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UNIVERSIDAD NACIONAL DE CORDOBA

FACULTAD DE PSICOLOGIA

SUBJETIVIDADES POLITICAS
Configuraciones subjetivas en las narrativas de la historia de
vida de un joven perteneciente a sector popular de la
población de Cordoba capital.

Profesora: Andrea Bonvillani.

Alumnos:

Bastías Carlos Damián 37672858

Heredia Elvira Elizabeth 35527979

Renzi Julieta 36849281

Tutor: Alonso, Maria del Rocio

Córdoba, 2017
INTRODUCCION

En el presente trabajo realizaremos un análisis sobre emergentes que se pueden


vislumbrar sobre configuraciones subjetivas, teniendo como base empírica el
relato de vida de un joven perteneciente al sector popular de la ciudad de
Córdoba. Dicho relato se podrá elaborar haciendo uso de la toma de entrevistas
semi-estructuradas, realizadas en el 2016 por el equipo de investigación jóvenes
de sectores populares y búsquedas de reconocimiento en ámbitos educativos y
escenarios urbanos de la ciudad de Córdoba dirigido por el Dr. Paulin, Horacio1,se
trabajará con una metodología de co-construccion2.
Las entrevistas de historias de vida es uno de los métodos de investigación
descriptiva más puros y potentes para conocer como las personas perciben el
mundo social que les rodea (Hernández, 2009); estas conforman una perspectiva
fenomenológica, la cual visualiza la conducta humana, lo que las personas dicen y
hacen, como el producto de la definición de su mundo. En este sentido, la historia
de vida, como metodología cualitativa busca capturar un proceso de
interpretación. A través del relato de la misma se visualizan procesos de
subjetivación propios de un encuentro consigo mismo al poner en palabras sus
anhelos y su realidad, lo cual le permitirá posicionarse desde otro lugar, y nombrar
lo innombrable. Hacer uso del lenguaje y de la carga emotiva que rememora lo
vivido y lo trae a colación.
Así mismo, es importante destacar que existen cuatro dimensiones vinculadas a
las historias de vida. Estas son la constructivista, la clínica, la cualitativa e la

1 Proyecto de Investigación Tipo A - 2016-2017-SECYT- UNC –Director Dr. Horacio Luis Paulín
2Aquí adherimos al enfoque metodológico del trabajo desarrollado por Di Leo y Camarotti (2013)
sobre relatos biográficos con jóvenes y a las premisas ético metodológicas que Leclerc-Olive(2009)
postula para la investigación biográfica: el principio de iniciativa, en cuanto a atender que si bien el
interés por la investigación nace en el investigador; el principio de intercambio, en cuanto a adoptar
una actitud del investigador intermedia entre la pasividad o “no directividad” y el intervencionismo
intrusivo y el principio de totalidad, en el que refiere a que la finalización de la serie de entrevistas
debe darse cuando la persona considera haber dicho lo más importantey las respuestas a las
preguntas del investigador son las que se ha permitido dar. Leclerc-Olive aclara que esto no
implica privilegiar la unidad y continuidad biográfica. En nuestro caso la hoja de la vida nos ha
servido para realizar un “cierre” provisorio de nuestro vínculo con el joven en el que como sujeto
nos ha permitido acceder en unos meses a aspectos personales muy importantes de su vida.
interdisciplinaria (Cornejo, 2006). Como mencionamos anteriormente, el trabajo
se realizo bajo los supuestos de la dimensión constructivista, la cual adhiere a la
hipótesis de que el saber es una construcción producida por la actividad del sujeto
y que la realidad no existe independientemente del investigador. En este sentido,
el relato adquiere el estatus de representación consciente.
El caso que trabajaremos es el de Juan; él es un joven de 20 años, que en el
momento de la toma de las entrevistas vivía en la casa que era de su mamá con
dos de sus hermanas, un sobrino y una pareja de jóvenes del barrio. Sus
ocupaciones fueron variando, pero la mayor parte del tiempo trabajó para una
empresa constructora, como obrero en la edificación de casas.
La base experiencial bajo la cual trabajaremos es sobre la elaborada por las
estudiantes Julieta Castro y Julieta Arancio, quienes llevaron adelante su proyecto
de tesis bajo esta metodología, que considera a la historia de vida, como
investigación cualitativa, aquella que busca descubrir la relación dialéctica, la
negociación cotidiana entre aspiración y posibilidad, entre utopía y realidad, entre
creación y aceptación; los datos provienen de la vida cotidiana misma, del sentido
común, de las explicaciones y reconstrucciones que el individuo efectúa para vivir
y sobrevivir diariamente (Ruiz Olabuénaga, 2012).
El propósito del trabajo monográfico, entonces, es revisar las marcas3 impresas en
la construcción de su relato de vida, en qué es posible desear, a partir de la
indagación en el proceso de configuración de Juan, es decir, en las condiciones
concretas y materiales de existencia que han configurado el horizonte de
aspiraciones.

Tomaremos la conceptualización que González Rey (González Rey, 2012) hace


de Subjetividad, entendiéndola como una producción simbólico-emocional de las
experiencias vividas que se configuraran en un sistema, que desde un principio se

3Cuando hacemos mención del término “marcas” nos estamos refiriendo a los atravesamientos
que condicionaran su visión del mundo, y como en este se subjetiva. Las modalidades de ser joven
dependen de la edad, la generación, el crédito vital, la clase social, el marco institucional y el
género. Sus trayectorias de vida estarán marcadas por un abanico de opciones y restricciones que
condicionan desigualmente sus estrategias y expectativas de vida ya que, como dice Adam
Przewoeski, “... la gente opta, pero lo hace en condiciones sociales que determinan objetivamente
las consecuencias de sus actos.”.
hace en la relación recursiva con la experiencia. Por lo cual, la subjetividad
humana será considerada siempre como una producción sobre las condiciones
concretas que se desarrollan y no como un simple reflejo de esas condiciones.
En contraste a lo expuesto por González Rey, trabajaremos sobre el concepto de
Subjetividad que sostiene Foucault, que si bien coincide en que esta es una
producción de las condiciones, y no un mero reflejo, no tiene en cuenta la
dimensión constitutiva del sujeto en lo emocional, es decir en donde se construye
un sentido sobre la realidad (Bonvillani, 2012).
Foucault concibe, al final de su trayectoria, que el sujeto aparece como un “pliegue
de procesos de subjetivación sobre los procedimientos de sujeción” (Gros, 2002).
Más adelante, va a delinear nuevos contornos para una “hermenéutica del sujeto”
a través de la idea de subjetivación, entendida como los procedimientos por los
que un sujeto se apropia de si, se transforma el mismo en sujeto de sus propias
prácticas (Tassin, 2012).
Es por consiguiente que podemos entender a la subjetivación como apropiación
de sí mismo a partir de una asunción ética, inaugurando una modalidad de habitar
la propia existencia. (Bonvillani, 2012)
Foucault va a referirse a las prácticas de libertad como el ethos, como practica de
modo de ser. La libertad individual se ha reflexionado en la ética y a su vez esta es
su ontología. En las prácticas de libertad se van a poner en juego las relaciones de
poder y en los juegos de verdad van a entrar en juego los cuidados de si, como
prácticas de autoformación del sujeto para acceder a un modo de ser, que sería la
práctica.
DESARROLLO

Configuraciones subjetivas .González Rey

La subjetividad es una cualidad constituyente de la cultura, el hombre y sus


diversas prácticas, es precisamente la expresión de la experiencia vivida en
sentidos diferentes para quienes comparten, constituyendo esos sentidos la
realidad de la experiencia vivida para el hombre. La realidad que nos rodea desde
muy temprano se configura subjetivamente a través de las relaciones con los
otros, las que siempre son culturales (González Rey, 2012).
En el análisis del relato de vida de Juan encontramos ciertas características
discursivas que denotan explícitamente como su subjetividad se va a ir
construyendo en base a la mirada que los otros le devuelven. Ese lugar lo
estarían ocupando en su relato de historia de vida los vecinos del barrio

Falleció mi vieja y fueron meses que era robar, pelear, drogarme, de todo,
hasta que empecé a calmarme un poco, la gente me miraba mal porque
estaban bobina de que yo iba y robaba, después me empecé a rescatar.
Me cansé de echar moco, me andaba buscando la policía todo, digo no! Me
voy a poner a laburar, la gente de acá ya se había cansado de denunciarme.
(Fragmento de entrevista, joven varón 20 años)

Sin embargo esas configuraciones subjetivas no son una reproducción de lo


evidente de las relaciones, sino resultado de producciones simbólicas emocionales
que están más allá de las evidencias compartidas de las relaciones. Las
configuraciones subjetivas se erigen como formas singulares de organización de
sentidos subjetivos, que no permanecen idénticos consigo mismos en el curso de
una configuración, y que convergen por sus múltiples efectos en los estados y
comportamientos de las personas.
La definición de subjetividad como las producciones simbólico-emocionales de la
experiencia vivida, tanto por personas, como por las formas y prácticas que se
definen dentro de una organización social, hace que lo subjetivo sea irreductible a
lo individual.

“Soy una persona tranquila, si me joden, uno del barrio no voy a pelear si nos conocemos
de toda la vida. Si es uno de afuera o ya si la insultan a mi mamá ya se funde todo con el
que sea. Sí.Soy tranquilo yo (…) acá no se insulta a la madre nunca”.
“Mi hermano me contó que empezó a choriar como a los 12, 13 años, no robaba acá en el
barrio, se metía en las obras y sacaba máquinas”.(Fragmento de entrevista, Joven varón
20 años)
En estos fragmento del relato de vida de Juan, se visibiliza como en su producción
subjetiva se imprimen marcas que están relacionadas con las formas y prácticas
que se encuentran inmersas dentro de la organización social del barrio (“si me
joden, uno del barrio no voy a pelear si nos conocemos de toda la vida”),así como
también en ( “…no robaba acá en el barrio, se metía en las obras y sacaba
máquinas”). (Fragmentos de entrevista, joven varón 20 años)
Pero además, también podemos observar cómo lo emocional irrumpe sobre estas
prácticas llegado el caso se rompan ciertos códigos o reglas entre los vecinos
(“…si la insultan a mi mamá ya se funde todo con el que sea (…) acá no se insulta
a la madre nunca.”).
Las personas y la multiplicidad subjetiva de los diferentes escenarios de su acción
social, definen la unidad inseparable de la subjetividad social e individual. La
subjetividad social e individual mantiene relaciones recursivas, cuyas expresiones
y efectos colaterales que son simultáneos y diferentes para cada uno de esos
sistemas, pasan a ser constituyentes de ambos a través de sentidos subjetivos
diferentes.
“Siempre éramos cuatro o cinco chicos que andábamos en la calle. En las
vacaciones nos levantábamos a las 8 de la mañana y nos íbamos a gomerear todo
el día al campo. Se hacían las 12 del mediodía agarrábamos todas las palomas y
pum! Las carneábamos y pum! Ahí nomás hacíamos un fueguito y las fritábamos,
a la bosta! A la noche queríamos tomar una coca, nos juntábamos unos cartones y
los vendíamos al depósito que estaba atrás del canal, los que más le dábamos a
la calle.”
En este párrafo del relato de vida, se ve como en la configuración subjetiva de
Juan la calle funciona como un espacio de acción social en donde se pondrán en
interjuego diferentes prácticas legitimadas o no inseparables de lo
individual.(González Rey, 2012)

Las acciones de la persona y su forma de expresión en los escenarios en los que


se desarrolla su vida social, son procesos constituyentes de las configuraciones de
la subjetividad social en esos escenarios, sin embargo, esa subjetividad social
permanentemente se desdobla en efectos que están más allá del control y la
intencionalidad de las personas y que se configuran subjetivamente de diferentes
formas en ellas, mas allá de sus representaciones consientes (González Rey,
2012).
En relación a lo trabajado anteriormente es pertinente hacer referencia a las
marcas impresas- en la construcción del relato de vida de Juan-,en los espacios
que irán configurando su subjetividad. A partir de la indagación en el proceso de
configuración del mismo podremos dar cuenta delas condiciones concretas y
materiales de existencia que han configurado el horizonte de aspiraciones.
Como nos subjetivamos es uno de los interrogantes a los que intentamos
responder cuando hacemos mención a las marcas, las cuales se impregnaran en
la visión que Juan tiene de su realidad y como en esta se va a ir subjetivando. Las
modalidades de ser estarán atravesadas por las condiciones sociales que lo
constituyen. En este caso, la vida de juan va a transcurrir en los espacios
Subjetivantés tales como el cortadero(un horno de ladrillos, lugar donde trabajaba
el padre), la calle, lafamilia, la escuela, los vecinos del barrio La Posta.

“Yo vivo el dia a dia, no me imagino nada, no pienso nada ni qué voy a hacer
mañana. Yo me levanto, hago lo que tengo que hacer y a la bosta, o me levanto
voy laburo, llego vengo a mi casa, voy un rato a la esquina, y así ..los fin de
semana si no salí el viernes, me levanto el sábado temprano, si me pinta voy y
robo, sino me voy a la casa de mi hermana tomo unos mates”
.
“Yo no pienso en lo que voy a hacer mañana, ni el año que viene, ni el futuro, ni se
si voy a llegar, si voy a estar vivo”.

En este fragmento obtenido de las entrevistas, da cuenta de cómo el discurso se


ve reducido a lo inmediato y el contexto se evidencia como inestable e inseguro, el
cual no le ofrece la posibilidad de construir un proyecto de vida que trascienda
más allá del presente. Observando en el relato de vida una total ausencia de
representación consciente de un anhelo

Ética, cuidado de sí, prácticas de libertad. Foucault

Siguiendo con el interrogante que abarca a toda la monografía en general- ¿cómo


nos subjetivamos?- retomamos el concepto de ética definido por Foucault (1994)
en el sentido de como los griegos entendían el ethos. Es decir, la ética como una
manera de ser y de conducirse, modo de ser del sujeto y un cierto modo de hacer.
Manera de cada uno de traducirse por su vestimenta, modo de andar y de
responden a todos los sucesos. La ética es la práctica reflexionada de la libertad y
a su vez esta última es la condición ontológica de la primera. A partir de esto el
cuidado de sí es el modo en el cual la libertad individual o cívica se ha
reflexionado como ética.
Entendiendo al cuidado de sí como el conocimiento de sí, el conocimiento de
cierto número de reglas de conducta o de principios que son a la vez verdades y
prescripciones. Implicando relaciones complejas con los otros, en la medida en
que este ethos de la libertad es también una manera de cuidar de los otros;
mostrando como el sujeto se constituye a sí mismo a través de un determinado
número de prácticas. Esto corresponde con lo propuesto por Foucault en los
últimos años de su vida donde delinea una “hermenéutica del sujeto” a través de la
idea de subjetivación, entendida como los procedimientos por los que un sujeto se
apropia de si, se transforma el mismo en sujeto de sus propias prácticas” (Tassin,
2012).
“nos íbamos a gomerear todo el dia al campo. Se hacían las 12 del mediodía
agarrábamos todas las palomas y pum! Las carneábamos y pum! Ahí nomás hacíamos un
fueguito y las fritabamos, a la bosta! A la noche queríamos tomar una coca, nos
juntábamos unos cartones y los vendíamos al depósito que estaba atrás del canal, los que
más le dabamos a la calle”.(Fragmento, joven varon 20 años)

En esta parte de la entrevista, se observa como ciertas prácticas de libertad, cierta


ética como un modo de ser y hacer, se asientan en la elección de realizar
diferentes acciones como cazar y comer las palomas o vender cartones para
“tomar una coca”; las cuales forman parte del proceso de subjetivación en donde a
partir de estas prácticas el sujeto, en este caso juan, se apropia de sí.
CONCLUSION

Siempre tuvimos presente, a la hora del realizar el trabajo, tener -o tratar por lo
menos- una perspectiva que a la hora de hablar de subjetividades no se la
reduzca a una mera y acabada consecuencia de la conjunción de variables, tales
como el contexto social, nivel socio-económico, entre otros factores intervinientes,
y que respondieran a una lógica estricta donde parece que estas nos determinan,
olvidándose o por lo menos obviando lo que ha sido lo principal que buscamos
abarcar en la monografía como lo son las emociones, los sentimientos y los
pensamientos que nos atraviesan y que se evidencian en el modo en que
construimos nuestras narrativas. Es en el discurso donde la palabra va cobrar
valor para exponer lo vivenciado y asi mismo esta se anudara con la carga
emotivo-afectiva, que a fin de cuentas serán lo que más información nos brindara
de la persona,
Sin duda creemos que los factores que podemos considerar “externos” como el
lugar donde vivimos, donde trabajamos, estudiamos, donde desarrollamos
nuestras vidas, son importantes en el proceso de configuración subjetiva, pero no
determinantes. Justamente, ahí está la esencia de este trabajo, donde
ponderamos lo vital de las personas, sus emociones, sus sentimientos.
Permitiéndonos un rol protagónico en lo que respecta a nuestra configuración
subjetiva y no como algo que viene dado o es natural, no como algo que no pueda
cambiar.
Es por ello que quizá nuestro autor predilecto sea González Rey (2012),
encontrando en él una crítica a todas aquellas teorías que intentan explicar la
historia, las políticas, los problemas y sus soluciones olvidándose de las
emociones de quienes están implicados. Por otro lado, encontramos en Foucault
(1994) conceptos realmente interesantes – aunque él también deja de lado lo
emocional- como la ética, referida a un modo de ser y hacer, el cuidado de sí,
entendiéndolo como el conocimiento de sí, encontrando la ontología de estos en
las prácticas de libertad. Desde este planteamiento entendemos nuestras
acciones, nuestros modos de ser, como una práctica de libertad; lo que deja
implícito que hay acciones que nos construyen pero nunca nos determinan. Y
quizá, la siguiente oración no sea propicia, o devele nuestros desconocimientos,
pero desde nuestra perspectiva, encontramos en estas prácticas de libertad una
dialéctica marxista donde mundo interno se entrelaza con el mundo externo, y a
partir de aquí, nos transformamos permanentemente, nos construimos y nos
subjetivamos.
Bibliografía.
Bonvillani, A. (2012): "Hacia la construcción de la categoría "subjetividad
política": una posible caja de herramientas y algunas líneas de significación
emergentes". Claudia Luz Piedrahita, Alvaro Díaz Gómez y Pablo Vommaro
(Comp.), Primer número de la Biblioteca Latinoamericana de Subjetividades
Políticas: Subjetividades políticas: desafíos y debates latinoamericanos.
Coedición del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO),
Universidad Francisco José de Caldas (Colombia). Editorial Magisterio,
Colombia.
Cornejo 2006
Foucault, M. (1994): "La ética del cuidado de sí como práctica de la libertad".
En Dichos y escritos. París: Gallimard.
González Rey, F. (2012). "La subjetividada y su significacion para el estudio de
los procesos
politicos: sujeto,sociedad y politica".En Claudia Luz Piedrahita, Alvaro
 Díaz Gómez y Pablo Vommaro (Comp.), Tercer Número de la Biblioteca
Latinoamericana de Subjetividades políticas "Pensamientos críticos
contemporáneos: Análisis desde Latinoamérica". Co-edición del Consejo
Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Universidad Francisco
José de Caldas (Colombia).
Gros, F. (2002). Situación del curso. En Michel Focault.La hermenéutica del
sujeto. Buenos Aires: Fondo de cultura económica.
Ruiz Olabuénaga,2012
Tassin, E. (2012): De la subjetivación política.
 Althusser/Ranciére/Foucault/Arendt/Deleuze. Revista de estudios sociales,
Número 43. Universidad jle-tes-Andes. Colombia. Pp. 36-49.

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