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¿QUÉ SON LOS OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE?

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), también conocidos


como Objetivos Mundiales , son un llamado universal a la adopción de
medidas para poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que
todas las personas gocen de paz y prosperidad.

Estos 17 Objetivos se basan en los logros de los Objetivos de Desarrollo


del Milenio, aunque incluyen nuevas esferas como el cambio climático, la
desigualdad económica, la innovación, el consumo sostenible y la paz y la
justicia, entre otras prioridades. Los Objetivos están interrelacionados,
con frecuencia la clave del éxito de uno involucrará las cuestiones más
frecuentemente vinculadas con otro.

Los ODS conllevan un espíritu de colaboración y pragmatismo para elegir


las mejores opciones con el fin de mejorar la vida, de manera sostenible,
para las generaciones futuras. Proporcionan orientaciones y metas claras
para su adopción por todos los países en conformidad con sus propias
prioridades y los desafíos ambientales del mundo en general.

Los ODS son una agenda inclusiva. Abordan las causas fundamentales de
la pobreza y nos unen para lograr un cambio positivo en beneficio de las
personas y el planeta.

"Erradicar la pobreza está en el corazón de la Agenda 2030, y también lo


está el compromiso de no dejar a nadie atrás", dijo el Administrador del
PNUD, Achim Steiner. "La Agenda ofrece una oportunidad única para
poner al mundo camino a un desarrollo más próspero y sostenible. En
muchos sentidos, refleja la razón por la que se creó el PNUD”, aseguró.

¿CUALES SON LOS OBJETIVOS DE DESARROLLO


SOSTENIBLE?
17 objetivos de Desarrollo Sostenible:

1. Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.

2. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la


nutrición y promover la agricultura sostenible.

3. Garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas


las edades.

4. Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover


oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.

5. Lograr la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de todas las


mujeres y niñas

6. Garantizar la disponibilidad de agua y su ordenación sostenible y el


saneamiento para todos.

7. Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y


moderna para todos.

8. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el


empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos.

9. Construir infraestructura resiliente, promover la industrialización inclusiva


y sostenible y fomentar la innovación.

10. Reducir la desigualdad en y entre los países.

11. Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos,
seguros, resilientes y sostenibles.

12. Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.

13. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus


efectos (tomando nota de los acuerdos celebrados en el foro de la
Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático).

14. Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los
recursos marinos para el desarrollo sostenible.

15. Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas


terrestres, efectuar una ordenación sostenible de los bosques, luchar
contra la desertificación, detener y revertir la degradación de las tierras y
poner freno a la pérdida de la diversidad biológica.
16. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible,
facilitar el acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces,
responsables e inclusivas a todos los niveles.

17. Fortalecer los medios de ejecución y revitalizar la alianza mundial para el


desarrollo sostenible.

La Asamblea General adopta la Agenda 2030 para el


Desarrollo Sostenible

La Asamblea General de la ONU adoptó hoy la Agenda 2030 para el


Desarrollo Sostenible, un plan de acción a favor de las personas, el
planeta y la prosperidad, que también tiene la intención de fortalecer la
paz universal y el acceso a la justicia.

Los Estados miembros de la Naciones Unidas aprobaron una resolución


en la que reconocen que el mayor desafío del mundo actual es la
erradicación de la pobreza y afirman que sin lograrla no puede haber
desarrollo sostenible.

La Agenda plantea 17 Objetivos con 169 metas de carácter integrado e


indivisible que abarcan las esferas económica, social y ambiental.

La nueva estrategia regirá los programas de desarrollo mundiales


durante los próximos 15 años. Al adoptarla, los Estados se
comprometieron a movilizar los medios necesarios para su
implementación mediante alianzas centradas especialmente en las
necesidades de los más pobres y vulnerables.

«Estamos resueltos a poner fin a la pobreza y el hambre en todo el mundo de aquí a 2030,
a combatir las desigualdades dentro de los países y entre ellos, a construir sociedades
pacíficas, justas e inclusivas, a proteger los derechos humanos y promover la igualdad
entre los géneros y el empoderamiento de las mujeres y las niñas, y a garantizar una
protección duradera del planeta y sus recursos naturales”, señalaron los Estados en la
resolución.»
Los 17 Objetivos de la Agenda se elaboraron en más de dos años de
consultas públicas, interacción con la sociedad civil y negociaciones
entre los países.

La Agenda implica un compromiso común y universal, no obstante, puesto


que cada país enfrenta retos específicos en su búsqueda del desarrollo
sostenible, los Estados tienen soberanía plena sobre su riqueza, recursos
y actividad económica, y cada uno fijará sus propias metas nacionales,
apegándose a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), dispone el
texto aprobado por la Asamblea General.

Además de poner fin a la pobreza en el mundo, los ODS incluyen, entre


otros puntos, erradicar el hambre y lograr la seguridad alimentaria;
garantizar una vida sana y una educación de calidad; lograr la igualdad
de género; asegurar el acceso al agua y la energía; promover el
crecimiento económico sostenido; adoptar medidas urgentes contra el
cambio climático; promover la paz y facilitar el acceso a la justicia.

Centro de noticias de la ONU

Objetivo 5
Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y las
niñas

En un documento titulado “No Empowerment without Rights, No


Rights without Politics” (“no hay empoderamiento sin derechos, no
hay derechos sin política”) que se redactó para un proyecto de
evaluación de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM),
señalamos que “... los avances hacia la igualdad de género y el
empoderamiento de las mujeres en la agenda para el desarrollo
requieren un enfoque basado en los derechos humanos, y requieren
apoyo para que el movimiento de mujeres active e impulse la
agenda. En el tercer ODM no aparece ninguna de las dos cosas. El
empoderamiento requiere capacidad de actuar en varias
dimensiones: sexual, reproductiva, económica, jurídica y relativa a
las políticas. Sin embargo, en el tercer ODM se enmarca el
empoderamiento de las mujeres en la reducción de las
desigualdades educativas. Al omitir otros derechos y no reconocer
los múltiples derechos humanos interdependientes e indivisibles
de las mujeres, se distorsiona el objetivo del empoderamiento y se
compartimenta el desarrollo ...”.
También señalamos la función de las “organizaciones de mujeres …
[como] agentes clave para abrirse camino entre esas distorsiones
y compartimentos a todos los niveles que, por tanto, son
esenciales para llevar adelante la agenda de la igualdad de género.
Sin embargo, las políticas que gobiernan el establecimiento de
agendas también influyen en las prioridades de financiación, de
manera que el apoyo financiero para las organizaciones de mujeres
y para proyectos sustantivos de empoderamiento de las mujeres es
limitado” (Sen y Mukherjee, 2014, pág. 188).
Muchas cosas han cambiado desde que se formularon los ODM,
poco después de la Declaración del Milenio del año 2000. ¿O quizá
no tantas? Es indudablemente cierto que, en comparación con la
formulación de los ODM, el proceso de los Objetivos de Desarrollo
Sostenible (ODS) ha sido más abierto e inclusivo, impulsado por los
Estados Miembros de las Naciones Unidas, y ha generado un
debate amplio e intenso. Y aun así, en lo que a justicia de género
se refiere, los objetivos tienen un parecido inquietante. El tercer
ODM se comprometía a “Promover la igualdad entre los sexos y el
empoderamiento de la mujer”; mientras que en el ODS 5 (según lo
acordado hasta el momento a través del proceso del Grupo de
Trabajo Abierto de la Asamblea General) (Naciones Unidas, 2014)
se insta a “Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las
mujeres y las niñas”. Ahora bien, dos importantes diferencias a
este nivel son la inclusión explícita de las niñas y de la palabra
“todas”, que se puede utilizar para abordar los problemas que
afectan a las más marginadas y oprimidas. En el nivel de las metas
que incluye el objetivo surgen más diferencias: mientras que el
tercer ODM tiene una única meta centrada en la educación, el ODS
5 propone un conjunto de metas para poner fin a la discriminación,
la violencia y las prácticas nocivas; reconocer y valorar los
cuidados no remunerados; asegurar la participación plena y la
igualdad de oportunidades de liderazgo en la toma de decisiones; y
asegurar el acceso universal a la salud sexual y reproductiva y los
derechos reproductivos. Queda por ver cómo se traducirán en
indicadores el ODS 5 y sus metas propuestas, y si esos indicadores
serán efectivos y se podrán utilizar para el proceso de supervisión
(cuando se pongan a prueba).
No obstante, pese a los avances logrados en los ODM, sigue
habiendo una limitación preocupante en el ODS 5: la falta de un
claro reconocimiento de los derechos humanos de las mujeres y
las niñas. Este artículo se redacta poco después de haberse
librado una amarga batalla por la afirmación de los derechos
humanos de las mujeres y el papel de las defensoras de los
derechos humanos y los defensores de los derechos de las mujeres
en el período de sesiones de este año de la Comisión de la
Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW) de las Naciones
Unidas. Lo que ocurre en la Comisión es importante porque se
trata de una institución que se creó para examinar y supervisar, y
porque se encuentra bajo los auspicios de ONU-Mujeres, que será
el principal instrumento operacional para la consecución del ODS
5.
En la Declaración política de la CSW (Naciones Unidas, 2015), que
es el principal resultado del período de sesiones, los derechos
humanos aparecen primeramente en un párrafo introductorio; una
segunda vez en el párrafo 2, donde se reconoce que la aplicación
de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing y la
Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de
Discriminación contra la Mujer se refuerzan mutuamente para el
ejercicio de los derechos humanos de las mujeres y las niñas; y de
nuevo en el párrafo 5, donde se indica que los derechos humanos
de las mujeres son una de las 12 esferas de especial preocupación
(de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing). El intento de
que los derechos humanos fueran el hilo conductor de todo el
documento no prosperó, pero tampoco el intento de eliminar todas
las menciones. No obstante, en el principal párrafo dispositivo
(párr. 6), en el que los gobiernos se comprometen a adoptar
medidas, no hay ninguna referencia explícita a los derechos
humanos, ni tampoco en ningún otro párrafo.
El acuerdo para incluir las limitadas menciones a los derechos
humanos en la Declaración política solo se logró tras largas
negociaciones en las que se combatieron alegaciones tales como
las de un Estado observador según el cual los derechos de las
mujeres no eran más que una de las 12 esferas de la Declaración y
Plataforma de Acción de Beijing y no merecían una mención
especial. El hecho de que los derechos humanos de las mujeres y
las niñas deban ser motivo de disputa 15 años después de la
Declaración del Milenio y 20 años después de la Cuarta
Conferencia Mundial sobre la Mujer es producto del rechazo. Este
rechazo trata de neutralizar los avances y los cambios muy reales
en las normas y los marcos para el ejercicio de los derechos
humanos de las mujeres que acordaron por consenso los Estados
Miembros durante las conferencias de las Naciones Unidas (en
Viena, El Cairo y Beijing) en la década de 1990. Si bien la
financiación para poner en práctica esas normas y marcos ha sido
lamentablemente insuficiente, como señalan Sen y Mukherjee en
sus artículos, es esencial que se hayan establecido las normas.
Los derechos humanos son motivo de disputa porque, a diferencia
de las políticas y los programas, suelen ser más claramente
justiciables y pueden utilizarse para que los gobiernos y otras
entidades respondan de sus actos u omisiones. El rechazo a los
derechos humanos de las mujeres ha estado liderado por Estados
Miembros (y Estados observadores) de las Naciones Unidas con
malos antecedentes en materia de discriminación contra la mujer,
así como de leyes, políticas y prácticas que sustentan la
desigualdad de género en una amplia gama de cuestiones. Un
recordatorio elocuente de quiénes son los principales
patrocinadores del rechazo fue la negativa a reconocer en la
Declaración política el papel fundamental de las defensoras de los
derechos humanos y los defensores de los derechos de la mujer
que arriesgan su libertad y su vida con frecuencia para proteger y
promover los derechos humanos de las niñas y las mujeres en
situación de riesgo. Sin embargo, la falta no es solo de ellos. La
negativa de otros Estados Miembros a reconocer que los derechos
económicos, sociales y culturales están interrelacionados y son
inseparables de los derechos civiles y políticos también representa
un serio desafío para avanzar hacia el cumplimiento del ODS 5.
Por último, también hay que preguntarse: ¿dónde está el meollo?
Cada ODS (como se indica en el informe del Grupo de Trabajo
Abierto) va acompañado de las metas y los medios de
implementación. En los vinculados al ODS 5 se mencionan las
reformas jurídicas y la tecnología (5.a, 5.b y 5.c), pero no se hace
referencia a la financiación. Teniendo en cuenta que la principal
deficiencia en el cumplimiento del tercer ODM fue la escasez de
recursos financieros, la dificultad de financiar el ODS 5 seguirá
representando un obstáculo fundamental mientras no pase a ser
un asunto central de sus medios de implementación.

LOGRAR LA IGUALDAD ENTRE LOS


GÉNEROS Y EMPODERAR A TODAS LAS
MUJERES Y LAS NIÑAS
La igualdad entre los géneros no es solo un derecho humano fundamental, sino
la base necesaria para conseguir un mundo pacífico, próspero y sostenible.

Si se facilita a las mujeres y niñas igualdad en el acceso a la educación,


atención médica, un trabajo decente y representación en los procesos de
adopción de decisiones políticas y económicas, se impulsarán las economías
sostenibles y se beneficiará a las sociedades y a la humanidad en su conjunto.
DATOS Y CIFRAS
 Dos tercios de los países de las regiones en desarrollo han logrado la equidad
de género en la educación primaria

 En 1990, en Asia meridional había 74 niñas matriculadas en la escuela por


cada 100 niños. En 2012, las tasas eran iguales.

 En África Subsahariana, Oceanía y Asia Occidental, las niñas aún se enfrentan


a obstáculos para ingresar en la escuela primaria y secundaria

 En el norte de África las mujeres suponen menos del 20% de los empleos
remunerados en el sector no agrícola. En el resto del mundo, ha crecido del 35% en
1990 al 41% en 2015

 En 46 países, las mujeres ocupan más del 30% de los escaños en los
parlamentos nacionales al menos en una de las cámaras
METAS E INDICADORES
METAS INDICADORES

Poner fin a todas las formas Determinar si existen o no


de discriminación contra todas las marcos jurídicos para promover, hacer cumplir y
mujeres y las niñas en todo el supervisar la igualdad y la no discriminación por
mundo razón de sexo

Proporción de mujeres y niñas a partir de


15 años de edad que han sufrido violencia física,

Eliminar todas las formas de sexual o psicológica a manos de su actual o


violencia contra todas las mujeres y anterior pareja en los últimos 12 meses,
las niñas en los ámbitos público y desglosada por forma de violencia y edad

privado, incluidas la trata y la Proporción de mujeres y niñas a partir de


explotación sexual y otros tipos de 15 años de edad que han sufrido violencia sexual
explotación a manos de personas que no eran su pareja en
los últimos 12 meses, desglosada por edad y
lugar del hecho

Eliminar todas las prácticas Proporción de mujeres de entre 20 y 24


años que estaban casadas o mantenían una
unión estable antes de cumplir los 15 años y
nocivas, como el matrimonio infantil,
antes de cumplir los 18 años
precoz y forzado y la mutilación
Proporción de niñas y mujeres de entre 15
genital femenina
y 49 años que han sufrido mutilación o ablación
genital femenina, desglosada por edad

Reconocer y valorar los


Proporción de tiempo dedicado al trabajo
cuidados no remunerados y el
doméstico y asistencial no remunerado,
trabajo doméstico no remunerado
desglosada por sexo, edad y ubicación
mediante.

Velar por la participación


Proporción de escaños ocupados por
plena y efectiva de las mujeres y la
mujeres en a) los parlamentos nacionales y b)
igualdad de oportunidades de
los gobiernos locales
liderazgo a niveles de toma de
Proporción de mujeres en cargos
decisiones en la vida política,
directivos
económica y pública.

Proporción de mujeres de entre 15 y 49


Garantizar el acceso
años que toman sus propias decisiones
universal a la salud sexual y
informadas sobre las relaciones sexuales, el uso
reproductiva y los derechos
de anticonceptivos y la atención de la salud
reproductivos, de conformidad con el
reproductiva
Programa de Acción de la
Número de países con leyes
Conferencia Internacional sobre la
y reglamentos que garantizan a los
Población y el Desarrollo, la
hombres y las mujeres a partir de los 15 años de
Plataforma de Acción de Beijing y los
edad un acceso pleno e igualitario a los
documentos finales de sus
servicios de salud sexual y reproductiva y a la
conferencias de examen
información y educación al respecto

Emprender reformas que a) Proporción del total de la población


otorguen a las mujeres el derecho a agrícola con derechos de propiedad o derechos
los recursos económicos en seguros sobre tierras agrícolas, desglosada
condiciones de igualdad, así como el por sexo; y b) proporción de mujeres entre los
acceso a la propiedad, al control de propietarios o los titulares de derechos
sobre tierras agrícolas, desglosada por tipo de
tenencia

Proporción de países cuyo ordenamiento


las tierras y otros bienes. jurídico (incluido el
derecho consuetudinario) garantiza la igualdad
de derechos de la
mujer a la propiedad o el control de las tierras

Mejorar el uso de la
tecnología instrumental, en particular Proporción de personas que poseen un
la tecnología de la información y las teléfono móvil, desglosada por sexo
comunicaciones.

Aprobar y fortalecer políticas


Proporción de países con sistemas para el
acertadas y leyes aplicables para
seguimiento de la igualdad de género y el
promover la igualdad entre los
empoderamiento de las mujeres y la asignación
géneros y el empoderamiento de las
de fondos públicos para ese fin
mujeres y las niñas.

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