Pontificia Universidad Javeriana

Ana Paula García García

LOS SIGNOS A TRAVÉS DEL CONTEXTO Y EL ESPACIO

A través del tiempo los signos y las representaciones cambian. Evoluciona el espacio y la
concepción de la idea de signo. Surgen nuevos lugares reales y digitales, las culturas
incorporan a su historia nuevos elementos, las creencias se esparcen y el mundo interpreta las
semiósferas pertenecientes a cada región del planeta, aunque algunos choquen entre sí y no
logren entenderse. Sin embargo, es posible analizar cada uno de estos temas en el mundo
contemporáneo y a su vez entender algunas razones de todo lo que pasa a nivel de
interpretación sígnica. En este trabajo se pretende mostrar el papel de la tecnología en la
difusión de los signos artísticos, las creencias y formas de expresión artesanales de algunas
culturas y finalmente el análisis del conflicto moderno entre el mundo occidental y el grupo
terrorista Isis.

1. EL ARTE Y SU DIGITALIZACIÓN

La nueva era ha traído consigo, además de la tecnología y el consumo masivo, nuevos

modos de desarrollar los diferentes tipos de industrias gracias a Internet. La web es una
plataforma capaz de almacenar millones de datos, es un soporte descentralizado de las
comunicaciones mundiales y logra conectar miles de computadoras, celulares, tablets y demás
equipos con acceso al ciberespacio. Es por esta razón que se ha convertido en un medio
transformador para las diferentes industrias, pues logra hacer más eficiente su publicidad y
comunicación con sus clientes, entre otras funciones.

Una de estas industrias que ha evolucionado apoyándose en las nuevas tecnologías es la

cultural, y es ahí donde encontramos el net.art el cual ha estado en constante proceso de
transformación en los últimos años. Ha sido una de las innovaciones más importantes dentro
del campo artístico y tecnológico, pues permite la interacción del vidente con las obras desde
la comodidad de su hogar. Consiste en una producción artística situada en la web que es
efectiva gracias a que contiene hipertextos, los cuales permiten a las personas elegir el camino
que recorrerán virtualmente por la galería tecnológica.

El net.art es el resultado de la creatividad ligada a las nuevas tecnologías de la

comunicación, además de la innovación y el trabajo de artistas que buscan nuevos espacios
que traspasen el ambiente físico. Es el resultado de la transformación, no solo de las
industrias, sino de la era contemporánea que ha traído consigo constantes cambios, modos de
consumo y el desarrollo del mundo digital. Hay que entender que desde la llegada de internet,
la apreciación y forma de entender la realidad ha cambiado.

Por otro lado, esta plataforma, dentro del concepto de arte, “Es heredero de varias
características propias de los movimientos de vanguardia, como son el cuestionamiento del
papel del autor, del carácter único de la obra, de su condición de mercancía, etc. y se inserta
dentro de la tradición de cuestionamiento de la institución artística.” (Albert, 2011) Así que si
bien es considerado arte en la era contemporánea, para muchos eruditos de arte clásico puede
ser imperdonable que la esencia de la obra se pierda al ser esparcida a través de una galería
virtual.

David Ross, el director del Museo de Arte Moderno de San Francisco desde 1992, habla de
los rasgos que caracterizan el arte net. Entre ellos resalta la autoconstrucción del visitante y la
promoción del diálogo con el autor, gracias a la interactividad brindada por los hipertextos, las
barreras económicas y sociales se han tratado de borrar gracias a su fácil acceso, es efímero y
la textura es nueva: hay nueva estética impredecible. También sus simulaciones de
construcciones son creíbles y hace más cómoda la visita del espectador. Además de que
cuenta con la privacidad deseada por el visitante ya que es posible acceder desde el hogar y el
feedback que se da en la plataforma permite el diálogo crítico y productivo.

Por otra parte, Ross menciona que en el net.art se trabaja en pequeña escala y El morphing
de imágenes y textos es único, pues hay una enorme capacidad de transformarlos. También es
un espacio transaccional, pues aunque no sea directamente mercantilizable, es posible hacer
negocio a través de él. La red es anárquica y peligrosa. Es lo que conlleva la absoluta libertad
del medio, pero es algo con lo que hay que convivir, pues aunque parezca una desventaja,
posee también una gran ventaja: la libre expresión ante una sociedad global.
 Así que conociendo en qué consiste el net.art es posible adentrarse más en un mundo
nuevo que está transformando la exposición del arte. El concepto está cambiando, pues intenta
mezclar la atemporalidad y el espacio virtual, produciendo así arte digital que no diferencia
edad ni capacidad económica.

2. ASPECTOS DE LA CULTURA

La cultura es la forma de vivir de una sociedad y puede ser expresada a través de las
creencias, normas y los valores compartidos por todos sus miembros. Dentro de estas pueden
verse las interpretaciones y representaciones que hacen particularmente del mundo y su
entorno. Ahí mismo se pueden ver las artesanías y las supersticiones diferentes, dependiendo
del universo sígnico al que pertenecen.

Las artesanías además de ser una actividad económica, son expresiones del arte de una
cultura. Existen trabajos en diferentes superficies y con gran variedad de materiales que
representan ideas, vidas y creencias dentro de una semiosfera.

La comunidad Kamsá, de Putumayo, es un grupo indígena agricultor y ganadero, que

además se dedica a las artesanías, entre las cuales se encuentran: mochilas, ruanas, esteras y
cinturones (Vistazo 43). Utilizan cabuya para tejer sillas, macetas para frutas y flores que
luego serán comercializadas. También hacen mochilas, adornos con hilos y bolitas de colores,
con los cuales pueden expresar características de su territorio y su cultura. Por ejemplo, en el
programa Vistazo 43, se observa como las señoras que realizan esta actividad dibujan el sol, la
autoridad de su comunidad, flores típicas de Putumayo, las lombrices propias de su
alimentación, loros de la región y algunos animales.

Hay que tener en cuenta que históricamente,

“la región del Valle de Sibundoy donde habitan los Kamsá ha sido un territorio conflictivo,
por su ubicación estratégica que ha servido como corredor de diferentes mercancías, recursos
y agentes. En este valle, conquistadores, misioneros, encomenderos, colonos, comerciantes y
grupos al margen de la ley, en diversos momentos históricos han generado actitudes y acciones
explícitas de colonialidad. A la comunidad Kamsá se le ha despojado sistemáticamente de su
territorio físico y simbólico, y se le han impuesto de forma violenta y agresiva otras formas de
vida, otros conocimientos, otros valores, otras relaciones tempo-espaciales. Las relaciones de
 poder que se han generado ante la presencia de diversas instituciones y organizaciones han
propiciado espacios de luchas, suscitando competencias por diferentes patrimonios
económicos, sociales y simbólicos. En estas luchas han existido imposiciones, pero también
formas de resistencia grandiosa y valiosa como son las logradas a través de sus formas de
expresión artesanal.” (Barrera, 2011)

Así que en ese sentido, su arte significa un reto mayor, puesto que ha atravesado momentos
en los que ha estado a punto de extinguirse por la violencia que ha vivido su comunidad.
Ahora sigue siendo parte del trabajo de las mujeres del grupo indígena y a su vez mantiene el
valor económico y cultural que tiene, y aunque en Colombia haya bajado la compra de
artesanías, esta comunidad sigue luchando por destacarse en este ámbito.

Por otro lado, se encuentra el aspecto de las creencias de las culturas, y allí dentro las
Supersticiones. Estas son ideas construidas colectivamente a través del tiempo y la posición
geográfica, que valoran desmedidamente algún objeto, acción, rito o suceso. Según la Rae, es
una creencia extraña a la fe religiosa y contraria a la razón. A continuación se hablará de una
superstición que aunque no sea un invento nuevo, aún se practica en México y el llano de
Colombia y Venezuela, entre otros lugares. Se trata de la mata de sábila y los beneficios que
se le atribuyen. Se cree que ponerla en la puerta de la casa con lazos color rojo amarrados
traerá suerte, pues se considera que es una planta capaz de absorber la mala energía en el
ambiente.

El ritual comienza comprando una planta pequeña de sábila para esperar a que llegue una
noche con la Luna en cuarto creciente, en ese momento se saca de la maceta sin dañar sus
raíces y se dejar reposar tres días. Transcurrido el tiempo se hace un lazo con listón rojo en la
raíz de la planta y se repite la siguiente oración:

"Sábila bendita, trae a mi casa la paz, la salud y la economía. Espero que desde hoy
escuches mi petición y me concedas lo que te pido. Libera mi hogar de todo lo
negativo y a las personas que en él vivimos". (Santa Muerte, 2015)

Después de rezar, se cuelga detrás de la puerta o sobre ella y deberá cambiarse una vez esté
seca. Sin embargo, si la persona quiere conservar la sábila en una matera, podrá realizar la
misma oración y amarrarle el listón rojo a sus pencas. Si se desea, pueden ponerse monedas
en la tierra de la maceta.

A pesar de que esta sea una superstición usada en nuestros días, hay que tener en cuenta
que no fue creada hace poco, de hecho es la evolución de ritos provenientes de
aproximadamente el siglo I en Europa. Allá “la adoración a los árboles y las plantas jugó un
papel muy importante para la concepción de la espiritualidad y las costumbre culturales.”
(García, 2016). Según narra James George Frazer en su libro La Rama Dorada, los antiguos
europeos creían que en cada árbol y planta habitaba un espíritu, el cual cumplía una misión en
la tierra: Cuidar el clima, los cultivos y la prosperidad. Por esta razón los adoraban y les
celebraban cada solsticio con festividades especiales de cada región. En mayo se celebraba el
árbol de mayo, solsticio de verano, en el cual cortaban palos de mayo para después
decorarlos. Había uno gigante para el centro del pueblo y otros más pequeños para cada casa.
“La intención de estas costumbres es atraer a la aldea y a cada casa en particular las
bendiciones que el espíritu del árbol puede otorgar.” (Frazer, pp. 154)

Así que al analizar la costumbre con la sábila, se evidencia la evolución de esta

superstición. Hay que tener en cuenta que las representaciones cambian con el tiempo y el
contexto. El universo sígnico, llamado así por Pierce, fue ampliándose por Europa y
posteriormente por otras partes del mundo, mezclándose con los imaginarios colectivos de
otras culturas. Obteniendo como resultado el sincretismo y la creación de nuevas
supersticiones y costumbres.

3. CONFLICTOS INTERCULTURALES

A la imposibilidad de interpretar los símbolos en una cultura distinta de la propia se la

denomina “choque cultural” (Aguirre, 1997) Dentro de una cultura los signos y costumbres
empleados son vistos de buena forma, pero al salir de esta semiósfera se encontrarán otras
formas de vivir, de tener costumbres y de interpretar el mundo. Puede que para algunos las
creencias de otros sean respetadas, como puede que las consideren un motivo de burla.
También puede que dentro de la cultura de unos, las costumbres de los otros universos sean
mal vistos. Y de todo eso, nacen los choques culturales entre las diferentes semiósferas.
 En el caso del conflicto entre el grupo terrorista Isis, y el mundo occidental, especialmente
el Norteamericano, existe sobre todo un choque cultural que se ha venido agrandando gracias
a detalles ofensivos entre ambas culturas y la constante sed de venganza.

Desde hace más de diez años la xenofobia hacia los islámicos ha ido aumentando a nivel
global, como si se tratara del mismo demonio oculto en un grupo que dice proclamar una
religión. Pero realmente, ¿a qué se debe esta concepción frente a las personas pertenecientes a
una religión u otra cultura?

Evidentemente nos encontramos en otra época, donde la compasión por las víctimas es un
tema de importancia a nivel mundial (Girard, 2002) Todos nos hemos concientizado de
aquello que significa matar a alguien o lo indignante que resulta que asesinen a otro. Es por
ello que grupos extremistas en la actualidad son caracterizados como demonios no solo por
sus radicales ideas, sino por sus terribles acciones que han implicado la muerte de muchas
personas, las cuales, en su mayoría, han sido inocentes y ajenos hacia dicho conflicto.
Además, se trata de aquellos que dicen pertenecer al Islam. Es por esta razón que desde los
ojos occidentales, las culturas de medio oriente causan terror.

Así que por una parte, se trata de un conflicto religioso y por el otro cultural. Mientras que
las personas de medio oriente han sido invisibilizadas en una cultura global, los
norteamericanos han sido el centro del mundo. Todos estos atributos se deben a su
representación del capitalismo y su poder militar que está por encima de muchos países y
hacen ver su fuerza. Sin embargo, las torres gemelas, la máxima representación del
capitalismo, fueron derribadas por grupos terroristas pertenecientes al islam, y a su vez, el
pentágono, el cual era la máxima representación del poder militar. Así por ese lado se hizo
una humillación a la cultura estadounidense. Como Verdu lo explica en el planeta americano
(2006) los norteamericanos sienten gran orgullo por su cultura y por ello no se fijan en
modelos de otros países, tienen autonomía y consumo excesivo. Aman el dinero después de a
Dios, pues el dólar ha sido una de las monedas más estables y puede proporcionarles
felicidad. Así que sus orgullos y amores, se vieron afectados en ese atentado.

Siempre atentar contra los signos y representaciones respetadas por alguien más será
negativo. En Estados Unidos comenzó la desinformación, tras de esta la sed de venganza y
con ella, la xenofobia hacia el mundo de medio oriente. Los atentados a USA generó el odio
inmediato hacia todo medio oriente. Las personas basan su argumento en la cultura machista
de los musulmanes, pero detrás de eso hay pánico hacia los grupos radicales. Sin embargo, si
es válido resaltar que dentro de la cultura islámica, las mujeres deben usar burka y vestir sin
ceñir el cuerpo, pertenecer a la casa y a un hombre. Cosa que en occidente resulta distinto,
pues en la mayoría de países visibles a nivel económico, las mujeres son una fuerza tan
respetada como los hombres. Ahí ya existe un roce intercultural en el modo de vestir y en la
concepción de la mujer.

Por otra parte, los estadounidenses sienten una amor por Dios impresionante, el 75% de la
población es cristiana protestante (Verdu, 2006) y todo lo justifican en Dios. Frente a eso, en
medio oriente está el Islam, religión que decían profesar aquellos que atacaron el 11 de
septiembre del 2001. El Islam tiene la misma historia bíblica del cristianismo, y aunque en
ninguna religión esté contemplado el sacrificio humano (los musulmanes permiten el animal),
los terroristas han atentado en Bruselas, Turquía, Francia etc., además de secuestros que
terminaban en homicidios grabados. Así que por esa parte, existe un choque entre los grupos
terroristas y los occidentales que le retribuyen la culpa a todos los pertenecientes al islam.
Aunque Al-Qaeda e ISIS estén en contra, ambos han actuado de manera similar.

Si se parte de que ninguna religión tiene la verdad absoluta y de que hasta este momento
nadie ha podido comprobar nada de lo que en ellas se promete, entonces es fácil deducir que
se trata de una guerra innecesaria. Además de que no sólo implica a los más religiosos, sino a
toda la sociedad y aparte de haberse convertido en una guerra mediática también es una
amenaza física contundente. Ejemplo de ello es que el judaísmo controle los medios masivos
del mundo y de que en los últimos tiempos musulmanes hayan cometido graves atentados.

Conocidos como ISIS (Islamic States of Iraq and Siria) han llegado estos “guerreros” que
volvieron a traer el miedo a los habitantes del mundo, aunque algunos sean más vulnerables a
sus acciones bélicas que otros. Curiosamente aquellos que usan públicamente la sigla ISIS
para referirse a ellos, ya corren un inmenso riego, pues debe partirse de que no se llaman a sí
mismos con este nombre, sino que por el contrario, lo rechazan al ser un término peyorativo
que en árabe da a entender que se trata de algo para aplastar, ellos mismos prefieren ser
llamados Daesh (Chirinos, 2015). Por otra parte se encuentra el argumento dado por el
Ministro Nacional francés al hacer un llamado a su país, diciendo que no es correcto alabarlos
de esa forma con el nombre otorgado. Ni son un estado real con poder político, ni son de todo
Irak o Siria, se les está atribuyendo un poder que no tiene. Sencillamente son una
organización comandada por un califa (en musulmán, príncipe y sucesor de Mahoma), pero
que a su vez, le brinda la libertad a sus miembros de decidir el momento en el que quieran
actuar y por esta razón, no existe un orden ni una planeación estricta de los atentados.

A finales del 2014 se empezaron a hacer virales varios videos donde un hombre
enmascarado decapitaba a algún prisionero que días antes había desaparecido, y ahora estaba
vestido de naranja. En 2015 inició su reconocimiento global gracias a los homicidios llevados
a cabo en la sede del diario de Charlie Hebdo en París, como protesta a una indignación por su
conocida sátira contra su credo (Renwick, 2016). Más adelante vino lo de Bruselas y luego un
extremista solitario en Orlando. Todo como forma de defensa a sus creencias radicales.
Aunque estos actos no sean justificables, es necesario reforzar que en las sátiras del diario
Charlie Hebdo hubo grandes faltas de respeto a una cultura, pues se “atentó” contra todos los
musulmanes, creyentes de Alá.

Es por todo esto que el mundo se encuentra en un punto de retroceso, pareciera que
hubiese decidido volver a las cruzadas medievales en las que todos debían tener la misma
creencia religiosa o sufrían las consecuencias. El siglo XXI está en pleno inicio y aun así el
comportamiento de estos seres parece haber sido tomado del XII. Se supone que se ha creado
compasión por las víctimas, pero a su vez esto responde a que se está intentando crear una
nueva tendencia a migrar al cristianismo, que, al fin y al cabo, es una religión muy parecida al
islam y al judaísmo, pues comparten la misma historia bíblica.

Y más allá de las diferencias religiosas, está el irrespeto a las costumbres de regiones del
mundo completamente diferente. Esto, más allá de diferencias es intolerancia, pues no hay
tolerancia hacia las diferencias ideológicas y tradicionales.

BIBLIOGRAFÍA

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Chirinos, C. (16.11.2015) ¿Por qué a ISIS lo quieren llamar a hora DAESH. Univision
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