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Papeles necesarios y papeles posibles en el grupo.

En algunos grupos, junto a los papeles condicionados por su tarea y fijados por su organización,
son también desempeñados otros que no resultan necesaria y directamente de la estructura y
la tarea del grupo, pero son hechos posibles por ellas. Por esto está indicado distinguir dos tipos
de papeles: los necesarios para el grupo y los posibles en el grupo.

Los papeles necesarios o también llamados papeles primarios son aquellos papeles que
conservan un carácter de exigencia. De ellos se hablará más adelante.

Por otra parte, los papeles posibles o papeles secundarios son aquellos que no están previstos
en el grupo como necesarios, pero se hallan en la esfera de posibilidades que resulta de la
situación de grupo. Algunos ejemplos que ilustran este tipo de papeles son: el papel de bufón,
el papel de mártir y de la cenicienta de los que los demás se aprovechan, el papel de oponente
y del turbulento, que en un grupo de trabajo esparcen la semilla del descontento y amotinan a
la gente. El que sean realizados y aparezcan este tipo de papeles depende ampliamente de los
individuos, o sea, de factores subjetivos. Y esto también en un doble sentido. Dependen por una
parte del modo de ser y de la iniciativa del individuo que se apropia de un papel secundario,
supuesto que los demás lo acepten en este papel; por otra parte, la realización de un papel
posible en el grupo depende de los miembros del grupo que impulsan al individuo al papel
secundario, siempre que él se deje impulsar y lo acepte. En contraste a los papeles necesarios o
primarios, los papeles posibles tienen un carácter de invitación. Esto quiere decir que el
individuo se siente estimulado por la situación de grupo a realizar un determinado papel.
Algunos ejemplos de este tipo

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