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Instituto educativo distrital técnico industrial

Curso básico de historia

Profesor : Darío gueber

Grado:6:7

La prehistoria

Nombre :

Sahid Hernández

Santa marta, magdalena


Introducción

Se realiza el siguiente trabajo con el fin de Investigar los tiempos antiguos del ser
humano, también reconocer cuales otros nombres se utilizaban para reconocer
dicho tiempo, reconocer cada tipo de paleolítico y como influía cada fase.
Objetivo general
 Reconocer e identificar la importancia de el periodo paleolítico

Objetivos específicos
 Estudiar el periodo paleolítico
 Identificar las etapas del periodo paleolítico
 Determinar la importancia del periodo paleolítico en la prehistoria
La prehistoria

El Periodo Paleolítico o Edad Antigua de la piedra, abarca desde los orígenes de la


vida hasta el surgimiento de las nuevas técnicas agrícolas, durante aquella época
se implementó el uso de herramientas como piedras talladas, huesos, cueros,
maderas, etc. Incluso es aquí donde el ser humano descubre el fuego. El término
fue creado por el arqueólogo John Lubbock en 1865, siendo este periodo el más
largo de la historia.

Aunque esta etapa se identifica con el uso de útiles de piedra tallada, también se
utilizaron otras materias primas orgánicas para construir diversos artefactos: hueso,
asta, madera, cuero, fibras vegetales, etc. Durante la mayor parte del Paleolítico
inferior las herramientas líticas eran gruesas, pesadas, toscas y difíciles de manejar,
pero a lo largo del tiempo fueron haciéndose cada vez más ligeras, pequeñas y
eficientes. El hombre del Paleolítico era nómada, es decir, su vida estaba
caracterizada por un desplazamiento continuo o periódico (estacional).

El periodo se divide en tres fases: Paleolítico Inferior, Paleolítico Medio,


Paleolítico Superior

Paleolítico inferior (2.5 millones a 120 000 a.C.)


En esta primera fase del Paleolítico vivieron los Homo habilis en la zona oriental de
África. Estos homínidos, que ya mostraban comportamiento grupal, organizados en
bandas de 15 a 20 individuos, llevaban una vida nómada, desplazándose en un
amplio territorio donde podían obtener alimento y establecerse durante periodos
cortos en refugios naturales, principalmente cuevas.

Los Homo erectus, que surgieron después, se organizaron en grupos más grandes
y mejor organizados que los Homo habilis. La lucha por la supervivencia debió́
impulsar la mutua colaboración para la creación de utensilios, la búsqueda de
alimento y refugio, así́ como la defensa contra los animales depredadores.

Los Homo erectus fabricaron herramientas más eficaces y ampliaron sus recursos
alimenticios al empezar a consumir animales. Entre esos utensilios destacan las
primeras hachas de mano o bifaces, que demuestran la existencia de concepciones
mentales avanzadas como la simetría.

En la fase final del Paleolítico inferior se comenzó́ a utilizar el fuego que, además
de ser fuente de luz y calor, ahuyentaba a los animales peligrosos y constituía el
único medio para modificar los recursos naturales, ya sea para la cocción de los
alimentos o para la fabricación de nuevos tipos de instrumentos. El grado de
organización social alcanzado por los erectus hizo necesaria la transmisión de ideas
y conocimientos, lo que debió́ estimular el surgimiento del lenguaje hablado.

Paleolítico medio (120 000 a 40 000 a.C.)

́ de una región a otra, se desarrolló


Este periodo, cuya medición varia
principalmente en Europa y en el próximo Oriente, y se caracterizó por la
presencia de los Homo sapiens de Neanderthal; aunque en la región asiática
existen evidencias de la presencia de los Homo sapiens sapiens de tipo Cro
Magnon, que ya tenían la estructura general de los seres humanos modernos.
Ambas especies compartieron los rigores de los cambios climáticos
producidos durante el Pleistoceno, era geológica caracterizada por periodos
glaciales e interglaciares.
La tecnología muestra un avance en la fabricación de instrumentos, como la
llamada técnica Levallois, que requería de mayor destreza que las anteriores.
Sin embargo, al no contar todavía con armas tipo proyectil, los cazadores
dependían de sistemas de acoso y de trampas para capturar a los miembros
más jóvenes y débiles de las especies animales. Asimismo, en esta etapa
aparecen los primeros indicios de que también se dedicaron a la pesca,
principalmente en ríos, aunque también existe evidencia de recolección de
productos marinos, como moluscos.
El comportamiento de ambas subespecies de Homo sapiens muestra en el
Paleolítico medio dos rasgos significativos: uno se refiere a que lograron
trasladarse, sobre todo los Neandertales, hacia territorios situados muy al
́ idos
norte de la zona libre de hielos a la que se habían limitado los homin
anteriores. El otro rasgo de gran importancia en el desarrollo de la cultura es
la posible existencia de la primera manifestación de creencias religiosas, lo
cual se infiere por los hallazgos arqueológicos ocurridos en varios sitios de
Europa y el próximo Oriente, que muestran la práctica deliberada de enterrar
a los muertos, lo que parece indicar la existencia de un pensamiento religioso
o, al menos, la creencia en la vida después de la muerte.

Paleolítico superior (40 000 a 10 000 a.C.)


En la primera fase de este periodo, neandertales y cromagnones convivieron
en Europa cerca de 10000 años, hasta la extinción de la especie Neanderthal
por causas que aun no se conocen con precisión. En esa época surgieron los
primeros cazadores-recolectores, con características sociales y económicas
bien definidas, impuestas por las condiciones de su forma de vida
determinada aun por el nomadismo.
Hombres y mujeres se organizaban en grupos unidos por lazos de
parentesco; y es probable que en ese tiempo se haya iniciado la división del
trabajo, cuya primera expresión debió́ ser la distribución de tareas de acuerdo
con el sexo. Mientras los hombres perseguían a las grandes presas de caza
o combatían con grupos rivales, las mujeres se dedicaban a la crianza de los
niños, a recolectar plantas y conseguir alimentos que no implicaran separarse
demasiado de sus hijos. Este hecho constituyó el fundamento primordial de
la familia humana, cuya importancia se incrementó con el paso del tiempo y
el surgimiento de nuevas necesidades.
En esta última fase del Paleolítico fue notable la evolución de la cultura en
diferentes partes del mundo. En particular en Europa y Asia la tecnología
presentó dos características: la difusión de técnicas novedosas para tallar la
piedra, y la aparición de un nuevo instrumental fabricado en hueso o asta.
En la industria lítica se utilizó la técnica laminar, la cual consistía en producir
instrumentos alargados, de bordes paralelos y cortantes, muy parecidos a los
cuchillos actuales. La tecnología cuya materia prima era el hueso, se orientó
hacia la fabricación de armas arrojadizas, muchas de las cuales muestran
una decoración que puede considerarse artística.

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