ÉTICA EN INVESTIGACIONES CLÍNICAS

Por Beatriz Rosas

La medicina es una rama de las ciencias de la salud, que ha existido desde épocas pasadas,
la cual se dedica al estudio de la vida, enfermedad y muerte del ser humano. En otras palabras, es
una ciencia dedicada al bienestar humano, para que las personas puedan vivir lo mejor posible,
desde su nacimiento hasta el momento de su muerte. Esto último se cumple realmente hasta cierto
punto, ya que, la medicina al igual que otras ramas, busca generar una explicación que nos ayude
a convivir mejor con el medio.
El medio que utilizan es una investigación, la cual, “tiene como principales objetivos, la
generación de conocimiento, a través de la producción de nuevas ideas; y la solución de problemas
prácticos” (Manterola y Otzen, 2013, p. 1498) donde experimentar con humanos, también
formaría parte de ella, lo que hoy en día, es muy complicado, ya que, existen normas y/o reglas
que se deben seguir para evitar transgredir la dignidad de las personas en el transcurso de esta.
Estas normas muchas veces se comenzaron a implementar, debido a la propia naturaleza humana,
ya que, muchas de las investigación se dieron antes de la primera guerra mundial y posterior a la
segunda guerra mundial, quienes a través de distinto métodos, donde mayoritariamente se
infringió dolor como búsqueda de respuesta a distintas interrogantes.
Toda investigación, que se quiera realizar en seres humanos debe de tener “ética”. Pero
¿Qué es la ética? Este concepto se ocupa demasiado en la vida cotidiana. Ética, según la filosofía,
es la reflexión “moral” con respecto de la conducta, lo que posteriormente derivaría a una
evaluación, si esa conducta fue “buena o mala”. Aunque mirada es subjetiva, ya que como
sabemos cada persona es diferente de otra y depende de múltiples factores como lo es el contexto
histórico, contexto situacional, la cultura, la sociedad, entre las cuales se puede desprender
normas y reglas establecidas, estas últimas sean explícitas o implícitas. En síntesis “son lo que se
espera en esas circunstancias como lo más correcto, y que no tienen que ser necesariamente iguales
a lo que manda la ley, lo que establece la norma, lo que obtenga el mejor resultado o lo que sea
más útil o eficiente”. (Pardo, 2011, p. 168) Estas normas y reglas, como se dijo anteriormente,
dependen de la sociedad en que hemos crecido, como por ejemplo, si una joven nace en una
familia religiosa, la mirada que ella tenga del mundo, va a ser desde el punto de vista religiosa y
juzgará al mundo en base a lo establecido por lo que dicte su religión.
¿Qué hace realmente que una investigación clínica sea ética? Una investigación clínica
como su nombre lo indica, “es la actividad encaminada a conocer el resultado de una intervención
o un producto para el diagnóstico o la terapéutica en los seres humanos” (Marañón Cardonne y
Leo Robaina, 2015, p. 165), y lo que hace que sea ético, según para mucho, se sustentaría en base
al consentimiento informado. Este tipo de consentimiento, establece según el Ministerio de
Salud, ley 20584, citado por Godoy y Barraza (2018, p. 185) “todas la personas tienen el derecho
de otorgar o denegar su voluntad para ser sometido a algún procedimiento o tratamiento, de
forma libre y voluntaria, luego que el profesional le entregue toda la información relacionada” lo
que muchas veces se mal utiliza por los fines de una investigación, no importando la salud física,
emocional ni psicológica de la persona que se ofrece voluntariamente para ello, quien antes que
nada es persona y como tal, merece que la traten como una, pero en realidad este es una cláusula
de seguridad para quien se someta a un tipo de experimento médico.
Tanto ética y medicina van de la mano, ya que esta trata con persona, y como tal se
merecen respeto el uno del otro, ya que todos somos dignos sin importar la clase social, ni la raza,
ni los prejuicios que puedan tener cada uno. Y como dignos que son cada uno, nunca se debe
colocar por encima de la persona los fines de una investigación.
A modo de finalización podemos decir que la medicina, como tal, al igual que otras ramas
de la ciencia de la salud, utilizan este medio para el avance de la medicina, pero que esto se
transgrede si quien está a cargo de una investigación de este calibre, se interesa por lo fines de la
misma, sin importar el bienestar de la persona a la cual someten. Esto último, depende de la moral
que haya sido impuesta en el médico a cargo.

REFERENCIAS
o Godoy, J. & Barraza, J (2018) La ficha clínica mirada desde la legislación Chilena actual.
Acta Bioethica, 24 (2): 181-188
o Manterola, C., & Otzen, T. (2013) Por qué Investigar y Cómo Conducir una
Investigación. Int. J. Morphol. 31(4), 1498-1504.
o Marañón Cardonne, T. & León Robaina, R. (2015) Humanidades Médicas, 15(1):163-
184
o Pardo A., (2011). La ética en la medicina. Persona y Bioética. 15(2), 166-186.