LOS NUEVOS

HÉROES
Paso a los soldados del libro y de la pluma,
del surco y de la fragua,
que escriben poemas, empujan arados
y conquistan mundos,
y son como hilos transparentes de agua,
buenos y fecundos.

La paz los anima:

la fuerza gigante del amor los mueve,
y sus pies se hunden en la negra sima
o en la blanca nieve.

Sus manos no empuñan aceros que matan,

nunca derraman sangre fratricida,
sus manos no oprimen, no humillan, no atan:
sus manos escarban, siembran y desatan
las germinadoras fuentes de la vida.

Férreos paladines de la Patria, corren

a la encarnizada lid de la labor,
¡alta la serena frente, raudo el pie,
desplegando enormes banderas de amor,
esgrimiendo fuertes espadas de fe!

Nuevos paladines del progreso, van

a trazar el surco y a sembrar el grano
de sus ideales; les llama el clarín
del progreso, el rudo bregar cotidiano.

En cada uno de ellos pelea un hermano,

con cada uno de ellos se vence al tirano,
la Patria en la gloria se levanta al fin

Ismael Navarro Puentes