CONSEJO EDITORIAL PORTADA

Miembros internos
Capitán de Navío Juan Manuel SOLTAU OSPINA (Oceanógrafo Físico)
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Capitán de Fragata Iván CASTRO MERCADO (Ingeniero Geógrafo)
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Capitán de Corbeta Rafael TORRES PARRA (Oceanógrafo Físico)
Responsable Área Oceanografía Operacional, rtorres@cioh.org.co
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Capitán de Navío (r) Carlos ANDRADE AMAYA, Ph. D. (Oceanógrafo)
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Ph.D. Humberto GONZÁLEZ GARCÍA (Ciencias Químicas) Diseño: Jaime A. Reyes
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Ph.D. Jose L. Hernández (Marine Science/Physical Oceanographer )
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jose.l.hernandez@ufl.edu
Ph.D. Aurelio MERCADO IRIZARRY (Oceanógrafo Físico)
Director, Coastal Hazards Center of UPRM, Professor (Physical Oceanography) -
Department of Marine Sciences - University of Puerto Rico,
amercado@cima.uprm.edu
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Prof. Oceanología - Universidad del Atlántico, ileon@uvigo.es
Ph.D. Daniel M. PALACIOS (Oceanógrafo)
Research Oceanographer (JIMAR), Environmental Research Division -
Southwest Fisheries Science Center, NOAA Fisheries, Daniel.Palacios@noaa.gov
Ph.D. César TORO (Oceanógrafo Físico)
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Editor Jefe
PU. Carlos PARRA, M.Sc. Ciencias Computacionales,
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El Boletín Científico CIOH, ISSN 0120-0542, es una revista especializada en los temas relacionados con la Oceanografía. Publica anualmente los artículos
científicos inéditos producto de los proyectos de investigación del Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas de la Dirección General
Marítima de Colombia, Ministerio de Defensa Nacional, y se distribuye nacional e internacionalmente por canje o suscripción. También se publican artículos
de otros institutos y/o investigadores que realicen una contribución original al desarrollo en el área de las ciencias del mar.
Copyright 2007 Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas.
CONSEJO CIENTÍFICO CONTRAPORTADA
Miembros internos
Capitán de Navío Juan Manuel SOLTAU OSPINA (Oceanógrafo Físico)
Director CIOH, e-mail: dcioh@cioh.org.co
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Capitán de Corbeta Rafael TORRES PARRA (Oceanógrafo Físico)
Responsable Área Hidrografía, e-mail: rtorres@cioh.org.co
Ph. D. Serguei Lonin (Océanologo) Investigador del Área de Oceanografía
Operacional del CIOH, e-mail: slonin@costa.net.co
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Técnica, e-mail: cedat@cioh.org.co

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Ph. D. Loïc MENANTEAU (Geógrafo) Centre National de la Recherche
Scientifique de Francia CNRS, e-mail: Loic.Menanteau@univ-nantes.fr
Ph. D. Juan ORTIZ (Oceanográfo Físico) Prof. Universidad del Norte,
e-mail: jortiz@uninorte.edu.co
Esp. Florentino RICO (Economista) ENAP,
e-mail: florentinorico@latinmail.com
Ph. D. Yves-François THOMAS (Geógrafo) Centre National
de la Recherche Scientifique de Francia CNRS,
e-mail: Yves-Francois.Thomas@cnrs-bellevue.fr
Ph. D. Joaquin TRIÑANES (Oceagrafó Físico) NOAA/AOML,
e-mail: joaquin.trinanes@noaa.gov
 CONTENIDO
7 Editorial

8 ESTUDIO DEL ESPECTRO DE OLEAJE EN EL CARIBE OBSERVADO CON BOYAS Y SU REPRESENTACIÓN EN EL ESPECTRO JONSWAP
Rafael Ricardo TORRES PARRA, Serguei LONIN

CONSTRUCCIÓN DE ESPECTROS DE OLEAJE EN EL MAR CARIBE A PARTIR DE MEDICIONES SATELITALES

19 Rafael Ricardo TORRES PARRA, Serguei LONIN

32 PROPAGACIÓN DEL OLEAJE Y ASIMILACIÓN DE DATOS SATELITALES EN UN MODELO ESPECTRAL DE TERCERA GENERACIÓN
Serguei LONIN, Ricardo TORRES, Iryna LONINA

INFLUENCIA DE UNA PELÍCULA DE HIDROCARBURO EN EL RÉGIMEN TÉRMICO EN EL ÁREA DE UN DERRAME

45 Serguei LONIN

54 HURACANES Y TORMENTAS TROPICALES EN EL MAR CARIBE COLOMBIANO DESDE 1900

Juan Carlos ORTIZ ROYERO

ESTUDIO DESCRIPTIVO DE LA INFLUENCIA DEL HURACÁN BETA EN LAS ISLAS DE PROVIDENCIA Y SANTA CATALINA
61 Germán COLLAZOS GUZMÁN, Hector Javier OSPINA VALLEJO, Alejandro MUÑOZ VARGAS

IMPACTOS EN LOS ARRECIFES DE CORAL OCASIONADOS POR EL HURACÁN BETA EN LA PLATAFORMA

71 INSULAR DE OLD PROVIDENCE Y SANTA CATALINA
Elizabeth TAYLOR, Delis HERNÁNDEZ, Fanny HOWARD, Giovanna PEÑALOZA, Santiago POSADA, Nicasio HOWARD,
Renato ROBINSON, Martha PRADA

METODOLOGÍA PARA LA CALIFICACIÓN Y CONTROL DE CALIDAD DE DATOS

78 OCEANOGRÁFICOS APLICADA AL CRUCERO CARIBE 2002
Carlos ROMERO BALCUCHO, Leonardo MARRIAGA ROCHA, Rafael Ricardo TORRES PARRA

INFORMACIÓN ESPACIAL PARA EL CONTROL Y ADMINISTRACIÓN DEL LITORAL EN EL

94 GOLFO DE MORROSQUILLO, CARIBE COLOMBIANO
Fernando AFANADOR FRANCO, Iván CASTRO MERCADO, Nixon TORRES OTALVARO

CONTRIBUCIÓN DE LA HIDROGRAFÍA HISTÓRICA AL ESTUDIO DE LA CINEMÁTICA DE

110 LOS FONDOS MARINOS: EVOLUCIÓN DEL GOLFO DE URABÁ, COLOMBIA
Yves-François THOMAS, Marcella CESARACCIO, Carolina GARCÍA-VALENCIA, Loïc MÉNANTEAU

120 VARIACIÓN ESPACIOTEMPORAL DE LOS COMPONENTES FISICOQUÍMICO, ZOOPLANCTÓNICO

Y MICROBIOLÓGICO EN LA BAHÍA DE CARTAGENA DURANTE EL AÑO 2006
Mary Luz CAÑÓN PÁEZ, Gustavo TOUS, Karen LÓPEZ, Rossana LÓPEZ, Fernando OROZCO

EL MICROFITOPLANCTON EN LOS PRINCIPALES MUELLES DE LA BAHÍA DE CARTAGENA,

CARIBE COLOMBIANO, VECTORES POSIBLES DE FLORACIONES MICROALGALES
135 V. C. SUÁREZ-VILLALBA, A. FRANCO-HERRERA, M. CAÑÓN

CARACTERIZACIÓN FISICOQUÍMICA, BIOLÓGICA Y MICROBIOLÓGICA EN AGUAS DE LASTRE

150 DE BUQUES DE TRÁFICO INTERNACIONAL
Mary Luz CAÑÓN PÁEZ, Gustavo TOUS, Karen LÓPEZ, Rossana LÓPEZ, Fernando OROZCO, Viviana SUÁREZ

VALIDACIÓN DE LOS VALORES DE CLOROFILA-A OBTENIDOS POR EL SATÉLITE MODIS-AQUA

169 EN LOS BANCOS DE SALMEDINA - CARIBE COLOMBIANO
E. RODRÍGUEZ-RUBIO, J.A. OREJARENA, J.G. DOMÍNGUEZ, G. MAYO, C. RICAURTE, C.A. ANDRADE
 EDITORIAL
Capitán de Navío Juan Manuel SOLTAU OSPINA
Director CIOH, jefcioh@cioh.org.co
La Visión formulada para los sistemas de gestión
administrativa en el Centro de Investigaciones
Oceanográficas e Hidrográficas de la Dirección General
Marítima, es la de convertirse en centro de referencia
regional, tomando como región a Iberoamérica.
Desde su fundación en 1975 el CIOH ha venido avanzando
con pasos firmes hacia el logro de esa Visión. Los primeros
Boletines Científicos publicaron uno o dos artículos por año
y en la medida en que los boletines se optimizaron, se
evidenciaba la transformación que al interior de la Institución
se realizó para avanzar hacia el futuro. Las cuatro áreas
misionales de investigación se desarrollaron así: “Protección
del Medio Marino”, cubriendo los análisis químicos,
biológicos, microbiológicos y físicos desde la prevención de
la contaminación hasta el desarrollo de planes de
contingencia; “Oceanografía”, empezando con la
descriptiva y siguiendo con la dinámica hasta llegar hoy en
día a la modelación numérica; “Hidrografía” en donde
inicialmente se realizaron las cartas en conjunto con otras
organizaciones y en la actualidad se presenta la cartografía
electrónica, dándole a sus productos distribución global; y
por último, “Manejo Integrado de Zonas Costeras”, con sus
primeros éxitos en proyectos de geomorfología costera con la
Misión Francesa y en la actualidad con mapas LIDAR de 25
centímetros de resolución y con modelos verticales, que
encantan a los ingenieros por la calidad de análisis que de
ellos se pueden obtener.
Con posterioridad a la lectura de este Boletín Científico, el
número 25 de nuestra historia, le pedimos al lector evaluar si
estamos cerca de alcanzar la Visión establecida. El ejemplar
veinticinco presenta catorce artículos distribuidos en temas
de Oceanografía (8), Biología (4), Geología (1) e Hidrografía
(1); cubriendo áreas de estudio oceánicas de toda la cuenca
Caribe y otras particulares, entre las que se cuentan el golfo
de Morrosquillo, la bahía de Cartagena, los Bancos de
Salmedina, la isla de Providencia y el golfo de Urabá.
Los datos obtenidos de las boyas de oleaje de DIMAR
permitieron trabajar para obtener constantes del espectro, las
que a su vez son fundamentales para el mejoramiento de la
asimilación de datos para el modelo de tercera generación del
CIOH. Dicho modelo permite generar pronósticos de oleaje a
cinco días en varias zonas del Caribe colombiano y sus
resultados están a disposición del público a través del sitio
web del CIOH. Con los tres artículos científicos sobre datos
de las boyas, comparaciones de cruceros con JASON-1 y
análisis de esquemas numéricos de cálculo, seguimos en el
mejoramiento continuo de nuestro modelo que en los
próximos años tendrá un acoplamiento atmosférico
mejorado y propio.
Las influencias de los hidrocarburos sobre parámetros
superficiales oceánicos también se analizan con hallazgos
sorprendentes que nos llevan a considerar un estudio serio de
literaturas sobre esta área.
En el tema de huracanes se da cuenta de lo que viene
sucediendo en los últimos veinte años en relación con el
aumento en cantidad y en intensidad de esos fenómenos. Se
hace un aporte importante con tres artículos al resumen
estadístico de varios años, a describir sus impactos asociados
en las comunidades coralinas y a contribuir en la explicación
de su aumento en magnitud y frecuencia. Nuestras
autoridades locales y regionales podrán, con estos estudios,
tomar decisiones en un escenario de mayor conocimiento y
como todos sabemos en esos escenarios se optimiza la
certeza de la decisión.
La revisión estadística y los programas de MATLAB
tuvieron su aplicación en trabajos con el Grupo de
Investigación en Oceanología de la Escuela Naval Almirante
Padilla (GIO), entregando rutinas para el control de calidad
de datos recolectados con CTD, lo que optimiza con una
herramienta sencilla la filtración de extremos propios de la
electrónica de los instrumentos.
La aplicación del modelo conceptual para contribuir a
mejorar la administración de litorales también fue tema de
estudio. Se entregan datos nuevos sobre la dinámica que
afecta a la zona del golfo de Morrosquillo y se sectorizan y
cuantifican áreas, que estamos seguros, la Dirección General
Marítima, las alcaldías, gobernaciones y otras autoridades
sabrán interpretar para sus distintos ámbitos de acción.
El estudio de la cinemática de los fondos marinos en el golfo
de Urabá permitió usar los productos cartográficos e
hidrográficos realizados desde 1938 hasta el año 2001 y,
después de una concienzuda disertación de tesis doctoral,
ofrecer como resultado de un proyecto INVEMAR-
COLCIENCIAS las conclusiones de movimientos netos
erosivos y sedimentarios y una aproximación a las
explicaciones de esa fenomenología.
Seguimos muy orgullosos de contribuir al país con este tipo
de publicaciones. La producción nacional y nuestro trabajo
están a su juicio.
Felicitamos a todo el talento humano que publicó artículos en
este boletín, los cuales han sido aceptados por algunos de los
investigadores con más conocimiento en ciencias marinas en
el país y la región americana. Esos investigadores componen
nuestros Consejos Científico y Editorial. Este Boletín
Científico estará igualmente disponible con todos sus
artículos en formato PDF en la página web del Centro para su
permanente y amplia consulta.
Capitán de Navío JUAN MANUEL SOLTAU OSPINA
Director

Los artículos científicos de la variación espacio temporal de

parámetros físicos, químicos, biológicos y microbiológicos
en la bahía de Cartagena nos generan una línea base
fundamental para los estudios que en cualquier área del
conocimiento se quieran adelantar posteriormente y muy
especialmente en verificar los impactos de obras para
descontaminar la bahía. También permiten comparar los
impactos de las aguas de lastre que se estudian para la bahía
de Cartagena en otro de los artículos y las relaciones con el
microfitoplancton que fue observado para el año 2005.

Finalmente, se hace un interesante hallazgo con los datos de

clorofila-a obtenida por MODIS contra una comparación in
situ en los Bancos de Salmedina. Resultados y conclusiones
que podrían ser usados para evaluar otras zonas del país o de
la región en las que se esté empleando este sensor remoto.

Nuestra revista clase B en la categorización que hace

COLCIENCIAS iniciará su periplo, con este ejemplar, hacia
la categoría A. Nuestro contenido, grupo editorial, grupos
científicos y el cumplimiento de los requisitos exigidos por el
ente acreditador así lo aseguran.

Estamos en el tiempo de consolidar la Seguridad

Democrática y nuestra contribución para ello se da a través de
la promoción de la ciencia y la tecnología. El desarrollo
marítimo nacional está profundamente asociado a la
capacidad que tengamos de transformar a través de las
ciencias del mar, la manera como trabajamos, explotamos y
la manera como conocemos nuestros territorios.
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 8-18 (2007)

ARTÍCULO

Estudio del espectro de oleaje en el Caribe

observado con boyas y su representación en el
espectro Jonswap
Study of the wave spectra in the Caribbean observed with
buoys and its representation on the JONSWAP spectra

Fecha recepción: 2007-09-06 / Fecha aceptación: 2007-09-21

CIOH
www.cioh.org.co
Rafael Ricardo Torres Parra
rtorres@cioh.org.co
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla
Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.
Serguei Lonin
slonin@costa.net.co oceanmet.ltda@yahoo.com
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla
Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
Utilizando información de dos boyas de oleaje direccional instaladas en el Caribe en el Área de Barranquilla e
Isla de Providencia en Colombia, se estudió el comportamiento del espectro de frecuencias del oleaje entre
marzo de 2006 y agosto de 2007. De manera iterativa se buscaron los valores de las constantes del espectro
JONSWAP que mejor reprodujeran los espectros mensuales promediados, al encontrar la menor diferencia de
los mínimos cuadrados entre los dos espectros. Se encontró que en todas las ocasiones, el oleaje local y el mar de
fondo tienen períodos que fácilmente se diferencian. Así mismo, el mar de fondo es un evento inusual en el
Caribe. Se observó una importante variación espacial y temporal en el comportamiento del oleaje en el Caribe.
Se encontraron valores de las constantes que satisfactoriamente reprodujeron los espectros mensuales del oleaje
medido con las boyas, sin embargo, dada la desviación estándar encontrada, se propone continuar con el estudio
de estos valores en la medida que más información esté disponible.

Palabras clave: Datos de oleaje, análisis de oleaje, espectro de oleaje.

Abstract
Using information of two directional wave buoys deployed in the Caribbean nearby Barranquilla and
Providencia Island in Colombia, the wave frequency spectrum behavior from march 2006 to august 2007 was
studied. Using iterative techniques the values of constants of the JONSWAP spectrum that best reproduced the
mean monthly spectrum were investigated, looking for the RMS values between the two spectra. It was found
that on all occasions, the Wind Sea and Swell could be easily differentiated due to their Periodo Also, the Swell is
an unusual event on the Caribbean. An important spatial and temporal variation on the wave behavior in the
Caribbean was observed. The values of the constants that satisfactorily reproduced the monthly wave spectra
measured with buoys were found, however, because, of the standard deviation found, to continue the study of the
values as long as more information becomes available is advisable.

Key words: Wave data, wave analysis, wave spectra.

8

Introducción
Uno de los aspectos más importantes de la dinámica
del océano que se ha tratado de entender en las últimas
décadas es el comportamiento del oleaje, por su
impacto en las actividades marítimas como
navegación, recreación, ingeniería oceánica, entre
otros. Esta necesidad fue reconocida por la Dirección
General Marítima de Colombia - DIMAR, la cual en
el 2004 inició el proyecto “Sistema de Medición de
Parámetros Oceanográficos y de Meteorología
Marina - SMPOM” [1], dentro del cual se diseñó una
red de monitoreo del comportamiento del oleaje para
el Caribe y Pacífico colombianos.
La importancia de esta red está en dos áreas
principales: el conocimiento del comportamiento del
oleaje y la seguridad marítima integral. En el primero,
porque los datos recolectados por las boyas permiten
el análisis espectral, con lo cual se genera información
imprescindible para el diseño de cascos de buques,
diseño de plataformas de costa afuera, ingeniería de
costas, energía alternativa, entre otros. En cuanto a la
seguridad marítima, al contar con la información del
oleaje en tiempo real, esta puede utilizarse en análisis
sinópticos del estado del mar y al emplearse en
técnicas de asimilación o validación de datos en
modelos numéricos de pronóstico del oleaje, mejora
los resultados de pronóstico, lo cual tiene un
importante impacto en la seguridad de actividades
marítimas como la navegación, recreación de sol y
playa, deportes náuticos, entre otras.
El presente trabajo busca de manera preliminar
analizar los espectros del oleaje en el Caribe a partir de
las mediciones de las boyas instaladas como parte del
proyecto SMPOM hasta agosto de 2007, con el fin de
dar los primeros resultados para mejorar el
conocimiento del comportamiento del oleaje en esta
cuenca. Adicionalmente, se efectuó la representación
de estos espectros medidos in situ de acuerdo con lo
propuesto por Hasselmann et al. [2], con lo cual es
posible encontrar las constantes del espectro
JONSWAP que mejor caractericen el oleaje en el
Caribe.
Esto último es de gran utilidad para el proyecto
“Sistema de Pronósticos Oceanográficos y
Atmosféricos a Escala Local - SPOA” [3], el cual está
en ejecución en el Centro de Investigaciones
Torres y Lonin: Espectro de oleaje en el Caribe
Oceanográficas e Hidrográficas - CIOH en ejecución
desde el año 2007 hasta el año 2010, por cuanto uno de
sus objetivos es el de asimilar y validar datos de altura
del oleaje, sean medidos por las boyas o por altímetros
satelitales en un modelo de pronóstico de oleaje. Para
la asimilación de datos satelitales es necesario
construir un espectro a partir de la información de
altura del oleaje, para lo cual es muy útil contar con las
constantes del espectro JONSWAP, tal como fue
propuesto por Torres y Lonin [4]. Igualmente los
espectros serán de utilidad en el proyecto SPOA por
cuanto el modelo de oleaje para aguas profundas
contará con grillas anidadas del modelo SWAN para
propagar el oleaje hasta aguas someras, donde las
condiciones de frontera serán ingresadas a través de
los espectros JONSWAP evaluados para el Caribe de
acuerdo con la metodología propuesta en el presente
artículo.
Datos
Como parte del proyecto SMPOM, se instaló en el año
2006 una boya de oleaje direccional TRIAXYS en
Bocas de Ceniza cerca de Barranquilla (lat. 11°32'N y
long. 74°40'W) y en el 2007 otra boya al norte de la
Isla de Providencia (lat. 13°32'N y long. 81°20'W).
Ambas boyas se encuentran a una profundidad
cercana a los 150 metros, con el fin de medir el
comportamiento de las olas en aguas profundas, es
decir, antes de ser modificado por efecto del fondo.
Estas boyas calculan los espectros de frecuencia y
direccional del oleaje. La ubicación de las boyas se
presenta en la figura 1.
Figura 1. Ubicación boyas de oleaje direccional del
proyecto SMPOM.
La información de las boyas está disponible en series
de tiempo discontinuas debido a problemas técnicos
de sus componentes, errores en la transmisión de los
9
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 8-18 (2007)

datos o debido a vandalismo. La información es De los archivos generados por el software de las
recolectada cada hora, midiendo las características del boyas, se utilizarán los de extensión
oleaje en una ventana de 20 minutos con una aaaammddhhmm.NONDIRSPEC, el cual contiene
frecuencia de 4 Hz (4800 datos por sensor por hora). para cada hora la potencia del espectro S(f) de
frecuencia para cada una de las 123 bandas integradas
El empleo de estos sensores y software permite tener en dirección.
la resolución y exactitud en la medición de oleaje de
acuerdo con la tabla 1.
Materiales y métodos
Tabla 1. Características boyas TRIAXYS. Espectro de frecuencias obtenido con boyas de
oleaje
Parámetro Rango Resolución Exactitud Para analizar los espectros, se usaron los archivos
Altura +/- 20 m 0.01 m Mejor que 2 %
Período 1.6 –33.25 0.005 Hz
NONDIRSPEC. Se utilizó esta información y no la
Dirección 0 – 360 º 3º +/- 1 º del espectro en función de las frecuencias y
direcciones S(f,θ), por cuanto los resultados de este
trabajo serán utilizados como parte del proyecto
El espectro direccional del oleaje se divide en 121 SPOA como se indicó en la introducción. Para esto se
bandas espaciadas cada 3 ºC empezando en la necesita reconstruir un espectro para ser asimilado por
dirección 000 ºC (Norte). El espectro de frecuencia se el modelo de oleaje usando la información que
divide en 123 bandas espaciadas 0.005 Hz, con la produce el satélite. En el caso del Jason-1, el altímetro
primera banda centrada en 0.03 Hz (T=33.33 s) y la mide la altura significativa de la ola (Hs) pero no
última en 0.64 Hz (T=1.56 s). Esta información es contiene información de dirección del oleaje [6]. Hs
almacenada en la memoria interna de la Boya y se encuentra relacionada con el espectro de
transmitida en tiempo real [5]. frecuencias por la fórmula:
La transmisión de los datos de oleaje se realiza por
comunicación satelital Iridium cada hora. En el caso
de la boya de Barranquilla, ésta ha tenido dos
Cuando Hs se calcula a partir del espectro de olas, se
configuraciones de acuerdo con los periodos de toma
denomina Hmo [7], donde mo es el momento cero
de datos indicados en la tabla 2. En los períodos 1 y 2,
la boya tomó datos desde el minuto 20 al minuto 40, en estadístico del espectro, lo cual físicamente
tanto que en el período 3 la boya tomo datos en la representa la varianza de la serie temporal de altura de
ventana del minuto 10 al minuto 30 cada hora. La boya olas.
de Providencia se configuró para tomar datos cada
hora desde el minuto 00 al minuto 20, iniciando la Para el análisis de los archivos NONDIRSPEC se
transmisión en el minuto 20. utilizó una matriz en la cual las columnas contienen
las 123 bandas de frecuencia y cada fila corresponde a
un archivo horario. Se calculó para cada mes natural,
Tabla 2. Series de tiempo boyas de oleaje disponibles. en función de los datos disponibles (Tabla 3) el
promedio, desviación estándar y valor máximo del
Boya Período Fecha inicio Fecha término No. Días
(ddmmaa) (ddmmaa) espectro para cada una de las bandas de frecuencia de
Barranquilla 1. 230306 190406 28 la matriz construida. Los resultados se graficaron
Barranquilla 2. 211206 190407 120 como puede observarse en las figuras 2 y 3. En el eje
Barranquilla 3. 190607 230707 35 de las abscisas el período de las olas en segundos y en
Providencia 1. 280507 260807 91 el eje de las ordenadas el valor del espectro.

10

Tabla 3. Series de tiempo disponibles para el análisis
espectral.
* Archivos recibidos por comunicación IRIDIUM
La información disponible de las boyas se presentó en
la tabla 2. Para el análisis de espectros con las boyas
de oleaje, se dividió esta información en series
mensuales tal como se presenta en la tabla 3,
incluyéndose el mes y año de nueve series de tiempo
analizadas para la boya de Barranquilla y tres para la
boya de Providencia. Se indica de acuerdo con la
disponibilidad de archivos NONDIRSPEC la fecha de
inicio y final de la serie de tiempo en UTC, así como el
número de archivos horarios utilizados en el cálculo
del promedio, desviación estándar y determinación de
valores máximos, cuantos no se encontraban
disponibles y el total de archivos que debería haber
entre el dato inicial y final. Las series de tiempo
marcadas con un asterisco, indican que al momento de
escribir este artículo, la información disponible
correspondía a la enviada por IRIDIUM en tiempo
real y no había sido descargada directamente de la
boya.
Espectro JONSWAP en el Caribe
Varios espectros idealizados se utilizan para
representar el comportamiento del oleaje. El más
simple fue el propuesto por Pierson y Moskowitz en
1964 [8], para el cual se asumió el concepto de mar
completamente desarrollado, en el cual las olas se
encuentran en equilibrio con el viento.
El espectro JONSWAP, propuesto por Hasselmann et
al. [2], después de analizar datos medidos durante el
proyecto conjunto de observación de oleaje en el Mar
del Norte (Joint North Sea Wave Observation Project
- JONSWAP), está diseñado para describir olas
Torres y Lonin: Espectro de oleaje en el Caribe
locales (Wind Seas) producidas con fetch limitado, el
cual se expresa de la siguiente manera:
ω=2πf, siendo S(w) la densidad de energía espectral y
f la frecuencia de la ola en Hz. De acuerdo con el
experimento JONSWAP usando datos del Mar del
Norte, se determinaron los valores de las constantes
así [9]:
, como parámetro de escalamiento,
siendo F la distancia sobre la cual el viento sopla a una
velocidad constante o fetch, g la gravedad y U10 la
velocidad del viento 10 metros sobre la superficie del
mar.
, como frecuencia pico del espectro,
γ=3.3 , siendo el factor de intensificación del pico, y
,
Existen otras formas idealizadas del espectro, las
cuales esencialmente son derivadas de los espectros
de Pierson y Moskowitz y JONSWAP. Existe un
espectro de oleaje de seis parámetros desarrollado por
Ochi y Hubble [10], con el cual es posible mostrar dos
picos, uno asociado con oleaje de fondo (Swell) y otro
con el oleaje local (Wind sea).
Para el presente estudio se utilizará el espectro
JONSWAP para representar el espectro de oleaje
encontrado en las dos boyas instaladas por la DIMAR
en el Caribe por ser en la literatura el de más amplia
aplicación y estar diseñado para mares de fetch
limitado. Este espectro idealizado sólo resuelve el
oleaje local y no el del mar de fondo.
Para estudiar el comportamiento general del oleaje en
el Caribe, se ajustó el espectro JONSWAP a los datos
observados con las boyas, resolviendo mediante
iteraciones los valores de las constantes. Teniendo en
cuenta que se tienen espectros horarios los cuales
contienen mucho ruido, en esta aproximación se
reprodujeron los espectros de frecuencias S(f)
11

promedio para cada mes, en los lapsos de tiempo
relacionados en la tabla 3.
Para lograr lo anterior, se realizaron diferentes
experimentos numéricos con el fin de encontrar los
mejores resultados en el ajuste del espectro
JONSWAP a los espectros promediados a partir de los
datos de las boyas. Dentro de estos ejercicios se
estudió la variación de los parámetros σ, α, ωp y γ,
empezando con límites amplios incluyendo valores
encontrados en el experimento JONSWAP [9], que se
fueron ajustando a los espectros encontrados en el
Caribe. Igualmente se estudió el orden en el cual se
iteraban estos parámetros con el fin de encontrar más
rápidamente convergencia a los valores más
adecuados.
Para procesar los datos se utilizó como entrada la
información del espectro de frecuencias promedio
encontrado con las mediciones de las boyas. Se
determinó mantener la frecuencia pico de los datos en
el espectro JONSWAP generado. Los valores de σ se
mantuvieron como en la propuesta de JONSWAP,
0.07 para las frecuencias menores o iguales a ωp y 0.09
para las frecuencias mayores a ésta.
Se usaron dos ciclos internos. Uno para buscar el
mejor valor de α, para lo cual se iteraron valores
iniciando en 0.015 hasta 0.06 con una variación de
0.0001. Durante cada ciclo calcula la diferencia de
mínimos cuadrados con respecto al espectro de datos
original. Al final del ciclo se guarda el valor de α con la
menor diferencia de mínimos cuadrados. El siguiente
ciclo interno busca el mejor valor de γ (utilizando el
valor de α encontrado en el ciclo anterior) de la misma
manera que se hizo con el valor de α, iniciando en 0.6
hasta 2.5, con una variación de 0.001.
Se tiene un ciclo externo que compara las diferencias
de los mínimos cuadrados entre los espectros
JONSWAP, que se calcularon con los valores de α y γ
seleccionados en cada ciclo interno hasta que la
diferencia entre el espectro de un ciclo al otro sea
menor a 0.001, encontrando los mejores valores de α y
γ.
12
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 8-18 (2007)
El espectro JONSWAP que se está calculando y la
comparación de las diferencias de los mínimos
cuadrados no se hace sobre todo el espectro, puesto
que como se indicó, este espectro fue prediseñado
para oleaje local, por lo que sólo se hace con las
frecuencias iguales o mayores a 0.08, es decir a
períodos iguales o menores a 12.5 segundos, por ser
éste el límite entre oleaje local y mar de fondo,
observado en los espectros de oleaje de las boyas
como se describirá en los resultados. Esta
aproximación se considera especialmente válida para
el caso del Caribe, por cuanto se logró determinar que
el mar de fondo es un fenómeno inusual en este
dominio.
Resultados y discusión
Espectro de frecuencias obtenido con boyas de
oleaje
En la Figura 2 se presenta la salida del análisis de las
nueve series de tiempo mensuales de la boya de
Barranquilla y en la figura 3 las tres series de tiempo
de la boya de Providencia. En la línea azul el
promedio de los datos disponibles por frecuencias, en
rojo el promedio más una desviación estándar con el
fin de estimar la dispersión de los datos y en negro el
valor máximo registrado para cada frecuencia.
Se encontró que en términos generales en todas las
salidas mensuales de las dos boyas, el
comportamiento del oleaje producido por vientos
locales, tiene períodos inferiores a los 12 segundos.
En los meses de febrero y marzo de 2007 en la boya de
Barranquilla sobresalen en los datos máximos (línea
negra) la presencia de picos de alta energía con un
período pico de 28 segundos y un intervalo entre los
14 y 40 segundos (apreciable también en otros meses),
que inicialmente se pensó fueron causados por mar de
fondo (oleaje Swell), es decir, aquel caracterizado por
un período más largo y regular en las ondas oceánicas,
desplazadas de su área de formación.

Al efectuar un análisis detallado de este suceso entre el
7 y 9 del mes de febrero/07, con una energía cuatro
veces superior al oleaje local, se encontró que se debió
a un error instrumental de la boya de oleaje
direccional, por dos razones: primero se encontraron
varios registros de la boya inadecuados, uno por
ejemplo con una altura máxima de la ola de 12.65
metros y Hmo de 4.47 m, con un período pico de 28.57
segundos lo cual para la ubicación de la boya en
Barranquilla son poco probables, además de la
inexistencia esos días de algún evento atmosférico
extremo. Stewart [9] en la figura 16.8 de su libro
presenta de acuerdo con el espectro de Pierson-
Moskowitz [8] la relación entre el período y altura
significativa de la ola en función de U10, para mares
completamente desarrollados (F→∞ ). En esta figura
un Hmo como el encontrado, correspondería a U10=15
-1
ms y un período de 11 segundos. El máximo período
de la ola sería menor a los 20 segundos, con lo cual los
valores registrados por la boya no son consecuentes
con registros de olas de gravedad.
La segunda razón se encontró al analizar el espectro
por frecuencias y direcciones en estos días. En la
figura 4, en el centro, se puede observar el promedio
para estos tres días. En esta imagen la dirección está en
convención náutica (0º corresponde al Norte - arriba)
y la frecuencia en Hz aumentando del centro hacia
afuera. Es evidente por un lado la baja frecuencia del
espectro por debajo de los 0.5 Hz, pero más
importante, la presencia de energía en todas las
direcciones lo cual no es posible. Llama la atención
que en las figuras 2 y 3, todos los espectros en alguna
medida muestran esta energía centrada alrededor de
los 28 segundos. Este error instrumental puede
deberse a problemas con la línea de fondeo por la
profundidad a la que se instalaron las boyas el cual
corresponde al límite sugerido por el fabricante, pero
deberá investigarse con mayor detalle, en especial las
condiciones que generan este mal funcionamiento. En
Torres y Lonin: Espectro de oleaje en el Caribe
la figura 4, arriba, se presenta el promedio del
espectro para los días del 4 al 6 de febrero/07, donde
se observa el comportamiento del oleaje local muy
similar al de los días del mal funcionamiento de la
boya, por lo cual parece poco probable que este
problema haya sido causado por un cambio de
dirección o intensidad del oleaje.
En las figuras 2 y 3, la única evidencia de mar de
fondo, corresponde a la registrada en agosto/07 por la
boya de Providencia, el cual tuvo niveles de energía
similares a los del oleaje local, por lo cual no se
tradujo en un aumento en Hs. En esta oportunidad el
mar de fondo se presentó entre los días 19 y 20 de este
mes, con un período entre los 14 y 16 segundos,
proviniendo del noreste, en tanto que el oleaje local
presentó un período alrededor de los 7 segundos,
proviniendo del nornoreste. En la figura 4, abajo, se
observa claramente la diferencia entre el oleaje local y
mar de fondo en el espectro de frecuencias y
dirección. Es evidente la diferencia con el espectro del
centro que indica el problema instrumental.
En este estudio preliminar se puede afirmar que el mar
de fondo es un evento aislado en el Caribe, pues de
todas las series de tiempo analizadas, sólo se hizo
presente por un corto período de 3 días, sin superar la
energía característica del oleaje local.
En cuanto a la energía mostrada por el espectro, se
encuentra un comportamiento diferente para las dos
boyas. En la de Barranquilla se observa en promedio
un pico de oleaje local cercano a los 5 m2s-1 y uno
máximo alrededor de los 26 m2s-1. La excepción a este
comportamiento se observa en las salidas de marzo y
abril de 2006, con valores menores aproximadamente
un 50%. En la boya de Providencia el pico del
espectro promedio oscila entre 0.5 y 1.5 m2s-1, más
bajo que el encontrado en Barranquilla y los valores
máximos no superan los 7 m2s-1.
13
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 8-18 (2007)

Figura 2. Comportamiento del espectro de frecuencias del oleaje a partir de datos de la boya de oleaje de Barranquilla. De
izquierda a derecha y de arriba hacia abajo se encuentran las salidas de marzo/06, abrril/06, diciembre/06, enero/07,
febrero/07, marzo/07, abril/07, junio/07 y julio/07.

Figura 3. Comportamiento del espectro de frecuencias del oleaje a partir de datos de la boya de oleaje de Providencia. De
izquierda a derecha se encuentran las salidas de junio, julio y agosto/07.

14

Figura 4. Arriba y en el centro S( f,θ ) en Barranquilla
promediado para los días 4 a 6 y del 7 a 9 de febrero de 2007
respectivamente. Abajo S( f,θ ) en Providencia promediado
para los días 19 a 20 de agosto de 2007.
Llama la atención la comparación de los meses de
marzo y abril, con información disponible para el
2006 y 2007 en la boya de Barranquilla, por cuanto a
pesar de ser el mismo mes, los promedios
correspondientes al año 2006 tuvieron menor energía
a los del 2007. Esto se evidencia al comparar el
promedio mensual de Hmo, el cual para el mes de
abril/06 fue de 1.65 metros, en tanto que para abril/07
fue de 2.36 metros, con una diferencia de 0.71 metros.
En el caso de la altura de la ola, ésta presenta
variaciones estacionales, lo cual era de esperar de
Torres y Lonin: Espectro de oleaje en el Caribe
acuerdo con el análisis realizado por Torres [11] con
base en información del satélite Geosat de la altura de
la ola, compilada en el Atlas de Young [12] en celdas
de 4 x 4 grados con información mensual, o si se tiene
en cuenta la variación en el comportamiento de los
regímenes de viento en el Mar Caribe, como fue
descrito detalladamente por Andrade [13], al ser este
factor el generador del oleaje.
Al comparar los meses de junio y julio de 2007
registrados por la boya de Barranquilla y la de
Providencia, se encontró que en estos períodos de
tiempo muy similares (tabla 3), se presentó menor
energía en la boya de Providencia. Este
comportamiento se observa claramente al comparar el
promedio mensual de Hmo, el cual en Barranquilla
fue de 2.11 y 1.93 metros para los meses de junio y
julio/07 (datos parciales), en tanto que fue de 1.55 y
1.62 metros en Providencia para los mismos meses,
evidenciando apreciables variaciones espaciales en el
comportamiento promedio del oleaje en la cuenca del
Mar Caribe, con diferencias en el mes de junio de 0.56
metros y en julio de 0.31 metros.
Estas diferencias en la altura de la ola en estos dos
puntos del Mar Caribe se encuentran en una buena
concordancia con la intensidad de los vientos, los
cuales en Bocas de Ceniza son más fuertes que en la
isla de Providencia. Los datos climatológicos de Da
Silva y Levitus [14], perfectamente muestran que en
términos de las tensiones turbulentas de Reynolds en
la superficie del mar (de las cuales linealmente
depende el crecimiento de las olas) para el mes de
-2
junio son en Providencia 0.081 Nm y en Barranquilla
-2
0.112 Nm (28% de diferencia relativa), en tanto que
-2 -2
para julio son 0.095 Nm y 0.137 Nm
respectivamente (31% de diferencia). Las diferencias
encontradas en las mediciones de las boyas de Hmo
son de similar magnitud.
Se observaron entonces, al construir el espectro de
frecuencias en el Caribe con información de las boyas
de oleaje, significativas variaciones interanuales
como espaciales, las cuales se deberán seguir
estudiando en más detalle en la medida que se cuenten
con series de tiempo en más lugares y más completas
de las boyas de oleaje.
Del análisis de estos espectros se encontró que las olas
locales como las olas de mar de fondo tienen un
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comportamiento constante en el período de la ola oleaje (azul), para los meses de diciembre/06 y
durante el año, tanto en las series de tiempo de enero/07 de la boya de Barranquilla, y para el mes de
Barranquilla como en las de Providencia. Las julio/07 de la boya de Providencia. Estos espectros se
2
primeras con períodos inferiores a los 12 segundos y encuentran normalizados (S (f )/σ ) y se presenta un
las segundas con períodos entre los 14 y 16 segundos. límite de confianza de +/- una desviación estándar
Así mismo, fue evidente que el mar de fondo es un (rojo). Se seleccionaron estas gráficas como simple
fenómeno inusual en el Caribe, pues sólo se presentó indicador visual del ajuste del espectro JONSWAP a
una vez en los períodos de oleaje analizados. los datos.
Espectro JONSWAP en el Caribe
En la tabla 4 se presentan los resultados obtenidos de
construir el espectro JONSWAP para cada uno de los
períodos indicados en la tabla 3. Se muestra la
frecuencia pico en Hz de los datos, la cual no se
modificó, los valores de α y γ encontrados por medio
de las iteraciones descritas en la metodología, el
número de veces que se iteró el ciclo externo y las
diferencias de los mínimos cuadrados entre el espectro
del promedio mensual de los datos de la boya (Sb) y el
espectro JONSWAP construido (Sj), dada por la
siguiente ecuación:

, con N el número de frecuencias usadas

en los espectros.

Tabla 4. Valores de α y γ del espectro JONSWAP.

Fp de los Valores por iteración Ciclos Dif. min.

Boya Año Mes
datos Alfa Gama usados cuadrado
Barranquilla /06 3 0.13 0.0351 0.671 10 4.5829
Barranquilla /06 4 0.15 0.0398 1.447 9 0.1203
Barranquilla /06 12 0.12 0.0317 1.449 13 15.1501
Barranquilla /07 1 0.13 0.0537 1.252 12 1.0143
Barranquilla /07 2 0.135 0.0477 1.03 11 0.4105
Barranquilla /07 3 0.13 0.0424 1.32 11 1.0711
Barranquilla /07 4 0.11 0.025 1.224 12 11.1344
Barranquilla* /07 6 0.125 0.0266 2.128 8 2.6507
Barranquilla* /07 7 0.12 0.0209 1.773 10 2.7775
Providencia /07 6 0.115 0.015 0.6 2 3.5687
Providencia /07 7 0.14 0.0215 0.673 8 0.9807
Providencia /07 8 0.145 0.015 0.6 2 0.3282 Figura 5. Ajuste del espectro de frecuencias JONSWAP a
Promedio 0.0312 1.1806 3.6491 datos medidos por las boyas de oleaje. De arriba a abajo se
Desv. Estándar 0.0127 0.4892 4.7253 encuentran las salidas de dic/06 y ene/07 de Barranquilla, y
jul/07 de Providencia.

En la figura 5 se presenta el espectro JONSWAP

(negro) que mejor se ajustó a los datos promedios del Para el mes de dic/06, a pesar de tener la mayor
espectro de frecuencias observado por las boyas de diferencia en los mínimos cuadrados encontrada

16

(tabla 4), arriba de la figura 5 se observa un buen ajuste
del espectro JONSWAP. Con niveles de energía
similares, en el centro se encuentra la salida del mes de
enero/07 de la boya de Barranquilla, en la cual la
diferencia de mínimos cuadrados fue menor, por lo
que se ajusta muy bien el espectro JONSWAP. Abajo
la salida de junio/07 de la boya de Providencia, la cual
a pesar de tener niveles de energía menores a las
anteriores, igualmente alcanzó un buen ajuste.
Como se observa en la tabla 4 el valor promedio de α =
0.0312 con una desviación estándar de 0.0127, en
tanto que el valor promedio de γ = 1.1806 con una
desviación estándar de 0.4892. A pesar de encontrar
una desviación estándar significativa y que los valores
de a y g encontrados de las series de Providencia son
más bajos a los de Barranquilla, para esta
aproximación inicial serán utilizados en el trabajo de
Torres y Lonin [4], teniendo en cuenta que se busca la
construcción de los espectros en todo el Mar Caribe,
solamente utilizando información de la altura de la ola
proveída por el satélite Jason-1, para lo cual se dejaron
constantes los valores de α y γ, buscando el valor más
adecuado de ωp.
Estos valores de α y γ en el Caribe son muy diferentes
a los encontrados durante el experimento JONSWAP
con las condiciones del Mar del Norte, con un γ = 3.3 y
-1
para un F = 48 mn y U10 = 10 ms típicos para el
Caribe, correspondería un valor de α = 0.0062, un
orden de magnitud menor. Estas marcadas
diferencias eran de esperarse por el contraste entre las
condiciones geofísicas entre uno y otro mar. Además
es importante debido a la sensibilidad del espectro
JONSWAP a estos valores.
El ajuste del espectro JONSWAP a los promedios
mensuales de espectros de las boyas de oleaje dio
resultados satisfactorios con las constantes utilizadas.
Sin embargo, en la medida que se cuenten con
mediciones del espectro del oleaje en otros lugares del
Caribe y con series de tiempo más completas se deberá
continuar con el estudio de los valores de α y γ. El
espectro JONSWAP es muy sensible a estos valores,
por lo cual posiblemente sea mejor no utilizarlos como
valores constantes sino como función de la altura de la
ola. Así por ejemplo α de los tres meses de Providencia
en promedio tuvo un valor de 0.017,
Torres y Lonin: Espectro de oleaje en el Caribe
significativamente menor al de Barranquilla que en
sus nueve meses promedió un valor de 0.036. De
manera similar sucedió con el valor de γ con valores
promedio de 0.62 y 1.37 respectivamente para
Providencia y Barranquilla. Los menores valores de
estas constantes en Providencia, están asociados
igualmente a menores valores de altura de la ola.
Agradecimientos
Los autores expresan su agradecimiento a la
Dirección General Marítima por el apoyo y
financiamiento de los proyectos de investigación
SMPOM y SPOA, marco en el cual se realizó este
estudio. Especial gratitud al personal del CIOH por el
apoyo técnico en la realización de este trabajo, así
como a los revisores anónimos por sus comentarios
constructivos.
Referencias bibliográficas
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medición de parámetros oceanográficos y de meteorología marina
para el litoral Caribe y Pacífico colombianos. Boletín Científico
CIOH. V. 24. P. 148 - 157.
[2] Hasselmann K, Barnett T, Bouws E, Carlson H, Cartwright D,
Enke K, Ewing J, Gienapp H, Hasselmann D, Kruseman P,
Meerburg A, Muller P, Olbers D, Richter K, Sell W and Walden H,
1973: Measurements of wind-wave growth and swell decay
during the Joint North Sea Wave Project (JONSWAP), Dtsch.
Hydrogr. Z. Suppl. A 8(12), 95p.
[3] Torres R, 2006: Ficha anteproyecto “Sistema de pronósticos
oceánicos y atmosféricos a escala local SPOA”, DIMAR -
CIOH.
[4] Torres R y Lonin S, 2007: Construcción de espectros de oleaje
en el Caribe a partir de mediciones satelitales. Boletín Científico
CIOH. V. 25. P. 19 - 31.
[5] Axys Technologies Inc., 2005: User Manual TRIAXYS
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PODAAC User Handbook. IGDR and GDR Jason Products,
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[8] Pierson W and Moskowitz L, 1964: A proposed spectral form

for fully Developed wind seas based on the similarity theory of
S.A. Kitaigordskii. J. Geophysical Research 69: 5181-5190.

[9] Stewart R, 2005: Introduction to Physical Oceanography.

246p. Disponible Internet (4-6-2007):
http://oceanworld.tamu.edu/ocean410/ocng410_text_book.html.

[10] Ochi M and Hubble E, 1976: Six parameter wave spectra.

Proc. 15th Coastal Engr. Conf., Vol 1, p. 301 - 328.

[11] Torres R, 2003: Estudio del potencial en Colombia para el

aprovechamiento de la energía no convencional de los océanos.
Trabajo de investigación. Disponible biblioteca Escuela Naval
Almirante Padilla.

[12] Young R, 2000: Wind and wave climate. Reino Unido.

Software.

[13] Andrade C, 2000: The circulation and variability of the

Colombian basin in the Caribbean sea. University of Wales.
School of Ocean Sciences.

[14] Da Silva A and Levitus S, 1994: Atlas of surface marine data.

NOAA Atlas NESDIS 6, Washington D.C.

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 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 19-31 (2007)

ARTÍCULO

Construcción de espectros de oleaje en el

Mar Caribe a partir de mediciones
satelitales
Wave spectra construction in the Caribbean Sea using
satellite measurements

Fecha recepción: 2007-09-06 / Fecha aceptación: 2007-10-05

CIOH
www.cioh.org.co
Rafael Ricardo Torres Parra
rtorres@cioh.org.co
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla
Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.
Serguei Lonin
slonin@costa.net.co
Grupo de Investigación en Oceanología, Escuela Naval de Cadetes
“Almirante Padilla”
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla
Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
Se explora la construcción de espectros de oleaje a partir de información de altura significativa de la ola del
satélite Jasón-1, utilizando el espectro preconcebido JONSWAP, con el fin de ser empleados en la asimilación de
datos en el modelo de oleaje de tercera generación del CIOH. Se utilizó información de un producto operacional,
el Compendio de Datos Operacionales del Sensor (OSDR), disponible con un retraso de 3-5 horas, al cual se le
aplicó una corrección para eliminar errores sistemáticos y el control de calidad necesario para alcanzar la mayor
exactitud del Compendio Intermedio de Datos Geofísicos (IGDR), otro producto con mayor procesamiento
disponible con un retraso de 2-3 días. Para verificar los resultados de la construcción de los espectros se
utilizaron dos boyas de oleaje direccional instaladas por la Dirección General Marítima de Colombia,
encontrándose gran coincidencia entre el espectro de las boyas y el construido.

Palabras clave: Altura significativa de la ola, Jason-1, espectro de oleaje.

Abstract
Construction of wave spectra using significant wave height from Jason-l satellite has been explored employing
the JONSWAP preconceived spectra, to be used on data assimilation on a third generation wave model operated
in the Oceanographic and Hydrographic Research Center -CIOH (Centro de Investigaciones Oceanográficas e
Hidrográficas). Information from an operational data product, the Operational Sensor Data Record (OSDR)
available within a 3-5 hour delay was employed, on which a correction to eliminate systematic bias and
necessary quality control were applied to achieve a higher accuracy offered on the Interim Geophysical Data
Record (IGDR), a more detailed data product available within a 2-3 day delay. Two directional wave buoys
installed by Colombia's Maritime Authority were used to verify the wave spectra construction results, finding a
great coincidente between the buoy and constructed spectra.

Key words: Significant wave height, Jason-l, Wave spectra

19
 Torres y Lonin: Espectros de oleaje a partir de mediciones satelitales
Introducción
En las últimas décadas la comunidad oceanográfica ha
reconocido la importancia de la modelación numérica
y mediciones satelitales en el conocimiento y
descripción de la dinámica del oleaje en el océano, lo
cual ha generado importantes esfuerzos en el
desarrollo de experimentos a nivel internacional como
el Proyecto de Oleaje Conjunto en el Mar del Norte
(JONSWAP [1]), Proyecto de Modelación de Olas del
Mar (SWAMP [2]) o el Grupo de Modelación de
Oleaje (WAMDI [3]), así como misiones satelitales
como la del TOPEX/Poseidon, ERS, GFO por citar
algunos [4]. Esta necesidad también fue reconocida
por la Dirección General Marítima de Colombia
DIMAR, la cual para el año 2007 contaba con dos
proyectos de investigación relacionados con el
monitoreo y pronóstico del oleaje.
Pese al avance alcanzado en el pronóstico del estado
del mar con modelos numéricos de tercera generación,
y aún cuando éstos numéricamente permiten resolver
el comportamiento del espectro del oleaje, siempre
habrá incertidumbre en cuanto a la exactitud de los
resultados de los pronósticos, causados por el
planteamiento físico del problema, el empleo de
métodos numéricos con diferentes órdenes de
aproximación, la calidad de datos de entrada,
restricciones computacionales, entre otros. Para
lograr superar este problema, es necesario tratar de
disminuir al máximo la brecha entre la realidad
(siempre desconocida) y las salidas de los modelos
numéricos, para lo cual se utilizan técnicas que
permitan la asimilación de datos, en las cuales se
combinan los diferentes métodos de medición de
oleaje disponibles con las herramientas de
modelación numérica [5].
Esta problemática fue abordada en el Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas -
CIOH de la Dirección General Marítima - DIMAR,
donde se encuentra en operación el modelo numérico
para la predicción de oleaje NEDWAM [6] desde
1996. Sin embargo, dada las limitaciones
computacionales existentes en el momento de su
implementación y que el modelo no había sido
actualizado, éste arrojaba resultados adecuados solo
en una escala regional. Motivados por el deseo de
mejorar ésta y otras herramientas numéricas
disponibles en el CIOH, DIMAR inició en el año 2007
20
el proyecto “Sistema de pronósticos oceanográficos y
atmosféricos a escala local - SPOA” [7].
Uno de los objetivos de este proyecto es mejorar el
modelo de oleaje de tercera generación disponible en
el Caribe, asimilando las mediciones de oleaje
disponible, logrando pronósticos más exactos, lo cual
es posible aprovechando la mayor capacidad
computacional por la puesta en funcionamiento de un
cluster con un arreglo de 24 procesadores como parte
del proyecto SPOA, el contar con mediciones in situ
de las boyas de oleaje direccional instaladas por
DIMAR como parte del proyecto “Sistema de
medición de parámetros oceanográficos y de
meteorología marina - SMPOM” [8] y el acceso a
mediciones satelitales de altura de la ola [4].
En el desarrollo de este objetivo, un reto surgió por
cuanto las mediciones con altímetros a bordo de
plataformas satelitales proveen información
exclusivamente de la altura significativa de la ola
(Hssat), en tanto que en los modelos de oleaje de
tercera generación, el espectro del oleaje se computa
mediante la integración de la ecuación del balance de
energía, sin ninguna restricción previa, por lo cual es
necesario asimilar información espectral.
El presente trabajo muestra una propuesta para la
construcción de espectros de oleaje en el Mar Caribe a
partir de mediciones de Hssat del satélite Jason-1, que
puedan ser asimilados de manera operacional en el
modelo de oleaje utilizado en el CIOH, empleando el
espectro preconcebido JONSWAP [1] de acuerdo con
los resultados de Torres y Lonin [9].
Se usaron datos del satélite Jason-1, el cual orbita
desde el 7 de diciembre de 2001 como sucesor del
satélite TOPEX/Poseidon, en una misión conducida
en conjunto por la Agencia Francesa Espacial (Centre
National d'Etudes Spatiales - CNES) y la
Administración Espacial y Aeronáutica de los Estados
Unidos (National Aeronautics and Space
Administration - NASA). En el artículo se evalúan
los productos que se generan con datos del satélite y el
control de calidad aplicado a los mismos.
Las mediciones de Hssat del satélite Jason-1 han sido
estudiadas en trabajos como los siguientes: Ménard et
al. [10], quienes evaluaron los niveles de error de

diferentes productos con la plataforma ya en vuelo.
Desai y Vincent [11] realizaron la evaluación
estadística de las mediciones del altímetro comparado
dos productos. Queffeulou [12] validó mediciones de
Hssat de diferentes altímetros entre sí y con respecto a
boyas de oleaje. También la asimilación de datos del
satélite Jason-1 en modelos de tercera generación fue
estudiado por Skandrani y Queffeulou [4], quienes
compararon el impacto de asimilar datos de múltiples
satélites para el pronóstico de oleaje a escala global.
Con el artículo se logra mostrar que es posible
construir adecuadamente el espectro de frecuencias
S (f) con mediciones de Hssat del satélite Jason-1 en el
mar Caribe, quedando disponible para ser asimilada
en un modelo de oleaje de tercera generación.
Materiales y métodos
Datos del Satélite Jason-1
El Jasón-1 es un satélite de órbita polar que repite su
huella en tierra cada 9.9156 días en lo que se denomina
un ciclo. Cada ciclo consta de 254 pases, en cada uno
de los cuales el satélite transita sobre el planeta en
sentido Norte - Sur o viceversa. El tránsito del satélite
en cada pase demora aproximadamente 56 minutos.
De estos pases, dieciséis tienen su huella en tierra
dentro del dominio del Mar Caribe (en la figura 1 se
muestran cinco de estos pases), por lo cual pueden ser
utilizados para la asimilación de datos en el modelo de
oleaje usado en el CIOH.
De los múltiples instrumentos con que cuenta el
satélite, el sensor más importante a bordo es el
altímetro de radar “Poseidón 2”, cuya señal se analiza
en tiempo real con un algoritmo de estimaciones a
bordo del satélite, con el cual se calcula, entre otros,
Hs sat [13]. También tiene un radiómetro de
microondas, para calcular el contenido de vapor de
agua en la troposfera a lo largo del pulso del altímetro,
con lo cual se puede obtener el error del satélite en las
mediciones de distancia causadas por el retraso del
pulso por el vapor de agua [14].
Los principales parámetros medidos por el altímetro
son la altitud, Hssat y el “retorno de potencia” conocido
también como coeficiente de reflexión de la señal en la
misma dirección de la emisión (backscatter
coefficient σ0). Estos parámetros son estimados cada
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 19-31 (2007)
50 m, es decir con una frecuencia de 20 Hz, las cuales
son comprimidas (dependiendo de la cantidad de
mediciones disponibles) mediante promedio o
regresión lineal a mediciones de 1 Hz. La distancia de
la huella en tierra de estas mediciones en el dominio
del Mar Caribe fueron calculadas en
aproximadamente 5.930 metros, por lo que cada valor
de Hssat es representativo para una distancia de
aproximadamente 6.000 metros sobre la huella del
satélite en tierra. Las distancias de los datos tomados a
20 Hz serán entonces de menos de 300 metros entre sí.
De acuerdo con Picot et al. [14], se tienen tres niveles
de procesamiento de los datos: (1) datos de telemetría
o en bruto, (2) compendio de datos del sensor y (3)
compendio de datos geofísicos. El compendio de
datos operacionales del sensor - OSDR (Operacional
Sensor Data Record), es un producto no validado que
utiliza información de ubicación y altitud disponibles
por una órbita computada a bordo del satélite en
tiempo real. Estos archivos están disponibles con un
atraso de 3 a 5 horas, e incluyen datos de Hssat con una
frecuencia de 1 Hz. Este producto tiene como
finalidad primordial proveer a centros de pronósticos
los datos del satélite para ser usados en la asimilación
de manera operacional en modelos numéricos, lo cual
es del mayor interés dentro del proyecto SPOA.
De otra parte, el compendio de datos geofísicos está
disponible a través de dos productos: El compendio
intermedio de datos geofísicos - IGDR (Interim
Geophysical Data Record) y el compendio de datos
geofísicos - GDR. Éstos se diferencian de los OSDR
por cuanto se aplica un re-traqueo en tierra a las ondas
electromagnéticas del altímetro, con lo cual se mejora
la exactitud de las mediciones. Otra diferencia es que
los compendios de datos geofísicos contienen todas
las correcciones ambientales y geofísicas. En estos
productos Hssat está disponible con una frecuencia de
1 y 20 Hz [14].
El IGDR es un producto no validado cuyos archivos
están disponibles con una demora de 2 a 3 días, en
tanto que el GDR es un producto completamente
validado que utiliza una órbita precisa y re-traqueo en
tierra, estando disponibles con una demora de 30 días.
La diferencia más significativa entre los productos
IGDR y GDR, es que este último utiliza una órbita
más precisa.
21
 Torres y Lonin: Espectros de oleaje a partir de mediciones satelitales
Los productos de este satélite se encuentran
dispuestos por el CNES a través del “Archivo,
validación e interpretación de datos oceanográficos
satelitales” - AVISO (Archiving, Validation and
Interpretation of Satellite Oceanographic data), así
como por la NASA a través del “Centro de
distribución y archivo activo de oceanografía Física” -
PO.DACC (Physical Oceanography Distributed
Active Archive Center).
Datos de las boyas de oleaje direccional
Como parte del proyecto SMPOM [8], DIMAR
instaló en el año 2006 una boya de oleaje direccional
en Bocas de Ceniza, cerca de Barranquilla (Lat.
11°32'N y Long. 74°40'W) y en el año 2007 otra boya
al norte de la isla de Providencia (Lat. 13°32'N y Long.
81°20'W) a una profundidad cercana a los 150 m.
Éstas recolectan información espectral del oleaje cada
hora en una ventana de 20 minutos con una frecuencia
de muestreo de 4 Hz. De los archivos generados por el
software de las boyas, se utilizarán los de extensión
“NONDIRSPEC”, los cuales contienen para cada
hora la potencia del espectro de frecuencia para cada
una de las 123 bandas de frecuencia S(f) integradas en
dirección [9].
Selección de productos del satélite Jason-1 y
control de calidad
Para la selección del producto del satélite Jason-1 a
utilizar en la asimilación de datos, se revisó la
información contenida en los archivos OSDR e IGDR
de Hssat, para evaluar las diferencias en las mediciones
de los dos productos en el Caribe, sin perder de vista la
necesidad de emplear operacionalmente la
información para ser asimilada en el modelo de oleaje.
Se conoce que el producto IGDR presenta un error en
la estimación de Hssat de 0.4 metros o 10% (el que sea
mayor) [10], sirviendo de referencia al ser un producto
más exacto [14]. Por otra parte, los productos OSDR
al estar disponibles pocas horas después de efectuadas
las mediciones de Hssat, se pueden emplear en la
asimilación de datos. Para lograr que los productos
OSDR tengan los mismos niveles de exactitud que los
IGDR se deben aplicar unos filtros y eliminar el error
sistemático de acuerdo con la expresión:
O i
Hs sat = 0.011 +1.053 Hs sat (en metros)
22
Los índices ( O ) e ( i ), denotan los valores de los
productos OSDR e IGDR respectivamente [11].
Para el control de calidad a los datos se utilizó la
información provista por el CNES en los formatos
establecidos para cada uno de los dos productos [15],
estableciéndose el uso de los siguientes filtros:
a) Filtro espacial. Se eliminan los datos fuera de los
límites en latitud y longitud del dominio del
modelo. Para este caso los límites del Mar Caribe
utilizados fueron: latitud mínima 9.5º N, latitud
máxima 17.5º N, longitud mínima 61º W y
longitud máxima 89º W.
b) Filtro del tipo de superficie. Usando una bandera
asignada internamente por el algoritmo del satélite
durante el procesamiento con base a un archivo
plantilla, se remueven los datos marcados con una
superficie diferente a “océanos abiertos” o “mares
semi-cerrados”.
c) Filtro de tipo de eco del altímetro. Con el
algoritmo interno del satélite se asigna un valor a
los ecos de “tipo oceánico”. Se eliminan los datos
que indiquen ecos diferentes.
d) Filtro de tipo de eco del radiómetro. El algoritmo
interno del satélite asigna un valor a los ecos de
“tipo oceánico”. Este filtro se diseñó para eliminar
datos erróneos de velocidad del viento medidos
por el radiómetro, pero no se aplicó por cuanto se
encontró que en el dominio del Caribe elimina
datos correctos de Hssat ubicados cerca a la Tierra.
e) Filtros de calidad para datos de 1 Hz. El algoritmo
interno del satélite asigna banderas teniendo en
cuenta la calidad de los datos del altímetro y
radiómetro. Se eliminaron los datos con banderas
de datos erróneos.
f) Se diseñó un filtro para eliminar los datos de Hssat
menores o iguales a 0.1 metros, por estar por
debajo de los niveles de exactitud del altímetro y
debido a que su baja energía dificulta la
construcción de un espectro.
g) Número de puntos válidos empleados para
calcular los datos de 1 Hz. Los formatos de los

archivos incluyen el número de valores colectados
a 20 Hz empleados para el cálculo de Hssat a 1 Hz.
Se utilizó un filtro para eliminar los valores de Hssat
a 1 Hz promediados con menos de 15 datos.
h) Filtro a desviaciones estándar superiores a los 0.7
metros. El valor de Hssat compilado a 1 Hz,
corresponde al promedio de 20 mediciones. En los
archivos se encuentra disponible la información de
la desviación estándar de estos datos. Con este
filtro se eliminan datos poco representativos por
presentar demasiada dispersión.
i) Filtro de alto gradiente. Para evitar cambios
demasiado bruscos en los valores medidos de Hssat
a 1 Hz, se aplica un filtro en el cual si el valor
absoluto de la diferencia entre el promedio de los
cuatro datos alrededor del dato evaluado y el dato
evaluado es mayor a 0.5 metros, el dato evaluado
es removido. De manera similar se hace con los dos
primeros y dos últimos datos de Hssat, pero
comparándolos con el promedio de los tres datos
alrededor del valor evaluado.
En el trabajo de Desai y Vincent [11], para el control
de calidad a los productos OSDR utilizaron los filtros
b, c, d y e, además de un filtro para editar aquellos
datos en que la desviación estándar al promediar (con
datos de 20 Hz) el coeficiente de reflexión (σ0), fuera
superior a 3 dB. El valor de la desviación estándar está
en la plantilla del producto.
Para seleccionar el producto del Jason-1 a utilizar y el
control de calidad más apropiado a aplicar a los datos,
se comparó el comportamiento de en los productos
OSDR e IGDR, realizando el siguiente experimento.
Se tomó el pase 039 (figura 1) del ciclo 201 del
satélite, en el cual se efectuaron mediciones en el
centro de la cuenca del Caribe el 22 de junio de 2007,
entre las 20 horas 24 minutos y 20 horas 26 minutos
tiempo UTC. Se procesó la información de este pase
c o n t e n i d o e n l o s a r c h i v o s
“JA1_IGD_2PbP201_039.CNES” para los productos
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 19-31 (2007)
IGDR, y para el producto OSDR el archivo
“JA1_OSD_2PbS20070622_184328_07326.
NASA”. Este último archivo se procesó con y sin
tener en cuenta el filtro aplicado al coeficiente de
reflexión (σ0).
Figura 1. Pases del satélite Jason-1 más cercanos a las
boyas de Barranquilla y Providencia, graficados con
información batimétrica de la Carta Náutica 007 de
DIMAR.
En la figura 1 se presentan los pases del satélite más
cercanos a la posición de las boyas. En azul claro las
aguas con profundidad menor a 50 metros, lo cual es
importante, por cuanto en estas áreas, las olas tendrán
un comportamiento de aguas en transición,
modificando sus características por el efecto del
fondo.
Construcción del espectro con mediciones
satelitales
Para la construcción del espectro con base en
mediciones satelitales se utilizó la información de
Hssat medida por el altímetro del satélite Jason-1
provista en archivos OSDR. Se aplicó el control de
calidad a los datos satelitales empleando los filtros
comentados anteriormente. Con esta información se
calculó el área bajo el espectro de frecuencias que
corresponde a esta altura despejando de la
fórmula [16].
23
 Torres y Lonin: Espectros de oleaje a partir de mediciones satelitales

Con los valores de las constantes del espectro Para la boya de Barranquilla sólo se tomó en cuenta el
JONSWAP [1] encontradas para el Caribe pase 039 por pasar muy cerca de la boya, en tanto que
(alfa=0.0312 y gama=1.1806) [9], se iteran valores de para la boya de Providencia se evaluaron los pases
la frecuencia pico (wpi) entre los valores mínimo y 026, 065, 141 y 204 (figura 1). Los nombres de los
-1
máximo de 0.6 y 1.3 rad × seg respectivamente, con archivos NONDIRSPEC indican en UTC
-1
una variación de 0.0025 rad × seg . A cada valor de wp aaaammddhhmm el inicio de la toma de datos por la
boya en la ventana de 20 minutos, en tanto que los de
se le calcula el espectro JONSWAP, hasta encontrar el
los archivos OSDR después del 2Pb indican en UTC
valor con el cual el área bajo la curva del espectro
aaaammdd_hhmmss_microsegundos. Nótese que la
JONSWAP m(wpi) sea más parecida al área bajo la
hora de los archivos OSDR corresponde al primer
curva que corresponde al valor de Hssat ( ). dato del archivo, el cual tiene una extensión mayor a
dos horas, incluyendo los datos medidos por el satélite
Este procedimiento se realiza para cada valor de Hssat, en su tránsito por el Caribe cerca de las boyas.
obteniendo finalmente un espectro JONSWAP
construido para cada valor del satélite en el Caribe con Para la evaluación inicialmente se ubica la posición de
frecuencia de 1 Hz. los puntos (latitud-longitud) con información de Hssat
medidos a 1 Hz, que estén a una distancia mínima de la
Para evaluar los resultados de la metodología boya. Esta distancia para cada boya se estimó de la
propuesta, se comparó el espectro JONSWAP siguiente manera:
construido con base en la información de Hssat con el
medido in situ por la boya de oleaje Por la corta distancia entre la huella en tierra del pase
( ). 039 y la boya de Barranquilla, se empleó un radio de
15 kilómetros (figura 1). En el caso de la boya en
Para esta comparación fue necesario contar con Providencia se evaluaron cuatro pases cercanos a esta
mediciones del oleaje simultáneas y cercanas del
boya, el 26, 65, 141 y 204. Los pases 26 y 141 no se
satélite Jason-1 (archivo OSDR) y del medido
consideraron por cuanto la distancia mínima a la boya
por la boya (archivo NONDIRSPEC). En la Tabla 1 se
es de 207.5 y 205 kilómetros respectivamente,
presentan los archivos disponibles para cada una de
distancia a la cual las características del oleaje pueden
las boyas, con los de los pases del satélite que cumplen
ser muy diferentes. En cuanto al pase 65, se puede
con estas condiciones para cada caso.
observar en la figura 1 cómo los puntos de medición
Tabla 1. Archivos NONDIRSPEC y OSDR disponibles del satélite más cercanos a la boya (89.7 kilómetros)
para evaluar la construcción del espectro de oleaje en el se encuentran sobre la plataforma continental
Caribe. centroamericana con menos de 50 metros de
profundidad, por lo que el comportamiento de este
Pase Nombre archivo oleaje será diferente al de la boya, al haber sido
Boya Jason-1 Nondirspec OSDR modificado por la interacción con el fondo. Para la
Barranquilla 039 200706222010 2PbS20070622_184328_07326 boya de Providencia se empleó entonces un radio de
Barranquilla 039 200707021810 2PbS20070702_164153_07328
88 kilómetros con datos del pase número 204.
Barranquilla 039 200707121610 2PbS20070712_144050_07295
Barranquilla 039 200707221410 2PbS20070722_123918_07325
De los puntos dentro de la distancia establecida, se
Providencia 026 200708102100 2PbS20070810_213027_06820
determina el que tenga el valor de Hssat más cercano a
Providencia 065 200708120900 2PbS20070812_090040_07264
Providencia 141 200708051000 2PbS20070805_101310_07316 la altura de la ola medida con la boya (Hsboya), el cual se
Providencia 204 200706290700 2PbS20070629_063842_05944 calcula sumando el área bajo el espectro usando las
Providencia 204 200707090500 2PbS20070709_042036_06962 frecuencias mayores o iguales a 0.08 Hz, limitando el
Providencia 204 200707190300 2PbS20070719_021902_06974 espectro al oleaje local (Wind Sea), evitando usar el
Providencia 204 200707290100 2PbS20070729_001724_07149 mar de fondo (Swell) [9].

24

El espectro JONSWAP construido con Hssat en el
punto seleccionado (SJ (f )), se compara con el espectro
de la boya (Sb (f)) para evaluar los resultados de la
metodología planteada. Esta comparación no se hizo
con el punto más próximo a la boya por la cercanía de
estas a aguas someras, con lo cual las mediciones
satelitales pueden ser de una naturaleza diferente a las
de la boya (aguas profundas), siendo inadecuado
hacer una comparación en este caso de los dos
espectros.
Finalmente para valorar los resultados, se utilizó la
suma del cuadrado de las diferencias entre el SJ (f ) y
Sb(f ), dada por la siguiente ecuación:
, con N el número de frecuencias usadas en
los espectros.
Se tomó N = 113 datos correspondientes a las
frecuencias del 0.08 a 0.64 Hz, con una variación de
0.005 Hz, tal y como se encuentra disponible el
espectro de frecuencias generado por la boya Sb(f ) y
filtrando las frecuencias de mar de fondo [9].
Resultados
Selección de archivos y filtros
Para la selección del producto del satélite Jason-1 a
usar, se realizó el experimento como se indicó en la
metodología, comparando el comportamiento de Hssat
en los productos OSDR e IGDR y el uso del filtro al
coeficiente de reflexión (σo), usando el pase 039 de 22
de junio de 2007.
Se encontró que los filtros aplicados para el control de
calidad en esta oportunidad, fueron superados por 125
datos del producto IGDR y por 127 datos del OSDR.
De éstos, 123 datos superaron los filtros aplicados a
ambos archivos. Al aplicar el filtro del coeficiente de
reflexión, sólo 9 datos del archivo OSDR lo
superaron, lo que indica un significativo impacto en el
dominio del Caribe al remover un gran número de
mediciones de Hssat.
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 19-31 (2007)
En la figura 2 se presentan los resultados del
experimento. En negro Hssat del producto IGDR el
cual sirve de referencia por ser más exacto [14]. En
azul Hssat del OSDR de antes de realizar el ajuste lineal
propuesto por Desai y Vincent [11] y en rojo después
de aplicado. En círculos magenta los nueve valores de
Hssat que superaron el filtro del coeficiente de
reflexión.
Figura 2. Comparación de la medición de altura
significativa de la ola de diferentes productos del satélite
Jason-1 del pase 039 de 22 de junio de 2007.
En la figura anterior se puede observar cómo el ajuste
lineal aplicado a los datos de Hssat del archivo OSDR,
logran valores muy cercanos a los encontrados con el
IGDR. Igualmente se observa la gran pérdida de datos
al aplicar el filtro del coeficiente de reflexión, sin un
impacto en la calidad de las mediciones, puesto que
muchos de los puntos que no superaron este filtro
tienen mejor coincidencia con los datos IGDR que
algunos de los 9 puntos que si superaron el filtro.
Para cuantificar la diferencia de aplicar o no la
corrección lineal a la Hssat del producto OSDR se
compararon los 123 datos coincidentes con el
producto IGDR. En la figura 3 se muestra esta
diferencia en metros en el eje de las ordenadas. La
serie de tiempo azul indica la diferencia entre IGDR
menos OSDR, la cual en promedio fue de -0.1386 m
con una desviación estándar de 0.0694 m, en tanto que
en negro se presenta la diferencia entre IGDR menos
el OSDR ajustado linealmente, la cual en promedio
25
 Torres y Lonin: Espectros de oleaje a partir de mediciones satelitales
fue de -0.0135 m, con una clara mejoría de un orden de
magnitud y una desviación estándar de 0.0658. Esto
indica que al corregir linealmente los valores de Hssat
de OSDR, se obtiene mayor exactitud al compararlo
con los datos IGDR.
Figura 3. Diferencias en la medición de altura significativa
de la ola de productos IGDR y OSDR del satélite Jason-1
del pase 039 de 22 de junio de 2007.
Un ejercicio similar se realizó con el pase 204 (figura
1) del mismo ciclo 201, el cual transitó sobre el oeste
del Caribe el 29 de junio de 2007 alrededor de las
06:51 UTC. En este caso, 141 datos OSDR superaron
los filtros, en tanto que 144 datos IGDR lo hicieron
igualmente. Aplicando el filtro del coeficiente de
reflexión al producto OSDR, tan sólo permanecieron
17 datos. 135 datos superaron igualmente los filtros
aplicados a los productos OSDR e IGDR.
Los resultados en el ejercicio con el pase 204 fueron
muy similares a los presentados en las figuras 2 y 3
para el pase 039. La diferencia entre IGDR menos
OSDR, en esta ocasión fue de -0.0795 m con una
desviación estándar de 0.0895 m, mientras que al
restarle al IGDR el valor de OSDR ajustado
linealmente, se obtuvo un promedio de 0.0218 m con
una desviación estándar de 0.0806 m.
Teniendo en cuenta lo anterior, se consideró adecuado
para el presente trabajo, usar los archivos OSDR
ajustando linealmente los valores de Hssat [11],
aprovechando de esta manera la ventaja de tener
acceso a la información pocas horas después de
efectuadas las mediciones, pero manteniendo niveles
26
de exactitud similares a los de los productos IGDR
registrados por Ménard et al. [10]. Por otro lado, los
filtros indicados en la metodología realizaron un
apropiado control de calidad. No se utilizó el filtro del
coeficiente de reflexión por cuanto implica para el
dominio del Caribe una gran pérdida de datos
correctos de Hssat .
Construcción del espectro con mediciones
satelitales
En las Figuras 4 a 7 se presentan las salidas gráficas de
la metodología propuesta para la construcción del
espectro con mediciones satelitales, usando los datos
de la boya de Barranquilla y del pase 039 del satélite
para el 22 de junio de 2007 (tabla 1).
En la figura 4 se presenta con asteriscos las Hssat del
archivo OSDR. En este caso, 127 datos superaron los
filtros propuestos en la metodología. En el eje de las
abscisas el tiempo UTC en que el satélite midió la
altura de la ola. Nótese que el satélite recorre el Caribe
(figura 5) en menos de tres minutos. Con asteriscos
negros Hssat en los tres puntos dentro del radio de 15
kilómetros a partir de la ubicación de la boya de
Barranquilla. En asteriscos rojos Hssat medida en la
ventana de las 20:10 a las 20:30 horas UTC. En este
ejemplo, la comparación de espectros (figura 7) usa el
SJ (f ) construido con la información Hssat del tercer
punto, por tener el valor de altura de la ola más similar
al medido por la boya (diferencia de 0.0961 metros).
Figura 4. Altura de la ola medida por el satélite Jason-1 en
el pase 039 de 22 de junio de 2007.
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 19-31 (2007)

Espectros de frecuencia JONSWAP construidos

En la figura 5 se presenta en planta la ubicación
espacial de los 127 datos que superaron los filtros
aplicados al archivo OSDR. Cada asterisco indica la
posición en la que se calculó cada uno de los valores
de Hssat presentados en la figura 4 en el tránsito de Sur
a Norte del pase 039 del satélite. El acercamiento en el
recuadro del área de Barranquilla en la figura 5,
muestra en rojo la ubicación de la boya y en magenta
los tres puntos dentro del radio de 15 kilómetros. La
Hssat del tercero de estos puntos es el que tiene mayor
coincidencia con la Hssat , debido posiblemente a la
dirección predominante del oleaje (noreste) y a la
ubicación de los dos primeros puntos en aguas en
transición (figura 1).

Figura 6. Espectros de frecuencia

JONSWAP construidos para las alturas
de la ola medidas por el satélite Jason-1
en el pase 039 de 22 de junio de 2007.

Espectro de frecuencia del oleaje

Figura 5. Ubicación espacial de las mediciones de altura de
la ola del satélite Jason-1 en el pase 039 de 22 de junio de
2007.

En la figura 6 se observan los 127 espectros

JONSWAP construidos uno para cada valor de Hssat
que pasó los filtros aplicados al archivo OSDR. Al
comparar las áreas de los espectros con el
comportamiento de la figura 4, se observa cómo se
lograron reproducir las variaciones en la altura de la
ola medidas por el satélite. A mayor altura de la ola, el
espectro JONSWAP registra mayor área en el espectro
y menor frecuencia pico (mayor período de la ola).

En la figura 7 se compara en azul el espectro Sb (f ) Figura 7. Comparación de espectros de frecuencia del

medido con la boya de Barranquilla en una ventana de
tiempo (minuto 10 a 30) que coincidió con el tránsito
del satélite por el Caribe siguiendo la trayectoria del
pase 039. La línea negra presenta el espectro
JONSWAP SJ (f ) construido a partir de la información
de Hssat para el tercer punto de medición del satélite. Se
observa la buena coincidencia de los dos espectros.
oleaje medido in situ con el construido con base al espectro
JONSWAP y la altura de la ola medida por el satélite Jason-
1 en el pase 039 de 22 de junio de 2007.
En la tabla 2 se presentan los resultados del
experimento para los pases 039 y 204 de los pares de
archivos relacionados en la tabla 1. En las primeras

27
 Torres y Lonin: Espectros de oleaje a partir de mediciones satelitales

dos columnas la hora en que se realizó la medición del mayor y menor número de datos en Barranquilla fue
satélite y el inicio de la ventana de 20 minutos de toma de 38 datos, en tanto que para Providencia fue de 10
de datos de la boya (UTC). En la tercera columna el datos. Esto indica que en cada pase en particular a
número de datos de Hssat del archivo OSDR que pesar de ser sobre la misma huella en tierra, el
superaron los filtros aplicados de acuerdo con lo altímetro tiene un comportamiento diferente que
descrito en la metodología. En las columnas cuatro y depende del estado de mar en cada ocasión. Sin
cinco, se presenta la distancia a la boya y la diferencia embargo, se presenta un número significativo de datos
entre las alturas de la ola medidas por la boya y por el en cada pase (mínimo 89) para ser empleados en la
satélite, para el punto seleccionado por tener el valor asimilación del modelo de oleaje.
de Hssat más similar al de Hsboya, estando dentro del
radio determinado para cada boya. En la sexta y En la columna 4 se observa como el pase 039 siempre
séptima columnas la frecuencia pico (wp) del espectro tuvo mediciones de Hssat con distancias a la boya de
Sb (f ) y del SJ (f ) construido. En la última columna la Barranquilla inferiores a los 15 km, así como
suma del cuadrado de las diferencias entre los dos distancias del pase 204 a la boya de Providencia
espectros. menores a los 88 km, cumpliendo en ambos casos con
el criterio de distancia establecido. En Barranquilla el
promedio de distancia del punto de medición satelital
Tabla 2. Resultados de la comparación del espectro de la seleccionado para la comparación con el espectro de
boya de oleaje y el espectro JONSWAP construido con la
la boya fue de 10.2 kilómetros, en tanto que para
altura de la ola medida por el satélite.
Providencia fue de 87.6 kilómetros.
aammddhhmm de Medición del satélite Frecuencia pico
MediciOnes en UTC No.
datos
compara espectros en Hz Suma
cuadrado de
Con información de la quinta columna se encontró en
satelite
superan
Distancia Diferencia JON-
diferencias
entre
promedio una diferencia en la altura significativa de la
a la boya Hmo boya - Boya
Jason 1 Boya filtros (Km) Hs sat (m)
SWAP espectros ola entre la medición de la boya y el satélite en
Boya de Barranquilla - Pase 039 Barranquilla de 6.8 centímetros y en Providencia de -
0706222024 0706222010 127 12.4962 0.0961 0.115 0.1317 14.054 1.7 centímetros, la primera con una desviación
0707021823 0707021810 118 12.0539 0.0913 0.11 0.1214 21.5284
estándar de 2.9 y la segunda de 0.8 centímetros. Estos
0707121621 0707121610 112 8.693 0.043 0.13 0.1253 14.2132
0707221420 0707221410 89 7.5805 0.0439 0.13 0.1548 9.9562 valores indican una excelente coincidencia entre los
Boya de Providencia - Pase 204 dos métodos de medición del estado del mar
0706290651 0706290700 146 87.5196 -0.008 0.11 0.1333 21.9065 siguiendo la metodología de comparación descrita en
0707090449 0707090500 136 87.3328 -0.0249 0.12 0.1397 9.0481
0707090248 0707190300 145 87.9064 -0.0126 0.175 0.1643 2.1119 este artículo, en parte por el buen resultado de las
0707290046 0707290100 139 87.9509 -0.0242 0.16 0.1524 1.642
correcciones y filtros aplicados a los archivos OSDR.
El signo negativo indica que el satélite sobreestimó el
En la tabla 2 se puede observar que para los pares de valor medido por la boya, el cual es el valor de
datos seleccionados (boya – satélite), el máximo referencia, debido a la mejor exactitud del
tiempo entre la ventana de observación de datos de la instrumento.
boya y el paso del satélite fue de 14 minutos en
Providencia el 29 de julio de 2007. El tiempo máximo Para analizar los resultados en la reconstrucción de wp
de diferencia entre una medición satelital y la de la (columnas 6 y 7 de la tabla 2) obtenida al iterar
boya será de 20 minutos, dada la frecuencia con que diferentes espectros de oleaje JONSWAP, se hace en
esta última está programada para recolectar datos. términos del período de la ola. Se encontró para
Barranquilla una diferencia promedio entre el período
Con la información de la tercera columna se puede
pico de la medición con la boya y del espectro
encontrar que, en promedio, el pase 039 del satélite
mantuvo 111.5 datos después de aplicados los filtros construido de 0.725 segundos, con una desviación
descritos en la metodología, en tanto que el pase 204 estándar de 0.69 segundos. En la boya de Providencia
en promedio mantuvo 141 datos, lo cual se explica por el promedio de esta diferencia fue de 0.52 segundos
ser un transecto más largo. La diferencia entre el con una desviación estándar de 1 segundo.

28

Lo anterior indica en promedio una adecuada
restitución de wp para ambas boyas, con una
dispersión en Barranquilla similar al promedio, en
tanto que en Providencia la dispersión es el doble que
el promedio. Estos valores muestran que la
reconstrucción del período pico es posible mediante la
metodología planteada, aceptando unos niveles de
variación, lo cual es de esperar por cuanto el espectro
medido por la boya (línea azul de la figura 7) al ser
construido a partir de mediciones en el campo durante
20 minutos contiene ruidos de alta frecuencia, en tanto
que usando el espectro JONSWAP se suaviza el
comportamiento espectral, logrando representar el
mayor aporte en las señales. Adicionalmente el hecho
de usar valores constantes de Alfa y Gama en la
construcción del espectro JONSWAP, contribuyen a
la dispersión encontrada.
Para evaluar cuantitativamente el éxito de la
reconstrucción del espectro propuesto en este artículo,
especial cuidado se tuvo al analizar el resultado de la
suma al cuadrado de las diferencias entre el Sb (f ) y el
SJ (f ) construido (columna 8 de la tabla 2). Este valor se
dividió en los 113 elementos de frecuencia y se le sacó
la raíz cuadrada, obteniendo de esta manera la
diferencia promedio entre los dos espectros para cada
2
una de las 113 frecuencias medida en m s.
Para el caso de la boya de Barranquilla, la máxima
suma del cuadrado de las diferencias de los espectros
fue la encontrada el 2 de julio/07 con un valor de
2 2
21.5284 (m s) , la cual correspondería en promedio
para cada una de las 113 frecuencias a una diferencia
2
entre los espectros de 0.43 m s. Este valor se consideró
bajo teniendo en cuenta que el espectro de la boya
contó para este caso con un pico de energía superior a
2
los 6 m s.
De manera similar para la boya de Providencia, se
encontró que la máxima suma del cuadrado de las
diferencias sucedió el 29 de junio/07 con un valor de
2 2
21.9065 (m s) , la cual correspondería en promedio
para cada una de las 113 frecuencias a una diferencia
2
entre los espectros de 0.44 m s. Este valor igualmente
se consideró bajo con respecto al espectro de la boya,
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 19-31 (2007)
que en esta oportunidad presentó un pico de energía
2
cercano a los 4 m s.
En promedio para los cuatro casos estudiados en la
boya de Barranquilla, la diferencia entre espectros por
2
frecuencia fue de 0.36 m s, con una desviación
2
estándar de 0.057 m s. De manera similar para
Providencia, el promedio de los cuatro casos arrojó un
2
valor de 0.24 m s con una desviación estándar de
2
0.149 m s, más bajo en promedio, pero con mayor
dispersión, debido a que los espectros de energía de
Providencia fueron menores a los de Barranquilla, lo
cual desmejora el resultado en la reconstrucción del
espectro.
Discusión
De los productos con información de Hssat del satélite
Jason-1, los OSDR al estar disponibles a las pocas
horas de efectuadas las mediciones permiten ser
utilizados para la asimilación de datos en modelos de
oleaje. De otro lado, el producto con mayor exactitud
para medir Hssat es el (I)GDR [14], sin embargo, con
los archivos OSDR es posible alcanzar niveles
similares de exactitud efectuando el control de calidad
a los datos y aplicando la corrección lineal a los datos
OSDR propuesta por Desai y Vincent [11]. De los
filtros propuestos por estos autores, no se aplicó el del
coeficiente de reflexión (σ0), para los datos en el
Caribe, por cuanto elimina muchos datos correctos de
Hssat .
En el trabajo de Queffeulou [12] se estimó la calidad
de las mediciones de Hssat de varios altímetros
incluyendo el Poseidón-2. Al compararlos con
mediciones de boyas empleó una distancia de 50
kilómetros y diferencia en tiempo entre mediciones de
máximo 30 minutos, en tanto que al realizar
comparaciones entre altímetros utilizó un criterio de
distancia de 100 kilómetros, distancias que consideró
adecuadas a partir de una estimación del error
geofísico de las mediciones satelitales. Teniendo
como referencia lo anterior, se consideran adecuadas
las distancias empleadas en el presente trabajo para
comparar los Sb (f ) y el SJ (f ) construido. En cuanto al
29
 Torres y Lonin: Espectros de oleaje a partir de mediciones satelitales
tiempo, debido a que la boya mide datos horarios en
una ventana de 20 minutos, el tiempo máximo de
diferencia entre una medición satelital y la medición
de la boya será de 20 minutos.
Se considera que siguiendo la metodología propuesta
es posible en el dominio del Mar Caribe construir
espectros de oleaje adecuados, a partir de datos de Hssat
medidos por el satélite Jason-1 y disponibles a través
de archivos OSDR.
Finalmente se recomienda como parte del proyecto
SPOA [7] evaluar la aplicabilidad e impacto de utilizar
la construcción de espectros propuesta en este trabajo
para asimilar datos de en el modelo de oleaje, así
como la metodología de comparación de espectros
Sb (f ) y SJ (f ) para validar los resultados.
Agradecimientos
Los autores expresan su agradecimiento a la Dirección
General Marítima por el apoyo y financiamiento del
proyecto de investigación SPOA, marco en el cual se
realizó este estudio. Especial gratitud al personal del
CIOH por el apoyo técnico en la realización de este
trabajo, así como a los revisores anónimos por sus
comentarios constructivos. Se resalta el
extraordinario apoyo recibido por AVISO-CNES y
PO.DACC-NASA quienes mantienen excelentes
bases de datos para acceder a los archivos generados
por el satélite Jason-1.
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31
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)

ARTÍCULO

Propagación del oleaje y asimilación de datos

satelitales en un modelo espectral de tercera
generación
Swell propagation and assimilation of satellite data in a third
generation spectral model

Fecha recepción: 2007-09-13 / Fecha aceptación: 2007-10-18

CIOH
www.cioh.org.co
Serguei Lonin, slonin@costa.net.co
Grupo de Investigación en Oceanología, Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla”;
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla Manzanillo,
Cartagena de Indias, D. T. y C.
Ricardo Torres, rtorres@cioh.org.co
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla Manzanillo,
Cartagena de Indias, D. T. y C.
Iryna Lonina, oceanmet.ltda@yahoo.com
Oceanmet Ltda.;
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla Manzanillo,
Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
En la predicción del oleaje en el Mar Caribe, dos mejoras pueden aumentar la precisión del modelo: el
perfeccionamiento del esquema numérico de transporte del espectro de olas y la asimilación adecuada de los
datos provenientes de las plataformas satelitales. La primera mejora minimiza el error de propagación de olas de
viento a lo largo del fetch y aumenta la exactitud de cálculo de olas de mar de fondo (swell). En el trabajo se
analizan varios esquemas numéricos, tales como Lax-Vendroff, FCT, TVD, “upward” de primer orden de
aproximación y un esquema no central de tercer orden. A pesar de que los esquemas positivos de tipo TVD
conservan mejor la forma inicial de las perturbaciones, la mayor exactitud de conservación integral del espectro
fue encontrada con el esquema de tercer orden. Luego de la implementación de este algoritmo mejorado, se
propone una metodología no tradicional de asimilación de datos del oleaje de las órbitas satelitales de JASON-1.
La metodología se basa en la teoría de perturbaciones pequeñas para un funcional que minimiza el error
cuadrático del modelo, corrigiendo unas constantes responsables por los procesos físicos de generación,
disipación y la transformación no-lineal del espectro.

Palabras claves: Modelo espectral del oleaje, asimilación de datos, esquemas numéricos de transporte.

Abstract
In wave forecasting in the Caribbean, two ways to improve enhancing of model accuracy are possible:
improvement of the numerical scheme of transport of the wave spectrum, and an appropriate assimilation of the
data obtained from the satellite platforms. The former minimizes the wind wave propagation error along the
fetch and increases the swell estimate accuracy. Several numerical schemes are analyzed, such as Lax-Vendroff,
FCT, TVD, “upward” of the first order of approximation and a non-central scheme of the third order. Despite the
fact that the type TVD positive schemes, keep the initial form of perturbations best, the greater accuracy in the

32
 Lonin et al.: Propagación del oleaje y asimilación de datos en un modelo espectral
integral spectrum conservation was found by using
the scheme of the third order. After the
implementation of that algorithm, a non-traditional
methodology is proposed to assimilate data from the
JASON-1 orbits. The methodology is based on the
small perturbations theory for a functional which
minimizes the model mean square error, correcting
some constants responsible for physical processes
description of generation, dissipation and non-linear
spectral transformation
Key words: Spectral wave model, data assimilation,
numerical scheme of transport.
Introducción
La descripción de los campos de oleaje y su pronóstico
depende de la exactitud con que se conocen los
campos de viento en el presente y futuro, así como de
la profundidad física del modelo empleado y la
calidad de su realización numérica. La física de los
modelos espectrales de tercera generación (WAM [1],
WAVEWATCH-III [2], SWAN [3]) es bastante
completa en la descripción de los mecanismos de
generación, disipación y transformaciones no lineales
de los espectros de olas. La realización numérica se
refiere a una variedad de esquemas que garantizan el
transporte del espectro con poca difusión y dispersión
numérica [4], con esquemas positivos [5],
conservativos y minimizando el fenómeno de GSE [6]
para las olas de mar de fondo (desde aquí y en adelante
se utilizará el término inglés swell para este tipo del
oleaje).
En aguas profundas, donde la ola no experimenta la
influencia del fondo, la exactitud del pronóstico puede
ser mejorada a través de la asimilación de la
información disponible, ingresada en el tiempo cuasi-
real. Varios ejemplos y métodos de asimilación de
datos en los modelos de oleaje se presentan en [7-10].
En áreas limitadas, como es el caso del Mar Caribe, la
asimilación directa de la altura de ola tendrá una
aplicación poco eficiente, debido a que afectará
solamente las direcciones en las que se propaga el
espectro, mientras que las velocidades de grupo altas
(del orden de la velocidad del viento) y el retraso para
acceder a los datos (unas horas después de ser
medidos), hará que la actualización de las zonas
influenciadas por la asimilación, ya no se encuentren
en el dominio de cálculo, limitado por las costas y las
fronteras abiertas. Bajo estas circunstancias y
considerando las causas que pueden afectar la
exactitud de la predicción de los campos de olas, se
necesita buscar otras formas (métodos) de
asimilación de la información de campo que sean más
eficientes.
En el trabajo de Lonin & López [11] se encontró que el
modelo UKMO (United Kingdom Meteorological
Office) subestima la intensidad de los vientos sobre el
Mar Caribe en un 30%, siendo esta la principal causa
del error en el cálculo de oleaje. Minimizar la causa,
obviamente, es mejor que corregir las consecuencias a
través de la asimilación de los parámetros del oleaje.
La implementación del modelo WRF [12] en el CIOH
(Proyecto SPOA) persigue precisamente esta idea,
tratando de mejorar la resolución y la física en la parte
de predicción meteorológica para poder emplear los
campos de viento más exactos en el pronóstico del
oleaje.
Reducir hasta un límite aceptable el error de cálculo
de los campos de oleaje es el principal objetivo de este
artículo, abarcando los dos frentes de posible error: 1)
el transporte del espectro de olas en el espacio y 2) las
correcciones relacionadas con la imprecisión de los
datos de entrada y con las imperfecciones de la propia
física del modelo.
En este trabajo se utiliza el modelo NedWAM
(versión del CIOH [13]). La figura 1 muestra el
cálculo de la altura de las olas con la advección del
espectro y sin ella (aplicando artificialmente la
celeridad de las olas igual a cero, es decir, las olas
evolucionan localmente); en la figura 2 se presentan
las diferencias que demuestran la importancia del
transporte, básicamente de las olas de swell (de hecho,
el transporte de cualquier componente de olas en un
campo no homogéneo de vientos puede considerarse
como swell). Desde la figura 2 se observa que con el
esquema simple “upwind” la advección contribuye un
20-40% en promedio de la intensidad del espectro
para las condiciones del Mar Caribe en ausencia de
ciclones tropicales u otros fenómenos locales
extremos.
33

Figura 1. Altura de la ola sin (arriba) y con (abajo) la
advección del espectro en el espacio. La advección
“suaviza” el campo. Esquema “upwind” aplicado.
Figura 2. Diferencias (con advección - sin advección)
relativas (en %) de la altura de ola en el experimento
anterior.
Las mejoras en los esquemas de transporte empleados
en el modelo, podrían entonces reducir el error total
del modelo. En el trabajo [13] fueron empleados los
esquemas de tipo “upward” de orden O(1),
observados en las figuras 3 y 4, los cuales junto con el
esquema FCT (Flux Corrected Transport, [14]),
34
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)
basado en la aproximación de Lax-Vendroff y el
esquema TVD (Total Variation Diminishing [15]),
figuras 5 y 6, son esquemas centrales que generan
oscilaciones parásitas para el transporte con números
de Reynolds de la malla por encima del valor de 2,
mientras que el esquema asimétrico “upward”, hasta
el momento empleado en el modelo NedWAM del
CIOH, es de primer orden de aproximación y contiene
una difusión artificial alta. De los esquemas
“positivos” [5] parece que los TVD son racionales y
prácticos desde el punto de vista de su realización y
desempeño computacional, pero tanto en el trabajo
[13], como en la figura 5 del presente, se observa una
subestimación de la velocidad de propagación del
impulso inicial, con un retraso significativo
(alrededor de 23%) con respecto a la velocidad
verdadera de transporte. Evidentemente, este
fenómeno se debe a la selección de los limitantes del
flujo de transporte, precisamente aquellos, que hacen
que el esquema sea “positivo” (o “transportativo”
[16]).
Figura 3. Propagación de una forma en el espacio (línea
continua es el perfil inicial) con el esquema “upwind” de
O(1) para distintos momentos de tiempo (cada 4 horas).
Velocidad de propagación = 5 m/s (corresponde a una ola
con el período de 6 seg, aprox.). Se observa que a las 24
horas (perfil final a la derecha), pierde un 20% de la
magnitud del pico. El integral se conserva.
 Lonin et al.: Propagación del oleaje y asimilación de datos en un modelo espectral
Figura 4. Propagación con la velocidad de 5 m/s (líneas
continuas corresponden al caso anterior, figura 3) y con 10
m/s (solución exacta, Cr = 1).
Figura 5. Propagación con el esquema “upwind”
(contornos negros) con V = 10 m/s durante 24 y 48 horas
respectivamente y la representación correspondiente con el
esquema TVD (contornos rojos). Se observa la mejor
conservación de la forma original de la señal, reproducida
por el esquema TVD, pero con el limitante sugerido por Roe
[17] la propagación es más lenta que en la realidad
(subestimación de la velocidad de propagación de un 23%).
El efecto fue observado en [13].
Figura 6. El esquema “upwind” (negro) vs. Lax-Vendroff
(rojo). Se observan las propiedades no monótonas del
último (una cola “parásita” detrás de la forma propagada).
Por lo anterior, en la primera parte de este trabajo se
busca mejorar los esquemas numéricos de transporte.
Una vez mejorado el modelo numéricamente, la
segunda parte de trabajo se dedica al desarrollo de un
método de asimilación de la información satelital,
pero no en forma tradicional de corrección de los
parámetros de olas observadas in situ o con los
sensores remotos, sino, ajustando ciertas constantes y
minimizando el error cuadrático entre las
observaciones y el cálculo. El concepto de
asimilación que se propone se basa en lo siguiente:
Existen errores de la información de entrada (campos
de vientos) y el mismo modelo genera otros errores.
Los numéricos se minimizan con las mejoras en sus
algoritmos discretos. Otros errores del modelo
generalmente se relacionan con la física de procesos y
la forma de su descripción. Sin dividir la naturaleza de
los errores entre los de entrada (externos) y los
producidos por el núcleo del modelo (internos), se
introducen unas constantes ante los términos
principales de generación, disipación y las
interacciones no-lineales y se aplica el método de
perturbaciones pequeñas [18], optimizando los
valores de estas constantes.
35

Debido a que el enfoque del método de asimilación no
es tradicional, en la descripción de la metodología, no
se detalla el uso de métodos de interpolación entre los
nodos del modelo y los puntos del satélite, es decir, no
se discute la forma del operador de observaciones,
utilizándose la interpolación de distancias inversas de
los cuatro nodos del modelo más cercanos a cada
punto satelital.
En el próximo capítulo se presenta una breve
descripción de datos utilizados de las plataformas
satelitales; la metodología está dividida en dos partes:
1) las mejoras en los esquemas numéricos y 2) la
asimilación de datos. Luego se presentan resultados
referentes a cada uno de estos temas y se discuten
posibles avances en su desarrollo hacia futuros
trabajos de investigación.
Datos de sensores remotos
Se utilizó la información del Satélite JASON-1, el cual
orbita desde el 7 de diciembre de 2001 en una misión
conducida en conjunto por la Agencia Espacial
Francesa (Centre National d'Etudes Spatiales CNES)
y la Administración Espacial y Aeronáutica de los
Estados Unidos (National Aeronautics and Space
Administration - NASA), continuando con las
mediciones de oleaje y la anomalía del nivel del mar
de su antecesor el TOPEX/POSEIDON.
En el artículo se utilizó información de altura de la ola
del paso 039 del ciclo 202, el cual efectuó mediciones
en el Mar Caribe el 2 de julio de 2007, empleando los
archivos OSDR (Operacional Sensor Data Record),
los cuales están disponibles con un atraso de 3 a 5
horas, con el fin de ser utilizados en la asimilación de
datos en centros de pronósticos de manera
operacional. Estos archivos fueron procesados
siguiendo la metodología propuesta por Torres &
Lonin en [19].
Se cuenta adicionalmente con una red de boyas de
oleaje direccional en construcción por la Dirección
General Marítima de Colombia en el Caribe. La red
provee de información espectral en tiempo real como
fue descrito por Torres & Lonin en [20], lo cual brinda
información muy completa y de calidad; dicha
información, por las limitaciones en cobertura y
permanencia, servirá para la validación de las técnicas
de asimilación de datos satelitales, los cuales cuentan
36
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)
con mayor cobertura con 16 pases en el dominio del
modelo por ciclo (el cual se repite aproximadamente
cada 10 días) y disponibilidad de los datos con un
tiempo máximo entre los pases sobre el Caribe de
24.36 horas. Existe gran confiabilidad en la
continuidad de las mediciones del satélite.
Metodología
Esquemas numéricos de transporte
Para una propiedad S del campo de dos dimensiones
(x, y), su propagación en el tiempo t con las
respectivas componentes de velocidad u y v, se define
como
(1.1)
prototipo de la ecuación que es empleada en el modelo
que estamos discutiendo en la segunda parte de la
metodología.
Introduciendo el espacio discreto (xi, yj, tk), donde i =
1, …, M; j = 1, …, N; k = 1, …, K con los respectivos
pasos espaciales Dx, Dy y del tiempo Dt, la
discretización de (1.1) más simple posible es de
primer orden O(1) [en este caso tanto en el tiempo,
como en el espacio]:
, (1.2)
donde son números de
Courant en las respectivas direcciones x e y.
La ecuación (1.2) es el esquema explícito de “flujo
arriba” (“upward”), cuya solución exacta es posible
presentar cuando Crx = 1, Cry = 0, ó Crx = 0, Cry = 1.
Para garantizar la estabilidad numérica, Crx, Cry £ 1.
Este esquema tiene una difusión artificial fuerte
(figuras 3 y 4) y fue aplicado en el modelo NedWAM,
implementado en el CIOH [13].
Para disminuir el efecto de la viscosidad artificial, se
requiere la aplicación de un esquema de mayor orden
de aproximación en el espacio. Los esquemas
centrales de tres puntos, tipo Lax-Vendroff (figura 6),
con el orden O(Dx2, Dy2), mejoran esta condición, pero
no son “transportativos”, es decir, en los gradientes
abruptos de solución se pueden producir oscilaciones
 Lonin et al.: Propagación del oleaje y asimilación de datos en un modelo espectral
parásitas, vistas en la introducción en la figura 6. De
hecho, cualquier esquema de diferencias centrales
está sujeto a este tipo de comportamiento y para
evitarlo, se requiere aplicar un esquema de mayor
orden de aproximación con diferencias no centrales,
introducir una difusión al modelo o cumplir con las
condiciones de un esquema “positivo” [21], como es
el caso de un esquema TVD (figura 5).
De hecho, un esquema TVD fue empleado también en
[13] y, a pesar de conservar la forma de la perturbación
inicial, tuvo una subestimación de la velocidad de
transporte, obviamente relacionada con la forma del
limitante que se aplicó para corregir el transporte de la
propiedad entre las celdas de la malla. Aquí, se van a
considerar dos formas distintas de aproximación de la
ecuación (1.1): la primera basada en uno de los
esquemas TVD distintos de lo anterior y la segunda en
el uso de un esquema no central de orden O(Dx3, Dy3).
Un esquema TVD puede ser obtenido desde (1.1)
aplicando una corrección de flujos entre los nodos en
la manera
(1.3)
donde f y g son flujos de la propiedad S entre los
nodos, definidos como
(Analógicamente
los demás términos).
Aquí, es la razón de gradientes
adyacentes y f(r) es el limitante.
En el caso dado, si f(r) = 1, "r, entonces (1.3)
corresponde al esquema de Lax-Vendroff. En el
trabajo de Roe [17], para los esquemas de segundo
orden de aproximación, fue propuesto utilizar
(1.4)
El limitante (1.4) fue especificado para graficar la
figura 5, lo que estimuló la búsqueda de otra expresión
para el f(r).
Un esquema es TVD cuando se satisfacen, según [5],
los siguientes criterios:
0 £f (r ) £2/(1-Cr); 0 £f(r ) £2/Cr, "k. (1.5)
En el siguiente apartado se presentan los resultados
correspondientes a los casos de definición de f(r) en
la siguiente forma:
f(ri) = max [0,min(1,ri)], (1.6)
propuesta por los autores y
(1.7)
propuesta por van Leer en [22].
El otro esquema numérico, es de orden O(3) por las
derivadas espaciales las cuales son aproximadas con
un polinomio no central con respecto al punto i,j [4],
lo que en resumen, para el caso 1D(x) se presenta
como:
(1.8)
Asimilación de datos
En el dominio WÌ{a£x£b; c£y£d} de coordenadas
cartesianas x e y con la frontera ¶W suficientemente
suave y en el período del tiempo tÎ[0, T] definimos el
siguiente problema de transporte del espectro
S(x,y,t,w,q):
(2.1)
(2.2)
S(t=0) = 0, (2.3)
donde Cx y Cy son respectivas velocidades de grupo en
proyección a los ejes de coordenadas; Gin corresponde
a la entrada de energía por acción del viento; D es la
disipación de energía y NL es el término de
interacciones no-lineales en el espectro con
37

En (2.1) se asumió que la frecuencia no varía debido a
las corrientes y cambio de profundidad, así que es una
aproximación para aguas profundas. Las coordenadas
cartesianas fueron seleccionadas solamente por la
comodidad de demostración del método, mientras que
el modelo se emplea en todo el Mar Caribe en
coordenadas esféricas. En (2.2) se asume que no hay
swell entrante en el contorno ¶W y que la ola saliente
tiene una velocidad infinita. La condición inicial (2.3)
implica el “arranque frío”, pero, sin pérdida de
generalidad, se podría aplicar un espectro inicial
desde un cálculo previo o un espectro analítico como
el espectro JONSWAP propuesto en [23].
El problema (2.1)-(2.3) se llama el problema directo y
la ecuación (2.1) se puede reformular simbólicamente
en la siguiente forma:
LS = f, (2.1')
donde en f se encuentran todos los términos de la parte
derecha de (2.1) y el operador L se define como
(2.4)
Los términos Gin, D y NL, como regla, dependen de
unas constantes (factores de proporcionalidad) y
nosotros asumimos que la diferencia entre el estado
verdadero y el simulado se debe a la variación de estas
constantes, es decir, cargamos todas las inexactitudes
de cálculo del espectro de oleaje a las imperfecciones
en la definición física de estos términos y a los errores
sistemáticos de especificación de campos de viento,
provenientes usualmente de un modelo atmosférico
con una resolución finita y con ciertas imperfecciones
físicas también. En otras palabras, asumimos que
f = c1Gin - c2D ± c3NL (2.5)
y los valores no perturbados de las constantes c1 = c2 =
c3 = 1.
Aunque se desconoce el estado verdadero, debido a
que las observaciones tienen errores, se va a
considerar el caso en que el error de las observaciones
es mucho menor que el error del modelo sin
asimilación de datos (estado denominado
“background”) y, por lo tanto, asumimos que el
estado verdadero se encuentra muy cercano a lo
observado, lo que es válido en caso de los sensores
38
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)
remotos de las plataformas de los altímetros
satelitales.
Se va a construir un problema conjugado y con base en
la teoría de perturbaciones pequeñas, se hallarán los
valores óptimos de las constantes en (2.5), cuando la
diferencia entre los campos de oleaje calculados y
observados sea la mínima posible.
Según [18], se define la multiplicación escalar de dos
funciones g y h en el espacio de Hilbert en la siguiente
forma:
(2.6)
de donde se introduce la norma cuadrática
Se aplica la igualdad de Lagrange para el operador
(2.4)
(2.7)
con una función S* conjugada a S. La expresión (2.7)
tiene el sentido de un funcional J, el cual más adelante
vamos a poner en dependencia de los valores de las
constantes en (2.5). Es obvio que la forma dual de
(2.7) es
(2.8)
si asumimos que existe un problema conjugado a
(2.1)-(2.3) en forma
L*S* = p, (2.9)
(2.10)
S*(t=T) = 0. (2.11)
Desde (2.7) se puede hallar que el operador conjugado
(2.12)
y el problema (2.9)-(2.11) debe solucionarse en el
tiempo regresivo en el intervalo tÎ [T, 0]. Por lo tanto,
a este problema se le va a llamar el problema inverso.
Ahora se va a buscar el sentido físico del funcional J a
través de la igualdad derecha en (2.8), empleando
varias formas de la función de manejo p. Por ejemplo,
 Lonin et al.: Propagación del oleaje y asimilación de datos en un modelo espectral
si tenemos un único punto (x0, y0) de mediciones de
oleaje durante un período T y empleamos
entonces,
W
es el período de pico del espectro promedio en el
intervalo de tiempo [0, T] en el punto de
observaciones, debido a la definición del período:
(Arriba, con la función d(x) se introduce la función
“delta” de Dirac; más adelante, el símbolo d (no
función!) se empleará para definir las variaciones
finitas).
Si, en calidad de otro ejemplo, definimos
entonces, el funcional
es el cuadrado de la altura
significativa Hs de la ola, promediado durante el
período T del tiempo en el punto de observación.
Nos interesan las mediciones “instantáneas” a lo largo
de una órbita satelital, así que podemos aplicar
(2.13)
para un instante t0 en los puntos 1£k£N, donde N es la
cantidad de puntos de mediciones del satélite a lo
largo de una órbita.
Recordamos que con el
valor g = 4. Con la definición (2.13) el funcional
(2.14)
Nos va a interesar la variación del funcional,
dependiendo de las perturbaciones pequeñas dci de las
constantes ci en (2.5). Las perturbaciones pequeñas
significan que |dci|<<1, "i. Asumimos que sólo estas
constantes varían y se evitan las perturbaciones en las
condiciones iniciales o de contorno.
En éste y sólo en este caso, la variación del funcional
será definida como
(2.15)
Aquí f1 implica que el valor f fue tomado en (2.5) con
c1 = c2 = c3 = 1; Hmod representa la altura significativa Hs
determinada por el modelo como la “primera
adivinanza” (“first guess”) y Hobs corresponden a las
observaciones. Tanto Hmod como Hobs se toman en los
puntos de observaciones (xk, yk) en el momento del
tiempo t0. Para hallar la última expresión en (2.15) se
utilizó el hecho de que las perturbaciones son
pequeñas, entonces, para Hs = Hmod + dH siempre
tenemos |dH| << Hmod. En otras palabras, se
desprecian los términos cuadráticos de las
perturbaciones.
Desde (2.15), asumiendo el caso cuando dc1=dc2=dc3,
finalmente se pueden encontrar las correcciones a las
constantes
(2.16)
Los valores corregidos ci = 1 + dci. Con estos últimos,
nuevamente se arranca el problema directo.
Resumiendo el procedimiento, señalamos que para
completar la tarea de asimilación de datos en esta
metodología, se requiere hacer los tres siguientes
pasos: 1) correr el problema directo (2.1)-(2.3) no
perturbado y encontrar Hmod en los puntos de
observaciones y f1 en todo el dominio W; 2) correr en el
tiempo hacia atrás, el problema inverso (2.9)-(2.11),
para hallar el campo de la función conjugada S*,
especificando la parte derecha de (2.9) en forma
(2.13); 3) definir con (2.16) las perturbaciones de las
constantes y emplear por segunda vez el modelo
directo.
39

Resultados
La figura 7 muestra los resultados de la propagación
de una perturbación inicial “difícil”, empleando los
esquemas TVD, según las fórmulas (1.6) y (1.7) en
comparación con la (1.2). Se observa que el efecto de
retraso, encontrado en la figura 5, se redujo
significativamente: para el lapso de tiempo de
propagación de 24 horas el esquema (1.6) produce un
retraso equivalente a 8.1%, mientras que el esquema
(1.7) tiene solamente un 2.3%. Sin embargo, el primer
esquema conserva mejor la forma inicial de la
perturbación. Ambos muestran la propiedad
monótona, es decir, son positivos.
Figura 7. La perturbación inicial (rojo), el esquema
“upward” (negro) versus los esquemas TVD modificados:
las curvas moradas corresponden a la fórmula (1.6) para 24
y 48 horas después del inicio de transporte; las curvas azul y
verde corresponden a la fórmula (1.7) para los respectivos
momentos de tiempo.
La tabla 1 verifica la propiedad de conservación en los
esquemas analizados. Resulta que ninguno de los
esquemas TVD, considerados en el presente estudio,
conserva la propiedad transportada a pesar de que son
suficientemente satisfactorios desde el punto de vista
de transportar la forma. Hay que tener en cuenta que el
campo del espectro de olas (para cada componente
direccional y de frecuencia) es mucho más
homogéneo que la perturbación inicial “difícil”,
tomada en este estudio. Así que los criterios de
selección del esquema final para su empleo en el
40
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)
modelo, probablemente deban combinar las
características de conservación integral de la
propiedad transportada y la forma, sacrificando tal
vez, en cierta medida, las ventajas de los esquemas
TVD.
Tabla 1. Conservación de propiedades en los esquemas. El
valor inicial integral de la propiedad es 1.500 unidades.
Fórmula 24 horas 48 horas
(1.2) 1500 1487
(1.6) 1590 1621
(1.7) 1516 1502
La figura 8 muestra los ensayos realizados con el
esquema (1.8), que tiene tercer orden de
aproximación, comparándolo, como siempre, con el
esquema (1.2). El esquema (1.8) tiene mucho menor
difusión y dispersión en la solución numérica, aunque
contiene pequeñas oscilaciones parásitas en la cola.
Señalamos que el chequeo de la conservación de este
esquema demostró una sobreestimación de la
propiedad en un valor completamente despreciable
(0.013%), lo que incidió en la decisión final de
emplear este esquema en el modelo.
Figura 8. Esquema “upward” (contornos negros) en
comparación con el de orden O(3), [fórmula (1.8),
contornos en azul] para el desplazamiento en los cuatro
cuadrantes desde el centro [la perturbación inicial tiene
coordenadas (25, 25)]; los contornos están trazados con un
intervalo de 0.5. El paso de la malla es de 20 km.
 Lonin et al.: Propagación del oleaje y asimilación de datos en un modelo espectral

Las figuras 9 y 10 muestran los cálculos de casos

reales, empleando los vientos de UKMO, comparando
las ventajas del esquema (1.8) con los casos del
esquema de primer orden y el modelo sin el bloque de
transporte. El último caso corresponde a la situación
hipotética (no real) del desarrollo de olas localmente,
bajo el forzamiento directo de los vientos, pero sin el
transporte de energía espacialmente. La tabla 2
muestra la estadística de estas comparaciones.

Figura 10. Diferencias (en m) entre las alturas calculadas

con los esquemas de O(3) y O(1) (arriba); O(3) y sin el
transporte (centro); O(1) y sin el transporte (abajo).

Tabla 2. Estadística simple sobre las diferencias entre las

alturas de la ola significativa en todo el dominio del Mar
Caribe, calculadas con distintos esquemas de transporte;
esquema O(0) significa que no se aplicó ninguno (el
Figura 9. Campo de oleaje (altura en metros) aplicando el modelo sin el transporte). Caso presentado en las figuras 9 y
bloque de transporte con la aproximación de orden O(3). 10.
Fecha: 03 de marzo de 2006.
Altura de ola,
Diferencias entre alturas
Parámetro m
O(3) O(3) - O(1) O(3) - O(0) O(1) - O(0)

Mínimo 0.1 -2.5 -2.8 -2.9

Máximo 3.9 1.6 2.2 1.7
Promedio 1.5 0.02 -0.01 -0.03
r.m.s. 0.69 0.44 0.71 0.47

De esta tabla se observa claramente que para algunas

zonas del Mar Caribe, el factor de transporte es tan
importante que produce un impacto medido en orden
de 1.5-3 m, cuando la altura máxima calculada es de
orden de 3.9 m. Las zonas de la mayor alteración de
campos de oleaje por el transporte de energía de las
olas usualmente están concentradas donde se
presentan los cambios bruscos de dirección de las olas
(parte sur-occidental del mar, figura 9, donde se
encuentra influencia de la Zona de Convergencia
Intertropical) y en variaciones significativas de la
intensidad de vientos (en el presente caso, la zona
oriental del Caribe).

En términos de la desviación estándar, la introducción

del esquema de O(3) de aproximación de transporte,

41
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)

varía con respecto al esquema de O(1) en casi la

misma magnitud como en el caso de no introducir
(artificialmente) el fenómeno del transporte al
modelo. En los experimentos numéricos de
asimilación de datos, mostrados más adelante, se
empleó el esquema del orden O(3).

Los experimentos de asimilación de datos fueron

realizados para el paso del satélite JASON-1 el día 2
de julio de 2007 (paso 39, ciclo 202, la hora 18:17
UTM, figura 12). La figura 11 presenta una
comparación entre los datos medidos por el satélite y Figura 11. Altura de la ola a lo largo de la órbita del satélite
el modelo sin y con la asimilación de estos datos. Se JASON-1, observada, calculada y asimilada en el modelo
observan dos zonas de distinto comportamiento del el día 2 de julio de 2007. El inicio del eje horizontal
corresponde al extremo sur de la órbita.
modelo: 1) la zona entre los puntos de la órbita 1 y 15,
aproximadamente, donde las diferencias entre el
modelo y observaciones no son aceptables y 2) los
demás puntos de la órbita, donde el modelo subestima
la altura de la ola en unos 20-50 cm. En el trabajo [11]
se encontró que UKMO subestima en un 30% la
intensidad de los vientos, así que ésta podría ser la
explicación del comportamiento del modelo en la
segunda zona. La asimilación de datos satelitales
elimina estas diferencias, llegando a las desviaciones
máximas nunca superiores a 20-30 cm entre el modelo
y los datos.

Lo mismo no sucede en la zona 1. La razón de las

desviaciones bruscas allá es la baja resolución de la
malla del modelo UKMO (0.56º de latitud por 0.83º de
longitud). Sobre la tierra la rugosidad superficial hace
que los vientos sean incomparablemente más débiles
que sobre el mar y a pesar de tratar de eliminar este
efecto quitando los puntos terrestres cercanos a la
costa en la interpolación de vientos en la malla del
NedWAM, la influencia de baja resolución del campo
de viento resulta ser notoria. La figura 12 confirma
esta circunstancia, demostrando en el rectángulo la
zona 1, mencionada arriba.
Figura 12. Velocidad de viento (en m s-1), según el UKMO,
para la hora 18:00 del día 2 de julio de 2007. Los puntos
indican el paso del satélite por la órbita; el rectángulo
muestra la zona de vientos subestimados.
Discusión
Distintos esquemas numéricos fueron examinados en
la primera parte de este trabajo. La comparación entre
ellos fue efectuada con respecto al esquema “upward”
de primer orden de aproximación de las derivadas. El
último tiene una difusión fuerte y fue necesario hacer
una revisión de calidad de cálculo del transporte del

42
 Lonin et al.: Propagación del oleaje y asimilación de datos en un modelo espectral
espectro con el fin de mejorar la predicción de los
campos del oleaje en el Mar Caribe.
Los esquemas TVD, por principio monótonos, fueron
examinados para distintas formulaciones de la
función limitante de flujos entre las celdas de la malla.
Se encontró que estos esquemas subestiman la
velocidad de transporte de las propiedades físicas,
aunque con debida selección de la forma del limitante,
se puede reducir este efecto significativamente. La
conservación de la forma inicial de perturbaciones y la
ausencia de oscilaciones parásitas en la cola de la
solución hacen atractivos estos esquemas. Sin
embargo, la conservación integral de las propiedades
físicas durante el transporte es una característica
importante. La comparación de ésta entre los
esquemas TVD y un esquema no simétrico de tercer
orden de aproximación espacial fue a favor de la
última, a pesar de que el esquema no es
completamente positivo. Una vez implementadas las
mejoras en la parte de transporte del espectro, se
efectuaron los experimentos de asimilación de datos
satelitales.
En este trabajo se empleó el caso dc1=dc2=dc3 y es el
caso más simple posible. La variación de todas las
constantes requiere solucionar un problema de
optimización más sofisticado. Sin embargo, en los
experimentos con el modelo se encontró que esta
simple aproximación empleada está dando buena
consistencia con lo esperado físicamente: el
crecimiento del espectro de olas, la disipación de
energía y su re-distribución a lo largo del espacio de
fase espectral son mecanismos coherentes.
Los resultados demuestran que las diferencias
significativas, si tienen lugar, se deben a la inexactitud
de los campos de viento, principalmente en las zonas
límites con los continentes, donde la relativamente
baja resolución espacial del modelo atmosférico de
UKMO subestima la intensidad de los vientos. La
solución está en la implementación de un modelo
atmosférico local con alta resolución, lo que se realiza
actualmente utilizando como base en el modelo WRF
[12].
El hecho de que nosotros estemos tratando de
“corregir” los campos de viento (o su impacto) a
través de variaciones de las constantes situadas ante
los términos de la parte derecha de la ecuación (2.1),
asimilando la altura de la ola medida por satélite, deja
de lado la circunstancia de que las olas de swell
interactúan poco con las olas de viento y no se
describen con la parte derecha de la ecuación (2.1),
sino que son olas transportadas con la exactitud
inherente al esquema de transporte empleado, lo cual
fue el tema de la primera parte de este estudio.
El satélite, produciendo la información sobre la altura
de ola significativa, no distingue en la medición las
olas de mar de viento y de swell, lo que lleva a
considerar un próximo paso en el desarrollo de la
presente metodología. Este paso podría incluir la
asimilación no de la altura de las olas, sino de un
espectro equivalente como lo proponen Torres &
Lonin en [19]. En tal caso, la función de manejo p
puede ser presentada en la forma
p = d (w-wl) d (x-xk)d(y-yk)d(t-t0),
donde l ³lmin, es decir, wl > wswell.
En este caso el funcional Jl(wl > wswell) tomará sólo una
parte del intervalo del espectro, la que no contiene las
olas posibles de swell. La optimización de las
constantes desde (2.15) en este caso va a ser tal vez
más consistente físicamente.
Las corridas del modelo “directo-inverso-directo”
pueden efectuarse entre los pasos consecutivos del
satélite sobre el Mar Caribe, formando un campo
espacial de las constantes ci, que ahora son funciones
ci(x, y), cuya evolución temporal dependerá de las
correcciones provocadas por cada paso satelital.
Agradecimientos
El trabajo fue financiado por la Dirección General
Marítima dentro del proyecto SPOA; contrato No.
008/2007-GINRED4-DIMAR, celebrado con la
firma OCEANMET LTDA. Los autores agradecen las
correcciones y recomendaciones hechas por los
evaluadores del artículo. Después de varias
modificaciones sustanciales del modelo NedWAM,
versión del CIOH, año 1996, la versión actual del
modelo obtuvo a partir del año 2008 el nombre
CaribWAM-III.
43
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 32-44 (2007)

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44
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 45-53 (2007)

ARTÍCULO

Influencia de una película de hidrocarburo

en el régimen térmico en el área de un
derrame
Oil film influence on the thermodynamic regime of the spill
area
Fecha recepción: 2007-09-13 / Fecha aceptación: 2007-09-28

CIOH
www.cioh.org.co
Serguei Lonin, slonin@costa.net.co
Grupo de Investigación en Oceanología, Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla”
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas CIOH, Isla Manzanillo, Cartagena
de Indias, D. T. y C.

Resumen
Se estudia la influencia de los hidrocarburos en la superficie del mar en el régimen térmico y la dinámica del
agua. Se supone que una película afecta el régimen de la capa superficial mediante los siguientes factores:
aumento del albedo, atenuación del oleaje, disminución o cesación de la evaporación del agua y acumulación de
la radiación solar de onda corta en la capa superficial. Estos mecanismos se estudian en los experimentos
numéricos con ayuda de un modelo 1D de la capa superficial del océano y se presentan resultados para las
condiciones de calma y vientos moderados.
Palabras claves: Película de hidrocarburos, régimen termodinámico, derrames.

Abstract
The oil surface slick influence on the thermal and current regimes is being studied. It is supposed that the slick
affects the upper layer regime by the following factors: albedo increasing, wave damping, decreasing or
cessation of the water evaporation, accumulation of the short-wave solar radiation into the slick layer. These
mechanisms were studied on the numerical experiments with the help of an 1-D model for the upper ocean layer.
Results for the calm and moderate wind conditions have been presented.
Key words: Hydrocarbon slick, thermodynamic regime, oil spills.

Introducción
En [1] Pielke escribe sobre una posible influencia de los derrames de hidrocarburos en los cambios de la
circulación de las brisas. En el mismo artículo se anota que, en general, es importante el factor de viento en las
aguas costeras para la formación de la circulación del agua. Si esto es cierto, entonces, el éxito de la predicción

45
 Lonin: Influencia de una película de hidrocarburo en el área de un derrame
del desplazamiento de las manchas de hidrocarburos
luego de un derrame depende de algunas relaciones
fundamentales en el sistema “hidrocarburo-medio
ambiente”, las cuales deben ser consideradas.
En el artículo [1] se hace referencia al trabajo [2], en el
cual se presenta un inventario de posibles efectos
físicos de los derrames en la superficie del mar. Entre
ellos se mencionan el retardo de evaporación del agua
desde las gotas en el aire, reducción de la evaporación
desde la superficie del agua, atenuación del oleaje y,
también, el aumento del calor en vecindad de la
superficie.
Hovis y Knoll [3] dicen que los cambios de
temperatura en la película pueden alcanzar unos 20oC
o más en comparación con las aguas alrededor de la
mancha. Es imposible no tomar en consideración esta
circunstancia cuando se discuten las características
del balance superficial de calor y las posibles
alteraciones de los parámetros hidrodinámicos. Todos
los factores mencionados arriba pueden afectar la
propia dinámica de la mancha y deben emplearse en
los respectivos modelos. En [4] se formuló un modelo
de derrames con los factores térmicos y los resultados
de las simulaciones demostraron significativas
variaciones diarias (más de 10oC) de la temperatura de
la mancha, pero no se presentó ninguna comparación
de estas variaciones con la superficie del agua pura.
En el presente trabajo se hace un intento de considerar
prácticamente todos los factores importantes que
forman el régimen térmico de la mancha para estimar
la necesidad de simular dicho fenómeno en los
modelos. Se realiza también una comparación de
algunos resultados con las mediciones en laboratorio.
Mecanismos físicos
Vamos a considerar la presencia de manchas de
hidrocarburos en la superficie del mar desde el punto
de vista de los siguientes factores físicos, los cuales
pueden alterar el régimen termodinámico:
 Aumento del albedo de la superficie;
 Disminución de altura de las olas y la rugosidad
superficial;
 Disminución (para las películas delgadas) y
46
cesación (para las gruesas) de la evaporación de
agua desde la superficie del mar;
 Débil penetración de la radiación de onda corta y su
acumulación (absorción) dentro de la capa del
hidrocarburo.
De los factores mencionados, sólo el aumento del
albedo conduce al efecto de mayor enfriamiento de la
superficie, mientras que los demás factores favorecen
su calentamiento.
Shekhter & Murashova en [5] reportan que el
coeficiente eficiente de reflexión (r12) depende
débilmente del espesor y tipo del hidrocarburo,
debido a que la reflexión desde la superficie de éste da
mayor contribución en r12, mientras que la reflexión
múltiple entre el hidrocarburo y el agua no tiene más
del 10% de r12. El coeficiente r12 disminuye lentamente
con el espesor de la mancha (para los espesores entre
0.1 y 100mm) y es aproximadamente igual a 0.4%. Su
dependencia del ángulo solar tampoco es significativa
(2-3%, aprox.) y, por lo tanto, los cambios del albedo
de la superficie en presencia de hidrocarburos pueden
considerarse independientes de la hora del día.
Al contrario, la penetración eficiente de la radiación
solar depende fuertemente del espesor y tipo de
hidrocarburo en la mancha. Para los espesores
mayores de 100mm, la radiación penetra más de un
20% y esta porción rápidamente tiende a cero con el
aumento del espesor de la mancha. Se requiere
mencionar que todos los resultados citados fueron
obtenidos bajo condiciones de cielo despejado [5].
En [6], para las películas de espesor de hasta 100mm se
estableció que los productos livianos tienen una
transparencia alta en la parte visual del espectro solar,
mientras que los hidrocarburos pesados tienen la
misma propiedad sólo para los de 10 a 20mm. En
general, las manchas delgadas (<5 mm) disminuyen la
penetración solar, por la reflexión en la frontera aire-
hidrocarburo en una tasa del 4%. La reflexión en la
frontera entre el aire y el agua pura se define igual al
2% [7]. En el último artículo se menciona también que
las manchas afectan el flujo de onda corta y la
composición espectral de la radiación solar penetrada
y que las propiedades de radiación penetrada cambian
notoriamente bajo vientos con velocidades mayores
de 6 a 8 m/s (cuando la mancha se involucra en la
columna del agua).
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 45-53 (2007)

Las manchas afectan específicamente su intervalo de Vamos a suponer que la evaporación de agua se
ondas más cortas, con una disminución brusca de la reduce en un 10% para las películas mono-
radiación foto-sintéticamente activa, en particular. moleculares, mientras que para las películas gruesas
Para las manchas cuyo espesor es mayor de 100 mm, no se presenta. También asumimos, que en el último
dicha afectación también tiene influencia en el caso la radiación solar se absorbe completamente en
intervalo infrarrojo. Sin embargo, la radiación la película.
infrarroja se absorbe normalmente en la capa
superficial, en los primeros 1-2 metros, al igual que sin Dada la necesidad de sobreestimar el efecto de las
presencia de manchas, así que el último efecto no manchas en el régimen térmico para concluir sobre la
tendrá que alterar significativamente el régimen importancia del fenómeno en los modelos se evalúa el
termodinámico. carácter extremo de las condiciones mencionadas
anteriormente. Los experimentos numéricos,
En el trabajo [8] se efectuó la investigación sobre la presentados abajo, tienen por objeto demostrar la
evaporación del agua bajo las películas mono- contribución de cada fenómeno en el proceso y poder
moleculares en condiciones de laboratorio. Se comparar los resultados entre sí. En la tabla 1 se
encontró que la evaporación y el contenido del calor presentan las condiciones de los seis experimentos
en la capa superficial se alteran entre 15 y 5% y entre numéricos. El primer experimento corresponde al
1.12 y 1.4 veces, respectivamente; en comparación agua pura (sin el derrame), mientras que en el último
con el agua pura durante ocho horas del experimento se involucran todos los factores físicos.
la temperatura superficial y la presión del vapor
saturado aumentan hasta 2.5 o C y 4 mb,
respectivamente. Tabla 1. Condiciones de los experimentos numéricos.
Radiación
Flujo latente solar
Considerando los efectos hidrodinámicos en Experimento Albedo Rugosidad de calor absorbida
presencia de manchas de crudo, se puede mencionar el LE (1 - m)Fi**
Albedo del agua
trabajo [9], en el cual se observó una ligera atenuación 1
(A)
Por Charnok*** LEnorm* m = 0.4
del oleaje debido a la desaparición de olas capilares y 2
,
A = A + 0.025 Por Charnok LEnorm m = 0.4
disminución del coeficiente de resistencia de la
superficie entre 25 y 33% (para los vientos 3 A Fórmula (1) LEnorm m = 0.4
moderados). También se notó que la atenuación de las 4 A Por Charnok
a) LE = 0
m = 0.4
b) LE =0.9LEnorm
olas capilares lleva a la disminución de la velocidad de
fricción a no más de un 10%. 5 A Por Charnok LEnorm m=0
,
6 A = A + 0.025 Fórmula (1) LE = 0 m=0
Sintetizando la información de los trabajos citados,
vamos a asumir que el albedo (A') de la mancha * - LEnorm es la evaporación “normal” del agua;
aumenta en 2.5% en comparación con el albedo (A) ** - m es la fracción de la radiación penetrada; Fi es la
del agua pura, es decir, A'=A+0.025. Luego, radiación solar incidente;
suponemos que para las manchas gruesas, el régimen -3 2
*** - según Charnok, z0 = 7.8 10 u* /g, donde g es la
hidrodinámico de la superficie cambia del régimen gravedad.
rugoso al suave. En caso extremo, se puede asumir que
el parámetro de rugosidad z0 de la superficie cubierta
con la mancha, se define para las superficies
hidrodinámicamente suaves con la siguiente fórmula: Metodología
El interés del presente trabajo son los mecanismos de
z0 = c'n/u*, (1) intercambio de calor e impulso entre la atmósfera y el
océano en presencia de películas de hidrocarburo. Por
donde n es la viscosidad molecular del agua; u* es la lo anterior, se empleó un modelo 1-D en la vertical
velocidad de fricción y c' es una constante universal (c' (ver [10, 11]). Las ecuaciones básicas son:
= 1/9).

47
 Lonin: Influencia de una película de hidrocarburo en el área de un derrame
¶u/¶t - fv = ¶/¶z [(Kz+n)¶u/¶z] , (2)
¶V/¶t + fu = ¶/¶z [(Kz+n)¶v/¶z] , (3)
Cpwr w ¶T/¶t = Cpw rw ¶/¶z [(aTKz+c)¶T/¶z]-¶QR /¶z, (4)
2 2
¶b/¶t = Kz [(¶u/¶z) + (¶v/¶z) ] +
¶/¶z(ab Kz¶b/¶z) + gaT aKz ¶T/¶z - e, (5)
2 2
¶e/¶t = C1e e/bKz [(¶u/¶z) + (¶v/¶z) ] +
2
¶/¶z(Kz / se¶e/¶z) + C3ee /bgaT aKz ¶T/¶z - C2ee /b , (6)
Kz = Cm b2 /e , (7)
donde u y v son componentes horizontales de la
velocidad de corrientes en las direcciones x e y; z es la
coordenada vertical; T es temperatura del agua; f es el
parámetro de Coriolis; t es tiempo; rw, Cpw son
densidad y capacidad específica de calor para el agua,
respectivamente; QR es la radiación solar de onda
corta, la parte que penetra la superficie del mar; b es la
energía cinética de turbulencia; e es la tasa de su
disipación; a es la constante de expansión térmica del
agua; C1e , C2e, C3e, se, Cm, ab, ae son constantes [12]
iguales a 1.38, 1.40, 1.40, 1.0, 0.08, 1.0, 1.0,
respectivamente; aT y c son el número inverso de
Prandtl (turbulento) y la conductividad molecular de
calor, respectivamente; Kz es el coeficiente de
turbulencia en la vertical.
Las condiciones de contorno para (2)-(7) en la
superficie del mar (z = 0) son:
(Kz+n)¶u/¶z = -tx /rw ; (Kz+n)¶v/¶z = -ty /rw ;
(aT Kz+c)¶T/¶z = -QT ; ab Kz ¶b/¶z = 0 ;
ae Kz¶e /¶z = 0, (8)
y debajo de la termoclina (z = H):
u = v = 0 ; b = 0 ; e = 0 ; T = Const. (9)
tx , t y en (8) son componentes tangenciales del estrés
de viento en la superficie del mar; QT es el flujo
resultante de calor en la misma superficie.
Vamos a suponer que un 40% de la radiación solar
48
incidente Fi penetra a través de la superficie del agua,
es decir,
QR = 0.4 Fi exp(-bQ z), (10)
donde bQ es el coeficiente de extinción de luz (bQ =
a/zd; a » 2; zd es la profundidad en la cual la radiación
superficial alcanza sólo un 10%). En (10) Fi se
determina por la radiación Fi0 que llega a la superficie
y el albedo A', así: Fi = Fi0 (1- A').
Entonces se presenta el balance superficial de calor
QT, como
QT = 0.6 Fi + Feff + HT + LET , (11)
donde Feff es la radiación eficiente de onda larga; HT,
LET son flujos turbulentos de calor sensible y latente,
respectivamente.
Los últimos flujos y también los componentes del
estrés de viento se calculan a través de las fórmulas
“bulk” [12], teniendo en cuenta la estratificación de la
capa próxima de la atmósfera y la rugosidad de la
superficie. El parámetro de rugosidad se define por la
fórmula (1), cuando es el caso, o por la fórmula de
2
Charnok (z0 ~ u* /g) si la superficie del mar es
hidrodinámicamente rugosa.
Condiciones del experimento
Los datos utilizados provienen de la estación
meteorológica de las Islas del Rosario, permitiendo
tener en cuenta las condiciones meteorológicas
marinas con poca influencia del continente. La
posición geográfica de la estación es j = 10º10'N;
l = 75º47'W. Los datos de la nubosidad nula y el
comportamiento diario cuasi-periódico de los
parámetros meteorológicos corresponden al día 26 de
1995.
La figura 1 indica el comportamiento diario de la
temperatura y humedad del aire. Los cálculos fueron
realizados bajo condiciones de pequeñas variaciones
diarias del viento entre 2 y 5 m/s de velocidad.
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 45-53 (2007)

En este caso la frontera inferior del dominio se fijó en

H = 50 m, lo que seguramente es mayor que la
profundidad real de la capa de mezcla. Teniendo en
cuenta que las condiciones iniciales corresponden al
estado de reposo para las corrientes (u = v = 0 para t =
0), el sistema arrancó de este estado y el cálculo duro 4
días hasta alcanzar el régimen cuasi-estacionario. La
figura 2 ilustra el comportamiento de los parámetros
del modelo. Estas condiciones corresponden al caso
del agua pura con la superficie del mar
hidrodinámicamente rugosa.

Luego de estos 4 días, en el momento 00:00 a.m. (hora

local) para estimar la influencia de la mancha durante
las próximas 24 horas se cambiaron las condiciones
del experimento de acuerdo a la tabla 1.

Figura 2. Comportamiento temporal de las variables del

Figura 1. Variaciones diarias de la temperatura del aire
(arriba, en ºC) y la humedad relativa (abajo, en %) en las
Islas del Rosario el día 26 de agosto de 1995.
modelo para el agua pura en la etapa de arranque del
modelo: a) coeficiente de turbulencia en la capa superior
(línea continua, en cm2/s) y la profundidad de la capa de
mezcla (línea punteada, en m); b) flujo eficiente de onda
larga (1), latente (2) y sensible (3) de calor (en W/m2); c)
radiación solar (línea continua) y el flujo total negativo en
la superficie (línea punteada), valores en W/m2; d)
componentes U (1,3) y V (2,4) de velocidad de corrientes
(en cm/s) en la superficie (1,2) y en la profundidad de 5 m
(3,4).

49
 Lonin: Influencia de una película de hidrocarburo en el área de un derrame

Resultados hidrodinámicamente suave de la superficie del agua

Los resultados se presentan en las figuras 3-6. La
figura 3 indica las variaciones diarias de la
temperatura del agua en la superficie del mar para los
experimentos 1-6 de la tabla 1. Se observa que el
aumento de albedo (2.5%, experimento 2) en
comparación con la superficie sin la mancha
(experimento 1) no reduce el calentamiento diario de
la superficie. De la misma manera, no se observa un
calentamiento notable de la superficie para el caso de
las películas mono-moleculares (experimento 4b).
Los efectos de cesación de la evaporación del agua
(experimento 4a), atenuación de las olas (experimento
3) y adsorción de la radiación solar (experimento 5)
contribuyen de manera relativamente similar al
régimen térmico, conduciendo a un calentamiento
o
hasta 0.15 C. Se observan para el mecanismo de la
absorción superficial de la radiación, las diferencias
claras en la fase de culminación, máximo de
temperatura del día (una hora antes). Esto tiene su
explicación física: la radiación solar se redistribuye en
una capa más delgada y se requiere menor período de
tiempo (menor capacidad calorífica) para el
calentamiento.
Finalmente, el experimento 6 muestra el efecto
acoplado de todos los factores, indicando que la
presencia de la mancha conduce a un incremento de la
o
temperatura superficial no mayor de 0.5 C en
comparación con el agua pura. Las variaciones más
pronunciadas se observan en las corrientes (figura 4).
Realmente, la transición del régimen rugoso al suave
(experimento 3) está causando la disminución de la
velocidad dentro de una capa superior en los primeros
5 metros hasta 1.2-1.4 cm/s para las magnitudes de
corrientes de 10-11 cm/s.
con la mancha, el espesor de la capa de mezcla (figura
5) disminuye de 10 a 7-8 metros, la turbulencia en la
capa superior (figura 6) se debilita el doble y se
presenta la transmisión del impulso de viento en una
columna más delgada. Por lo anterior, las corrientes
sub-superficiales se debilitan. Debido a la
disminución de la transmisión de calor, por la misma
razón, y por el calentamiento de la superficie, las
fuerzas de boyancia crean una capa superficial
delgada aislada, en la cual la energía del viento se
concentra. El mismo fenómeno explica el
comportamiento diario de las condiciones sin los
hidrocarburos, cuando durante el día la superficie se
o
calienta a 1 C (figura 2), las corrientes superficiales se
incrementan el doble (figura 4) y el espesor de la capa
de mezcla disminuye de 22 a 8-9 metros (el efecto
también es conocido como “summer jets”).
Por lo mostrado arriba, el efecto de disminución de
turbulencia por las fuerzas de boyancia en el caso de
las manchas de hidrocarburo en el mar y las
alteraciones de las propiedades hidrodinámicas,
puede tener importancia desde el punto de vista de los
efectos dinámicos. Sin embargo, para el caso del
océano real bajo las condiciones normales el aumento
de temperatura no es significativo.

La cesación de la evaporación del agua y adsorción de

la radiación aumentan las corrientes superficiales en
más del 10 %, mientras que el resultado integral, para
toda la columna del agua de 5 m, es la disminución de
velocidad en un 5-6 %. Esta observación puede
explicarse de la siguiente manera: debido al régimen
Figura 3. Variaciones temporales de la temperatura (en ºC)
superficial del agua en presencia de la mancha. Los
números de experimentos corresponden a lo indicado en la
tabla 1.

50

Figura 4. Variaciones temporales de velocidad de
corrientes (en cm/s) en la superficie del mar (arriba) y a 5 m
de profundidad (abajo) en presencia de la mancha (ver
figura 3 para los detalles de cada curva).
Figura 5. Comportamiento temporal del espesor (en m) de
la capa de mezcla en presencia de la mancha (ver figura 3
para los detalles de cada curva).
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 45-53 (2007)
Figura 6. Comportamiento temporal del coeficiente de
turbulencia (en cm2/s) en presencia de la mancha(ver figura
3 para los detalles de cada curva).
Discusión y conclusiones
Los experimentos ejecutados para las condiciones
oceánicas medias mostraron que la temperatura de la
mancha de hidrocarburos no se incrementa más de
o
0.5 C, el máximo diario de temperatura se presenta
una hora antes en comparación con la superficie no
contaminada y en el caso de las películas mono-
moleculares no se observa prácticamente ninguna
alteración.
Debe señalarse en adición a lo descrito anteriormente,
que la mancha en movimiento “siente” el efecto de
intercambio de calor entre el agua y el aire en las aguas
adyacentes, por lo tanto, los resultados obtenidos
pueden ser sobreestimados. En otras palabras, era
imposible tener en consideración los efectos de
interacción tres-dimensional en una aproximación de
1-D.
El efecto térmico es muy pequeño y es comparable
con el error de detección de la temperatura. Por
ejemplo, el error relativo dT/T en la dependencia
lineal entre la evaporación y la temperatura no excede
2.5%. Las alteraciones de las propiedades del crudo
por el calentamiento también son despreciables.
Sin embargo, para el caso de los derrames grandes,
puede ser ventajoso tener en cuenta la influencia de
las manchas en las corrientes. En este trabajo se
demuestra que las corrientes se pueden acelerar en un
51
 Lonin: Influencia de una película de hidrocarburo en el área de un derrame

10%, mientras que las corrientes sub-superficiales

disminuyen su intensidad debajo de la mancha. Pero si
se piensa que nuestro conocimiento sobre los
mecanismos de movimiento de la mancha se basa en la
relación empírica Voil = 0.03Wa + Vs [13], donde Voil ,
Wa y Vs son vectores de velocidad de la mancha, del
viento y de la superficie del agua, respectivamente,
entonces, un error de 10% en el cálculo de Vs parece
que no afecta mucho la exactitud de cálculo final. La
causa de esta circunstancia es la inexactitud de la
fórmula para Voil y los errores de estimación de los
vientos y corrientes. El coeficiente empírico (0.03) en
la fórmula anterior varía más del 10% por las causas
escritas en [13]. Es posible que en un futuro próximo
en los modelos más modernos estos errores se
eliminen parcialmente.

El interrogante planteado en la introducción todavía

está abierto. Diversas estimaciones de autores
distintos concluyen un rol más importante de las
manchas desde el punto de vista del régimen térmico.
Para ampliar la respuesta, los experimentos del
laboratorio fueron ejecutados. Los experimentos
fueron realizados en el CIOH en dos acuarios de vidrio
sin tapa, expuestos al aire libre. La temperatura
superficial del agua en un acuario con el agua limpia y
del crudo Cusiana en el otro fue medida. Los
experimentos, entonces, correspondieron a las
condiciones naturales tropicales con el cielo
despejado. Sin embargo, la velocidad del viento en la
superficie de los acuarios fue limitada, debido a los
detalles constructivos (las paredes de vidrio con
respecto a la posición de la superficie del agua
formaban las zonas de sombra para el viento). Bajo
estas restricciones, las condiciones del experimento
fueron casi semejantes a las de calma. Para estas
condiciones, fue calculado el comportamiento diario
de la temperatura de la superficie, empleando el
mismo modelo y las condiciones meteorológicas del
momento. Los resultados del modelo y del laboratorio
se muestran en la figura 7. La figura muestra una
posibilidad real de aumento de temperatura entre 15 y
20oC o más, bajo las condiciones de calma. El modelo
satisfactoriamente representa el proceso. Sin
embargo, la ausencia total de los vientos en la
naturaleza es una situación bien rara.
Hora local
Figura 7. Comportamiento temporal de la temperatura del
agua con (línea continua) y sin (línea punteada) la mancha
de hidrocarburos bajo las condiciones de calma en
laboratorio. Los puntos corresponden a los datos de
observaciones en los acuarios: el agua pura (círculos) y la
superficie de hidrocarburo (puntos y cruces).
Agradecimientos
El trabajo fue financiado por DIMAR y
COLCIENCIAS en el proyecto 0140-09-347-95. El
autor agradece al Dr. Alexander Kazakov por la
discusión del tema, al Dr. Anatoliy Lezhenin por el
suministro del código del modelo numérico y al M.Sc.
Carlos Parra por sugerencias al texto.
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53
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 54-60 (2007)

ARTÍCULO

Huracanes y tormentas tropicales en el Mar

Caribe colombiano desde 1900
Hurricanes and Tropical Storms in the Colombian Caribbean
Sea since 1900

Fecha recepción: 2007-09-12 / Fecha aceptación: 2007-10-16

CIOH
www.cioh.org.co
Juan Carlos Ortiz Royero
jortiz@uninorte.edu.co
Departamento de Física
Universidad del Norte
Km 5 vía a Puerto Colombia, Barranquilla. Colombia

Resumen
Exceptuando el área de la Isla de San Andrés y Providencia, el Caribe colombiano ha sido caracterizado como
una zona de baja probabilidad de formación y desarrollo de tormentas tropicales, de acuerdo con la Agencia para
la Atmósfera y el Océano de los Estados Unidos (NOAA). Esto no significa que tales eventos no se han
presentado en la costa Caribe colombiana; Irene en 1971, Joan en 1988 y Bret en 1993, son algunos ejemplos de
tormentas que cruzaron la costa colombiana en el pasado. El aumento en el número e intensidad de las tormentas
que han pasado por el Mar Caribe en la última década pone de manifiesto la necesidad de comenzar a evaluar los
efectos de estos fenómenos en la zona costera para el fortalecimiento de programas de alerta, donde el oleaje y la
marejada ciclónica representan los efectos oceánicos más importantes al paso de un evento de esta naturaleza.
En el presente trabajo se hace una revisión y análisis de las tormentas que pasaron por el Caribe colombiano
desde 1900, sus características y la amenaza costera que representan. Se establece que los últimos 17 años han
sido muy activos y se observa como la elevada actividad ciclónica del año 2005 coincide con un aumento
sustancial de la temperatura global. Expertos en calentamiento global coinciden que la intensidad o el número de
las tormentas en el Atlántico podrían aumentar por efectos del incremento de la temperatura superficial de
océano.

Palabras clave: Huracanes, temporada ciclónica, Mar Caribe.

Abstract
With the exception of the San Andres and Providence Islands, the Colombian Caribbean has been characterized
as a zone of low probability of tropical storms formation and development, according to the National Oceanic
and Atmospheric Administration (NOAA). This does not mean that such events have not happened in the

54
 Ortiz: Huracanes y tormentas tropicales en el Mar Caribe colombiano
Colombian Caribbean coast; Irene in 1971, Joan in
1988, and Bret in 1993, are some examples of storms
which passed through the Colombian coasts in the
past. The increase in the number and intensity of
storms which have crossed the Caribbean Sea during
the last decade make evident the necessity of
beginning an assessment of the effects of these
phenomena in the shore zone for strengthening the
warning programs where cyclonic swelling and heavy
seas represent the most important oceanic effects of
the passage of an event of such a nature. This paper
presents a revision and analysis of the storms which
have passed through the Colombian Caribbean since
1900, their characteristics and the shore threat they
represent. It has been established that the last 17 years
have been very active and it is also observed how the
high 2005 cyclonic activity coincides with the
substantial global temperature increase. Some global
warming experts agree that the intensity or the number
of storms in the Atlantic could increase because of the
ocean superficial temperature increase.
Key words: Hurricanes, cyclonic season, Caribbean
Sea.
Introducción
En meteorología, un huracán es un sistema
tormentoso con una circulación cerrada alrededor de
un centro de baja presión, alimentado por el calor
producto del aire húmedo que se levanta y se
condensa. El nombre tiene su origen en los trópicos y
su naturaleza ciclónica, se distinguen de otras
tormentas ciclónicas como las bajas polares por el
mecanismo de calor que las alimenta, que las
convierte en sistemas tormentosos de núcleo cálido,
Ortiz y Mercado [1].
La escala Saffir-Simpson (tabla 1) es una clasificación
de los huracanes de acuerdo a la velocidad del viento
durante la vida de un huracán, la cual está evaluada en
categorías de 1 a 5, de menor a mayor intensidad,
respectivamente.
Tabla 1. Escala Saffir Simpson.
Tipo de tormenta Vientos
(km/h)
Huracán Cat. 1 118-153
Huracán Cat. 2 154-177
Huracán Cat. 3 178-209
Huracán Cat. 4 210-250
Huracán Cat. 5 Más de 250
Los huracanes en el Océano Atlántico son fenómenos
muy comunes que se forman sobre aguas cálidas entre
junio y noviembre, los vientos superficiales juegan un
papel muy importante en su formación. En términos
generales, los huracanes que se forman en el Atlántico
lo hacen por la convergencia de los vientos del este, en
la costa oeste africana, de acuerdo a Mo et al. [2]. Los
porcentajes de distribución histórica ubica la zona del
Atlántico, incluyendo al Mar Caribe con un 11% y la
zona del Pacífico occidental con el mayor porcentaje
de presencia de huracanes con un 39% de acuerdo a
Rubiera. [3]
La costa sureste de los Estados Unidos y las Antillas
Mayores (Puerto Rico, la Española y Cuba) han sido
históricamente las zonas más afectadas por huracanes
en el Mar Caribe. En Norteamérica, Zandbergern [4]
muestra una detallada información de los huracanes
que impactaron las costas de los Estados Unidos
desde 1823, Bell y Ray [5] y Shapiro y Goldenberg
[6], son otras referencias importantes.
En Centroamérica los estudios han sido muy pocos,
algunos relacionados al análisis de los daños causados
y las pérdidas humanas, llevados a cabo por agencias
del gobierno. Un estudio general para el Caribe se
muestra en Rubiera [3], este estudio señala que uno de
los ciclos más activos ocurrió durante la primera
mitad del siglo XX. En la década de los años 20, 30, 40
y hasta los 50, la zona del Caribe sufrió temibles
huracanes.
En Colombia no existen estudios similares de la
actividad ciclónica en el pasado, el Caribe
colombiano cuenta con aproximadamente 1.760 km
de línea de costa en las cuales se ubican las ciudades
costeras más importantes de Colombia (Cartagena,
Barranquilla y Santa Marta), haciendo de esta zona
55

una de las más importantes de nuestro país. La
extensión del Caribe colombiano es cerca de los
590.000 km2 de superficie. El Mar Caribe limita hacia
al sur con Suramérica, al oeste con Centroamérica, al
este con las Antillas Menores y por el norte por las
Antillas Mayores (Cuba, Haití, República
Dominicana y Puerto Rico). Está conectado con el
Golfo de México por el denominado canal de Yucatán
en la parte noroeste y hacia el este con el Océano
Atlántico tropical. En la figura 1 se muestran las aguas
territoriales de Colombia en el Mar Caribe.
Figura 1. Aguas territoriales colombianas en el Mar Caribe
(Armada República de Colombia).
La temporada de huracanes inicia en junio y termina
en noviembre, siendo septiembre y octubre los meses
más activos estadísticamente. Existe actualmente una
discusión científica acerca de la relación entre el
aumento de la temperatura superficial del mar y la
actividad ciclónica. En este trabajo se pretende
establecer el estado del arte de la actividad ciclónica
en aguas del Mar Caribe, específicamente, las aguas
territoriales colombianas.
Los factores que determinan la formación y
trayectoria de un huracán son diversos y complejos.
No existe un modelo teórico contundente que pueda
predecir su comportamiento, pero se ha establecido
que la presencia de un disturbio atmosférico conocido
como baja presión, sumado a vientos débiles en los
niveles altos de la atmósfera, la temperatura de la
superficie de mar y la fuerza de Coriolis juegan un
papel importante en la dinámica de un huracán.
56
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 54-60 (2007)
HURDAT [7] (HURricane DATa) es la base de datos
oficial de registro histórico de las tormentas y
huracanes en el Océano Atlántico, incluyendo el
Golfo de México y el Mar Caribe, pertenece a la
Agencia Nacional de la Atmósfera y el Océano
(NOAA). Esta base de datos es utilizada ampliamente
en todo el mundo para diferentes propósitos: manejo
de riesgos costeros, análisis de pérdidas potenciales,
verificación y validación de modelos, cambio
climático, entre otros.
Materiales y métodos
La metodología se apoyó en analizar, de la base de
datos HURDAT, las tormentas que ingresaron al Mar
Caribe colombiano desde 1900. Se tomó como
o
dominio geográfico de estudio una malla desde 68
Oeste hasta los 84o Oeste y desde los 8o Norte hasta
los 16o Norte. Como puede verse en al figura 2.
Figura 2. Dominio geográfico para analizar la actividad
ciclónica en el Caribe Colombiano.
Fueron escogidas aquellas tormentas cuyas
trayectorias se encontraban en la zona de estudio. Se
hizo una caracterización de acuerdo al tipo de
tormenta en la escala Saffir Simpson en cada año
desde 1900 hasta el 2007 y otra por décadas, tratando
de encontrar un comportamiento estadístico
apreciable.
Resultados
En la figura 3 se muestra toda la actividad ciclónica en
el Mar Caribe colombiano desde el año 1900 hasta el
año 2007, a simple vista puede notarse que la
 Ortiz: Huracanes y tormentas tropicales en el Mar Caribe colombiano
actividad de los huracanes en Colombia ha sido
importante.
Figura 3. Actividad ciclónica en el Caribe colombiano:
1900-2007.
Un total de 57 tormentas han pasado por las aguas del
Caribe colombiano, algunas cercanas a la Península
de la Guajira y otras tocando tierra. No existe en
realidad una tendencia clara en el aumento del número
de eventos que han pasado por el Caribe en los últimos
100 años, como puede verse en la figura 4.
Huracanes en el Caribe Colombiano
1900 - 2007
Figura 4. Número de eventos en el Caribe colombiano
1900 a 2007.
La figura 5 muestra el número de eventos por década y
se hace perceptible que definitivamente los últimos 17
años (1990 al presente) han sido los años más activos
(sólo comparable con la década de los años 30). El año
1996 con tres eventos (Marco, Lili y César) y el 2005
con tres eventos más (Gamma, Beta y Emily) son los
años de mayor actividad ciclónica, sólo comprable
con los años 1933, 1961 y 1971 con tres eventos cada
uno también.
La década más activa en número de eventos es la de
1990 y lo que va corrido del 2000, con 7 eventos cada
una. Históricamente sólo la década de 1930, con igual
número de eventos, ha sido tan activa. Vale mencionar
en 1930 “San Zenón” en la República Dominicana,
que destruyó a Santo Domingo; el de 1932 en Cuba,
que ocasionó la mayor catástrofe natural ocurrida en
la historia de este país al quedar barrida la población
de Santa Cruz del Sur por una enorme marea de
tormenta muriendo sus 3.000 habitantes. Pero
después se estableció un período de relativa calma
durante parte de los años de la década de los 60, así
como en los 70, 80 y primera mitad de los 90; ésto se
puede apreciar en la figura 5.
Número de huracanes por década
Figura 5. Actividad ciclónica en el Caribe colombiano por
década.
La figura 6 muestra los eventos más cercanos respecto
a la línea de costa. Se observa como desde 1901 la
costa Caribe colombiana ha sido afectada con el paso
de tormentas. Obviamente esta descripción resulta ser
casi despreciable cuando se analiza la actividad en la
costa sureste de los Estados Unidos, pero de igual
manera pone de manifiesto que las tormentas han
estado presente desde comienzos de siglo en
Colombia, aunque en bajo número.
57

LATITUD
LONGITUD
Figura 6. Principales tormentas que han afectado la línea de
costa del Caribe colombiano.
La figura 7 muestra un mapa batimétrico y topográfico
de la zona y se pueden apreciar mejor las trayectorias
de los huracanes que han pasado cerca; incluso esta
figura permite apreciar mejor el paso de Bret en 1993
(línea azul) por encima de la Sierra Nevada de Santa
Marta. El huracán Joan en 1988 ha sido el evento más
significativo en la historia reciente de Colombia,
aunque al pasar por la costa colombiana era una
tormenta tropical, la cantidad de lluvia que
acompañaba al sistema causó severos daños asociados
a las inundaciones y más tarde alcanzaría la categoría
4 en Centroamérica.
Figura 7. Mapa batimétrico de la zona de estudio y las
trayectorias de las tormentas cerca de la costa.
58
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 54-60 (2007)
La situación para San Andrés es más delicada, ya que
la Isla ha sido afectada por tormentas en mayor
número y de forma directa. Esto se puede ver en la
figura 8. El huracán Hattie, categoría 3, en 1961 con
vientos de 180 Km/h y la tormenta 4 de 1911 que fue
un huracán categoría 2, con vientos de 160 km/h
impactaron la isla de manera directa.
Figura 8. Actividad ciclónica en la isla de San Andrés.
Desde hace algunos años existe la preocupación por el
aumento en la temperatura superficial del mar debido
al calentamiento global y su relación de alguna
manera con la actividad ciclónica, no hay unificación
de criterios en la comunidad científica respecto a si
aumentarían en número o en intensidad.
Aunque debe hacerse un análisis más detallado de la
temperatura del Mar Caribe, una primera
aproximación consiste en comparar el aumento en la
temperatura superficial global en el último siglo y el
número de eventos. Para esto se tomaron los datos del
aumento de la temperatura del reporte del año 2007
del Panel Intergubernamental para el Cambio
Climático o IPCC [8], aunque no se observa una
correlación muy clara, si es evidente que la temporada
de huracanes 2005 coincide con el aumento más alto
en la temperatura superficial del mar en los últimos 20
años (figura 9).
 Ortiz: Huracanes y tormentas tropicales en el Mar Caribe colombiano
Figura 6. Variación de la temperatura promedio de la
superficie del océano y el número de eventos en el Caribe
colombiano.
Discusión y conclusiones
Existen dos y tal vez tres efectos geofísicos y
metereológicos que hacen de la costa colombiana un
lugar particularmente favorable para el paso de
tormentas: 1) La fuerza de Coriolis hace que los
huracanes, que provienen de la costa africana, tiendan
a moverse en dirección oeste-noroeste, 2) la línea de
Costa carieb colombiana no es horizontal sino con una
pendiente tal, que el oleaje generado no impacta
perpendicular a la costa, excepto la Península de la
Guajira, donde se encuentra una de las reservas
carboníferas más grandes del mundo y es la zona
costera más expuesta a la actividad ciclónica y 3) la
presencia de la Sierra Nevada de Santa Marta, de
acuerdo a planteamientos teóricos sería un escudo
natural frente a las tormentas, al observar a Bret en
1993, nos damos cuenta que esta teoría no siempre es
válida.
En este trabajo se pone de manifiesto que los
huracanes son una realidad en Colombia, aunque en
un número menor respecto a otras áreas del Caribe. Un
total de 57 tormentas han cruzado las aguas
territoriales colombianas en los últimos 100 años; un
huracán categoría 4 (Joan 1988) cuando se dirigía a
Centroamérica ha sido uno de los más importantes
eventos ciclónicos en la historia reciente de Colombia.
Una simulación de este huracán y el oleaje generado
en aguas profundas se hizo en Ortiz et al., [9]. Dos
huracanes categoría 1 y dos tormentas tropicales (TT)
han pasado cerca de la costa también.
La Península de la Guajira y las islas de San Andrés y
Providencia son las zonas de más alto riesgo ante la
amenaza de las tormentas que vienen del este. Otras
tormentas pueden provenir de las aguas cercanas a la
península de Yucatán y moverse en dirección este-
noreste, pero son menos comunes. (i.e Jenny 1999).
Otro caso particular se presentó en 1909 con la
tormenta tropical No. 10 la cual se formó justo en
frente de las costas colombianas y siguió rumbo
Norte.
Se debe aclarar que los daños en vidas humanas y en la
economía no están necesariamente relacionados
directamente con la categoría de la tormenta. En
Centroamérica han ocurrido tormentas tropicales
donde las inundaciones producidas por las lluvias han
causado miles de víctimas, aunque la intensidad de
sus vientos no haya sido significativa.
Joan en 1988, César en 1996 y Bret en 1993 son la
mejor evidencia que han existido huracanes que han
tocado tierra Colombiana. El caso de la isla de San
Andrés es más delicado. Al menos 12 tormentas y
huracanes han afectado la isla, siendo Hattie en 1961
uno de las más peligrosas y más recientemente la
tormenta Beta en el 2005 causó daños menores a la
infraestructura costera.
Aunque un huracán no pase cerca de la línea de costa,
éste puede generar oleaje de fondo, fenómeno
asociado a olas de tormenta que son generadas en
lugares remotos y que viajan cientos de kilómetros
hasta llegar a las playas. Se caracterizan por aparecer
sin previo aviso, cuando no existe un sistema de
observación climático, con períodos entre 12 y 18
segundos y alturas de 2 a 4 metros de acuerdo a la
dinámica misma desde su formación hasta su arribo.
Esta revisión histórica debe dar una perspectiva que el
estudio de los huracanes y sus efectos deben tenerse
en cuenta para diseñar planes de manejo de
emergencias, basados en modelaciones de oleaje y
líneas de inundación por la marejada para las áreas
mas propensas al efecto directo de los mismos.
Agradecimientos
EL autor desea expresar su agradecimiento a la
Dirección de Investigaciones y Proyectos (DIP) de la
Universidad del Norte por el apoyo para la realización
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 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 54-60 (2007)

de esta investigación, así mismo como a la Dirección

General Marítima (DIMAR) y al Centro de
Investigaciones Oceanográficos e Hidrográficas
(CIOH) del Ministaerio de Defensa Nacional -
DIMAR.

Referencias bibliográficas
[1] Ortiz JC y Mercado A. Estudio preliminar del impacto del
oleaje de huracanes en la línea costera del Departamento del
Atlántico. Boletín Científico del CIOH. Vol. 24. 2006; 48-59.

[2] Mo K, GD Bell and WM Thiaw (2001), Impact of sea surface

temperature anomalies on the Atlantic tropical storm activity and
West African rainfall, J. Atmos. Sci., 58, 3477 3496.

[3] Rubiera J. Early Warning for Hurricanes. Thematic Session

Cluster 2 World Conference on Disaster Reduction. Kobe, Japan.
January 18 22, 2005.

[4] Zandbergen P. Exposure of US counties to Atlantic tropical

storms and hurricanes, 18512003. Nat Hazards. Springer. May
2008.

[5] Bell K and Ray P. North Atlantic Hurricanes 1977-99: Surface

Hurricane-Force Wind RadiiAtlantic Sea Surface Temperatures
and Tropical Cyclone Formation. Monthly Weather Review. Vol.
132. 2004; 1167-1189.

[6] Shapiro Lloyd J and Goldenberg Stanley B. Atlantic Sea

Surface Temperatures and Tropical Cyclone Formation. Journal of
Climate. Vol. 11. 1997; 578-590.

[7] Unisys Weather Tropical Data Department [Página Web]

[Actualizada 2007 Febrero 1; Citada 2006 Febrero 15].
D i s p o n i b l e e n :
http://weather.unisys.com/hurricane/atlantic/index.html.

[8] IPCC, 2007: Cambio climático 2007: Informe de síntesis.

Contribución de los Grupos de trabajo I, II y III al Cuarto Informe
de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el
Cambio Climático [Core Writing Team, Pachauri RK, Reisinger A
y Equipo principal de redacción (directores de la publicación)].
IPCC, Ginebra, Suiza.

[9] Ortiz J.C., López F., Estrada E., y Bacca L.F., Estudio y
simulación del huracán Joan sobre la costa Caribe colombiana
incluyendo la isla de San Andrés en 1988. Revista de la Sociedad
Colombiana de Física. Vol. 40 No. 2, 2008.

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 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 61-70 (2007)

ARTÍCULO

Estudio descriptivo de la influencia del

huracán Beta en las islas de Providencia y
Santa Catalina
Descriptive Study of the influence of hurricane Beta on the
Providencia and Santa Catalina Islands

Fecha recepción: 2007-09-04 / Fecha aceptación: 2007-09-17

CIOH
www.cioh.org.co
Germán Collazos Guzmán, gcollazosg@enap.edu.co
Hector Javier Ospina Vallejo, hospina@cioh.org.co
Alejandro Muñoz Vargas, amunoz@cioh.org.co
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas
CIOH, Isla Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
La temporada de huracanes del año 2005 pasará a la historia como una de las más devastadoras de la humanidad,
en la que se rompieron los registros históricos hasta ese momento de depresiones tropicales, con treinta
tormentas y catorce huracanes, de los cuales cinco fueron “mayores”, es decir que alcanzaron las categorías tres,
cuatro o cinco en la escala Saffir Simpson. Durante esta temporada el Centro Nacional de Huracanes de los
Estados Unidos y los meteorólogos mundiales tuvieron que recurrir al alfabeto griego para nominarlos una vez
terminados los nombres previamente escogidos para ese año.

El 28 de octubre de 2005 y por espacio de doce horas el huracán Beta de categoría uno pasó siguiendo una
trayectoria muy particular, sobre las islas colombianas de Providencia y Santa Catalina. Utilizar esta
información para describir con metodología científica el paso del huracán, se convierte en un importante banco
de información ambiental de referencia que puede ser utilizado para aportar antecedentes a los planes de
atención y prevención de desastres, así como para entender las experiencias futuras de estos fenómenos
meteorológicos en nuestro país.

En el siguiente documento se analizó en forma descriptiva datos e información obtenida in situ en la isla de
Providencia durante el paso del fenómeno meteorológico, complementando sus valores con el análisis de las
imágenes satelitales y sensores remotos que en simultánea efectuó la Central de Pronósticos del Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas.

Las conclusiones académicas permitieron reconstruir el comportamiento del fenómeno meteorológico, así
como la identificación de posibles causas y los efectos de su evolución.

Palabras claves: Depresión tropical, huracán “BETA”, temporada huracanes 2005.

61
 Collazos et al.: Estudio descriptivo de la influencia del huracán Beta
Abstract
The hurricane 2005 season will be registered in
history as one of the most devastating in human kind,
in which historical records were broken up to that
moment of the tropical depressions, with thirty storms
and fourteen hurricanes, out of which, five were
considered “high”, this is, they reached the categories
three, four or five at the Saffir-Simpson scale. During
this season the United States Hurricane National
Center and the worldwide meteorologists had to resort
to the Greek alphabet to name them once they were out
of the previously chosen names for that year.
On October 28, 2005 and for a space of twelve hours,
hurricane Beta, of category one, passed through
following a very particular path, over the Colombian
Islands, Providencia and Santa Catalina. Using these
data to describe with scientific meteorology the
hurricane passage, becomes an important
environmental data bank of reference which can be
utilized to supply records to the disaster attention and
prevention, as well as to understand forthcoming
experiences of these meteorological phenomena in
our country.
The following paper in a descriptive manner the
obtained in situ data has been analyzed at the
Providencia Island, during the passage of the
meteorological phenomenon, complementing its
values with the analysis of the satellite images and the
remote sensors which simultaneously was carried out
by the Oceanographic and Hydrographic Research
Center Forecasting Central.
The academic findings permitted the reconstruction of
the meteorological phenomenon behavior, as well as
the possible causes and effects of its evolution.
Key words: Tropical depression, hurricane “BETA”,
2005 hurricane season.
Introducción
Científicamente una tormenta tropical se convierte en
huracán cuando sus vientos máximos sostenidos
alcanzan los ciento diez y ocho (118) kilómetros por
62
hora. En este momento el diámetro del área cubierta
por vientos destructivos puede superar los doscientos
cincuenta (250) kilómetros (acuerdo reportes
meteorológicos emitidos por la Central de Huracanes
de Miami). Cuando “BETA” alcanzó esta categoría,
sobre las islas de Providencia y Santa Catalina, su
influencia se sintió simultáneamente en Colombia,
Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Jamaica y Salvador
[1].
Un huracán puede convertirse en una fuerza
progresiva tan destructiva que puede superar los
doscientos cincuenta (250) kilómetros por hora de
vientos sostenidos con ráfagas de mayor intensidad
como el huracán “Gilbert” que en mil novecientos
ochenta y ocho alcanzó trescientos cincuenta
kilómetros por hora, lo que le mereció pasar a la
historia como el mayor huracán del siglo veinte.
Contradictoriamente en el ojo del huracán que
corresponde al vértice ciclónico que tiene un diámetro
medio de veinte kilómetros es en donde los vientos
parecen calmarse y las nubes se elevan en paredes
verticales de gran altura, aunque el mar permanece
igual de agitado que su alrededor [2].
El huracán “BETA” entró en las estadísticas históricas
como una depresión tropical que se formó el día
veinticinco de octubre en aguas del sector conocido
como Panamá Basin, ubicado en el mar Caribe entre
Panamá, Nicaragua y Colombia, que se caracteriza
por la alta temperatura superficial de sus aguas en
plena zona de calma ecuatorial [1].
Durante los dos días siguientes “BETA” avanzó hacia
el Norte siguiendo una trayectoria definida en
traslación que hacía suponer su arribo a la isla de San
Andrés. No obstante un cambio de trayectoria de
último momento, debido a la interacción de un eje de
vaguada que se encontraba ubicado al sureste del
Golfo de México, el cual se desplazó hacia el Noreste,
y un eje de cuña en media tropósfera se organizó al
norte y al noroeste del huracán, haciéndolo dirigir
hacia las islas de Providencia y Santa Catalina en
donde llegó a medio día del veintiocho de octubre
convertido en un huracán categoría uno [1].
La experiencia duró en estas islas doce horas,
sintiendo sus vientos huracanados inicialmente por el

costado oriental y posteriormente por el costado
occidental, después que el huracán hiciera un giro
alrededor de la isla por el Norte [1].
Esta trayectoria inusual (figura 1) en un fenómeno de
gran magnitud, sumado a la escasa velocidad de
traslación, fue la causante de los destrozos materiales
y físicos tan marcados que se sucedieron en las islas
colombianas una vez el fenómeno siguió en
trayectoria hacia el Oeste para llegar a las costas de
Nicaragua el treinta de octubre convertido en un
huracán categoría dos [1].
Figura 1. Seguimiento de las posiciones del huracán
BETA. Se evidencia el giro que efectuó en dirección sobre
las islas de Providencia y Santa Catalina. Sector extraído de
la carta náutica 007 de DIMAR.
Durante las doce horas de exposición en Providencia y
Santa Catalina, la Capitanía de Puerto recolectó en
forma manual durante cada hora datos in situ de la
intensidad del viento con un anemómetro portátil
Kestrel 4000. Así mismo, se registraron mediante
observaciones de campo, los elementos más
significativos en el comportamiento de la biota
terrestre y marina antes de la llegada del fenómeno.
De la misma forma el Centro de Investigaciones
Oceanográficas e Hidrográficas desde Cartagena
recibió e interpretó imágenes del satélite
geoestacionario GOES 12 en banda visible e
infrarroja, que complementado con los análisis del
modelo numérico de circulación oceánica MCO,
permitió hacer un seguimiento del comportamiento
del huracán y su permanente evolución.
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 61-70 (2007)
Materiales y métodos
Para medir la intensidad del viento in situ se utilizó un
anemómetro portátil de bolsillo Kestrel 4000 con un
grado de error de +/- 3% de fábrica, medido en
superficie en un punto ubicado en el sector de Black
Sand Bay frente a la Capitanía de Puerto de
Providencia en la línea costera, libre de obstáculos a
una distancia de 100 metros en coordenadas latitud
13º 22,36´N y longitud 081º 22,25´W. En total se
efectuaron veintidós mediciones espaciadas en
intervalos de una hora desde las diez de la mañana del
día veintiocho hasta las dos de la tarde del veintinueve
de octubre.
Para hacer el análisis multitemporal, se utilizaron
imágenes del “Earth Science Office at NASA
Marshall Space Flight”, información de pronósticos,
valores y análisis del “National Weather Service” del
Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos
www.nhc.noaa.gov actualizadas cada cinco minutos,
las cuales fueron trabajadas multiespectralmente
mediante el software técnico grapher 3.0.
La información sobre el comportamiento de la biota
terrestre y marina fue recogida mediante visitas de
campo de personal técnico de la Capitanía de Puerto
de Providencia y Santa Catalina en los sectores más
próximos a ésta, en dos tiempos: previa a la llegada
del huracán y posterior al paso del huracán por
intervalo de varios días.
Se utilizó el modelo numérico de circulación oceánica
MCO con asimilación de datos para el Caribe
aplicado en derrames de hidrocarburos, pesquería y
búsqueda y rescate, para identificar las condiciones
iniciales de la dinámica oceánica. Así mismo, el
modelo numérico NEDWAN [Netherland Wave
Model] para calcular la altura de la ola en la
predicción del oleaje y el modelo numérico UKMO
[United Kindom Meteorological Office] para
introducir los parámetros iniciales de viento.
Área de estudio
El Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa
Catalina, pertenecen al territorio insular de Colombia
y está situado al occidente del mar Caribe (figura 2).
La isla de San Andrés se encuentra entre los 12° 29'N
63
 Collazos et al.: Estudio descriptivo de la influencia del huracán Beta
y 12° 36'N y los 81° 41'W y 81° 43'W con 26 km2 de
superficie; mientras que la isla de Providencia se
encuentra entre los 13° 19'N y 13° 23'N y 81° 21'W y
81° 23'W con 17 km2 de superficie [3].
Figura 2. Detalle de ubicación de las islas de San Andrés y
Providencia. Carta náutica 007 de DIMAR.
El archipiélago está formado por un conjunto de islas
oceánicas, atolones y bancos coralinos alineados en
dirección NNE. Es uno de los sistemas arrecifales más
extensos del Atlántico y es el área de este tipo más
grande de Colombia [4]. Según algunas estimaciones,
el área de la plataforma calcárea - incluyendo
arrecifes, pastos marinos y fondos sedimentarios
someros -, es de unas 500.000 hectáreas. Comprende
dos arrecifes de barrera antepuestos a cada una de las
islas mayores (San Andrés y Providencia), cinco
atolones verdaderos y algunos bancos coralinos.
Alrededor del Banco Serrana y de la isla de
Providencia se encuentran las barreras arrecifales más
largas (50 y 32 kilómetros, respectivamente) [5].
Las islas principales del archipiélago colombiano, San
Andrés y Providencia, son muy similares en tamaño y
se encuentran separadas entre sí por 55 millas
náuticas. San Andrés, con cerca de 150.000 habitantes
es de origen coralino rodeada de pequeños cayos y
arrecifes que ofrecen protección natural a la franja
costera en el sector noreste y Providencia con cerca de
5.000 habitantes es de origen volcánico con grandes
elevaciones de montes y montañas que forman una
cordillera de 300 metros en promedio, rodeado por un
64
largo arrecife de 15 millas náuticas considerado como
uno de los cinco arrecifes más largo del mundo [1].
Las condiciones océano atmosféricas del área están
condicionadas por varios factores de macro escala
como son: la corriente cálida del Golfo de México, los
frentes fríos que se originan en Norteamérica, el paso
de las ondas tropicales que vienen del este en
dirección oeste. Así mismo influye en el clima
particular de Providencia y Santa Catalina, la
evaporación y la interacción propia de su escarpada
geomorfología con los vientos locales diurnos y
nocturnos [1].
El archipiélago está situado dentro del cinturón de
huracanes del Caribe; el paso de huracanes por sus
aguas han sido registrados en 1818, 1876, 1877, 1906,
1940, 1961 (Hattie), 1971 (Irene), 1988 (Joan), César
(1996), Wilma y Beta (2005). A pesar de esto no existe
variada documentación académica registrada en
nuestro país sobre estos fenómenos lo cual constituye
una oportunidad muy valiosa de iniciar cuanto antes la
documentación de los eventos recientes con el fin de
prever a futuro su comportamiento y causas-efectos
[6].
Resultados
Desde el día 27 hasta el mismo 29 de octubre de 2005,
sucedieron en las islas de Providencia y Santa
Catalina, varios fenómenos naturales previos a la
llegada del huracán, los cuales fueron detalladamente
consignados por los inspectores de litorales del grupo
de coordinación de Coralina y funcionarios de la
misma Capitanía de Puerto de Providencia y Santa
Catalina, así:
Mortandad de aves. Especies de aves como sugard
birds, parulas, vermívoras peregrinas, gullie birds,
pelícanos y otras aves exóticas, fueron víctimas de
una aparente desincronización previa de sus sistemas
de referencia en vuelo, ocasionándoles la muerte por
fatiga. Varias bandadas de aves volaban
continuamente sin rumbo aparente hacía el Sur, luego
hacia el Este para regresar nuevamente a la isla donde
fallecían en el sector de la represa y en menor escala
sobre la vía circunvalar [1].

Concentración anormal de peces en el arrecife. Las
corrientes superficiales sufrieron alteraciones desde el
mismo 27 de octubre ocasionadas por el tránsito en
superficie a gran velocidad de masas de aire cálido
inicialmente hacia el Sur y posteriormente a medida
que la tormenta tropical se acercaba a la isla, variando
en forma secuencial hacia el Este, Norte y finalmente
hacia el Oeste. La dinámica generada por la
interacción atmosférica y oceánica influenciada por
una celda de convección de este tipo, generó una gran
afluencia de nutrientes en profundidad hacia la
superficie, haciendo que se presentara una
concentración anormal de varios representantes de
estas cálidas aguas, margaritas, peces loro, isabelitas,
pargos rojos, mantarayas, barracudas e incluso y para
curiosidad de los buzos, cientos de tiburones de
cabeza plana [1].
Meteorológicamente, el cielo se mantuvo en gran
medida despejado, previo al evento macro,
ocasionado por la absorción de calor que la tormenta
tropical hacía en ese momento al sur de la isla a 120
kilómetros de distancia. La presión barométrica inició
su descenso el 27 de octubre desde 1014 mb (situación
normal), hasta 995 para el día 29 de octubre/05,
acompañada ya para ese momento, de gran
pluviosidad y presencia de cúmulos nimbos (nubes de
desarrollo vertical) de gran intensidad [1].
Sobre los factores que incidieron en definir la
particular trayectoria que terminó siguiendo el
sistema BETA, se pueden describir con gran
aproximación dos de ellas muy significativas. La
principal tiene que ver con la anomalía de temperatura
superficial, que en ese momento se encontraba
alterada por el reciente paso por aguas del Caribe de
otra tormenta tropical, diez días antes, llamada
“WILMA” ocasionando que los mayores gradientes
fueran precisamente por donde estableció su
trayectoria. El otro factor menos importante, pero
totalmente evidente fue la interacción del sistema
ciclónico con las montañas escarpadas de
Providencia, lo cual generó que el sistema perdiera
velocidad en traslación e incluso lo convirtiera en
semi estacionario por varias horas, aumentando su
efecto destructivo y haciéndolo virar literalmente
desde el Este por el Norte hacia el Oeste, tal como se
aprecia en la figura 1 [1].
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 61-70 (2007)
Con base en la animación efectuada en el Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas de
las imágenes en las bandas infrarrojo (IR4) y visible
(VIS), capturadas por el satélite Goes 12, se pudo
determinar que anterior a la formación de “BETA”, se
presentaron en el Caribe varios fenómenos
meteorológicos como el paso de las tormentas
“WILMA” y “ALFA”, las cuales gradualmente
fueron creando inestabilidad atmosférica como
consecuencia de gradientes altos de temperatura
superficial [7].
Es evidente que la tormenta tropical “WILMA” y en
especial la tormenta tropical “ALFA” coadyuvaron a
generar inestabilidad atmosférica en la zona, previa al
paso de una nueva onda tropical del este, la cual dio
origen a la formación de “BETA”. Esta onda tropical,
continuó su tránsito hacia el Oeste por algunos días y
antes del 25 la fuerte inestabilidad océano atmosférica
presenciada durante el mes de octubre consolidó las
condiciones básicas para permitir la nueva formación,
sumado a un gradiente térmico anormal en superficie
[7].
El 26 de octubre, las características que congregaban
el avance de dicho sistema, se organizaron
suficientemente antes de las 1800 UTC, señalando el
inicio o formación de una depresión tropical. En sus
inicios, el movimiento era inicialmente noroeste, pero
debido a la influencia de un eje de vaguada en niveles
medios de la tropósfera, provenientes del sureste del
Golfo de México y a un eje de cuña en niveles medios
de la tropósfera, ubicado al este noreste del sistema,
ocasionó que el sistema tropical, diera vuelta
gradualmente hacia el Norte [7].
La salida del Modelo de Circulación Oceánica MCO
de DIMAR (figura 3), registró temperaturas
superficiales del mar superiores a los 29° C en el sitio
donde la depresión tropical BETA se intensificó hasta
convertirse en una tormenta tropical alrededor de la
una de la mañana del día 27 de octubre de 2005. Dicho
sistema se consolidó durante las 36 horas siguientes
debido a una interrupción leve del sistema por
debilitamiento del eje de cuña proveniente del
65
 Collazos et al.: Estudio descriptivo de la influencia del huracán Beta

Noreste, por lo que el día 28 de octubre BETA
aumentó la velocidad de sus vientos y descendió
drásticamente su presión atmosférica interior, hasta
convertirse en un huracán categoría 1, en cercanías a la
isla de Providencia [6].
existieran víctimas humanas, ya que los ciudadanos
del municipio se encontraban en sus albergues [1].
De los datos medidos in situ representados en la figura
4, tanto durante veinticuatro horas del día 28 de
octubre, como durante las primeras 12 horas del día 29
de octubre de 2005 respectivamente, se concluye la
siguiente evolución del fenómeno meteorológico:

Figura 3. Salida TSM del MCO (Modelo de Circulación

Oceánica) para el día 27 de octubre de 2005. Se observa un
gradiente anormal de temperatura al Suroeste del mar
Caribe.

Debido a que el eje de vaguada que se encontraba

ubicado al Sureste del Golfo de México, se desplazó
hacia el Noreste y un eje de cuña en media tropósfera
se organizó al norte y al noroeste del huracán, “BETA”
cambió su movimiento hacia el Oeste y el Oeste-
Suroeste, intensificando la velocidad de sus vientos
consolidándose rápidamente como un fenómeno de
gran escala, alcanzando una intensidad máxima de 90
nudos alrededor de la una de la mañana del 30 de
octubre respectivamente [7].

Poco antes de que el ojo del huracán “BETA”

alcanzara las costas de Nicaragua, el vórtice interior
central de la nube (ojo) y la intensidad del huracán, se
estimó de 100 nudos, alcanzando la categoría 2 en la
escala internacional Saffir-Simpson [7].

Los datos medidos alrededor de la isla por la Capitanía

de Puerto de Providencia desde el 28 de octubre al 29
de octubre de 2005, mediante la utilización de un
anemómetro digital portátil en superficie, arrojó el
comportamiento promedio estadístico (figura 4), en
Figura 4. Registro de la intensidad del viento medido in
donde se resalta la mayor intensidad en horas de la situ en la isla de Providencia para los días 28 y 29 de
noche, lo cual fue un factor decisivo en evitar que octubre.

66
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 61-70 (2007)

a. Tormenta Tropical muy cercana a categoría de

huracán, desde las ocho de la mañana hasta las dos
y media de la tarde, con vientos desde 65 millas por
hora (104 kilómetros por hora) hasta 78 millas por
hora (125 kilómetros por hora), no sostenidos.

b. Huracán categoría uno desde las tres de la tarde del

día 28 de octubre de 2005 con vientos sostenidos
de 75 millas por hora (120 kilómetros por hora)
hasta el medio día del 29 de octubre de 2005 en que
continuó su tránsito hacia Nicaragua y se dejó de
sentir en Providencia y Santa Catalina con vientos
no sostenidos de 98 millas por hora (157
kilómetros por hora).

Se observa como el huracán evolucionó en intensidad

a su paso por las islas de Providencia y Santa Catalina,
pasando en menos de veinticuatro horas de tormenta
tropical a huracán categoría dos en la escala Saffir
Simpson [1].

Al correlacionar estos datos en el Centro de

Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas con
la salida del modelo NEDWAN de predicción de
oleaje y del modelo meteorológico UKMO para estos
días, (figura 5), se evidencia un aumento en la altura
del oleaje, así como abundante precipitación
acumulada en milímetros sobre San Andrés Islas,
siendo concordante lo observado con lo pronosticado.

La presión barométrica tuvo un comportamiento

inversamente proporcional a la intensidad de los
vientos. Es decir, a menor presión más inestabilidad
atmosférica que coincide con los registros más
intensos de viento [1].

En la figura 6, se registran los valores medidos de

presión barométrica in situ sobre las islas de
Providencia y Santa Catalina, en forma comparativa
con los valores medidos de viento.
Figura 5. Resultados de los modelos NEDWAN de
predicción de oleaje (Hs) y UKMO de circulación
meteorológica para los días 28 y 29 de octubre de 2005.

67
 Collazos et al.: Estudio descriptivo de la influencia del huracán Beta
Figura 6. Datos comparativos de valores in situ medidos en
Providencia y Santa Catalina de presión barométrica e
intensidad del viento durante el paso del huracán “BETA”.
El impacto ambiental del paso del huracán “BETA”
sobre Providencia y Santa Catalina medido en las
playas y zonas de arrecife fue registrado mediante
visitas de campo de técnicos de la Capitanía de Puerto
de Providencia y Santa Catalina, así como del Grupo
de Coordinación de CORALINA [1].
68
La playa de Sur Oeste así como la de Manzanillo, son
extensiones de terreno no consolidado de
aproximadamente un kilómetro y medio de largo por
400 metros de ancho en promedio, siendo las playas
de mayor importancia de la isla montañosa de
Providencia, límite natural entre el mar y una
considerable zona de manglares y lagunas costeras.
Su importancia es ambiental, social, económica y
cultural, ya que en ella no sólo confluyen importantes
actividades de turismo ecológico y buceo, las carreras
de caballos, las carreras de botes típicos, sino que
también es el punto de encuentro de la comunidad los
fines de semana. Las construcciones que existen sobre
el litoral son kioscos artesanales donde se degusta la
gastronomía isleña. El ecosistema es rico y
abundante, como en la mayoría de la isla, debido a las
grandes extensiones de pastos y praderas marinas, la
cercanía del manglar y de zonas coralinas [1].
Las playas de Sur Oeste y Manzanillo tuvieron un
impacto devastador al paso del huracán “BETA”. La
acumulación de sedimentos y la erosión de la línea de
costa fueron muy evidentes como se observa en la
figura 7.
Figura 7. Acumulación de sedimentos en la playa de
Manzanillo posterior al paso del huracán “BETA”
(fotografía del coautor CC Germán Collazos Guzmán).
Un diagnóstico ambiental inicial elaborado por la
Capitanía, de Puerto de Providencia, Fonade y
Coralina, interinstitucionalmente, valoró la
problemática en:

 Acumulación de escombros (en un 95% de origen
natural).
 Acumulación de peces muertos.
 Erosión pronunciada entre 5 a 8 metros a lo largo de
toda la línea de playa.
 Dinámica oceánica alterada.
 Rompientes de olas aumentadas ante el nuevo perfil
abrupto de la playa, acelerando el transporte de
sedimentos.
 Destrucción del manglar en un 10% en ambas
playas.
 85% de las palmeras de ambas playas destruidas.
Con el paso de los días la humedad relativa alta, la
pluviosidad mantenida y la misma dinámica oceánica
empezaron a ahondar el problema de lixiviados. En
general la materia orgánica inició su proceso de
descomposición trayendo consigo malos olores e
insectos, aumentando los riesgos de enfermedades
infectocontagiosas [1].
Sobre los arrecifes de Providencia, el Grupo de
Coordinación de CORALINA en Providencia, realizó
un inventario posterior al huracán, encontrando que
los mayores daños se presentaron en los parches
arrecifales del norte de la plataforma de Providencia,
entre 0 y 5 m de profundidad. En estas áreas las
colonias presentaban volcamiento, fraccionamiento,
fisuras, desprendimiento y otras estaban
completamente derrumbadas [8].
De igual forma, se observaron fracturas y
desprendimiento de colonias de gorgonáceos y
esponjas. Las colonias volcadas por lo general fueron
aquellas que estaban en los bordes del parche y
correspondieron a colonias de gran tamaño (mayores
de 1 m de diámetro). El fenómeno se presentó
principalmente en el montanius star (Montastrea
faveolata) y el boulder star (Montastrea annularis)
[8].
Del total de las estaciones evaluadas, se observó un
total de 248 colonias de coral impactadas, la mayoría
de ellas en el sector conocido como Twin Shoal que
fue el de mayor impacto, presentando hasta un 20% de
afectación. Parches de coral cercanos como los
encontrados en Ketleena Cay (Basalt key) y Blue
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 61-70 (2007)
Shoal fueron calificados con una afectación del 15%;
mientras que los del sector de White Water Bar Head y
Point of Reef Big Shoal tuvieron un 10 % [8].
Discusión y conclusiones
La información recolectada y analizada del huracán
“BETA”, permite determinar que el fenómeno
meteorológico sobre las islas de Providencia y Santa
Catalina correspondió a un huracán categoría uno
durante el veintiocho y veintinueve de octubre de
2005. Así mismo, que evolucionó a huracán categoría
dos el treinta de octubre en su tránsito hacia las costas
de Centroamérica.
Se observa, al comparar las mediciones efectuadas in
situ con las predicciones efectuadas por la Central de
Pronósticos del Centro de Investigaciones
Oceanográficas e Hidrográficas, que las herramientas
utilizadas actualmente para modelar la circulación
oceánica, el oleaje y las condiciones meteorológicas,
son eficientes y concordantes con la realidad, lo cual
valida los procedimientos y resultados efectuados por
este equipo de trabajo al analizar un fenómeno de esta
envergadura en la distancia.
Existe un comportamiento especial en la naturaleza,
antes del inicio de fenómenos extremos, que pueden
servir de alerta temprana para prever los mejores
cursos de acción. La mayoría está relacionado a
posibles cambios abruptos en los sistemas de
referencia en vuelo en el caso de las aves migratorias,
abundancia de producción primaria en superficie
ocasionada, posiblemente, por las celdas de
circulación oceánica, así como, a una dinámica
oceánica especial.
A pesar de no contar con equipos sofisticados
automáticos en el momento del fenómeno extremo,
las mediciones de la intensidad del viento y la presión
barométrica efectuada por la Capitanía de Puerto en
forma manual, son un aporte sustancial de gran valor
para cuantificar la magnitud real del huracán a su paso
por las islas de Providencia y Santa Catalina.
Los gradientes anormales de temperatura superficial
son una causa determinante para establecer las
posibles rutas de los huracanes. Cuando éstos se
forman en la región oceánica común a Panamá,
Nicaragua y Colombia, la dirección de mayor
69
 Collazos et al.: Estudio descriptivo de la influencia del huracán Beta

probabilidad de ocurrencia es hacia el Archipiélago de Referencias bibliográficas

San Andrés y Providencia, considerando la dinámica
superficial de la corriente del Golfo de México.
El huracán “BETA”, a su paso sobre las islas de
Providencia y Santa Catalina el 28 y 29 de octubre de
2005, es la experiencia más directa en tiempo que ha
tenido Colombia con el paso de un fenómeno extremo,
donde se observaron afectaciones en litorales y en la
zona costera, así como en el ecosistema de todos los
seres vivos.
[1] Collazos G. Siempre estaré en ti. [Libro de superación
personal donde el autor describe el paso del huracán “BETA”
sobre Providencia y Santa Catalina]. Editorial Feriva. 73p.
[2] Unisys Weather Tropical Data Department [On line].
2 0 0 7 f e b 1 . D i s p o n i b l e e n :
http://weather.unisys.com/hurricane/atlantic/index.html.
[3] INSTITUTO GEOGRÁFICO AGUSTÍN CODAZZI.
Descripción del Archipiélago de San Andrés y Providencia.
Bogotá 2007.

[4] Díaz JM, G Díaz-Pulido J, Garzón-Ferreira J, Geister JA,

La geomorfología de islas volcánicas como
Providencia y Santa Catalina tiene una influencia
directa en el movimiento de traslación de un
fenómeno de macro escalas, debido aparentemente a
la fricción de los vientos superficiales con las
elevaciones montañosas y la barrera arrecifal.
Futuros trabajos
Los resultados y conclusiones anteriores se pueden
complementar a futuro con mediciones más
complejas de las nuevas herramientas instaladas en el
Archipiélago de San Andrés y Providencia, posterior
al paso del huracán “BETA”, tales como las estaciones
meteorológicas automáticas de Providencia, Santa
Catalina y Serrana, así como, la boya de medición
oceánica instalada en un punto cercano a Low Cay.
Sánchez y S Zea. 1996. Atlas de los arrecifes coralinos del Caribe
colombiano. Tomo I. Complejos arrecifales oceánicos. Invemar,
Santa Marta. Serie publicaciones especiales 2: 83p.
[5] Márquez JC. Descripción y datos relevantes del medio físico
natural de las islas de Providencia y Santa Catalina. 1994.
[6] Ospina H. Boletín meteomarino del Caribe colombiano.
Octubre 2005.
[7] Ospina H, Muñoz A. Boletín mateomarino del Caribe
colombiano. Enero a octubre 2007.
[8] GRUPO DE COORDINACIÓN DE CORALINA. Inventario
de daños ecológicos causados por el paso del huracán BETA en las
islas de Providencia y Santa Catalina. 2006.

Igualmente, la modelación de la circulación oceánica

utilizando otros modelos como el SLOSH, el
ADCIRC e incluso el mismo SWAN mediante
corridas estacionarias puede aportar un mejor
entendimiento del campo de olas y su impacto en
zonas de mayor envergadura.

Agradecimientos
Los autores desean expresar sus agradecimientos a la
Capitanía de Puerto de Providencia y Santa Catalina,
así como al Grupo de Coordinación de CORALINA y
al Centro de Investigaciones Oceanográficas e
Hidrográficas por proporcionar la información base
del análisis descriptivo de este trabajo de
investigación.

70
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 71-77 (2007)

RESEÑA

Impactos en los arrecifes de coral

ocasionados por el huracán Beta en la
plataforma insular de Old Providence y
Santa Catalina
Impact on the coral reefs caused by the hurricane Beta on
the Old Providence and Santa Catalina Insular Platform

CIOH
Fecha recepción: 2007-09-11 / Fecha aprobación: 2007-10-18

www.cioh.org.co Elizabeth Taylor, elizabeth.taylor@coralina.gov.co

Delis Hernández, delis.hernandez@coralina.gov.co
Fanny Howard, joynell3000@yahoo.com
Giovanna Peñaloza, giovannapen@gmail.com
Santiago Posada, posada_santiago@hotmail.com
Nicasio Howard, nicasiohoward@yahoo.com
Renato Robinson, robinsonrenato@yahoo.com
Martha Prada, pradamc@gmail.com
CORALINA, Vía San Luis, Bight, Km 26, Archipiélago de San Andrés,
Providencia y Santa Catalina, Colombia

Resumen
El pasado 27 de octubre del 2005, el tardío huracán Beta categoría 1 impactó la plataforma insular de las islas de
Old Providence y Santa Catalina durante dos días de vientos fuertes y más de dos semanas de lluvias
persistentes. El huracán Beta tuvo un tamaño pequeño, pero una significativa capacidad destructiva dado que
permaneció estacionario o con mínima velocidad de translación. Utilizando la metodología de muestreos de
observación rápida, los técnicos de la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San Andrés
- CORALINA - estimaron los daños sufridos en los diferentes ecosistemas terrestres, costeros y marinos. En
este trabajo sólo se reportarán los efectos ambientales observados sobre los arrecifes de coral en 11 estaciones a
lo largo de la plataforma insular. En general, se encontraron los mayores daños en los parches coralinos someros
de la sección norte de la plataforma, los cuales tuvieron mortalidades hasta del 20%. Sin embargo, colonias de
gran tamaño sufrieron fracturas, volcamientos, blanqueamiento y otras enfermedades. Los resultados de este
trabajo fueron utilizados para formular acciones posteriores de recuperación.

Palabras clave: Mortalidad corales, efecto huracán, observaciones rápidas.

Abstract
On October 27, 2005, the late hurricane Beta category 1 made impact on the Old Providence and Santa Catalina
and Insular Platform for two days of strong winds and over two weeks of persistent rainfall. Hurricane Beta was
small in size but had a significant destructive capacity due to the fact that it remained stationary or with minimal
translation velocity. Using the quick observation sampling methodology, the San Andres Archipelago
Sustainable Development Corporation technicians -CORALINA- estimated the damages suffered by the
different shore, coastal, and marine ecosystems. In this paper only the environmental effects observed on the

71
 Taylor et al.: Impactos en los arrecifes de coral ocasionados por el huracán Beta

coral reefs at 11 stations along the insular platform
will be reported. In general, the most considerable
damages on the shallow coral patch north the
platform, which had mortalities up to 20%. However,
colonies of great size suffered fractures, overturning,
whitening and other diseases. The findings of this
work were used for further recovery actions.
Key words: Mortality, corals, hurricane effect, quick
observations.
Introducción
La tormenta tropical Beta fue nombrada el 27 de
octubre de 2005 cuando el Centro Nacional de
Huracanes de la NOAA localizaba este fenómeno
climático en las coordenadas 11,5˚ Norte y 81,3˚
Oeste. En ese momento Beta mantenía vientos
sostenidos de 85 km/hora (50 mph) y una presión
atmosférica de 994 mb. Con un movimiento bastante
lento (promedio de 6 km/hora), Beta se fue
desplazando hacia el Norte afectando un área de 95
km alrededor de su centro. Su deriva se mantuvo hacia
el Norte hasta fortalecerse con vientos sostenidos de
100 km/hora.
En el presente trabajo se presenta el esfuerzo de
muestreo hecho por técnicos de CORALINA en su
evaluación rápida de los daños a los corales a lo largo
de la plataforma, la cual constituye parte importante
de la sección central del Área Marina Protegida
SeaFlower. Los resultados sirvieron de guía para la
selección de sitios donde posteriormente se realizó un
proyecto piloto para la restauración de corales.
Área de estudio
La plataforma de Old Providence y Santa Catalina es
alargada y tiene una extensión aproximada de 255 km2.
Su sistema arrecifal está caracterizado por la presencia
de una gran barrera (35 km) que se vuelve discontinua
en dos secciones, formando pináculos bien
desarrollados [1]. El huracán ingresó a la plataforma en
su sección norte atravesándola de Este a Oeste y para
evaluar los daños al coral, se seleccionaron al azar 11
estaciones (figura 1).

Contrario a lo pronosticado y debido a fenómenos de

circulación atmosférica de gran escala al sur de la
Florida, la tormenta continuó su lento movimiento
hacia el Norte-Noreste, y ya para las 11 p.m. de 28 de
octubre de 2005, el centro de Beta fue localizado en las
coordenadas 13,6˚ Norte y 81,4˚ Oeste, es decir, al
norte de la isla de Old Providence, momento en que
empezó a hacer el esperado giro hacia el Norte-
Noroeste. Con este cambio de dirección, Beta cruzó la
plataforma arrecifal de Old Providence y Santa
Catalina en su sección norte con vientos de 110
km/hora (70 mph) y una presión atmosférica de 989
mb. Fue en el amanecer del día 29 de octubre de 2005,
cuando Beta se convierte en un huracán categoría 1
según la escala de Saffir-Simpson, cuando su centro
aparentemente estaba localizado completamente al
norte de Old Providence, pero siendo un fenómeno
casi estacionario, con vientos sostenidos de 130
km/hora (80 mph). Al final del día, Beta incrementa su
velocidad de translación (de 6 a 16 km/hora),
alejándose de las islas con dirección Oeste. Figura 1. Localización del área de estudio.

72

Los hábitats marinos de esta plataforma están sujetos a
tres regímenes de exposición (expuestos, protegidos y
lagunares) y han sido categorizados en siete unidades
principales: parches de coral, ante-arrecife, arrecife
del talud, arrecife de cresta, planos de gorgonios,
pastos marinos y manglares [2]. En general, los
parches de coral y los arrecifes del talud soportan las
máximas riquezas de especies mientras que los del
ante-arrecife [3].
De los monitoreos de CARICOMP, se conoce que el
porcentaje de coral vivo varía entre 1% y 38%
dependiendo del sitio, mientras que la cobertura de
algas es alta comparada con San Andrés a pesar de que
la población de erizos está aumentando [4, 5].
Métodos
La semana comprendida entre el 16 y 22 de noviembre
de 2005, el equipo de técnicos de la Corporación para
el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San
Andrés, Old Providence y Santa Catalina,
CORALINA, realizó una evaluación rápida de los
corales mediante buceo autónomo.
En cada una de las 11 estaciones seleccionadas al azar,
se hizo un recorrido de 20 minutos y dos buzos
experimentados por estación registraron las siguientes
variables: a) tipo de ambiente; b) porcentaje de coral
en el área; c) porcentaje de coral vivo; d) diámetro de
las colonias afectadas; e) porcentaje de
blanqueamiento; f) cobertura total y relativa de algas,
g) porcentaje de cobertura de gorgonios y h)
coordenadas geográficas. Se tomaron fotografías para
crear un reporte gráfico de estos impactos en futuros
estudios.
Resultados
Los mayores daños a los corales se encontraron en los
parches arrecifales del norte de la plataforma de Old
Providence, entre 0 y 5 m de profundidad sobre
colonias de múltiples especies y tamaños. En estas
áreas las colonias presentaban volcamiento,
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 71-77 (2007)
fraccionamiento, fisuras, desprendimiento y otras
estaban completamente derrumbadas. De igual
forma, se observaron fracturas y desprendimiento de
colonias de gorgonáceos y esponjas.
Muchas de las colonias de gran tamaño (mayores de 1
m de diámetro) y que estaban en los bordes del parche
se les encontró volcadas y fracturadas. El fenómeno
se presentó principalmente en el coral llamado
montanius star (Montastrea faveolata) y en el boulder
star (Montastrea annularis).
Un total de 248 colonias de coral se registraron como
impactadas, la mayoría de ellas en el sector conocido
como Twin Shoal que fue el de mayor impacto,
presentando hasta un 20% de afectación (tabla 1,
figura 1). Los parches de coral cercanos como los
encontrados en Ketleena Cay (Basalt key) y Blue
Shoal fueron calificados con una afectación del 15%;
mientras que los del sector de White Water Bar Head y
Point of Reef Big Shoal tuvieron un 10 % (figura 2).
En el sector del “Lagerhead Blof”, localizado en el
Sureste de la plataforma insular, se hizo un recorrido
desde la costa hasta un parche arrecifal de la laguna y
no se encontró ningún parche arrecifal impactado.
También se hizo un recorrido por los complejos de
Acropora palmata del sector y se pudo constatar que
las colonias estaban en perfectas condiciones.
De las estaciones muestreadas, la mayor presencia de
blanqueamiento (20%) fue encontrada en el sitio
conocido como Bar ubicado al Oeste de Old
Providence y en los corales de Point of Reef Big Shoal
y White Water Bar Head los cuales tuvieron un 10%.
En el sitio de buceo conocido como “Channel”, cerca
del canal de navegación, tres colonias bastante
grandes (> 1.5 m de diámetro) de las especies
Dendrogyra cylindrys, Montastrea annularis y
Montastrea faveolata sufrieron volcamiento,
probablemente porque la arena acumulada en sus
bases se erosionó. No obstante, las colonias que
estaban en un área de 200 metros a la redonda no
presentaban impactos evidentes.
73
 Taylor et al.: Impactos en los arrecifes de coral ocasionados por el huracán Beta

Tabla 1. Resumen de la evaluación rápida de daños a los arrecifes de la plataforma de Old Providence y Santa Catalina
con el paso del huracán Beta.

No.
Latitud Longitud % colonias
%
Estación Nombre (decimales (decimales mortalidad afectadas % algas
por blanqueamiento
grados) grados) reciente
estación

1 Point Reef Big Shoal 13.520000 - 81.335667 10 20 10 30

White Water Cross
2 13.461550 - 81.343217 5 10 5 40
Bar
Withe Water Bar
3 13.454033 - 81.348300 10 22 10 30
Head
4 Channel 13.388767 - 81.390633 3 3 5 60
5 Bar 13.371389 - 81.403194 5 5 20 50
6 Blue Shoal 13.426222 - 81.351361 15 10 3 50
7 Tete's Place 13.328139 - 81.411361 5 12 2 30
8 Pinacles 13.387083 - 81.335944 1 16 2 50
More Bar poor
9 13.431722 - 81.343444 5 50 1 40
Correnty
10 Ketleena Cay Bar 13.407972 - 81.365333 15 40 4 60
11 Twin Shoal 13.400333 - 81.360139 20 60 3 60

Figura 2. Ejemplo corales impactados con el paso de la tormenta tropical Beta en la plataforma de Old Providence.
Fotografías tomadas por Giovanna Peñaloza.

74

Fue notoria la disminución de macro-algas en todas
las estaciones, las cuales representaron tan sólo entre
el 15 y 20% de las comunidades bentónicas. Antes del
huracán, los resultados de las estaciones CARICOMP
en Old Providence y Santa Catalina se ha calculado
que la presencia de macro-algas representa entre 40 y
60% [6].
Discusión
Las islas del Archipiélago de San Andrés, Old
Providence y Santa Catalina, localizadas en el Caribe
occidental sufren bajo impacto por huracanes,
comparadas con las localizadas en el Oriente. Sin
embargo, el paso del huracán Beta y los largos
períodos con altas temperaturas superficiales, sin
duda representaron disturbios significativos para los
arrecifes locales.
Figura 3. Estaciones para evaluación de corales mostrando porcentaje de coral afectado (círculos rojos) sobre contornos batimétricos. El
tamaño del círculo indica el porcentaje de afectación. La línea roja identifica el paso aproximado del ojo de la tormenta tropical Beta.
Escala 1:100.000.
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 71-77 (2007)
Estos efectos negativos se observaron, en especial, en
los parches someros que sufrieron en mayor grado los
efectos de las olas y corrientes. A estas causas, se
suma la introducción de grandes cantidades de
sedimentos de origen terrígeno, que aunque no
cuantificados resultaron en el mantenimiento de
condiciones de alta turbiedad durante casi un mes.
La presencia de blanqueamiento en los corales fue un
fenómeno que se había registrado con antelación al
paso del huracán Beta originado por las altas
temperaturas del agua superficial experimentadas
desde junio de 2005. Monitoreos de corales que
CORALINA mantiene en seis estaciones alrededor de
las islas, registraron temperaturas promedio de aguas
superficiales entre 29.5 y 30˚C durante los cinco
meses consecutivos que antecedieron al huracán.
75
 Taylor et al.: Impactos en los arrecifes de coral ocasionados por el huracán Beta
Contrario a la recuperación de corales blanqueados
observada en Belize un mes después del paso del
huracán Mitch [7], el blanqueamiento de los corales de
Old Providence se mantuvo durante los siguientes seis
meses del paso del huracán Beta. De hecho, un estudio
que muestreó más de 22 estaciones en esa plataforma,
reportó la permanencia del blanqueamiento de corales
aun con una afectación del 20% [8].
Los resultados presentados en esta nota coinciden
parcialmente con una evaluación preliminar hecha por
Rodríguez y Reyes-Nivia [9]. Ellos muestrearon 12
estaciones alrededor de la plataforma costera de Old
Providence y estimaron el porcentaje de
blanqueamiento en sólo 10%, calificaron como bajo el
impacto en colonias de Acropora palmata y notaron
desprendimiento de octocorales y esponjas y el
volcamiento de grandes colonias de coral. Así mismo,
determinaron el área de mayor impacto en los parches
arrecifales al norte de Santa Catalina. Sin embargo,
sólo reportaron una mortalidad reciente con un
máximo del 10% dado que no visitaron las áreas más
distantes de la plataforma, que sufrieron un mayor
impacto.
Siguiendo recomendaciones de sus técnicos y con
apoyo del Ministerio del Medio Ambiente, Vivienda y
Desarrollo Territorial, CORALINA realizó un
proyecto piloto para recuperar algunas de las colonias
desprendidas del fondo, especialmente aquellas de
tamaño mediano [10].
Es importante continuar monitoreando la condición
de salud de los arrecifes coralinos en la plataforma
insular de Old Providence y Santa Catalina de modo
que los resultados obtenidos puedan extender su
escala temporal. Ya se tiene información para analizar
el grado de recuperación natural o el efecto de nuevos
impactos negativos causados por fenómenos
naturales, incluyendo el aumento de temperatura
superficial del agua, gracias a la red de monitoreo de
corales que se lleva a cabo en el Archipiélago de San
Andrés.
76
Agradecimientos
Este estudio fue hecho gracias a aportes hechos por el
Fondo de Compensación Ambiental del Ministerio de
Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial y con
recursos propios de CORALINA.
Referencias bibliográficas
[1] Díaz JM, Barrios LM, Cendales MH, Garzón-Ferreira J,
Geister J, López-Victoria M, Ospina GH, Parra-Velandia F,
Pinzón J, Vargas-Ángel B, Zapata FA y Zea S. 2000. Áreas
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Publicaciones Especiales, 5: 175p.
[2] Márquez G. 1987. Las comunidades marinas p.p.45-53. En:
Universidad Nacional de Colombia (Ed). Las islas de Old
Providence y Santa Catalina, ecología regional. Fondo FEN,
Colombia. Bogotá. 110 p.
[3] Friedlander A, Nowlis J, Sánchez JA, Appeldoorn RS,
McCormik C, Bejarano S and Mitchell A. 2003. Designing
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77
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)

ARTÍCULO

Metodología para la calificación y control de

calidad de datos oceanográficos aplicada al
Crucero Caribe 2002
Methodology for rating and controlling the quality of
oceanographic data applied to the Cruise Caribe 2002
Fecha recepción: 2007-09-05 / Fecha aceptación: 2007-09-27

CIOH
www.cioh.org.co Carlos Romero Balcucho
Carlosaugustoromero@yahoo.com
Grupo de Investigación en Oceanología, Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla”,
Cartagena de Indias
Leonardo Marriaga Rocha
lmr666@hotmail.com
Grupo de Investigación en Oceanología, Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla”,
Cartagena de Indias
Rafael Ricardo Torres Parra
rtorres@cioh.org
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas, Cartagena de Indias

Resumen
El análisis de los parámetros establecidos internacionalmente para compartir la información oceanográfica y la
revisión de los datos recolectados por los centros de investigación de la Dirección General Marítima,
permitieron elaborar una metodología para procesar datos oceanográficos tomados por CTD, que le permita al
usuario o investigador alcanzar datos de buena calidad para ser utilizados en investigaciones o proyectos
oceanográficos. Se revisaron metodologías aplicadas por algunos de los centros de investigación oceanográfica
mas importantes a nivel mundial. Se efectuó una revisión de la información recolectada por el Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas de Colombia (CIOH), durante los cruceros que han sido
realizados hasta el año 2006. Lo anterior permitió presentar una propuesta metodológica para el control de
calidad de datos oceanográficos de temperatura y salinidad obtenidos con CTD, empleando un programa en el
que el usuario interactúa en los diferentes niveles de control de calidad. Esta metodología fue aplicada a los datos
del Crucero Caribe 2002, eliminándose los errores contenidos en la información del crucero para finalmente ser
desplegada en gráficas y realizar el análisis oceanográfico respectivo.

Palabras clave: Datos oceanográficos, CTD, metodología, calidad, MATLAB.

Abstract
The analysis of the parameters internationally established to share the oceanographic information and the
reviewing of the data gathered by the Maritime General Direction research centers, permitted the elaboration of
a methodology to process oceanographic data taken by CDT, which permit the user or researcher to get good
quality data to be utilized in oceanographic research or projects. Methodologies applied by some of the
worldwide most important oceanographic research centers were reviewed. A revision of the information
gathered by the Colombia Oceanographic and Hydrographic Research Center (CIOH) was undertaken, during

78

the cruises carried out up to 2006. The foregoing
permitted the submission of a methodological
proposition for the oceanographic data on
temperatures and salinity quality control obtained
with DT, using a program in which the user interacted
within the different quality control levels. This
methodology was applied to the Cruise Caribe 2002
data, eliminating the errors contained in the cruise
information to finally have it displayed in graphs and
carry out the corresponding oceanographic analysis.
Key words: Oceanographic data, CTD, methodology,
quality, MATLAB.
Introducción
Teniendo en cuenta el avance de la Oceanografía, en
especial el aumento en la cobertura espacial y las
diferentes fuentes de datos, los investigadores
actualmente dependen de la disponibilidad de un
sistema de intercambio internacional que provea datos
e información de todas las fuentes disponibles.
Adicionalmente, los científicos que estudian procesos
locales se benefician sustancialmente con el acceso a
datos recolectados por otros países o entidades en su
área de interés.
La realización de un trabajo como el control de calidad
de datos oceanográficos, es necesaria en el país debido
a que Colombia está invirtiendo gran cantidad de
recursos anualmente en desarrollo de cruceros,
obteniendo información que no está siendo
aprovechada en todo su potencial para la realización
de proyectos de investigación, pues se desconoce la
calidad de los datos obtenidos de una manera
cuantitativa y estandarizada. Además, no puede
ofrecer su información al programa IODE [1],
encargado del intercambio de este tipo de información
[2].
Esta problemática fue identificada por la Dirección
General Marítima, quien es la directa responsable del
manejo de los datos oceanográficos. Debido a esto, el
CIOH está adelantando el proyecto denominado
RETROCEAN (Recuperación y control de calidad de
datos oceanográficos), cuyo objetivo es dar una
calificación a los datos con los que actualmente se
cuenta [3, 4].
Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.
El presente artículo nace de la presentación del trabajo
de grado para aspirar al título de Oceanógrafo Físico
de dos de los autores y se enmarca como un aporte al
proyecto “RETROCEAN” haciendo parte primordial
de la fase II, el cual busca hacer un estudio de los
estándares de calidad exigidos internacionalmente,
recopilar los procedimientos y finalmente presentar
como propuesta un programa de Control de Calidad
de Datos Oceanográficos (CCDO_CIOH), acorde a
nuestras condiciones y verificar su aplicación en el
Crucero Caribe 2002, cuyo objetivo fue la recolección
de datos in situ de temperatura superficial del mar
para el tratamiento de imágenes satelitales (TSS
AVHRR) para ser usados en un modelo de búsqueda,
rescate y seguimiento de un artefacto flotante, dentro
del marco del proyecto “Modelos Numéricos
Aplicados a Operaciones Navales de Búsqueda y
Rescate Fase III”. Finalmente la aplicación del mostró
su aplicabilidad en el desarrollo del análisis
oceanográfico del área.
De manera general, en el proceso de control de calidad
de datos oceanográficos se pueden distinguir cinco
fases, que coinciden internacionalmente, como son,
planeamiento previo a la recolección de datos, control
de aspectos importantes durante el crucero, control
sobre la calibración, respuesta del sensor y
procesamiento inicial de los datos y finalmente la fase
de postprocesamiento [5]. Esta última tiene en cuenta
el establecimiento de verificaciones tanto a nivel
crucero, como a nivel estación.
En desarrollo de la investigación se analizaron las
metodologías utilizadas en algunos de los centros de
datos más importantes a nivel mundial, entre las que
se pueden contar la utilizada por el observatorio de
Saint Lawrence en Canadá, para validación de
parámetros físicos, quienes dividen su metodología
en cinco pasos a saber: 1) Pruebas de validación con la
METADATA como el tiempo y las posiciones, 2)
Pruebas de comparación de valores de datos dentro de
un perfil, 3) Comparación de los perfiles con la
climatología, 4) Comparación de un perfil con otros
perfiles de la misma misión (crucero) y 5) Inspección
visual de la ruta del crucero y de otros perfiles del
mismo [6]; Así mismo la metodología para el control
de calidad de boyas Argos empleada por el Instituto
Francés de Investigación para la Explotación del Mar,
IFREMER, quienes para este caso establecieron
cuatro niveles de control de calidad, a saber:
79

1) Verificación de los formatos, códigos e información
completa, 2) Verificación de la fecha, ubicación y
duplicidad de posiciones, 3) Verificación de los datos
y finalmente 4) Chequeo visual [7]; por otra parte se
analizó la metodología utilizada en el proyecto de
investigación a escala de la cuenca del mediterráneo
“ E U - M A S T / M AT E R ” d e s a r r o l l a d a
interinstitucionalmente por el IFREMER, el NCMR
(Greek National Center for Marine Research), el OGS
(L'Istituto Nazionale di Oceanografia e di Geofisica
Sperimentale) y la Universidad Autónoma de
Barcelona [8]. Finalmente se analizó la metodología
empleada en el Laboratorio del Clima del Océano del
Centro Mundial de Datos Oceanográficos en Silver
Spring, la cual tiene en cuenta los siguientes niveles de
control: conversión del formato, chequeo de la
posición/fecha/tiempo, asignación de crucero y
número de lanzamiento, chequeo de la velocidad,
chequeo de duplicidad, chequeos de inversión y
duplicidad de profundidad, chequeos de pares de alta
resolución, chequeo de rangos en datos a niveles
observados, chequeo de gradiente excesivo, chequeo
de densidad para niveles observados, interpolación
vertical, chequeo de densidad a niveles estándar,
análisis estadístico de datos a niveles estándar y
análisis objetivo [9, 10].
Materiales y métodos
Crucero Caribe 2002
Realizado desde el 26 de noviembre hasta el 7 de
diciembre de 2002 por el B.O A.R.C “Malpelo”,
perteneciente a la flotilla de buques oceanográficos
del Centro de Investigaciones Oceanográficas e
Hidrográficas (CIOH), efectuando en total 97
estaciones de las 123 planeadas, de las cuales, 74
contaron con lanzamientos de CTD. Las condiciones
oceanográficas adversas reinantes en el área durante el
período del levantamiento no permitieron el
lanzamiento del CTD en todas las estaciones dentro de
los márgenes mínimos de seguridad para el personal y
el material. Así mismo, se otros datos biológicos. Para
la toma de los parámetros oceanográficos se empleó
un CTDO SEACAT SBE 19, un disco Secchi, un
termómetro de cazoleta, un termómetro de
temperatura húmeda, un termómetro de temperatura
seca y un anemómetro [11].
80
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)
Metodología
Se elaboró una metodología apoyada con un
programa realizado con el software MATLAB, de
manera tal, que se guía al usuario o investigador
dentro de un proceso de control de calidad estándar,
para que sea éste quien finalmente, decida que hacer
con cada uno de los datos que no superen los chequeos
propuestos. El programa, que se denominó CCDO-
CIOH, debe ser utilizado por oceanógrafos o
profesionales capacitados, quienes durante el
desarrollo de sus propias investigaciones, no cuenten
con certeza en la calidad de los datos con que trabajan,
decidirán el tratamiento a las inconsistencias
encontradas, dando como producto final los datos que
superaron los filtros evitando el uso de banderas de
calidad.
Se limitó la aplicación de la metodología a tres
variables básicas en oceanografía física como son:
profundidad, temperatura y salinidad, tomadas con un
perfilador tipo CTD.
Durante el procesamiento inicial, se realizan una serie
de tratamientos estadísticos y filtros realizados con el
SBE DATA PROCESSING, lo que garantiza la
eliminación de ruido propio de la señal capturada por
el sensor del CTD y la calibración in situ de los
perfiles de T y S, tal como lo presentó Andrade en el
año 2004 [12]. Este procesamiento inicial debe ser
realizado completa y adecuadamente, ya que su
importancia radica en ser el primer punto de control y
está basado en las recomendaciones del fabricante,
con lo cual en esta etapa se asegura gran parte del
control de calidad. Finalizada la etapa de
procesamiento inicial, se cuenta con archivos con
extensión “.cnv”.
Para poder aplicar la metodología propuesta a los
datos, se estableció una configuración estándar de los
archivos; estos requerimientos son desplegados en
pantalla al usuario una vez ingresa al programa y son
los siguientes:
1. Los archivos con la información de las
estaciones deben estar en el formato cnv, luego
de la etapa de procesamiento inicial realizada
con el software SEASOFT del CTD.
2. El header del archivo debe eliminarse y
solamente contendrá la información numérica,

por lo que es necesario se trabaje con una copia
de los archivos de las estaciones para no dañar la
información original.
3. De las matrices con la información de las
estaciones se deben eliminar las filas que
contengan valores negativos en la columna de
presión, ya que representan momentos en que el
ctd se encuentra fuera del agua.
4. De las matrices con la información de las
estaciones se deben eliminar las filas que
correspondan a los momentos en que el ctd se
encuentra siendo izado a la superficie (tomando
datos en la dirección de subida) eso se observa
fácilmente ya que los valores de la columna de
presión comienzan a disminuir en vez de
aumentar.
5. Los nombres de las estaciones deben tener 6
caracteres antes del punto y la extensión .cnv por
ejemplo: est005.cnv.
6. Se debe crear un archivo con extensión .dat que
contenga un listado con los nombres de las
estaciones a aplicarles el control de calidad, a
este archivo se le debe llamar "estaciones.dat" y
se debe tener en cuenta que debe estar en la
misma carpeta en la que se está trabajando el
programa, la cual, también debe contener las
estaciones.
7. Se debe crear un archivo con extensión .dat que
contenga un listado de las posiciones de las
estaciones (en décimas de grado), el cual deberá
estar incluido en la misma carpeta donde se está
trabajando este archivo debe tener como nombre
"posiciones.dat". Su columna 1 corresponderá a
las latitudes y su columna 2 corresponderá a las
longitudes. Además se debe tener cuidado, ya
que el orden de las posiciones será el mismo
orden en que se listaron las estaciones en el
archivo de estaciones. Esta información de
latitud y longitud debe ser tomada directamente
del header del archivo que entrega el ctd y
confirmada con la metadata disponible.
8. Se debe tener el toolbox “seawater” cargado en
el path de Matlab.
Posteriormente, al haber cumplido estos
requerimientos, se efectúan las siguientes
verificaciones y correcciones, asegurando la calidad
de los datos finales:
Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.
Primer nivel. Inspección visual de las estaciones
Se realiza despliegue gráfico, en el cual el usuario o
investigador tiene la visión de la posición de las
estaciones, en planta, detectando posiciones erróneas.
Combinando esta gráfica con el conocimiento que ha
adquirido el investigador de la información de la
metadata, se consolida la comprensión que se tiene
del crucero en estudio.
Segundo nivel. Verificación de duplicidad de
estaciones
El programa verifica las estaciones mediante la
comparación de las mismas entre sí, detectando si una
pareja de datos latitud-longitud es idéntica a otra. En
caso de encontrar duplicidad, el usuario deberá
verificar sus datos y decidir si los tiene en cuenta o no
dentro del desarrollo de su análisis.
Tercer nivel. Verificación de duplicidad de
profundidades
Este punto marca el inicio de las verificaciones a nivel
estación. Una duplicidad de profundidad ocurre
cuando una lectura de profundidad tiene el mismo
valor de otra lectura en la misma estación. De
encontrar profundidades duplicadas la metodología
presenta al usuario cuatro opciones a seguir: tomar
solamente el primer dato, promediar los valores,
eliminar todos los valores o salir del programa para
verificar.
Cuarto nivel. Verificación de inversión de
profundidades
Una inversión ocurre cuando una lectura de
profundidad, tiene un valor mucho menor que el de la
lectura que la precede. En caso de encontrar inversión,
la metodología ofrece al usuario dos opciones, como
son: eliminar la inversión o salir del programa para
verificar. Para lograr esto el programa desplega en
pantalla el o los niveles donde se encontró la
inversión.
Quinto nivel. Verificación de rangos de
temperatura
Con el fin de verificar si los valores obtenidos, en cada
una de las estaciones, se encuentran de acuerdo a la
climatología del área de estudio. Se optó por dar la
opción al usuario o investigador de establecer o
introducir los límites superior e inferior de
temperatura. En caso de no tener información
climatológica concreta del área, como es el nuestro, al
81
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)

programa se le introdujo una opción para que el
usuario utilice los rangos predefinidos del WOD05
(climatología de Levitus) [9, 10, 13].
De encontrar valores de temperatura por fuera de los
rangos, el usuario tiene dos opciones como son:
eliminar la fila en donde se encuentra este valor o salir
del programa para verificar.
Como es sabido, la climatología de Levitus pudiera no
ser de mucha utilidad en áreas muy cercanas a la costa.
Sin embargo, para casos en que no se cuente aun con el
conocimiento completo de la climatología del área,
por lo tanto no se tengan rangos concretos de variación
de parámetros, utilizar la climatología de Levitus
podría ser una buena primera aproximación al
resultado esperado, por lo tanto aportaría a sentar las
bases del control de calidad.
“excesivo” fue tomado del World Ocean Database
2005 (WOD05), en el cual se establece un valor
máximo aceptable de inversión (MVI) y un valor
máximo aceptable de gradiente (MVG),
discriminando además entre valores para
profundidades superiores e inferiores a 400 m y se
pueden apreciar en la tabla 1 [9, 13].
En caso de encontrar alguna inversión o gradiente
excesivo, el usuario puede eliminar la fila en donde se
encuentra este valor o salir del programa para
verificar las posibles causas.
Tabla 1. Máximos factores de gradiente e inversión usados
en el WOD05.
MVI MVG MVI MVG
VAR IABLE
(< 400m) (< 400m) (> 400m) (> 400m)

Temperatura 0.3 0.7 0.3 0.7

Sexto nivel. Verificación de rangos de salinidad
Análogamente con el nivel anterior, se realiza la Salinidad 9.0 9.0 0.05 0.05
misma verificación pero esta vez con respecto a la
salinidad, con las mismas opciones de elección que en
el nivel anterior.
Octavo nivel. Verificación de densidad en niveles
Séptimo nivel. Verificación de gradientes excesivos observados
de temperatura y salinidad Se realiza para localizar inversiones de densidad y
Por definición “gradiente excesivo” es un consiste en calcular la estabilidad estática de manera
decrecimiento excesivo, en el valor del parámetro, local en cada estación. La estabilidad se calcula bajo
respecto de la profundidad (usualmente valor la formulación empleada por Lynn y Reid (1968) [14]:
negativo); y una “inversión excesiva” es un
incremento excesivo, en el valor del parámetro,
respecto de la profundidad (usualmente es un valor
positivo). Aplicando la formulación:

donde,

Donde: , Profundidad en metros.

Valor de la variable en la profundidad del nivel
actual.
Valor de la variable en siguiente nivel de
profundidad.
Profundidad en metros del nivel actual.
Profundidad en metros del siguiente nivel.
En la aplicación de la anterior formulación se tuvo en
cuenta que el programa tome para el cálculo de la
densidad como valores de temperatura, salinidad y
presión, los que ya han superado las anteriores siete
verificaciones.

Se asumió el error asociado al equipo como poco Como criterios de valores máximo y mínimo de
representativo. El criterio utilizado para definir estabilidad se utilizaron los establecidos por Pond y

82

Pickard (1983) [15], según los cuales, en el océano
abierto en los primeros 1.000 metros, los valores de
-8 -1
estabilidad están en el orden de 100 x 10 m y 1000 x
-8 -1
10 m . Actualmente no se cuenta con valores típicos
de estabilidad para el Caribe colombiano, en océano
abierto ni en zona costera, por lo que fueron tomados
los anteriormente descritos. Sin embargo, como se
verá más adelante, será necesaria una revisión más
profunda de este aspecto.
En caso de encontrar inestabilidad, se sugiere al
usuario la verificación de los datos y el análisis de la
situación.
En general las verificaciones realizadas desde el tercer
nivel hasta este punto, van acompañadas con
graficación automática, nivel por nivel, de los perfiles
de las variables, lo cual facilita al usuario del
programa la toma de decisiones con respecto de la
posible eliminación de datos durante el análisis.
Noveno nivel. Interpolación a niveles estándar
Cualquier valor que no superó las anteriores
verificaciones, no fue tenido en cuenta durante la
interpolación.
El método de interpolación usado es un esquema de
Reiniger-Ross (1968) modificado [16], que utiliza los
cuatro valores observados que rodean un nivel de
profundidad estándar al cual se hará la interpolación,
dos sobre el nivel estándar y dos por debajo de él.
Computando dos interpolaciones de Lagrange de tres
puntos, los dos valores interpolados son promediados
y este resultado se tomó como el valor del parámetro
en el nivel estándar deseado.
Solamente se tuvieron en cuenta profundidades
estándar hasta el nivel 17, debido a las actuales
restricciones en la toma de datos por longitud de la
guaya de los buques oceanográficos pertenecientes a
la DIMAR.
Décimo nivel. Verificación de estabilidad a niveles
estándar
Se realizó análogamente al procedimiento establecido
en el octavo nivel de control de calidad, excepto que el
Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.
diferencial de profundidades se realiza entre los
niveles estándar.
Decimoprimer nivel. Verificación estadística en
niveles estándar
Este nivel pretende descartar los valores no
representativos y verificar la consistencia de los datos
del crucero entre las estaciones. Para lograrlo, se
calcula la media y las desviaciones estándar de los
datos. Conocida esta información se estableció como
criterio para el análisis de la información que aquellos
datos cuya desviación estándar estuviera por encima
de tres desviaciones estándar del proceso, fueran
considerados por fuera de los límites aceptables como
de buena calidad.
Resultados
Una vez definida la metodología a seguir, era
necesario aplicarla a datos reales tomados en
campañas oceanográficas, con el fin de observar los
resultados de su aplicación. Como ya se mencionó, se
seleccionaron los datos obtenidos en desarrollo del
crucero “Caribe 2002” almacenados en la base de
datos del CIOH, tomando los archivos ya procesados
con el software del Seabird [12]. Inicialmente se
observó que tanto la estación 015 como la estación
120, contenían solamente una fila de datos; así
mismo, las estaciones 041 y 042, se encontraron con
información tomada en la dirección de ascenso del
CTD. Con el fin de aprovechar la información
obtenida se invirtió la dirección de los datos, teniendo
en cuenta que para el caso en que el equipo se
encuentre bien calibrado, el sentido en que hayan sido
capturados los datos no es tan relevante.
Detectadas estas falencias, se determinó dar una
calificación de estación errada y no incluir en el
desarrollo del control de calidad a las estaciones 015 y
la 120.
Posteriormente el programa ingresa al primer nivel de
control de calidad, en donde se despliega visualmente
la gráfica de la ubicación de las 72 estaciones en el
Mar Caribe (figura 1).
83

Figura 1. Gráfica elaborada por el programa CCDO-CIOH.
En el segundo nivel de control de calidad, el programa
CCDO-CIOH nos muestra que hay una inconsistencia
en la posición de las estaciones 095 y 115, ya que
ambas cuentan con la misma ubicación (figura 2). Una
vez revisada la información del crucero y teniendo en
cuenta que para la fecha de realización de la estación
115 las condiciones meteorológicas eran adversas, se
determinó no procesar dicha estación, con el fin de no
arriesgar el control de calidad por considerar dudosa la
información con la que ésta cuenta.
Figura 2. Estaciones duplicadas que detecto el programa.
Luego de reiniciar el programa de control de calidad,
nos muestra los nombres de los archivos de las
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Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)
estaciones y su cantidad, que ahora es de 71. El
programa pasa el primer y segundo control de calidad,
esta vez sin ningún inconveniente.
Posterior a la aplicación de estos dos niveles de
control, se establecieron los rangos de los valores de
salinidad y temperatura, para lo cual se escogieron los
establecidos por el World Ocean Atlas (Levitus) [9,
13], teniendo en cuenta su fiabilidad.
El programa CCDO-CIOH ejecuta los niveles de
control de calidad, desde el tercero al décimo,
estación por estación. Desplegando, inicialmente, una
gráfica donde muestra la ubicación de la estación y se
puede corroborar visualmente que coincida con la
ubicación de las estaciones del crucero (figura 3). De
igual manera, en el desarrollo de las verificaciones a
nivel estación, el programa entrega una gráfica de los
perfiles de los parámetros analizados, con el fin de
presentar una ayuda gráfica al usuario para la toma de
decisiones hacia el posible encuentro de novedades en
los datos o simplemente para observar como mejora el
perfil al superar esta estación las verificaciones
sometidas.
Figura 3. Gráfica de ubicación de la estación a procesar.
En la tabla 2, se puede apreciar un resumen de las
alertas entregadas por el programa en cada uno de los
niveles de control de calidad, para cada una de las
estaciones que conforman el crucero Caribe 2002.
 Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.

El análisis estadístico del crucero, fue superado sin
presentar ningún reporte o dato por fuera de las
desviaciones estándar establecidas.
El programa CCDO-CIOH crea, automáticamente,
dos archivos tipo Excel, en la misma carpeta en la que
está instalado y corriendo el mismo, estos archivos
contienen la matriz de datos de temperaturas y
salinidades. En estas matrices, la primera columna
indica los niveles de profundidad estándar y
subsecuentemente cada una de las filas contiene los
datos correspondientes a ese nivel, de igual manera, a
partir de la segunda hasta la última, cada columna
representa una estación.
Superados todos los niveles de control de calidad, el
programa CCDO-CIOH realiza una gráfica del
crucero en la cual se presentan las curvas de salinidad,
temperatura, diagrama T-S y gráfica del crucero (fig.
4).

Tabla 2. Alertas entregadas por el programa entre el tercer y el décimo nivel.

TERCER CUARTO QUINTO SEXTO SÉPTIMO OCTAVO NOVENO DÉCIMO

No. ESTACIÓN
NIVEL NIVEL NIVEL NIVEL NIVEL NIVEL NIVEL NIVEL

1 EST001 4 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso Exitoso

2 EST002 3 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 3 Exitoso E xitoso
3 EST003 4 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 4 Exitoso Exitoso
4 EST004 3 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 3 Exitoso Exitoso
5 EST005 5 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso Exitoso
6 EST006 6 1 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
7 EST007 6 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
8 EST008 11 1 Exitoso Exitoso 1 5 Exitoso 1
9 EST009 4 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
10 EST010 3 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso Exitoso
11 EST011 25 Exitoso Exitoso Exitoso 12 2 Exitoso 1
12 EST012 78 1 Exitoso Exitoso 14 1 Exitoso Exitoso
13 EST013 37 2 Exitoso Exitoso 16 6 Exitoso Exitoso
14 EST014 24 1 Exitoso Exitoso 17 1 Exitoso Exitoso
15 EST15B 5 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
16 EST016 12 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 3 Exitoso Exitoso
17 EST017 1 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso 1
18 EST018 31 2 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso Exitoso
19 EST019 2 1 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
20 EST020 61 2 Exitoso Exitoso 1 1 Exitoso Exitoso
21 EST021 13 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
22 EST022 16 1 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso 1
23 EST025 130 2 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 2
24 EST026 148 3 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 1
25 EST027 49 2 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso 1
26 EST029 106 4 Exitoso Exitoso 6 Exitoso Exitoso 1
27 EST030 6 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso Exitoso
28 EST031 19 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
29 EST032 7 Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso Exitoso Exitoso

30 EST033 94 8 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso

85
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)

31 EST034 1 4 Exitoso Exitoso 9 5 Exitoso Exitoso

32 EST035 17 2 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso Exitoso
33 EST036 46 2 Exitoso Exitoso 8 Exitoso Exitoso 1
34 EST037 4 Exitoso Exitoso Exitoso 1 1 Exitoso 1
35 EST038 6 1 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso
36 EST039 7 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso Exitoso
37 EST040 13 1 Exitoso Exitoso 4 3 Exitoso Exitoso
38 EST041 112 Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso Exitoso 1
39 EST042 152 4 Exitoso Exitoso 8 Exitoso Exitoso 2
40 EST043 97 Exitoso Exitoso Exitoso 4 Exitoso Exitoso Exitoso
41 EST050 49 4 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exi toso
42 EST051 240 14 Exitoso Exitoso 9 2 Exitoso Exitoso
43 EST057 5 Exitoso Exitoso Exitoso 3 3 Exitoso Exitoso
44 EST058 54 4 Exitoso Exitoso 16 Exitoso Exitoso 1
45 EST059 80 5 Exitoso Exitoso 13 4 Exitoso Exitoso
46 EST060 141 4 Exitoso Exitoso 12 Exitoso Exitoso Exitoso
47 EST061 145 6 Exitoso Exitoso 8 2 Exitoso Exitoso
48 EST062 5 1 Exitoso Exitoso 7 1 Exitoso Exitoso
49 EST063 217 19 Exitoso Exitoso 11 Exitoso Exitoso 2
50 EST078 91 18 Exitoso Exitoso 4 Exitoso Exitoso Exitoso
51 EST079 1 55 10 Exitoso Exitoso 12 Exitoso Exitoso 3
52 EST081 32 5 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso 1
53 EST082 8 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso Exitoso
54 EST083 61 3 Exitoso Exitoso Exitoso 2 Exitoso 3
55 EST084 14 2 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso Exitoso
56 EST085 9 Exitoso Exitoso Exitoso 1 3 Exitoso Exitoso
57 EST086 49 2 Exitoso Exitoso 7 Exitoso Exitoso 3
58 EST087 78 1 Exitoso Exitoso 3 1 Exitoso Exitoso
59 EST088 198 8 Exitoso Exitoso 7 Exitoso Exitoso Exitoso
60 EST089 221 10 Exitoso Exitoso 8 Exitoso Exitoso 2
61 EST095 62 10 Exitoso Exitoso Exitoso 1 Exitoso 3
62 EST111 61 9 Exitoso Exitoso 5 Exitoso Exitoso 4
63 EST112 312 28 Exitoso Exitoso 28 3 Exitoso Exitoso
64 EST113 166 27 Exitoso Exitoso 19 Exitoso Exitoso 4
65 EST114 83 9 Exitoso Exitoso Exitoso 6 Exitoso Exitoso
66 EST117 17 2 Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso Exitoso 3
67 EST118 11 2 Exitoso Exitoso Exitoso 8 Exitoso 3
68 EST119 133 4 Exitoso Exitoso 9 Exitoso Exitoso 3
69 EST121 71 1 Exitoso Exitoso 8 Exitoso Exitoso 1
70 EST122 81 3 Exitoso Exitoso 10 1 Exitoso Exitoso
71 EST123 44 Exitoso Exitoso Exitoso 8 Exitoso Exitoso 1

86

Figura 4. Curvas finales del Crucero Caribe 2002
realizadas por el programa CCDO-CIOH.
Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.
Discusión
Aplicación programa CCDO-CIOH
Se logró observar la ventaja de trabajar con el
lenguaje de programación MATLAB frente a otros
programas, teniendo en cuenta las facilidades que este
ofrece para la presentación de información gráfica.
Entre estas facilidades tal vez la más relevante
consistió en que no fue necesario remitir la
información al disco duro en nuevos archivos para
poder utilizarla posteriormente en la graficación.
El programa CCDO-CIOH brinda al usuario la
posibilidad de decidir, entre varias opciones, que
hacer con los datos que no superen, por cualquier
motivo, alguno de los niveles de control de calidad.
Por esta misma razón, la interacción usuario-
programa es completa requiriendo dedicación
exclusiva y concentración del usuario, ya que los
lapsos de tiempo entre preguntas del programa y
muestra de resultados gráficos son cortos.
El ítem anterior podría ser irrelevante para cruceros
con poca cantidad de estaciones, sin embargo, para
cruceros como el Crucero Caribe 2002, que contó con
71 estaciones óptimas para analizar, podría llegar a ser
un poco tedioso. Una opción aplicable, consiste en
hacer unas modificaciones sencillas al código fuente,
dejando fijas las opciones de selección escogidas por
el usuario. Esto hace que el programa se ejecute
automáticamente, pero deteniéndose en cada
despliegue de gráficas, buscando que el usuario pueda
apreciar la variación en las mismas posterior al paso
por cada nivel.
Si el usuario, desea efectuar comparaciones entre una
estación y otra simplemente no deberá cerrar las
ventanas de las gráficas. Al cambiar de estación y
hacer el despliegue gráfico, el programa CCDO-
CIOH automáticamente sobrepondrá el nuevo perfil
en la misma gráfica sin borrar el anterior.
Durante el desarrollo de los distintos niveles de
control de calidad, en el despliegue de los perfiles de
salinidad, se pudo observar que las curvas no
aparecen suavizadas. Esto se atribuye, en primera
instancia, al empleo de los rangos de Levitus para la
verificación, debido a que la Región Caribe está
incluida en lo que para el WOD05 es denominado la
región del Atlántico Norte que abarca todo el Océano
87
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)

Atlántico desde la línea del Ecuador hasta latitudes
aproximadas a los 65º N, lo cual, como se puede
apreciar, constituye una extensión demasiado amplia,
haciendo que los rangos de salinidad sean igualmente
amplios. A pesar de esto, al convertir los datos a
profundidades estándar, esta posible falencia queda
superada. En general será necesario profundizar en el
conocimiento claro de la climatología propia del
Caribe colombiano con el fin de utilizar rangos
propios originados en esta climatología y no
remitirnos a los rangos de Levitus.
de lo cual se puede inferir que el período
climatológico durante el desarrollo del crucero
corresponde a una transición entre la finalización de la
época húmeda, caracterizada por vientos débiles de
orientación variable y régimen de lluvias abundantes,
y el inicio de la época seca, caracterizada por vientos
fuertes del sector norte noreste y lluvias débiles
escasas, razón por la cual durante la toma de
estaciones se registraron valores de velocidad del
viento que variaron entre los 0.5 m/s y los 16.0 m/s.

Una vez se realice una verificación de la climatología

del Mar Caribe colombiano, la cual tenga en cuenta la
estacionalidad, será necesario analizar nuevamente la
medida estadística utilizada para la ejecución del
décimo nivel de control de calidad. Actualmente se
establece una verificación que implica que los valores
por encima de tres desviaciones estándar son
considerados fuera del rango y por tanto erróneos.

Análisis oceanográfico general del Crucero Caribe

2002, como ejemplo de la aplicación del programa
CCDO-CIOH
A fin de comprobar la efectividad de la aplicación de la
metodología propuesta y de su respectiva
automatización mediante el programa CCDO-CIOH,
se utilizaron los datos del Crucero Caribe 2002, con el
fin de aplicarla. Luego de la cual, se desarrolló un
análisis oceanográfico básico a fin de corroborar si el
comportamiento de los datos calificados correspondía
a lo esperado para la Región del Caribe colombiano en
la época anual de la toma de datos. Para esto se
tomaron dos transectos a lo largo de la costa Caribe
colombiana, conformados por estaciones
completamente verificadas con el programa CCDO-
CIOH, con el fin de tener una apreciación general y
básica de las condiciones oceanográficas del área del
crucero. El primer transecto se denominó “A” y se
tomó lo más cercano posible a la línea de costa y un
segundo transecto denominado “B” a una mayor
distancia de la misma.
Figura 5. Transecto “A” Crucero Caribe 2002.
Para la temperatura se observa una distribución
acorde a lo esperado en la vertical, sin embargo la
distribución horizontal, a lo largo del transecto varía
en descenso desde la estación No. 1 ubicada frente al
Golfo de Urabá hasta la estación No. 123, ubicada
frente a la Península de la Guajira, como se puede
apreciar en la figura 6. Este fenómeno probablemente
es causado por el ascenso de masas de agua, debido al
incremento de la intensidad de los vientos
provenientes del Noreste, dando inicio al fenómeno
conocido como surgencia costera.

Transecto “A”
En promedio el transecto “A” está ubicado a unas 8
millas de la línea costa y cuenta con 20 estaciones,
verificadas por el programa CCDO-CIOH, ubicadas a
lo largo de la misma, desde la longitud de 77º W hasta
72º W. La época del año en la cual se realizó el crucero
fue hacia finales del mes de noviembre del año 2002, Figura 6. Perfil de temperatura Transecto “A”.

88
 Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.

Las estaciones ubicadas en el área

de la Península de la Guajira,
registran valores entre los 24º C y
los 26º C de temperatura
superficial, mientras que las
ubicadas hacia el Golfo de Urabá,
registran valores entre los 27º C y
los 29º C, lo cual nos indica la
posible presencia del fenómeno de
surgencia costera, por aguas mas
frías de zonas mas profundas,
producida por una fuerte
divergencia del transporte de Ekman tal y como fue Figura 7. Perfil de salinidad Transecto “A”.
discutido por Andrade (2000) [17], la cual ha sido
documentada en estudios previos en términos de Para el caso de la densidad, el comportamiento está
distribución de salinidad (Gordón 1967); datos acorde con lo observado previamente en las gráficas
históricos (Perloth 1971); análisis isanostérico de temperatura y salinidad, mostrando una
(Febres-Ortega 1972); corrientes inducidas por el distribución horizontal con valores ascendentes desde
viento (Fajardo 1979) y en la descripción las estaciones más cercanas al Golfo de Urabá hasta la
oceanográfica general del comportamiento de este Península de la Guajira, con un valor mínimo en
fenómeno (Andrade 2000) [17]. Sin embargo, es superficie en la estación No. 5 con un valor de 20.748
necesario realizar una verificación de los parámetros Kg/m3 y un valor máximo en superficie en la estación
químicos y biológicos del área que corroboren la No. 123 con valor de 24.277 20.748 Kg/m3, área de
ocurrencia de este fenómeno. posible surgencia costera.

Como soporte adicional al análisis

anterior, se cuenta con la variación
de salinidad en el mismo transecto,
figura 7, en la cual se puede apreciar
una distribución horizontal cuya
variación es ascendente conforme
las estaciones se aproximan a la
Península de la Guajira, es decir,
con valores bajos para la salinidad
en las aguas superficiales debido a
los aportes fluviales en el Golfo de
Urabá y aumento de esta en las
zonas m á s profundas (parte
superior izquierda de la gráfica), con un valor mínimo Figura 8. Perfil de densidad Transecto “A”.
superficial de 33.244 psu en la estación No. 5 y un
máximo superficial en la estación No. 84 con 36.778
psu, como aspectos para destacar y que merecen un
estudio más detallado se consideran el hecho de que Transecto “B”
hacia el sector de la Península de la Guajira el cambio Éste se encuentra ubicado a unas 15 millas de la costa
en el valor de esta variable en la vertical es mínimo en colombiana y cuenta con datos de 17 estaciones,
los primeros 200 m (parte superior derecha de la verificadas por el programa CCDO-CIOH,
gráfica) y la aparición de un núcleo salino hacia los
100 m de profundidad a la altura de las estaciones No. desplegadas desde la longitud de 77º W hasta 72º W,
26 y 27 ubicadas en el sector intermedio frente a como se puede apreciar en la figura 9.
Barranquilla y Santa Marta.

89
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 78-93 (2007)

En cuanto a los valores de salinidad en el mismo

transecto, figura 11, se presentan los máximos en las
estaciones ubicadas al oeste de la Península de la
Guajira con valores de 36.5. Estos valores se
encuentran en la parte superficial posiblemente como
consecuencia de la alta evaporación que se presenta
en este sector del Caribe colombiano, sumado a la
posible surgencia, que trae aguas más salinas.
Igualmente se destaca como aspecto que merece un
estudio más detallado la cuña salina que se observa
distribuida horizontalmente desde la Península de la
Guajira, ocupando la columna de agua desde la
superficie hasta los 200 m de profundidad, llegando
hasta el sector del Golfo de Urabá, haciéndose más
delgada ocupando la columna de agua entre los 100 y
200 m de profundidad.
Figura 9. Transecto “B” Crucero Caribe 2002.

Para la temperatura se presentan una distribución

horizontal uniforme y una distribución vertical
acorde a lo esperado posiblemente reflejo de que,
a esta distancia de la costa, con sectores de mayor
profundidad, por acción de vientos y corrientes la
variable se comporta más uniformemente, lo que
podría llevar a pensar que el fenómeno de
surgencia es perceptible pero en una menor
medida, figura 10. Figura 11. Perfil de salinidad Transecto “B”.

Los valores de temperatura oscilan entre 25.5 ºC y Los valores de densidad del transecto, muestran
27.5 ºC en la capa superficial del transecto. Estos estabilidad en toda la columna de agua, con valores
valores disminuyen a medida que aumenta la menores en la parte superior y mayores en aguas
profundidad llegando al valor mínimo de 5º C. Se debe profundas.
tener en cuenta que para el caso de algunas de las
estaciones registradas, en este transecto, los valores de
la gráfica son producto de la interpolación que realiza
el software de graficación.

Figura 12. Perfil de densidad Transecto “B”.

Temperatura superficial
Dentro del análisis de planta, desarrollado luego de la
aplicación del programa CCDO-CIOH a los datos,
Figura 10. Perfil de temperatura Transecto “B”. figura 13, se observa un comportamiento acorde a lo

90

ya expuesto, pero de una manera mucho más
apreciable en cuanto a las variaciones desde la línea de
costa hacia el mar abierto y desde el Golfo de Urabá
hasta la Península de la Guajira, siendo más notoria la
posible presencia del fenómeno de surgencia costera,
al inicio de la época de los vientos fuertes, resaltando
que su amplitud corresponde a la variación de los
contornos de colores en la zona, tal y como se aprecia
en la figura. Así como una expectativa de aumento de
la misma en razón del incremento de los vientos.
Además, se aprecia una variación de temperaturas con
valores de 29º C para el área del Golfo de Urabá y
25º C para la península de la Guajira. Sin embargo, no
se debe perder de vista que en la gráfica es el resultado
de una interpolación realizada a los valores de
temperatura superficial del mar luego de haber sido
aplicada la metodología de control de calidad de datos
propuesta.
Figura 13. Temperatura superficial Crucero Caribe 2002.
Diagrama T-S
Consecuentemente con la necesidad de una
herramienta funcional y pragmática, el programa
CCDO-CIOH entrega de manera automatizada varias
gráficas, entre éstas un diagrama T-S del crucero al
que se le realizó el control de calidad. Para el caso del
crucero Caribe 2002, la verificación del diagrama T-S,
nos muestra la presencia de masas de agua en el Caribe
colombiano, la caracterización completa de estas
masas de agua requiere de un estudio más a fondo y no
es la finalidad de este trabajo. Sin embargo,
efectuando un análisis básico de la posible
Romero et al.: Control de calidad de datos oceanograficos”.
caracterización observada, tomando los criterios
expuestos por Knauss [18] y Stewart [19] en sus
libros, se observan cuatro pares T-S característicos, el
primero en 28º C y 35 psu, el cual podría corresponder
a la presencia de agua superficial del Caribe, el
segundo en 24º C y 36.9 psu, el cual podría
corresponder a la presencia de agua subtropical del
atlántico norte, el tercero en 7º C y 34.7 psu, el cual
podría corresponder a la presencia del agua
intermedia antártica y finalmente un cuarto par en 4º C
y 34.9 psu, el cual podría corresponder a la presencia
de agua profunda del Atlántico Norte.
Figura 14. Diagrama T-S Crucero Caribe 2002.
Finalmente, es necesario establecer que dentro del
ejemplo desarrollado, se encontró que los valores de
la temperatura y la salinidad no superaron los rangos
establecidos (Levitus) en ninguna de las estaciones.
Los datos resultantes luego del control de calidad
presentan un comportamiento óptimo, sin embargo,
se debe tener en cuenta que el ejemplo solamente
tomó la información de un crucero, el cual concordó
con la época llamada húmeda para el Caribe
colombiano.
Lo anterior, lleva a proponer el proceso expuesto
(tomado rangos de la climatología de Levitus) como
91

primera aproximación al control de calidad de datos
en zonas en las que no se cuente con informacion
climatológica previa. Susecivamente se deberá
desarrollar verificaciones comparativas con otros
cruceros coincidentes en zonas y épocas del año y
mediante procesos de análisis objetivos de datos,
determinar los valores climatológicos típicos para el
Caribe colombiano.
Agradecimientos
Al Ph.D Serguei Lonin, por su disposición
permanente y por los conocimientos que nos
transmitió en el desarrollo del trabajo.
Al MSc Carlos Parra por su valiosa colaboración, así
como en sus observaciones críticas para hacer de éste
un buen trabajo.
Al señor Capitán de Fragata Ricardo Morales Babra,
por habernos abierto las puertas del CIOH, para
aportar en la investigación de nuestros mares.
Al Centro Mundial de Datos en Silver Spring, Estados
Unidos, y en particular a Charlotte Sazama, por
habernos permitido recibir la información del
WOD05, con los datos necesarios para soportar
nuestro trabajo.
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Oceanographic Data. Manual and Guides No. 26. [Manual en
línea]. Publicación de UNESCO; 1993 [citada 2007 Agosto 3].
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Citada 2007 Ago 3]. Disponible en:
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Government Printing Office, 2006. [DVD]. Documento en pdf
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physical oceanography. Texas: A & M University, 2003; p. 222-
228.

93
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)

ARTÍCULO

Información espacial para el control y

administración del litoral en el Golfo de
Morrosquillo, Caribe colombiano
Spatial Information for the control and management of the
littoral at the Morrosquillo Gulf, Colombian Caribbean
Fecha recepción: 2007-09-14 / Fecha aprobación: 2007-10-13

CIOH
www.cioh.org.co
Fernando Afanador Franco, fafanador@cioh.org.co
Iván Castro Mercado, ifcastro@cioh.org.co
Nixon Torres Otalvaro, ntorres@cioh.org.co
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas - CIOH, Isla Manzanillo,
Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
A raíz de la creciente ocupación de los bienes de uso público, principalmente de las playas y de los terrenos de
bajamar por parte de los particulares, la Dirección General Marítima - DIMAR en su función de Autoridad
Marítima Nacional encargada de controlar y administrar estos bienes, ha definido un modelo conceptual que
utiliza información espacial, especificaciones y procedimientos técnicos para establecer técnicamente el límite
de su jurisdicción. La información espacial utilizada comprendió fotografías aéreas digitales ortorectificadas
tomadas durante 2005 e información tridimensional obtenida con un sensor LIDAR (Light Detection and
Ranging) ALS40 que permitieron conformar una base cartográfica digital adecuada para las labores de
administración y control del litoral en el Golfo de Morrosquillo.

La utilización de la información espacial en el control y administración del litoral en el Golfo de Morrosquillo,

comprendió la definición del modelo conceptual, el establecimiento de las necesidades de información, la
aplicación del modelo conceptual, la verificación de sus resultados en terreno, el análisis y discusión del límite
de la jurisdicción de la DIMAR, el almacenamiento de la información de jurisdicción en el SIG Institucional de
la DIMAR y finalmente, el desarrollo del control y administración del litoral por parte de la Capitanía de Puerto
y de la Dirección General Marítima basados en la información espacial correspondiente.

Como resultado de la investigación, se obtuvo la base cartográfica digital del área de estudio, compuesta por
171 ortofotomapas a escala 1:2000; una base de datos asociada a la cartografía, resultante de un censo de las
áreas litorales bajo jurisdicción; la interpolación desde el Modelo Digital del Terreno- DTM generado con base
en datos LIDAR, del valor de la altura elipsoidal de la línea de más alta marea en la zona de estudio; la posición
espacial del límite interno de las playas; localización y cuantificación de las áreas erosionadas y con acreción
producidas por la construcción de espolones; espacialización y cuantificación de las áreas sometidas a rellenos
antrópicos; localización y cuantificación de las planicies de inundación por un eventual ascenso del nivel medio

94

del mar; trazado del límite preliminar de la
jurisdicción de la DIMAR y la estructuración y
almacenamiento de la información espacial y
alfanumérica en la Geodatabase Corporativa de la
Autoridad Marítima Nacional. En relación con los
bienes de uso público bajo jurisdicción de la DIMAR,
a través de la investigación se estableció que 132.8 ha
corresponden a playas, los terrenos de bajamar ocupan
un área de 4260 ha y la franja de cincuenta metros de
jurisdicción abarca 519.4 ha.
Palabras clave: Litoral, control y administración,
jurisdicción de la DIMAR, Caribe colombiano.
Abstract
Due to the squatting of the public properties, mainly of
the beaches and intertidal zones, by individuals,
Colombia's Maritime Authority DIMAR (Dirección
General Marítima), acting as the National Maritime
Authority, in charge of controlling and managing such
properties, has defined a conceptual model which
utilizes spatial data, technical specifications and
procedures to establish technically the limit of
jurisdiction. The spatial information used comprised
orthorectified digital air photographs taken during
2005, as well as three-dimensional information
obtained with a LIDAR (Light Detection and
Ranging) ALS40 sensor which allowed to conform a
digital carthographic base appropriate for the control
and management tasks of the littoral at the
Morrosquillo Gulf.
The utilization of the spatial information for the
control and management of the littoral at the
Morrosquillo Gulf, comprised the definition of the
conceptual model, the establishment of the needs of
spatial information, the application of the conceptual
model, the verification of its findings on the field, the
analysis and discussion of the limits of DIMAR
jurisdiction, the storing of the information of
jurisdiction at the Institutional GIS of DIMAR and
finally, the development of the control and
administration of the littoral by the Port Authorities
and the DIMAR based on the corresponding spatial
data.
As a result of the research, the digital carthographic
base of the area of study was obtained which is
Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo
composed of 171 orthophotomaps to scale 1:2000, a
database associated to the carthography resulting
from a census of the littoral areas under jurisdiction,
the interpolation from the Digital Terrain Model
DTM- which was generated based on the LIDAR
data, from the ellipsoidal height value of the highest
tide line internal beach limit; location and
quantification of the eroded and accretion produced
by the construction of groins and breakwaters;
spatialization and quantification of the areas subject
to anthropic refilling; location and quantification of
the flooding areas for an eventual sea level rise; trace
of the preliminary limits of DIMAR jurisdiction and
the structuring and storing of the spatial and
alphanumeric information at the National Maritime
Authority Corporative Geodatabase. Regarding the
public properties under DIMAR jurisdiction, through
the research it was established that 132.8 hectares
correspond to beach field, the low tide fields occupy
an area of 4,260 hectares and a strip of fifty meters of
jurisdiction comprises 519.4 hectares.
Key words: Littoral, Control and management,
DIMAR jurisdiction, Colombian Caribbean.
Introducción
Los litorales son áreas complejas, compuestas por
ambientes marinos y terrestres. Igualmente es el lugar
en donde se presentan múltiples actividades,
derechos, intereses y el hogar de aproximadamente el
44% de la población mundial. Por ello, las naciones
del mundo se encuentran tan interesadas en balancear
el desarrollo y la explotación de los recursos en estas
zonas [1].
A pesar de lo anterior, por lo general se presenta una
falta de entendimiento y conocimiento adecuado del
sistema litoral. El ambiente terrestre cambia en
escalas de tiempo de centenares de años, mientras que
el ambiente marino es más dinámico, con procesos
más determinantes para los cambios como las mareas
y la erosión de la línea de costa, en escalas de tiempo
mucho menores.
Como consecuencia de lo anterior, la información
espacial y el acceso a ella, se convierten en elementos
que proporcionan una invaluable ayuda en la toma de
95
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)

decisiones para el control y administración de los La ciénaga de La Caimanera tiene un papel

litorales. De esta manera, los datos o la información
espacial, deben cumplir dos características
importantes: ser fácilmente entendible y fácilmente
accesibles [2]. En este orden de ideas, la tecnología de
la información espacial puede ser utilizada como
soporte efectivo, coherente y oportuno para los
procesos de toma de decisiones sobre su control y
administración.
Área de estudio
El área de estudio correspondió a la totalidad del
Golfo de Morrosquillo, específicamente entre Punta
San Bernardo y Bahía Cispatá, en el Caribe
colombiano (figuras No. 1 y 2).
La zona costera del Golfo de Morrosquillo comprende
territorios de los municipios de Tolú y de San Onofre
(departamento de Sucre), así como de San Antero
(departamento de Córdoba) y se encuentra ubicada
entre las coordenadas 9° y 10° latitud Norte y entre los
75° y 76° longitud Oeste del meridiano de Greenwich.
El golfo pertenece en su mayor parte al departamento
de Sucre [3].
El clima es tropical, con temperaturas superiores a los
24°C y precipitaciones de 850 mm anuales; vientos
predominantes de dirección Norte-Este y una época de
lluvia que se prolonga desde el mes de abril hasta
noviembre.
importante en el movimiento de arenas en el sector la
Boca - Tolú. Bajo el efecto de las olas, las arenas
transitan de un lado al otro de la boca de la ciénaga,
formando una barra que, en las épocas en que el caudal
de la ciénaga es reducido, el oleaje cierra la boca al
nivel de la playa. Cuando las lluvias hacen subir el
nivel del agua, la apertura de la boca da paso hacia el
mar, a las arenas amontonadas en la barra, que
transitan hacia el Norte hasta Puerto Viejo y por la
influencia del oleaje de allí hasta Palo Blanco.
Desde el punto de vista morfológico, el Golfo de
Morrosquillo está limitado por las islas de San
Bernardo al Norte e Isla Fuerte al Sur, su litoral está
delineado por un amplio arco de círculo constituido
por una amplia playa continua sobre más de 40 km de
longitud, desde Punta San Bernardo hasta Cispatá,
antigua desembocadura del Rió Sinú.
Según se ha evidenciado del cambio morfológico y
debido al cambio en la dinámica fluvial, en 1938 el río
inició el cambio de su curso para desembocar
directamente al mar; desde entonces el Sinú afecta
aún más la morfología litoral especialmente en el
sector sur del golfo. En este sentido, el río ha
construido en esta zona un gran delta en donde la
progradación hacia el Norte, ha hecho avanzar la línea
de costa varios kilómetros [4].

El Golfo de Morrosquillo está protegido de la acción

de los vientos y las corrientes marinas fuertes, por la
conjunción de dos hechos geográficos. El primero, la
cercanía al norte de las Islas de Barú y del Rosario que,
aminoran la acción de los alisios de dirección Nor-
Este y el segundo, su forma de medio círculo coronado
al norte, por el Archipiélago de San Bernardo.

Con respecto al transporte de sedimentos, el golfo

presenta dos ejes principales de transporte de arenas.
Uno procedente de la punta de San Bernardo, que se
dirige hacia la boca del Francés y el otro, parte de la
Bahía de Cispatá hacia Tolú. Las arenas procedentes
del Norte siguen la punta y la Isla de San Bernardo y
Figura 1. Localización continental y nacional del área de
luego toman una dirección Oeste - Este, como ocurre
estudio entre Bahía Cispatá y Punta San Bernardo, Golfo de
frecuentemente, por la presencia de puntas rocosas
Morrosquillo, Caribe colombiano.
paralelas al oleaje.

96

Figura 2. Ortofotomosaico del área de estudio.
Coordenadas geográficas referidas al elipsoide WGS84.
Metodología
Planteamiento del problema
Como consecuencia de las diversas presiones y
crecientes ocupaciones, por parte de los particulares,
de los bienes de uso público (playas y terrenos de
bajamar principalmente), ubicados sobre los litorales
sometidos a la jurisdicción de la DIMAR, se hace
necesario determinar técnica y espacialmente, el
límite de la jurisdicción de la DIMAR en el sector del
Golfo de Morrosquillo, con el objetivo de llevar a
cabo su administración y control por parte de la
Autoridad Marítima Nacional, en cabeza de la
Capitanía de Puerto de Coveñas.
Lo anterior implica la producción de cartografía base
digital a una escala adecuada, que permita la
representación de los elementos que caracterizan el
litoral, para con base en ella, junto con la aplicación
del modelo conceptual para la determinación de la
jurisdicción, obtener finalmente, la espacialización de
su límite en este sector del litoral Caribe colombiano.
Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo
Marco teórico y estado del arte
Esta etapa consistió en investigar y recopilar los
enunciados teóricos que pudieran dar una explicación
coherente a los hechos observados y solucionar el
problema planteado.
Información espacial de los litorales
Es generalmente reconocido, por una parte, el papel
crítico de la información al permitir la
responsabilidad y rigurosidad científica de las
decisiones [5] y por otra, que la información espacial
debe contar con una serie de características para que
sea útil y efectiva en las labores de control y
administración de los litorales [6]. La primera de ellas
es la flexibilidad, es decir que se ajuste a las
necesidades precisas de adquisición de datos para
todos los usuarios; la segunda corresponde a la
confiabilidad, ya que como se trata de información
que será utilizada en la toma de decisiones, se requiere
que sea confiable y completa; en tercer lugar el
carácter holístico; como cuarta, su adecuación al
marco legal vigente, ya que los tomadores de
decisiones requieren conocer datos e información que
se enmarquen dentro de las posibilidades de actuación
definidas por los preceptos jurídicos vigentes y
finalmente, su utilidad en el manejo y solución de
conflictos que se puedan presentar, especialmente
entre las actividades socioeconómicas y el medio
ambiente, entre las actividades y la sociedad y, entre
las actividades y la economía.
Por otra parte, las zonas litorales cambian
rápidamente y por ello, su manejo debe ser
establecido igualmente de forma rápida. Sin embargo,
para que cualquier control y manejo sea efectivo, las
políticas necesitan estar basadas en un proceso de
toma de decisiones técnicamente soportado, lo que a
su vez requiere, acceso rápido y a tiempo a los datos e
información requeridos para la toma de la decisión. Es
por ello que la llamada información de línea base y su
componente de información espacial, hacen parte del
proceso de planeación del control y manejo costero
[7]. Dado que muchos de estos datos tienen un
carácter espacial, la tecnología de sensoramiento
remoto es una fuente importante de datos para el
manejo de los litorales [8]. Además, los Sistemas de
97

Información Geográfica (SIG), contribuyen en gran
medida al control y administración de los litorales a
través de su efectividad en el manejo de grandes bases
de datos; el almacenamiento eficiente y facilidades
para análisis espacial de la información y; facilidades
para modelar, probar y comparar escenarios
alternativos de manejo antes que se implemente una
estrategia o acción determinada.
Actualmente, con el desarrollo de las técnicas para
recolección de datos espaciales y de las tecnologías de
sensoramiento remoto y de los Sistemas de
Información Geográfica (SIG), la tendencia a nivel
mundial se orienta hacia el uso de datos espaciales y
del SIG por las organizaciones e investigadores, para
el direccionamiento de la planeación y el manejo de
los problemas relacionados con las zonas litorales.
El LIDAR (Light Detection And Ranging) o escaneo
láser, es un sistema de sensoramiento activo, que
permite efectuar mediciones a distancia sobre la
superficie terrestre, a partir de un sensor dispuesto en
el interior de una aeronave. El sensor obtiene puntos
tridimensionales (x, y, z), a partir de los cuales se
pueden generar Modelos Digitales de Elevación
(DEM). La tecnología se basa en el principio LASER
(Light Amplification by Stimulated Emisión of
Radiation), que amplifica la luz por simulación de
emisión y radiación.
La tecnología de un sistema LIDAR está conformada
por los siguientes componentes: aeronave, unidad de
GPS, unidad de movimiento inercial y, unidad láser
(sensor LIDAR). Mediante la combinación de estos
elementos, se obtienen puntos de elevación a través de
la emisión de señales de luz que viajan desde la fuente
(sensor) hasta los objetos en la superficie terrestre,
regresando nuevamente al sensor. El tiempo de
regreso queda registrado en el sistema y a partir del
sistema GPS y la unidad de movimiento inercial -
UMI, se calcula la posición (x, y, z) de cada punto. La
unidad de movimiento o de medida inercial (UMI), es
un dispositivo que integra giróscopos y acelerómetros
junto con un reloj permite la medición de los tres
posibles giros de la aeronave durante el vuelo: viraje,
cabeceo y balanceo.
98
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)
Por otra parte, la fotografía aérea digital, empleando
cámara métrica digital, ha sido una técnica
relativamente reciente, que ha encontrado en la
información obtenida con el s e n s o r LIDAR, un
buen nivel de complementación, especialmente para
la modelación y análisis del terreno. Las fotografías
aéreas digitales, entre otras ventajas, presentan la de
su estabilidad dimensional, ya que no les afectan las
variaciones de temperatura del medio ambiente y no
son objeto de una manipulación directa por parte de
los usuarios. Sin embargo, la principal ventaja de la
fotografía aérea digital es la representación pictórica
de grandes extensiones del terreno, lo que facilita en
gran medida, las labores de fotointerpretación y
análisis del terreno por parte de los técnicos y
profesionales de diversas áreas del conocimiento [9].
Modelos conceptuales
Uno de los más grandes avances del hombre ha sido su
habilidad para entender sistemas complejos a partir
del reconocimiento de que reglas simples pueden
conformar complejidades y que los patrones
complejos pueden, a su vez, ser generados a partir de
reglas simples [10].
Dentro de esta aproximación, es normal la utilización
de modelos conceptuales. Desde el punto de vista
teórico, los modelos conceptuales se consideran como
herramientas para formular hipótesis y teorías. Son
mapas de la realidad, que permiten guiar, por una
parte, las investigaciones y, por otra, el conocimiento
sistemático. Adicionalmente, revelan interrelaciones
entre variables y orientan a los investigadores hacia el
establecimiento de preguntas de investigación [11].
Administración y control de los litorales
Tal como se mencionó anteriormente, el litoral es la
zona donde confluyen e interaccionan el medio
marino y el medio terrestre, creando una franja de
territorio que, en algunos casos, cuenta con pocos
kilómetros y con características geomorfológicas y
biológicas únicas dentro del planeta.
Las áreas litorales del mundo han sido y están siendo
sometidas a serias presiones antropogénicas. Sus
características naturales han sido utilizadas y

disfrutadas durante mucho tiempo por el hombre. Esa
franja de transición entre la tierra y el mar contiene
algunos de los hábitat más productivos y valiosos de la
biosfera. Por ello ha sido lugar de alta prioridad e
interés para la humanidad, el comercio, actividad
militar y múltiples industrias.
Los procesos que se dan en los litorales se caracterizan
por una relación compleja y dinámica de procesos
naturales, demográficos y económicos relacionados
unos con otros, en una red de influencia recíproca.
Esos procesos son esencialmente ciclos dinámicos
que involucran la explotación de los recursos
naturales, la transformación y uso de los recursos por
el crecimiento demográfico, la organización social y
la producción económica.
En el corto plazo, su ocupación sin planificación y sus
patrones de uso, conllevan a procesos de degradación
y eventualmente, al agotamiento de sus recursos. Es
por esta razón que la administración de los litorales
requiere de una aproximación integrada: las
decisiones de manejo necesitan basarse en un
conocimiento completo del sistema litoral y de las
fuerzas dinámicas que operan sobre él. Una lección
clave que se ha aprendido de varios proyectos de
manejo costero, es que es imposible planearlos e
implementarlos sin una aproximación multisectorial
[7]. Requiere además, una continua e iterativa
aproximación, ya que se trata de ambientes altamente
dinámicos. Además requiere de permanentes y
exactos monitoreos de las circunstancias de cambio y
evaluación constante de la efectividad de los
esfuerzos de manejo y acciones tomadas, con el fin de
corregir las futuras medidas y políticas.
En relación con las actividades de origen
antropogénico, se asume que las actividades humanas
ejercen una presión sobre el medio produciendo
cambios y la sociedad responde a estos cambios con
actuaciones sobre el medio o con respuestas
económicas [12].
Por todo lo anterior, se requiere, desde el punto de
vista administrativo, el conocimiento del destino o uso
actual de estas zonas y la identificación clara de las
personas, bien sean de tipo natural o jurídico, que se
encuentran ocupando estos espacios.
Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo
A lo largo y ancho de los litorales colombianos se
encuentran ciertas áreas denominadas como bienes de
uso público, cuyo dominio pertenece a la Nación y su
uso o aprovechamiento pertenece a todos los
habitantes del territorio. De acuerdo con el
ordenamiento jurídico vigente, los bienes de uso
público que se encuentran bajo responsabilidad de la
Dirección General Marítima, son las aguas interiores
marítimas, las playas marítimas, las zonas de bajamar,
y las aguas y playas fluviales de los ríos bajo su
jurisdicción [13].
Para fines de control y administración de los espacios
litorales bajo su jurisdicción, la DIMAR utiliza dos
figuras: la concesión y el permiso. Una concesión es
una autorización que la Nación otorga a un particular
(natural o jurídico) para utilizar un bien de uso público
por un período de tiempo determinado. El
concesionario está obligado a efectuar, entre otras
actividades, el mantenimiento y conservación de las
playas y terrenos de bajamar y a evitar completamente
los cerramientos que impidan la vista de las playas.
Por su parte, un permiso es una autorización que la
Nación otorga a un particular (natural o jurídico) para
utilizar un bien que, sin ser de uso público, forma
parte de su jurisdicción. De esta forma, la DIMAR
otorga permisos para aquellos proyectos que se
encuentren fuera de los bienes de uso público, pero
dentro de la franja de los 50 metros de jurisdicción
medidos desde la línea que representa la altura de la
más alta marea del sector.
A nivel nacional, la Comisión Colombiana del
Océano respondiendo a las necesidades del país en
materia de políticas y directrices del orden nacional,
ha formulado una política integral que comprende los
espacios oceánicos y costeros y, establece las líneas de
acción en cinco áreas temáticas que agrupan los
principales aspectos para el fortalecimiento continuo
del tema marítimo en Colombia. Una de estas áreas
temáticas es el “Desarrollo territorial” como parte
fundamental del progreso y fortalecimiento de la
competitividad económica y socio-cultural de un país,
siempre teniendo presente los elementos que
permitan un adecuado uso, manejo y
aprovechamiento de los recursos naturales.
99
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)

Definición
El área temática de desarrollo territorial, en su del modelo
conceptual
numeral 2.3.1 establece el manejo integrado de la zona
costera como un proceso de planificación especial
dirigido a áreas complejas como es la zona costera, en Establecimiento de las Aplicación
del modelo
Verificación de
resultados
necesidades de
donde se debe realizar un uso racional de acuerdo con información espacial conceptual en campo

la legislación vigente identificando claramente las

playas marítimas, las zonas de bajamar y las áreas Análisis y
discusión del
marítimas jurisdiccionales como bienes de uso límite de la
jurisdicción
público de carácter nacional y de carácter estratégico
para la soberanía del Estado.
Almacenamiento
de la información
espacial en el
Con base en lo anterior, la Política Nacional del SIG Institucional

Océano y Espacios Costeros - PNOEC determina unas

líneas de acción a través de las cuales se identifican las Control y
estrategias y planes a desarrollar articuladamente administración
del litoral
entre las instituciones, un control y desarrollo
sostenible de la zona costera y ecosistemas marinos.
Figura 3. Etapas de trabajo para el empleo de la
En el caso particular de la Dirección General Marítima información espacial en el control y administración de los
se establece una línea de acción que indica la litorales.
realización de una “Plan Director de Costas”, con el
apoyo de las instituciones con competencias sobre
control y administración de las actividades que se Recursos
realizan en los litorales y áreas marinas del país. Es
aquí precisamente, en donde la información espacial
producida por la DIMAR, juega un papel fundamental
como insumo para la concepción y elaboración de P
dicho plan director, al permitir conocer de manera r
rápida, eficiente y técnicamente sustentada, qué hay o PROCESOS PROCESOS
U
actualmente en las áreas bajo su jurisdicción. b NATURALE S SOCIALES

Metodología
La metodología para el empleo de la información
espacial en el control y administración de los litorales,
s
l o
e s
m PROCESOS
ECONÓMICOS

comprendió las etapas ilustradas en la figura 3. a

s
El control y administración de los litorales
colombianos parte de la base de la interacción de tres
Figura 4. Interacción de procesos en los litorales
grandes procesos que actúan sobre estos espacios: los
colombianos.
procesos naturales, procesos sociales y los procesos
de tipo económico (figura 4). Como es de esperarse, la
interacción de estos procesos está relacionada De conformidad con lo anterior y con el fin de lograr
directamente con los recursos disponibles, los usos del un mejor control de los litorales colombianos, se
suelo y los problemas de diversa índole que se definió y aplicó un modelo conceptual en el que se
presentan en los litorales colombianos. detectaron y analizaron los posibles significados y

100
 Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo

relaciones entre las variables del modelo, dentro de Actuaciones

antrópicas
una aproximación dinámica y sistemática de los Altura línea
más alta marea
Playas

ambientes litorales. La definición de este modelo

Determinaciones
Base de datos
conceptual permitió establecer claramente las asociada
previas

necesidades en materia de información espacial para Base Riesgos

determinar el límite de la jurisdicción de la DIMAR en cartográfica
digital
Trazado preliminar
de la jurisdicción
ambientales

los litorales colombianos y con base en ello, llevar a de la DIMAR

cabo un adecuado control y administración de estos

Revisión y ajustes al
espacios. trazado preliminar

Definición del modelo conceptual para la Aprobación

jurisdicción
determinación del límite de la jurisdicción de la DIMAR

DIMAR
Una descripción detallada del modelo conceptual
utilizado, de sus características y de sus componentes,
se encuentra en [14]. De forma resumida, en el modelo
se incluye, para la obtención de la base cartográfica
digital, la utilización de un sistema láser
aerotransportado conocido con el nombre de LIDAR
(Light Detection and Ranging) junto con el empleo de
la fotografía aérea digital. De manera
complementaria, se utiliza una cámara aérea con la
que se obtienen los detalles planimétricos necesarios
(fotografías digitales) para completar la información
requerida para la determinación de la jurisdicción.
Adicionalmente, también se incluyeron otros
componentes de información necesarios para abordar
el problema de la determinación del límite de la
jurisdicción de la DIMAR, de una manera más
integral. Se trata de los componentes de base de datos
asociada, cota de inundación, el análisis del impacto
de las actuaciones antrópicas sobre el litoral, el
establecimiento del límite interno de la playa, el
análisis de las determinaciones previas efectuadas
para definir el límite de la jurisdicción y finalmente, el
análisis de riesgos asociados a las costas, como uno de
los elementos condicionantes de las actuaciones
administrativas de la DIMAR en lo relacionado con
los litorales.
Figura 5. Macrocomponentes del modelo conceptual para
el establecimiento del límite de la jurisdicción de la
DIMAR en los litorales colombianos.
Necesidades de información espacial para el
control y administración de los litorales
De acuerdo con las experiencias adquiridas durante
los proyectos de establecimiento de la jurisdicción
llevados a cabo con anterioridad al año 2005 y a través
del análisis del objeto de la DIMAR, sus funciones y
su jurisdicción espacial definidas en el Decreto Ley
2324 de 1984; así como también del análisis de los
requerimientos específicos de información espacial
en materia de trámites sobre los litorales, se
establecieron las siguientes necesidades de
información espacial y su escala ideal, enfocadas al
establecimiento del límite de la jurisdicción y el
control y administración de los litorales colombianos:
Tabla 1. Información espacial y escalas requeridas
para la base cartográfica digital.
Información espacial requerida Escala ideal
Construcciones en el área de la jurisdicción 1: 1000
Posición de las líneas de más baja y alta 1: 1000
marea
Cuerpos y cursos de agua 1:1000
Elementos culturales (vías de comunicación,
infraestructura comunal, etc.). 1:1000

Línea de costa 1:1000

De manera esquemática y resumida, en la figura 5 se 1:1000
Áreas de vegetación costera 1:10000
ilustran los macro componentes del modelo. Durante Alturas o cotas en el área de la jurisdicción ---------
la aplicación de la totalidad de estos
macrcomponentes, se utilizó información espacial
bien fuere ortofotomapas (cartografía base), datos Una vez establecidas las necesidades de información
LIDAR filtrados o modelos digitales del terreno. espacial, se evaluaron 17 alternativas tecnológicas

101
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)

existentes en el mercado (LIDAR, CASI, LANDSAT,

SPOT, Radarsat, IRS, IKONOS, QuicBird, ASTER,
cámara NIKON, fotografía aérea métrica digital,
levantamiento topográfico, ERS, MOMS, CBERS,
MODIS y MOS), obteniéndose que las opciones que
cumplían en su totalidad con los criterios de selección
establecidos (escala, exactitud planimétrica de ± 2
mm a la escala de publicación y exactitud altimétrica
de ± 30 cm) fueron las opciones LIDAR, fotografía
área métrica digital y los levantamientos topográficos.

La opción de levantamientos topográficos fue

descartada debido a su alto costo, gran cantidad de
recursos técnicos y humanos, así como el excesivo
tiempo requerido. Al efectuar una revisión del estado
del arte de las tecnologías LIDAR y fotografía aérea
digital, se encontró que lo más recomendable era su
uso complementario, con el fin de aprovechar sus
respectivas ventajas. Como resultado de ello, se optó
por acoplar dentro de una aeronave, un sensor LIDAR
y una cámara aérea digital para la adquisición, al
mismo tiempo, de datos LIDAR y fotografías aéreas
digitales (figura 6). Figura 7. Líneas de vuelo (en color verde) y límite
aproximado de la zona de trabajo (línea roja) en el Golfo de
Realizado el diseño del vuelo fotogramétrico (figura Morrosquillo.
7), se tomaron simultáneamente los datos (fotografías
aéreas digitales y datos del sensor LIDAR)
respectivos, resultando en una distribución de
ortofotografías y datos LIDAR mostrados en la figura
8. En las figuras 9 y 10 se ilustran respectivamente
ejemplos de nube de puntos capturados por el sensor
LIDAR y parte de una ortofotografía del área de
trabajo.

Figura 8. Distribución de ortofotografías y datos LIDAR

Figura 6. Cámara digital y sensor LIDAR ALS40 en el sector del Golfo de Morrosquillo. Cada rectángulo
adaptados para toma de información simultánea en una corresponde a una ortofotografía a escala 1:2000 para un
aeronave. total de 171 planchas.

102

Figura 9. Nube de puntos (correspondientes al suelo)
capturados por el sensor LIDAR en un sector del Golfo de
Morrosquillo.
Figura 10. Fragmento de una ortofotografía del área de
estudio en inmediaciones de la población de Tolú. Nótese la
alta resolución espacial que permite identificar claramente
cada una de las construcciones presentes en el litoral.
Aplicación del modelo conceptual
La figura 11 muestra la secuencia de etapas requeridas
para la aplicación del modelo conceptual. En primer
lugar, se efectuó la aplicación de las especificaciones
y procedimientos técnicos definidos para cada uno de
los componentes del modelo. Dichas especificaciones
y procedimientos contienen los lineamientos y
metodologías que permiten obtener cada uno de los
insumos requeridos por el modelo conceptual para el
establecimiento técnico del límite de la jurisdicción de
Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo
la DIMAR con base en la utilización de información
espacial de ortofotografías digitales y datos LIDAR
correspondientes a las características del terreno
(suelo desnudo).
Especificaciones
y procedimientos
técnicos
Tomas de Aplicación de Aplicación
datos especificaciones del modelo
en campo y procedimientos conceptual
técnicos
Establecimiento
límite de la
jurisdicción DIMAR
Figura 11. Etapas para la aplicación del modelo
conceptual.
La utilización de la información espacial requirió el
alistamiento de los sensores, el diseño geométrico del
vuelo y la toma de datos como tal. De esta forma, con
el fin de garantizar el óptimo funcionamiento de los
sensores LIDAR Leica ALS40 y la cámara digital
DACS (Digital Airborne Camera System) con matriz
de 4080 x 4080 y distancia focal de 55.127 mm, éstos
fueron sometidos a los procedimientos de calibración
pre-vuelo requeridos. Una vez realizados estos
procedimientos de calibración, se efectuó el diseño
geométrico del vuelo sobre el área de estudio, con el
fin de garantizar los requerimientos de cubrimiento de
la zona y escala de las fotografías, de tal forma que la
escala de publicación de las fotografías fuera de
1:2000.
Posteriormente, con base en el diseño geométrico del
vuelo, se efectuó, en forma simultánea, la toma de
fotografías aéreas digitales y las mediciones con el
sensor LIDAR sobre el área de estudio, referenciadas
al sistema MAGNASIRGAS con origen Bogotá-
Magna (04° 35´ 46.3215” N; 74° 04´39.0285” W).
En relación con el procesamiento de la información
adquirida con el sensor LIDAR y la generación de
ortofotografías digitales, una vez tomadas las
fotografías aéreas y efectuadas las mediciones con el
sensor ALS40, se procedió a efectuar el tratamiento
digital de la información LIDAR a través de la
utilización del software MARS ® para el filtrado y
103

clasificación de los datos en tres categorías: terreno
(suelo desnudo), construcciones y vegetación.
Por su parte, las aerofotografías fueron sometidas a un
proceso de ortorectificación digital, con el fin de
obtener una base confiable y libre de deformaciones,
que permitiera disponer de una cartografía
(ortofotomapas) exacta y actualizada.
Desde el punto de vista de estimación de la exactitud
posicional, se aplicó una verificación estadística a las
ortofotografías y a los datos LIDAR, basada en la
suposición de que los errores posicionales se
comportan siguiendo una distribución de probabilidad
de tipo normal o campana de Gauss. Aplicada la
prueba estadística [3], se obtuvo una probabilidad del
95% de obtener errores iguales o menores en (x, y) de
0.993 m en cualquier punto muestreado sobre la
cartografía. En lo que respecta a la información
obtenida con el sensor LIDAR, se aplicó un
tratamiento estadístico similar al anterior pero sólo a
la coordenada (z), obteniéndose una probabilidad del
95% de obtener errores iguales o menores a 0.3 m para
cualquier punto muestreado en la nube de datos
LIDAR. Los valores de exactitud obtenidos, tanto
para la base cartográfica como para los datos LIDAR,
se consideraron aceptables para los fines de la
presente investigación.
Por otra parte, la toma de datos en campo consistió en
la recolección de información relacionada
principalmente con las áreas rellenadas por acción
antrópica, las áreas afectadas por el Plan de
Ordenamiento Territorial, el Plan de Expansión
Portuaria y el Plan Sectorial de Turismo; y la toma de
muestras del material constitutivo de playas y terrenos
aledaños.
Una vez recopilada y analizada la información de
campo, se llevó a cabo la aplicación propiamente
dicha de las especificaciones y procedimientos
técnicos establecidos con base en la información
recopilada durante la fase de campo. Conformado
cada uno de los bloques temáticos del modelo
conceptual, se efectuó la superposición digital de cada
uno de sus resultados a través de la utilización del
104
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)
Sistema de Información Geográfica ArcGis 9.2 ® y se
realizó el trazado preliminar del límite de la
jurisdicción de DIMAR en el Golfo de Morrosquillo.
Verificación de resultados en campo
Esta etapa consistió en realizar visitas directamente a
los sitios del área de trabajo en los cuales se tenían
dudas sobre el trazado del límite de la jurisdicción. En
estos sectores se analizaron directamente en el
terreno, la extensión de los bienes de uso público
(playas y terrenos de bajamar, principalmente) y sus
principales características como material
constitutivo, presencia de vegetación permanente y
conformación geomorfológica del sector. Efectuada
esta verificación, se realizaron los ajustes del caso al
trazado preliminar con el fin de ser puesto a
consideración de la Capitanía de Puerto de Coveñas.
Análisis y discusión del límite de la jurisdicción en
el área de estudio
Esta etapa consistió en analizar detenidamente, por
parte de personal de la oficina de litorales de la
Capitanía de Puerto de Coveñas y del Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas, el
trazado preliminar de la jurisdicción de la DIMAR
efectuado sobre la base cartográfica digital. Con base
en el conocimiento de la zona de trabajo por parte del
personal de la capitanía y la experiencia en materia de
actuaciones administrativas anteriores, se efectuó la
revisión minuciosa de la totalidad del trazado
efectuado.
En aquellos sectores del área de trabajo sobre los
cuales se presentaron dudas o inquietudes sobre el
trazado preliminar, fueron objeto de una nueva
verificación en terreno, en la cual, de forma similar a
la etapa de verificación de resultados, se analizaron
cuidadosamente, la extensión de los bienes de uso
p ú b l i c o ( p l a y a s y t e r r e n o s d e b a j a m a r,
principalmente) y su condición actual.
Carga de la información al SIG institucional de la
DIMAR
Muchos países alrededor del mundo están
desarrollando infraestructuras de datos espaciales
 Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo

(SDI) como una forma para manejar mejor y utilizar

las relaciones espaciales de los datos.

Debido a la necesidad de centralizar la información

espacial producida por los Centros de Investigación
de la DIMAR, esta última creó el Sistema de
Información Geográfica Institucional denominado
SIG-DIMAR en el cual reposa toda la información
espacial de carácter oficial producida por la entidad.
Como era de esperarse, la información del límite de la
jurisdicción de la DIMAR en el Golfo de Morrosquillo
fue almacenada en la base de datos geográfica Figura 13. Feature Dataset en el que se almacenó la
(Geodatabase Corporativa), cumpliendo con los información espacial correspondiente a los bienes de uso
requerimientos técnicos de sistema de referencia y público localizados en los litorales bajo jurisdicción de la
consistencia lógica (reglas topológicas) definidos DIMAR.
para la correcta disposición final y funcionalidad de la
información espacial.

Para ello, se efectuó el acceso desde una estación

remota a la Geodatabase Corporativa del SIG-
DIMAR utilizando una aplicación de escritorio vía
ArcCatalog versión 9.2 ArcEditor con un rol de datos
de consulta de edición que habilita los permisos de
ingreso, actualización y eliminación sobre los objetos
existentes en la Geodatabase Corporativa de la
DIMAR (figura 12). La información fue almacenada
directamente en el Feature Dataset 2102 (un Feature Figura 14. Feature Class presentes en el Feature Dataset de
Dataset es una agrupación de Feature Class que zona costera en la Geodatabase Corporativa de la DIMAR.
comparten la misma referencia espacial y es utilizado
en el modelamiento de las relaciones espaciales entre
los Feature Class) y en sus correspondientes Feature Como se puede apreciar en la figura 14, la
Class (un Feature Class es una agrupación de
información espacial requerida para el control y
características geográficas con el mismo tipo de
geometría, bien sea punto, línea o polígono, los administración de los litorales se organiza y almacena
mismos atributos y la misma referencia espacial, lo en Feature Class que a su vez, corresponden a los
que permite agrupar características homogéneas en bloques temáticos que componen el modelo
una sola unidad) siguiendo las etapas contempladas en conceptual implementado. Cada uno de los objetos
el documento del procedimiento técnico para la carga almacenados en los diferentes Feature Class tiene
de la información en el SIG-DIMAR (figuras 13 y 14). asociados unos atributos que los caracterizan y
coadyuvan en el control y administración de los
litorales.

Control y administración del litoral del Golfo de

Figura 12. Ventana del árbol de ArcCatalog en el cual se
efectuó la conexión con la Geodatabase Corporativa de la
DIMAR.
Morrosquillo
El control y administración del litoral del Golfo de
Morrosquillo se lleva a cabo en primer lugar, por la
Capitanía de Puerto de Coveñas. Para ello, la oficina
de litorales de la capitanía dispone de un acceso a la
Geodatabase Corporativa del SIG-DIMAR, a través

105

del cual es posible la consulta y despliegue de la
información espacial relacionada con el trazado de la
jurisdicción en el golfo.
De esta manera, la oficina de litorales de la capitanía
de puerto ha podido consultar, de manera eficiente, la
información correspondiente a la localización
espacial y límites de los bienes de uso público (playas
y terrenos de bajamar principalmente) sometidos a la
jurisdicción de la DIMAR en el golfo, franja de 50
metros de jurisdicción, áreas afectadas por rellenos de
origen antrópico, pronunciamientos previos de la
DIMAR en materia de jurisdicción en esta área,
localización espacial de la altura de la línea de más alta
marea y la base de datos resultante del censo efectuado
a las construcciones (denominadas UMCDs o
Unidades Mínimas de Censo DIMAR) como
información adicional y complementaria.
La disponibilidad de esta información constituye, para
la Capitanía de Puerto de Coveñas, un soporte técnico
de gran efectividad en el proceso de toma de
decisiones sobre el control y administración de esta
parte del litoral Caribe colombiano. De esta forma, las
decisiones que se adopten como Autoridad Marítima
Nacional a través de las figuras administrativas
actualmente disponibles, cuentan con un soporte
técnico en esta información espacial, evitando de esta
forma y sesgos en las decisiones tomadas y aportando
transparencia al proceso de toma de decisiones.
De acuerdo con lo anterior, las soluciones de los
trámites de concesiones, permisos y demás figuras
administrativas, en el área del Golfo de Morrosquillo,
se efectúa tomando como base el límite de la
jurisdicción y la localización espacial de los bienes de
uso público que se encuentran dispuestos en la base de
datos del SIG Institucional de la DIMAR.
Resultados y discusión
Como resultado de la investigación, se obtuvo la base
cartográfica digital del área de estudio, compuesta por
171 ortofotomapas a escala 1:2000 (figura 15); una
base de datos asociada a la cartografía, resultante de
un censo de las áreas litorales bajo jurisdicción; la
106
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)
interpolación desde el Modelo Digital del Terreno-
DTM generado con base en datos LIDAR, del valor de
la altura elipsoidal de la línea de más alta marea en la
zona de estudio; la posición espacial del límite interno
de las playas; localización y cuantificación de las
áreas erosionadas y con acreción producidas por la
construcción de espolones; espacialización y
cuantificación de las áreas sometidas a rellenos
antrópicos; localización y cuantificación de las
planicies de inundación por un eventual ascenso del
nivel medio del mar (figura 16); trazado del límite
preliminar de la jurisdicción de la DIMAR (figura 17)
y la estructuración y almacenamiento de la
información espacial y alfanumérica en la
Geodatabase Corporativa de la Autoridad Marítima
Nacional. En relación con los bienes de uso público, la
investigación logró establecer que en el Golfo de
Morrosquillo, se encuentran 132.8 ha de playas;
4260 ha de terrenos de bajamar y 519.4 ha de franja de
50 metros de jurisdicción.
Tal como se mencionó anteriormente, el litoral es un
espacio dinámico y complejo y por ello mismo, deber
ser bien entendido con el fin de efectuar un efectivo
control y administración. Con la combinación de
información espacial, las funciones analíticas y de
modelamiento de los SIGs, se puede responder rápida
y flexiblemente a preguntas relacionadas con los
litorales.
Sin embargo, la falta de información puede ser un
factor que contribuye a las fallas de las políticas.
Frecuentemente, en los países en desarrollo, hace falta
información, especialmente en aquellas áreas en
donde se presentan los recursos renovables tal como
es el caso del litoral. De esta forma, el SIG y la
información espacial deben ser vistos como una
oportunidad para el avance en el campo del manejo de
los recursos litorales. En este sentido, la tecnología
SIG ha demostrado ventajas sin precedentes en el
manejo litoral [15].
Las experiencias anteriores y actuales en el control y
administración de los espacios litorales colombianos,
han evidenciado, en primer lugar, la necesidad del
soporte científico para la selección y adopción de las
medidas de control y manejo de estos espacios; en
segundo lugar, que las necesidades de información

espacial del litoral a nivel nacional, muestran a su vez,
que dichos requerimientos son específicos para cada
área geográfica en el planeta, debido a las diferencias
que existen en los problemas de control y
administración en cada país o región del planeta.
Por otra parte, la determinación de las necesidades de
información espacial para el establecimiento del
límite de la jurisdicción de la DIMAR, permitió
también concluir que existen dos factores claves
relacionados con la efectividad de la fotografía aérea
digital en las labores de control y administración de
los litorales colombianos. El primero de ellos es la
resolución espacial que dadas las condiciones actuales
de ocupación de los litorales colombianos, debe ser
alta (del orden de 25 cm aproximadamente) con el fin
de permitir la clara identificación de las
construcciones y pequeños elementos que se
encuentran localizados sobre los litorales.
El segundo factor corresponde a la exactitud
posicional de las ortofotografías utilizadas. La
exactitud debe permitir una representación de los
elementos localizados sobre el litoral, tal que el nivel
de error no sea mayor a 0.5 mm de la escala de
publicación (es decir, ± 1.0 m), con lo que se garantiza
una representación con nivel de exactitud adecuado
para las labores de control y administración de las
áreas litorales.
En relación con la efectividad de la utilización de
datos LIDAR, específicamente en la elaboración de
Modelos Digitales del Terreno DTMs, existen dos
factores claves. El primero de ellos corresponde
también a la exactitud posicional en la coordenada Z
(alturas elipsoidales), la cual se requiere, en el caso de
los litorales colombianos, del orden de ± 30 cm, lo que
ha permitido representar las alturas del terreno con un
buen grado de exactitud en comparación con otras
fuentes de información. Un segundo factor clave es la
densidad de puntos emitidos por el sensor, que
alcanzan la superficie del suelo. Dicha densidad debe
ser tal que permita efectuar interpolaciones de alturas
del orden de unos pocos centímetros, para lo cual en el
caso del área de estudio, esta densidad se encuentra en
2
± 25 puntos/m .
Una aplicación similar de información espacial para el
manejo costero y la toma de decisiones, fue
implementada exitosamente durante los inicios de los
Afanador et al.: Administración litoral Golfo de Morrosquillo
años 2000, en sectores específicos de la Bahía de
Tampa por parte del laboratorio de mapeo y SIG de la
Universidad de Ohio en los Estados Unidos [16]. De
forma similar a la presente investigación, se empleó
información espacial procedente de varias fuentes
entre las que se encuentran datos instrumentales de
niveles del agua, datos batimétricos, modelos
digitales de elevación, fotografías aéreas y datos
tomados con tecnología GPS. Otra aplicación similar
basada en información espacial litoral
(ortofotografías y mapas topográficos,
principalmente), fue desarrollada por la Oficina de
Infraestructura de Datos Espaciales de Catalonia en
España con el fin de proporcionar a los diversos
usuarios de la información, acceso a ella para la
evaluación e implementación de políticas y medidas
de manejo, especialmente enfocadas hacia la
mitigación de la erosión [17].
En Suráfrica también se desarrolló una aplicación
similar a la presente investigación, consistente en la
conformación de una base de datos de casetas
ubicadas sobre las playas, con información acerca del
propietario, vecinos y detalles de éstas permitiendo
localizarlas espacialmente [5]. Por su parte, el
desarrollo de la presente investigación, además de
confirmar la utilidad de la información espacial
principalmente fotografías aéreas y datos del sensor
LIDAR, hizo evidente también la necesidad de
efectuar implementación un entrenamiento en los
temas de toma de datos espaciales y en el manejo y
diseminación de éstos (entrenamientos en
procesamiento de datos LIDAR, entrenamiento en
rectificación y manejo de fotografías aéreas digitales
y capacitación en el diseño e implementación de un
SIG institucional, entre otros temas). Esto a su vez
condujo al planteamiento de un reto institucional para
la Autoridad Marítima Nacional consistente en el
desarrollo de una estrategia efectiva de información y
de su diseminación accesible para la toma de
decisiones relacionadas con el control y
administración de los litorales colombianos, la cual ha
conducido hacia la consolidación del SIG
Institucional de la DIMAR, el cual además de
contener la información espacial base y temática para
la administración de los litorales, centraliza y hace
más accesible, confiable y segura, la información
espacial relacionada con las demás actividades que
desarrolla la DIMAR a nivel nacional.
107

Figura 15. Fragmento de un ortofotomapa a escala 1:2000
en el sector de la Boca de la Ciénaga, en inmediaciones de la
población de Coveñas, Golfo de Morrosquillo.
Figura 16. Planicie de inundación (zona en color azul) ante
un eventual ascenso del nivel medio del mar de 30 cm para
el litoral del área de estudio. En color rojo las
construcciones que se verían afectadas por la inundación.
108
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 94-109 (2007)
Figura 17. Ejemplo del trazado preliminar del límite de la
jurisdicción (línea en color rojo) en cercanías a la población
de Coveñas, Golfo de Morrosquillo. De esta manera, la
zona más próxima al Mar Caribe estará sometida a la
jurisdicción de la DIMAR; mientras que la zona después de
la línea roja hacia el continente, estará por fuera de dicha
jurisdicción.
Agradecimientos
Los autores expresan sus más sinceros
agradecimientos al Señor Capitán de Fragata Marco
Antonio Olier, Capitán de Puerto de Coveñas, al
Suboficial Segundo Jairo Paternina y a los señores
Gildardo Velásquez, William Monroy y Luis Pérez de
la Oficina de Litorales de la Capitanía de Puerto de
Coveñas, por su invaluable y decidido apoyo para el
desarrollo de la presente investigación.
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109
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 110-119 (2007)

ARTÍCULO

Contribución de la hidrografía histórica al

estudio de la cinemática de los fondos
marinos: evolución del golfo de Urabá,
Colombia
Contribution of historical hydrography to the sea bottom
cinematic study: evolution of the Uraba Gulf, Colombia
Fecha recepción: 2007-09-11 / Fecha aprobación: 2007-10-08

CIOH
www.cioh.org.co
Yves-François Thomas thomas@cnrs-bellevue.fr
Marcella Cesaraccio cesaraccio@cnrs-bellevue.fr
Université Paris Panthéon Sorbonne CNRS: Laboratoire de Géographie Physique, UMR 8591, 1
Place Aristide-Briand, 92195 Meudon Cedex, Francia
Carolina García-Valencia
colombiacgv@invemar.org.co
Invemar: Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras,
Cerro Punta de Betín, A.A. 1016, Santa Marta
Loïc Ménanteau
loic.menanteau@univ-nantes.fr
Université de Nantes CNRS: Géolittomer, UMR 6554, B.P. 81227, 44312 Nantes Cedex 3, Francia

Resumen
El reciente desarrollo de herramientas especializadas tanto en geomática, para la solución de problemas de
interpolación, como en sistemas de información geográfica, para la conformación, gestión y explotación de bases
de datos permitió el rápido desarrollo de estudios en hidrografía histórica. El estudio presentado se basa en una
serie de mapas batimétricos realizados entre 1938 y 2001, se muestra la influencia de contribuciones de sólidos en
la desembocadura del río Atrato sobre la cinemática del fondo de Bahía Colombia, situada al sureste del golfo de
Urabá. El área del fondo que no ha cambiado corresponde a un 35 % de la superficie de la Bahía. Los sectores en
erosión representan un 4% de la zona de estudio, se localizan esencialmente sobre la franja litoral y dan cuenta del
retroceso de la línea de costa. Sobre distintos brazos del río Atrato, el desplazamiento se evidencia en la
localizacion de estos sectores de forma secundaria hacia el oeste de la Bahía. Las zonas en acumulación
representan la mayor parte de los fondos de Bahía Colombia (61 %) en los que el material acumulado tiende a
cubrir y aplanar la topografía original. La acumulación sedimentaria media anual del orden de magnitud de 1,8 107
m3/año para el conjunto de Bahía Colombia, pone en evidencia, suponiendo una densidad en seco de 0,43, que se
6
acumula una masa de 8 10 ton/año, correspondiendo a la sedimentación de la totalidad de la carga de sólidos de los
ríos costeros y del río Atrato.

La confrontación de las velocidades de sedimentación actuales con las constatadas en el Holoceno plantea la
existencia de una crisis contemporánea de erosión, posiblemente debida al desarrollo de actividades humanas.

Palabras clave: SIG, mapas batimétricos, sedimentología, geomorfología, Colombia, Urabá (golfo de), Atrato
(delta del).

Abstract
The recent development of specialized tools, both in geomathics, for the solution of interpolation problems and the
geographical information systems, for the conformation, management and exploitation of data basis, permitted

110

the quick development of studies in historical
hydrography. The study submitted is based on a series
of bathymetric charts prepared between 1938 2001,
the influence of contributions of solids in the mouth of
the Atrato river is shown over the bottom of the
Colombia Bay cinematic, located southeast of the
Uraba Gulf. The area at the bottom which has not
changed corresponds to a 35% of the Bay surface. The
sectors in erosion represent some 4% of the study zone;
they are located essentially located on the littoral strip
and recount to the depression of the shoreline. On
different arms of the Atrato river, the displacement is
evident at the location of these sectors in a secondary
way westwards the Bay. The accumulation zones
represent the majority of the Colombia Bay (61%)
where the accumulated material tends to cover and
flatten the original topography.
The annual media sediment accumulation of the order
of magnitude of 1,8 107 m3/year for the set of
Colombia Bay, shows up that a mass of 8 106 ton/year
is accumulated, supposing a dry density of 0,43,
corresponding to the sedimentation of the whole of the
charge of the coastal rivers and the Atrato river solids.
The confrontation of the present sediment velocities
against those stated in the Holoceno brings up the
existence of a contemporary erosion crisis, possibly
due to the development of human activities.
Key words: SIG, bathymetric charts, sedimentology,
geomorphology, Colombia, Uraba (Gulf), Atrato
(delta).
Introducción
Los estudios de hidrografía histórica, realizados desde
mediados del siglo XX en Francia, Gran Bretaña y
Estados Unidos, utilizaron las grandes colecciones de
cartas de navegación constituidas desde el siglo XIX.
Los primeros estudios de crónicas de mapas
coincidieron con las zonas marinas donde los
levantamientos hidrográficos frecuentemente se
renovaban, principalmente en las áreas
geomorfológicamente activas (i.e. lagunas, estuarios y
deltas) o de importancia económica (sitios portuarios o
industriales).
En Francia, el ingeniero hidrógrafo J. Volmat condujo
el primer trabajo sobre este tema y publicó entre 1931 y
1953 una serie de contribuciones sobre “La Pointe de la
Coubre et ses abords du XVIIème siècle à nos jours” (La
barra de la Coubre y sus cercanías del siglo XVII hasta
Thomas et al.: Evolución de la batimetría del Golfo de Urabá
hoy). En Colombia, este tema es abordado por Molina
et al. (1992) quienes proponen la comparación de una
serie de perfiles batimétricos del golfo de Urabá.
Los trabajos de hidrografía histórica aumentaron por el
reciente desarrollo de herramientas especializadas
tanto en geomática, para la resolución de los problemas
de interpolación, como en sistemas de información
geográfica, para la constitución, gestión y explotación
de bases de datos. Así pues, Reeve et al. (2001)
pudieron cuantificar la evolución de los bancos
infralitorales de Great Yarmouth sobre la costa sureste
de Inglaterra aplicando el análisis en componentes
principales a una secuencia de levantamientos
hidrográficos. De la Torre et al. (2002) por su parte,
condujeron una reflexión sobre los métodos y límites
del empleo de las bases de información geográfica en
medio submarino basándose en el ejemplo de
levantamientos efectuados en la bahía del río Sena
(Francia).
El objetivo de este trabajo es mostrar la importancia de
la hidrografía histórica para evaluar la influencia de la
contribución de sólidos del río Atrato sobre la
cinemática de los fondos de Bahía Colombia (sureste
del golfo de Urabá) por medio de una serie de mapas
batimétricos realizados entre 1938 y 2001.
Marco físico
Las principales características de carácter geológico,
estructural, morfológico, hidrológico, climático y
geodinámico del golfo de Urabá que alberga en su
extremo sur la Bahía Colombia (Figura 1), se presentan
brevemente a continuación.
Morfología de los bordes y del fondo. El golfo de Urabá
es el más grande del Caribe colombiano. Sus costas
pertenecen a los departamentos de Antioquia (este y
sur) y Chocó (oeste). Se abre sobre 37 km entre punta
Arenas del Norte al este y el Cabo Tiburón al oeste.
Tiene 70 km de largo, un ancho máximo de 39 km entre
las puntas Triganá y Urabá, un ancho mínimo de 9 km
entre punta Las Vacas y la boca Urabá. Paisajes de
colinas bajas, acantilados, enseñadas, bahías, playas y
deltas caracterizan el borde del golfo cuyos relieves
periféricos, inferiores a 500 m, están principalmente
constituidos por rocas sedimentarias plegadas. A lo
largo de la orilla occidental del golfo, el litoral se
caracteriza por la presencia de una secuencia de rocas
de composición volcánica e intrusiva, a veces cortadas
en acantilados. Las isóbatas presentan una
111
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 110-119 (2007)
determinada sinuosidad en sus contornos, a excepción
de las localizadas delante de punta Arenas del Norte,
que indican la existencia de una pendiente suave y
regular hacia el centro del golfo. Existe una disimetría
entre los dos lados, presentándose al oeste una
morfología sinuosa y pendiente más fuerte. Los
cruceros del B.I. Ancón 'Urabá 2003' y 'Urabá 2004'
(Thomas et al, 2007) permitieron conocer que sus
fondos están mayormente compuestos por sedimentos
que pertenecen a las clases granulométricas de los
limos y arcillas (Figura 2).
Figura 1. Localización de Bahía Colombia al sur del golfo
de Urabá. Las líneas punteadas indican la localización de
los perfiles presentados en la figura 3.
Figura 2. Cartografía de la distribución de los sedimentos
que pertenecen a la clase granulométrica de los limos (a) y
de las arcillas (b) en el golfo de Urabá (datos del crucero del
B.I. Ancón “Urabá 2003”).
Las unidades morfosedimentarias del fondo (Molina et
al, 1992) fueron individualizadas a partir de perfiles
realizados con una ecosonda de baja frecuencia
(transductor ELAC de 12,5 Khz). Estos perfiles
112
muestran un sustrato subyacente a la superficie
irregular, surcada por canales cuya profundidad varía
en función de la posición con relación a la
desembocadura del río Atrato. Sobre los perfiles
realizados en boca Tarena, los principales canales
tienen una profundidad de 10 a 13 m mientras que a la
entrada del golfo estos últimos sólo alcanzan de 5 a 7
m. El origen de estos canales se remonta a la última
glaciación cuaternaria, cuando los ríos desembocaban
en la plataforma continental actual. Las capas
depositadas de sedimentos sobre este sustrato tienen
espesor variable; forman prismas sedimentarios de
forma cóncava cuyo espesor se reduce desde la línea de
orilla hacia el centro del golfo. El espesor de estas
acumulaciones, a veces superior a 20 m hacia la costa
se reduce a menos de tres metros en la entrada del golfo
(sector norte). Thomas et al, (2007) midieron el
espesor de estos depósitos del Holoceno en el sector de
Bahía Colombia usando una ecosonda ODEC
StrataBox equipada con un transductor de 10 kHz. El
estudio arrojó que en el fondo, existen capas de
sedimento cuyo espesor puede variar, siendo
generalmente entre 20 y 30 m (Figura 3).
Figura 3. Espesor de los depósitos Holoceno en el sector de
Bahía Cartagena por medio de una ecosonda ODEC
StrataBox equipada de un transductor de 10 kHz. La
localización se indica sobre la figura 1.
Climatología e hidrología del golfo de Urabá
La región del golfo de Urabá posee un clima húmedo
tropical, con una pluviosidad considerada entre las más
elevadas del mundo. Así pues, las precipitaciones
medias sobre la cuenca del Atrato son de 5.318

mm/año. Las lluvias más importantes tienen lugar entre
los meses de marzo y noviembre mientras que la
temporada menos húmeda corresponde a los meses de
diciembre a marzo. Las temperaturas medias anuales
son del orden de 27,2° C y las variaciones con relación
a la media mensual son inferiores a 2° C.
El río Atrato cuya cuenca se extiende en cerca de
35.000 km2 recibe sobre los 720 kilómetros de su curso
las aguas de mas de 150 ríos y vierte sus aguas en el mar
Caribe a través de 16 brazos diferentes, entre los
principales se pueden citar Leoncito I, II y III, Urabá,
Coco Grande, Matuntugo, Pavas I y II, Roto y Tarena.
La parte fundamental de las contribuciones al golfo se
hacen hoy por esta última boca. El caudal del Atrato
representa la parte la más importante de las
contribuciones hídricas al golfo de Urabá con un
promedio multianual medido sobre la estación de
Domingodó, de 4.155 m3/s (UNESCO, 2002). Cifras
poco diferentes de las reportadas por Lozano (1998):
4.500 m3/s. Numerosos ríos, de menor importancia
aportan también sus aguas al golfo de Urabá. Así pues,
de este a oeste se encuentran los ríos Mulatos (caudal
multianual promedio de 10,6 m3/s según IDEAM -
1995), Necoclí, Bobal, Caimán Viejo, El Totumo,
Caimán Viejo, Cirilo, Turbo (3,7 m3/s), Guadualito (2,6
m3/s), Currulao (9,8 m3/s), León (63,8 m3/s), Titumate,
Negro, Tolo, y Acandí. En su desembocadura, el Atrato
forma un delta ancho que ocupa el suroeste del golfo de
Urabá. La dinámica del delta y la importancia de las
contribuciones de agua dulce son los elementos
esenciales del comportamiento de tipo estuarino que
caracteriza al golfo de Urabá.
La dinámica marina actual
La marea del golfo de Urabá es de tipo mixto, su
régimen es de tipo micromareal. Es generalmente
inferior a 0,5m pero bajo los efectos unidos de la
presión y del viento puede alcanzar 1m. Se considera
generalmente que no tiene ningún efecto directo
apreciable en cuanto a la dinámica hidrológica o
sedimentológica (Lozano, 1998).
Las corrientes de Bahía Colombia se conocen gracias a
los trabajos de Lozano (1998). En superficie, la
corriente se establece en dirección del sur y está
vinculada al viento dominante y son prácticamente
independientes de la marea. A la profundidad de 5m, se
observan algunos cambios de dirección indicando la
Thomas et al.: Evolución de la batimetría del Golfo de Urabá
vuelta en profundidad hacia el norte de las aguas de la
bahía. Estas medidas confirman el esquema
generalmente reconocido (Molina et al, 1992): entrada
de las aguas al golfo por el costado occidental y salida o
evacuación por el costado oriental, tanto en superficie
como en fondo.
Las observaciones de olas sobre la plataforma del
Caribe colombiana se conocen a través de las datos
tomados por los VOS (Voluntary Observing Ship)
disponibles a través de la base de datos COADS
(Comprehensive Ocean Atmosphere Data Set) por una
parte, y de las medidas de los altímetros radares de los
satélites TOPEX-POSEIDON y JASON por otra
(Thomas, 2006-a y 2006-b). El sector de estudio
elegido está limitado por los paralelos 8 hasta 10° N y
los meridianos 76 a 78° W. La dirección de procedencia
principal del oleaje se establece tanto entre 315 y 75°
en temporada seca como en temporada húmeda. Un
segundo pico, menos importante, corresponde al sector
180 a 270° que aparece en temporada húmeda. A lo
largo del año, el período medio de olas oscila entre 5,5
y 6,5 segundos, y la altura media de las olas, entre 1,4
(mayo) y 2,0 m (enero). Los valores más probables de
las alturas de olas anuales y decenales son
respectivamente de 6,8 y 8,9 m en temporada seca y de
5,6 y 7,4 m en temporada húmeda.
Materiales y métodos
Mapas batimétricos trabajados
Cuatro mapas batimétricos fueron seleccionados para
el estudio (ver Tabla 1), publicados respectivamente
por la Defense Mapping Agency (mapas DMA 24515 y
24517) y por el Centro de Investigaciones
Oceanográficas e Hidrográficas (mapas CIOH 412 y
295).
Los cuatro documentos fueron realizados y publicados
en proyección Mercator, pero no todos tienen el mismo
referencial espacial: El mapa DMA 24515 se realizó
refiriéndose al datum Bogota Observatory, el mapa
DMA 24517 refiriéndose al datum Word Geodetic
System 1972 y los dos últimos (los mapas CIOH 295 y
412) refiriéndose al datum Word Geodetic System
1984. Entre tanto las sondas de todos los mapas,
recurren al mismo referencial hidrográfico: el nivel
medio de las bajas mareas de sicigias.
La realización de estos distintos mapas marinos se
enmarca entre 1938 y 2001, intervalo de tiempo
113
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 110-119 (2007)

durante el cual las técnicas tanto de localización como
de medida de la profundidad de agua evolucionaron
ampliamente. Las sondas adquiridas para hacer los
documentos más recientes se obtuvieron con ayuda de
GPS diferencial (para la localización) y ecosondas
verticales o multi haz de calidad hidrográfica asociados
a centrales e inercia (para la adquisición los datos de
balanceo y cabeceo) y de mareómetros (para la fijación
del nivel de referencia). Por el contrario, los primeros
datos fueron adquiridos empleando círculos
hidrográficos, de ecoscopio, o incluso de sondeos a
mano con línea y plomo, y de escalas de marea. La
interpretación de los resultados deberá pues tener en
cuenta esta evolución tecnológica.
del programa informático Didger ® de Golden
Software. Los datos adquiridos en brazas fueron
transformados en metros. Los datos disponibles en el
datum Bogota Observatory fueron convertidos al
datum Word Geodetic System 1984 empleando el
programa informático Geotrans ® de la Nacional
Imagery and Mapping Agency. Por último, las bases de
datos así constituidas fueron interpoladas empleando
el programa informático Surfer ® de Golden Software.
Las figuras 4-a y 4-b presentan respectivamente las
sondas de los mapas DMA 24515 y CIO 412.

Las fechas de toma de datos deberán también tenerse en

cuenta: los mapas DMA 24515 y CIOH 412 y 295 son
mapas originales; el mapa DMA 24517 es una
continuación del mapa CIOH 295. El mapa DMA
24515, publicado a escala del 1:100.000, muestra el
estado de los fondos observado en 1938. Por último, los
mapas CIOH 295 y 412, respectivamente publicados
en las escalas 1:35.000 y 1:100.000, indican el estado
de los fondos observado entre 1983 y 1990, luego entre
1983 y 2001, según la parte del mapa considerada. Un
hecho debe destacarse: a excepción del mapa DMA Figura 4. Puntos de sondeo de mapas hidrográficos (a)
24515 del Defense Mapping Agency de 1938 y (b) 412 del
24515, estos mapas sufren multitemporalidad: los
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas
levantamientos batimétricos que sirvieron a su de 2001.
realización se extendieron sobre una decena de años, o
incluso más.
Elaboración de Modelos Numéricos de Terreno
Sólo los dos mapas con mayor intervalo temporal
La interpolación espacial es un problema clásico de
fueron seleccionados, es decir los mapas DMA 24515
estimación de una función F(x), donde x = (x, y), en un
llevando las sondas observadas en un crucero
punto xp del plan a partir de valores conocidos de F en
hidrográfico del U.S.S. Bushnell en 1938 y COL 412
llevando aquéllas observadas durante misiones un determinado número m, de puntos circundantes xi
hidrográficas del CIOH realizadas entre 1983 y 2001. (Gratton, 2002) :
El intervalo de tiempo entre las distintas adquisiciones
se extiende pues, entre 45 años cuanto menos y 63 años
como máximo. El problema consiste en determinar la ponderación, i.e.
los Wi, de cada uno de los puntos circundantes. Se
Con el fin de determinar el orden de magnitud de la escogieron y se compararon dos técnicas de
evolución de los fondos de Bahía Colombia se interpolación: la interpolación por triangulación de
compararon los dos documentos seleccionados. Delaunay seguida de una interpolación lineal, y la
interpolación por kriging.
Análisis de información batimétrica
Las distintas etapas del procedimiento de análisis se Triangulación de Delaunay seguida de una
describen a continuación. Los mapas fueron interpolación lineal. El interpolador se compone de
escaneados a color en el espacio colorimétrico RGB a dos fases. Una primera, consiste en establecer una
razón de 300 puntos por pulgada. El contorno de la triangulación de Delaunay del conjunto de los puntos
línea de costa, las isobatas y las sondas fueron de medida. La segunda fase es la interpolación
rectificados geométricamente y extraídos por empleo propiamente dicha. El algoritmo crea una red de

114

triángulos en las formas optimizadas trazando
segmentos entre las sondas originales. Los puntos
originales se conectan de tal manera que ningún borde
de triángulo se entrecruce por otros triángulos, resulta
una malla de triángulos sobre el conjunto de la grilla de
puntos. Los tres puntos que definen cada triángulo
materializan un plan de inclinación y altitud conocidas
a la cual se aplica una interpolación lineal. Los
resultados de la interpolación siguen muy
estrechamente los datos originales en la medida en que
estos últimos se utilizan para definir los triángulos.
Este método proporciona un interpolador exacto. La
triangulación de Delaunay seguida de una
interpolación lineal da buenos resultados cuando los
datos se distribuyen regularmente sobre el conjunto de
la grilla. La grilla de datos que muestran sectores
desparramados por su parte se describen menos
perfectamente.
Interpolación por kriging. Este método geoestadístico
permite considerar los valores de una propiedad en
todo el espacio por interpolación exacta según el
concepto de variable regionalizada a partir del
parámetro de varianza (Matheron, 1970; Armstrong y
Carignan, 1997). El kriging proporciona una
estimación lineal no sesgada (media sin cambios) que
minimiza la variación del error de estimación.
Proporciona una única estimación para un modelo
matemático de variograma (gráfico que indica la
relación entre la varianza y la distancia) dado. El
variograma experimental es una función que
caracteriza el grado de coherencia espacial de los datos.
Su modelación es una etapa necesaria para realizar
estimaciones por kriging. Se propusieron numerosos
modelos de variogramas (Marcotte, 1991). Las figuras
5-a y 5-b presentan respectivamente los variogramas
de las sondas de los mapas DMA 24515 y CIO 412.
Figura 5. Variograma experimental omnidireccional con
ajuste de un modelo cuadrático (a) para las sondas de los
Thomas et al.: Evolución de la batimetría del Golfo de Urabá
mapas hidrográficos de 1938 (efecto pepita: 6, meseta:
122,5 y rango: 10200) y para (b) las sondas de 2001 con
ajuste de un modelo cuadrático (efecto pepita: 6, meseta: 79
y rango: 9000)
Las principales propiedades y características asociadas
al kriging se describen a continuación. Si se considera
un punto conocido se encuentra el valor conocido ya
que es un interpolador exacto. Presenta un efecto de
filtro puesto que los puntos, los más cercanos, reciben
los pesos más importantes (este efecto de filtro varía
según la configuración y según el modelo de
variograma utilizado para el kriging). Tiene en cuenta
la continuidad del fenómeno estudiado a causa de la
utilización del variograma. Finalmente efectúa
generalmente una suavización: las estimaciones son
menos variables que el contenido real que se pretende
estimar.
Resultados y discusión
Análisis de Modelos Numéricos de Terreno
Se presentan a continuación los resultados de las
interpolaciones de batimetría para Bahía Colombia
obtenidas con una grilla de interpolación de 498 líneas
por 440 columnas tanto por triangulación de Delaunay
como por kriging a partir de los mapas DMA 24515
(Figura 6) y CIO 412 (Figura 7). Como se podía
esperar, la interpolación por triangulación de Delaunay
da buenos resultados en el centro de la bahía, donde los
datos se distribuyen de manera regular sobre el
conjunto de la grilla, pero resulta menos eficaz, donde
se distribuyen desigualmente las sondas y donde hay
gran pendiente, i.e. sobre los márgenes de los brazos
del Atrato. Para estudiar la evolución de los fondos
sobre el intervalo de tiempo 1938 - 2001, solamente se
tomaron los resultados proporcionados por el método
kriging. La Figura 8 muestra las curvas de frecuencia
de ocurrencia de las profundidades para cada uno de
estos dos mapas. Altas frecuencias a 35m y 30m
desaparecen sobre el mapa de 2001 y las frecuencias de
26m y 23m se unen para no formar más que un aumento
a los 22m. En general, se confirma la reducción de altas
frecuencias, acompañado de su desplazamiento hacia
profundidades menores.
115
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 110-119 (2007)
Figura 6. Modelo numérico de terreno de Bahía Colombia,
sur del golfo de Urabá (Colombia), obtenido por
triangulación e interpolación lineal de costa y sondas (a) del
mapa hidrográfico 24515 levantado por el Defense
Mapping Agency (1938) y (b) del mapa hidrográfico 412
levantado por el Centro de Investigaciones Oceanográficas
e Hidrográficas (2001).
Figura 7. Modelo numérico de terreno de Bahía Colombia,
sur del golfo de Urabá (Colombia), obtenido por “kriging” a
partir de la línea de costa y sondas (a) del mapa hidrográfico
24515 levantado por el Defense Mapping Agency (1938) y
(b) del mapa hidrográfico 412 levantado por el Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas (2001).
La comparación realizada de los mapas, permite
considerar la sedimentación en términos absolutos: DZ
= Z2001 - Z1938, i.e. en metros entre las dos fechas de
publicación. Sin embargo, cada punto de estos MNT
debe ser ponderado por un factor que tiene en cuenta el
intervalo de tiempo efectivo que pasó entre los
levantamientos hidrográficos efectuados en el crucero
del U.S.S. Bushnell en 1938 y los levantamientos de las
misiones hidrográficas que condujeron a la elaboración
del mapa COL 412. El intervalo de tiempo necesario
para la realización de un mapa hidrográfica impone la
definición de un término de ponderación Kaño para cada
pixel del mapa considerando el intervalo cronológico
116
real entre levantamientos para cada punto del espacio
cartografiado. El valor de este término se presenta en la
Figura 9, su utilización permitió calcular la velocidad
de erosión o sedimentación anual: DZaño = DZ / Kaño
expresadas en m/año para el intervalo temporal 1938-
2001 (Figura 8).
Figura 8. Cartografía de los sectores en acumulación y en
erosión, expresadas en m/año, en Bahía Colombia, sur del
Golfo de Urabá (Colombia), para el intervalo temporal
1938-2001.
Volumen sedimentado o erosionado
Se considera que los mapas hidrográficos no presentan
un error más importante que un pie entre 0 y 30 m de
profundidad (Cailliau, 1978). Es pues a un error
máximo de 2 * 0,3 m 0,01 m/año, que deberá ser
tenido en cuenta para el intervalo de tiempo
considerado. Las evoluciones inferiores o iguales al
centímetro al año, se pueden calificar de dudosas.
El volumen de sedimento acumulado en Bahía
Colombia entre 1938 y 2001 es aproximadamente de
109 m3, o sea 1,8 107 m3/año. Los sectores estables
representan un 35% de los fondos y los sectores en
erosión, un 4% de los fondos. Estos últimos se
localizan esencialmente sobre la franja litoral donde
revelan el retroceso de la línea de costa sobre distintos
brazos del río Atrato, además del desplazamiento que
indican hacia el oeste, de Bahía Colombia. Las zonas
en acumulación representan la parte esencial de los
fondos (61 %) dónde los materiales acumulados
tienden a cubrir y alisar la topografía original como lo
certifican distintos perfiles de la bahía (Figura 9).

Figura 9. Perfiles biométricos en el centro y sur del golfo de
Urabá (Colombia) realizados a partir del modelo numérico
de terreno presentado en figura 7. La localización de los
perfiles se indica sobre la figura 1.
Figura 10. Histogramas de altura de sedimentos
erosionados y/o acumulados por tramo de profundidad de
agua. Las profundidades de referencia corresponden al
mapa hidrográfico 24515 del Defense Mapping Agency
(1938). La erosión se hace poco importante a partir de la
profundidad de 20 m, la acumulación crece linealmente a
medida que la profundidad aumenta.
Thomas et al.: Evolución de la batimetría del Golfo de Urabá
Un análisis más detallado, conducido por tramo
batimétrico de 5 en 5 metros (Figura 10), determina
que los sectores en erosión, para la mayoría, se
restringen a profundidades inferiores a 20m mientras
que los sectores en acumulación están presentes a
cualquier profundidad. Por otra parte, en las mayores
profundidades se encuentran las velocidades de
sedimentación más importantes (Tabla 1 y Figura 11).
Este aumento de la velocidad de sedimentación debe
relacionarse con la disminución de la agitación del mar
debida al viento, en los fondos. Varios ensayos de
simulación de oleaje conducidos por los autores en el
golfo de Urabá, usando el modelo SWAN (Ris, 1997),
han mostrado que el oleaje debido al mar de fondo no
puede afectar la partes central y occidental de Bahía
Colombia.
Figura 11. Gráfico cartesiano de la velocidad de
sedimentación en función de la profundidad de deposición.
Las profundidades de referencia corresponden a las del
mapa hidrográfico 24515 del Defense Mapping Agency
(1938). La acumulación se expresa en mm/año.
Las medidas realizadas en Bahía Colombia por dos de
los autores (YFT y CGV) conducen a la estimación de
un valor medio de la densidad seca de los sedimentos
igual a 0,43. Los depósitos anuales de 1,8 107 m3
corresponderían a la acumulación de una masa de
sedimento del orden de 7,9 106 ton/año.
La carga de sólidos de los ríos del golfo de Urabá se
conoce gracias a las mediciones del IDEAM (1995) y a
los trabajos de Restrepo y Kjerfve (2000) y Restrepo et
al. (2006). Estos autores consideran que la
contribución de sólidos recibida por el golfo de Urabá,
en realidad es esencialmente para Bahía Colombia, del
orden de 1,3 107 ton/año. La contribución del Atrato se
estima en 1,1 107 ton/año.
La confrontación de nuestros resultados con las
estimaciones de Restrepo y de Kjerfve (2000) llevan a
pensar que cerca del 61 % de la totalidad de la carga de
117
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 110-119 (2007)

Tabla 1. Mapas batimétricos seleccionados para el los problemas de interpolación, así como para a
estudio del golfo de Urabá. creación, gestión y utilización de las bases de datos
Mapa 24515 24517 412 295 cartográficos (SIG). La disponibilidad de dos mapas
Editor DMA DMA CIOH CIOH hidrográficos publicados en 1938 (mapa DMA 24515)
Título golfo de Urabá Bahía Colombia golfo de Urabá Bahía Colombia
y en 2001 (mapa CIO 412) condujo al estudio de la
Escala 1:100.000 1:30.000 1:100.000 1:35.0 00
Datum 1 2 3
cinemática de los fondos marinos de Bahía Colombia
OB ( ) WGS 72 ( ) WGS 84 ( ) WGS 84
Fecha Septembre 1979 Juin 1984 Septembre 2001 Janvier 1995
(sureste del golfo de Urabá). Las principales
Edición Segunda Primera Segunda Segunda conclusiones son las siguientes: un 35% de la zona de
Formato 789.0 x 1161.0 918.6 x 1044.6 752.8 x 940.1 787.4 x 895.3 estudio es estable y solamente 4 %, está en erosión,
Datos 1938
de 1977 hasta de 1983 hasta de 1983 hasta esencialmente sobre la franja litoral (distintos brazos
1980 2001 1990
Sondas Brazas Metros metros metros
del río Atrato, oeste de Bahía Colombia) mientras que
Nivel MLWS ( )
4
MLWS ( )
4
NMBS ( )
5
NMBS ( )
5 los espacios en acumulación corresponden a la
Fuente Original Col 295 original original mayoría de los fondos de la bahía (61 %) dónde los
Límite 77°23’W y
76°57’W y 8°10’N 77°23’W y 8°44’N 76°57’W y 8°10’N
materiales tienden a cubrir y alisar la topografía
NW 8°55’N
76°40’W y
original.
Límite SE 76°42’W y 7°53’N 76°42’W y 7°53’N 76°42’W y 7°53’N
7°52’N

(1): Bogota Observatory, (2): Word Geodetic System 1984,

Tabla 2. Velocidad de sedimentación entre 1938 y 2001
(3): Word Geodetic System 1984, (4): Mean Low Water in
expresada en función de la profundidad de depositación.
Sysigies, (5): Nivel Medio de bajamar en Sicigias
Profundidad Observaciones Erosión promedio
(m) (número) (mm/año)
sólidos de los ríos costeros y del río Atrato se depositan 2,5 49.043 12,36
en Bahía Colombia.
7,5 41.613 23,27
12,5 18.201 28,36
Esta migración limitada a escala local de los 17,5 21.512 32,55
sedimentos en suspensión es confirmada tanto por el
22,5 43.162 36,55
análisis de 9 años de imágenes del radiómetro
27,5 21.082 47,27
SEAWIFS del satélite SEASTAR (García Valencia et
32,5 3.901 82,18
al, 2007) que revela la presencia excepcional de
37,5 1.680 67,27
penachos expulsados desde el golfo de Urabá como por
campañas in situ de medidas de turbidez que revelan Los sectores erosionados se localizan en gran parte
valores inferiores a 0,3 NTU y concentración de sólidos hacia las profundidades inferiores a 20m, mientras que
inferiores a 1 mg/l sobre la totalidad de la altura de la los sectores en acumulación, están presentes a
columna de agua hacia el extremo septentrional del cualquier profundidad. Es a las profundidades más
golfo de Urabá. importantes que se encuentran las mayores
velocidades de sedimentación: 0,023 m/año a 10m de
La velocidad de sedimentación observada varía entre 1 profundidad, 0,033m/año a 20m, 0,047m/año a 30m y
y 8 cm/año (Tabla 2). Debe compararse con la 0,067m/año a 40m. Una acumulación sedimentaria
observada entonces durante el Holoceno (Figura 3) que anual media de cerca de 1,8 107 m3/año pudo ser
se estima en 0,2 cm/año. La hipótesis de una fuerte estimada.
compactación de los sedimentos después de su
depósito no basta para explicar tales diferencias. Estos Al suponer una densidad seca cercana a los 0,43, los
valores plantean una crisis erosiva actual que podría ser depósitos anuales corresponderían a una masa de 7,9
explicada por las actividades humanas sobre la cuenca 106 ton, es decir cerca del 61 % de la totalidad de la
del río Atrato y demás corrientes de agua que llegan al carga sólida de los ríos costeros y del río Atrato.
golfo.
La confrontación de las velocidades de sedimentación
actuales (de 1 hasta 8 cm/año) con las estimadas en el
Conclusión Holoceno (0,2 cm/año) ponen de manifiesto, incluso
después de considerar el apisonamiento de los
La búsqueda de hidrografía histórica cuantitativa, es ya sedimentos antiguos, la existencia de una crisis
posible por el desarrollo de herramientas contemporánea erosiva posiblemente debida al
especializadas tanto en geomática, para la solución de desarrollo de actividades humanas.

118

Agradecimientos
Los autores desean agradecer muy especialmente
COLCIENCIAS e INVEMAR que financió esta
investigación en el marco del convenio 175/97
“Movilidad de investigadores” y el CIOH que puso a
disposición sus archivos cartográficos.
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estudio del golfo de Urabá.
119
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)

ARTÍCULO

Variación espaciotemporal de los

componentes fisicoquímico, zooplanctónico y
microbiológico en la Bahía de Cartagena
Temporary space variance of the physical chemical
components, Cartagena Bay zooplankton and
microbiological organisms

Fecha recepción: 2007-08-21 / Fecha aprobación: 2007-10-17

CIOH
www.cioh.org.co
Mary Luz Cañón Páez, mcanon@cioh.org.co
Gustavo Tous, gtous@cioh.org.co
Karen López, karbact27@yahoo.com
Rossana López
Fernando Orozco, forozco84@gmail.com
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas - CIOH
Isla de manzanillo, Cartagena de Indias, AA 982, D.T y C., Colombia

Resumen
El trabajo tuvo como finalidad realizar el levantamiento de información fisicoquímica (nutrientes, oxígeno
disuelto, temperatura, salinidad, pH, turbidez, sólidos suspendidos totales), biológica (zooplancton, pigmentos)
y microbiológica (Enterococos intestinales, Salmonella sp., Shigella sp., Pseudomonas sp., Coliformes totales,
Escherichia coli, Vibrio cholerae y hongos) en el estuario de la Bahía de Cartagena ubicado en la costa norte de
Sur América, sector del Caribe colombiano entre los 75º30'-75º36'W y 10º26'-10º16'N. Lo anterior, con el fin de
dar continuidad a la recolección de información contemplada en el proyecto “Presencia de organismos exógenos
y patógenos en aguas de lastre de buques de tráfico internacional”, para realizar una caracterización línea base de
la bahía, generar información actualizada y establecer la presencia de posibles especies invasoras por la
descargas de aguas de lastre.

Para la toma de información en campo se emplearon metodologías previamente documentadas y validadas por el
laboratorio de química del Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas (CIOH), las cuales
contemplaron la toma de muestras de agua en 10 estaciones de la Bahía de Cartagena, tres profundidades
(superficie, media y fondo) y una periodicidad de toma de las mismas de quince días, durante 10 meses (febrero a
noviembre de 2006). Para evaluar la calidad sanitaria de las aguas, se tomó como referencia la regla 2D de la
convención establecida por la Organización Marítima Internacional OMI de 2004, sobre la eficacia de la gestión
del agua de lastre.

De este modo, se pudo establecer la variación espacio-temporal de los parámetros fisicoquímicos, observándose
que durante las épocas de lluvia y transición se reportaron las mayores concentraciones de pigmentos, sólidos
suspendidos totales y turbidez en la capa superficial, mientras que en las capas del medio y fondo durante las
temporadas seca y de transición, la mayor concentración fue de nutrientes (nitritos, ortofosfatos).

120

En cuanto a las variables microbiológicas estudiadas,
se reportaron valores de Coliformes totales, E coli y de
Enterococos intestinales por encima de los límites
permisibles establecidos por la OMI/2004, razón por
la cual, no se recomienda la toma de lastre en ningún
punto de la bahía de Cartagena, sino más allá de las 12
millas. Con lo anterior, se minimiza el riesgo de
contaminación a puertos internacionales y se evita el
transporte de especies nacionales a otras áreas. Cabe
mencionar que durante el estudio no se reportó la
presencia de Vibrio Cholerae.
Finalmente en el componente zooplanctónico, se
siguen encontrando nuevos reportes, todos
pertenecientes a la clase Malacostraca a saber: Peisos
petrunkevitchi (Sergestidae), Platysanthus crenulatus
(Xanthidae), Callinectis sapidus (Portunidae),
Xiphopenaeus kroyeri (Penaeidae), Acanthocyclus
gayi (Atelecyclidae), Halicarcinus planatus, Alpheus
armillatus (Alpheidae), Alpheus haterochaelis
(Alpheidae), Betaeus lilianae (Alpheidae),
Loxopagurus loxochelis (Diogenidae), Pachicheles
haigae (Porcellanidae), Parapagurus Diógenes
(Parapaguridae), Plagusia chabrus (Grapsidae),
Porcellana sigsbeiana (Porcellanidae), Polyonyx
quadriungulatus (Porcellanidae), Ocypode quadrata
(Ocypodidae), Corystoides chilensis (Atelecyclidae),
Chorismus antarcticus (Hippolytidae).
Palabras clave: Contaminación marina, parámetros
fisicoquímicos, microbiológicos, plancton, variación
estacional, Bahía de Cartagena.
Abstract
The finality of this work was the gathering of physical
chemistry (nutrients, dissolved oxygen, temperature,
saline, pH, turbid, total suspended solids), biological
(zooplankton, pigments) and microbiological
(intestinal Enterocoeles, Salmonella sp., Shigella sp.,
Pseudomonads sp., total Coliforms, Escherichia coli,
Vibrio choleroe and fungus) data in the estuary of the
Bay of Cartagena located in the north coast of South
America, Colombian Caribbean sector within 75o30'-
75o36'W and 10o26'-10o16'N. The preceding, with
the finality of providing the continuance in the re-
Cañón et al.: Calidad de las agua de Bahía de Cartagena
collection of information considered in the project
“Presence of Exogenous Organisms and Panthogens
in Vessel ballast Waters Of International Traffic”, to
execute a linear characteristic base of the bay,
generate actualized information and establish the
presence of possible invading species due to the
discharge of the ballast waters.
For the information taking in the field, previously
documented methodologies were applied and
validated by the Oceanographic and Hydrographic
Research Center (CIOH), in which considered the
water sample taking from 10 stations of the Bay of
Cartagena, three depths (surface, middle, and bottom)
and one periodicity taking of same of fifteen days
during ten months (February through November,
2006). To assess the sanitary quality of the waters, the
2D rule of the convention established by the
International Maritime Organization IMO Of 2004
was used as reference, based on the management of
the efficiency of the ballast water.
This way, space-time variation of the physical
chemicals could be established , observing that in the
rainy season and transition periods the largest
pigment concentrations were reported, total
suspended solids and turbid on the superficial layer,
while in middle and bottom layers during the dry
seasons and the transition periods, the largest
concentration was of the nutrients (nitrates,
orthophosphates).
As to the variables microbiological studied, total
Coliforms are reported, E coli and of intestinal
Enterocoeles above the established permitted limits
of the IMO/2004, and due to this fact, the ballast
taking is not recommended in any point of the Bay of
Cartagena area, only twelve miles beyond. Due to the
foregoing, international ports minimize the risk of
contamination and the transportation of national
species to other areas is avoided. It is worth
mentioning that throughout the study the presence of
Vibrio choleroe was not reported.
Finally in the zooplankton component, new reports
are constantly found, all belonging to the
Malacostraca class, that is: Peisos petrunkevitchi
(sergestidae), Platysanthus crenulatus (Xanthidae)
121

Callinectis sartidus (Portinidae), Xiphopenaeus
Kroyeri (Penaeidae), Acanthocyclus gayi
(Atelecycledae), Halicarcinus planatus, Arpheus
Armillatus (Apheidae), Alpheus haterochaelis haigae
(Alpheidae) Betaeus liliane (Alphedae), Loxopagurus
joxocheois (Diogenidae), Pachichelis haigae
(Porcellanidae), Parapagunos Diogene
(Parapaguridae), Plagucia chabrus (Grapsidae).
Porcellana sigsbeiana (Porcellanidae), Polyonyx
quadriungulatus ( Porcellanidae), Ocypode quadrata
(Ocypodidae), Corystoides chilensis (Atelecyclidae),
antarticus (hippolytidae).
Key Words: Marine contamination, physical
chemicals, microbiological, plankton, stationary
variation, Bay of Cartagena.
Introducción
En más de 350 estudios realizados a la Bahía de
Cartagena entre los 70’s hasta la actualidad, se ha
concluido que la contaminación de la bahía obedece a
varios factores, entre los que se pueden citar los
vertimientos de aguas negras; los aportes
provenientes del Canal del Dique; las descargas
industriales, los vertimientos de hidrocarburos en sus
diferentes formas y transporte y las descargas de
buques. De las anteriores, la más preocupante por sus
implicaciones de riesgo en la comunidad, es el
vertimiento de aguas negras y se sabe que los niveles
de contaminación por coliformes se presentan en
forma crítica en la temporada de lluvias; sin embargo a
lo largo del año se ha observado una contaminación
crónica de la bahía desde el punto de vista sanitario
(Tuckovenko & Rondon, [1]; Urbano, [2]).
La industria también ha influido de manera
significativa en la descarga de contaminantes a este
estuario, aportando buena parte de los residuos de
aceites, combustibles, fertilizantes, vertimientos
típicamente industriales como carbonatos, amoniaco,
fenoles, aguas calientes, entre otros (INVEMAR [3];
122
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)
CARDIQUE [4]; UNOPS-CIOH, [5]). Cabe
mencionar que el control ejercido sobre los
vertimientos industriales de las grandes empresas ha
avanzado rápidamente en los últimos años en
Cartagena. En este sentido, el número de empresas
controladas a través del convenio de producción más
limpia, liderado por el Ministerio el medio ambiente
(MMA) y la Corporación Autónoma Regional del
Canal del Dique (CARDIQUE), ha permitido
disminuir las concentraciones en los vertimientos,
permitiendo llevar al mínimo las cargas de
contaminantes (INVEMAR [3]).
Continuando con el levantamiento de información en
campo, para determinar la calidad de las aguas de la
Bahía de Cartagena e identificar las características
ambientales actuales de la misma a través del
proyecto de investigación “Presencia de organismos
exógenos y patógenos en aguas de lastre de buques de
tráfico internacional”, se ha venido valorando
estacionalmente desde el punto de vista
fisicoquímico, planctónico y microbiológico dicha
calidad de las aguas. De este modo, el trabajo buscó
complementar la información recolectada en años
anteriores (Rondon et al., [6], Cañón et al., [7],
Gavilán et al., [8]), de manera que se pudiera observar
en lapsos de tiempo más cortos la dinámica de estos
componentes y sus variaciones a lo largo de las tres
épocas climáticas características de la región.
Adicionalmente se pretendió generar el
levantamiento de información zooplanctónica que
permitiera establecer la variación de la comunidad y
la identificación de posibles invasores.
El trabajo se desarrollo en la Bahía de Cartagena, la
cual se encuentra ubicada en la costa norte de Sur
América, en el Suroeste, Mar Caribe colombiano
departamento de Bolívar, entre las coordenadas
10º26' a 10º16' N y 75º30' a 75º36' W. Dado que a esta
bahía llega el aporte de aguas continentales a través
del Canal del Dique, en la actualidad se le da el
calificativo de estuario.

Figura 1. Área de estudio, Bahía de Cartagena con la
localización de las estaciones monitoreadas.
La bahía con una superficie de 82 km2 y una
profundidad promedio de 16 m, consta de dos partes:
la bahía externa e interna. La primera está conectada,
con el Mar Caribe a través de dos bocas (Bocachica y
Bocagrande), mientras que la segunda se ubica en la
parte norte y no tiene intercomunicación directa con el
mar (Tuckovenko & Rondon, [1]; Garay & Giraldo
[9]; Urbano, [2]; Plagiardi et al., [10]).
Materiales y métodos
Fueron programadas 20 salidas de campo a la Bahía de
Cartagena, siguiendo la grilla previamente
establecida en los años anteriores (Cañón et al., [7])
(figura 1) y tres estaciones de referencia adicionales
para el complemento de la información técnica.
Dichas estaciones se ubicaron en el sector sureste
(boya 10) y centro de la bahía (boyas 27 y 21).
Cañón et al.: Calidad de las agua de Bahía de Cartagena
Para la toma de parámetros químicos (oxígeno
disuelto, demanda bioquímica de oxígeno, nutrientes,
salinidad, turbidez, sólidos suspendidos totales) se
tomaron en campo muestras de agua en tres
profundidades (superficie (0.5 m bajo el agua), media
agua y fondo (1 m por encima del fondo)) a través del
lanzamiento de una botella Niskin de 5 litros. En
campo, el contenido de las botellas fue reenvasado en
galones de 5 litros, previamente marcados y
preservados en hielo para su posterior procesamiento
en el laboratorio.
Adicionalmente en el campo se registró la lectura de
datos correspondientes a oxígeno disuelto, pH,
temperatura del agua, salinidad y turbidez, con sondas
multiparamétricas de marcas WTW, HORIBA, WPA,
refractómetro y turbidímetro, de cada una de las
muestras. También se registró información sobre la
identificación de la muestra, hora de toma de la misma
y condiciones meteorológicas en el momento de la
toma, junto con observaciones de características
locales que complementarán la interpretación
posterior de los datos.
En cuanto a la toma de muestras de zooplancton, se
realizó un arrastre horizontal durante 1 minuto a lo
largo de cada estación, en el cual se utilizó una red de
de 55 μm. Esta red tiene un diseño cónico con un
diámetro máximo de boca de 25cm y una longitud de
80 cm. En el extremo posterior de la red lleva
adaptado un sistema colector o concentrador de la
muestra filtrada, que entra a través de la boca hasta
dicho dispositivo. Esta red se dispuso a un lado de la
popa de la lancha y se le adaptó un flujómetro en la
boca para estimar el volumen de agua filtrada. Una
vez realizado el arrastre se procedió al marcado y
preservación de las muestras con formalina al 4%
neutralizada con bórax, para su posterior análisis en el
laboratorio.
En el caso de la clorofila se tomaron muestras con
botella Niskin en cada estación a tres profundidades,
las cuales fueron transvasadas en galones de 5 litros,
refrigeradas y marcadas para su posterior análisis en
el laboratorio.
Para evaluar el componente microbiológico, se
tomaron muestras de las estaciones en tres
profundidades, el agua se colectó en botellas
previamente esterilizadas y se refrigeraron las
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 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)

muestras para su posterior análisis en el laboratorio. Al
igual que en los numerales anteriores, se consignó
información sobre las muestras en los registros
correspondientes acuerdo con el procedimiento
operativo de toma de las muestras.
Para el procesamiento de muestras se emplearon
métodos previamente validados por el laboratorio de
química, acuerdo con el manual de procedimientos
técnicos y referidos en la tabla 1.
Para el análisis e interpretación de datos se aplicaron
paquetes estadísticos (minitab, Excel y Primer) y
graficadores (Surfer) de software que permitieron
visualizar la distribución y comportamiento de las
variables analizadas a los largo de todo el período
estudiado. Actualmente este tipo de análisis es el que
se debe establecer para incorporar la información de
datos fisicoquímicos, microbiológicos o biológicos a
procesos más complejos, de manera que se pueda
observar rápidamente la situación de la calidad de las
aguas en el área de estudio.

Tabla 1. Métodos, técnicas y especificaciones empleadas para el análisis de los

parámetros físicos, químicos y biológicos de las muestras colectadas.

PRODUCTOS TIPO DE ENSAYO

O PROPIEDADES
MATERIAL MEDIBLES RANGO ESPECIFICACIONES, NORMA O TÉCNICA UTILIZADA
A ENSAYAR DE MEDIDA

pH
3.5 hasta 10 Método potenciométrico, MPT – Q. 05. [11]

AMONIO Método colorimétrico de azul de indofenol y posterior lectura de ésta por

0.1 hasta 0.8 mg/L espectrofotometría MPT – Q. 13. [12]

Método colorimétrico, coloración de las muestras con soluciones con

NITRITO
sulfanilamida y diclorhidrato de N-(1-naftil) etilendiamina y posterior
0.02 hasta 0.5 mg/L
AGUAS lectura de ésta por espectrofotometría. MPT – Q. 15. [12]
MARINAS Y
ESTUARINAS

Método colorimétrico en el cual se forma un complejo y la subsiguiente

ORTOFOSFATOS reducción a un complejo azul cuya intensidad se mide
0.02 hasta 0.5 mg/L espectrofotométricamente. MPT – Q. 15. [12]

SÓLIDOS Método secado a 105º C. La técnica utilizada es gravimetría. En esta se

SUPENDIDOS mide específicamente el total de residuos sólidos filtrables a través de una
TOTALES membrana. MPT–Q.21. APHA-AEEA-WEF. [13]

DEMANDA
Método Winkler. La técnica incubación y titilación
BIOQUÍMICA DE
MPT – Q. 27. APHA-AEEA-WEF. [13]
OXÍGENO

124
 Cañón et al.: Calidad de las agua de Bahía de Cartagena

PRODUCTOS TIPO DE ENSAYO

O PROPIEDADES
MATERIAL MEDIBLES RANGO ESPECIFICACIONES, NORMA O TÉCNICA UTILIZADA
A ENSAYAR DE MEDIDA
ZOOPLANCTON Método observación al esteroscopio

COLIFORMES Método recuento de colonias, a través de la técnica f iltración por

TOTALES membrana. MPT–M.01. APHA-AEEA-WEF. [13]

COLIFORMES Método recuento de colonias, a través de la técnica filtración por

FECALES membrana. MPT–M.02. APHA-AEEA-WEF. [13]
AGUAS
MARINAS Y
ESTUARINAS

Vibrio cholerae Método Enriquecimiento Selectivo y aislamiento TCBS

MPT – M. 04. APHA-AEEA-WEF. [13]

Método recuento de colonias, a través de la técnica siembre en

HONGOS profundidad. MPT–M.08. APHA-AEEA-WEF. [13]

Método recuento de colonias, a través de la técnica siembre en

Pseudomonas sp. profundidad. MPT–M.08. APHA-AEEA-WEF. [13]

Salmonella sp y Método recuento de colonias, a través de la técnica siembre en

Schigella sp profundidad. MPT–M.08. APHA-AEEA-WEF. [13]

125

Resultados y discusión
Parámetros fisicoquímicos
Durante el período de estudio el pH en la Bahía de
Cartagena varió entre 7.52 y 8.72 unidades,
observándose los valores más altos en las tres
profundidades durante la temporada de lluvias,
seguidos por la época seca y reportándose los más
bajos para la temporada de transición. Se reportaron
valores promedio entre 7.96 y 8.56 unidades de pH.
Igualmente se observó que los valores más altos se
observaron para las estaciones Ecopetrol, Contecar y
boya 21 (figura 2).
De esta manera, se observó que los valores de pH,
registrados para la bahía están por encima del rango
establecido para las aguas marinas (7.5 a 8.4),
significando que en la bahía se observan condiciones
del medio alcalinas. Los valores altos de pH durante la
estación de lluvia y en las estaciones del fondo, se
explican porque en esta época al presentarse un
aumento de nutrientes por las lluvias, hay
disponibilidad de alimento el cual hace que aumente la
productividad del sistema. En este sentido, al haber
mayor actividad productiva se consume el CO2,
haciendo que el pH aumente. Dicho aumento se debe a
que la baja en concentración del CO2 ocasiona a su vez
una disminución en la concentración del ión hidroxilo
(H+) y por ende un aumento en el pH [14].
2a. 2b. 2c. 2d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
2 f. 2g. 2h 2 i.
Capa del medio Seca Transición Lluvia
2 j. 2k. 2l 2m .
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 2. Variación espacio-temporal del pH en la Bahía de
Cartagena. En el gráfico se representa con la línea roja a la
época seca, con la verde a la de transición y con la azul a la
de lluvias. A continuación de cada gráfico se ilustran los
contornos para cada capa de la columna de agua durante las
tres temporadas climáticas.
126
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)
La concentración de oxígeno durante los tres períodos
climáticos y para la columna de agua varió entre 2 y
8.7 mg/L (figura 3). De igual forma, se pudo observar
que las mayores concentraciones (superiores a 5
mg/L) se reportaron en la capa superficial durante las
tres temporadas del año. Por el contrario, en las capas
del medio y fondo se mantuvieron niveles más bajos
(2 y 5 mg/L) con excepción de la boya 2, la cual se
encuentra ubicada fuera de la bahía interna y está
influenciada por la dinámica del océano abierto
(figura 1).
Este comportamiento se puede explicar por la
incorporación a las capas superficiales de este gas
desde la atmósfera, de modo que su concentración
está determinada en gran parte por su solubilidad en el
agua de mar [14]. También se observó que durante las
temporadas seca y de transición, se presentaron
valores más altos en las capas del medio y del fondo (3
y 6 mg/L) con respecto a la temporada de lluvias (2 y 5
mg/L).
Esta situación puede, de igual manera, atribuirse al
intercambio de este gas con la atmósfera y su
incorporación a la columna de agua, a través de
procesos de mezcla generados por los vientos
predominantes durante esta época y al mayor
consumo durante la época de lluvias por parte de los
consumidores y productores.
3a. 3b. 3c. 3d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
3e. 3f. 3g. 3h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
3i. 3j. 3k. 3l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 3. Variación espacio-temporal de oxígeno disuelto
(mg/L) en la Bahía de Cartagena. En el gráfico se representa
con la línea roja a la época seca, con la verde a la de
transición y con la azul a la de lluvias. A continuación de
cada gráfico se ilustran los contornos para cada capa de la
columna de agua durante las tres temporadas climáticas.

En cuanto a la demanda bioquímica de oxígeno se
observaron valores entre 0.1 y 3.8 mg/L, registrándose
los valores más altos durante la temporada de
transición y lluvias en Contecar, Néstor Pineda, boya
30, boya 21 (figura 4). Dichos valores pueden
explicarse por la cercanía o influencia de estas
estaciones a zonas de aportes de materia orgánica
como lo son el Canal del Dique, el emisario submarino
y distintos caños de aguas servidas que realizan sus
aportes a la bahía. En superficie, durante las tres
épocas, se observaron las concentraciones más altas
de DBO5, con respecto a las estaciones del medio y
fondo, característica que puede atribuirse a la
influencia directa sobre las capas superficiales de
aguas servidas o del Canal del Dique. Asimismo, se
pudo observar que en el fondo durante la temporada de
lluvias se presentó alta demanda en las boyas 30 y 21,
las cuales están próximas a la desembocadura del
emisario submarino, razón por la cual se consigue
explicar los valores reportados.
4a. 4b. 4c. 4d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
4e. 4f. 4g. 4h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
4i. 4j. 4l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 4. Variación espacio-temporal de la demanda
bioquímica de oxígeno disuelto- DBO5 (mg/L) en la bahía
de Cartagena. En el gráfico se representa con la línea roja a
la época seca, con la verde a la de transición y con la azul a la
de lluvias. A continuación de cada gráfico se ilustran los
contornos para cada capa de la columna de agua durante las
tres temporadas climáticas.
En las zonas estuarinas la salinidad presenta una
variación estacional notable. Generalmente
disminuye en la época de lluvias y aumenta en la de
sequía. La salinidad interviene directamente sobre las
características fisicoquímicas del agua del mar
Cañón et al.: Calidad de las agua de Bahía de Cartagena
relacionándose con la temperatura, la densidad y el
pH; caracteriza las masas de agua oceánicas e influye
en la distribución de los seres vivos, ya que sus
estructuras y funcionamiento están íntimamente
ligados a las variaciones de la salinidad [15]. Acuerdo
con lo anterior, en la Bahía de Cartagena se logró
observar una estacionalidad de esta variable,
encontrándose los valores más bajos (entre 10 y 15)
durante la temporada de lluvias en las capas
superficiales, seguidos por las época de transición
(15-32) y los más altos reportados para la temporada
seca en las profundidades del medio y fondo (25 - 33)
(figura 5).
5a. 5b. 5c. 5d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
5e. 5f. 5g. 5h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
5i. 5j. 5k. 5l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 5. Variación espacio-temporal de la Salinidad en la
bahía de Cartagena. En el gráfico se representa con la linea
roja a la época seca, con la verde a la de transición y con la
azul a la de Lluvias. A continuación de cada gráfico se
ilustran los contornos para cada capa de la columna de agua
durante las tres temporadas climáticas.
De esta manera, se observó una estratificación de la
columna de agua en todas las estaciones, producto del
aporte o flujo dominante de las aguas continentales
del Canal del Dique en las capas superficiales y de
aguas marinas en las capas del medio y profundas por
las bocas que conectan a la bahía con el Mar Caribe.
De este modo y acuerdo con lo expuesto por Chester
[14], el flujo dominante de las aguas del Canal del
Dique forma en las capas superiores de la bahía una
capa de aguas menos densas sobre una de aguas más
densas y salinas, que sumado al débil intercambio con
las aguas saladas del mar hacen que se genere la
estratificación en la columna de agua [16].
127

En el caso de los sólidos suspendidos totales, éstos
variaron entre 10.45 y 40.25 mg/L, observándose la
mayor concentración en las capas superficiales y del
medio durante la temporada de lluvias, en tanto que en
el fondo la mayor concentración se observó durante la
época seca (figura 6). Debido a la alta estratificación
salina, las concentraciones altas de sedimentos en la
superficie obedecen a que estos quedan atrapados en
esta capa, donde la turbulencia es suficientemente alta
para mantener las partículas en forma suspendida
[16].
6a. 6b. 6c. 6d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
6e. 6f. 6g. 6h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
6i. 6j. 6k. 6l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 6. Variación espacio-temporal de los sólidos
suspendidos totales-SST (mg/L), en la Bahía de Cartagena.
En el gráfico se representa con la línea roja a la época seca,
con la verde a la de transición y con la azul a la de lluvias. A
continuación de cada gráfico se ilustran los contornos para
cada capa de la columna de agua durante las tres temporadas
climáticas.
Las estaciones que reportaron en promedio mayor
concentración de sólidos fueron la boya 21 y
Ecopetrol en superficie, la boya 19 y Ecopetrol en la
capa del medio y la boya 30 y Ecopetrol en el fondo
(figura 6). En el caso de las boyas 21 y 30 el aumento
es resultado de la influencia directa que sobre estas
dos estaciones ejerce el emisario submarino y en el
caso de Ecopetrol y la boya 19 por su cercanía a la
desembocadura del Canal del Dique, el cual aporta
gran cantidad de material sedimentario a la bahía de
Cartagena, especialmente durante la temporada de
lluvias. Durante la temporada de lluvias, en las tres
profundidades se observó una mayor concentración
de sólidos, lo cual demuestra que con la llegada de las
lluvias el aporte a través del Canal del Dique y los
caños de aguas residuales incrementan los niveles de
material suspendido en toda la bahía. Los valores altos
128
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)
reportados en las estaciones de fondo durante la
temporada seca resultan de la mezcla generada en la
columna de agua por acción del viento. También se
consiguió observar un patrón de distribución de sur a
norte durante la temporada de lluvias de los sólidos,
situación que demuestra igualmente el aporte de este
tipo de material por el Canal del Dique.
En cuanto a los nutrientes se observó que la
concentración promedio de nitritos en la época seca
fue de 0.022 mg/L, con mínimos de 0.01 mg/L y
máximos de 0.135 mg/L, en tanto que en la de
transición el promedio fue más bajo con 0.010 mg/L,
mínimos de 0.01 mg/L y máximos de 0.026 mg/L y en
la época de lluvias a pesar del aporte continental que
se supone debía ser mayor por el incremento del
material aportado a través de caños y del Canal del
Dique por el aumento del caudal, reportó los valores
más bajos con respecto a las otras dos temporadas, con
un promedio de 0.007 mg/L, mínimos de 0.01 mg/L y
máximos de 0.021 mg/L(figura 7).
7a. 7b. 7c. 7d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
7e. 7f. 7g. 7h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
7i. 7j. 7k. 7l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 7. Variación espacio-temporal de la concentración
de nitritos (mg/L), en la Bahía de Cartagena. En el gráfico
se representa con la línea roja a la época seca, con la verde a
la de transición y con la azul a la de lluvias. A continuación
de cada gráfico se ilustran los contornos para cada capa de
la columna de agua durante las tres temporadas climáticas.
Sin tener en cuenta los valores máximos de las
estaciones Contecar, Muelles el Bosque y la boya 27,
se observó que durante la temporada seca y de
transición se presentaron las mayores
concentraciones de nitritos las cuales se explican por
aportes continentales y resuspensión de los materiales
del fondo, generados por la mezcla que sobre la

columna de agua ejercen los vientos alisios
característicos de estas épocas.
De las tres profundidades, en el fondo seguida de la
capa del medio, fue donde se reportaron las mayores
concentraciones con respecto a la superficie. Dicho
comportamiento se atribuye a los procesos de
degradación de la materia orgánica que sobre estas
capas se presentan y porque adicionalmente en las
capas superficiales, los productores primarios pueden
consumir estos nutrientes, por lo cual las
concentraciones superficiales se ven disminuidas
[14].
De las tres épocas analizadas el promedio más alto de
ortofosfatos se observó en la temporada de transición
(0.04803 mg/L), seguidos de la época de lluvias
(0.04697 mg/L) y por último en la temporada seca
(0.02359 mg/L) (figura 8). Dichas concentraciones se
atribuyen a la variedad de aportes que sobre la época
de transición ocurren dentro de la bahía, pues es bien
sabido que las fuentes de fósforo incluyen minerales y
entradas antropogénicas.
8a. 8b. 8c. 8d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
8e. 8f. 8g. 8h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
8i. 8j. 8k. 8l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 8. Variación espacio-temporal de la concentración
de ortofosfatos (mg/L), en la Bahía de Cartagena. En el
gráfico se representa con la línea roja a la época seca, con la
verde a la de transición y con la azul a la de lluvias. A
continuación de cada gráfico se ilustran los contornos para
cada capa de la columna de agua durante las tres
temporadas climáticas.
De este modo, durante la temporada de transición por
el Canal del Dique el aporte es importante, teniendo en
cuenta que se presentan algunas lluvias y también por
la mezcla de las masas de aguas, las cuales se generan
Cañón et al.: Calidad de las agua de Bahía de Cartagena
por la presencia de vientos mas débiles que en la
temporada seca, pero que son suficientes para realizar
la resuspensión de sedimentos y realizar el
consecuente aporte a la columna de agua de este tipo
de nutrientes. En las capas del fondo, las
concentraciones de ortofosfatos fueron más altas que
en las capas del medio y de superficie. Lo anterior, se
atribuye a la producción de nutrientes por
descomposición bacteriana de la materia orgánica
depositada en el fondo. Y las bajas concentraciones
del medio y la superficie, se explican por la remoción
de este elemento durante la producción biológica o
por los procesos químicos que involucran el equilibrio
agua-minerales. Por esta razón es considerado este
elemento en algunos sistemas como limitante.
Parámetros biológicos
Durante el período de muestreo, se evaluaron dentro
de estos parámetros la dinámica durante las tres
épocas del año, de concentraciones de sustancias que
absorben en las mismas longitudes de onda de las
clorofilas a, b y c, así como de la feofitina-a, así como
la diversidad planctónica en la bahía.
La clorofila-a varió en promedio entre 0.13 y 16.91
3
mg/m , observándose durante los períodos de
transición y lluvias en las capas superficiales las
mayores concentraciones (4.98 a 16.91 mg/m3). Por el
contrario en las capas del medio y fondo fue durante la
época seca donde se reportaron valores más altos (0.2
3
y 3.7 mg/m ) con respecto a las temporadas de
3
transición y lluvias (0.2 y 2.2 mg/m ) (figura 9).
9a. 9b. 9c. 9d.
Capa superficial Seca Transición Lluvia
9e. 9f. 9g. 9h
Capa del medio Seca Transición Lluvia
9i. 9j. 9k. 9l.
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
Figura 9. Variación espacio-temporal de concentración de
sustancias que absorben en la misma longitud de onda de la
clorofila-a (mg/L), en la Bahía de Cartagena. En el gráfico
se representa con la línea roja a la época seca, con la verde a
129
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)

la de transición y con la azul a la de lluvias. A continuación transición y lluvia en superficie fueron ECOPETROL
de cada gráfico se ilustran los contornos para cada capa de la y Contecar las estaciones que reportaron las
columna de agua durante las tres temporadas climáticas. concentraciones más altas con 39.94 y 28.62 mg/m
3

respectivamente.
Las altas concentraciones en la capa superficial
En la capa del medio las boyas 19, 27 y 27 durante la
durante las temporadas de transición y lluvias, se
explican por el aporte durante estas dos épocas de temporada seca reportaron valores entre 0 y 2 mg/m3 y
material nutritivo, a través del Canal del Dique. Dicho las demás entre 2 y 4 mg/m3(figura 10). En la época de
material nutritivo, es asimilado por los productores transición fue en la Sociedad Portuaria donde se
3
primarios, generando de esta forma una mayor registró el mayor valor (6.64 mg/m ).
concentración de clorofilas durante estas temporadas,
mientras que durante la época seca dicha carga Y en el fondo durante la temporada seca la Sociedad
disminuye y por tanto el valor se ve reflejando en Portuaria y El Bosque reportan las mayores
3
menores concentraciones. De este modo, concentraciones (6.87 y 6,66 mg/m ), en la de
concentraciones altas de clorofila son referidas muy a transición la Escollera 2 y Sociedad Portuaria (5.46 y
3
menudo como un indicador de la abundancia del 3.81 mg/m ) y en la época de lluvias la Escollera 2 y El
3
fitoplancton [17], por lo cual se infiere que en las Bosque (33.2 Y 3.13 mg/m ). La presencia de estas
capas superficies durante las temporadas de transición concentraciones de feofitina puede explicarse en
y lluvias la abundancia del fitoplancton es mayor con términos de decaimiento y degradación de las
respectos a las capas del medio y fondo durante la poblaciones fitoplanctónicas por encontrarse en una
temporada seca. etapa avanzada de la sucesión o bien en términos del
pastoreo por el zooplancton [13].
En las profundidades del medio y fondo, la
10a. 10b. 10c. 10d.
concentración de clorofila-a se ve disminuida con
respecto a la superficie, posiblemente porque la alta
concentración de material suspendido en las capas
superficiales, el cual impide la penetración de la luz, Capa superficial Seca Transición Lluvia
10e. 10f. 10g. 10h
principal fuente de energía para que el proceso
productivo se genere. De esta manera, el resultado se
ve reflejado en concentraciones bajas de clorofila-a.
Capa del medio Seca Transición Lluvia
En cuanto a los períodos estacionales, durante la 10i. 10j. 10k. 10l.
temporada seca en estas dos profundidades se
observaron mayores concentraciones de clorofila- a
con respecto a la superficie. Este comportamiento Capa del fondo Seca Transición Lluvia
obedece a procesos de mezcla que durante esta época
se generan, permitiendo de este modo que el material
nutritivo del fondo suba y enriquezca áreas más
superficiales; adicionalmente la carga de material Figura 10. Variación espacio-temporal de concentración
particulado durante esta temporada tambien es menor, de sustancias que absorben en la misma longitud de onda de
la feofitina-a (mg/L), en la Bahía de Cartagena. En el
situación que permite una mayor penetración de la luz gráfico se representa con la línea roja a la época seca, con la
en la columna de agua, haciendo que los productores verde a la de transición y con la azul a la de Lluvias. A
primarios se desplacen unos metros hacia abajo, continuación de cada gráfico se ilustran los contornos para
generando picos productivos a mayor profundidad. cada capa de la columna de agua durante las tres
temporadas climáticas.
En cuanto a las sustancias que absorben en la misma
longitud de onda de la feofitina-a, se observó que en
superficie la mayor concentración en promedio la La concentración de sustancia que absorben en la
reportó la boya 21 (6.98 mg/m3) durante la temporada misma longitud de onda de la clorofila-c, varió entre
seca. Por el contrario, durante las temporadas de 0.12 y 1.34 mg/m3. En la superficie con respecto al

130
 Cañón et al.: Calidad de las agua de Bahía de Cartagena

medio y fondo se observaron las mayores porque al ser especies con otros pigmentos
concentraciones. Con excepción de la boya 21 (1.34 accesorios, pueden aprovechar otras longitudes de
3
mg/m ) en la superficie durante las tres temporadas onda diferentes y ubicarse en áreas más profundas.
climáticas se observó un comportamiento similar, en
tanto que en la capa del medio y fondo las mayores Cuando la clorofila b se encuentra en la muestra puede
concentraciones se observaron durante la época seca suceder una subestimación de la clorofila-a
3)
(0.02 y 0.28 mg/m , seguida de la de transición (0 y acompañada de una sobreestimación de la feofitina-a,
3
0.12 mg/m ) y por último la de lluvias (0 y 0.12 el grado de interferencia depende del radio a:b.
3
mg/m ) (figura 11). incluso la clorofila-c puede generar subestimación de
la feofitina-a, sin embargo no es tan severa como con
De las estaciones analizadas la boya 21 en superficie
la clorofila b [18]. Durante el período analizado se
durante la temporada seca reporta la mayor
3 observaron concentraciones de sustancias que
concentración (1.34 mg/m ), mientras que en la capa
absorben en la misma longitud de onda de la clorofila-
del medio la mayor concentración se presentó en
b, en las temporadas seca y de transición con valores
Contecar (0.27 mg/m3) y en el fondo en las estaciones
que oscilaron entre 0.01 y 0.10 mg/m3, no así durante
de Muelles el Bosque y en la Boya de la Escollera
3 el período lluvioso. En este sentido y acuerdo con lo
(0.16 mg/m ).
expuesto arriba, con excepción de la época de lluvias,
los valores de feofitna-a y clorofila-a, en las
11a. 11b. 11c. 11d.
estaciones boya 27, Contecar, Bosque, Escollera y
boya 21, pudieron subestimarse o sobreestimarse por
la presencia de la clorofila b. Las bajas
Capa superficial Seca Transición Lluvia concentraciones reportadas sugieren presencia de
11e. 11f. 11g. 11h
pocas especies con este tipo de pigmento [17, 18].

Capa del medio Seca Transición Lluvia De forma general se informa que con respecto al
11i. 11j. 11k. 11l. zooplancton, el total de especies registradas fue de 97
con un total de 1,504.757 individuos identificados y
ubicadas dentro de 8 phylum diferentes (Ciliophora,
Capa del fondo Seca Transición Lluvia
C h a e t o g n a t a , C h o rd a t a , E c h i n o d e r m a t a ,
Artrópodos, Mollusca Apellida, Cnidaria).

Figura 11. Variación espacio-temporal de concentración de

sustancias que absorben en la misma longitud de onda de la
clorofila-c (mg/L), en la Bahía de Cartagena. En el gráfico
se representa con la línea roja a la época seca, con la verde a
la de transición y con la azul a la de lluvias. A continuación
de cada gráfico se ilustran los contornos para cada capa de la
columna de agua durante las tres temporadas climáticas.
Los anteriores resultados sugieren que en la bahía
predominan especies de algas con mayor
concentraciones de clorofila a que de clorofila-c.
También se pudo establecer que durante la temporada
seca en las capas del medio y fondo las
concentraciones son más altas que en la época de
transición y lluvias. Esta distribución se presenta
Dentro de los copépodos se observó el nauplio 1 con
558.213 ind., reportando de esta forma el mayor
porcentaje (45%) en abundancia con respecto a los
demás individuos. Otras especies importantes fueron
Acartia sp., con 310.318 ind., Oithona sp., con
258.237 ind., las cuales alcanzaron el 25% y 21%
respectivamente en el grupo. El incremento en las
abundancias de estas especies pone en manifiesto la
eutrofización de las aguas según Crisafi y Cresenti
[19]. De igual forma se pudo observar que las especies
menos representativas, con un sólo individuo en todo
el año fueron el género Aetideus, Oithona setigera,
Pseudodiaptomus gracilis. Estudios anteriores en la
bahía no registran estas especies, por lo anterior se
reportan como una posible introducción.

131
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 120-134 (2007)

Fue posible también observar que durante la época de De acuerdo con lo establecido por la convención
lluvias se presentó una alta diversidad de especies, con internacional sobre manejo de aguas y sedimentos de
una alta dominancia de individuos tolerantes a la baja lastre emitida por la OMI [20], en las estaciones
salinidad. Al respecto, se puede mencionar a los monitoreadas se reporta la presencia de las especies
Tintinnidos, los Nauplio de copépodo 1, Oithona sp., y
contempladas en la regla 2d y la mayoría sobrepasa
Mytilus sp. Por el contrario, en la época seca se
observó alta diversidad de especies, a diferencia de los los límites permisibles (tabla No. 2). En este sentido,
de la época de transición en el que bajó la diversidad las aguas de la Bahía de Cartagena representan un
pero se registró el aumento de la dominancia de riesgo para puertos internacionales. Por lo anterior se
algunas especies. recomienda evitar la toma de aguas de lastre en la
bahía.
Parámetros microbiológicos
De los parámetros estudiados (Coliformes totales, E.
coli, Enterococos fecales, Vibrio sp, Salmonella spp., Tabla 2. Microorganismos de la Bahía de Cartagena
Shigella spp., Pseudomonas aeruginosa y Hongos) se durante las diferentes épocas climáticas (seca (S),
observó que los coliformes totales se reportaron en transición (T) y lluvias (L); en superficie (Sup), media agua
mayor concentración en la época de transición en el (Med) y fondo (Fon)) contempladas como de alto riesgo
muelle Contecar (4600 UFC/100mL). En tanto que para la salud y que sobrepasan los límites permisibles
para los demás indicadores de contaminación fecal, establecidos en la convención sobre manejo de aguas de
como E. coli y Enterococos fecales, se observó el lastre de la OMI-2004.
mayor recuento durante la época de lluvias, pero en
Estación Descripción E. coli Enterococos
diferente estación ya que el primero fue predominante
en Contecar y el segundo en Muelles el Bosque. Los Influencia directa S-T-L(Sup-Fon) T(Sup-Med-Fon)
Ecopetrol Canal del Dique /T-L(Med) /L(sup)
resultados fueron de 3320 UFC/100mL y 3200
Aporte de caños de aguas
UFC/100mL para estas dos estaciones. residuales y lixiviados del S-T-L(Sup)/T- S-T-L(Med)/T-
Contecar
antiguo basurero L(Med)/S-T(Fon) L(Sup)/S-T(Fon)
En cuanto a las especies de Vibrio (V. alginolitycus y V. Aporte de caños de T(sup)/T-L(Med) S-T-L(med)/T-L
parahemolitycus) fueron encontradas en todas las Bosque aguas residuales /S-T-L(Fon) (sup)/T-L(Fon)
estaciones en la época de lluvias. Mientras, que en la Sociedad T-L(Sup) S-T-L(Sup)/T
Alto tráfico marítimo
temporada seca se observó la ausencia de éstas en Portuaria /T(Med)/T(Fon) (Med-Fon)
Muelles el Bosque, indicando de esta manera que las B19 Influencia Canal del Dique S(fon) T(Sup)
condiciones de alta evaporación, aumento de
Descarga emisario S-T-L S-T-L(Med-Fon)
temperaturas y altas salinidades, características de B30 contaminación coliformes (Sup_Med-Fon) /T-L(Sup)
este período, pudieron influir para que dichas especies
E2 Influencia directa Mar
fueran ausentes. Caribe
T(Sup-Fon)

B10 Influencia Canal del Dique

En cuanto a Pseudomonas aeruginosa, se observó el Influencia islotes S(Med)/T-
mayor número en la época de lluvias en Muelles el B21 (Banco Santa Cruz) T(Sup-Med-Fon) L(Sup)/T(Med)
Bosque (3540 UFC/100mL), Sociedad Portuaria y Influencia emisario
B27 S(Fon)
Escollera 2; en las demás estaciones la cantidad fue submarino
inferior. De esta forma se observó la fácil
adaptabilidad de la especie a los ambientes acuáticos.
Conclusiones
Finalmente los hongos estuvieron presentes en mayor
cantidad en todas las estaciones monitoreadas en la Con la evaluación de los parámetros fisicoquímicos se
bahía durante la temporada de lluvias. Cabe pudo establecer que a través del aporte continental en
mencionar que se reportó un valor de las épocas de lluvia y transición se reportan las
35400UFC/100mL en la boya B30 en la profundidad
mayores concentraciones de pigmentos, sólidos
del medio, característica que está directamente
relacionada con el aporte directo sobre esta boya del suspendidos totales y turbidez, características que
emisario submarino. influyen directamente en la variación estacional de la

132

flora y fauna presentes en este cuerpo de agua, las
cuales también se ven incrementadas en diversidad y
cantidad de especies. En tanto que en las capas del
medio y fondo durante las temporadas seca y de
transición, la mayor concentración de nutrientes con
respecto a la superficie y época de lluvias, pudo
deberse a la mezcla o resuspensión de material del
fondo, procesos de degradación de la materia orgánica
y consumo en la superficie por los productores
primarios.
Se continúan reportando especies planctónicas en la
Bahía de Cartagena, lo cual sugiere que la
comunidades biológicas responden a las variaciones
estacionales características del área de estudio y a
posibles fuentes de introducción de especies. Por lo
anterior, es importante establecer con cada nuevo
reporte estudios más específicos que permitan
identificar si son flora habitual de este cuerpo de aguas
o si son especies introducidas y sus impactos en las
nativas.
La evaluación del componente microbiológico
durante el período de estudio, reportó valores de
Coliformes, E.coli, Enterococos y Vibrio por encima
de los límites permisibles, consignados en la regla 2D
de la convención sobre manejo de aguas y sedimentos
de lastre emitida por la OMI en el 2004. Por esta razón,
se puede establecer que el agua de la Bahía de
Cartagena puede ser potencial fuente de
contaminación para puertos internacionales si no se
aplican las directrices emitidas por la OMI
(intercambio en mar abierto).
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134
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)

ARTÍCULO

El microfitoplancton en los principales

muelles de la Bahía de Cartagena, Caribe
colombiano, vectores posibles de floraciones
microalgales
Micro-plankton at the main piers of Cartagena, Colombian
Caribbean, vectors of possible micro-algae flowering

CIOH
Fecha recepción: 2007-08-21 / Fecha aprobación: 2007-10-12

Viviana Suárez Villalba, vivis_carol04@yahoo.com

Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas - CIOH,
www.cioh.org.co Isla Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.
Andrés Franco Herrera, andres.franco@utadeo.edu.co
Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano.
Sede Santa Marta. Facultad de Ciencias Naturales. Programa de Biología Marina.
Dirección de investigaciones. Código postal: Carrera 2 No 11-68, Edificio Mundo
Marino, El Rodadero, Santa Marta, Colombia
Mary Luz Cañón, marlucpaez@cioh.org.co
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas - CIOH,
Isla Manzanillo, Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
Con el fin de evaluar los cambios espacio-temporales del microfitoplancton en la Bahía de Cartagena, entre
marzo-noviembre de 2005 y detectar especies con capacidad para desarrollar floraciones potencialmente
nocivas, se adelantaron muestreos en diferentes puntos de la bahía determinando la composición, la abundancia
y la concentración de clorofila a. Se encontraron un total de 124 especies, distribuidas en 49 géneros y 18
familias, además de 6 morfotipos y la presencia de 10 estructuras de resistencia. Las mayores abundancias
relativas se observaron en el grupo de las diatomeas centrales seguidas de las pennales, sobresaliendo la especie
Skeletonema costatum y los géneros de Coscinodiscus, Chaetoceros, entre otros. Las concentraciones de
clorofila a alcanzaron niveles de 44,79 mg/m3. Los quistes e hipnocistos alcanzaron abundancias relativas entre
0,01 y 56,13 %, detectándose la presencia de especies catalogadas como potencialmente riesgosas tales como
Asterionellopsis glacialis y Dinophysis caudata. Los resultados muestran cambios en la estructura comunitaria,
producto de las variaciones en las condiciones fisicoquímicas del agua de la Bahía de Cartagena, destacándose
especies marinas que han desarrollado adaptaciones a través del tiempo, siendo capaces de sobrevivir a
condiciones marino-estuarinas tropicales, generados principalmente por la continua descarga de aguas
continentales en la bahía.

Palabras clave: Bahía de Cartagena, fitoplancton, diatomeas, quiste e hipnocistos.

Abstract
In order to evaluate the micro-plankton space-temporal changes in the bay of Cartagena, between March-
November 2005, and to detect species with capacity of developing partially dangerous flowering, several
sampling at different points of the bay were carried out determining their composition, abundance and the
chlorophyll a concentration. A total of 124 species were found, distributed in 49 types and 18 families, besides 6

135
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena
morpho-types and the presence of 10 structures of
resistance. The greater relative abundances were
observed in the group of central diatomeas followed
by the pennales ones, standing out the species
Skeletonema costatum and the types of
Coscinodiscus, Chaetoceros, among others. The
chlorophyll a concentrations reached a level of 44.79
mg/m3. The cysts and hypno-cysts reached relative
abundances between 0,01 and 56.13%, were the
presence of species designated as potentially risky
such as Asterionellopsis glacialis and Dinophysis
caudata. The results show changes in the community
structure, caused by variations in the water physical-
chemical conditions of the Bay of Cartagena, standing
out the marine species which have developed
adaptations through time, being capable of surviving
under tropical marine-estuary conditions, caused
mainly by the continuous continental waters dumping
in the Bay.
Key words: Bay of Cartagena, phytoplankton,
diatomeas, cyst and hypnocysts.
Introducción
La Bahía de Cartagena es considerada un sistema
estuarino costero [1], además de ser reconocida por su
fuerte actividad portuaria y por el aporte de aguas del
río Magdalena a través del Canal del Dique, así como,
por los vertimientos de aguas residuales producto de
la actividad industrial y doméstica de la ciudad [2, 3].
Uno de los estudios realizados entre los años 1996-
1997 reportaron caudales de aproximadamente
10.064.636 m 3 /día entre aguas residuales,
vertimientos industriales, Canal del Dique y
lixiviados de basureros [3]. El fitoplancton, como
fuente primaria de alimento para las redes trófica
marinas, no ha estado exento a estas variaciones. No
obstante, su nivel de investigación ha sido puntual ya
sean para la Bahía de Cartagena y aguas adyacentes,
estos estudios se han venido realizado desde el año de
1973 hasta la actualidad, teniendo en cuenta que han
existido algunos períodos largos de ausencia de
investigaciones; sin embargo, estos autores han
establecido que la comunidad fitoplanctónica está
caracterizada principalmente por diatomeas y
dinoflagelados tropicales neríticos, siendo los
136
géneros Skeletonema, Chaetoceros y Ceratium los
más importantes, respectivamente [4, 5, 6, 7, 8, 9, 10,
11] y que la comunidad se encuentra regulada por las
condiciones ambientales de la zona. Así mismo, las
concentraciones de clorofila a en la bahía muestran
que fluctúan en virtud de los períodos climáticos y de
las entradas de nutrientes de origen alóctono a sistema
[12, 13]. A la fecha, no se ha encontrado ninguna
investigación enfocada a la descripción y ecología de
microalgas nocivas en la Bahía de Cartagena.
Con base en lo anterior y considerando la importancia
de tener información actualizada sobre una
comunidad fundamental para el sostenimiento de la
vida marina, como lo es el fitoplancton y en un
sistema costero ecológicamente impactado por
vectores antrópicos, la presente investigación tuvo
como objetivo principal evaluar los cambios espacio-
temporales del microfitoplancton en la Bahía de
Cartagena, entre marzo y noviembre de 2005,
acogiendo tres épocas climáticas para la zona y
detectar la presencia de especies
microfitoplanctónicas potencialmente nocivas. Esta
investigación se enmarcó dentro del proyecto
“Presencia de organismos exógenos y patógenos en
aguas de lastre de buques de tráfico internacional”,
que ha sido desarrollado desde el año 2002 por el
Centro de Investigaciones Oceanográficas e
Hidrográficas, de la Dirección General Marítima.
Área de estudio
La Bahía de Cartagena se encuentra localizada en el
Caribe colombiano entre los 10°26' 10°16'N y 75°36'
75°30'W [3]. Cuenta con un aporte significativo de
aguas continentales provenientes del Canal del
Dique, el cual ha generado grandes cambios
morfológicos al introducir elementos
sedimentológicos, que han debilitado y han obligado
a que esta bahía empezara a comportarse como un
estuario típico donde dominan condiciones de agua de
mezcla [14, 15]. Presenta dos entradas de renovación
de aguas oceánicas, una en la parte norte y la otra en el
sur constituido por Bocachica considerado el más
importante desde el punto de vista hidrodinámico
debido a sus mayores profundidades [2].
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)

En la bahía se presentan tres épocas climáticas bien
definidas, una época seca que abarca los meses de
diciembre a abril determinada por la intensidad de los
vientos alisios, un período de transición entre mayo a
julio con vientos suaves, aumento de la temperatura
ambiental y lluvias de poca intensidad finalmente
entre agosto y noviembre la época lluviosa donde la
acción de estos vientos disminuye [16, 17].
Carbonell [6], Balech [20], Rines y Margraves [21],
Moreno et al. [22], Tomás [23], Matsuoka y Fukuyo
[24] y Botes [25]. Dado que las redes de fitoplancton
presentan una baja eficiencia de filtración, las
muestras colectadas no fueron cuantificadas a nivel
de densidad (células/volumen). Sin embargo, se
obtuvo un valor de abundancia relativa (%) a partir
del número de células obtenidas en cada una de las
muestras, por período climático.

Materiales y métodos
Se muestrearon siete estaciones, donde se incluyeron
cuatro muelles de alto tráfico internacional e
importancia comercial en la bahía: Ecopetrol,
Contecar, El Bosque y Sociedad Portuaria. Junto a
éstos, se consideraron tres boyas con las siguientes
referencias: boya 19, influenciada por las aguas que
llegan del Canal del Dique, boya 30 ubicada en el
centro de la bahía y la boya E2 influenciada por aguas
oceánicas y aguas procedentes de la bahía (figura1).

Se realizaron dos monitoreos mensuales desde el mes

de marzo hasta noviembre de 2005, lo cual permitió
abarcar las épocas seca, transición y lluvia, más no el
cambio entre lluvia y seca. Para la recolección del
componente microfitoplanctónico, se realizaron
arrastres superficiales con una red de plancton de
65 m de diámetro de poro a una distancia de 2 m de la
embarcación, las muestras fueron almacenadas en
frascos de 500 ml y preservadas con formalina al 4%
v/v y neutralizada con bórax, después de cada uno de
los arrastres se lavó la red y el colector con agua de
mar. Esta metodología fue utilizada de forma similar
en anteriores trabajos lo cual permitió realizar una
comparación histórica de la bahía, donde el micraje de Figura 1. Ubicación de los principales muelles de arribo de
la red osciló entre 1 y 2 micras. La identificación se los buques mercantiles, así como las boyas incluidas para el
hizo mediante un microscopio óptico de luz, a 40x y muestreo de fitoplancton en la Bahía de Cartagena, Caribe
100x, analizando alícuotas en una placa Sedgwick- colombiano (B: Boya; CIOH, 2002).
Rafter (SR) de 2 ml; el número de alícuotas a observar
se estableció mediante el método de curvas de
Para la cuantificación de los pigmentos fotosintéticos
diversidad acumulada mediante el índice de Shannon (clorofila a y feopigmento a), se tomaron muestras de
Wiener [18] las cuales fueron para esta investigación agua con la botella Niskin de 6 l de capacidad a dos
de 10 a 12 alícuotas. Para la identificación se profundidades: una a nivel superficial (0,5 m de
siguieron las claves propuestas por Cupp [19], Vidal y profundidad) y de fondo (1 m por encima del fondo),
se almacenaron en recipientes plásticos con

137
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena

capacidad de 5 l oscurecidos y depositados en neveras Resultados

de fibra de vidrio con hielo. Para su extracción se
siguió la metodología propuesta por Parsons et al.
[26], modificada por el Centro de Investigaciones
Oceanográficas e Hidrográficas (CIOH) y las
ecuaciones descritas por Jeffrey y Humphrey [27].
Se identificaron un total de 124 especies, distribuidas
en 49 géneros y 18 familias, además de 6 morfotipos y
la presencia de 10 estructuras de resistencia (tabla 1).
A nivel de las tres épocas climáticas, las diatomeas
centrales dominaron sobre los demás grupos
fitoplanctónicos y las de menor dominio fueron los
grupos de cianófitas y las clorófitas (figura 2).

a b

Figura 2. Abundancias relativas (%) de los principales grupos microfitoplanctónicos encontrados en las tres épocas
climática en la Bahía de Cartagena en el año 2005 (a: Seca; b: Transición; c: Lluvia).

138
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)

Tabla 1. Presencia de especies encontradas en la Bahía de Cartagena, en las distintas estaciones muestreadas en el año
2005.
ECOPETROL CONTECAR BOSQUE SOCIEDAD PORTUARIA B19 B30 BE2

Phyllum HETEROKONTOHYTA
Clase DIATOMOPHYCEAE
Orden Centrales
Familia Coscinodiscaceae Coscinodiscus sp x x x x x x x
C. gigans x x x x x x x
C. asteromphalus x x x
C. granni x x x x x x x
C. radiatus x x x x x x x
Palmeria hardmaniana x x
Familia Eupodiscaceae Odontella aurita x x x x x x x
O. mobiliensis x x x x x x
O. alternas x x x x
O. regia x x x x x x
O. sinesis x x x x x x
Triceratium pentacrinus x x
Familia Lithodesmiaceaceae Lithodesmium undulatum x x x x x x
Bellerochea malleus x x
Familia Thalssiosiraceae Skeletonema costatum x x x x x x x
Planktoniella sol x x x x
Lauderia annulata x x x x x x
Cyclotella menegiana x x x x x x x
Familia Chaetoceraceae Chaetoceros sp x x x x x x
C. decipiens x x x x x x x
C. didymus x x x x x x x
C. peruvianum x x x x
C. affine x x x x x x x
C. curvisetus x x x x x x x
C. eibenii x x x x x
C. lorenzianus x x x x x x
C. radicans x x x x x
C. borealis x x x x x x x
C. affinis var javanicus x x x x x x x
C. dydimus var protuberans x x x x x
C. laveis x x x x x
C. diversum x
Bacteriastrum furcatum x x x x x x
B. hyalinum x x x
B. delicatulum x x x x x x x
Familia Leptocylindraceae Leptocylindrus danicus x x x x x
Familia Rhizosoleniaceae Rhizosolenia sp x x x x x x
R. stigera x x x x x x
R. imbricata x x x x
Proboscia alata x x x x x
Pseudosolenia calvar-avis x x x x x x
Guinardia cylindrus x x x x x
Streptotheca sp x x x x x x
Caliptrella robusta x x x x x x
Familia Melosiraceae Melosira moniligera x x x x x x
M. nummuloides x x x x x x
Endyctya ocenaica x x x x x
Orden Pennales
Familia Auriculaceae Surirella fastuosa x x x x x x
Familia Fragilariaceae Toraxium undulatum x x x x x
Asterionellopsis glacialis x x x x x x
Licmosphera sp x x x
Climacosphenia moniligera x x x
Plagiogramma sp x x x x x
Thalassionema sp1 x x x x x x x
T. sp2 x x x x x x x
T. sp3 x x x x x x
T. sp4 x x x x x x
T. sp5 x x
T. niTzschioides x x x x x x x
T. frauenfeldii x x x x x x x
Thalassiotrix sp x x x x x x
Grammatophora marina x x x
Familia Naviculaceae Navicula sp1 x x x x x
N. sp2 x x x x x x
Gyrosigma balticum x x x x x
G . sp1 x x x x x x
G. sp2 x x x x x x

139
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena

G . sp3 x x
G . sp4 x x x x
Pleurosigma sp1 x x x x x x x
P. sp2 x x x x x

Familia Nitzschiaceae Nitzcshia sp1 x x x x x x x

N. sp2 x x
N. sp3 x x x x
N. closterium x x x x x
N. longissima x x x x x x
Pseudonitzschia sp x x x x x x x
P. pugens x x
P. seriata x x x x x x x
Familia Bacillariaceae Bacillaria paxillifer x x x x x
Cylindroteca closterium x x x x x x
Clase DICTYOCHPHYCEAE
Orden DICTYOCHALES
Familia Dictyochaceae Dictyocha sp x x
Phyllum DINOPHYTA
Clase DINOPHYCEAE
Orden PERIDINIALES
Familia Ceratiaceae Ceratium macroceros x x x x x x x
C. tripos x x x x x x x
C. gibberum x x x
C. vultur x x x x x
C. furca x x x x x x x
C. fusus x x x x x x x
C. hircus x x x x x x x
C. pentagomun x x x x x x
C. symetricum x x x x
Familia Peridiniaceae Protoperidinium sp1 x x x
P. sp2 x x x x x
P. sp3 x x x
P. depresum x x
P. conicum x x x x x x x
P. divergens x x x x x
P. elegans x x x x x x
P. vensutum x
P. latidorsale x x x x x x x
P. pellucidium x x x x x x
Familia Gonyaulacaceae Goniaulax spinifera x x x
Familia Pyrophacaceae Pyrophacus horologium x x x x x
Orden DINOPHYSALES
Familia Dinophysaceae Dinophysis caudata x x x x x x x
Ornithocercus magnificus x x x x x x x
Orden PROROCENTRALES
Familia Prorocentraceae Prorocentrum gracile x x x x x x x
Phyllum CIANOPHYTA
Clase CIANOPHYCEAE
Orden OSCILLATORIALES
Familia Oscillatoriaceae Oscillatoria sp x x x x x x x
O. lacustris x x x x x x x
Familia Nostococaceae Anabaena sp x
Phyllum
Clase CLOROPHYCEAE
Orden Chlorococcales
Familia Scenedesmaceae Pediastrum boryanum x x x x x x x
P. duplex x x x x
P. gracillimum x x x
P. simplex x x x x x x
Scenodesmus cuadricauda x x x x x x x
Orden Zygnematales
Familia Desmidiaceae Staurastrum gracile x x x x x x
S. leptocladum x x x x x
Micrasterias sp x x x x x x
ESTRUCTURAS DE RESISTENCIA Hipnocistos x x x x x x x
Quise 1 x x x x x x x
Quiste 2 x x
Quiste 3 x x x x x x x
Quiste 4 x x x x x
Quiste 5 x x x
Quiste 6 x x x x x
Quiste 7 x x
Quiste 8 x x x x x x
Quiste 9 x x x x x x

140
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)

Al igual que en las tres épocas climáticas, a nivel de las estaciones las diatomeas centrales registraron las
mayores abundancias relativas en todos los muelles y boyas de estudio (Ecopetrol, Contecar, Bosque, Sociedad
Portuaria, boya 19, boya 30 y boya E2), donde la especie Skeletonema costatum fue la más representativa
durante todo el muestreo, al igual otras diatomeas centrales de los géneros Coscinodiscus, Chaetoceros,
Bacteriastrum y dinoflagelados de los géneros de Ceratium y Protoperidinium. Finalmente, la presencia de
hipnocistos se hicieron evidentes durante todo el período de estudio, igualmente que algunos quistes de
dinoflagelados (figura 3), con abundancias relativas que oscilaron entre 0,01 y 56,13 (tabla 2).

a b c d

e f g h

i j k l
Figura 3. Algunas especies microfitoplanctónicas encontradas en la Bahía de Cartagena en el año 2005. (a:
Bacteriastrum delicatulum; b: Chaetoceros affine; c: Skeletonema costatum; d: Pyrophacus horologium; e: Ceratium
vultur; f: Dinophysis caudata; g-i: Estructuras de resistencia; j: Pediastrum simplex; k: Scenedesmus quadricauda; l:
Micrasterias sp.). Fotomicrografías tomadas entre 100x y 400x aumentos.

Sociedad
Ecopetrol Contecar Bosque Portuaria B19 B30 BE2
Hipnocistos 33,11 20,61 29,21 17,95 56,13 9,86 39,47
Quiste 1 0,06 0,11 0,03 0,27 0,60 0,14 Las concentraciones de clorofila a en la Bahía de
Quiste 2 0,02 0,05 Cartagena durante todo el muestreo oscilaron entre no
Quiste 3
Quiste 4
0,25 0,12 0,17
0,10
0,32
0,02
0,27
0,08
0,64
0,48
0,35
0,34
detectable (0,02) y 44,79 mg Chla/m3,
Quiste 5 0,03 0,04 0,04 evidenciándose la mayor concentración promedio
Quiste 6 1,01 0,39 0,29 0,25 0,28 0,01 durante la época de transición con 7,7 ± 9,55 mgChl
Quiste 7 0,09 0,13
Quiste 8 0,05 0,16 0,02 0,25 0,15 0,07
a/m3 seguida de la época seca con 3,73 ± 2,92mg
Quiste 9 0,82 0,68 0,23 0,19 0,22 Chla/m3, mientras que en la época de lluvia se reportó
con un valor de 2,88 ± 4,95mg Chla/m3 (figura 4a). En
Tabla 2. Abundancia relativa de quistes e hipnocistos en las
estaciones muestreadas en la Bahía de Cartagena en el año
las estaciones, los mayores valores se registraron en el
2005. muelles de Ecopetrol con niveles medios de 11,08 ±

141
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena

3
13,16 mg Chla/m y la menor concentración en la boya estaciones muestreadas a nivel superficial, la mayor
3
30 (5,84 ± 7,70 mg Chla/m ). En cuanto a las concentración promedio fue en el muelle de Ecopetrol
concentraciones en el fondo, se presentaron mayores con 7,11 ± 10,73 mg/m3 y la boya E2 (6,99 ± 5,28
valores en el muelle de El Bosque con 2,05 ± 2,08 mg/m3) y el menor valor en el muelle de Sociedad
mgChla /m3, mientras que las más bajas se Portuaria (2,62 ± 3,38 mg/m3). En cuanto al nivel de
evidenciaron en el muelle de Ecopetrol (0,69 ± 0,78 fondo, se presentaron las concentraciones más altas
3
mgChla/m ) y las boyas 19 y E2 (0,83 ± 1,56 en la boya E2 con 3,72 ± 5,58 mg/m3 y la más baja con
3 3
mgChla/m y 0,87 ± 0,66 mgChla/m , 0,99 ± 1,41 mg/m3 en la boya 19; en cuanto a las
respectivamente; figura 4b). demás estaciones tanto a nivel superficial como de
fondo se presentaron valores medios (figura 5b).
16

14 14

12 12

Feopigmento a mg/m3
10 10
Clorofila mg/m 3

8 8

6
6
4
4
2
2
0
0
SECA TRANSICION LLUVIA
SECA TRANSICION LLUVIA

a a
30
20
25
3
F e op ig m e n t o a m g /m

15
Clorofila a mg/m 3

20

15 10
10
5
5

0 0
ES EF CS CF BS BF SPS SPF B19S B19F B30S B30F BE2S BE2F ES EF CS CF BS BF SPS SPF B19S B19F B30S B30F BE2S BE2F

b
b
Figura 4. Concentraciones promedio de clorofila a en el Figura 5. Concentraciones promedio de feopigmento a en
agua; a: en las tres épocas climáticas y b: concentraciones el agua; a: en las tres épocas climáticas y b:
promedio para las estaciones muestreadas en la Bahía de concentraciones promedio para las estaciones muestreadas
Cartagena en el año 2005 (Estaciones: ES: Ecopetrol en la Bahía de Cartagena en el año 2005 (Estaciones: ES:
superficie; EF: Ecopetrol fondo, CS: Contecar superficie, Ecopetrol superficie; EF: Ecopetrol fondo, CS: Contecar
CF: Contecar fondo, BS: Bosque superficie; BF: Bosque superficie, CF: Contecar fondo, BS: Bosque superficie;
fondo, SPS: Sociedad Portuaria superficie; SPF: Sociedad BF: Bosque fondo, SPS: Sociedad Portuaria superficie;
Portuaria fondo, B19S: boya 19 superficie; B19F: boya 19 SPF: Sociedad Portuaria fondo, B19S: Boya 19 superficie;
fondo, B30S: boya 30 superficie; B30F: boya 30 fondo, B19F: Boya 19 fondo, B30S: Boya 30 superficie; B30F:
BE2S: boya E2 superficie; BE2F: boya E2 fondo). Boya 30 fondo, BE2S: Boya E2 superficie; BE2F: Boya E2
fondo).

Las concentraciones de feopigmento a en la bahía

variaron entre no detectables (0,03) y 42,98 mg/m3, Discusión de resultados
registrándose el mayor valor promedio en la época
3
seca (6,19 ± 6,67 mg/m ), seguida por la época de Para la comparación histórica del microfitoplancton
3
lluvia (3,47 ± 4,28 mg/m ) y por último la de en la Bahía de Cartagena se tuvo en cuenta la
3
transición con 2,51± 8,84 mg/m (figura 5a). En las metodología empleada en cada una de las

142

investigaciones, donde el método empleado fue de
forma similar permitiendo una comparación
adecuada debido a la homogeneidad del sistema de
muestreo (Vidal y Carbonell [5], Arias y Durán [12],
Tigreros [10], Sanjuán et al., [9], Cañón et al., [11]).
La composición microfitoplanctónica encontrada en
la bahía, ha presentado ciertos cambios históricos
donde algunos grupos microfitoplanctónicos como
las diatomeas y los dinoflagelados, han sido
reportados como permanentes, mientras que grupos
como las cianófitas y las clorófitas empezaron a ser
reportadas desde el 2002-2005. En cuanto a las
euglenófitas y las dictyotas han sido ausentes en su
totalidad aunque estas han sido encontradas en las
investigaciones de los años 1977; 2002-2003 (tabla
3). La presencia o ausencia de algunos de estos grupos
puede indicar una serie de cambios en el medio o en
los organismos, de los cuales pueden dar
generalmente ciertos indicios de contaminación del
sistema (Pinilla [28]). Un ejemplo claro es encontrar
especies que hayan sido catalogadas como
indicadoras de sistemas eutroficados,
mesotroficados, con cambios de pH o estratificación
térmica, como es el caso de Closterium sp.,
Cosmarium sp., Micrasterias sp. y la cianófita
Oscillatoria sp. (Pinilla [28]), que se reportan durante
este estudio, pero en menores abundancias.
Tabla 3. Cantidad de especies encontradas de los distintos
grupos fitoplanctónicos en la Bahía de Cartagena en los
diferentes años (* Corresponde a las distintas fases del
proyecto; - ausencia de especies).
Diatomeas Diatomeas Dinofla- Cianó- Eugle-
Autor pennadas centrales gelados fitas nófitas Clorófitas Dictyotas
Vidal y Carbonell (1977) 74 70 44 - -
Arias y Durán (1984) 14 18 22 - -
Tigreros (2002*) 13 60 18 5 -
Sanjuán et al ., (2003) 14 41 18 4 -
Tigreros (2003*) 14 77 25 3 1
Cañon et a l., (2004*) 8 36 11 5 -
Presente estudio (2005*) 39 48 24 5 -
Durante las tres épocas climáticas, se presentó una
marcada presencia y abundancia de la diatomea
central S. costatum, la cual tiene como característica
ser eurihalina y euriterma; esta especie es
cosmopolita, además ha sido catalogada como muy
abundante y cuando esto ocurre y alcanza grandes
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)
densidades, puede causar grandes impactos en el
sistema como la producción de hipoxia o anoxia.
Estas especies junto con otras diatomeas como
Coscinodiscus sp., Chaetoceros affinis y C.
curvisetus, han llegado a producir un tipo de mareas
amarillo-verdosas (COI Comisión Oceanográfica
Intergubernamental, [29]). S. costatum en la bahía ha
sido encontrada muy frecuentemente a lo largo del
tiempo, Vidal y Carbonell [5] la reportaron con una
mayor densidad en los meses de junio y septiembre,
igualmente Arias y Durán [7] y García [8], la registran
con altas densidades en la mayoría de las estaciones
ubicadas en diferentes puntos de la bahía; al punto que
Sanjuan et al. [9] y Cañón et al. [11] establecen que S.
costatum puede alcanzar una dominancia de hasta el
90 %, haciendo considerar las demás especies como
raras.
Para el presente estudio, igualmente se reportaron
Coscinodiscus sp., C. gigans, C. granni y C. radiatus.
La primera especie presentó una alta abundancia
relativa en algunas estaciones (B19, B30 y BE2),
presentando mayores densidades en el mes de julio;
C. gigans presentó altas y bajas abundancias
dependiendo la época (seca y transición,
respectivamente), siendo igualmente reportada por
diversos autores como común en la bahía (Vidal y
Carbonell [5], Arias y Durán [7], Tigreros [10], Cañón
et al. [11]. C. granni se reporta con una mayor
abundancia en la época de lluvia, lo cual puede ser
- 2 debido a la fertilización dada por nutrientes
- -
1 1
provenientes de aguas de origen continental
4 1 aportadas a través del Canal del Dique (Tuchkovenko
7 2
6 - et al., [1]) que se da especialmente en las épocas
8 - climáticas de transición y lluvias, queriendo además
que este género es indicador de aguas ricas en
nutrientes [30].
Algunos géneros de diatomeas son acompañantes de
especies que se encuentran relacionados a floraciones
tóxicas como Dinophysis acuminata y D. acuta. En
sus florecimientos se han encontrado Guinardia sp.,
143
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena
Bacteriastrum sp., Lauderia annulata, S. costatum, C.
curvisetum, C. decipiens y Thalassionema
nitzschioides, entre otras; estas especies, aunque son
de ambientes diferentes, ya sean marinas o estuarinas,
pueden llegar a dominar en el medio [29, 31]. Las
especies nombradas como acompañantes han sido
registradas desde 1977 hasta la actualidad, con una
abundancia relativa baja con algunas excepciones,
como el caso de T. nitzschioides que puede llegar a
tener una alta presencia de células. Lauderia annulata
y Guinardia sp., se registraron en el muelle de El
Bosque, aunque es cierto que estas especies han
permanecido históricamente en la bahía en bajas
densidades (Vidal y Carbonell [5], Tigreros [10],
Cañón et al. [11]).
La presencia de estructuras o esporas de resistencia es
notable en la bahía durante las tres épocas climáticas.
La aparición de este tipo de estructuras son dadas por
condiciones ambientales adversas, ya que las algas
pueden formar quistes móviles o no móviles, que
sobreviven por largos períodos de tiempo en los
sedimentos, hasta que las condiciones sean favorables
y les permitan reproducirse [32]. Las diatomeas
producen esporas de reposo o resistencia, las cuales
son estados fuertemente salificados en los ciclos de
vida de diatomeas céntricas marinas y unas pocas
dulceacuícolas y diatomeas pennadas [33]. Su mayor
abundancia relativa se presentó en la época de
transición y la menor en seca, muy posiblemente
debido a los cambios que se producen por el cambio
de época, causados por el ingreso de aguas
continentales que disminuyen la transparencia y
generan fluctuaciones en la temperatura y salinidad
del agua.
Por parte del grupo de los dinoflagelados, el género
Ceratium se hace presente, siendo importante ya que
algunas de sus especies pueden llegar a proliferar
causando grandes impactos en un ecosistema; según
la COI [29], la especie C. furca junto con otros
dinoflagelados han sido productores de mareas rojas o
144
inocuas [32]. En este estudio no se encontró en
algunas de las estaciones, sin embargo esta especie
registra abundancias generalmente altas durante las
tres épocas. En años anteriores ha sido reportada por
diversos autores, quienes la consideran como
frecuente pero con bajas densidades (Carbonell [6],
Arias y Durán [7], Tigreros [10], Cañón et al. [11]. La
especie Dinophysis caudata, ha sido catalogada como
tóxica [29], es de hábitos cosmopolitas
fundamentalmente nerítica, e incluso oceánica, pero
ocasionalmente abundante en aguas costeras
tropicales, subtropicales y cálido-templadas del Mar
Caribe [34]. Además de poder llegar a ser tóxica, hace
parte de las especies acompañantes cuando se
presentan estas floraciones tóxicas. Esta especie se
presentó en este estudio con una baja abundancia
relativa, siendo consistente con su comportamiento
histórico en los últimos años (Tigreros [10] Cañón et
al. [11]. Este mismo comportamiento, se detecta en
las especies Protoperidinium conicum, P. latidorsale
y P. elegans y Prorocentrum gracile, las cuales si bien
son poco abundantes, son muy frecuentes en
ambientes oceánicos tropicales; además, tienden a ser
encontradas como especies acompañantes de las
floraciones de Dinophysis [30] o productoras de
floraciones inocuas en aguas costeras [32].
En el grupo de las cianófitas, la especie de
Oscillatoria sp. se presentó con altas abundancias en
algunas de las estaciones; los organismos de este
género se han reportado como realizadoras de
floraciones tóxicas en el agua (Avaria et al. [32]
Reguera [34]). Una especie de este género es O.
lacustris, que se presentó con una alta abundancia en
la época de lluvia en este estudio. En la bahía, se ha
registrado el género Oscillatoria, la cual ha sido
reportada en las distintas fases con altas densidades
sobre todo en la época seca, de igual forma Sanjuán et
al. [9] la reportan con altas abundancias y poca
diversidad en el número de especies, la presencia de
este grupo en esta época es debido a que aún se
continúan realizando aportes de aguas dulces por

medio del Canal del Dique, además es común
encontrarla en sistemas estuarinos (Koening et al.
[35]. Aunque se registren especies de este género con
altas abundancias que de una u otra forma han
proliferado o decaído según las condiciones del
medio, no se puede establecer si son especies
estacionales.
En cuanto a las clorófitas que en su mayoría son de
aguas dulces y estuarinas, se registran también en
aguas saladas [36], como es el caso Pediastrum
duplex, P. gracillimum, y Staurastrum leptocladum,
con una abundancia relativamente alta, en
comparación a las demás clorófitas. En el presente
estudio, estas especies se registraron en las estaciones
de Sociedad Portuaria, boya 19 y boya 30
respectivamente, de igual forma también se
registraron las clorófitas P. boryanum, P. simplex,
Staurastrum gracile y Scenedesmus quadricauda, las
cuales han sido reportadas para la bahía en fases y
estudios anteriores. Las especies P. boryanum y S.
quadricauda han sido catalogadas como indicadoras
de eutroficación en un cuerpo de agua, además de ser
muy cosmopolitas por lo que se puede observar en
cualquier época del año, ya que son especies
oportunistas [37].
La mayoría de las especies encontradas y nombradas
anteriormente se encuentran relacionadas con
enfermedades de invertebrados y vertebrados
marinos por generar mareas rojas, las cuales pueden
llegar a causar grandes impactos en el medio acuático;
algunas de las especies que han sido relacionadas con
algunas causas son: S. costatum, C furca, Dinophysis
caudata, algunos géneros de Chaetoceros, Ceratium,
Coscinodiscus, entre otros (tabla 4). Según Tigreros
[10], el registro de algunas especies de algas que han
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)
sido reportadas como productoras de toxinas por la
COI [29], se encuentran presentes en la bahía, con los
resultados obtenidos y con estudios anteriores se
puede indicar que existen posibilidades para que se
desarrollen eventos de floraciones de algas tóxicas en
la Bahía de Cartagena siempre y cuando las
condiciones para cada uno de estos organismos
fueran favorables. No obstante, se debe comprobar
que la taxonomía de estas especies coincida con las
cepas tóxicas registradas en otras partes del mundo.
Desde una perspectiva geográfica, se puede deducir
que las concentraciones de clorofila a se encuentran
cerca a los rangos reportados para la gran cuenca del
Caribe y dentro de los valores reportados en los
diferentes puntos costeros del Caribe colombiano,
específicamente los reportados en la Bahía de
Cartagena cuyos valores fluctúan entre 0,02 y 73,19
mg / m3 (tabla 5); en cuanto a valores reportados en
sistemas eutroficados costeros tropicales estos
3
oscilan entre 62 y 130 mg/m [38], valores que no son
muy lejanos a los reportados para la zona de estudio
para el año 2005, donde las concentraciones se
presentaron de forma variable, oscilando entre 0,024
y 44,79 mg Chl a/m3, donde la mayor concentración
promedio se dio en la época de transición y en el
muelle de Ecopetrol; estos aumentos de clorofila a,
para esta época presentan generalmente relación con
el aumento de algunos de los nutrientes (e.g. nitritos,
fosfatos, silicatos), por el aporte de aguas
continentales y es debido a que en esta época se
presentan fuertes descargas por el Canal del Dique,
que para el año de muestreo tuvo altos caudales,
debido a las fuertes lluvias que se presentaron en el
interior del país y que influencian la cuenca del río
Magdalena [39].
145
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena

Tabla 4. Géneros y especies de fitoplancton encontrados en la Bahía de Cartagena con características potenciales de
producir daños en el medio acuático.

Especie Causas Época

Skeletonema costatum
Skeletonema costatum,
Coscinodiscus sp, Chaetoceros
affinis y C. curvisetus
Puede causar grandes impactos en el sistema
Seca, transición y lluvia
como la producción de hipoxia o anoxia
Pueden producir un tipo de mareas amarillo -verdosas Seca, transición y lluvia

Especies de este género puede llegar a producir daños

Seca, transición y Lluvia
Género Chaetoceros mecánicos en los recursos marinos

Especies de este género son indicadoras de

Género Coscinodiscus
Género Pseudonitzschia
Pseudonitzschia seriata
Género Rhizosolenia y
Pseudonitzschia
R. setigera, Pseudos-nitzschia
sp
Asterionella japonica S. y
costatum
Prorocentrum gracile, Ceratium
tripos y C. furca
Género Dinophysis;
D. caudata
condiciones marinas ricas en nutrientes o
de eventos de surgencias. Además han sido
catalogadas como productoras de polución, Seca, transición y lluvia
y otras cuando se han presentado floraciones
tóxicas, consumen todos los nutrientes del agua
hasta agotarlos, causando disminución en la
transparencia y amenazas a diferentes cultivos
considerada nociva en la salmonicultura y posible
productor del veneno amnésico de mariscos
considerada como especies tóxicas, al relacionarse
con intoxicaciones por la producción del veneno
amnésico de mariscos
Han sido catalogadas como especies productoras
de toxinas y envenenamientos
Han sido asociadas a intoxicaciones, cuando hay
eventos de floraciones la mayoría de veces se ven
relacionadas a la temperatura del agua
Producen ácido domoico, generando eventos de
envenenamiento diarreico por mariscos. Transición- lluvia; seca, transición y lluvia
Son productoras de floraciones inocuas Seca, t ransición y lluvia
Estas especies producen floraciones tóxicas y se encuentran
especie acompañantes como Guinardia sp, Lauderia
annulata, Skeletonema costatum, Chaetoceros curvisetum,
C. decipiens, thalassioma nitzschioides, Protoperidinium
conicum P. latidorsale Bacteriastrum sp, Pseudonitzschia sp Seca, t ransición y lluvia
y Pseudonitzschia seriata
Especie tóxica, causa floraciones alterando el medio

Ceratium furca Esta especie junto con otros dinoflagelados

han sido productores de mareas rojas Seca, t ransición y lluvia

Pyrophacus horologium
Género Oscillatoria sp
Pediastrum boryanum y
Scenodesmus quadricauda
Produce mareas causando grandes daños en
en el medio acuático
Se ha reportado floraciones tóxicas en el agua,
además de producir coloraciones verde azulado
Son especies indicadoras de de eutroficación
en un cuerpo de agua
Seca, t ransición y lluvia
Ausente en las tres boyas en la época seca
Seca, transición y lluvia
Ausente en las tres boyas en la época de lluvia
Seca, transición y lluvia
ausente en la mayoría de las estaciones

146
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 135-149 (2007)

Tabla 5. Valores mínimos (mín.) y máximos (máx.) de clorofila a (Chl a) para diferentes regiones del Mar Caribe y la costa
Caribe colombiana (tomado y modificado de Franco-Herrera, [40] y Gocke et al., [38]).

min - max
Región Tipo Chl a (µg l -1) ó (mg/m 3 )
CUENCA DEL CARIBE
Bianchi et a l, (1995) Golfo de México Aguas costeras y 0,15 - 2,85
(90°W / 28°N) oceánicas
Phlips y Badylak (1996) Florida Aguas costeras 0,2 - 39,9
(80°W / 25°N)
Webber y Roff (1996) Costa Hellshire, Sudeste Aguas costeras 0,70 - 2,64
de Jamaica (76°W / 17°N)
Rodríguez y Varela (1987) Noreste de Venezuela Aguas costeras y 0,1 - 5,2
(70°W / 12°N) oceánicas, zona de
surgencia

COSTA CARIBE COLOMBIANA

SISTEMAS TROPICALES

Plataforma continental de la Aguas oceánicas zona 0,76 - 1,52

Duarte (1996)
Guajira (71°W / 13°N) de surgencia

et al. (1992) Franco- 0,1 - 0,8

(75°W / 10°N) Aguas oceánicas
Herrera et al. (1992) 0,01 - 0,08

Franco-Herrera (2001)** Golfo de Salamanca Aguas costeras 7,6 - 96,1

Parque Nacional Natural Tayrona
-Herrera et al.(en rev.)** Aguas costeras 7,2 - 75,0
(74°W / 11°N)
Bahía de Cartagena
Arias y Durán (1984) Aguas costeras 0,20 - 19,25
(75°W / 12°N)
Tigreros (2002) Bahía de Cartagena Aguas costeras 0,78 - 40,81
Sanjuán et al . (2003) Bahía de Cartagena Aguas costeras 0,02 - 73,19
Cañón et al . (2004) Bahía de Cartagena Aguas costeras 0,028 - 29,49
Orejarena et al . (2004) Bancos de Salmedina Aguas costeras 0,06 - 1,20
Presente estudio (2005) Bahía de Cartagena Aguas costeras 0,02- 44,79
Gocke et al. (2003) Isla Salamanca Occidental 5,5 - 15
SISTEMAS TROPICALES EUTROFICADOS
Gocke et al. (2003) Ciénaga Grande de Santa Marta 62 - 67
Gocke et al. Complejo de Pajarales 19 - 130

147
 Suárez et al. El microfitoplancton en los principales muelles de la Bahía de Cartagena
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149
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)

ARTÍCULO

Caracterización fisicoquímica, biológica y

microbiológica en aguas de lastre de buques
de tráfico internacional
Physical-chemical, biologic and microbiologic
characterization in international traffic ships ballast water

Fecha recepción: 2007-03-31 / Fecha aprobación: 2007-06-02

CIOH
www.cioh.org.co
Mary Luz Cañón Páez, marlucpaez@cioh.org.co
Gustavo Tous, gtous@cioh.org.co
Karen López, karbact27@yahoo.com
Rossana López,
Fernando Orozco, forozco84@gmail.com
Viviana Suárez
Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas - CIOH, Isla Manzanillo,
Cartagena de Indias, D. T. y C.

Resumen
Durante los años 2005 y 2006 se continuaron realizando muestreos a tanques de lastre de buques de tráfico
internacional que arribaron a la Bahía de Cartagena, la cual está ubicada en el sector sur occidental de la costa
Caribe colombiana y localizada entre los 75º30'-75º36'W y 10º26'-10º16'N. Este trabajo se realizó con el
objetivo de seguir evaluando si la gestión a bordo de los taques de lastre, se efectuó de acuerdo con las directrices
emitidas por la Organización Marítima Internacional (OMI), a fin de reducir el riesgo de introducción de
especies en las zonas costeras.
Para lograr el objetivo se tomaron muestras de aguas de lastre de 75 buques procedentes de diferentes puertos
internacionales, a través de los manholes, de las descargas directas al mar, del deslastre en cubierta o de las
tuberías de acceso a los tanques. Dichas muestras de aguas fueron procesadas en el laboratorio, caracterizándose
en cada una de ellas las condiciones fisicoquímicas como nutrientes, oxígeno disuelto, temperatura, salinidad,
pH, turbidez, sólidos suspendidos totales; biológicas como fitoplancton, zooplancton, concentración de
pigmentos fotosintéticos y microbiológicas como Enterococos intestinales, Salmonella sp., Shiguella sp.,
Psedumonas sp., Coliformes totales, Escherichia coli, hongos.
Al igual que en las caracterizaciones anteriores de los años 2002, 2003 y 2004 en este mismo puerto, en este
estudio se continuaron reportando condiciones ambientales adecuadas para el sostenimiento de comunidades
biológicas dentro de los tanques. También se siguieron reportando nuevas especies planctónicas entre las cuales
se pueden mencionar a Oithona setigera, Oithona hegolandica, Microstella sp., Diartrodes sp., Oculosetella
sp., Corystoide chilensi, Parapagurus Diógenes y Sagitta minima.
Además fue posible evidenciar que según el convenio sobre manejo de aguas y sedimentos de lastre generado
por la OMI en el 2004, el 29% de las embarcaciones monitoreadas sobrepasaron los niveles permisibles de
descarga con respecto al microbio indicador Escherichia coli y el 11% de Enterococos Intestinales.
Palabras clave: Bahía de Cartagena, aguas de lastre, microbiología, fisicoquímicos, biológicos.

150

Abstract
During the years 2005 and 2006 the sampling to those
international traffic ships ballast water which arrived
in the Bay of Cartagena, located at the southwestern
Caribbean Colombia Zone and between 75o30'-
75o36W and 10o26'-10o16N, continued. This work
was carried out with the objective of continuing the
assessment on if whether work on board the ballast
tanks, was carried out according to the guidelines
issued by the International Maritime Organization
(IMO), in order to diminish the risk of species
introduction in the shore zones.
The achieve the objectives, samples of ballast water of
75 ships coming from different international ports
were taken, through the manholes, from the direct
discharges to the sea, from the deck disballast or from
the tank access pipelines. Those water samples were
processed in the laboratory, where in each one of them
the physical-chemical conditions were characterized,
such as nutrients, solved oxygen, temperature,
salinity, pH, turbidity, total solids in suspension; the
biological ones such as fito-plankton, zooplankton,
photosynthetic pigment concentration;
microbiological such as intestinal enterococos,
Salmonella sp., Psedumonas sp., total Coliforms,
Escherichia coli, fungus.
Likewise the previous 2002, 2003 and 2204
characterizations at this same port, in this study the
report of the appropriate environmental conditions for
sustaining the biological communities in the tanks
continued. Also the new planktonic species continued
to be reported, among which Oithona setigera,
Oithona hegolandica, Miocrostella sp., Diartrodes
sp., Oculosetella sp., Corystoide chilensi,
Parapagurus Diógenes, and Sagitta minima can be
mentioned.
In addition, it was possible to evidence that according
to the agreement on the handling of ballast water and
sediment by IMO in 2004, 29% of the monitored
vessels surpassed the permissible discharge levels
with respect to the Escherichia coli and the 11% of
Intestinal enterococos germ indicator.
Key words: Bay of Cartagena, ballast waters,
microbiology, physical-chemical, biologic.
Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena
Introducción
El riesgo que representan las especies introducidas
utilizando como vector las aguas de lastre de los
buques de tráfico internacional, Hewitt [1], Drake,
[2], ha despertado el interés de organizaciones
ambientales, investigadores, universidades, centros
de investigación, órganos de control, entre otros, por
los daños que sobre la salud humana, los recursos
pesqueros, la biodiversidad y las zonas costeras en
general éstas han causado.
En 1990 el Comité de Protección del Medio Marino
(CPMM), en su 31º período de sesiones, constituyó un
grupo de trabajo sobre el agua de lastre que redactó
directrices para abordar el problema de las especies
foráneas. Una resolución del CPMM, la
MEPC.50(31) fue adoptada en 1991 con el título
Directrices internacionales para impedir la
introducción de organismos acuáticos y agentes
patógenos indeseados que pueda haber en el agua de
lastre y en los sedimentos descargados por los buques.
Las directrices indican que la capacidad de
supervivencia de los organismos acuáticos y agentes
patógenos después de ser transportados en el agua de
lastre puede reducirse si se dan diferencias
apreciables de salinidad, temperatura, nutrientes e
intensidad de la luz, por ejemplo, en las condiciones
ambientales prevalecientes. Por ello recomendaron
que se procediera con cuidado a cargar el agua de
lastre para asegurar que se cargara a bordo
únicamente agua limpia y sedimentos limpios.
Cuando no fuera posible descargar el agua de lastre,
su sustitución en alta mar ofrece un medio de limitar la
introducción de especies no deseadas. Las aguas
oceánicas profundas contienen pocos organismos y
con los existentes no es probable que se adapten
fácilmente a las nuevas aguas costeras o aguas dulces
[3].
En este sentido, desde hace más de 10 años se viene
trabajando en la generación de alternativas a nivel
global, que permitan disminuir el riesgo de
introducción de especies invasivas, ya que en el
medio marino la introducción de éstas ha sido
identificada por el Fondo Mundial del Medio
Ambiente (GEF, su sigla en inglés) como una de las
cuatro amenazas más grandes a los océanos del
mundo, siendo las otras tres: la contaminación
151

proveniente de fuentes terrestres; la sobreexplotación
de recursos marinos vivientes y la alteración física y
destrucción de hábitats marinos [4].
Por lo anterior, para contrarrestar las consecuencias y
disminuir los riesgos de las especies invasivas, en la
ecología nativa, la salud humana y la economía de las
zonas impactadas, la OMI/GEF/UNDP, contando con
el apoyo de los estados miembros de la Organización
Marítima Internacional (OMI) y la industria naviera,
desarrollaron la fase inicial de un proyecto global
denominado “Remoción de barreras para la efectiva
implementación del control y medidas de gestión del
agua en países en desarrollo”, el cual buscó ayudar a
los países en desarrollo a implementar las medidas de
carácter urgente voluntario previstas en la Resolución
A868(20), con el fin de reducir la transferencia de
especies invasoras que tiene como vector el agua de
lastre. Actualmente y a partir de las experiencias
aprendidas en la fase experimental del proyecto
Globallast, se plantea el desarrollo de una segunda
fase, la cual tiene como objetivo principal, asistir a los
países y regiones más vulnerables a implementar
mecanismos sostenibles para el manejo y control de
las aguas y los sedimentos de lastre [5].
Numerosas leyes y regulaciones a nivel internacional
están emergiendo para combatir los problemas de
salud pública, ambientales y económicos causados
por especies acuáticas invasoras. La mayor parte de
las leyes apuntan a las naves comerciales, como
camino primario para las invasiones y la llamada para
que las naves emprendan el intercambio del agua del
lastre (BWE) o un tratamiento equivalente (BWT),
para reducir la probabilidad de la transferencia de
organismos indeseados. El tratamiento se considera
más prometedor que BWE a largo plazo, porque el
BWE se limita en su eficacia, alcance, uso y la
aplicabilidad [6].
En el país, la Dirección General Marítima (DIMAR) a
través del Centro de Investigaciones Oceanográficas e
Hidrográficas (CIOH), desde hace 5 años viene
trabajando en la Bahía de Cartagena en el monitoreo
de tanques de lastre de algunos buques que arriban al
puerto. Con dicha información, se pretende generar el
soporte técnico que permita junto con los marcos
normativos existentes estudiar y construir los
mecanismos legales, jurídicos, políticos e
152
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)
institucionales nacionales necesarios para adoptar el
convenio sobre el manejo de aguas de lastre, el cual
establece los mecanismos para prevenir, reducir y
eliminar en última instancia la transferencia de
organismos invasores.
Metodología
Teniendo en cuenta la dificultad para la toma de la
muestra en los tanques, fue necesario emplear
diferentes técnicas de muestreo, por lo cual se
tuvieron en cuenta varios criterios para seleccionar el
método real de muestreo, por lo anterior dichos
criterios contemplaron:
a) La identificación de métodos seguros y conformes
con las operaciones de los buques.
b) Selección de los buques; se contemplaron los
buques con rutas de mayor frecuencia que
visitaron el Puerto de Cartagena.
c) Acceso a los tanques de lastre: esto dependió en
gran parte al diseño del buque y del tanque. En
términos generales el acceso a los tanques de
lastre a través de la apertura de escotillas
(manholes) es el método de muestreo más
recomendado [7], sin embargo durante el
desarrollo del proyecto actual el sistema de
deslastre en cubierta, fue también predominante a
la hora de la toma de la muestra. En la tabla 2 se
describen los diferentes tipos de acceso a los
tanques y métodos empleados para la toma de la
muestra.
d) Y el volumen de descarga: se evitó el muestreo en
los tanques de lastre de los buques que contenían
una mezcla de agua de diferentes regiones, para
centrarse en tanques con agua del lastre de una
sola área de origen conocida. Cabe mencionar,
que el tipo de buques que con mayor frecuencia
arribaron al puerto de Cartagena fueron los tipo
container, sin embargo por facilidad de acceso los
seleccionados para la toma de muestra fueron los
tipo tanqueros o cargueros que venían lastrados a
tomar carga en el puerto.
 Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena

Tabla 1. Técnicas y equipos de muestreo utilizados para el monitoreo de aguas a los tanques de lastre de buques de tráfico
internacional que arribaron al puerto de Cartagena.

Tipo de acceso Tipo de muestreo Descripción

a) Manholes (puertas de Redes, botellas, baldes El muestreo se realizó a

acceso a los tanques) través de las bocas de los
tanques. Para éste se utilizó
una botella Nansen de 5 litros
y redes de plancton
(fitoplancton y zooplancton)
ya que de esta forma se tiene
acceso directo al tanque. Fue
raramente posible muestrear
de esta manera (24 muestras),
debido a la baja
disponibilidad de buques con
este sistema o porque dichas
bocas se encontraban
ubicadas por debajo de la
carga de las naves. En este
último caso, la situación
implicaba tiempo y costos
por parte de la tripulación
para la toma de la muestra
por tal razón la cantidad de
muestras fue menor con
respecto a otros métodos de
muestreo.

Toma directa Esta técnica es útil para

valorar la descarga, así como
la biota descargada en el agua
de lastre. Principal
preocupación para las
autoridades del Estado Rector
del Puerto.
b) Descarga en cubierta
(Overflow)

153
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)
c) Tuberías de acceso Bombas de mano, tubos,
bombas eléctricas, toma
directa.
d) Tuberías de acceso
d) Descarga directa al mar Toma directa con baldes,
redes, botellas,
154
En este caso, fueron
utilizadas bombas de mano o
eléctricas, a las cuales fue
acoplada una manguera que
se introdujo a los tanques de
lastre a través de las tuberías
de acceso. En los buques
estas tuberías se utilizan para
medir el nivel del agua en un
tanque y para conectar el
tanque con una cubierta
superior
El método requiere equipo
diseñado especialmente para
acceder al tanque a través de
tuberías estrechas. En este
caso se utilizó un dispositivo
de acero inoxidable de 15 cm
de largo y 0.5 cm de diámetro
o mangueras de ¾ de pulgada
adaptadas a bombas
manuales. Los estudios
futuros del agua del lastre
deben considerar que el
muestreo vía las tuberías de
acceso, es inferior con
respecto a otras técnicas de
muestreo. Sin embargo, en
algunos casos las bocas no
pueden ser abiertas, debido a
la sobreposición de la carga,
por lo cual el muestreo a
través de los tubos de acceso
puede ser la única solución
para muestrear el agua del
lastre en el tanque (Sutton et
al. 1998).
Durante el proceso de cargue
y descargue de la nave, es
importante mantener la
estabilidad del buques. Por
esta razón cuando se presentó
descarga de aguas de lastre al
mar a través de la toma
directa , se accedió a la
muestra de aguas para el
análisis
 Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena

Es importante aclarar que varios estudios han Resultados y discusión

concluido que ningún método hasta ahora
implementado para evaluación y monitoreo de
especies dañinas transportadas en aguas de lastre, es
adecuado para muestrear todos los grupos de
organismos en todos los barcos [1, 7, 8, 9, 10]. Se
sugiere por lo tanto, el uso de más de un método y
diferentes equipos para conseguir mejores resultados.
Cabe mencionar también, que una vez tomadas las
muestras se siguieron los protocolos de preservación
de las mismas y se reportó la información in situ de los
parámetros indicados acuerdo con los protocolos
establecidos por el laboratorio.
En el procesamiento de las muestras se emplearon
metodologías previamente validadas por el
laboratorio de química, siguiendo los procedimientos
establecidos en el manual de procedimientos técnicos
[12].
Parámetros fisicoquímicos
En la tabla 3, se presenta la variación fisicoquímica y
de pigmentos fotosintéticos en los tanques de lastre de
buques de tráfico internacional monitoreados en el
presente estudio.
En cuanto a los nutrientes en los buques monitoreados
se reportaron concentraciones de nitritos entre 0 y
0.09 mg/L con promedios de 0.007 mg/L, indicando
condiciones de disponibilidad de este elemento
(fuentes energéticas) para aprovechamiento por parte
de la comunidad biológica presente en los tanques y
contribuir con el proceso de oxidación del amonio a
nitrato. De éstos, un 24.23% (18 buques) en promedio
reportaron concentraciones de nitrito que facilitan el
aporte de nutrientes, para el sostenimiento de
organismos que son transportados en las aguas de
lastre. El 75% de los buques, reportan

Tabla 3. Concentración de parámetros fisicoquímicos y pigmentos fotosintéticos en los tanques de lastre de buques de
tráfico internacional monitoreados durante el período 2005-2006 en la Bahía de Cartagena.

pH Chl -
NO2 NH4 PO4 OD SST Tem, Chl - a Feo - a Chl -b c+c2
BUQUE (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) Unida Sal (mg/L) (mg/L) (mg/L)
(°C) (mg/L)
des
FALCON 0,002 0,041 0,009 6,75 14 30 8,5 32 0,53 3,95 0,04 0,16
DONAU 0,005 0,043 0,009 6,96 18,7 30 8,8 32 1,60 2,14 0,02 0,15
PACIFIC 0,033 0,002 0,042 6,93 15 27,4 7,1 25 0,53 0,00 0,00 0,00
SIELTOR 0,008 0,006 0,108 5,37 8,05 29,4 7,06 30 0,00 0,00 0,00 0,00
HAPPY
BEE 0,001 0,002 0,059 5,06 27 34,4 8,28 26 0,27 0,00 0,00 0,00
AGUILE
SUP 0,005 0,006 0,101 5,06 37 32,2 9,03 0 0,00 0,00 0,00 0,00
AGUILE
FONDO 0,005 0,006 0,101 5,06 37 32,2 9,03 0 0,00 0,00 0,00 0,00
PALUC
A (REF) 0,005 0,075 0,050 3,96 11 30,8 8,84 32 1,07 1,74 0,00 0,00
PALUC
A OVER 0,012 0,093 0,117 4,7 15 32,2 8,33 30 0,53 0,77 0,00 0,02
FLOW
HAPPY
BEE 0,000 0,106 0,015 4,72 19 35,5 8,62 32 0,00 0,00 0,00 0,00

155
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)

pH Chl -
NO2 NH4 PO4 OD SST Tem, Chl - a Feo - a Chl -b c+c2
BUQUE (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) Unida Sal (mg/L) (mg/L) (mg/L)
(°C) (mg/L)
des
GLORY
ATLAN 0,009 0,204 0,250 5,46 52 29,3 9,02 0 0,27 2,54 0,00 0,00
TIC
CSAB -
HAMBU 0,006 0,070 0,071 3,96 18 28,7 7,98 30 0,27 0,00 0,00 0,00
RG
MARSK
FREEPO 0,013 0,066 0,067 5,06 20,5 28,8 8,05 30 1,07 2,86 0,00 0,00
RT
LIBORNO 0,000 0,282 0,069 4,7 21,5 30 7,99 32 0,00 0,19 0,00 0,00
CAP
NELSON 0,001 0,074 0,031 5,02 17,5 29,6 8,35 30 0,00 0,00 0,00 0,00
CCNI
PTA 0,056 0,430 0,147 4,38 25,5 30,7 7,94 14 0,27 1,23 0,00 0,00
ARENA
CMA
CGM 0,002 0,086 0,031 4,49 32,5 31,3 8,06 30 0,00 0,00 0,00 0,00
AZTECA
MOUNT
0,004 0,002 0,133 5,3 21,5 33 8,45 26 0,00 0,00 0,00 0,00
RAINIER
MOUNT 0,039 0,002 0,107 5,3 21,5 33 8,45 26 8,81 0,00 0,33 0,19
RAINIER
PAMPL
0,002 0,002 0,005 5,27 18,25 33,5 7,85 30 0,27 0,00 0,00 0,00
ONA
IZOLA 0,012 0,002 0,078 5,38 10,25 30,5 8,4 22 0,27 0,00 0,00 0,00
BALSA 0,010 0,002 7,580 3,45 62 31,7 4,65 30 0,53 0,00 0,00 0,00
ARAUCA 0,001 0,054 2,488 5 14,25 31,1 7,23 25 0,00 0,00 0,00 0,00
FUJISEIM 0,004 0,058 0,223 6,15 15,25 30,8 7,99 28 5,07 13,24 0,00 0,14
VALPA
RAISO 0,006 0,013 0,079 6,36 8 30 8,06 20 0,53 0,00 0,00 0,00
EXPRESS
YOKOH
AMA 0,001 0,013 0,023 6,85 9,25 30,7 7,96 12 0,00 0,00 0,00 0,00
ALICAN
TE 0,003 0,017 0,010 5,96 7,75 29,3 7,48 30 0,27 0,00 0,00 0,00
IRENE
LOBOS 0,004 0,023 0,150 6,42 16,75 29,8 7,98 12 0,80 1,25 0,00 0,03
GLORY
ATLAN 0,001 0,016 0,015 5,9 27,5 31 8 34 0,53 0,00 0,00 0,00
TIC

156
 Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena

pH Chl -
NO2 NH4 PO4 OD SST Tem, Chl - a Feo - a Chl -b c+c2
BUQUE (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) Unida Sal (mg/L) (mg/L) (mg/L)
(°C) (mg/L)
des
SIERRA
EXPRESS 0,008 0,124 0,018 3,9 38,25 29,1 8,28 30 1,07 2,67 0,01 0,06
CSAV
HAMBU 0,002 0,013 0,033 5,37 24,5 29,1 8,27 30 0,00 0,00 0,00 0,00
RGO
CALA
PINAR 0,025 0,033 0,013 5,06 37,25 29,2 8,09 29 0,00 0,00 0,00 0,00
DORIAN 0,015 0,101 0,080 3,52 21,25 30 8,08 30 0,80 3,68 0,00 0,05
CALAP
ULA 0,002 0,025 0,009 6,21 13 25,6 8,12 32 0,80 3,12 0,00 0,00
ANAKE
NA 0,001 0,016 0,009 6,33 20 26,6 8,06 30 0,00 0,00 0,00 0,00
ST
JHONS 0,001 0,017 0,01 6,47 21 26,2 8,13 32 0,53 0,00 0,00 0,00
CALLAO
0,001 0,064 0,06 5,84 12,25 30 8,02 32 0,00 0,72 0,00 0,00
EXPRESS
ALIANCA
CHANG 0,000 0,060 0,07 5,25 23,75 30,1 8,1 24 0,53 3,02 0,00 0,02
AI
PANABO 0,000 0,056 0,01 5,49 23,25 29,7 7,92 26 1,34 3,90 0,00 0,09
HANGA
BERLIN 0,001 0,057 0,00 4,7 12 31,7 7,75 28 0,53 0,00 0,00 0,00
SIELTOR 0,003 0,070 0,009 2,22 428,2
5 29,4 7,71 30 0,53 0,00 0,02 0,06
HERON 0,041 0,055 0,09 5,54 24 29,5 7,8 20 0,00 0,75 0,02 0,00
STENAC 0,001 0,060 0,03 5,66 19,25 30 8,04 22 0,27 0,29 0,02 0,03
CALA
PALME 0,001 0,059 0,01 5,45 17 30,2 8,14 28 1,07 0,00 0,06 0,05
RA
CHELSEA 0,006 0,062 0,02 5,22 29,5 29,7 7,87 30 0,27 0,00 0,00 0,00
SEABO
ARD 0,000 0,002 0,00 5,02 23,25 29,4 7,97 28 0,00 0,00 0,00 0,00
FLORIDA
ANALSA 0,001 0,054 0,02 1,6 6,5 29,7 7,48 30 0,00 0,00 0,00 0,00
CSAV
LIBORNO 0,002 0,056 0,01 1,67 4,5 30,2 7,75 30 0,00 0,19 0,00 0,00
MILAN
0,001 0,054 0,04 1,58 10,5 28,7 7,36 30 0,27 0,00 0,01 0,02
EXPRESS
EVIN
MO NRO 0,001 0,051 0,04 1,32 7,5 31,1 8,02 28 0,27 0,00 0,01 0,00
VIA

157
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)

pH Chl -
NO2 NH4 PO4 OD SST Tem, Chl - a Feo - a Chl -b c+c2
BUQUE (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) Unida Sal (mg/L) (mg/L) (mg/L)
(°C) (mg/L)
des
HELBIN
KY 0,002 0,068 0,02 4,51 15,75 31,7 8,23 28 0,00 0,19 0,00 0,02
EXPRESS
PANABO 0,001 0,002 0,02 5,34 22,5 29,5 7,73 28 0,27 0,00 0,03 0,03
CCNI
PTA 0,003 0,002 0,05 5,97 24,5 29 7,69 26 0,00 0,37 0,02 0,00
ARENA
CAP
MELVIL 0,001 0,002 0,02 5,7 19,5 28,7 7,95 30 0,27 0,00 0,03 0,01
LE
WESTE
0,002 0,002 0,01 4,74 46,5 30,5 7,74 28 0,00 0,56 0,08 0,08
R HAVE
CHELSEA 0,003 0,002 0,01 5,6 30,5 30,1 7,76 28 0,53 0,00 0,01 0,02
POLLU 0,001 1,260 1,17 4,623 3 30 8,04 32 0,00 0,00 0,00 0,00
POLLU
0,001 1,260 1,17 4,623 3 30 8,04 32 0,00 0,00 0,00 0,00
XA
ROTHO
0,012 1,641 0,02 2,941 12,7 30 7,87 30 0,00 0,00 0,00 0,00
RN
TMM
DURAN 0,003 1,097 0,14 5,34 27 30 8,19 30 0,62 0,00 0,03 0,04
GO
LIKE
OSTRI 0,003 0,186 0,15 8,08 38,7 28 8,06 33 0,00 0,00 0,00 0,00
CEC
AMERI 0,018 0,016 1,12 6,91 32,3 29 7,36 33 0,00 0,00 0,00 0,00
CA
HAPPY
0,004 0,012 0,04 5,25 29,7 28 8,28 29 0,00 0,00 0,00 0,00
BEE
PALEN
0,011 0,028 0,04 6,91 6,3 32 8,23 32 0,13 0,36 0,01 0,01
QUE
MARESI
0,000 0,038 0,02 6,14 13,3 29 7,69 25 0,04 0,00 0,00 0,00
AS
CALA
PRO 0,022 0,002 0,03 2,21 7 29 7,69 28 0,18 0,20 0,02 0,02
GRESO
PUNTA
ARENAS 0,001 0,002 0,03 6,91 12,3 25 7,69 32 0,00 0,45 0,00 0,00
CURA
ZAO 0,000 0,002 0,03 8,08 11,9 27,2 7,76 24 0,13 0,12 0,00 0,00

158
 Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena

pH Chl -
NO2 NH4 PO4 OD SST Tem, Chl - a Feo - a Chl -b c+c2
BUQUE (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) (mg/L) Unida Sal (mg/L) (mg/L) (mg/L)
(°C) (mg/L)
des
NEDLL
OYD
0,002 0,002 0,02 5,25 7,7 28,2 7,89 29 0,00 0,18 0,00 0,00
CURAC
AO
STENA
CONQU 0,089 0,071 0,45 7,1 11 30 7,91 30 0,00 0,00 0,00 0,01
UEST
NS
CHALL 0,011 0,072 0,03 7,5 9,3 29 7,89 28 0,00 0,70 0,03 0,04
ENGUER
HAPPY
LADY 0,005 0,096 0,01 6,6 16 30 8,1 35 0,00 0,04 0,00 0,00
TEAM
ANEMO 0,006 0,002 0,11 5,78 12,7 28,3 6,2 22 0,12 0,01 0,00 0,00
NIUM
PHILLI
NE 0,006 0,002 0,01 6,87 236,3 28,4 8,22 31 0,00 0,21 0,01 0,01
SHULTE
HAPPY
0,001 0,022 0,01 6,96 29,2 30 8,16 31 0,00 0,19 0,01 0,02
LADY

concentraciones menores a 0.01 mg/L, característica
que puede limitar los procesos de oxidación en los
tanques, puesto que el nitrito como fuente de energía
está en menor concentración.
Las concentraciones de amonio fueron mayores que
los nitritos, éstas oscilaron entre 0.002 y 1.641 mg/L,
observándose liberación de dicho elemento al medio.
Esta situación correspondió con los valores de pH
también reportados, los cuales en condiciones básicas
contribuyen para que se presente una mayor
liberación al sistema de esta forma inorgánica del
nitrógeno, Chester [13]. La concentración promedio
de este elemento fue de 0.102 mg/L, superior a la
reportada en estudios anteriores, indicando de esta
manera que los procesos de amonificación fueron más
significativos. Cabe mencionar, que sólo cuatro
buques (Pollux a, Rothorn, TMM Durango, Pta
Arenas) son los que en realidad aumentaron la
concentración promedio de los valores de amonio
reportados en este estudio. En estos buques, también
se reportaron condiciones aeróbicas y alcalinas en los
tanques, situación que facilita la liberación de dicho
elemento, puesto que este proceso se presenta en
condiciones aeróbicas o anaeróbicas y bajo
condiciones de pH básicas [14].
Por otro lado, la concentración de ortofosfatos en los
tanques monitoreados varió entre 0 y 7.58 mg/L, con
promedios de 0.22 mg/L. Con respecto a los estudios
anteriores [15, 16] las concentraciones reportadas en
este estudio fueron más elevadas, indicando de esta
forma que en los tanques está la disponibilidad de
nutrientes mínima, para el sostenimiento de especies
biológicas [15]. Cinco buques (Balsa, Arauca, Pollux
A, CEC América, Stena Conquest) fueron los que
reportaron las mayores concentraciones de
ortofosfatos en las aguas analizadas. Es de resaltar
que El Stena Conquest y Pollux A, también se

159

encontraron entre las embarcaciones que reportaron
las mayores concentraciones de nitrito. Por lo anterior,
en estas naves en particular, se puede indicar que las
condiciones mínimas de nutrientes y características
abióticas del agua son adecuadas para el normal
crecimiento de las algas, su mantenimiento y
desarrollo.
Las concentraciones de oxígeno en los tanques de
lastre de los buques se observaron entre 1.32 mg/L y
8.08 mg/l, con valores promedio de 5.26 mg/L. La
variación del parámetro en los tanques corresponde
con la forma de acceso al tanque, viéndose claramente
reflejado que tanques con valores mínimos de oxígeno
correspondieron con tomas directas de las muestras a
través de los manholes. Por el contrario, valores de
oxígenos más altos se observaron en las muestras que
fueron tomadas de otra forma, tal es el caso de la
descarga directa al mar o en cubierta. Es importante
mencionar que por las características de los
movimientos del agua en los tanques de los buques o
maniobras de los mismos, el parámetro se ve alterado.
Sin embargo, en algunos buques con toma directa
también se reportan concentraciones mayores de
oxígeno, indicando de esta forma que el sistema es
apto para mantener organismos
En promedio los sólidos suspendidos totales
estuvieron en 20.48 mg/L. El buque que reporta la
menor concentración de sólidos (3.00 mg/L) también
reporta valores de salinidad y temperatura
característicos de aguas marinas. De este modo se
corrobora junto con las características fisicoquímicas
del agua analizada, que el buque sí realizó el
intercambio en mar abierto como lo establece la
directriz A868 de la OMI, puesto que en aguas de alta
mar la concentración de sólidos es baja, ya que son
ambientes oligotróficos y con una baja influencia de
las áreas continentales que aportan la mayor cantidad
de material en suspensión. Cabe mencionar que tres
buques (Balsa, Weter have y Glory Atlantic),
reportaron la mayor concentración de sólidos, estos
valores pudieron estar influenciados por la
resuspensión del sedimento en el momento de la toma
de la muestra, puesto que en el procedimiento de
deslastre en cubierta, el agua es bombeada con
bastante presión, situación que origina la resuspensión
160
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)
de las partículas de sedimento. Con respecto a esta
carga sedimentaria se puede indicar que sí afecta la
zona donde se realiza la descarga (particularmente
Colclinker, ECOPETROL) puesto que son grandes
cantidades de sólidos las que se acumulan en los
tanques y es en estas dos estaciones en donde se
realizan las mayores descargas.
Los datos de temperatura reportados oscilaron entre
25 y 35.5 ºC, con promedios de 29.9 ºC. Los valores
más altos correspondieron siempre a la misma
embarcación (Happy Bee), dicha temperatura se
explica, debido a que la muestra fue influenciada por
el sitio donde fue tomada la muestra. Dicho lugar
corresponde con los ductos del cuarto de máquinas,
área donde se registran altas temperaturas. En
comparación con los estudios anteriores, en este
buque también se reportaron temperaturas altas, las
cuales pueden ser factores de control para muchas
especies que no toleran estas condiciones [15].
Algunos autores incluso, dentro de los tratamientos de
control de bioinvasores, proponen tratamientos
térmicos (40º C) a las aguas en tiempos de exposición
superiores a las 5 horas. Aunque no se reportan estas
temperaturas tan altas, en términos de esta variable sí
puede ser una condición limitante para el normal
desarrollo de especies de flora y fauna.
La salinidad osciló entre valores de 0 y 35, rango
superior al reportado en la Bahía de Cartagena, el
promedio de la salinidad en buques muestreados fue
de 27.04, indicando condiciones de salubridad de las
aguas y algo de mezcla de las mismas. Si se tiene en
cuenta que las aguas son tomadas en áreas costeras y
mezcladas al realizar el intercambio en mar abierto, es
razonable que los valores se vean afectados por la
mezcla. Sólo el 8.5% de los buques reportaron valores
de salinidad por debajo de 20, siendo el rango entre 29
a 32 el más predominante. Sólo un buque reportó
valores de salinidad de 35 (Happy Lady), este alto
valor pudo presentarse por las altas temperaturas
registradas en los tanques que generan procesos de
evaporación y por lo tanto elevan la salinidad. En
general, predominaron rangos de salinidad que
corresponden con los generalmente reportados para
aguas marinas y que sugieren el intercambio en mar
abierto.

Los valores de pH en los tanques monitoreados
variaron entre 4.65 y 9.03 unidades de pH, indicando
de esta forma la presencia de aguas con características
tanto ácidas como básicas. En promedio el parámetro
reportó valores de 7.95 unidades de pH, el cual se
encuentra dentro del rango normal de las aguas
marinas (7.1-8.3), indicando de esta forma aguas de
características ligeramente alcalinas. En comparación
con la bahía, el rango de variación de este parámetro
en los diferentes tanques monitoreados indica algún
tipo de contaminación antropogénica, que al ser
descargadas en algún sitio específico, puede generar
alteración en los procesos biológicos del área
directamente afectada. Con excepción de 11 buques,
los demás reportaron valores de pH dentro del rango
normal de aguas marinas, sólo uno de ellos (Balsa)
reporta valores muy por debajo del rango (4.64),
indicando contaminación del tanque por productos
químicos propios de la carga del buque y 2 (Aguile y
Glory Atlantic) de características básicas (9.03)
indicando posiblemente aguas con menores
concentraciones de CO2.
Parámetros biológicos
Debido a que la técnica no es específica
(espectrofotometría), se reportan la concentración de
sustancias que absorben en la misma longitud de onda
del pigmento fotosintético clorofila-a entre 0 y 8.81
mg/L, con promedios de 0.46 mg/L, aunque con
valores más bajos que los reportados en la bahía, son
evidentes dentro de los tanques los procesos de
actividad fotosintética. Dicha variación puede
presentarse porque bajo las condiciones de oscuridad
en que permanecen los fototrofos en los tanques, hace
que su nivel de producción disminuya, lo cual es
lógico teniendo en cuenta que dichos organismos
requieren de una fuente de energía, en este caso la luz,
la cual está ausente bajo las condiciones de estudio
[16, 17]. Se puede inferir adicionalmente que dadas
las condiciones de nutrientes y la concentración de
sustancias que absorben en la misma longitud de
ondas del pigmento fotosintético clorofila-a reportada
en los tanques, estas aguas sí proporcionan los
requerimientos mínimos necesarios para el
sostenimiento de especies biológicas. Si sumado a
esto, se tiene en cuenta que las rutas de estos barcos
son más cortas, el tiempo bajo el cual van a estar en
condiciones de poca luz va a disminuir, por lo tanto
Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena
algunas especies pueden adaptarse a estos períodos de
poca luz y reactivar sus procesos productivos una vez
se den nuevamente las condiciones ambientales
adecuadas (períodos de descarga). En este sentido, es
importante verificar los volúmenes y las zonas de
descarga para evitar posibles introducciones.
Por su parte, la concentración de sustancias que
absorben en la misma longitud de onda del pigmento
feofitina- a, oscilaron entre 0 y 13.24 mg/L con
promedios de 0.70 mg/L. Las mayores
concentraciones de estas sustancias, pueden
presentarse porque las características de los tanques
como condiciones de poca iluminación y baja
disponibilidad de nutrientes, con respecto a un medio
natural, generan productos de degradación en
mayores concentraciones. Varios de los buques que
reportan altas concentraciones de sustancias que
absorben en la misma longitud de onda del pigmento
fotosintético clorofila-a, también reportan mayores
concentraciones de las que absorben en el rango de la
feofitina-a, por esta razón y dada la técnica utilizada
(espectrofotometría), las que absorben en el rango de
la clorofila-a en los tanques puede estar influenciada
por los valores de las que lo hacen en el rango de la
feofitina-a reportada, lo anterior debido a que los dos
pigmentos tienen sus máximos picos de absorción en
regiones del espectro similares [18]. Las altas
concentraciones de Fefitina-a, también son
indicadoras de procesos de degradación y
descomposición que en los tanques se dan sobre los
productores, debido a las condiciones de poca
luminosidad, baja circulación y condiciones de
temperatura, nutrientes y demás factores abióticos
diferentes a las del medio natural [15].
El 40 % de los buques monitoreados reportan
concentraciones entre 0.01 y 0.19 mg/L de sustancias
que absorben en el mismo rango de la clorofila-c, por
esta razón puede inferirse que dentro de los tanques
pudieron encontrarse especies del grupo de las algas
pardas y diatomeas, las cuales poseen este tipo de
pigmentos dentro de sus células. De las sustancias que
absorben en la misma longitud de onda de los
pigmentos analizados, la concentración de clorofila b,
reportó la menor concentración con respecto a las
demás. Dicha concentración osciló entre 0 y 0.33
mg/L, con un promedio de 0.011 mg/L y sólo el 28%
161

de las embarcaciones (21) reportaron concentraciones
de clorofila b mayores a 0.01 mg/L. En este sentido,
puede establecerse que dentro de los tanques existen
procesos tróficos, sostenidos por los productores
primarios, los cuales soportan los requerimientos
nutricionales de los consumidores presentes en los
tanques. Pese a las limitaciones en los tanques, es
evidente la presencia de especies que generan riesgo
de introducción en los lugares donde son deslastrados
volúmenes de aguas significativos.
En cuanto al componente planctónico y dada la
distribución del fitoplancton, se esperaría encontrar
mayor cantidad de cocolitofóridos y dinoflagelados, si
los buques realizaron la gestión de aguas de lastre
como lo indican las directrices de la OMI. Lo anterior,
debido a que dichas especies son características de
áreas más oceánicas y de ambientes oligotróficos. Sin
embargo, es importante recordar que en algunas
embarcaciones predomina la mezcla de aguas y por lo
tanto la diversidad de especies se ve alterada.
Figura 1. Análisis de clasificación de las aguas de lastre de
los buques muestreados en la Bahía de Cartagena.
Dendrograma de similaridad de Jaccard (índice cofenético
0,9777).
162
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)
Se han encontrado 46 especies, distribuidas en 15
familias, además de 4 morfotipos y la presencia de
estructuras de resistencia. De éstas, fueron
identificadas completamente 41 especies. La
diversidad de especies medida a través del índice de
Shannon (H´) indicó la símilaridad entre algunas
embarcaciones, observándose el más alto valor en los
buques Pollux A, Durango, Happy Bee y Rothorn y el
más bajo en Nedlloyd Curazao y Team Anemonium
(figura 1).
Las especies más abundantes fueron Coscinodiscus
wailesii, C. granni, seguidas de Skeletonema
costatum, Chaetoceros decipiens, Asterionella
japónica, Ceratium vultur Oscillatoria sp., Ceratium
tripos Coscinodiscus sp. y C. gigans (tabla 4). La
presencia de estructuras de resistencia como los
ipnocistos y algunos quistes también fueron
encontrados en algunos buques con una alta densidad.
Por lo anterior, las estructuras de resistencia y quistes
pueden representar riesgo para la bahía en el momento
de ser descargadas al encontrar las condiciones
adecuadas para desarrollarse [17].
Con respecto al zooplancton, se identificaron un total
de 7.720 individuos, distribuidos en 67 taxas,
agrupados en 9 phylla, entre los cuales los Artrópodos
predominaron con el 92.16%, seguidos por Mollusca
con 4.04%, Quetognatos con 0.97%, Protozoa con
0.91%, Nemertea con 0.77%, Anellida con 0.76%,
Cordata con 0.32%, Cnidaria con 0.025% y
Equinodermata con 0.012%. El buque en el que se
registró el mayor número de individuos fue el CCNI
Punta. Arenas, con 1696 ind/20L, seguido del Buque
Alianse Shangai con 863 ind/20L, Falcon (759
ind/20L); CMA Azteca (535 ind/20L); Dorían (525
ind/20L), Sierra Express (431 ind/20L), CSAV
Hamburgo (377 ind/20L), Panabo (359 ind20/L);
Irenes Logos (265 ind/20L), Donau (215 ind/20L),
Cala Pinar (183 ind/20L) y Cala Palmera (142
ind/20L). Es importante también indicar que de las
embarcaciones monitoreadas, en dos buques (CSAV
Hamburgo y el Sieltor) no se hallaron individuos.
También se observó un aumento considerable en el
tamaño de algunos individuos encontrados,
comparándolos con los de la fauna de la bahía como es
el caso de la Euterpina acutifrons, dicha característica
ha sido documentada por algunos autores, como típica
 Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena

Tabla 4. Especies de mayor y menor abundancia (cel/l) encontradas en las aguas de lastre de
los diferentes buques muestreados en el año 2006. (MAR: MARESIAS; P. SHUL: PHILLINE
SHULTHE; DUR: DURANGO; C.PRO: CALA PROGRESO; P.A: POLLUX A; HAP:
HAPPY BEE; C.EX: CARIBIAN EXPRESS; C.PAL: CALA PALENQUE; ROT:
ROTHORN; L.OS: LIKES OSPREY; S. CON: STENA CONQUEST; H. LAD2: HAPPY
LADY II; HAF: HAFENTOR; N.CUR: NEDDLLOYD CURACAO; H.LAD: HAPPY
LADY).

ABUNDANCIA
ESPECIES (cel /l) BUQUE

Mayor abundancia
Asterionella
japónica 12,91 P.A, ROT, HAP, HAF
Ceratium vultur 11,25 P.A, ROT
C. tripos 10 C.PRO
Coscinodiscus sp. 9,58 C.PAL
P.A, DUR, L.OS, MAR, C.PAL, S.CON,
C. gigans 9,58 H.LAD2, P.SHUL
C. granni 20 C.PRO
C. wailesii 30 C.PRO
Chaetoceros
decipiens 13,75 P.A, ROT
Oscillatoria sp. 11,25 HAP
Skeletonema 23,33 C.PAL
costatum
Menor abundancia
Dinophysis
caudata 0,83 ROT
Melosira
moniliformes 0,83 DUR
Planktoniella sol 0,83 C.EX
C. radicans 0,42 DUR
Proboscia alata 0,42 C.EX
Striatella
unicpuntata 0,42 ROT
Bacteriastrum
furcatum 0,42 MAR
Estructuras de resistencia
P.A, ROT, DUR, L.OS, HAP, MAR, C.EX,
IPNOCISTOS 97,09 N.CUR, H.LAD, H.LAD2, P. SHU

QUISTES 13,76 C.PRO, C.EX, P.AR, N.CUR, P. SHU

163
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)

de organismos propios de ambientes mas oceánicos

que costeros. En este sentido, podría inferirse que sí se
realizó un intercambio en mar abierto, de las aguas
cargadas en puerto.

Igualmente es importante mencionar la identificación

de las especies Oithona setigera, Oithona plumifera,
(Familia Oithonidae), Microsetella sp.,(Familia
Ectinosomidae) Diartrodes sp., Oculosetella sp,
(Clase Copopoda) dentro del grupo de los artrópodos,
como nuevos reportes, lo anterior debido a que en los
estudios previos realizados en la bahía y en los buques
no han sido reportados [16]. En el grupo de los
Figura 2. Análisis de clasificación de las aguas de lastre de
decapados se podría estar ante una posible
los buques muestreados en la Bahía de Cartagena.
introducción de organismos, dada por las especies Dendrograma de similaridad de Jaccard (índice cofenético
Corystoide chilensi (Familia Atelecyclidae) 4 0,9777).
ind/20L, Parapagurus Diógenes (Familia
Parapaguridae) 2 ind/20L las cuales se encontraron en
el estado larval de zoea. Se habla de posible Es así como en los buques evaluados en cuanto a
introducción, dado que también fueron reportados en Escherichia coli el 29 % (figura 3) sobrepasa los
muestras analizadas de la bahía y estos organismos niveles permisibles citados en el convenio. En este
han sido reportados como su nombre científico lo sentido, dichos buques representan riesgo para la
indica en aguas del Pacifico chileno. Otro reporte salud humana en las áreas donde esta agua sea
nuevo corresponde a la especie Sagitta minima, (clase deslastrada, evidenciándose así una gestión no
Quetognatha) la cual también ha sido identificada en adecuada de las aguas de lastre.
la bahía.

Al aplicar el índice similaridad de Jaccard, el análisis

nos indica que los buques Csau Liborno, Happy Bee y
Sector con 99.75%, seguidos de Fujiser Narú e Izola
con 77.8% son los que presentan mayor similaridad.
Los de menor valor fueron Cap Nelson, Chelsea,
Analisa y Cala Palmira, siendo el buque denominado
Cap Nelson el más disímil (figura 2).

Parámetros microbiológicos
Como es bien sabida, la OMI a través del Convenio
sobre manejo de aguas y sedimentos de lastre en
buques de tráfico internacional del 2004, ha
establecido en la “Sección D” las Normas para la
gestión de aguas de lastre. Dentro de dichas normas en Figura 3. Niveles de Escherichia Coli, encontrados en los
la regla 2D se establecen a algunos microbios tanques de lastre de buques de tráfico internacional que
indicadores, a efectos de la salud de los seres humanos arribaron al Puerto de Cartagena en 2006.
como los Enterococos intestinales, la Escherichia coli
y el Vibrio cholerae toxigenico (01 y 0139) para medir
Con respecto a los Enterococos intestinales
la eficacia de la gestión del agua de lastre.
únicamente 6 buques sobrepasaron los niveles

164

permisibles (figura 4). En este sentido, en términos de
calidad sanitaria, las aguas de estas embarcaciones no
cumplen con las condiciones mínimas para ser
descargadas, evidenciándose igualmente una gestión
no adecuada de las mismas.
Figura 4. Niveles de Enterococos fecales, encontrados en
los tanques de lastre de buques de tráfico internacional que
arribaron al puerto de Cartagena en 2006.
Teniendo en cuenta que estos microorganismos han
sido identificados como causantes de gran cantidad de
infecciones que conllevan riesgos asociados a
enfermedades del tracto respiratorio superior y
enfermedades gastrointestinales, los buques que
sobrepasaron los niveles permisibles están
contribuyendo con fuentes adicionales de
contaminación en la bahía y aunque el porcentaje es
bajo con relación a la totalidad de embarcaciones
monitoreadas, es importante mantener el control
sobre éstas.
Vibrio cholerae también está considerado como
microbio indicador por el convenio de la OMI del
2004, la presencia de vibrio se observó únicamente en
una embarcación (Panam Pacific) aunque no fue
posible identificar la variedad de esta especie (01 y
0139) es importante mantener el control.
Cabe mencionar que aunque no están contemplados
en el convenio sobre aguas de lastre, fueron evaluados
otros parámetros microbiológicos para establecer la
Cañón et. al.: Calidad de aguas de lastre - Puerto Cartagena
calidad sanitaria del agua de dichas embarcaciones.
Así, en el caso de los coliformes totales únicamente el
32% de de las embarcaciones monitoreadas reportan
niveles por debajo del valor permisible (figura 5). Por
lo anterior, podría inferirse que en términos de calidad
sanitaria, el agua de lastre no es adecuada,
representando riesgo para la salud humana de la
comunidad costera que esta en contacto directo con
ésta. De esta manera, se establece que los buques
representan una fuente adicional de contaminación
para las aguas del puerto, además de las descargas de
caños y del emisario submarino
Figura 5. Niveles de Coliformes totales, encontrados en los
tanques de lastre de buques de tráfico internacional que
arribaron al puerto de Cartagena en 2006.
En comparación con la bahía y con excepción de un
muestreo, estos valores están muy por encima de los
promedios reportados durante las tres épocas
climáticas (250 a 1950 UFC/100 ml), razón adicional
para establecer que las aguas de los buques
representan fuentes adicionales de contaminación,
que afectan la calidad sanitaria de las aguas del puerto.
También se reportan niveles elevados de hongos y
aunque están por debajo de los reportados en la bahía
[20], los valores igualmente representan riesgo para la
comunidad que esté en contacto directo con esta agua.
El 33 % de los buques reportaron valores por encima
de las 5000 UFC/100 ml (figura 6).
165

Figura 6. Niveles de hongos, encontrados en los tanques de
lastre de buques de tráfico internacional que arribaron al
puerto de Cartagena en 2006.
Por lo anterior y dado que en los tanques pueden
existir condiciones no adecuadas para el normal
desarrollo de algunas especies, los hongos presentan
estructuras de resistencia (esporas), las cuales permite
mantenerse latentes en condiciones adversas de
crecimiento y con los niveles reportados, éstos se
pueden incrementar y representar riesgo también a la
comunidad costera si alcanzan las condiciones
adecuadas de crecimiento y reproducción.
El 20% de los buques reportó la presencia de
Pseudomonas sp con niveles superiores a 500
UFC/100 ml; Salmonella sp ni Shigella sp fueron
reportadas en los buques monitoreados durante el
período de estudio, por lo anterior el riesgo de
transmisión de enfermedades gastrointestinales con
respecto a los demás patógenos intestinales es menor.
En los buques los parámetros fisicoquímicos
demuestran condiciones ambientales aptas para el
normal desarrollo de especies biológicas, dado que las
concentraciones por ejemplo de nutrientes están
dentro de los rangos mínimos para el sostenimiento de
organismos.
Aun se sigue reportando nuevos especies que pueden
generar alteraciones en la flora y fauna marinas
nativas de la Bahía de Cartagena, razón por la cual es
necesario mantener el control y trabajar en la
prevención.
166
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 150-168 (2007)
Conclusiones
En cuanto a la evaluación de parámetros
microbiológico en los tanques de los buques, pudo
evidenciarse que alrededor del 30% de los buques
sobrepasan los niveles permisibles del microbio
indicador Escherichia coli, 11% los de Enterococos
Intestinales y 2% de Vibrio, acuerdo con los límites
permisibles establecidos en la convención sobre
manejo de aguas y sedimentos de lastre. Por lo
anterior, se establece el riesgo que representan las
aguas de lastre para la salud humana de la comunidad
directamente expuesta en las áreas de descarga.
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167
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 169-175 (2007)

ARTÍCULO

Validación de los valores de clorofila-a

obtenidos por el satélite MODIS-AQUA en
los Bancos de Salmedina - Caribe
Colombiano
Validation of the chlorophyll-a data obtained by the
MODIS AQUA satellite in the Salmedina banks
Colombian Caribbean

CIOH
Fecha recepción: 2007-09-14 / Fecha aceptación: 2007-10-19

www.cioh.org.co
Rodríguez Rubio E. erodriguez@dimar.mil.co
Centro de Control Contaminación del Pacífico (CCCP), Tumaco, Colombia
Jaime A Orejarena jorejarena@enap.edu.co
JG Domínguez gabrielhd76@yahoo.com
Gisela Mayo gisemayo2003@yahoo.es
Constanza Ricaurte sasyricaurte@yahoo.com
CarlosA Andrade candrade@costa.net.co
Grupo de Investigaciones en Oceanología (GIO), Escuela Naval Almirante Padilla,
Cartagena de Indias, Colombia.

Resumen
El conjunto de datos de clorofila obtenido por el radioespectómetro de imágenes de resolución moderada
(MODIS) producido por tres algoritmos, (HPLC empírico, el OC3M y semianalítico) fue comparado con datos
tomados in situ en los bancos de Salmedina en el Mar Caribe colombiano. Todos los algoritmos sobreestiman la
clorofila in situ, con un error mayor del 35%. Las estimaciones de concentración de clorofila más cercanas
comparadas con los datos in situ, fueron producidas por un algoritmo semianalítico con un error cuadrático
medio RMS del 39%. Estos resultados indican que para las aguas costeras del Caso 2 en el mar Caribe
colombiano, el análisis semianalítico es la mejor aproximación, pero es necesario un algoritmo bio-óptico local
para mejorar la precisión de las mediciones de clorofila-a con mediciones del MODIS en el área.

Palabras clave: MODIS, clorofila-a, Bancos de Salmedina, evaluación local, Colombia, satelitales.

Abstract
The set of chlorophyll-a data obtained by the moderate resolution image radiospectometer (MODIS) produced
by three algorithms, (HPLC empiric, the OC3M and semi-analytical) has been compared to the data taken in situ
at the Salmedina banks at the Colombian Caribbean. All algorithms over-estimate the chlorophyll-a in situ, with
an error over 35%. The estimate of the closest chlorophyll concentration compared to the data in situ it, were
produced by a semi-analytical algorithm with a medium quadratic error RMS of 39%. These results indicate that
for the shore waters of Case 2 at the Colombian Caribbean, the semi-analytical analysis is the best
approximation, but it is necessary a local bio-optical algorithm in order to improve the accuracy of the
chlorophyll-a with measurements of the MODIS in the area.

Key words: MODIS, chlorophyll-a, Salmedina banks, local assessment, Colombia, satellite.

169
 Rodríguez et al.: Validación de los valores de clorofila-a obtenidos por el satélite MODIS-AQUA en los Bancos de Salmedina
Introducción
Los primeros estudios de clorofila en el Mar Caribe
colombiano fueron orientados principalmente a la
descripción de los sistemas de afloramiento
(surgencias) realizando medidas in situ tradicionales
desde buques oceanográficos [1, 2, 4, 5]. Desde 1988
las herramientas de sensores remotos comenzaron a
usarse para diferentes estudios principalmente en
sedimentación costera y transporte de sedimentos
desde plataformas satelitales especializadas en tierra
como SPOT o LANDSAT [6, 7, 8, 9] y descripciones
climáticas desde mosaicos regionales de imágenes del
Coastal Zone Color Scanner-CZCS [10].
Recientemente, algunos estudios en el Caribe
utilizaron datos del sensor NOAA AVHRR para
caracterizar la variabilidad espacial y temporal de
mesoescala [11, 12], el SeaWiFS y el sensor OCTS
usado en la descripción de la distribución de la
concentración de clorofila-a en el Mar Caribe
colombiano, [13, 14]. Esos trabajos utilizaron los
datos satelitales para describir los mayores patrones
espacio-temporales de concentración de clorofila en
escalas anuales e interanuales, usando algoritmos de
carácter global para cuantificar clorofila-a sobre el
área.
Los artículos citados, resaltan algunos aspectos
importantes sobre la significación cuantitativa de la
concentración de la clorofila-a en las aguas costeras
colombianas desde datos satelitales. Sin embargo,
como el área se encuentra bajo la influencia de la
descarga del río Magdalena [15], el nivel de
complejidad óptico de las aguas es mayor. Las
descargas anuales del río Magdalena son de
aproximadamente 288 km3, la carga media de
6 -1
sedimento es de 144 x 10 t año , correspondientes a
-2 -1 2 Actualmente, el Espectro-Radiómetro de Imagen de
un campo de 560 t km año para los 257.438 km de
cuenca [16].
Las masas de agua dadas sus características, son a
menudo clasificadas como aguas turbias “Caso 2”.
Esta nomenclatura proviene de un método común de
clasificación de aguas oceánicas o de aguas
continentales que las divide en dos casos: Caso 1 y
Caso 2 [17]. Es generalmente reconocido, que las
170
aguas del Caso 2 son más complejas que las aguas del
Caso 1, en su composición y propiedades ópticas. La
interpretación de una señal óptica de aguas del Caso 2
puede por lo tanto ser más difícil. En el Caso 1, las
propiedades ópticas son dominadas por la clorofila-a
y la covarianza de los pigmentos detríticos, en el Caso
2, existen otras sustancias, las cuales no covarían con
la clorofila-a pero también afectan las propiedades
ópticas. Entre estas sustancias se incluye gelbstoff
(humus acuático) compuesto principalmente de ácido
fúlvico y ácido húmico, sedimentos suspendidos,
cocolitofóridos, detritos y bacterias [18, 19].
Sustancias no covariantes con la clorofila-a de las
aguas del Caso 2 han causado errores en las
estimaciones de concentración del pigmento con
inexactitudes tan altas que alcanzan el 133% [20].
Desde el lanzamiento del Sensor de Visualización
Marina de Campo Amplio de Visión (SeaWiFS)
abordo del satélite SeaStar en agosto de 1997, los
datos globales de color del océano están disponibles
para la comunidad científica en forma frecuente. El
SeaWiFS es superior al CZCS [21]. La sensibilidad de
su radiómetro es mucho más alta (10bits vs 8 bits) y
adicionalmente, las bandas espectrales son una ayuda
para hacer aplicaciones bio-ópticas y para efectuar
correcciones atmosféricas. Con el espectro mejorado
y la resolución radiométrica, el sensor SeaWiFS
produjo mapas globales de concentración de
clorofila-a usando un algoritmo radio espectral
empírico [22]. Sin embargo, las correcciones para el
humus acuático y absorción detrítica, que no covarían
con la clorofila, no fueron hechas. El humus acuático
y el detrito pueden absorber suficiente luz en
longitudes de onda azul que incrementan las
concentraciones aparentes de clorofila-a calculadas
empíricamente, tanto como para duplicarlas [23].
Resolución Moderada (MODIS) está entregando
imágenes alrededor del mundo con un espectrómetro
de 36 bandas que observa el suelo, la atmósfera y los
océanos entre 412 nm y 14,385 nm. Las bandas de
color oceánicas en el MODIS son muy similares a las
bandas del SeaWiFS con la ventaja que son más
estrechas que las del SeaWiFs como resultado de la
mayor apertura y rendimiento del MODIS. Las
bandas más estrechas mejoran la corrección

atmosférica, incorpora mejoras significativas en la
calidad radiométrica, en la capacidad que resulta de un
cuidadoso análisis de los resultados y la experiencia
ganada como herencia de los sensores precursores
[24].
El propósito principal de este trabajo es el de probar el
desempeño de varios algoritmos bio-ópticos estándar
para datos del MODIS, utilizando los datos promedio
diarios de concentración de clorofila-a producidos por
el Instituto de Sensores Remotos Marinos (IMaRS) de
la Universidad del Sur de la Florida: Productos para
Mar Caribe Sur: Clorofila_MODIS (HPLC empírico),
Clorofila_2 (SeaWiFS análogo - OC3M) y
Clorofila_3 (Semianalítico), en aguas Caso 2 del
Caribe colombiano y compararlos con un conjunto de
datos de medición de clorofila-a realizados sobre
muestras tomadas in situ en los Bancos de Salmedina
en un período de 16 meses entre junio de 2003 y
septiembre de 2004, cada 15 días.
Materiales y métodos
Mediciones de clorofila-a desde el satélite
Los datos de concentración media diaria de clorofila
fueron obtenidas en el IMaRS, de las imágenes LAC
(1 km x 1 km) de clorofila diaria provistas con los 3
algoritmos para clorofila.
Chlorophyll_MODIS = HPLC empírico
Chlorophyll_2 = SeaWiFS análogo - OC3M
Chlorophyll_3 = Semi-analítico [25].
Los datos del MODIS, fueron leídos con rutinas
escritas en MATLAB para lograr acceso a los datos
guardados a través del Formato Jerárquico de Datos
(HDF).
Medidas in situ de clorofila - a
Los datos fueron recolectados principalmente sobre
los Bancos de Salmedina (figura 1) bajo varias
condiciones ambientales en diferentes temporadas del
año [15]. Las coberturas temporales incluyeron (i) La
época seca (diciembre - marzo), caracterizada por
fuertes procesos de mezcla producidos por el viento y
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 169-175 (2007)
limitada descarga del río. (ii) La época de transición
(abril - junio) con altas descargas de agua fresca y
vientos bajos, (iii) La temporada seca corta (julio -
agosto) “Veranillo de San Juan” y (iv) La época de
lluvias (septiembre - noviembre) caracterizada por
una importante descarga del río y vientos débiles. La
base de datos incluye cerca de 31 medidas de
clorofila-a (mg /m-3) derivadas
espectrofotométricamente de muestras tomadas a
profundidades entre 0 - 5 m para comparar con los
datos del MODIS entre Junio de 2003 y septiembre de
2004.
La concentración de clorofila-a fue determinada
usando el método espectrofotométrico de Strickland y
Parsons [26] modificado por el laboratorio del CIOH,
[27]. Las muestras de agua superficial fueron filtradas
a bajas presiones (menores que 0.5 atm) usando filtros
de fibra de vidrio Whatman (GF/F 1.2 µm de
diámetro). Los filtros fueron colocados en tubos de
centrifugación previamente cubiertos con papel
aluminio, con el propósito de evitar la degradación de
la clorofila por exposición directa a la luz, cerca de 5
ml de acetona fueron adicionados, los cuales fueron
usados para liberar la clorofila contenida en los filtros.
Las muestras fueron congeladas a -27º C. 15 horas
después los filtros fueron macerados en tubos de
centrífuga adicionando 5 ml más de acetona. Las
muestras fueron centrifugadas por 15 minutos y la
absorbancia del extracto fue medida en un
espectrofotómetro. La ecuación de Jeffrey y
Humphrey [28] fue usada para convertir la
absorbancia a 664, 647 y 630 nm de concentración de
clorofila- a.
(Ca) Clorofila-a = 11.85E664 - 1.54E647 - 0.08E630 (en
µg/ml)
Donde E es la absorbancia a la longitud de onda
indicada por subíndice, luego de una corrección celda
a celda en blanco y la resta celda a celda en blanco
corregida a una absorbancia de 750 nm.
171
 Rodríguez et al.: Validación de los valores de clorofila-a obtenidos por el satélite MODIS-AQUA en los Bancos de Salmedina

Donde v es el volumen de acetona en mililitros y V es muestras. El RMS es una estimación del error del
el volumen de agua de mar en litros. conjunto de datos del MODIS, la diferencia promedio
es una estimación de la tendencia y el coeficiente de
2
determinación (r ) del análisis de correlación indica la
10º24´

Cartagena
covarianza entre el conjunto de datos y las
observaciones in situ. Juntas, estas mediciones
estadísticas proveen información del comportamiento
10º22´
0 ´

y la incertidumbre del conjunto de datos de clorofila

Tierra del MODIS. La decisión de transformar
Bomba
logarítmicamente los datos antes de realizar la
10º24´

evaluación estadística está basada en la distribución

2
1 0 1000 2000 3000 4000
natural de la clorofila oceánica, la cual es lognormal.
75ºº38´ 75º36´ 75º 34´ 75º32´ [30].
5
10º 22´

3 4

Resultados y discusión
Se compararon los valores de clorofila-a medidos in
75º 42´ 75º40´ 75º38´
situ y los derivados de algoritmos del MODIS (figura
Figura 1. Mapa de localización de los Bancos de 2; a b c y 3). La comparación entre el algoritmo
Salmedina y posición de los datos medidos in situ, sobre el
Mar Caribe colombiano, los puntos rojos señalan las 5 empírico para la clorofila-a MODIS HPLC y la
estaciones donde se tomaron las mediciones. clorofila in situ (figura 2a), dio como resultado un
error cuadrático medio de 48.9%, con un sesgo de
42.8%. Los algoritmos SeaWiFS análogo y OC3M
Los datos in situ que coincidieron tanto en lugar, versus la clorofila-a in situ (figura 2b) resultaron con
espacio y tiempo de la toma de muestra con los datos un error cuadrático medio del 45% y 38.1% de sesgo.
obtenidos por las imágenes del MODIS, fueron La precisión del algoritmo semianalítico con la
promediados. El resultado final fueron 15 puntos
clorofila-a in situ (figura 2c) fue del 39% y con un
comparables dentro del conjunto.
sesgo del 34%. En general, los algoritmos de
Criterio de comparación pigmento del MODIS sobreestimaron las
De acuerdo con Gregg y Casey [29], el conjunto de concentraciones de clorofila medidos en los tres
datos fue transformado logarítmicamente (base 10) casos.
antes de la comparación. El análisis incluyó un
análisis de correlación, error medio cuadrático (RMS) Se considera que el algoritmo semianalítico funcionó
logarítmico definido como: bien, con el mejor RMS y el menor sesgo y significa
un desempeño aceptable del sensor del MODIS que
produjo datos comparables con las mediciones hechas
in situ y se considera satisfactorio porque un
algoritmo produjo valores de clorofila-a alcanzando
y la diferencia promedio (DP) es definida como
el objetivo del 35% para la precisión de datos
obtenidos del MODIS. Los valores obtenidos se
ajustan a lo esperado en este caso de análisis y han
sido mencionados por otros autores en estudios
Donde S indica los valores de clorofila-a del MODIS, similares (i.e. Eplee et al., 2001; Hooker y McClain,
I indica la clorofila-a in situ, y n el número de 2000; Gregg y Casey, 2004).

172
 Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, 169-175 (2007)

Según los mismos autores la imprecisión de estas

comparaciones se debe, entre otras causas, a los
errores propios en las diferentes metodologías de toma a)
de datos, que deben ser tenidos en cuenta para futuros
estudios. Entre los más importantes se pueden
mencionar la presencia de materia orgánica cromófora
disuelta (CDOM), presencia de aerosoles que
absorben radiancia, diversidad de las especies de
fitoplancton de la zona estudiada, sedimentos en
suspensión, la nubosidad, el reflejo solar, y la falta de
exactitud entre la medición y el paso del satélite.

Se realizó una comparación de la variación temporal

de los datos obtenidos por el logaritmo semianalítico y
los datos in situ (figura 3) dio como resultado un ajuste
muy bueno con un alto coeficiente de correlación b)
(R=0.83 (p<0.05)). Este resultado corresponde con la
variación intraestacional que caracteriza el Caribe
colombiano; se presentó alta clorofila-a en la época de
lluvias (septiembre - noviembre) producidas por los
diferentes aportes de aguas continentales (descargas
del río Magdalena y del Canal del Dique) y
concentraciones más bajas en temporada seca
(diciembre - febrero), a diferencia de un valor máximo
en enero producido por una surgencia estacional
observada en el área (Orejarena et al., 2004).

A pesar de las fuentes potenciales de error en la

validación los datos de clorofila-a a nivel local, los c)
valores obtenidos por el algoritmo semi-analítico del
satélite MODIS se trabajaron bien, pero todavía no es
ideal para estudios cuantitativos que incorporen datos
de clorofila-a desde satélites, porque los valores del
sensor sobreestiman la concentración. Por esa razón
es necesario trabajar en el desarrollo de un algoritmo
bio-óptico tomando mediciones de muchas variables
in situ para el desarrollo de un algoritmo local y
validar los datos satelitales de clorofila-a producidos
por el MODIS o por otros sensores como el Sea-
viewing Wide Field-of-view Sensor - SeaWiFs o el
The Médium Resolution Imaging Spectrometer
Instrument - MERIS. Figura 2. Gráfico de dispersión de los datos de clorofila-a
in situ /datos de clorofila-a MODIS y comparación local de
los estadísticos para los tres algoritmos.

173
 Rodríguez et al.: Validación de los valores de clorofila-a obtenidos por el satélite MODIS-AQUA en los Bancos de Salmedina
Clorofila MODIS (Semi-analítico)
Clorofila in situ
Figura 3. Comportamiento interanual entre la clorofila-a
MODIS (semianalítico) y clorofila-a in situ. Parejas de
puntos (R=0.8397, p< 0.05).
Reconocimientos
Los autores agradecen al personal del Centro de
Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas
(CIOH), al Grupo de Señalización Marítima, la
Estación de Guardacostas de Cartagena. Al señor José
Ladeut por su diestra mano en el timón al bote. Al
Institute for Marine Remote Sensing (IMaRS) -
University of South Florida, por el acceso público a
los productos obtenidos por el USF MODIS parte del
proyecto “Estudio oceanográfico integral de los
Bancos de Salmedina, Caribe colombiano”
financiado por el Instituto Colombiano para el
Desarrollo de la Ciencia y la Tecnología “Francisco
José de Caldas” COLCIENCIAS, la Escuela Naval de
Cadetes “Almirante Padilla” y la Universidad
Nacional en Medellín.
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175
Boletín Científico CIOH No. 25, ISSN 0120-0542, (2007)
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utilice lenguaje sencillo, más sencillo aún que en el resto de
su trabajo. Elimine todo tipo de adjetivos, clichés y
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más importantes y las conclusiones principales.
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lector la búsqueda del tema de interés y deben ser a lo sumo
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Introducción: La introducción le debe informar al lector
propósito de la investigación, el conocimiento previo del
tema y la importancia de la investigación respondiendo
preguntas básicas ¿Cuál es el problema?, ¿Cuál es el
problema?, ¿Qué trabajos indican que él existe?, ¿Qué
método usó usted para resolver el problema? ¿Qué
encontró?
Materiales y métodos: Un requisito fundamental de
cualquier experimentación es que el trabajo pueda ser
repetido y validado por otros científicos. Esta sección
provee toda la información que un investigador
competente necesita para repetir la investigación.
Resultados: La sección de resultados es el corazón del
artículo científico. Aquí se le informa al lector los datos
obtenidos durante la investigación.
Discusión: En esta sesión se explican los resultados de la
investigación y se comparan con el conocimiento previo
del tema. La discusión contesta tres preguntas
fundamentales: ¿Por qué se obtuvieron estos resultados?,
 Normas de presentación de originales y de corrección

¿Cómo comparán con los resultados de otros

investigadores? y ¿ Cuál es la contribución principal de la
investigación, qué importancia tiene y qué problema
importante resuelve? Algunos autores terminan la sección
de discusión con sugerencias para investigaciones futuras.

Agradecimientos: Esta sección reconoce la ayuda de

personas o instituciones que hicieron contribuciones
importantes al desarrollo de la investigación. Se incluye
dentro del artículo científico, si su autor lo considera
oportuno y necesario.

Referencias bibliográficas: La referencia bibliográfica es

un conjunto de datos suficientes, precisos y ordenados que
identifican una fuente. Aunque los títulos bibliografía,
referencias y literatura citada se usan frecuentemente como
sinónimos, el primero debe usarse cuando se presenta una
recopilación completa de laliteratura. Las referencias
bibliográficas del trabajo, ordenada según el orden de
aparición. En su conformación se emplea la norma
Vancouver (The University of Queenjand, Brisbane
Australia. 2007; disponible en:
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Consultada el 1 de septiembre de 2007. Las citas en el texto
a la referencia bibliográfica inician en la introducción.

Tablas, cuadros y figuras: Las tablas son ideales para

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documental, se colocan al pie de la tabla y no al pie de
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información que se intenta mostrar incluyendo textos y los
colores deben ser fácilmente diferenciables.