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ISAÍAS: UN CANTO A LA VIÑA

INTRODUCCIÓN
«Al haber perdido la habilidad de pensar bíblicamente, los cristianos posmodernos están
siendo transformados de agentes de cambio cultural e iniciadores a conformistas
culturales e imitadores. La cultura popular hace señales para que entren, y los cristianos
posmodernos han mordido el anzuelo. Como resultado, el modelo bíblico de la fe ha
cedido a un despliegue cada vez más grande de modas pasajeras y fórmulas». – Hank
Hannegraf (Cristianismo en Crisis)

Texto: Isaías 5:1-7


Tema: Isaías en su canto a la viña, es decir, Israel, hace una descripción con respecto a la misma,
señalando tres aspectos fundamentales (1) El dueño de la viña (Dios), (2) lo que el dueño de la
viña hizo por ella y finalmente (3) El juicio de Dios por causa del mal fruto.

Desarrollo
Este canto está dirigido evidentemente a la nación de Israel, como nación, como pueblo de Dios.
La naturaleza del canto, es en sí misma una denuncia de parte de Dios en boca del profeta. Es
importante señalar aquí que la parábola de los labradores malvados de Mateo 21:33-46, esta
inspirada en el canto de Isaías. Hay una probabilidad muy alta de que cuando Jesús narró la
parábola de Mateo 21 tuviera en mente a Isaías 5:1-7. Ahora bien, la pregunta que siempre es
pertinente al momento de tratar un asunto tan vital como este. ¿Cómo aplica este texto a la
situación de la iglesia contemporánea? Indiscutiblemente, como iglesia, somos su pueblo; por lo
menos, así nos lo hace saber el apóstol Pedro en 1 de Pedro 2:9 “Pero ustedes son linaje escogido,
real sacerdocio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios” El apóstol Pablo hace lo propio al
referirse a la iglesia en Efesios 2:19 Por lo tanto, ustedes ya no son extraños ni extranjeros, sino
conciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios. También en 1 Timoteo 3: 14
Aunque espero ir pronto a verte, escribo estas instrucciones para que, si me retaso sepas, como
hay que portarse en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y fundamento de la
verdad.
Por consiguiente las expectativas de Dios con respecto a su pueblo en Isaías y en particular en este
pasaje, son las mismas para su iglesia hoy y en todas las épocas como lo veremos a medida que
desarrollamos la enseñanza en el pasaje de Isaías y de forma paralela con el pasaje de Mateo
21:33 y Juan 15.
A juicio propio el primer aspecto a tratar en este desarrollo es el más importante

1. El Dueño de la viña. Vv. 1


 Este pasaje es claramente una canción, pero no es cualquier tipo de canción. Es una
canción canta da en una fiesta particularmente especial. La fiesta de los tabernáculos. Una
fiesta tradicional del pueblo judío.
 Richard Niel Donovan dice al respecto: El profeta habría cantado esta canción en La Fiesta
de los Tabernáculos – un festival de la cosecha que duraba una semana. Su cantar hubiera
sido algo normal en el ambiente festivo y llamaría la atención de la gente. La canción y la
historia que relata, llamaría aún más la atención de la gente. Más adelante, la canción
involucraría a los oyentes pidiéndoles actuar como jueces (v. 3-4). Entonces, el último
versículo funciona como un gancho con púas para quienes están escuchando, ya que
pronto se dan cuenta de que la canción realmente no se trata de la viña, sino de ellos
mismos – de sus pecados – y del juicio que ha sido proclamado sobre ellos.
 Es importante señalar aquí, que si Isaías entonó esta canción en la fiesta de los
tabernáculos, su interpretación tenía un propósito definido como veremos a continuación.
El propósito de la canción no tenía como fin simple y llanamente exacerbar los sentidos de
la personas, sino, llegar con profundidad y contundencia a su conciencia.
 Esto sin lugar a dudas es una lección para la alabanza contemporánea que en muchos
casos no deja de ser más que música festiva que estimula las emociones pero que no
perfora la conciencia de la iglesia y que de ninguna forma confronta su realidad. Los
himnos de la Biblia en realidad eran muy diferentes en todo sentido a lo que se conoce
como canciones de alabanza el día de hoy.
 En la Nueva Biblia latinoamericana de Hoy se lee este primer versículo: Cantaré ahora a
mi amado, El canto de mi amado acerca de Su viña. Mi bien amado tenía una viña en una
fértil colina[a].
 Claramente el amado hacer referencia a Dios. Mi bien amado denota sin lugar a dudas el
carácter amoroso y lleno de gracia de Dios. No solo en este primer versículo, sino en todo
el contexto del pasaje. ¿Quién era o es el dueño de la viña? Dios, un ser descrito en este
primer versículo y en su contexto con esos dos atributos o perfecciones de su carácter,
que por cierto son comunicables a nosotros.
 Dios es amor, Dios es gracia, son quizás dos de los atributos que más se destacan en el
carácter de Dios en la enseñanza del cristianismo contemporáneo, muchas veces sin
entender a que se refieren en realidad.
 Ahora bien, que significa que Dios es amor. 1 de Juan 4:8 dice que Dios es amor. 8 El que
no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor. (NBLH)
 Grudem lo define de la siguiente forma: El amor de Dios quiere decir que Dios se a
eternamente a otros. Esta definición entiende el amor como darse a uno mismo
desprendidamente para beneficio de otros. Este atributo de Dios muestra que es parte de
su naturaleza darse a sí mismo a fin de dar bendición o bien a otros. Y esto es claramente
cierto en la relación de Dios con la humanidad especialmente con los pecadores. 10 En esto
consiste[a] el amor: no en que nosotros hayamos amado[b] a Dios, sino en que El nos amó a
nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros pecados. 1 de Juan 4:10
(NBLH). Juan también escribe en su evangelio. 16 “Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que dio a Su Hijo unigénito (único), para que todo aquél que cree en El, no se
pierda, sino que tenga vida eterna. Juan 3:16 (NBLH).
 Los seres humanos pensamos en el amor en los términos no de entrega, sino, de
recepción. Al llegar al entendimiento del amor de Dios en estos términos, debe ser claro
para nosotros que estamos llamados a amar de la misma manera.
 Pero también se habla de la gracia y Grudem la define como: Bondad de Dios hacia los
que solo merecen castigo. La gracia como la bondad de Dios mostrada especialmente a los
que no la merecen se ve frecuentemente en los escritos de Pablo. El recalca que la
salvación por gracia es lo opuesto a salvación mediante el esfuerzo humano, porque la
gracia es algo que se otorga gratuitamente: 23 por cuanto todos pecaron[a] y no alcanzan la
gloria de Dios.24 Todos son justificados gratuitamente por Su gracia por medio de la
redención que es en Cristo Jesús. Romanos 3:23-24 (NBLH)
 Conocer al dueño de la viña, es decir, conocer a Dios, es vital para nuestro caminar como
cristianos. Conocer su carácter y voluntad nos va a permitir como iglesia, como cristianos
contemporáneos relacionarnos de forma correcta con El y obedecer su voluntad. El
fracaso del pueblo de Israel obedeció precisamente a ese hecho. Tenían un volumen
inusitado de tradiciones religiosas, pero no conocían a su dueño ni conocían su voluntad.
Un profeta contemporáneo a Isaías denuncia la causa de su fracaso. Oseas 4:6 Mi pueblo
es destruido por falta de conocimiento. Por cuanto tú has rechazado el conocimiento, Yo
también te rechazaré para que no seas Mi sacerdote. Como has olvidado la ley de tu Dios,
Yo también Me olvidaré de tus hijos. (NBLH).
 Conocer a Dios y conocer objetivamente su voluntad, es la voluntad de Él. Un pueblo que
no conoce a su Dios, una iglesia, una familia, un individuo que no conoce a su Dios está
destinado a la destrucción y a fracaso. Esa fue la razón de la caída del pueblo de Israel.
El segundo aspecto importante es:

2. La obra de Dios por su viña. Vv. 2-4


 Sin lugar a dudas la obra de Dios por su pueblo es una obra de gracia. Estos versículos
corresponden objetivamente al carácter del dueño de la viña. La obra de Dios por su viña,
fue evidentemente de amor y gracia. No se dejó nada al azar, de ningún modo fue una
obra descuidada o irresponsable. El dueño de la viña, hizo todo lo necesario para que su
viña produjera lo esperado, para que fuera una viña exitosa.
 Motyer dice al respecto. Los detalles no deben alegorizarse, haciendo que cada acto
represente una fase en el cuidado que tiene el Señor de su pueblo. Más bien, esbozan la
imagen de un trabajo completo, que no deja nada por concluir. La fertilidad de la tierra, su
preparación y la calidad de las viñas (que eran de las mejores), no dejan nada que desear.
Tampoco son imperfectas las expectativas del amigo, porque estaba tan convencido de la
cosecha que construyó una torre de vigía, una residencia solida para alguien con la
intención de quedarse a vivir allí; además, construyo un lagar (no una prensa), un almacén
permanente. Luego nos enteramos que la viña disponía de una doble valla (v.5) ¡Que más
podría tener!
 Dios había hecho todo lo necesario por su viña, por su pueblo, de modo que él esperaba o
“aguardaba con confianza” como lo señala el término hebreo, a que diera buen fruto. De
modo que Dios en boca del profeta pide a los hombres de Judá y a los habitantes de
Jerusalén, es decir, a su propio pueblo que juzguen entre su viña y El.
 Isaías señala en el v. 4 que el amado esperaba buenas uvas, pero dio uvas agrias, o uvas
silvestres. Y la palabra traducida como uvas silvestres, está relacionada con (heder) y
significa literalmente “fruta que hiede” de modo que la viña a pesar de todo produjo
frutas venenosas, un mal fruto.
 Uvas silvestres: “Estamos tratando aquí con algo peor que no dar fruto. El Nuevo
Testamento también habla de una fe que produce fruto, pero el fruto son obras muertas,
las cuales contaminan el aire como un cadáver. El acónito, o parra montes (2 Reyes 4:39),
tener hermosas bayas, pero son amargas, de olor fétido y venenosas en naturaleza. Esta
es una descripción precisa de la obstinada y falsa religión del infiel pueblo del pacto.”
(Bultema)
 Uvas silvestres significa que la viña produjo exactamente lo que tú esperarías que
produjera sí nada se le hubiera hecho. Todo el amor, cuidado, tiempo, trabajo, e inversión
resulto no tener resultado.
 Delitzsch comenta que la diferencia entre una viña domestica y una silvestre solo radica
en el cuidado que se le preste. Esta es exactamente la idea: ¿Qué se puede hacer ahora
por el pueblo de Dios cuando se les ha dedicado una obra de gracia completa y a pesar de
todo siguen como si no supieran que es la gracia?
 Dios realmente espera fruto de su iglesia, de su pueblo. La obra de gracia que Dios ha
realizado por su iglesia amerita sin lugar a dudas que produzca fruto y un fruto que
permanezca. No podemos permanecer impávidos y pasivos como si Dios no hubiese hecho
nada por nosotros. Nuestra respuesta objetiva al evangelio, es una muestra de la obra de
Dios y del fruto en nosotros. Su obra de gracia tiene el propósito de que demos fruto nada
más ni nada menos. 4 ¿No ves que desprecias las riquezas de la bondad de Dios, de su
tolerancia y de su paciencia, al no reconocer que su bondad quiere llevarte al
arrepentimiento? (Romanos 2:4 NVI)
 Es interesante porque Jesús se presenta en Juan 15 como la vida verdadera y sus
discípulos como las ramas. Toda rama que en el no da fruto la corta, pero la que da fruto,
el Padre la poda para que de mas fruto todavía.
 Y sin lugar a dudas lo que Dios espera de nosotros como cristianos es que demos fruto en
virtud de la obra de Cristo. Dios en la obra de redención de Nuestro Señor Jesucristo hizo
todo lo necesario para que su pueblo, la iglesia de fruto. El llamado de Juan 15, es a
permanecer para dar fruto y señala tres cosas en las que como pueblo de Dios debemos
permanecer (1) En Cristo (Cabeza de la Iglesia) (2) En las enseñanzas de Jesús o que sus
palabras permanezcan en nosotros y (3) En su amor, en el mandamiento de “amarnos los
unos a los otros” de la forma en que el nos amó. Si permanecemos en estas tres cosas
fundamentales daremos fruto y por ende gloria a Dios.
Y finalmente el tercer aspecto
3. El juicio de Dios hacia su viña por causa del mal fruto. Vv. 5-7
 Al no encontrar fruto, el juicio de Dios es inminente. En estos dos versículos se destaca
otro atributo o perfección de Dios que es absolutamente notable. Su justicia. Este es un
pasaje que hace evidente que las perfecciones del carácter de Dios, se presentan en el de
forma eterna, al mismo tiempo. Dios no es más amor que justicia, ni ms justicia que gracia.
No podemos hablar más de un atributo que de otro.
 Con respecto a la justicia, Grudem señala que La rectitud de Dios es el concepto de que el
Señor siempre actúa de acuerdo a lo que es correcto y es en sí mismo la norma suprema de
lo que es recto. Y con relación a esta perfección de su carácter Moisés enfatiza: Él es la
Roca, sus obras son perfectas, y todos sus caminos son justos. Dios es fiel; no practica la
injusticia. Él es recto y justo. Deut. 32: 4 (NVI)
 En virtud de su rectitud, Dios tiene que tratar a las personas de acuerdo a lo que se
merecen. Es necesario que Dios castigue el pecado, porque el pecado no merece premio,
es malo y merece castigo. (Grudem)
 De modo que lo que sucede a continuación es el castigo de Dios a su pueblo en razón de
su infidelidad. Y la razón de todo esto está claramente definida y establecida en el v. 7. Sin
dejar de decir lo que significa para él su pueblo, también es enfático en señalar lo que
esperaba de su pueblo. Esperaba justicia, pero encontró ríos de sangre; esperaba rectitud
pero encontró gritos de angustia.
 Dios esperaba de su pueblo integridad y justicia, pero encontró asesinato y violencia.
(Biblia de estudio NVI).
 Donovan dice al respecto: El juicio que Yahvé pronuncia aquí no se vería por completo
hasta un siglo después. Isaías escribió esto en el siglo ocho a.C., y la destrucción de la
ciudad de Jerusalén y el exilio de sus habitantes no tomaría lugar hasta el siglo sexto – 587
a.C. (Brueggemann, 51). La demora le daba a Judá y a Jerusalén oportunidad de
arrepentirse – de renunciar la alabanza de ídolos – de buscar justicia – de ayudar a viudas
y huérfanos – y de observar sus ritos con sustancia espiritual. La canción no les pide hacer
estas cosas pero sí pronuncia sentencia. Es difícil imaginar, no obstante, que Yahvé no
hubiera suavizado su postura si la gente hubiera expresado remordimiento.
 Para el caso de la iglesia las palabras del apóstol Pedro son pertinentes en 2 de Pedro
3:10-15. 10 Pero el día del Señor vendrá como un ladrón. En aquel día los cielos
desaparecerán con un estruendo espantoso, los elementos serán destruidos por el fuego,
y la tierra, con todo lo que hay en ella, será quemada.[a] 11 Ya que todo será destruido de
esa manera, ¿no deberían vivir ustedes como Dios manda, siguiendo una conducta
intachable 12 y esperando ansiosamente[b] la venida del día de Dios? Ese día los cielos serán
destruidos por el fuego, y los elementos se derretirán con el calor de las llamas. 13 Pero,
según su promesa, esperamos un cielo nuevo y una tierra nueva, en los que habite la
justicia. 14 Por eso, queridos hermanos, mientras esperan estos acontecimientos,
esfuércense para que Dios los halle sin mancha y sin defecto, y en paz con él. 15 Tengan
presente que la paciencia de nuestro Señor significa salvación, tal como les escribió
también nuestro querido hermano Pablo, con la sabiduría que Dios le dio.
 Estos son los frutos que Dios espera de su iglesia, de los que nos decimos llamar cristianos.
La demora del día del Señor solo revela su amor, gracia y paciencia porque él no quiere
que nadie perezca sino que todos se arrepientan, Su paciencia también significa salvación.
Pero no cabe duda que en el día del Señor se hará evidente su justicia. Nuevamente las
palabras de Romanos 2:4 son pertinentes.

CONCLUSIÓN
El canto a la viña nos debe hacer pensar profundamente en el carácter de Dios
fundamentalmente, pero también en su obra de gracia eterna hacia su pueblo. Dios espera
fruto de su pueblo y en su paciencia nos da la oportunidad de acceder al arrepentimiento,
mientras aguardamos el día de su venida. Por lo tanto, vivamos de tal modo que honremos,
su amor, gracia, paciencia y justicia.

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