Sunteți pe pagina 1din 2

Voz La importancia de la voz en la comunicación

16 diciembre, 2014 por Eduvoz

El psicólogo alemán Albert Mehrabian demostró en los años ochenta la importancia de la voz en el
mensaje verbal. Ante un grupo de personas, el 38% del impacto viene determinado por la voz (el
timbre, el tono, el volumen, la velocidad del habla, la entonación, la vocalización, las pausas…) frente
a un 7% que corresponde a las palabras y el contenido del mensaje. Estamos hablando del 38% de
nuestra comunicación verbal, así que hay que cuidar lo que se dice, pero también, cómo se
dice. Veamos algunos aspectos de la voz que debemos tener en cuenta en ese sentido: La
articulación El primer requisito al hablar es hacerse oír y comprender por nuestro interlocutor, por
lo que es necesario tener una articulación flexible que nos permita vocalizar y pronunciar
correctamente. Pero, ¿cómo podemos conseguirlo? Conviene recordar que hablar, lo mismo que
andar, es una función motora, por eso, para hacernos entender sin esfuerzo, debemos trabajar
ejercicios de gimnasia de la mandíbula, los labios, la lengua y los mofletes. Estos ejercicios se llaman
logocinéticos y consisten en realizar movimientos como: abrir y cerrar la boca; sacar la lengua y
llevarla hacia arriba y hacia abajo; sonreír y cerrar la boca; inflar los mofletes y desinflarlos… Si
realizamos asiduamente este tipo de ejercicios, conseguiremos una articulación fluida y, en
consecuencia, se nos entenderá mejor. La velocidad del habla tan mala es hablar muy rápido como
excesivamente despacio. Si hablamos a toda velocidad, atropellando las sílabas y las palabras se nos
entenderá mal, cometeremos errores de pronunciación y produciremos la sensación de estar
nerviosos.

Si, por el contrario, hablamos muy lentamente, aburriremos y agotaremos la paciencia de quien nos
escucha. La velocidad adecuada está entre 135 y 170 palabras por minuto, por lo tanto si queremos
controlar la velocidad al hablar, debemos contar las palabras por minuto que pronunciamos en la
lectura de un texto y, según el resultado, practicar leyendo en voz alta, “cronómetro en mano”. Las
pausas El lenguaje oral, lo mismo que la música, está compuesto por sonidos y silencios. Para dar
sentido a nuestro mensaje hay que pronunciar correctamente los sonidos, pero también, respetar
los silencios.

Las pausas son necesarias por diversos motivos, el primero y más importante es la respiración,
podemos respirar sin hablar, pero es imposible hacerlo con el sonido producido por la vibración de
las cuerdas vocales, sin tomar aire antes. Las pausas también restan monotonía al discurso, ayudan
a captar la atención del oyente, recalcando la importancia de una frase o incitando su curiosidad
por la siguiente.

La entonación No hay nada más aburrido que escuchar a una persona hablar con una entonación
monótona. Es necesario dar a cada concepto su matiz y a cada frase la entonación que le
corresponde, dependiendo de su significado e intención. El lenguaje oral lo mismo que la lectura en
voz alta requiere una entonación distinta según la frase sea interrogativa, exclamativa, afirmativa,
negativa… Tampoco es lo mismo hacer una advertencia que dar una orden o transmitir un mensaje
con intención de reprender o de aconsejar. Para comunicarnos con eficacia a través del lenguaje
oral, antes de hablar, debemos plantearnos qué efecto queremos causar con nuestras palabras y
utilizar un tono de voz que esté en consecuencia con el resultado que queremos obtener. La voz es
el vehículo de la palabra.

PENSAMIENTOS EN “VOZ LA IMPORTANCIA DE LA VOZ EN LA COMUNICACIÓN”


http://www.eduvoz.com/voz-38-la-importancia-de-la-voz-en-la-comunicacion/

S-ar putea să vă placă și