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INVESTIGADORES PRINCIPALES:
ROSAMARINA VARGAS ROMERO
DENIS ALFONSO GELDRES GARCÍA
Pág.
PRESENTACIÓN 12
INTRODUCCIÓN 14
PRIMERA PARTE: MARCO TEÓRICO – METODOLÓGICO DE LA 19
INVESTIGACIÓN
1. Antecedentes 20
1.1.Contexto político y legislativo 33
2. Aspectos metodológicos de la investigación 40
2.1. Paradigma investigativo 40
2.2. Enfoques de la investigación 41
2.2.1. Investigación Acción Participativa – IAP- 41
2.2.2. Enfoque de Equidad de Género 44
2.2.3. Enfoque de Derechos 46
2.3. Técnicas, instrumentos y estrategias de investigación 48
2.3.1. Técnicas e instrumentos de investigación 48
2.3.2. Estrategias de investigación 50
3. Aproximaciones conceptuales 51
SEGUNDA PARTE: CARACTERIZACIÓN DE LAS NIÑAS Y 62
ADOLESCENTES EN EXPLOTACIÓN SEXUAL COMERCIAL DEL
SECTOR PRADO CENTRO, COMUNA 10 DE MEDELLÍN.
1. Descripción sociodemográfica y cultural de la comuna 10 y del sector de 65
Prado Centro
2. Aspectos generales de la situación actual de las niñas y adolescentes en 68
explotación sexual comercial
2.1. Edades 68
2.2. Relaciones familiares 69
2.3. Lugar de nacimiento 72
2.4. Lugar de residencia 74
2
2.5. Comunas de procedencia 76
2.6. Desplazamiento 79
2.7. Ascendencia o grupo étnico 80
2.8. Documentación (posesión y uso de tarjeta de identidad) 82
2.9. Atención en salud 85
2.10. Situación escolar 87
2.11. Uso de métodos anticonceptivos 91
2.12. Salud sexual y reproductiva 95
2.13. Maternidad 100
2.14. Estado de salud 103
2.15. Alimentación 105
2.16. Consumo de sustancias psicoactivas –SPA- 107
2.17. Atención institucional 111
2.18. Situación actual de amenazas contra sus vidas 114
2.19. Relaciones erótico afectivas de las jóvenes 116
2.20. Condiciones psicosociales 119
3. Circuito de la explotación sexual 121
3.1. Modalidades de delitos contra las niñas y adolescentes 125
4. Situación de vulneración los derechos de las niñas y adolescentes en 126
explotación sexual
4.1. Factores de riesgo 126
4.2. Vulneración de derechos 129
4.3. Factores protectores 130
TERCERA PARTE: MODELO DE ATENCIÓN PARA NIÑAS Y 132
ADOLESCENTES EN EXPLOTACIÓN SEXUAL COMERCIAL
1. El modelo como un camino por explorar 133
2. Desestructuración de prejuicios sobre la ESCNNA para la 134
consolidación del modelo
3. Principios del modelo 137
4. Pilares conceptuales y enfoques del modelo 140
3
4.1. Equidad de género 140
4.2. Derechos humanos y dignidad 142
4.3. Derechos sexuales y reproductivos 144
4.4. Laicidad 147
4.5. Autonomía, empoderamiento y participación 147
4.6. Corresponsabilidad, transversalidad y territorio 149
5. Estrategias del modelo 149
5.1. Planeación, monitoreo y evaluación 150
5.2. Estrategias de motivación e invitación a las niñas y 151
adolescentes
5.3. Procesos lúdico-pedagógicos con niñas y adolescentes, 152
familias y parejas
5.4. Acompañamiento psicosocial, médico y nutricional 166
5.5. Formación del equipo 168
6. Fortalecimiento de una comunidad ética para la prevención y 169
erradicación de la ESCNNA
CUARTA PARTE: RECOMENDACIONES (CONCEPTO TÉCNICO) 171
BIBLIOGRAFÍA 182
ANEXO 1. Encuesta de necesidades 191
ANEXO 2. Instrumentos de caracterización 193
ANEXO 3. Tarjeta de invitación a las NA 213
4
LISTADO DE GRÁFICOS
Pág.
Gráfico 1: Edades 68
Gráfico 2: Lugar de nacimiento 72
Gráfico 3: Lugar de residencia 74
Gráfico 4: Comuna de procedencia 77
Gráfico 5: Su familia ha sufrido desplazamiento 79
Gráfico 6: Ascendencia o grupo étnico 80
Gráfico 7: Tiene documento de identidad 82
Gráfico 8: Porta el documento de identidad 82
Gráfico 9: Situación del documento de identidad 83
Gráfico 10: Tiene Sisben 85
Gráfico 11: Ha estudiado 87
Gráfico 12: Último grado aprobado 88
Gráfico 13: Sabe leer y escribir 89
Gráfico 14: Quiere seguir estudiando 90
Gráfico 15: Usa algún método anticonceptivo 91
Gráfico 16: Cuál(es) método(s) anticonceptivo(s) usa 93
Gráfico 17: Ha tenido relaciones sexuales sin protección en el último mes 94
Gráfico 18: Con quién ha tenido relaciones sexuales sin protección 94
Gráfico 19: Tiene una ITS actualmente 95
Gráfico 20: Ha tenido alguna ITS en el pasado 96
Gráfico 21: Está embarazada actualmente 96
Gráfico 22: Ha tenido abortos 98
Gráfico 23: Cuántos abortos ha tenido 98
Gráfico 24: Causas de los abortos 99
Gráfico 25: Tiene hijos-as 100
Gráfico 26: Cuántos hijos-as tiene 101
Gráfico 27: Edades de los hijos-as 101
5
Gráfico 28: Quién cuida los hijos-as 102
Gráfico 29: Presenta algún síntoma de enfermedad 103
Gráfico 30: Cuántos síntomas presenta 104
Gráfico 31: Tiene dolor de muelas 104
Gráfico 32: Como tres veces al día 105
Gráfico 33: Cuántas comidas come al día 106
Gráfico 34: Razones de no comer 3 veces al día 106
Gráfico 35: Consume alguna SPA 107
Gráfico 36: Cuántas SPA ha consumido o consume 107
Gráfico 37: Cuáles SPA consume 108
Gráfico 38: Conoce las consecuencias del consumo de SPA 109
Gráfico 39: Desea rehabilitarse del consumo de SPA 110
Gráfico 40: Desea ingresar a una institución de rehabilitación de SPA 110
Gráfico 41: Desea ingresar a una institución de protección 111
Gráfico 42: Razones por las que NO se institucionalizaría 112
Gráfico 43: Ha estado en instituciones de protección 113
Gráfico 44: Está bajo amenaza de muerte 114
Gráfico 45: Quién la amenazó 115
Gráfico 46. Modelo de atención a niñas y adolescentes en ESC 170
6
LISTADO DE MAPAS
Pág.
Mapa 1. Ubicación del sector Prado Centro en la Comuna 10 (La 67
Candelaria), Medellín, Colombia.
Mapa 2. Lugares de procedencia de las familias de las NA del sector 73
Prado Centro en la Comuna 10 (La Candelaria), Medellín, Colombia.
Mapa 3. Ubicación de zonas de permanencia y residencia de las NA en 75
explotación sexual del sector Prado Centro de la Comuna 10 (La
Candelaria) Medellín, Colombia.
Mapa 4. Comunas de Procedencia de las NA en explotación sexual del 78
sector Prado Centro de la Comuna 10 (La Candelaria) Medellín, Colombia.
7
LISTADO DE CUADROS
Pág.
Cuadro N° 1 Temas nodales y actividades posibles para jornadas 156
lúdico-pedagógicas
Cuadro N°2 Ejemplo de un día de encuentro 163
Cuadro N°3 Ejemplo de las características generales de una atención 167
psicosocial
8
LISTADO DE FOTOGRAFÌAS
Pág.
Foto 1. Adolescente del proceso en actividad lúdico-pedagógica 19
Foto 2. Manilla realizada por una de las “chicas talentosas”. 62
Foto 3. Elaboración de “cofre de los secretos” por una de las jóvenes 132
del proyecto.
Foto 4. Máscara elaborada por una adolescente del proyecto. 171
9
LISTADO DE SIGLAS
IAP Investigación Acción participativa
ES Explotación Sexual
ESC Explotación Sexual Comercial
ESCI Explotación Sexual Comercial Infantil
ESCIA Explotación Sexual Comercial Infantil y Adolescente
ESCNNA Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescente
NNA Niños, Niñas y Adolescente
NA Niñas y Adolescentes (para esta investigación)
OIT Organización Internacional del Trabajo
ONU Organización de Naciones Unidas
UNESCO Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia
y la Cultura
IPEC Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil
OMS Organización Mundial de la Salud
UNICEF Fondo de Naciones Unidas para la Infancia
ICBF Instituto Colombiano de Bienestar Familiar
FUNLAM Fundación Universitaria Luis Amigó
CDN Convención Internacional de Derechos del Niño
ONG Organización No Gubernamental
VIH Virus de Inmunodeficiencia Humana
ETS Enfermedad de Transmisión Sexual
ITS Infección de Transmisión Sexual
SPA Sustancias Psicoactivas
MAC Método(s) Anticonceptivo(s)
VBG Violencia(s) Basada(s) en Género
MEN Ministerio de Educación Nacional
UNFPA Fondo de Población de las Naciones Unidas
DDSSRR Derechos Sexuales y Reproductivos
10
AGRADECIMIENTOS
A Luz Mery Giraldo, Cristian Andrés Villa, Claudia Marcela Ciro Arcila, Jacqueline
Alejandra Suarez Cano, Omar de Jesús Parra y su equipo artístico, Marta Nelly
Maya, Luz Mery Sierra de Buritica e Ildamaris Zapata Gómez por su
acompañamiento y apoyo administrativo y logístico vital para el desarrollo del
proyecto.
11
PRESENTACIÓN
12
Los resultados de esta investigación han sido divididos en el presente informe final
en forma de cuatro (4) secciones que corresponden a los productos generales que
estaban descritos en los términos de referencia del proyecto, a saber:
13
INTRODUCCIÓN
"La utopía está en el horizonte. Me acerco dos pasos, ella se aleja dos pasos. Camino diez pasos y
el horizonte se desplaza diez pasos más allá. Por mucho que camine, nunca la alcanzaré.
Entonces,... ¿para qué sirve la utopía? Para eso: sirve para caminar."
Eduardo Galeano
1
OIT, 2005.
2
Naciones Unidas, 2006.
14
20063, reportó que el fenómeno se ha incrementado a cerca de 2 millones de NNA
víctimas de explotación sexual comercial infantil.
Existe una exigencia de carácter urgente sobre los Estados, la familia, la sociedad
civil y el sector académico, para que se comprometan con los tratados
internacionales vigentes, como la Convención Internacional Sobre los Derechos
3
UNICEF, 2006.
4
UNICEF, 2002.
5
Proyecto de la Mesa Intersectorial por la prevención de la ESCIA en la ciudad de Medellín.
15
del Niño de 1989, que promueven a niños, niñas y adolescentes como sujetos de
derechos y exhortan a su protección integral como una prioridad. Estas
consideraciones han sido adoptadas por Colombia a través del artículo 44 de la
Constitución Política, la Ley 1098 de 2006 y, a nivel municipal por el Acuerdo
Municipal N°50 “Por medio del cual se establecen medidas tendientes a la
prevención y sanción del abuso y la explotación sexual infantil en el municipio de
Medellín”. Así mismo, el Acuerdo 020 de 2011 que “establece el desarrollo de
acciones de prevención y atención a las violencias sexuales”.
Esta problemática que amerita intervención y estudio, es una de las peores formas
de vulneración de los derechos de la infancia y adolescencia dados sus impactos
negativos en la salud y el bienestar social de los NNA, como también en
detrimento de la sociedad en general, porque se puede decir que el desarrollo de
una ciudad también se mide por el bienestar que esa sociedad proporcione a sus
NNA.
16
viola los derechos humanos y los derechos sexuales de las niñas, poniéndolas
también en alto riesgo de embarazos por violación, debe ser una prioridad del
gobierno municipal, por tanto, la Secretaría de las Mujeres desde el enfoque de
derechos, y encargada de la restitución de derechos y el empoderamiento de las
mujeres se interesa por una población prioritaria, en este caso las jóvenes6 y las
niñas.
6
La Organización Panamericana de la Salud considera joven a la persona que esté en el rango
entre los 15 y 24 años, por tanto una menor de edad también puede ser denominada como joven.
En ese sentido, para hacer más liviana la lectura del texto, se recurre en algunos casos a este
término para referirnos a las niñas y adolescentes en explotación sexual menores de 18 años.
17
género, además del conocimiento idóneo y la experiencia en el abordaje de dicha
problemática.
Por supuesto que esta investigación, como cualquier otra, tuvo sus límites,
situación que invita a nuevas posibilidades de ahondar en la realidad de esta
problemática, basándose en sus adelantos. Sin embargo, este es un primer paso
que la Secretaría de las Mujeres desea aportar en la búsqueda de una sociedad
con equidad de género y, por fin, libre de violencias contras las mujeres; en primer
lugar, porque brinda desde la sororidad a estas adolescentes y niñas posibilidad
de voz y fortalecimiento, y en segundo lugar, porque insisten en el reconocimiento,
la visibilidad y la indignación social y política que se requiere para acabar con esta
absurda realidad que podemos detener entre todos y todas.
18
PRIMERA PARTE
19
ASPECTOS TEÓRICO-METODOLÓGICOS DE LA INVESTIGACIÓN
1. ANTECEDENTES
20
que, además, se caracteriza por la utilización de la infancia dentro de mafias y
redes organizadas trasnacionales y locales7.
De otro lado, en el texto La Infancia Rota, se lee también otro debate actual sobre
la dificultad de asociar la explotación sexual a una forma de trabajo infantil, pues
esto abriría una brecha para su legitimación: “Nosotros pensamos que la
explotación sexual comercial de los niños no debe considerarse jamás una forma
7
En Colombia se empieza a usar el término desde 1995, gracias al estudio realizado desde la
Defensoría del Pueblo con apoyo de UNICEF y la Fundación FES: Situación de la niñez explotada
sexualmente en Colombia.
8
ALCALDÍA DE MEDELLÍN. 2007, p.33.
9
FUNDACIÓN PLAN et al. 2006, p. 6.
21
de trabajo infantil, es un delito más de los que el mundo adulto comete contra los
niños”10.
Una violación fundamental de los derechos de la niñez. Abarca el abuso sexual por
una tercera persona o personas. El niño-a es tratado como objeto sexual y como
mercancía. La explotación sexual comercial de la niñez constituye una forma de
coerción y violencia contra ésta, equivale al trabajo forzado y constituye una forma
contemporánea de esclavitud11.
Sin que esto deje de ser realidad, estudios locales siguen anotando que una parte
de la población infantil y adolescente en explotación sexual no siempre se
relaciona con redes estructuradas que fuerzan a niños, niñas y adolescentes –
NNA – a prostituirse, sino más bien como resultado de situaciones de pobreza
extrema, desplazamiento forzado y violencia sistemática que llevan a NNA a
prostituirse con la ayuda o no de intermediarios.
10
CUADROS FERRÉ, Isabel y ORDOÑEZ VERA, Martha. 2006, p. 47.
11
ECPAT INTERNACIONAL. 2000, p.2.
22
y de género, el término acogió a niñas y adolescentes resultando la Explotación
Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes – ESCNNA – como el término
de referencia contemporáneo más incluyente, aunque la Explotación Sexual
Comercial de la Infancia y la Adolescencia – ESCIA también es aceptado y
utilizado.
Para el Plan Nacional contra la ESCNNA esta problemática lleva muchos años, y
se ha agudizado con el “afianzamiento a nivel mundial de un modelo social y
económico “basado en el mercado y en la internacionalización de los capitales” Es
decir, se evidencian el grave problema de la ESCNNA como un fenómeno
directamente relacionado con elementos estructurales de orden social y
económico compartido por todas las sociedades del mundo.
12
ICBF et al. 2006, p.28.
13
SEGURA, 1992.
14
DEFENSORÍA DEL PUEBLO, 1995.
15
ÁLVAREZ-CORREA, 1995.
16
ÁLVAREZ-CORREA, 1998.
23
El tipo de demanda que presenta la comercialización sexual de adolescentes en
diferentes países latinoamericanos17 ha sido un giro teórico pertinente propuesto
desde la OIT y el Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil
(IPEC). En Colombia el Estudio cualitativo sobre la demanda en la explotación
sexual comercial de adolescentes: el caso de Colombia18, se apoyó en la
Secretaria de Bienestar Social de Bogotá y el Programa Por una vida más digna
de la Alcaldía de Medellín. En Medellín, el estudio hace referencia a dos sectores:
“San Diego: escenario de ESC femenina” y “Parque Bolívar: escenario de ESC
masculina” (especialmente de orientación sexual homosexual).
Según el Plan Nacional contra la ESCNNA todos estos estudios han sido
abordados desde diferentes enfoques que han evolucionado con el pasar del
tiempo en la medida en que se ha ahondado en la problemática y ha aumentado el
compromiso político para evidenciarla.
(…) el tema ha sido abordado desde distintas miradas: primero como una de las
situaciones irregulares de la niñez; luego como una violación de los derechos de la
niñez, estipulados en la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CDN).
Hacia finales del siglo pasado, la referencia fue la violencia sexual, materializada
en la Política HAZ PAZ, centrada en el abuso sexual. Por otro lado, tras la
adopción del Convenio 182 de la OIT surge la perspectiva de las peores formas de
trabajo infantil. En los últimos años se ha relevado la perspectiva de la garantía de
los derechos de los menores de 18 años (Ley 679 de 2001), considerando lo
planteado en la Declaración de Estocolmo. También se ha abordado el tema
desde la lucha contra la Trata de Personas (Leyes 747 de 2001 y 985 de 2005)19.
Sin interés de realizar un Estado del Arte sobre la evolución de estas miradas,
podemos decir que, a grades rasgos, la comprensión actual de la ESCNNA ha
estado influenciada por un interés sociológico creciente de profundizar en el
contexto socio-cultural y económico productor del fenómeno, y no sólo de los
procesos de individuación psicoanalítica de la situación. Y, de otro lado, en la
17
Ver OIT – IPEC (2007a) La demanda en la explotación sexual comercial de adolescentes:
estudio comparativo cualitativo en Sudamérica (Chile, Colombia, Paraguay y Perú), Perú.
18
OIT. 2007b.
19
ICBF et al. 2006, p.27.
24
nueva concepción de los NNA como sujetos de derechos desde una perspectiva
que ha buscado alejarse de paternalismos o visiones superficiales para entender
este escenario de manera más integral y participativa.
20
HIDALGO, 1991.
21
CAMARA DE COMERCIO D BOGOTÁ, 1991.
22
VELANDIA, 1993.
23
CÁMARA DE COMERCIO DE BOGOTÁ, 1999.
24
Ver, SEGURA E., Nora (1995). La prostitución infantil y la educación en Colombia, UNESCO,
Bogotá, 1992, y DEFENSORÌA DEL PUEBLO, Situación de la niñez explotada sexualmente en
Colombia, Serie Fémina, 6, Bogotá.
25
En primer lugar, La prostitución en Medellín25; investigación de la Universidad de
Antioquia que propone una tipología que diferencia una prostitución masculina de
menores de edad y una prostitución femenina que se diversifica a su vez en
callejera, de rebusque, acera, ocultas tras un oficio, salones de estilistas, salas de
masajes, callgirl (contactos eróticos por teléfono) y en streep-tease (desnudos
públicos). Esta tipología implica mujeres de todas las edades y no hace
diferenciación entre prostitución y explotación sexual.
Otro estudio de este año, fue La calle como forma de sobrevivencia. (Gaminismo,
prostitución infantil y menor trabajador en el centro de Medellín)26; que realiza un
interesante y novedoso análisis que relaciona las lógicas de supervivencia del
menor en situación de calle (concepto también naciente en esta década), los usos
territoriales de los NNA y la experiencia institucional de los menores. Fue
desarrollado por la Cámara de Comercio de Medellín en asocio con ICBF y la
Consejería Presidencial para Medellín. A su vez, el documento plantea alternativas
de solución a la problemática enfatizando en la coordinación interinstitucional,
mesas de trabajo, el cambio de paradigma de interpretación de los menores de
edad como sujetos de derechos y el establecimiento de albergues especiales,
programas educativos y campañas de sensibilización a la comunidad.
25
GIL y SIERRA, 1996.
26 GALEANO Y VÉLEZ, 1996.
27 PUERTA, 1997.
26
además subraya que esta es “una opción ligada a las necesidades de
sobrevivencia” 28.
27
En anteriores décadas Bogotá y Medellín fueron las ciudades que más estuvieron
involucradas en análisis particulares o comparativos con otras ciudades. No
mencionaremos todos estos estudios excepto uno desarrollado en la década que
estamos repasando por el interesante relacionamiento de temas que analiza. Este
es Lo visible de lo invisible. Análisis y mejoramiento de las condiciones de vida de
los niños, niñas y jóvenes de la calle con énfasis en los que consumen sustancias
psicoactivas33. Realizado en ocho ciudades incluida Medellín, profundiza en la
relación del consumo de sustancias psicoactivas – SPA, la prostitución, y la forma
en que las necesidades materiales y afectivas de los NNA se ven cubiertas por
estos consumos y por las redes de relaciones que construyen en la calle34.
Ahora bien, siendo de tan reciente interés los estudios sobre la explotación sexual
infantil no siempre han considerado una mirada de género que reflexione acerca
del modo diferencial como hombres y mujeres menores de edad se ven afectados
por esta situación delictiva. La excepción han sido algunos estudios nacionales
que se han acercado al tema desde el análisis de la condición de orientación
sexual especialmente de población infantil y adolescente masculina. Pero, la
llamada de atención se ha despertado desde las ONG´s en pro de la equidad de
género y los derechos de la infancia, que han abordado y denunciado el tema en
los diferentes informes de la situación de derechos humanos. En ellos, se
menciona la ausencia de estadísticas actualizadas que discriminen por sexo la
población afectada por la explotación sexual (lo cual es un asunto recurrente para
los datos oficiales sobre las violencias y violación de derechos humanos de las
mujeres en la ciudad).
Los estudios más recientes sobre la ESCNNA en Medellín, son esfuerzos desde el
gobierno local35 que aportan a delimitar planes y programas más adecuados al
28
contexto de la ciudad, y han sido los que más se han acercado a utilizar la
perspectiva de género en sus análisis. Por ejemplo, el estudio La Explotación
sexual de Adolescentes en Medellín36; que identifica claramente cómo la
feminización de la pobreza “refleja el nivel de necesidades básicas insatisfechas
que puede influir de forma directa en considerar la prostitución femenina como
estrategia de sobrevivencia y no como estilo de vida y lo que determina a su vez,
una relación comercial entre “no iguales” en el mundo del comercio sexual” 37. Este
trabajo, relaciona y describe una serie de factores de riesgo (predisponentes y
precipitantes) que tienen que ver con la situación económica, familiar, las formas
de violencia intrafamiliar, el trabajo infantil y adolescente, la situación educativa, la
migración rural-urbana y el desplazamiento, los embarazos precoces, la identidad
homosexual. Así mismo, mapea o caracteriza por género, edad y sectores de
permanencia a esta población, entre ellos se identifican: San Diego – Avenida 33,
Parque Bolívar, Guayaquil, La Veracruz y Guayabal – La mayorista. En el texto
hay una amplia reflexión acerca de las particularidades de la explotación sexual
masculina y rasgos generales de la situación de las adolescentes entre 13 y 18
años en explotación sexual del centro de Medellín.
29
2. La dificultad de delimitar la diferenciación entre el ejercicio de derechos desde
la práctica sexual de adolescentes con una situación de explotación por parte
de terceros;
3. La naturalización de la explotación asociada a un determinismo causal de
factores socio-económicos, situaciones familiares, o del rol de la madre o el
abuso sexual como destinación de los sujetos a la vinculación en la
explotación39;
4. La explotación como estrategia de resistencia, subversión e incluso de libertad
que llevaría a otro debate más complejo sobre la elección de NNA para
vincularse o permanecer en esta situación;
5. El riesgo de psicopatologizar a los NNA desde la intervención estatal que no
logra desprenderse del todo de ciertos tintes “salvadores” o rescatistas de un
sujeto largamente victimizados y construido como sujeto indefenso y sufriente;
6. La centralización de la verdad de la explotación sexual sobre los NNA y no
sobre los “clientes o usuarios” lo cual los legitima por omisión en el análisis;
7. La producción de “la calle como el otro maligno”, como el lugar del riesgo vs.
una visión idealizada del “hogar” del cual NNA han salido o han sido
expulsados;
8. A nivel metodológico principalmente, “la falacia de la autonomía del sujeto,
falacia ubicada en la tendencia a extraer de sí, exhortar al sujeto a hacerse
responsable y por tanto, poseedor de un control sobre su vida”40 que no
39
Se ha generado polémica y controversia sobre la capacidad de los niños y niñas entre los 14 y
los 18 años para dar el consentimiento sobre la actividad sexual desarrollada en la ESCI, ya que
en Colombia la edad legal de consentimiento para las relaciones sexuales es de 14 años. Al
respecto consideran Cárdenas y Rivera (2000) “En todo caso aunque pudiera existir
consentimiento de parte del niño/a, prima la intención perversa del adulto que manipula sus
sentimientos, necesidades y carencias, distorsionando su desarrollo sexual infantil; en el caso del
niño/a, tener la posibilidad de un acto voluntario no implica que éste obedezca a libre opción,
puesto que su desarrollo psíquico, así como sus procesos de socialización (incluida la educación
como medio para formar criterios de juicio) no han alcanzado niveles óptimos de maduración o
apropiación consciente que le permitan el ejercicio autónomo de su afectividad ni sexualidad; más
aún, se hallan en niveles significativos de retraso si se toman en cuenta las condiciones
socioeconómicas y familiares en que tales procesos han tenido lugar”.
40
ALCALDÍA DE MEDELLÍN. 2007b, p.98.
30
considera a cabalidad los mecanismos de sujeción de los individuos o impone
una supuesta y unívoca solución a los individuos41;
9. El riesgo de caer en la explotación como “subespecie”, ya que los diferentes
estudios pueden constituirse en discurso subjetivante y olvidar, a veces, que no
es igual la práctica común de unos individuos a una identidad colectiva; y,
10. La ausencia o imprecisa utilización de un enfoque de género así como de la
conceptualización sobre la orientación sexual, en los abordajes de la
explotación sexual, que hasta el momento se ha confundido con la mera
utilización del lenguaje inclusivo en algunos textos, y en otros, ha tenido
equivocaciones conceptuales que no permiten avanzar en el análisis.
Ahora bien, la más reciente investigación del gobierno local es el Mapeo de los
escenarios de Explotación Sexual Comercial Infantil y Adolescente, modalidad
abierta, y estimación del tamaño de población víctima de esta problemática en las
comunas 4 y 10 de la ciudad de Medellín, 2011, desarrollado desde la Secretaría
de Bienestar Social de la Alcaldía de Medellín con apoyo de la Mesa intersectorial
por la prevención de la ESCIA en la ciudad de Medellín 42. En este estudio se
construye una georeferenciación detallada del fenómeno. Además, la investigación
llega a algunas conclusiones sobre las características principales de la población
de NNA en explotación sexual del centro de Medellín, que señalan principalmente
los siguientes datos: tiempo de permanencia de la población en la situación de
explotación estimado de 1 a 4 años; 87% de la población consume psicoactivos;
92% en situación de desescolarización; los mayores reportes de NNA en
explotación se concentran en un sector entre el Parque Bolívar y el viaducto del
metro; la problemática afecta fundamentalmente a la población del sexo femenino,
en un 60%; se reportan casos desde aproximadamente los 4 años de edad, con
una mediana de 12 años para toda la población; los días de la semana de mayor
41
“Queda interpelado un doble ejercicio de imposición discursiva que, por una parte esta
representado en aquellas posturas incapaces de ver algo más que seres desvalidos y explotados y
por la otra, se encarga de citar, en la supuesta oposición al primer ejercicio, la liberación de los
individuos, imponiéndoles una subjetividad a partir de un discurso de derechos y deberes”. Ibid,
pp.99-100.
42
ALCALDIA DE MEDELLÍN, 2012.
31
frecuencia de NNA en ESCIA son viernes y sábados en los horarios de la noche y
la madrugada; se reportan altos niveles de movilidad hacia otros municipios y
otros sectores de la ciudad. Cabe anotar que este estudio se baso en información
indirecta arrojada por 304 informantes, visitantes o trabajadores habituales de los
sectores, así como miembros de la fuerza pública y de otros-as adultos en
prostitución.
Y aunque estos informes han insistido año tras año en la necesidad de profundizar
en la temática de todas y cada una de las violencias sexuales contra mujeres de
todas las edades en la ciudad, el último informe de la Situación de las Mujeres de
Medellín 2005-200844, menciona la relación entre la explotación sexual y el
43
CORPORACIÓN PARA LA VIDA MUJERES QUE CREAN – CORPORACIÓN VAMOS MUJER.
2011, p.36.
44
ALCALDIA DE MEDELLÍN, 2010.
32
desplazamiento forzoso pero no arroja estadísticas específicas del problema. Al
respecto, el interés de la ciudad esta puesto en el trabajo que viene realizando el
Observatorio de Violencias Sexuales y que, en su último boletín, tipifica la ESCIA
como un tipo de delito sexual.
45
Entre los que se pueden destacar los siguientes: CONDE CÁRDENAS, Lina María et al (1999).
Prevención e intervención en carencias afectivas de las jóvenes de primera etapa y sus familias de
la Corporación Amiga Joven, del barrio Lovaina del municipio de Medellín; JARAMILLO
MONSALVE, Diana (1999). Prevención e intervención de alto riesgo y/o iniciación en la prostitución
en los menores de la Corporación Amiga Joven, sector Lovaina del municipio de Medellín;
TAMAYO JARAMILLO, Julieta (2002). La explotación sexual infantil y juvenil vista a través de los
ambientes familiares: Una aproximación desde la experiencia en la Corporación Amiga Joven;
ALZATE GIL, Jaime et al (2002). Prostitución infantil en Medellín.
33
Nacional de Prevención y Erradicación de la ESCNNA publicado en 2006 por el
ICBF46.
46
ICBF et al. 2006, p.29-32.
34
participación y trabajo conjunto de diferentes sectores de la sociedad civil con el
sector público y privado contra la ESCNNA; b) desarrollo del conocimiento con
estudios diagnósticos, análisis locales, regionales o sectoriales; c) procesos de
normatización y adopción de leyes; d) existencia de servicios y/o programas de
atención a los y las víctimas de ESCNNA; y, e) incidencia sobre transformaciones
culturales y formación de tejido social47.
47
Ibid, pp. 26-27.
48
UNICEF. 2003, p.39
35
establecer límites de edad para el empleo de mano de obra infantil en
trabajos nocivos y de sancionar legalmente su utilización;
La Convención Internacional de los Derechos del Niño (CDN), adoptada en
1989 y ratificada por Colombia según Ley 12 de 1991, la cual Consagra la
protección general de los derechos de la niñez y exige la protección debida
del Estado, la sociedad y la familia a todos los menores de edad. Estableció
en forma explícita deberes de los Estados Parte en relación con la
erradicación de la ESCNNA en el artículo 34 para impedir: a) la incitación o
la coacción para que un niño se dedique a cualquier actividad sexual ilegal;
b) la explotación del niño en la prostitución u otras prácticas sexuales
ilegales; c) la explotación del niño en espectáculos o materiales
pornográficos;
La Convención Interamericana sobre Tráfico Internacional de Menores de
1994, aprobada por la Ley 470 de 1998, cuyo objeto es prevenir y sancionar
la ESCNNA desde la adopción de las medidas legales y administrativas que
sancionen el tráfico internacional de menores definido como “la
substracción, el traslado o la retención, o la tentativa de substracción,
traslado o retención de un menor con propósitos o medios ilícitos”;
La Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la
Violencia contra la Mujer de 1995, conocida como “Convención de Belem
do Pará”, ratificada por Colombia en virtud de la Ley 248 de 1995, que
obliga a los Estados Parte a adoptar políticas orientadas a erradicar la
violencia física, sexual y psicológica contra la mujer, en el ámbito doméstico
o en el ámbito público. El artículo 9° prevé que los Estados tengan en
cuenta la vulnerabilidad de la mujer a la violencia, en razón de ser menor de
edad. Adicionalmente, Este instrumento fue vertido en la importante Ley
1257 de 2008 sobre no violencias contra las mujeres49;
La Declaración y Programa de Acción aprobado por el Primer Congreso
Mundial contra la Explotación Sexual Comercial de los Niños de Estocolmo
en 1996. Declaración que recogió el compromiso de 122 países y
49
RAMIREZ, 2010.
36
numerosas ONG de establecer una “asociación global contra la explotación
sexual comercial de los niños”50, que fue reafirmada y complementada en el
Segundo Congreso Mundial contra la ESCNNA de 2001 en Yokohama;
El Estatuto de la Corte Penal Internacional, aprobado en 1998 sobre
crímenes de lesa humanidad que Incluyó como competencia de la Corte el
procesamiento de personas que, “formando parte de un Estado u
organización, cometan en forma múltiple actos como la violación, esclavitud
sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, esterilización forzada o
cualquier otra forma de violencia sexual de gravedad comparable a estos
actos, como una política deliberada, por lo que serán sometidas a su
jurisdicción cuando tales conductas no sean sancionadas penalmente en su
país”;
El Convenio No.182 sobre las peores formas de trabajo infantil de la
Conferencia Internacional del Trabajo de 1999. En Colombia el Convenio
182 fue aprobado mediante Ley 704 de 2001 y establece la obligación de
los Estados que lo ratifiquen de adoptar medidas inmediatas y eficaces para
conseguir la prohibición y la eliminación, de todas las formas de esclavitud
o las prácticas análogas a ésta, como la venta y el tráfico de niños, el
reclutamiento forzoso u obligatorio de niños para utilizarlos en conflictos
armados, y la utilización, el reclutamiento o la oferta de niños para la
prostitución, la producción de pornografía o actuaciones pornográficas;
El Protocolo Facultativo de la CDN relativo a la venta de niños, la
prostitución infantil de la Asamblea General de las Naciones Unidas del
2000, en Colombia el Protocolo fue aprobado mediante la Ley 765 del 31 de
julio de 2002, el cual amplía las medidas que deben adoptar los Estados
50
Con énfasis en: “conceder alta prioridad a la acción contra ese fenómeno; promulgar su carácter
delictivo; condenar y castigar a todos los implicados en su promoción, facilitación y consumación
reforzar el papel de la familia en la protección de los NNA; revisar la legislación, las políticas,
programas y prácticas vigentes, y desarrollar e implementar planes y programas integrales para
prevenir y eliminar la ESCNNA. La Declaración insiste en que se requiere mayor voluntad política,
medidas más eficaces y presupuestos suficientes para lograr su aplicación, así como la creación
de un clima adecuado para la erradicación del fenómeno mediante la educación, la movilización
social y la promoción del desarrollo” ICBF et al. 2006, p.34.
37
para garantizar la protección de los niños frente a la venta de niños, la
prostitución infantil y la utilización de niños en la pornografía; y,
El Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas,
especialmente de mujeres y niños en el 2000, que complementa la
Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada
Transnacional, adoptado por Colombia mediante la Ley 800 de 2003, que
insisten en la consideración de estos (explotación sexual y trata de menores
de edad) como delitos transnacionales y en la obligación de tipificar como
delito la trata de personas, estipulando que cuando cualquiera de las
conductas descritas como tal afecte a un niño, se considerará delito incluso
si no se recurre a ningún medio de coacción, fraude o engaño.
Esta ley pone gran atención en la regulación y sanción de los actos delictivos
permitidos en las telecomunicaciones, en especial las redes de información global
(internet), introdujo disposiciones de cooperación internacional para prevenir la
ESCNNA y el turismo sexual con énfasis en sanciones especificas para los
prestadores de servicios turísticos en el país. Creo impuestos para la financiación
de planes y programas de prevención y lucha contra la ESCNNA y asignó
51
ICBF et al. 2006, p.42.
38
funciones a la Policía Nacional para la vigilancia y control de cualquier
establecimiento que tenga indicio de ESCNNA52.
De otro lado, la Ley 985 de 2005 sobre la trata de personas, crea el Comité
interinstitucional contra la trata de personas y el Sistema Nacional de Información
para la recolección, procesamiento y análisis de información estadística y
académica. Dispone además en su artículo 9º al ICBF como entidad encargada de
suministrar asistencia a los menores de edad víctimas a los que se les debe
garantizar:
Por último, cabe mencionar que a nivel local, Medellín es pionera en la formulación
de políticas públicas que contemplan esta problemática, como lo hace la Política
Pública para la Prevención y Atención de las violencias sexuales que afectan a la
ciudadanía, principalmente a mujeres, niñas, niños y adolescentes en el Municipio
de Medellín, sancionada por el Acuerdo 20 de 2011, que estipula la creación y
puesta en marcha de un Plan de Acción integral, intersectorial, interinstitucional y
transdisciplinario con enfoque diferencial y de género, que contemple acciones de
promoción, prevención, detección, atención, sanción, rehabilitación, vigilancia y
control del abuso sexual y la explotación sexual. Además de instaurar un Comité
Coordinador Municipal para la Prevención y Atención de las violencias sexuales y
un Observatorio sobre violencias sexuales con enfoque de género.
52
REPÚBLICA DE COLOMBIA, Código de la Infancia y la Adolescencia, Ley 1098 Noviembre de
2006. Edición 2009, pp. 254-318.
53
ICBF et al. 2006, p.44.
39
2. ASPECTOS METODOLÓGICOS DE LA INVESTIGACIÓN
54
SÁNCHEZ y SOSA. 2004, p. 11.
55
Ibíd.
40
construcción de conocimiento latinoamericano ha tenido tres axiomas
fundamentales: a) la recuperación de la historia 56; b) la realidad propia desde la
que se construye el conocimiento; y, c) el conocimiento como orientador de la
acción transformadora.
En cuanto a la IAP podemos decir que hace su aparición como teoría hacia finales
de los 60 y comienzos de los 70, desarrollándose más ampliamente en los 80.
Tres formas de referirse a ella pueden ser: como un movimiento de intelectuales
de América Latina y otros países; a su vez como una concepción de vida o una
postura política reaccionaria al status quo y propositiva en sus métodos; y, como
un método investigativo heurístico en sí mismo, que ha servido para ser aplicado a
la interpretación de las “realidades sociales”57.
56
Desde luego que la producción del conocimiento en un territorio como Latinoamérica (también
aplicado para el caso de Europa) no está exenta del ejercicio de poder, como lo identifica Foucault
(1992). Sin embargo, el peso de perspectivas investigativas que incluyen la participación de
sectores populares y que reivindican la co-construcción del conocimiento permite señalar que hay
avances sustanciales en la apertura de la investigación hacia modelos más democráticos y
horizontales.
57
El sociólogo Orlando Fals Borda se ubica como uno de los máximos exponentes de la IAP.
Revísese “La investigación-acción participativa: Política y epistemología". En: CAMACHO, Álvaro
G. (Ed.). La Colombia de hoy. CEREC, Bogotá, 1986.
41
Una de las principales características de la IAP es la búsqueda por la
transformación de las realidades y desigualdades sociales que, según sus
propuestas, parten de los sujetos mismos y sus comunidades, y no de una
solución externa difuminada y reflejada en estructuras e instituciones políticas
altamente criticadas por su ineficiencia. La IAP se plantea como un camino de
acción de los directamente afectados en sociedades marcadas por las injusticias y
las desigualdades sociales, por lo que surge como una propuesta que pretende
revisar el orden establecido.
De esta manera, una de sus sugerencias apunta a transformar, entre otras cosas,
la relación entre sujeto investigador y objeto investigado propuesta desde la
academia, para proponer otras alternativas no hegemónicas de construcción de
saberes; en el fondo revisa la relación Poder-Conocimiento. Así, se comienza a
realzar el conocimiento popular y se plantea que este conocimiento es igualmente
válido al planteado desde los estamentos tradicionalmente legitimados para
producir conocimiento. La relación sujeto-objeto desde una interpretación
supuestamente objetiva, imparcial y de “no involucramiento” se desdibuja para
plantearse un sujeto único que se autoinvestiga. Esto generaría, por tanto,
posibilidades de transformación, proponiendo el cambio y construyendo
conocimientos sobre y desde sus propias realidades. En este contexto, se pueden
o no establecer puentes de conversación entre diferentes sujetos investigadores
donde podrían estar los académicos y otros interactuantes.
42
Ahora bien, la participación debería, en este marco, ser espontánea y
autogestionada desde las comunidades y no impuesta desde el exterior. Sin
embargo, una posibilidad igualmente válida es la que acepta que, independiente
del lugar desde donde se produzca o incite el diálogo-reflexión, las comunidades y
sujetos pueden igualmente ser reconocidos como actores principales de
transformación. De esta manera, algunos de los proyectos participativos actuales
se han concentrado en generar espacios que posibiliten hablar a las personas o
grupos más vulnerables o con altas limitaciones de autogestión o auto
organización. En un ambiente de diálogo de saberes que es de por sí asimétrico,
la participación o “permitir hablar” a estos grupos vulnerados, es sólo un primer
paso significativo que depende de que el interlocutor haga caso y escuche estas
necesidades y propuestas expuestas.
Por ejemplo, los elementos de la pedagogía crítica coinciden en decir que los
fenómenos sociales estudiados que involucra a sus actores, deben tener un
concepción humanista sobre las interacciones investigativas y sobre los mismos
sujetos, dándoles posibilidades de participar sin preconcepciones y dando
prelación al diálogo de saberes, desde una perspectiva de horizontalidad, donde
todos los sujetos poseen conocimiento igualmente válido y, en general, defiende la
idea de que el conocimiento válido es el que se construye entre todos-as. Bajo
estas premisas, fundamentadas en el humanismo, también se impulsa un principio
filosófico e investigativo que pondera el conocimiento, ejercicio y defensa de los
43
derechos humanos, teniendo en cuenta los principios constitucionales que
promueven los ideales de democracia participativa, el Estado Social de Derecho,
la convivencia intercultural y las libertades individuales.
Según una de las más grandes intelectuales del feminismo –Marcela Lagarde58-
el enfoque de equidad de género “está basado en la teoría de género, en el
paradigma teórico histórico-crítico y en el paradigma cultural del feminismo”. Dicho
enfoque:
58
LAGARDE, Marcela. 2001.
59
Es interesante traer a colación cómo pese a que el término humanista está desprestigiado, la
feminista española Victoria de León (2006) ofrece una interesante aproximación a lo que ella
denomina el humanismo feminista en su texto: Matria. El Horizonte de lo Posible. Siglo XXI,
Madrid, España.
60
LAGARDE, Marcela. Ibíd. p.13.
44
construcción de conocimientos e interpretaciones, y prácticas sociales y
políticas”61.
Para Marta Lamas, en la línea que ella denomina como antropología feminista, el
enfoque de género implicaría el reconocimiento de que “una cosa es la diferencia
sexual y otra las interpretaciones, atribuciones, representaciones o prescripciones
que un grupo social construye basados en dicha diferenciación sexual”62.
61
Ibíd. p.16.
62
La antropóloga feminista Marta Lamas, ha sido incisiva visibilizando las confusiones semánticas
y conceptuales que ha generado la acepción de la palabra género en inglés como sinónimo de
sexo. Se puede revisar: Lamas, M. (2007). Complejidad y claridad en torno al concepto de género.
En Giglia, Garma y De Teresa (Comp.) ¿Adónde va la antropología? División de Ciencias Sociales
y Humanidades de la UAM- Iztapalapa, México.
63
Lamas, M. Género, diferencias de sexo y diferencia sexual. Revisado el 5 de octubre de 2012:
http://www.iupuebla.com/Doctorado/Docto_Generoyderecho/MA_Doctorado_Genero/MA_GENERO
.pdf
45
b) Que las construcciones simbólicas que se han hecho a partir de la
diferenciación sexual no están destinadas a permanecer para siempre, pueden ser
transformadas.
Es pertinente mencionar que tampoco existe una receta universal para el enfoque
basado en los derechos humanos. Sin embargo los organismos de las Naciones
64
Oficina de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos – Ginebra.
2006, p.15.
46
Unidas han llegado al consenso en un conjunto de atributos fundamentales a
saber: a) cuando se formulen las políticas y los programas de desarrollo, el
objetivo principal deberá ser la realización de los derechos humanos; b) un
enfoque basado en los derechos humanos identifica a las personas como titulares
de derechos y aquello a lo que tienen derecho, y a los correspondientes titulares
de deberes y las obligaciones que les incumben, y procura fortalecer la capacidad
de los titulares de derechos para reivindicar éstos y de los titulares de deberes
para cumplir sus obligaciones; c) los principios y las normas contenidos en los
tratados internacionales de derechos humanos deben orientar toda la labor de
cooperación y programación del desarrollo en todos los sectores y en todas las
fases del proceso de programación65.
65
Ibíd., pp.15-16.
66
MEN-Colombia. 2010, p.7.
47
2.3. TÉCNICAS, INSTRUMENTOS Y ESTRATEGIAS DE INVESTIGACIÓN
67
DELGADO, Juan. 1998, p.56.
48
Por tanto, durante este periodo de tiempo, se tomaron notas etnográficas sobre
situaciones diversas, expresiones y reacciones de las participantes ante las
actividades implementadas. Para todo esto, la observación participante fue el
elemento fundamental pues del contacto directo, de la interacción y del diálogo
salieron aspectos teóricos neurales. De otro lado, las entrevistas abiertas se
dieron en dos ámbitos de encuentro: a) en algunos casos de manera individual ya
sea en actividades lúdico-pedagógicas o por fuera de estas en espacios privados,
pero dentro del horario de actividades; b) en otros casos, de manera colectiva
mientras se desarrollaban actividades como la elaboración de artesanías, pintado
de uñas, peinados, decoración de espacios o en pleno almuerzo. Muchas veces
los diálogos establecidos se daban espontáneamente o se motivaban
vinculándolos a las actividades programadas.
68
Ver el Anexo No.1 Encuesta de necesidades
69
Ver el Anexo No.2 Instrumentos de caracterización, que incorpora las adecuaciones realizadas.
49
2.3.2. Estrategias de investigación
Jornadas o recorridos para establecer el contacto con las NA en ESC del sector,
mediante actividades lúdicas-recreativas en calle como estrategia de invitación y
vinculación al proyecto. Estas jornadas se acompañaron de recorridos previos por
parte del equipo de trabajo para elegir sitios específicos de interacción, identificar
personas o instituciones de la zona que pudieran apoyar el proceso, y cualificar los
mapas georeferenciales existentes. El conocimiento de las dinámicas y prácticas
in situ permitió al equipo de trabajo ampliar la comprensión de dichos contextos
con miras a cualificar su intervención y a recomendar acciones más ajustadas a la
realidad de dicha población.
b) Jornadas lúdico-pedagógicas.
50
c) Acompañamiento psicosocial de las NA participantes.
3. APROXIMACIONES CONCEPTUALES
En la explotación sexual, terceros se apropian del cuerpo del niño, la niña o del (a)
adolescente para obtener beneficios de cualquier índole. Es una forma denigrante
de violencia que reduce el cuerpo y la personalidad naciente de quienes la
padecen a la condición de objeto de intercambio70.
70
UNICEF. 2003, p.31.
51
La Defensoría del Pueblo ha definido esta modalidad de abuso contra la infancia y
la adolescencia como una forma de violencia que afecta gravemente el desarrollo
de la personalidad cuando afirma que:
Es la acción que establece una persona adulta por medio de una relación
comercial de compraventa para fines sexuales con adolescentes hombres o
mujeres, con remuneración económica u otro tipo de retribución en la forma de
prostitución, pornografía o turismo sexual. Viola los derechos de los y las
adolescentes, por cuanto les quita el derecho a crecer en un ambiente sano, a la
protección y a un adecuado nivel de vida que incluya salud, educación, seguridad
e integridad física. Esta relación comercial con fines sexuales, esta mediada por el
contexto socioeconómico en el que se desarrolla y puede hacer parte de grandes
redes comerciales del sexo promovida por proxenetas locales o mantenida
directamente por los/as adolescentes explotados/as a cambio de beneficios
inmediatos. Ellos y ellas no tienen conciencia clara de lo que hacen, no es elección
voluntaria, no constituye un estilo de vida, por el contrario llegan a estos
escenarios, primordialmente, por las difíciles circunstancias que han tenido que
atravesar. Por tanto los/as adolescentes que se ven abocados a ejercer la
prostitución no son enfermos sexuales precoces72.
71
DEFENSORÍA DEL PUEBLO, 1994.
72
ALCALDIA DE MEDELLIN. 2007a, p.31.
52
esta debe entenderse no como si fuera una elección compleja y libre de
constreñimientos que, por lo regular, haría un adulto/a.
Una violación fundamental de los derechos de la niñez. Abarca el abuso sexual por
una tercera persona o personas. El niño-a es tratado como objeto sexual y como
mercancía. La explotación sexual comercial de la niñez constituye una forma de
coerción y violencia contra ésta, equivale al trabajo forzado y constituye una forma
contemporánea de esclavitud73.
73
ECPAT INTERNACIONAL. 2000, p.2.
53
un tipo de violencia basada en el género –VBG, concepto que engloba distintas
modalidades de abuso, identificados actualmente como delitos, y un grave
atentado a los derechos humanos cometidos contra mujeres, niñas y jóvenes. La
VBG ha sido definida por la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra
la mujer, en el artículo 1, de la siguiente manera:
74
ICBF et al. 2006, p.189.
75
Durante el texto se hace uso del término prostitución en el contexto de las menores explotadas y
no como se entiende desde el marco legislativo que diferencia claramente el ejercicio libre de las
transacciones económicas por satisfacción sexual del mundo adulto. Sin embargo, hace más
liviana la escritura recurrir a éste, además porque sigue siendo un término de uso frecuente por las
mismas NA.
54
El primer de los términos, el de proxeneta, se refiere a “un hombre o mujer quien
contacta, induce, facilita o establece la relación entre el NNA y el cliente-abusador.
Generalmente controlan el dinero y efectúan la negociación, razón por la cual
también reciben el nombre de chulos. Aunque en ocasiones actúan solos,
frecuentemente hacen parte de redes o grupos”76. Puede presionar, chantajear o
manipular afectivamente a los NNA. El cliente se refiere a “todo individuo ´que se
aprovecha injustamente de algún desequilibrio de poder entre ellos y una persona
menor de 18 años con el fin de usarlos sexualmente, ya sea para obtener
beneficios materiales o por placer personal´. De acuerdo con diferentes
investigaciones este puede ser de cualquier condición social, nivel educativo,
casado o soltero, hombre o mujer”77; el intermediario son todos aquellos que “se
benefician indirectamente por ayudar a facilitar el contacto sexual entre los NNA y
el explotador o proxeneta. Suelen ser intermediarios distintas personas como
taxistas, botones de hoteles, dueños de residencias, vendedores informales, los
pares de parche o pandilla, a veces vecinos o familiares”78.
76
ICBF et al. 2006, p.190
77
Ibid, 191.
78
Ibidem.
79
Dependiendo del enfoque de las investigaciones o modelos, la explotación sexual es un tipo de
abuso sexual y un tipo de violencia contra la infancia, generalmente tipificada como abuso sexual
extrafamiliar: “es realizado por personas ajenas a la familia, generalmente cuidadoras o personas
completamente extrañas que utilizan niños, niñas y adolescentes con fines eróticos o comerciales”
GOBERNACION DE ANTIOQUIA, 2011, p.25. El debate frente a los límites conceptuales entre
ambas categorías continúa dándose en el medio académico pero también institucional.
80
OIT. 2005, p.8.
55
en términos teóricos toda explotación sexual es una violencia sexual81 y un abuso
en tanto se cometen actos contra un menor de edad, pero no todo abuso sexual
está en el marco delictivo de la explotación sexual comercial.
81
De acuerdo con la OMS, violencia sexual es “todo acto sexual, la tentativa de consumar un acto
sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o
utilizar de cualquier modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona,
independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito, incluidos el hogar y
el lugar de trabajo” Además, la violencia sexual se manifiesta de diferentes formas como: la
prostitución forzada, la trata de personas, los matrimonios precoces, los actos violentos contra la
integridad sexual, el abuso sexual cometido contra niños y adolescentes, el incesto, la violación, el
manoseo, el embarazo o el aborto forzado; la restricción en el acceso a servicios sanitarios
seguros en regulación de la fecundidad, la atención del embarazo, el parto o la interrupción
voluntaria del embarazo, el contagio forzado de infecciones de transmisión sexual, la desnudez
forzada, y la explotación sexual comercial de niños, niñas y adolescentes, entre otras” Alcaldía de
Medellín, Boletín del Observatorio de Violencias Sexuales, Edición 01, noviembre de 2012.
82
Aquella que utiliza menores para su comercialización desde distintos lugares cerrados como
casas o negocios legales que generalmente son fachadas manejadas por redes delictivas
organizadas.
56
Turismo sexual: “se considera turismo sexual infantil la promoción de actividades
turísticas en las que se incluye la actividad sexual con NNA. Esta promoción
puede ser tanto para captar turistas extranjeros como del mismo país. Muchos
explotadores viajan a países menos desarrollados para involucrarse en actos
sexuales con NNA. El anonimato, la disponibilidad de NNA y el estar lejos de las
restricciones morales, sociales y jurídicas que normalmente gobiernan su
comportamiento puede llevar a una conducta abusiva en otro país. Además, estos
explotadores justifican el comportamiento aduciendo que es culturalmente
aceptado en ese país o que ayudan a los NNA con algún dinero”83.
83
GOMEZ, 2005.
84
ICBF, 2006, pp.192-193.
85
Fundación Esperanza, 2003.
57
almacenamiento de este tipo de materiales; según los contenidos se habla de
pornografía blanda y pornografía dura. La primera hace referencia a imágenes
desnudas y seductoras de NNA que no son sexualmente explícitas, mientras la
segunda involucra la exhibición de imágenes de acceso carnal y/o actos sexuales
con NNA; la pornografía se produce con fines de lucro, circulación e intercambio,
con fines delictivos (chantaje, trata, etc.) y para uso personal. Se puede encontrar
en revistas, libros, Internet, programas de radio, películas, dibujos animados, etc.,
lo cual dificulta su control86.
86
ICBF, 2006, pp.191 - 192
87
Ibid, p.193.
58
“clientes”, dueños de negocios o control controlando las redes de ESCIA y de trata
interna entre regiones de Colombia”88.
88
Ibid, p.194.
59
elaboración emocional del abuso sexual, la ignorancia e ingenuidad, el manejo
inadecuado de la presión, la no confianza en sus familiares y el consumo de
drogas.
60
una edad específica sino en el tipo de vivencias diferenciales cuando, a nivel
físico, los riesgos de complicaciones en la salud y de asumirse como madres
jóvenes cambia radicalmente la situación de una niña a la de una adolescente.
61
SEGUNDA PARTE
62
CARACTERIZACIÓN DE LAS NIÑAS Y ADOLESCENTES EN
EXPLOTACIÓN SEXUAL COMERCIAL SECTOR PRADO CENTRO
COMUNA 10, MEDELLÍN.
Frente a la encuesta que arroja los datos cuantitativos aclaramos que ésta tenia
como principal objetivo identificar las principales necesidades de las NA, que diera
pie a la construcción de una base de datos del grupo89 y, de otro lado, para
identificar situaciones de carácter urgente o emergencias posibles que pudieran
ser atendidas de inmediato, especialmente en cuanto a la situación en salud y
protección de la vida de las NA. Otros datos de la encuesta se relacionaron más
con aspectos no urgentes pero si apremiantes en aspectos como educación,
estructura familiar e interés de ser atendida por alguna institución de protección
89
Otros datos de la encuesta que tiene que ver con datos personales como nombre, lugar de
residencia, teléfono, se retoman en el formato SUB. Muchas NA, por razones de seguridad, se
abstuvieron de dar algunos de estos datos, lo cual fue aceptado por principio ético del equipo de
trabajo.
63
y/o rehabilitación. Estos datos sirvieron para el análisis de la situación de las NA y,
algunos de ellos para facilitar remisiones o apoyos a mediano o largo plazo.
64
1. DESCRIPCIÓN SOCIODEMOGRÁFICA Y CULTURAL DE LA COMUNA 10 Y
DEL SECTOR DE PRADO CENTRO90
90
Datos tomados de UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA, s.f. y del texto de NARANJO, Gloria, 1992.
65
residentes habituales de la zona son menores de 30 años, por lo que el grupo de
edad 20-24 años es el que posee el mayor número de población.
El predominio de este segmento de adultos jóvenes constituye sin duda una de las
características singulares del sector poblacional de estos barrios. Generalmente
son ellos los desocupados, son ellos los subempleados. La tasa de desempleo
alcanza aquí el 11.49 % de la población en edad de trabajar. El estrato
predominante es medio-bajo o 3.
66
Mapa 1. Ubicación del sector Prado Centro en la Comuna 10 (La Candelaria), Medellín, Colombia.
67
En este sentido, gracias a este hito y al consecuente incremento de la actividad
productiva de la zona, los “bajos del metro” entre la Estación Prado Centro y la
Estación Parque Berrio, se convirtieron en zonas de comercio formal y sobre todo
de múltiples formas de comercio informal, incluyendo un estilo de compra-venta
llamado “cambalache” que utiliza mayormente mercancía de contrabando y
robada.
2.1. Edades
68
Frente a este aspecto, se rastreo en las NA entrevistadas el promedio de edad a la
que habían llegado a la explotación sexual, lo cuál indicó que la mayoría llegó a
los 12 años o menos (una adolescente dice haber llegado a la edad de 7 años91).
En este sentido, aparecen múltiples circunstancias que aunadas ayudan a apreciar
porque las NA se vinculan a esta actividad, en especial se identifican factores
familiares y del contexto barrial que facilitan este hecho y que se profundizarán
más adelante.
Existe una tendencia muy fuerte hacia un círculo vicioso donde muchas NA han
vivido el hecho de que sus madres han sido o son prostitutas, así como lo han
visto en algunas de sus hermanas mayores. Una de las adolescentes lo expresa
de esta manera:
Mi mamá decía que trabajaba en una panadería pero luego nos dimos cuenta que
trabajaba en el barrio en prostitución. Igual yo sabia que algún día me iba a tocar y
¡normal! Me llegó el día y a mi no me paso por la mente ¡ay no voy a ser capaz de
hacer eso! ¡No! ¡Es como si hubiera estado muchos años ahí!”.
91
Lo cual concuerda con el hallazgo de la reciente investigación de la Alcaldía de Medellín: Mapeo
de los escenarios de Explotación Sexual Comercial Infantil y Adolescente, modalidad abierta, y
estimación del tamaño de población víctima de esta problemática en las comunas 4 y 10 de la
ciudad de Medellín, 2011 y donde se asegura que: “La edad promedio mínima reportada de niños,
niñas y adolescentes explotados/as sexualmente es los 7 años”.
69
Otra de las jóvenes narra: “mi mamá trabajaba en pueblos y en la Veracruz, ya no
lo hace… a mi mamá la violó el padrastro y le dieron la espalda en la casa, la
abuela la culpó, le dijo que le respetara el marido y la echó, yo por eso no me
hablo con mi mamita (abuelita)”.
El círculo se mantiene toda vez que las hijas encuentran una afinidad con sus
madres y no sólo un ejemplo, ya que entienden que esta actividad se convirtió en
una forma de mantener económicamente a los hijos-as y es “un trabajo como
cualquier otro”.
70
rápidamente los casos particulares y trabaje con las familias que se puedan
rastrear a tiempo. Esto ayudaría a romper con círculos viciosos donde dos o más
hermanas de una misma familia se ven abocadas a repetir una misma triste
historia.
Algunas señalan que las constantes peleas de sus padres, los maltratos físicos,
verbales, el abandono, el consumo de SPA y el alcohol de los padres, fueron
razones para salir de sus casas. También se evidencia un vacío afectivo
especialmente de la figura materna (fundamentalmente por ser la figura presente)
como en el testimonio de una de las niñas: “mi mamá prefiere al marido antes que
a sus hijas”, -refiriéndose así a sus padrastros- y manifestando su sensación de
abandono. Verbigracia, una de las niñas señala que su mamá toma demasiado, su
papá vive en otro municipio por lo que tiene poco contacto con él y por eso se fue
a “vivir con sus amigas al centro”.
Aunque existen resentimientos hacia las familias, muchas guardan un afecto sobre
todo con las madres, pues son referenciadas como figuras de autoridad y ejemplo
de perseverancia (“mi mamá es una berraca”). Los padres o padrastros, en
oposición, casi siempre están ausentes o son referenciados como “golpeadores” o
abusadores.
71
2.3. Lugar de nacimiento
72
Convenciones:
Lugares de
procedencia de
Antioquia
Lugares de
procedencia de
Chocó
Lugares de
procedencia de
Córdoba
Mapa 2. Lugares de procedencia de las familias de las NA del sector Prado Centro en la Comuna
10 (La Candelaria), Medellín, Colombia.
Las jóvenes cuya familia extensa todavía tiene miembros en los pueblos de origen
también transitan entre la ciudad y el campo. En un caso recogido por la
investigación, una de las niñas tiene hermanos mayores vinculados al negocio de
“raspar” coca y por temporadas ella dice también haber participado en esta
actividad que “deja más plata” aunque ha regresado a Medellín porque argumenta
que es “mucho más duro, muy trabajoso y no es lo mismo que estar en la ciudad”.
También se presenta la vinculación de algunos miembros de la familia a grupos
armados como la guerrilla.
73
informal o en el servicio doméstico. Algunas de las jóvenes relatan haber trabajado
en estos oficios junto a sus madres antes de estar en la explotación sexual.
En este cuadro está claro que la mayoría de las niñas habitan permanentemente
en el centro de la ciudad, en un 82 % viven fundamentalmente en hoteles o
edificios de inquilinatos.
74
La mayoría de estos hoteles no tiene nombres que los identifiquen y son
administrados por familias que viven en los mismos edificios, haciéndose cargo de
cobrar a las niñas el costo de “la dormida” de cada noche. Por lo general, las niñas
duermen compartiendo una misma habitación con sus más allegadas y/o
hermanas, en una situación reiterada de hacinamiento y condiciones insalubres.
Convenciones:
Lugares de
residencia de
las NA en ESC
Lugares de
permanencia de
las NA en ESC
75
la dinámica de la prostitución o vive en sectores del centro lo que les facilita la
movilidad.
En general, estas jóvenes no han roto del todo los lazos familiares pues a pesar
de vivir de forma más constante en hoteles de Prado Centro, siempre se refieren a
los hogares en los barrios como “sus casas” y recurren a ellos en oportunidades
especiales. Algunos de estos momentos en los que retornan a las casas, tiene que
ver con fechas especiales como navidad o cumpleaños, al encontrarse en una
situación de riesgo o amenaza en el centro a lo que llaman “estar caliente”, o por
tener poco dinero.
Otras veces, se debe a un deseo de retorno que surge porque algún familiar las
busca y se los pide o porque desean “descansar del trabajo”, “engordar” o bajar el
consumo de SPA. En otras ocasiones el retorno, casi siempre temporal, se debe a
la necesidad de atender un embarazo muy adelantado y el parto.
Sin embargo, casi siempre las jóvenes dicen no “aguantar” mucho el regreso a las
“reglas” o normas del hogar, a una sensación de “encierro” y de falta de “libertad”
que suelen sí encontrar en la dinámica del centro de la ciudad. Algunos relatos,
demuestran que algunas niñas regresan a sus casas por un par de días, también
en la búsqueda de afecto pero lo que casi siempre encuentran son “reproches” o
peleas con sus padres o hermanos-as. En ciertas ocasiones, roban en sus propios
hogares antes de retornar al centro, casi siempre para utilizar las ganancias en el
consumo de SPA.
76
comunas 2, 9, 6 y 4, todas en la zona Nororiental de Medellín. Sólo 2 niñas
provenían de zonas distintas, una de la Noroccidental (Comuna 6: Doce de
octubre) y otra del municipio de Bello.
77
Convenciones:
Mapa 4. Comunas de Procedencia de las NA en explotación sexual del sector Prado Centro de la
Comuna 10 (LA Candelaria) Medellín, Colombia.
Muchas de ellas también han hecho parte a su vez de bandas o pandillas, desde
muy jóvenes cometiendo a su vez delitos menores, aprendiendo a utilizar armas
(especialmente cuchillos o navajas), utilizando sustancias psicoactivas y
comenzando a tener relaciones sexuales a muy temprana edad (generalmente
entre los 10 y 12 años).
En muchas ocasiones amigas del barrio las invitan al centro directamente y otras
veces las jóvenes empiezan a intercambiar sexo por favores desde el barrio,
gracias a las dinámicas de iniciación sexual temprana y a que existen agentes
explotadores muy cercanos a ellas. Esta dinámica facilita que algunas, llegando al
centro, ya tengan experiencia y no se sientan afectadas emocionalmente al
vincularse a la prostitución.
78
2.6. Desplazamiento
Los círculos de amistades en los barrios son uno de los principales conectores de
las jóvenes con la explotación sexual. En la mayoría de los casos son otras
mujeres adultas o jóvenes vinculadas a la prostitución, comerciantes o
transportistas, los que hablan sobre una oportunidad económica a las jóvenes o
las contactan directamente con el escenario del centro de la ciudad y sus
dinámicas. Algunos buseros y taxistas juegan un papel muy importante para que
79
las jóvenes conozcan el centro ya que entablan relaciones afectivas con ellas o a
cambio de favores, muchas veces sexuales, las transportan gratuitamente de los
barrios hacia el centro y de vuelta o les “dan la liga” (regalo económico con el que
se movilizan en el centro).
Salíamos una vez a la semana en los recorridos de los colectivos y conocí un tipo
administrador de un hotel y mi amiga se consiguió un jíbaro que le daba de todo
luego subíamos a amanecer, pero ella tuvo una pelea con una pelada y nos
bajamos del todo. Conocí un acopio y ese era mi parche, me gustaban unos
taxistas y ahí empecé con la mariguana y como yo quería plata me fui a vivir con
unas amigas. Unas amigas conocían a un taxista y él me dijo que conocía unos
gringos, que me fuera con él, así conocí amigos en el Poblado y ahora yo los llamo
y les pregunto si van a abajar, si pueden los espero o si no me paro ahí y le tocan
el hombro a uno…
80
De las 40 participantes encuestadas, sólo dos de ellas, un 5 %, son de
ascendencia afrocolombiana, las mismas niñas se autodenominan con esta
categoría, sin embargo se sienten más “paisas” que chocoanas, a pesar de que
sus familias originalmente han migrado de este departamento, incluso ya
pertenecen a una generación nacida en Medellín que ha adoptado las formas de
comportamiento y de diversión con especial relación a los referentes culturales de
la juventud citadina de los barrios populares. Hasta el momento no se ha atendido
a ninguna NA indígena, y la mayoría de ellas, el 95 % cabe en la categoría de
mestizas o blancas pero ellas mismas no se ligan identitariamente a un grupo
étnico particular92.
92
En esta investigación se habla de etnia o etnicidad desde la conjugación de los factores de
procedencia territorial y afinidades culturales compartidas por el sujeto con una comunidad
particular.
93
Hablamos de raza no desde la acepción tradicional sino como una clasificación social compleja
que comprende relaciones sociales de dominación, objetivadas en instituciones y normas, así
como esquemas de percepción que operan de manera irreflexiva, a partir de procesos de
naturalización históricamente constituidos. El fenómeno de racialización sería entonces el
procedimiento discursivo de definición de un individuo a partir de su adscripción o asignación a una
“raza”, o a un grupo humano fenotípicamente homogéneo cuyas características comunes, de
naturaleza hereditaria, determinarían sus capacidades y comportamiento. Además, esta
adscripción racial suele venir acompañada de juicios negativos de valor, en función de una
jerarquización de tales grupos humanos (Restrepo, 2007). Para nuestro análisis fue importante
preguntar a las jóvenes si vivían formas de discriminación producto de esta racialización, aunque
en las preguntas se formulara la categoría raza o color de piel para hacer entendible la razón por la
cual podrían estar siendo víctimas de violencia o maltrato.
81
adjudican como que las negras tienen más deseo sexual: “a mi me decían: esta
negra! Cochina! chorro de humo! Es que usted es muy aletosa y arrechita!”
82
Del total de las jóvenes encuestadas el 87 % de ellas no porta su documento
consigo, y las que saben que existe no recuerdan el número. Esto es una muestra
fehaciente de que no es un elemento de uso frecuente, que consideren útil, o que
entiendan su importancia para la reclamación de sus derechos como ciudadanas.
Solo un 13 % dicen tener el documento, la mayoría de las veces no es original y lo
mantienen guardado en lugares del centro como los hoteles donde habitan o
lugares que consideran seguros (p.e. parqueaderos), pues confiesan que en
varias ocasiones ya los han perdido gracias a circunstancias relacionadas con
estados alterados de conciencia o como consecuencia de peleas o robos.
83
Las que lo poseen, lo tienen en muy mal estado y algunas de ellas tienen
solamente el registro civil y algunas están siendo ayudadas por las familias de sus
compañeros afectivos para adelantar los trámites, aunque la dificultad principal
consiste en la ignorancia de los procedimientos y/o en la falta de recursos
económicos.
En uno de los casos recogidos, se vislumbra que incluso las NA les confían la
pelean por la custodia de sus hijos que pueden estar bajo protección de sus
familias de origen o del Estado; pero estas relaciones son altamente riesgosas
para las NA y sus hijos-as ya que son muy inestables y violentas, especialmente
por los retornos constantes de las jóvenes a la prostitución y drogadicción que
producen reacciones negativas en sus “protectores”.
84
2.9. Atención en salud
Otras jóvenes han sido atendidas en centros de salud de sus barrios, algunas por
las EPS a las que las familias aún las tienen afiliadas; en la mayoría de estos
85
casos son jóvenes que aún mantienen vínculos con las familias o están
comenzando su vida en el centro.
Otras, por el contrario, llevan más de 4 o 5 años en esta condición y han roto casi
del todo sus relaciones familiares, se hayan completamente desprotegidas por ser
habitantes de calle94 y, la mayoría de ellas, acuden en muchas oportunidades a la
Unidad Hospitalaria de Manrique donde se atiende población indocumentada. Sin
embargo, es una constante que las jóvenes acuden sólo en momentos de
urgencias (heridas, sobredosis y abortos agravados) a unidades de atención
especializada en salud pero no necesariamente para atenderse cuando se
presentan síntomas de enfermedades, que por lo general son producto de un largo
estado de desnutrición, uso de SPA e infecciones (en especial de transmisión
sexual) que no han sido tratadas correctamente.
94
Según la Alcaldía de Medellín (2007a, p.35), los-as adolescentes habitantes de calles son
quienes ya tienen un periodo prolongado de vivir en las calles, es decir, duermen, se alimentan,
conviven y permanecen en la calle, generan formas económicas de subsistencia a las que llaman
“el rebusque”, y aunque algunos no duerman en la calle esto depende del ingreso económico
diario, estas personas “han roto los vínculos con la familia y hacen de la calle su espacio
permanente de vida. En esta categoría se ubican los dedicados al Gaminismo que combina
múltiples actividades de sobrevivencia como el raponeo, la mendicidad, la prostitución infantil y las
ventas ocasionales”.
86
Es notable que las NA no reconocen la importancia de tener y manejar
adecuadamente los documentos de identidad y/o la carta de población especial
para adelantar los trámites de salud y lograr el reconocimiento de derechos
fundamentales, los cuales de acuerdo a las condiciones de la población tendrían
que darse independiente de la tenencia o no de dichos documentos.
87
Otra razón para la desescolarización es la vinculación de las jóvenes a la dinámica
de bandas en el barrio sea por hacer parte de ellos o por ser víctimas de su
persecución o violencia, en estos casos las madres prefieren retirarlas de la
escuela y llevarlas consigo para que “ayuden” a conseguir el sustento económico.
88
En promedio, las jóvenes han completado una parte o el total de los estudios de
básica primaria en un 49 %, y un 28 % han logrado realizar el primer grado de
bachillerato. Apenas un 23 % ha avanzado en grados superiores. Este dato es
grave pues corrobora que las NA están abandonando sus hogares y/o sus barrios
a muy temprana edad gracias a no tener elementos motivadores como el estudio.
Estos datos además pueden tener variaciones que los empeoran si se contrasta
caso por caso, pues algunas dicen haber aprobado un curso cuando en realidad lo
abandonaron a la mitad.
89
mucha dificultad y otro caso presenta señales de dislexia95. Otra adolescente
presenta un leve retraso mental96 que se refleja en dificultades para la
comprensión y la comunicación, dispersión en las ideas y poca capacidad de
atención.
Cuando se les pregunta por las instituciones en donde han estudiado y el barrio en
donde se ubica, muchas no se acuerdan o muestran desinterés al hablar sobre el
tema. Sin embargo, cuando se habla sobre sus metas a corto plazo en el plano
educativo, todas quieren estudiar sin saber cuándo empezar ni qué hacer para
lograrlo. Muchas de las jóvenes tienen el deseo de terminar una carrera
95
Este caso se deduce de una de las jóvenes que dice confundir palabras y letras al leer.
96
Para esta joven no se cuenta con un diagnóstico médico pero se pude decir que existen señales
claras de su estado por la dificultad de comprensión y transmisión de ideas durante las
conversaciones mantenidas con ella.
90
universitaria, y han nombrado querer ser profesionales como médicas, médicas
forenses, enfermeras, odontólogas, pediatras, profesoras, actrices, estilistas y
veterinarias; una en ellas comenta con felicidad: “se imagina yo de pronto
atendiendo a las chicas como una doctora…” Otras hablan de su deseo de, por lo
menos, terminar sus estudios secundarios, aunque algunas dicen no querer
hacerlo a través de un internado.
Por ejemplo, el hecho de estar casi siempre bajo efectos de SPA lo que permite
que los clientes, novios y/o desconocidos abusen de ellas no utilizando
preservativo. Igualmente, algunas jóvenes dicen que los clientes emplean
91
estrategias de engaño para no utilizarlo, como apagar la luz para romperlo o
quitárselo, drogarlas, golpearlas, amenazarlas u ofrecerles más dinero.
92
Un 79 % de las entrevistadas dicen utilizar como principal MAC el condón, pero
este uso siempre es limitado, especialmente en las relaciones erótico-afectivas
que establecen con sus parejas que por lo general son del mismo sector. Algunas
de ellas utilizan la inyección, el implante subdérmico o la ligadura de trompas. La
mayoría tiene información errónea o nula sobre el uso de métodos
anticonceptivos, aunque algunas de ellas manifiestan querer un método hormonal
como implantes o inyecciones, pues estos métodos a largo plazo les llaman la
atención pero dicen no tener los recursos. Algunas de las que tienen implantes los
han obtenido de sus experiencias en algunos internados que les han brindado
información.
93
acogida, ya se han realizado por lo menos una citología y conocen su utilidad. A
pesar de ello, muchas de ellas, se refieren a ella como una experiencia muy
desagradable, dolorosa o traumática que no les gustaría repetir.
94
vínculo afectivo establecido ellos confían en sus parejas y deben ganar la
credibilidad de las mismas no utilizando o no exigiendo el uso del condón. Un 53
% no le interesa decir con quién no lo utiliza o insiste en que siempre lo utiliza.
Sólo un 5 % de las jóvenes admiten haber tenido relación sin protección con
clientes y argumentan que ya conocen a sus clientes y saben con cuáles
supuestamente no corren riesgos.
97
De acuerdo a una revisión médica que incluyó citologías a un grupo de 12 jóvenes del proyecto,
sólo una tuvo resultados positivos en cuanto a ITS pero no de VIH Sida.
95
En cuanto a su historial de ITS, el cuadro demuestra un 22 % de casos
afirmativos. Lo cual vuelve a evidenciar una alta frecuencia de relaciones sexuales
riesgosas en el pasado y como conducta regular. Inferimos de las historias
narradas que algunos pueden ser casos crónicos con un largo periodo sin la
adecuada implementación de un tratamiento eficaz, pues algunas de ellas
referencian, nuevamente, la automedicación en estos casos.
Cuando se les pregunta si saben que tipo de ITS tienen o han tenido en el pasado
no logran identificarla, con excepción de un par de niñas que dicen haber
contraído sífilis alguna vez, pero no estamos seguros que su aseveración se
respalde en un diagnóstico oficial.
96
muchas de las jóvenes del proyecto expresaron creer estar embarazadas o tener
dudas al respecto. Era recurrente el pedido de una prueba de embarazo para
corroborar un posible embarazo asociado a síntomas como dolor en los senos,
retrasos menstruales, dolores o abultamiento abdominal e incluso sensaciones de
cansancio, sueño, hambre o supuestos movimientos de un bebé en sus vientres.
Muchas de las NA que creían estar embarazadas o que tenían dudas al respecto,
expresan la común controversia de saberse demasiado jóvenes y sin recursos
para ser madres, y, de otro lado, no querer abortar por razones morales
especialmente las de influencia de la religión católica. A aquellas que tenían
sospechas se les preguntó si deseaban continuar con sus embarazos y muchas
aseveraron que sí, a pesar de tener en su historia reciente abortos u otras
condiciones que podrían potencialmente presentar riesgos a su proceso de
embarazo, además todas mantuvieron el consumo de sustancias psicoactivas.
Ahora bien, este deseo no era tan genuino, toda vez que algunas de ellas, en
ciertas ocasiones o momentos informales confesaban a algún miembro del equipo
que iban a abortar, lo que nunca pudimos comprobar aunque se abordaba el tema
de los riesgos y la prevención con cada una de ellas. Sin embargo, otras
expresaban su deseo de continuar con su embarazo pues en este hallan una
posibilidad de establecerse con sus parejas y es un hito de felicidad que en
algunos casos las impulsa a dejar su actividad actual.
Sólo una de las jóvenes del proyecto llegó en evidente y avanzado estado de
embarazo, que con el tiempo reconoció como un embarazo producto de un
“accidente” o relación sexual sin protección, aunque decía que deseaba tenerlo
para, según ella, estabilizar su relación de pareja y comenzar una familia.
De aquellas a las que se les logró realizar exámenes de embarazo, sólo un caso
dio positivo, pero el examen se logró con muy pocas y el riesgo de embarazos se
mantuvo constante con todas ellas durante el tiempo en que participaron del
97
proceso formativo. De las que pudieran estar embarazadas como de aquella de la
que se estaba seguro, podemos decir que ninguna había iniciado control prenatal
y ninguna de ellas tenía conocimiento sobre cómo hacerlo y qué importancia tenía.
98
Hay dos cosas graves que complementan esta información, una son las causas de
aborto que se verán en el siguiente cuadro, y la otra el hecho de que en la mayoría
de los casos narrados la mayoría de estos abortos fueron realizados muy
recientemente, en condiciones que confiesan son insalubres o caseras, y algunos
casos provocados por ellas mismas aunque no hablan sobre los detalles de los
procedimientos que emplean.
Aunque un 92 % dicen haber tenido sólo un aborto esta cifra también puede
ponerse en duda si consideramos que el promedio de las NA lleva por lo menos
dos años en la explotación sexual lo que eleva la probabilidad de embarazos no
deseados y consecuentemente de abortos.
El hecho de que el 38 % de los abortos relatados haya sido causado por agresión
infringida por sus parejas, en peleas con otras jóvenes, un 8 % por causa del
consumo de SPA y otro 8 % por intento de suicidio, agrava la situación de salud
mental y física de las NA, y demuestra una realidad violenta que se da
fundamentalmente en las relaciones de pareja, con sus pares y contra ellas
mismas.
99
Aunque el dato de aborto espontáneo sea de un 15 % es muy probable que en el
23 % que no clarifica las causas, los casos tengan que ver más con abortos
inducidos ayudados o no por terceros.
Frente al tema, las jóvenes mantienen en sus expresiones la idea de que esta
práctica es negativa, “pecaminosa” y trae consigo riesgos graves, pero no admiten
que es una práctica común por temor a ser señaladas. Sin embargo, cuentan que
algunos de estos hechos se relacionan con abusos sexuales en sus hogares,
barrios de origen o producto de la explotación sexual.
2.13. Maternidad
Sin embargo, las historias relatan constante abandono por parte de la pareja lo
que las obliga a una crianza solitaria de los hijos que tampoco se prolonga durante
mucho tiempo porque muchas deciden dejarlo con sus familias de origen o
entregarlos a instituciones de protección.
100
En algunos casos las jóvenes intentan criar a sus hijos mientras están en la
explotación sexual y los dejan al cuidado de personas conocidas o en los hoteles
donde residen, y en muchas de estas ocasiones las autoridades intervienen
poniendo a los menores bajo protección, lo que se convierte en una nueva pérdida
emocional para estas jóvenes.
De las nueve (9) jóvenes con hijos-as el 56 % tiene un solo hijo-a, un 33 % dos
hijos-as y una sola de ellas tiene ya 3 hijos de los cuales tuvo el primero a la edad
de 12 años. Esto expone fehacientemente la presencia del difícil problema de las
“madres niñas” en la ciudad, que repiten uno tras otro embarazos no deseados.
101
Las edades más frecuentes de los hijos son un año o menos con un porcentaje de
50 % y 2 años en un 36 %, lo que además aumenta la problemática del abandono
de niños y niñas muy pequeños que además presentan problemas de salud física
y emocional, en ciertos casos.
En estos casos no siempre los hijos-as se mantiene unidos pues deben ser
repartidos en varias familias o entre familias e instituciones. Esto genera mucha
dificultad emocional para las jóvenes, por ejemplo en el caso en que una de ellas
se queja porque al ir a ver a uno de sus hijos durante el fin de semana no puede
visitar a otra que se encuentra en otro lugar.
102
2.14. Estado de salud
103
contra ellas en peleas con sus pares, parejas, clientes o auto infringidas. Otras se
quejan de haber sido atropelladas en accidentes de tránsito, lo cual ocurre
frecuentemente cuando están bajo efectos de las SPA.
99
Debido a que esta encuesta no fue realizada por personal médico, sólo se recogen datos
asociados a sintomatología, que de todas formas fueron muy útiles a la hora de las remisiones
médicas logradas para algunas de las NA durante el proceso.
104
En cuanto al estado de salud de las NA de la muestra, un elevado número de
ellas un 62 % dice presentar actualmente, dolor de muelas, caries o algún otro
problema dental. Aclaramos que, aunque el nombre del cuadro se refiere sólo al
dolor, en general la pregunta se hizo teniendo en cuenta cualquier afección dental.
En este sentido muy pocas de las jóvenes tampoco atienden sus problemas
dentales especialmente por la carencia de recursos o por restarle importancia.
Muy pocas NA de las que se proyectan a trabajar más allá del centro y se
trasladan a sectores más ricos de la ciudad en busca de clientes, cuidan más de
su higiene personal como sus dientes, en este caso incluso se realizan
tratamientos de ortodoncia también pagados con “favores sexuales” como lo relata
una adolescente.
2.15. Alimentación
105
De este porcentaje un 60 % sólo consumen 2 comidas al día y un 22 % sólo una
comida al día. Ambas cifras son graves, sobre todo porque muchas de ellas
admiten no comer comidas saludables sino “mecatear”100 y comer en desorden.
La mayoría de las entrevistadas afirman no consumir las tres comidas diarias por
asuntos económicos en un 32 % y por efectos del consumo de sustancias que
inhiben el apetito como el “sacol” que dicen ponerlas “enfermas” y vomitar los
alimentos de sal que ingieren, este porcentaje es del 50 %, el 6 % restante dice no
comer sino el almuerzo y la cena debido a que sus ritmos de vida hacen que
duerman hasta muy tarde.
100
Comen comidas procesadas poco nutritivas como gaseosas, fritos o comidas con preservantes.
106
2.16. Consumo de SPA
107
alcohol parecen ser de uso más esporádico asociado fundamentalmente a las
“rumbas” de los fines de semana o a la disponibilidad de excedentes económicos.
Sin embargo, las ruedas y la cocaína son de uso frecuente en aquellas jóvenes
con un mayor tiempo de consumo de SPA. Entre otras cosas, porque son muy
fáciles de adquirir y son económicas. Esto se debe a que la zona de Prado Centro
tiene varias “plazas” o puntos de venta de drogas, en los cuales algunas de las
niñas incluso participan como vendedoras a lo que denominan “jibariar”. La
consecución de sacol también se hace muy fácil porque muchos vendedores
informales, las ferreterías, incluso en los barrio de las familias de origen, están al
alcance de las jóvenes y son altamente apetecidas pues tienen efectos
prolongados.
108
constante el hecho de que muchas llegaban con un alto consumo de pastillas y de
sacol.
La mayoría manifiesta la necesidad de consumir para poder estar con los clientes,
dicen que así se desinhiben más. Por tanto, el consumo de drogas llega al mismo
tiempo que el intercambio de sexo por dinero puesto que la droga es para ellas un
coadyuvante del encuentro sexual con el desconocido; “no podría hacerlo si no
estoy ensacolada”.
Otras refieren que hay algunos de ellos (clientes) que les exigen consumir alguna
SPA. Otras dicen que se cuidan de no consumir cuando “hacen los ratos”101,
puesto que corren mayores riesgos, bajos los efectos de la droga.
Con relación al inicio del consumo verbalizan que se llega por incitación de las
amigas-os en algunos casos de sus barrios de origen y en otros casos de Prado;
siendo en Prado el lugar donde se agudiza el consumo de SPA. El consumo es
fácil en los barrios porque, según ellas, “es más fácil comprar sacol en el barrio por
que no saben para que es”.
109
consumo en el cuerpo como “enloquecerse” o deprimirse, y no sobre
consecuencias a mediano y largo plazo sobre la salud y/o la vida. Otras no les ven
efectos negativos a algunas sustancias como la marihuana y por el contrario le
asignan una función benéfica en el cuerpo porque las “relaja” en comparación de
la cocaína o las pepas que consideran riesgosas porque, según sus relatos,
intensifican las ganas de pelear, producen más accidentes o facilitan que se hagan
daño a si mismas.
110
Este cuadro tampoco muestra que las NA deseen entrar a un centro de
rehabilitación, en contraste con el 50 % que dice querer rehabilitarse un 64 %
dicen no querer internarse o ingresar a una institución especializada para la
rehabilitación de SPA. Sin embargo, esto se debe a que consideran que les ayuda
más internarse en una institución de protección, donde igualmente les restringen el
consumo, pero en donde encuentra más ganancias que en el otro tipo de
institución. Un 29 %, de todas formas, dice poder internarse, y un 8 % no responde
a la pregunta generalmente por tener dudas al respecto.
111
que se encuentran en una situación especial en las que una nueva internación
podría ser benéfica para sus planes inmediatos o futuros.
Cuando se indaga sobre las razones por las que no deseen ingresar a una
institución sobresale que no soportan el encierro, las normas estrictas, los
castigos, las madrugadas, el aburrimiento por falta de actividades, la
incomunicación con sus parejas y amistades, las peleas con sus pares y los
maltratos de funcionarios-as. Ha sido tan reiterativo el fracaso de las instituciones
en la experiencia de algunas NA que a la hora de preguntar si desean ingresar a
una, algunas dicen preferir volver a sus familias de origen o iniciar una familia
propia que retornar a estas.
Dichas instituciones han fracasado en todos los casos de los cuales se tuvo
conocimiento en su intento por mantenerlas en una dinámica de internado y
112
“resocialización”. Por lo cual muchas de las que dicen querer internarse en la
actualidad rápidamente manifiestan querer hacerlo pero no bajo la modalidad de
internado.
En otro caso, también se experimento desde el mismo proyecto las debilidades del
sistema para hacer efectiva una atención integral y humana. Lo cual sucedió en el
caso de una participante que deseaba ingresarse a un internado para terminar sus
estudios junto con su pareja (un menor de edad en situación de calle cuyo oficio
era la venta de drogas): su única condición era internarse juntos para sentirse
apoyados mutuamente con el plan de completar sus estudios antes de llegar a su
113
mayoría de edad y luego comenzar una vida juntos. Sin embargo, el funcionario
que los recogió se negó a internar a uno de ellos ignorando por completo estas
circunstancias que le fueron explicadas, a lo que los jóvenes reaccionaron
manteniéndose en la misma situación de vulneración de sus derechos y de
explotación.
Es así como para ellas estas instituciones están alejadas de lo que desean para
sus vidas o de sus propias realidades, muchas expresiones lo corroboran: “me
aburro en los internados, son el infierno”, “lo quieren mantener a uno encerrado”,
“es que como no entienden que yo quiero estar con mi hermanita en el internado
de ella, para sentirme acompañada, además porque si no es así, cuando mis
papás la visiten a ella no me van a poder visitar a mi” , “en el internado fue donde
me dañe, allá aprendía a consumir drogas y hasta vendí allá adentro”.
114
riesgo su vida como amenazas, aunque reconocen el carácter hostil de la calle,
que hace que diariamente deban estar dispuestas a defenderse por si solas,
haciendo uso de armas cortopunzantes. Sin embargo, un 20 % de las jóvenes
dice tener alguna amenaza de muerte actualmente, que como demuestra el
cuadro siguiente se debe fundamentalmente a amenazas provenientes de otras
jóvenes de la zona por “cacicazgo” término con el que se refieren a rivalidad o
peleas y búsqueda de poder entre pares (otras niñas y adolescentes en
explotación sexual) con motivos de poder sobre el territorio e intento de robo.
Otras veces, las razones de estas peleas son deudas, agresiones o peleas por
relaciones amorosas.
Sólo una de las jóvenes dice estar amenazada por las “convivir” o grupos ilegales
que “controlan” la seguridad y la venta de drogas en el centro. Ahora bien, es muy
probable que este caso se deba también a consecuencias de peleas entre las
mismas jóvenes que entablan relaciones amorosas con estos personajes, quienes
intervienen en las disputas entre ellas defendiendo a sus parejas a través de la
violencia, como lo relatan las jóvenes:
Es que yo soy novia de un convivir, ellos son los de la misma cuadra, evitan las
peleas y le dan ´la pela´102 a los que roban. Una vez una peladito me llevaba la
mala y me mando a decir que me iba a dar ´lata´103 entonces yo la mechoníe pero
102
Se refiere a actos de violencia física.
103
Se refiere a un arma cortopunzante como navaja o cuchillo.
115
cuando se me iba a venir al otro día mi novio se dio cuenta y le dio una pela
tremenda y ella así ya no se mete conmigo, aunque ella todavía me tiene rabia.
Donde yo deje de ser novia de él, ella me busca y me casca.
Las jóvenes establecen vínculos intensos con figuras que se han ubicado en el
lugar del agresor, dando cuenta de estilos de apego que mantienen los ciclos de
violencia y favorecen la adaptación a los mismos. Su visión sobre las relaciones
de pareja y el amor, se fundamentan en una cultura patriarcal que largamente ha
establecido como fundamentos del amor falsas creencias que entrelazan amor con
violencia y se materializan en aspectos como los celos patológicos que recrean un
tipo de control sobre la pareja; la dependencia insana hacia la pareja que pone en
manos del otro decisiones sobre la propia salud y la vida; o, la manifestación y
tolerancia de violencia física, sicológica o sexual en razón de comprender,
soportar o tolerar ciertos “defectos” o “momentos” de descontrol de las parejas.
116
feminidad y masculinidad, relaciones inequitativas entre los géneros, modelos
estéticos femeninos poco saludables y altamente competitivos y consumistas.
Entre otras cosas, porque muchas de las relaciones que establecen las hacen con
hombres violentos de la misma zona donde “trabajan” y por lo tanto son miembros
de grupos delincuenciales que hacen de sus “cuidadores” y ejercen control en
muchas oportunidades limitando su movilidad, controlando sus acciones e
interfiriendo para “defenderlas” de clientes abusivos u otras jóvenes con las que
pelean.
La mayoría de estos hombres son jóvenes y/o niños en situación de calle que
roban, venden droga o mendigan en la zona. Son también hombres con grandes
carencias afectivas, que han llegado al centro gracias a muchos de los factores
por los cuales hemos mencionado que las jóvenes llegan al centro y se vinculan
con estas actividades. Estos hombres han incorporado la violencia como un modo
de subsistencia en la calle y en la medida en que el control sobre las jóvenes les
brinda un lugar de poder en medio de la inequidad que ellos mismos sufren,
emplean este medio asumiéndose entre figuras protectoras-paternales y parejas
“amorosas”.
117
Otras veces, las jóvenes hablan de parejas mayores que pueden haber sido
clientes o de otros hombres jóvenes o adultos que incluyen profesionales,
comerciantes y hasta policías. Algunas de estas parejas les proponen hacer
planes para el futuro aunque muchos de ellos son casados o tienen familia.
118
descubierto una buena proporción de inicio de actividades sexuales asociadas a
abuso sexual por parte de familiares como padres, padrastros o cuñados, así
como actores armados de los barrios. Este abuso a veces, es sistemático y
sufrido por varios miembros de la familia (hermanas) a la vez.
119
en la convivencia diaria fueron el enojo, la frustración y la alegría. Elemento
bastante coherente ya que el enojo exige al individuo cierto nivel de organización
frente a sus acciones, mientras la tristeza desorganiza y resta impulso vital al
individuo. A grande rasgos las NA presentan una situación emocional
caracterizada por aflicción, dolor, angustia y tristeza, asociadas a eventos
traumáticos pasados relacionados principalmente a violencias como abusos y la
salida de sus familias. Aunque se reconocen como sobrevivientes por largo tiempo
en su permanencia en la ciudad; muchas asocian su traslado a este nuevo
espacio gracias a cambios en la dinámica familiar lo que generó ruptura de
sueños, intereses, ideales y presencia de temores e inseguridades respecto al
futuro.
120
negativas de su historia de vida (especialmente familiares) como eventos que han
condicionado sus elecciones, su bajo nivel académico, su descomposición física y
social como las principales situaciones que mantienen su esquema de vida en
esas condiciones.
De otro lado, es importante señalar que pese al poco interés por los temas de
higiene y una tendencia a evadir las responsabilidades subjetivas en lo que refiere
al autocuidado y a la protección de la propia vida. Sin embargo, hay una
valoración positiva de sus cuerpos, que se presenta por lo general por la
asociación de una estética particular a su medio de trabajo y una forma de
competir con sus pares. Su relativamente alta capacidad de autoestima tiene que
ver más con la necesidad imperante de generarse como figuras fuertes,
autoritarias o empoderadas, pero en especial para enfrentar su medio de
permanente violencia, más que por la auténtica autoconsideración de ser una
persona con derechos, capacidades y talentos.
Nos referimos aquí a un Circuito de explotación sexual más que a un Red debido a
que consideramos, según los testimonios recogidos que el tipo de explotación
sexual experimentado en el sector de Prado Centro se relaciona más con un
121
círculo de beneficiarios indirectos de la explotación que con una mafia organizada
que se lucra directamente de la actividad de las NA.
En este sentido se indagó directamente con las jóvenes si ellas estaban obligadas
a pagar a terceros por protección o para poder trabajar en el sector a lo que la
mayoría contestó negativamente, incluso insinuando que “eso si sería explotación,
hay niñas que se dejan robar de las grandes pero yo no me dejo”; “lo que
ganamos es para nosotras, oiga! ¿Acaso uno putea para otros? No… que tal!”.
Aunque el “caciqueo” se refiere a la presión ejercida por mujeres mayores o
adolescentes con mayor experiencia sobre las recién llegadas para que les
entreguen obligadamente parte o todo el dinero que ganan, muchas veces esta
situación se resuelve a través de la violencia. Pero, en términos generales, según
lo relatado por las jóvenes participantes en el proyecto no se logra evidenciar la
existencia de proxenetas como tal, que tengan a cargo una o un grupo de jóvenes.
122
sobrevivir lo que consiste en pagar su habitación, comprar SPA, comida,
elementos de aseo y “salir a rumbear”. Algunas dicen que cuando les va bien no
tiene que hacer “muchos ratos” pues algunos clientes les pagan muy bien, entre
los que se cuentan extranjeros y hombres profesionales104.
En un solo caso, pudimos observar que la misma familia, obligaba a la niña a estar
en situación de explotación sexual comercial para aportar económicamente en los
gastos de la casa, con expresiones como “mi papá me dice es que usted no esta
putiando, es que no tiene esa chimba para ir a comprarme un regalo, si tiene para
zapatos y no tiene para mi, es que yo a usted ya no la quiero, y uno es un niño, a
uno le duele que la familia lo coja a uno de desparche”. Solo en estos casos la
niña es chantajeada o forzada a aportar a la casa pero en general, las ganancias
de las jóvenes se emplean para sobrevivencia propia.
Sin embargo, las jóvenes que se inscriben a un sector específico del centro casi
siempre se mantienen en el mismo por periodos prolongados (años), pues se
adscriben a ciertos territorios y riñen con adultas y jóvenes cuando se movilizan
por otros diferentes, es este sentido se crean fronteras invisibles entre sectores
muy cercanos divididos por escasas cuadras. Algunas de las jóvenes, sin
embargo, dicen haber trabajado por temporadas en sectores como San Diego (La
33) o la Veracruz, pero dicen tener miedo en ambos sectores por violencias que
104
En este sentido, las tarifas se establecen de acuerdo al tipo de cliente y al tipo de sexo que se
compre, así los pagos varían entre $5.000 y $60.000 por “rato”.
123
han vivido o visto, como en el caso de este testimonio: “yo casi no voy por San
Diego, porque por allá los paracos les echan ácido en la cara a las prostitutas”.
De otro lado, se confirma, según las entrevistas, que los hoteles que albergan
menores de edad en el sector de Prado Centro tienen estrategias para evadir a las
autoridades y son avisados con tiempo, antes de que la Policía de Infancia y
Adolescencia los registre, en cuyo caso avisan a las niñas para que salgan a la
calle mientras pasan las requisas y luego todo “vuelve a la normalidad”.
Múltiples violencias son vividas a diario por las NA que, como hemos dicho con
anterioridad, se presentan con mayor frecuencia entre pares, con los clientes y
con otros actores que cotidianamente habitan este sector. Las violencias que
experimentan casi siempre conllevan riesgos hacia su salud y su vida
especialmente por la presencia de armas y por la naturalización de la resolución
violenta de los conflictos o confrontación de poderes. Una gran preocupación que
relatan en las jóvenes es el caso de muertes de niñas producidas en los
momentos en que “hacen ratos”. Algunas niñas relataron haber sido testigos de
asesinatos de compañeras por parte de integrantes de bandas de barrios que
implementan venganzas contra enemigos atacando a las mujeres que son sus
“novias”. Otras en cambio cuentan que “han encontrado niñas colgadas de las
regaderas o a amarradas a las camas y degolladas”.
Ahora bien, aunque dicen que estos casos extremos son menos frecuentes la
discriminación de la comunidad en general, incluso de los mismos funcionarios
públicos (policía, policía de infancia y adolescencia, entre otros) se hace cada vez
más cotidiana, según las jóvenes. Esto se da cuando los funcionarios las tratan
mal, insultándolas, denigrándolas, pegándoles o, incluso pidiendo favores
sexuales a cambio de no internarlas.
124
1.1 . Modalidades de delitos contra las NA
De otro lado, las propuestas de hacer pornografía son frecuentes pero las jóvenes
argumentan que se abstienen de aceptar estas ofertas pues aunque saben que
pueden dar mucho dinero así mismo puede implicarlas en lo que ellas creen sería
un delito por el cual podrían ser sindicadas ellas y las personas que las invitan,
que generalmente son amigos o clientes. Aunque en este caso se equivocan
confundiendo su lugar de víctimas con el de actores delincuenciales, esta creencia
también se vuelve un factor de protección que disminuye el riesgo de nuevas
vulneraciones.
En relación con esto, las jóvenes cada vez más utilizan las redes sociales y la
Internet como medio para crear relaciones de amistad e incluso contactos con
clientes, y aunque no usan imágenes pornográficas, sí usan fotografías
“sugestivas” que según ellas es para “autopromocionarse”.
105
Como factor protector se entienden aquellas actitudes, ideas o comportamientos “internos o
externos que colaboran para que el individuo o las masas opongan resistencia o reduzcan las
consecuencias de las consecuencias de los riesgos, disminuyendo así el peligro de disfunción y la
producción del daño o de situaciones problemáticas” Alcaldía de Medellín, 2007b, p. 30.
125
Tampoco se recogen testimonios al respecto de haber sido utilizadas en la
modalidad de matrimonios serviles o al servicio de grupos armados ilegales,
Aunque en esta última modalidad, las diferencias de esclavitud sexual que
experimentan jóvenes con grupos armados de zonas rurales no se puede
equiparar a la realidad de la ciudad, se pude decir que estando rodeadas de
actores ilegales que ejercen cierto poder en la zona, muchas terminan siendo
seducidas o engañadas por ellos. Algunas de ellas dicen trasladarse por
temporadas y voluntariamente a pueblos de Antioquia pero creen que esto es más
riesgoso pues sienten que la ciudad es un factor protector, pues en cierta medida
conocen más las dinámicas territoriales y tienen más contactos y amistades que
sirven como modo de contención en caso de situaciones riesgosas. Otra
modalidad, en la cual estas NA se ven inmersas es en el Turismo Sexual (que se
relata en ciertas entrevistas), donde se habla de clientes explotadores extranjeros
fundamentalmente españoles y “gringos” que llegan buscándolas o contactadas a
través de terceros conocidos.
A nivel familiar:
- Familias numerosas en condiciones económicas precarias.
- Familias monoparentales especialmente de jefatura femenina.
126
- Ausencia del padre o presencia de padres abusadores o violentos.
- Violencia intrafamiliar constante que incluye violencia física, verbal y sexual.
- Figura materna que violenta y/o esta ausente en la crianza por razones
laborales, o que ejercen la prostitución.
- Círculo familiar donde hermanas mayores u otras familiares también ejercen
o han ejercido la prostitución.
- Relaciones inequitativas de género manifestadas entre el padre y la madre
y entre las figuras paternas y los hijos-as, evidenciadas en mantenimiento
de roles domésticos para las mujeres, violencia de género, privilegios de los
hijos sobre las hijas (estudio, “libertad” sexual y de apropiación de la calle,
etc.)
- Formas económicas de subsistencia de la familia que implica la
desescolarización de las hijas a temprana edad para “ayudar”.
- Hacinamiento que facilita el abuso sexual y la violencia.
- Violencia entre los hermanos-as que, en ocasiones, llega a violencia física
extrema.
- Familias desplazadas y niñas que han sido abusadas sexualmente por
miembros de grupos armados ilegales.
A nivel barrial:
- Presencia de grupos armados y bandas delincuenciales que hacen de las
niñas y jóvenes un blanco para el abuso sexual, en ocasiones, como
estrategia de guerra entre combos.
- Naturalización de la violencia como forma de resolución de conflictos y
como estilo cotidiano de relacionamiento entre las personas.
- Presencia de plazas de SPA y acceso relativamente fácil a las drogas.
- Presencia de explotadores sexuales o personas que proponen a las jóvenes
la salida de la explotación sexual.
- Círculo de amistades que incitan al abandono de la familia, el consumo de
SPA y la vinculación a la explotación sexual.
127
- Iniciación temprana de actividad sexual como forma de intercambio de
favores con personas adultas o con otros jóvenes.
A nivel educativo:
- Baja escolarización femenina y su alta desescolarización por razones
familiares o de violencia barrial.
- Desinterés en el estilo educativo de la Escuela que a su vez reproduce
patrones de discriminación o inequidad de género que desmotiva a las
jóvenes a seguir estudiando.
- Presencia de violencia y venta de drogas al interior de la Escuela.
A nivel social:
- Mantenimiento de relaciones de inequidad entre los géneros y de utilización
del cuerpo y sexualidad de las mujeres y de las niñas a través de
estereotipos reproducidos en los medios de comunicación, la música, la
publicidad, así como muchas prácticas y discursos populares.
- La complicidad, silenciamiento o indiferencia frente a la situación de
violencia y vulneración de derechos de la niñez, en especial de las niñas en
su condición de género.
A nivel individual:
- Baja autoestima y empoderamiento de las jóvenes en especial por no ser
estimuladas dentro de sus hogares y tener como referente figuras
femeninas violentadas y discriminadas.
- Situación de cansancio, aburrimiento y encierro por el cúmulo de tareas
domésticas y la deserción escolar
- Mal manejo de la presión de grupo o familiar.
128
- Embarazo adolescente que la excluye del afecto familiar y de la
continuación de sus estudios.
- Deserción escolar.
- Presión directa de la familia para ser proveedora económica sin importar la
labor realizada.
- Violencia intrafamiliar y abuso sexual.
- Uso y abuso de drogas.
La mayoría de ellas ha visto truncado desde muy temprana edad una vida de
bienestar y felicidad al ser utilizadas de múltiples maneras por los adultos a su
alrededor, por haber sufrido más violencias y tener menos oportunidades en razón
de su género.
129
4.3. Factores de protección
130
En general, se mantiene una idea de querer la continuación y culminación de sus
estudios como una forma de vincularse a un trabajo, así como el deseo de buscar
otros tipos de trabajo que no involucren la utilización de su cuerpo y los factores
negativos que eso les implica. Algunas hacen esfuerzos en la misma ciudad o
trasladándose a otras ciudades por temporadas y en compañía de sus parejas, lo
cual indica una posibilidad de generar desde la autonomía económica un cambio
radical de vida.
Un factor protector, que hemos mencionado atrás, se refiere a los miedos a ser
víctimas de violencias más graves producto de la trata de personas o de su
utilización en la industria pornográfica. Esto evita enormemente que las jóvenes
puedan ser sometidas a esclavitud doméstica, sexual y otra forma de
comercialización masiva con el uso de pornografía.
131
TERCERA PARTE
Foto 3. Elaboración de “cofre de los secretos” por una de las jóvenes del proyecto.
132
MODELO DE ATENCIÓN PARA NIÑAS Y ADOLESCENTES EN
EXPLOTACIÓN SEXUAL COMERCIAL
Los modelos en el campo social, parten de experiencias previas que dejan huellas
o senderos señalados, en otros casos las huellas se van desdibujando por el
olvido o porque se hallan rutas menos espinosas. La experiencia realizada a partir
de este proyecto puede ser denominada “piloto” y sirve como un punto de partida
para validar un corpus de concepciones, planeaciones, metodologías y acciones,
así como para retroalimentarlas, cambiarlas o mejorarlas.
En ese sentido, las particularidades del presente modelo son: a) parte de una
experiencia específica de convivencia con niñas y adolescentes mujeres menores
de 18 años; b) el encuentro a través de actividades lúdico-pedagógicas con las
niñas y las adolescentes tuvo una duración de dos meses y el acompañamiento
133
psicosocial cuatro meses106; c) es fruto de una experiencia de IAP; d) es asumido
como un compromiso político, por lo que no responde únicamente a intereses
académicos, sino al interés supremo de aportar hacia la construcción de una
comunidad para la prevención y erradicación de la ESCNNA.
a) La victimización: No existe una sola creencia sobre algo, toda creencia está
vinculada a otra o se justifica con otra, el mundo de las creencias es
semejante a una red de telaraña. En ese sentido, una de las creencias que
sale a relucir desde una posición lastimera es que las niñas y las
106
Esta diferencia de tiempos se debe principalmente a la vinculación de la psicóloga a cargo de la
atención psicosocial, en un periodo más largo que incluyo dos meses de trabajo adicional antes y
después de la intervención o atención directa con las NA. Esto ayudó a la interlocución del equipo
interdisciplinario y mantuvo la atención y remisión de las niñas y adolescentes que por voluntad
propia siguieron aproximándose a la institución.
107
OIT, 2007c.
134
adolescentes son sujetos inválidos o incapaces de hacer algo por ellas
mismas e incapaces de hacer cambios personales, como si ese fuera su
destino inevitable. Como consecuencia de esta creencia se asumen
posturas asistencialistas negando o minimizando sus capacidades de
resiliencia108, sus fortalezas, sus habilidades o potencialidades. Esta
creencia neutraliza las posibilidades de transformación porque frena
procesos de reconocimiento y valoración; y en ella se dinamizan unas
relaciones de poder que indican de forma simplista que algunas personas
están en la “vida correcta” y otras en la “vida incorrecta". Desde otra
perspectiva, podemos decir que no podemos ocultar que las niñas y
adolescentes con experiencias de explotación sexual comercial son
víctimas y que se han vulnerado todos sus derechos como personas, pero
es importante reconocer también sus potencialidades y habilidades, y sobre
todo, que ellas son capaces de tomar decisiones en situaciones difíciles y
que pueden autogestionar elementos que reconozcan valiosos para su vida.
108
Del verbo latino resilio, resilire: «saltar hacia atrás, rebotar», resiliencia se entiende aquí como
la capacidad de los sujetos para sobreponerse a períodos de dolor emocional, tragedias, traumas,
amenazas o estrés severo, afrontar la adversidad y lograr adaptarse a las circunstancias vividas.
135
“basta que alguien ingrese a un lugar y se encierre allí para que su alma se
sane”109.
109
Ibid., p.16.
136
comporten bien, etc. La invitación es a considerar estos “retornos” como “la
expresión de una construcción de alternativas de vida posibles pero no
como el fin en sí mismo”110; es decir, no como el único camino a seguir, no
como la alternativa, sino como una alternativa. Cuando ellas abandonan
dichos lugares o fueron expulsadas de ellos:
110
Ibidem
111
Ibidem
112
Los estudios y experiencias sobre el tema, demuestran que la niñez en explotación sexual
comercial se encuentran en situaciones de huida de “experiencias tempranas devastadoras donde
ni la familia, ni la escuela, ni la comunidad han podido construirles causes para canalizar su vida”.
OIT, 2007c.
137
Por tanto, de manera sencilla podemos señalar que el presente modelo propone la
creación de espacios113 de “protección temporal que pueda servir para renovar
fuerzas y seguir caminando”114. Es decir, un espacio temporal que permita la
atención y protección de las niñas y adolescentes buscando profundizar
reflexiones potenciadoras de cambios, que pueden estar relacionadas o no con la
institucionalización en espacios de protección vigentes de la ciudad.
113
Con espacio no sólo hacemos referencia a la infraestructura, sino las relaciones humanas que
en ella se entrelazan. Tampoco creemos que haga falta la creación de espacios adicionales a la
infraestructura de la ciudad, pues se pueden generar alianzas con instituciones no
gubernamentales con vasta experiencia en el tema para que sirvan como escenarios para estos
Refugios.
114
OIT, 2007c, p.19.
138
capacidades para vivir en el planeta y no para vivir en el marco de una
institución particular.
115
“Hoy llegó Dina muy alegre; una de las profesoras le preguntó por qué estaba tan contenta, ella
respondió con una sonrisa: es que profe, me reconcilié con mi marido”. Nota de campo del 4 de
octubre (nombre modificado por seguridad).
139
relación no jerárquica y sorora116. Esto ayuda a entender las dinámicas
particulares y grupales y abrirse a modificar sus planeaciones de acuerdo a
ellas. Esto permite que se evalúen tanto los grandes logros como los
pequeños avances en las NA que discurran por el espacio. Verbigracia, en
nuestra experiencia investigativa se logró paulatina y consensuadamente la
disminución del consumo antes y durante el tiempo de interacción, gracias
a los esfuerzos planeados que se basaron en este principio.
116
La palabra sororidad se deriva de la hermandad entre mujeres y tiene que ver con el percibirse
como iguales que pueden aliarse, compartir y, sobre todo, cambiar su realidad debido a que todas,
de diversas maneras, hemos experimentado la opresión y discriminación de género.
140
Esto significa ser consciente de las condiciones de dominación que han ejercido
los hombres a través del patriarcado117, ubicando el cuerpo y la sexualidad de las
mujeres como territorios de violencias. Así como, la estructuración de la
dominación bajo la premisa de la apropiación de las mujeres como objetos
sexuales y no como personas. Esto se traduce en una larga tradición que
considera los cuerpos de las mujeres adultas, jóvenes y niñas como simples
instrumentos para satisfacer el deseo sexual de los hombres. La explotación
sexual comercial de niñas y adolescentes es una hija del patriarcado y la lucha
contra la explotación sexual es una lucha contra una expresión medular de un
sistema cultural que opera aún hoy día en nuestra sociedad.
Equifonía: significa que la voz de las mujeres es valiosa y debe ser escuchada.
Como históricamente la voz y la palabra de las mujeres han sido silenciadas o
escuchadas en menor medida que la de los hombres; entonces se debe fomentar
lo que históricamente ha sido negado e infravalorado. Esto significa promover la
expresión, el uso de la palabra, el diálogo (espontáneo o guiado) en la comodidad
de un espacio propicio promoviendo también espacios de ocio activo, donde la
117
Sobre la historia del patriarcado véase EISLER, Riane (1995), El cáliz y la espada, Cuatro
Vientos Editorial, Chile.
141
palabra es un bien colectivo. No está demás señalar que será necesario fortalecer
la capacidad de escucha. Asimismo, no se puede hablar de equifonía si no se
pone en práctica un lenguaje incluyente en la práctica cotidiana.
Equivalía: significa que todas las mujeres son valiosas al igual que los hombres.
Esto va de la mano con la dignidad como principio del reconocimiento de los
derechos de las personas. Por tanto, se debe reiterar a las NA que ellas son
valiosas, importantes y que tienen dignidad. La valía se traduce en la vindicación
del “yo”, y a partir de allí se construye autoestima y autonomía fuentes de
equipotencia.
142
existencia de los derechos, su apropiación y práctica. El espacio en su totalidad
deberá ser un espacio promotor del ejercicio de los derechos118.
Los derechos humanos son bienes muy preciados con los que cuenta el total de la
población producto de largas luchas históricas y se constituyen en faros o luces
que alumbran el devenir de las sociedades hacia un mundo de equidad, justicia y
bienestar. Este horizonte ético junto a una conciencia crítica, nos sirven como
paradigmas para presidir el orden social y las relaciones entre los ciudadanos y
ciudadanas y entre éstas y el Estado 119.
Pero, ¿cómo haríamos para didactizar estos aspectos vitales en nuestra relación
con las niñas y las adolescentes? Explicar por qué las personas tienen derechos,
aún cuando se les están siendo vulnerados no es una tarea fácil, sin embargo el
horizonte de dignidad nos puede ayudar a dirigir nuestra interacción al
reconocimiento de la condición de humanidad con las NA además de su
consideración como personas importantes, valiosas y con dignidad120; por lo cual
cuentan con derechos121.
118
“Los derechos humanos han sido producto de largas luchas de la humanidad y son expresión de
sus aspiraciones éticas más elevadas, han emergido de la tradición de oposición o forma de limitar
el ejercicio de relaciones abusivas de poder y dominación y de restablecer opciones de convivencia
respetuosas entre los individuos y entre estos y los Estados. Pero además, los derechos
humanos están resguardados por mecanismos eficaces de garantía, protección y sanción que los
hacen exigibles ante los demás y ante el Estado que se expresan en los diversos instrumentos
jurídicos adoptados por la comunidad internacional y por los Estados”. UNFPA - Ministerio de la
Protección Social Modelo de atención integral en salud para víctimas de violencia sexual.
Colombia, 2011, p.44-45.
119
Ibíd.
120
En nuestra experiencia investigativa fueron valiosas las frases pegadas en los espejos como
“Soy importante”. También fue conmovedora la apropiación de una canción que fue motivada por
una de las pedagogas: “qué linda soy, qué bonita soy, como me quiero”.
121
Desde luego que el marco de los derechos se reconoce también el tema de las
responsabilidades.
143
dinamizar los derechos “no solo como una manera de garantizar determinados
insumos frente a determinadas carencias, sino de permitir la creación de mundos
donde sea posible gestionar de manera autónoma una vida digna y plena” 122. Para
ello se debe buscar la generación de autonomía y empoderamiento, para
aumentar la capacidad de autogestión y autocuidado de las niñas y adolescentes
en su consolidación como “sujetas de derecho”. Hay que recordar que un principio
fundamental en este modelo es la voluntad, esto quiere decir que la niña debe
encontrar sentido y desear involucrarse en este proceso. Así, el objetivo del
entendimiento de los derechos debe cobrar sentido por un plano de negociación y
trato horizontal, desde la convivencia, el respeto y el afecto.
122
OIT, 2007c, p.43.
123
Desde finales de los 70 e inicios de los 80, en Latinoamérica, se empieza a vincular el tema de
la sexualidad al mundo de la salud y los derechos humanos. Aunque en la actualidad aún se está
trabajando desde la OMS para ofrecer una lista de los derechos sexuales y reproductivos junto con
su marco legal, las organizaciones internacionales vienen reconociendo los derechos en el campo
de la sexualidad. De otro lado, la psicóloga y pedagoga María Ladi Londoño, quien ha sido
reconocida por sus trabajos en materia de derechos sexuales y reproductivos, hace referencia a 15
derechos sexuales y reproductivos y los denomina de manera inspiradora como los “más humanos
de todos los derechos”: LONDOÑO, María Ladi. Derechos sexuales y reproductivos. Los más
humanos de todos los derechos. ISEDER, Cali, 1996.
144
Los derechos humanos relativos al ejercicio de la sexualidad y de la reproducción
que coadyuvan y garantizan que los seres humanos tengan y realicen una
vivencia de la sexualidad y de la reproducción sana, libre, placentera y sin riesgos,
como parte sustantiva del proyecto de vida. Estos hacen parte de los derechos
humanos como campos de ejercicio de derechos y libertades de aspectos de la
vida que históricamente se consideraban privados o íntimos tales como los
relacionados con la vivencia y toma de decisiones en el mundo de las relaciones
afectivas, las relaciones sexuales y los aspectos relacionados con la reproducción,
los lazos parentales o de familia124.
Cada uno de los derechos sexuales y reproductivos –planteados por María Ladi
Londoño en 1996- podría servir como un eje orientador en las actividades
pedagógicas con las niñas y las adolescentes, echemos un vistazo:
124
Ibíd., p.46.
145
10. A una educación sexual oportuna, integral, laica, gradual, científica y con
enfoque de equidad de género.
11. Al servicio de salud gratuito y de calidad que faciliten el cuidado integral de
la gestación, el parto, el post-parto y la crianza, acompañados por
legislaciones apropiadas.
12. A la adopción y a tratamientos para la infertilidad de tipo integral, asequibles
y razonables.
13. A negarnos a facilitar investigaciones con nuestra función reproductiva, a
estar informadas/os de manera comprensible sobre el alcance de
tecnología que la modifique, que debe regularse por una ética humanista.
14. A participar como ciudadanas/os y ONG`s en la formulación e
implementación de políticas y programas de población y desarrollo.
15. A no tener actividad.
125
MEN, 2010.
146
4.4. Laicidad
Una perspectiva laica implica: a) aceptar que hay distintos credos reconocidos por
el Estado y la ley, b) saber que en Colombia el Estado no favorece un credo por
encima de otro, c) reconocer el derecho de las personas a elegir uno, varios o
ningún credo o creencia particular, d) pero por sobre todas las cosas, partir del
reconocimiento de los derechos constitucionales de las personas sin influencia o
coacción de ninguna creencia religiosa.
147
novio para ir de paseo”126. Es necesario tener una visión histórica y con equidad
de género sobre las barreras que frenan la autonomía. No es lo mismo hablar de
autonomía en los hombres que en las mujeres. En el sistema patriarcal, los
hombres han sido formados privilegiadamente para la autonomía, la toma de
decisiones propias, etc. Mientras que las mujeres han vivido y viven aún bajo la
creencia de vivir para-el-otro y no para-sí-misma. Esta afectación se ve explícita
en las experiencias de la explotación sexual comercial y en la constitución de las
relaciones que establecen las NA.
126
Comentario de una adolescente un día antes de salir de paseo con todo el grupo.
127
Sugerente es la definición de Mahbud ul Haq sobre el término empoderamiento: “que la gente
está en posición de ejercer su capacidad de elegir de a cuerdo a su propio y libre deseo. El
empoderamiento implica una política democrática en que la gente puede influir en las decisiones
sobre sus propias vidas (…) Significa la descentralización del poder de tal manera que la
gobernabilidad sea traída a la puerta de cada persona. Significa que todos los miembros de la
sociedad civil (…) participen de lleno en la tarea de tomar e implementar las decisiones” (Citado
por LAGARDE, Marcela, 1996, p.111). Marcela Lagarde ha abordado el tema de la autonomía de
las mujeres de forma muy clara y sencilla en su libro Claves feministas para el poderío y la
autonomía de las mujeres. Instituto Andaluz de la Mujer, España, 1999.
128
En la experiencia las NA tuvieron escenarios de participación gracias a la realización de un
evento abierto que contó con una exposición de sus trabajos artísticos, sus reflexiones grupales y
la expresión de sus necesidades, y en donde asistió un grupo de funcionarios públicos,
acompañantes y aliados-as del proceso.
148
4.6. Corresponsabilidad, transversalidad y territorio
129
Este es el nombre que las NA del proyecto escogieron durante el proceso para
autodenominarse.
149
Las fortalezas, dificultades y aprendizajes de cada una de las estrategias
implementadas se vierten en esta propuesta de modelo.
130
No todas las estrategias señaladas se implementaron en el pilotaje de esta experiencia
investigativa pero se proponen desde necesidades identificadas en la misma experiencia.
150
elementos del modelo en los aspectos pedagógicos, administrativos, logísticos y
financieros. La participación de NA en este seguimiento generaría una ganancia
adicional que da luces sobre los horizontes propuestos y el desarrollo de los
procesos.
131
Ver en el anexo la tarjeta de invitación utilizada en la experiencia investigativa con las “chicas
talentosas”.
151
5.3. Procesos lúdico-pedagógicos con las NA, las familias y las parejas
En ese marco, todo proceso pedagógico debe empezar por responder algunas
preguntas que pueden orientar el trabajo:
Ahora bien, creemos que las jornadas lúdico-pedagógicas deben estar dirigidas -
en distinta intensidad y con la aplicación de diferentes estrategias- al menos a tres
actores claves: a) las niñas y las adolescentes, b) sus familias, c) las parejas de
las niñas y adolescentes. Recordemos que el espacio de Refugio debe estar
fundamentalmente diseñado y dirigido a las niñas y las adolescentes, pero es
importante viabilizar simultánea y estratégicamente el trabajo con sus familias y/o
152
con sus parejas (en especial grupos de hombres), siempre y cuando esto cuente
con la aprobación de las NA.
Como muchas niñas y adolescentes mantienen aún ciertos vínculos con sus
familias, es necesario reencontrar y facilitar la recomposición de ese vínculo. Este
proceso se puede dar paulatinamente teniendo espacios exclusivos de trabajo con
las madres o padres de las NA que deseen asistir para luego intentar encuentros
grupales o individuales, también desde la estrategia lúdica. Sin embargo, existen
casos donde dichos vínculos están altamente deteriorados y no es prudente que
se fuerce el encuentro. Por tanto, el trabajo con familias depende mucho de la
voluntad de las niñas y adolescentes y se sugiere hacerlo después de haber
desarrollado actividades sólo con ellas y haber construido niveles básicos de
confianza. La misma idea se debe aplicar cuando se quiera trabajar con sus
parejas.
Para el trabajo con las niñas y adolescentes es importante contar con un equipo
de profesionales expertos. Se recomienda contar con varios pedagogos-as que
puedan tener grupos pequeños de trabajo, así como la ayuda de asistentes para
cada uno-a de los encargados-as de grupo. En este mismo marco, inspirados en
los recorridos del movimiento social de mujeres de Medellín, creemos que es
necesario que las mujeres tengan espacios propios para reflexionar y dialogar, por
lo que, si en el equipo de trabajo existen profesionales hombres, se sugiere que se
dinamicen encuentros mixtos y encuentros donde sólo estén las mujeres.
153
cuyo número depende de la cantidad de NA participantes; los utilizados en el
desarrollo de la investigación fueron: 1. autocuidado y belleza, 2. pintura,
modelado y/o artesanías, 3. danza, natación y/o deportes. El paso por los centro
de interés les permite que, a través de una actividad lúdica motivante se acerquen
a distintas temáticas, aprendizajes o reflexiones.
132
En nuestra experiencia con “las chicas talentosas” se facilitaron casilleros donde cada quien
podía guardar sus pertenencias, entre ellas las navajas y los tarros de “sacol”. Las llaves eran
supervisadas por las pedagogas. Al finalizar la jornada del día, cada quien recogía sus
pertenencias.
133
No sobra señalar que algunos de los temas que aquí consideramos nodales, han sido recogidos
de nuestra experiencia investigativa con “las chicas talentosas”; y otros temas consignados son
nuevos pero no menos importantes. El diseño de las actividades pedagógicas -en nuestra
experiencia particular- ha sido construido en primera instancia por el equipo pedagógico
(basándose en los enfoques y sentido de la experiencia), y en segunda instancia, fue
retroalimentado entre el equipo de trabajo.
154
manera de ejemplos. El orden de los temas puede ser cambiado de acuerdo a las
particularidades de cada contexto.
155
Cuadro N° 1
Temas nodales y actividades posibles para jornadas lúdico-pedagógicas
156
¿Cómo me ven las demás lapiceros, decoración de
personas? diarios personales, etc.
¿Qué puedo ir cambiando Creación de siluetas y
para sentirme mejor conmigo ejercicios de autoestima.
misma?
¿Dónde nací o de dónde
vengo?
¿Con qué nombre quisiéramos
nombra a todo el grupo?
2 El cuerpo Autocuidado ¿Conozco mi cuerpo? Baños aromatizados.
Conocimiento del cuerpo ¿Qué me han dicho sobre mi Actividades con mascarillas
Valoración del cuerpo sexuado cuerpo? de frutas.
“Mi cuerpo es mío y yo decido” ¿Cómo valoro mi cuerpo? Construcción de siluetas
¿Por qué yo decido sobre mi humanas para
cuerpo? reconocimiento y valoración
¿Cuáles son las cicatrices que del cuerpo.
tengo en el cuerpo? Talleres de danza individual
¿Cómo adorno mi cuerpo? y colectiva
¿Qué anécdota quiero contar Talleres de relajación.
sobre mi cuerpo? Talleres de masajes.
Taller de fotografía.
Modelado en arcilla.
2 Familias Familias diversas ¿Qué tipos de familias Construcción de árboles
Puedo escoger a mi familia conocemos? genealógicos.
157
Tipo de relación con las ¿Cómo me llevo con mi Talleres sobre los afectos y
familias familia? los cuidados.
Procedencia de las familias ¿De dónde es mi familia?
¿A quiénes considero mi
familia?
¿Qué anécdota sobre mi
familia quiero contar?
3 Amistades Relaciones de sororidad ¿Quiénes son mis amistades? Talleres para la construcción
Abordaje pacífico de los ¿Quiénes con mis mejores de artesanías para regalar a
conflictos amigos y amigas? las amistades: pulseras,
Redes de apoyo ¿Qué es una amistad? collares, manillas, aretes.
Solidaridad y cooperación ¿Qué es lo que más valoro de Juegos de dramatización.
El día del amor y la amistad mis amistades? Arboles de relaciones.
¿Cómo ayudo y cómo me
ayudan mis amistades?
¿Qué debo criticar de mis
amistades?
¿Mis amistades toman mis
decisiones?
¿Cuál es la anécdota más
bonita que recuerdo de mis
amistades?
4 Mi pareja Relaciones erótico-afectivas ¿Me gusta alguna persona? Talleres de pintura sobre el
Lealtades y libertades en la ¿Cómo es mi pareja ideal? tema.
158
pareja ¿Cómo es mi pareja real? Talleres para la construcción
La toma de decisiones ¿Todas las personas deben de portarretratos
La violencia de pareja tener pareja por obligación? Talleres de danza en
Orientación sexual ¿Mi pareja toma mis algunos casos con las
decisiones? parejas.
¿Cómo me ayuda mi pareja? Juegos de roles.
¿Qué quisiera que cambie mi
pareja para mejorar la
relación?
¿Qué es la orientación sexual?
¿Tengo derechos sexuales?
¿Qué anécdota recuerdo
haber pasado con mi pareja?
159
espacios de la ciudad conozco? reconocimiento de espacios
Localidad, comuna y ciudad a ¿Qué espacios son mis artísticos, deportivos,
la que pertenezco favoritos? académicos, de salud, de
Espacios públicos y espacios ¿Qué espacios no me gustan? protección, denuncia, etc.
privados ¿Qué otros espacios quiero Talleres de dibujo.
El derecho a habitar en los conocer? Talleres para la construcción
espacios ¿Me siento parte de esta de mapas, diagramas y
Pertenencia a una comunidad ciudad? croquis.
o más comunidades ¿A dónde puedo ir si me pasa Participación en eventos de
Identificación de instituciones algo malo? ciudad, fechas
de protección, denuncia o de ¿Qué anécdota puedo contar conmemorativas o acciones
acceso a servicios de salud. sobre el lugar donde vivo? públicas.
160
8 Derechos Todas las personas son ¿Cuáles son mis derechos? Talleres de poesía.
humanos importantes ¿Cuáles son mis deberes y Taller de pintura o
Todas las personas tiene responsabilidades? artesanías.
dignidad ¿Para qué sirven las leyes? Conversaciones
Las leyes ¿Qué tipo de mundo quisiera espontáneas y guiadas.
Mis derechos y mis vivir? Juegos de rol.
responsabilidades ¿Qué hago para que nadie se
La convivencia pacífica meta conmigo?
161
sexuales y reproductivos?
¿Cómo es una ciudad
sexualmente feliz?
162
Cuadro N°2
Ejemplo de un día de encuentro
163
almorzar bajo el acompañamiento del equipo para 1:30 p.m.
mediar y acompañar las relaciones humanas. En
pleno almuerzo o inmediatamente después se
puede invitar al reposo y el diálogo espontáneo.
Actividades Se pueden seguir con las actividades lúdico- 1:30 p.m. –
lúdicas- pedagógicas a cargo de las pedagogas u otros 3:00 p.m.
pedagógicas profesionales invitados-as con temas diversos:
fotografía, pintura, danza, body art, etc.
Refrigerio. De igual manera que en el desayuno y el 3:00 p.m. –
almuerzo, se hará invitación para ir al comedor de 3:30 p.m.
forma ordenada y respetuosa para tomar el
refrigerio.
Evaluación y De vez en cuando es importante que las niñas y 3:30 p.m. –
actividad de las adolescentes evalúen el proceso haciendo 4:00 p.m.
despedida observaciones, ofreciendo reconocimientos y
dando sugerencias.
Regreso al Se recogerán las pertenencias y se retornará en el 4:00 p.m. –
lugar de mismo transporte al mismo punto de recogida. Es 4:30 p.m.
recogida. recomendable que siempre una o dos personas
acompañen el trayecto de vuelta.
164
1) La prevención: de la explotación sexual comercial de otras hijas y
hermanas de las niñas o adolescentes que corren el peligro de caer en esa
situación.
3) Redes afectivas: Las familias son un importante grupo con las que las
niñas y las adolescentes mantienen aún vínculos económicos y afectivos.
Ahora bien, se trata de identificar qué integrantes de las familias están
realmente interesados-as en el proceso para aplicar el principio de
participación voluntaria.
Algunos de los temas que sugerimos para trabajar con las familias podrían ser:
El trabajo con las parejas es vital porque muchas niñas y adolescentes establecen
relaciones afectivas basadas en la dependencia y las violencias. A veces, muchos
intentos por gestionar alternativas de vida apartadas de la explotación sexual
165
comercial son frenados por las mismas parejas de las niñas y adolescentes que
están involucrados en actividades ilegales.
134
Este-a profesional también interviene en momentos de contención de crisis grupales o
individuales.
135
En la experiencia, se contó con el acompañamiento en dos oportunidades de funcionarios-as la
Personería de Medellín para explicar la importancia de la denuncia de violencias, y recoger
voluntariamente casos (alrededor de 8) de violencias realizadas por miembros de la fuerza pública
contra las NA, lo cual coincidió con un escenario de disturbios en el centro de la ciudad durante los
cuales algunas de las jóvenes se vieron violentadas física, psicológica y sexualmente.
136
Frente a la remisión en la experiencia con las “chicas talentosas”, se lograron resultados
asombrosos especialmente considerando el tiempo tan corto de atención. Entre estos logros se
cuentan: la Unidad Hospitalaria de Manrique asignó citas a 20 de las niñas y adolescentes del
proyecto aunque solo 12 de las NA aprovecharon los espacios de consulta y la realización de
exámenes médicos; la Unidad de Niñez de la Secretaría de Bienestar Social solicitó una visita para
incluir a las niñas y adolescentes al listado censal como población especial y precisaron
procedimientos para la vinculación de algunas NA al sistema de salud; del Centro Zonal Nº1 se
enviaron 15 cartas de población especial para las NA que además de requerirlo no aparecían
vinculadas al sistema de salud; por último, se conto con apoyos específicos de funcionarios
específicos de la Secretaria de Salud para rastrear la Sisbenización de las jóvenes y el
acompañamiento de Profamilia en un taller con las niñas y adolescentes sobre métodos
anticonceptivos.
166
Como se observa, los profesionales en psicología y trabajo social se dirigen hacia
la creación de redes efectivas de atención y prevención así como agentes de
reflexión y motivación hacia la autogestión de las NA.
Cuadro N°3
Ejemplo de las características generales de una atención psicosocial
N° Individual Grupal
1 Espacio de asesoría: servicio de Se ejecutará en algunos bloques
apoyo profesional a través de una previa concertación con el equipo de
acción preventiva y orientadora a pedagogas para trabajo de temas
personas, en la toma decisiones o recurrentes en asesorías
resolución de problemas. Consta de individuales.
atención, evaluación, impresión
diagnóstica, proyección de acciones
pendientes y seguimiento. Sesiones
167
con duración flexible y buscando
desarrollo de procesos individuales.
168
tiempo y espacios definidos para la reflexión y/o actualización en diversos temas y
enfoques. La puesta en práctica de esta propuesta puede hacerse realidad si se
crea una Escuela de Formadores con acompañamiento de expertos externos-as.
Hay mucho aún por hacer, es de celebrar los avances y juntar las manos y los
corazones, para que las adversidades no nos tumben, y juntos, hombres y
mujeres, podamos estar orgullosos y orgullosas de ser parte de una comunidad
que previene y se compromete en erradicar la explotación sexual comercial de
niñas, niños y adolescentes.
137
Sugerimos la revisión del concepto técnico o recomendaciones de este informe.
169
Gráfico 46. Modelo de atención a niñas y adolescentes en ESC
170
CUARTA PARTE
171
RECOMENDACIONES (CONCEPTO TÉCNICO)
172
adolescentes, compuesto por profesionales de psicología, trabajo
social, medicina, odontología y nutrición. La presencia continua de un
médico-a es necesaria porque la remisión y atención en salud de forma
externa demanda condiciones y tiempos adicionales pero las
afectaciones en salud de las niñas y adolescentes requieren atención
inmediata. Asimismo, el lugar debe contar con un equipo directivo-
administrativo, personal de aseo, vigilancia y preparación de la
alimentación que pase por una sensibilización adecuada.
f) El equipo completo debe estar en constante formación, sensibilización,
reflexión y cualificación sobre diversos temas. Por tanto, el espacio
debe contar con un tiempo para participar de una escuela de
formadores, creado a través de redes interinstitucionales y/o al interior
del lugar.
g) El lugar debe contar con actividades lúdicas y recreativas con tres tipos
de población, en diferentes momentos, con una intensidad distinta, y
después de un previo análisis sobre las pertinencia de convocar ciertas
personas, de acuerdo a los casos individuales: a) las familias de las
niñas y adolescentes, b) las parejas de las niñas y adolescentes y c) las
niñas y las adolescentes. El lugar es fundamentalmente para las niñas y
las adolescentes, por tanto, en negociación con ellas tiene que analizar
la viabilidad de trabajar o no con sus familias y sus parejas, ya que las
relaciones entre las tres poblaciones pueden estar mediadas por la
violencia física, la dependencia emocional, entre otros aspectos
perjudiciales para las niñas y adolescentes.
h) El lugar debe formar parte de una red o alianza con instituciones
públicas o privadas de prevención, atención y protección, no sólo para
intercambiar experiencias, sino para hacer remisiones (en salud,
educación, protección, etc.) con las niñas y adolescentes que así lo
deseen.
173
i) El lugar debe estar cerca a la zona donde están las niñas y las
adolescentes para crear un sentido conjunto de pertenencia y facilitar la
llegada de las niñas y adolescentes.
174
En ese proceso de toma de decisión, las instituciones, a través de sus
profesionales, pueden orientarlas sobre todo para que el regreso con sus familias
no signifique el retorno a agresiones sufridas en el pasado. A lo cual se le debe
hacer acompañamiento, seguimiento y evaluación personalizado.
175
sexual comercial de niñas, niños y adolescentes menores de 18 años, b)
prevención del turismo sexual y trata de personas, pero con el énfasis puesto en la
prevención del turismo sexual y trata de niños, niñas y adolescentes menores de
18 años, y c) contradiscurso que confronte los mensajes sexistas y estereotipos
que recrean la mercantilización, cosificación y poder sobre el cuerpo de las
mujeres. Estas campañas publicitarias deben realizarse a través de diferentes
medios de difusión: programas de televisión, notas en prensa escrita, anuncios en
radio, mensajes en vallas, carteleras en paraderos, performance y/o montajes
artísticos e interactivos en calle. Las campañas deben estar dirigidas a diversos
tipos de población, incluidas las niñas y adolescentes en explotación sexual
comercial; lo que implica implementar metodologías comunicacionales, estilos
gráficos y artísticos de mayor impacto para cada grupo poblacional particular.
Asimismo, se recomienda que desde el Sistema institucional de comunicación de
la administración pública se dinamicen acciones de revisión o fiscalización de los
anuncios sexistas en la ciudad. Sin embargo, no todo queda en manos de la
administración pública, es necesario sensibilizar a toda la comunidad sobre la
ESCNNA como una de las formas más vergonzosas de vulneración de derechos
contra la niñez y la adolescencia de nuestra ciudad, que tiene a los NNA como
víctimas de la problemática social y no como los culpables de su situación. La
realización de campañas publicitarias continuas y diferenciales en diversas
zonas de la ciudad, requiere la participación de la empresa privada que maneja
televisión, prensa escrita e internet y de las organizaciones civiles que manejan
medios de comunicación alternativos. Es necesario que desde el sector público se
preste asesorías al sector privado para el análisis de los mensajes e imágenes
pertinentes para no recrear el sexismo ni la revictimización de las niñas y las
adolescentes. Las campañas publicitarias ofrecen grandes posibilidades de
impacto en la población para su sensibilización, en ese sentido, es posible que
toda la ciudad se entere y se sensibilice sobre el fenómeno de la explotación
sexual comercial.
176
6. Es valioso lo que la Secretaría de las Mujeres de Medellín realiza en cuanto
a la transversalización de la equidad de género en todas las otras Secretarías y
entes del municipio. Sin embargo, se recomienda que la Secretaría de las Mujeres
mantenga presencia en redes o alianzas como -por ejemplo- la Mesa Intersectorial
para la Prevención y Atención de la ESCIA; pues, las aportaciones en materias de
enfoque de género venidas de la Secretaría de las Mujeres resultan
imprescindibles.
177
que en un inicio se implemente campañas publicitarias e informativas yendo hasta
los espacios de socialización y esparcimiento en el que habitan los hombres:
bares, cantinas, billares, parques, discotecas, canchas de fútbol, entre otras en el
centro de la ciudad como en las comunas. En todo este proceso es importante
empezar con tres grupos diferenciados que están en mayor contacto con las niñas
y las adolescentes en muchas ocasiones como clientes explotadores y en otros
casos como agresores o con quienes establecen relaciones de noviazgo (buseros,
taxistas, policías, hombres comerciantes). En las comunas se debe trabajar con
niños, púberes, adolescentes hombres, adultos y adultos mayores. Sin embargo,
requiere un abordaje priorizado el trabajo con los adolescentes hombres porque
en el marco de la socialización patriarcal, están asumiendo como ritual de paso y
reconocimiento de su masculinidad la necesidad de tener relaciones sexuales con
mujeres en contexto de prostitución o con niñas y adolescentes en explotación
sexual comercial.
178
los actos delictivos contra las niñas y las adolescentes entre quienes se benefician
directa e indirectamente de la ESCNNA.
179
c) Incorporar en sus informaciones datos claros sobre instituciones donde
se reciben casos de denuncia frente a delitos sexuales incluyendo la
ESCNNA.
d) Ofrecer información sobre las instituciones de prevención, protección y
atención a la niñez y adolescencia en explotación sexual comercial.
e) Realizar eventos de socialización de la información colectada al menos
una vez al año.
f) Promover estudios por zonas específicas y con diferentes grupos
poblacionales.
g) Promover la difusión virtual o física de estudios sobre las violencias
sexuales y ESCNNA.
h) Crear un centro de documentación exclusivo sobre el tema de violencias
sexuales, abierta a la consulta de la comunidad en general.
180
sobre sus propias acciones implementadas para revisar sus metodologías o
aplicar procesos de retroalimentación basados en el Plan de Acción Nacional para
la Prevención y Erradicación de la explotación Sexual Comercial de Niñas, Niños y
Adolescentes menores de 18 años (ESCNNA) planteado por el ICBF, UNICEF,
OIT - IPEC.
15. Se sugiere que las ONG’s que cuenten con experiencia y trayectoria en
formación o constitución de escuelas de formación en temas de equidad de
género, prevención de violencias, educación sexual, masculinidades, prevención
de la ESCNNA se articulen en la tarea de formar continuamente a los
profesionales de las instituciones involucrados en prevención, protección y
atención a las niñas y adolescentes en explotación sexual comercial. Asimismo, se
sugiere que integren en sus planes o procesos con las comunidades el fenómeno
de la ESCNNA, con el fin de que se hable sobre el tema entre los espacios
familiares, vecinales o comunitarios. Una de las primeras acciones para crear
comunidades preventivas es hablar sobre el problema.
181
BIBLIOGRAFÍA
ALVARÉZ- CORREA G., Miguel (1995). Programa a favor del menor prostituido o
en peligro de serlo. Informe y balance de actividades del primer semestre de 1995.
Procuraduría Delegada para la Defensa del Menor y la Familia, Bogotá.
ALVARÉZ- CORREA G., Miguel y SUÁREZ M., Roberto (1998). Niños y jóvenes
del sexo masculino prostituidos. Una visión desde la perspectiva de los derechos.
Procuraduría general de la Nación – UNIANDES – UNICEF, Bogotá.
182
ALZATE GIL, Jaime et al (2002). Prostitución infantil en Medellín. Universidad
Autónoma latinoamericana, Facultad de Derecho, Medellín.
183
Convención sobre los Derechos del Niño. 1989.
184
Estatuto de la Corte Penal Internacional. 1998.
185
JARAMILLO MONSALVE, Diana (1999). Prevención e intervención de alto riesgo
y/o iniciación en la prostitución en los menores de la Corporación Amiga Joven,
sector Lovaina del municipio de Medellín. Monografía de grado. Fundación
Universitaria Luis Amigó, Departamento de Educación, Licenciatura en Pedagogía
Reeducativa, Medellín.
186
NARANJO GIRALDO, Gloria (1992). Medellín en Zonas. Monografías.
Corporación Región, Medellín.
OIT (2005). Una alianza global contra el trabajo forzoso: Informe global con arreglo
al seguimiento de la Declaración de la OIT relativa a los principios y derechos
fundamentales en el trabajo, Informe I (B), Conferencia Internacional del Trabajo,
93a reunión, Organización Internacional del Trabajo (OIT), Ginebra.
187
ONU – PINHEIRO, Paulo Sérgio (2006). Informe Mundial sobre la violencia contra
los niños y las niñas, Organización de las Naciones Unidas (ONU).
PUERTA, Ana Lucia, SALDARRIAGA, Lina María y URIBE, Mónica María (1997).
Algo más que a la venta de un cuerpo, Monografía de grado, Universidad de
Antioquia – Facultad de Ciencias Sociales y Humanas, Medellín.
RAMÍREZ CARDONA, Claudia Cecilia (Coord.) (2010). Ley 1257 de 2008 sobre
no violencias contra las mujeres. Herramientas para su aplicación e
implementación. Corporación Sisma Mujer, Bogotá.
188
SÁNCHEZ RAMOS, Irene y SOSA ELÍZAGA, Raquel (Coords.) (2004). América
Latina: los desafíos del pensamiento crítico. Siglo XXI, Buenos Aires.
TOVAR C., Gloris Rocío (1997). El trueque que trunca la vida: contexto social,
económico y familiar de cinco menores de edad que reflejan la problemática de la
prostitución infantil. Monografía de grado, Universidad de Antioquia – Facultad de
Ciencias Humanas y Sociales, Medellín.
UNICEF (2003). Para que los niños y las niñas puedan vivir en dignidad.
Normativa nacional e internacional para la prevención y atención del abuso y la
189
explotación sexual en la niñez. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia
(UNICEF) Oficina para Colombia y Venezuela, Bogotá.
190
ANEXO 1. ENCUESTA DE NECESIDADES
191
CUESTIONARIO PARA SONDEO DE NECESIDADES
FECHA:
NOMBRES Y APELLIDOS: DOMICILIO PERMANENTE:
FECHA Y LUGAR DE NACIMIENTO: EDAD:
ASCENDENCIA O GRUPO ÈTNICO: TELÈFONO:
192
ANEXO 2. INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN
193
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
I. INFORMACIÓN GENERAL
Nombres y apellidos:
Número y tipo de documento de
identidad:
(Registro civil de nacimiento)
Lugar de nacimiento:
Fecha de nacimiento: Día: Mes: Año:
Edad:
Teléfono:
Domicilio más permanente:
Ascendencia o grupo étnico:
Situación de Discapacidad:
Observaciones:……………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………..
………………………………………………………………………………………………..
194
II. SEGUIMIENTO DE DATOS ARROJADOS
(Puntualizar o corroborar algún cambio o dato adicional en los datos de la ficha
individual).
Seguimiento 1:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
Fecha y firma del entrevistador-a…………………………………………………………
Seguimiento 2:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
195
III. ¿QUIÉN SOY YO?
(Espacio para exponer o anexar dibujos, escritos o entrevistas que permitan
señalar cómo se definen las NA desde su propio discurso respecto a aspectos
generales).
¿A qué me dedico?
196
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
3. Configuración familiar
a) Integrantes de la familia biológica o de afinidad de la NA, es decir, las personas
197
de su familia de origen:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
b) A quién(es) considera su familia por su cercanía emocional positiva (protegen,
quieren, ayudan):
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………
4. Sitio de residencia de la familia de origen
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
5. Sitio de procedencia de la familia
Medellín ( )
Otro: ……………………………………………………………………………………….
Familia migrante / víctima de desplazamiento forzado ( )
Familia migrante / desplazamiento con motivaciones voluntarias ( )
Migrante externa ( ) Migrante interna ( )
198
9. ¿Cómo es mi familia de origen?
(Espacio para exponer o anexar dibujos, escritos o entrevistas que permitan
señalar cómo definen las NA a su familia desde su discurso).
199
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
3. Área Conductual:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
200
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
4. Área Emocional:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
5. Área Relacional:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
201
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
7. Otras anotaciones:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
202
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
Razones de desescolarización:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
3. Valoración pedagógica:
a) En cuanto a sus habilidades comunicativas (oral, escucha, habla y lectura):
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
203
4. Otras observaciones pedagógicas:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
204
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
205
2. ¿Cuáles son las violencias que he sufrido?
(Espacio para exponer o anexar dibujos, escritos o entrevistas que permitan
señalar las violencias padecidas por las NA enunciadas desde su propio punto de
vista)
206
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
207
3. ¿Qué tipo de violencias sexuales he sufrido?
(Espacio para exponer o anexar dibujos, escritos o entrevistas que permitan
señalar las violencias sexuales padecidas por las NA enunciadas desde su propio
punto de vista)
208
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
Observaciones:
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
………………………………………………………………………………………………
209
3. ¿Cómo es un día cotidiano de mi vida con todo lo bueno y lo malo?
(Espacio para exponer o anexar dibujos, escritos o entrevistas que permitan
señalar las manifestaciones de la vulneración de sus derechos sexuales y
reproductivos desde el punto de vista de las NA mediante una lectura de su
propia cotidianidad).
210
INSTRUMENTOS DE CARACTERIZACIÓN. SITUACIÓN DE NA VÍCTIMAS DE EXPLOTACIÓN SEXUAL
EN EL SECTOR DE PRADO CENTRO DE LA COMUNA 10 DE MEDELLÍN
211
II. INSERCIÓN EN EL CIRCUITO DE LA EXPLOTACIÓN SEXUAL
(Espacio para exponer o anexar dibujos, escritos o entrevistas que permitan
señalar cómo se insertaron las NA en el circuito de la explotación sexual, desde
sus propios testimonios).
212
ANEXO 3. TARJETA DE INVITACIÓN A LAS NA
213
214