IMPACTO AMBIENTAL: preservar el medio, biodiversidad y

recursos naturales
Ing. Agr. Fernando Díaz Shenker (*)

Se entiende por impacto ambiental el resultado o huella que deja la interacción

del hombre con su entorno, al extraer y utilizar los recursos naturales, como
suelo, agua y combustibles fósiles, también al talar los bosques y quemar los
campos, construir casas y edificios; habilitar centros poblados, rutas, caminos,
entre otros. El pasado 5 de junio se recordó el Día Mundial del Ambiente, una
fecha que, como otras ambientales, busca la sensibilización mundial sobre tan
delicado componente de la vida del hombre y los demás seres vivos del
planeta.

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IMPACTO AMBIENTAL

Los avances en las diversas disciplinas del quehacer humano han permitido también
incrementos productivos e industriales con la utilización de nuevas tecnologías de
rápida aplicación y adaptación. Por ejemplo, la agricultura mecanizada e intensiva, con
el monocultivo como principal exponente, avanza con la habilitación de nuevas tierras,
en muchos casos con una deforestación previa; lo mismo que la ganadería mayor y
menor. Los resultados son rendimientos y productividad cada vez mayores, al igual que
las ganancias. Pero esto tiene su otra cara. Hoy en día, bien se sabe que los recursos
naturales no son ilimitados. El agua es un bien cada vez más escaso y con más valor, el
suelo tiene una capacidad de recuperación o regeneración muy lenta, los bosques que se
talan no siempre cuentan con programas efectivos de reforestación que suplan, al menos
en parte, su carencia, sus beneficios ambientales para el hombre y otras especies.

LAS CONSECUENCIAS DE NO ACTUAR

En contrapartida, la actuación negativa del hombre sobre el ambiente ha aparejado una

serie de consecuencias negativas, como una sobreexplotación de los recursos naturales
no renovables (agua, suelo y bosques), una exagerada acumulación de desechos de
diverso origen, tanto domiciliarios como industriales, muchos de ellos no degradables,
como plásticos, chatarra electrónica; además de restos de fertilizantes y agrodefensivos
tóxicos; detergentes que terminan en arroyos, como el Mburicao, y en lagos, como el
Ypacaraí, por citar solo dos. La destrucción de humedales y los recursos hídricos con la
muerte de peces y especies acuáticas es otra consecuencia que también se ha
intensificado últimamente. Otra es la destrucción de los espacios verdes públicos con el
corte de árboles sin criterios técnicos. El incumplimiento dela Ley de Deforestación
Cero (29/12/2008), no solo perjudica las reservas forestales, sino que también provoca
la migración y desaparición de especies silvestres de flora y fauna, a la vez que se
favorece la multiplicación de plagas y enfermedades anteriormente controladas en
forma natural. El dengue, la chikunguña y el zika son buenos ejemplos.
CONCLUSIÓN

Estas son algunas de las consecuencias de no actuar; de no implementar estrategias de

educación ni de sensibilización dirigidas a la población, estudiantes, empresarios y
funcionarios del Gobierno; de no cumplir con la legislación vigente, que protege al
ambiente y sus recursos, tal como lo expresa la Ley de Evaluación del Impacto
Ambiental (n.º 294/93); de no introducir el componente ambiental y de velar por su
aplicación en los planes, programas y proyectos productivos nacionales; de permitir que
prosperen procesos y negocios mal planificados y peor gestionados, desde el punto de
vista ambiental.

(*) Especialista en Comunicación Rural

FUENTE: Fernando Díaz Shenker /ABC Color – Suplemento Rural

08/06/2016.-