Jesse Fariña

Tamara Núñez

Del Romanticismo al Naturalismo (Carmen Balart Carmona)

i. Introducción
La autora Carmen Balart hace un recorrido desde el romanticismo hasta el
naturalismo para lograr a entender las temáticas que configuran la narrativa
moderna chilena, sin duda el periodo romántico fue fundamental para sentar una
identidad chilena tanto individual como colectiva. Abordando en primera instancia
los autores que introducen las ideas románticas en Hispanoamérica.
A lo largo de la transición se ven los cambios en los ideales que perseguía la
literatura, la cual siempre buscaba tener un carácter formador en la sociedad chilena
del siglo XIX y en palabras de Lastarria (1817-1888) “una literatura que sea reflejo
de nuestra chilenidad”. Hasta la parte mas oculta de la realidad hispanoamericana
que se vuelven tópicos centrales de la literatura.
ii. La transición literaria
Las ideas románticas en Hispanoamérica fueron introducidas por Echeverria,
acogidas en un momento en el que se buscaba los ideales de la independencia, y
la emancipación intelectual, el romanticismo se alza entonces para romper con los
moldes establecidos. Autores como Sarmiento, Bello, Lastarria, entre otros
buscaban una literatura que fuese fiel a la “identidad” chilena,
El movimiento romántico- realista en Chile se caracterizó por: el sentimiento de
libertad, en que se pudiese expresar costumbres, preocupaciones del país, se
exaltara la patria y la libertad; la idea de progreso, ante esto la novela adquiere un
carácter progresista, proyectado al futuro mediante la cual se intenta hacer más
perfecto al hombre; costumbrismo, se entienda que la literatura ayudaba a crear una
cultura nacional, siendo un espacio real y a la vez literario para presentar
costumbres, personas, conductas y a la vez de crítica social con el fin pedagógico
de moralizar; la expresión reformadora de la sociedad, aquello para simplemente
contribuir al perfeccionamiento social, cumpliendo la función de edificación política,
social, moral y espiritual y por último la representación dual y el afán docente del
mundo narrado, donde se presenta “una dinámica contradicción entre dos sectores
de la realidad: el ámbito de lo aparente y el ámbito de la realidad verdadera (Balart,
2010), en los textos se mostraba la constante lucha y polarización de personajes
virtuosos y personajes ocultos tras “engañosas apariencias o dominados por falsos
convencionalismos”. Finalmente en el ideario de la novela del siglo XIX prima lo
didáctico a través de una critica de usos y costumbres de la sociedad chilena.
Naturalismo:
Dentro de la tendencia naturalista, se produce una división en tres momentos
destacables: el criollismo, la expresión modernista y la orientación mundonovista,
saltando luego de eso a una corriente imaginista.
 Jesse Fariña
Tamara Núñez

Criollismo: se centra en la incorporación de realidades hispanoamericanas como el

ascenso social y el anhelo por la riqueza, teniendo por determinante tres factores
importantes: el ambiente, el momento histórico y el temperamento que predomina
en los personajes por características heredadas desde sus padres o contexto. Por
otro lado, lo importante es el reflejo del bajo pueblo, el comportamiento del “roto”
como figura principal y resultando heroico en las condiciones históricas específicas.
Modernismo: Ruben Darío, como el escritor que se convierte en una figura
importante al impulsar una literatura abierta a distintas formas de interpretación de
realidad; caracterizada por un lenguaje elaborado, metafórico y simbólico, rico en
sensaciones y vocabulario que es capaz de estimular los sentidos del lector. El
escritor modernista no quería que la realidad limitara su creatividad, quitando las
convenciones sociales que son capaces de atarlo, y yendo en contra de los
prejuicios burgueses, escribe sobre la aspiración a libertad absoluta.
Mundonovismo: El mundonovismo pretendía alejarse de la obra costumbrista. Se
basa más en una novela testimonio, donde la predominancia es acercar la narración
casi a un reportaje, donde se muestre una realidad total, con hechos reales y no
una obra creativa, la idea es lograr ser un fiel documento o un testimonio de
circunstancias históricas. Acá, la identidad nacional nace a partir de la
representación de las formas rurales.
Imaginismo: En este final, se rompe la tradición exhibida a lo largo del movimiento
naturalista, dando espacio a una escritura imaginativa, que pueda exponer las
falencias, una muestra “anticriollista” que se llena de las aspiraciones del hombre
de campo, en donde la vida sea capaz de escribirse a través de una historia más
justa.
iii. Conclusión
A pesar de la influencia europea en la literatura Hispanoamericana, cada lugar le da
una identidad propia del territorio al movimiento literario. En Chile, así como en
muchos otros lugares, la aparición de un movimiento era resultado de una oposición
hacia el movimiento anterior, en el caso del realismo, este se opone a ciertas ideas
románticas y a la vez complementa otros ideales.
A través de la línea temporal de los movimientos literarios somos capaces de
contemplar la manera en que se transforman los ideales pertenecientes a cada
periodo, que a pesar de tener divergencias siempre van manteniendo un hilo
conductor desde las corrientes anteriores.