SERVIR en el Informe Técnico N° 443-2013-SERVIR, señaló.
El proceso administrativo disciplinario no debe exceder de treinta (30) días
hábiles. El incumplimiento de este plazo no origina, en sí mismo la caducidad de la facultad sancionadora de la administración pública, sino determina la responsabilidad de los integrantes de la comisión de procesos administrativos disciplinarios, como responsables de la conducción del proceso.
La administración debe conducir los procesos administrativos disciplinarios en
plazos razonables; lo contrario supondría una afectación al derecho al debido proceso.
La entidad debe observar el principio de inmediatez como una pauta
orientadora para el ejercicio de su potestad disciplinaria, desde la apertura del proceso hasta su culminación, con la imposición de alguna sanción.
En ese sentido, en aplicación del principio de inmediatez, cuando exista un
periodo prolongado e irrazonable entre la apertura del proceso y la imposición de la sanción o medida disciplinaria, se producirá la perdida de la facultad sancionadora (del empleador).
Introducción al derecho internacional privado: Tomo III: Conflictos de jurisdicciones, arbitraje internacional y sujetos de las relaciones privadas internacionales