Riesgos Sociales en la Adolescencia

Como bien se sabe, la adolescencia es el paso de niñez a la adultez donde ocurre una serie de
cambios que hacen que este período sea algo problemático, rebelde o conflictivo. En esta etapa de
la vida estas transformaciones van a estar influidas por factores sociales, culturales, familiares y
personales que respaldaran el desarrollo de conductas propias de la etapa adulta. El riesgo social,
en este período supone la existencia de una ambiente que podría derivar en situaciones que ponen
en riesgo la integridad física y psicológica de un adolescente y que tendría implicaciones en su salud
actual, como persona y que pueden tener repercusiones en la edad adulta.

Dentro de los factores que pueden afectar al adolescente tenemos las enfermedades que pueden
atacar la capacidad de los adolescentes para crecer y desarrollarse plenamente y que podrían ser
consecuencia de una vida desordenada de parte de los padres durante su procreación.
Generalmente, los problemas más comunes que ponen en riesgo al joven, se relacionan con el
consumo de alcohol y las drogas lo cual es nocivo entre los adolescentes ya que reduce el control
de lo que hacemos y aumenta los comportamientos de riesgo, como las relaciones sexuales no
protegidas, que puede llevarnos a embarazos a temprana edad, enfermedades de transmisión
sexual, igual nos lleva a comportamientos peligrosos que pueden provocar accidentes, violencia en
todos los aspectos y muertes prematuras. Además, puede llevarnos a problemas de salud en una
etapa posterior de la vida e influir en la esperanza de vida.

Como puede verse, las conductas y factores de riesgo en adolescentes son responsables de la
salud y bienestar de ellos en esta etapa y para contribuir a prevenir estos riesgos y conductas,
primeramente se debe recurrir a la familia la cual tiene un peso importante en la prevención de
conductas de riesgo, ya que mediante la educación y buenos ejemplos permite el desarrollo sano
en el adolescente, en una familia los padres y adultos son básicos por la influencia que ejercen en el
desarrollo de hábitos, formas de expresar afectos, relacionarse con los demás, de resolver conflictos
y de desarrollar conductas de cuidado. Las formas de crianza pueden tener un efecto positivo o
negativo en las conductas de riesgo en el adolescente.

Por ello, fomentar comportamientos saludables durante la adolescencia y adoptar medidas para
proteger mejor a los jóvenes contra los riesgos de salud es fundamental para la prevención de estos
problemas de en la edad adulta, así como para la salud futura de los países y su capacidad para
desarrollarse y prosperar.
El consumo de alcohol, tabaco, drogas la falta de actividad física, las relaciones sexuales sin
protección y la exposición a la violencia pueden poner en peligro no solo su salud actual, como ya
se dijo, sino también la de su adultez e incluso la salud de sus futuros hijos.