CÁTEDRA: ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS

LA IMPORTANCIA DE SER EMPRESARIO

En el nuevo contexto económico que se mueve la sociedad actual, cada vez cobra más
fuerza un hecho completamente cierto: ser empresario es la principal alternativa por la
que hay que decidirse si se tiene una habilidad o conocimiento por explotar, y es una de
las principales alternativas que tienen los países para disminuir las altas tasas de
desempleo que afrontan, al tiempo que impulsa la competitividad de la región en sectores
específicos de la economía.
Crear una empresa es a no dudarlo una vía de desarrollo económico y social para
cualquier comunidad que quiera aplaudir la iniciativa de sus integrantes. Sin embargo, si
tú eres del tipo de persona que tienes la capacidad de visualizar oportunidades del
mercado y sabes cómo articular los recursos necesarios para poner en marcha una
actividad empresarial, tienes todo el perfil de un empresario; y con toda seguridad esperas
obtener a cambio una retribución de lo que haces, que se manifieste por ejemplo en el
aumento de la calidad de vida para ti y los tuyos (familiares, amigos, etc.).
Claro que ser empresario va más allá que el hecho simplemente de crear una empresa,
para que tú seas un empresario debes ser ante todo un investigador, un curioso y estar en
disposición permanente de asumir riesgos para obtener rentabilidad a través de
operaciones comerciales generadas a través de tu empresa.
Como empresario debes tomar decisiones, ser creativo, generar propuestas de valor que
permitan mejorar e implantar nuevos procesos, nuevas formas de hacer las cosas. Debes
estar en una búsqueda constante de oportunidades de negocio, y a partir de éstas, iniciar
las actividades necesarias para integrar los recursos que se requieren para realizar con
éxito los proyectos propuestos.
Debes entender igualmente que las empresas del siglo XXI se caracterizan por ser
lideradas no por empresarios individuales, sino por equipos empresariales, redes de
trabajo empresarial. Estas redes se conforman cuando tú con otros individuos deciden
unir cada una de sus habilidades para funcionar como empresarios. Cada uno realiza un
aporte real al proceso de creación empresarial, asegurándose una amplia gama de
posibilidades y formas de pensamiento. De acá el viejo adagio, “dos cabezas piensan
más que una…”
Estudio económicos evidencian sobre la importancia de crear una empresa. Por ejemplo
el 80% de las empresas en Colombia son mipymes, y junto con el resto de
microempresarios que conforman la economía colombiana se han convertido en la base
del desarrollo del país. Las mipymes son los responsables del desarrollo de la mayor
parte de las economías latinoamericanas y el gran motor de grandes economías como por
ejemplo la asiática.
Estos mismos estudios indican que es evidente que para ser empresario se necesitan
ciertas características personales: generalmente son personas que prefieren mandar a ser
mandadas, que confían en sus propias capacidades, dispuestas a arriesgarse, personas
fuera de lo común y que piensan a largo plazo. Sin embargo también hay empresarios
que no tienen ninguna de estas características. Así podemos decir que no hay reglas fijas

1
 CÁTEDRA: ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS

para convertirse en empresario, más que el estar dispuesto a hacerlo, aunque algunas de
las virtudes señaladas ayudan bastante. Se definen como condiciones importantes de un
empresario “la confianza en sí mismo, la capacidad para asumir riesgos, la flexibilidad, la
necesidad de realizar y el deseo de ser independiente”.
Por otro lado, siempre se ha hablado acerca del “olfato empresarial”, es decir, de esa
capacidad para predecir y adelantarse a los cambios del mercado y aprovecharlos
favorablemente. Popularmente se cree que es una especie de don de la naturaleza con el
que algunas personas nacen y del que otros carecen. Aunque el verdadero olfato de los
empresarios proviene del conocimiento profundo que se debe tener, del tipo de negocio
en el que se está desarrollando la actividad empresarial.
Es por esta razón que no puedes cometer el error que cometen muchas personas de
iniciar la actividad empresarial llenos solo de fe y confianza en sí mismos. Esto es un
gran error, ya que aquí se tiene muy poca oportunidad de triunfar y permanecer en el
negocio con éxito. Si bien el entusiasmo, la perseverancia y la confianza son importantes
para el éxito inicial, para mantenerse es indispensable que el empresario gaste gran parte
de su tiempo en estudiar cada uno de los detalles de su negocio, que aprenda sus
mecanismos no solo de la experiencia sino también de las cifras y que sepa usar
provechosamente estos conocimientos.
Te invito entonces a que si quieres ser un empresario conozcas mucho más de cerca
sobre el negocio que quieres emprender, debes aprender a leer las señales del mercado,
aún las menos perceptibles, para poder adelantarte a las tendencias y tomar decisiones
acertadas, ya que una de las características principales del empresario es tener la
información y saber aprovecharla para su beneficio propio.
Edwin Palacio
Lic. En Administración