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Alicia Rubio Bañón*

Antonio Aragón Sánchez*


RECURSOS CRÍTICOS Y ESTRATEGIA
EN LA PYME INDUSTRIAL
El estudio de las decisiones que permiten desarrollar e implantar estrategias
competitivas sostenibles que faciliten la consecución de un desempeño superior al de los
competidores sigue siendo un tema abierto al debate. A pesar del importante peso
relativo que en la economía tienen las PYME, y su tratamiento diferenciado a la hora de
diseñar políticas estratégicas, la mayoría de investigaciones que estudian los recursos
estratégicos de las organizaciones lo hacen utilizando muestras de grandes empresas. En
este trabajo se examinan cómo contribuyen al éxito competitivo de las PYME los
recursos y capacidades catalogados como estratégicos y las estrategias competitivas,
utilizando, para ello, la clasificación de Miles y Snow (1978).

Palabras clave: recursos estratégicos, competitividad, PYME, éxito, recursos y capacidades.


Clasificación JEL: M100.

1. Introducción las oportunidades y sortear las amenazas que se deri-


van de la relación de la empresa con su entorno. La otra
Las empresas tienen diversas alternativas a la hora se fundamenta en coordinar y aprovechar de forma ade-
de fijar sus objetivos estratégicos. La literatura en admi- cuada y eficiente los recursos con los que cuenta la em-
nistración de empresas los ha concretado en varias op- presa en relación a sus rivales. Desde esta perspectiva,
ciones, como la búsqueda del máximo beneficio (Kaller- la clave del éxito competitivo se sitúa en elementos per-
beg y Leicht, 1991), la mejora de los ingresos (Chaston tenecientes a la propia empresa, una idea que concep-
y Mangles, 1997), el incremento de la cuota de mercado tualmente ha propiciado el desarrollo de la teoría de re-
(Chang y Shing, 2000), la mejora de la productividad cursos y capacidades (Grant, 1991).
(Drucker, 1995) o el aumento del éxito competitivo (Ca- En la década de los noventa muchos trabajos teóricos
misón, 1997). y empíricos analizaron tanto el rol jugado por los recur-
Por otra parte, la literatura en dirección estratégica ha sos y capacidades en la consecución de ventajas com-
ofrecido dos alternativas teóricas para explicar la conse- petitivas sostenibles, como las características que de-
cución de estos objetivos. Una consiste en aprovechar bían presentar para que la empresa lograra apropiarse
las rentas producidas por ellos (Huselid et al., 1997;
Gautam et al., 2004). Estas investigaciones permitieron
* Departamento de Organización de Empresas y Finanzas de la
avanzar en el conocimiento del éxito o competitividad
Universidad de Murcia.
Versión de junio de 2007. empresarial desde el ámbito interno de las organizacio-

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nes. La mayoría de estas investigaciones se centran en éxito competitivo. Para aproximarnos al concepto de es-
el estudio de los factores de éxito de las grandes empre- trategia se utiliza la conocida clasificación de Miles y
sas1 (Rangone, 1999; Wilkinson, 1999; Knight, 2000 y Snow (1978). Posteriormente, tras un breve análisis de
Lerner y Almor, 2002). Son escasas las investigaciones la teoría de recursos y capacidades, se identifican los
que profundizan en el estudio de los factores explicati- factores críticos de éxito a los que la literatura confiere
vos del éxito con muestras de PYME, lo que contrasta una mayor importancia y se analiza el papel jugado por
con la importancia que tiene para el desarrollo económi- cada uno de ellos como factor de éxito en las empresas
co y social de cualquier área económica este colectivo de menor tamaño. De esta revisión se derivan las hipó-
de empresas. Concretamente, en Europa representan tesis propuestas en la investigación. A continuación, se
más del 99 por 1002 del tejido empresarial y eso las con- contrastan dichas hipótesis con una muestra de 1.201
vierte en piezas clave de la creación de empleo y de ri- PYME industriales españolas. El trabajo finaliza con la
queza. Por ello es importante incrementar las investiga- presentación y discusión de los resultados, y con el aná-
ciones que se centren en su estudio, lo que acercaría la lisis de las implicaciones que tienen para la investiga-
importancia real a la científica y contribuiría a reducir el ción en PYME y con el examen de las aplicaciones que
gap existente en la literatura. No hay que perder de vista pueden hacer las empresas a nivel práctico
que algunas investigaciones han demostrado que las
estrategias y los factores competitivos aplicables a las 2. Éxito competitivo
grandes empresas difieren de las que deben aplicar las
PYME para lograr su desarrollo y éxito (Chen y Ham- Son muchas y muy diversas las acepciones que so-
brick, 1995; Camisón, 1996; Renuka y Venkateshwara, bre éxito competitivo se han propuesto en la literatura
2006). (Kester y Luerhrman; 1989; Porter, 1990 y Camisón,
Este trabajo tiene como objetivo profundizar en el co- 1997). La mayor parte de ellas coinciden en definir la
nocimiento de las PYME y sus especificidades con res- competitividad como una capacidad para generar venta-
pecto a las grandes empresas, con vistas a la obtención jas competitivas sostenibles, para producir bienes y ser-
de una posición ventajosa en el mercado. vicios creando valor, o para actuar adecuadamente
Para conseguir este objetivo, se delimita, en primer como consecuencia de la rivalidad suscitada en su rela-
lugar, el concepto de éxito competitivo, estableciendo ción con otras empresas. De acuerdo con planteamien-
las principales características del término. En segundo tos anteriores entendemos la competitividad empresa-
lugar, se establece un modelo de competitividad empre- rial o éxito competitivo de una empresa como la capaci-
sarial, que lleva a estudiar la relación de la estrategia dad para, rivalizando con otras empresas, conseguir
empresarial, y de una serie de factores internos, con el alcanzar una posición competitiva favorable, que permi-
ta obtener un desempeño superior al de los competido-
res (Rubio, 2004).
1
Entre las escasas excepciones encontradas son de resaltar los El término competitividad, por tanto, procede de com-
estudios realizados por CHANDLER y HANKS (1994); RANGONE petencia. En el ámbito económico, este término tiene
(1999); CAMISÓN (1997) y LERNER y ALMOR (2002) que, con
diferentes objetivos, analizan el papel jugado por los recursos y dos significados: el grado de rivalidad económica exis-
capacidades en las empresas de menor tamaño. tente en un mercado, o bien la forma de actuación de los
2
Según el Directorio Central de Empresas (DIRCE) a 1 de enero del
año 2003 había en España 2.809.385 PYME (empresas comprendidas
agentes en el mismo. En este trabajo, la competitividad
entre 0 y 249 asalariados). Este tipo de empresas representa el 99,87 se entiende en el segundo de sus sentidos, es decir,
por 100 del censo de empresas de España, que se eleva a 2.813.120,
excluida la agricultura y la pesca (http://www.ipyme.org/estadisticas_pyme/
como la capacidad para competir o capacidad del agen-
retrato_pyme_2.pdf). te para actuar ante la rivalidad suscitada al relacionarse

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con otros agentes. Se trata, también, de un concepto re- Algunas perspectivas teóricas, dejando a un lado la
lativo: se es competitivo si se está en condiciones de influencia del entorno, centran su atención en variables
competir con otro. La posición relativa frente al agente empresariales, es decir, variables relacionadas con el
rival se constituye como una de las variables determi- ámbito interno de la empresa. Nos referimos a la teoría
nantes del éxito o fracaso competitivo de la unidad ana- universalista, en el supuesto de homogeneidad empre-
lizada. Destaca también su referencia a la capacidad de sarial, y a la teoría de recursos y capacidades, que asu-
acción deliberada del agente, es decir, presupone que la me la heterogeneidad entre empresas como premisa
empresa puede llegar a ser capaz de alterar los merca- fundamental.
dos a través de su conducta o sus resultados. La com- Otras perspectivas introducen en la cadena de causa-
petitividad implica necesariamente la existencia de un lidad al entorno. Dentro de este grupo podemos distin-
agente que elige, define estrategias y trata de controlar guir, a su vez, entre enfoques que parten del supuesto
las variables que afectan a su capacidad para competir. de homogeneidad empresarial, afirmando que las fuen-
Es la capacidad para competir, en definitiva, la que tes de las rentas económicas dependen directamente
origina las diferencias entre las organizaciones que tie- del entorno general (efecto país) o específico de la em-
nen éxito y las que no. Esta concepción está íntimamen- presa (efecto industria) y, por tanto, consideran que la
te ligada al concepto de desempeño organizativo (busi- empresa no tiene ningún margen de actuación (teoría
ness performance), de hecho la apropiación de las ren- de la firma y economía industrial clásica), y, por otro, las
tas producidas por las ventajas competitivas tendrá que partiendo del supuesto de heterogeneidad conside-
como resultado un mayor desempeño y, por lo tanto, ran que la empresa puede aprovechar las oportunida-
una mejor posición relativa de la empresa respecto a su des del entorno, salvando las amenazas, aprovechando
competencia. las oportunidades e incluso cambiándolo a través de su
Por otra parte el buen desempeño determinará los ni- conducta y/o resultados (nueva economía industrial).
veles de éxito o fracaso alcanzado por las empresas. El que a finales de los años ochenta numerosas in-
Pero ¿existe una mejor estrategia? ¿Es posible identifi- vestigaciones (Rumelt, 1991) mostraran que son los re-
car cuáles son los recursos estratégicos en las PYME? cursos y capacidades los principales impulsores del éxi-
La respuesta a esta pregunta será ampliamente tratada to de las empresas hizo cuestionar las perspectivas que
en los apartados siguientes. se sustentaban en las variables estructurales de merca-
do. Además, el que unido a esto se demostrara la hete-
3. Factores de éxito competitivo rogeneidad empresarial, hizo que numerosas investiga-
ciones situaran a la teoría de recursos y capacidades
El análisis de los factores que inciden en la competiti- como el marco de análisis más apropiado para el estu-
vidad empresarial constituye un tema fundamental en la dio de la competitividad empresarial.
administración de empresas. La literatura en esta mate- Esto se constata por la cantidad de trabajos surgidos
ria trata de responder a dos cuestiones claves: ¿cuáles en la década de los noventa cuya finalidad era analizar
son las fuentes de las rentas económicas o de los resul- tanto el rol jugado por los recursos y capacidades en la
tados diferenciales de las empresas? y ¿cuál es el gra- consecución de ventajas competitivas sostenibles,
do de influencia de cada una de ellas? como las características que debían presentar para que
Los modelos teóricos que han tratado de responder a la empresa lograra apropiarse de las rentas producidas
estas cuestiones no se ponen de acuerdo en cuanto a la por ellos (Huselid et al., 1997; Gautam et al., 2004).
relación que tienen los factores empresariales o el en- En este trabajo, siguiendo esta última corriente de in-
torno con el éxito empresarial. vestigación, se propone un modelo explicativo de la

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competitividad que contempla la influencia en el éxito de ploradoras, analizadoras y reactivas; y 3) cualquier


la empresa tanto de la estrategia empresarial como de orientación —defensiva, exploradora o analizadora—
una serie de recursos y capacidades que la literatura puede conducir a un buen resultado empresarial. La
identifica como estratégicos en las PYME. reactiva, dada su falta de consistencia, tendrá menores
desempeños que las otras tres.
Éxito competitivo y estrategia La orientación estratégica defensiva corresponde a
empresas que se concentran en un estrecho y limitado
La estrategia es la definición sobre cómo la empresa ámbito del producto-mercado. Expertas en un área de-
va a competir, es decir, la determinación de las políticas terminada no buscan nuevas oportunidades fuera de su
necesarias para alcanzar los objetivos empresariales. negocio, sino que tratan de proteger su cuota de merca-
En esta línea, la formulación de la estrategia competitiva do. Necesitan pocos ajustes en tecnología, estructura o
implica un análisis interno que configure los puntos fuer- procesos. Están orientadas internamente, y enfatizan la
tes y débiles que conforman su perfil de activos y habili- reducción de costes y el incremento de eficiencia.
dades y que determine su posición en relación con sus El patrón estratégico de las exploradoras es el opues-
competidores. Por otro lado, también es necesario un to al de las defensivas. Buscan continuamente nuevas
análisis externo del sector industrial y del entorno de la oportunidades de mercado mediante procesos de inno-
empresa (Porter, 1980). vación y desarrollo de productos. Actúan rápidamente
Hasta la fecha las investigaciones se han centrado, ante las tendencias emergentes del entorno y suelen
fundamentalmente, en el examen y validación de dos ti- propiciar cambios en el sector. Disponen de tecnologías
pologías estratégicas, la realizada por Porter (1980) y la muy flexibles, razón por la que puede verse afectada su
propuesta por Miles y Snow (1978). eficiencia interna.
En este trabajo se adopta la tipología de Miles y Snow Las organizaciones analizadoras son una simbiosis
(1978), por diversas razones. En primer lugar, esta cla- de las dos anteriores al actuar de un modo defensivo o
sificación es una de las más utilizadas y aceptadas por explorador, dependiendo del entorno en el que se en-
su visión de la organización (McDaniel y Kolari, 1987). cuentren y del equilibrio eficiencia-innovación que re-
Además, se centra en el proceso de interacción dinámi- quieran. En entornos estables, las organizaciones ope-
ca con el entorno de la empresa, lo que hace que se ten- ran rutinaria, formal y eficientemente a través de estruc-
ga en consideración la relación entre recursos externos turas y procesos formalizados; en entornos turbulentos
e internos (O’Regan y Ghobadian, 2004). Por último, la son seguidoras de los competidores más innovadores
literatura apunta hacia la conveniencia del uso de esta tratando de adoptar con rapidez las ideas que parezcan
clasificación en el caso particular de las PYME más prometedoras.
(O’Regan y Ghobadian, 2004). Las organizaciones reactivas se caracterizan por la
Diversos trabajos han validado empíricamente esta ti- inestabilidad e inconsistencia, debido a su incapacidad
pología (Shortell y Zajac, 1990; Doty et al., 1993), pu- para responder a los cambios del entorno. Dado que ca-
diéndose considerar aceptada por la literatura e interna- recen de una estrategia consistente y clara, existen es-
mente consistente (Conant et al., 1990; Dvir et al., casos argumentos —teóricos (Slater y Narver, 1993) y
1993). Miles y Snow se basan en tres premisas: 1) las empíricos (Wrigth et al., 1991)— que indiquen la necesi-
empresas de éxito desarrollan un enfoque sistemático e dad de considerarlas, razón por la cual en este estudio
identificable de adaptación a su entorno; 2) son identifi- no se incluye el análisis de las mismas.
cables cuatro orientaciones estratégicas en cada sector, El análisis de la influencia de los tipos estratégicos en
así, las empresas son clasificadas en: defensivas, ex- el éxito de la empresa ha sido objeto de numerosas in-

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vestigaciones (Miles y Snow, 1978; White, 1986; Robin- presas: cada empresa es diferente en función de su do-
son y Pearce, 1988; Conant et al., 1990; Wright et al., tación de recursos y capacidades, y sobre éstos se
1991; Wright et al., 1991; Kim et al., 2004; Spanos et al., sustentan las ventajas competitivas. Por otro lado, se
2004; Aragón y Sánchez, 2005), sin resultados conclu- encuentra la sostenibilidad de las rentas, ya que la hete-
yentes. Mientras un grupo de trabajos señala que las rogeneidad puede o no persistir en el tiempo y, por lo
empresas con estrategias defensivas, exploradoras y tanto, las empresas pueden obtener rentas superiores
analizadoras tienen la oportunidad de ser igualmente en el largo plazo.
exitosas en sus actividades y que siempre tendrán re- Para Grant (1991, 1996) y Amit y Schoemaker (1993)
sultados superiores al de las reactivas (Miles y Snow, los recursos son los inputs con los que cuenta la empre-
1978; Conant et al., 1990; Wright et al., 1991), otros sa para desempeñar su actividad. Por sí solos no gene-
muestran que los rendimientos obtenidos por las empre- ran renta alguna; es necesaria su adecuada coordina-
sas varían en función del tipo de estrategia adoptada ción para conseguir ventajas sobre los competidores.
(Smith et al., 1987; White, 1986; Robinson y Pearce, Las capacidades son precisamente esto, la facultad de
1988; Kim et al., 2004; Spanos et al., 2004; Aragón y gestionar adecuadamente los recursos para realizar
Sánchez, 2005). una determinada tarea dentro de la empresa (Grant,
En el ámbito de la PYME se ha comprobado la rela- 1991). En definitiva, las capacidades son la forma en
ción contingente existente entre el rendimiento, la estra- que la empresa combina sus recursos (Amit y Schoe-
tegia y el tamaño (Smith et al., 1987), la relación positiva maker, 1993), y permiten incrementar el stock de recur-
entre la adopción de una estrategia exploradora y el éxi- sos intangibles, desarrollar las actividades básicas más
to competitivo (Camisón, 1997; Aragón y Sánchez, eficientemente que sus competidores y, por último,
2005), y la relación o ajuste de alguno de los factores adaptarse a los cambios implantando estrategias de for-
estratégicos identificados anteriormente con la estrate- ma anticipada (Collis, 1994).
gia y el éxito (Olson y Currie, 1992; Chandler y Hanks, Diferentes autores (Barney, 1991; Grant, 1996; Hill y
1994; Entrialgo, 2002; O`Regan y Ghobadian, 2004; Jones, 1996) afirman que los recursos y capacidades
Wang y Ang, 2004). Por lo tanto, estos argumentos con- que permiten alcanzar ventajas competitivas son aque-
ducen a la formulación de la siguiente hipótesis de in- llos que son valiosos y escasos. Son valiosos cuando
vestigación: permiten a la empresa crear valor para los clientes y de-
sarrollar estrategias que aumenten su competitividad o
H1: Las PYME con una orientación estratégica desempeño. Son escasos cuando ninguna otra empre-
exploradora son más competitivas y obtienen me- sa dispone de ellos, en caso contrario se convertirán en
jores resultados que las que siguen una estrategia un requisito para competir, pero no en una fuente de
defensiva o analizadora. ventaja competitiva. Un tercer requisito es la durabili-
dad, que recoge la amenaza que puede provocar la ob-
Éxito competitivo y recursos y capacidades solescencia de los recursos (Grant, 1996; Amit y Schoe-
maker, 1993). Los recursos que no se deprecian, o que
La teoría de recursos y capacidades supone para la lo hacen muy lentamente, son una base más segura
dirección estratégica un cambio importante en la con- para la creación de ventajas competitivas, pues es más
cepción de los elementos determinantes de los resulta- difícil que un competidor pueda desarrollar un sustitutivo
dos de las empresas. Su tesis central reside en dos con- con unas prestaciones mayores que el original.
ceptos (Barney, 1991; Grant, 1991; Amit y Schoemaker, Para conocer los recursos estratégicos de las PYME,
1993). Por un lado, está la heterogeneidad entre las em- se realiza un análisis de la literatura que pone de mani-

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fiesto que: la posición tecnológica (Donovan, 1996), la ción al mantenimiento de la tecnología existente para al-
innovación (Pil y Holwelg, 2003), los recursos comercia- canzar un nivel productivo óptimo (Donovan, 1996).
les (Kara et al., 2005), la calidad de los productos y ser- Es clave constituir reservas o fondos que permitan un
vicios (Renuka y Venkateshwara, 2006), la gestión de aumento de las posibilidades de efectuar las inversiones
los recursos humanos (Rogoff et al., 2004), las capaci- necesarias para el desarrollo de la organización (Birley y
dades directivas (Rogoff et al., 2004), la flexibilidad de la Westhead, 1990). Igualmente adquiere relevancia la coo-
estructura organizativa (Renuka y Venkateshwara, peración tecnológica entre empresas como arma estraté-
2006), los sistemas de información (Tse y Soufani, gica. La cooperación aumenta el interés de los directivos
2003), la cultura (McLarty, 2000) y la cooperación por el desarrollo tecnológico, mejora la posición tecnoló-
(Glaister y Buckley, 1996) son elementos que claramen- gica de las PYME cooperantes y permite impulsar pro-
te contribuyen a la competitividad y al éxito de la PYME. yectos y actividades que no se podrían emprender aisla-
Este trabajo se centrará en el análisis de cinco de damente, bien por la escasez de recursos financieros,
ellos —los recursos tecnológicos, la innovación, la cali- bien por falta de experiencia comercial o tecnológica
dad del producto y servicio, la gestión de recursos hu- (Hoffmann y Schlosser, 2001; Klofsten y Scheele, 2003).
manos y las capacidades directivas para gestionar la Una adecuada gestión de este recurso aumenta el ren-
empresa— con el objetivo de profundizar en su conoci- dimiento de las máquinas, procesos productivos, siste-
miento como factores de éxito de las PYME. mas, e, incluso, el rendimiento de los recursos humanos.
Además, aumenta la capacidad de producción, disminu-
Recursos tecnológicos ye los costes y facilita la adaptación a las necesidades de
los clientes, mejorando, con ello, el desempeño de la em-
Dentro de los recursos tecnológicos, se incluyen el presa (Price Waterhouse, 1995; Donovan, 1996).
stock de tecnologías, la experiencia y los medios huma- En definitiva, para afrontar los abundantes desafíos
nos, científicos y técnicos para su desarrollo (Grant, del entorno, y poder adaptarse a las exigencias de los
1996). Por tanto, la tecnología se puede entender como clientes, las PYME deben examinar cuidadosamente las
el conjunto de conocimientos, formas, métodos, instru- mejoras que pueden introducir, tanto en sus productos o
mentos y procedimientos que permiten combinar los di- servicios como en sus procesos. Sólo tendrán una posi-
ferentes recursos y capacidades en los procesos pro- ción tecnológica que promueva el éxito aquellas organi-
ductivos y organizativos para lograr que éstos sean efi- zaciones que incorporen o desarrollaren activos tecno-
cientes (Donovan, 1996). lógicos que les permitan posicionarse por delante de
Pese a que la tecnología ha sido considerada tradi- sus competidores. Sobre la base de este razonamiento
cionalmente, a nivel académico, como una ventaja liga- formulamos la segunda de las hipótesis:
da a la gran empresa, la literatura ha relacionado tam-
bién esta variable con el éxito competitivo de las PYME H2: El éxito competitivo de las PYME se ve in-
(Acar, 1993; Donovan, 1996; Camisón, 1997; Aragón y fluido positivamente por su posición tecnológica.
Rubio, 2004; 2005).
La adquisición o desarrollo de tecnología en las Innovación
PYME requiere un esfuerzo económico especialmente
importante en las empresas de menor tamaño, por ello Por innovación se entiende el cambio en los produc-
los directivos además de examinar cuidadosamente las tos y procesos, la mejora de los mismos, los nuevos en-
mejoras que pueden introducir, tanto en los productos o foques de marketing o las nuevas formas de distribución
servicios como en los procesos, prestan especial aten- (North et al., 2001). Estas nuevas ideas pueden mejorar

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la forma en que, hasta el momento, se están haciendo H3: El éxito competitivo de las PYME se ve in-
las cosas, o bien cambiarlas radicalmente. La innova- fluido positivamente por el nivel de innovación.
ción puede producirse gracias a la investigación de la
propia empresa, o bien adquiriendo nuevas tecnologías Esta hipótesis puede ser a su vez descompuesta en
o licencias. En la práctica la innovación en la PYME tie- tres subhipótesis, si tenemos en cuenta los diferentes ti-
ne un carácter muy básico e incremental más que un ca- pos de innovación en la empresa:
rácter radical (Donovan, 1996).
Pese a que las grandes empresas, por poseer más H31: El éxito competitivo de las PYME se ve in-
medios financieros y humanos, pueden parecer más fluido positivamente por el nivel de innovación en
propensas a realizar innovaciones, las PYME también productos.
innovan, como muestra el hecho de que los gastos en H32: El éxito competitivo de las PYME se ve in-
innovación, en empresas de menos de 20 empleados fluido positivamente por el nivel de innovación en
en España, llegaron a representar el 9,5 por 100 del to- procesos.
tal del gasto de innovación de las empresas españolas3. H33: El éxito competitivo de las PYME se ve in-
Asimismo, muchas estadísticas evidencian cómo las fluido positivamente por el nivel de innovación en
PYME son las principales promotoras del crecimiento gestión.
en los niveles de innovación (Gudmunson et al., 2003;
Lloyd-Reason, et al., 2002). Calidad del producto o servicio
Por otro lado, algunos trabajos demuestran la rela-
ción positiva existente entre la innovación y el éxito de La calidad del producto o servicio consiste en lograr la
las PYME (Lloyd-Reason et al., 2002; Camisón et al., conformidad o adecuación del conjunto de las caracte-
2004). La ventaja competitiva de este factor descansa rísticas y atributos de un producto, o servicio, con las
en la menor complejidad organizativa y en los bajos ni- necesidades y expectativas del comprador (Price Wa-
veles de burocracia, la comunicación más fluida y di- terhouse, 1995). Esta adecuación se ve favorecida por
recta entre los diversos departamentos y entre la ge- la implantación de sistemas de gestión de la calidad to-
rencia y el personal, y, sobre todo, en el contacto más tal que, aunque a corto plazo pueden suponer fuertes in-
cercano con el mercado, lo que les permite tener una versiones, a medio y largo plazo reducen costes, dan
gran capacidad de respuesta a los cambios en el entor- origen a clientes y empleados satisfechos, y mejoran la
no (Lloyd-Reason, et al., 2002). productividad y los resultados de la empresa (Lee,
Que el éxito de las PYME se asocie positivamente al 2004).
desarrollo de nuevos productos, servicios o procesos, y En principio cabe pensar que las PYME pueden pre-
que una empresa pueda ver reducida su capacidad para sentar debilidades a la hora de competir con las grandes
competir si sus productos no satisfacen plenamente las empresas, ligadas a la falta de estrategias específicas
necesidades de sus clientes, ya sea por un mal diseño, de calidad y al escaso esfuerzo de normalización y certi-
por una mala calidad o un deficiente servicio al cliente, ficación (Camisón, 1997). No obstante, algunos trabajos
nos lleva a enunciar la siguiente hipótesis de investiga- evidencian que las PYME presentan unas condiciones
ción: muy favorables a la implantación de procesos tendentes
a la obtención de productos y servicios de calidad (Ahie-
re y Golhar, 1996; Lee, 2004; Price y Chen, 1993).
3
http://www.clminnovacion.com/srinnovacion/innovacionCLM/informes/
El trabajo realizado por Sun y Cheng (2002) muestra
Manual+de+Innovacion.htm cómo las empresas de menor tamaño se caracterizan

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por implantar sistemas de calidad como consecuencia 1999). La gestión de recursos humanos reportará venta-
de las exigencias del entorno, puesto que, tras la certifi- jas si las PYME son capaces de aprovechar: a) el buen
cación, los productos son mejor aceptados, tanto por los clima laboral existente, motivado por los excelentes ca-
clientes como por otras empresas e instituciones guber- nales de comunicación, b) los mayores niveles de flexi-
namentales. Asimismo, estos investigadores ponen de bilidad, c) la alta motivación laboral, al permitir a los tra-
manifiesto que las prácticas de gestión de la calidad bajadores observar con facilidad la relación entre las ta-
más utilizadas son las relacionadas con los sistemas de reas desarrolladas en los puestos y el resultado final
liderazgo directivo, la participación de los trabajadores obtenido por la empresa, y ofrecer al mismo tiempo
en la empresa y la calidad de la información. Otro grupo puestos de trabajo variados y d) la mayor cercanía del
de trabajos estudian el impacto de la certificación ISO directivo a los puestos de trabajo.
en las PYME (Brown et al., 1998; McAdam y McKeown, Por el contrario, las ventajas se verán limitadas si el
1999; Quazi y Jacobs, 2004; Renuka y Venkateshwara, buen clima, y por tanto el menor conflicto, viene de la
2006). Esta línea de trabajo muestra el impacto positivo mano de la imposibilidad de tener representación sindical
de la certificación sobre la productividad, la exportación, o de prácticas directivas muy jeráquicas. O bien, si la falta
el control de la empresa, los costes, la reducción de las de profesionalización en la gestión de recursos humanos
quejas de los clientes y la imagen de la empresa, varia- lleva a las empresas a una informalidad en las decisiones
bles todas ellas ligadas directamente a la competitividad sobre contratación, remuneración, promoción, etcétera, lo
(McAdam y McKeown, 1999; Renuka y Venkateshwara, que puede ser decisivo para limitar la consecución del éxi-
2006). En definitiva, para las PYME la calidad es un fac- to competitivo (Hornsby y Kuratko, 2003).
tor que favorece su éxito. Estos resultados llevan a plan- Por último, son numerosos los trabajos que apuntan
tear la siguiente hipótesis de investigación: hacia una escasa capacidad para atraer y retener per-
sonal cualificado, debido, fundamentalmente, a la me-
H4: El éxito competitivo de las PYME se ve in- nor posibilidad de ofrecer incentivos salariales (McLarty,
fluido positivamente por la calidad de sus produc- 2000; Reid et al., 2000; Klass et al., 2002). Para paliar
tos o servicios. este problema los bajos salarios pueden complementar-
se con fórmulas alternativas de retribución, adaptadas a
Recursos humanos cada individuo a través de flexibilidad en los horarios,
planes de formación, participación en la gestión, desa-
Entendemos por gestión de los recursos humanos los rrollo de la carrera profesional, etcétera.
mecanismos que permiten atraer candidatos cualifica- Respecto a la incidencia de este recurso en la compe-
dos, retener y motivar a los empleados actuales, y esta- titividad de la PYME, algunos autores afirman que no
blecer fórmulas que les ayuden a crecer y desarrollarse existe un claro consenso acerca del rol jugado por los
dentro de la empresa (McEvoy, 1984). recursos humanos (Deshpande y Golhar, 1994). Sin
La literatura reconoce a la gestión de los recursos hu- embargo, son numerosos los trabajos empíricos que
manos en la PYME una serie de singularidades que la apuntan hacia una relación positiva (Huck y McEwen,
hacen diferir de la gestión que realizan las grandes em- 1991; Yusuf, 1995; Wijewardena y Cooray, 1995; Luk,
presas (Hornsby y Kuratko, 1990; 2003; Deshpande y 1996; Gadenne, 1998; Warren y Hutchinson, 2000), e
Golhar, 1994; Renuka y Venkateshwara; 2006). incluso lo califican como el recurso clave para competir
Un análisis de esta literatura pone de manifiesto que (Hornsby y Kuratko, 2003). De acuerdo con este último
el pequeño tamaño puede ser fuente de ventajas y des- grupo de trabajos se plantea la quinta hipótesis de in-
ventajas en la gestión de este recurso (Wilkinson, vestigación:

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Enero-Febrero 2009. N.º 846
RECURSOS CRÍTICOS Y ESTRATEGIA EN LA PYME INDUSTRIAL

H5: El éxito competitivo de las PYME se ve in- nivel de productividad de la empresa (Norburn y Birley,
fluido positivamente por una adecuada gestión y 1988). Asimismo, algunos trabajos evidencian que exis-
dirección de los recursos humanos. te una relación positiva entre el éxito y el nivel de educa-
ción de los directivos (Martin y Staines, 1994). Esto su-
Capacidades directivas giere que las empresas que cuenten con directivos con
un mayor nivel de formación alcanzarán mayores nive-
El directivo, propietario o no, es la persona que adop- les de éxito. De este punto se deriva la última de las hi-
ta las decisiones generales de la empresa, planifica los pótesis planteadas en este trabajo:
objetivos a conseguir y diseña los medios para alcan-
zarlos, aunque después delegue las decisiones en nive- H6: El éxito competitivo de las PYME se ve in-
les inferiores (Rubio, 2004). Su papel crucial está fuera fluido positivamente por el nivel de formación de
de toda duda en cualquier tipo de empresa, sin embargo su máximo responsable.
su importancia en las PYME es, si cabe, aún más impor-
tante. En los directivos de las PYME suele recaer la res- 4. Metodología
ponsabilidad de elegir entre distintas opciones estratégi-
cas, incluso suelen ser ellos los que implementan las Población, muestra y obtención de datos4
tácticas de negocio y gestionan la mayoría de sus recur-
sos. Por ello, se les califica como el activo más impor- La población utilizada ha sido las sociedades mer-
tante (Lerner y Almor, 2002), y la falta de capacidad di- cantiles de los sectores industriales manufactureros
rectiva se enumera como una de las principales causas (CNAE, 15 a 22 y 24 a 36) con un tamaño comprendido
de fracaso en las PYME (Martin y Staines, 1994; Ahire y entre 10 y 250 trabajadores. La distribución de empre-
Golhar, 1996). sas en la población se ha estimado a partir del Directo-
Los trabajos que estudian la influencia de las capaci- rio Central de Empresas editado por el Instituto Nacio-
dades directivas en el éxito competitivo de las PYME nal de Estadística (DIRCE, 2003). El marco muestral
presentan resultados positivos. Pese a que hay investi- de selección ha sido la base de datos SABI de la em-
gaciones que muestran una falta de relación entre am- presa INFORMA SA5.
bas variables (Acar, 1993; Gadenne, 2000) son muchas El trabajo de campo se realizó entre el 20 de febrero y
más las que las relacionan positivamente (Huck y el 10 de mayo de 2004; la información fue recogida con
McEwen, 1991; Martin y Staines, 1994; Lin, 1998; Luk, una encuesta vía fax con seguimiento telefónico, utili-
1996; Camisón, 1997; Rogoff et al., 2004). En definitiva, zando como soporte un cuestionario dirigido al gerente.
aquellas empresas que cuenten con directivos capaces En total se efectuaron 9.337 contactos efectivos (fax y
de responder a las exigencias del entorno, del mercado contacto telefónico). Las respuestas válidas obtenidas
y de su propia organización, alcanzarán mayores nive-
les de éxito.
4
El nivel de educación, al ser un reflejo de los conoci- Para la realización de la encuesta que da soporte a este trabajo se
ha contado con la financiación del Ministerio de Industria, Turismo y
mientos y habilidades poseídos, se relaciona de forma Comercio (Dirección General de Política de la Pequeña y Mediana
positiva: con la capacidad del directivo para realizar Empresa), de la Fundación Leonardo Torres Quevedo de Santander y
del Instituto de Fomento de la Región de Murcia.
elecciones estratégicas de acuerdo con las exigencias 5
La base está constituida por más de 43.000 empresas industriales,
del entorno (Wiersema y Bantel, 1992), con su propen- de las que 18.000 tienen entre 10 y 250 trabajadores, obtenidas
mediante compras masivas en los Registros Mercantiles. Ello nos
sión a generar e implementar soluciones creativas a los permite asimilarla a una subpoblación obtenida de manera aleatoria a
problemas (Bantel y Jackson, 1989), e, incluso, con el partir de la población original de empresas.

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ALICIA RUBIO BAÑÓN Y ANTONIO ARAGÓN SÁNCHEZ

fueron 1.201, lo que supone una tasa de respuesta del IPj = grado de innovación de los productos en la
12,9 por 100; el error para la estimación de una propor- empresa j.
ción es de 2,8 puntos porcentuales con un nivel de con- IPCj = grado de innovación de los procesos en la
fianza del 95 por 100. empresa j.
Para contrastar las hipótesis de trabajo que relacio- IGj = grado de innovación de la gestión en la em-
nan cada una de las estrategias y de los recursos inter- presa j.
nos señalados con el éxito competitivo se ha utilizado el ACj = aseguramiento de la calidad en la empresa j.
método de la regresión multivariante. Es el método más RRHHj = gestión de recursos humanos en la empresa
adecuado, según la literatura, para los estudios donde j.
la variable dependiente e independiente son continuas y FDj = formación del directivo en la empresa j.
no existen variables que actúen al mismo tiempo con
carácter dependiente e independiente, en cuyo caso se Medida de las variables
utilizaría un análisis de ecuaciones estructurales.
Matemáticamente la ecuación de regresión adopta la Para el contraste de hipótesis propuesto es preciso
siguiente expresión: contar con datos relativos a la estrategia y a los factores
explicativos del éxito —variables independientes—, a
3

Y ij = b 0 + å b k Ckj + b 4 EE j + b 5 EDj + b 6 PTj + b 7 IPj + los indicadores de resultados de las empresas —varia-
k =1
bles dependientes— y a las variables de control.
+ b 8 IPCj + b 9 IG j + b10 ACj + b11RRHHj + b12 FDj + e i
La medida de las diferentes variables independien-
tes y dependientes se hace de acuerdo con lo especifi-
Yij = valor del indicador de éxito i para la empresa cado en el Anexo. Para la medición de la variable direc-
j. ción de recursos humanos y de las variables relativas a
b0 = constante de la recta de regresión. la innovación se utilizan medidas de percepción cuali-
b1-b12 = parámetros de los coeficientes de variación tativa, basadas en la opinión que tiene el directivo so-
parcial para cada una de las variables inde- bre diversas afirmaciones relativas a las mismas; la
pendientes; representan la estimación del medición de la estrategia seguida por la empresa, la
cambio en la variación de la variable depen- tecnología, la formación del gerente y la calidad se ha
diente que puede atribuirse a un incremento hecho a través de variables dummies o dicotómicas.
en una unidad en la variable independiente. Por lo que respecta a la medida de los indicadores de
ei = error aleatorio o residuo de la recta de regre- competitividad o de resultados de las PYME, se utiliza la
sión; el residuo es la diferencia entre el valor escala definida por Quin yRohbaugh (1983) en la que se
real de variable dependiente y el pronostica- diferencian cuatro indicadores de resultados: proceso o
do por el modelo. eficiencia interna, relaciones con el entorno o sistema
Ckj = valor del indicador de control k para la empre- abierto, indicadores de resultados cuantitativos o siste-
sa j (k = 1: antigüedad; 2: tamaño de la em- ma racional, e indicador de recursos humanos. A partir
presa y 3: tipo de control). de estos cuatro últimos indicadores se calcula el indica-
EEj = empresas que siguen una estrategia explora- dor global de éxito competitivo.
dora. Asimismo, con la finalidad de no desvirtuar el análisis
EDj = empresas que siguen una estrategia defensiva. de datos y de evitar posibles problemas de interpreta-
PTj = posición tecnológica de la empresa j (recur- ción de los resultados, se han introducido en los análi-
sos tecnológicos). sis, como variables de control, la antigüedad, el tamaño

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CUADRO 1

RESULTADOS DE LA REGRESIÓN1

Variables dependientes (indicadores de resultados)


Variables independientes
Indicador global Proceso interno Sistema abierto Sistema racional Indicador de RH

Antigüedad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . –0,08*** –0,02 –0,04 –0,10*** –0,05


Tamaño . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . –0,10*** –0,12*** –0,09*** 0,03 –0,11***
Tipo de control . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0,04 0,03 –0,01 0,05 0,04

Estrategia exploradora. . . . . . . . . . . . . . 0,03 0,05 0,02 0,01 0,02


Estrategia defensiva . . . . . . . . . . . . . . . –0,02 –0,02 –0,05 0,01 –0,01
Posición tecnológica . . . . . . . . . . . . . . . 0,06* 0,02 0,04 0,09*** 0,02
Innovación en productos . . . . . . . . . . . . 0,14*** 0,08* 0,24*** 0,05 0,03
Innovación en procesos . . . . . . . . . . . . . 0,14*** 0,11** 0,05 0,12** 0,11**
Innovación es gestión . . . . . . . . . . . . . . 0,16*** 0,18*** 0,08** 0,08** 0,13***
Calidad. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0,07** 0,11*** 0,03 0,07** –0,02
RRHH . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0,16*** 0,11*** 0,10*** 0,10** 0,13***
Formación del directivo . . . . . . . . . . . . . 0,04 0,01 0,02 0,01 0,05

R2 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0,289 0,193 0,190 0,138 0,116


R2 corregida . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0,279 0,181 0,178 0,125 0,103
F ............................. 28,347*** 16,687*** 16,350*** 11,163*** 9,131***

NOTAS: 1 Coeficientes estandarizados.


* Diferencias estadísticamente significativas p < 0,1; ** p < 0,05; *** p < 0,01.
FUENTE: Elaboración propia.

de la empresa y el tipo de control —familiar o no— afirmar que la muestra cumple los supuestos de lineali-
(Acar, 1993; Wijewardena y Cooray, 1995; Gadenne, dad, homocedasticidad, independencia y normalidad,
1998). Para ello se ha utilizado una variable continua siguiendo la metodología recomendada.
para la antigüedad, número de años transcurridos des- El Cuadro 1 muestra los resultados de las regresiones
de su puesta en marcha, una dicotómica que toma el va- realizadas. Concretamente, se incluye el coeficiente es-
lor 0 cuando la empresa es pequeña (10-49) y 1 si ésta tandarizado así como su significación estadística. Tam-
es mediana (50-250), para el tamaño, y una última tam- bién se recogen el R2 y la F asociados al modelo.
bién dicotómica para el tipo de control, 0 si es familiar y Como se puede comprobar todos los modelos son
1 en caso contrario. significativos, lo que pone de manifiesto que las varia-
bles independientes, en conjunto, explican variaciones
Resultados en los indicadores de resultados. Aunque los R2 son
algo bajos son superiores a los obtenidos en trabajos
Un análisis previo de los datos permite analizar las re- similares a éste (Acar, 1993). Por otra parte, es de re-
laciones entre las variables objeto de estudio. En este saltar que en este trabajo se analiza el efecto de algu-
sentido, el análisis de los índices de tolerancia nos ase- nas variables internas de las empresas, lo que no ex-
gura que no hay multicolinealidad entre las variables. cluye la influencia en los resultados de variables de
Además, el cálculo y análisis de los residuos permite otra índole.

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ALICIA RUBIO BAÑÓN Y ANTONIO ARAGÓN SÁNCHEZ

Los resultados obtenidos para las variables de control so, la flexibilidad, y el gran dinamismo de las pequeñas
difieren en función del modelo. Respecto de la antigüe- empresas permite obtener ventajas competitivas sobre
dad no se observa en ningún caso el efecto positivo que las grandes, como sucede en este caso.
se esperaba por la experiencia acumulada por las em- Por último, en lo que respecta a la variable tipo de
presas. Los resultados ponen de manifiesto que en dos control, los resultados son claros. No se observa una in-
de los modelos, los que utilizan el indicador global de fluencia significativa de esta variable en ninguno de los
éxito y el indicador racional de resultados respectiva- modelos planteados. Esto nos lleva a confirmar la idea
mente, la antigüedad explica el éxito pero de forma ne- de Aronoff y Ward (1995), al sostener que el éxito no se
gativa, es decir son las empresas más jóvenes las que ve influido por el tipo de control de la empresa. Este re-
presentan mejores niveles de competitividad. sultado es a su vez contrario al obtenido por Daily y Do-
El debate respecto de la influencia de esta variable si- llinguer (1992), en empresas controladas por la familia,
gue abierto. Mientras algunos trabajos asocian edad de cuando demostraron que el mayor alineamiento de inte-
la empresa y desempeño de una forma positiva, al en- reses y los menores costes de control favorecen la crea-
tender que las empresas con más antigüedad presentan ción de ventajas competitivas en las PYME familiares.
crecimientos más rápidos (Braker y Pearson, 1986; Bir- Por lo que respecta al efecto de las variables indepen-
ley y Westhead, 1990), otros sugieren la relación contra- dientes en los indicadores de resultados, se observa
ria (Begley y Boyd, 1987) e incluso los resultados en que el tipo de estrategia seguido por las PYME no expli-
ocasiones apuntan hacia una ausencia de relación ca el mayor o menor éxito alcanzado por las PYME.
(Acar, 1993; Wijewardena y Cooray, 1995). Este resultado nos lleva a rechazar la H1.
Esta falta de consenso puede deberse a que la anti- Respecto del resto de hipótesis (H2 a H5) relativas al
güedad por si sola no es una garantía de mejora de la efecto en los indicadores de resultados de las variables
posición competitiva, pues esta mejora sólo podrá lo- recursos tecnológicos, innovación, calidad y gestión de
grarse con la ayuda del resto de recursos. Dicho de otro recursos humanos, se observa que cabe aceptarlas; tan
modo, el efecto experiencia se produce sólo si la empre- sólo la variable formación del directivo presenta una au-
sa es capaz de adaptarse a las nuevas tecnologías, sencia de relación en todos los modelos lo que nos lleva
orientarse al cliente y al mercado. a rechazar la H6.
Por lo que respecta al tamaño se observa que esta Concretamente, en el primer modelo, el que utiliza el
variable es significativa en todos los modelos, salvo en indicador global de éxito, se observa que la posición tec-
el que utiliza como variable dependiente los resultados nológica de la empresa, la innovación en productos,
denominados de sistema racional, evidenciando que procesos y gestión, la calidad de los productos y la ges-
cuanto menor es la empresa mejores son sus indicado- tión de los recursos humanos son variables que expli-
res de competitividad o éxito. Estos resultados son can el éxito competitivo.
coherentes con la literatura, dado que, si bien la compe- Respecto a la influencia de cada una de las variables
titividad se ha venido asociando positivamente al tama- independientes en los diferentes indicadores de resulta-
ño apoyándose en los beneficios que representan en las dos que componen el resultado global, se observa que
empresas de mayor tamaño las economías de escala, el la variable posición tecnológica presenta a su vez una
mayor poder de negociación, la mayor solidez de las es- relación positiva con el sistema racional, la innovación
tructuras financieras o la mayor facilidad de acceso a los en productos con el indicador de proceso interno y de
mercados internacionales, entre otras cuestiones, tam- sistema abierto, la innovación en procesos con el proce-
bién es posible sostener la tesis opuesta: la mayor pro- so interno, el sistema racional y el indicador de recursos
ximidad al mercado, la cultura de confianza y compromi- humanos.

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RECURSOS CRÍTICOS Y ESTRATEGIA EN LA PYME INDUSTRIAL

Respecto a la calidad, se observa una influencia posi- (Ribeiro, 2001 y 2003; Gudmunson et al., 2003). Ade-
tiva en dos de los indicadores de resultados: el de pro- más deben aprovechar las ventajas del pequeño tama-
ceso interno y el de sistema racional. Por último, tanto la ño, lo que se concreta en una menor burocracia, un
innovación en gestión como la dirección de recursos hu- mayor contacto con los trabajadores y una comunica-
manos tienen un efecto positivo y significativo en los ción más fluida entre departamentos.
cuatro indicadores de resultados que se analizan. Respecto de la gestión y dirección de los recursos hu-
manos, además de su importancia para el éxito competi-
5. Discusión y conclusiones tivo, avalada por la literatura (Huck y McEwen, 1991;
Reid et al., 2000; McLarty, 2000), es uno de los factores
Una de las primeras conclusiones que se pueden ex- cuya gestión inadecuada se constituye en la principal
traer del examen de los análisis efectuados es que las causa de fracaso de las PYME (McEvoy, 1984). Las ven-
estrategias que siguen las PYME no explican las varia- tajas del buen clima laboral que, por lo general, presen-
ciones en los indicadores de resultados. Esto puede tan las empresas de menor tamaño, la mayor claridad or-
apoyar la hipótesis de que el éxito competitivo de la ganizativa fomentada por la menor complejidad existente
PYME no se relaciona directamente con la estrategia o la mayor cercanía de los directivos a los puestos opera-
seguida por la empresa, es decir, todas las estrategias tivos y a sus empleados son oportunidades que, bien
pueden conducir al éxito (Miles y Snow 1978; Conant et gestionadas, pueden transformarse en ventajas competi-
al. 1990; Wright et al. 1991). tivas sostenibles en el largo plazo. Por otro lado, las
Respecto de los recursos y capacidades analizados, PYME deben ser capaces de atraer y retener personal
los resultados más consistentes se obtienen para las cualificado, ofreciendo seguridad en el empleo, estable-
variables innovación en gestión y dirección de los recur- ciendo sistemas de selección adecuados, orientándose
sos humanos, que explican variaciones positivas y sig- al trabajo en equipo, desarrollando sistemas de retribu-
nificativas en los cinco indicadores de resultados con los ción equitativos, fomentando la participación de los traba-
que se trabaja, y para la innovación en procesos —in- jadores, informando periódicamente a éstos de las estra-
fluencia positiva y significativa en cuatro de ellos—. tegias y desempeño de la empresa, y creando una fuerza
Esto nos permite afirmar que la necesidad de adapta- de trabajo formada y preparada para afrontar los conti-
ción a las necesidades de los clientes debe realizarse nuos retos competitivos. En definitiva deben prestar es-
prestando especial atención a la innovación. Se trata de pecial atención a aquellas prácticas que favorezcan el
un recurso estratégico ampliamente destacado en la li- desarrollo del capital humano y que permitan gestionar
teratura (Chaston y Mangles, 1997; Pil y Holwelg, 2003) correctamente el conocimiento organizativo. Otros facto-
lo que se confirma en este trabajo para el caso de res que se muestran como estratégicos para el modelo
PYME industriales españolas. Los retos competitivos global, aunque sólo son relevantes con alguno del resto
exigen que las empresas analicen constantemente las de indicadores de resultado son la tecnología y la cali-
mejoras que pueden ir introduciendo en sus productos y dad. En primer lugar, es posible afirmar la importancia
procesos; la innovación continua se confirma como un que para competir con éxito tienen los activos tecnológi-
factor clave para atender las necesidades cambiantes cos (Cunningham, 1995; Gudmunson et al., 2003; Klofs-
de los clientes y, por tanto, como un factor clave del éxi- ten y Scheele, 2003 y Pil y Holwelg, 2003). Es necesario
to competitivo de las PYME. Para apoyar la innovación, orientar los recursos humanos, económicos y materiales,
las PYME deben contar con unos recursos humanos y para que la empresa sea capaz de desarrollar interna-
financieros adecuados y con un buen sistema de infor- mente su tecnología o bien para que la tecnología que
mación que fomente la participación de los trabajadores adquiere o el uso que de ella hace la sitúen por delante

TRIBUNA DE ECONOMÍA
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ALICIA RUBIO BAÑÓN Y ANTONIO ARAGÓN SÁNCHEZ

de sus competidores. En este sentido, las empresas ana- terminantes para que las empresas alcanzaran el éxito
lizadas muestran una posición que en más del 60 por 100 una vez alcanzado el mismo. A pesar de ello, se conside-
de los casos es fuerte o buena. ra que los resultados obtenidos pueden servir de guía
Aunque resulta preocupante que alrededor del 40 para las prácticas directivas futuras. En segundo lugar,
por 100 de ellas afirmen que utilizan la misma tecnolo- no hay que olvidar que obtener la información a través de
gía que la mayoría de empresas del sector, y que sólo una encuesta realizada a los directivos de las empresas
realizan nuevas inversiones cuando constatan que la puede tener como consecuencia que las respuestas se
competencia está obteniendo buenos resultados o que deban más a un retrato ideal basado en sus conocimien-
los competidores tienen una tecnología más eficiente o tos y experiencias que a la realidad de sus empresas.
moderna, hecho que dificultará la capacidad competitiva Por último, a pesar de las limitaciones, este trabajo
de estas empresas. realiza una serie de aportaciones muy importantes a ni-
Por último, cabe destacar la importancia de la calidad vel científico y práctico. En primer lugar, profundiza en el
del producto o servicio. Las PYME deben implantar conocimiento científico de las PYME y de sus estrate-
ideas y técnicas asociadas con la gestión de la calidad, gias competitivas al analizar cada uno de los recursos
lo que permitirá hacer las cosas bien a la primera, lo- estratégicos de forma aislada, analizando su rol como
grando la conformidad de las características y atributos favorecedores del éxito competitivo en las PYME. Ade-
del producto o servicio con las expectativas del compra- más, y en segundo lugar, corrobora empíricamente la
dor. A esta misma evidencia llegan, entre otros, los tra- importancia que para el éxito competitivo de las PYME
bajos de Luk (1996) y Chaston y Mangles (1997). tienen la tecnología, la innovación, la calidad y los recur-
Además estos resultados, unidos a los de Camisón sos humanos.
(1997) y Sun y Cheng (2002), entre otros, confirman que A partir de las conclusiones y reflexiones realizadas,
los productos y servicios de las PYME certificadas son se deben abrir líneas futuras de investigación que pro-
mejor aceptados en el mercado, hecho que lleva a reco- fundicen en el conocimiento de las relaciones aquí estu-
mendar una mayor atención a la inversión en sistemas diadas. En primer lugar, la ampliación de este estudio a
de aseguramiento de la calidad. otros ámbitos territoriales, nacionales o europeos, y a
Desafortunadamente, pese a la repercusión que la ca- otros sectores permitiría obtener conclusiones más defi-
lidad total tiene en el crecimiento y competitividad de las nitivas. En segundo lugar, todos los factores de éxito
PYME, en la muestra de empresas seleccionada tan sólo identificados no necesariamente repercutirán en una
un 20 por 100 de ellas dispone de una certificación ISO mejora de resultados financieros a corto plazo, sino que
9000 o equivalente. Esto denota una falta importante de pueden suponer una mejora de su posición competitiva
interés por parte de las empresas en inculcar el compro- a corto, medio y largo plazo. Un estudio longitudinal per-
miso que implica contar con una certificación de calidad, mitiría salvar este inconveniente.
con el objetivo de desarrollar modelos de empresa que
respondan a las actuales exigencias de los mercados, en Referencias bibliográficas
donde los consumidores demandan una buena calidad
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206 ICE TRIBUNA DE ECONOMÍA


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208 ICE TRIBUNA DE ECONOMÍA


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210 ICE TRIBUNA DE ECONOMÍA


Enero-Febrero 2009. N.º 846
RECURSOS CRÍTICOS Y ESTRATEGIA EN LA PYME INDUSTRIAL

ANEXO

Medición de variables

Variables independientes

Dirección y gestión de los recursos humanos Medida de cada uno de los procesos 0 = no aplica; 1 = sí aplica
(Suma = número de prácticas de recursos 1) Reclutamiento y selección del personal.
humanos que aplica la empresa) 2) Sistema de valoración y desempeño.
3) Formación y capacitación.
4) Planes de desarrollo de la carrera.
5) Gestión de las retribuciones.

Innovación Medida de cada uno de los ítems en comparación con los competidores: escala 1 = muy
por debajo a 5 = muy por encima

Productos 1) Número de productos introducidos o modificados al año.


2) Carácter pionero de su empresa a la hora de introducir nuevos productos.
3) Rapidez en la respuesta a la introducción de nuevos productos de otras empresas
del sector.
4) Gasto en I+D+i para nuevos productos.

Procesos 1) Número de procesos introducidos o modificados al año.


2) Carácter pionero de su empresa a la hora de introducir nuevos procesos.
3) Rapidez en la respuesta a la introducción de nuevos procesos de otras empresas
del sector.
4) Gasto en I+D+i para nuevos procesos.

Gestión 1) Número de sistemas de gestión introducidos o modificados al año.


2) Carácter pionero de su empresa a la hora de introducir nuevos sistemas de gestión.
3) Rapidez en la respuesta a la introducción de nuevos sistemas de gestión de otras
empresas del sector.
4) Gasto en I+D+i para nuevos sistemas de gestión.

Variables dummy

0) Si la empresa no sigue una estrategia exploradora.


Estrategia competitiva Estrategia exploradora
1) Si la empresa sigue una estrategia exploradora.

0) Si la empresa no sigue una estrategia defensiva.


Estrategia defensiva
1) Si la empresa sigue una estrategia defensiva.

Posición tecnológica 0) Posición sostenible-débil: la tecnología es la misma que se utiliza en la mayoría de empresas del sector y sólo
realizamos nuevas inversiones cuando comprobamos que la competencia tiene buenos resultados o bien los
principales competidores tienen una tecnología más eficiente y moderna que la nuestra.
1) Posición fuerte-buena: la tecnología adquirida por la empresa o el uso que hace de ella nos posiciona por delan-
te de la competencia o bien desarrollo interno de la tecnología con el fin de obtener mejores resultados que la
competencia.

Formación gerente 0) El gerente tiene estudios universitarios.


1) El gerente tiene estudios primarios o de grado medio (bachillerato o formación profesional).

Calidad 0) La empresa no está certificada por la ISO de la serie 9000 o equivalentes.


1) La empresa está certificada por la ISO de la serie 9000 o equivalentes o bien se encuentra en proceso de ha-
cerlo.

TRIBUNA DE ECONOMÍA
Enero-Febrero 2009. N.º 846 ICE 211
ALICIA RUBIO BAÑÓN Y ANTONIO ARAGÓN SÁNCHEZ

ANEXO

Medición de variables

Variables dependientes

Indicador global2 Proceso interno1 1) Mejora de la coordinación de procesos internos.


(Quinn y Rohbaugh, 2) Mejor organización de las tareas del personal.
1983) 3) Mejora de la calidad del producto.

Sistema abierto1 4) Aumento de la satisfacción de los clientes.


5) Incremento de la habilidad de adaptación a las necesidades cambiantes de los
mercados.
6) Mejora de la imagen de la empresa y de sus productos.

Sistema racional1 7) Incremento de la cuota de mercado.


8) Incremento de la rentabilidad.
9) Incremento de la productividad.

Relaciones humanas1 10) Aumento de la productividad.


11) Reducción del abandono voluntario de los trabajadores.
12) Reducción del absentismo.

NOTAS: 1 Para cada una de las variables se ha utilizado una escala Likert de 1 = evolución muy desfavorable del indicador (últimos dos años) a 5 = evolución
muy favorable del indicador (últimos dos años).
Una vez calculada la fiabilidad y la validez de las escalas la puntuación de cada una de ellas se ha obtenido como la suma de los ítems que la componen.
2 El indicador de resultado global de las empresas se obtiene por medio de la suma del valor medio de las puntuaciones obtenidas para cada uno de los ítems in-

dicados. Nuevamente, para confirmar la fiabilidad se calculó el coeficiente alfa de Cronbach obteniéndose un valor de 0,835 y se confirmó la validez del concepto
en su faceta discriminante a través de un análisis factorial.

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