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Los primeros pobladores

Los contactos de los primeros


pobladores se dieron en un marco
en el que la geografía y la cultura
estaban relacionadas íntimamente.
El continente Americano fue
recorrido poco a poco a través de
miles de años, por grupos de
individuos que arribaron hasta el sur
del continente. Si bien no se ha
establecido una fecha sobre la cual
estén de acuerdo los científicos
respecto del arribo de los primeros pobladores a América, se puede indicar que estos ya
efectuaban actividades de caza y recolección hacia 5,000 a. C. Todo el continente
americano se pobló, pero no en todos sus rincones se dio un desarrollo cultural. Para esto
fueron esenciales dos elementos: la domesticación de los granos y un medio óptimo en
que las tierras y el clima favorecieran a los hombres. En América, los pueblos que reunieron
estas características erigieron civilizaciones y conformaron una unidad geográfica y
cultural conocida como América nuclear, zona que a su vez se divide en tres regiones:

1.- La zona circuncaribe, que comprendía las culturas de las Antillas –litoral continental
que bordea al mar Caribe-, parte de lo que hoy es Nicaragua y las costas colombianas.

2.- La zona andina, conformada por las culturas de los actuales Perú, Ecuador, Bolivia,
Colombia y Venezuela.

3.- Mesoamérica.
Mesoamérica, Áridoamérica y Oasisamérica, son conceptos utilizados por los
investigadores para definir regiones de América cuyos pueblos comparten características
geográficas y culturales; sus límites son flexibles, dependiendo de la época o el periodo
histórico; además de que diluyen, pues unas áreas influyen sobre las otras. Al norte (Árido
América) y sur de la América nuclear hubo culturas marginales, que aunque
concentraban diversos pueblos, no tuvieron un desarrollo tan importante.

Árido América también es identificada por otros autores como la gran Chichimeca y el
Norte de México en donde la producción cultural de los pueblos que la habitaron fue
escasa en comparación con Mesoamérica. Los pobladores de Árido América ocuparon
un territorio menos variado y exuberante.

La falta de lluvia y de grandes corrientes fluviales no propiciaba la agricultura, salvo la


de temporal o de subsistencia. Dedicaban una parte de su tiempo a estas formas de
agricultura menor, pero su mayor actividad era la cacería y la recolección de plantas y de
frutos silvestres. No desarrollaron grandes centros de población, como en el caso de
Mesoamérica, ya que conseguían su sustento tras largas travesías, al hacer pocos
intercambios con otras tribus, se veían obligados a mudarse constantemente en busca de
mejores alimentos y vivienda.

Oasisamérica es un término derivado de la conjunción de oasis y América. Se trata de


un territorio agreste, marcado por la presencia de montañas rocosas y la sierra madre
Occidental. Al oriente y al poniente de estas enormes cordilleras se extienden las grandes
planicies áridas de los desiertos de Sonora, Chihuahua y Arizona. Oasisamérica cubría una
parte la superficie de los actuales estados mexicanos de Chihuahua y Sonora, así como de
Arizona, UTAH, Nuevo México, Colorado, Nevada y California en los Estados Unidos. Esta
región es rica en yacimientos de turquesa, uno de los materiales suntuarios más apreciados
por las altas culturas de Mesoamérica. Esto permitió el establecimiento de relaciones de
intercambio entre estas dos grandes áreas culturales.

Las culturas que propiamente definen a Oasisamérica, la Anasazi, la Mogollon, la


Hohokam y la Paquime, iniciaron su desarrollo a finales del arcaico, hace unos dos mil
años, a partir de las culturas del desierto.

Los Oasisaméricanos fueron agricultores, aunque las condiciones climatológicas no les


permitían una agricultura muy eficiente y por ello tenían que recurrir a la caza y a la
recolección para complementar su subsistencia.

Mesoamérica limitaba al norte con los estados


actuales de San Luis Potosí, Zacatecas, Durango,
Coahuila, Nuevo León y Sonora, además de que
penetraba al sur de Texas, Arizona y Colorado. Paul
Kirchhoff fue el primero en utilizar el concepto de
Mesoamérica en 1943, para designar un vasto espacio
geográfico-cultural. En este territorio de desarrollo un
modelo de civilización que integro una serie de
elementos comunes entre las diversas regiones
culturales de México: Occidente, Norte, Golfo,
Altiplano Central, Oaxaca y el Mayan, esta última región abarco hasta la actual
Centroamérica. Alrededor del 2,500 a. C., el proceso de sedentarización se acelera en el
área mesoamericana, inician intercambios comerciales y la organización social transita de
un sistema igualitario a uno de estratificación, según aptitudes.

En esta área se desenvolvieron culturas con una estructura económica, política y social
organizada; En estas regiones aparecieron culturas que compartían elementos materiales
y espirituales. Ejemplo son la práctica de la agricultura como base de la subsistencia; el
uso de la coat, el maíz como principal cultivo, complementado con frijol, chile y calabaza.

La construcción de pirámides escalonadas, la talla de piedra para escritura o


simbología; los inicios de la escritura; dos calendarios para medir tiempo: Uno ritual o
religioso de 260 días y otro civil o solar de 365. Celebraciones religiosas con sacrificios
humanos.

Los estudiosos del México prehispánico han clasificado a las culturas mesoamericanas,
conforme a su antigüedad en tres periodos u horizontes culturales: El Preclásico, El Clásico
y El Posclásico.

Horizonte Preclásico:

Las grandes civilizaciones


mesoamericanas tuvieron su
auge en el horizonte Preclásico
que abarca aproximadamente
desde el 1500 a.C. cuando
comenzaron a desarrollarse las
primeras aldeas agrícolas,
hasta el año 200 d.C., Durante
este periodo la vida en
Mesoamérica se hace
dependiente al cultivo de
plantas domesticadas cada
vez en mayor numero, la
recolección y la caza son
complemento importante; El cambio en el género de vida permite considerables
aumentos en la población, acompañados de cambios en la organización social que se ve
reflejados en los restos arqueológicos. En este periodo fue un fenómeno común en toda el
área mesoamericana la unión de grupos de aldeas bajo el control de una de ellas
convertida en centro ceremonial. La organización política, los conceptos religiosos y las
relaciones de unas regiones con otras se modifican con relación al pasado. El rasgo más
característico este periodo es la formación de unidades político-territoriales más amplias, la
aldea donde reside este hombre poderoso crece más que otras y se convierte en centro
ceremonial o capital. Periodo en el cual se consolido una de las grandes civilizaciones de
Mesoamérica: La Olmeca.
Horizonte Clásico:

Esta gran época va desde el principio de nuestra era hasta el año 900 d.C. y marca el
florecimiento máximo de
Mesoamérica. Se trata de una
etapa de expansión y
florecimiento de varias culturas,
bien diferenciadas entre sí, que
intercambiaron ideas,
comerciaron y fueron foco de
reunión de gente con distinto
origen. En el clásico algunos
lugares tomaron características
urbanas y surgió una clara
estratificación social entre la
minoría en el poder y el resto de
la población; la ciudad se convirtió en la gran concentradora y distribuidora de la riqueza,
mientras que el campo proveía al sustento alimenticio. Las grandes capitales se vincularon
entre sí a través de una red de circulación comercial que fue dirigida por los
teotihuacanos, el comercio a larga distancia fue el factor más importante que logro
brindar unidad a Mesoamérica durante el clásico. Todas las ciudades mesoamericanas del
Clásico se construyeron siguiendo un modelo cósmico, en estrecha relación con los
movimientos de los astros en el horizonte; durante el Clásico es importante el desarrollo de
la religión, que mantuvo algunas de sus características hasta la conquista. Las divinidades
que alcanzaron mayor importancia son las relacionadas con la lluvia, el fuego, la tierra y el
tiempo. En este periodo la casta sacerdotal tenían el control del conocimiento
astronómico, de la voluntad de los dioses, las matemáticas, la historia y el arte. El pueblo
más poderoso del clásico fue Teotihuacán, siguiéndole en importancia el Maya. El mayor
cambio que marco el periodo clásico fue la importancia que adquirieron las ciudades
frente al campo.
Horizonte Posclásico:

El periodo posclásico comprende desde el


año 900 d.C. hasta la caída de Tenochtitlán en
manos de los españoles en 1521 d.C. este
periodo se caracteriza por la invasión de grupos
semi nómadas que provenían del norte, de la
vasta extensión de Árido América, tal vez
atraídos por la riqueza de las ciudades
mesoamericanas.

La desaparición de las culturas del horizonte clásico no significo el fin de las


civilizaciones mesoamericanas, si no un cambio en el proceso de su evolución hacia una
nueva etapa, conocida como Posclásico. Una de las principales características de este
periodo fue la incursión de grupos culturalmente menos desarrollados en los lugares desde
los que se había ejercido el pode hegemónico. El reacomodo de los pueblos, las
constantes migraciones y el cambio de dominio en las distintas regiones fueron factores
que, con el tiempo, poco a poco se conjuntaron para dar nacimiento y consolidar los
nuevos señoríos, que en algunos casos constituyeron auténticos imperios.

Una característica distintiva del horizonte Posclásico fue la introducción de la


metalurgia, que estuvo limitada al trabajo en oro, plata y, a veces, cobre. Con estos
materiales se elaboraron objetos suntuarios dedicados al culto religioso o al adorno de los
nobles. El comercio era una actividad fundamental que, además de permitir el
intercambio de productos y materias primas, facilitaba el contacto cultural. En algunos
aspectos la organización política, social y económica adopto formas más complejas que
en las etapas anteriores, mientras continuaba la creación de sobresalientes centros
urbanos. En esa época florecieron grupos como los
Toltecas y los Mexicas.

Los Olmecas

Entre los años 800 y 200 a.C. surgió la cultura Olmeca o


cultura madre mesoamericana en la costa del golfo de
México, que fue la más importante de la época
influenciando a otros grupos ya asentados en
Mesoamérica. Los principales centros olmecas en La venta, Tres Zapotes, El Trapiche, San
Lorenzo y los Tuxtlas, dan testimonio de la grandeza que alcanzo esta civilización.

Esta civilización fue la primera en desarrollar un sistema de escritura jeroglífica para su


lenguaje. Los olmecas son también los iniciadores del juego de pelota, actividad popular
también entre otras culturas de la región con fines recreativos y ceremoniales. La
posibilidad de considerar al mundo olmeca como el inicio de la civilización se deriva
principalmente de su extraordinaria escultura. Cabezas colosales, altares, estelas y otras
numerosas piezas que no solo expresan una gran calidad estética, sino también un
adelanto técnico sorprendente; no se puede negar que al contemplar estas figuras y
cabezas se tiene la impresión de encontrarse frente a una raza no representada en
ninguna otra parte de Mesoamérica.

En la religión el culto principal era el del jaguar;


hasta los altares mismos son jaguares. En la
escultura en piedra lo más frecuente es el jaguar
humanizado, un hombre-jaguar o niño-jaguar; se
adoraban dioses antropomorfos.

La sociedad de los Olmecas es una sociedad


patriarcal, es decir, el hombre es quien se
preocupa de todos los problemas que pudieran estar afectando a la civilización, y el
hombre es quien controla y maneja a la familia.

Su organización política era teocrática, es decir, todo


giraba en torno a algún Dios.

Su comercio se basaba en el intercambio de mercancías


con los diferentes grupos mesoamericanos. Cultivaban el
maíz, el frijol, la calabaza, también fueron cazadores y que se
dedicaban a la pesca como también a la captura de
mariscos.
Los Zapotecas

Desde épocas muy remotas, hacia el año 800 a.C., durante el horizonte preclásico, los
zapotecos se establecieron en
los valles centrales del actual
estado de Oaxaca. Así, mientras
Teotihuacán florecía en el
centro de México y las ciudades
Mayas en el sureste, Monte
Albán, centro ceremonial
construido en lo alto de un
cerro, era la ciudad más
importante de la región Oaxaqueña.

Los Zapotecas desarrollaron una agricultura muy variada que a principios del periodo
clásico daba sustento a numerosas aldeas. Para tener buenas cosechas rendían culto al
sol, la lluvia, la tierra y el maíz.

Los Zapotecos alcanzaron un elevado nivel cultural y


fueron, junto con los Mayas, el único pueblo de la época
que desarrollo un sistema completo de escritura. Por medio
de glifos y otros símbolos grabados en piedra o pintados en
los edificios y tumbas, combinan la representación de ideas
y sonidos. Viven actualmente en el estado de Oaxaca, aun
cuando hay pequeños grupos en Veracruz, Guerrero y
Chiapas.

En cuanto al aspecto religioso decir que el pueblo Zapoteca como la mayor parte de
las civilizaciones antiguas era politeísta.

La sociedad zapoteca estaba dividida en estamentos: existía la clase gobernante, de


régimen teocrático, y el pueblo, conformado por comerciantes, artesanos y campesinos.
Monte Alban dominó los valles hasta finales del periodo Clásico y, al igual que otras
ciudades mesoamericanas, entre los años 700 y 800 a.C. termino su esplendor; pese a ello,
la cultura Zapoteca continuo en los valles de Oaxaca.
Los Teotihuacanos

En el noreste del valle de México,


algunos grupos se instalaron en el valle
de Teotihuacán para formar algunas
aldeas agrícolas, aprovechando los
manantiales y las tierras fértiles del
lugar, la cultura Teotihuacana es una
civilización precolombina de
Mesoamérica que se desarrollo entre
los siglos I a.C. hasta el siglo VIII d.C.
aproximadamente. El termino Teotihuacán significa “lugar donde los dioses han nacido”
en idioma náhuatl, esto refleja la creencia Azteca de que los dioses crearon todo universo
en este sitio.

La ciudad de Teotihuacán fue uno de los centros religiosos más importantes de


Mesoamérica, El área de las ruinas abarca 20 km y en ella se han encontrado templos,
palacios y grandes plazas.

Una avenida central de 40 m de ancho y


2.5 km de largo recorre la ciudad en sentido
norte-sur. Esta avenida se llama Calzada de
los muertos porque se pensaba, de forma
errónea, que estaba rodeada por tumbas. En
el extremo norte de la calzada de los muertos
esta la pirámide de la luna; al fondo del patio
central de la ciudadela se encuentra el
templo de Quetzalcóatl, es una pirámide
escalonada, con relieves que representan
serpientes y al Dios de la lluvia Tláloc. El edificio más grande de Teotihuacán es, sin lugar a
dudas, la pirámide del sol. Mide 225 metros por cada lado y tiene una altura de 65 metros,
equivalente a un edificio de más de 25 pisos; es una de las obras de arquitectura
prehispánicas más grande de toda Mesoamérica. La fuerza de la organización
Teotihuacana era la religión. Alrededor del centro ceremonial vivía la gente, la gente del
pueblo se dedicaba, fundamentalmente a la agricultura; cultivaba maíz, frijol, chile y
calabaza. Los Teotihuacanos practicaron los sacrificios humanos y animales, según los
hallazgos arqueológicos encontrados en las pirámides de Teotihuacán.

La religión era similar a los de otras culturas precolombinas, fue politeísta, lo que
significaba la existencia de varios dioses. La política al igual que la religión era regida por
los líderes religiosos, es decir, que tuvieron un gobierno teocrático. Aunque los arqueólogos
pueden documentar el abandono real de la ciudad de Teotihuacán, hay pocas
evidencias que permitan saber el motivo de su abandono en el siglo VIII d.C.

Los Mayas

La civilización Maya se estableció durante el periodo pre-clásico (2000 a.C. a 250 d.C.),
de acuerdo con la cronología de
Mesoamérica, muchas ciudades
Mayas alcanzaron su mayor
desarrollo durante el periodo
clásico (250 d.C. a 900 d.C.) y
continuaron hasta la llegada de los
españoles. Los mayas durante su
apogeo fue una de las ciudades más densamente pobladas y culturalmente dinámicas
del mundo. Al igual que los demás pueblos Mesoamericanos, el pueblo Maya era
agricultor; su principal cultivo fue el maíz, el cual era tan importante que estaba
relacionado con sus creencias religiosas, pues pensaban
que los dioses habían hecho a los hombre con masa.

La gente vivía en chozas hechas con troncos de árbol,


palma y barro.

Los artesanos y agricultores pagaban tributo a sus


gobernantes y desempeñaban tareas productivas. La
sociedad estaba dividida en grupos sociales, la pintura
mural sobre todo en Bonampak, revela sus costumbres, que
consistía en erigir estelas. La mayor parte del comercio se
realizo por medio del trueque.
La religión era panteísta, ya que adoraban a la naturaleza y los fenómenos
atmosféricos, y politeísta ya que adoraban a varios dioses. Cada ciudad-estado fue
gobernado por un jefe Maya, que conto con la asistencia de una junta que incluía a los
principales jefes y sacerdotes. Sus conocimientos astronómicos y matemáticos les
permitieron hacer cálculos sobre los ciclos de Venus, e incluso predecir los eclipses. Entre
sus aportaciones existen multitud de textos, en relieves de los templos y en escaleras
jeroglíficas.

Los Mixtecos

La cultura Mixteca fue un pueblo de


Mesoamérica que habitaron los estados de
Oaxaca, Guerrero y Puebla; la zona se
divide en dos regiones, conocidas con los
nombres de Mixteca alta y baja.
Constituyen la primera las serranías, y la
segunda las llanuras contiguas a la costa.
La civilización Mixteca floreció en el sur de
México entre los siglos (XV-II a.C.) Y llego a
su fin a inicios del siglo XVI d.C. cuando los
españoles llegaron a América. Los Mixtecos,
en sus memorias históricas, referían su linaje y descendencia por medio de pinturas y
caracteres jeroglíficos, en corteza de arboles y pieles curtidas, se asegura que en esas
escrituras consignaban las creación del mundo, el diluvio, la
genealogía y la biografía de sus mayores y patriarcas.

Los Mixtecos fueron los artesanos más famosos del México


pre-colombino, sus trabajos en piedra y en diferentes metales
nunca fueron superados en la región; esta maestría creativa se
encuentra plasmada en obras de todo tipo y realizadas con
diferentes materiales: figuras y herramientas de obsidiana y
cristal de roca, cerámica policroma, decorada con un sinfín
de motivos geométricos, simbólicos y religiosos; grabados en
hueso y madera con representaciones de escenas semejantes
a las de los códices, adornos en jade, concha y turquesa.

Los Mixtecos establecieron su propio centro religioso; la tumba mixteca más rica, por sus
obras de arte lapidario y por los objetos de oro, concha, coral, etc., es una antigua tumba
zapoteca conocida como tumba 7 de Monte Albán, donde se enterró a un señor o
personaje mixteca, que probablemente habitaba en la ciudad, misma que en Posclásico
siguió teniendo su carácter sagrado aun para los
propios Mixtecas.

Mitla, que había sido un centro ceremonial


Zapoteco, se convirtió en la ciudad mixteca más
importante. Los Mixtecos se organizaron
políticamente en reinos independientes
gobernados por una elite hereditaria. El rey
Mixteca era el gobernador supremo y jefe del
ejército Mixteca. Esta sociedad era estratificada y jerarquizada, en la cima de la pirámide
social se encontraba el gobernador, luego seguían los comerciantes, artesanos,
campesinos siervos y esclavos.

Los Totonacos

La cultura Totonaca inicia en el año 400


d.C. y termina en el año 1519 d.C. en la
actualidad sus descendientes residen en los
estado mexicanos de Veracruz, Puebla e
Hidalgo. Su época de apogeo tuvo lugar
durante el periodo clásico tardío, etapa en
la cual se construyó el centro ceremonial
del
Tajín
, el
cual significa “trueno o rayo”. El Tajín tenía una
extensión de 1.221 hectáreas y estaba emplazada
en una zona lluviosa y selvática.

La cultura Totonaca recibió gran influencia de los


Teotihuacanos, sobre todo en lo que a religión se refiere. Otro de los centros arqueológicos
importantes de la región fue Zempoala que significa en Náhuatl “veinte, o lugar de
veinte”, la teoría que más adeptos tiene para explicar el significado de este nombre es
que en el lugar se desarrollaban actividades comerciales cada veinte días.

La cultura Totonaca sobresale por su cerámica


variada, escultura en piedra, arquitectura colosal y
por su avanzada percepción urbanística; dentro del
apartado cultura, los Totonacas se destacaron
especialmente en la escultura. Esta puede
apreciarse en los frisos de la pirámide, en columnas
de templo y en los relieves que decoran el lugar
donde se practicaba el juego de pelota. Una
artesanía muy característica de estos es la conocida
como “caritas sonrientes”, los yugos y las palmas.

La religión de este pueblo, como la del resto de Mesoamérica, estaba formada por un
gran número de deidades relacionadas con los elementos que les eran propicios en la
vida.

En la política era un gobierno teocrático, sociedades, pueblos que viven para sus
dioses. Los Totonacos tenían una sociedad dividida en clases, se encontraban los
caciques, los nobles, señores y sacerdotes.

Cultivaban el maíz, la calabaza, el chile, jitomate, etc. Con la ayuda de implementos y


piedra. Durante la época de la conquista española los Totonacos se aliaron a las fuerzas
de Hernán Cortes para luchar contra los mexicas y así liberarse de su yugo.

Los Toltecas

Los Toltecas (el nombre viene del lengua náhuatl


y significa “maestros constructores”) fueron un
pueblo que vivió entre 900 d.C. y 1200 d.C.,
descendientes de los Teotihuacanos se asentaron en
el actual estado de Hidalgo donde establecieron
una gran ciudad llamada Tullan, hoy llamada Tula.
Ellos influyeron en el arte y la arquitectura en toda Mesoamérica, tuvieron un enlace
especial con la cultura Azteca que son considerados sucesores de los toltecas.

Construyeron vastos monumentos; levantaron enormes túmulos para guardar los restos
de sus héroes e imponentes pirámides para sustentar los templos de sus dioses. Amantes de
lo grandioso, esculpieron para algunos de sus templos estatuas gigantescas.

Su religión fue panteísta ya que adoraban a las fuerzas de la naturaleza a saber, cielo,
agua y la tierra; Tenían un sistema de creencias dualista.

En Tula la función política estaba ligada a la


religión y el centro urbano era sede del gobierno
y de la religión; rendían un exagerado culto a
sus dioses. Eran no solo inteligentes, sino también
se sujetaban a principios morales. Tenían
establecida la monogamia; castigaban
duramente el adulterio; no eran nada flexibles
para los demás delitos.

Los Toltecas extendieron su influencia mediante la guerra y el comercio, tomaron de


otras culturas formas distintas de trabajar la tierra y de construir casas, obtuvieron riquezas y
dominaron territorios. Al igual que en Teotihuacán se trabajaba la obsidiana y la cerámica.
Hacia el año 1200 d.C. su fuerza fue destruida por nuevos grupos de invasores.

Los Huastecos

Los Huastecos como cultura


claramente definida, comenzaron a
tener importancia después de los años
750 a 800 d.C. y adquirieron especial
relevancia en el periodo posclásico
Mesoamericano. En términos
geográficos actuales, los antiguos
Huastecos ocuparon el norte de
Veracruz, el oriente de Hidalgo, noreste
de Puebla, sureste de San Luis Potosí, y una pequeña porción de Tamaulipas.
Se sabe que la lengua Huasteca pertenece al tronco Maya, pero quedo separado de
él en época remota.

La religión Huasteca fue politeísta, con culto especial a las


fuerzas de la naturaleza, pero en el Posclásico recibió fuertes
influencias Toltecas y Mexicas. Por lo general, los dioses
Huastecos llevaban un gorro cónico, y así la adoración de
Quetzalcóatl como dios del viento es precisamente Huasteca;
otra deidad Huasteca importante fue Tlazolteotl (Ixcuina),
diosa de la siembra del algodón, típico producto Huasteco,
que fue adaptado al náhuatl por los Toltecas con el nombre
de Cuiname.

Entre las manifestaciones artísticas destaca, por lo demás,


la cerámica de color crema con decoración en guinda y negro; a veces representa
figuras antropomorfas, las figuritas de arcilla; tal vez el trabajo artesanal en que mas
destacaron los Huastecos fue el de la concha, ya que transformaron y crearon
magistralmente todo tipo de adornos y objetos suntuarios con este material. La alfarería
tiene la característica de ser muy creativa, tanto ollas como vasijas tienden a adoptar
formas humanas o de animales.

La agricultura, principalmente el cultivo del maíz, fue la base de la economía


fundamental de los Huastecos. El sistema de gobierno respondía al esquema del
cacicazgo, y los distintos grupos integrantes vivían relativamente aislados en las sierras en
que se habían asentado. Fueron un pueblo belicoso, como demuestran la tenaz
resistencia que opusieron a Hernán Cortes en las proximidades del rio Panuco. Coincidían
con otros pueblos amerindios (en particular, los indios de las praderas de América del
norte) en la costumbre de guardar el cuero cabelludo de sus enemigos como trofeo de
guerra.
Los Purépechas

Los Tarascos o Purépechas deriva de una mezcla de grupos chichimecas, nahuas y pre
tarascos que habitaron las riberas e islas del lago de Patzcuaro. Situada cronológicamente
en el horizonte Posclásico (900 d.C.).

Los Purépechas establecieron su señorío en


Tzintzuntzan, Ihuatzio y Patzcuaro. En cuanto a su
cultura material este pueblo destaco por el empleo
de instrumentos agrícolas de cobre.

Su religión estaba dividida en tres grandes dioses:


dioses mayores, dioses mediadores y los dioses
menores, este pueblo concebía que su origen era
divino, los Purépechas introdujeron el culto solar, y
ellos, junto con los Toltecas-Chichimecas, lo extendieron al resto de occidente, centrando
su adoración en el sol, el universo estaba dividido en tres planos: el cielo, la tierra y el
mundo subterráneo.

Para los Purépechas, el Poniente tenia gran importancia por ser el origen del hombre.

La sociedad Purépecha era fuertemente centralizada y jerarquizada: en la cúspide se


encontraba el máximo gobernante. Seguía el sacerdote mayor a cargo del culto y juez
principal en asuntos religiosos. Más abajo existía una nobleza menor que comprendía a los
acompañantes y sirvientes del máximo gobernante, después venia la gente común y los
esclavos.

Tuvieron una economía mixta


basada en la agricultura, caza, pesca,
y recolección. Los tributos y el comercio
suplieron la deficiencia de materias
primas. Cultivaron el maíz, frijol, chile,
tabaco, algodón, calabaza y otras
especies. También fueron buenos
pescadores, empleaban canoas, redes,
anzuelos de cobre, por medio de los
cuales obtenían charales, truchas y pescado blanco.

El arte Purépecha, visto como conjunto, es alegre y lleno de exuberante alegría de vivir.
Aprendieron a configurar el cuerpo en todas las dimensiones, se esfuerzan en representar
al hombre y el animal en toda su movilidad, por captar las torsiones, vueltas,
intersecciones, por crear dinamismo. Para el arte Purépecha la vida es interesante, no
enigmática.

Los aztecas

La cultura Azteca (llamados


también los Mexicas), floreció en los
siglos XIV y XVI d.C., en el territorio
correspondiente del actual país de
México. Los aztecas se desarrollaron en
la región cultural de Mesoamérica
desde los años 1325 d.C. Hasta el año
1521 d.C., fecha de la conquista de
México por parte del conquistador
español Hernán Cortes, quienes derrotaron a los Aztecas y destruyeron su civilización.
Edificaron la ciudad de Tenochtitlán la cual recibió este nombre por ser Tenoch el caudillo
de los fundadores. Tenochtitlán alcanzo día a día una vida más floreciente.

Se organizaron en diferentes clases sociales, tales


como nobles, sacerdotes, guerreros, comerciantes,
agricultores y esclavos.

La religión que demandaba sacrificios humanos


en gran escala, particularmente al dios de la guerra
Huitzilopochtli; para los Aztecas, los dioses eran los
compañeros permanentes del hombre. Los
sacerdotes pertenecían a las clases superiores,
estudiaban en sus propias escuelas, llamadas
Calmecac. Allí aprendían escritura y astrología,
practicaban la penitencia e interpretaban cantos
rituales. Los templos estaban bien dotados y tenían bajo su jurisdicción asilos y hospitales.
De manera general, la creencia más difundida es la de la pareja “sol-tierra”, en la que el
sol dio calor a la tierra y la fecundo. La tecnología avanzada, como la utilización de
chinampas (islas artificiales construidas en los lagos para la agricultura) y la vasta red de
comercio y sistema de administración tributaria. El
cero como concepto matemático apareció mil
años antes en América central que en Europa
Occidental, y también antes que en Egipto o en la
India.

El desarrollo de técnicas agrícolas les permitió en


un primer momento obtener productos básicos, pero
los tributos provenientes de pueblos sometidos eran
los que sustentaban a la clase dirigente, sacerdotal
y militar y permitir el desarrollo urbano de la
metrópoli; los territorios sometidos enviaban a Tenochtitlán maíz, frijol, chile, tabaco, cacao
y otros alimentos. También mantas, pieles, plumas, trajes de guerreros, armas y joyas de
oro, jade, papel y turquesa.

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