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Tema 14 – África: territorio y sociedad:

áfrica mediterránea y áfrica


subsahariana. Contrastes físicos,
socioeconómicos y culturales.
by Santiago
43-55 minutos

1. INTRODUCCIÓN: EL CONTINENTE AFRICANO.

2. LOS CONTRASTES FÍSICOS

2.1. DOMINIO ECUATORIAL.

2.2. DOMINIO TROPICAL.

2.3. DOMINIO ÁRIDO

2.4. DOMINIO MEDITERRÁNEO

2.5. DOMINIO MONTAÑOSO

2.6. UNA PROPUESTA DE DIVISIÓN REGIONAL

3. EL ÁFRICA MEDITERRÁNEA.

3.1. CLIMA.

3.2 EL RELIEVE.

3.3 LA HIDROGRAFÍA. 3.4BIOGEOGRAFÍA.

3.5 ASPECTOS DEMOGRÁFICOS.

3.6 ASPECTOS ECONÓMICOS.

– MARRUECOS.

– ARGELIA.

– TÚNEZ.

– LIBIA.

– EGIPTO.
4 EL ÁFRICA SUBSAHARIANA.

4.1. EL CLIMA.

4.2. EL RELIEVE.

4.3. LA HIDROGRAFÍA.

4.4. BIOGEOGRAFÍA.

4.5. ASPECTOS DEMOGRÁFICOS.

4.6. ASPECTOS ECONÓMICOS.

4.6.1. AGRICULTURA, PESCA Y GANADERÍA.

4.6.2. LA INDUSTRIA.

5. ÁFRICA EN LA ENCRUCIJADA.

6. BIBLIOGRAFÍA

1 INTRODUCCIÓN; EL CONTINENTE AFRICANO

África es una gran masa continental, con más de 30 millones de Km2, atravesada por el
ecuador (que divide al continente en dos partes casi simétricas), separado de Europa por
el estrecho de Gibraltar y de Asia por el Canal de Suez; así, el continente africano
aparece como una gran isla bordeada por profundidades oceánicas a causa del escaso
desarrollo de su plataforma continental. El 75 por ciento de la superficie se encuentra
dentro del área intertropical. La inexistencia de grandes barreras montañosas explica los
pocos contrastes climáticos y vegetales de un continente donde el relieve de halla
dominado por mesetas y altiplanos.

Tras una sujeción casi total del continente africano al dominio y la dependencia
europea, hacia 1960, será cuando la mayor parte de las colonias africanas accedan a la
independencia formal. Es un hecho que subsisten -y muy acusadamente- actualmente en
toda África las dependencias de los mercados mundiales y las opciones políticas
dirigidas según los intereses de las grandes potencias y de la geopolítica internacional.

El neocolonialismo, que no es sólo una política más, es la situación característica y


definitoria de los países africanos en su mayoría. Esta situación genérica de
neocolonialismo es distinta en los dos dominios físicos, culturales y económicos en que
podemos dividir el continente: África mediterránea y África negra o subsahariana.

En el desarrollo del tema abordaremos en primer lugar las características físicas


generales del continente africano. Haremos hincapié en las diversas áreas climáticas.
Realizaremos una propuesta de división regional y nos centraremos en los contrastes
socioeconómicos y culturales de los dos dominios arriba señalados. Concluiremos con
unas referencias bibliográficas.
2 LOS CONTRASTES FÍSICOS

El continente africano está constituido en un 96 % de su superficie por elementos del


zócalo, bien esté aflorando o recubierto por una capa sedimentaria o volcánica. El
relieve del zócalo y su cobertera sedimentaria se configura como una vasta plataforma
levantada, cuyas formas planas predominantes se ven interrumpidas por las cadenas
montañosas de los extremos norte y sur, y por los macizos del oriente africano, o por las
altas mesetas meridionales. La distribución altitudinal de las tierras africanas se
organiza en dos grandes sectores: uno sudoriental, culminado en los macizos volcánicos
de Etiopía, Kenia y Tanzania; y otro noroccidental, de mesetas de escasa altitud y tierras
bajas, que acaba en el Atlas y que se interrumpe en los macizos intrasaharianos, dando
lugar en las depresiones, a cuencas sedimentarias de poco espesor (Congo, Nilo, Níger).
Las formas de relieve más extensas vienen determinadas por el zócalo, y son
predominantemente planas, ya se trate de sedimentos graníticos, salpicados de montes
isla, o de mesetas arenosas o calcáreas. Un aspecto de gran interés económico relaciona
con el zócalo es la mineralización, destacando los diamantes (África del Sur, Tanzania,
Angola, Liberia), el cobre (Tanzania, Zambia), el hierro (Libia, Magreb), o el petróleo
(Golfo de Guinea y Norte de África).

Casi toda África está situada en la zona cálida, entendiendo por tal aquella en la que la
temperatura media del mes más frío desciende de los 18 ° (criterio de Kóppen). Se
pueden distinguir tres grandes tipos de clima en la zona cálida: clima sin estaciones,
clima con estaciones seca y húmeda alternantes, y climas áridos, a los que hay que
sumar, fue del área cálida, en los extremos sur y norte los climas mediterráneos, y el
clima de verano cálido y húmedo e invierno templado del sureste costero. En conjunto
predomina una distribución zonal matizada por ciertas anomalías: interrupción de la
zona cálida húmeda en África oriental, desarrollo de regiones semiáridas en zonas
propias de estaciones húmedas-secas (ejemplo en el Cuerno de África), y la extensión
hacia el ecuador de los climas desérticos a lo largo de las costas occidentales.

2.1. DOMINIO ECUATORIAL

El rasgo más llamativo es la potencia y diversidad de la cobertura vegetal, sólo


interrumpida por la red hidrográfica, que, aunque de gran complejidad y caudal, tiene
poca capacidad erosiva y modifica poco el modelado. La formación vegetal dominante
es la selva ombrófila o pluviisilva, con tres escalonamientos de pisos arbóreos no
apareciendo el tapiz herbáceo. Llama la atención su gran variedad fiorística y arbórea,
aunque muy dispersas, lo que dificulta su aprovechamiento económico. Esta formación
vegetal se asienta sobre suelos ferralíticos. Destacan las abundantes precipitaciones y las
temperaturas poco variables a lo largo del año (aunque varían mucho del día a la noche).
Este dominio se localiza sobre todo en torno al ecuador, la Cubeta del Congo, Gabón,
Sur de Camerún y Guinea Ecuatorial.

2.2. DOMINIO TROPICAL

Un primer rasgo general es el carácter transicional y la heterogeneidad del dominio


tropical. Este dominio, a caballo entre el húmedo y el árido, con primacía de uno u otro
según su proximidad entre ellos, configura tres regiones naturales claramente
diferenciadas:
La región subecuatorial, degradación del dominio ecuatorial. El factor hegemónico es el
clima con una estación seca y corta y una pluviosidad de 1500 mm/año. El paisaje
vegetal corresponde a selvas densas mixtas (especies semicaducifolias). Forma una
franja en torno al dominio ecuatorial, en el sector meridional del golfo de Guinea y el
sector occidental de Sudán, Angola y Congo. Dentro del mosaico de selvas y sabanas
cabe destacar el bosque-galería y la sabana-parque. En esta región abundan los suelos
ferruginosos, ricos en óxido de hierro.

La región saheliense subárida es la antesala del desierto. Tiene una mayor


homogeneidad en sus paisajes naturales, en virtud de la acentuación de la sequedad.
Tiene precipitaciones de carácter torrencial de gran intensidad horaria y cierta
irregularidad interanual. Las formaciones típicas son las sabanas espinosas y las
seudoestepas tropicales. Los suelos ante la falta de precipitaciones y de lavado, pierden
contenido ferruginoso degradándose hacia suelos grises subdesérticos. La región
saheliense circunda a la sudanesa, prolongándose hacia el norte en la fachada occidental
y hacia el sur en la oriental. En el África austral se reduce a una franja en torno al
Kalahari.

Una región intermedia la constituye la tropical propiamente dicha, con fuerte


inestabilidad climática y bruscos contrastes y la máxima heterogeneidad en sus paisajes
naturales.

2.3. DOMINIO ÁRIDO

La aridez es responsable de la existencia de una vegetación extremadamente rala y


xerófila, cuya formación más típica es el acheb. Sólo los uadis y los oasis constituyen
excepciones de verdor, principalmente entre algo menos de los 20-30° del hemisferio
septentrional, franja de vegetación árida, mientras en el hemisferio sur se reduce a una
franja litoral meridiana, entre los 15 y 30 °. Existen diversas categorías de aridez,
destacando la hiperárida del interior continental desértico, frente a los desiertos costeros
(que gozan de una cierta benignidad) y los macizos montañosos del interior desértico
(que se presentan como áreas intermedias por su altitud, humedad y vegetación). En
conjunto predomina el paisaje geomorfológico sin entidad del elemento vegetal, por lo
que el paisaje natural se presenta como “un océano mineral”.

2.4. DOMINIO MEDITERRÁNEO

El dominio mediterráneo como encrucijada de elementos fitogeográficos sobre un


medio morfológico muy diverso, tiene una gran variedad de paisajes vegetales. Se
distinguen dos regiones naturales diferenciadas:

La estepa mediterránea subárida con inviernos lluviosos y más suaves, produciéndose


heladas esporádicas. Representa una degradación de la región mediterránea subhúmeda,
con una oscilación térmica fuerte y veranos muy calurosos frente a inviernos suaves. La
formación vegetal predominante, escasa, dispersa, adaptada a la aridez, está compuesta
por arbustos y por matorrales allí donde se han degradado los arbustos. Se localiza al
sur del Atlas, continúa por el litoral mediterráneo de Túnez, Libia y Egipto, y penetra
hacia el norte por el litoral atlántico.
La región mediterránea subhúmeda tiene mayores y más regulares precipitaciones,
distribuidas en un semestre invernal húmedo y otro estival árido. Al localizarse en
medios montañosos, abre paso a una diversidad de paisajes naturales según la altitud, la
exposición o el sustrato litológico, pero con una decisiva importancia de la intervención
humana. Se localiza en el Atlas, costa atlántica y Rift marroquíes, prolongándose por el
Tell de Argelia y Túnez, con una discontinuidad en la costa libia y continuando por el
Mediterráneo oriental.

2.5. DOMINIO MONTAÑOSO

El descenso de las temperaturas y el aumento de las precipitaciones, así como los


contrastes entre solana-umbría, característico de todos los dominios montañosos, se ve
en África singularizado por el predominio del medio cálido en que están enclavadas
estas montañas y por la enorme extensión del altiplano. Podemos indicar la siguiente
sucesión de pisos: entre 1000-2000 metros, con aumento de las precipitacions y un
descenso de las temperaturas; entre 2000-3000 metros, donde se dan las máximas
precipitaciones, con temperaturas bajas y abundante humedad ambiente; entre 3000-
4000 metros, con frecuentes vientos y temperaturas muy bajas; y entre 4000-5000
metros, que se convierte en una pradera de altitud, casi sin árboles, por encima del cual,
a partir de 5000 metros se sitúa el piso nival. La máxima altitud se encuentra en el
Kilimanjaro.

2.6. UNA PROPUESTA DE DIVISIÓN REGIONAL

Se puede establecer una división, en base a un criterio etnocultural y espacial con dos
conjuntos:

a) El África árabe o septentrional: Este conjunto tiene una cultura común fundamentada
en el islam, y representa la parte africana más poblada y urbanizada.

El Magreb: Corresponde al solar de los pueblos denominados bereberes, descendientes


de los munidas y mauritanos que entran en el mundo árabe a partir de los siglos VII y
VIII. En sentido estricto correspondería con Marruecos, Argelia y Túnez. En sentido
más amplio incluye a Libia y Mauritania.

El Valle del Nilo: Egipto y Sudán componen una región bien definida gracias a un
relieve predominantemente llano, un clima marcadamente seco y la espina dorsal del
valle del Nilo (fertilizado por el limo de la empinada meseta abisinia). El valle del Nilo
es un oasis de 3000 km de longitud y pocas decenas de km de anchura.

b) El África Subsahariana o África Negra: Con una naturaleza fecunda y una baja
densidad de población, donde el subdesarrollo se hace palpable:

África Occidental: engloba a todos los países litorales e interiores que ocupan la zona
atlántica al sur del río Senegal y el Golfo de guinea. El ambiente geográfico de los
países litorales se destaca por una llanura litoral baja y malsana, subiendo el relieve en
el interior hasta la meseta africana llena de selvas impenetrables, cruzadas por
numerosos ríos. Esta zona fue de las regiones africanas más castigadas por la
colonización europea y el esclavismo.
África Centroecuatorial: Abarcaría los estados de Gabón, Congo, Guinea Ecuatorial,
Camerún, República Centroafricana y Chad. Este ámbito se halla dominado desde el
punto de vista físico por la presencia de la gran cuenca fluvial del Congo o Zaire, y la
extensión de una de las mayores capas forestales del planeta, hoy en peligro de
desaparición.

El Cuerno de África: Es la región comprendida entre el valle del Nilo, el Mar Rojo y el
Océano índico. Región de altiplanicies, volcanes y fosas tectónicas o Rift Valley. Está
ocupada por los estados de Etiopía, Eritrea (cristianos ortodoxos) y Somalia y Djibuti
(musulmanes).

África Oriental: La componen Kenia, Uganda, Tanzania, Ruanda y Burundi. Estos


estados comparten, además de la región de los grandes lagos y mesetas circundantes, la
civilización de origen bantú y swahili.

África Austral: Comprende los estados de Angola, Zambia, Malawi, Mozambique,


Namibia, Bostwana, Zimbabwe, Madagascar, Comores, Seychelles, República
Sudafricana, Lesotho y Ngwane. Desde el punto de vista físico destaca la presencia de
dos grandes accidentes: la cuenca de los ríos Zambeze, Limpopo y Orange; y los
desiertos de Kalahari y Namib, los más áridos de la Tierra.

3 EL ÁFRICA MEDITERRÁNEA

Esta formada por los países del Magreb (Marruecos, Argelia y Túnez), y también Egipto
y Libia. Entre todos abarcan una superficie de 5.753.000 Km2 que constituye una
unidad de relieve claramente diferenciada del resto.

Esta región de África está ligada en todos sus aspectos al mundo mediterráneo.
Culturalmente, forma parte del modo de vida islámico y su lengua oficial es el árabe. Al
igual que el resto del continente, los países del África mediterránea vivieron todo el
siglo XIX como colonias europeas y la descolonización dio paso a distintas situaciones
políticas, inestables en algunos casos hasta nuestros días.

3.1. CLIMA

La gradación climática desde la costa hacia el interior viene definida por la latitud, ya
que la aridez aumenta a medida que descendemos hacia el ecuador, y por la altitud , ya
que la cordillera del Atlas impide la penetración de las borrascas, reteniendo la humedad
en el litoral africano.

El norte de África esta situado entre las altas presiones subtropicales de las Azores, las
del Atlántico sur y las bajas presiones ecuatoriales. Los movimientos de estas masas de
aire son los causantes de la distribución de las precipitaciones. Se distinguen pues tres
tipos de climas:

Clima subtropical mediterráneo. Países del Magreb y provincia del El Cabo, con una
estación cálida y seca y otra fresca y húmeda.
Clima árido. Desde el Atlántico hasta el mar Rojo, con fuertes oscilaciones térmicas y
lluvias ocasionales ciclónicas en invierno y tropicales en verano, quedando el Sahara
central casi sin lluvias.

Clima de montaña atlásico. En el Atlas y con nieves discontinuas solo en las mayores
altitudes. Las precipitaciones casi siempre en forma de lluvia. Característico de estas
zonas es el viento siroco, provocado por las altas presiones subtropicales sobre el
Sahara. Un viento seco que provoca tempestades de arena y arruina los cultivos.

3.2. EL RELIEVE

Geomorfologicamente hablando, el África mediterránea se caracteriza por sus costas


abruptas y elevadas (a partir de Túnez se forman bahías y las costas se hacen mas bajas)
por la Gran Cordillera del Atlas dispuesta en sentido SW-NE que a través de Argelia,
Túnez y Marruecos, y dominando el resto del territorio, se extienden mesetas extensas y
monótonas que descienden suave y escalonadamente hacia el mar. Al sur está el Sahara,
amplísima superficie de areniscas -9.100.000 Km2– en la que se distingue:

Un desierto rocoso: el hamada.

Un desierto de guijarros: el serir o reg.

Un desierto de dunas: el erg.

No recibe más de lOOm de precipitaciones en casi ninguna parte de su extensa


superficie. Las temperaturas son elevadas, más en verano y por el día, mientras que
durante la noche descienden por debajo de los 0° C.

3.3. LA HIDROGRAFÍA

Existen dos tipos de cuencas africanas:

Cuencas normales y exorreicas. Son aquellas que descargan directamente al mar a


través de ríos de régimen irregular, de fuerte pendiente y gran poder erosivo. Dentro de
este tipo de cuencas destaca el río Nilo: es el río más largo del mundo -6.700 Km- y en
torno a él se concentran grandes densidades de población. Arrastra gran cantidad de
sedimentos desde su nacimiento, que va depositando durante su curso en el valle
formando una tierra gris rica en sales y materiales orgánicos muy fértiles. Esta
característica de Nilo es lo que da pie al desarrollo de una prospera agricultura en torno
a sus orillas.

Cuencas endorreicas. Son aquellas que desaguan hacia otras cuencas interiores
formando zonas cerradas como lagos o áreas pantanosas. Dentro de estas cuencas
tenemos el río Hodna en Argelia y el Ajerid en Túnez.

3.4. BIOGEOGRAFÍA

Dentro del dominio mediterráneo africano se distinguen dos regiones naturales


diferenciadas:
1- La estepa mediterránea. Es una degradación de la estepa mediterránea subhúmeda,
con menores precipitaciones de mayor irregularidad y con mayores oscilaciones
térmicas de invierno a verano. La formación vegetal predominante es de tipo arbustivo
adaptada a la aridez. Con el aumento de la aridez esta vegetación se degrada hacia
diversos tipos de matorral: azufaifo, artemisa y palmito.

2- La región mediterránea subhúmeda. En ella las precipitaciones son más abundantes y


continuas durante el invierno, mientras que la aridez tiene lugar en la estación seca. La
acción antrópica ha originado un paisaje natural degradado muy diferente al climático.
La formación vegetal predominante es el bosque esclerófilo o durisilva con asociaciones
monoespecíficas de frondosas, alcornocales, encinares e incluso pinares en áreas más
áridas. Esta región se localiza en ambos extremos del continente.

3- El dominio de la montaña. En ella podemos distinguir la sucesión en altura de


diversos pisos:

Piso montañés inferior o submediterráneo. Esta constituido por bosques de encinas,


alerces y pino negral y sotobosque de romero y esparto. Entre los 600 y los 1700
metros.

Piso montañés superior. Con robles y cedros, combinado con un sotobosque muy
variado. Entre los 1700 y los 2000 metros.

Piso subalpino. La vegetación es arbustiva y está formada por enebros, landas y


garrigas. Entre los 2000 y los 2700 metros.

Piso alpino. La vegetación aparece ahora en almohadilla y se compone de camefitos y


praderas hidrófilas. Entre los 2700 y los 3500 metros.

Piso alpino superior. La vegetación aparece en formaciones en roseta de hemicriptofitas


endémicas, desde los 3500 metros en adelante.

3.5. ASPECTOS DEMOGRÁFICOS

Pese a la reciente explosión demográfica que ha conocido África en los últimos 65 años,
la densidad de población del continente africano, es una de las más bajas del mundo (29
hab/Km2). Las razones de ello, se encuentran en la gran cantidad de medios hostiles
para la vida que se dan en el continente: las enfermedades tropicales, la insuficiencia
sanitaria y alimentaría y otras razones de carácter histórico como han sido, la trata de
esclavos, que saqueo al continente especialmente de gente joven , sana y vigorosa.

Las elevadísimas tasas de natalidad, que pueden superar los 45 por mil, de mortalidad,
por encima del 15 por mil, provocan un crecimiento demográfico fuerte que, de seguir
así, conseguirá que para el año 2025, la población africana se haya duplicado. Ello,
unido a su retraso económico y estructural, da lugar a un auténtico problema de este
continente y del mundo entero en la actualidad y en el futuro.

Son muchas las etnias que conviven en el África mediterránea: árabes, nómadas,
beréberes, europeos… y todos ellos, como ya tuvimos ocasión de comentar, se
concentran en torno a la franja litoral desde Marruecos hasta Egipto y en torno a los ejes
fluviales, los valles y los oasis. El resto del continente son espacios prácticamente
despoblados.

Aunque en líneas generales la densidad es baja, esto encubre una desequilibrada


ocupación territorial, fuertemente condicionada por las disponibilidades hídricas. La
costa y el valle del río Nilo concentran a la población en contraste con los vacíos
poblacionales del desierto y el Atlas. Uno de los efectos de la modernización ha sido la
reducción de la mortalidad gracias a las medidas sanitarias, aunque la mortalidad
infantil sigue siendo alta y la esperanza de vida moderada. Una lenta disminución de la
natalidad manifiesta una escasa modernización social (dificultada por el integrismo
islámico sobre todo en Egipto y Argelia) y un alto índice de analfabetismo. Aunque
todos estos países han iniciado ya su proceso de transición demográfica, especialmente
en su primera fase —fuerte descenso de la mortalidad y muy especialmente de la
mortalidad infantil- el momento transicional es diferente para según que países. Egipto
y Túnez son los mas adelantados en el proceso por haber iniciado ya el descenso de la
natalidad, además del de la mortalidad.

Aunque estas sociedades muestran rasgos tradicionales y arcaísmos han conseguido la


“práctica” desaparición del nomadismo tradicional (aunque esto no ha modificado la
estructura social tribal ni su economía de base ganadera). La mayor parte de las
comunidades rurales son sedentarias, distribuyéndose en aldeas o pueblos de pequeñas
dimensiones; este poblamiento concentrado responde tanto a imperativos del medio
(escasez de agua), como a necesidades de defensa colectiva (hostilidad tribal). La
población urbana es hoy del 50 por ciento, continuando una tradición de florecientes
civilizaciones urbanas. Todas las ciudades conservan su centro histórico (medina), con
un plano desordenado de calles estrechas y los barrios comerciales (zocos); pero junto al
casco histórico ha surgido la ciudad moderna. El fuerte crecimiento urbano inducido por
la industrialización ha dado lugar a la configuración de grandes ciudades. En la mayoría
de los países la capital acapara más de una tercera parte de la población urbana total
(como Trípoli o El Cairo, la mayor ciudad de la zona, con más de 10 millones de
habitantes). El crecimiento urbano ha sido superior al económico e industrial, trayendo
consigo dos grandes problemas: el desempleo y la infravivienda.

Hasta ahora, la distancia existente en términos de nivel de vida, entre las dos orillas del
Mediterráneo, ha alimentado el flujo migratorio en sentido sur-norte, como vía de
escape del aumento de población y de la grave situación económica de estos países
africanos que no pueden dar a su gente un nivel de vida admisible.

3.6. ASPECTOS ECONÓMICOS

En el África mediterránea, la colonización francesa dejó unas estructuras económicas


bastante más dinámicas que en el resto del continente.

En conjunto las tierras cultivadas son sólo un 4,5 por ciento del territorio, aunque este
dato enmascara grandes desequilibrios regionales (Tunes tiene un 30 %). El regadío se
ha revelado como una necesidad y se han dado numerosos proyectos para aumentarlo
con embalses y aguas subterráneas. El incremento local de los rendimientos se, ha
debido al regadío, la mecanización y los fertilizantes; aunque en conjunto los
rendimientos son pobres, como es el caso del cultivo básico: el cereal. La ganadería,
base de la economía nómada, está muy extendida entre los agricultores sedentarios. Su
importancia obedece más a su cantidad que a su calidad, con rendimientos pobres en
leche y carne. Destaca la cabaña ovina y caprina de Argelia y Marruecos. En África del
norte, el acaparamiento de tierras por un pequeño grupo de terratenientes condujo a
graves desequilibrios, saldados con reformas agrarias insuficientes (como la de Nasser
en Egipto o la de Gadafi en Libia) ya que el gobierno orientó su estrategia económica al
desarrollo industrial, marginando el agrario.

La industrialización del Magreb era en principio de tipo tradicional (industrial


alimenticias), siendo a parte de la pesca industrial, la minería, el sector que más
prosperó (destacando los fosfatos y el petróleo). La industrialización está muy
mediatizada por la infraestructura viaria, la herencia colonial: las regiones más
industrializadas son las costeras, en tanto en el interior predominan los caminos
tradicionales y los ferrocarriles enlazan sobre todo los puertos con las zonas mineras.
Los países más industrializados son Egipto y Argelia. El sector servicios está poco
desarrollado aunque recientemente existe un fuerte impulso turístico (Túnez, Egipto,
Marruecos). Desde un punto de vista económico se aprecian diferencias entre los países:

Marruecos. Su estructura es la clásica de un país de incipiente desarrollo. Los sectores


de la agricultura y la pesca son importantes en su contribución al PIB, ya que estos
sectores son de vocación claramente exportadora. Las principales industrias son la
textil, de origen autóctono, y la química, sustentada por capital francés. En las últimas
décadas ha emprendido una marcha prudente hacia la consolidación económica, gracias
sobre todo a las inversiones exteriores en industrias ligeras (España y Francia). La
minería esta centrada en la extracción y exportación de fosfatos. El sector servicios
representa el 53% del PIB. En cuanto al tema de la importación, básicamente son objeto
de ello, productos semimanufacturados, equipo industrial, energía y productos
alimenticios. La balanza comerciales deficitaria y Marruecos se encuentra agobiado por
su gran deuda externa.

Argelia. En este país conviven tres formas de vida diferentes que se corresponden con
tres modelos económicos distintos. Tradicional: asociado a la agricultura, ganadería y
pesca y destinada al autoconsumo. Los principales productos son el trigo y la cebada.
Colonialista, o mejor dicho de origen colonialista, con nuevas roturaciones y nuevos
cultivos destinados a la comercialización, y tratados en industrias subsidiarias. Los
productos más importantes de este tipo son la vid, los agrios y el olivo. Moderna, que
aparece tras la independencia. Esta presente tanto en la ganadería como en la agricultura
y en la industria hidrocarburos: petróleo y gas. Argelia estableció un modelo
industrializador autogestionario que intentaba avanzar en el proceso de diversificación
industrial (saneando y privatizando empresas), pero el fundamentalismo islámico ha
puesto en riesgo esta situación durante la última década.

El sector servicios está poco desarrollado. Las importaciones argelinas se centran, al


igual que las marroquíes, en semi-manufacturados, equipo industrial, y productos
alimenticios. De la energía como ya hemos visto, ya disponen ellos. Su gran problema,
al igual que en caso marroquí, es la gran deuda externa.

Túnez. La situación económica de este país es bastante sólida actualmente. Economía


diversificada y sociedad equilibrada, con buen nivel de desarrollo industrial y un
elevado porcentaje de exportaciones. Importante desarrollo turístico. Aunque los
sectores agrícola y ganadero siguen ligados a técnicas antiguas y a una baja
productividad (trilogía mediterránea) otros sectores como el industrial (especialmente la
industria textil y la farmacéutica, hierro, fosfatos) poseen un tamaño considerable. Su
disponibilidad energética supone una disposición de petróleo superior al autoconsumo,
aunque su balanza comercial también es deficitaria. Importa fundamentalmente textiles
y maquinaria.

Libia. Este país por sus características naturales ve muy limitada su actividad agrícola,
aunque es mucha la población dedicada al sector. La ganadería corre a cargo de los
pueblos nómadas. Lo que realmente ha impulsado el desarrollo económico del país son
sus importantes yacimientos petrolíferos, de gas natural y de fosfatos. También es
importante la industria de transformación de los productos agropecuarios. Su deuda
exterior es sensiblemente inferior a la de sus países vecinos.

Egipto. A pesar de los esfuerzos del estado y de las muchas potencialidades de este país
(fértil Nilo, petróleo y control del Canal de Suez) la renta per capita de los egipcios
sigue siendo muy baja. A pesar de la importante actividad agrícola en torno al eje del
Nilo (algodón, maíz, arroz, mijo y caña de azúcar) actualmente este sector tiene menos
importancia que otros, como por ejemplo que el sector servicios. La actividad industrial
se centra en la producción hidroeléctrica de la presa de Assuán y la explotación de los
recursos petrolíferos. Otras industrias localizadas en las principales ciudades -El Cairo,
Alejandría, Port Said y Assuán- producen cemento, neumáticos, superfosfatos, hierro,
acero, papel, tejidos, algodón y aceite. La diversificación industrial se basó en el modelo
soviético (industrias básicas), pero el peso del Estado ha sido excesivo y los planes de
apertura económica no han tenido éxito.

4 EL ÁFRICA SUBSAHARIANA

Constituye dentro del Tercer Mundo el conjunto regional menos poblado, con una
densidad media de 25 hab/km2, hasta la reciente explosión demográfica que ha
duplicado la población africana por dos en le último cuarto de siglo.

Este espacio africano también llamado “África Negra” se localiza al sur del desierto del
Sahara. La puerta de acceso por vía terrestre es la mítica ciudad de Tombuctú (Malí)
que da paso a lo que en otro tiempo fue conocido como “el país de los negros”. La piel
negra de sus habitantes a menudo confunde y oculta una realidad de tremenda
diversidad étnica y cultural. A pesar de esta gran diversidad, también son muchos los
elementos que unifican al país, entre otras cosas una similar historia colonial y
neocolonial.

La mayoría del África subsahariana es actualmente monoteísta, siendo las principales


religiones el islamismo, el cristianismo y en menor medida el judaismo, especialmente
entre los abisinios.

4.1. EL CLIMA.

La gran amplitud geográfica da lugar a tipos climáticos muy variados. En las


características de estos climas influyen:

Las corrientes marinas:


En las costas occidentales la corriente fría de Canarias y Benguele y la corriente cálida
de Guinea.

En las costas orientales la corriente cálida de Mozambique provoca importantes


precipitaciones.

La latitud

El relieve, porque aunque no existen grandes barreras montañosas, la altitud y la


orientación de la meseta dan lugar a que las partes orientales tengan menos lluvias que
las occidentales.

Su localización en relación con la circulación general atmosférica, cuyas oscilaciones


determinan las situaciones de invierno y verano.

En África subsahariana se distinguen las siguientes zonas climáticas:

Zona ecuatorial. Situada en el área de influencia de las bajas presiones ecuatoriales. El


clima es constantemente cálido y lluvioso. Se extiende por las Cuencas del Congo,
Nigeria, Gabon y sur de Camerún.

Clima tropical. Las temperaturas siguen siendo muy altas pero la influencia monzonica
provoca una estación seca y otra húmeda. Este clima comprende las mayores
extensiones; regiones sudanesas, mesetas orientales y meridionales y Madagascar.

Clima árido. En los desiertos de Namib y Kalahari. Se dan escasas precipitaciones


concentradas en verano (con lo que la evaporación es mayor y el grado de humedad
menor) y fuertes oscilaciones térmicas.

Clima subtropical. Con una menor extensión que los anteriores, lo encontramos en la
costa occidental (El Cabo) y en la oriental. Tiene dos estaciones claramente
diferenciadas; una cálida y otra seca.

4.2. EL RELIEVE

África subsahariana se caracteriza por el dominio de un paisaje monótono, definido por


extensas mesetas -meseta septentrional, meseta oriental y meseta meridional- salpicadas
por algunas cadenas montañosas e interrumpidas por fosas tectónicas -Rift Valley- ,
extensas cubetas -cubeta del Niger, del congo, del Kalahari y del Chad- .es de destacar
el valle del Congo en el centro de África con una altitud media de 300 metros que
constituye la 2a cuenca más importante del mundo. La línea de costa está formada por
costas rectilíneas de estuarios muy abiertos.

4.3. LA HIDROGRAFÍA

Los ríos subsaharianos siguen las principales líneas de fractura del zócalo y debido a la
variedad volumétrica y a las gargantas, los rápidos y las cataratas por las que atraviesa
estos ríos, muchos de ellos son prácticamente innavegables -ríos Zambeze, Livingstone,
Stanley, Aughrabies…-. El clima influye claramente sobre el régimen fluvial. Los de la
zona ecuatorial, aún con sus dos máximos anuales, tienen un caudal constante, por
ejemplo el río Congo. En cambio, los ríos tropicales tienen un máximo y un mínimo.
Este es el caso de los ríos Niger, Senegal y Zambeze.

4.4. BIOGEOGRAFÍA

Lo más destacable es el proceso de desertización y sabanización que la acción antrópica


ha ocasionado en esta parte de África. Podemos diferenciar diferentes dominios
biogeográficos:

Zona ecuatorial o selva siempre verde. Es de una gran riqueza florística (boababh,
ébano, caoba, palmera…) y se extiende por la cubeta de Congo, Gabon y Camerún. Esta
selva se transforma en una zona de manglares en el Golfo de Guinea.

Zona tropical. A través de un proceso de transición la vegetación propia del dominio


anterior se va empobreciendo, desarrollándose un bosque mixto de árboles de hoja
caduca y de arbustos que va degradándose hasta formar praderas herbáceas que reciben
el nombre de sabanas, salpicadas de árboles característicos, especialmente acacias.

Zona esteparia. Este dominio es más hostil que el anterior. Encontramos dos tipos de
zonas esteparias: Con arbustos y Con matorrales espinosos. En ambos encontramos una
vegetación pobre asentada sobre suelos raquíticos y salinos. Esta zona es conocida
como el Sahel y esta situada entre Senegal y Sudan y entre Somalia y Tanganika.
También encontramos este dominio en el Kalahari.

Zona mediterránea. Es el dominio de la parte de El Cabo. Las especies vegetales propias


son las características de los ámbitos mediterráneos. Aquí, los suelos son mas ricos, del
tipo pardo-forestal.

Zona de montaña. En este dominio la vegetación aparece organizada en base a los


escalones altitudinales, hasta llegar ala pradera alpina de la cumbre de la montaña.

4.5. ASPECTOS DEMOGRÁFICOS

Evidentemente los medios áridos dificultan extraordinariamente cualquier tipo de


actividad agraria, base de la economía de subsistencia de los pueblos allá asentados. Las
endemias y enfermedades también ejercen un papel destructor importante (malaria,
paludismo, SIDA, enfermedad del sueño) que hablan de un cuadro sanitario muy
deficiente y una gran subalimentación. La baja densidad también tiene raíces históricas,
como la trata de esclavos. Esta dinámica histórica de la población africana se ve rota por
la explosión demográfica que se desencadena a partir de los años 40 y que evidencian
una serie de datos: el poco calado de las políticas de planificación familia, un
comportamiento demográfico altamente pronatalista, y la reducción de la mortalidad
gracias a la intervención exterior. La tasa de mortalidad es la más elevada del planeta, y
los índices de morbilidad e insalubridad son también los más elevados.

La distribución de la población es muy desigual. Esta, está en función de las


condiciones naturales y socioeconómicas de cada zona: Las zonas más pobladas se
corresponden con los centros industriales o mineros, se dan en la costa y en las vías
fluviales más grandes y son la República Sudafricana, el Delta del Níger, el Golfo de
Guinea, la costa sudeste, zona de los lagos de África oriental (Ruanda y Burundi) y la
meseta etíope. Los desiertos demográficos se corresponden con las áreas desérticas y
áridas y las impenetrables selvas tropicales.

El proceso de urbanización, al igual que en el resto del mundo subdesarrollado ha sido


reciente, acelerado y caótico. Aún así, todavía la población urbana es, en general,
escasa. Este proceso de crecimiento ha sido diferencial en el tiempo y en el espacio. Así,
aunque alguna gran ciudad tiene su origen en el pasado colonial, la mayoría comienzan
su desarrollo con la colonización. Este desarrollo urbano se aceleró durante el periodo
de entreguerras y a partir de 1945 fueron muy pocas las ciudades creadas. Pero el
crecimiento de las ciudades más importantes se aceleró, generando macrocefalias que
constituyen polos aislados al no configurar regiones urbanas. Por otra parte, la falta de
infraestructuras y la imposibilidad de dar empleo a todos los inmigrantes urbanos han
originado la aparición de extensos barrios marginales.

La diversidad religiosa, lingüística y étnica es enorme en esta zona (se ha llegado a


hablar de miles de etnias). La gran mayoría de la población se puede considerar
autóctona, excepto un porcentaje de población blanca asentado en Sudáfrica, al margen
de toda mezcla racial.

4.6. ASPECTOS ECONÓMICOS

El grado de subdesarrollo de los países del África Negra es tal, que mas que de tercer
mundo habría que hablar de cuarto mundo.

Su economía o deseconomía, siempre se ha desarrollado en función de intereses


europeos primeramente y de las potencias mundiales actualmente. África ha sido un
lugar para el saqueo y el aprovechamiento de toda su riqueza natural y humana. Los
saqueadores no han dejado nada a cambio, excepto la imposición de modelos culturales
agresivos y dañinos. La miseria de los autóctonos así como la incompatibilidad de sus
sistemas productivos tradicionales con la economía mundial, origina una espiral de
miseria creciente de la que, ciertamente, es muy difícil salir.

Los productos que contribuyen al sostenimiento del PIB de África subsahariana son ,
por orden de importancia: vegetales, minerales, animales y en ultimo lugar, productos
manufacturados.

La red de comunicaciones para los intercambios económicos, organizada por los


intereses foráneos, está enfocada exclusivamente hacia el exterior (con clara
funcionalidad de organizar más eficientemente el saqueo del continente). El interior
africano esta desconectado entre si, lo que dificulta enormemente la organización propia
de los países africanos.

4.6.1. AGRICULTURA, PESCA Y GANADERÍA

De todas las actividades económicas africanas, la más importante es la agricultura. Se


trata de una agricultura básicamente tradicional, arcaica y de autosubsistencia. El otro
tipo de agricultura existente es la plantación, que se encuentra en su totalidad en manos
europeas y está enfocada a la exportación, y está compuesta por monocultivos
mecanizados y de un elevado rendimiento. Los productos principales son:
Palmera aceitera. Costa occidental.

Nuez de cola. Sierra Leona y Nigeria.

Copal. Cuenca del Congo.

Plátano. Camerún y Somalia.

Cacao. Congo y Angola.

Café. Kenia, Uganda, Tanganika, Mozambique, Angola y Madagascar.

Arroz. Sierra Leona, Guinea, Kenia y Tanganika.

Palmera datilera. En todos los desiertos africanos.

En la sabana se producen acacias, karité, algodón, tabaco, cacahuete, maíz y trigo.

En relación al sistema de tenencia de la tierra, la tradición africana prioriza los intereses


colectivos sobre los individuales.

La cabaña ganadera de África subsahariana está compuesta fundamentalmente por


ovejas y cabras por ser estas las dos especies que mejor se adaptan a estas zonas. De
todas formas, los rendimientos de esta actividad económica son bajísimos.

4.6.2. LA INDUSTRIA

El desarrollo industrial del África Negra es mínimo en razón de todo lo que hemos
hablado anteriormente: escasez de recursos humanos capacitados y escasez de recursos
económicos. Por el contrario, su gran abundancia se da en yacimientos y recursos
naturales: oro, diamantes, plata, manganeso, hierro, cromo, cobalto, cadmio, platino.
Paladio, cinc, germanio, estaño….y un largo etc.

La escasa industria que posee el continente la podemos clasificar según tres diferentes
modelos industriales.

La industria de tipo colonial: la mayoritaria.

La industria diversificada y parcialmente nacionalizada.

Las estructuras industriales complejas, que únicamente se da en la República

Sudafricana.

La producción minera, enfocada como industria extractiva, esta a la cabeza del


entramado industrial, especialmente en Sudáfrica.

Por ultimo, comentar que la industria africana se caracteriza por su exigüidad, escasez
de mercado interno y vías de mercado supranacionales.
5 ÁFRICA EN LA ENCRUCIJADA

La colonización africana está en la raíz de los problemas políticos y económicos de


África. Tras el proceso de independencia política, generalmente en los años 60, se caerá
en la dependencia económica, en el neocolonialismo. El comercio exterior está basado
en la exportación de materia prima y la importación de alimentos y manufacturas. El
alto nivel de exportaciones agrarias se acompaña a su vez de importaciones de
alimentos. La crisis agraria del continente y su déficit en la balanza comercial han traído
a su vez la crisis medioambiental (avance real de la desertización). Hay que mencionar
también que bajo la capa del neocolonialismo se esconden muchas veces los intereses
de las clases dominantes autóctonas. La pobreza se ha convertido en un factor alarmante
en África, con graves desequilibrios entre los espacios rurales y urbanos.

África se mantiene en la cola del subdesarrollo mundial, incapaz de explotar en su


propio provecho, por y para sí misma, sus inmensas riquezas naturales. El drama en el
que vive inmerso y en el que todos los países tienen su parte de responsabilidad, no
podrá acabar si no es a través de un impulso consciente y desinteresado de los países
occidentales. Impulso que repare la injusticia pasada y presente, y no pretenda el propio
beneficio, sino únicamente el bien de África.

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Excelente y completísima página sobre África (geografía, historia, arte, pueblos, etc.):
http: / / ikuska.com / África / index.htm
Otra excelente página sobre África, en francés: http://www.africa-onweb.com/

IEPALA, Instituto de Estudios para América Latina y África: http:/ / www.iepala.es/

Apuntes de Geografía de África en lafacu.com:


http://www.lafacu.com/apuntes/geografia/Africa/default.htrn

Más apuntes sobre Geografía Africana en lafacu.com:


http://www.lafacu.com/apuntes/geografia/geog afric/default.htm

Revista África Internacional (números completos, aunque no todos):


http://www.eurosur.org/ai/

Portal del Islam en español (numerosos artículos en “Geopolítica” o “Sociedad y


Economía”):

http: / / www.webislam.com/

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