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INTRODUCCIÓN
Según el libro "El paraíso en la otra esquina" del escrito peruano Mario Vargas
Llosa (que es un juego infantil en el Perú) se expresa que la utopía está “en la otra
esquina”, una utopía política y estética, donde los protagonistas están recorriendo
un camino pero nunca llegan a la meta, pero que bien vale la pena tomar el
camino.
El economista español Aurelio Martínez afirma que las utopías del siglo XX son
terribles, hay que ser realistas. A esto la Dra. Cortina le respondió en el diario El
País donde ella colabora: “hay que jugar a "la Lleva" (que también es otro juego
infantil de la zona andina)” pues ahora “la lleva” el neoliberalismo, es decir las
empresas las cuales deben ser responsables, pues: no se puede tener poder sin
responsabilidad.
Cuando se crea ETNOR –la fundación que dirige la Dra. Adela- en compañía de los
empresarios y los académicos, se pensó primeramente ¿seguirá valiendo la ética
de la empresa en la globalización de deslocalización, de personas reducidas al
trabajo? A esto la conferencista afirma que éste es el momento, ahora es más que
nunca, pues ahora es que ha florecido más ese misterio, que es una realidad que,
a juicio de la Dra. Cortina, es irreversible y que vale la pena potenciar. Por eso, si
no hay que crear o diseñar paraísos “que hay en la otra esquina”, hay entonces
que cultivar los mejores gérmenes que hay en nuestras tierras para una
humanidad mejor. Uno de esos gérmenes es la Responsabilidad Social
Empresarial –en adelante, RSE-, porque según la conferencista ésta puede dar
lugar a una humanidad mucho mejor y empresas mucho mejores.
Así las cosas, las empresarios tienen un enorme poder: cada vez más los
empresarios son auténticos paradigmas, símbolos, y a más iniciativa y creatividad
en la sociedad, se tiene más poder y así más responsabilidad. Por eso el mundo
los quiere cultivar más: y todos deben asumir la responsabilidad, que no quede
ninguno por fuera es el ideal.
¿En qué consiste la RSE? He aquí una pequeña historia con sus conceptos. Nace
en los años 20 del siglo XX y se fortalece en 50's y 60's. Parte de la idea de que si
las empresas usan recursos sociales, por el hecho del uso se genera un deber ético
y por ende de alguna manera debe revertir a la sociedad dichos beneficios. Las
empresas más pueden crear la riqueza o no, para apoyar o restar cualquier factor
dentro de la sociedad. Tienen gran poder entonces y deben hacerse responsables
de ese poder (conscientes) y ante la sociedad deben serlo más allá de la creación
de trabajo y riqueza: por medio de intangibles que cada vez vayan teniendo más
fuerza.
En los 70's aparece un quiebre. Sale el artículo de Milton Friedman que dice: que la
única responsabilidad de la empresa es crear beneficio para el empresario y los
accionistas; y en segundo lugar afirma que la empresa es del empresario y es una
herramienta que está en sus manos para crear riqueza para el accionista por
medio de la generación de lucro en su objeto social. Así las cosas, nace en el
debate.
Sin embargo también en los 70's en la ética de la empresa se pone muy de moda
gracias a los escándalos del Watergate, donde se piensa que no es posible la
corrupción en una empresa gracias a las complicidades del poder político pues
entonces ¿en quién confían los ciudadanos? Y… si no hay confianza, los países se
desfondan y no pueden hacer nada bueno. Así mismo, en años recientes para el
caso de ENRON se preguntó ¿que nos trajo hasta acá? Es por esto que es preciso
recuperar la confianza y crear confianza.
La Dra. Cortina afirma igualmente que esto no es algo nuevo. Dice que aún en el
inicio del capitalismo, cuando salió la idea de la empresa salió también con otro
pié: la ética de la empresa. Adam Smith escribió dos grandes obras la una sobre la
riqueza y otra sobre la solidaridad y la confianza ambas interrelacionadas. Se
retoman entonces los inicios del capitalismo y se pone en marcha una nueva idea:
la cuestión no es encontrar ideologías comunes (70's), sino buenas prácticas, es
decir es apostar por una ética de las prácticas no de las ideas.
Éste debe ser el punto de unión de las empresas, el cual debe ser acompañado
con un slogan bastante sugerente: la ética es rentable. Si. La ética vale por si
misma, pero curiosamente -y es el mensaje de la historia que se comprueba- la
ética resulta fecunda también para el mundo empresarial aún en los resultados.
Las ideas que iban surgiendo (comercio justo –al inicio-… hasta el "contrato moral"
de hoy) generó las ideas de para la creación de un “código para el buen gobierno”,
a partir de elementos presentes.
La ética en los 70's cambió un poco la ética en las siguientes tres dimensiones:
• No es solo de personas, sino de organizaciones;
• No solo es por convicción, sino también de la responsabilidad -es decir, vale
desde la contemplación de las consecuencias-, es decir, una
"responsabilidad convencida";
• Pasa de identificar la actuación ética con el desinterés, al invento de: el
interés propio es también un interés universalizable, pero no solo lucho por
el interés propio, sino hay que congujarlo con el universalizable-.
Un nuevo paso se da con la identificación del “con quién debo ser responsable”,
por medio de la teoría de los stakeholder de Friedman, que no son más que los
grupos de interés: los que han apostado por, los afectados positiva o
negativamente. La idea de Friedman no solo sirve al accionista sino a los grupos
de interés, sino trabajadores, proveedores, clientes, medio ambiente, todos los
que.... debían ser favorecidos.
2001: Libro verde de la Unión Europea (cuyo autor se desconoce, comenta la Dra.
Adela): es un marco para la RSE e invita a las empresas a ésta responsabilidad por
medio del estudio de los agentes, elementos, etc. Es muy diferente a la propuesta
de Friedman: habla de integración voluntaria de las preocupaciones sociales y
medioambientales dentro del comercio y sin indiferencia con los interlocutores. Lo
interesante es que la caracteriza como "voluntaria" porque se ha dicho también
que no es "derecho" sino es una responsabilidad de las empresas, es algo que se
hace voluntariamente, es elemental que se cumpla la legalidad, es un plus, es más
allá. Tampoco es filantropía eso es acción social, no es ayudar a grupos, sino sería
un asunto cosmético. Se trata entonces de introducirse en ese triple balance:
económico, medioambiental y social. Algo interesante: lo que se pretende es
convertir la economía europea en una economía basado en el conocimiento más
competitivo, sostenible con más y mejores empleos y con cohesión social. No se
trata que sean las más éticas, sino intentar que sea la más competitiva asumiendo
la RSE. Es la convicción por cohesión social, es una afirmación de que un
liberalismo salvaje es execrable. Donde siendo más responsables, somos más
competitivos, con más cohesión habrá más riqueza. Se trata de una inversión, no
de despilfarro, el mensaje es que lo que ahí se invierta sea una inversión en el
seno de la empresa.
ENTENDIMIENTO DE LA RSE
ALCANCE DE LA RSE
Insertos en éste análisis ha decirse que la RSE debe extenderse a todos los niveles
de la empresa, hasta ésta entre en el núcleo duro de la empresa. No es una cosa
cosmética. Es de ética, desde dentro. La RSE no es un añadido, entra al núcleo
duro de la empresa y tiene que afectar el gobierno corporativo, al proceso
productivo, las áreas de negocio y los RR.HH.
IMPORTANCIA DE LA RSE
Hay razones para asumir la RSE y saber así por qué se potencia (en la propuesta
del Pacto Mundial de la ONU se logró mucha más aceptación de éste tipo de
propuestas que la otra propuesta paralela de la ONU en ese entonces, “La
gobernanza mundial”). Las empresas más “RSE” aumentan su competitividad y hay
razones claras:
• La sociedad civil presiona para que las empresas cada vez sean más
responsables, cada vez pide más y va a ir cada vez a más. Los estudios
dicen que mínimo el 50% aumenta competitividad.
• Las instituciones públicas lo piden cada vez más. Es una economía no
alternativa, sino que desde dentro está haciendo una buena economía.
Valga la pena hacer acá una referencia a Amartya Senn cuando escribió
sobre una economía desde dentro, crear una buena sociedad, al servicio de
la riqueza social, de una situación en la que se encuentra que ayude a crear
una buena sociedad. Se preguntará: ¿la economía tiene que ver con
valores? A esto un importante economista español quien luego de afirman
un no rotundo a la semana en una visita a la Dra. Cortina dijo: “el hecho de
que haya una humanidad muriendo de hambre es un fracaso de la
economía como ciencia”. No es ese saber que no tiene nada que ver con
una sociedad buena, tiene que ver más bien con una posibilidad de
empoderar a la gente para crear riqueza con sus medios, generando
riqueza, pero también confianza que ella puede hacerla por redes
económicas logradas gracias a la cohesión social. La ética no es un
sombrero, sino una forma de henchir el destino, de esperar y ganar el
futuro.
• El mercado pide cada vez más empresas éticas. Los consumidores lo piden
así, hay que movilizar a los consumidores donde se pida más. Esto es hacer
un boicot cada vez a más, contagiándose a otros países. Cada vez más los
inversores piden más ranking de empresas socialmente responsables. El
tema de la inversión va a apremiar a los actores responsables, no aquellos
que no merecen ningún crédito o confianza.
• El entorno pide que las empresas sean RSE. En estos tiempos de
globalización, si no sabe quién es, no sabe que proyectos y no sabe a donde
va a ser incapaz de un entorno cambiante. Hay que hacer una auditoria
"ética” como la red de supermercados española MERCADONA así se lo pidió
a la Fundación ETNOR, como una “forma de prepararse para el futuro”.
RETOS DE LA RSE
MODELO DE RSE