Plan de texto

Idea Principal: Las culturas, de cualquier índole, sirven para la transformación socioeconómica de las
distintas sociedades.

Tesis: Las distintas culturas son el motor principal de la trasformación de las sociedades; ya que estas
a través de la guía de una persona (preparada o no), la disposición de la persona y la interacción de
personas de distintos pasados, condiciones sociales y visiones diferentes del mundo son las fuentes
primordiales del cambio socioeconómico.

ESTRUCTURA:

1) Introducción

a. Origen de la intención

i. Mi origen artístico

ii. Mi ciudad de origen

b. Objetivos

c. Metodología

i. Primer vistazo a Bordieu

d. Descripción escrita de la estructura del texto

2) Contextualización

a. Condiciones de seguridad en Palmira

b. Casa de la cultura Ricardo Nieto

i. Semilleros

ii. Agrupación folclórica “Apolinar Altamirano”

c. Introducción de testimonios

3) Primera Sección: La importancia de las expresiones culturales como herramienta de

trasformación social

a. Caso 1: Sistema nacional de orquestas de Venezuela

i. Hallazgos y “éxito” del sistema

ii. Inconvenientes e irregularidades del sistema

 b. Contraste con otro método de transformación con otra clase de cultura

i. Caso Coach Cárter

4) Segunda Sección: El caso de la agrupación folclórica Apolinar Altamirano

a. Origen y razón de existencia

b. Evolución del grupo y sus primeros grandes logros

c. Influencia de la danza sobre los integrantes y ex—integrantes de la agrupación

5) Tercera Sección: La influencia de las artes en las personas

a. Retoma casos: “El sistema”

b. Relación del arte con la transformación de las personas

c. Importancia de la mezcla de “clases de personas”

i. Importancia de la interacción de distintas clases de individuos

ii. Resultados colectivos e individuales

6) Conclusión
Explorando a “Apolinar Altamirano”: Una pequeña muestra de
impacto socioeconómico en Palmira a partir de los capitales de
bourdieu
Juan Sebastián Candelo Andrade - Universidad de los Andes

Introducción

El principal objetivo de este escrito es mostrar el impacto social que puede llegar a generar la
adopción de una cultura (artística o no) y la forma en que las prácticas coreográficas y
musicales se han conectado con la evolución de procesos personales. Específicamente, de
algunos individuos a través de la formación de los cursos de extensión1 de la escuela municipal
de arte “Casa de la cultura Ricardo Nieto” (Sitio al cual llamaré de ahora en adelante CC) en
Palmira-Valle.2 Para esto, me enfoco en un primer momento en el proceso realizado por la
agrupación folclórica “Apolinar Altamirano” en la CC a lo largo de su existencia, en conjunto
con los testimonios de algunos miembros de la agrupación y las experiencias del autor de este
texto. En este texto adopto un modo de análisis que Clifford Geertz e Ian Middleton describe
como “la manera en la que oscila el lente de un telescopio, para observar en constante relación
lo micro y lo macro”, con el fin de mostrar el contexto del municipio en contraste con el entorno
en el que han vivido las distintas personas que pertenecen a este proceso. (Geertz citado por
Middleton (Sin publicar))

La idea principal del texto será desarrollada a través de tres puntos que serán tratados a lo largo
del texto. En primer lugar, es necesario entender la situación que ha vivido el municipio de
Palmira respecto a la violencia, para luego abarcar los logros alcanzados por programas
basados en la formación cultural. Una vez tocados esos dos puntos, empezaré a describir el
proceso de formación artística realizado por la agrupación a lo largo de su historia, así como
las percepciones que algunos de sus involucrados tienen sobre la evolución de su proceso de
formación dentro de este. Finalmente, compararé estos procesos con algunos de los procesos
tocados en los programas basados en la formación cultural, para analizar la relación de la
cultura con la transformación de las personas.

Es necesario aclarar que mi objetivo no es afirmar que el hecho de tener una pequeña formación
cultural pueda erradicar la situación social de violencia que está viviendo Palmira, ya que la
propia historia de la ciudad se ha encargado de demostrar que esta afirmación es falsa. Sin
embargo, espero demostrar dos cosas: La formación cultural es una salida realmente viable
para intentar erradicar hábitos nocivos y la interacción de diferentes clases de personas es un
factor realmente importante en la transformación socioeconómica de cualquier clase de
individuo. Siendo esta una de las razones, en parte, el por qué los programas de formación que

1
Forma en la que la CC denomina a los cursos de bajo nivel de exigencia.
2
El trabajo de campo que da como resultado esta investigación fue realizado entre el 2016 y el 2019.
Agradezco enormemente a la iniciativa “Créditos por investigación y creación” el cual apoyó el financiamiento
del trabajo de campo llevado a cabo en el 2019 y a la secretaría de cultura y turismo de Palmira-Valle por el
apoyo brindado para el desarrollo de la investigación.
ofrece la casa de la cultura no estén enfocados exclusivamente en la población vulnerable del
municipio de Palmira.

A lo largo del texto abarcaré la transformación socioeconómica a través de los capitales de

Bourdieu (Económico, cultural, social y simbólico) por lo cual es necesario aclarar la teoría
relacionada al mismo. El capital económico se entiende como los objetos materiales que posee
una persona. El capital cultural se entiende como el número de saberes (no necesariamente
artísticos) propios de algún individuo. El capital social se puede definir como toda deuda de
honor, amistad, lealtad, etc., que ponga a mi disposición el capital de otra persona en forma de
deuda, favor, regalo, etc. El capital simbólico puede ser relacionado con el honor, fama o
prestigio que posea una persona la cual le da al sujeto mayor legitimidad. La teoría se basa en
el principio de que la gente que posea mayor capital buscará conservarlo, mientras que los
grupos que posean menor cantidad de capital tenderán a aumentarlo.

A partir de estas aclaraciones, mi texto será desarrollado de la siguiente manera. Iniciaré con
la contextualización acerca de las condiciones sociales que se viven en Palmira-Valle del Cauca
y haré una breve descripción del proceso realizado en la escuela municipal de arte “Casa de la
cultura Ricardo Nieto” e introduciré algunos testimonios de algunos miembros de la agrupación
folclórica “Apolinar Altamirano”. Después haré una descripción de 2 proyectos: El sistema
nacional de orquestas de Venezuela y el equipo de baloncesto que dirigió el entrenador Ken
Carter en la escuela Richmond en una zona marginal de California-Estados Unidos. Una vez
descritos estos dos procesos, expondré el proceso que está adelantando actualmente la
agrupación folclórica “Apolinar Altamirano” para acabar analizando y contrastando los tres
procesos a partir de los capitales de Bourdieu

Contexto Social

Hoy en día existen diferentes espacios en los cuales se puede llegar a formar grandes artistas
que pueden ser originarios de los denominados “sitios marginales” del territorio nacional
colombiano. Las administraciones de las ciudades más conflictivas siempre asumen un gran
reto: ¿Cómo conseguimos que las estadísticas de inseguridad se vean reducidas?.

Según las estadísticas manejadas por el Consejo Ciudadano para la seguridad pública y la
Justicia Penal (CCSPJP), en el año 2018 hay tres ciudades en Colombia entre las 50 ciudades
más peligrosas del mundo, las cuales son Cali (28), Palmira (37) y Cúcuta (50). Aunque en
tiempos pasados dos de estas ciudades llegaron a estar entre las más peligrosas del mundo,
según este ranking (Cali llegando a ocupar el 4to puesto a nivel mundial en el año 2014 y
Palmira el 8vo puesto, ocupándolo en el año 2015) (Palmero, 2016; Redacción, 2014), las cifras
de muertos empezaron a reducirse en estas dos ciudades producto de la intervención policial y
militar en conjunto con las políticas de intervención social en las que destacan las políticas
relacionadas con la educación, la cultura y el deporte.

Dentro de los programas realizados por la administración local se destaca el programa de

formación artística realizado en la escuela municipal de arte “casa de la cultura Ricardo Nieto”,
los cuales se han dedicado a la enseñanza de las distintas ramas artísticas: pintura, música,
danzas, teatro, artes plásticas y artes digitales. La CC se dedica a la enseñanza de estas artes en
dos niveles, los cursos de extensión y las carreras técnicas por competencias laborales. En el
nivel de cursos de extensión se brinda un espacio de aprendizaje de nivel básico e intermedio
el cual comparten personas de distintas razas, edades y formaciones académicas, brindando así
un gran espacio de convivencia el cual permite el “sano desarrollo” de las actividades artísticas.
Los cursos de extensión poseen también espacios en los cuales pueden aplicar los
conocimientos adquiridos, las agrupaciones ya sean folclóricas, clásicas, de teatro u orquestas
salseras y/o filarmónicas. Entre las agrupaciones más destacadas se encuentran la agrupación
folclórica “Apolinar Altamirano” y la orquesta filarmónica infantil y juvenil de la CC.

La agrupación folclórica “Apolinar Altamirano” es una agrupación multidisciplinar que reúne

artistas de todas las edades, estratos, costumbres y creencias, brindando un espacio de
aprendizaje y desarrollo artístico, donde sobresale la enseñanza de lo que ellos denominan “su
majestad la danza” al tiempo que ayudan al desarrollo de aptitudes musicales y conocimientos
folclóricos en general (como mi caso). Esta agrupación fundada en el año 2014 y dirigida por
el maestro Janio Plaza, pertenece al cúmulo de semilleros que funcionan en la casa de la cultura
“Ricardo Nieto” desde el año 2009, entre los que se destaca junto a la Orquesta filarmónica
Infantil-Juvenil y la agrupación folclórica “Kachariparí”.

Una de las personas más importantes en este proyecto es su director, Janio Alberto Plaza. Este
líder es uno de los fundadores de varios procesos artísticos importantes y uno de los docentes
más experimentados del tema en el municipio de Palmira. Él afirma que el proceso de la danza
va muy ligado al proceso de la música, ya que para él “un bailarín que no tenga oído musical
no es capaz de bailar bien” (comunicación personal, 21/04/2019) y me menciona que tiempos
anteriores se dictaba las clases de danzas con tamboras, o en su defecto, con un equipo de
sonido y un maletín de discos (lo que yo suelo llamar “la verdadera biblia”). Para el maestro,
la enseñanza sin músicos es algo no tan efectivo para la formación de bailarines, ya que no se
puede regular el ritmo, se pierde la magia de la música en vivo y no se puede desarrollar
apropiadamente el “oído musical”, que es fundamental en la formación de bailarines de
excelencia. Esta herramienta que se usa hasta el día de hoy es a mi parecer es una de las partes
más importantes de la formación del bailarín. Para los primeros pasos de este proceso, hubo
una importante participación de dos músicos junto a Janio; el primero era yo desempeñando el
papel de instrumento melódico de la mano del clarinete, saxofón o quena en su defecto; y el
segundo es el Alejandro Cruz, que en aquel entonces ejercía de percusionista junto a Janio, a
veces tocando la Tambora o el Redoblante. Entre los propios integrantes del proceso también
se puede identificar varios personajes importantes, de los cuales puedo llegar a destacar el caso
de Harrinson Montaño, un muchacho joven de alrededor de 21 años de Timbiquí cauca y el
cual posee conocimientos de teatro, música y danzas (Proceso en el cual destaca).

Con base en lo anterior , en conjunto con las experiencias que poseo como observador externo,
exmiembro de la agrupación y entrevistador para el proyecto de investigación, puedo llegar a
afirmar que las distintas culturas son el motor principal de la trasformación de las sociedades;
ya que estas a través de la guía de una persona (preparada o no), la disposición de la persona y
la interacción de personas de distintos pasados, condiciones sociales y visiones diferentes del
mundo son las fuentes primordiales del cambio socioeconómico.

La importancia de la cultura como herramienta de transformación social

Según la RAE la cultura es un “Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y

grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc.”. En esta
definición se pueden destacar tres puntos muy importantes, los modos de vida y costumbres,
los grados de dominio3 y la afirmación de que la cultura no solamente se limita al arte, sino que
se puede ligar a cualquier clase de conocimiento humano. Las artes hoy en día pueden llegar a
ser una herramienta que ayude a formar una “paz paralela” a través del análisis y adopción de
ciertos hábitos no violentos, aunque pensar que el mero acto de hacer arte o de presentarlos
como personas no violentas puede erradicar la violencia o generar una violencia es algo
ingenuo (Middleton, sin publicar. O´Connel, 2011).

Si tomamos como referencia otros programas, podemos empezar relacionando el proyecto con
el “Sistema nacional de orquestas de Venezuela”, el cual inició como una propuesta del
gobierno venezolano para producir una gran cantidad de músicos de distintas zonas y
condiciones vulnerables a lo largo de todo el país. Dentro de los resultados se puede observar
un “proceso exitoso” dentro del plano nacional e internacional, pero cabe destacar que en el
sistema no solo había personas de bajos recursos (población a la cual no estaba enfocada el
programa), sino que, también en investigaciones posteriores, se reveló que había una gran
cantidad de personas de buenas condiciones socio económicas coladas en el programa.
También se encontraron varias irregularidades al momento de evaluar en un primer momento
el sistema, entre ellos destacan las matrices de evaluación que utilizaron en su momento, ya
que estas eran muy incompletas para el objetivo que se buscaban en un primer momento (Baker
et al, 2018).

Si tomamos en cuenta que las culturas pueden ser relacionadas con cualquier rama del
conocimiento y hábitos humanos, podemos relacionar este proyecto con un caso de Estados
Unidos, más en concreto, el caso del equipo de baloncesto dirigido por el “Coach Carter”. Este
caso se desarrolló en el barrio Richmond (zona la cual posee un carácter marginal) del estado
de California alrededor del año 1999. En la secundaria local se contrató a Ken Carter,
entrenador egresado de la secundaria el cual poseía varios récords de la escuela con el equipo
de baloncesto. Cuando él inició a dirigir al equipo de baloncesto hizo que todos sus estudiantes
firmaran un contrato con el cual se comprometían a obtener una serie de resultados académicos
para poder seguir en el equipo de baloncesto. La cláusula más importante que poseía el contrato
especificaba que todos los jugadores necesitaban un promedio mínimo de 2.3 con el cual tenían
mayores posibilidades de acceder a una beca universitaria por deportes. El equipo tuvo muy
buenos resultados a nivel deportivo ganando varios torneos, pero llegó un momento en que
muchos integrantes del equipo empezaron a incumplir en la parte académica del contrato;
situación que dio pie al coach para tomar medidas extremas. Como primera medida el coach

3
Esto puede ser relacionado con el nivel de formación académica o empírica del individuo sobre un tema en
específico.
clausuró el gimnasio en el que practicaban los estudiantes hasta que todos los integrantes del
equipo obtuvieran las calificaciones mínimas que se exigían en el contrato. Como segunda y
última medida, el coach canceló todos los partidos que debían jugar en ese periodo, por ende,
perdiendo por inasistencia a los mismos partidos y el invicto que llevaban en esa época. Una
vez el equipo cumplió con los requisitos mínimos para jugar, retomaron actividades para seguir
con el exitoso proceso deportivo. Los resultados obtenidos a lo largo del proceso podemos
encontrar dos puntos realmente impresionantes, el rendimiento deportivo del equipo durante
esa época fue realmente alto logrando varios campeonatos a lo largo del proceso (Cosa que no
es común para Richmond), y el 100% de los estudiantes involucrados lograron entrar a la
universidad para continuar con sus estudios a través del buen rendimiento académico y becas
deportivas (Situación realmente extraña para el contexto social de Richmond).

Si analizamos a fondo el caso, podemos hallar que los miembros del equipo de baloncesto de
la secundaria Richmond se encontraban en su inmensa mayoría en una situación crítica a nivel
social, económico y académico. Para pertenecer al equipo se debía firmar un contrato en el cual
se comprometían a cumplir unos requisitos académicos para poder seguir con las actividades
comunes del equipo de baloncesto, y que para que se pudieran llevar completamente estas
actividades el equipo al completo debían cumplir con este contrato académico. Después de
llevar estrictamente el control del contrato y las políticas de entrenamiento logró algo que hasta
el momento sigue siendo histórico en el estado y en la secundaria, la totalidad del equipo logró
entrar a la universidad y esto marcó algo increíble tanto para la institución por las condiciones
sociales de la zona, como para las propias entidades gubernamentales.

Tomando en cuenta estos casos podemos encontrar que los dos proyectos confluyen en la
importancia de la convivencia de grupos heterogéneos con el objetivo de logar una relación
sana y positiva para todos los individuos involucrados.

Apolinar Altamirano, un grupo de artistas.

La agrupación folclórica “Apolinar Altamirano”

4

(Grupo al que llamaremos de ahora en adelante

AA) surge como un curso de extensión en la casa
de la cultura el cual se dedica a la coreografía de
distintas danzas folclóricas principalmente del
Pacífico Colombiano, aunque no se limita
solamente a la región anteriormente mencionada,
pues posteriormente se convertiría en uno de los
grupos representativos de la CC. Entre los
procesos desarrollados, es uno de los grupos más
destacados, ya que AA se presenta constantemente en varios escenarios a nivel local y
departamental, y en unos pocos a nivel nacional.

4
Imagen extraída del Facebook oficial de la agrupación en la cual se pueden ver a varios miembros actuales de
la agrupación.
Dirigidos por Janio Plaza, actualmente se encuentran en un proceso constante y fructuoso en
la casa de la cultura durante el periodo académico. Son un grupo de artistas de diferentes razas,
condiciones académicas, trayectos artísticos, que se dedican a la interpretación de diferentes
rutinas coreográficas para su presentación en diferentes espacios artísticos a lo largo de la
ciudad y el departamento. El proyecto nace como un curso de extensión ofrecido por la CC al
cual en sus inicios pertenecían más mujeres que hombres (situación que se mantiene hasta el
día de hoy). Lleva el nombre de, como Janio lo describe, uno de los grandes gestores culturales
de la cultura palmirana y fundador de la agrupación folclórica “Tambores de Colombia”, al
momento del fallecimiento del maestro en el año 2014. El grupo tiene una proyección
importante a lo que nivel artístico se refiere, ya que constantemente están involucrados en
montajes de gran magnitud, aspecto que se ve reflejado en los montajes interdisciplinares que
se realizan a lo largo de su historia y en la necesidad que recalca el maestro de llevar el proceso
de la mano de un grupo de músicos.

El proyecto en sus inicios, en el año poseía un carácter multidisciplinar ya que se realizaba un

proceso de formación de bailarines y de músicos (proceso al que yo pertenecí), pero que
posteriormente se fue definiendo al proceso de formación de bailarines debido a la ausencia de
nuevos músicos dispuestos a continuar el proceso que tuvimos que dejar de lado los antiguos
músicos por causas mayores. 5 Entre
los grandes logros de la agrupación se
destacan presentaciones en festivales
internacionales de danzas como el
festival “Colombia Baila” celebrado
en el municipio de Florida-Valle, o en
el Encuentro internacional de danzas
realizado en el marco del Trigésimo
quinto concurso departamental de
bandas musicales celebrado en
Samaniego-Nariño, encuentro al cual
aspiran volver este año. También han
participado en montajes de gran
calibre a nivel municipal como lo son los montajes del día de la danza celebrados en el
municipio cada año, o montajes mixtos como el hecho por la propia casa de la cultura en el año
2013; en la cual reunieron alrededor de 170 artistas diferentes en escena para la celebración
sobre el día del músico.

Entre los miembros podemos encontrar a Harrinson Montaño, un hombre de alrededor de 22

años al momento de escribir este texto, el cual se dedica actualmente a ser estudiante del curso
técnico por competencias laborales en danzas ofrecido por la CC y posee distintos
conocimientos en distintas ramas del arte. Es egresado del técnico laboral en teatro ofrecido
por la entidad, es miembro del ensamble de cuerdas frotadas de la CC, ademas de ser uno de
los miembros de AA. Oriundo de Timbiquí-Cauca, afirma que el aprendizaje de las artes tuvo

5
Imagen de la agrupación tomada en diciembre del 2015, momento en el cual el autor ejercía de clarinetista
del grupo.
un papel fuerte de su formación desde que se graduó como bachiller en el 2015, ya que para él
la formación artística es algo muy largo e interesante. Decía entre risas ‘apenas uno entra a la
CC uno no sale, porque apenas uno acaba un curso piensa “pero me falta hacer éste y este otro
y pues uno siempre encuentra cosas nuevas pa’ hacer’”.

Otro de los miembros se encuentra Alejandro Cruz, joven de actualmente 18 años, originario
de Palmira. Músico polifacético, viene de una familia en la cual siempre ha estado rodeado de
música. Posee un papá músico, dos hermanos que son estudiantes de música y danzas, y una
madre que siempre ha estado interesada en el proceso artístico de sus hijos y los ha apoyado en
todo lo relacionado a las artes. Él hace parte (o en su defecto perteneció) de muchos procesos
que se desarrollan en la CC. Actualmente cursa el técnico por competencias laborales en música
y está en primer semestre de Ingeniería Industrial en la Universidad del Valle. En medio de su
proceso de formación artística, llegó a AA para ejercer de músico y fortalecer sus
conocimientos en músicas folclóricas de Colombia. Inicialmente llegó al proyecto por
invitación de Janio y en ese momento lo tomó más como una “actividad pasajera” dentro de su
rutina, pero poco a poco fue adquiriendo más amor y compromiso por el proyecto. Ha
participado en muchas presentaciones de AA, por las cuales guarda gratos recuerdos de su
estadía en el grupo y hasta el día de hoy está dispuesto a apoyar el proceso, cosa que no ha
podido ocurrir tan constantemente.

Janio Plaza, director de la agrupación, es una persona que muchos de los miembros de AA
califican como “Artista de excelencia” y gran profesor. Es una persona que ha visto en la danza
una salida a las labores del campo en las cuales se desempeñaba su familia y un estilo de vida
del cual puede tener un sustento digno para él y su familia. Inició su proceso joven en las clases
de danza que ofrecía el profesor Apolinar Altamirano en el corregimiento del Bolo de san Isidro
ubicado al sur de Palmira. Él fue una persona que en su proceso de formación tuvo que
sacrificar varias cosas para poder seguir el sueño de ser un artista. Comentaba en medio de su
entrevista “Yo en la mañana estudiaba, en la tarde le ayudaba a mi mamá en las labores de la
finca en la que ella trabajaba y en las noches viajaba a Palmira en bus para ir al ensayo de la
agrupación Tambores de Colombia para devolverme en bus cuando podía, sino me devolvía
caminando a mi casa a altas horas de la noche”. Es una persona que siente un amor y un
compromiso por la enseñanza ya que el arte ha sido una pieza fundamental en su desarrollo
como persona.

La influencia de las artes en las personas

En el sistema nacional de orquestas de Venezuela (que llamaré de ahora en adelante el sistema)

podemos relacionar al conocimiento que poseen los profesores como el capital cultural de las
propias personas a la vez que se puede inferir que el sistema posee un gran capital social por la
gran cantidad de profesores que tiene en su programa. Por su parte, el capital económico se
puede ver desde dos puntos de vista distintos; en un primer plano se puede observar en el dinero
puesto para el correcto desarrollo de las orquestas involucradas, pero también, se puede asociar
al tiempo invertido por los beneficiarios en el aprendizaje, la movilidad de los instrumentos en
caso de ser necesario, la movilidad de las personas involucradas en el proceso y toda actividad
que signifique un esfuerzo económico tangible o intangible en el correcto desarrollo de la
actividad. De la misma manera, se puede hacer una relación de capitales similar con AA, ya
que se también es el producto de una organización centrada en la enseñanza de un arte, o varias
en el caso de la CC y AA. Asimismo, en el caso del “Coach Carter” podemos definir el
conocimiento que posee Carter como el capital cultural fundamental, el capital social resulta
de la combinación entre los conocimientos estratégicos y sociales que posee Carter con las
habilidades físicas y mentales de los jugadores y finalmente el capital económico serían los
recursos que invierte la secundaria en el desarrollo del proyecto en conjunto con el tiempo
invertido por parte de los involucrados.

A lo largo del proceso de recolección de datos (basados en mis experiencias personales y en

conjunto con las entrevistas recolectadas) se puede observar un crecimiento en el capital
cultural de todos los involucrados, factor fundamental para medir el impacto sociocultural
generado por los propios procesos, y esto ha generado un crecimiento en el capital económico
de algunos de los involucrados. En el caso del sistema podemos decir que hubo un crecimiento
del capital cultural de los beneficiarios ya que uno de los resultados más destacados se
encuentran grandes exponentes actuales de la música sinfónica a nivel colectivo como lo es la
orquesta sinfónica “Simón Bolívar” y a nivel individual como lo es el reconocido director de
orquesta Gustavo Dudamel. En el caso “Coach Carter” podemos encontrar también un éxito a
nivel colectivo, ya que uno de los objetivos fundamentales del proyecto era que la totalidad de
los miembros lograran ingresar a la universidad, objetivo que se cumplió, y siendo éste un
factor que muestra que hubo un crecimiento en el capital cultural de los beneficiarios, y
probablemente, de los involucrados. En el caso de AA se puede observar un crecimiento a nivel
colectivo ya que este grupo actualmente posee un gran reconocimiento a nivel local y está
empezando a tener reconocimiento a nivel nacional, situación que se ve reflejada en la cantidad
de montajes y presentaciones que presentan a nivel local y nacional en conjunto con
invitaciones al extranjero para mostrar el proceso realizado en el territorio nacional.

Uno de los factores a tomar en cuenta, y a mi parecer el más importante, es la constante

interacción entre gente muy diferente en lo que a posesión de capital de distintas clases
concierne, ya que este factor influye al momento de generar la calidad de los resultados y esto
se ve reflejado en los tres casos estudiados. El sistema está enfocado en la educación de
personas de condiciones vulnerables, pero las investigaciones demostraron que realmente la
cantidad de personas que cumplen los requisitos socioeconómicos para pertenecer al sistema
era menor a las cifras oficiales suministradas en los primeros estudios.6 El caso “Coach Carter”
poseía este factor, aunque en una menor proporción, y también fue un caso de éxito. En AA se
puede apreciar este factor, ya que podemos encontrar estudiantes del técnico, padres de familia,
miembros experimentados, personas que van por ocio y estudiantes del nivel de extensión (un
nivel menos exigente). Los entrevistados afirman haber percibido un crecimiento grupal, ya
sea a través del creciente número de involucrados en el proyecto, la cantidad y calidad de
montajes presentados al público o los espacios en los que muestran estos montajes; siendo esto
una prueba del crecimiento del capital cultural y social del grupo. También se puede apreciar

6
Cabe aclarar que para mí este factor no es algo negativo sino algo que influyó positivamente en la evolución
exitosa del proyecto.
un crecimiento en el capital cultural y económico en los entrevistados; ya que Janio afirma que
la danza ha significado una herramienta valiosa al momento de mejorar su capital económico,
Harrisnon afirma que las artes han sido una herramienta valiosa al momento de incrementar su
capital cultural y de la cual espera empezar a utilizar como ayuda al momento de empezar a
trabajar (siendo esta una proyección a futuro para mejorar su capital económico), y finalmente
Alejandro afirma que las artes han tenido un papel importante en su desarrollo como persona
y le ha permitido encontrar una nueva manera de generar ingresos para su vida cotidiana.

Conclusión

Comparar distintos proyectos sociales basados en objetivos similares nos permite contrastar el
desarrollo de los mismos e identificar los aspectos que generaron sus consecuencias, haciendo
posible el estudio de los resultados obtenidos sin el riesgo de que el enfoque cultural del caso
afecte el fruto del análisis. En este caso, la metodología que propongo permite aclarar y apoyar
el sentido de las tendencias generales e individuales que toman los distintos programas de
transformación social basados en la enseñanza de distintas culturas.

En la medida de que estos procesos se mantienen a lo largo del tiempo, permiten que se aumente
la calidad y la cantidad del impacto generado por los mismos, aumentando poco a poco la
transformación de estas sociedades que han estado relacionadas íntimamente con la violencia.
Estos espacios invitan constantemente a personas de diferentes clases sociales a hacer parte
integral de este proceso de transformación para la disminución de la inseguridad a lo largo de
los distintos territorios azotados por este peligro. Una de las motivaciones fundamentales de
estos procesos es servir de apoyo en la construcción de un territorio más pacífico que se ve
alimentado, en parte, con los resultados que ofrecen estos casos.
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