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2. La Corte IDH confirma que en este caso no hace falta agotar los
recursos internos
La Corte aclara en su resolución que, en esta etapa de los casos, en los que
ya ha sido emitida una sentencia de fondo, no es aplicable el requisito de
agotamiento de los recursos internos establecido en el artículo 46 de la
CADH[4]. Esto último se hace todavía más evidente toda vez que la
ausencia de dicho requisito se configura como una causal de improcedencia
que impide que un caso pueda ser resuelto en el marco del sistema
interamericano. No obstante, tanto el caso de Barrios Altos como el de La
Cantuta YA fueron resueltos por la Corte IDH en los años 2001 y 2006,
respectivamente y actualmente solo queda pendiente verificar si el Estado
peruano ha dado cumplimiento a todos los extremos ordenados por el
Tribunal en casa una de sus sentencias.
Uno de los puntos más sólidos en la decisión del Tribunal, es, sin duda, el
afirmar que existe una “tendencia regional orientada a la prohibición expresa
del indulto cuando se trata de graves violaciones a los derechos humanos o
de crímenes internacionales reconocidos en el Estatuto de Roma”[6] tales
como los crímenes de lesa humanidad de los cuales Fujimori es autor
mediato. Para llegar a dicha conclusión, la Corte realiza una evaluación de
la legislación interna de diversos países que conforman la Organización de
Estados Americanos (OEA) e identifica que, en su gran mayoría, el rechazo
al indulto es tajante.
Pero la Corte IDH, decide dar un paso adicional y confirmar que esta
tendencia además de reflejar la perspectiva de la región latinoamericana, ha
sido consolidada también desde los postulados del Derecho Internacional
de los Derechos Humanos y el Derecho Penal Internacional. Así, la Corte
presenta dentro de sus considerandos, un análisis comprensivo de los
estatutos y decisiones de la mayor parte de los tribunales penales
internacionales y otros órganos de derechos humanos y concluye que la
tendencia creciente se orienta a “limitar que las condenas impuestas por
tribunales penales por graves violaciones a los derechos humanos sean
perdonadas o extinguidas por decisiones discrecionales de los Poderes
Ejecutivo o Legislativo”[7]. Cabe precisar que el Tribunal no limita dicho
análisis a los indultos comunes, sino que considera que también es
aplicable a los indultos por motivos humanitarios.