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UNIVERSIDAD PEDAGOGICA Y TECNOLOGICA DE COLOMBIA.

ESPECIALIZACION EN ALTA GERENCIA DE EMPRESAS

Trabajo presentado por: Erika Johana Figueroa Rincón

Trabajo presentado a: Docente: María Cayetana Pedraza

ENFOQUE GENRECIAL MODERNO: BENCHMARIKING

Existen diferentes enfoques gerenciales modernos que permiten dirigir una organización

según su perfil empresarial; esto con el fin de lograr “optimización de los recursos, la

disminución en los costos, el aumento en la productividad, el liderazgo en el mercado, un

mejor servicio, el aumento de la competitividad” (Suarez, 2016).

Teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente, el enfoque gerencial moderno que me

pareció más interesante fue el benchmarking, puesto que:

“es el proceso de obtener información útil que ayude una organización a mejorar sus

procesos. Esta información se obtiene de la observación de otras instituciones o empresas

que se identifiquen como las mejores (o suficientemente buenas) en el desarrollo de

aquellas actuaciones o procesos objetivos de interés. Benchmarking no significa espiar o

solo copiar. Está encaminado a conseguir la máxima eficacia en el ejercicio de aprender

de los mejores y ayudar a moverse desde donde uno esta hacia donde quiere estar”

(Confederación Granadina de Empresarios, s.f.).


Es así que, el benchmarking puede impactar de forma importante en los resultados obtenidos

por una empresa, debido a que se puede implementar en diferentes áreas de la misma, lo que

permite mejorar procesos, estrategias, conceptos, entre otros factores; con dichas mejoras en

el funcionamiento empresarial, se puede lograr un incremento en la eficiencia y mayor

competitividad a nivel local, nacional e internacional; debido a que hoy día una empresa no

solo debe pensar localmente, puesto que en la actualidad la globalización ha impactado de

forma importante a las organizaciones, razón por la cual, las mismas tienen que competir

teniendo en cuenta características empresariales internacionales; es por tanto, que las

organizaciones deben tener un amplio conocimiento de las diferentes practicas que realizan

otras empresas e identificar cuáles de estas prácticas se pueden implementar dentro de sus

estrategias y procesos productivos.

Todas las definiciones de benchmarking tienen en común cuatro puntos: desarrollar

ventajas competitivas, estudiar mejores prácticas de cualquier industria, comparar el

desempeño entre industrias para lograr una mejora en su organización y/o producción, es

un proceso de mejora continua (Llorente, s.f.).

Para obtener las características mencionadas, es importante recopilar nuevas ideas que

renueven las estrategias o procesos que no estén dando los resultados esperados; esto permite

tener una mejora continua en el área o las áreas empresariales en las que se determine que

necesitan cambios para incrementar la calidad y eficiencia. Además es importante no solo

analizar las características de las otras empresas sino también las propias para tener presente

el estado actual de la empresa, y con base en dicho estado, tomar decisiones que faciliten

avanzar hacia las metas deseadas.


El benchmarking se puede aplicar en diferentes áreas de una empresa, puesto que existen

distintos tipos de benchmarking, tales como: interno, externo o competitivo, funcional o

genérico, de desempeño, estratégico, de procesos (Suarez, 2016).

De esta manera, se evidencia la diversidad de enfoques para la aplicación del benchmarking,

lo que permite una amplia aplicación del mismo en las diferentes áreas/departamentos de la

empresa, analizando los mejores procesos de empresas líderes, para tomarlos como referencia

en relación con el área que deseamos mejorar para alcanzar un nivel más alto en eficiencia,

calidad y competitividad, dependiendo de la necesidad especifica que tenga dicha área o

departamento empresarial donde va a ser aplicado el enfoque gerencial de benchmarking.

Es importante destacar que como se ha mencionado en el texto, el benchmarking impacta

directamente la competitividad empresarial, razón por la cual, es importante tener en cuenta

que:

“… la competitividad se fundamenta en los factores internos de la empresa, más

específicamente, de la habilidad de las personas que administran la organización para

desarrollar capacidades o destrezas distintivas y generar alrededor de estas estrategias y

estructuras organizacionales adecuadas, eficientes y efectivas” (La competitividad y la

gestión empresarial, 2003).

Es así, que aplicando el enfoque gerencial de benchmarking se puede lograr diseñar nuevas

estrategias, métodos y técnicas, tomadas de empresas que sobresalen en el mercado, para

adaptárlas según el perfil empresarial y metas establecidas, de esta maneta se pude generar

un crecimiento en competitividad, puesto que las estrategias y estructura organizacional se

modifica para tener mayor eficiencia.


Finalmente es importante destacar que a través del benchmarking una empresa puede tener

mejora continua en sus procesos, estrategias, prácticas y otros factores, puesto que permite

medir con frecuencia los diferentes procesos empresariales y compararlos respecto a los

procesos de empresas líderes, adaptando dichos procesos según las circunstancias y las

características empresariales que posee.

Bibliografía

Confederación Granadina de Empresarios. (s.f). Benchmarking. Confederación

Granadina de Empresarios. España. Recuperado el 16 de septiembre de 2019, de

http://www.cge.es/portalcge/tecnologia/innovacion/4111benchmarking.aspx

Llorente, J.L.(s.g.). Benchmarking. Recuperado el 16 de septiembre de 2019, de

http://www.gestion-calidad.com/archivos%20web/benchmarking.pdf

Rodriguez, H. A. (2003). La competitividad y la gestión empresarial. Revista Escuela de

Administracion de Negocios , 132 - 143.

Suarez, S. J. (2016). Especializacion en Alta Gerencia de Empresas. Tunja, Colombia.

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