TEMA 9

LA PROGRAMACIÓN
ESTRUCTURA Y ELEMENTOS DE LAS U.D.

En la exposición se verán los elementos de las programaciones y de las unidades didácticas,

se analizarán los principios pedagógicos y didácticos que se han de tener en cuenta para la
elaboración de las mismas, y en último lugar, las distintas áreas de la Educación
Secundaria, haciendo hincapié en aquellos elementos de la unidad didáctica que se
consideren más relevantes y característicos.

El diseño del currículo está articulado en sucesivos niveles de concreción, el primeros de

ellos es Diseño Curricular Base que recoge un conjunto de prescripciones, sugerencias y
orientaciones sobre la intencionalidad de la educación escolar y sobre las estrategias
pedagógicas más adecuadas; en el segundo nivel de concreción, en el Proyecto Curricular
de Centro se contextualizan y pormenorizan los objetivos y contenidos que el DCB
propone, así como los medios para alcanzarlos, adecuándolos a su realidad.
Las decisiones que se tomen en el PCC serán el marco de referencia para el tercer nivel de
concreción: las programaciones.

Las PROGRAMACIONES se configuran como un conjunto de Unidades Didácticas

ordenadas y secuenciadas para las áreas de cada ciclo educativo.
Esta tarea exige dos pasos fundamentales: planificar y distribuir los contenidos a lo largo de
cada ciclo; y planificar y temporalizar las actividades de aprendizaje y evaluación
correspondiente. La programación es de carácter cíclico y será elaborada por el profesorado
de la etapa o ciclo a través de los cauces que establezca el PCC.

Para la elaboración de las programaciones ha de tenerse en cuenta los PRINCIPIOS

PEDAGÓGICO Y DIDÁCTICOS.

- Uno de los principios básicos es el de facilitar la construcción de aprendizajes

significativos diseñando actividades de enseñanza y aprendizaje que permita el
establecimiento de relaciones entre conocimientos y experiencias previas y los nuevos
aprendizajes.
Se deberá proporcionar oportunidades para poner en práctica los nuevos conocimientos,
de modo que el alumno pueda comprobar el interés y la utilidad de lo aprendido y
pueda así consolidar aprendizajes.
Es igualmente importante propiciar en las actividades la reflexión personal de lo
realizado y la elaboración de conclusiones con respecto a lo que se ha aprendido, de
modo que el alumno pueda analizar el avance que se ha producido respecto de sus ideas
previas.

- El proceso ha de estar presidido por la necesidad de garantizar la funcionalidad de los

aprendizajes, es decir, asegurar que puedan ser utilizados en las circunstancias reales en
que el alumno los necesite.

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 Por aprendizaje “funcional” se entiende la aplicación práctica del conocimiento
adquirido, que sean necesarios y útiles para llevar a cabo otros aprendizajes, y también
el desarrollo de habilidades y estrategias de planificación de la propia actividad de
aprendizaje, es decir, aquellas relacionadas con el aprender a aprender.

- Los contenidos deben presentarse con una estructura clara, planteando la interrelación
entre distintos contenidos de una misma área y entre contenidos de distintas áreas.

- Los proyectos y programaciones deben recoger la preocupación por reforzar los

aspectos prácticos.
Por un lado, se ha de incorporar una dimensión práctica, y, en ocasiones,
potencialmente profesionalizadora en todas las áreas, estableciendo una mayor
vinculación de la escuela con el mundo del trabajo.
Por otro lado, poniendo el énfasis en la necesidad de conseguir una educación más
integral.

- Es sumamente importante en esta etapa crear un clima de aceptación mutua y

cooperación que favorezca las relaciones entre iguales, la coordinación de intereses y la
supresión de cualquier tipo de discriminación.
El proceso de enseñanza y aprendizaje es fundamentalmente interactivo, en el que es
tan importante la relación profesor-alumno como la que establecen los alumnos entre sí.
En relación a ello el planteamiento de trabajos cooperativos favorece el intercambio de
información, la confrontación de puntos de vista distintos y por tanto la descentración
del alumno de sus juicios y opiniones, atendiendo a las de sus compañeros.

- Los importantes cambios que se producen en el desarrollo fisiológico y psicológico en

los alumnos de estas edades hacen necesario prestar atención a los problemas de
autoestima y equilibrio personal y afectivo.
En este sentido, el papel del profesor consistirá en favorecer la comprensión de los
cambios que se producen, así como en propiciar que se dé una valoración positiva de
los mismos que se les considere como algo enriquecedor.

Uno de los retos de la Enseñanza Secundaria Obligatoria es la ATENCIÓN A LA

DIVERSIDAD a la que se da respuesta desde dos fuentes distintas: por un lado, desde las
disposiciones oficiales y, por otro, desde la práctica docente.

Desde las disposiciones oficiales se aborda por la consideración de ser en el 4º curso una
materia optativa que puede ser elegida por aquellos que tengan especial interés y también se
oferta en 4º curso, en el espacio de opcionalidad, materias científicas optativas más
acotadas que permiten ampliar el abanico de las ofertas científicas.

Desde la práctica docente el profesor debe ajustar la ayuda pedagógica a las diferentes
necesidades del alumnado y facilitar recursos y estrategias variadas que permitan dar
respuesta a las diversas motivaciones, intereses y capacidades que presentan los alumnos de
estas edades. Para lograr este “ajuste” es preciso planificar un conjunto de actuaciones en
relación con los contenidos, con las estrategias y con la evaluación.

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La ORGANIZACIÓN DEL CENTRO debe estar al servicio de las intenciones
educativas. A continuación se señalan algunos criterios y reflexiones que contribuyen al
establecimiento de condiciones favorables para el proceso de enseñanza y aprendizaje.

Se debe mantener el carácter unitario que tiene esta etapa con un planteamiento
educativo integrado que implique la coordinación entre los equipos de profesores de los dos
ciclos, es fundamental que compartan los mismos objetivos, criterios generales, estrategias
metodológicas, evaluación, promoción y atención a la diversidad.

La organización del currículo en áreas y materias optativas, así como el carácter abierto y
flexible de la propuesta curricular confieren gran importancia a la organización del
trabajo del equipo docente y a los instrumentos de coordinación.
La comisión de coordinación pedagógica, integrada por el director, jefe de estudios y los
jefes de departamento, tienen la responsabilidad de dirigir y coordinar los trabajos de
elaboración de PC. A partir de las decisiones del PC, los departamentos deben desarrollar
las programaciones. Los profesores de un determinado grupo de docencia, trabajan en
equipo coordinados por el tutor de dicho grupo y con el asesoramiento del departamento de
orientación.
Por lo tanto, la coordinación y organización conjunta de estos equipos docentes y la
existencia de unas bases comunes es fundamental para garantizar una coherencia mínima de
la práctica educativa.

Otra variable de enorme influencia en el proceso educativo es sin duda los agrupamientos
mediante los cuales se organiza el alumnado, los criterios para agruparlos deben ser
flexibles y responder al objetivo y tipo de actividad que se pretende.

Los criterios de ORGANIZACIÓN DE LOS ESPACIOS deben tener como finalidad la de

crear un ambiente estimulante, cómodo y acogedor que favorezca la actividad educativa.
Los espacios comunes, pasillos, aseos, salón de actos etc., deben de ser accesibles
para todos, que promuevan la comunicación y favorezcan los desplazamientos. Para ello, es
importante contribuir, entre todos, a que los espacios permanezcan limpios, poco ruidosos y
estén bien señalizados.
Un espacio especialmente importante lo constituye la biblioteca, debe estar situada en un
lugar de fácil acceso y asegurar un tiempo de funcionamiento tan amplio como sea posible.
Deben cuidarse particularmente las condiciones térmicas, acústicas y de iluminación de tal
forma que proporcione el marco de trabajo adecuado y un ambiente acogedor, estimulante y
adaptado a la edad de los usuarios.
La organización del espacio en el aula debe estar en función de la diversidad de
actividades y situaciones que puedan presentarse. Un mobiliario adaptable, ligero y
funcional es fundamental para acomodarse a las previsibles modificaciones frecuentes en su
disposición. Debe, a su vez, permitir el equilibrio entre el trabajo individual y el colectivo,
la autonomía de movimiento y la comunicación.
Dentro de una concepción de escuela abierta al medio, el espacio escolar se amplía
más allá de las paredes del centro. Cuando la actividad educativa se traslada fuera del
recinto escolar, el entorno se convierte en espacio educativo y, por tanto, es necesario
pensar de qué modo aprovecharlo mejor, como organizar las tareas en este nuevo espacio
que permita incorporar las posibilidades educativas del entorno.

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La ORGANIZACIÓN DE LOS TIEMPOS debe ser flexible y estar en función de las
intenciones educativas y del mejor aprovechamiento de recursos humanos y materiales.
En cuanto a tiempos de profesorado, se debe garantizar la existencia de tiempos para
programación y coordinación vertical entre ciclos y cursos, y horizontal entre áreas. En este
sentido es importante organizar de forma conjunta la distribución temporal de tareas entre
el profesorado.

La función de los MATERIALES y RECURSOS DIDÁCTICOS es la de ayudar al profesor

a llevar a la práctica las intenciones educativas, por lo que la selección de los mismos debe
responder a criterios que tengan en cuenta el contexto educativo, las características de los
alumnos con los que se trabaja y, sobre todo, el que estén al servicio de esas intenciones.
Hay que diferenciar entre los materiales curriculares para el profesorado y para los
alumnos:
Para el profesorado: han de servir para orientar al profesorado sobre los distintos aspectos
que han de tenerse en cuenta en el proceso de enseñanza. En primer lugar en la elaboración
y realización del PC, ofreciendo pautas para seleccionar objetivos y contenidos, y la
metodología. En segundo lugar, en la elaboración de las programaciones para definir
objetivos didácticos, seleccionar actividades adecuadas, tomar decisiones en cuanto a
espacios, tiempos y agrupamientos.
Estos materiales deben ser diversos, que ofrezcan modelos distintos y perspectivas
amplias, dentro de las cuales haya posibilidades distintas de concreción.

La selección de materiales y recursos didácticos par los alumnos debe responder a

decisiones compartidas por el conjunto del equipo docente, y considerar una serie de
criterios: que no sean discriminatorios, que permitan el uso comunitario, y eviten el
derroche innecesario y la degradación del medio ambiente, que incluyan normas de
seguridad e información de sus características, entre otros.

Llegar a conseguir los propósitos que un centro se ha planteado, la necesidad de adecuar la

acción educativa al contexto del centro y favorecer su apertura al medio, supone establecer
RELACIONES DE COLABORACIÓN entre los distintos colectivos implicados en la
educación. Por ello, el PC debe incorporar las líneas básicas que regirán el papel de los
PADRES en el proceso educativo, ya que pueden ser un cauce para facilitar la relación del
centro con el medio ofreciendo información sobre recursos, apoyando actividades, etc., así
como las conexiones que se establecerán con otras INSTITUCIONES de la comunidad.

Por último, habrá que PROGRAMAR LA EVALUACIÓN, proceso que permite verificar y
comprobar los resultados de una acción formativa. Se evaluarán:
- Las actividades que se han empleado. Por su claridad, su adecuación al nivel de los
alumnos, por su capacidad de motivar, por la variedad de su elección de manera que
permita abordar los distintos tipos de conocimientos y desarrollar diferentes
capacidades, y por la coherencia entre lo que se esperaba de ellas y lo que de hecho han
dado de sí.
- Los materiales y recursos didácticos, por la facilidad de adquisición, de utilización y de
comprensión, por la ayuda que han prestado y por su variedad.

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- La actuación de los profesores, como promotor de actividades, como animador y asesor.
Por su capacidad de modificar sus planteamientos iniciales a las necesidades de la clase.
- La actuación de los alumnos, su implicación en el proceso de enseñanza-aprendizaje, su
grado de satisfacción y, por supuesto, la preparación adquirida respecto a los objetivos.
- Y, el trabajo de los grupos, la organización de trabajo, sus miembros, su capacidad de
resolver conflictos.

Tras la programación, el último nivel de concreción lo constituyen las UNIDADES

DIDÁCTICAS; en el DCB hay indicaciones acerca del proceso que puede llevar a la
elaboración de los proyectos curriculares y programaciones, así como de las Unidades
Didácticas que el profesor desarrolla en su tarea docente, en su desarrollo que puede y debe
ser distinto según las circunstancias de los alumnos y de los medios didácticos a su
disposición.
Entendemos por U.D. una unidad de programación y actuación docente configurada por un
conjunto de actividades que se desarrollan en un tiempo determinado, para la consecución
de unos objetivos didácticos.
La U.D. da respuesta a todas las cuestiones curriculares:
- Al qué enseñar: objetivos y contenidos.
- Cuándo enseñar: secuencia ordenada de actividades y contenidos.
- Cómo enseñar: metodología, actividades, organización de espacio y tiempo, y
materiales y recursos didácticos.
- Y a la evaluación: criterios e instrumentos para la evaluación.

Por Diseño de la unidad, se entiende todo lo relativo a la expresión de las intenciones

educativas y al modo de llevarlas a la práctica docente.
Por Desarrollo curricular, en cambio, se entiende la práctica docente en cuanto al
desarrollo del currículo en el aula.

Dentro de los aspectos citados se recogen algunos aspectos comunes a todas las
programaciones, fundamentalmente, la relación que cada U.D. mantiene con decisiones
globales relativas al centro y a la secuencia curricular desarrollada a lo largo de la etapa, la
cual se articula en objetivos didácticos propios de cada unidad que son, a su vez, objeto de
un proceso de evaluación.
Junto a elemento, en cierto modo, comunes a todas las unidades, es importante señalar la
presencia de otros elementos propios y específicos de cada unidad (actividades, evaluación,
etc.).
El diseño de una U.D. es una tarea que se concreta en un procedimiento cuya secuencia de
operaciones vendría a ser:
1º- Seleccionar un núcleo conceptual.
2º- Formular los objetivos didácticos.
3º- Detallar los contenidos.
4º- Acceder a los conocimientos previos.
5º- Secuenciar la metodología.
6º- Diseñar actividades.
7º- Definir las pautas de evaluación.
8º- Establecer los criterios de revisión.

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Para el desarrollo del currículo en el aula hay que tener en cuenta una serie de factores:

El papel del profesor ha cambiado sustancialmente en los últimos años. Su labor

fundamental es crear las condiciones adecuadas para que se produzcan aprendizajes, en este
sentido, su labor se centra en 3 líneas básicas de actuación:

- En primer lugar, como fuente de información, bien directo, como modelo, bien
seleccionando adecuadamente los materiales y actividades.

- En segundo lugar, como favorecedor del aprendizaje al fomentar una actitud positiva
hacia la música con su propia actitud positiva.

- Y, por último, gestionando y organizando todos los aspectos de la actividad de la

clase, de manera que la actuación de los alumnos pueda tener lugar con la mayor
rentabilidad de medios y situaciones.

En este sentido, el profesor:

- Fomentará actitudes positivas hacia la colaboración de los alumnos entre sí y con él
mismo, ya que factores emocionales son de gran importancia en el proceso de
aprendizaje.

- Además, el profesor constituye un modelo de valores, su propia actuación en clase está

transmitiendo actitudes con respecto al modo de relacionarse, de ser solidario, de
trabajar en equipo y, en definitiva, al modo de comportarse en la sociedad.

- La tolerancia y evitar la crítica destructiva por parte del profesor son esenciales para
que la comunicación y el aprendizaje sean afectivos.

- El profesor debe fomentar la participación activa de los alumnos en las actividades, ya

que es una de las principales fuentes de motivación para el aprendizaje.

- Asimismo, para captar el interés de los alumnos, es importante la variedad en las tareas,
en el uso de materiales y en el tipo de organización que adopte la clase; y partir de sus
intereses, que los temas y actividades presentados sean apropiados a su edad, entorno
social y gustos.

- Finalmente, el alumno debe servir de contraste a la actividad del profesor; le servirá

para ajustar su labor docente a las necesidades de la clase.

La organización del aula: grupos cooperativos, la organización material del aula debe ser
flexible, de forma que permita a los alumnos trabajar individualmente, en pequeño grupo o
en gran grupo, con la menor pérdida de tiempo posible.
Hay distintas formas de organizar los grupos: Una, dejar que los alumnos decidan por sí
mismos; o, que el profesor decida la formación de los grupos de acuerdo con su nevel:
juntando los del mismo nivel o mezclando niveles.

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Los métodos de aprendizaje cooperativo propugnan que los alumnos trabajen juntos para
aprender, siendo responsables tanto de su propio aprendizaje como del de su o sus
compañeros de equipo.
En general, se basan en agrupaciones mixtas de alumnos, en cuanto a sexo como nivel
inicial de conocimientos y motivaciones.
La tarea del grupo es aprender algo como equipo:
- Este tipo de trabajo fomenta la autoestima de los alumnos y provoca una aceptación de
la diversidad de ritmos y estilos de aprendizaje, con la ventaja de que la gente que
coopera aprende a apreciarse entre sí.
- Otras consecuencias de esta metodología son las de desarrollar el gusto por la escuela,
la mejora académica y, en definitiva, favorecer el sentido de la cooperatividad y el
altruismo.

Los trabajos que se han realizado sobre el aprendizaje en grupos cooperativos ponen de
manifiesto tres principios fundamentales:
1- Las recompensas de equipo tratan de garantizar que, una vez alcanzado por todos los
miembros de un equipo un determinado nivel de aprendizaje, el profesor recompensa a
los miembros por medio de un certificado, un reconocimiento explícito...
2- El rendimiento individual significa que el éxito de un equipo es función o depende del
aprendizaje de cada uno de sus miembros. Si no todos los alumnos alcanzan el nivel que
se haya establecido, el equipo no puede seguir adelante.
3- La igualdad de oportunidades para el éxito supone que el alumnado contribuya a la
tarea del equipo, mejorando con respecto a sus propios logros anteriores. De este modo,
tanto los alumnos de bajo nivel como los de alto están llamados a superarse a sí
mismos, y esto hace que las contribuciones de todos los miembros del equipo sean
valoradas.

Las estrategias de aprendizaje son aquellas que contribuyen al desarrollo del aprendizaje.
En este sentido, el profesor deberá proporcionar a los alumnos, según las necesidades que
vayan manifestando, todos los recursos que les faciliten su propia actuación y les abran
paso a la autonomía.
Se pueden identificar como estrategias de aprendizaje:
- La clarificación, que consiste en la verificación clarificación por parte del alumno de su
comprensión.
- El razonamiento deductivo: usar el conocimiento propio para extraer hipótesis.
- La inducción: Se utiliza para descubrir una organización y unos modelos que permitan
obtener información sobre la materia y archivarla. Los procedimientos lógicos incluyen
la analogía, el análisis y la síntesis.
- La práctica contribuye al almacenamiento y recuperación, cuanto más se practica más
se retiene. Todo lo que no se evoca o se trabaja se olvida.
- La memoria la finalidad es la organización de la información, contribuye también a la
codificación, almacenamiento y recuperación. Es necesaria la práctica y la repetición.

Y por último, las estrategias de comunicación, no se pueden enseñar en el sentido estricto

de la palabra, puesto que los alumnos ya las utilizan, pero es posible hacerles conscientes
de la forma en que se usan y enseñarles a sacar el mejor partido posible de las mismas, para
mejorar la comprensión oral, escrita y no verbal.