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1.

RELATOS DE INVESTIGACIÓN
Y EXPERIENCIAS DOCENTES

Coordinadoras y compiladoras:
Sonia Gabriela Lizarriturri y
María Mercedes Civarolo

febrero 1 GIDED
2016
GRUPO DE INVESTIGACIONES
Y DESARROLLOS DIDÁCTICOS
Coordinadoras y compiladoras: Mgter. Sonia Gabriela
Lizarriturri y Dra. María Mercedes Civarolo
Referatos de esta edición: Lic. Prof. Susana L. Barco de
Surghi/Mgter. María Paulinelli
Edición: Prof. Gabriela Luján Giammarini
Diseño: Lic. José Lautaro Aguirre

Relatos de investigación y experiencias docentes


María Mercedes Civarolo, Sonia Gabriela Lizarriturri... [et al.]; compilado por María Mercedes
Civarolo; Sonia Gabriela Lizarriturri. - 1a ed. - Gabriela Luján Giammarini, 2016.
Libro digital, PDF - (Relatos de investigación y prácticas docentes/María Mercedes Civarolo;
Sonia Gabriela Lizarriturri; 1)
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-987-42-0156-0
1. Enseñanza. 2. Didáctica. 3. Escritura. I. Civarolo, María Mercedes, comp. III. Lizarriturri,
Sonia Gabriela, comp.
CDD 370.1
Índice

4 Introducción.
Sonia Gabriela Lizarriturri

6 La pareja educativa I.
Orientaciones didácticas para el nivel inicial y primario.
Maria Mercedes Civarolo y Mónica Pérez Andrada

22 Escritura y géneros académicos.


Experiencias de la cátedra Lingüística del Texto y Análisis del Discurso, de la UNVM.
Gabriela Luján Giammarini

39 La importancia de las estrategias metalingüísticas y metacognitivas implicadas en la


escritura de textos académicos, en el ámbito de la UNVM.
Sonia Gabriela Lizarriturri
Introducción
Mgter. Sonia Gabriela Lizarriturri

Con Relatos de invest igación y experiencias docentes, inicia- Para esta concepción, la pareja educativa consiste en un
mos formalmente el área de publicaciones de gided. Esta trabajo entre iguales, cuyas prácticas relacionales entre
colección, en particular, surge del interés por compartir los educadores se sustenta en un proyecto interaccionista
con colegas, egresados y estudiantes de grado de carreras y socioconstructivista, en el cual se percibe la necesidad de
de formación docente, posibles modos de abordar la delica- transformar los hechos en pensamiento, los pensamientos
da y compleja relación entre las investigaciones didácticas en ref lexión, y las ref lexiones en cambios de pensamiento
y las prácticas de enseñanza, en el nivel superior univer- y acción; implicándose, de esta manera, “en una confronta-
sitario. ción productiva al servicio de la enseñanza… estar juntos
Titulamos “relatos” a la colección porque el contar, el para pensar mejor…”. Asimismo, Civarolo y Pérez suman a
relatar es una actividad intrínseca a la condición humana este marco teórico componentes de la Enseñanza para la
que se vincula con la etimología de “narrar que deriva ya Comprensión (epc) desarrollados por la Escuela de Gradua-
del narrare latino, ya de gnarus, ‘que es aquel que sabe de dos de Educación de la Universidad de Harvard, por ser un
un modo particular’; lo que nos hace pensar que relatar marco conceptual innovador que focaliza en la compren-
implica ya un modo de conocer, ya un modo de narrar, en sión como meta del proceso de aprendizaje, y vincula pen-
una mezcla inextricabe”. (Bruner, 2013: 48)1 samiento y acción que aparecen, muchas veces, escindidos
Relatamos, seguidamente, nuestros modos de conocer de la práctica educativa.
y narrar. En Escritura y géneros académicos. Experiencias de la cá-
En La pareja educat iva I. Orientaciones didáct icas para el tedra Lingüíst ica del Texto y Análisis del Discurso, de la unvm,
nivel inicial y primario, María Mercedes Civarolo y Mónica Gabriela Luján Giammarini aborda parte del trabajo de
Pérez Andrada construyen la primera parte de un relato campo y los resultados obtenidos en la investigación-ac-
que aúna experimentación y ref lexión, e indagan sobre ción, “La escritura como estrategia didáctica”, realizada
las posibilidades que ofrece la implementación de la mo- durante el período 2014 y 2015, bajo mi dirección. Vincula
dalidad “pareja educativa” en el ámbito de la enseñanza. el género narrativo y el discurso académico, a partir del
La experiencia posibilita la generación de orientaciones relato descriptivo de una serie de decisiones áulicas toma-
didácticas para educadores de todos los niveles educativos das a nivel de grado en la cátedra “Lingüística del Texto
y, en este caso en particular, del nivel inicial y primario, ya y Análisis del Discurso”, para demostrar la potencialidad
que recogen experiencias que pueden ayudar a las prácti- de la escritura de diferentes géneros discursivo-textuales
cas pedagógicas de quienes deseen comenzar a probar las en la apropiación de contenidos temático-disciplinares. Su
ventajas de esta modalidad, para generar un aula en donde análisis se centra, específicamente, en las posibilidades de
ocurra la interacción entre docentes y estudiantes, para tres géneros escritos por los estudiantes cursantes de la
enseñar y aprender en un ambiente en donde se respire el mencionada cátedra: carta personal, autobiografía acadé-
pensamiento en comunidad. mica y relato explicativo.
Se toma como referencia la exitosa experiencia de las
escuelas infantiles de Reggio Emilia en Italia. Loris Ma-
laguzzi,2 mentor de la concepción pedagógica reggiana. en la escuela como un organismo vivo, “una escuela amable” in-
mersa en lo político, lo social y lo ciudadano. Justificó la conso-
lidación de la pareja educativa, la legitimación del atelierista, la
1 Bruner, J. (2013) La fábrica de historias. Buenos Aires, Fondo de participación conjunta de enseñantes y auxiliares en reuniones
Cultura Económica. pedagógicas y cursos de formación, la entrada a la escuela del
2 Malaguzzi, Loris (1920 – 1994); guionista, escritor, director tea- educador hombre como una exigencia pedagógica, la eliminación
tral y periodista, estudió Magisterio, se licenció en Pedagogía y piramidal del director/a en cada una de las escuelas como jefe/a
especializó en Psicología. Fue el mentor de una concepción pe- de grupo y el impulso para llevar a cabo una actuación educativa
dagógica y cultural basada en la cultura de la infancia. Pensaba basada, principalmente, en la investigación y experimentación.

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En suma, se ref lexiona principalmente sobre las facili-
dades que otorga la escritura abordada estratégicamente
y vinculada con el género narrativo en la adquisición de
conocimiento especializado y disciplinar, tal como afirma
Giammarini, a partir de la consideración de las ref lexio-
nes de Labov: “las narrativas son el principal modo en que
transmitimos nuestras experiencias a otros” (Labov en
Pertot, 2013).3
En La importancia de las estrategias metalingüíst icas y
metacognit ivas implicadas en la escritura de textos académi-
cos, en el ámbito de la unvm, escrito a mi cargo, sistematizo
las conclusiones y experiencias de la investigación que
dirigiera durante los años 2012 y 2013, en la Universidad
Nacional de Villa María, sobre la importancia de las estra-
tegias metalingüísticas y metacognitivas implicadas en la
producción de textos académicos y su vinculación con la
adquisición, comprensión, reelaboración y transmisión de
conocimientos. En tal sentido, podrá leerse que la investi-
gación surgió de la preocupación por las dificultades que
enfrentan los estudiantes universitarios para producir y
comprender textos académicos y, que se abordó metodoló-
gicamente como un estudio de caso. El estudio abarcó dos
etapas: a) Año 2012, sistematización bibliográfica y elabo-
ración de descriptores para el análisis de las produccio-
nes escritas de los estudiantes que ingresan a las distintas
carreras de la unvm y, de los últimos años de las carreras
del Profesorado y Licenciatura de Lengua y Literatura, y
de la Licenciatura en Diseño y Producción Audiovisual. b)
Año 2013, análisis de producciones escritas de las áreas y
disciplinas temáticas indicadas en el punto anterior y que
se desarrollan en el cuerpo del texto.
Precisamente, el análisis y cotejo de un corpus de es-
critos tan variado cualitativa y cuantitativamente, nos
permitió revisar la construcción de dispositivos de eva-
luación de producciones escritas y comprobar que resultó
un aporte de esta investigación la descripción y transfe-
rencia de los procedimientos y estrategias cognitivas y
lingüístico-discursivas que implica la escritura, ya que las
fuentes bibliográficas sistematizadas dan cuenta de ello
en el campo de la comprensión lectora, pero no en el de
la producción.
Finalmente, y a modo de cierre de esta Introducción,
apostamos a los relatos, a la narrativa porque “es una invi-
tación a encontrar problemas, no una lección acerca cómo
resolverlos. Es una profunda ref lexión sobre la condición
humana, sobre la caza más que sobre la pesca”. (Bruner,
2013: 38). En otras palabras, una invitación desafiante para
entrelazar investigación y prácticas de enseñanza.

3 Pertot, W. (2013) “Las narrativas son el marco por el que percibi-


mos el mundo real”. Diálogo con William Labov. Página 12. Edi-
ción impresa: 14 de octubre de 2013.

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La pareja educativa i.
Orientaciones didácticas para el nivel inicial y primario
Dra. María Mercedes Civarolo
Lic. Mónica Pérez Andrada

Introducción Sin embargo, nadie duda de las ventajas que encierra la po-
sibilidad de que dos educadores trabajen en pareja, aunque
“Cada maestro con su librito”; “cierro la puerta del aula y no se tenga muy en claro cómo hacerlo.
hago lo que quiero…”; ¿cuántas veces escuchamos estas ex- Fundirse como pareja implica pensar en prácticas do-
presiones en la escuela como explícita manifestación de lo centes más humanas, de mayor cooperación, que deben
que piensan algunos educadores? Esta realidad, cotidiana hacerse extensibles también a las relaciones entre maes-
y subjetiva, muestra creencias arraigadas y derechos ad- tros, alumnos y entre familias, en una comunidad; al decir
quiridos que constituyen respuestas que actúan como me- de Perkins (1997), desde su visión acerca de la cognición
canismos de defensa, que de alguna manera, llevan a “sim- humana como construcción social y cultural: “los seres
plificar ilusoriamente” la complejidad de la tarea docente y humanos funcionan como personas más el entorno por-
de la práctica educativa de cualquier nivel de enseñanza. que eso les permite desarrollar mejor sus aptitudes e inte-
Actualmente, tanto la escuela como el aula son espacios reses”. La “cognición socialmente distribuida” es aquella
públicos colectivos que promueven el aprendizaje colabo- que se apoya en el trabajo socialmente compartido como
rativo a través de la interacción social y el encuentro entre condición para la construcción de conocimientos. De este
mentes en comunidades de pensamiento, de estudiantes modo, el aprendizaje cooperativo entre maestros, y entre
juntos a educadores, en tanto que enseñar es también maestros y alumnos, es una estrategia didáctica impres-
aprender, y ¿qué mejor que intentar “aprender juntos” en- cindible para la construcción del conocimiento en una
señando en pareja educativa, a partir de las relaciones que “escuela inteligente”.
se entretejen entre los sujetos responsables del aula? La exitosa experiencia de las escuelas infantiles de Reg-
Hablar de “pareja” es dejar de lado el “1” para dar vi- gio Emilia, en Italia, da cuenta de que este tipo de trabajo es
gencia al “2”, es pensar en una dupla, un par, un dúo, con posible, a pesar de la complejidad de la empresa que encie-
sus individualidades y diferencias, que comparten algo en rra; al igual que un cofre esconde un tesoro repleto de posi-
común que da sentido o razón de ser a dicha unión. bilidades para la buena enseñanza. Solo resta descubrirlo…
La pareja educativa es un concepto que deviene del la-
tín paricŭlus, de par, paris, igual o semejante; remite a dos
educadores, con formación, criterios y experiencias dife- ¿Por qué trabajar en pareja educativa?
rentes, aunque con igual profesionalismo. Son dos perso-
nas que asumen el desafío de encarar un proyecto común El trabajo en pareja educat iva que aquí se propone deriva de
con una intencionalidad compartida que es acompañar un programa de investigación4 que tiene por objetivo cen-
los procesos de desarrollo de niños y niñas, respetando la tral generar “buenas prácticas de enseñanza” vinculadas
diversidad de los mismos. Asumir la labor educativa en pa- a la comprensión.
reja no es una tarea sencilla; porque la enseñanza, a pesar Inspirándonos principalmente en la experiencia educa-
de los grandes cambios de la humanidad y la globalización, tiva que se viene llevando a cabo en Reggio Emilia, desde
sigue siendo pensada como un trabajo en solitario. Más la post guerra, hace más de cincuenta años, asumimos el
allá de la falta de decisiones políticas y presupuestarias en desafío de experimentar esta modalidad de trabajo para
educación en Latinoamérica, pensar el aula es pensar en poder teorizar sobre ella y generar orientaciones para me-
un educador en singular y, por más esfuerzo que pongamos
los maestros para trabajar juntos, pasar del 1 al 2, es decir, 4 Se trata del Proyecto de Investigación de la Universidad Nacional
sumar 1+1, en otras palabras, sumar un “uno” al “otro”, de Villa María titulado “Configuraciones de enseñanza en carre-
ras de formación docente de la unvm”, que reúne a equipos de
puede convertirse en una pesadilla, no sólo para quienes investigación en el campo de la Didáctica General y las Didácticas
pretenden enseñar sino para quienes intentan aprender. Específicas. Se sugiere consultar www.gided.info

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jorar la intervención docente que, en definitiva, siempre En educación infantil la situación es similar, en tanto
debe ser “acompañar” los procesos de los niños. que no es posible desempeñarnos independientemente,
Loris Malaguzzi,5 mentor de esta concepción pedagó- desoyendo al otro y sin intentar coordinar nuestro “movi-
gica, es quien rompe con la idea tradicional del maestro miento” al compás del ritmo de los niños y las niñas.
novel y el maestro experto, en la que existe una relación Como educadores, consustanciados con la complejidad
diferenciada, jerárquica y propone el trabajo en pareja de la problemática y los desafíos que supone enseñar y
educat iva, la que se conforma por dos personas con la mis- aprender, ponemos el acento en los aspectos esenciales de
ma categoría profesional, las mismas funciones e idéntico este baile, como aproximación, que nos ayude a ref lexio-
sueldo; quienes comparten, sin divisiones nominales, un nar sobre el concepto de pareja educativa. “Needs two
único grupo de niños y niñas a cargo, durante la mayor to tango”, es una frase popular que expresa la necesidad
parte de la jornada laboral, asumiendo la responsabilidad mutua que existe en la danza y que los movimientos son
conjunta y tutorial con el mismo poder de decisión experta. posibles sólo si se realizan conjuntamente; esto no quiere
La pareja educat iva es un trabajo entre iguales, cuyas decir que ambos deban hacer el mismo movimiento, sino
prácticas relacionales se enmarcan en un proyecto inte- procurar mantener una conexión y una oposición “con-
raccionista y socioconstructivista, en el cual pueden sur- frontativa”, constante entre los torsos y, en el caso de la
gir conf lictos y desacuerdos que derivan en la búsqueda pareja educativa, es una confrontación productiva al ser-
del consenso y el disenso para poder asumir riesgos con- vicio de la enseñanza.
juntos, limar asperezas, acordar y, fundamentalmente, Todos acordamos sobre la belleza visual que ilustra el
confrontar. espíritu del tango y es en sintonía con esta danza que Ma-
Es precisamente frente al otro que “empareja” que la laguzzi arguye que no cualquier pareja es “pareja”, sino
confrontación permite a “los maestros percibir la necesi- que debe existir tanto en el baile como en la educación
dad de transformar los hechos educativos en pensamiento; una unión de mentes, pero no de iguales, sino de perso-
los pensamientos en ref lexión, y las ref lexiones en cam- nas consustanciadas con la tarea de educar, con decisiones
bios de pensamiento y acción” (Malaguzzi, 2001: 79). Es de- políticas, profesionales, donde se produzcan equilibrios y
cir, la confrontación de la pareja educat iva implica discutir desequilibrios y, como dice Loris, una “tensión necesaria e
públicamente interpretaciones posibles sobre la manera imprescindible de quien con curiosidad, quiere aprender,
de hacer educación. no como una moda, sino para entrar en crisis y modificar
Así, por ejemplo, si hacemos una analogía entre la pa- sus hábitos y costumbres didácticas” (Hoyuelos, 2006: 26).
reja educat iva y los bailarines de tango, simplemente en- Porque en ese trabajo, se va más allá de la palabra, de los
tendemos que el individualismo es enemigo de este baile. verbalismos, de quien busca los significados y se hace lo ne-
Esta danza, que contempla la necesaria conexión entre la cesario por “problematizar los sucesos de la vida; para que
pareja de bailarines, busca la unidad en el contacto, en el éstos se puedan interpretar de mil maneras y nunca saber
despliegue, en la reducción máxima del espacio entre dos cuál será la interpretación exacta” (Hoyuelos, 2006: 26).
cuerpos que se desplazan como uno solo. La bailarina Ni- En Reggio, la infancia es vista como una construcción
cole Nuaklapwijk expresa, social, dentro de un conjunto activamente negociado de
relaciones sociales. En este contexto, “los educadores en
conducir en el tango, no significa mover algo, sin mo-
pareja educat iva se dejan contaminar y… seducir por lo más
vernos, moverme no puede tener lugar sin la presen-
bello de la originalidad humana: la incertidumbre de co-
cia del otro, así como mover a otro, no puede tener
nocer” (Hoyuelos, 2009: 171). Su trabajo se basa en una ley
lugar sin la participación del movimiento de uno.
fundamental: “Si se hacen cosas reales, también son rea-
Esto rige en partes iguales para el hombre y la mujer.
les sus consecuencias” (Hoyuelos, 2009: 181), es decir, las
La conducción debe tener lugar en una totalidad, en
ideas surgen a partir de los acontecimientos y experien-
la unidad de la pareja.
cias reales, dando lugar a respuestas y conclusiones reales.
Sobre la base de una pedagogía interactiva y relacional,
se explica que un grupo de niños está conformado por in-
dividualidades con afinidades y habilidades diferentes. El
5 Malaguzzi, Loris (1920-1994). Guionista, escritor, director teatral aprendizaje es el resultado de la actividad vincular entre
y periodista, estudió Magisterio; posteriormente, se licenció en
Pedagogía y se especializó en Psicología.  Fue el mentor de una
ellos y con la pareja educativa.
concepción pedagógica y cultural respetuosa de la cultura de la
infancia. Pensaba en la escuela como un organismo vivo: “una
escuela amable”, inmersa en lo político, lo social y lo ciudadano.
Justificó la consolidación de la pareja educat iva y legitimó la figu-
ra del atellierista como la participación conjunta de enseñantes y
auxiliares escolares, la eliminación piramidal del director/a en
las escuelas, y dio impulso a la actuación educativa basada, prin-
cipalmente, en la investigación, experimentación y verificación
de los procesos y resultados.

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¿Cómo trabajar en pareja educativa? nes, modelos de errores y de éxitos, pero la gran diferencia
está en que en las escuelas infantiles “se sigue a los niños,
Relevancia de la no a las programaciones” (Malaguzzi, 2001: 88) y esto mar-
interacción/comunicación ca la diferencia.
Malaguzzi expresa con claridad cómo se supone que de-
Este modelo educativo se sostiene desde la idea de trabajo bería actuar la pareja educativa:
cooperativo. La pareja educativa, la legitimación del atelie-
Tenemos que estar convencidos de que las modali-
rista y también de la cocinera, la participación conjunta de
dades del aprendizaje y del conocimiento son indi-
familiares y de la comunidad en las reuniones pedagógi-
viduales y de que lo que nos interesa es descubrir y
cas ayudan a la formación integral del niño constituyendo
entender las interacciones a través de las cuales los
uno de los ejes de esta pedagogía.
niños construyen sus habilidades. (…) tenemos que
Malaguzzi luchó durante toda su vida por “el desarrollo
estar convencidos de las capacidades de trabajo coo-
de las potencialidades de todos los niños y niñas, mujeres
perativo de niños y niñas, y creer que el éxito del pro-
y hombres allí donde se encuentren” (Malaguzzi, 2001).
yecto depende de esas capacidades. Hemos de respe-
Civarolo (2011: 41) sostiene,
tar sus tiempos de acción y de pensamiento, así como
el niño es una actor protagonista, sujeto dotado de sus pausas y sus indecisiones. Hemos de ayudar a los
cien lenguajes, metáfora que nos legó Malaguzzi, para niños a ref lexionar sobre sus posibles diferencias de
describir su rechazo hacia aquellas visiones que de- opinión y dar la libertad de proponer alternativas ca-
finen al niño como débil, incompleto, vacío y sin ca- tegóricamente opuestas.
pacidad. Por el contrario, ese niño poderoso es capaz
Hemos de ayudar a los niños a exponer con claridad
de explorar, observar, crear, porque atesora un bagaje
sus hipótesis, sin supeditarlas a la de sus compañe-
de posibilidades que le permiten expresarse en cien
ros, sin que tengan miedo a equivocarse, y dar valor
lenguajes,…pero de esos cien lenguajes le roban 99.
a las propias ideas. Hemos de ayudar a los niños a
detectar el enriquecimiento que proviene de la nego-
Es así como Malaguzzi denuncia, constituyéndose en un
ciación de las ideas y de los actos.
defensor de la cultura de la infancia.
En este escenario la pareja educativa conlleva una in- La pareja educat iva tiene que asumir un rol de me-
tencionalidad: “la de un par que quiere permanentemente diación, proponiendo intercambios mesurados de
aprender experimentando con los niños” (Civarolo, 2008: saberes y de competencias. También poner de relie-
18), siendo ellos mismos aliados incansables en el estudio ve los significados que aparecen y solicitar la parti-
y comprensión del mundo de los chicos. cipación de todos los niños además de preservar, en
Pensar en una pareja educat iva es también pensar en las la medida de lo posible, la neutralidad en el curso de
posibilidades de la experiencia estética a través del arte de los procesos de las ideas y de las prácticas de los ni-
enseñar, la cual se hace posible a través de la progettazione, ños, convencidos de que estos tienen recursos para
la escucha, la abducción y la documentación de la cultura llegar más lejos de lo que se piensa. Y hacer lo posible
infantil. por ayudarlos a expresar mejor las ideas (…) así como
asegurarse de que cada proyecto ha cumplido los ob-
jetivos de ayudar al desarrollo de su personalidad.
La progettazione (Malaguzzi, 2006: 46)

Las palabras programación y planificación tan usadas en La progettazzione es una especie de dialéctica constructiva
nuestros días son reemplazadas por el pedagogo reggiano, espiralada que permite dar forma al proyecto. Al decir de
opta por proyecto o proyección, en italiano: progettazione, Hoyuelos (2001: 54), “trabajar con los niños conlleva […] dos
refiere a las estrategias para apoyar los procesos dinámi- ideas: estar proyectando constantemente y tener confian-
cos de conocimiento de los niños. Esta posición teórica im- za en el futuro”.
plica previsión y actuación de secuencias de operaciones
coordinadas, pero siempre desde una posición f lexible,
que se construye y deconstruye y saca provecho del error “Luces y sombras para imaginar el mar”
y la incertidumbre del proceder del niño en el proceso de
conocimiento. La pareja educativa y una progettazzione singular son fun-
Malaguzzi ama la estética de lo insólito, no soporta la damentales para descubrir la creatividad e imaginación
rutina, la clonación que lleva a los educadores a la repeti- en el trabajo de pequeño grupo, conformado por niños y
ción absurda. En Reggio Emilia, existe un patrimonio de niñas de seis y siete años.
intercambios de trabajo, investigaciones, documentacio-

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Vea Vecchi (1990) considera que las luces y sombras, →→ La pareja educativa podría diseñar propuestas didác-
transparencias y colores invitan a explorar e inventar his- ticas, que hagan visible el pensamiento y el conoci-
torias en un espacio ambiguo entre la magia y la ciencia. miento de los niños y niñas.
De tal modo que, para llevar a cabo una primera experien- →→ La pareja educativa propone escenarios de aprendi-
cia a manera de prueba, se ofreció a los niños, un espacio zaje que estimulan la curiosidad, la motivación y la
especialmente preparado con retroproyector, música con creatividad, promoviendo la realización de activida-
sonido del mar, un ambiente con una acústica adecuada, des significativas de aprendizaje sobre todo en lec-
con luces laterales y en el techo ubicadas sutilmente, para to-escritura, ya que los niños ante este entusiasmo
no saturar. Además, se les proveyó de materiales novedo- quieren transmitir de manera oral y escrita sus emo-
sos como blondas, celofán de colores, gemas, vidrio, etc., ciones e impresiones.
que les aportarían diferentes texturas, bordes, transpa-
rencias, colores, imágenes, y propiciarían una absoluta
libertad de acción. La pareja educat iva y el pequeño grupo
Los niños, al interactuar con los materiales, imagina-
ban y relataban aquellas alegorías que su imaginación les En palabras de Malaguzzi el trabajo en pequeño grupo es
permitía ver, las que fuimos rescatando a través del regis- mucho más que un simple elemento funcional, se trata de
tro en audio, fotografías y filmación; la textualidad de la un contexto cultural que tiene en su seno una vitalidad
palabra da cuenta de que gran parte de esa creatividad y y una red de posibilidades infinitas, por lo que debemos
narrativa infantil fue co-construida con otros niños. hacer todo lo posible para que esta forma de trabajo forme
Algunas de las manifestaciones que se documentaron parte de la cultura de la educación infantil.
se relacionaron con el  animismo, es decir, dar vida a los
El pequeño grupo abre una ventana desconocida de
objetos, por ejemplo: “el pulpo abrió sus brazos y sentí que
observación y descubrimiento de las maneras dife-
algo me tocó”, o con el dinamismo al otorgar movimiento a
renciadas que los niños tienen de participar, proce-
los objetos: “el t iburón me seguía”. 
der, elegir; por ello es importante seleccionar acti-
Esta posibilidad de representar y de representarse es de-
vidades, siguiendo las motivaciones y los intereses
nominada por Piaget (1947), como función simbólica; desde
de los niños. Las actividades en pequeño grupo (dos,
los dos años hasta los siete, se transforma la inteligencia
tres o cuatro niños) son módulos de enorme deseo
para prolongarse en pensamiento propiamente dicho.  Un
y eficacia comunicativa. Se trata de una tipología
niño de este período de edad no desarrolla un tipo de razo-
de organización que es la más adecuada para desa-
namiento ordenado y jerarquizado como el de los adultos.
rrollar la pedagogía relacional y donde, con mayor
Su razonamiento es diferente y Piaget lo denomina trans-
probabilidad, se desarrolla la complejidad de la inte-
ductivo, porque
racciones; y donde emergen mayores acomodaciones
(…) se caracteriza por la asociación de elementos par- auto-reguladoras, conf lictos productivos y juegos de
ticulares, que no guardan una relación lógica y nece- reciprocidad interactiva. (Malaguzzi, 2001: 56)
saria entre sí, cuando intenta construir una respues-
ta lo hace desde estas características de pensamiento, La interacción entre los niños y la pareja educat iva acom-
por lo cual hablamos de una pre-causalidad, ya que pañando el trabajo de pequeño grupo da cuenta de que:
no puede establecer una relación de causa-efecto des- →→ El niño aprende interaccionando con su ambiente,
ligada de su egocentrismo. (Piaget, 1947) transformando activamente sus relaciones con el
mundo del adulto, de las cosas, de los acontecimien-
Estas características van cediendo paulatinamente, dando tos, y de manera original de sus coetáneos. En este
paso a una progresiva socialización y descentración del sentido participa de la construcción de su yo y en la
pensamiento. construcción del de los otros.
El anterior trabajo descripto, o mejor dicho, esta proge- →→ La interacción entre los niños tiene un valor fun-
ttazzione realizada en pareja educativa permite abrir nue- damental en la experiencia de los primeros años de
vas perspectivas para la educación, ya que vida. Se trata de una demanda, de un deseo, de una
→→ Los niños y las niñas recurren espontáneamente al necesidad que todo niño tiene y que quiere satisfacer
juego de las figuras y al lenguaje, cuando han des- en adecuadas situaciones que favorecen dicha inte-
cubierto que puede ser un medio de expresión del racción.
mundo y de su ser. →→ La interacción en pequeño grupo permite negociacio-
→→ Los niños y las niñas construyen su conocimiento nes y dinámicas interesantes, productivas y diversas,
a medida que organizan y reorganizan la realidad. y no menos importantes que las que se dan entre ni-
ños y adultos.

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→→ El reconocimiento del autoaprendizaje y co-apren- →→ Tenemos que reconocer que las construcciones sim-
dizaje de los niños (que además disponen de las ex- bólicas que, en parte, se derivan de las habilidades
periencias interactivas que construyen con la ayuda cognitivas y de las formas con las que se actúa, en-
de los adultos) tiene un importante y específico rol cuentran un terreno abonado en las interacciones de
en la organización de comportamientos e ideas, que los niños en pequeño grupo, porque posibilitan una
son en definitiva, el objetivo de los procesos y de las capacidad de desapego de la realidad y la aparición
estrategias de la educación infantil. de procesos de abstracción combinatoria. Por ejem-
→→ La interacción entre los niños pone en juego conduc- plo; si pensamos en los juegos de rol, ilusión o ficción
tas sociales, emocionales, comunicativas y también son propios de esta edad, en ellos el niño interpreta a
cognitivas. Las variables de contenido y forma de la los personajes con extraordinaria intensidad, a veces
interacción son las que dibujan la cantidad y la cali- con una completa identificación y olvido de sí mismo.
dad de los diversos puntos de vista, que tienen que ser En ellos realidad y ficción se confunden. Pero en úl-
coordinados. Esta riqueza no se da cuando los niños tima instancia los niños reconocen la realidad de su
tienen que estar solos. papel de “como si”. El niño utiliza los símbolos inven-
→→ Cada interacción, por lo tanto, puede producir un tados por él para transformar a su gusto según sus
enriquecimiento de las relaciones interpersonales, deseos e imaginación y expresar todo lo que no puede
de la capacidad de escucha y de respuesta, de las mo- manifestar de su experiencia a través del lenguaje
dificaciones mímicas y lingüísticas, del redescubri- verbal según las necesidades interiores. El juego sim-
miento de los coetáneos, de la adquisición de nuevas bólico constituye el medio privilegiado para el niño
curiosidades y conocimientos, y del desarrollo de la de ejercitar sin oposición sus esquemas en respuesta
capacidad simbólica. Se trata de una experiencia que a sus propias necesidades afectivas e intelectuales, es
ofrece una larga lista de posibilidades de aprendizaje. sin oposición porque no está dirigida hacia una adap-
→→ Para que los intercambios tengan, más fácilmente, tación al mundo real. El juego es asimilación pura de
un carácter cooperativo (según han demostrado mu- la realidad al niño. En el plano afectivo y social, el
chas investigaciones) es necesario que las edades y juego simbólico permite expresar y regular los con-
niveles de maduración y desarrollo de los niños no f lictos, y todo ello es más fructífero en la interacción
sean muy diversos, aspecto que es importante que con sus coetáneos.
sea tenido en cuenta a la hora de elegir proyectos y →→ Al mismo tiempo no tenemos que olvidar el rol que
ofrecer propuestas a los niños. tienen los juegos de simulación (tan comunes en la
→→ Según afirman las teorías provenientes de la psicolo- experiencia de los pequeños) en el desarrollo social
gía social, en las interacciones entre los niños se dan de las inteligencias, en el desarrollo del deseo y en la
naturalmente conf lictos cognitivos y de otro tipo que garantía de poder estar, actuar y hablar juntos. Todo
tienen que ver con el desarrollo de la personalidad, esto ayuda a la construcción del símbolo.
y con la confrontación y la diversidad de acciones,
expectativas e ideas que emergen. Gracias a estos Para terminar es importante destacar que los niños, na-
conf lictos se transforman las situaciones individua- turalmente siempre están dispuestos a interactuar entre
les, sobre todo, en el plano cognitivo y en las formas ellos, no descubren el arte de hacerse amigos o maestros
de aprendizaje que posibilitan el desarrollo. Y como entre ellos, extrayendo los modelos del cielo, sino que los
no se dan relaciones de autoridad o de fuerte depen- extraen interpretando los modelos que la pareja educat i-
dencia, los niños se muestran sensibles a entender va les ofrece cuando estos saben estar, trabajar, discutir,
el significado del conf licto, a sentir su fascinación y pensar o investigar juntos (cuanto más mejor). (Malaguzzi,
sus ventajas. 2001: 58-60)
→→ Por otra parte, tenemos que considerar que los con-
f lictos no tienen por qué producir efectos en los nive-
les cognitivos que sean, necesariamente, más avan- Diálogo en el pequeño grupo
zados a los que ya tienen los niños. Sin embargo, esto
también, debe ser considerado como una ventaja ya Ejemplo real: entran al aula taller un grupo de tres niños,
que los conf lictos son percibidos como oposición, di- Francisco, Octavio y Ulises, los dos primeros de siete años
sonancia, diferencia, y los efectos y progresos cog- y el último de tan solo cinco años. Se dirigen rápidamente
nitivos no siempre se pueden ver inmediatamente, hacia los globos. Octavio toma la voz de mando y empieza
debido a que pueden aparecer más adelante. Cuan- a dar algunas directivas a los demás:
do el problema planteado puede suscitar conf lictos
—“Vamos a hacer nuestro plano”, “primero hay que sa-
cognitivos, los niños ponen en marcha un proceso de
ber cómo dibujarlo”.
co-construcción a través de acuerdos cooperativos.

10
Mientras tanto Francisco no resiste la tentación y pincha Forman con cintas de papel crepe rosa, las bolitas de tel-
una bombita con la tijera. El grupo comienza con el pro- gopor.
yecto compartido (la realización de un gran dibujo), selec- —“Mira, Fran, me salió la nariz”
cionan los materiales y con las miradas aceptan o no las —“Uli, ahí te va a decir el Octavio lo que tenés que hacer”.
decisiones entre ellos. “Hacé la lengua”
Octavio inicia el dibujo diciendo qué tipo de materiales
Ulises manifiesta:
va a usar. Ulises objeta:
—“Ya le hice la boca y los labios”
—“Yo lo hago así nomás”
—“¡Mirá qué buena idea tuvo el Ulises, Fran!”. Replica Octa-
Octavio aclara el porqué de la disposición y el modo de uti- vio entusiasmado.
lizar los materiales. Continúa organizando el trabajo luego —“¿Nos ayudás a hacer las orejas?”
de meditar en todo lo que tiene y exclama: —“Vos tenémelo, mientras yo le pongo pegamento”
—“¡Puede ser un bombero!”, “porque ya tenemos el casco”. —“Ya puede escuchar”. Dice Francisco, al pegar la primera
oreja.
Toma la mitad de una esfera de telgopor y la muestra al
—“Fran, ahora puede hablar”. Octavio continúa el lenguaje
resto del grupo. Mientras tanto, no deja de dibujar el futu-
figurado.
ro bombero en el papel. Estimula a sus pares, para que se
entusiasmen: Los dos niños sonríen. Octavio mira la obra terminada y
—“¡Esto es como en plást ica chicos!”. suelta un grito de aprobación.
—“¡Un bombero hicimos!”, “Con cinta ya está… alcánzame el
Ulises pregunta qué tiene que hacer, los otros dos le res-
plano ¿a ver cómo salió?”
ponden:
—“Tenés que hacer los dientes. Tenés que mejorarlos”. Luego toman, sin dudarlo, la cámara fotográfica que es-
pera impávida sobre la mesa y fotografían su obra una y
Francisco le aclara:
otra vez.
—“Ya sé cómo hacer las orejas”.
Francisco agarra una bombita amarilla, luego busca en la El anterior ejemplo muestra cómo los niños se desarrollan
mesa del rincón algunas más, al descubrir que hay de color en un mundo de relaciones, necesitan trabajar juntos para
rosa deja la de color amarillo y toma dos de color rosa. Una hablar entre ellos, ref lexionar sobre algo y revisar sus ex-
vez concluido el trabajo habla con Octavio. periencias y teorías. El pequeño grupo es indudablemente
—“Ahora preparemos los ojos. ¿De qué color pueden ser?”. un hábitat natural para los niños.
—“Oh, Octavio”. Loris Malaguzzi amaba las actividades en pequeño
grupo, sostenía que realizadas por dos o tres niños juntos
Se enoja, porque Octavio ya empezó con los ojos.
abrían una ventana hacia lo desconocido y permitían des-
—“¿Hice los dientes bien?”. Pregunta Ulises
cubrir las maneras diferenciadas que los niños tienen de
—“Si, ahora mejorá los de arriba”.
participar, proceder y elegir.
Francisco se molesta porque Octavio no deja de decir cómo
Las actividades en pequeño grupo son módulos de
debe ser y hacerse el bombero.
enorme deseo y eficacia comunicativa, esta tipología
Ulises aplicado en la tarea pregunta:
de organización es la más adecuada para desarrollar
—“Ya está. Ahora, ¿qué hago Octavio? ¿Qué hago Fran?”. Le
una pedagogía relacional y donde, con mayor posibili-
pregunta al otro niño.
dad se desarrolla la complejidad de las interacciones,
Francisco contento por ser consultado le indica, en de-
y donde emergen mayores acomodaciones auto-regu-
talle, lo que debe realizar.
ladoras, conf lictos productivos y juegos de reciproci-
—“Anda haciendo el mismo tamaño de la boca”
dad interactiva. (Malaguzzi, 2001: 56)
Le pegan los ojos de algodón, con el centro de color azul
con goma vinílica.
Ulises aún no está satisfecho y re-pregunta si está bien El espacio como estét ica que maximice las
la boca. Obtenida la confirmación de sus pares, continúa potencialidades de cada niño
trabajando.
Octavio vuelve a asumir una actitud de compromiso Desde la pedagogía Reggiana se recoge la idea de espacio
frente al proyecto que se está llevando a cabo y comienza como lugar habitable de encuentro y conexión, de relacio-
a supervisar todo el trabajo. nes móviles y dinámicas que se van transformando y mo-
—“Un poquito más grande”. dificando, invitando a la complejidad de las actuaciones de
los niños y los adultos que lo habitan.
Al fin pide ayuda…
López Quintás (2009) refiere sobre la condición ambien-
—“Fran, ahora tenés que ayudarme”.
tal de la vida humana, considera la idea de que el ser hu-

11
mano convierte los espacios en ámbitos, porque es “un ser minación artificial debe actuar como apoyo para la
que habita” y que crea, por necesidad ineludible, ámbitos ambientación y la promoción de la actividad diaria,
de encuentro y convivencia. Si observamos cómo los niños siempre pensado y adaptado para las necesidades y
utilizan los espacios, veremos su gran capacidad de cons- deseos de la infancia. Por ejemplo, en las salas de 2
truir y deconstruir ámbitos, en tanto que, en algunos mo- y 3 años del nivel inicial, las luces no pueden estar
mentos utilizan los espacios con la misma finalidad para colocadas en el techo, porque los niños suelen dormir
la que habían sido diseñados, pero otras veces, modifican la siesta boca arriba y esto dificulta el buen descanso.
totalmente su función. →→ El acceso y la visibilidad entre los espacios que con-
El espacio debería presentarse desde el punto de vista forman la escuela son características muy impor-
didáctico como una invitación a la imaginación, capaz de tantes a tener en cuenta, por ejemplo, las ventanas
alimentar la creatividad de niños productores (y no consu- ayudan a integrar el entorno dentro de las clases, en
midores), es decir, un espacio organizador de las relaciones lo posible deberían estar a la altura de los pequeños
y de la actividad, un agente que estructura las relaciones y llegar prácticamente a nivel del piso.
personales, en tanto que es el contexto que más cerca tiene →→ Es fundamental, tanto para los chicos como para la
el niño y la niña al interactuar continuamente, y le brinda pareja educativa, que exista una comunicación en-
la posibilidad de servirle para formarse una idea del mun- tre los espacios, con puertas que enlacen y faciliten
do que lo rodea y convertirse en parte activa del mismo. la comunicación (aunque cuidadosamente pensadas
El espacio no es uno solo, se necesitan una gran varie- para evitar el exceso de ruido), puesto que el com-
dad de espacios en la escuela: espacios verdes o construi- partir espacios sirve para estimular el contacto en-
dos, abiertos o cerrados y, al mismo tiempo, también es tre los niños de distintas edades, al mismo tiempo
necesario dar una respuesta equilibrada a las necesidades que potencia su autonomía y capacidad de decisión.
de seguridad, de exploración, de autonomía, de movimien- Abrir estas puertas al momento del juego fomenta la
to, de descanso, de juego y de relación social. relación entre niños de distintas edades y les permite
El objetivo no es crear una nueva escuela, sino que se decidir qué actividades quieren hacer o qué proyec-
trata de desafiar las condiciones existentes, puesto que tos emprender. Contar con aulas con posibilidades de
hasta los cambios más pequeños pueden suscitar nuevos conexión aumenta las opciones de juego de los niños
retos y experiencias. de nivel inicial y en el caso de los niños de prima-
La pareja educativa tendría que considerar a los espa- ria, al compartir por ejemplo una película, aumen-
cios como invariante didáctica de relevancia y pensarlos ta las posibilidades de intercambio de opiniones, la
desde su dimensión estética: ref lexión, el conocimiento del pensamiento del otro
→→ La luz debe utilizarse con mucho cuidado, porque es y otorga en todos los casos una mayor f lexibilidad
la que puede crear un ambiente positivo. Es preciso en la comunicación de los distintos grupos. Es por
tener en cuenta que la luz cambia de intensidad se- ello que en Reggio Emilia no existen los pasillos, sino
gún avanza el día y también a lo largo de las diferen- que existe la gran plaza sobre la cual rotan las au-
tes épocas del año. La luz inf luye en la percepción las con sus transparencias, donde nada es privado;
de los colores y puede aumentar su intensidad hasta una especie de “acuario”, tal como a Loris le gusta-
generar malestar en los habitantes de un espacio con- ba imaginar metafóricamente la escuela (Civarolo,
creto, o todo lo contrario, proporcionar bienestar y 2008: 15); porque Malaguzzi creía que las criaturas
tranquilidad. Al trabajar con niños se necesitan au- tienen derecho a participar de un ámbito capaz de
las bien iluminadas, pero que cuando sea necesario solicitar y de convertirse en un interlocutor complejo
puedan protegerse del sol y quedar a oscuras, al igual de esas capacidades para que éstas se puedan, cuali-
que deben ser acústicamente agradables. tativamente, expresar y desarrollar profundamente
→→ Los colores bien utilizados ayudan al equilibrio y a (Hoyuelos, 2006: 73).
promover estímulos creativos en los niños. No debe- →→ El espacio exterior no solo debe ser pensado como la
mos cometer el error de pensar que a los niños sólo salida al recreo o al patio, o como un sitio para estar
les gustan los colores básicos y llamativos, como el al aire libre, sino tal como sostiene Ritscher (2007),
rojo, amarillo y azul que invaden los espacios infan- un espacio exterior se articula a través de elemen-
tiles. Pareciera que la paleta cromática ha desapare- tos inertes y elementos vivos; el espacio exterior es
cido. ¿Por qué no utilizar colores que les permitan a un recurso educativo precioso, puesto que es el sitio
los niños ver el mundo en otras gamas?, orientarse en privilegiado de contacto entre el centro educativo
el centro educativo, recorrer su escuela identificando y el territorio, el social y el natural. De allí que es
los espacios concretos. necesario pensar, organizar, articular y equipar el
→→ El diseño del entorno debe ser claro y lógico; el niño espacio exterior al aula como se hace con el espacio
debe poder moverse con la máxima comodidad. En interior. No se trata solo de que el espacio sea amplio,
este caso se retoma lo referido anteriormente, la ilu- se trata de pensar en un espacio enriquecido, articu-

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lado y variado, que invite a comportamientos inteli- evitando interferencias innecesarias en las expe-
gentes: exploraciones, descubrimientos, intenciones, riencias de aprendizaje y de comunicación.
encuentros, colaboraciones, iniciativas, proyectos, →→ Los espacios vacíos, como menciona Bonàs (2010: 34),
construcciones. Este espacio debe ser diseñado con tienen que ser considerados como un espacio-tiempo
zonas diferenciadas, delimitaciones, plantas, equipa- para decidir qué se quiere hacer a partir de una es-
do con mobiliario, materiales, estructuras para reor- tructura creadora de posibilidades. Esta estructura
denar, de manera que el gran grupo de niños se divida se define por pequeñas zonas y en cada una de estas
espontáneamente en subgrupos autogestionados. Es zonas o ámbitos se encuentran materiales de consul-
útil tener un terreno con desniveles, para subir y ba- ta, elementos de ambientalización o herramientas de
jar; zonas pavimentadas: terraza, patio, carriles para uso que permiten poner en marcha proyectos muy
bicicletas. Son útiles los materiales para “trabajar” diversos según ámbitos y temáticas variadas, así es
(cavar, llenar, mezclar, trasvasar, transportar, cons- que, no debemos olvidar que “el espacio y los objetos
truir...): arena, agua, tierra, hierba, césped, además desvelan la cultura de las personas que lo habitan”
de herramientas para estos juegos-trabajo: contene- (Hoyuelos, 2006: 79).
dores diferentes, palas, cucharas, regaderas, espon-
jas... Respecto a los equipamientos de juego grandes y Otálora (2010: 77) sostiene la tesis de que “un espacio edu-
fijos, típicos de los parques infantiles como tobogán, cativo resulta significativo para el desarrollo en la infan-
estructuras para trepar, son necesarios sólo pocos, cia cuando el conjunto de situaciones relacionadas entre
pero bien escogidos y bien distribuidos, porque como sí, favorecen la construcción del nuevo conocimiento y
sostiene Hoyuelos (2006: 76), “El verdadero espacio permiten el crecimiento de formas de pensamiento más
invita a transformarlo para sentir nuevas vivencias”. avanzadas y modalidades más complejas de interacción”.
→→ La belleza, la atmósfera un poco mágica, se crea tam- O como prefería decir Loris, debemos construir un proyec-
bién con la presencia de plantas que son el equipa- to educativo que contemple un “espacio – ambiente más
miento vivo y dan formas al espacio, delimitan, di- habitable” (Hoyuelos, 2006: 78).
viden, son puntos de referencia estables, sirven para
crear zonas de sombra, son una fuente de materiales
para jugar: pequeñas ramas, hojas, f lores, semillas... “Fascinadas con los globos”
Las plantas ofrecen a los niños espacios recogidos
donde retirarse “en privado”, porque también tienen En la modalidad de taller preparamos lo que Cabanellas
derecho a estar solos. Ante esto, la pareja educativa (2005) llama un espacio significante, dividido en dos secto-
no puede desligarse de su rol de responsabilidad di- res, aunque comunicados. El primer espacio estaba am-
ferenciado, pero puede permanecer algo alejada aun- bientado con telas de colores: blanco, verde, rojo; esferas
que atenta; es una forma de estar presentes sin intro- de telgopor de diferentes tamaños, forradas y sin forrar;
misiones. La presencia de los educadores constituye túneles de telas, espejos, cascabeles al estilo sonajero que
un atractivo y un punto de referencia para el niño. colgaban del techo en forma de lluvia, algodones colgantes
que dispuestos en forma de cortina asemejaban “la nieve”,
El espacio exterior es menos programable que lo que pasa según decían los chicos. Cañón, pantalla y video digitali-
en el interior, hay demasiadas variables para tener en zado proyectaban obras elegidas de los artistas Jason Hac-
cuenta, como por ejemplo climáticas: se deberían prever kenwerth, Mia Perlman y Chema Madoz.
los cambios de tiempo como el calor y la lluvia. Reconocer El segundo espacio invitaba al trabajo de taller en pe-
que el aprendizaje que puede aparecer en el espacio ex- queño grupo en una atmósfera creativa de total libertad,
terior está lleno de secretos y sorpresas, pero justamente en el que había mesas y sillas pequeñas, una mesa con múl-
son, en buena parte, el motivo de la fascinación y de cómo tiples materiales a disposición tales como: globos, témpe-
f lorece el aprendizaje en la cultura de la infancia. ras, cintas, adhesivos, cartulinas, pinceles, goma de pegar,
→→ Con respecto al mobiliario, puede decirse que al pres- lápices, algodones, esferas, en fin, una enorme cantidad
tar atención desde lo didáctico con criterio pedagó- de materiales atractivos que reunían variedad de colores,
gico al tipo de mesas y sillas, observamos que éstas texturas, tamaños y formas.
deben elegirse en función de la edad y de las activi- Este espacio significante enriquecido por las posibi-
dades que vayan a realizarse dentro y fuera de clase. lidades de exploración que atesora permitió capitalizar,
El mobiliario al igual que la infraestructura escolar mediante la documentación, el nivel sensitivo y experien-
debe siempre abrir a un debate continuado, partien- cial manifestado por los niños, no sólo en las alocuciones
do siempre de la premisa de ofrecer un mayor bienes- verbales espontáneas, sino también en los gestos y movi-
tar a los niños. Es preciso pensar la distribución del mientos corporales que daban lugar a que af loraran pen-
mobiliario de modo que defina áreas de acción del samientos en expresiones metafóricas extraordinarias.
niño y lo proteja de los espacios de desplazamiento,

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Zoe y Soraya, de tan solo 3 años, luego de explorar con trenar todas las dotaciones genéticas que poseen, así
notable habilidad en la computadora las diapositivas de las como de los vínculos que establece y de los que niega.
obras de los artistas plásticos que eran proyectadas en el Los espacios, los materiales, los colores, las luces y la
espacio significante, se dirigen al aula taller e inician este decoración tienen que participar y ser solidarios con
intercambio dialógico: la gran alquimia que representa el hecho de crecer en
una comunidad. (Hoyuelos, 2006: 74)
Z – ¡Mirá, son iguales a los que vimos! (refiriéndose a
los globos y vinculándolos con la representación de
una escultura de Jason Hackenwerth realizada con
El valor de los materiales
globos de color rosa).
S – ¿Ese es un gusano? (continua la relación). Los materiales forman parte de las actividades cotidia-
nas de los niños, dentro y fuera de la escuela, así como la
Z – Hay dos gusanos (acerca otro globo).
ropa que usamos o el cepillo para lavarse los dientes, son
S – Ahora parece un jabón colgado (cambia el globo de todos objetos habituales con un uso concreto establecido
posición). culturalmente. Los niños aprenden a dominar su entor-
no a partir del reconocimiento y utilización de múltiples
Z – El mío t iene dos bebés en la panza (le muestra a So-
objetos: primeros los exploran, manipulan, descubren sus
raya la forma del globo).
atributos, experimentan, luego los usan según su función
S – Juguemos al metegol! preestablecida y, por último, le dan un uso libre y creativo.
Por lo tanto, los objetos materiales no pueden ser con-
Z - ¡Ah… sí, es el mete…..gol!
siderados nunca pasivos o inertes, sino que son elementos
significativos, porque se interpretan desde un entramado
Los globos encontrados significan para ellas la represen-
de relaciones de gran complejidad. El objeto, como seña-
tación, en este caso, de la obra del artista Hackenwerth
la Ceruti (1994), establece campos de emoción, campos de
observada minutos antes. La manipulación de los globos
continuidad, que abarca a los niños, a la pareja educativa
se vuelve mucho más que un juego, en realidad, es un foro
y al espacio. Los objetos materiales como constructores de
para la construcción cooperativa de las ideas que f luyen
espacios, redes, horizontes, paisajes, invitan a todos ellos
y llevan a cabo a través de acciones distintas, pero com-
a la activación de la memoria, a la producción simbólica y
plementarias, a fin de alcanzar una meta compartida. En
a la creatividad. Por lo tanto, es preciso que los materiales
palabras de Malaguzzi; “el niño es un portador de teorías,
sean valorados según favorezcan la experimentación, el
competencias, preguntas y es un activo protagonista de
juego y el aprendizaje, y según si dan respuesta a la cons-
sus propios procesos de crecimiento y desarrollo” (Mala-
trucción del conocimiento. A continuación, se presentan
guzzi, 2001: 94).
algunas características que deben poseer los materiales y
Manifiestamente hacia los tres y cuatro años, los niños
los espacios vinculados a ellos:
comienzan a describir los objetos a partir de las percep-
→→ Malaguzzi (1975) refiere a una escuela que encuentre
ciones sensoriales como el color (en este caso rosado), el
y manifieste su propia identidad “que sea una especie
tamaño o la forma, basadas en el movimiento. Las niñas
de túnel transparente” (Hoyuelos, 2006: 89), que no
asumen que “es un gusano” o “la panza de una mamá con
interrumpa el espacio. Por ello, las escuelas infanti-
dos bebés” (por la similitud de forma) o un “jabón colgando”
les de Reggio –hacia el exterior y hacia el interior–
(por la similitud de color). Asimismo van compartiendo las
gozan de grandes cristales transparentes que hacen
interpretaciones del otro, ya que interpretar lo que otro
que la luz, tanto de dentro como de afuera, generen
dice es reconocerle una intención comunicativa, y esto es
lo que llaman paisajes luminosos, tan apreciados por
mucho más que reconocer el significado de sus palabras.
los niños, que son capaces de percibir los matices que
Según Reyes (1996: 35), “la comunicación parte de un acuer-
los cristales proponen.
do previo de los hablantes, de una lógica de la conversación
→→ La cocina reviste especial importancia, Loris la con-
que permite pasar del significado de las palabras al signifi-
sidera como el símbolo emblemático y cultural de
cado de los hablantes”.
una forma de escuela diversa. Gracias a la cocina
Un ambiente especialmente preparado no sólo estimu-
y a los profesionales ligados a ella, los niños se re-
la la creatividad sino que además aumenta el desarrollo
lacionan con el personal, el material y los menús y
neurológico de los niños. Vecchi (1998: 133-135) señala que,
esto es de una importancia vital en el mundo de las
quien proyecta un entorno donde se vive muchas ho- relaciones posibles ligadas al aprendizaje.
ras al día, y en una edad en que el cerebro, el cuerpo →→ El uso de materiales no convencionales como la ma-
y los sentimientos son tan especialmente reactivos y dera, la tela, el corcho, tarros de leche, tapas de ollas,
en formación, tiene que tener conciencia de las posi- blondas de papel, gemas, puede ofrecer infinidad
bilidades que ofrece a los niños para expresar y en-

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de posibilidades sensoriales y de exploración,6 en artes, de la literatura, lo que ayudará a los niños a
los niños mayores estimula la creatividad y el jue- constituirse en sujetos culturales.
go simbólico; mientras que para la pareja educativa →→ Cada niño tienen una manera individual y propia de
plantea un reto importante, ya que muchas veces se acercarse a los objetos, de manipularlos, examinar-
desconoce su valor educativo, lo que requiere de la los, entenderlos; la pareja educativa debe tratar de
investigación y documentación. Asimismo, la bús- no intervenir en este proceso, ofreciendo su ayuda
queda de materiales no convencionales resulta todo solo si fuera estrictamente necesario. Como educa-
un desafío para la pareja educativa. Malaguzzi (1980), dores hay que adoptar una actitud de descubrimien-
comenta que en “el diseño de los objetos y mobiliarios to junto los niños y niñas, de sus procesos mentales;
es necesario no fetichizar nada, sino hacer sintoni- observar atentamente cómo exploran, descubren,
zar estos elementos e instrumentos con el ambiente conocen, transmiten, crean y no tanto el resultado
físico, cultural y humano de la escuela. Estos elemen- que obtienen, aunque sin desmerecerlo, alentarlos a
tos alargan, integran, median y robustecen la actua- seguir con la actividad que f luye y sustenta el pensa-
ción de los niños con la pareja educat iva” (Hoyuelos, miento, ayudándolos a persistir en los objetivos que
2006: 108). se han planteado.
→→ En el trabajo en grupo es importante señalar que los
niños más pequeños son los que más necesitan de El análisis de los materiales no puede separarse de la ac-
varios ejemplares del mismo objeto, ya que en esas tividad pedagógica, los mismos pueden simplemente ser
edades, el tipo de juego realizado no es todavía com- un medio para ocupar el tiempo del niño, o pueden, si la
partido ni organizado socialmente, a menudo adopta pareja de educadores se lo propone, convertirse en motores
formas de imitación de un niño a otro, y cada niño del desarrollo infantil.
quiere tener un objeto para desarrollar su propio jue- →→ Las paredes, los techos y muros tienen también una
go, al mismo tiempo que desean jugar en paralelo con función pedagógica, pueden dar cuenta del trabajo
los otros niños. Los objetos están llenos de posibles que realizan los niños en la escuela, ayudándolos a
acciones y lo que el niño consigue hacer con ellos de- mostrar y narrar las historias y los procesos vivi-
pende del tipo y cantidad de objetos propuestos, las dos. Para ello, la pareja educativa es fundamental
características y las posibilidades. al lograr hacer visible las experiencias infantiles,
→→ Para que los niños se muevan con seguridad en el con una estética pensada y cuidada; en una escuela
mundo de los objetos, éstos deben estar dispuestos de que habla a través de su “segunda piel” e invita a los
un modo ordenado, visible y accesible, con lo que se padres y a la comunidad, a detenerse con la mirada
facilita la orientación y la recreación. Por lo anterior, para ver qué es lo que los niños quieren contarnos.
el material siempre debe estar en buenas condicio- →→ El intercambio con los grandes objetos, sostiene Ma-
nes, se debe retirar todo aquello que estorbe, recu- laguzzi (Hoyuelos, 2006: 95-96), favorece en los niños
perar las funciones esenciales de cada objeto y dar los ritmos de maduración neurológicos y muscula-
siempre entrada a las novedades en la vida escolar res, el impulso que éstos sienten de probarse en los
de los niños. juegos, en los que su cuerpo puede ejercitarse amplia-
→→ Los materiales del entorno natural y social ofrecen mente, el deseo de ganar gestos, fuerzas, conocimien-
muchas posibilidades de manipulación y encierran tos y sentimientos que robustezcan la propia identi-
una gran riqueza sensorial, así como también pro- dad, y de hacer familiar la relación con los espacios,
mueven la creación de nuevas relaciones percepti- las cosas y los demás, convierten a los grandes obje-
vas. El descubrimiento del uso social de los objetos tos en interlocutores de extraordinaria fecundidad.
(por ejemplo una caja puede servir para guardar, para Si prestamos atención a lo que sucede entre los niños
trasladar objetos o como un objeto en sí mismo que y los grandes objetos, conseguiremos un inventario
despierta la imaginación), ayuda al descubrimiento de extremada importancia; una relación de gestos,
de los procedimientos culturales sobre los mismos degustaciones, temores, ref lexiones, propósitos, ac-
objetos. Dicho conocimiento aumenta las capacida- tos intrépidos, medidas precisas, perspectivas, sali-
des del niño en lo que a control y actuación se refiere, das, invenciones y rechazos, seducciones, traiciones,
como la seguridad y la autonomía personal. Despier- muecas, gemidos y gritos de rabia y de alegría, can-
tan su curiosidad, las ganas de conocer y generan ac- tos de victoria, historias empezadas y no acabadas,
titudes positivas en cuanto al aprendizaje. A objetos comentarios espléndidos y reservados, silencios, de
cotidianos hay que sumarle materiales específicos, cantidades crueles y de artificiosos aplazamientos.
que permitan descubrir el valor de la música, de las Es una historia compleja y rica, en y con matices in-
sospechados.
6 Para ampliar este tema se sugiere leer Civarolo, María Mercedes
→→ Malaguzzi (Hoyuelos, 2006: 95-96) refiere sobre
(2001) Al rescate de la act ividad infant il. Villa María, eduvim. la importancia cultural del espejo. Este objeto tan

15
atractivo para los pequeños los ayuda a construir su Malaguzzi, “a partir de un acto imaginario el niño selec-
identidad junto con la de las cosas y la de los otros, ciona un objeto, le da vida y le aporta unos significados
sabiendo que la unidad del cuerpo y del yo no es una sustitutivos de algo” (Hoyuelos, 2006: 60).
unidad fácil, sino una conquista compleja; el espe-
Estos significados son el sustento de las propias accio-
jo devela, según Loris, marcos de referencia, abre a
nes, son en realidad las estructuras de pensamiento,
comunicaciones e intercambios inmediatos y com-
las estructuras constituyen una altura cognitiva, un
plejos, brinda experiencias extraordinarias, como
esquema clave que unifica, por abstracción los sig-
por ejemplo el juego del aparecer y el desaparecer,
nificados en un significado más general y omnicom-
que supone un ir y volver; en el cual se consolida el
prensivo. (Hoyuelos, 2004: 141)
sentido del yo y del otro, en una relación cargada de
excitación y felicidad.
Esta transferencia que el niño realiza al asimilar dos ob-
jetos aparentemente no relacionados, describiendo el pri-
Todos los objetos tienen su significatividad, pueden inducir
mero como si fuera el segundo, es decir, transportando
a comportamientos lúdicos y a aprendizajes, o por el con-
entonces el significado de un dominio a otro, hace que el
trario, a confundir y, en consecuencia, ser rechazados por
niño metaforice, en otras palabras, que construya un nue-
el niño. Por ello, es necesario elegir el material de acuerdo
vo conocimiento a partir del devenir de la manipulación
con el objetivo que se persigue y el proyecto elegido. La se-
de diferentes objetos y, en consecuencia, sucede la creación
lección y la forma en que éstos se presenten son cruciales
de uno nuevo.
para promover significativas experiencias de aprendizaje,
a través del establecimiento de relaciones fructíferas entre
los niños y los objetos de conocimiento.
La escucha

La tradición educativa es testigo de que el verbalismo ha


“Los significados del tubo” sido siempre uno de los grandes males de la escuela. El do-
cente encargado de hablar mucho y de escuchar poco ha
Transcripción del diálogo entre Chiara y Felicitas, de 5
sido el ejemplo más claro de una tradición pedagógica li-
años, mientras manipulan un tubo de tela.
gada a un modelo magistrocentrista. Representación social
Cada una de las niñas toma un extremo del tubo de tela
que da cuenta aún de que no es sencillo escuchar a nuestro
al que mueven y agitan, y a medida que lo sacuden explo-
compañero en la pareja educativa y que, aún más difícil, es
ran el material y sus dimensiones.
escuchar las voces de la infancia.
F –Hay que perderse en el túnel (Mientras dice esto, Fe-
La mayoría de nosotros escuchamos a través de una
licitas se introduce dentro de la tela).
pantalla de resistencia. De una auténtica escucha (…)
Ch –¿Por dónde apareciste? (La compañera mira den- nos separan nuestros prejuicios, sean religiosos o
tro del tubo). espirituales, psicológicos, o científicos; nos separan
nuestras preocupaciones diarias, nuestros deseos
F –Me meto porque es muy grande, puedo hacerlo… Acá
o expectativas, nuestros miedos, etc. Por lo cual, lo
viven los gigantes.
que realmente escuchamos es... nuestro ruido inter-
(Chiara, al mismo tiempo y a pesar de compartir el mismo no, nuestro sonido, no lo que realmente está siendo
tubo de tela, imagina un túnel que relaciona con una “red dicho. (Rogers, 1987: 17 y 19).
para cazar”).
La pareja educativa se posiciona a partir de un modelo
Ch –Te cacé, ¡estás atrapada! (Sostiene un extremo del
pedagógico relacional, por ello, debe estar siempre alerta,
tubo).
expectante, sosteniendo la atención, libre de prejuicios y
(Felicitas vuelve a cambiar el juego al salir del tubo, deja su preconceptos, a fin de ser realmente receptiva, ya que
pelo dentro del trozo de tela y recorre la sala).
si reconocemos que los niños son activos protagonis-
F –Mirá. Me creció el pelo como a una chica grande. Dejá tas en la construcción del conocimiento, entonces el
mi cabello. verbo más importante en la práctica educativa no
sería hablar, sino escuchar. Escuchar, significa estar
Las dos niñas se divierten mientras corren entusiasmadas,
abierto a lo que otros tienen que decir, escuchar sus
recorren el espacio con la tela que les permite apropiarse
cien lenguajes, con todos nuestros sentidos. (Rinaldi,
del mismo.
2006: 14)
Estas experiencias de corporizar los objetos que apare-
cen a cada momento en la actividad de los niños, son su-
mamente significativas y relevantes, ya que como señala

16
El maestro que conoce cómo escuchar al niño es aquel que encuentra y recoge en su actuar. Así, de forma asimétrica
lo deja tomar la iniciativa y además lo guía y acompaña de y complementaria, la investigación del niño y las formas
una forma productiva; “no da respuestas a los niños, si no de investigar de la pareja educativa se entrelazan a través
que sabe hacer las preguntas adecuadas en cada momento”. de este tipo de razonamiento abductivo, que al no poseer
Esto es un arte, el preguntar aquello que puede ayudarlos certidumbres da muchas más posibilidades, abiertas e in-
en su desarrollo cognitivo, aquello que pueda suponerles sospechadas.
un conf licto que les ayude a avanzar en sus aprendizajes. Maluguzzi defiende y promueve este tipo de razona-
La pareja educativa no solo tiene que poder escuchar miento abductivo, porque enlaza y sintoniza con la forma
los tiempos y señales de la infancia, no es suficiente, tiene de investigar del niño y, por lo tanto, permite a la pareja
que poder escuchar al otro que empareja; son dos que se educativa, armonizar con las maneras de actuar y de pen-
escuchan y que escuchan, porque “escuchar es estar alerta sar de la infancia.
para dejar de considerar las cosas como naturales y ob- Como educadores generalmente al momento de pensar
vias”. (Hoyuelos, 2006: 18) una actividad, una propuesta didáctica, una secuencia,
difícilmente perseguimos probabilidades; la antigua he-
Después de estar en Reggio comprendí que un buen educador rencia conductista ha hecho que sigamos persiguiendo
t iene que saber escuchar y esperar. certezas, propongamos objetivos, seleccionemos aquellos
Saber dar t iempo para que las cosas sucedan. contenidos que consideramos nodales y creamos que mo-
Decía Malaguzzi que sin t iempo no hay creación. vilizamos el conocimiento de los otros. Por ello es que la
abducción como propuesta nos paraliza, o sacude nuestros
Jerome Bruner presupuestos teóricos, porque es un acto revolucionario,
que no tiene certezas, porque recurre a la “probabilidad”
como proceso de conocimiento.
A través de la abducción, entendida como búsqueda
constante de significados y conocimientos insospecha-
Abducción dos, el niño da sentido a las señales que encuentra en su
proceso de conocimiento, lo que ofrece una ampliación de
La escucha da la posibilidad de la abducción. Malaguzzi
posibilidades del pensamiento, la indagación y el descu-
aboga por una teoría ecológica fundada en el intercambio
brimiento.
continuo entre el niño, el medio y el ambiente. Es una teo-
El ejemplo que se plantea a continuación abarca algu-
ría genética, interaccionista, socioconstructivista, creati-
nos puntos nodales de la pedagogía reggiana, como son
va y subjetiva, que reclama la abducción.
la documentación en pareja educativa y la abducción, a la
Hoyuelos (2004: 76, 178-180) expone que la abducción es
que nos referimos anteriormente.
un método para formar una predicción general sin ningu-
na seguridad verdadera de que se tendrá éxito.
Malaguzzi aboga por esta idea de abducción, como com-
“Te robo el alma…¿ Ver es mirar?”
plemento a los procesos inductivos y deductivos siempre
presentes –pero no únicos- en el hombre. Viene presentada
Si observamos plano y perspectiva de la fotografía que se
como el arte del detective, que sigue las pistas, los indicios,
muestra a continuación, podemos deducir con facilidad
las huellas, que está disponible a una modificación cons-
que Victoria, de tan solo 5 años, tomó la fotografía desde
tante de las estrategias y de sus pensamientos.
la posición en la que se encontraba, abarcando tanto al es-
La abducción supone la búsqueda de significados insos-
pacio como a los educadores, mientras documentaban la
pechados que hacen re- significar cada situación; de este
actividad de los niños. Como señala Hoyuelos (2001: 6), fue
modo la abducción acepta como método de investigación
la autora de “ese instante robado que podría captar el alma
la paradoja, la duda, la diversidad de puntos de vista, la
de dicho proceso”.
multidimensionalidad, la verificación, corrección y con-
frontación interpretativas. Devela una nueva forma de mi-
rar, ya que el mirar adquiere una importancia singular, es
un mirar comprometido; no se trata sólo de observar o de
una mirada como la de alguien que recibe una respuesta
por su “mirar”, sino que es más bien un desvelar y por lo
tanto, un acto creativo.
La abducción, además de ser una estrategia de investi-
gación y una actitud permanente en la pareja educativa,
puede ser también la forma de investigar del niño, que tra-
ta de dar sentido y significado a las diversas señales que

17
desde la propia óptica; lo que da, siguiendo a Hoyuelos, el
plano detalle donde se recogen “una mano actuante, unos
ojos que miran, un dedo que señala, el detalle de un obje-
to… ayuda a entender los matices poéticos de los procesos
infantiles”. (Hoyuelos, 2001: 4)
A posteriori de la toma de foto de Victoria, se inicia un
diálogo entre la documentadora y la niña:
D: - ¿Por qué sacaste esa foto?, ¿qué te gustó?
V: -Ellos (se refiere a los documentadores) me miraban
de atrás de las campanitas.
D: -¿Qué campanitas?
V: - Las del zapato de Tinkerbell, ellos estaban ahí.

La documentadora atrapa y sigue la pista que le da la niña


y descubre, entonces, que los zapatos de Tinkerbell son ver-
des con pompones blancos, como la cortina de algodones
que pende del techo en el espacio significante y cae como
cortina solapante de los documentadores. La niña sin in-
hibición, al sacar la foto, pudo relacionar algo conocido y
Fotografía tomada por Victoria, 5 años
familiar, como lo son los zapatos de un dibujo animado o
de un libro de cuentos y, de esta manera, logró explicar
Asombrados, pudimos ser captados por la niña, lo que nos
algo desconocido metaforizando, en este caso, a los docu-
permitió tomar conciencia de que estábamos siendo ex-
mentadores que la observaban a través de las cámaras.
plorados por la mirada del otro, en este caso de Victoria.
Dahlberg sostiene,
Esta experiencia puede llegar a inquietar a los educadores,
nos pone sobre aviso, nos deja a la intemperie ante un ob- hacer fotos se convierte en un sustituto de ver. Obvia-
servador que no lo era y que rompe con lo predecible, lo mente, hay que mirar para poder dirigir el objetivo
impenetrable y lo no esperado. De manera contraria a los hacia el objeto deseado (…) pero mirar no es lo mismo
adultos, el niño o la niña esperan ser vistos, esboza Mala- que ver. Ver es una función humana, uno de los gran-
guzzi, ellos son unos perfectos polinizadores de ideas que des dones del hombre, para ver hace falta una activi-
siguen rastros, huellas y pistas con el afán de conocer y, dad, una apertura interior, unos intereses, paciencia,
es en esa búsqueda de conocimiento, en la que no se dejan concentración. Hoy en día disparar la cámara signifi-
atrapar por la incertidumbre, conceptualizan su mundo a ca, esencialmente, transformar el acto mismo de ver
través de metáforas, que hacen visibles las posibilidades y en un objeto. (Dahlberg, et al., 2005: 248)
los cambios de su inteligencia.
Por lo tanto, sentirse observado es
La documentación
un valor que genera una expectación en el niño (…)
sentirse observado significa sentirse visto y valo-
En las escuelas infantiles de Reggio Emilia, toda documen-
rado. El niño necesita de esta observación partici-
tación nace y navega con un plan detallado de observación
pante, pero no interferente, que se hace con la sensi-
y escucha. “No se trata sólo de plasmar lo acontecido, sino
bilidad de quien quiere aprender sin interrumpir sus
de construir –en diversos formatos– un producto públi-
procesos de aprendizaje. (Hoyuelos, 2004: 136)
co que dé cuenta narrada de lo vivido”, refiere Hoyuelos
(2007), documentador y atellierista experto de las Escuelas
La fotografía de Victoria implica, al decir de Hoyuelos
Infantiles de Pamplona y discípulo de Malaguzzi.
(2001: 4), “la selección intencional del plano oportuno (…)
La documentación constituye una de las actividades
una construcción intersubjetiva que trata de recoger, inter-
fundamentales que asume y realiza la pareja educativa,
pretar y comunicar algo concreto que se desea compartir
siendo una de las actividades que ha llevado a reinventar
con otros como alteridades diferentes a nosotros”. Disparar
el rol de profesional de la educación, al transformar a los
la cámara es una decisión tomada por la niña justo en el
educadores en agentes permanentes de investigación en-
momento en que la pareja educativa documenta, implica
cargados de documentar la vida cotidiana de la infancia,
la inversión de roles que permite “observar al que observa”.
tratando de esta manera de interpretar su cultura, sus
La posibilidad de usar la cámara (conocimiento que ya
ideas, su forma de ver el mundo sin anteojeras. Esta acti-
se posee) permite construir un mapeo corporal del “otro”

18
tud permanente supone igualmente una disposición éti- tensión, a una mayor comprensión del funcionamiento de
ca, respetuosa; porque el hecho de documentar, además de la mente y la inteligencia. Tal como sostenía Montesori, es
mirar para ver y escuchar, comporta también otra manera saber que “todos tenemos velocidades e intereses diferen-
de trabajar entre los adultos que requiere aprender a re- tes y que cada día es una aventura con cosas nuevas para
gistrar lo más importante mientras se está escuchando; es observar y para aprender”.
un ejercicio que necesita mucho ensayo y práctica para no La pareja educativa que escucha y documenta compren-
desvirtuar los mensajes de los niños y niñas. de que la documentación no es una descripción, sino una
Documentar es pensar sobre lo que se escucha y pre- interpretación del sentido que la experiencia ha supuesto
guntar sobre aquello que no se entiende en el momento, para el niño, se podría decir que recoge procesos, permite
además de apreciar y registrar el espacio-ambiente cargado plantear hipótesis y rescatar los significados elaborados
de señales codificables para los niños y niñas, luz, movi- a través de una meta-interpretación, es decir, una inter-
miento, letras, números, coetáneos, una computadora a la pretación de la interpretación (la que los maestros y los
cual se consulta cuando hay dudas o en la cual se regis- propios niños hacen de la situación). Por ello, es importan-
tran proyectos o mensajes para enviar a otras personas, te realizar el análisis de los procesos en cooperación con
cámaras fotográficas. Todo esto puede formar parte de la otros educadores, para evitar caer en subjetivismos y con-
vida que transcurre en la sala, en el patio o en el taller y seguir procesos creativos de intersubjetividad, ya que cada
que es importante documentar. Para hacerlo bien, se torna profesional posee su propia forma de ver, de razonar, en la
imprescindible “saber esperar y respetar, con una gran sa- cual intervienen sus emociones, su cultura y su historia
biduría dialógica y cultural, los tiempos de la maduración educativa. El trabajo con los demás amplía el horizonte y
y el desarrollo”. (Hoyuelos, 2004: 129-134) las miras de sentido. La mayoría de las veces, la interpre-
Frente a la tarea de documentación, la pareja educati- tación de la documentación no es un diálogo romántico o
va se hace inseparable; porque no es posible documentar divertido, sino que implica un reto, un desafío a construir
solo, porque sobre lo documentado es necesario dialogar, en cada momento, una herramienta de comunicación que
es necesario que el “otro” pueda comprender, hay que estar busca formular nuevas hipótesis sobre la dirección que
dispuesto a desnudarse y aceptar la crítica, es un modo de tomará el trabajo y las experiencias con niños y niñas;
provocación para poner en tela de juicio las verdades que “escuchar - observar - documentar e interpretar crean un
creemos más aferradas, para tomar conciencia de lo que contexto propicio para la curiosidad y la investigación y
se sabe, con la voluntad de saber más. La documentación motiva a maestros y niños en un proceso existencial y cog-
pedagógica, que se viene realizando en Reggio desde la dé- nitivo” (Fornasari, 2005: 30). Lo que además, “(…) servirá
cada del sesenta, es una herramienta para la recopilación también para ver la diferencia entre las personas, y para
de evidencias de los procesos de enseñanza, aprendizaje ver cómo una determinada persona evoluciona de forma
y desarrollo que conducen a conocer más y mejor a los diferente con respecto a los problemas”. (Red Territorial
pequeños, sus intereses, necesidades, sus desempeños y de Educación Infantil, 2011: 29)
permite, tanto a niños como a adultos, analizar, ref lexio- La documentación hace perceptible los cambios en la
nar y evaluar el trabajo y los modos de conocer. Todo este inteligencia de los niños, esto se puede ver releyendo las
proceso realizado en gran parte por los educadores repre- transcripciones de los maestros convertidos en “notarios,
senta un ejercicio de formación y autoformación continua, que tienen que tomar nota y volver a hablar con los niños
que da lugar a la ref lexión metacognitiva sobre sus pensa- para decir; hoy habéis hecho esto, habéis llegado hasta
mientos y sus prácticas, para dejarse contaminar por las aquí, hemos llegado hasta aquí y mañana retomamos este
ideas e iniciativas de los pequeños. tema”. (Malaguzzi, 2001: 104-111)
Cuando se sostiene que Malaguzzi puntualiza que el El niño tiene una memoria activa, reconoce que sus
niño o la niña esperan ser vistos, se afirma que hablar de ideas a veces no coinciden con las de sus coetáneos, co-
documentación es hablar también de visibilidad de la in- mienza a descubrir que tiene principios, teorías propias,
fancia, porque supone ver y escuchar tanto el lenguaje y que los otros también pueden tener las suyas, y que esto
verbal como el lenguaje corporal de los niños, implica gra- ocurre también en otras civilizaciones y culturas. Por eso,
bar risas, llantos u otros sonidos para “(…) dejar constancia la pareja educativa da crédito al niño como constructor
estética y narrada de forma visual, audiovisual o escrita de teorías significativas, sabe que es capaz de elaborar hi-
de un trabajo realizado (…) se convierte en memoria viva”. pótesis, hacer preguntas y arriesgar respuestas diferentes
(Hoyuelos, 2007) a las que esperamos; esto supone el reconocimiento ético
En la documentación se siguen, rastros, huellas y pistas de que el niño es autor de sus puntos de vista legítimos
que los niños muestran en su afán de conocer; elementos para poder describir, organizar, y reorganizar sus cono-
visibles e invisibles que exigen una gran complejidad in- cimientos. Como sostenía Malaguzzi, todos los niños son
terpretativa. Hacerlos visibles es también aproximarse a lo inteligentes, y la inteligencia y el conocimiento están en
indiciario, desde una mayor comprensión de los procesos, íntima relación, “fruto de una cooperación sinérgica de
de sus relaciones, de sus símbolos, de su cultura y por ex- las diversas partes cerebrales, en la que todo coopera” (Ma-

19
laguzzi, 1993: 6), ya que en la cooperación se transforman Bibliografía
todas las posibilidades, el patrimonio lingüístico y concep-
tual que los niños tienen, el patrimonio verbal y no verbal, Altimir, D. (2010) ¿Cómo escuchar a la infancia? Barcelona,
y también el emocional; aspectos muy importantes en el Rosa Sensat, Octaedro.
desarrollo, que permiten a los educadores, descubrir las
Bonàs, M. (2010) “El espacio vacío. Tiempos y espacios de
posibilidades infinitas y percibir los cien lenguajes de la
posibilidades”. Aula de Innovación Educat iva, nº 193-194,
infancia preservando que no le roben ninguno...
págs. 32-35.
En síntesis, documentar es para la pareja educativa un
proceso dinámico, que ofrece la oportunidad de hablar de Cabanellas, I.; Eslava, C. (coord.) (2005) Territorios de Infan-
algo concreto, un ejercicio muy útil para desarrollar la em- cia. Diálogo entre arquitectura y pedagogía. España, Grao
patía y de esta forma acercarse y ponerse en lugar de los
Ceruti, M. (1994) El ojo del observador. Barcelona, Gedisa.
otros. Como proceso de búsqueda permanente, constituye
un espacio de confrontación productiva y de formación Civarolo, M. (2008) “A dos voces Alfredo Hoyuelos habla
continua que sirve de ref lexión para valorar la experien- de Malaguzzi y Reggio Emilia”. Revista Magisterio, Edu-
cia como para la propia autovaloración. cación y Pedagogía. Bogotá.
El trabajo en pareja educativa puede compararse con las
Civarolo, M. (2011). Al rescate de la act ividad infant il. Villa
notas musicales, es necesario combinarlas con precisión
María, Eduvim.
para lograr la armonía con ellas, cualquiera sea el instru-
mento que se emplee, aprender a tocar bien supone tiempo, Civarolo, M.; Pérez, M. (2013) “1 + 1 = Pareja educativa”.
requiere primero estar convencido de lo que se desea y, con Nodos y Nudos, enero-junio 4(34), Colombia.
dedicación y mucha perseverancia se ven los resultados,
Civarolo, M.; Pérez, M. (2014) “Al compás de la pareja edu-
aunque muchas veces parezca que no se avanza, porque
cativa”. Cuadernos de Pedagogía, nº 443, marzo, España.
los cambios se notan poco a poco…
Comenzar a trabajar en pareja educativa no es una ta- Civarolo, M.; Pérez, M. (2016) “La pareja educativa. Una
rea más, requiere coraje y tolerancia a la frustración, pero experiencia en el ámbito universitario”. Magistro, Col-
trae aparejado la posibilidad de pensar y actuar con otro, ciencias, nº 17, vol. 9, Universidad Santo Tomás, enero
desterrando la soledad y el individualismo, en un encuen- – junio 2016, Colombia.
tro que cobra sentido cuando las propias ideas son las de
Civarolo, M. (coord). (2016) Viaje iniciát ico al pensamiento
otro y las ideas de otro son también las propias. Tal como
de Malaguzzi. Villa María, unvm.
sostiene Emanuele, desde su sabiduría a los 5 años, “las
ideas también quieren mirarse entre ellas para que así nos Dahlberg, G. et al. (2005) Más allá de la calidad en educación
vengan otras a la cabeza”. (Altamir, 2010: 45) infant il. Barcelona, grao.
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21
Escritura y géneros académicos. Experiencias de la cátedra
Lingüística del Texto y Análisis del Discurso, de la unvm
Prof. Gabriela Luján Giammarini

Introducción y funcionan dinámicamente para organizar el mundo.


Cuando se reconoce un género, se reconocen conocimien-
“Lingüística del Texto y Análisis del Discurso” constitu- tos sociales e institucionales puestos en juego en diversas
ye una cátedra común tanto para el Profesorado como la actividades relacionadas con él, sus funciones, incluso mo-
Licenciatura en Lengua y Literatura,7 de la Universidad tivos e ideologías; se reconoce, además, cierto contenido
Nacional de Villa María. A partir de la investigación-ac- esperado y un estilo apropiado.
ción: “La escritura como estrategia didáctica, en el nivel En la cátedra, los textos escritos circulantes son fuer-
superior”, dirigida por la Mgter. Sonia G. Lizarriturri, se temente intertextuales, la mayoría de los datos y elemen-
comienza a ref lexionar en torno a cómo lograr abordar en tos que se incluyen provienen de otros sitios particulares
sólo un cuatrimestre la inmensidad de dos campos disci- (lecturas teóricas) y pueden incluirse con mayor o menor
plinares tan bastos; el equipo de cátedra8 opta por una se- grado de libertad. Las elecciones realizadas y las que debe-
rie de decisiones y actividades áulicas que le otorgan valor rán realizar los estudiantes a la hora de producir un texto
al género textual-discursivo como facilitador y evaluador escrito, logran posicionarlos desde el inicio en el rol de es-
de aprendizajes. critores, dentro de un campo académico, en el que deben
La finalidad del presente artículo es realizar una re- actuar de manera competente y responsable, sin recurrir
visión sobre los diversos géneros abordados, analizados a falsificaciones, plagios u anomalías.
y escritos en la Cátedra Lingüística del Texto y Análisis Desde las perspectivas y modelos socio-cognitivos de
del Discurso, durante el año 2015. Uno de los interrogan- escritura (Bereiter y Scardamalia, 1987, 1993; Scarda-
tes didácticos que se plantean en el espacio de la cátedra malia y Bereiter, 1992), se sostiene la necesidad de lograr
es ¿cuál es la participación estratégica de los estudiantes “transformar el conocimiento”. La transformación sucede
como usuarios de diferentes géneros? La respuesta a este en el espacio del contenido, pero en interacción recursiva
interrogante la ejemplificaremos con el primer parcial del con el espacio retórico (objetivo, plan de acción, audiencia);
año 2015. En dicho parcial pueden reconocerse las princi- ambos permiten un pensamiento ref lexivo. Es así como la
pales características de una gran población de objetos y da- escritura desempeña un rol fundamental en el desarrollo
tos acomodados de diferentes formas lingüísticas, conside- del propio conocimiento, y los cambios en ella son tan va-
radas plausibles y apropiadas a los fines perseguidos. Por riados y cuantiosos como el escritor lo crea necesario; de
ello, las expresiones por las que se optan permiten darle esta forma, los textos se encuentran repletos de conceptos
sentido a la situación, tipificar el momento y su “respuesta” y diversas operaciones en torno a ellos, se trata de objetos
(Bazerman, 2008). que son “traducidos” a un mundo representado y se relacio-
Diferentes lecturas bibliográficas permiten centrar el nan para lograr representar otras realidades. Asimismo,
trabajo de la cátedra en torno a la escritura de diversos gé- cada género presenta operaciones propias y apropiadas,
neros, pero el “habilitador” principal lo constituye el mar- abstracciones, relaciones o revalidaciones entre los con-
co teórico-metodológico de Bazerman (2008, 2012), quien ceptos, que resulta de sumo interés considerar al momento
estudia cómo los géneros textuales se vuelven familiares de abordar a la escritura y a los géneros estratégicamente.

7 Se ubica en el tercer año del Plan de Estudio de ambas carreras,


en el segundo cuatrimestre; con una carga de 4 hs para el Profe-
sorado en Lengua y Literatura y de 6 hs para la Licenciatura en
Lengua y Literatura.
8 Compuesto por la Docente Responsable del espacio: Mgter. Sonia
Lizarriturri, la Jefa de Trabajos Prácticos: Prof. Mariana Ocampo
y la Auxiliar Docente: Prof. Gabriela Giammarini.

22
Presentación del espacio curricular. de Ciapuscio (2009), De la palabra al texto. Resulta ser una
Inicio de los encuentros verdadera sorpresa para el cuerpo docente notar que a los
estudiantes les ocasiona mayor dificultad comprender, co-
En el año 2015, el desarrollo de la cátedra “Lingüística del mentar y resumir este último texto que el de De Beaugran-
Texto y Análisis del Discurso” comprende el período: mar- de (2002); cuando se indaga sobre las posibles razones, las
tes 11 de agosto hasta el martes 17 de noviembre, inclusi- respuestas son vinculantes, ya que sostienen que el géne-
ve; lo que implica un total de catorce encuentros y catorce ro explicativo es al que más acostumbrados y disciplinados
son también los estudiantes que inician el cursado en el (para utilizar un término de Foucault (2012), están.
segundo cuatrimestre. Los documentos bibliográficos y Las llaves del esquema anterior se enriquecen con la
las actividades de escritura remiten a los contenidos del incorporación de la definición como género discursivo,
programa,9 constituyendo el grupo de géneros leídos y las diferencias en la caracterización y abordaje de los con-
escritos a lo largo del cursado de la materia. La Unidad ceptos según diccionarios especializados, tales como el
1 recibe el nombre: “El texto, los textos, el discurso, los Diccionario enciclopédico de las Ciencias del Lenguaje, escrito
discursos…”. Como puede comprobarse en el programa por Ducrot y Todorov (1974); el Diccionario de Análisis del
anexo, esta unidad incluye como lecturas: “El Análisis del Discurso, de Charaudeau y Maingueneau (2005); el Diccio-
Discurso. Capítulo 1”, en Las cosas del decir, de Calsamiglia nario de uso del español, de Moliner (2007) y Diccionarios
y Tusón (2012) y “De la gramática del texto al Análisis Crí- de la RAE: versión impresa (2014) y versión en línea de la
tico del Discurso. Una breve autobiografía académica”, 23ª edición en www.rae.es, entre otros, seleccionados por
escrito por Van Dijk (2006). A partir de estas lecturas se los estudiantes. Se señalan las diferencias entre las defi-
trabajan simultáneamente tanto los conceptos vertebrado- niciones de los diccionarios y las presentadas por los auto-
res de los objetos de estudio de la Lingüística del Texto y res estudiados, por ejemplo, a través de interrogantes tales
el Análisis del Discurso, como las particularidades de los como ¿por qué no se brinda una definición de discurso en
géneros textual-discursivos. Así, en el caso de Calsamiglia Ducrot y Todorov (1974)?, ¿todos los diccionarios consulta-
y Tusón (2012) se consideran los aspectos característicos de dos tienen la definición de texto?, ¿por qué se selecciona
los géneros explicativos de los manuales de cátedra y, en una determinada “acepción” y no otra? Consecuentemen-
la autobiografía de Van Dijk (2006), las particularidades te, los estudiantes postulan definiciones sobre los concep-
de una autobiografía académica. Con posterioridad a los tos a partir de la lectura crítica y el análisis de los textos
comentarios, ref lexión y sistematización de las lecturas abordados; de esta forma, no se establecen definiciones
se proponen las siguientes actividades de escritura: escri- textuales, sino construidas fundamentalmente mediante
bir la propia autobiografía académica, enunciación por la ref lexión metalingüística y metacognitiva.
escrito de las principales ideas leídas y la construcción de El esquema de la Figura 2 fue presentado a los estudian-
un resumen (individual o grupal, a elección) sobre los dos tes para que, a partir de él, incorporen toda la información
textos trabajados. que consideren oportuna y necesaria.
El intercambio en clase suscita la necesidad de que el Se desarrollan la totalidad de los contenidos de la Uni-
resumen sea visual, es decir, la propuesta para organizar dad I, a partir de su enseñanza y de lecturas bibliográficas
el campo interdisciplinario del Análisis del Discurso es correspondientes. Cada una de las lecturas comprende
moldeado y expuesto en un esquema de llaves (Figura 1). la elaboración de un escrito en el que se presenten la se-
En principio, nace con sólo tres ramificaciones: objeto de lección y jerarquización de ideas principales, se abordan
estudio, unidades de análisis y disciplinas relacionadas los siguientes textos: capítulo “Nociones básicas” del libro
y/o afines. Introducción a la Lingüíst ica del Texto, De Beaugrande y
Las lecturas subsiguientes permiten relacionar al Aná- Dressler (1997), reseña del libro Tipologías textuales, de Cia-
lisis del Discurso con el campo de la Lingüística del Texto puscio (1994) y el artículo de Silvestri (2000), “Los géneros
y, de esta forma, ampliar el esquema anterior.10 “La teoría discursivos y el desarrollo del pensamiento. Un enfoque
y la práctica en los estudios discursivos: Lingüística del sociocultural”.
texto y Análisis del Discurso”, escrito por De Beaugrande Cabe aclarar que como cierre de la Unidad 1, por un
(2002) y publicado en las Memorias del Curso Internacio- lado, se lee en clase el cuento11 que Beatriz Lavandera
nal: Análisis del Discurso en las Ciencias Sociales, la Cultura (1985) selecciona en la “Introducción” del Curso de Lingüís-
y el Territorio, es leído junto con la “Introducción” del libro t ica para el Análisis del Discurso, previo a su transcripción
afirma: “El tema de este curso tiene mucho que ver con
este cuento, dado que vamos a…”.12 La lectura y comenta-
9 El Programa completo de la cátedra se presenta en el apartado
final del artículo, titulado: Anexo.
10 La decisión de comenzar a trabajar con algunos conceptos del 11 El autor es el escritor brasileño Luis Fernando Verissimo. El cuen-
Análisis del Discurso, previo al trabajo con la Lingüística del to se encuentra en el apartado “Historia de animales”, del libro El
Texto, responde a los intereses manifestados por los estudiantes analista de Bagé.
en el inicio de la materia. El Análisis del Discurso resulta ser más 12 De esta forma se presenta a los estudiantes, es decir, no se leen
seductor para ellos. todas las palabras de Beatriz Lavandera, sino que se esperan infe-

23
Objeto de Estudio (De acuerdo con las diferentes disciplinas que
componen el campo)
El campo interdisciplinario

Disciplinas que compo- Lingüística del Texto, Etnografía de la Comuni-


nen el campo cación, etc. (Cómo cada disciplina caracteriza
o estudia al discurso)
del discurso

Enunciado
Unidades de Análisis Texto
Discurso

Figura 1. Resumen visual inicial y primera proyección

Campo Interdisciplinario en el
Estudio del Texto y del Discurso

Objeto de estudio. Objeto de estudio. Unidades de análisis Disciplinas que componen


Definiciones de Discurso Definiciones de Texto el campo

DRAE (on line e impreso), DRAE (on line e impreso), Texto como un evento Antropología, Etnometodo-
Ducrot y Todorov, Moliner, Ducrot y Todorov, Moliner, (entendido como represen- logía, Análisis de la Conver-
Charaudeau y Maingueneau Charaudeau y Maingueneau tación, esquema mental) sación, Etonografía de la
comunicativo, contribución comunicación, Sociolingüís-
a un discurso (éste se defi- tica Interaccional, Psicolin-
ne como conjunto de textos güística y Ciencias Cogniti-
relacionados mutuamente vas, Lingüística Funcional,
y relevantes, hablados o Pragmática, Teorías de la
escritos, presentados en Enunciación, entre otras
cualquier medio). Sistema
real de la lengua (De Beau-
grande, 2002: 125).

Enunciado/expresión
(conjunto de "oraciones"que
conforman T/D) --> Texto
--> Discurso (Producto de
los procesos). Son unida-
des prácticas/categorías
lingüísticas y de análisis
que se toman en su con-
junto

Figura 2. Resumen visual ampliado (segunda versión)

24
rio oral del cuento, en clase, dispara dos preguntas: ¿por como ideales el sistema matemático formal, la descripción
qué creen que Beatriz Lavandera sostiene esta afirmación? y la explicación, busca trascender lo particular y lograr,
¿Cómo podrían explicarla? Ambas apuntan a desencade- así, máximos niveles de abstracción; por otro lado, la mo-
nar relaciones temático-conceptuales entre los conteni- dalidad narrativa se ocupa tanto de las intenciones y ac-
dos de la Unidad I. Por otro lado, la lectura del artículo: ciones humanas como de las consecuencias, de los sucesos
“Teorías o modelos de producción de textos en la enseñan- de la experiencia, sitúa a ésta en tiempo y espacio, en otras
za y el aprendizaje de la escritura”, de Álvarez Angulo y palabras, se encarga de lo particular. Mucho se sabe sobre
Ramírez Bravo (2006), cumplió con el objetivo de facilitar la primera modalidad y su funcionamiento, pero no suce-
la transición articulada de la Unidad 1 hacia la Unidad 2: de lo mismo con respecto a la segunda: el relato, aunque
“Las representaciones teórico-prácticas de los textos y los paradójicamente es lo primero que se utiliza. Cuando se
discursos”. logra narrativizar una experiencia, es cuando se consigue
“comprenderla”.
Se torna necesario comentar que no sólo la Psicología
Parcial. Situación clave para el desarrollo del Cognitiva sostiene y afirma la relevancia de la narración.
espacio curricular En el año 2013, William Labov brinda la conferencia inau-
gural en las II Jornadas Internacionales Beatriz Lavandera
Por razones de índole institucional se torna necesario lue- de Sociolingüíst ica y Análisis del Discurso, en la uba y allí
go de todos los anteriores desarrollos, trabajos y lecturas, plantea que no se puede conocer la realidad por fuera de
la realización de un parcial evaluativo sobre los temas los relatos, en otras palabras, “las narrativas son el prin-
de la Unidad I. Toma lugar en la sexta clase, el 22 de sep- cipal modo en que transmitimos nuestras experiencias a
tiembre. Se plantea bajo la modalidad “carpeta abierta”, es otros” (Labov en Pertot, 2013), la utilización de la narra-
decir, los estudiantes cuentan con todos los materiales de tiva implica, en realidad y por consiguiente, expresar un
lecturas, los resúmenes, las actividades realizadas, los pro- punto de vista.
pios apuntes de clase y todos los diccionarios que deseen o En efecto, tanto Bruner como Labov “avalan” el objetivo
crean pertinente poseer, incluso, pueden trabajar con sus del parcial: si se puede narrativizar lo aprendido, es porque
computadoras personales. realmente los estudiantes han adquirido conocimiento.
Como docentes responsables de la cátedra, al momento Incluso Bazerman (2012: 82) sostiene que los actos de ha-
de elaborar el examen parcial, se considera necesario re- bla más ordinarios son contar y recordar, y estos géneros
currir a un enmascaramiento de la explicación “corriente”. cotidianos son la base misma de la escritura: objetos que
Esto se debe a que el objetivo no es la “repetición y repro- permiten memorar la situación, la circunstancia, el moti-
ducción” de contenido en el papel, sino la apropiación real vo o la transacción específica tratada.
de todo lo visto, leído y trabajado, el establecimiento de
relaciones entre ellos y el conocimiento previo. En efecto, El parcial solicitaba a nivel temático y formal:
el parcial cuenta con dos objetivos, explicitados en la hoja
entregada a los estudiantes: A) Nivel Temático
→→ Sistematizar, conceptual y metodológicamente los 1. Elegir una de las siguientes formas o géneros narra-
contenidos desarrollados en la Unidad I del progra- tivos: autobiografía académica, carta personal o re-
ma de estudios. lato-explicativo, para el desarrollo de los contenidos
→→ Narrativizar, en forma escrita, los desarrollos con- de la Unidad I.
ceptuales implicados en los estudios discursivos y 2. Establecido el género, la inclusión de los contenidos
textuales. deberá presentarse de acuerdo con las característi-
cas del género seleccionado y sistematizar las ideas
El enmascaramiento se encuentra, fundamentalmente, en centrales de la bibliografía estudiada con relación a
el último objetivo: “narrativizar, en forma escrita”. De eso dichos temas.
se trata: contar y escribir, o contar escribiendo, o escribir 3. Asimismo, dentro del contenido del escrito, deberán
mientras se cuenta, o como se prefiera hacerlo; pero se de- incluirse: opiniones personales sobre las ideas se-
ben combinar, mixturar y lograr los dos procesos... leccionadas como centrales; una o dos definiciones
Jerome Bruner ([1986] 2012) sostiene en Realidad mental redactadas en el estilo de alguno de los diccionarios
y mundos posibles, la presencia de dos modalidades de pen- especializados consultados; el sentido del título de la
samiento que se vuelven tangibles a través de argumentos unidad I y la relación de ésta con el título y conteni-
y relatos, se estructuran e implican causalidades de mo- dos trabajados de la Unidad II.
dos diferentes. Las dos modalidades del pensamiento son,
por un lado, la paradigmática o lógico-científica que posee B) Nivel Formal
→→ El escrito debe llevar un título acorde con el conteni-
rencias por parte de los estudiantes sobre “lo que podría tratarse”. do y el estilo discursivo del género adoptado.

25
→→ Respetar la estructura narrativa: introducción o pre- argumentativo abstracto y el enfoque de los artícu-
sentación, desarrollo o nudo-conf licto, cierre. los científicos. Las cartas siguen manteniendo varias
→→ Incluir referencias bibliográficas a modo de citas di- funciones importantes en la publicación científica,
rectas o indirectas en el interior del escrito. tanto como un medio para la respuesta directa como
→→ Consignar, al final del trabajo, la Bibliografía citada para ser un foro de publicación menos formal, más
de acuerdo con normas apa. rápido, de resultados importantes. (Bazerman, 2012:
→→ Revisar la sintaxis y la legibilidad del escrito. 92)

Tal como se puede observar, el género del escrito produci- En ciencia, el artículo experimental nació de tempranos
do por los alumnos es impuesto, aunque con ciertos “tintes intercambios de epístolas, hacia los mediados del siglo
de libertad”, cada uno puede optar por el género en el que xvii, sobre todo entre filósofos de la naturaleza, muchas
se siente más cómodo: autobiografía académica (leída, tra- veces dirigidos a la Royal Society (Bazerman, 2008).
bajada y escrita a lo largo del cursado de la materia), carta El género autobiografía académica. Jeremy Bernstein
personal (pese a que no se plantea ninguna actividad en (1994), en una pequeña compilación propia: Quarks, chif la-
la que, previamente, se les solicitara la escritura de este dos y el cosmos, inicia el libro con su propia autobiografía
género, se cree pertinente su incorporación por la relación escrituraria para, en cierta forma, justificar y argumentar
dialogal que habilita con un interlocutor o destinatario) y, su llegada al New Yorker como escritor de perfiles biográfi-
finalmente, relato-explicativo. Si bien a este último se le cos científicos. En el Capítulo 10, titulado: “Lo meramente
otorga un nombre que es un oxímoron, les permitiría a los personal”, manifiesta su interés por la discusión acerca
estudiantes contar cómo estudian, abordan y vinculan los del gran torrente de biografías y autobiografías científicas
materiales para y en el examen. En síntesis, los estudiantes surgidas en estos últimos años. Con respecto a las últimas
deben narrativizar en su examen, bajo el formato que op- se refiere a Watson, Einstein, Steven Levy y Primo Levi,
ten o crean pertinente, lo trabajado en las clases. entre otros; en este caso, lo interesante es la pregunta que
La actividad requiere la selección de uno de los géne- se plantea en torno a la autobiografía:
ros propuestos; esto responde a la selección del ambien-
En la introducción a su autobiografía, A slot machine,
te comunicativo en el que debe inscribirse el escritor. Se
a broken test tube, Luria deja bien en claro que él con-
trata de reconocer que cada género demanda una forma
sidera La doble hélice un modelo de lo que debe ser una
distinta de escritura, un diferente marco conceptual y
autobiografía científica: “Si una autobiografía tiene
motivo social, diversas herramientas se pondrán en jue-
que ser algo más que un registro superficial de suce-
go, al igual que intereses y (re)conocimiento de audiencia/
sos, debe ser algo así como una confesión”. ¿Pero una
receptor. Adquieren relevancia los términos formales y/o
confesión de qué? (Bernstein, 1994: 187).
convencionales, las expectativas, los temas, la retórica y
sus formas, las relaciones sintácticas, los marcadores or-
En consecuencia, una autobiografía debe ser como una
ganizacionales y discursivos.
confesión, ¿pero una confesión de qué?
Por último, género relato-explicat ivo. Para el equipo de
cátedra constituye un sitio frecuentado por los estudian-
Los géneros del parcial tes, ya que en este género suelen desarrollar la mayor can-
tidad de actividades relacionadas con el espacio “Lingüís-
El siguiente análisis se centra, en primer lugar, en la des-
tica del Texto y Análisis del Discurso”, sobre todo cuando
cripción de los variados elementos que se ponen en juego
se producen los comentarios-debates orales y, por lo tanto,
en cada uno de los géneros: carta personal, autobiografía
tienen más afinidad con él; a pesar de tener al inicio la
académica y relato explicativo. En segundo lugar, a partir
palabra: relato.
de la elección azarosa de un escrito por género, se ilustra
cómo puede vislumbrarse el aprendizaje en las produccio-
nes seleccionadas.
Est imado y est imada, querida y querido, saludos
El género carta. Según Bazerman (2012), a lo largo de la
cordiales o afectuosos. El género carta personal
historia, las cartas han resultado formativas para el surgi-
miento y transición habilitadora en el desarrollo de otros
La carta es un medio f lexible, posee un fuerte carácter
géneros, junto con la introducción de la imprenta, como los
social y autodescriptivo. Se trata de una construcción dis-
periódicos, las revistas científicas y la novela; géneros que
cursiva que permite la comunicación al menos entre dos
durante mucho tiempo contuvieron vestigios del formato
partes, en determinadas circunstancias y posee diversas
epistolar.
y diferentes funciones. Según Bazerman (2008, 2012), nace
Tomó más de un siglo que los artículos abandonaran como un medio formal y oficial de transmitir información,
los vestigios del formato de carta y adoptaran el tono

26
hasta que –en los tiempos del mundo helénico y romano- por otra parte, en este sent ido, además, en un comienzo, en la
comenzaron a incluir expresiones y mensajes personales. actualidad.
Algunas cartas poseen formatos fuertemente tipifica- La mirada sobre la receptora lego nunca se aparta de
dos y recurren al uso de fórmulas ya consideradas clásicas; la escritura, es por ello que recurre vastamente a fórmu-
mientras que otras presentan espacios menos tipificados, las explicativas y reformuladores discursivos, incluso, in-
como el caso que nos convoca: la carta personal (Bazer- corpora de forma acertada opiniones personales: “Pienso
man, 2008). Cuando se escribe una carta es necesario pro- que son mucho más interesantes y enriquecedores los estudios
veer información situacional, es decir, posee un encabeza- interdisciplinarios y que gracias a ello ambas disciplinas han
miento con una fecha y, generalmente, acompañada por el podido desarrollarse notablemente. No te digo que los estudios
lugar de origen de quien escribe. La voz predominante es estrictamente lingüíst icos no han podido, porque no es así, pero
la primera persona, la misma voz del firmante de la carta. te aconsejo que no te encierres en ellos y te abras al estudio de
En el cuerpo, se narra el motivo o la situación por la que otras disciplinas como lo han hecho las dos de las que te estoy
se escribe, se presentan referencias sobre las actividades hablando”; “En simples palabras, son lo que hoy conocemos
o el bienestar de quienes intervienen (emisor y receptor), como cuento, texto instruct ivo, ensayo, etc.”; “y permiten el de-
como así también de sus cercanos. Finalmente, se presen- sarrollo de los procesos cognit ivos, es decir, del pensamiento”.
tan saludos, cariñosos o no tanto, cierres, halagos, deseos… Los consejos y las recomendaciones de lectura abundan:
Seis estudiantes eligieron el género carta personal para “Existe un diccionario, que es específico del Análisis del Discur-
resolver el parcial de “Lingüística del Texto y Análisis del so (Charaudeau y Maingueneau, 2002)”; “Pensando y buscan-
Discurso”. Los títulos son los siguientes: “s.o.s. ¿Discurso do un poco, encontré entre mis apuntes los textos de dos autores
en proceso?”, “Carta a mi madre respondiendo a sus intere- que te recomiendo para que leas (Calsamiglia y Tusón, 2012)”.
ses lingüísticos”, “Recomendación cariñosa de la Lingüís- No se presentan grandes desarrollos teóricos con mi-
tica del Texto y el Análisis del Discurso”, “Los motivos de nuciosidades, sino introducciones a los temas en cuestión:
mi desaparición”, “Huellas de enseñanza y nuevos apren- “Líneas más arriba te mencioné a De Beaugrande y Dressler
dizajes” y “Carta explicativa de la materia Lingüística del (1997), ellos lo plantean [al texto] como un “evento comunica-
Texto y Análisis del Discurso para una amiga”. t ivo que cumple siete normas de textualidad. Si un texto no
Se toma como ejemplo una de ellas, “Recomendación sat isface esas normas, no puede considerarse comunicat ivo”.
cariñosa de la Lingüística del Texto y el Análisis del Dis- Las siete normas (te las voy a mencionar solamente porque si
curso”. Inicia con un encabezamiento situacional e in- no te voy a marear y a aburrir) son (…). Además, los textos se
mediatamente, un saludo: “¡Hola, Cata!”,13 el interés por el clasifican de acuerdo a ciertos criterios que han ido variando a
bienestar de su receptora: “¿Cómo estás?”. Los participantes lo largo de los años (…)”.
son, en consecuencia, Cata y Luchi. Si bien no se especifica La epístola finaliza con una despedida amistosa, la pro-
cuál es la relación entre ambas, puede suponerse que son mesa de continuar el intercambio sobre el tema en cues-
primas; porque en la razón de la correspondencia, Luchi tión, una suerte de consejos y explicaciones finales.
sostiene que la tía Mónica le comentó el interés de Cata En síntesis, el texto correspondiente al género carta per-
por los estudios lingüísticos y discursivos. El objetivo de sonal logra cumplir con los objetivos y las consignas solici-
la carta es ayudar a la receptora a conocer los campos de tadas en el parcial,14 posee adecuación al género selecciona-
estudios que le interesan: “Es por ello que me gustaría comen- do y organiza su contenido con relación a éste, demuestra
tarte un poco lo que sé”. De esta forma, inicia el cuerpo de apropiación de los temas y ref lexión sobre las lecturas pro-
la epístola, en donde sucede un desarrollo predominante- puestas.
mente narrativo, pero con grandes cuotas de explicación
sobre los estudios textuales y discursivos.
Desde el comienzo de la misiva, Luchi deja en claro que Cuando de confesiones se trata: el contar académico.
no es una experta en el tema en cuestión: “No soy una exper- El género autobiografía académica
ta en esta área, pero ojalá a través de esta carta pueda ayudarte
a afianzar tu decisión”; es decir, ocupa un lugar de semi-lego Como se señala en el comienzo de este artículo, la biblio-
dirigiéndose a un lego sobre el tema en cuestión. La es- grafía de la Unidad I incluía la lectura y el análisis de la au-
critura denota trasparencia y claridad conceptual; predo- tobiografía académica de Van Dijk (2006), titulada: “De la
mina el uso de conectores que permiten el ordenamiento Gramática del Texto al Análisis Crítico del Discurso. Una
lógico e incluso cronológico de las ideas: en primer lugar, breve autobiografía académica”. Desde el inicio del texto,
con la inf luencia de esta corriente, con el t iempo, más tarde, Van Dijk despeja dudas sobre lo que se leerá: se trata de
una explicación sobre sus desarrollos de inicio de los años
‘70, en torno a la Gramática Textual, hasta su actualidad
como estudioso del Análisis Crítico del Discurso, así tam-
13 Todas las citas textuales, de ahora en adelante, que se encuentren
entrecomilladas y en kursiva corresponden a la voz de los estu-
diantes. 14 Sólo no cumplió en manifestar la relación entre las Unidades 1 y 2.

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bién como otros temas de sus investigaciones que resultan que implica un gran desafío para la memoria a largo plazo,
pertinentes. “El punto central de esta autobiografía se cen- dada la dificultad de adaptar, organizar y reorganizar toda
tra en lo ‘académico’. Mi historia personal será contada en la información disponible para ajustarse a la retórica que
otra parte” (Van Dijk, 2006). exige el género (Magadán, 2013: 100).
La autobiografía académica, titulada: “La (¿larga?) dis- La autobiografía culmina con un cierre, aunque éste se
tancia entre Texto y Discurso”, presenta una predominan- presente de una forma un tanto abrupta y con un deseo:
cia en el uso de la primera persona del singular y plantea, “Por el momento, aquí se det iene mi experiencia en el estudio de
al inicio, su objetivo: “El propósito de esta autobiografía aca- la Lingüíst ica del Texto y el Análisis del Discurso. Espero que la
démica es demostrar los conocimientos sobre Lingüíst ica del base de lo ya aprendido hasta ahora me permita ver con mayor
Texto y Análisis del Discurso que he podido incorporar hasta expectat iva los otros modelos y más aportes sobre ambas disci-
el momento en el marco de una materia universitaria”, cabe plinas (…)”. En una autobiografía académica, hacia el final,
destacar que en ningún sitio nombra a la materia en cues- se espera también una conclusión en la que se retome todo
tión, pero puede correctamente suponerse que se trata de lo narrado, en este caso, “demostrado”.
la cátedra “Lingüística del Texto y Análisis del Discurso”.
Es interesante señalar el objetivo propuesto: “demostrar”,
no se trata de contar u explicar, sino de demostrar lo que El oxímoron: Había una vez un por qué.
sabe, de declarar, de exponer… Posiblemente, tal decisión El género relato-explicat ivo
se funde en el hecho de que la actividad de escritura es
presentada como un examen, por tal motivo, supone como Tal como se señaló, en el relato explicativo se espera que
necesario “demostrar lo que sabe”. los estudiantes cuenten cómo abordan y vinculan los ma-
Para lograr el anterior cometido, en el cuerpo de la auto- teriales para y en el examen. El producto escrito esperado
biografía se enumeran lecturas y breves referencias sobre responde a un género “novedoso”, ya que representa una
ellas; en algunos casos adolece de “baches teóricos” y no hibridación entre dos tipologías textuales: narración y ex-
logra realizar el “salto” que le permita no sólo enumerar, plicación (Werlich, 197515 en Ciapuscio, 1994; Adam, 1991).
sino además, demostrar conocimiento, en otras palabras, Cuando se habla sobre un relato, en realidad, se produ-
no se presenta en demasía la reelaboración conceptual. ce una referencia a la base o tipología textual narrativa,
Predominan fórmulas tales como: me he podido insertar, he y se utiliza fundamentalmente cuando deben y/o quieren
leído acerca de, pude tener acceso al, pude ver que, pude sa- expresarse ocurrencias y cambios en el tiempo. Sostiene
ber que, me llevaron a ver que, pude tener en consideración Adam y Lorda (1999) que para hablar específicamente de
que. Sin embargo, éstas no se encuentran al servicio de lo relato deben presentarse al menos un nudo y un desenlace.
prometido, sino que se utilizan para “cumplir” con cierta Adam (1991) y Adam y Lorda (1999) afirman que la tipología
formulación retórica esperada en una autobiografía aca- narrativa se reconoce por medio de secuencias (conforma-
démica, un recorrido personal sobre un área (o más) de es- das por diversas proposiciones) que poseen cierta autono-
tudio o conocimiento. No obstante, hacia el final del texto mía entre ellas, una propia organización y una relación de
logra posicionarse en el género autobiografía, deja de ser dependencia e independencia con el resto de las secuen-
meramente un resumen con encabezamientos personales, cias. Son cinco las secuencias de base de la narración, pero
para otorgar lugar a lo esperado: pueden repetirse e incluso, ausentarse algunas de ellas.
En efecto, las secuencias base de la narración son: (Pn1)16
“De esta manera, lo aprendido acerca de los textos y los
Situación inicial; (Pn2) Nudo; (Pn3) Acción, Evaluación;
discursos permit ió que pudiera seguir con los estudios
(Pn4) Desenlace y (Pn5) Situación final; pueden también
de ambos, teniendo en cuenta cómo se representan éstos,
presentarse (Pn0) Entrada-Prefacio y (PnΩ) Evaluación fi-
teórica y práct icamente. Para este fin, conocer la noción
nal. Ejemplos de géneros textual-discursivos que utilicen
de “modelos de producción textual” fue fundamental
la tipología narrativa: novela, cuento, historieta, leyenda,
para acercarme a cómo se plasman las teorías dinámi-
fábula, mitos, entre otros.
cas, en un modelo estát ico, que representa a las teorías,
La explicación se utiliza para componer y descomponer
a la vez que las explica (Didactex). Para part ir hacia los
representaciones conceptuales (Ciapuscio, 1994), por esta
modelos textuales fue necesario que antes conociera uno
razón es utilizada principalmente en la ciencia. Se desta-
de los más representat ivos: el modelo de De Beugrande y
ca por poseer vocabulario específico en vinculación con el
Dressler, publicado en el año 1997”.
tema que trata. Desarrolla, al igual que la narración, un
propio despliegue explicativo: (Pe0)17 Conocimiento previo
Tal vez, esta maduración y adecuación final del estudiante
al género seleccionado responda a la carencia (a pesar de
15 En realidad, propone el término exposit ivo o exposición en lugar de
su necesidad indiscutible) de pensar el problema retórico explicación. Sin embargo, se opta por la nomenclatura de Adam
desde el inicio del proceso de producción, sino de elabo- (1991).
rarlo mientras se encuentra en desarrollo del escrito; lo 16 Pn = Programa Narrativo.
17 Pe = Programa Explicativo.

28
sobre el tema en cuestión; (Pe1) Problema a investigar o carencia de marcadores lingüístico-discursivos19 que per-
resolver, preguntas, cuestionamientos; (Pe2) Proceso ex- mitan vincular las ideas entre los párrafos u oraciones, re-
plicativo, uso de elementos retóricos;18 (Pe3) Conclusión laciones que le resultan costosas al lector en algunos frag-
(Adam, 1991; Calsamiglia y Tusón, 2012). Ejemplos de gé- mentos. Sólo tienen lugar algunos conectores relacionados
neros textual-discursivos que utilicen la tipología explica- con lo narrativo, con lo histórico-temporal: luego, desde sus
tiva: artículos científicos, artículos periodísticos, artículos orígenes, actualmente, posteriormente.
de divulgación científica, revistas científicas, ponencias, Utiliza recursos retórico-estilísticos propios de la expli-
papers, resúmenes, manuales escolares, entre otros. cación como citas y referencias de autoridad, definiciones,
A raíz de lo anterior, se espera que los estudiantes que enumeración y clasificación, ejemplificación. Sin embar-
escojan el género relato-explicativo mixturen algunas de go, no se presentan reformulaciones, ni explicaciones lue-
las características antes nombradas. Sólo tres personas se go de las citas de autoridad. El escrito exhibe mucha infor-
inclinan por el género y se aborda el titulado: “Textos y mación, se trata de una recensión bibliográfica, más que
discursos, de ayer y hoy”. de un relato. En otras palabras, el texto se asemeja a una
El título es adecuado al contenido del escrito, debido a gran transcripción de ideas interesantes que necesitan
que en él se presentan determinados conceptos específicos, ser transformadas y seguramente, no lograron serlo por
como así también disciplinas, y se desarrollan diversas cuestiones de tiempo y tal vez, por falta de delimitación
posturas de especialistas con respecto a ellos o simplemen- de objetivos acotados.
te, sólo una posición o definición. La conclusión, pese a ser breve, es acertada. Retoma el
inicio, aunque no profundiza en lo que se expresa:
“En el siguiente relato me propongo dar a conocer y ex-
plicar, sintét icamente, la evolución de la Lingüíst ica del “Para cerrar puedo afirmar que el texto y el discurso, los
Texto y el Análisis del Discurso, sus objetos de estudio y textos y los discursos están interrelacionados y dependen
métodos de invest igación; definir: texto, discurso, enun- de las representaciones teórico-práct icas de los textos y
ciado, proceso, producto, organización lingüíst ico-dis- los discursos. En la que se t ienen en cuenta todas y cada
cursiva, pragmát ica y comunicat iva, t ipos textuales, una de las concepciones de los invest igadores y sus enfo-
géneros discursivos, adecuación, intencionalidad, contex- ques, ya sean como parte de la Lingüíst ica del Texto o del
tos, ideología y finalmente, el desarrollo de los modelos Análisis del Discurso”.
teórico-metodológicos más representat ivos de la Lingüís-
t ica del Texto y el Análisis del Discurso”. No resulta sencillo escribir en un género carente de defi-
niciones con límites claros, pero el acercamiento realiza-
A lo largo de la lectura del parcial puede vislumbrarse que, do por la estudiante es sumamente valioso y requiere una
con algunas modificaciones y restricciones, la totalidad de continuidad ref lexiva para poder acercarse aún más al
lo propuesto se cumple; sin embargo, se trata de una em- género propuesto y seleccionado. Por ejemplo, a partir de
presa compleja y extensa que difícilmente puede llevarse la conclusión podría re-plantear una pregunta que guíe el
adelante en cuatro horas y respetando el género seleccio- relato explicativo y limite el objetivo del escrito, por ejem-
nado. Es necesario destacar que el escrito es clasificado por plo: ¿cuál es o cómo se produce la inter-relación entre la
su autora como relato, acompañado por un “dar a conocer”, noción de texto y discurso?
lo que podría entenderse como un “contar algo”; pero con
un condimento especial, la explicación, tal como lo indica
el infinitivo seleccionado en la introducción citada: “expli- Repercusiones sobre el parcial
car”. Sin embargo, no se presenta un problema (Pn2, Pe1),
esto conlleva a que se vincule el escrito con la tipología La clase siguiente al parcial, el equipo de cátedra dedica
textual descriptiva. gran parte a la ref lexión sobre él: por qué habían optado
¿Cómo se estructura el texto? Se presentan diversos te- por determinado género, cuáles habían sido los inconve-
mas pero no se determinan por medio de subtítulos, sino nientes, qué cambiarían (qué no), cómo les resultó la expe-
que es tarea competente al lector discriminarlos. Se utiliza riencia, entre otras cuestiones.
el pretérito y el presente, en lo que respecta a los verbos; Dos de las estudiantes autoras de un relato-explicativo
el primero se encuentra al servicio de encuadramientos justifican su elección en lo costoso que les resulta redu-
históricos sobre lo que solía suceder, en materia lingüística cir textos, de las tres opciones la consideran como la más
o discursiva; mientras que el uso del presente determina oportuna al momento de realizar un parcial. Una de ellas
sobretodo definiciones, clasificaciones, enumeraciones. agrega un comentario sobre lo difícil que es pensar en la
La información no presenta una estructuración clara, carta como un género académico (a pesar de su origen
no sólo por la falta de subtítulos, también se encuentra una como género).

18 Definición, analogía, ejemplificación, reformulación, cita de au- 19 Se utilizan muy pocos y que sirven, fundamentalmente, para re-
toridad, clasificación, pregunta ficticia. tomar un tema, ejemplo la locución preposicional: en relación con.

29
En cambio, otra estudiante afirma que la carta le resul- Las primeras ref lexiones son realizadas en torno a un
ta la mejor opción de escritura, sin embargo, considera esquema, elaborado por la Mgter. Sonia Lizarriturri, pre-
costoso planificar y decidir el por qué la escribe y cómo sentado y explicado por ella (Figura 3).20
se estructura el contenido. Con relación a esta respuesta, Las lecturas siguientes son el capítulo III de De Beau-
una compañera sostiene que prefiere elegir la autobiogra- grande y Dressler (1997): “El enfoque procedimental” y del
fía académica porque, de esa forma, no debe pensar en el libro de Barthes (1987), El susurro del lenguaje, el capítulo
“quién”, ni en el “cómo”. Comienza una discusión entre los “Escribir, ¿un verbo intransitivo?”. Cabe destacar que, para
estudiantes acerca de si el comentario es “atinado” o no: ¿la abordar el primero de los anteriores, se debe recuperar lo
autobiografía no se dirige a un destinatario?, ¿no ostenta ya sabido, por ejemplo, las normas o estándares y princi-
una estructuración propia que permita notar cuál es su pios o criterios textuales propuestos en los capítulos an-
género? teriores del libro Introducción a la Lingüíst ica del Texto. El
Tanto los estudiantes que trabajan la carta como la au- texto de Barthes trabaja desde la semio-crítica el problema
tobiografía sostienen que, en ocasiones, es difícil “contro- de la persona gramatical, lo que conlleva a preguntas tales
larse” y respetar el género. Una de ellas comenta que en la como ¿quién cuenta lo que se cuenta?, ¿dónde se ubican
escritura de la carta tiene que otorgarle mucha atención al los lectores y dónde los escritores?, entre otras. E incluso,
vocabulario, lo que ocasiona que le dedique más a la his- provoca nuevas lecturas, esta vez pertenecientes al libro
toria que a los aspectos teóricos (cuestión que no es tal, Variaciones sobre la escritura: “Escritura e historia” y “Mis
porque en su escrito logra una excelente relación entre razones para escribir” (Barthes, 2007). En otra clase, se in-
material teórico y género). troducen los textos de Van Dijk (2000 y 2001). Las ref lexio-
Una de las estudiantes escribe una carta titulada: “Hue- nes y el trabajo áulico en conjunto permiten el abordaje
llas de enseñanza y nuevos aprendizajes”, el título resulta de, por ejemplo, textos narrativos, tales como un cuento
muy oportuno y creativo; por ello, se le pregunta específi- de Pedro Orgambide (1970), titulado “La intrusa”; posterior-
camente si lo escribió antes o después de la redacción del mente contrastado con “La intrusa” (1970, en El informe de
texto. Ella responde que surgió al final y que su proceso Brodie), de Jorge Luis Borges (2012).
había sido realmente costoso; comienza con una autobio- Se propuso como actividad práctica de escritura, para
grafía, pero nota la dificultad para apartarse de la teoría y la Unidad II:
de los apuntes, entonces, piensa: ¿y si le escribo una carta
a mi profe del secundario? Lingüística del Texto y Análisis del Discurso. Trabajo
Todos acuerdan en que si se les devuelven los parciales Práctico n° 4
o si pueden reescribirlos, les cambiarían muchas cosas,
por ejemplo, eliminarían párrafos explicativos o repro- Unidad II: “Las representaciones teórico-prácticas de los
ductivos de referencias textuales, e incluso, algunos cam- textos y los discursos”
biarían el género elegido. Preguntaron si la próxima vez
podrían contar con más tiempo o bien, si podría ser una Temas:
actividad para realizar en la comodidad de sus hogares. A) Desarrollo de los modelos teórico-metodológicos
La experiencia les resulta enriquecedora y son muy au- de: De Beaugrande y Dressler (1997); De Beaugrande
tocríticos con sus trabajos, incluso más que las docentes (2002); Van Dijk (1980, 2000, 2001, 2008, 2011); Grupo
encargadas de la “corrección”. Didactex (2006).
B) Teorías lingüísticas y modelos de escritura.

Continuación y camino hacia el final del


cuatrimestre

Posterior al parcial, la actividad de la cátedra continua con 20 No será objeto de este apartado explicar el cuadro, para obtener
detalles, véase:
la ejecución de la Unidad II: “Las representaciones teóri- Lizarriturri, S. (2015) “Teorías Lingüísticas y Enseñanza de
co-prácticas de los textos y los discursos”. En esta unidad, la Lengua” [en línea], en Riestra, D.; Tapia, S.; Goicoechea, M.
la propuesta de trabajo se centra en el desarrollo de los [comps.] Cuartas Jornadas Internacionales: Invest igación y Práct icas
en Didáct ica de las lenguas y las literaturas. Tomo 1. E-book, isbn
modelos teórico-metodológicos más representativos de la 978-987-3667-20-6. Viedma: Grupo geise, Universidad Nacional de
Lingüística del Texto y el Análisis del Discurso, algunos de Río Negro, págs. 350-364. Dirección url: https://sites.google.com/
ellos son los propuestos por De Beaugrande y Dressler; De site/grupoeise/jornadas
Giammarini, G.; Lizarriturri, S. (2015) “La enseñanza de la escri-
Beaugrande; Van Dijk; Adam. Se efectúan análisis de tipos tura como estrategia didáctica” [en línea], en Riestra, D.; Tapia,
textuales y géneros textual-discursivos representativos de S.; Goicoechea, M. [comps.] Cuartas Jornadas Internacionales: In-
los modelos teórico-prácticos desarrollados por la Lingüís- vest igación y Práct icas en Didáct ica de las lenguas y las literaturas.
Tomo 1. E-book, isbn 978-987-3667-20-6. Viedma, Grupo geise,
tica del Texto y el Análisis del Discurso. Universidad Nacional de Río Negro, págs. 750-764. Dirección url:
https://sites.google.com/site/grupoeise/jornadas

30
Modelos de Escritura

Lingüísticos o estructura- Psicolingüísticos. Proce- Socio-culturales e interac- Semiótico-Discursivos.


les. Organización sintác- suales. Ej. Flower y Hayes cionales. Ej. De Beaugran- Ej. Barthes (1994, 2002);
tico-textual. Ej. Van Dijk (1981); Van Dijk y Kintsch de y Dressler (1997); Grupo Bruner (1988, 2002)
(1980) (1983); Bereiter y Scarda- Didactex (2003)
malia (1987, 1992, 1993)

Figura 3. Esquema sintético sobre "Modelos de escritura",


desarrollado por la Mgter. Sonia Lizarriturri, año 2015

C) Relaciones entre Lingüística, Literatura y escritura: dor a Lugones?, ¿por qué recibió ese nombre?, ¿qué escribe
Barthes ([1987] 2009) “Escribir, ¿un verbo intransiti- Borges sobre Lugones?, entre otras. Asimismo, se releen los
vo?; Barthes (2007) “Diez razones para escribir”, “Tex- textos “De dónde viene la escritura”, en Flores en las grietas,
to (teoría del)” de Richard Ford (2012) y “El misterio de la escritura”, en  A
la tarde, cuando llueve, de Angélica Gorodischer (2007), se
Consignas: identifican las particularidades genéricas de cada uno de
1. Con relación al punto C. ¿Podrías enunciar tus ra- ellos y algunos procedimientos lingüísticos, propios como
zones para escribir?, a la manera de las “10 razones conectores o marcadores discursivos, pronombres, modos
para escribir”, de Roland Barthes (2007). La respuesta y tiempos verbales, elipsis. Lo mismo se realiza con “El
a esta pregunta debe ser individual y enviarse de ma- Cautivo”, de Borges. Cabe destacar que tanto estas activi-
nera independiente por mail. dades como las anteriores se entregan al equipo de cátedra
2. Elegir uno de los siguientes textos: “De dónde viene para su evaluación y posterior devolución. Cada estudian-
la escritura”, en Flores en las gritas, de Richard Ford te tiene que asignar títulos pertinentes a sus escritos y, en
(2012) o “El misterio de la escritura”, en A la tarde, caso de ser necesario, justificar la elección.
cuando llueve, de Angélica Gorodischer (2007) y es- El último trabajo práctico de escritura realizado en las
cribir bajo el género que decidas/n un texto sobre lo clases surge de la lectura del capítulo “La operación de
leído. El género debe explicitarse y este texto puede leer”, de Bértolo (2015). Se continúa con las tareas de trans-
realizarse con un compañero/a; cuando den por fi- formación, con respecto al género y con análisis, por ello,
nalizada su escritura, debe ser enviado al correo de la propuesta es la siguiente:
la cátedra. 1. Transformar el capítulo anterior en un texto donde
3. Leer el artículo de Dorfman, “Alicia en el país de las emplees escritura creativa y los recursos estéticos
consignas”, analizarlo según la propuesta de análisis que te parezcan pertinentes (fotos, videos, dibujos…)
de Van Dijk, revisada en clase del 6/10 (adjuntamos 2. Analiza de acuerdo con los cuatro estratos que pro-
power point) y presentarlo en la clase del día 13. pone Bértolo, “Alicia en el país de las consignas” del
escritor chileno Ariel Dorfman [Dorfman, A. (2015)
Con relación a esta actividad práctica, las producciones de “Alicia en el país de las consignas” [en línea], Página
los estudiantes son sobresalientes. Con respecto a la con- 12, versión impresa 5 de julio de 2015. Dirección url:
signa (2), por ejemplo, crean ficciones, epístolas, un texto http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/
explicativo, una reseña literaria, una noticia con formato libros/10-5627-2015-07-05.html]
web y una entrevista. 3. Escribe el análisis anterior bajo la modalidad ar-
En los encuentros siguientes, el equipo de cátedra se gumentativa donde también deberás considerar: la
predispuso a trabajar aún más con la noción de género carga semántica de las palabras con mayor fuerza
(desde Bazerman, 2012), y en estrecha vinculación con el intencional (subjetivemas); los recursos discursivos
tema de tipologías textuales (Adam, 1992), otorgando espe- (metáforas, comparaciones, hipérboles, metonimia,
cial énfasis a la tipología narrativa. Se analizan cuentos analogías, etc.), y los contextos lingüísticos, situacio-
de Jorge Luis Borges, pertenecientes a El Hacedor; surgen nal y socio-cultural.
preguntas tales como: ¿Por qué Borges le dedica El Hace-

31
La segunda consigna implica retomar una actividad ante- Consideraciones finales
rior. Mientras que para resolver la última actividad deben
recurrir a los materiales trabajados en clase sobre análisis Los géneros textual-discursivos se rehacen en cada nueva
del discurso, enmarcados en la Unidad 3: “Los hablantes, acción individual. Cada vez que se escribe se crea en una
sus costumbres” (Arnoux, 2006; Raiter y Zullo, 1999, 2008). determinada y nueva circunstancia, se adecua a un género
Como cierre del espacio académico, es decir, como tra- que facilita la representación de universos con objetos y
bajo integrador de la cátedra, se les solicita un examen expresiones particulares, sostiene Bazerman (2012: 36) que
domiciliario: de esto se trata la ontología específica de cada expresión,
de cada género. Al escribir se crea, en efecto, un universo
Trabajo Integrador Final discursivo compuesto por diversos objetos; un espacio de
Lingüística del Texto y Análisis del Discurso interacción y comunicación social mediado, es decir, no
Año 2015 inmediato. Es por esta razón que se deben pensar palabras
apropiadas, efectivas y novedosas; de acuerdo con el géne-
Elaborar en forma individual, escrita, a partir de un géne- ro por el que se opte, se realizan elecciones retóricas sobre
ro textual y/o discursivo a elección, los siguientes tópicos. los elementos discursivos y temáticos, y se establecen rela-
Resulta importante señalar que es necesario explicitar ciones. Determinadas circunstancias requieren determi-
claramente el porqué de la elección del género y la funda- nadas formas, en estrecha vinculación con el campo social
mentación teórico-práctica de los temas. del que se trate.
Para abordar todo el trabajo de una cátedra, a partir de
Tópicos: la consideración de la escritura como una estrategia didác-
1. ¿En qué reside la importancia de los aportes de la Lin- tica, como la estrategia que permite la mejor apropiación
güística del Texto y el Análisis del Discurso para los y transformación del conocimiento, se necesita de una
estudios académicos y las actuales formas de comu- “excusa” y, en el caso antes reseñado, la excusa está cons-
nicación social? tituida por el trabajo con el género, con diversos géneros
2. ¿Textos, discursos y géneros, una preocupación teó- textual-discursivos.
rica?, ¿una práctica socio-cultural?, ¿cómo funcionan Tareas pendientes son continuar y profundizar en el
en el ámbito de la educación lingüística y literaria análisis de las producciones de los estudiantes, para po-
del Profesorado y la Licenciatura en Lengua y Lite- der mejorar y ajustar la propuesta, y sostener el abordaje
ratura? de la escritura como estrategia didáctica en el espacio cu-
3. ¿Qué papel juega la escritura como conocimiento rricular.
y herramienta tecnológica en la construcción y de-
construcción del sentido y la ideología textual y dis-
cursiva?
4. ¿Qué aspectos resultan  positivos y cuáles no, para  la
escritura de narraciones personales, de divulgación
académica o científica y de crítica literaria-discur-
siva?

Fecha de entrega:
Martes 24 hasta las 12 hs., por correo electrónico a la direc-
ción: textoydiscursounvm@gmail.com

Cuestiones formales:
El escrito debe enviarse en un archivo de Word. Letra:
Times New Roman, tamaño 12, interlineado 1, 5. Máximo
de palabras: 5000.
No olvidar incluir la bibliografía.  

Los escritos se enmarcan en diversos géneros, desde poe-


sía lingüística a historieta, desde una obra de teatro hasta
nuevas biografías académicas, también ensayos y artícu-
los.

32
Anexo Para regularizar: aprobar prácticos y parciales con 4 o más
de cuatro.
Para promocionar: aprobar prácticos y parciales con 7 o más
de siete y realizar un trabajo final (coloquio o monografía,
Inst ituto Académico Pedagógico De Ciencias según se determine por las características del curso).
Humanas
Para rendir: ser regular o rendir la materia en carácter de
libre.
Carreras:
Profesorado y Licenciatura Días y horarios de clases de consulta
En lengua y Literatura Clases:
Martes de 14.00 a 18.00 horas
Asignatura
Lingüística del Texto y Análisis del Discurso Consulta y tutorías
Martes de 12 a 14 horas.
Docente responsable
Mgter. Sonia G. Lizarriturri Introducción
Jefe de Trabajos Práct icos: Mariana B. Ocampo El presente programa de Lingüística del Texto y Análisis
Auxiliar Docente: Gabriela Luján Giammarini del Discurso aborda algunas de las teorías, las perspecti-
vas y los enfoques más significativos que conforman, ac-
Ciclo Lectivo: 2015 tualmente, el vasto campo de la Lingüística textual y el
Análisis del Discurso: Lingüística y Psicología Cognitiva,
Índice
Pragmática, Análisis Conversacional del Discurso, Teoría
i-identificación del programa
de la Enunciación, entre otros, con la finalidad de promo-
ii-objetivos del curso
ver el análisis crítico y ref lexivo de diversos textos y dis-
iii-contenidos
cursos de circulación social y académica.
iv-métodos de evaluación
En tal sentido, comenzaremos con un primer acerca-
v-cronograma de actividades
miento a la complejidad que implica la caracterización de
vi-lineamientos metodológicos
las nociones de texto y discurso. Según historiografían De
vii-bibliografía
Beaugrande y Dressler (1997); De Beaugrande (2002), y Van
Dijk (1998; 2011), los conceptos de texto y discurso remiten
a:
1. identificación del programa de estudio
A) Categorías lingüístico-conceptuales indistintas: tal
Denominación: como aconteció en la década de 1960- 1970, en los
inicios de la Lingüística del Texto llamada entonces
Lingüística del Texto y Análisis del Discurso
“Gramática del Texto”. Esta etapa se caracterizó por
Código: el predominio del análisis lingüístico- estructural de
textos escritos literarios. Precisamente, en el artículo
2EP4916-Profesorado/ 25-22 Licenciatura
“Text, Texte, Klassen von Texten” (1964), el lingüista
Ciclo: Profesional alemán Peter Hartmann, cuya publicación se adopta
como fecha de nacimiento de la Lingüística del Texto,
Carreras: Profesorado y Licenciatura en Lengua y Litera-
sostiene que una de las tareas de la lingüística debe
tura
ser la descripción estructural del discurso.
Instituto: Ciencias Humanas B) Categorías lingüístico-conceptuales diferenciadas a
partir de sus objetos y métodos de investigación. El
Ubicación en el programa de estudios: 3er AÑO
punto nodal de esta diferenciación lo constituyeron
Crédito horario semanal: 4 hs. de clase + Consultas, en el las teorías gramaticales y su relación con el estudio
Profesorado; y 6 horas en la Licenciatura. del lenguaje, en el período 1972-1980, aproximada-
mente.
Crédito horario total: 64 hs. Profesorado y 94 hs. Licen-
ciatura.
La Lingüística del texto, en esta etapa, centra sus investi-
Condiciones para cursar / rendir: gaciones en los textos escritos y propone la categoría de
Para cursar: tener las materias correlativas. “textema” (Dressler, 1972), categoría que evoluciona hacia
el concepto de “textualidad” (De Beaugrande y Dressler,
1981), a fin de abocarse al estudio de los textos y las tipolo-

33
gías textuales en tanto procesos y productos cognitivo-co- →→ Reconocer las representaciones simbólico-discursi-
municativos de los sujetos hablantes de una lengua. Asi- vas portadoras de ideologías en diferentes discursos
mismo, se articula en un campo interdisciplinario con la y textos de circulación social: científicos, académi-
Psicología y la Lingüística Cognitiva, la Psicolingüística, cos, periodísticos y políticos.
la Gramática Generativa, la Semántica Léxica-cognitiva,
la Inteligencia Artificial y la Filosofía de la Mente, entre
otras disciplinas. 3. Contenidos
Por su parte, el Análisis del Discurso aparece con este
nombre por primera vez en 1975, y retoma las perspectivas Unidad i: “El texto, los textos, el discurso, los discursos…”
de análisis de la Gramática y luego, Lingüística Sistémico →→ Síntesis evolutiva de la Lingüística del Texto y el Aná-
Funcional (Halliday, Sinclair, citados por De Beaugran- lisis del Discurso. Sus objetos de estudio y métodos
de, 2011), en lo referente a la conexión del lenguaje con el de investigación.
conocimiento de mundo de los hablantes y el papel del →→ Sistematización bibliográfica de las nociones y cate-
contexto socio-cultural. Surge así la noción de “contexto/s” gorías de la Lingüística del Texto y el Análisis del dis-
(individual- cognitivo, situacional y socio-cultural), que, a curso: texto, discurso, enunciado, proceso, producto,
su vez, integran los aportes de la Sociolingüística, la So- organización lingüística, discursiva, pragmática y
ciología, la Antropología Cultural, la Psicología Social, la comunicativa, tipos textuales, géneros discursivos,
Etnometodología del Habla, el Análisis Conversacional, la adecuación, intencionalidad, contextos, ideología.
Pragmática, la Teoría de la Enunciación y el Procesamien-
to de la Información, entre otras interdisciplinas. Lecturas:
C) Categorías lingüístico-conceptuales cooperativas Calsamiglia, H. y Tusón, H. (2012) “El Análisis del Discur-
que conforman el campo transdisciplinario del so. Capítulo 1”, en Las cosas del decir. Barcelona, Ariel.
Análisis Crítico del Discurso que permite enfocar
Ciapuscio, G. (2009). “Introducción” y Capítulo III “Moda-
problemas desde múltiples puntos de vista. Para este
lidad y géneros académicos” en De la palabra al texto
período De Beaugrande(2002) acuña el concepto de
(editora), Buenos Aires, Eudeba.
“discursivismo”.
Cortés, M. (2007) “Las clasificaciones de textos”, en Al-
En otras palabras, trazar el mapa actual del campo trans- varado, M. (Comp.)Problemas de la enseñanza de la len-
disciplinario del Análisis del Discurso y la Lingüística del gua y la literatura. Buenos Aires, UNQui. 
Texto nos permite transitar la distancia que media entre
Silvestri, A. (2000) “Los géneros discursivos y el desarro-
la descripción lingüística de los textos y discursos hacia el
llo del pensamiento. Un enfoque sociocultural” en S.
análisis crítico-ideológico representado en la organización
Dubrovsky (comp.) Vigotsky: su proyección en el pensa-
lingüístico-discursiva que portan.
miento actual. Bs. As., Ediciones Novedades Educativas,
2000.
2. Objetivos del curso De Beaugrande, R. (2002) “La teoría y la práctica en los es-
tudios discursivos: Lingüística del texto y Análisis del
Objetivos Generales Discurso”, en Curso Internacional: Análisis del Discurso
→→ Ref lexionar sobre los desarrollos conceptuales impli- en las Ciencias Sociales, la Cultura y el Territorio. Memo-
cados en los estudios discursivos y textuales. rias. Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, Universidad Na-
→→ Investigar bibliográficamente los aportes del Análi- cional de Colombia.
sis del Discurso y la Lingüística del Texto vinculados
De Beaugrande, R. y Dressler, W. (1997) Introducción a la
con el análisis de textos y discursos orales y escritos.
lingüíst ica del texto. Nociones básicas y capítulo III.
→→ Transferir los aportes de la Lingüística del Texto y el
Barcelona, Ariel.
Análisis del Discurso al análisis de textos y discursos
de circulación social: científicos, académicos, perio- Van Dijk, T. (2006) “De la gramática del texto al Análisis
dísticos y políticos. Crítico del Discurso. Una breve autobiografía acadé-
mica”, página web de ALED, versión 2.0., diciembre de
Objetivos Específicos 2006, Universidad de Pompeu Fabra, Barcelona.
→→ Conceptualizar nociones claves: discurso, texto,
enunciado, sintaxis discursiva y textual, géneros
Unidad ii: “Las representaciones teórico-prácticas de los
discursivos, tipos textuales.
textos y los discursos”
→→ Analizar lingüística, discursiva y críticamente tex-
→→ Desarrollo de los modelos teórico-metodológicos más
tos y discursos de circulación social: científicos, aca-
representativos de la Lingüística del Texto y el Aná-
démicos, periodísticos y políticos.

34
lisis del Discurso: J.M. Adam (1992, 2000, 2006); De 4. Métodos de evaluación
Beaugrande y Dressler (1997); De Beaugrande (2002)
van Dijk (1980, 1983, 1998, 2001; 2008; 2011;); J.M. Condiciones de cursado – Regularización – Aprobación
Adam (1992, 2000, 2006).
→→ Análisis de tipos textuales y géneros discursivos re- El alumno podrá ser regular si aprueba con por lo menos
presentativos de los modelos teórico-prácticos desa- 4 (cuatro) todos los parciales y prácticos.
rrollados por la Lingüística del Texto y el Análisis del Se prevé también la modalidad de Promoción Directa
Discurso: narración, descripción y explicación. para aprobar la asignatura si se cumplimentan todos los
siguientes requisitos:
Lecturas: →→ asistir al 80% de las clases
De Beaugrande, R. y Dressler, W. (1997) Introducción a la →→ realizar el 80% de los prácticos
lingüíst ica del texto. Nociones básicas y capítulo III. →→ aprobar con 7 (siete) o más los prácticos evaluados y
Barcelona, Ariel. los 2(dos) parciales previstos.
Kuguel, I. (2009) “Géneros académicos y grados de espe-
Requerimientos- Ver apartado anterior-
cialización” en De la palabra al texto. Buenos Aires, Eu-
deba.
Van Dijk, T. (1998). Estructuras y funciones del discurso. Ma- 5. Cronograma de actividades:
drid, Siglo XXI. Agosto: unidad i
Van Dijk, T. (Comp.) (2001) El discurso como estructura y pro- Setiembre: unidad ii
ceso. Estudios sobre el discurso I. Barcelona, Gedisa.
Octubre: unidades ii y iii
Van Dijk, T. [Comp.] (2008, 3ª.reimp.) “El discurso como in-
teracción en la sociedad” en El discurso como interac- Noviembre: unidad iv
ción social. Barcelona, Gedisa.
Zamudio, B. y Atorresi, A. (2000) La explicación. Buenos
6. Lineamientos metodológicos
Aires, Eudeba.
La modalidad es asistencial, teórico-práctica, previéndose
Unidad iii: “Los hablantes, sus costumbres” trabajos prácticos individuales y grupales, escritos y ora-
→→ Taller de integración: lectura, escritura y análisis les. En los teóricos se estimulará la participan de los alum-
crítico e ideológico de discursos/textos (lingüísticos) nos, para así poder adecuar los contenidos a sus procesos
y géneros: carta, autobiografía literaria y académi- de aprendizaje.
ca, relato de una conferencia, cuento periodísticos,
políticos y académicos, literarios y autobiográficos.
7. Bibliografía general
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36
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38
La importancia de las estrategias metalingüísticas y metacognitivas
implicadas en la escritura de textos académicos, en el ámbito de la
unvm
Mgter. Sonia Gabriela Lizarriturri

La investigación “La importancia de las estrategias meta- se enmarca en el campo interdisciplinario de las Ciencias
lingüísticas y metacognitivas implicadas en la escritura del Lenguaje, comprendido por la Lingüística del Texto,
de textos académicos, en el ámbito de la unvm –años 2012- el Análisis del Discurso, la Psicología Cognitiva, la Prag-
2013” surge de la preocupación por las dificultades que mática Discursiva, los Enfoques Socio-Culturales sobre la
enfrentan los estudiantes universitarios para producir y Lectura y la Escritura, entre otros aportes.
comprender textos académicos. La temática registra an- Comenzaremos por los aspectos relevantes de los textos
tecedentes a nivel de encuentros académicos (Luján 2001 en tanto categorías lingüístico-cognitivas y discursivas. De
-2004; Buenos Aires, 2007; Córdoba, 2009; Gral. Sarmien- acuerdo con Beaugrande y Dressler, 1997; De Beaugrande,
to, 2011), y de publicaciones (Ciapuscio, 2009; Nogueira, 2000; Van Dijk, 2001, que historiagrafiaron la evolución
2005, 2010; Riestra, 2009). No obstante, los fragmentados del campo de la Lingüística del Texto y el Análisis del Dis-
estudios empíricos, a nivel institucional, resultan insufi- curso, el empleo de los términos texto o discurso se rela-
cientes para abordar esta problemática en el campo de la ciona con períodos de conf luencia y discontinuidad entre
investigación y la enseñanza. ambas disciplinas, desde el surgimiento de la primera, en
De allí nuestra hipótesis de investigación: la explicita- la década de 1970, a la actualidad en que asistimos a un
ción y enseñanza de los procesos lingüístico-cognitivos, período de mutua cooperación.
discursivos y socio-pragmáticos, implicados en la escri- De Beaugrande (2002) emplea el término “discursivis-
tura de textos académicos, en diferentes soportes tecno- mo” para referirse a dicho proceso de cooperación y sos-
lógicos, habilita y potencia el desarrollo de las estrategias tiene que el término remite a cualquier enfoque que pre-
metalingüísticas y metacognitivas necesarias para su pro- tenda describir o analizar la textualidad de un texto o un
ducción y comprensión, en el marco de la cultura acadé- discurso. Define al texto como un evento comunicativo,
mica-letrada actual. un sistema real que se produce y recibe a partir de la ac-
Durante el primer año de investigación, 2012, y como tualización del sistema virtual de la lengua, y es contribu-
paso previo al estudio contrastivo de las producciones es- yente del discurso. A su vez, entiende a éste último como
critas de estudiantes de los últimos cursos del Profesora- “un conjunto de textos mutuamente relevantes, hablados,
do de Lengua y Literatura y de la Licenciatura en Diseño escritos o presentados en cualquier otro medio”. (De Beau-
y Producción audiovisual de la unvm, nos centramos en: grande, 2002: 124).
a) la sistematización de los aportes teórico-metodológicos Por su parte, la Psicología y la Lingüística Textual
que conforman el aparato conceptual y, b) en la reelabora- Cognitivas, adoptan indistintamente, con significados
ción de dichos aportes para conformar un instrumento de equivalentes, los términos texto o discurso y remiten a
análisis descriptivo de los procesos lingüístico-discursivos ellos como el resultado de complejos procesos y represen-
implicados en las estrategias metalingüísticas y metacog- taciones mentales involucradas en el procesamiento del
nitivas de la escritura académica. lenguaje. Desde estas perspectivas, los textos conllevan
Esta primera etapa de la investigación reveló la signifi- un conjunto de representaciones semánticas, sintácticas,
cación y los alcances involucrados en la relación escritu- discursivas y pragmáticas subyacentes a su planificación
ra-textos, a nivel cognitivo, lingüístico, social y cultural. y emisión, con propósitos comunicativos en un contexto
En el entramado de ese vínculo estudiamos a los textos, determinado.
en general, y a los textos académicos, en particular, dado Los procesos implicados en la producción discursiva
que constituyen una interfaz clave con relación al desa- o textual a nivel individual han sido investigados, entre
rrollo de las habilidades y estrategias metalingüísticas y otras teorías y autores, por Adam (2006), De Beaugrande y
metacognitivas que conlleva la escritura académica. Des- Dressler (1997), Van Dijk (1983, 1998, 2001), Belinchón, Ri-
de esta perspectiva el estudio de la escritura y los textos vière e Igoa (1992), Bereiter y Scardamalia (1987), Flower y

39
Hayes (1981); a partir de cuyos modelos el procesamiento 1. La recurrencia en la utilización de la noción de gé-
cognitivo con relación a la producción escrita simboliza: nero discursivo, aunque se empleen las denomina-
“(…) la referencia a estructuras de conocimiento y a proce- ciones de trama, superestructura, o andamiaje.
sos que se sitúan en las ´junturas´ del pensamiento y del 2. El abordaje de los tipos textuales como el produc-
lenguaje, procesos que operan como una interfaz entre la to resultante de las prácticas comunicativas de los
actividad cognitiva inteligente y la actividad lingüística usuarios lingüísticos en distintos contextos so-
propiamente dicha”. (Belinchón, Rivière e Igoa, 1992: 629) cio-culturales. Consecuentemente, no se explicitan
Por su parte, Ciapuscio (2009), dentro del ámbito de los los procesos involucrados en la comprensión y pro-
estudios textualistas y discursivos, caracteriza a los textos ducción de los esquemas o tipos textuales, ni los pro-
como “objetos lingüísticos-comunicativos complejos”, ca- cedimientos lingüístico-cognitivos representados
paces de subsumir procesos cognitivos de diferente natu- en estos formatos (superestructuras, tramas o anda-
raleza (léxicos, sintácticos, semánticos, discursivos y prag- miaje), bajo cuya superficie subyace la información
máticos), a la par que como productos pueden analizarse temática. Aquí, creemos conveniente aclarar que la
en distintos niveles: funcional, situacional, semántico y palabra “trama” como equivalente a superestructu-
gramatical. Asimismo, sostiene que los textos son “tipos” ra, formato o envase, se difundió masivamente en
representativos de una categoría o géneros de textos. nuestro país a partir de la publicación del libro de
Este último enunciado nos permite introducir una pro- Kaufmann y Rodríguez (1993) La escuela y los textos,
blemática concomitante con nuestra hipótesis de investi- cuya propuesta de clasificación textual se reproduce
gación: la relación de la enseñanza de la escritura de tex- en prácticamente en todos los manuales revisados.
tos académicos con los modelos teóricos provistos por la 3. La preponderancia de actividades didácticas des-
Lingüística del Texto, la Psicología Cognitiva y el Análisis tinadas a la comprensión, sobre las destinadas a la
del Discurso. producción de textos escritos. Asimismo, en los ma-
A propósito de ello, recordemos que desde una perspec- nuales investigados, resultó sumamente complejo
tiva textual-discursiva y socio-cognitiva, el texto es el establecer el porcentaje de actividades destinadas
objeto abstracto que sirve de base estructural al género específicamente a la producción escrita, por dos
discursivo y al enunciado. El texto, por tanto, es una forma motivos: a) numerosas actividades de producción
lingüística estereotipada, y se diferencia del género dis- escrita se solicitan como parte de las actividades de
cursivo por estar definido únicamente por características comprensión lectora y son evaluadas como tales; y
lingüísticas internas, y no como el género por determina- b) los enunciados lingüísticos indican la actividad
ciones socioculturales. De acuerdo con ello, de escritura que debe desarrollar el alumno con ex-
presiones generales, poco precisas, mediante verbos
el conocimiento sobre los géneros se adquiere y am-
cuya semanticidad remite únicamente a la funcio-
plía sobre la base de experiencias comunicativas y
nalidad comunicativa de la escritura, por ejemplo,
desempeña un papel central en las actividades de
transcribir, completar, escribir y responder pregun-
producir y comprender textos; son parte de nuestra
tas, copiar, mencionar, enunciar, anotar razones,
dotación. (…) Los géneros académicos son conjuntos
completar cuadros comparativos, escribir anécdotas,
de textos más o menos estandarizados que se em-
escribir una historia personal, narrar, reformular un
plean para resolver tareas comunicativas regulares
párrafo, etcétera. Si, además, analizamos pormeno-
en los espacios de creación y comunicación del cono-
rizadamente las actividades de escritura vinculadas
cimiento. (Ciapuscio, 2009: 75)
con la producción de textos académicos, observamos
que no aparecen enunciadas, explícitamente, activi-
Sin embargo, estos modelos teóricos no tienen su corre-
dades de escritura cuyo objetivo central consista en
lato en la enseñanza de la disciplina Lengua, tal como lo
componer un tipo o género de texto académico, artí-
demostramos en investigaciones anteriores (Lizarriturri,
culo, ensayo o informe, con las correspondientes fa-
2010, 2011), en las que analizamos los últimos diseños cu-
ses de ejecución: planificación, ideación, desarrollo,
rriculares para la enseñanza de Lengua, en diferentes ju-
expresión, y análisis gramatical (De Beaugrande y
risdicciones provinciales, particularmente Córdoba, y los
Dressler, 1997; Belinchón, Igoa y Rivière, 1992).
libros de textos más utilizados para su enseñanza en el
nivel medio.
En tal sentido, los manuales focalizan en el reconoci-
La revisión y análisis de los contenidos y actividades di-
miento de los recursos lingüístico-discursivos que debe
dácticas propuestas por los manuales de Lengua, de mayor
tener en su superficie el “producto” texto, de acuerdo con
circulación en los últimos cuatro años, en el nivel medio
los propósitos comunicativos que persigue. Este tipo de
de la provincia de Córdoba, nos permitió observar:
actividades apunta a la señalización concreta de distintos
elementos lingüísticos y no requiere de abstracciones o
generalizaciones. Por lo tanto, no involucra el desarrollo

40
de las habilidades metalingüísticas y metacognitivas, cuyo las tres dimensiones anteriores. La reelaboración concep-
dominio consciente requiere la escritura de textos, las que tual del aparato crítico sistematizado permitió establecer
a su vez se basan en el dominio de las estrategias lingüísti- nexos entre el análisis de las dimensiones anteriores con
co-cognitivas específicas. los enfoques socio-culturales de Vigotsky-Luria, y las pers-
Las investigaciones precedentes sobre los modelos de pectivas socio-históricas sobre la escritura y los textos
escritura y producción escrita de textos académicos que (Havelock, 2008; Olson, 1998; Silvestri, 2000). En otras
presentan los textos para enseñanza de Lengua en el nivel palabras, los enfoques socio-culturales e históricos apor-
medio, constituyeron un insumo clave para la presente tan herramientas para el análisis de los modos de pro-
investigación porque, por una parte, orientaron el diseño ducción y comprensión de los textos escritos, en diferentes
de las pruebas de producción escrita y, por otra, aportan in- contextos socio-históricos y culturales (cognición situada).
formación sobre los conocimientos de producción y com- A nuestro criterio, tres argumentos surgidos de los
prensión textual con que arriban los estudiantes a la Uni- enfoques socio-culturales de Vigotsky-Luria adquieren
versidad, aspectos que ponderamos como parte del estudio incidencia con relación a la temática que investigamos:
comparativo de los escritos académicos que producen los 1) la concepción del lenguaje como un instrumento de me-
estudiantes del Profesorado de Lengua y Literatura, cuan- diación semiótica social e individual de cuya evolución
do inician la carrera y cuando cursan los últimos años. socio-cultural deviene el papel central de las herramien-
En otros términos, la concepción de escritura y produc- tas socio-semióticas en la constitución de los Procesos
ción textual académica que predomina en los diseños cu- Psicológicos Superiores (pps). 2) La diferenciación en el
rriculares actuales de formación docente terciaria y supe- interior mismo de los pps, entre los procesos psicológicos
rior, y en los libros de textos para la enseñanza de Lengua de la oralidad, pps Rudimentarios y, los pp Avanzados de
en el nivel medio, enmascara, en palabras de Bacherlard la escritura. Estos últimos se caracterizan por el empleo
(1997), obstáculos epistemológicos. Dichos obstáculos ha- descontextualizado, regulado, consciente y voluntario de
cen a la particularidad de la relación escritura–textos, ra- los instrumentos de mediación semiótica. 3) La relación de
zón por la que sistemáticamente retomamos los aportes de la escritura con los conceptos científicos.
las teorías lingüísticas y discursivas que conf luyen en el Los tres argumentos anteriores establecen una relación
estudio de los textos escritos, en tanto complejos procesos de reversibilidad entre los procedimientos lingüísticos que
y productos socio-cognoscitivos y comunicativos. En tal intervienen en la escritura de textos académicos y los pro-
sentido, Belinchón, Igoa y Rivière (1992), Ciapuscio (2009) cesos de ref lexión metalingüísticos y metacognitivos que
y Van Dijk (2001), acuerdan en el reconocimiento de tres conlleva la escritura como proceso psicológico superior
dimensiones para su estudio: avanzado.
1. Estructural: comprende la dimensión estructural En tal sentido, la lectura y la escritura se convierten
del sistema de la lengua y su proyección en la orga- en dos estrategias socio-cognitivas cuya dialéctica surge,
nización del sistema lingüístico de los textos como en primer lugar, porque todo texto “es un documento de
eventos comunicativos. Con relación a esta dimen- decisiones, de procesos de elección y combinación” (De Be-
sión destacamos las investigaciones de Adam (2006), augrande y Dressler, 1997: 37). Decisiones que adopta el
De Beaugrande y Dressler (1997), Van Dijk (1998, autor y que el lector debe tratar de reconstruir para alcan-
2001). zar el sentido del texto. Para que esto suceda, para que el
2. Cognitiva: abarca los procesos cognitivos, lingüísti- lector pueda activar las pistas que ha diseminado el autor,
co-discursivos, metalingüísticos y metacognitivos según los autores citados, todo texto debe cumplir con siete
que intervienen en la escritura de los textos. Estos normas y tres principios regulativos: eficacia, efectividad
procesos psicolingüísticos y socio-cognitivos pueden y adecuación.
examinarse en Ardila-Ostrovsky (2004), Belinchón, Los procesos involucrados en la producción discursiva
Igoa y Rivière (1992), García Madruga (2005, 2006), o textual se inician a nivel individual en el nivel de proce-
Olson (1998), Rivière (2003) y Vigotsky (1988, 1999). samiento cognitivo y finalizan en el nivel lingüístico, tal
3. Funcional-comunicativa: involucra la reconstruc- como lo sistematiza el siguiente modelo:
ción del contexto de producción o intencionalidad
subyacente en todo texto. Sobre este aspecto, revisa- Fases del proceso de escritura (Fuente: De Beaugrande
mos los aportes de Havelock (2008), Olson (1998), Sil- y Dressler, 1997):
vestri (2000), Van Dijk (1998, 2001, 2008, 2011), entre 1. Planificación (planificación del objetivo y el formato
otros. general del texto).
2. (selección de un tema presumiblemente informativo
Según el estado de la cuestión relevado hasta fines del año y relevante).
2013, las teorías y perspectivas lingüístico-discursivas 3. Desarrollo (definición detallada de los contenidos
referidas a la textualidad-discursividad, acuerdan en la específicos que desarrollarán el tema general y su
delimitación de los aspectos a investigar en el marco de orden en el texto).

41
4. Expresión (desarrollo secuencial de las oraciones del del “sistema” o “red” gramatical. En ese sentido, en el pro-
texto en un modo coherente, tanto local como glo- cesamiento sintáctico a nivel discursivo o textual, inter-
balmente). vienen procedimientos que contribuyen tanto a estabilizar
5. Análisis gramatical (revisión de la cohesión y cohe- como a economizar el sistema. Estos procedimientos son
rencia textual). nominados por De Beaugrande y Dressler (1997)21 como:
repetición, repetición parcial, paralelismo, paráfrasis, uso
Las tres primeras fases del proceso se vinculan con la di- de proformas, elisión, tiempo y aspectos verbales, conec-
mensión funcional-comunicativa de la escritura y las dos tores y la perspectiva funcional de la oración, constituyen
últimas, con las dimensiones cognitiva y estructural. En procedimientos lingüísticos de dominio específico cuyo
términos textualistas, las dos últimas fases del proceso de manejo consciente hablita, en la producción escrita, la re-
escritura corresponden a las normas lingüísticas de cohe- f lexión metalingüística y metacognitiva.
sión y coherencia. Dada la importancia que revisten para este trabajo de
La cohesión y la coherencia textual equivalen al proce- investigación, explicitamos brevemente la función sintác-
samiento lingüístico léxico y sintáctico que se produce en tica que representan estos procedimientos de cohesión:
la memoria operativa (mo) o memoria a corto plazo (mcp),
que es una memoria acotada en cantidad y tiempo de re- Repetición. La repetición léxica (depende del elemento que
tención de la información, mientras que el contenido con- se repita y el tipo de texto o discurso: sustantivo, adjetivo,
ceptual se almacena en la memoria a largo plazo (mlp), o verbo o pronombre) aumenta o disminuye la informativi-
memoria episódico-semántica (Rumelhart, 1970; Wright, dad del texto.
1968; citados por De Beaugrande y Dressler, 1997). A su
vez, la cohesión –gramatical– se convierte en un recurso Repetición parcial. Recurso de transcategorización o uti-
clave de la textualidad, porque el procesamiento textual se lización de algunos mecanismos léxicos con otra función.
basa en un procesamiento formal de las opciones y patro- Al respecto, De Beaugrande y Dressler (1997) sostienen
nes que se usan en el discurso, es decir, en la sintaxis, que que un concepto activado previamente puede reutilizarse
en las lenguas naturales es un sistema limitado en cuanto siempre que su expresión se adapte a la situación comu-
clases de elementos y estructuras, en comparación con las nicativa.
clases de elementos y estructuras que organizan los con-
ceptos y relaciones. Paralelismo. Consiste en repetir las mismas expresiones
Cabe aclarar que cuando aludimos a la sintaxis, referi- formales para expresar otro contenido o repetir el mismo
mos a la gramática relacional o cognitiva, generativa en las contenido para obtener un cambio en la expresión formal.
perspectivas chomskianas, que remite a procesos cogniti-
vos que acontecen en tiempo real, en el momento en que el Paráfrasis. Recurso por el cual se emplean diferentes
productor o receptor textual escriben o leen, a diferencia expresiones para repetir el mismo contenido. Puede ser
de lo que acontece en las gramáticas tradicionales de cor- sinonímica o parafrástica. A su vez, pone en juego y pue-
te estructuralista o descriptivistas. Estas últimas adquie- de construirse con otro mecanismo de cohesión que es la
ren carácter funcional-instrumental, porque describen a sustitución pronominal. Como bien destacan los autores
nivel sintáctico, semántico y morfológico los enunciados que referenciamos, tanto el uso de paráfrasis como de pro-
lingüísticos, es decir, no contemplan en su análisis los formas depende de la situación comunicativa, y el ejemplo
procesos psicológicos que necesariamente ponen en juego prototípico lo representa el discurso jurídico. En él a di-
los sujetos cognitivos. Por el contrario, las gramáticas cog- ferencia de lo que sucede en el discurso cotidiano, no es
nitivas explicitan los procesos lingüístico-cognitivos que posible cohesionar los discursos sustituyendo expresiones
intervienen en el procesamiento de la información oracio- por sinónimos, expresiones equivalentes o pronombres.
nal y textual, ya que es a partir del dominio consciente
de las estructuras sintácticas que se pueden desarrollar Los pronombres o sustitución pronominal. En el texto
deliberadamente, los niveles semánticos (significados-con- los pronombres ofician de co-referentes, sustituyen a los
tenidos) y pragmático (intencionalidad). Parafraseando a sustantivos o referentes y cumplen una función deíctica,
De Beaugrande y Dressler (1997: 92), la sintaxis cognitiva señaladora. Esta función deíctica del pronombre puede ser
se presenta como una red que reproduce las estrategias y anafórica o catafórica. En el primer caso, refieren a infor-
expectativas de los usuarios del lenguaje y, por otro, ex- mación dada con anterioridad en el texto y en el segundo,
presa las reglas gramaticales a modo de procedimientos de remiten a información que se encuentra más adelante.
utilización de esas reglas. Por lo tanto, los pronombres permiten a nivel discursi-
Desde la perspectiva descripta, la gramática se integra
al discurso-texto como una propiedad inherente al proce-
21 Adoptamos la denominación propuesta por los autores citados, no
so de su constitución, donde los elementos lingüísticos de obstante puede consultarse al respecto: Van Dijk (1980, 1983,1998,
la superficie textual revelan las relaciones y dependencias 2001).

42
vo-textual que los interlocutores mantengan el contenido nueva al texto y, su aparición –no siempre necesaria-
discursivo activo, sin tener que recurrir a la repetición que se incrementa cuando la relación entre secuencias
es un mecanismo anti-económico. oracionales no es obvia, por lo cual se debe marcar de
manera explícita. El indicio superficial más utilizado
Las proformas verbales. Particularmente, las referidas a es el conector o conjunción “y”, y con menor frecuen-
los verbos hacer (De Beaugrande y Dressler, 1997) y decir cia, “también” y “además”.
(Olson, 1998), cuando son reemplazados por proformas B) La disyunción: vincula elementos opuestos, y apare-
como eso o tal, multiplican los mecanismos de economía ce marcada en la superficie del texto con el conector
discursivo textual en un mecanismo de por sí económico, “o”. Cumple dos funciones, en el interior de la oración
como es el sistema sintáctico. Al respecto, las proformas al conectar dos alternativas, una de las cuales se im-
no correfieren monotemáticamente a elementos del mis- pondrá sobre la otra en el mundo textual, y entre ora-
mo tipo, por ejemplo, los pronombres a los sustantivos, los ciones para introducir una información adicional y
proverbos a los verbos y los promodificadores a los mo- para traer a colación una alternativa no considerada
dificadores. Estas correspondencias son preferenciales, anteriormente en el mundo textual.
porque tienen la ventaja de “encajar” en marcos gramati- C) La adversación: vincula elementos equiparables
cales conocidos que son fácilmente utilizables y reutiliza- pero incompatibles en el mundo textual, a nivel su-
bles, puesto que permiten avanzar en la organización de perficial se reconoce por el empleo de los conectores:
la informatividad textual. Dicho de otro modo, las profor- “pero”, “no obstante”, “sin embargo”, “aunque”. “La
mas se utilizan amoldadas a la superficie textual y a los función textual que desempeña la adversación es la
requerimientos gramaticales, ya que permiten mantener de facilitar una solución a un problema en el que se
activado el contenido informativo, aunque no el formato combinan acontecimientos en principio incompati-
superficial de su expresión. Permiten el acceso a los conte- bles entre sí”. (De Beaugrande y Dressler, 1997: 124)
nidos semánticos de forma menos costosa y también pue- D) La subordinación: vincula elementos ordenados je-
den referirse a cláusulas enteras. rárquicamente y verdaderos en el mundo textual, si
cumplen determinadas condiciones. Se concreta a ni-
Tipos de correferencia pronominal: vel textual a través de una amplia gama de conecto-
Anáfora. Forma pronominal previa al correferente. res como: “porque”, “ya que”, “como”, “así”, “mientras”,
Catáfora. Forma pronominal posterior al correferente. “por consiguiente”, etcétera. Cuando conecta secuen-
cias oracionales permite establecer interrelaciones a
La elisión u omisión. Si bien no hay acuerdo teórico acerca nivel de coherencia textual, dado que explicita rela-
de su conceptualización, puede ser de distinto tipo: nomi- ciones de causa-consecuencia, temporalidad, razón y
nal, verbal y de sujeto oracional. En todos los casos, impli- ordenamiento jerárquico.
ca una operación cognitiva de inferencia o reposición de
información que se brinda en algún lugar de la superficie Los conectores, al igual que el tiempo y los aspectos ver-
textual, o que dicha superficie permite inferir. bales, varían su función de acuerdo al contenido del texto,
razón por la cual especificaremos estos procedimientos
El tiempo y los aspectos verbales. Constituyen uno de los con relación al texto explicativo. Sin embargo, no caben
recursos centrales de la cohesión textual. Las categorías dudas que mediante el uso de los conectores el productor
verbales temporales y aspectuales tienen distinta organi- textual puede ejercer un control sobre el proceso de reco-
zación en las diferentes lenguas, aunque en general pue- nocimiento y de activación de las relaciones textuales que
den distinguirse en todas las lenguas: tiempos de pasado, han de realizar los receptores. La utilización del conector
presente y futuro; continuidad frente a discontinuidad; adecuado permite al productor, además, insertar su propia
anterioridad frente a posterioridad y acontecimientos fi- interpretación, como una estrategia de reconducción de la
nalizados frente a acontecimientos no finalizados. situación.
Los conectores pueden sugerir e, incluso en ocasiones,
Conexión. Es el mecanismo más evidente de señalización imponer, una determinada interpretación a las secuencias
de las relaciones entre los acontecimientos y situaciones afectadas, aunque no siempre aparecen en todas las tran-
que presenta el texto, es decir, el uso concreto de conec- siciones entre todos los acontecimientos y situaciones que
tores facilita la conexión y actualización de los aconteci- concurren en un mundo textual.
mientos del mundo textual. En las gramáticas tradiciona- En consecuencia, el empleo de conectores es una ma-
les los conectores se denominan “conjunciones”. Para De nifestación de que los comunicadores intentan organizar
Beaugrande y Dressler (1997), los cuatro procedimientos formalmente sus enunciados proporcionándoles cohesión,
principales de conexión son: a la vez que intentan ser máximamente relevantes para
A) La conjunción: vincula entre sí elementos equipara- que el receptor acceda a la interpretación más adecuada, a
bles, es una relación de adición, añade información

43
un costo mínimo, que rentabilice el esfuerzo empleado en sobre lo que intenta hacer el productor. La progresión te-
la interacción comunicativa. mática, la coherencia textual, es posible en la medida en
que el productor textual proporciona las pistas para la ac-
La perspectiva funcional de la oración. Refiere a la inte- tivación de esquemas previos –situacionalidad- y conoci-
racción entre la sintaxis, la informatividad y las situacio- mientos específicos –intertextualidad-. Estas pistas tienen
nes comunicativas. Revela la ubicación estratégica de la que encontrarse en la superficie textual, en la expresión.
información: al comienzo de oraciones, o al final de ellas, Es el lugar en que escritor y lector se encuentran. Es el pun-
lo que es un indicio de su importancia y del nivel de infor- to de llegada del escritor, donde se deben materializar las
matividad que el productor otorga al contenido del texto. demás instancias implicadas en la escritura, entendida
La preeminencia que otorgan los autores referidos a la como proceso, y el punto de partida del lector, desde don-
cohesión o gramática textual radica en dos factores: en la de se disparan las demás instancias de la comprensión,
operatividad de las estructuras sintácticas o gramaticales entendida también como proceso.
empleados textualmente en tiempo real y, en la interac- Es importante señalar que en el modelo De Beaugrande
ción entre la sintaxis y las demás normas y principios que y Dressler (1997), los procesos de producción y compren-
regulan la textualidad. En otras palabras, la sintaxis es el sión textual son considerados procesos cognitivos de re-
envase que transporta no sólo el contenido de un texto, solución de problemas que suponen:
sino que activa a través de sus construcciones lingüísti- A) Mantenimiento de la continuidad y conectividad
cas la intencionalidad, el plan del productor textual y la textuales. Se sostienen en la memoria de trabajo o
jerarquización de la información subyacente en el mundo memoria operativa de corto plazo, los elementos o
textual. indicios de la superficie textual –su expresión– los
En consecuencia, la cohesión se corresponde con la nor- que permiten activar un esquema que guíe la inter-
ma de coherencia o sentido del texto, ya que el sentido tex- pretación.
tual se construye a partir de la activación de conocimien- B) Evaluación de las hipótesis. A partir de la selección
tos a través de las expresiones lingüísticas que conforman del esquema, se generan expectativas acerca del de-
la superficie del texto. sarrollo del contenido textual que se corroboran con
la lectura.
La continuidad del sentido está en la base de la co-
C) Emparejamiento de patrones. Se produce cuando los
herencia, entendida como la regulación de la posi-
esquemas activados mentalmente a partir de la in-
bilidad de que los conceptos y las relaciones que
formación del texto resultan insuficientes y se gene-
subyacen bajo la superficie textual sean accesibles
ra el conf licto, que obliga al lector a llenar lagunas y
entre sí e interactúen de un modo relevante. Esta or-
proponer nuevas hipótesis o subhipótesis de lectura.
ganización subyacente en un texto es lo que se deno-
D) Probabilidades de computación. Corresponde al equi-
mina mundo textual. (De Beaugrande y Dressler,
librio entre los datos brindados por el texto y los co-
1997: 135-136)
nocimientos del lector. Un texto demasiado explícito
produce aburrimiento, mientras que otro donde se
Así como el dominio de los recursos de cohesión son la cla-
exija del lector completar demasiadas lagunas infe-
ve de la producción escrita, porque el productor no sólo
renciales, puede generar desazón, cansancio y aban-
construye el tema sino la intencionalidad que persigue,
dono de la lectura.
la coherencia se torna clave para el proceso de compren-
E) Planificación dirigida a la consecución de una meta.
sión.22 Mientras que la recepción textual y su procesa-
La información de un texto se comprende a raíz de
miento comienzan en la superficie del texto y se opera
la corroboración de las hipótesis que son las metas
descendiendo progresivamente a las fases más profundas
establecidas especulativamente por el lector.
(lo que implica extraer las ideas principales) hasta la re-
cuperación del plan del productor, la producción sigue el
camino inverso: de la representación mental a su materia-
Otros modelos de producción escrita
lización en un producto textual.
En algunos aspectos producción y recepción no son pro-
Flower y Hayes (1996), en uno de los modelos de composi-
cesos inversos, esto ocurre cuando el receptor anticipa las
ción escrita más difundidos, identifican tres grandes gru-
actividades del productor. En esos casos el receptor tiene
pos de procesos cognitivos que pueden darse en cualquier
la misma direccionalidad que el productor e intenta recu-
etapa o fase de la escritura: planificación, traducción y re-
perar las ideas y los planes del productor, hipotetizando
visión (o relectura). Dado que la escritura es una actividad
encaminada a una meta, los procesos de escritura se consi-
22 Van Dijk (1980, 1983) aborda la noción de coherencia desde un deran recursivos, jerárquicamente organizados e interre-
enfoque proposicional que permite al lector construir la macroes-
tructura o contenido del texto. No desarrollamos su propuesta
lacionados, ya que el empleo de uno de ellos demanda del
porque focaliza en los procesos de comprensión textual. otro. En los procesos de planificación se establecen metas

44
que involucran tres subprocesos, generación de ideas (re- 1. La planificación de la escritura: concebir al receptor,
cuperación de información relevante desde la memoria), concebir la relación tema-estructura-estilo, plantear-
organización (selección del material y presentación, de se el propósito, buscar y seleccionar información,
acuerdo con decisiones retórico-estilísticas y característi- planificar recursivamente.
cas de la audiencia) y establecimiento de objetivos (según 2. La puesta en texto: traducir lo planificado, dominar
lo desarrollado y revisado anteriormente). Los procesos de convenciones globales y locales, concentrarse, pri-
traducción, guiados por los planes, involucran la elabora- mero, en los aspectos globales, releer, volver a la pla-
ción de representaciones proposicionales estructuradas nificación, recurrir a estrategias de apoyo.
en secuencias oracionales, gramaticalmente aceptables. La 3. La autocorrección o revisión y la corrección: verifi-
revisión o relectura implica un proceso de concientización car la adecuación a la situación comunicativa, con-
(ref lexión metalingüística y metacognitiva), que permite trolar la coherencia y el estilo, controlar los aspectos
evaluar el producto resultante o la evolución del proceso superficiales.
de composición, de acuerdo con los planes o metas inicia-
les, y puede llevarse a cabo en cualquier momento de la
composición textual. La descripción de estos procesos, por Los procesos cognitivo-lingüísticos y los tipos y
parte de Flower y Hayes, es de carácter general, ya que se géneros discursivo-textuales
presentan numerosas diferencias a nivel individual, por
ejemplo, en la manera de escribir con un plan previo o sin El dominio de los procedimientos lingüísticos o sintaxis
él, y sobre todo en la revisión, donde no siempre se corrige textual se torna clave ya que a partir de la estructura
y revisa de acuerdo con el plan inicial. lingüística de los textos, accedemos a los conceptos y a
Desde una perspectiva similar, Bereiter y Scardamalia su organización temática. Si bien ya hemos descripto los
(1983), describen tres tipos de procesos con relación a la procedimientos lingüísticos más importantes, algunos de
producción discursiva escrita: a) procesos ejecutivos de ellos adquieren especial significación según el formato o
escritura, formados por los aspectos conceptuales de la superestructura textual, denominada tipos textuales por
escritura; b) procesos de la organización lingüística del la Lingüística del Texto y géneros discursivos, por el Aná-
texto, es decir, la organización sintáctico-oracional y los lisis del Discurso.
mecanismos de cohesión y coherencia; y c) el nivel de eje- Los dos tipos textuales académicos y sus correspondien-
cución gráfica, el paso del plan o texto interno a las re- tes formas discursivas, que se privilegian en la cultura aca-
presentaciones gráficas escritas. Al igual que en el modelo démica letrada universitaria son la explicación y la argu-
anterior, estos autores afirman que los tres niveles y los mentación. De acuerdo con nuestros objetivos e hipótesis
correspondientes procesos implicados se dan en forma in- de investigación nos centramos en la explicación por ser
terrelacionada e interactiva, y descansan en un riguroso el género y texto académico en el que se enmarcan las
sistema de control cognitivo. producciones escritas de los estudiantes.
También estudiaron las dificultades que se presentan en Zamudio y Atorresi (2000) sostienen que los procedi-
la producción escrita como consecuencia de la lentitud, del mientos y recursos lingüísticos que intervienen en los
esfuerzo cognitivo y demanda de atención que exige la es- discursos y textos explicativos son estrategias discursi-
critura en todo momento. Entre las dificultades recurren- vo-textuales y tipos de razonamientos. Destacamos por
tes señalan: la pérdida de objetivos o planes iniciales en la sus alcances discursivos y cognitivos los siguientes pro-
memoria a corto plazo, por la lenta velocidad de ejecución, cedimientos:
las interferencias surgidas por las demandas mecánicas de
la escritura (lapicera, teclados de computadora, etc.) y las La anáfora. Comprende un plano textual y uno cognitivo.
demandas relacionadas con la planificación y estructura Textual: la anáfora aparece en relación con otras expresio-
del contenido y, finalmente, las dificultades para desarro- nes mencionadas anteriormente en el texto, es decir, con
llar un control interno de la composición. el antecedente. Cognitivo: el referente es conocido por el
En el campo de la enseñanza de la composición escrita interlocutor puesto que está presente en la memoria inme-
se destacan las propuestas de Ana Atorresi (1999, 2005) y diata (Charaudeau y Maingueneau, 2005: 24).
Daniel Cassany (1998, 1999, 2000). Éste último acredita una
vastísima producción referida a la escritura. No obstante, La paráfrasis. En el sistema de la lengua, las paráfrasis
sólo consideraremos sus aportes vinculados a la escritura independientemente de su construcción a partir de sus-
académica, ya que adopta un enfoque comunicativo-di- tituciones sinonímicas, parafrásticas, de equivalencia co-
dáctico, que no se corresponde con los objetivos de esta rreferencial entre enunciados, o de anáforas de tipo pro-
investigación. nominal, adverbial, verbal y designacional, revelan una
Por su parte, Ana Atorresi (2005) establece tres momen- estructura sintáctico-oracional que para la Lingüística del
tos, con sus correspondientes fases, para el proceso de Texto Cognitiva permite activar conceptos. En otras pala-
composición escrita: bras, el recurso de cohesión parafrástica pone en marcha
procesos de coherencia temática a partir de la activación intencionalidad y aceptabilidad. Por lo tanto, en los tex-
de redes semánticas, a la par que facilita el reconocimien- tos que tienen intencionalidad epistémico-explicativa se
to, a través de la superficie textual, de la intencionalidad recurre al empleo de ejemplos como un modo de clarificar
o plan del productor. y concretizar el conocimiento teórico.
La paráfrasis textual remite fundamentalmente a la
distribución de la información en el texto, ya que la infor- La analogía. Es otro modo de paráfrasis conceptual. Con-
mación que inicialmente se presenta como nueva se trans- siste en relacionar un objeto problemático del saber con
forma en conocida mediante el recurso de la paráfrasis. En otro objeto o cierta representación conocida por el lector,
este sentido, una estructura textual explicativa adecuada con el cual el primero tiene algún elemento o cualidad en
debería iniciar el texto con información nueva en el pri- común. De allí su vinculación con el ejemplo, ya que ambos
mer párrafo y retomarla en los párrafos subsiguientes, me- comparten la intencionalidad: facilitar la comprensión y
diante procedimientos parafrásticos que la transformen aceptabilidad al destinatario a partir del hecho concreto.
en información conocida o dada. Si relacionamos los planteos epistemológicos de
Vigotsky (1999), con las investigaciones socio-históricas
La definición. Es un procedimiento analítico que vincula acerca de la escritura (Havelock, 2000; Olson, 1998), po-
dos términos equivalentes semánticamente, uno por defi- demos trazar el punto de encuentro entre la escritura y los
nir y otro que define. Zamudio y Atorresi (2000) clasifican textos, dicho de otro modo, podemos trazar el recorrido
a las definiciones por su forma en metalingüísticas y pa- que va desde el proceso de escritura individual, por par-
rafrásticas; y por su contenido en convencionales y natu- te de un sujeto cognoscente, al surgimiento de los textos
rales. Las primeras son generales y se construyen a partir como productos o artefactos sociales comunicativos, re-
de metalenguaje, en cambio, las definiciones parafrásticas productores –intencionales- de los distintos momentos de
remiten a conceptos. Estas últimas pueden construirse por la historia del conocimiento humano de occidente.
aproximación, por metonimia, por sinonimia, hiperoni- Graficamos, a modo de síntesis de esta primera etapa de
mia, o por derivación. De acuerdo con estas clasificacio- investigación, las perspectivas abordadas para el estudio
nes conviene remarcar que, en los textos explicativos, las de la escritura, los textos y la complejidad de sus vínculos
definiciones remiten a conceptos que lingüísticamente se estructurales, cognitivos, lingüísticos, epistémicos, socia-
construyen mediante equivalencia, descripción, denomi- les, culturales y académicos (Ver Figura 1).
nación o por la función del objeto que se describe.

El ejemplo. Es un procedimiento que consiste en propor- Segunda y tercera etapa de la investigación:


cionar un caso concreto, particular, para la explicación año 2013
de un concepto. Según Coltier (1988), citado por Zamudio
y Atorresi (2000), el ejemplo tiene dos funciones, facilitar el A partir del marco teórico-epistemológico precedente,
acceso al pensamiento teórico que se enuncia y establecer profundizamos en la indagación y descripción de las es-
nuevos saberes. El ejemplo desde esta perspectiva estable- trategias lingüísticas que intervienen en el procesamien-
ce una relación sintagmática con el ejemplificado, del cual to de textos escritos académico-explicativos, porque sólo
se diferencia por el grado de abstracción: concepto general su “ejecución competente” (Ardila-Ostrovsky, 2004) ha-
por una parte, ejemplo concreto, por otro. Pero también bilita el desarrollo de las estrategias metalingüísticas y
el ejemplo establece relaciones paradigmáticas ya que su- metacognitivas necesarias para la lecto-escritura acadé-
pone una elección entre varios ejemplos para un mismo mica. En otras palabras, el relevamiento y reelaboración
concepto, con los que mantiene una relación en ausencia. conceptual de las dimensiones estructurales, cognitivas y
En el plano de la textualidad-discursividad el ejemplo socio-comunicativas implicadas en la escritura de textos
es una forma de paráfrasis, porque expresa la reformu- académicos, guió el diseño y análisis de textos académi-
lación de un concepto. Es importante señalar que se trata cos producidos por alumnos del Profesorado de Lengua y
de una paráfrasis conceptual, no lingüística, que se evi- Literatura, y alumnos del último año de la Licenciatura en
dencia mediante el mecanismo de la repetición y que, en Diseño y Producción audiovisual, de la unvm.
general, puede suprimirse por tratarse de una aclaración. En función de ello, desarrollamos y aplicamos, durante
Esta modalidad del ejemplo es muy empleada en los textos el año 2013, el modelo de análisis para producciones es-
explicativos y en el discurso didáctico, con la finalidad de critas académicas que describimos a continuación (Ver
explicitar el objeto de explicación. Figura 2).
Por otra parte, la selección de ejemplos que presenta un
texto indica la representación que el productor textual se
formula del lector; o en términos de las normas y están-
dares de la textualidad (De Beaugrande y Dressler, 1997;
De Beaugrande, 2000), pone en evidencia la relación entre

46
Figura 1. Entre la oralidad y ENTRE LA ORALIDAD Y LA ESCRITURA:
la escritura: los textos y los LOS TEXTOS Y LOS DISCURSOS
discursos
Relaciones entre texto,
oralidad y escritura

El texto como Categoría


Lingüística

a) Procesos Psicolingüísticos de la b) Enfoques Socio-Históricos de la


Oralidad y la Escritura Escritura y los Textos

A) PSICOLOGÍA COGNITIVA:
Modelos de procesamiento cognitivo del lenguaje y los discursos:
Karmiloff-Smith (1994, 2005); Riviére (2003); Vigotsky-Luria (1998, 1999);
Ardila-Ostrovsky (2004)

Procesos psicolingüísticos escritos:


Comprensión Lectora y Producción Escrita

Procesos Psicológicos de Procesos Psicológicos de


Comprensión Lectora Producción Escrita
• García Madruga (2005, 2006) • Bereiter y Scardamaglia (1983)
• León (2003) • Flower y Hayes (1996)
• Carretero, M., Almaraz, J., Fernández • De Beaugrande y Dressler (1997)
Berrocal (1995)

Rivière (1992, 2003), Vega y Cuetos (1999)

B) LINGÜÍSTICA DEL TEXTO Y ANÁLISIS DEL DISCURSO SOCIO-COGNITIVOS:


Teorías y modelos lingüísticos de los textos y la lectura:
Van Dijk y Kintsch (1998); Van Dijk (2001, 2008); J.M. Adam (2003, 2006); De
Beaugrande y Dressler (1997); De Beaugrande (2002); Marotto-Duarte (1999).
Teorías y modelos lingüísticos de los textos y la escritura:
De Beaugrande y Dressler (1997); Bereiter y Scardamaglia (1983); Flower y Hayes (1996).

Texto como Categorización Conceptual


o
Proceso y producto cognitivo de la organización
del Sistema de la/s Lengua/s
Problema

Texto como proceso-producto cognitivo comunicativo y categoría lingüística. Discurso


de Divulgación: (ejemplo, el discurso académico) solapamiento de las categorías
conceptuales de:
• Escritura (historia de la escritura como tecnología), procesos de producción y
comprensión textual.

RE-PRESENTAR LOS TEXTOS

47
Guía-Modelo de evaluación

“La importancia de las estrategias metalingüísticas y metacognitivas implicadas en la


escritura de textos académicos, en el ámbito de la unvm”

1)  Aspectos superestructurales de la Reconocimiento del formato textual-género discursivo  10%


organización textual

2)  Aspectos macroestructurales de la Construcción y jerarquización de ideas principales  30%


organización textual: Coherencia

3)  Aspectos microestructurales de la Procedimientos cohesivos Construcción sintáctica  10%


organización textual: Cohesión
Aspectualidad verbal  10%
Otros procedimientos  10%
cohesivos

 20%
4)  Re-elaboración temático-conceptual
 5%
5)  Aspectos formales Ortografía
 5%
Puntuación
 100%
Total final

Figura 2. Modelo grilla de análisis

Descripción del modelo de análisis 1-Aspectos superestructurales


para producciones escritas de la organización textual

Lo primero que cabe señalar con relación a esta propuesta Comprende el reconocimiento del formato textual y las
para el análisis y evaluación de datos referidos a los pro- particularidades discursivo-enunciativas propias de los
cesos metalingüísticos y metacognitivos de la escritura géneros discursivos académicos: explicaciones de divul-
académica es la elección del “tipo” textual explicativo y de gación académica, resumen y argumentaciones.
los géneros discursivos: resúmenes, explicaciones y argu- Sobre este punto, Adam (1999, 2000, 2006) considera
mentaciones. que los textos se estructuran a partir de distintos tipos
De acuerdo con Zamudio y Atorresi (2000), el texto de secuencias: narrativa, descriptiva, argumentativa,
explicativo como tipo textual es una configuración o es- explicativa y dialogal, a las que considera un esquema o
quema definido por características internas: el modo de superestructura global cognitiva que poseemos los sujetos
organizar la información –estructura-, los procedimien- como resultado de conocimientos personales y culturales.
tos cognitivos o tipos de razonamiento que conlleva esta En otras palabras, como sujetos cognoscentes disponemos
organización y las estrategias discursivas y recursos lin- en la memoria de esquemas psicológicos que coinciden con
güístico- gramaticales específicos, fundamentados en la las superestructuras textuales, producto de experiencias
investigación bibliográfica de la primera etapa. En tanto culturales. Esto nos permite cuando leemos o escribimos,
género discursivo, la explicación adquiere particularida- ordenar la información sobre el esquema mental e ir orde-
des lingüístico-discursivas en los enunciados explicativos nando y jerarquizando las ideas.
de textos académicos, discursos de divulgación científica, Asimismo, Adam define a la secuencia como una es-
discursos y textos científicos, resúmenes, y discursos di- tructura, una red relacional jerárquica, relativamente
dácticos, entre otros. autónoma, que posee organización interna propia y puede
estar en relación de dependencia o independencia con el
texto. La unidad constitutiva de la secuencia es la macro-

48
proposición formada por proposiciones y, en el texto expli- predominan las secuencias descriptivas y las secuencias
cativo, se organiza a partir de tres fases: una fase inicial explicativas aparecen de modo secundario.
de pregunta o planteamiento del problema, que motiva la
pregunta ¿por qué x? o ¿cómo se produce x?; una fase reso-
lutiva o de respuesta explicativa que incluye razonamiento 2-Aspectos macroestructurales
lógico; y una fase final de conclusión-evaluación. de la organización textual
En este modelo las macroproposiciones del esquema de
la secuencia explicativa prototípica son: Involucra la construcción y jerarquización (reconocimien-
to en el caso de la lectura) de las ideas principales, a partir
0. Macroproposición explicativa 0 (facultativa): des-
del modo en que se conectan y relacionan las macropro-
cripción inicial destinada a introducir el tema o la
posiciones temáticas de la/s secuencias/s prototípicas para
cuestión problemática. Esquematización inicial.
asegurar la progresión y coherencia de la información del
1. Macroproposición explicativa 1: planteamiento contenido textual. Este aspecto permite la ejecución de in-
del problema (¿por qué?, ¿cómo?) Problema (pregun- ferencias conectivas y elaborativas, durante los procesos
ta). de producción y, sobre todo, de comprensión.
Las inferencias conectivas sirven para conectar en un
2. Macroproposición explicativa 2: explicación o res-
todo coherente las ideas del texto más allá del nivel de la
puesta (Porque…) Explicación (respuesta).
oración. Consiste en conectar “lo ‘dado’ con lo ‘nuevo’, me-
3. Macroproposición explicativa 3: conclusión-eva- diante las inferencias ‘puente’ (bridging), también llama-
luación. Conclusión (evaluación). (Zamudio y Ato- das inferencias “‘hacia atrás’ ya que consiste en conectar
rresi, 2000: 56) la información nueva con la información dada anterior-
mente” (García Madruga, 2006: 84). Además de las infe-
La secuencia prototípica no siempre aparece en forma rencias puente, otras inferencias conectivas importantes
completa en los textos, por ejemplo, la tercera macropro- son las inferencias referenciales anafóricas y las causales.
posición correspondiente a la conclusión-evaluación suele La cantidad de recursos cognitivos que demandan estas
omitirse, o puede aparecer como un punto de partida que inferencias conectivas dependen del dominio de los proce-
luego se trata de explicar. También la pregunta-macropro- dimientos de cohesión lingüística y el modo en que, tanto
posición 1- puede ocultarse, o incluirse en forma implícita productores como lectores, activan sus habilidades cogni-
en el texto. La respuesta a la pregunta que desencadena la tivas.
explicación o respuesta, es decir, la macroproposición ex- Las inferencias elaborativas u opcionales, relaciona-
plicativa 3 es la fundamental, y debe elaborarse a partir de das con la coherencia global, se corresponden con el plan
razonamientos lógicos. Estos últimos se evidencian en los de trabajo e intencionalidad del productor textual, y se
procedimientos de cohesión textual como los conectores, realizan durante la recuperación del significado del tex-
o la perspectiva funcional de la oración. to completo o segunda lectura de lo leído. Requieren más
En los textos concretos, las secuencias explicativas no tiempo y recursos cognitivos dado que se realizan según la
suelen aparecer de una manera pura sino mezcladas con aplicación de estrategias específicas e implican un trabajo
otras secuencias o dentro de otros tipos de secuencias, por activo, por parte del escritor sobre el significado del texto
lo cual desde este enfoque el análisis de las explicaciones y, de control metacognitivo, por parte del lector.
textuales se plantea en términos de éstas como secuencias
prototípicas englobantes, o de la función que desempeñan
en el marco de otra secuencia, en el caso de que la secuen- 3- Aspectos microestructurales
cia explicativa se encuentre incluida. En otras palabras, de la organización textual
podrá hallarse una secuencia descriptiva prototípica que
incluya una secuencia explicativa y a la inversa. Implica la puesta en texto de los procedimientos de cohe-
Entre los textos que presentan secuencias explicativas sión y coherencia textual. En términos De Beaugrande y
prototípicas más puras se encuentran los discursos cien- Dressler (1997), una adecuada, eficaz y eficiente conexión
tíficos y técnicos. El discurso de divulgación científica y entre las fases de los procesos de comprensión y produc-
el discurso didáctico adoptan otras características que lo ción textual.
acercan más a la modalidad expositiva que explicativa. Se ponderaron tres procedimientos de cohesión espe-
La diferencia más importante entre explicación y ex- cíficos: construcción sintáctica, aspectualidad verbal y
posición reside en que la exposición no se organiza como pronominalización, ya que según los autores citados, el
un tipo de razonamiento que incluya relaciones causales, sentido textual se construye a partir de la activación de
inferenciales o implicacionales, sino que se presenta como la información conceptual contenida en las expresiones
un tipo de discurso enciclopédico, que no adopta un forma- lingüísticas.
to prototípico o secuencia prototípica de base, clara. En él

49
4- Re-elaboración temát ico-conceptual tructura y proceso. Estudios sobre el discurso I. Barcelona,
Gedisa.
Refiere al grado de elaboración de los conceptos y su es-
De Beaugrande, R. (2002) “La teoría y la práctica en los es-
tructuración temática. En el caso de los textos explicati-
tudios discursivos: Lingüística del texto y Análisis del
vos, particularmente del resumen, la reelaboración temá-
Discurso”, en Curso Internacional: Análisis del Discurso
tico conceptual del texto fuente, se torna en la estrategia
en las Ciencias Sociales, la Cultura y el Territorio. Memo-
que permite evaluar el grado de comprensión del tema y de
rias. Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, Universidad Na-
la relación entre los aspectos macro y micro-estructurales.
cional de Colombia.
De Beaugrande, R. y Dressler, W. (1997) “Nociones bási-
5-Aspectos formales cas” y “Capítulo III”, en Introducción a la lingüíst ica del
texto. Barcelona, Ariel.
Comprende el empleo de una adecuada ortografía y signos
Van Dijk, T. (2006) “De la gramática del texto al Análisis
puntuación con relación a la estructuración temática y el
Crítico del Discurso. Una breve autobiografía acadé-
grado de legibilidad que requieren los textos académicos
mica”, página web de aled, versión 2.0., diciembre de
escritos.
2006, Universidad de Pompeu Fabra, Barcelona.

Análisis de producciones escritas


Artículo 1:
El corpus analizado está integrado por veinte (20) textos
escritos correspondientes a alumnos de los últimos años [1. La Lingüíst ica del Texto, ayer y hoy]
del Profesorado de Lengua y Literatura, veinte (20) Textos
producidos por los alumnos de la cátedra de Semiótica au- [2. La Lingüíst ica del Texto ha sido un campo de constantes
diovisual, del cuarto año de la Licenciatura en Diseño y cambios e interacciones con el paso de los años.] [3. Desde el
doscientos (200) escritos de los ingresantes a las diferentes estudio de las oraciones en sí mismas, separadas del contexto
carreras de la unvm. Incorporamos este último segmento de producción comunicat iva, al interjuego con otras disciplinas
al corpus, no previsto originariamente, a fin de contrastar que permit ieron ampliar sus ámbitos de estudio y acercarla a
el modo en que ejecutan procesos de escritura estudiantes la “vida real”.]
avanzados y quienes aspiran a ingresar (insumo generado [4. En sus comienzos, la Lingüíst ica del Texto se encontró]
a partir del proyecto “La comprensión lectora en la unvm”, con el problema de qué datos estudiar y cómo estudiarlos.
del que participamos tres integrantes de la presente inves- Teniendo en cuenta la época y los escasos medios tecno-
tigación). lógicos con los que se contaba, [5. los lingüistas, terminaron
Los textos seleccionados ref lejan los modos en que los considerando que la unidad de análisis máxima debía ser la
estudiantes abordan la producción escrita y sus represen- oración. Los mismos invest igadores fueron quienes crearon
taciones implícitas y explícitas acerca del significado de la datos art ificiales a través de su propia intuición.]
escritura como estrategia de adquisición y difusión de los De esta manera, se dividió [6. el] lenguaje en distintos [7.
conocimientos académicos. compartimentos] que se dedicaron a estudiar los diversos
aspectos de la lengua. [8. Se formularon reglas subyacentes
dest inadas a indicar lo “correcto” o “incorrecto” en las formas
Profesorado en Lengua y Literatura de construir las oraciones.]
Sin embargo, en una etapa posterior, los lingüistas co-
Alumnos de tercero y cuarto año de la materia “Lingüísti- menzaron a notar que sus teorías no se correspondían
ca del Texto y Análisis del Discurso” con lo que sucedía en la comunicación real. De esta ma-
nera, surge una nueva concepción del texto, ya no como
Consigna de escritura: Escribir un artículo académico una secuencia de oraciones, [9. sino como “un acontecimien-
que no exceda las cinco páginas referido al contenido de to comunicat ivo que cumple siete normas de textualidad]. Si
la bibliografía que se detalla. Presentar el escrito tenien- un texto no satisface alguna de esas normas entonces no
do en cuenta los aspectos formales (empleo Normas apa puede considerarse que ese texto sea comunicativo.” (De
bibliografía y citas; interlineado 1,5; letra Arial 11 para el Beaugrande, Dressler, 1997, p. 35) Es decir, el problema
cuerpo y, para títulos y subtítulos negrita Arial 12). pasó a ser el estudio [10. de] cómo funcionan los textos en
la situación comunicativa.
Bibliografía: Dentro de las normas de textualidad, encontramos dos
De Beaugrande, R. (2001) “La saga del Análisis del Discur- nociones centradas en el [11. texto: la cohesión y la coheren-
so”, en van Dijk, T. (Comp. 2001) El discurso como es- cia; y otras nociones centradas en el usuario: la intencionali-

50
dad, la aceptabilidad, la informat ividad, la situacionalidad y [7].  Error conceptual, las divisiones que se produjeron en
la intertextualidad.] el campo de las Ciencias del Lenguaje para el estudio del
[12. También existen, en el proceso comunicat ivo mismo], Lenguaje, dieron origen a las diversas interdisciplinas de
principios regulativos que controlan la comunicación tex- la Lingüística Aplicada: Psicolingüística, Sociolingüística,
tual: eficacia, efectividad y adecuación. [13. Nos permiten] Análisis del Discurso, Lingüística del Texto, entre otras.
preguntarnos: “¿qué tan eficiente es el texto para ser pro-
[8]. Error conceptual. El “se” impersonal introduce una
ducido y recibido fácilmente, qué tan efectivo es en pro-
pro-forma lingüística que omite designar a la Gramática
mover las intenciones y los objetivos, y qué tan apropiado
Generativa, Teoría de la sintaxis de Chomsky, como pers-
es ante el contexto, los participantes y la situación?” (De
pectiva fundante de la Psicolingüística y los estudios Cog-
Beaugrande, 2002, pp. 135-136)
nitivos. La inadecuada construcción sintáctica no muestra
[14. Como se puede ver], el campo de la Lingüística del
relación entre las dos oraciones o enunciados.
Texto ha llegado a ser una disciplina que se basa en la si-
tuación comunicativa real, promueve el trabajo interdis- [9].  Error de conexión. El empleo del conector adversativo
ciplinario y busca aplicar sus descubrimientos a distintas no obstante justifica la enunciación del Texto como cate-
problemáticas sociales. goría de estudio, sin reparar que en el párrafo anterior se
consideró como unidad de análisis a la oración.
Bibliografía
[10].  Acerca de. Asimismo, falta aclarar que el estudio de
De Beaugrande, R. (2001) “La saga del Análisis del Discur-
la textualidad como proceso y producto, a partir de siete
so”, en van Dijk, T. (Comp. 2001) El discurso como es-
normas y tres principios (no se mencionan), es el centro
tructura y proceso. Estudios sobre el discurso I. Barcelona,
de la Teoría de De Beaugrande y Dressler (1997) y De Beau-
Gedisa.
grande (2000).
De Beaugrande, R. (2002) “La teoría y la práctica en los es-
[11].  La informatividad no corresponde al usuario en tér-
tudios discursivos: Lingüística del texto y Análisis del
minos de comunicación, sino al procesamiento de la infor-
Discurso”, en Curso Internacional: Análisis del Discurso
mación, es una norma computacional.
en las Ciencias Sociales, la Cultura y el Territorio. Memo-
rias. Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, Universidad Na- [12].  Error conceptual, los principios regulativos corres-
cional de Colombia. ponden a la Teoría de la Textualidad de De Beaugrande y
Dressler que los atribuyen al texto y no al proceso de co-
De Beaugrande, R. y Dressler, W. (1997) Introducción a la
municación.
lingüíst ica del texto. Barcelona, Ariel.
[13].  Elipsis de sujeto. Pronominalización catafórica.
Referencias artículo 1: [14].  Error de conexión discursiva para cierre de un artí-
culo explicativo. Se cierra con una generalización que no
[1].  No corresponde al registro del género discursivo.
corresponde a la evolución de los estudios de la disciplina.
[2].  Error de puntuación, ya que correspondería coma y no
punto y seguido. El inicio no corresponde al estilo discur- Comentario artículo 1: el análisis muestra que el estu-
sivo de un artículo académico, sino al narrativo, al igual diante –autor del mismo– no domina aún las caracterís-
que el título. ticas superestructurales y microestructurales del tipo y
género explicativo. Por ello, los procedimientos lingüísti-
[3]. Error en la conexión intraoracional. El inicio de la
cos de cohesión o sintaxis textual no dan cuenta de una
segunda oración con un nexo preposicional de causali-
macroestructura coherente, que active la red conceptual
dad-consecuencia no desarrolla el contenido de la prime-
relacional que requiere la elaboración de la progresión te-
ra oración como debiera. Continúa con registro de estilo
mática.
narrativo.
[4].  Se personaliza a la Lingüística del Texto como sujeto
sintáctico y enunciativo. En este último caso, se ref leja Artículo 2:
la falta de dominio de los procedimientos lingüísticos de
enunciación propios de los géneros y textos explicativos. [15. Las siete normas de textualidad según
Robert de Beaugrande]
[5].  Error conceptual, la unidad de análisis no es la oración
para la Lingüística del Texto sino el Texto y el concepto de En este artículo [16. nos] concentraremos en las siete nor-
textualidad, a partir de la conectividad. mas de textualidad. Para ello hemos seleccionado un frag-
[6]. Al.

51
mento del libro La emoción de Ricardo Campa.23 Creemos términos de De Beaugrande] es la razón por la cual la con-
que dicho fragmento se justifica por la complejidad que el ciencia es conceptual, porque es lingüíst ica.
autor introduce en las oraciones. [17. La producción de este [23. Está claro] a su vez que el productor al escribir que la
artículo solo intenta mostrar cómo se ajustan las normas de conciencia es conceptual está dando entrada a su segunda
textualidad a cualquier artículo, siendo en este caso un artículo oración en la cual se hace evidente que el acontecimien-
de raigambre filosófica. El texto comienza así:] to B se planea a partir del A, es decir por el hecho mismo
de ser conceptual no puede precisarse el nacimiento de la
La conciencia es una noción lingüíst ica y por ende con-
conciencia.
ceptual. La dificultad de establecer una fecha de naci-
miento de la conciencia, de evocar su advenimiento como
B. La dificultad de establecer una fecha de nacimiento de la
un acontecimiento que colma de esperanza y de desespe-
conciencia
ración la condición humana, agrava el conocimiento de
un fundamento inexplicable en sus constructos o en sus También cabe destacar que en estas oraciones se realizan
componentes (genét icos, orgánicos). inferencias ya que el concepto lingüíst ica y el término con-
ceptual es aplicado al movimiento posmoderno en el que el
Un texto para que sea comunicativo debe cumplir siete conocimiento es un constructo mental.
normas de textualidad. La primera norma que analizare- Las normas antedichas corresponden al texto en sí
mos es la de cohesión. Según de Beaugrande “la cohesión mismo. En cambio la tercera norma llamada intencionali-
establece las diferentes posibilidades en que pueden conec- dad corresponde al productor textual. En los textos cien-
tarse entre sí dentro de una secuencia los componentes de tíficos la coherencia y la cohesión son consecuencia de la
la superficie textual, es decir, las palabras que realmente intención del productor textual; no ocurre lo mismo en la
se escuchan y se leen”24 dicha cohesión descansa sobre de- conversación espontánea, en la que se permite la falta de
pendencias gramaticales. Esto quiere decir que si inverti- cohesión. En el texto que [24. nosotros] tomamos como refe-
mos o reorganizamos las secuencias superficiales del texto rencia, el autor tiene como intención mostrar la dificultad
causaría alteraciones importantes. Por ejemplo si [18. yo que conlleva el análisis de la conciencia. [26. [25. Teniendo]
modifico] la primera oración y coloco: La conciencia y por en cuenta la complejidad innecesaria de su escritura, la cual
ende conceptual es una noción lingüíst ica, altero el significa- obstaculiza la buena interpretación.] Bien podría escribirse:
do total de la frase, primero porque supondría que la con- la noción de conciencia es una construcción lingüíst ica. El co-
ciencia es conceptual por el solo hecho de ser conciencia y nocimiento de su estructura física se torna más difícil de enten-
no por ser una noción lingüíst ica. der por no poder delimitar el momento exacto de su nacimiento;
La coherencia es la segunda norma de textualidad y “re- pero la idea de haber elegido dicho texto es para ver las
gula la posibilidad de que sean accesibles e interactúen de diferentes escrituras y cómo se adaptan a las normas de
un modo relevante los componentes del mundo textual, es textualidad, sin embargo siempre está el hecho ineludible
decir, la configuración de los conceptos y las relaciones que de la intención del escritor, que puede crear dificultades
subyacen bajo la superficie del texto”25 adrede para crear ciertos matices literarios.
[19. De Beaugrande] explica que el receptor de un texto La cuarta norma es la de aceptabilidad y se refiere di-
puede activar los conceptos y establecer relaciones [20. rectamente a la actitud del receptor. Es cierto que el re-
entre ellos]. [21. Si bien el concepto es un término que llevó ceptor intenta mantener la cohesión y la coherencia al [27.
a filósofos y lingüistas, tanto de la escuela realista como de la tolerar] las imperfecciones del material textual, también
escuela idealista, largos años de discusión, aquí simplemente es cierto que para mantener la cohesión y la [28. coheren-
se lo ut iliza para designar “una estructuración de conocimien- cia] el receptor debe darle desde su sentido, [29. sent ido al
tos”26.] En la frase: texto.] Esto se observa en el pasaje antedicho ya que la [30.
primer] oración puede ser aceptada con facilidad por su to-
A. La conciencia es una noción lingüíst ica tal coherencia y cohesión mientras que en la segunda parte,
y por ende conceptual complejizada con oraciones largas y perífrasis complejas
puede bajar el nivel de aceptabilidad , pero dejándole la ta-
Se produce una activación del concepto lingüíst ica, y en
rea al mismo receptor de agregarle sentido al texto. En la
el caso de que se tratase de un lector con conocimiento
frase: [31. el conocimiento de un fundamento inexplicable,
lingüístico no dudará del hecho de que la lingüíst ica está
el lector t iene que inferir que existe un conocimiento de la con-
relacionada con el estudio de los signos y por lo tanto si la
ciencia pero que es inexplicable.] Dicho proceso se hace [32.
conciencia es un signo, por lo mismo es conceptual. [22. En
casi de manera inconsciente], pero pueden agregar al lector
23 Campa R: La emoción. La filosofía de la infidelidad. Editorial Sudame- entusiasmo e interés en el material textual, con lo cual
ricana. Argentina. Buenos Aires. Año 1988. puede ser un recurso positivo para la producción de textos.
24 De Beaugrande, R. y Dressler, W: Introducción a la lingüíst ica del La quinta norma de textualidad es la informatividad.
texto. Barcelona, Ariel. 1997. Pág. 35
25 Ídem p., 37 [33. De Beaugrande] sostiene que “…cualquier texto es (…)
26 Ídem p. 37

52
informativo”27 y que de la misma manera que “procesar [16].  Se asume una posición desde el plural mayestático, a
secuencias con un alto nivel informativo requiere realizar fin de incluir al receptor, registro argumentativo por ex-
un esfuerzo mayor”28 por lo mismo un nivel bajo de infor- celencia. Concentraremos no evoca léxica y conceptual-
matividad puede perturbar e incluso provocar un rechazo mente al objetivo del trabajo: centrarse o focalizar en los
del texto. alcances de la Teoría de De Beaugrande y Dressler.
En nuestro texto la informat ividad es sumamente baja
[17]. Discursivamente corresponde emplear el procedi-
ya que en la [34. primer] parte se dice algo ya conocido a
miento de ejemplificación y no el comentario coloquial.
nivel lingüístico, y en lo que resta no agrega nada especifi-
co a la explicación del hecho de la conciencia, solo afirma [18]. La enunciación discursiva en primera persona del
que existe dificultad [35. para explicarla, lo cual perturba su singular es propia de los textos y géneros argumentativos,
lectura. En este caso el receptor del texto se puede ver desmot i- no de los explicativos. Además, se pasa de la primera per-
vado y tentado a abandonar su lectura.] sona del plural a la del singular, las connotaciones discur-
La sexta norma enunciada es la situacionalidad y se re- sivo-pragmáticas son diferentes en cada caso.
fiere a la situación en la que se presenta el texto. [36. En
[19].  (…) y Dressler explican.
nuestro caso] se trata de un texto de contenido filosófico que
tiene en [37. cuanta] avances científicos interdisciplinarios. [20].  A partir de las conexiones o relaciones de conectivi-
En este sentido [38. el texto es] apropiado por usar términos dad (cohesión) de la superficie textual.
como conciencia que es un término filosófico, y otros como
[21].  No se enmarca dentro de la teoría de De Beaugrande y
componentes genét icos y orgánicos términos utilizados por
Dressler, ya que explicitan al término concepto de acuerdo
la ciencia actual. A su vez el autor publica dicho libro pen-
con la Lingüística Cognitiva.
sando en un público interesado en dicha lectura y creyen-
do que su aporte abre un espacio de [39. dialogo.] [40. Con [22].  De Beaugrande y Dressler no dan tales fundamentos.
lo cual] también se torna apropiado ya que no habrá lector Es una inferencia del escritor-alumno inf luenciada por
que al ver el nombre del autor y el título del libro no sepa otros conocimientos previos.
la temática analizada.
[23].  La afirmación es un procedimiento lingüístico-dis-
La séptima y última norma de textualidad se llama la
cursivo propio de la argumentación, pero no del género
intertextualidad y “se refiere a los factores que hacen depen-
“explicativo”.
der la utilización adecuada de un texto y del conocimien-
to que se tenga de otros textos anteriores. [41. Analizando [24].  Retoma la primera persona del plural.
nuestro ejemplo es necesario tener en cuenta textos de t ipo fi-
[25].  Error de conexión con la oración anterior e inadecua-
losóficos y científicos porque el autor para la elaboración de su
do empleo del gerundio.
libro ha consultado textos de dicha índole.]
[42. Hemos comprobado] que no existe un texto comuni- [26].  La estructuración sintáctica de la oración hace ilegi-
cativo que de una u otra forma no se adapte a las normas ble su significado.
de textualidad propuesta por [43. R. de Beaugrande]. Dichas
[27].  Tolerar es un subjetivema por parte del alumno, ya
normas toman en consideración tanto la [44. realidad del
que dicho término no aparece en la teoría referenciada.
texto en sí mismo como la realidad que permanece fuera del
texto mismo.] [45. Es por ello que al haber una realidad externa [28].  (…) que el (…).
al texto y en relación directa con el receptor, el texto se torna
[29].  Error de construcción sintáctica y también concep-
en cierta medida dependiente del receptor. Y este es el logro de
tual, debido a que no se refieren a la coherencia como “el
las normas de textualidad: haber salido de los límites del texto
sentido del texto”, De Beaugrande y Dressler. La coherencia
para ingresar en una relación amistosa con las mentes que lo
como “sentido del texto” es una noción de la divulgación de
reciben.]
la teoría de Van Dijk y Kintsch (1978).
Bibliografía [30]. Primera.
De Beaugrande, R. y Dressler, W. (1997) Introducción a la
[31].  En esta frase debería aclararse que es una elabora-
lingüística del texto. Editorial Barcelona.
ción personal del alumno que combinó conceptos de Cam-
pa con De Beaugrande y Dressler.
Referencias artículo 2:
[32].  No en el caso de la escritura que es totalmente cons-
[15].  La autoría de las normas corresponde a De Beaugran- ciente y en el “Capítulo III” de Introducción a la lingüíst ica
de y Dressler, 1997. del Texto, de De Beaugrande y Dressler se pormenoriza.
[33].  (…) y Dressler, sostienen (…).
27 Ídem p., 43
28 Ídem p., 43 [34]. Primera

53
[35].  Empleo indistinto del plural y la tercera persona, en Introducción
este caso, prescriptivamente.
Para este trabajo nos iniciaremos en el estudio de las teo-
[36].  El plural mayestático da cuenta de conocimiento te- rías que permitieron la comprensión para un posterior [46.
mático en forma de cita de autoridad. análisis de los signos.] Para fijar [47. un comienzo en esta inves-
t igación] decidimos leer a Peirce, pionero en el desarrollo
[37]. Cuenta.
de la corriente semiótica. Más adelante, [48. por cuest iones
[38].  Elipsis de sujeto, no puede inferirse el texto al que se cronológicas] nos fijaremos en Saussure quien nos habla de
refiere. los signos relacionados dentro de una esfera social, a este
fenómeno se lo llama “semiología”. Ambas [49. corrientes
[39]. Diálogo.
estudios] sin haberse valido una de la otra representan hoy
[40].  Error de conexión. los signos y su accionar en el lenguaje dentro de la socie-
dad.
[41].  Analogía no desarrollada.
[42].  Aseveración argumentativa sin fundamentación. El signo según Peirce.
[43].  (…) y Dressler (…). Peirce basa sus estudios en la búsqueda de una teoría del
conocimiento a partir de la construcción y fundamenta-
[44].  Hasta este párrafo en el artículo no se planteó esta
ción del signo, los cuales parecen ser el medio exclusivo
distinción.
por el cual obtenemos el conocimiento
[45]. Es una interpretación muy personal del aporte de El autor llama semiosis a un proceso tríadico en el cual
las normas de la textualidad de De Beaugrande y Dress- delimita tres elementos formales. El signo, el objeto y el
ler, porque la teoría no da cuenta de este comentario. Se interpretante.
omitieron los tres principios regulativos que son tan im- [50. A cont inuación, cita textual de concepto de Peirce sobre
portantes como las normas. el signo:]
Defino al signo como algo que es determinado en
Comentario artículo 2: el estudiante revela en su escrito
su calidad de tal por otra cosa, llamada su objeto, de
conocimientos previos de carácter filosófico que interfie-
modo tal que determina un efecto sobre una persona,
ren en la elaboración temático-conceptual de la fuente bi-
efecto que llamo su interpretante, vale decir que este
bliográfica. A nivel superestructural, el escrito se encuen-
último es determinado por el signo en forma media-
tra organizado en forma argumentativa y, también a nivel
ta. (Peirce, C.S, Obra lógico-semiót ica. Madrid, Taurus,
microestructural, por los procedimientos lingüístico-dis-
1987, pág. 139).
cursivos que emplea.
En el micro-nivel se observan discontinuidades y ruptu-
Así el signo se convierte en aquello que representa a un
ras entre las formas léxicas y sintácticas con relación a las
objeto para su interpretación.
semánticas y a la organización macroestructural.
Existen ciertas condiciones para [51. este] algo sea un sig-
no, para empezar el signo debe tener cualidades que sirvan
para distinguirlo, debe tener interpretante y una semió-
Licenciatura en Diseño y tica tríadica. El interpretante, traducción de un signo en
Producción Audiovisual otro signo más desarrollado o equivalente con el significa-
do del primer signo. Podemos distinguir tres tipos de inter-
pretantes: un interpretante inmediato, un interpretante
dinámico y un interpretante final. El objeto es aquello a
Escrito 3 lo que el signo está representando, se distinguen dos tipos
[52. bá!icamente] de objetos: el inmediato y el dinámico.
Alumnos de cuarto año de la cátedra Semiótica audiovi-
De esta forma los tres elementos tríadicos se configuran
sual
en una semiosis infinita, ya que el interpretante es un sig-
Consigna de escritura: Sistematizar en un escrito expli- no en el lugar de un objeto ligado a otro interpretante que
cativo, aspectos teóricos y / o de análisis metodológico re- a su vez es un signo y así de manera ilimitada.
feridos a la Semiótica audiovisual.
El signo lingüístico para Saussure
Semiótica y Semiología. Semiótica audiovisual.
Saussure, fundador de la lingüística moderna, a través de
la semiología, [53. sentara] los conceptos básicos para el
estudio de los signos en el seno de la vida social.

54
Saussure articula los conceptos en binomios, pero opo- sino que son una [57. triada] ya que se relacionan [58. los tres
niéndolos de manera dicotómica. elementos] de manera multilateral entre ellos. No se debe
Es inconcebible para Saussure el signo lingüístico como analizar de manera [59. binaria,] como lo hace en el mo-
el nombre de una cosa, como unidad, sino que es la unión delo de Saussure, el modelo de Peirce, ya que poseen una
de términos, un concepto y una imagen acústica. base o una naturaleza diferente tal como lo mencionamos
[54. A cont inuación, cita textual de concepto de Saussure anteriormente
sobre el signo lingüíst ico:] A continuación [60. de formas más esquemát icas] vere-
mos las principales diferencias entre los autores.
El signo lingüístico es, pues, una entidad psíquica de
dos caras, que puede representarse por las siguien-
tes figuras: concepto e imagen acústica. Estos dos Semiótica Semiología
elementos están íntimamente unidos y se reclaman Charles Sanders Peirce Ferdinand de Saussure.
recíprocamente. (...) Y proponemos conservar la pa- (1839-1914) (1857-1913)
labra signo para designar el conjunto y reemplazar
concepto de imagen acústica respectivamente con Primeros estudios 1867- Primeros estudios 1907-
significado y significante. (Curso de Lingüíst ica Gene- 1868 1908
ral, 91-93) Proviene de planteamien- Proviene de la lingüística
tos acerca de la lógica y la psicología en general
De esta forma el autor considera al signo lingüístico una
entidad integrada por dos planos, significado y significan- Estudia las propiedades Estudia los signos en el
te, y que posee dos características enunciadas en dos prin- generales de los sistemas seno de la vida social.
cipios, la arbitrariedad del signo lingüístico y el carácter de signos, como base para
lineal del significante. Su arbitrariedad hace referencia a la comprensión de toda
la unión entre el significado y significante, la cual al prin- actividad humana.
cipio es inmotivada. A su vez Saussure plantea que esta ar-
bitrariedad puede ser absoluta o relativa dependiendo del Referencias escrito 3:
grado de motivación del conjunto de signos de una lengua
[46].  No se menciona cuáles son esas teorías, se omiten los
(cuanto más motivados menos arbitrariedad). El segundo
referentes: Semiótica y Semiología.
principio, la linealidad del significante, está relacionado
con la naturaleza acústica del significante que se permi- [47].  Error conceptual respecto del género discursivo-tex-
te solamente en el tiempo de manera lineal y sucesiva a tual sobre el que debe adecuarse el escrito.
través de los fonemas (unidades mínimas y autónomas de
[48].  Ambigüedad léxica que omite información.
plano de la expresión).
[55. El autor además ref lexiona sobre cuál es el objeto de [49].  Falta conexión con los dos referentes: semiótica (que
estudio propio de la lingüíst ica. La lengua se diferencia del len- no se mencionó hasta el momento, salvo en el título).
guaje en tanto que solo es una parte de el, el lenguaje es conside-
[50].  No aplica el procedimiento de cita formal que corres-
rado en su conjunto (conjunto de imágenes verbales acumula-
ponde para un trabajo académico.
das en los individuos). Así la lengua es parte del lenguaje social
que existe en virtud de una especie de pacto entre los miembros [51].  Se omitió el conector de subordinación “que”.
de la comunidad.]
[52]. Básicamente.
Diferencias entre nociones de signo y ambos autores [53]. Sentará.
Las diferencias conceptuales entre ambas nociones del [54].  Nuevamente incurre de modo improcedente al citar.
signo residen inicialmente en el enfoque y concepción de
[55].  No caracterizó a la Semiología.
este; Peirce estudia el signo desde una postura filosófica y
Saussure desde una mirada psicológica y sociológica. [56]. Establecer.
Se podría [56. estableces] como otra diferencia en la con-
[57]. Tríada.
cepción del signo entre ambos autores, los modelos pre-
sentados y la cantidad de componentes que cada modelo [58].  Reiteración innecesaria.
integra.
[59].  Se omitió el referente y no se sabe a qué se refiere.
En la semiología, se establece una dicotomía, una bipar-
tición entre el significado y significante, que relacionados [60].  Corresponde singular: de forma más esquemática.
determinan lo que es el signo lingüístico.
En la semiótica, los tres elementos, no funcionan como Comentario escrito 3: como rasgos sobresalientes de la
partes separadas interrelacionadas de manera recíproca, escritura podemos señalar el empleo indistinto del plural

55
mayestático, en el inicio, de enunciación que se transfor- lebrado. Las grandes secuencias de este modelo ideológico
ma en voz impersonal con el empleo de “se”. Asimismo, la que es el esquema narrativo se convierten en:
organización sintáctica y formal oscila entre la narración
contratocompetenciaactuaciónsanción
y la descripción, mostrando inadecuación al género y tipo
textual explicativo solicitado.
Aplicamos entonces dichos criterios al film de Carol Reed,
diciendo en primer lugar que la película se divide en cua-
tro programas narrativos:
Escrito 4
Programa narrativo no 1:
Análisis estructural del film:
“Llegada del personaje principal (Holly) a Viena”
“El tercer hombre” de Carol Reed
Contrato: comienzan los intentos de Holly para demos-
Elementos de narratividad según [61. Denis bertrand] trar la inocencia de su amigo Harry, al mismo tiempo que
quiere esclarecer los motivos de su muerte.
Éste plantea el modelo actancial, en el mismo podemos
Competencia: Holly no tiene miedo, quiere y sabe investi-
identificar: actante, programa narrativo y esquema na-
gar porque es escritor. Aquí es clave el personaje del ayu-
rrativo.
dante del policía ya que es él el que nos describe las com-
Comenzando por el actante (ilustra el doble movimien-
petencias de Holly.
to deductivo e inductivo de análisis semiótico) y teniendo
en cuenta los tres pares de categoría actanciales que plan- Actuación: Holly comienza a investigar por su parte, hace
tea Greimás: preguntas, observa el lugar donde sucedió, compara los
1. Sujeto-Objeto testimonios de quienes estuvieron en ese momento u ob-
2. Destinador-Destinatario servaron algo como en el caso del portero, etc.
3. Ayudante-Oponente
Sanción: la sanción de Holly es positiva ya que termina
descubriendo la verdad: Harry está vivo y no solo eso, des-
Podemos decir que en el film a tratar todos los personajes
cubre a su vez que no es quien [63. el] cree debido a los ne-
pasan por todas las posiciones y que esto se debe al paso de
gocios que realiza.
un programa narrativo a otro.
En segunda instancia diremos que el programa narra-
En un momento determinado de la historia aparece Anna
tivo es la estructura sintáctica elemental que «le pone mú-
(novia de Harry) y Holly evidencia sentimientos hacia ella,
sica» al paradigma actancial, a través de la relación entre
al mismo tiempo Anna comienza a tener problemas con
el sujeto y el objeto, erigidos así en hiperactantes. [62. Art i-
los rusos por culpa de Harry (aunque no lo sepa) y su do-
cula] dos enunciados de base: los enunciados de estado (se
cumentación.
basan en los predicados elementales de «ser» y de «tener»)
Esto da inicio a un nuevo contrato y por ende un segun-
y los enunciados de hacer (tienen por función transformar
do programa narrativo.
los estados). Se produce entonces la transformación de un
enunciado de estado a otro con la mediación de un enun-
Programa narrativo no2:
ciado de hacer.
“Holly quiere entregar a Harry”
Para hacer ver el hecho de que los encadenamientos de
acciones incluidas en un relato tienen un sentido y que allí Contrato: este nuevo contrato se genera cuando Holly ha-
se dibuja una intencionalidad a posteriori, Greimás puso bla con la policía (motivan el deber hacer de Holly) y cono-
en evidencia la existencia de un marco general de la orga- ce la verdad sobre Harry. Se siente desilusionado, al mismo
nización narrativa [...]: «el esquema narrativo canónico>> tiempo que engañado y decide colaborar con su captura;
Hay diferentes formas de plantear este esquema; en este además de esta forma también ayudara a Anna.
caso utilizaremos el modelo de esquema n° 2: el marco con-
Competencia: ya tiene las pruebas sobre Harry, quiere
tractual; el cual en un principio plantea un contrato entre
ayudar a Anna y sabe que puede entregar a su amigo y de
el destinador y el sujeto fija los valores y el mandato, el
este modo hará justicia.
sujeto adquiere las competencias (conocimientos, medios
de actuar, etc.) para ejecutar el mandato y cumplir con su Actuación: Holly se encuentra con Harry y logra corrobo-
compromiso realizando la acción (la actuación misma), rar lo que le dicen en la policía.
antes de que el destinador, al final del recorrido, verifique Además para conseguir la libertad de Anna deberá en-
la conformidad de la acción realizada con relación a los tregar a Harry.
términos del compromiso, retribuya o castigue, aportando
Sanción: la sanción es negativa en su totalidad. Holly trai-
así él mismo su contribución al contrato inicialmente ce-
ciona a Harry y Anna lo descubre, a su vez esto hace que

56
en el próximo encuentro no pueda sacarle nada de infor- enunciación basada en Bertrand, autor que no se retoma
mación. en el resto del escrito. Sí se formula una síntesis de la teoría
de Greimás, y no se explicita la relación entre ambos auto-
Aquí se desencadena otro programa narrativo.
res. La aplicación de lo de Greimás narra la organización
de cada programa, es decir, conecta secuencias oracionales
Programa narrativo no3:
al modo de historia narrativa y no como procedimientos
“Harry decide irse”
analíticos de un modelo. Nuevamente, al igual que en el
Contrato: como destinador [64. esta] Anna, que encubre escrito anterior, se registra inadecuación al formato expli-
a Harry para que logre Huir. Holly cumple el roll de des- cativo, requerido por este tipo de análisis.
tinatario, yendo detrás de su amigo para detenerlo; Anna
insiste para que cambie de opinión, logrando que Holly se
aparte por un momento de la investigación. Ingreso unvm, año 2013
Competencia: siente que puede, quiere y que además está
Consigna de escritura: Realice el resumen del texto: “De
en el deber de hacerlo ya que se lo ha prometido a Anna.
la cultura impresa a los hipermedios”. Extensión máxima
Actuación: Yendo camino al aeropuerto (Holly en compa- 25 a 30 líneas.
ñía de la policía) pasan por un hospital en donde puede
dilucidar las consecuencias del accionar de Harry; En ese De la cultura impresa a los hipermedios
momento Holly entra en una nueva competencia que lo
Shakespeare, el gran dramaturgo inglés, vivió en el pe-
lleva a querer entregar a su amigo, ya que se siente en el
ríodo de transición de la cultura manuscrita a la impresa,
deber de hacerlo.
mientras que nosotros, en la actualidad, somos testigos de
Sanción: Es negativa, Holly se siente cobarde por tener la otro cambio en los modos de comunicación: la transición
intención de huir a pesar de las consecuencias de perder del papel a la pantalla, de lo material a lo virtual. ¿Qué se
a Anna. puede decir, entonces, de las ediciones modernas de Sha-
kespeare, por ejemplo, las ediciones que no fueron crea-
Programa narrativo no 4: das para el medio de Gutenberg sino para el entorno de la
“emboscada y muerte de Harry” computadora?
Para el estudio del género dramático en particular el
En este programa narrativo Holly sufre nuevamente una hipertexto parece un medio mucho más convincente que
transformación: Luego de lo sucedido en el programa na- el libro impreso a fin de presentar una literatura destinada
rrativo 3, él toma la decisión de aliarse con la policía para a ser representada (o registrada en forma escrita después
terminar con el negocio turbio de Harry. de la representación), pues este género depende de las com-
plejas relaciones entre el texto escrito de antemano y las
Contrato: Holly se siente desilusionado
versiones representadas. La ventaja del hipertexto radica
Actuación: le tienden una emboscada, esto desemboca en en que un medio electrónico permite combinar lo textual
una persecución en donde Harry es asesinado. y lo visual, es decir, reunir las palabras escritas con los ges-
tos del teatro. Por ejemplo, el Proyecto de Archivo Electró-
Sanción: Por un lado es positiva ya que Holly cumple su
nico de las Obras de Shakespeare del mit (Massachusetts
objetivo, que es terminar con el negocio de su amigo, pero
Institute of Technology),es un proyecto de videodisco que
por otro le resulta negativa ya que Anna lo termina consi-
procura ofrecer enlaces con una diversidad de ediciones
derando como un traidor.
modernas y facsímiles fotográficos de ediciones antiguas
y brindar acceso, también, a muchas representaciones de
Referencias escrito 4:
escenas selectas y adaptaciones para el cine, pero también
[61].  No se retoma en el escrito, sólo se lo menciona en el permite que los usuarios diseñen su propia puesta en esce-
título. na mediante un programa de simulación en computadora
(c.f. Friedlander, 1991; Murray, 1997, pág. 286). La ventaja
[62].  Empleo de Anáfora, correcto.
de semejante comparación de material textual, visual y au-
[63]. Él. ditivo sobre una edición impresa anotada es, precisamen-
te, la amplitud de los documentos que ofrece y la facilidad
[64].  Está, ¿y cómo se justifica teórica y metodológicamen-
con que la nueva tecnología permite salvar la distancia
te que es destinatario?
entre las piezas del poeta en cuanto literatura dramática
y las mismas piezas en cuanto teatro, problema con el que
Comentario escrito 4: como rasgos sobresalientes de la
tuvieron que lidiar durante años muchos profesores de li-
escritura podemos señalar el empleo de una sintaxis co-
teratura cuando daban clases.
rrectamente estructurada, al igual que la voz y persona
de la enunciación. En el título del trabajo se formula una
57
Ahora bien, ¿cualquier obra de Shakespeare sigue sien- siste hacer libros, también altera nuestra experiencia de
do la “misma” obra cuando aparece en un entorno de hi- la lectura y la escritura. Hace varios cientos de años, la
pertexto? La modalidad de lectura de un hipertexto y la imprenta transformó la lectura y la escritura en las socie-
experiencia de leer a Shakespeare son diferentes que en dades occidentales. El hecho de que los cambios provengan
el caso de un texto impreso. La mayoría de las ediciones ahora de la computadora implica que la tecnología es un
impresas del poeta tienen numerosas notas y los editores elemento constitutivo de la experiencia de la lectura.
suelen atenerse a las convenciones de un texto único y cla-
ro que demanda una lectura secuencial. En consecuencia, Karin Littau (2006), “De la cultura impresa a los hiperme-
la edición impresa aparece con la forma de una variante dios”, en Teorías de la lectura, Buenos Aires, Manantial,
de texto escrito, provisto de información adicional, como 2008, pp. 64-68. Adaptación.
notas al pie y comentarios críticos separados del cuerpo
principal del texto por su ubicación al principio o final de
la publicación. Resumen 1. Aspirante a la carrera Licenciatura en
Por el contrario, el hipertexto es un entorno abierto, Administración de Empresas
que puede presentar la “obra en curso”, es decir, puede
ofrecer toda la historia de su producción y transmisión De la cultura impresa a los hipermedios
abriendo ventanas, y presentar así versiones múltiples y
El texto refiere a que el avance en la [65. comunicación], la
simultáneamente. De modo que la ventaja de leer una obra
tecnología [66. y] demás son el [67. constante] de los cambios
en un entorno hipertextual radica, precisamente, en la po-
a la hora de armar un texto, [68. modificarlo, y/o leerlo.]
sibilidad de ver múltiples versiones al mismo tiempo, que
[69. Con el correr del t iempo] se han desarrollados dife-
el usuario puede comparar y completar con notas, pero re-
rentes formas de expresarse [70. lo cual] a veces difiere en
elaborar también para producir una versión híbrida pro-
el fin de [71. dicha obra] como ejemplo tomado el de Sha-
pia. En otras palabras, no sólo ocurriría que ese hipotético
kespeare.
lector tendría una relación no lineal con los textos, pro-
[72. Sabiendo que muy dist into fue la edición de sus obras a
porcionada por la lectura intertextual comparativa, sino
las que podríamos ser en cualquier obra de teatro [73. la cual
que también podría transformarse en editor en la medida
t iene ediciones realizadas por productores. Para así lograr
en que la tecnología le permite armar o, mejor dicho, cons-
como objet ivo, el cual] fue muy dist into al del autor original.]
truir una “versión propia” según le apetezca.
[74. Aunque esto] por un lado puede dejar en segundo pla-
Se ve así la fuerza de lo que intuyeron los que hacen his-
no la idea principal también tiene sus ventajas que permite
toria del libro, los futurólogos y los teóricos de los nuevos
combinar lo textual y lo visual, ofrece enlaces con una di-
medios. El hipertexto no sólo cambia nuestra concepción
versidad en ediciones modernas y facsímiles fotográficos
de la edición sino que es “una encarnación casi incómo-
de ediciones antiguas y brindar acceso, a representaciones
da por lo literal” de la tesis posestructuralista de que los
de escenas selectas y adaptaciones para el cine. Pero tam-
lectores son escritores, como dice George P. Landow (1992,
bién permite que los usuarios diseñen su propia puesta en
pág.34). Pues si el lector hace su propia versión del texto,
escena.
este hecho socava los supuestos críticos sobre la autoría,
Como bien dicho la idea original posee el elemento más
la originalidad y la textualidad que se basan en nociones
“puro”, por así decirlo del autor original [75. pero esto siem-
románticas sobre la obra de arte como expresión única y
pre tiene sus pro, y sus contras.]
original de un individuo dotado. Mientras que el lector
no puede alterar físicamente un texto impreso (marcas al
Referencias Resumen 1:
margen o subrayados), el usuario de computadora puede
reconfigurar un texto o muchos en la pantalla. [65].  Comunicación y debería usarse comunicaciones.
Por lo tanto, la relación que un entorno electrónico,
[66].  No corresponde “y”.
comparado con un medio impreso, establece con el lector
es totalmente distinta en la medida en que la nueva tecno- [67].  ¿Quiénes son el constante?
logía favorece la existencia de un “lector-autor” (Landow,
[68].  Ambas anáforas están bien utilizadas.
1992, pág. 117) El lector se parece a un escritor porque ya
no es un consumidor pasivo de un producto acabado sino [69].  Conector narrativo.
un colaborador, en el sentido más literal de la palabra, en
[70].  Anáfora que no está vinculada con el referente.
el proceso activo de significados. En un entorno hipertex-
tual, tiene muy poco sentido aferrarse a la noción estricta [71].  Previamente no se mencionó obra alguna.
de división del trabajo que deslinda las tareas de crear un
[72].  Error en la construcción sintáctica que hace ilegible
texto, reproducirlo y distribuirlo, división que sólo surgió
el sentido del párrafo.
cuando se industrializó la prensa de imprimir. En este as-
pecto, la tecnología de la computación no se limita a trans- [73].  A partir de problemas en la construcción de las aná-
formar nuestros conceptos de qué es un texto y en qué con- foras, se complica la sintaxis del texto.
58
[74].  No se identifica la proforma “esto” con ningún refe- elaboración temático-conceptual. Según los criterios de
rente. la guía modelo de análisis para producciones escritas que
aplicamos, este escrito evidencia falta de dominio de los
[75].  Registro oral-coloquial
procedimientos de la microestructura textual y de reela-
boración temático-conceptual.
Comentario Resumen 1: El resumen presenta inadecua-
Asimismo, se observa falta de dominio de conexión in-
ción al género y alteraciones en la construcción sintáctica
tra y extra oracional y, de manejo de formas verbales y
que inciden en la organización macroestructural. Según
construcciones sintácticas complejas.
los criterios de la guía modelo de análisis para produc-
ciones escritas que aplicamos, este escrito evidencia falta
de dominio de los procedimientos de la microestructura
Ref lexiones finales
textual y de reelaboración temático-conceptual.
El desarrollo de las habilidades metalingüísticas y meta-
cognitivas, cuyo dominio consciente requiere la escritura
Resumen 2. Aspirante a la carrera Licenciatura en
de textos, se basa en el dominio de las estrategias lingüís-
Desarrollo Local y Regional
tico-discursivas, habilitantes de procesos socio-cogniti-
vos. Precisamente, la concientización de las estrategias
De la cultura impresa a los hipermedios
y procedimientos lingüísticos específicos que demandan
[76. Este Dramatologo] inglés ha vivido en un tiempo de
los textos académicos: conectores, el papel funcional de
transición de la cultura manuscrita a la imprenta, mien-
ciertas oraciones, las formas verbales y pronominales,
tras que nosotros [77. somos test igos de otro modo de comu-
la anáfora, la analogía, la paráfrasis, las elisiones, entre
nicación.]
otras, permite superar la distancia que media entre pro-
[78. En el estudio del genero dramat ico parece un medio mas
cesos y textos básicos como el narrativo, hacia las formas
convincente que el libro impreso.] [79. La ventaja del hipertexto
más complejas y abstractas del pensamiento y la escritura,
radica en que es un medio que permite hacer reformas en lo
como los textos académico-explicativos. Su explicitación,
textual y lo visual, reunir palabras con los gestos del teatro, por
a partir de la sistematización bibliográfica, nos permitió
ej en un proyecto de videodisco permite ediciones fotográficas
elaborar descriptores para el análisis de las producciones
ant iguas, seleccionarlas y adaptarlas al cine.]
escritas de los estudiantes que ingresan a las distintas ca-
[80. La ventaja de estas tecnologías] es que brinda piezas,
rreras de la unvm y, de los últimos años de las carreras del
[81. en cuanto a la literatura, salvar distancias.] [82. Por lo tan-
Profesorado y Licenciatura de Lengua y Literatura, y de la
to la relación en un entorno electronico ya no se parece que el
Licenciatura en Diseño y Producción Audiovisual.
lector lo sea solamente, sino ya como un consumidor masivo o
Resulta significativo destacar que como parte del aná-
colaborador.]
lisis de las producciones escritas, se observan dificultades
en el dominio de la gramática textual y, particularmente,
Referencias Resumen 2:
de los procedimientos lingüísticos de la microestructura
[76].  Error de construcción léxica que obtura al referente. textual, cuya ejecución ref lexiva (revisión gramatical del
modelo de fases De Beaugrande y Dressler, 1997), guía
[77].  Registro oral y narrativo, comunicación en singular
la elaboración temático-conceptual de los conocimientos.
cuando correspondería en plural
Consideramos un aporte de esta investigación la descrip-
[78]. Oración inconclusa, mal estructurada sintáctica- ción y transferencia de los procedimientos y estrategias
mente. Faltan las tildes en género y dramático. cognitivas y lingüístico-discursivas que implica la escri-
tura, ya que las fuentes bibliográficas sistematizadas dan
[79].  Falta conexión entre las dos oraciones del segundo
cuenta de ello en el campo de la comprensión lectora (Van
párrafo.
Dijk, 1980,1983, 1998, 2001; León y otros, 2003; García Ma-
[80].  No se sabe a qué tecnologías alude. druga y otros, 1995; 2006), pero no en el de la producción.
Asimismo, la focalización en el análisis de la escritura
[81].  Falta de conexión intra-oracional.
de textos académico-explicativos obedece a que este tipo
[82].  El conector de consecuencia no tiene su antecedente textual asume un rol protagónico como estrategia meta-
en las oraciones anteriores, y la conexión intra-oracional lingüística y metacognitiva, porque permite el dominio
también resulta inadecuada. y la ref lexión consciente de los modos de producción,
organización y transmisión de los conocimientos que se
Comentario Resumen 2: Este texto presenta mayor grado vuelcan en los textos académicos.
de inadecuación al género y alteraciones en la construc- Seleccionamos y transcribimos ejemplos de análisis de
ción sintáctica, que en el caso del texto (1). No se recons- las producciones que conformaron el corpus de esta inves-
truyó la macroestructura y, por lo tanto, no se observa re-

59
tigación, con la finalidad de validar la hipótesis de inves- Ardila, A., Ostrosky-Solís, P. (2004) Desarrollo histórico de
tigación original. las funciones superiores ejecut ivas. E-Textos, i.a.e.u. Es-
Por último, las conclusiones elaboradas a partir del paña.
presente estudio de casos dan cuenta de las diferencias en
Atorresi, A. (2005). Taller de escritura I y II. Postgrado en
el grado de dominio de los procedimientos lingüísticos,
Construct ivismo y Educación. Buenos Aires, flacso
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uam, flacso Virtual.
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totalidad de los 20 (veinte) escritos analizados, pudo
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