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LO QUE DOY REFLEJA MI RELACION CON DIOS

INTODUCCION
Como ya mencioné, este sermón expositivo toma como base, uno de los
mejores estudios bíblicos respecto a poner a Dios primero en todo ámbito de
nuestras vidas. Por eso, honro al primer expositor de donde toman forma estos
pensamientos, reconociendo que la mayor parte de la inspiración que recibí,
fue al leer el estudio bíblico “Lo primero es lo primero”.
En la Biblia hubo una fiesta en la casa de María, Marta y Lázaro. Marta se
molestó porque María no le ayudaba a cocinar, pero Jesús dijo: María escogió
la mejor parte, la que no le será quitada, se sentó a los pies de Jesús a escuchar
Su Palabra. Quiero animarle a usted a que elija esa mejor parte. Vamos a
estudiar la Palabra de Dios juntos.
Desarrollo
Quiero hablarle de poner a Dios primero en su vida, y cómo hacemos eso.
Vamos a tocar cuatro áreas críticas donde es importante de que Dios sea
primero en nuestras vidas. En nuestras finanzas, con nuestras familias, en
nuestras batallas que es cuando nos enfrentamos al conflicto y las luchas y
finalmente en nuestro futuro. Finanzas, Familia, Batallas y Futuro:
Ocurren tres cosas cuando pones a Dios primero:
Lo honramos: Damos honor a Dios y Él es digno de honor.
Demostramos que efectivamente tenemos fe: Sin fe es imposible complacer a
Dios, es una demostración de fe, cuando ponemos a Dios primero.
Desata bendiciones en nuestra vida.
LAS FINANZAS
En Génesis capítulo 4, es el primer registro de un ser humano en el que se da
cualquier clase de ofrenda a Dios. Hay algo a lo que se refieren los teólogos,
como la “ley de la primera mención”. Cuando un tema se introduce por
primera vez en la biblia, pon mucha atención, porque por lo general hay un
principio muy importante en medio de eso. Y vas a encontrar reiterado ese
mismo principio a través de las Escrituras, y hay algunos principios
impresionantes que encontramos cuando Caín y Abel llevan sus ofrendas a
Dios.
Sabemos que Caín, cultivaba la tierra, Abel era ganadero… y leemos en el verso
tres: “Tiempo después Caín presentó al Señor una ofrenda del fruto de la
tierra, Abel también ofrendó lo mejor de su rebaño, los primogénitos. Y el
Señor miró con agrado a Abel y su ofrenda, pero no miró así a Caín y a su
ofrenda, por eso Caín se enfureció y andaba cabizbajo”.
Algunos piensan que Dios no aceptó la ofrenda de Caín, porque Dios quería un
sacrificio animal, la Biblia no dice eso, eso es una suposición teológica. Caín era
agricultor, y cuando se introdujo la Ley, los que se ganaban la vida cultivando
trigo, uvas, etc. Llevaban los primeros frutos de eso como ofrenda y eran
totalmente aceptables para Dios.
Ambos hicieron bien al traer una ofrenda del trabajo que tenían. Pero había
una distinción entre la ofrenda de Abel y la de Caín. Cuando la ofrenda de Caín
se menciona, no se dice nada más, es sólo una ofrenda sin descripción. Tal vez,
una ofrenda que no le costó mucho, tal vez, las sobras. Pero cuando Abel trajo
su ofrenda dice que eran los “primogénitos”. Lo más gordo, es decir, trajo la
mejor parte. Abel trajo lo primero y lo mejor a Dios, Caín sólo trajo algo, y
seguramente no era lo primero y lo mejor, o lo hubieran mencionado como lo
hicieron con su hermano Abel. Dios respetó la ofrenda de Abel, pero no
respetó la ofrenda de Caín.
Sigamos con el verso 6: “El Señor le dijo: ¿Por qué estás enojado? ¿Por qué
andas cabizbajo?, si hicieras lo bueno, (o literal mente, si haces lo bueno, si das
lo mejor, esa palabra significa que algo está bien), si das lo mejor, ¿No serías
aceptado? Y si no hicieras lo bueno, es decir, si no traes lo mejor el pecado te
acecha y quiere dominarte, ¡pero tú puedes dominarlo!
Hay un par de cosas importantes aquí. Caín no ofreció lo mejor como Abel, y
Dios dijo: Si hicieras lo que Abel, serías aceptable y no lo hiciste porque hay
otras cosas más importantes en tu vida Caín. Hay distancia entre tú y yo y se
refleja en lo que das, tu ofrenda refleja una relación pobre y mediocre
conmigo. Así mismo, los primogénitos, y lo mejor de Abel, generan un reflejo
de su relación con Dios. Tanto es así que el nuevo testamento habla de la
historia en Hebreo 11:4 “Por la fe, Abel ofreció a Dios un sacrificio más
aceptable que el de Caín, por lo cual, recibió testimonio de ser justo, pues Dios
aceptó su ofrenda. Y Abel, por la fe, aun muerto habla todavía”.
La ofrenda de Abel fue mejor, eso literalmente es un “sacrificio mejor”. Y como
dice, dio sus primicias y lo mejor. Caín no, y lo encontramos confirmados en el
Nuevo Testamento. Dice, no sólo que fue un acto de fe, que Abel llevara a Dios
su primicia y lo mejor, sino que confirmó su justicia. Lo que significaba que
tenía una relación correcta con Dios.
En definitiva, su ofrenda le sirvió como testigo y reflejo de donde estaba con
Dios, tenía una relación correcta con Dios, reflejada en la ofrenda que dio. Le
dio a Dios su primicia, porque Dios era el primero en su vida. Caín le dio sus
sobras porque Dios no estaba en la lista de prioridades de Caín. Y nunca
escapamos al principio de “donde está tu tesoro, está tu corazón”.
Lo que damos al reino de Dios, a su Casa o Iglesia, a Dios mismo, siempre será
un reflejo de nuestra relación con Él. Sino hemos de dar de esta manera, no es
lo primero para nosotros, no importa lo que digamos con nuestros labios.
La mayoría de nosotros conoce la Escritura de Proverbios 3:9-10 que dice:
“honra al Señor con tus bienes y con los primeros frutos de tus cosechas, así
tus graneros rebozaran y tus bodegas se llenaran de vino”, ese tipo de ofrendas
desata una bendición, es una promesa de bendición para personas de la
sociedad agraria. Su prosperidad se medía en uvas, trigo y cabezas de ganado
y Dios dice: “si me honras dando tus primicias y la mejor parte, yo desataré
bendición en tu vida”.
Toma ese principio. Tal vez no seas un pastor de ovejas, tal vez no cultives maíz
para vivir, pero el principio se transporta a lo que haces. Dios dice: “Yo puedo
hacer que tu economía prospere, yo puedo abrir puertas que ningún hombre
puede cerrar, darte favor donde no se pueden encontrar. Puedo darte
conexiones en tu vida que no encontrarías en mil años”.
Hermano, Dios puede hacer cosas que tú nunca podrás conseguir. Sí, y aun
tienes que seguir trabajando, y trabajar muy duro. Pero Dios le da el elemento
sobrenatural, cuando lo honras. Honramos a Dios, le demostramos nuestra fe
y desatamos bendiciones.

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