“Taine y los orígenes de la Francia contemporánea en dos historiografías finiseculares”
(Fernando Devoto):
La obra apareció en el escenario histórico en un momento en el cual reinaban los
grandes frescos de a historiografía romántica. Les orígenes no perdían terreno tampoco en el plano de la erudición. La obra de Taine parecía llevar ventajas. El autor hacia una constante exhibición de su erudición en los y en las abundantes notas a pie de, a de lo que había hecho Michelle y otros historiadores de su generación para quienes la investigaciones en archivos era importantes a los efectos constructivos pero no a los demostrativos. Taine iba más y se proponía diferenciarse de los historiadores de la generación romántica esbozando una metodología rudimentaria para el análisis y la valoración de las distintas fuentes. Otros aspectos. En primer lugar los distanciamientos proclamados del objeto que parecía contestar fuertemente con la pasión política que explícitamente animaban la historiografía precedente desde Lamartine. Taine nos prometía entrar en el estudio de la revolución de la mano de los móviles políticos de la coyuntura sino acompañado por y el método de la medicina experimental. El procedimiento era en este caso análogo: clasificación, agrupamiento, operación que permitían precisar los lagos comuneros trasmitidos de gemaciones en generación. El procedimiento propuesto sostenía Taine era el mismo que se utilizaba en filosofía o en química. El establecimiento de dependencia constante permitía que la historia dividiera de una simple narración en una ciencia y pudiera constatar leyes después de haber expuesto y clasificado los hechos. El historiador entonces trata de establecer rasgos constante y por ende características de un proceso histórico en un ámbito nacional y otorgar a aquellos el de leyes que esa evolución histórica. Taine historiador formulaba, como se ve, ambiciosas promesas: la imparcialidad, la erudición, la posesión de un método que permitiría aspirar a la vez a una historia total y una historia científica. La revolución no era el producto de fuerzas sociales o políticas sino un conjunto de ideas y creencias que se extendían por la sociedad francesa, independencia de la voluntad y de la percepción de los sujetos. La interpretación no era nueva en varios sentidos. En primer lugar Taine ya la había sostenido si bien con menor carga valorativa en un pasaje celebre de la historie de la literatura anclase. Si la interpretación dada por Taine al problema de las causas de la revolución era en buna medida una combinación de otras anteriores no lo seria en cambio su imagen de la revolución misma sus características y su significado. Taine se convertía así en uno de los pioneros de una vasta literatura ensayística que intentaba combinar , aspiraciones científicas y prejuicios sociales con rasgos de una rudimentaria psicología social. La multitud empero incapaz de gobernarse a sí misma generaba nuevos líderes. Al hacerlo era presa de grupos organizados: los jacobinos eran los principales en entre ellos. El propósito de la obra de Taine es dejar expuesto en su correspondencia era ciertamente pedagógico educar a los franceses en su pasado para que tuvieran la posibilidad de evitar repetir errores. El significado de su obra era ciertamente hostil a la revolución especialmente en el tono general y en la adjetivación recargada que usaba contra los sectores populares y los grupos políticos. La aproximación al libro de Taine implicaba inicialmente para sus adversarios dos tareas: explicar primero como el brillante pensador laico y anticlerical había producido una obra tan virulentamente contrarrevolucionaria y que sería aclamada por sus adversarios de ayer clerical y legitimista. Razón y espíritu crítico los dos elementos en que los que deban reposar las democracias modernas. Taine n especial hablaba de método pero practicaba solo las apariencias, intentaba extrapolar procedimientos de las ciencias naturales cuando en realidad como intentaba denostar el método histórico es radicalmente distintos. La historia no es una ciencia natural, su método por lo tanto no puede definirse tampoco como objetivo sino como indirecto y subjetivo. La historia su propia cientificidad sabiendo que era imposible imitar a las ciencias naturales. Taine además los procedimientos de la de textos y ellos le impedía extra el núcleo de verdad que contenían.