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Natalia Zurita Acosta

201618423

Modelos de Liderazgo

Los hábitos de una persona altamente efectiva

Nuestro carácter está fundado por nuestros hábitos. Los hábitos son factores poderosos en

nuestras vidas, debido a que son pautas consistentes, a menudo inconscientes, de modo

constante y cotidiano expresan nuestro carácter y generan nuestra efectividad o inefectividad.

En el libro Covey expone que los hábitos no son irrompibles; es posible quebrarlos. Pueden

aprenderse y olvidarse. Pero también sé que hacerlo no es fácil ni rápido. Supone un proceso

y un compromiso tremendo y para esto da una guia de 7 habitos que toda persona efectiva

deberia tener. Los 7 habitos no son un conjunto de partes independinetes o fórmulas

fragmentadas. En armonia con las leyes naturalaes del crecimiento, proporcionnan un

enfoque gradual, secuencial y altamemte integrado del desarrollo de la edectividad personal

e interpersonal. Nos mueven paulatinamnere sobre un continuo de madurez, desde la

dependencia hacia la independencia y hasta la interdepdndencia.

Todos empezamos nuestra vida como seres totalmente dependientes de otros. Sin sus

cuidados solo viviríamos unas horas, o a lo sumo unos pocos días. Después, gradualmente,

nos volvemos cada vez más independientes física, mental, emocional y económicamente,

hasta que por fin podemos hacernos cargo de nuestra persona. Cuando seguimos creciendo y

madurando, tomamos cada vez más conciencia de que toda la naturaleza es interdependiente,

de que existe un sistema ecológico que la gobierna a ella y también a la sociedad (Covey,

2003). Además, descubrimos que los más altos logros de nuestra naturaleza tienen que ver

con las relaciones con los otros, que la vida humana también es interdependiente. Con

respecto a lo dicho previamente, Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva, es un


instrumento gerencial capaz de aportar herramientas necesarias para aprender a conducir la

vida de forma efectiva, mediante un proceso de crecimiento y desarrollo personal e

interpersonal, donde los tres primeros se orientan hacia el éxito propio, y los siguientes tres

sobre la victoria pública o logros para con el entorno, y el último hábito sobre la capacidad y

necesidad de mejorar continuamente.

Cuando se habla de hábitos es necesario mencionar los términos conocimiento,

habilidad y deseo, pues estos conjugados conllevan al logro del primero. Pues, hacerse

altamente efectivo significa hacer cosas diferentes, cambiar paradigmas, teorías, caracteres,

actitudes y por encima de todo desarrollar principios, que permitan alcanzar la eficacia y

eficiencia en el obrar diario. Ampliando lo anterior, el primero de los hábitos se refiere a la

proactividad, que no es mas que la capacidad de tener iniciativa para emprender proyectos y

efectuar las tareas, así como ser responsable de nuestros actos y decisiones, sean estas buenas

o malas (Covey, 2003). O dicho de otro modo, reconocer nuestra responsabilidad de hacer y

dejar de hacer, y/o poner el mayor empeño para que las cosas se den. Es importante destacar

que, los 7 hábitos de la gente altamente efectiva no comprende cambiar la vida de las personas

y organizaciones en días o semanas, sino mas bien a cambiar desde adentro hacia afuera, a

largo plazo y pero con la gran diferencia que es para toda la vida.

Seguidamente, un segundo Hábito es el de Empezar con un Fin en Mente, este refleja

que al iniciar un propósito se debe conocer el fin que se quiere lograr, significa conocer con

claridad la misión, visión, metas, filosofía, saber a qué distancia están y cuanto falta para

lograrse. Solo se así se darían los pasos correctos hacia al crecimiento y desarrollo definitivo.

(Covey, 2003). Es aquí donde se identifican quehaceres de la vida cotidiana, como el caso

en que tenemos proyectos, primero los pensamos y luego muy pocos ejecutamos. Pues, en
este hábito sucede similar, se orienta a comprender que las cosas se crean dos veces, primero

mentalmente y luego ejecutándola, destacando los principios de hacer y hacer, disposición,

planificación, organización, liderazgo, y descartando el miedo a no resultar exitoso, lo que

permite identificar claramente donde se está detenido, y si se está sobre el camino correcto,

y de ser necesario reconducir o retroalimentar con rapidez.

Del mismo modo, el tercer hábito, es el resultado de ser proactivo y empezar con el

fin en mente, se denomina Poner Primero lo Primero, y orienta a que las tareas, actitudes, se

organizan identificándoles por grado de importancia, y ejecutándolas en esa misma dirección.

Es aquí donde se inicia la transición hacia la adopción de principios, a la conversión de la

efectividad, a la apertura de auto descubrimiento y a asumir sentido común de manera

organizada (Covey, 2003).. Pues, las prácticas y las técnicas cambian con la tecnología e

innovación pero los principios no cambian. Al poner en práctica los hábitos antes descritos,

se puede decir que se dio la transición de la dependencia a la capacidad de yo hacer por mis

propios medios, de no necesitar de otro para lograr lo que se quiere, a la libertad, a lo que el

Dr. Covey denominó “la actitud del yo”.

Adicionalmente, el cuarto hábito, se refiere a Pensar Ganar – Ganar, en el cual se

orienta hacia el beneficio mutuo, compartir de conocimientos, la abundancia plena y la

capacidad de cooperación mutua. De esta manera, todo lo que se hace resulta enriquecedor

para las partes involucradas, lo que evita la pérdida de tiempo y diferencias encontradas. Esto

es gerencia moderna y capacidad de reconocimiento del que piense diferente, el cual es un

elemento indispensable que debe ser incluido en el Modelo Social Venezolano. Es en este

paradigma donde el carácter es la gran base, se conservan las relaciones emocionales, se

manejan acuerdos mutuos, todo sustentado en sistemas, es decir; el sistema de


adiestramiento, planificación, comunicaciones, presupuestario, informativo, recompensas y

cualquier otro se basan en este hábito de ganar – ganar.

Analogamente, un quinto hábito denominado busque primero entender luego ser

entendido. Aquí se inicia el camino hacia la comunicación interpersonal efectiva, hacia la

comunicación empática, donde se debe aprender antes de enseñar. Escuchar significa dejarse

influir de manera correcta, pero es el punto de partida de influir en los demás (Covey, 2003).

Es en este hábito donde se aprende a tratar a todos por igual, pero a cada uno de modo

particular puesto a que todas las personas son diferentes, por tanto; se diferencian en sus

ideas, opiniones, comportamientos, y otros puntos de vista.

Posteriormente, existe un siguiente hábito llamado Sinergizar, orientado hacia la

cooperación creativa, comunicación respetuosa, donde las partes asumen bajo la base del

ganar – ganar una idea aun mejor, en la cual el resultado es mayor que la suma de ambos,

además se aprende, mejora en conocimiento y se aprovechan las diferencias para crear

disposición de generar con altura soluciones a los problemas mejor que la vez anterior

(Covey, 2003). Sinergia no es más que abrir la mente y el corazón hacia nuevas ideas y

opciones, traspasando de viejos paradigmas a nuevos descubrimientos, que generen valor

agregado, reconociendo que las personas no ven las situaciones como son, sino como son

ellos.

Por otra parte, en materia personal los 7 habitos son de vital relevancia a la hora de

trabajar por un fin o una meta, precisamente este hecho es lo que me llamo mas la atención,

ya que el ser humano se cuestiona constantemente el rumbo de su existencia en cuanto a que

se posiciona en un universo donde cada acción que toma dia a dia resulta en algo distinto en
un futuro, por lo cual siempre existe esa ansiedad a la hora de saber como caminar hacia los

objetivos que el individuo se propone diariamente y ahí es donde los 7 habitos ayudan a

esclarecer un poco la ruta que se debe tomar para que aquella meta provea el maximo

bienestar posible. En otras palabras, esta obra provee bases para que el individuo se

desenvuelva en un mundo en el que a veces los valores son cuestionados y limitados, ya sea

por algun beneficio social o economico. Es muy común en el individuo preguntarse hacia

donde camina diariamente y personalmente siento que la obra es una muy buena guia para

aquellos lideres que tienen una meta clara y quieren luchar por ella.

Finalmente, el séptimo hábito que se define como afilar la sierra, hace referencia a la

capacidad de renovar con equilibrio, de revisar los seis hábitos anteriores y corregir, innovar

y mejorar continuamente. Dicha mejora, debe ir precedida del cumplimiento de las cuatro

dimensiones, que son: física, mental, social y espiritualmente.La renovación es el principio

y proceso que nos permite ascender en crecimiento y cambio, de perfeccionamiento continuo,

de pensamiento óptimo.Una vez cumplidos los 7 hábitos, se puede decir que se ha dado el

gran salto de la Independencia a la Interdependencia, a la actitud del nosotros, que se logra

con el esfuerzo personal y de la ayuda y la cooperación de otras personas, siempre y cuando

tengan principios, ideas y objetivos claros.

Concluyendo, resulta oportuno indicar que aquellas personas que no han leído los 7

Hábitos de la Gente Altamente Efectiva, se han perdido de conocer las herramientas

necesarias para autoevaluarse y emprender un nuevo modelo de vida personal y

organizacional, de olvidarse de aquel paradigma de tener infinidades de proyectos sin

arriesgarse a ejecutar al menos uno. Resulta necesario equivocarse para aprender, hay que

atreverse para crecer, tener capacidad de buscar y ver ideas diferentes, de ver más allá de
donde ven todas las demás personas, eso es lo que hace la diferencia, es precisamente lo que

hizo Fayol, Taylor, Einstein, Newton, Da Vinci, Darwin, Arquímedes, entre otros, lo que

lograron por consiguiente fue solo el resultado del esfuerzo.

REFERENCIAS

Covey, S. R. (2003). Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva. Buenos Aires : Paidós.

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