Resumen de ‘jornada de trabajo y descansos obligatorios’ – Valdés Sánchez, G.G.

& Garcés
Carvajal, T.

I. La jornada de trabajo

Podemos definir la jornada de trabajo como el tiempo que debe destinar el trabajador para la
ejecución de las labores materia de su contrato de trabajo. La condición más importante respecto a
la regulación de la jornada de trabajo corresponde a la delimitación de tal tiempo por factores
biológicos en virtud de la salud y el desarrollo de la capacidad laboral.

 ¿Es libre el manejo de la jornada de trabajo y la distribución de sus horas de trabajo?

La respuesta es no. Si bien existe un espacio de libertad, también existen topes máximos
legales. La regulación esencialmente consiste en delimitar el máximo de tiempo que un individuo
puede trabajar, imponiendo también descansos obligatorios en virtud de la salud del individuo. Hay
dos parámetros aplicados:

o Diarios: hay un máximo de 8 horas diarias. Si la jornada es diurna, se paga como

mínimo el salario mínimo diario. Si es nocturna, se debe pagar el salario mínimo más
un recargo del 35%. Para niños los menores de edad la jornada es de máximo 6 horas
diarias. Para embarazadas desde el séptimo mes de gestación y hasta la finalización del
periodo de lactancia, la jornada se limita a 4 horas diarias, sin posibilidad de disminuir
ingresos.

o Semanales: hay un máximo de 48 horas semanales. De esto se deriva que se pueden

trabajar máximo 6 días semanales, y hay un descanso obligatorio de un día, que
normalmente es el domingo. Además de este día, es obligatorio el descanso en los
festivos. Para menores de edad el limite es de 5 días.

Hay que ser claros en un aspecto: estos limites son respecto a los tiempos incluidos en el contrato
de trabajo. No obstante, pueden existir pactos que superen estos límites, pero deben remunerarse
como horas extra o jornada extraordinaria. Para poder pactar este tipo de desarrollos resulta
necesario:

1) Obtener la autorización del Ministerio del Trabajo: dentro de esto, el Ministerio del trabajo
debe examinar si existe alguna causal extraordinaria que le imponga al empleador la
necesidad de acudir al tiempo suplementario y que justifique tal pacto.
 2) No superar el tope de dos horas diarias extra y doce semanales.

3) Un pago especial, que varia según sea diurno o nocturno. En el primer caso, debe haber
como mínimo una remuneración con sobrecargo del 25% de la hora ordinaria de trabajo (si
se paga 100 pesos la hora, se debe pagar 125 la hora extra diurna). En el segundo caso, hay
un sobrecargo del 75% (si se paga 100 pesos la hora, se debe pagar 175 la hora extra
nocturna).

4) Un registro a cargo del empleador de las horas extra.

5) Aviso prudente al trabajador para que este pueda expresar su disponibilidad.

 ¿Qué sucede cuando las horas extras se tornan en un ingreso habitual para los
trabajadores?

Puede imaginarse la posibilidad de que la jornada extraordinaria llegue a “constituir un

derecho debido a la prolongación en el tiempo del uso de esa figura de parte del empleador y en
relación con todos y cada uno de los [trabajadores], quienes llegaron a contar con el ingreso
proveniente de ese trabajo adicional, para asumir sus compromisos económicos”. No obstante, la
jurisprudencia ha dicho que la jornada extraordinaria es una situación excepcional, y que por tanto
no puede considerarse como un derecho. Es más, considerarlo como tal entraría en contravía del
derecho a los trabajadores de tener una jornada laboral conforme a lo establecido por la ley.

 ¿En qué tipo de estipulaciones yace la libertad de las partes para la configuración de la
jornada laboral?

Como ya se vio, existen una serie de regulaciones sobre la jornada laboral que limitan la
libertad de las partes para desarrollar estipulaciones propias. No obstante, existen una serie de
situaciones especiales que pueden pactarse: unas formas de organizar la jornada. Estas son:

a) Traslado del sábado a los días precedentes de la semana laboral (art. 164, CTS): en
principio, el sábado puede configurarse como un día laboral. Sin embargo, con el artículo
23 de la Ley 50 de 1990 se plantea la posibilidad de que se trasladen las horas de trabajo
del sábado a otros días de la semana. El único límite es que no se pueden dar más de 10
horas diarias de trabajo, por lo cual queda reducida la posibilidad de imponer horas extra.

b) La jornada diaria flexible: este tipo de acuerdos, creados por la Ley 789 de 2002, están
encaminados a sectores que tienen poca demanda en algunos días y un incremento
 importante en otros. Así, es posible pactar de tal manera que la jornada diaria varíe entre
un mínimo de cuatro horas y un máximo de 10 horas. De igual forma, es posible pactar
que se trabaje el domingo y se descanse otros días de la semana. Esto bajo dos condiciones:
hay un máximo de 48 horas a la semana, y no puede haber trabajo nocturno.

c) Jornada flexible para bares: acá se trabajan 6 horas diarias y 36 horas semanales, pero no
causa recargos por trabajo nocturno ni por domingos.

d) Ampliación de la jornada por razones especiales: se puede hacer una ampliación de la

jornada sin previa autorización del Ministerio del Trabajo con base a hechos de fuerza
mayor o caso fortuito que requieran de manera inmediata la mano de obra extra.

II. Exclusiones de la regulación sobre la jornada de trabajo

Existen ciertos trabajadores que quedan excluidos de lo establecido en el Código sobre la

jornada de trabajo, en virtud de sus condiciones especiales o de lo especial y delicado de sus
funciones. La Corte Suprema ha dicho en este sentido que estos trabajadores son aquellos que
cuentan “una naturaleza especial, cuyos intereses tienden a confundirse con los del propio
empleador”1. Están aquí dos tipos de trabajadores2:

o Los que desempeñen cargos de dirección, confianza o de manejo:

- Dirección: aquellos que tienen mando al interior de la empresa.
- Confianza: aquellos que laboran en actividades cuya ejecución o desarrollo
involucran una confianza especial por parte del empleador. La confianza debe ser
institucional: aquellos que manejan labores de carácter restrictivo o reservado.
- Manejo: es aquel que tiene bajo su cargo la administración de elementos
representativos de dinero, siendo uno de los directivos o altos mandos en ella3.
Sobre estos debe hacerse una precisión: el hecho de que no tengan jornada laboral legal
ni pago de horas extra, ello no los excluye de que “el empleador, a través de su máximo
órgano de dirección, imponga a todos sus trabajadores en general una jornada de

1
Sentencia del 24 de septiembre de 2008, rad. 34417.
2
De esto no se deriva que no haya límites: no se puede afectar los derechos fundamentales ni la dignidad humana. Si
hay daños al individuo, debe haber una reparación. No obstante, los limites los impone el mercado: depende de la
naturaleza de las funciones, de la posibilidad de retención. Se deriva de las condiciones propias del mercado.
3
De esto se deriva que, si se trata de un funcionario de bajo mando con baja remuneración que tiene algún tipo de
relación con la administración de dineros, se le debe tener como incluido dentro de la regulación ordinaria.
 trabajo que deberán estar obligados a cumplir, incluidos los que desempeñen cargos de
dirección, confianza o manejo”4.
o Los que ejerciten actividades discontinuas o intermitentes y los de simple vigilancia,
cuando residen en el lugar o sitio de trabajo5.
III. Situaciones especiales de jornada

 Trabajo por turnos

Existen materias que, en virtud de su naturaleza, no se pueden interrumpir. Para acordarlas con
las regulaciones del trabajo, resulta necesario acudir a la figura del trabajo por turnos. Usualmente
estos son de 8 horas, con distribución en tres grupos. El asunto acá es si se debe pagar un salario
variable dependiendo de si el turno es diurno o nocturno. Lo que se hace es que se promedia el
numero de horas diurnas y nocturnas de tal manera que el trabajador siempre reciba una misma
remuneración.

 Trabajo en labores discontinuas (art. 165, CTS)

Existen casos en que, por el contrario, la naturaleza del trabajo no requiere de una actividad
continua pero sí una disponibilidad amplia. En estos casos se puede exceder la ampliación de la
jornada a más de 8 horas diarias, siempre que en el curso de tres semanas el promedio de trabajo
diario no supere esas 8 horas ni supere las 48 horas semanales. Se tiene una bolsa de 144 horas en
para dividir en tres semanas. Así, el trabajador debe calcular el pago cada tres semanas,
reconociendo las horas extra resultantes de la desviación del promedio.

 Trabajo sin solución de continuidad

Acá se puede extender la jornada a 56 horas semanales, pero no se puede afectar el descanso
de un día semanal.

IV. Extensión de la jornada y los descansos en el curso de esta

Según lo establecido por el articulo 21 de la Ley 50 de 1990, se impone a toda empresa con
más de 50 trabajadores y con jornada de 48 horas semanales que se deben destinar dos de esas
horas a actividades recreativas, culturales, deportivas o de capacitación. El cumplimiento de esta

4
CSJ, Sentencia del 24 de septiembre de 2008, rad. 34417.
5
Acá se excluyen a las empleadas domésticas. Ver sentencia C-372/1998.
regulación no es a rajatabla: basta con que se de descanso de dos horas semanales, de manera tal
que solo se trabajen 46 horas.

V. Descansos obligatorios

Estos son días encaminados a que el trabajador tenga la oportunidad de reparar sus fuerzas
intelectuales y materiales (C-019/2004). Pueden sintetizarse como sigue:

1) Descansos semanales: un día a la semana, normalmente el domingo.

2) Descansos vacacionales: 15 días hábiles, consecutivos y remunerados anuales. Sólo son
exigibles tras un año de trabajo. En caso de renuncia en periodo inferior a ese tiempo, se
maneja la proporcionalidad: me liquidan en proporción a lo que trabaje. Las vacaciones
también prescriben: si pasan más de 3 años pasado el periodo en que pueden reclamarse
(es decir, un año después del periodo que las causa), se pueden perder. Esto último salvo
sea un trabajador extranjero cuya familia vive fuera del país: este puede acumularlos hasta
por 4 años. Para pedir vacaciones hay que pedirlas 15 días antes de cuando quiero irme.
Puedo acumular vacaciones: un máximo de 7 días por periodo hasta por dos años, y debe
disfrutar 8 días de vacaciones por periodo: 6 días ininterrumpidos y 2 días libres
3) Festivos: todas las fiestas son descansos obligatorios.