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Semana 1
¿Qué haces cuando no puedes entender algo? Para los zombies es muy fácil. Simplemente
siguen golpeando sus cerebros contra la pared. Los cerebros vivientes son mucho más
complejos. Resulta que si entiendes solo un poco acerca de la información más básica de
cómo funciona tu cerebro, podrás aprender más fácilmente y con menos frustración.
Los investigadores han descubierto que tenemos dos modos de
pensamiento fundamentalmente diferentes. Aquí los llamaré modos Enfocado y Difuso.
Estamos familiarizados con el modo enfocado. Es cuando nos concentramos
intencionalmente en algo específico que intentamos aprender o entender. Pero no estamos
muy familiarizados con el pensamiento difuso. Resulta que este estilo más relajado de
pensamiento está relacionado con un conjunto de estados de descanso neural.
Utilizaremos una analogía del juego conocido como pinball para entender estos dos
modos de pensamiento. Por cierto, las metáforas y las analogías son realmente útiles
cuando intentamos aprender algo nuevo.
Recuerden que el juego de pinball empieza al halar la palanca y soltarla, enviando la
bolita que salta y rebota contra cojines de goma, y así ganas puntos. Entonces, aquí está
el cerebro, aquí las orejas y los ojos mirando hacia arriba. Y podemos ubicar la máquina
de pinball allí dentro. Ahí lo tienen. Aquí está la analogía para el modo enfocado. Los
cojines azules de goma se encuentran muy cerca entre sí. ¿Pueden ver este patrón de color
naranja en la parte superior? Representa un patrón de pensamiento familiar, relacionado
de pronto con algo sencillo como una suma o con ideas más complejas como la crítica
literaria o el cálculo de ondas electromagnéticas. Piensas un pensamiento y boom, arranca
y se mueve fácilmente. Y después, mientras rebota contra los cojines azules,
logras resolver el problema que estás intentando solucionar o el concepto que estás
intentando entender, que está relacionado con algo que te es bastante familiar.
Vean como ese pensamiento se mueve fluidamente por toda la difusa vía neural
anaranjada que está por debajo. Es como si estuviera recorriendo una carretera familiar,
bien pavimentada. ¿Y si el problema en el que estás trabajando necesita nuevas ideas o
enfoques? Conceptos en los que no has pensado antes, que están simbolizados aquí por
este patrón neural ubicado hacia el área inferior de la máquina de pinball. Pero si no has
pensado ese pensamiento antes, entonces no sabes cómo se siente ese patrón ni dónde
está. Entonces, ¿cómo vas a desarrollar ese nuevo pensamiento inicialmente? No sólo no
sabes dónde está el patrón ni cómo luce, sino que tampoco puedes ver todos los cojines
azules que están bloqueando tu acceso en cualquier dirección en la que decidas moverte.
Para llegar a este nuevo patrón de pensamiento, necesitas una nueva forma de pensar, que
está representada aquí por el modo difuso. Observa cuán separadas están los cojines de
goma. El pensamiento arranca, miren cómo se mueve y rebota por todas partes. Puede
viajar un largo trecho antes de se interrumpa al golpear un cojín. En este modo difuso de
pensamiento, puedes ver las cosas más ampliamente, desde un punto de vista mucho más
amplio. Puedes hacer nuevas conexiones neuronales que recorren nuevos caminos. No
puedes concentrarte tan fijamente como sueles hacerlo para finalizar cualquier tipo de
resolución de problemas o para entender los aspectos más sutiles de un concepto. Pero
puedes, al menos, llegar al sitio inicial en el que tienes que estar para encontrar una
solución.
Tal como lo entienden hoy en día los neurocientíficos, solo puedes estar en el modo
enfocado o en el modo difuso de pensamiento. Parece que no puedes estar en ambos
modos de pensamiento al mismo tiempo. Piensa en una moneda. Podemos ver un lado de
la moneda, o el otro, pero no podemos ver ambos lados al mismo tiempo. El estar en uno
de los modos parece que limita tu acceso al otro modo de pensamiento. En nuestro
próximo video veremos cómo algunas personas extraordinarias logran tener acceso a sus
modos difusos de pensamiento para realizar grandes cosas.
Uso de los modos Enfocado y Difuso... O bien, algo de Dalí te vendrá bien
Veamos a algunas personas famosas en la historia que usaron modos diferentes de pensar
para ayudarlos a resolver sus problemas. Si ven a este sujeto de ahí, era Salvador Dalí, un
pintor surrealista muy conocido del siglo XX. Fue la definición clara de un personaje libre
y loco. Lo pueden ver aquí con su mascota, un ocelote llamado Babou. Dalí solía usar una
técnica interesante que lo ayudaba a crear sus pinturas surrealistas fantásticamente
creativas. Solía relajarse en una silla y dejar que su mente estuviera libre,
pensando vagamente en algo en lo que se había concentrado previamente. Solía tener una
llave en su mano, moviéndola justo por encima del suelo. Cuando comenzaba a entrar en
sus sueños, quedándose dormido, la llave se le caía de la mano [SONIDO] y el ruido lo
despertaba, justo a tiempo para que pudiese recoger esas conexiones e ideas difusas que
estaban en su mente. Después, regresaba al modo de concentración, incorporando las
conexiones nuevas que había hecho mientras estaba en el modo difuso.
Ustedes quizá piensen que eso está bien para un artista, pero ¿cómo se relaciona esto con
los procesos de pensamiento más científicos o matemáticos? Vean aquí abajo. Este
personaje era Thomas Edison, uno de los inventores más brillantes de la historia. Según
la leyenda, lo que Edison solía hacer era sentarse y relajarse en su silla, sosteniendo
rodamientos en su mano. Se relajaba liberando sus pensamientos y su mente, aunque a
menudo terminaba pensando en lo mismo en lo que antes estaba pensando concentrado,
pero más relajadamente. Cuando Edison se dormía, el rodamiento se caía y hacía ruido
en el piso, tal como sucedía con Dalí. Esto despertaba a Edison y él arrancaba con las
ideas generadas en el modo difuso, listo para llevarlas al modo concentrado y construir a
partir de allí. Entonces, la conclusión es que cuando estás aprendiendo algo nuevo,
especialmente algo que es un poco más difícil, tu mente necesita poder ir de un modo de
aprendizaje al otro. Eso te ayuda a aprender de forma eficaz. Esto puede compararse un
poco a fortalecer tus músculos levantando pesas. Nunca planearías participar en una
competencia de levantamiento de pesas esperando justo hasta el día antes para pasar todo
el día ejercitándote como un loco. Quiero decir, esto no sucede así. Para fortalecer tu
estructura muscular, hay que hacer un poco de trabajo cada día, permitiendo que tus
músculos vayan creciendo. Igualmente, para construir una estructura neuronal, hay que
trabajar un poco cada día, construyendo poco a poco un andamio de neuronas para
ir colocando allí tus pensamientos, un poquito cada día. Este es el truco.
En resumen, aprendimos que usar analogías es una técnica poderosa para el
aprendizaje. Aprendimos sobre los dos modos de pensamiento diferentes del
cerebro, enfocado y difuso. Cada uno nos ayuda a aprender, pero de formas muy
diferentes. Por último, aprendimos que aprender algo difícil puede tomar tiempo. Tu
cerebro necesita alternar sus formas de aprendizaje, mientras lucha con el material nuevo
y lo asimila.
¿Qué es el aprendizaje?
Sinopsis de la procrastinación
Todo el mundo tiene problemas con la procrastinación (postergar tareas). Porque si estás
trabajando en algo, significa que no estás trabajando en muchas otras cosas. Pero algunas
personas tienen más problemas con la procrastinación que otras. En este video vamos a
darles una pequeña perspectiva sobre procrastinación, por qué aparece, y una pequeña y
poderosa herramienta que los ayudará a ocuparse de ella.
Cuando hay algo que en realidad prefieres no hacer, parece que que activas las áreas de
tu cerebro que se asocian con el dolor. Su cerebro, de manera natural, busca la forma de
detener ese estímulo negativo cambiando tu atención hacia algo diferente. Pero, aquí está
el truco. Los investigadores han descubierto que poco después de que la gente comienza
a trabajar en lo que no les gusta, ese neuromalestar desaparece. Entonces, parece que lo
que sucede cuando procrastinas o pierdes el tiempo es algo así. Primero, observas y
obtienes una pista sobre algo que te provoca cierta incomodidad. Como no te gusta, para
hacer que la sensación se vaya apartas tu atención de lo que te provocó esa
incomodidad. Te diriges hacia algo más placentero. El resultado es que te sientes más
feliz, temporalmente. Hablaremos más sobre la procrastrinación más tarde. Pero, mientras
tanto, les voy a presentar una útil y pequeña herramienta mental. A esta herramienta se le
llama el Pomodoro. Fue inventada por Francesco Cirillo a principios de la década de
1980. Pomodoro es tomate en italiano. Los relojes de cocina frecuentemente se parece a
un tomate y, en realidad, es lo único que hace falta para poner en práctica esta sencilla
técnica. Todo lo que hay que hacer es poner el reloj en 25 minutos, apagar todas las
interrupciones y, después, enfocarse. ¡Eso es todo! Casi todo el mundo puede
concentrarse durante 25 minutos. La última cosa que hay que hacer es darte a ti mismo
una pequeña recompensa cuando termines. Unos minutos de navegación por internet, una
taza de café o un pedazo de chocolate, incluso sólo estirarse o conversar, permitiendo que
tu cerebro cambie gentilmente su foco durante un tiempo. Verán que emplear la técnica
Pomodoro es muy efectivo. Es como hacer ejercicio intensamente durante 25 minutos en
un gimnasio mental, seguido por un poco de relajación mental. Inténtenlo. A
continuación, vamos a ver cómo una niña muy tímida de diez años, cambió su cerebro.
Sí, ésa soy yo cuando tenía 10 años. Me encantaban los animales, los trabajos manuales
y soñar. En esa época, yo era la reina beligerante de la anti matemática. Yo desprecié,
ignoré, reprobé y odié francamente la matemática y la ciencia a todo lo largo de la escuela
primaria y secundaria. Eso es extraño, porque ahora soy profesora de Ingeniería.
Me alisté en el ejército en cuanto salí de la escuela secundaria para estudiar idiomas en el
Instituto de Idiomas de la Defensa. Ésa soy yo cuando tenía 18 años. Me veía muy
nerviosa y concentrada lanzando una granada de mano. Sólo empecé a estudiar
matemática y ciencia cuando tenía 26 años, después que salí del ejército. Al principio se
me hizo muy difícil. En mis clases había alumnos que pensaban muy rápidamente, y que
parecían entender todo más facilmente y más rapidamente que yo. A veces tomaba una
pausa por unos pocos meses, me iba y trabajaba como traductora de ruso en barcos de
arrastre soviéticos. Ésta soy yo en el Mar de Bering. Después regresaba a la escuela e
intentaba aprender un poco más. A medida que fui adquiriendo destreza técnica, se me
empezaron a abrir nuevas puertas. Terminé trabajando como operadora de radio en la
Estación del Polo Sur en la Antártida, y allí conocí a mi esposo. Siempre digo que tuve
que ir hasta el fin del mundo para conocer a ese hombre. Aquí está él, después de apenas
10 minutos a la intemperie a menos 70 grados Farenheit con un viento de 60 millas por
hora. El efecto del viento intensifica el frío increíblemente. Ahora, a mí no se me hacía
fácil naturalmente ni la matemática ni la ciencia. En lo absoluto. Yo logré tener éxito
porque gradualmente logré descubrir algunos trucos. Pero, retrocedamos un poco.
En el esquema grande de todas las carreras y disciplinas diferentes que pueden estudiar
las personas, ¿por qué las que incluyen matemáticas y ciencia constituyen a veces
mayores desafíos? Creemos que tal vez esto sucede, al menos en parte, debido a a
naturaleza abstracta de las ideas. Es decir, tomemos por ejemplo una vaca que está en
medio del campo. Si te dan la palabra vaca, puedes señalar directamente a la vaca para
aprender el significado de esa palabra. Incluso las letras de la palabra vaca, V A C A,
equivalen aproximadamente a los sonidos a los que corresponden. Pero en relación
con las ideas matemáticas, con frecuencia no hay nada análogo a lo que se pueda señalar.
No hay signos de suma en el medio de un campo. No hay multiplicación, ni división ni
cosas semejantes que puedan equivaler directamente a mini términos matemáticos ni
científicos. En otras palabras, estos términos son más abstractos. Pero Ustedes podrían
decir, ¿y qué sucede con conceptos como amor, entusiasmo o esperanza? Todos son
abstractos. Sí, lo son, pero lo que sucede es que estos términos abstractos se relacionan
con frecuencia con nuestras emociones. Podemos sentir nuestras emociones, aún cuando
no podamos ver y señalar ejemplos concretos, como podríamos hacer con la vaca.
Esto quiere decir que es importante practicar con ideas y conceptos que estés aprendiendo
en matemática y ciencia, tal como con cualquier otra cosa que estés aprendiendo, para
ayudarte a mejorar y fortalecer las conexiones neurales que estás haciendo durante el
proceso de aprendizaje. Aquí a la izquierda ven la representación simbólica de un patrón
de pensamiento. Las neuronas se van uniendo a través del uso repetido. Mientras más
abstracto es algo, más importante es practicar para convertir esas ideas en realidad para
ti. Aunque las ideas que estés manejando sean abstractas, los patrones neurales de
pensamiento que estás creando son reales y concretos. Al menos lo son si los construyes
y los fortaleces mediante la práctica. Aquí ven una manera de visualizar lo que está
sucediendo. Cuando comienzas a entender algo, por ejemplo, cómo solucionar un
problema, el patrón neural está allí, pero es muy débil. Tal como el patrón desvaído que
está en la parte superior de nuestra analogía de la máquina de pinball que tenemos aquí.
Cuando vuelves a resolver el problema desde el principio, sin ver la solución, si
comienzas a profundizar ese patrón de pensamiento, es algo como este patrón más oscuro
que ven aquí en el centro, Y cuando ya resuelves el problema con facilidad, cuando
vuelves a hacer cada paso completa y concisamente en tu mente sin siquiera ver la
solución, e incluso has practicado con problemas semejantes, en ese momento el patrón es
como éste oscuro y firme que ven en la parte inferior del marco. Lo que practicas se
vuelve permanente. Cuando estás aprendiendo, lo que tienes que hacer es estudiar
algo, estudiar duro concentrándote con intención. Después, haces una pausa, o al menos
cambias tu foco hacia algo diferente por un rato. Durante este rato de aparente relax, el
modo difuso de tu cerebro tiene la oportunidad de trabajar en el fondo y ayudarte a
comprender conceptualmente. A tu cemento neural, de cierto modo, le da chance de
secarse. Si no haces esto, sino que aprendes abarrotándote, tu base de conocimiento tendrá
una apariencia como ésta, todo desordenado y con una base confusa y pobre. Si tienes
problemas de procrastinación o pérdida de tiempo, te conviene usar el Pomodoro, el reloj
de cocina. Eso te ayudará a seguir, usando breves períodos de atención concentrada cada
día, que te ayudarán a comenzar a construir los patrones neurales que necesitas para tener
más éxito en el aprendizaje de materiales más desafiantes. En la próxima sesión,
hablaremos sobre la fragmentación, la esencia vital de cómo comprender y dominar ideas
clave.
Introducción a la memoria
Cuando veo hacia atrás, pensando en mi niñez, o recuerdo algunas palabras de español o
de ruso, o recuerdo una de las ecuaciones de Maxwell, estoy recurriendo a porciones de
mi cerebro que están involucradas en la memoria a largo plazo, y lo que estoy intentando
hacer es mantener algunas ideas en mente para conectarlas juntas de modo de lograr
entender un concepto o resolver un problema, estoy utilizando mi memoria de
trabajo. Obviamente, a veces traigo cosas a colación de mi memoria a largo plazo a mi
memoria de trabajo, para poder pensar en eso. Entonces, los dos tipos de memoria están
relacionados. Existen muchas formas diferentes de rebanar nuestra comprensión de un
recuerdo, pero para este curso sobre aprendizaje, aprendizaje, vamos a hablar sólo sobre
estos dos sistemas principales de memoria, la memoria de trabajo y la memoria a largo
plazo. La memoria de trabajo es la parte de la memoria que tiene que ver con lo que
estamos procesando inmediata y conscientemente en nuestra mente. Nuestra memoria de
trabajo está centrada en la corteza prefrontal, aunque como lo veremos después, existen
también conexiones a otras partes de nuestro cerebro, de modo que podamos tener acceso
a los recuerdos a largo plazo. Los investigadores solían pensar que nuestra memoria de
trabajo podía contener alrededor de 7 artículos o fragmentos, pero ahora se cree que la
memoria de trabajo puede contener sólo cerca de 4 fragmentos de información. Tendemos
a agrupar automáticamente los recuerdos en fragmentos, por lo que pareciera que nuestra
memoria de trabajo es mayor de lo que es en realidad. Aunque nuestra memoria de trabajo
es como un pizarrón, no es un pizarrón muy bueno. Muchas veces es necesario seguir
repitiendo lo que estamos intentando aprender para que se quede en nuestra memoria de
trabajo. Por ejemplo, a veces te repites a ti mismo un número de teléfono hasta que tengas
la oportunidad de escribirlo. La repetición es necesaria para que los vampiros
metabólicos, es decir, los procesos disipadores naturales, no hagan desaparecer esos
recuerdos. Puede que por ejemplo cierres los ojos para evitar que otros asuntos
se entrometan en las limitadas ranuras que hay en tu memoria de trabajo mientras te
concentras. Entonces, sabemos que la memoria a corto plazo es algo así como un pizarrón
mental ineficiente. La otra forma de memoria, la de largo plazo, es como un almacén
de depósito, y tal como un almacén, se distribuye en una gran área. Los diferentes tipos
de recuerdos a largo plazo se almacenan en diferentes regiones del cerebro. La
investigación ha demostrado que para intentar convertir un recuerdo de corto plazo en
uno a largo plazo, necesitamos volverlo a visitar al menos varias veces para aumentar las
probabilidades de que lo podamos encontrar después cuando lo necesitemos. La
capacidad de almacenaje de la memoria a largo plazo es inmensa. Tiene espacio para
billones de asuntos. De hecho, puede haber tantos asuntos que se pueden enterrar unos a
los otros, haciendo difícil que encuentres la información que necesites a menos de que la
practiquemos y la repitamos al menos algunas veces. La memoria a largo plazo es
importante porque allí almacenamos los conceptos y técnicas fundamentales que
frecuentemente están involucradas en lo que sea que estemos aprendiendo. Cuando nos
encontramos con algo nuevo, a menudo utilizamos nuestra memoria de trabajo para
manejarlo. Si deseamos mover esa información a nuestra memoria a largo plazo, a
menudo hace falta invertir tiempo y práctica. Para ayudar a este proceso, usen la técnica
llamada repetición espaciada. Esta técnica involucra repetir lo que estamos intentando
retener, pero lo que hay que hacer es espaciar esas repeticiones, repetir una palabra nueva
de vocabulario o una técnica para resolver problemas, por ejemplo, durante varios
días. Extender su práctica durante varios días hace una verdadera diferencia. La
investigación ha demostrado que si intentamos pegar cosas a nuestra memoria repitiendo
algo 20 veces en una noche, por ejemplo, no se pegará tan bien como si practicamos
la misma cantidad de veces a lo largo de varios días. Es como construir la pared de ladrillo
que vimos antes. Si no dejamos que pase el tiempo necesario para que el cemento se
seque, esto es, el tiempo que hace falta para que las conexiones sinópticas se formen y se
fortalezcan, no tendremos una estructura muy buena. Hablando de una estructura
duradera, vean esta parte de la Acrópolis aquí.
Aunque los cerebros vivientes son muy complejos, esta semana hemos usado la metáfora,
la analogía y los zombies para ayudar a simplificar el tema. En esencia, las personas
tienen dos modos fundamentalmente diferentes de pensar que, para los fines de este curso,
hemos etiquetado como enfocado y difuso. Utilizamos una analogía simple de pinball
para ayudarnos a entender las diferencias entre los modos. En el modo enfocado
los cojines de goma están más apretados entre sí, lo que parece ayudar, de algún modo, a
mantener concentrados los pensamientos. Por otro lado, en el modo difuso los cojines de
goma tienen más espacio entre sí, lo que permite un rango más amplio de formas de
pensar. El modo enfocado se centra más en la corteza prefrontal y a menudo
parece involucrar pensamientos sobre cosas con las que estamos familiarizados. Por
ejemplo, si estamos familiarizados con la multiplicación y estamos intentando resolver
un problema de multiplicación, o estamos intentando encontrar una palabra que rime con
otra, quizá nos estemos adentrando en las vías familiares del modo enfocado. Pero si
estamos intentando resolver algo nuevo, a menudo se hacen necesarias las perspectivas
más amplias del modo difuso. Este modo representa muchos de los estados neurales de
reposo del cerebro. Los pensadores creativos a lo largo de la historia,
independientemente de cuál haya sido su disciplina, han encontrado formas para
acceder al modo difuso, a menudo más directa y rápidamente. Pero todos accedemos a
este modo de forma bastante natural cuando hacemos cosas como dar una caminata o
tomar una ducha o, incluso, ir quedándonos dormidos. Cuando nos encontramos atorados
en un problema o, incluso si no estamos seguros de una situación en el curso de nuestra
vida diaria, a menudo es una buena idea, una vez que nos hemos enfocado directamente
en la situación, dejar que las cosas se calmen y tomarnos un poco más de tiempo. Así,
pueden suceder más procesos neurales, a menudo por debajo de la conciencia, en el modo
difuso. Lo que pasa es que a menudo hace falta tiempo para que el proceso neural se lleve
a cabo e igualmente para construir las nuevas estructuras neutrales que nos permiten
aprender algo nuevo. Ésta es la razón por la cual combatir la procrastinación es tan
importante. La forma más fácil de combatirla es utilizar la técnica Pomodoro, ese breve
período de tiempo de 25 minutos de concentración enfocada, seguido por una breve
relajación mental. Es a través de la práctica y la repetición que podemos ayudar a impulsar
y fortalecer las estructuras neurales que estamos construyendo cuando estamos
aprendiendo algo nuevo. La práctica y la repetición son particularmente importantes
para los temas abstractos. Por supuesto, la memoria es un aspecto importante del
aprendizaje. Existen cuatro sectores o ranuras en nuestra memoria de trabajo. Las cosas
pueden salirse de esos sectores a menos que las continuemos repitiendo para mantenerlas
en la mente. En ese sentido, la memoria de trabajo es como un pizarrón no muy
bueno. Por otro lado, la memoria a largo plazo es un almacén. Si hemos practicado y
repetido algo lo suficientemente bien para que se vaya a la memoria de largo plazo, de
hecho lo podemos convocar después en caso de que lo necesitemos, aunque podemos
necesitar un poco de repetición ocasional para refrescar la memoria. Nunca es una buena
idea atiborrar nuestro aprendizaje repitiendo las cosas muchas veces en un mismo día,
porque es como intentar construir músculos levantando pesas en un solo día. Así no da
tiempo para que crezcan estructuras sólidas. También hemos aprendido sobre la
importancia de dormir para eliminar las toxinas que se desarrollan durante nuestras
actividades del día. Hay que evitar hacer pruebas o cualquier cosa difícil con poco
sueño la noche anterior, porque es como intentar pensar con veneno en el cerebro. Y de
igual importancia, el ejercicio es sorprendentemente valioso para ayudar a mejorar tanto
nuestra memoria como nuestra capacidad para aprender.
Semana 2
¿Qué es un fragmento?
En este video vamos a responder la pregunta, ¿Qué es un fragmento, o chunk, en
inglés? Cuando vemos por primera vez este concepto nuevo, a veces no tiene mucho
sentido, como se muestra aquí en este rompecabezas desordenado. Fragmentar es el
proceso mental que te ayuda a unir pedazos de información a través del significado. Esa
nueva unidad lógica hace que el fragmento sea más fácil de recordar y también hace más
fácil que el fragmento pase a formar parte de la imagen más grande de lo que estás
aprendiendo. Sólo memorizar un hecho sin comprensión o contexto no te ayuda a
entender lo que realmente está sucediendo ni cómo el concepto se ajusta a otros que
estés aprendiendo. Observen que estas piezas de rompecabezas no tienen bordes que se
engranen que nos ayuden a ensamblarlas con otras piezas.
Hablamos antes sobre la memoria de trabajo y sobre cómo estas cuatro ranuras de la
memoria de trabajo parecen ubicarse en la parte de nuestro cerebro que está justo
detrás de tu frente, conocida como la corteza prefrontal. Cuando estás enfocando tu
atención en algo es casi como si tuviéramos un pulpo, el pulpo de la atención que desliza
sus tentáculos a través de esas cuatro ranuras de la memoria de trabajo cuando es
necesario para ayudarnos a hacer conexiones con la información que podemos tener en
diferentes partes de nuestro cerebro.
Recuerden, esto es distinto a las conexiones aleatorias del modo difuso. Enfocar la
atención para conectar partes del cerebro a fin de unir ideas, es una parte importante del
modo enfocado de aprendizaje. A menudo es lo que nos ayuda a comenzar a crear un
fragmento. Es interesante que cuando estamos estresados, nuestro pulpo de atención
comienza a perder la capacidad para hacer algunas de estas conexiones. Es por esto que
nuestro cerebro no parece trabajar correctamente cuando estamos enojados, estresados o
atemorizados. Los fragmentos son piezas de información, hablando
neurocientíficamente, que se vinculan a través del significado o uso. Podemos tomar las
letras P, O y P y vincularlas en un fragmento conceptual fácil de recordar, la palabra pop.
[SONIDO] Es como convertir un pesado archivo de computadora en un archivo ZIP. Por
debajo de ese fragmento pop único hay una sinfonía de neuronas que han aprendido a
cantar a tono una con la otra, la compleja actividad neural que une a nuestros fragmentos
abstractos y simplificadores de pensamiento, pensamientos que pueden referirse a
acrónimos, ideas o conceptos y que son la base de gran parte de la ciencia, la literatura y
el arte. Digamos que quieres aprender a hablar español. Si eres un niño que vive en un
hogar donde hablan español, aprenderlo es tan natural como respirar. Tu madre dice,
mamá, y tú le contestas, mamá. Tus neuronas se disparan y se unen en un brillante enlace
mental que cementa en tu mente la relación entre el sonido mamá y la cara sonriente de
tu madre. Ese brillante enlace mental es una huella de memoria, que está conectado, por
supuesto, a muchas otras huellas de memoria relacionadas con esa.
Los mejores programas de aprendizaje de idiomas, tales como los del Instituto de Idiomas
de la Defensa, donde aprendí ruso, incorporan prácticas estructuradas que incluyen
repeticiones y rotan el modo enfocado de aprendizaje del idioma con conversaciones con
hablantes nativos, que son más de tipo difuso. La meta es incrustar las palabras y los
patrones básicos para que podamos hablar tan libre y creativamente en nuestro
idioma nuevo como lo hacemos en nuestro idioma nativo. Resulta que uno de los
primeros pasos que damos para obtener experiencia en temas académicos es crear
fragmentos conceptuales, saltos mentales que unen pedazos dispersos de información a
través del significado. El concepto de fragmentos neurales se aplica también a los
deportes, a la música, al baile, y en realidad, a todo lo que los humanos puedan lograr
hacer bien. Básicamente un fragmento significa una red de neuronas que suelen
dispararse juntas para que puedas tener un pensamiento o realizar una tarea suave y
eficazmente. La práctica enfocada y la repetición, la creación de fuertes huellas de
memoria, nos ayudan a crear fragmentos. El camino hacia la experiencia se construye
poco a poco, fragmentos pequeños se van haciendo más grandes y toda la
experiencia sirve para apuntalar interpretaciones más creativas a medida que vas
dominando el material. En otras palabras, como lo veremos más tarde, no hacen falta sólo
práctica y repeticiones en la construcción de fragmentos para dominar el material que
estás aprendiendo. Hacer fragmentos ayuda a tu cerebro a trabajar más eficazmente. Una
vez que haces un fragmento de una idea, un concepto o una acción, ya no necesitas
recordar todos los pequeños detalles subyacentes. Tienes la idea principal, el fragmento,
y eso es suficiente.
Es como vestirte por la mañana. Sólo tienes un sencillo pensamiento como, me voy a
vestir. Pero es sorprendente cuando nos damos cuenta del complejo espiral de actividades
subyacentes que se llevan a cabo a partir de ese fragmento simple de pensamiento. A
continuación, hablaremos sobre cómo se puede formar un fragmento.
En este video vamos a explicarles un poco el contexto relacionado con cómo hacer un
fragmento. Si están aprendiendo a tocar una canción difícil en la guitarra, la
representación neural de la canción en tu mente puede considerarse como un fragmento
bastante grande. Primero escucharías la canción, tal vez incluso verías a otra persona
tocando la canción, especialmente si eres un principiante que está aprendiendo cosas
como sostener la guitarra. Captar un sentido inicial del patrón que quieres dominar por ti
mismo es similar para el caso de la mayoría de los temas o destrezas. A veces tienes que
captar pequeños pedazos de canciones que se convierten en fragmentos, que a su vez se
van uniendo en fragmentos más grandes. Por ejemplo, durante varios días, podrías
aprender cómo colocar suavemente los acordes en una guitarra y cuando los has
dominado, los podrías unir a otros acordes que hayas aprendido, uniéndolos
gradualmente de modo que puedas tocar la canción.
Cuando aprendes un deporte, digamos baloncesto, fútbol o golf, tienes que captar y
dominar diversos trozos y pedazos de las destrezas necesarias. Estás creando pequeños
minifragmentos neurales que después puedes ir tejiendo gradualmente en fragmentos
neurales más grandes. Después, puedes unir esos fragmentos grandes convirtiéndolos en
fragmentos aún más grandes y más complejos a los que puedes recurrir en un instante, en
reacción por ejemplo a un leve cambio con giro de una pelota de fútbol que se atraviesa
en tu camino. Los mejores fragmentos son los que están tan bien incrustados que
ni siquiera tienes que pensar conscientemente en conectar y unir el patrón neural. De
hecho, ese es el punto de convertir ideas, movimientos o reacciones complejas en un
fragmento único. Puedes ver esto en el aprendizaje de idiomas. Muchas veces,
cuando estás empezando a aprender, hace falta mucha práctica sólo para lograr usar el
matiz, tono y acento apropiados de una única palabra. Encadenar oraciones improvisadas
involucra la capacidad de mezclar creativamente varios minifragmentos y fragmentos
complejos en el idioma nuevo. Para que entiendan lo que quiero decir, intenten repetir
el siguiente trabalenguas en el idioma indio de Kannada.
>> Hola, soy Shilpa Konkani. Soy un hablante nativo de Kannada que es uno de los
idiomas más antiguos que se hablan en la India. Hoy voy a compartir con Ustedes un
trabalenguas en Kannada. Entonces, comencemos. Terikere yri male muru kari kurimari
meyuthiddavu. >> No es fácil, ¿cierto? A menos de que sean hablantes nativos de
Kannada, pero el idioma fue aprendido poco a poco.
Aprender matemáticas y ciencia involucra el mismo enfoque. Cuando estás aprendiendo
material nuevo de matemáticas y ciencia, a menudo te dan muestras de problemas con sus
soluciones. Esto es porque, cuando estás tratando de entender por primera vez
cómo solucionar un problema, tienes una carga cognitiva pesada. Entonces, es una ayuda
empezar a trabajar usando un ejemplo. Es como oír una canción por primera vez antes de
intentar tocarla tú mismo. Muchos detalles de la solución están ahí y tú sólo tienes que
reconocer por qué se dieron esos pasos de esa forma. Esto te puede ayudar a ver los
rasgos clave y a subrayar los principios de un problema. Una inquietud que surge
en cuanto al uso de problemas de ciencia y matemática ya solucionados para empezar a
formar fragmentos es que puede ser demasiado fácil concentrarte en por qué funciona un
paso individual en vez de ver la conexión entre los pasos. Es decir, en por qué este paso
individual es lo siguiente que hay que hacer. Entonces, mantén en mente que no estoy
hablando sólo de un enfoque tipo cortador de galletas, haz lo que te digan, un enfoque en
el que no tengas que pensar, cuando estés siguiendo una solución que te dan ya lista. Es
más como usar un mapa que te ayude cuando estés viajando a un lugar nuevo. Préstale
atención a lo que pasa a tu alrededor cuando estés usando el mapa y pronto serás capaz
de llegar a cualquier lugar por tu cuenta. Incluso serás capaz de encontrar formas nuevas
de llegar. A continuación, les vamos a mostrar los pasos reales de la formación de
fragmentos. Soy Barbara Oakley. Gracias por Aprender a Aprender. Traducido por Lucía
Fernández. Oye, niña, algunas veces las cosas parecen difíciles, pero pronto pasará la
tormenta y estarás jugando en el patio. Oyes niña, a veces te puedes sentir triste, pero
algún día te darás cuenta de que todo en realidad no es tan malo. Solo es parte del
crecimiento
Ilusiones de competencia
En este video, hablaremos sobre algunas ideas esenciales para lograr organizar el
aprendizaje. La importancia de recordar, las ilusiones de competencia en el aprendizaje,
mini-exámenes y el valor de cometer errores. Uno de los métodos más comunes para
intentar aprender el material de un libro o de unas notas es simplemente volver a
leerlos. Pero el psicólogo Jeffery Karpicke ha demostrado que este método es en realidad
mucho menos productivo que otra técnica muy sencilla. Recordar. Después que has leído
el material, simplemente mira hacia otro lado, y verifica qué puedes recordar del material
que acabas de leer.
La investigación de Karpicke, publicada en el Journal Science, presenta evidencias
sólidas en esa línea. Los estudiantes estudiaron un texto científico y lo
practicaron recordando la mayor cantidad de información que pudieron. Luego volvieron
a estudiar el texto y volvieron a recordar. Es decir, intentaron una vez más recordar las
ideas clave. Los resultados fueron que en la misma cantidad de tiempo, con sólo practicar
y recordar el material, los estudiantes aprendieron más y a un nivel más profundo que con
todos los demás métodos, incluyendo volver a leer el texto varias veces, así como dibujar
mapas conceptuales, que supuestamente enriquecen las relaciones de los materiales
estudiados. Este aprendizaje mejorado se obtuvo cuando los estudiantes presentaron
exámenes formales, y también cuando se pusieron a prueba ellos mismos, informalmente.
Esto nos recuerda algo importante. Cuando recordamos conocimientos, no somos sólo
robots sin conciencia. El proceso de recordar en sí mismo realza el aprendizaje
profundo, y nos ayuda a comenzar a formar chunks. Es casi como si el proceso de
recordar ayudara a construir pequeños ganchos neurales en los que podemos colgar
nuestros pensamientos.
A los investigadores los sorprendió aún más que los mismos estudiantes predijeron que
simplemente leer y recordar el material no era la mejor manera de aprender. Ellos
pensaron que hacer mapas de conceptos y dibujar diagramas que mostraran las relaciones
entre los conceptos sería lo mejor. Pero si estás intentando construir conexiones
entre chunks, antes de que los chunks básicos estén incrustados en el cerebro, no funciona
tan bien. Es como intentar aprender estrategias avanzadas de ajedrez antes de siquiera
entender los conceptos básicos de cómo se mueven
las piezas. Usar el recuerdo, el recordar mentalmente las ideas clave, en vez de volver a
leer pasivamente, hará que tu tiempo de estudio sea más enfocado y efectivo. Parece que
la relectura sólo es efectiva si dejas que pase algún tiempo entre unas lecturas y otras, de
modo que se convierta como en un ejercicio de repetición espaciada. Una manera
de pensar en este tipo de aprendizaje y recuerdo se muestra aquí. Como lo mencioné
antes, hay cuatro ranuras en la memoria de trabajo. Cuando estás empezando a aprender
cómo entender un concepto o una técnica para resolver un problema toda tu memoria de
trabajo se involucra en el proceso, como lo demuestra este nudo de conexiones enredadas
entre las 4 ranuras de la memoria de trabajo. A medida que fragmentas el
concepto, sentirás que se conecta más fácil y suavemente en tu mente. Una vez que el
concepto está fragmentado, sólo usa una ranura de la memoria de trabajo, y al mismo
tiempo se convierte en una hebra suave que es fácil de seguir y usar para hacer conexiones
nuevas. El resto de tu memoria de trabajo queda libre. De cierto modo, esa hebra de
material fragmentado ha aumentado la cantidad de información que está a la disposición
de tu memoria de trabajo. Es como si la ranura de tu memoria de trabajo fuera un
hiperenlace que se ha conectado a una página web grande y amplia. Ahora pueden
entender por qué es clave que sean Ustedes mismos los que resuelvan el problema o
dominen el concepto. Entonces, alguien escribió el manual de soluciones, o el libro de
cualquier tema que estén Ustedes estudiando. Si sólo ves la solución, por ejemplo y
piensas, sí, ya sé por qué hicieron eso. Entonces, la solución no es realmente tuya. Casi
no has hecho nada para tejer esos conceptos en tu propio circuito neural
subyacente. Simplemente darle un vistazo a una solución y pensar que realmente lo sabes
tú mismo es una de las ilusiones de competencia más comunes que hay en el aprendizaje.
Tienes que tener información que persista en tu memoria si vas a dominar el material
suficientemente bien para salir bien en los exámenes y pensar creativamente con él.
Igualmente, les sorprenderá saber que hay que resaltar y subrayar muy
cuidadosamente. De lo contrario, no sólo es ineficiente, sino que puede ser engañoso. Es
como si el haber hecho movimientos con tu mano te hiciera creer que colocaste el
concepto en tu cerebro. Si marcas el texto, intenta buscar las ideas principales antes de
marcar nada, e intenta subrayar o resaltar lo mínimo posible, una oración o menos por
cada párrafo Por otra parte, escribir palabras o notas en el margen, resumiendo conceptos
clave, es una idea muy buena. Jeff Karpicke, el mismo investigador que ha hecho el
importante trabajo relativo al recuerdo, también ha investigado un tema relacionado
con importante para que se hagan expertos en lo que están aprendiendo. La razón por la
que a los estudiantes les gusta releer sus notas o libros, es que cuando tienen el libro o
Google abierto frente a ellos, les da la ilusión de que el material también está en sus
cerebros. Pero en realidad no está, porque puede ser más fácil mirar el libro en lugar
de recordar, y los estudiantes persisten en sus ilusiones, estudiando de una manera que
simplemente no es muy efectiva. Esto nos recuerda que sólo querer aprender el material,
y y dedicarle mucho tiempo a hacerlo, no garantiza que en realidad lo aprendas. Una
manera muy útil para asegurarte de que estás aprendiendo y no engañándote con ilusiones
de competencia, es ponerte a prueba a ti mismo con respecto a lo que estés estudiando. De
algún modo, eso es lo que haces al recordar. Es permitirte ver si en realidad captaste o no
una idea. Si cometes un error mientras lo haces, en realidad es algo muy positivo. Por
supuesto que no te conviene repetir tus errores, pero es muy valioso cometer errores en
tus pequeños miniexámenes antes de presentar los verdaderos, porque te permiten hacer
reparaciones, y al corregir tus errores poco a poco corriges tu pensamiento, lo que
te ayuda a aprender cada vez mejor. Como saben, recordar es una herramienta poderosa.
Pero hay otro consejo útil. Refrescar el material fuera de tu lugar usual de estudio también
puede ayudar a fortalecer tu aprendizaje. No te das cuenta, pero cuando estás aprendiendo
algo nuevo, a menudo tomas pistas subliminales de la habitación donde estabas y el
espacio que te rodeaba en el momento en que estabas aprendiendo originalmente el
material. Esto te puede desorientar cuando presentas un examen, porque generalmente lo
presentas en una habitación diferente de la habitación en la que estudiaste. Al recordar y
pensar en el material cuando estás en diversos ambientes físicos, te independizas de las
pistas que te da un lugar específico. Eso te ayuda a evitar el problema de que la habitación
no sea la misma en la que originalmente te aprendiste el material. Soy Barbara Oakley,
gracias por Aprender a Aprender. Es valioso cometer errores, porque eres pequeña. Está
bien. Regresa al principio de ésta.
¿Qué te motiva?
Al aprender una nueva idea, por ejemplo, una nueva palabra de vocabulario o un nuevo
concepto o un nuevo enfoque para resolver problemas, a veces tiendes a practicarlo una
y otra vez durante la misma sesión de estudio. Un poco de esto es útil y necesario, pero
seguir estudiando o practicando después de que has dominado aquello que puedes en una
sesión, es llamado sobreaprender. El sobreaprendizaje puede servir. Puede producir una
automaticidad que puede ser importante cuando estás ejecutando un saque en el tenis, o
tocando un concierto de piano perfecto. Si te agobias en los exámenes o al hablar en
público, el sobreaprendizaje puede ser valioso. ¿Sabías que incluso los oradores públicos
expertos practican cerca de 70 horas para una charla TED típica de 20 minutos ? La
automaticidad puede de hecho, ser útil en tiempos de nerviosismo, pero Pero ten cautela
con el sobreaprendizaje repetitivo durante una sola sesión. Las investigaciones han
demostrado que eso puede ser un desperdicio de tiempo de aprendizaje. La realidad es
que una vez captada la idea básica durante una sesión, seguir martillándola durante la
misma sesión no fortalece las conexiones de memoria a largo plazo que deseas
fortalecer. Peor aún, concentrarte en una sola técnica es un poco como aprender
carpintería si practicas sólo con un martillo. Después de un rato, piensas que puedes
arreglar cualquier cosa sólo con darle una paliza. Usar una sesión subsiguiente de estudio
para repetir lo que estás intentado aprender está bien, y es a menudo valioso. Puede
fortalecer y profundizar tus patrones neurales fragmentados. Pero ten cuidado. Repetir
algo que ya sabes perfectamente bien es fácil, admítelo. También puede darte la ilusión
de competencia de que has dominado todo el material, cuando de hecho, sólo has
dominado la parte fácil. En lugar de esto, te conviene balancear tus estudios
concentrándote deliberadamente en lo que te resulta más difícil. Concentrarse en el
material más difícil es llamado práctica deliberada. Con frecuencia esto es lo que hace la
diferencia entre un buen estudiante y un excelente estudiante.
Todo esto está también relacionado con un concepto conocido como Einstellung. En este
fenómeno, un simple pensamiento inicial, una idea que ya tienes en mente o un patrón
neural que ya has desarrollado y fortalecido, puede impedir que encuentres una mejor
idea o solución. Vimos esto en la imagen de pinball del modo enfocado, cuando tu pelota
inicial de pensamiento fue a la parte superior del cerebro, pero el patrón de pensamiento
de la solución estaba en la parte inferior.
Los apiñados cojines del modo enfocado y los patrones anteriores que creaste pueden
crear una especie de bache, que te impide saltar hacia un nuevo lugar donde la solución
pueda ser encontrada. Por cierto, la palabra alemana "Einstellung" quiere decir
mentalidad. Básicamente puedes recordar al Einstellung como la instalación de un
bloqueo de carretera, debido a la manera en la que estabas mirando algo
inicialmente. Este tipo de enfoque equivocado es especialmente fácil de hacer en
deportes y en ciencia, por no mencionar otras disciplinas. Porque a veces, tu intuición
inicial acerca de lo que está sucediendo o acerca de lo que tienes que hacer es
engañosa. Tienes que desaprender tus ideas o enfoques previos equivocados incluso
mientras estás aprendiendo otras nuevas.
Un error significativo que los estudiantes a veces cometen al aprender aprendiendo es
saltar al agua antes de aprender a nadar. En otras palabras, empiezan a trabajar ciegamente
en sus tareas sin leer el libro de texto, sin asistir a clases, sin ver las lecciones en línea,
o sin siquiera hablar con alguien que sepa. Ésta es una receta para hundirse. Es como
permitir que un pensamiento brote aleatoriamente en la máquina de pinball del modo
enfocado, sin prestar atención realmente a dónde está se encuentra la solución. Entender
cómo obtener soluciones reales es importante en el aprendizaje y en la vida. Dominar un
tema nuevo significa no sólo aprender los fragmentos básicos, sino también cómo
seleccionar y usar diferentes fragmentos. La mejor manera de aprender eso es practicando
el ir saltando entre problemas o situaciones que requieran de diferentes técnica o
estrategias. Esto se llama intercalar o interleaving.
Una vez que has entendido bien la idea detrás de una técnica durante tu sesión de
estudio, como por ejemplo, has aprendido a manejar bicicleta con ruedas de
entrenamiento, comienza a intercalar tu práctica con problemas de diferentes tipos
o diferentes tipos de enfoques, conceptos, procedimientos. A veces esto puede ser un
poco difícil de hacer. Por ejemplo, a menudo una sección en particular de un libro se
dedica a una técnica específica, de modo que cuando vas a esa sección, ya sabes cuál
técnica vas a tener que usar. Pero de todos modos, hagan lo que puedan para mezclar su
aprendizaje. En ciencia y matemática en particular puede ayudar ver de antemano los
problemas más variados que a veces están al final de los capítulos. O pueden intentar
deliberadamente analizar por qué algunos problemas requieren de una técnica y no de
otra. Te conviene que tu cerebro se acostumbre a la idea de que sólo saber cómo usar un
único concepto, enfoque o una técnica de solución de problemas no es
suficiente. También tienes que saber cuándo usarlos. Intercalar tus estudios, asegurándote
de repasar para un examen, por ejemplo, saltando los problemas que aparezcan en
diferentes capítulos y materiales, a veces puede darte la impresión de un aprendizaje más
difícil pero en realidad te ayuda a aprender con más profundidad. Intercalar es
extraordinariamente importante. Aunque practicar y repetir es importante para ayudar a
construir patrones neurales sólidos que puedas recurrir, es la intercalación lo que ayuda a
comenzar a construir flexibilidad y creatividad. Es donde dejas el mundo de la práctica y
la repetición, y comienzas a pensar más independientemente. Cuando vas intercalando
dentro de un tema o una disciplina, comienzas a desarrollar tu poder creativo dentro de
esa disciplina. Cuando intercalas entre diversos temas o disciplinas, puedes hacer más
fácilmente nuevas conexiones interesantes entre fragmentos en los diferentes campos, lo
que puede realzar aún más tu creatividad. Por supuesto que toma tiempo desarrollar
fragmentos sólidos de conocimiento en diferentes campos, de modo que a veces hay una
compensación. Desarrollar experticia en diversos campos quiere decir que puedes traer
ideas nuevas de un campo a otro. Pero también quiere decir que tu experticia en un campo
o en el otro no es tan profunda como la de una persona que se especialice sólo en una
disciplina. Por otra parte, si sólo desarrollas experticia en una disciplina, puede que la
conozcas muy profundamente, pero puedes quedar atrincherado muy profundamente en
tu manera de pensar, y no seas capaz de manejar ideas nuevas.
El filósofo científico Thomas Kuhn descubrió que la mayoría de los cambios de
paradigmas en la ciencia son generados bien por personas jóvenes o por personas que se
habían entrenado originalmente en una disciplina distinta. Son personas que no se
quedaron fácilmente atrapadas en el einstellung, a quienes no se les bloquearon las ideas
a pesar de su entrenamiento anterior. Y por supuesto existe el viejo dicho que la ciencia
progresa de funeral en funeral, a medida de que mueren las personas atrincheradas a las
maneras antiguas de ver las cosas.
Finalmente, no cometas el error de pensar que el aprendizaje sólo ocurre en los temas y
tópicos que adquieres de los libros y maestros. Cuando enseñas a un niño como manejar
exitosamente a un bravucón, o arreglas una fuga de agua en el lavabo, o empacas una
maleta pequeña para un viaje de negocios a Hong Kong, todas las anteriores ilustran los
resultados de aspectos importantes en el aprendizaje. El físico Richard Feynman fue
inspirado en su trabajo ganador de Nobel por observar a alguien arrojar un plato durante
la cena en una cafetería. Mike Bowe, de las series de televisión "Trabajos Sucios"
y "Alguien tiene que hacerlo", enseña la importancia y la emoción que el apredizaje peude
tener en muchas disciplinas no académicas. Soy Barbara Oakley. Gracias por aprender
sobre el aprendizaje.
Resumen
En este video, voy a resumir algunas de las ideas principales de los videos de esta
semana. En otras palabras, vamos a fragmentar esta semana sobre fragmentación. Aquí
vamos. Los fragmentos son pedazos de información, neurocientíficamente hablando, que
se agrupan por el uso, y frecuentemente por el significado. Pueden imaginarse a un
fragmento como a una red centelleante de neuronas que sintetizan ideas o acciones clave
de forma compacta. Los fragmentos se pueden hacer más grandes y más complejos, pero
al mismo tiempo, son artículos a los que es fácil acceder, que se pueden ajustar como
cintas en las ranuras de tu memoria de trabajo. La mejor manera de construir fragmentos
es entendiendo la idea básica con atención y concentración, y practicando para ayudar a
profundizar tus patrones y ayudarte a visualizar el contexto más amplio. Simplemente
recordar, es decir, intentar recordar los puntos clave sin mirar la página, es una de las
mejores maneras de ayudar al proceso de fragmentación. Hacerlo ayuda a construir
ganchos neurales. Ayuda a entender mejor el material. También es bueno intentar
recordar el material en lugares diferentes al lugar donde aprendiste originalmente el
material, de modo que se arraigue más profundamente y se pueda acceder a
él independientemente de dónde te encuentres. Esto puede ser muy útil para los
exámenes. Transferencia es la idea de que un fragmento que has dominado en un área
con frecuencia te puede ayudar a aprender mucho más fácilmente fragmentos de
información de áreas diferentes, que pueden compartir sorprendentes cosas en común.
Intercalen su aprendizaje eligiendo diferentes conceptos, enfoques y técnicas para
practicarlos todos en una sola sesión. Los fragmentos son muy importantes, pero
no necesariamente fortalecen la flexibilidad, que también es importante para que se hagan
expertos en lo que están aprendiendo. Ilusiones de competencia en el aprendizaje.
Aprendan a reconocer cuándo se están engañando a Ustedes mismos, creyendo que
realmente se están aprendiendo el material. Pónganse a prueba con frecuencia usando
mini exámenes para ver si realmente se están aprendiendo el material, o si se han estado
engañando a Ustedes mismos, creyendo que están aprendiendo cuando en realidad no es
cierto. Recordar es en realidad una forma de mini exámenes. Intenten evitar depender
demasiado de resaltar, que los puede engañar haciéndolos creer que el material se está
yendo a su cerebro cuando no es verdad. Los errores son buenos durante el
aprendizaje. Te permiten captar las ilusiones de competencia.
Eviten practicar sólo las cosas fáciles, que les puede hacer sentir la ilusión de que han
dominado el material. Practiquen deliberadamente lo que les parezca más difícil
para dominar completamente el material.
Einstellung es cuando tu pensamiento inicial, una idea que ya tenías en mente, o un patrón
neural que ya habías desarrollado bien y fortalecido, impide que encuentres una mejor
idea o solución, o te impide que seas lo suficientemente inteligente para aceptar
soluciones nuevas, mejores o más apropiadas. La Ley de la Casualidad es útil. La Dama
de la Fortuna favorece La Dama de la Fortuna favorece a los que intentan. intentando, y
los sorprenderán agradablemente los resultados
Semana 3
La razón por la que aprender a evitar la procrastinación es tan importante es que el buen
aprendizaje es una actividad paulatina. Les conviene evitar el abarrotamiento, que no
construye estructuras neurales sólidas. Dedicándole la misma cantidad de tiempo al
aprendizaje, pero espaciando ese aprendizaje comenzando antes, podrán aprender
mejor. Lo primero es lo primero. Al contrario de la procrastinación, en la que es fácil
caer, la fuerza de voluntad es difícil de encontrarla. Usa muchos recursos neurales. No es
conveniente desperdiciar fuerza de voluntad en controlar la procrastinación, salvo cuando
sea absolutamente necesario. Sobre todo, porque como verán, no hace falta. Se recordarán
de que procrastinamos en relación con cosas que nos ponen un poco incómodos. Cuando
piensas en algo que no te gusta particularmente y se encienden los centros de dolor de tu
cerebro, mudas tu atención y la enfocas hacia algo más agradable. Esto te hace sentir
mejor, al menos temporalmente. Pero tristemente, los efectos a largo plazo de evitar las
cosas sistemáticamente pueden ser perniciosos. Cuando postergas tus estudios, puede ser
más doloroso todavía pensar en estudiar. Puedes sofocarte en los exámenes porque no has
creado las firmes bases neurales que necesitas para sentirte cómodo con el material. La
procrastinación puede ser un mal hábito monumentalmente importante, como una piedra
angular, es decir, un hábito que influye en muchas áreas importantes de tu vida. Si
mejoras tus capacidades en esta área, gradualmente sucederán muchos otros cambios
positivos. La procrastinación comparte características con la adicción. Ofrece excitación
y alivio temporales contra la realidad, que a veces es aburrida. Es fácil engañarte a ti
mismo, por ejemplo, y pensar que lo mejor que puedes hacer en un momento dado es
navegar por la web buscando información, en lugar de leer el libro de texto o hacer los
problemas que te asignaron. Puede que comiences a buscar excusas y cuentos. Por
ejemplo, puedes pensar que la química orgánica requiere de razonamiento espacial, que
es tu debilidad, y que por eso obtienes malos resultados. Creas excusas irracionales que
suenan superficialmente razonables, como que si estudias con demasiada anticipación se
te olvidará el material. Si tienes problemas de procrastinación, puede que incluso te digas
a ti mismo que la procrastinación es una característica innata que no se puede cambiar.
Después de todo, si se pudiera curar fácilmente, ¿no te la hubieras curado ya? Sin
embargo, mientras más arriba vayas en tus estudios, más importante es que controles tu
procrastinación. Los hábitos que te sirvieron en años más tempranos pueden voltearse y
morderte. En estos vídeos les voy a enseñar como pueden convertirse en amos de sus
hábitos. Ustedes deben tomar las decisiones, no sus hábitos, esos zombies que
tienen buenas intenciones pero no piensan. Como verán, las estrategias para manejar la
procrastinación son sencillas. Sólo que a veces no son intuitivamente obvias. Entonces,
regresemos a esa historia con la que comenzamos este video. Los que comieron arsénico
comenzaron con dosis diminutas de arsénico. En dosis diminutas, el arsénico no parece
dañino. Incluso puedes inmunizarte contra sus efectos. Esto te puede permitir tomar dosis
más grandes y verte sano, aún cuando el veneno esté aumentando lentamente tu riesgo de
cáncer y te esté destruyendo los órganos. Del mismo modo, los procrastinadores sólo
postergan una cosita pequeña. Lo hacen una y otra vez, y se van acostumbrando a
hacerlo. Puede que hasta se vean sanos, pero los efectos a largo plazo no son buenos.
Imagínense que van a salir conduciendo un automóvil por primera vez en su vida. Para
algunos de ustedes, eso puede ser una propuesta emocionante. Esta primera vez estarían
como en una situación de hiperalerta. La avalancha de información que les estaría
llegando podría hacer que la tarea se hiciera casi imposiblemente difícil. Pero, una vez
que has fragmentado la tarea de conducir el automóvil, lo único que tienes que hacer es
pensar, allá vamos. Y allá vas. Tu cerebro se pone como en modo zombie, donde sólo
está semi consciente de algunos factores clave, en lugar de sentirse abrumado por la gran
cantidad de información. Es la misma idea que cuando montas bicicleta. Al principio, es
muy difícil, después es más fácil. Neurocientíficamente hablando, fragmentar se
relaciona con los hábitos. El hábito es un ahorrador de energía para nosotros. Nos
permite liberar nuestra mente de otros tipos de actividades. Adoptamos este modo
habitual zombie mucho más a menudo de lo que se pueden imaginar. De eso se tratan los
hábitos, no hay que pensar de modo enfocado en lo que estás haciendo mientras que estás
ejecutando el hábito. Ahorra energía. Los hábitos pueden ser buenos y malos. Pueden ser
breves, como cepillarte el cabello sin darte cuenta. O pueden ser largos, como por ejemplo
cuando das una caminata, o cuando ves televisión por algunas horas después de que llegas
a casa del trabajo. Se puede considerar que los hábitos tienen cuatro partes. La primera es
el estímulo. Es el disparador que desencadena al modo zombie. El estímulo puede ser algo
tan simple como leer la primera cosa de tu lista de cosas por hacer. Es hora de comenzar
la tarea de la próxima semana. O ver un mensaje de texto de un amigo. Es hora de dejar
de trabajar. Un estímulo en sí mismo no es ni útil ni dañino, es la rutina. Lo que hacemos
en reacción a ese estímulo es lo que importa. Número 2, la rutina. Éste es tu modo
zombie. La respuesta usual de rutina que tu cerebro está habituado a dar cuando recibe el
estímulo. Las respuestas zombie pueden ser útiles, inofensivas o a veces dañinas. Número
3, la recompensa. Todo hábito se desarrolla y continúa debido a que nos recompensa. Nos
da una pequeña sensación inmediata de placer. La procrastinación es un hábito fácil
de desarrollar porque la recompensa, que es volver el foco de tu mente hacia algo más
placentero, sucede muy rápida y fácilmente. Pero los buenos hábitos también se pueden
recompensar. Encontrar formas para recompensar los buenos hábitos de estudio es
importante para escapar de la procrastinación. Número 4, creer. Los hábitos tienen poder
debido a que crees en ellos. Por ejemplo, puedes sentir que nunca podrás ser capaz de
cambiar tu hábito de postergar los estudios hasta la última hora. Para cambiar un hábito,
necesitarás cambiar tu creencia subyacente.
En este video, vamos a ver cómo pueden Ustedes aprovechar sus poderes zombie de
hábito para evitar la procrastinación y al mismo tiempo usar al mínimo la fuerza de
voluntad. No tienen que hacer un cambio total de sus viejos hábitos. Sólo tienen que
anular parte de ellos y desarrollar unos nuevos. El truco para anular un hábito es buscar
cambiar tu reacción a un estímulo. Sólo tienes que usar la fuerza de voluntad para cambiar
tu reacción al estímulo. Para entender esto, ayuda volver a ver los cuatro componentes del
hábito y re-analizarlos desde la perspectiva de la procrastinación. La primera es el
estímulo. Identifiquen qué los lleva a su modo zombie de procrastinación. Los estímulos
usualmente caen en una de las cuatro siguientes categorías. Ubicación, hora, cómo te
sientes y reacciones, sea a otras personas o a cosas que acaban de suceder. ¿Buscas algo
en la web y después te pones a navegar en la web? ¿Si recibes un mensaje de texto,
interrumpes tu estudio por 10 minutos hasta que logras recuperar la concentración,
incluso cuando estás intentando mantenerte en tus tareas? Lo que sucede con la
procrastinación es que como es un hábito automático, a menudo no te das cuenta de que
comenzaste a procrastinar. Puedes frenar la mayoría de los estímulos apagando tu
teléfono móvil o manteniéndote lejos de la Internet y otras distracciones durante períodos
breves de tiempo, tal como cuando estás haciendo un pomodoro. Número dos, la
rutina. Digamos que en lugar de dedicarte a estudiar, con frecuencia distraes tu atención
hacia algo menos doloroso. Tu cerebro quiere ir hacia su rutina cuando recibes tu
estímulo. Entonces, es en la reacción al estímulo donde debes enfocarte activamente a
reprogramar tu viejo hábito. La clave para reprogramar es tener un plan. Desarrollar un
nuevo ritual puede ser útil. Algunos estudiantes agarran el hábito de dejar su teléfono en
el carro cuando van a una clase, con lo que eliminan una potente distracción. Muchos
estudiantes han descubierto el valor de instalarse en un rincón quieto de la biblioteca o
más cerca de su hogar, o los efectos productivos de simplemente sentarse en una silla
favorita en una hora apropiada con todos los accesos a Internet desconectados. Puede que
el plan no les sirva perfectamente al principio, pero perseveren. Ajusten el plan si es
necesario, y disfruten la victoria cuando el plan funcione. No intenten cambiar todo al
mismo tiempo. La técnica Pomodoro puede servir especialmente para cambiar la reacción
a los estímulos. El número tres es la recompensa. Esto a veces exige un poco de
investigación. ¿Por qué estás procrastinando? ¿Lo puedes sustituir con una compensación
emocional, tal vez un sentimiento de orgullo por lograr algo, incluso si es una pequeña
sensación de satisfacción? ¿Puedes ganar una pequeña apuesta interna, o un concurso
sobre algo que conviertas en un juego personal, o permitirte consentirte con un
sabroso café, o leyendo un poco en tu sitio web favorito, o permitirte a ti mismo pasar
una noche ociosa viendo televisión o navegando por Internet sin sentirte culpable? Y te
podrías dar una recompensa más grande cuando logres cosas más importantes. Tal vez
podría ser entradas para el cine, o comprarte un suéter, o algo frívolo. Recuerden que los
hábitos son poderosos porque crean antojos neurológicos. Puede ser útil agregar una
nueva recompensa si quieres superar tus antojos previos. Sólo cuando tu cerebro
comience a esperar la recompensa, se crearán las conexiones que te permitirán
crear nuevos hábitos. Muchas personas encuentran que fijar la recompensa a una hora
específica, por ejemplo, ir con un amigo a comprar almuerzo a mediodía, o detener el
trabajo principal a las 5 p.m., se convierte en una sólida mini meta que puede ayudarte a
estimular tu trabajo. No se sientan mal si al principio no logran que el proceso fluya. A
veces encuentro que hay que pasar días de penoso trabajo, y hacer varios ciclos de la
técnica de pomodoro, antes que todo empiece a fluir. Y me encuentro comenzando a
trabajar en un nuevo tema. También recuerden que en la medida en que vayan
mejorando en una tarea, esa tarea se va haciendo más agradable.
El número cuatro es creer. La parte más importante de cambiar el hábito de procrastinar
es creer que lo puedes lograr. Les puede suceder que cuando las cosas se vuelvan
estresantes, les apetezca regresar a los viejos hábitos que les resultan más cómodos. Creer
que su nuevo sistema funciona es lo que va a hacer que lo superen. Una cosa que puede
apuntalar este trabajo es que desarrollen una nueva comunidad. Reúnanse con
compañeros de clase, o reúnanse virtualmente con amigos, que puedan tener esa filosofía
positiva que Ustedes quieren desarrollar. Desarrollar y estimular una cultura con amigos
que piensan igual puede ayudarnos a recordar los valores, que en momentos de debilidad
tendemos a olvidar.
Profundizar en la memoria
Resumen de memoria
4 Semana
Cómo ser un mejor estudiante
Esta semana vamos a hablar de un montón de ideas importantes y técnicas que los
ayudarán a visualizar y mejorar su capacidad para aprender bien, usando metáforas y
analogías, para aprovechar el trabajo en equipo en lugar de socavar sus propias fortalezas,
y, por último, para que obtengan buenos resultados en los exámenes. Un pensamiento
importante antes de empezar los videos de esta semana. El aprendizaje no progresa
lógicamente, es decir, no va agregando cada día un ordenado paquete adicional a nuestra
cobertura de conocimiento. A veces, te topas con una pared en cuando estás construyendo
tu entendimiento. Las cosas que tenían sentido antes pueden repentinamente parecer
confusas. Este tipo de colapso del conocimiento parece ocurrir cuando tu mente
está restructurando tu entendimiento, construyendo una base más sólida. En el caso de los
estudiantes de idiomas, experimentan períodos ocasionales en los que el idioma
extranjero de pronto parece totalmente incomprensible. Recuerden que toma tiempo
asimilar el conocimiento. Atravesarán inevitablemente algunos períodos en los que
parezca que están retrocediendo en vez de avanzar en la comprensión de un material. Éste
es un fenómeno natural que significa que su mente está luchando profundamente con el
material. Encontrarán que cuando emergen de estos períodos de frustración temporal, su
base de conocimiento dará un paso sorprendente hacia adelante.
Una de las mejores cosas que pueden hacer, no sólo para recordar, sino para entender
conceptos, es crear para ellos metáforas o analogías. En general, mientras más visuales,
mejor. Una metáfora no es más que darse cuenta de que una cosa se parece de algún modo
a otra. Ideas sencillas, como la descripción que puede dar un profesor de geografía
explicando que Siria se parece a un bol de cereal (por la pronunciación en inglés de ambas
palabras), o imaginar a Jordania como un zapato Nike Air Jordan, son recursos que
puedes recordar por décadas. Si estás intentando entender la corriente eléctrica, te puede
ayudar visualizarla como agua. Del mismo modo, el voltaje eléctrico se puede sentir
como presión, como un empujón. A medida que van subiendo a comprensiones más
sofisticadas de cualquier tópico en el que se estén concentrando, pueden revisar sus
metáforas o desecharlas y crear otras más significativas. Las metáforas y la visualización,
ser capaces de ver algo con el ojo de la mente, han sido muy útiles no sólo en el arte y la
literatura, sino también permitiéndole al mundo de la ciencia y la ingeniería que
progresen. En los años 1800, por ejemplo, cuando los químicos comenzaron a imaginarse
y a visualizar el mundo miniatura de las moléculas, hubo un progreso dramático. Aquí
ven una divertida imagen de unos monos en un anillo de benceno, en una parodia para
iniciados de la publicación German Academic Chemical Life, impresa en 1886. Noten los
enlaces simples en las manos de los monos y los enlaces dobles en sus pequeñas colas.
Con frecuencia te puede ser útil imaginarte que eres el concepto que estás
intentando entender. Te puedes poner las pantuflas tibias y peludas de un electrón que va
recorriendo una losa de cobre, o te puedes colar en el interior de la X de una ecuación
algebraica y sentir cómo se siente asomar la cabeza por la madriguera del conejo. Pero
no vayas a dejar que te explote dividiéndola inadvertidamente entre cero. En química,
compara a un catión con un gato que tiene patas (paws, en inglés) y por tanto es pawsitivo,
y a un anión con una cebolla (onion, en inglés), que es negativo, porque te hace llorar.
Las metáforas nunca son perfectas, pero en la ciencia, todos los modelos no son más que
metáforas, lo que quiere decir que en algún momento se rompen. Pero no se preocupen
por eso. Las metáforas y los modelos con frecuencia son de vital importancia para dar un
entendimiento físico de la idea central que está detrás del proceso o concepto que estás
intentando entender.
Es interesante que las metáforas y las analogías sirven para sacar a la gente de Einstellung,
es decir, que se bloqueen pensando en un problema del modo equivocado. Por ejemplo,
usar la sencilla imagen de diferentes soldados que atacan una fortaleza desde muchas
direcciones diferentes al mismo tiempo puede abrir caminos creativos para que los
estudiantes vean cómo muchos rayos de baja intensidad se pueden usar para destruir un
tumor cancerígeno. Los cuentos, incluso si se usan sólo como tontos trucos para
memorizar, también te pueden permitir que retengas más fácilmente lo que estás
intentando aprender. Las metáforas también ayudan a que las ideas se peguen en tu
mente, porque se conectan a estructuras neurales que ya están allí. Es como trazar un
patrón usando papel de calcar. Las metáforas te permiten que al menos tengas una idea
de lo que está sucediendo. Soy Barbara Oakley. Soy Barbara Oakley. Gracias por
Aprender a Aprender. Traducido por Lucía Fernández. Global Translator Community.
Si algunos de Ustedes se estresan durante los exámenes, tomen en cuenta que el cuerpo
segrega químicos como la cortisona cuando está bajo estrés. Esto puede hacer que te
suden las palmas de las manos, que sientas un nudo en el estómago. Pero es interesante,
que las investigaciones demuestran que cómo interpretes estos síntomas, cómo expliques
por qué estás estresado, hace una gran diferencia. Si en vez de pensar, este examen me da
mucho miedo, piensas, este examen me emociona y quiero obtener un
excelente resultado, realmente puedes mejorar tu desempeño. Otro buen consejo para los
que entran en pánico durante los exámenes es que le presten atención por un momento a
su respiración. Relajen el estómago, coloquen la mano sobre él, y respiren lenta y
profundamente. Se les debe mover la mano, a medida que todo el pecho se va
expandiendo hacia afuera como un barril. Haciendo este tipo de respiración profunda,
están contrarrestando la respuesta de huida que alimenta la ansiedad. Esto los calmará.
Pero no comiencen a usar este tipo de respiraciones el mismo día del examen. Si practican
estas técnicas de respiración durante las semanas anteriores, sólo hará falta que lo hagan
uno o dos minutos. Se deslizarán más fácilmente hacia ese patrón de respiración durante
el examen. Recuerden, la práctica logra fijar los conocimientos. Es especialmente útil
pasar deliberadamente a un patrón de respiración profunda en esos momentos finales de
ansiedad justo antes de entregar el examen. Excelente profesores de todo el mundo me
han dado muy buenos consejos para presentar exámenes, y aquí están algunos de
los mejores. Susan Sajna-Hebert, profesora de psicología de la Lakehead University, le
aconseja a sus estudiantes que tapen las respuestas de las preguntas de selección
múltiple e intenten recordar la información, de modo que respondan las preguntas por su
cuenta primero. Si sus estudiantes se quejan diciendo que los exámenes de práctica eran
más fáciles que el verdadero, ella les pregunta, ¿qué hay de diferencia entre las dos
situaciones? Cuando respondiste el examen de práctica, ¿estabas en tu casa relajado
viendo dibujos animados? ¿Lo respondiste con un compañero? ¿Sin límite de
tiempo? ¿Tenías a mano los materiales dados en clase? Estas circunstancias no son
exactamente las mismas de un salón de clases repleto, con un reloj marchando inexorable
y sin ningún acceso a materiales. Tracy Magrann, profesora de ciencias biológicas en el
Saddleback College, le dice a sus estudiantes que enfrenten sus temores. Con
frecuencia tu peor temor es no obtener las notas que necesitas para estudiar la carrera que
elegiste. ¿Cómo puedes manejar esto? Es sencillo. Ten un plan B para una carrera
alternativa. Una vez que tengas un plan para la peor contingencia posible, te sorprenderás
al ver cómo disminuye tu temor. La Profesora Magrann dice, estudia duro hasta el día del
examen, y después relájate. Tienes que decirte a ti mismo, bien, vamos a ver cuántas
preguntas respondo correctamente. Siempre podré estudiar la otra carrera que elegí. Esto
te ayudará a liberar el estrés, y así de hecho, saldrás mejor en el examen y estarás más
cerca de la carrera que es tu primera opción. Y Bob Bradwhaw, profesor de matemática
del Ohlone College, les habla a sus estudiantes de la preocupación buena y la
preocupación mala. La preocupación buena te ayuda proporcionándote motivación y
concentración, mientras que la mala simplemente desperdicia la energía. Aquí les dejo
unos pensamientos finales. El día antes de presentar un examen o exámenes denle
un último vistazo a los materiales para pulirlos. Necesitarán tanto sus músculos del modo
enfocado como los del modo difuso, por ponerlo así, para el día siguiente. Por eso, no
conviene que presionen demasiado a su cerebro. Sería igual que correr una carrera de 10
millas el día antes de correr un maratón. No se sientan culpables si no logran trabajar muy
duro el día antes de un examen importante. Si se prepararon bien, esto parece ser una
reacción natural, casi como si estuvieras retrocediendo inconscientemente para conservar
energía mental. Cuando estés presentando un examen, recuerda cómo tu mente te puede
engañar, haciendo que pienses que lo que hiciste está correcto, aunque no lo esté. Esto
quiere decir que, siempre que puedas, debes parpadear, cambiar tu atención, y después
revisar dos veces tus respuestas usando una perspectiva amplia, preguntándote a ti mismo
si esto realmente tiene sentido. A menudo hay más de una manera de responder una
pregunta, y revisar tus respuestas desde diferentes perspectivas te da una oportunidad de
oro para verificar lo que has hecho. Si no hay otra manera de revisar que no sea retroceder
y usar la lógica, ten en mente que detalles sencillos han hecho tropezar a los estudiantes
más avanzados. Sólo haz lo mejor que puedas. En las clases de ciencia, emparejar tus
unidades de medida en ambos lados de la ecuación te puede dar pistas importantes con
respecto a si lo que hiciste está correcto. El orden en que respondas tus exámenes también
es importante. Los estudiantes generalmente trabajan en sus exámenes desde la primera
página hasta la última. Cuando estés revisando tu trabajo, si lo haces yendo más desde
atrás hacia adelante, puede que le dé a tu cerebro una perspectiva más fresca, que te
permita descubrir los errores más fácilmente. Nada es totalmente seguro. Puede que
ocasionalmente estudies muy duro, pero que los dioses de los exámenes no cooperen.
Pero si te preparas bien, practicando y construyendo una sólida biblioteca mental, y usas
un enfoque sabio para presentar los exámenes, verás que tendrás cada vez más suerte.
Resumen
Esta semana, hemos hecho un repaso amplio a través de los aspectos más profundos del
aprendizaje. Las metáforas y las analogías no son sólo para el arte y la literatura. Una de
las mejores cosas que puedes hacer para recordar, y tabién comprender más fácilmente los
conceptos en muchos campos distintos, es crear una metáfora o analogía para
ellos. Frecuentemente, mientras más visual, mejor. Hemos aprendido del ganador del
Premio Nobel Santiago Ramón y Cajal que si cambias tus pensamientos, puedes
realmente cambiar tu vida. Parece ser que la gente puede estimular el desarrollo de sus
circuitos neuronales al practicar pensamientos que usan esas neuronas. Como Santiago
Ramón y Cajal, puedes sentirte orgulloso de apuntar hacia el éxito a pesar de todas las
cosas que hacen a otras personas decir que no puedes. Ten presente que cuando te
esfuerzas en una tarea o pregunta de una prueba y no miras atrás a revisar tu trabajo, estás
actuando un poco como una persona que se niega a usar partes de su cerebro No están
tomándote una pausa para un respiro mental y entonces revisitar lo que has hehco con la
perspectiva amplia en mente, para ver si tiene sentido. El exceso de confianza en tus
resultados puede se consecuencia de un solo modo de pensamiento. Por darle importancia
a estudiar un poco con tus amigos, puedes retomar más fácilmente donde tu pensamiento
se ha quedado estancado. Tomar un examen es un asunto serio, justo como los pilotos
aéreos y los doctores hacen listas de verificación antes de despegar y la cirugía, ir a
través de tu propia lista de verificación puede incrementar enormemente tu probabilidad
de éxito. Estrategias contraintuitivas como la técnica de inicio difícil saltando hacia lo
más fácil, puede dar a tu cerebro una oportunidad de reflexionar en retos más
difíciles incluso si estás más enfocado en otros problemas más directos. Aquí hay unos
últimos puntos importnates. EL cuerpo libera químicos cuando está bajo estrés. Como
interpretas la reacción de tu cuerpo a esos químicos hace toda la diferencia. Si tu cambias
tu pensamiento desde: este examen me tiene preocupado - hacia: este axamen me tiene
emocionado para dar lo mejor de mí, ayuda a mejorar tu desempeño. Si sientes pánico en
una prueba, momentáneamente presta atención a tu respiración. Relaja tu estómago, pon
tu mano en ella, y toma un respiro lento y profundo.
Tu mano debe moverse hacia afuera y tu pecho completo debería expandirse como un
barril. Tu mente puede engañarte a pensar que lo que has hecho es correcto incluso
cuando no lo es. Esto significa que mientras sea posible deberías pestañear, cambiar tu
atención, y volver a revisar tus respuestas usando una perspectiva amplia, preguntándote
a ti mismo, esto en realidad tiene sentido ? Y finalmente, recuerda que no dormir lo
suficiente la noche antes del examen puede negar cualquier otra preparación que hayas
hecho.