- Los científicos para determinar procesos ocurridos en la
tierra en el pasado, aplican las siguientes leyes, principios y métodos:
Ley de la Superposición
Esta ley establece: “que, en una secuencia no deformada de
rocas sedimentarias, cada estrato es más antiguo que el que tiene por encima y más joven que el que tiene por debajo”. Esta ley es aplicada también a otros materiales depositados en la superficie, como por ejemplo coladas de lava y estratos de ceniza de erupciones volcánicas.
Principio de la Horizontalidad Original
Este principio sostiene que los materiales, al depositarse de
acuerdo con la gravedad, lo hacen en capas horizontales sucesivas.
Cuando observamos estratos rocosos que son planos, deducimos
que no han experimentado alteración y que mantienen aún su horizontalidad original. Pero si está plegado o inclinado un cierto ángulo deben haber sido desplazados a esa posición por alteraciones de la corteza algún tiempo después de su depósito.
Principio de intersección
Cuando una falla atraviesa otras rocas, o cuando el magma hace
intrusión y cristaliza, podemos suponer que la falla o la intrusión es más joven que las rocas afectadas, a este principio se le llama principio de intersección.
Inclusiones
Las inclusiones son fragmentos de una unidad de roca que han
quedado encerrados dentro de otra. El principio se basa en lo siguiente: la masa de roca adyacente a la que contiene las inclusiones debe haber estado allí primero para proporcionar los fragmentos de roca. Por consiguiente, la masa de roca que contiene las inclusiones es la más joven de las dos.
Discontinuidades Estratigráficas o Discordancias
Cuando observamos estratos rocosos que se han ido depositando
esencialmente sin interrupción, decimos que son concordantes. A lo largo de la historia de nuestro planeta, el depósito de sedimentos se ha interrumpido una y otra vez. La ruptura en el registro litológico se denomina discontinuidad estratigráfica (hiato o laguna estratigráfica). Una discontinuidad estratigráfica representa un largo periodo durante el cual se interrumpió la sedimentación, la erosión eliminó las rocas previamente formadas y luego se reinició el depósito. Las discontinuidades estratigráficas son rasgos importantes ya que representan acontecimientos geológicos significativos de la historia de la Tierra. Correlación por criterios físicos La correlación a lo largo de distancias cortas suele conseguirse observando la posición de una capa en una secuencia de estratos. Correlacionando las rocas de un lugar con las de otro, es posible una visión más completa de la historia geológica de una región.
Aunque son importantes por sí mismos, sólo se comprende su
valor completo cuando se correlacionan con otras regiones. Cuando el objetivo, es la correlación entre áreas muy distantes o entre continentes, el geólogo dependerá de los fósiles.
Fósiles y correlación.
Cada época de sedimentación tiene unos fósiles característicos
–fósiles guía- que, además evolucionaron, siendo indicativos de la edad relativa de los materiales que los contienen. Dicho en otros términos, cuanto más antiguo -menos evolucionado- es el fósil, más antiguo es el material.
Paralelamente, se descubre la correlación entre tipo de fósil y
condiciones de formación, principio básico que supone que un fósil de ser marino debe haberse generado en este tipo de ambiente, ayudando con ello a determinar, además, las condiciones de la zona en aquel momento.
2.- Procesos que revelan los hechos ocurridos en el pasado con
respecto al origen de la tierra. Existen muchas teorías y procesos que revelan el origen de la tierra. La teoría más aceptada, fue postulada por el físico George Anthony Gamow (1904-1968), en el año 1948, denominada: el Big Bang. En ella se establece que el universo posiblemente se formó hace unos 10 mil o 15 mil millones de años, como consecuencia de una gigantesca explosión producida a partir de un átomo primigenio que era aún más pequeño que la cabeza de un alfiler. Inmediatamente después de la gran explosión, se cree que se originaron protones, neutrones, electrones y fotones, los cuales se encontraban a muy elevadas temperaturas. Estas partículas, al unirse formaron átomos de helio e hidrógeno, los primeros elementos que constituyeron la materia.
La teoría del Big Bang se sustenta en tres puntos:
El Universo se está expandiendo como resultado de la enorme
explosión. Se sabe que el Universo se expande porque las galaxias se están alejando unas de otras. Para medir su velocidad de alejamiento, los astrónomos se basan en la cantidad de energía que irradian las galaxias. Para ello, utilizan un aparato llamado espectrómetro que descompone la luz a manera de arco iris. Cuando los astros están más lejos de la Tierra, viajan a mayor velocidad y se desplazan hacia el color rojo (efecto Doppler).
La abundancia de elementos químicos en el universo es
constante; es decir podemos encontrar los mismos elementos (en forma de isótopos) en diferentes astros, aun cuando éstos se encuentren separados por grandes distancias. En 1965, los físicos Pensias y Wilson detectaron que la radiación que llega a la Tierra desde todas partes del universo proviene de una gran explosión que ocurrió hace 10 mil o 15 mil millones de años.
El modelo de expansión del universo se basa en que su
temperatura disminuye conforme pasa el tiempo, y esto se debe a que los gases se enfrían cuando se expanden. Algunos astrónomos piensan que nuestro universo se colapsará cuando tenga 1039 años de vida; las estrellas se apagarán y poco a poco tendrá menos actividad física.
4.- ¿Qué es la Geología?
La Geología es la ciencia que estudia la composición, estructura,
dinámica e historia de la Tierra, incluyendo sus recursos naturales (energía, minerales, agua…), así como los procesos que repercuten en su superficie y, por tanto, en el medio ambiente.
La Geología no se reduce a la simple contemplación de una roca,
mineral, fósil, o paisaje, ni tampoco el estudio de los grandes desastres naturales. Es mucho más.
La Geología es una ciencia básica y fundamental para atender
las necesidades de la sociedad. Su impacto en nuestras vidas es directo y absoluto. 5.-
En base a las huellas de las grandes revoluciones orogénicas y
de otros datos biológicos, geológicos y geofísicos, se ha formado un panorama de lo acontecido desde la solidificación de la corteza terrestre -hace unos 4000 Ma (millones de años)-, hasta la formación de la Pangea como sigue:
Las formaciones asociadas con los episodios orogénicos más
antiguos (2400-1200 Ma antes del presente), se encuentran distribuidas sobre casi todos los continentes y están modificadas por episodios más recientes.
Hace unos 700 Ma (Precámbrico tardío), dos grandes
paleocontinentes, Panáfrica y Baikalia, se unen para formar (paleo) Pangea; este continente se divide en (paleo) Norteamérica, (paleo) Europa, (paleo) Asia y (Paleo) Gondwana que incluía los actuales Sudamérica, África, Australia, Antártida e India hace aproximadamente 500Ma. Hace unos 400Ma Europa y Norteamérica se unen; posteriormente, hace 280Ma, Gondwana se une a Norteamérica y Europa y esta última con Asia hace aproximadamente 230Ma, formando así, el continente único que Wegener llamó Pangea.
La ruptura de la Pangea según las referencias indica que ocurrió
en cuatro etapas generales durante la era Mesozoica (245 s 65Ma): Formación de un Rift entre Laurasia y Gondwana, el océano atlántico en expansión separó Norteamérica de África seguido de un rifting entre Norteamérica y Sudamérica.
Ruptura y movimiento de los diversos continentes del Gondwana.
La Antártida y Australia, que ya se mantenían suturadas, se separaron de Sudamérica y África, mientras que la India se separó del supercontinente Gondwana y empezó a moverse hacia el norte.
Sudamérica y África empezaron a separarse, el extremo
oriental del mar de Tethys empezó a cerrarse debido a la rotación de Laurasia y al movimiento de África hacia el norte siendo este movimiento el precursor del presente mar Mediterráneo.
Para fines de la era, Australia y la Antártida ya se habían
separado, la India había llegado casi a la mitad del Ecuador; Sudamérica y África se habían apartado ampliamente; Groenlandia se había separado por completo de Europa y un rift la alejaba de Norteamérica para formar una masa de tierra aparte.
Origen geológico del continente americano
Vamos a remontarnos a unos 250-300 millones de años, cuando
las masas continentales conformaban un único supercontinente, a finales del Paelozoico y comienzos del Mesozoico. El territorio de la actual América del Norte y de América del Sur estaban allí, unido entre sí, se tocaban directamente por lo que pudiéramos denominar el actual México-Costa Rica y la zona norte colombiana-venezolana, los otros países centroamericanos que conocemos en la actualidad no existían. El territorio del actual Brasil estaba unido así en África.
Hace unos 184-175 millones de años, en el Jurásico Medio, se
comenzó a escindir lentamente en dos grandes masas. El actual territorio de América del Norte se empezó a separar del África actual; la grieta dejada fue el origen del Océano Atlántico Norte. El punto es que sobre 150 millones de años atrás, a comienzos del Cretácico, teníamos dos grandes masas claramente diferenciadas y separadas, lo que los científicos llaman Laurasia y Gondwana.
Laurasia
Era el bloque continental Norte. Estaba compuesto por las
actuales superficies de Europa, Asia, Norteamérica y Groenlandia.
Gondwana
Se trataba del bloque continental Sur; lo conformaban los
territorios de África, Sudamérica, India, Australia y la Antártida, que aún no se distinguían claramente entre sí.
Hace unos 140 millones de años Gondwana comenzó a
subdividirse y cada continente comenzó a diferenciarse. 40 millones de años después, Sudamérica y África comenzarían a separarse entre sí y de Gondwana oriental (India, Australia y Antártida). Luego ya era una realidad la separación entre África y Sudamérica.
A comienzos del Cenozoico (desde el Paleoceno y el Oligoceno
hace unos 66 millones de años), Laurasia se partió, cuando el territorio de la Actual América del Norte y Groenlandia se liberó de Eurasia.
Antillas mayores y menores
¿Cómo surgieron las Antillas?
Entre Norteamérica y Sudamérica hay una zona de subducción
muy larga ocupada por corteza volcánica oceánica y un arco volcánico. Hace aproximadamente 60 millones de años, al iniciarse el periodo terciario, esta zona referida se fraccionó dando nacimiento a una placa pequeña (Caribe) que se fue desplazando hacia el nororiente, colisionando con la barrera de las islas de las Bahamas. El arco volcánico frontal se erigió formando las Antillas mayores (Cuba,República Dominicana, Puerto Rico).
Esta misma placa desvió su dirección al oriente creando un nuevo
arco volcánico que daría inicio a lo que conocemos como Antillas Menores.
Hará unos 20 millones de años, la placa del Pacífico se dividió en
dos grandes partes a las que llamamos en la actualidad placas de Cocos y de Nazca. La primera se mueve hacia el nororiente impulsando la placa del Caribe y la segunda lo hace hacia el oriente colisionando con la placa de sudamérica, creando una zona de subducción a la que achacamos la actividad sísmica y volcánica tanto en Ecuador como Colombia.
Hace unos 15 millones de años y como resultado del accionar de
las dos placas arriba mencionadas, en el Mioceno, entre el sur de México y Costa Rica fueron apareciendo una cadena de volcanes en actividad que a la larga fueron dando origen a un gran archipiélago.
Hace unos 8 millones de años el conjunto de islas llegaba hasta
sudamérica
Hace aproximadamente 4 millones de años la actividad tectónica
fuerte fue cediendo al término del Mioceno y la mayor parte de las islas se iban juntando, formando un itsmo. El paisaje quedó configurado así: El Océano Pacífico y el mar Caribe solo se comunicaban con tres corredores marinos: uno en el actual lago de Nicaragua; el segundo en zona de Panamá y el lago Gatún; el tercero, mucho más grande que los anteriores, cubría una profunda depresión (geosinclinal de Bolívar) que iba desde el golfo del Urabá hasta la región donde desemboca el río San Juan, en el pacífico colombiano.
Hace tres millones de años, durante el Plioceno se consolidó la
separación total del mar Caribe y el Océano Pacífico. La llegada del Pleistoceno con sus cambios climáticos y glaciaciones, afianzó dicho puente terrestre entre Norte y Sudamérica.