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Texto: LUCAS 8:39

Tema: CUENTA CUAN GRANDES COSAS HA HECHO DIOS CONTIGO.


Navegaron al otro lado del mar de Galilea, donde vivían lo gadarenos.
Gadara: era una de la ciudad que conformada Decápolis ¨lit. diez ciudades¨
En la antigüedad esta región al oriente de Galilea, había formado parte del territorio
que Moisés había dado en herencia a la media tribu de manases, a la de Rubén y
Gad.
En tiempos de Jesús, aunque los judíos estaban esparcidos por toda la región, este
territorio había sido considerado como territorio gentil.
La presencia de hatos de cerdos nos da a entender que eran paganos.
Los cerdos eran animales inmundos para los judíos.
Era una región griega, que tenía dioses griegos, templos griegos anfiteatros griegos
y sus vidas estaban consagradas a una esencia griega.
Cuando Jesús bajo a tierra se encuentra con dos hombres endemoniados.
No podemos confundir a hombres poseídos por demonios o casos psiquiátricos o
de epilepsia.
El endemoniado es un claro ejemplo de la fuerza satánica dominando la persona.
La dignidad más alta que puede tener todo ser humano es que nuestro templo sea
templo del Espiritu Santo.
Jesús nos liberto del pecado, desarrollando nuestra personalidad, nuestra dignidad
e incremento su dominio propio.
Este hombre al ver a Jesús le suplicaba que lo dejara en paz.
Lo que había en este hombre lo hacía vagar por lugares desolados.
Jesús le pregunto por su nombre.
Legión: era un grupo de soldados romanos compuesto aproximadamente por 6mil
hombres.
Parece ser que le llamaban legión porque muchos demonios habían entrado en él.
Esta legión rogaba a Jesús que no le ordenara volver a las oscuridades eternas.
Jesús les permite entrar a los cerdos.
Cuando los demonios entraron a los cerdos, ellos se precipitaron hacia el barranco
cayeron al agua y se ahogaron.
Los que cuidaban de estos cerdos, salieron huyendo y contaron por los campos y
el pueblo lo que habían visto.
Cuando la gente salió a ver, se encontraron a Jesús y al hombre que había estado
endemoniado, sentado a los pies de Jesús, vestido y en sano juicio.
La noticia se extendió que Jesús había sanado a un endemoniado.
Pero el pueblo le pide a Jesús que se vaya.
Jesús sube al bote para regresar a Galilea.
El hombre que había sido restaurado le rogaba a Jesús que lo llevara.
Jesús le ordena que fuera a contar lo que Dios había hecho con él.
Lc 8:26-39
Tenemos que considerar las reacciones de dos clases de personas.
Tenemos a los gadarenos. Le pidieron a Jesús que se fuera.
Les fastidiaba que les alteraran la rutina de la vida.
Todo seguía su marcha en paz hasta que llegó ese revolucionario de Jesús, y le
rechazaron.
Hay más personas que rechazan a Jesús porque les altera la vida que por ninguna
otra razón.
Si le dice a uno: " Tienes que abandonar ese hábito, tienes que cambiar tu vida»; si
le dice a un empresario: " No puedes ser cristiano y hacer que tus obreros trabajen
en esas condiciones»; si le dice al dueño de una casa: " No puedes cobrar dinero
por el alquiler de esa pocilga» -es probable que todos le digan: " ¡Vete a la porra, y
déjame en paz!»
Apreciaban a sus cerdos más que al alma de un hombre.
El dar más valor a las cosas que a las personas es uno de los mayores peligros de
la vida.
Eso es lo que crea los suburbios y las explotaciones injustas. Y, entre nosotros: eso
es lo que nos hace exigir egoístamente nuestra comodidad a costa del sacrificio y
de la esclavitud de otros.
No hay absolutamente nada en el mundo tan importante como una persona
humana.
Tenemos al hombre que fue curado.
Era natural que quisiera irse con Jesús, pero Jesús le mandó a su casa.
El testimonio cristiano, lo mismo que la caridad, empieza en casa.
Nos sería mucho más fácil hablar de Jesús entre los que no nos conocen; pero es
nuestro deber, allí donde Cristo nos pone, testificar de Él.
Y si resulta que somos los únicos cristianos en la tienda, en la oficina, en la escuela,
en la fábrica o en el círculo en el que trabajamos o vivimos, no tenemos por qué
quejarnos.
Es un desafío en el que Dios nos dice: «Ve a decirles a los que te encuentras todos
los días lo que Yo he hecho por ti.»
A. La Familia debe ser el primer lugar donde el creyente debe dar
evidencias de su nueva vida. Hechos 16:31
Es la voluntad de Jesús que algunos de los que reciben el beneficio del evangelio,
en vez de ir a otras partes, se queden entre los suyos para testimonio a ellos.
Todas nuestras familias pueden escuchar y creer el Evangelio incluyendo hasta los
niños.
La actividad de la misión debe comenzar primero por nuestra casa.
Somos testimonio de las grandes cosas que Dios ha hecho con nosotros para
quienes nos rodean.
la familia del creyente es una unidad completa para la salvación de Dios.
Dios siempre ha querido que pensemos en los nuestros.
1. la familia de Noé. Génesis 7:1.
Noé preparo el arca porque creyó en la advertencia divina. Hebreos 11:7
«Entra… en el arca de seguridad”. Es una invitación de gracia del evangelio:
2. las familias que participaron de la Pascua. Éxodo 12:3-4.
Era un cordero para toda la casa.
Jesús es el cordero para todas nuestras familias. Juan 1.29
Y así como todos participaban de la pascua hoy todos los nuestro son participes de
esta Salvación.
3. la familia de Rahab la ramera Josué 2:18-19.

El medio de salvación para Rahab y su familia fue un cordón escarlata.


Era un medio muy simple.

Todo lo que ella tenía que hacer era colgar un cordón (un hilo) en la ventana de su
casa.
La seguridad de la salvación de esta mujer y su familia no se fundamentó en una
experiencia interna, sino más bien era una evidencia externa.

La condición era que aquel hilo escarlata colgara de la ventana donde estaba la
casa.

Salir de la casa era un suicidio. Era destrucción para los que salieran de ella.
La salvación se garantizaba para todos los que estaban en la casa.

Así que la salvación de la ira que estar por venir es así de simple.
El cordón escarlata representaba la sangre de Cristo.

Confiar en el Señor Jesucristo y en su preciosa sangre derramada en la cruz nos


asegura la salvación eterna.

Salir de la casa de seguridad nos garantiza destrucción, pero mientras estemos en


la casa de aquel que fue crucificado estamos seguros.

4. la familia de Zaqueo. Lucas 19:9.

Jesús es la repuesta a todos los problemas.

Le estaba diciendo a zaqueó que, aunque era recaudador de impuesta tenía todo el
derecho de la salvación como cualquier israelita.

5. la familia de lidia. Hechos 16:11-14.

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