Sunteți pe pagina 1din 4

POLÍTICAS PÚBLICAS, BUEN GOBIERNO Y PARTICIPACIÓN CIUDADANA

María Alejandra Benítez Hurtado

Son diversas las respuestas y disposiciones que la ciudadanía de un país espera


de su gobierno, teniendo en cuenta sus perspectivas, estudios e intereses, frente a
situaciones o coyunturas que los afecta como tales. El aumento considerable de
transmisión del V.I.H., la mortalidad de madres lactantes y la expansión de la
malaria en la región andina fueron situaciones delicadas que a principios del año
2002 generaron una respuesta del gobierno colombiano, tomando como piedra
angular la normatividad constitucional y la ley 100 de 1993, el ejecutivo respondió
con el Plan Nacional de Salud 2002 – 2006 a las situaciones anteriormente descritas.

Sin embargo, hay problemáticas en nuestro país que requieren urgente de medidas
gubernamentales, partiendo del diálogo social, como por ejemplo la mortandad de
infantes en las rancherías guajiras por causa de desnutrición, entre muchas otras

Lo que un sector bastante amplio de la población civil desconoce es que en la


adopción de medidas es menester su participación, la conciliación de sus posturas
divergentes y la voluntad política del ejecutivo. Todo ello constituye el andamiaje
denominado Política Pública, y dicho concepto va concatenado al de Buen Gobierno.

Para una mayor comprensión de lo esbozado líneas atrás, se deben precisar las
referidas nociones, el cual, junto con la reseña de la importancia de conocer estos
dos conceptos, se erigen como objetos de este trabajo de opinión. En primera
medida, los profesores Grisales y Giraldo (2007, p. 79) definen Política Pública
como el resultado de la actividad de una autoridad investida de poder público y de
legitimidad gubernamental frente a un problema o en un sector relevante de su
competencia, es decir, es un marco de orientación para la acción o un programa o
perspectiva de actividad. Cuando se perfilan las políticas públicas se deben tener
en cuenta aspectos como el marco jurídico del Estado, pues son a través de ellas
que se les da viabilidad a las políticas públicas; los servicios de personal, los
recursos materiales (financieros), y lo más considerable: la persuasión a la
ciudadanía, pues ellos consideran a sus gobernantes sus legítimos representantes

1
de sus intereses y necesidades, y por ello quienes detentan el poder político deben
atender a las tutelas solicitadas por los gobernados.

Gracias a las políticas públicas se crean espacios de interacción entre el gobierno


y organizaciones sociales, grupos de interés, empresas, etc., lo cual es admisible
en regímenes democráticos por cuanto es requisito sine qua non la participación
ciudadana. De este proceso de diálogo resulta una agenda política que define y
estudia los problemas, la medición del impacto que podría tener la Política Pública
al momento de su implementación, reacciones, grupos en contra y a favor, etc. Para
lograr o intuir los posibles escenarios, se requiere una gran visión política, por lo
cual sugerimos el asesoramiento de personas que pudieran contar con esta
poderosa herramienta1. Posteriormente se elucubran unos objetivos contentivos de
las expectativas a corto, mediano y largo plazo, y antes de la implementación se
escoge la mejor opción para la ejecución de la política pública. Luego de poner en
marcha la estrategia para superar el problema acuciante se hace una evaluación
para determinar si ha cumplido con las metas establecidas. De ese análisis
devienen dos alternativas: la continuidad de la estrategia o el cambio de la misma.

En otro orden de cosas, no hay una definición precisa del concepto de Buen
Gobierno. Esa noción implica asegurar que la corrupción es mínima, durante el
proceso de la toma de decisiones tiene en cuenta a la minoría a y sus peticiones,
así como a la voz de los más desfavorecidos. También trabaja para las necesidades
presentes y futuras de la sociedad2.

Los principios rectores del Buen Gobierno son:

Participación ciudadana: Es quizás su columna vertebral, implica el flujo de


información, organización y libertad de opinión.
Legalidad: Por una parte se exige la protección y promoción de los derechos
humanos, el multiculturalismo, y en otro sentido, que el marco normativo
contenga un alto tinte de justicia.

1 http://www.unla.mx/iusunla18/reflexion/QUE%20ES%20UNA%20POLITICA%20PUBLICA%20web

.htm#_edn1
2 http://www.casaasia.es/governasia/boletin2/3.pdf

2
Transparencia: Se integra de los dos axiomas anteriores por cuanto se exige
que las medidas gubernamentales deben estar sujetas al imperio de la ley y que
la ciudadanía posea información clara y veraz de las decisiones adoptadas, que
de forma directa o indirecta pueden afectarlos, en forma positiva o negativa.
Responsabilidad: Este principio implica el servicio eficiente que debe ser
prestado por las instituciones gubernamentales a los administrados.
Consenso: Corresponde a la conciliación de los múltiples puntos de vista frente
a los intereses de la ciudadanía y el establecimiento de la vía para lograr
realizarlos.
Equidad: Implica la no exclusión de ningún sector social y conceder
oportunidades a las poblaciones más vulnerables.
Eficacia y Eficiencia: Bajo estos dos preceptos, con el mejor manejo de los
recursos públicos se busca la satisfacción de las necesidades de todos los
sectores de la sociedad.
Sensibilidad: Es otro de los principios preponderantes en el Buen Gobierno y
conlleva al nivel de receptividad del poder ejecutivo ante las demandas de la
ciudadanía.

El Buen Gobierno exige la observancia de los Derechos Humanos, el óptimo y legal


manejo de los recursos, la protección del medio ambiente y el advenimiento de la
justicia material.

Las preguntas que surgen son, por una parte ¿Cuál es la relación subyacente entre
las Políticas Públicas y el Buen Gobierno?; y en la otra arista ¿Por qué es importante
el conocimiento de estos conceptos y su interconexión? Frente a la primera cuestión,
la participación ciudadana se erige como ese vínculo entre las Políticas Públicas y
el Buen Gobierno. El concepto de participación ciudadana, como su literalidad lo
señala, implica la integración de toda una comunidad en el ejercicio del poder y las
Políticas Públicas constituyen una vía o una forma de participación ciudadana, para
que intereses y necesidades de dicha comunidad sean atendidos. El ejercicio del
Buen Gobierno igualmente busca fortalecer la democracia participativa, logrando
una fuerte interacción entre el Estado y la ciudadanía, facultados también en la toma

3
de las decisiones gubernamentales y en la veeduría, seguimiento y control de las
mismas. De allí la importancia de tener un conocimiento promedio sobre estas dos
nociones y sus alcances.

BIBLIOGRAFÍA

ARROYABE S. (2010). Las políticas públicas en Colombia. Insuficiencia y desafíos.


Revista del Departamento de Ciencia Política de la Universidad Nacional, Sede
Medellín.

GRISALES L. y GIRALDO L. (2008). Políticas públicas vigentes en Colombia que


contribuyen al logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio afines con el sector
salud, 2006. Revista Facultad Nacional de Salud Pública Vol. 26 Nº 1 enero-junio
2008.

CIBERGRAFÍA

http://www.unla.mx/iusunla18/reflexion/QUE%20ES%20UNA%20POLITICA%20P
UBLICA%20web.htm#_edn1

http://www.casaasia.es/governasia/boletin2/3.pdf

S-ar putea să vă placă și