Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
1. Introducción:
Al origen de la psicología jurídica, durante el siglo XX, aportaron muchos de los psicólogos
quienes contribuyeron en el origen de la psicología actual, entre ellos Alfred Binet, quien a
partir del experimento de Catell, donde realizó una simulación de los interrogatorios
judiciales en 1893, consideró la necesidad de desarrollar una ciencia psicojurídica, al mismo
tiempo que sus grandes aportaciones a la psicometría contribuyeron y fueron decisivas para
la creación de instrumentos que avalaran las evaluaciones forenses.
Se considera a Binet padre de la Psicología experimental debido a su fe en la observación por
encima de la teoría, contribuyó a fundar el primer laboratorio de investigación psicológica
de su país en 1889, fundó la primera revista francesa de psicología, la cual se convirtió en la
referencia internacional de psicología experimental; así mismo, desarrolló técnicas
experimentales para medir la capacidad de razonamiento. Con la colaboración de Theodore
Simon, estableció escalas para la medición de la inteligencia en niños, mediante la
construcción del test de Binet-Simon que alcanzó gran notoriedad. Sus estudios sobre la
inteligencia lo llevaron a utilizar un método, el cual él mismo denominó ‘’método
interrogativo’’ el mismo que culminaría su uso con la publicación de su libro acerca del
estudio experimental de la inteligencia, donde sus conclusiones reflejaban su confianza en
un pensamiento sin imágenes que excedía la mera introspección. Por sus números aportes es
considerado una de las figuras más destacadas en la psicología francesa.
Antecedentes
Los antecedentes de la Psicología del Testimonio se remontan al origen del Derecho.
por ejemplo, podemos encontrar referentes a la importancia de los testimonios, el
procedimiento para su obtención y su papel en la indagación de la verdad en textos
griegos y romanos.
Marbe (discípulo de Wundt) es el primero de quien se tiene constancia que intervino
en un juicio en 1892, como testigo experto, para informar acerca del tiempo de
reacción en un caso de accidente de tren.
Schrenk-Notzing en 1896 intervino en un caso de homicidio, para informar sobre el
efecto de la publicidad previa a un juicio.
Catell (1893) figura como el primero en investigar sobre la exactitud de las
declaraciones de los testigos en EEUU.
En Europa, el austríaco Gross (1897) publica el libro “Kriminalpsychologie”
destinado en gran parte al testimonio.
A finales del S.XIX y principios del S.XX surge la investigación sobre este tema,
interesándose por la seguridad de los relatos y por la seguridad que las personas tiene
en su propia memoria (exactitud de la memoria). Destacando: Binet y Münsterberg
Binet, puso de manifiesto la falta de exactitud del recuerdo y los efectos de la sugestión de
la memoria visual. Publicó en 1900 el libro titulado “La suggestibilité” en el que se recogen
los primeros trabajos aplicados sobre la Psicología del testimonio y donde estableció:
1. Que los errores son elementos constantes y normales del testimonio
2. Que el testimonio es una reproducción lacunar y deformada de la realidad
3. Que son generalmente especiales y versan sobre uno de los aspectos del conjunto
4. Que se aprecian con exactitud preferentemente los detalles y que hechos falsos son
referidos como verdaderos, sin vacilaciones, con precisión en las minucias.
Poco después publicó La science du témoignage (la ciencia del testimonio, 1905). Además,
editó junto a Beaunis, Henry y Ribot la revista L'Année Psychologique, donde se publicaron
interesantes trabajos aplicados a la Psicología del Testimonio desde sus primeros números;
como el de Claparède (1905), titulado La psychologie judiciaire, que resumía la actualidad
de la Psicología del Testimonio de entonces en Europa.
Münsterberg (1908), señaló la necesidad de una reforma legal basada en la experimentación
científica. Publicó el primer manual específico sobre Psicología del testimonio titulado “On
the Witness Stand” (1908).
3. LA SUGESTIONABILIDAD (1900)
Gondra en el 2012 refiere que Alfred Binet fue un pionero de la psicología del testimonio
legal y la sugestión fue uno de sus temas de investigación que más le gustó. Debe ser por ello
que debió publicar su obra La suggestibilité en el año de 1900 en la cual se puso a la defensiva
en lo que respecta a crear una ciencia que pueda ser aplicada al testimonio.
Binet tuvo como bases para dicha obra las observaciones que llevó a cabo a la
sugestionabilidad en los testimonios de infantes de las cuales pudo deducir la influencia que
pueden tener las preguntas sugestivas en las respuestas que son emitidas por los
testigos.(García, 2016)
Debido a sus experiencias y a las consecuencias de estas Binet dentro de su obra establece lo
siguiente: (Lemoine, 1967)
1. Como elementos del testimonios los errores se caracterizan por su constancia y
normalidad
2. El testimonio en cuanto a la realidad puede ser una reproducción tallada o deformada
de esta misma.
3. Los errores dentro del testimonio en general vienen a ser especiales además de que
pueden versar sobre uno de los aspectos del conjunto.
4. Dentro de los testimonios hay apreciaciones por la exactitud de los detalles además
de que hay hechos falsos que pueden ser presentados como parte de la verdad sin la
presencia de vacilaciones.
Binet realizó un experimento con escolares de 7 a 14 años. Para evaluar dicho efecto
utilizo 6 objetos pegados en un poster, entre ellos figuraban una moneda, un botón, una
estampilla, la etiqueta de una tienda, una fotografía y una pequeña foto (sacada de una
revista) de una multitud.
Todos los niños conocían estos objetos, no eran difíciles de interpretar por los niños,
incluso algunos de ellos les resultaban familiares. Se les mostraba el poster por u
intervalo de 10 a 12 segundos, luego se les pidió a los niños reportar la mayor cantidad
de detalles de aquello que habían visto. Sin embargo, les creo cierta confusión a nivel
perceptivo, el cual respondía al tiempo insuficiente que les dio para observar en detalle
el poster. Esto ponía a los niños en la posición de testigos. En este sentido, después de
observar el poster les pidió escribir todo aquello que recordaban, sin formularles
preguntas específicas.
Realizó un segundo experimento con otro grupo de niños, a los cuales se les mostró el
mismo poster y a modo que reporten lo que recordaban se les formuló 41 preguntas.
Con este primer experimento, los resultados demostraron que sus reportes estaban
incompletos y con numerosos errores, sin embargo, resalto que era esta la mejor forma
de obtener el testimonio de un niño. Por ello afirmó que:
- Si deseamos un testimonio fiel de un niño, no tenemos que formular preguntas ni
tampoco pedirles que den su reporte de manera oral
- Todo lo contrario, debe pedírseles que reporten espontáneamente de manera escrita
todo aquello que saben.
Con el segundo experimento, los resultados demostraron que los niños dieron más
detalles, pero estos eran menos precisos. Probando así que la certeza subjetiva y el
completar los detalles no están correlacionados en la habilidad para recordar. Por lo
que los errores serían de 2 tipos:
- Errores lógicos: Por ejemplo afirmar que el botón estaba cocido cuando en realidad
estaba pegado.
- Errores de invención: Cuando un objeto imaginario es descrito en lugar de uno real.
Existe una gran desconfianza, y algunas legislaciones exigen probar al niño, si tiene capacidad
para distinguir entre la verdad o la mentira. Las razones que se aducen para no creer menos
en el testimonio del niño son: su menor capacidad de atención, su mayor dificultad para
retener lo percibido, su mayor facilidad para ser sugestionado, dificultad para distinguir entre
realidad y fantasía, mayor número de contradicciones, una narración menos coherente y una
menor capacidad moral para juzgar las consecuencias de afirmar algo falso bajo juramento o
promesa.
Según investigaciones existe una progresión en la credibilidad que se corresponde con la edad.
Pero no todas las investigaciones han demostrado que los niños sean menos creíbles que los
adultos. Algunas demuestran que el testimonio infantil es más creíble. En conclusión, no cabe
duda, el niño es más creíble que el adulto cuando afirma haber sido abusado sexualmente.
El problema no está en la capacidad intelectual, ni en la de mentir, reside en cómo se entreviste
al niño testigo. Binet halló que era importante el modo de interrogar a los niños, pero la
sociedad y la ciencia psicológica consideró los resultados que demostraban que eran
sugestionables, a pesar de que éste autor escribiera que solo cuando se les hacen preguntas
capciosas.
BIBLIOGRAFÍA
Arce, R., & Fariña, F. (2013). Psicología Social Aplicada al Ámbito Jurídico. Psicología,
455, 3.
Fariña, F., Arce, R., & Seijo, D. (2005). HISTORIA DE LA PSICOLOGÍA JURÍDICA EN
AMÉRICA Y EUROPA. Santiago de Compostela, abril de 2005. Los editores., 29.
Garrido, E., Masip, J. and Herrero, M. (2006). Psicología Jurídica. Madrid: Pearson Prentice
Hall, pp.59-61.
Garcia, D. D. M. (2016). Sensibilidad del cbca al intervalo de retención y la repetición de
entrevistas en la evaluación de la credibilidad de las declaraciones en menores de edad
(Doctoral dissertation, Universidad de Murcia).
Gondra, J. (2012). Alucinaciones, transfer y polarización: los experimentos de Alfred Binet en
el Hospital de la Salpêtrière. Revista de historia de la psicología, 33(1), pp.51-68.
Recuperado de: http://file:///C:/Users/Admin/Documents/Dialnet-
AlucinacionesTransferYPolarizacion-5447737.pdf
Lemoine, E. R.(1967) Psicología del testimonio [En línea] Revista de Psicología, 4, p. 43-
60.
Manzanero, A.L. (2010). Breve historia de la Psicología del Testimonio. Psicología del
Testimonio. Editorial Psicología Pirámide. Madrid
Nicolas, S., Gounden, Y., & Sanitioso, R. B. (2014). Alfred Binet, founder of the science of
testimony and psycho-legal science. L’Année psychologique, 114 (2), 209-229. doi
10.4074/S0003503314002012
Voyat, G. (1983). El auténtico mundo de Alfred Binet. Infancia y Aprendizaje, 6(22), 109-
114.