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1 Richard. M.

Cantera Ríos

RICHARD MARTIN CANTERA RÍOS

ENTRE

LA PAUSA

Y LA RAZÓN

“DESAPRENDIENDO DE LA VIDA”
2 Richard. M. Cantera Ríos

ENTRE
LA PAUSA
Y LA RAZÓN

“DESAPRENDIENDO DE LA VIDA”

Derechos reservados:
© 2014 Richard Martin Cantera Ríos
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el fotocopiado, así como la elaboración de material basado en esta obra sin la
previa autorización expresa del autor.

Ilustraciones y diseño de portada:


Carlos Pérez Tucto
Luis Casanova Ocas

Revisión:
Víctor Cantera Ríos
3 Richard. M. Cantera Ríos

“No involuciones en tus principios, valores y conocimientos


aprendidos, has vivido muchos años con tu familia, ellos te
han enseñado la moral y el respeto a ti mismo, has tenido
modelos positivos de comportamientos, no puedes olvidar,
dejar tus aprendizajes buenos de tantos años y quitarlos en
un momento, en un segundo, sólo por simples tentaciones
o por satisfacer a alguien más”

Richard Martin Cantera Ríos


4 Richard. M. Cantera Ríos

“Dedicado a mi familia y a los grandes amigos de la


adolescencia”
5 Richard. M. Cantera Ríos

Agradecimiento

“A mi madre, quién me enseñó que ESTAMOS POR ALGO


EN ESTE MUNDO, para amar con todo el corazón, para sonreír
sin parar, para llorar y desahogarse sin sentir que somos débiles
por ello, para aprender de los errores y desaprender de hábitos
negativos que sólo nos limitan en nuestro camino hacia esa paz y
tranquilidad tan deseada. Gracias madre por enseñarme QUE
ESTAMOS EN ESTE MUNDO para entender la diferencia que hay
entre errores y horrores, por enseñarme que la única forma de
no caer en ellos es utilizando el regalo más grande que pudo
habernos dado DIOS, “LA RAZÓN”, sobre todo, por ayudarme a
entender que no hay, que no existe vida sin que un corazón
tenga que latir fuerte o muy despacio, ya sea por situaciones
negativas que trae la vida o por sentimientos positivos, lo único
importante es vivir con ganas con fuerza y con gran pasión”
6 Richard. M. Cantera Ríos

Índice

Introducción

Capítulo I. Los límites de la vida……………………………..………………………………..10


Capítulo II. Un hijo La fuerza para vivir…………………….……………………………….26
Capítulo III. El verdadero amor…………………………….……………………………………39
Capítulo IV. Pasos en el peldaño del sentimiento………………………………………48
Capítulo V. Los caminos de la soledad………………………………………………………59
Capítulo VI. Perdiendo la razón………………………………………………………………….64
Capítulo VII. Yo te extrañaré………………….…………………………………………………..87
Capítulo VIII. La capacidad de olvidar……….…………………………………………………93
Capítulo IX. La vida es una pausa………….…………………………………………………101
Capítulo X. Volviendo a vivir………………………………………………………………....107
Capítulo XI. Luchando contra las adversidades……………………………………….118
Capítulo XII. Los padres la pieza principal del rompecabezas familiar………129
Capítulo XIII. Diferencia entre el error y el horror…………………………………….153
Capítulo XIV. La ley de la saturación en el amor……………………………………….160
Capitulo XV. La activación del sentimiento………………………………………………169
Capitulo XVI. Los detalles son la llave para activar la necesidad de amor…175
Capitulo XVII. Dios nunca olvida, está en tu vida, mente y corazón……………188
Capítulo XVIII. La decisión entre la pasión y el sentimiento……………………….198
Capítulo XIX. Cuando la rutina acaba el amor…….……………………………………207
Capítulo XX. El amor nunca se acaba sólo cambia de lugar……………………..218
Capítulo XXI. Desaprendiendo de tus estructuras mentales…………………….223
7 Richard. M. Cantera Ríos

INTRODUCCIÓN
Hoy aprendí que la vida es un círculo en el cual nunca hay
que rendirse, que jamás en la vida hay que intentar correr o huir
de los problemas que nos aquejan, porque ellos siempre van a ir
detrás de uno, lo peor de todo es que tarde o temprano te van
alcanzar enredándote más en ellos, es allí donde te sentirás como
dentro de un círculo de intriga, de nostalgia, de frustraciones, del
cual por más que intentes salir rodeándolo no podrás, te sentirás
un pequeño punto encerrado en él, tratando de buscar salidas sin
poder encontrarlas.

Lo bueno es que la única salida, dependerá de ti, de cómo


tú sigues ese círculo de problemas, no tratando de huir de ellos, si
no corriendo siempre al lado de las situaciones problemáticas,
acompañando a tus problemas, enfrentándolos, caminando junto
a ellos; te aseguro que al final, éstos se cansarán y los dejarás
atrás, descansarás un momento y disfrutarás de esa paz que tanto
anhelabas, dándole un gran respiro de tranquilidad, de alivio a tu
corazón y a tu mente que tanto lo necesitaban.

Alguien decía, que la vida que se lleva es como una carrera


de competencia en la que siempre nos tocará seguir corriendo en
búsqueda por lograr nuestras metas, en esa larga carrera de vida
encontrarás esperándote ese sentimiento que todos buscamos, la
felicidad, momentos inolvidables de felicidad, en la cual sentirás
que todo lo que te rodea será lo mejor que te está pasando, sólo
sonreirás, sonreirás como loco(a), lo mejor de todo ello es que, tu
sonrisa hará feliz a las personas que te rodean y que más amas.

A veces tendrás miedo de ser tan feliz, pues sabes que la


vida siempre es como un gran círculo, donde tarde o temprano te
tocará seguir en ese duro recorrido, donde lamentablemente para
ti, encontrarás esperándote otra vez el llanto, los sufrimientos y
decepciones.
8 Richard. M. Cantera Ríos

Es allí donde debes buscar tu motivación, tu causa, tu razón


para seguir en este mundo, aferrándote con fuerza a ella, hasta
que nuevamente llegues a esa parada de felicidad momentánea
que tanto se anhela llegar.

Al final la respuesta sólo es una. QUE IMPORTA, TÚ ESTAS


POR ALGO EN ESTE MUNDO, para amar con todo el corazón, para
sonreír como loco(a), para llorar y desahogarte, para aprender de
tus errores y seguir el camino sin que ellos te detengan, yendo
siempre hacia adelante, siguiendo el sendero que la vida y Dios te
deparen, siempre con la cabeza muy en alto dispuestos a luchar y
esforzarse por mantener en valores este don tan maravilloso que
es la vida.

Estás en este mundo para entender la diferencia que hay


entre los errores y horrores, pues los horrores te detendrán, no
dejándote avanzar, pero con la fuerza de voluntad, la firmeza para
no volver a caer en tus remolinos, con la motivación de ser mejor
en la vida, todo se puede, no hay nada imposible para tu mente y
sobre todo para entender que no hay, que nunca existirá una vida
sin que un corazón lata fuertemente o muy despacio, ya sea por
situaciones negativas de la vida o por sentimientos positivos, lo
único importante es vivir con energía, con fuerza y con una gran
pasión.

Algún día llegará el momento en que reflexionarás y dirás,


sí, sufrí pero amé, lloré, pero reí, fracasé, pero me levanté y si no
lo pude superar, mírame, lo sigo intentando, al final la vida sigue
siendo eso un gran regalo que Dios nos concedió con mucho amor
y no necesité de nadie para poder ser feliz. Sólo de Dios, de mi
familia y de mis decisiones.
9 Richard. M. Cantera Ríos

DESAPRENDIENDO DEL CÍRCULO DE LA VIDA

ODIO TRISTEZA AMOR ALEGRIA

MEDIOCRIDAD COSTUMBRE ESFUERZO SUPERACIÓN

POBREZA RIQUEZA

ACOMPAÑA A TUS PROBLEMAS DESAPRENDIENDO DEL CÍRCULO DE LA VIDA VIVIR CON FUERZA Y GRAN PASIÓN
10 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO I – LOS LÍMITES DE LA VIDA

Éramos un buen grupo de cuatro muchachos, entre


los dieciséis años de edad, todos grandes y mejores amigos,
íbamos descubriendo, disfrutando los placeres que la vida
nos ofrecía, sin preocupaciones, viviendo apresurados como
si el tiempo nos iría a ganar, pensando sólo en nosotros y
que los demás, el resto no tenían razón, como teniendo un
gran cartel en la espalda que decía: ¡vivir sin límites!.
En verdad estábamos dispuestos a vivir la vida en un
minuto; como olvidarlo, esa fue la mejor época de nuestras
vidas.
Pero, como todo adolescente, surgieron las primeras
ilusiones, por la cual dejamos de lado esas reuniones diarias
de juegos; sucumbiendo ante la mayor tentación de nuestra
etapa ¡mujeres!, llegando con ellas el amor o se podría decir
para los adolescentes varones, el amor con placer o será el
placer disfrazado con amor.
A ese tiempo, cada uno de los cuatro amigos tuvimos
nuestra pareja, cuatro lindas chicas con las que conocimos el
primer amor, cada uno de acuerdo a su personalidad con su
forma diferente de amar.
Nosotros con un amor con el tono apasionado, ellas
ilusionadas dispuestas a dar todo por sentirse amadas; entre
salidas y diversión, les propusimos a ellas ir de paseo juntos
para pasar un día especial, en el cual nos íbamos a divertir
sanamente, de maravilla, les dijimos.
Ellas lo analizaron por un momento, como quienes
buscando la forma de inventar el cómo pedir permiso a sus
padres para el paseo tan deseado por todos.
11 Richard. M. Cantera Ríos

Así lo hicieron, obtuvieron el permiso de los padres,


aduciendo que era una práctica de campo organizado por su
colegio y que sólo iban a ir compañeras, era muy difícil con
ese pretexto del estudio, que los padres de todas las chicas
se negaran.
Con el permiso obtenido quedamos un fin de semana
para el esperado paseo, acordando que las chicas cocinarían
y llevarían el almuerzo, nosotros los hombres las gaseosas y
refrescos, siempre con el pretexto de que hay que compartir
todo en la vida por amor; como dije antes, las mujeres en la
etapa de la adolescencia, se convierten en fieles seguidoras
del machismo disfrazado con amor.
Todavía recuerdo cuando pedí el permiso a mi madre
ese día, adujo casi gritándome, ¡que no había dinero y que la
situación económica en la casa no estaba para paseos!; a lo
que yo le respondí, ¡que sólo quería el permiso por que mis
amigos llevarían el almuerzo para compartirlo!, ella me miró
medio molesta, pero no dijo nada, para mí ello era sinónimo
de aceptación.
Fui a dormir para levantarme temprano, emocionado
por ese paseo tan esperado, mientras descansaba, escuché
sonidos en la cocina de mi hogar, como si alguien estuviera
preparando algo, miré el reloj, era de madrugada, de mala
gana me levanté dirigiéndome a la cocina, encontrando a mi
bella madre preparándome con esmero, el almuerzo para el
paseo.
-¿Qué hace madrecita?- le pregunté.
Ella me miró, con los ojos a medio cerrar del sueño,
pero con una cara de dulzura, respondió:
12 Richard. M. Cantera Ríos

-Preparando el refrigerio para tu paseo, como vas a ir


sin almuerzo-
Yo escuchaba sus palabras con mucha alegría porque
se preocupaba por mí.
Le respondí, que ya no se preocupara pues habíamos
colaborado para el almuerzo y que un amigo lo iba a llevar,
mirándome seriamente me dijo:
-Pero igual hijo, puede que no te inviten o no alcance
para todos-.
Sacando dinero de su cartera para el almuerzo, eso sí
recomendándome como siempre que vaya con cuidado.
Allí me di cuenta, que nuestras madres son únicas,
que su corazón es muy grande, abierto siempre para sus
hijos; pareciese que en la noche no duermen, pensando en
nuestras vidas, en nuestro futuro, en nuestros problemas,
buscando en cómo lograr solucionarlos, así se molesten un
momento, siempre están con nosotros, algunas veces nos
llaman la atención, pero siempre lo reflexionan, les gana el
amor por sus hijos y ceden, siempre cederán por sus hijos,
buscando darles una vida mejor de la que ellos tienen, ojalá
entendamos que en este mundo, donde cada uno intenta
vivir su vida sin preocuparse por los demás, los únicos que
nos toleran, ayudan, son nuestra familia, nadie más, por ello,
hay que intentar compartir más tiempo y decepcionarlos lo
menos posible.
Como dije, las madres siempre estarán a nuestro lado
cuidándonos, protegiéndonos, preocupándose por nuestro
bienestar, entendí que sin su cariño, apoyo, sin sus sabios
consejos andaríamos deambulando por la vida cometiendo
permanentemente errores.
13 Richard. M. Cantera Ríos

Comprendí que así tengamos los años avanzados,


siempre seremos unos niños para ellas, cogidos de su falda
como quien nos perderíamos sin su presencia y apoyo.
Le di un fuerte beso en la mejilla y me despedí, yendo
apresurado al lugar de la reunión, donde íbamos a tomar la
movilidad para el paseo.
Allí encontré a los amigos, también a las chicas, con
las mochilas llenas de almuerzo, habían madrugado para
prepararlos para ellas y sus parejas; por lo menos yo había
llevado frutas, refresco, pero el resto de los amigos tenían la
mochila vacía, en realidad todos llevábamos sólo cubiertos,
unidos por la consigna que en el amor se debe de compartir
todo.
Al llegar al lugar previsto, quedamos sorprendidos
con la vista de aquel hermoso paisaje, además de un prado
verde con frondosos árboles, cortado por un río con aguas
cristalinas, se podía respirar un olor a pureza; el clima estaba
muy adecuado con un sol que brillaba con gran esplendor, lo
cual permitió que el paseo para las cuatro parejas fuera más
divertido y romántico.
El día transcurrió muy rápido entre juegos y sonrisas,
como siempre no faltó la pareja que abrazara y cargara a la
suya, terminando empapados en las aguas del río, gritándole
con toda la locura y emoción de un adolescente, que estaba
loco por ella, todos celebrábamos la escena, ese fue el inicio
para que entre todos resultáramos en el río, jugando en el
agua como si fuésemos unos niños.
Después de descansar un poco empezamos a jugar
unos deportes, riendo todos sin parar, la estábamos pasando
muy bien.
14 Richard. M. Cantera Ríos

Pero está demostrado que cuando el sol se oculta en


la llanura y el atardecer se pierde en la oscura noche, el
varón adolescente se convierte en un lobo sexual, dispuesto
a comer a cualquier caperucita que se encuentre disponible,
haciendo que ya no piense con la cabeza, si no con su libido
sexual, como siendo presionados por las hormonas, que en
esa época nos tenían muy acelerados.
Entre atardecer y anochecer, Javier uno de nuestros
amigos, apresuradamente con el pretexto de ir a hacer cosas
de hombres, nos reunió al grupo de cuatro amigos y cual un
militar mañoso había trazado un gran plan, para cumplir con
sus libidinosos objetivos que tanto había esperado.
-¡Ya es hora!- habló emocionado, todos lo mirábamos
sorprendidos, como quien no sabiendo lo que quería-
-¡Ya es hora!- volvió a repetir; -tenemos a las chicas
aquí, solas y dispuestas a muchas cosas con nosotros, este es
el momento de aprovechar y enseñarles a vivir el placer del
amor-.
Nadie habló nada, como estando de acuerdo con lo
que decía, pues a cada uno de nosotros también nos ganaba
la impaciencia por compartir unos momentos de amor, de
placer con nuestra pareja.
Javier calló un momento, luego empezó a explicar lo
que para él era un gran plan, dijo que cada uno con nuestra
pareja, tendríamos que dispersarnos por los cuatro puntos
cardinales, para no cruzarnos y lograr los objetivos de placer
que habíamos esperado dieciséis años.
Ricardo, -tu vas al norte, dijo; Miguel, tu vas al oeste
por donde se oculta el sol, Carlos te toca ir por el este y por
último yo voy al sur-.
15 Richard. M. Cantera Ríos

Replicó con mucha emoción, como si fuese el mejor


plan que había trazado en toda su vida, como si ese fuera el
momento que había esperado hace muchísimo tiempo, para
hacer realidad sus locos sueños de placer.
Mientras tanto Carlos, también intentaba según él,
dar sus métodos para enamorar, nos daba consejos como si
fuera un experimentado, diciéndonos que a las mujeres para
enamorarlas sólo hay que darles lo que a ellas más les gusta,
“detalles”.
Es más decía con mucha seguridad que la única forma
de llevarlas a la cama, se llamaba romanticismo, que ello
haría que se enamoraran más, que cuando sintieran el amor
en su corazón estarían dispuestas a todo.
Javier dijo, -si eso-, -primero mucho amor y después
terminan haciendo el amor-.
-Cuando ellas pierden la razón se entregan sin poner
reparos y nosotros gustosos de recibirlos- agregó Miguel.
Todos sonreímos ansiosos de ya estar a solas con nuestras
parejas.
Así pondríamos en práctica el plan, dándonos ánimo
como si nuestros sueños locos fuesen tan fáciles de cumplir.
Como ustedes entenderán los adolescentes desarrollan muy
bien su imaginación y su inteligencia para lograr sus planes
libidinosos.
Como quién no sabíamos nada, regresamos donde las
chicas, que nos esperaban muy alegres con una gran sonrisa
y una cara de agradecimiento, se sentía que ellas la estaban
pasando de maravilla, dispuestas a entregarnos su corazón y
algo más por ese sentimiento tan grande llamado amor; eso
es lo que único que esperábamos e imaginábamos.
16 Richard. M. Cantera Ríos

Me acerqué a mi enamorada, aunque habían pasado


minutos, nuestras miradas brillaban de emoción al vernos;
cuando le comenté para ir a pasear y conocer mejor el lugar,
ella me aceptó, no se hizo de rogar, percibí que ella también
quería tener unos momentos de privacidad como todas las
parejas de enamorados la tienen alguna ocasión, caminamos
rumbo al este como lo habíamos planeado con los amigos,
mientras los demás hacían lo mismo cada uno por su límite.
Mientras caminábamos sentía que mi corazón latía
fuertemente, con una mezcla de amor y de pasión, era como
si mis sentidos sintieran el olor del deseo de ella hacia mí,
miraba buscando con desesperación un lugar propicio donde
poder entregarnos al amor, me controlaba, trataba de no
mostrar mucho ese deseo de besarla, de abrazarla; pues yo
era muy astuto y sabía que si se daba cuenta de mi ansiedad,
me iba a rechazar o no querer nada y ese no era el plan.
Mi ansiosa búsqueda de ese lugar ideal, llegó a su fin,
encontré un coposo árbol, rodeado de hermosas flores y un
verdoso pasto, con una pequeña sombra para cubrirnos del
sol, todo estaba propicio para el desarrollo de mis planes, el
ambiente, el lugar, la situación era muy romántica.
Nos sentamos buscando la sombra bajo del árbol, no
sin antes jalar una colorida flor silvestre, la cogí de la mano,
puse la flor en sus dedos, me acerqué hacia ella lentamente,
la miré a los ojos y le dije que la quería, que la amaba, que
no dejaba ni un segundo de pensar en ella, que el estar a su
lado en aquel momento era lo que había esperado siempre,
que daba gracias por tenerla a mi lado y que ya no podría
estar ni un solo momento sin ver sus hermosos ojos y besar
sus rojos labios.
17 Richard. M. Cantera Ríos

No necesitamos más palabras, como reflejo de amor


ella cerró levemente sus hermosos ojos, mientras nuestros
labios se unían como dos imanes, primero en un tierno beso,
ambos cuerpos temblaban al sentir aquel fuerte sentimiento
de entrega de amor, de ternura.
Pero los tiernos besos poco a poco se convirtieron en
besos con pasión, cada vez más fuertes y más apresurados,
nuestros labios no se dejaban, no querían separarse.
Ya nuestra razón, nuestro yo, dejó de pensar y sólo
nos dejamos llevar; sin dejar de besarla, la cogí suavemente
de la cintura y lentamente caímos recostados en el verdoso
pasto, seguidamente la besé lentamente en el cuello, de su
garganta se escapó un suave quejido de placer, señal para mí
que también estaba esperando, deseando lo mismo que yo.
Yo estaba dispuesto a todo, la abracé aún más fuerte,
acariciando su espalda, como quien invitándola a que me
permitiera explorar todo su cuerpo, cuando ya mi alocada
mente sintió que ella me iba permitir llegar a algo más que
ella y yo deseábamos; de improviso me empujó, se levantó
apresuradamente como si su razón ganara a su libido, con
una cara de avergonzada me habló con una suave voz, con
un tono romántico pero a la misma vez con firmeza, con una
gran seguridad dijo:
-¡Que estamos haciendo!, ¡vamos ya es tarde!-.
Ya se imaginarán, yo sentado, súper acelerado por los
besos de pasión y ella parada frente a mí, segura ya de que
no quería llegar a nada más, pero mi corazón, mis hormonas
aceleradas me decían que intente de nuevo besarla, aunque
mi razón sabía que ella era una buena chica y que no me iba
a permitir, así lo presionara para llegar a algo más.
18 Richard. M. Cantera Ríos

Además en mi había un fuerte sentimiento de amor


hacia ella, la quería, lo que me hizo no exigirle nada más y
respetar su decisión, más bien me sentía avergonzado de la
pasión que le demostré e intenté pedirle disculpas, a lo que
ella respondió cortándome la explicación.
-No te preocupes no ha pasado, ni ha cambiado nada
en mis sentimientos que tengo por ti-
-Te amo- repitió-
Ello me hizo considerarla más; en el fondo me gustó
su decisión, no era el momento ni el tiempo.
Vamos a buscar a las demás chicas, nos deben estar
buscando- dijo.
En el camino mi cabeza se preguntaba si ella sintió lo
mismo que yo, la conclusión era obvia, ella sí, sintió algo, sí
tuvo sensaciones de exitación, era algo normal, somos seres
humanos, no somos de piedra, la diferencia es que en ella
ganó la razón, además supo manejar sus emociones; al final
le agradecería por ello. Triste y a la vez contento porque no
se molestó conmigo, ella me agarró la mano y nos dirigimos
hacia el oeste del lugar.
Con sorpresa observé a Miguel abrazando, besando,
con las dos manos que revoloteaban debajo del polo de su
pareja, ella lo besaba también con pasión, mientras sacaba
las manos de Miguel cuando intentaba tocar bajo la cintura.
Lizet, mi enamorada, se sorprendió por esa escena,
movió la cabeza como quien se decepcionaba de su amiga y
atinó a tomarme de la mano, alejándonos apresuradamente
del lugar.
Yo la seguí, nos dirigimos al sur en busca de su otra
mejor amiga; allí encontramos a Javier y su enamorada Elisa.
19 Richard. M. Cantera Ríos

Estaban en una escena un poco difícil de contarla, lo


único real es que ambos se acariciaban por todo el cuerpo
sin que ninguno de los dos diera límite a su imaginación y ya
dispuestos a todo con el pretexto de amor.
Lizet miró con cara de sorpresa a su amiga, como si
todas las conversaciones del que hasta donde se debe llegar
con los hombres, nunca hubieran sido escuchado por Elisa,
movió la cabeza aún más decepcionada, mientras que a
empujones me dijo que caminara, como quién obligándome
a no mirar esa escena o como si me dijera en su mente que
todos los hombres buscamos eso.
Balbuceando entre dientes súper molesta dijo:
-¡Qué mal!-, -¡que decepción-!
Mientras yo sentía que cuando me miraba sus ojos
me decían, olvídate de esas tentaciones que yo no soy así.
Molesta repitió de nuevo
-¡Vamos, alejémonos de este lugar!-
Dirigiéndonos al este, allí encontramos al último de
nuestros amigos, Carlos, estaba asustado, sentado sobre una
gran piedra, frotándose la mejilla, mientras su enamorada le
gritaba muy fuerte.
-¡Imbécil!-, -¡idiota!-, -¡no vuelvas intentar tocarme
que yo no soy una mujer fácil, ni menos una cualquiera para
satisfacer tus pensamientos pervertidos!- terminando allí en
ese momento su relación de enamorados.
-Vamos amigo- le dije, dándole ánimos, ya perdiste,
no todas las mujeres son como pensamos que eran.
Así acabó ese gran paseo, entre diversión, locuras y
decepciones, donde todos regresamos, unos más contentos
que otros.
20 Richard. M. Cantera Ríos

La vida que toca llevar, los amigos, la familia siempre


nos dan enseñanzas, lecciones que nunca se olvidarán, que
por más sencillas que sean siempre influyeron en nosotros,
y en las personas que nos rodean, que amamos, nosotros no
fuimos la excepción, ese paseo fue el inicio para aprender a
tomar decisiones, en donde a cada uno nos tocó elegir un
camino, elegir un límite de vida.
Si bien es cierto, en ese paseo nosotros los hombres
en nuestra aceleración hormonal elegimos un solo límite,
buscando satisfacer nuestro libido, nuestro placer con amor,
preguntamos a las mujeres adolescentes y jóvenes.
¿Qué tipo de mujeres se sienten en una relación de
pareja?, ¿qué tipo de límites tienen en su vida?
La del norte, la que siente deseos, sensaciones como
todas las personas en el mundo, que sabe que puede sentir,
pero que jamás se deja llevar por sus placeres, maneja sus
emociones, que sabe que el amor como el sexo son como un
baile, porque para ello se necesitan siempre dos, que si algo
pasa es porque alguno de los dos cedió. Pero sobre todo que
sabe que nunca mandan las sensaciones, si no su razón, su
capacidad para decir no frente a los placeres.
O la del sur, la que permite todo, estando dispuesta a
entregarse y tener relaciones sexuales con ese pretexto de
amar y ser amada, que lleva un cartel de hedonista en su
vida, pensando que las personas están en este mundo para
sentir placer, para disfrutar apresurados de la vida porque es
una sola y que hay que aprovecharla sin límite mientras se
pueda, yendo por el mundo con la filosofía de que hay que
dar todo por amor sin pedir nada a cambio.
21 Richard. M. Cantera Ríos

O la del este, que piensa que el hecho de no tener


relaciones sexuales, no significa tener un poco de ese placer
y cede en algunas situaciones, pues su lema es que hay que
comer un poquito de la manzana prohibida del placer, que
cede porque somos seres humanos y como tal sentimos, que
las sensaciones están para conocerlas poco a poco, así el
resto diga lo contrario.
O la chica del oeste, que la palabra sexualidad en su
vocabulario será un tabú, que nunca permitirá ni siquiera
escuchar el tema de sexo, menos de su pareja, negándose a
sentir sensaciones, por que sentir ello es algo anormal, es un
pecado, algo impuro, estando por ello dispuesta a golpear,
maltratar al hombre que busque algo más que amor en ella.
Aprendamos a no confundir el amor con sexo, no te
dejes engañar o ilusionar por los detalles, el romanticismo,
que algunas veces cuando no es con amor verdadero, son los
que condicionan para que una mujer ceda y tenga relaciones
sexuales con su pareja, nunca se mezcla, excitación, pasión,
con ese hermoso sentimiento llamado amor.
Hay que entender que en el amor, en la vida, en el
sexo debe existir la ley de la pausa, pausa para pensar en
las consecuencias de todas tus acciones, los cuales no sólo
te afectarán a ti mismo, si no también a las personas que
estimas.
Pausa para entender metafóricamente que el sexo
es como comerse una torta de deseo sexual en la cual hay
diferentes sabores, cada vez más dulces mientras más se
llega al centro de ella, probablemente sentirás sensaciones
de placer al probar la última parte donde se encuentra la
cereza que representa la máxima sensación sexual.
22 Richard. M. Cantera Ríos

Pero después de realizar las relaciones sexuales, al


comerte desesperadamente la torta del placer, sin pensar en
las consecuencias ni en los consejos recibidos durante tantos
años, el sabor dulce del placer, pasará en pocos segundos a
convertirse en un sabor agrio, amargo, al sentir los grandes
temores de ser padres.
La impaciencia que no te dejara dormir varios días, al
pensar en un embarazo no deseado, o al pensar en la idea
de convertirte en un padre tan joven, sin todavía lograr tus
objetivos trazados, esos pensamientos te llenarán de miedo,
grandes temores al darte cuenta de las consecuencias, de las
responsabilidades que implica el tener relaciones coitales a
temprana edad.
Allí surgirá el arrepentimiento y el miedo a quedarse
sola, al darse cuenta como mujer, de las alarmantes cifras
donde indican con mucha sorpresa que la mayor parte de las
madres adolescentes son abandonadas por su pareja en los
pocos años de convivencia.
Destinada en la mayoría de los casos a vivir como una
madre soltera, luchando sola por darle el bienestar a un hijo,
o como un padre frustrado sin poder quemar como debe ser
las etapas de tu vida, todo por dejarse llevar por los placeres
sin hacer caso a su razón.
Utiliza tu pausa para entender que la única forma de
detener las sensaciones placenteras del cuerpo humano, las
tentaciones, esos pensamientos negativos que rondan tu
cabeza, es utilizando tu razón, que por mas difícil que sean
las decisiones a tomar siempre te ayudará a hacer, a decidir
lo correcto para no arrepentirte nunca de tus elecciones de
vida.
23 Richard. M. Cantera Ríos

Es positivo realizar una introspección, una reflexión


crítica, constructiva de los actos, de las experiencias vividas
para no volver a equivocarnos, de hecho lo hacemos en tono
de arrepentimiento cuando cometemos errores, pero recién
nos lamentamos de ello cuando los acontecimientos ya han
pasado, cuando el tiempo, la vida ya no nos permiten volver
a subsanarlos.
Lo real, concreto es, que la única forma de no andar
cometiendo grandes errores en la vida, es utilizar tu razón,
pensando, reflexionando antes en lo que vas hacer, en las
consecuencias que traerán tus actos, entendiendo que por
más placenteros o emocionantes que sean, la vida es como
un círculo que tarde o temprano, te estará esperando para
pasarte la factura de tus acciones.
A partir de allí, cada uno de nosotros iría, buscaría su
rumbo, siguiendo el sendero que Dios, la vida, y el destino
nos tendría señalado.
Todos buscando un límite de vida que recorrer para
lograr nuestras metas, para buscar ese objetivo tan deseado,
pero a la misma vez imposible de conseguirlo por completo,
llamada felicidad.
Para cada uno, para todos los amigos del grupo fue
difícil despertar de la adolescencia, que fue de lejos la mejor
etapa de nuestras vidas que nos tocó vivir, donde todo eran
juegos, sonrisas y despreocupaciones.
Fue como despertar de un sueño e iniciar una vida
nueva, con muchas, grandes responsabilidades que afrontar,
que cargar sobre nuestros hombros.
Vida en la cual todos esperaban y esperan todavía
algo más de nosotros.
24 Richard. M. Cantera Ríos

Vida donde algunos de los amigos eligieron límites,


caminos equivocados, que sólo los dirigirían a un mundo de
penas, tristezas, sufrimientos, que harían que cayeran en un
abismo sin fondo.
Pero con el tiempo en sus mentes llegaría la pausa y
la razón, ayudándoles también a despertar de sus oscuros
sueños, haciendo que se detengan en sus ilusiones de vida,
para salir de una vez de sus profundos abismos y remolinos,
para cumplir con gran firmeza sus verdaderas motivaciones
de vida.
Desaprendiendo así de los hábitos negativos de vida,
pensamientos cerrados y egoístas en donde uno piensa que
tiene la razón, resurgiendo de su fondo, encontrando por fin
un objetivo para seguir luchando por el bienestar de ellos y
de quienes los amaban.
Entendiendo al final, que somos seres humanos y
cometemos errores, retrocediendo de las equivocaciones,
de las malas elecciones para iniciar y buscar de nuevo un
camino de vida, de límite mejor.
Ahora recordamos con felicidad, pero, también con
mucha tristeza, melancolía, aquellos momentos maravillosos
vividos durante la mejor época que nos tocó vivir a cada uno
de nosotros, nuestra adolescencia.
El recordar esos años es como vivir en un sueño que
nadie de nosotros está dispuesto a dejar ir, aunque a veces
reprimimos esos recuerdos para no vivir en el pasado, para
continuar con la vida y disfrutar de lo bueno que tenemos a
nuestro lado, familia, pareja, hijos, que son el mayor regalo
que la vida nos ha dado.
25 Richard. M. Cantera Ríos
26 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO II – UN HIJO LA FUERZA PARA VIVIR

Así pasó el tiempo para el grupo de grandes amigos,


donde cada uno eligió su límite de vida, algunos ingresamos
a la universidad para continuar nuestra vida académica de
superación, la vida afectiva siguió para algunos de nosotros
entre, respeto y sentimientos compartidos de amor.
Para Javier entre locuras y pasiones desenfrenadas
con su pareja.
Un día nos reunimos con Javier, el amigo del sur en el
paseo, lo sentimos pensativo, le preguntamos que pasaba, el
por qué de su preocupación, movió la cabeza como quien no
quería contarnos sus problemas, finalmente, sintió confianza
con sus amigos de siempre, diciendo que estaba preocupado
porque había tenido relaciones sexuales con Elisa la chica del
paseo, que ella estaba retrasada ya más de tres semanas en
su menstruación; muy asustado, seguía hablando que el sólo
pensar en tener un hijo a su edad lo desesperaba.
Muy preocupado, pidió que le acompañáramos a él y
su enamorada, que también era nuestra amiga a realizarse
una prueba de embarazo, los cuatro inseparables amigos
estábamos para apoyarnos en las buenas y en las malas, así
debía ser, así que los acompañamos, aunque nadie quería
estar en su situación.
Entenderán que para cualquier adolescente, estar en
esa situación es muy difícil y para una mujer más, Elisa tenía
temor, mucha vergüenza de hacerse la prueba de embarazo,
por lo que ella y una de sus amigas que la acompañaba nos
pidieron que buscáramos una farmacia alejada del centro de
la ciudad.
27 Richard. M. Cantera Ríos

Así lo hicimos, cuando llegamos a la farmacia todos


tratábamos de disimular la tensión del momento y animar a
nuestros amigos, todos estábamos muy avergonzados, nadie
se animaba a preguntar a la enfermera que atendía allí.
Javier estaba nervioso, callado y no atinaba a nada,
mientras Elisa no podía controlar su ansiedad, sólo quería
tener ya los resultados, no soportaba la angustia, el miedo
se notaba en sus expresiones, uno de los amigos se ofreció y
sonrojado pregunto a la enfermera:
-¿Cuánto es el precio de un test de embarazo?-.
La enfermera lo observó con cara de sorprendida, en
su mirada parecía decirnos que éramos unos inconscientes,
seguro también preguntándose, ¿el por qué ello?, ¿el cómo
puede pasar esto en los adolescentes, en los muchachos de
hoy?, ¿el cómo unos adolescentes con cara de niños pueden
jugar a intentar ser adultos al practicar relaciones sexuales?,
¿a esta edad?, igual sorprendida le respondió.
-¡Treinta soles!-.
Javier como todo adolescente no tenía esa cantidad
de dinero, de tal manera que todos los amigos colaboramos
para el examen, pagamos y Elisa entró a su consultorio, la
enfermera le preguntó, quién era el enamorado, exigiéndole
que acompañara a Elisa.
La prueba no iba a demorar, máximo cuatro minutos
comentó la enfermera, mientras entraban al consultorio, vi
que Elisa y Javier temblaban de miedo, en realidad para
cualquier adolescente que se encuentre en esa situación, en
la impaciente espera de saber si es que van o no ser padres,
debe de ser una de las situaciones más difíciles que les toca
vivir.
28 Richard. M. Cantera Ríos

Para Javier y Elisa esa no fue la excepción, los cuatro


minutos se volvieron horas, esperando atormentados que
no aparezca la segunda línea en la prueba que al fin y al cabo
sería la confirmación de que ella estaba embarazada.
Apareció la segunda línea en el test, la enfermera
confirmó lo que ya era obvio, le dijo a Elisa con pena:
-¡Estas embarazada…..!-.
Ambos salieron apresurados, les preguntamos:
-¿Qué fue?-, -¿cuál era el resultado?-.
Javier estaba pálido, nervioso, como tartamudeando,
con los ojos brillosos aguantándose por no llorar, contestó.
-¡Está embarazada!-.
Mientras Elisa sólo lloraba sin consuelo, repitiendo
que sus padres, que su familia la iban a botar de su casa.
Lo único que pude decir fue, felicitaciones, todos les
aconsejamos que un hijo siempre será una bendición para
cualquier persona, que los hijos eran una oportunidad, una
bendición, para luchar y tener un objetivo en esta vida, que
tarde o temprano sus situaciones que son una preocupación
para ellos, se iban a convertir en felicidad en un futuro.
La verdad, ni nos escucharon lo que les hablamos, el
miedo, la preocupación por saber que su vida iba a cambiar
intempestivamente a tan temprana edad, era más fuerte,
aunque los apoyábamos, ninguno de los amigos hubiéramos
querido estar en esa situación, hasta nos atrevimos a decir
en voz baja, que bueno que no me pasó esto a mí.
Pero lamentablemente, la vida no es como pensaba
Elisa, el amor que Javier decía sentir por ella, desapareció en
un mes, como si las palabras hubieran sido escritas con tinta
invisible, invisible como esa presencia, que se desapareció
cuando ella más lo necesitaba, se fue junto con la promesa
de que estarían juntos para siempre en todos los momentos,
buenos y malos.
29 Richard. M. Cantera Ríos

Sólo quedaron en recuerdos las palabras que decían:


que pase lo que pase, siempre iban a compartir una vida y
que nunca la iba a dejar sola, las promesas sólo fueron eso,
promesas no cumplidas, palabras que jamás se convirtieron
en acciones, quedaron en una fantasía de amor para Elisa.
Javier se asustó y la dejó, tratamos de hacerlo entrar
en razón, haciéndolo reflexionar para no dejar sola a Elisa ni
a su hijo por venir, pero nos repetía que ya no la amaba, que
había sido pasión lo que había sentido por ella, que al pasar
dos meses de su embarazo, él ya no la deseaba como antes,
pues no existía nada de sentimiento por ella y que todo que
lo que un día sintieron, ya no existía; hasta se atrevió a decir
que le daba repulsión besarla y estar con ella, que la sentía
como una mujer extraña.
No saben –nos dijo-, que terror se siente despertar al
lado de una mujer que no amas, no soporto estar a su lado,
no es la mujer de la que me enamoré, ha cambiado, repitió.
En realidad si había cambiado, el embarazo le había
afectado, la hermosa figura que tenía, no existía, no podía
hacer ya la vida de fiestas, de paseos, Javier nunca entendió
esos cambios, por una sola razón, nunca la amó, sólo amó
su bella cara, su buena figura, amó el que le tengan envidia
cuando lo veían con ella y la excitación que le causaba.
Pese a nuestros consejos, la dejó, dijo a Elisa no estar
preparado para tener un hijo, que no era responsable de sus
actos, pues un hijo no estaba en su presente, menos en su
futuro, que no iba asumir ninguna responsabilidad de ello, le
increpó que ella también era muy joven para tener un hijo y
le propuso la más absurda de la propuestas, no tener al niño,
que estaban muy jóvenes para ello.
30 Richard. M. Cantera Ríos

Elisa a pesar de su equivocación, era una buena chica


inmediatamente respondió que no, que no estaba dispuesta
a abortar, si no quería ejercer la paternidad de su hijo que se
largara, que la dejara sola. Lamentablemente Javier se alejó,
la dejó con dos meses de embarazo, él viajó a otra ciudad sin
tener ningún remordimiento.
Elisa había ya había ingresado a la universidad, no era
de esta ciudad, vivía sola en un departamento, se educaba,
alimentaba y pagaba los estudios con el poco dinero que le
mandaban sus padres.
Muchas veces la animábamos que fuera donde sus
padres, que pidiera ayuda a su familia, pero siempre repetía
dándonos una negativa, cuando sus padres venían de vez en
cuando a visitarla, ella les ocultaba su embarazo fajándose el
vientre para que no la descubrieran; ya en los últimos meses
de embarazo les dijo que no vinieran a verla, inventando que
estaba demasiado ocupada con los exámenes, que no tenía
mucho tiempo para estar con ellos.
Elisa contaba que cuando venían sus padres a verla,
su vientre se notaba poco, decía que parecía que su hijo se
ocultaba, como si se arrinconara de miedo en el fondo de su
vientre, como si supiera de la pena, del sufrimiento que iba a
causarle a su madre si es que se enteraban sus padres, ella
sentía que su hijo lo ayudaba.
En la noche cuando ya estaba en su cama, su vientre
crecía más, como si su bebé supiera que estaba sola y ya no
le causaría más problemas a su madre, mientras Elisa en su
eterna soledad con los ojos húmedos, se frotaba el vientre,
esperando el día del nacimiento de su hijo para darle todo el
amor que tenía para él.
31 Richard. M. Cantera Ríos

Aquel niño pese a los sufrimientos era un bebé muy


esperado, entre llantos, soledad, tristezas de la madre, ese
hijo era la fuerza para que ella viviera, era la luz en aquella
oscuridad, la compañía en su soledad y su sonrisa para curar
sus lágrimas, a Elisa le encantaba ir al hospital sólo para ver
al niño en la ecografía y escuchaba emocionada los latidos
de su bebé, eran tan rápidos como si estuviera ansioso por
nacer, sólo eso le daba paz ,saber que su hijo estaba bien, él
le daba fuerzas para sobresalir.
Mientras pasaban los meses, la realidad se volvía más
difícil para ella, los gastos aumentaron, necesitaba trabajar,
sabía que iba a necesitar dinero para cuando nazca su bebé,
era una mujer de decisiones y no estaba dispuesta a que le
faltara nada a su hijo, por lo que presento su currículo para
un trabajo de medio tiempo.
Un día la llamaron, le dijeron que había una opción
para contratarla, pero una condición era que tenía que pasar
por una entrevista personal.
Ella se emocionó de felicidad, pero luego regresó la
preocupación, sabía que en el país, en la ciudad en que vivía,
las mujeres embarazadas y más aun si eran adolescentes, no
eran aceptadas normalmente o no eran primera opción para
un puesto de trabajo.
En realidad no se le notaba demasiado el vientre y
decidió no comentar nada de su embarazo en la entrevista,
pero tenía un problema, los vómitos y los mareos le venían
muy seguido, casi cada una hora, eso la preocupó, pero igual
tenía que tener el trabajo, lo necesitaba por lo que decidió
arriesgarse a pasar la entrevista de trabajo, la cual duraría
toda una mañana.
32 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando llegó a la empresa, temerosa antes que entre


a la oficina, acarició con ternura su vientre y le habló a su
bebé:
-¡Hijo, ayúdame!- le dijo con gran sentimiento de
pena, -¡tú sabes que necesitamos este trabajo para vivir, no
hagas que tenga vómitos, ni mareos!, -¡ayúdame, que lo que
consiga ahora es para ti, para nuestro bienestar!-
Fueron con tanto sentimiento esas palabras que le
cayeron unas lágrimas, mientras le pedía disculpas por que
lo iba a negar una vez más.
Se limpió los ojos húmedos de las lágrimas, pidió a
Dios que le ayudara una vez más, acariciándose siempre el
vientre entro a la entrevista de trabajo; la secretaria le pidió
que esperara un momento, la espera se hizo muy larga, casi
una hora, cuando por fin la llamaron para la entrevista.
Entró nerviosa, pero habló con el entrevistador con
mucha seguridad, expresándose de muy buena manera ante
sus preguntas, le habló de los objetivos que tenía en la vida,
de sus ganas de aprender, de ser mejor, que si a la empresa
le iba bien a ella también le iría bien, así que daría todo de
ella para ser productiva.
Entre la espera y la entrevista pasaron dos horas, no
hubo ni una sola sensación de vómitos, menos mareos, ni
nada con el embarazo, como si su hijo dentro de su vientre
la hubiera escuchado y entendido la necesidad de su madre.
No pasó demasiado tiempo para que la llamaran de
la empresa, ellos le comunicaron que estaban ya dispuestos
a contratarla, fue una gran noticia, Elisa se sentía feliz por un
objetivo cumplido, pero igual su felicidad no era completa,
necesitaba compañía para desahogar su soledad.
33 Richard. M. Cantera Ríos

Así pasaba el tiempo yendo a clases y a su centro de


labores, poco a poco empezó a crecerle más el vientre, en la
universidad y en su centro de trabajo, era la más cuidada, y
protegida de todas las chicas.
Tenía casi ocho meses de embarazo, después de salir
de su trabajo, como todas las noches cuando entraba en el
cuarto parecía que junto a ella llegaba de nuevo la soledad,
quería gritar a todos que necesitaba ayuda, pedir compañía
para disipar todas sus penas y lloraba sin consuelo encerrada
en esas cuatro paredes que los sentía como una celda; en su
depresión escuchaba sólo música sentimental, en especial
una canción, que hacía que sufra más y más, una y otra vez
se frotaba el vientre, hablándole a su bebé que esperaba,
prometiéndole que pase lo que pase siempre contaría con su
madre, que nunca lo iba a dejar, que lo cuidaría de todos y lo
ayudaría en todos sus problemas.
Todos los amigos nos dábamos cuenta de ello, de su
sufrimiento, de soledad, pero no podíamos apoyarla mucho,
cada uno también teníamos nuestras responsabilidades.
Hasta que llegaron los nueve meses, tuvo los dolores
de parto, averiguamos por fin el teléfono de sus padres y los
llamamos diciéndole que su hija estaba mal en el hospital,
que iba a dar a luz a su hijo.
Los padres de Elisa no podían creerlo, sorprendidos y
muy preocupados, viajaron inmediatamente, mientras ella
ya había alumbrado a un fuerte bebé, al entrar a verla vimos
que abrazaba, lloraba con su hijo entre sus brazos, era una
mezcla de alegría, de emociones y también de sentimientos,
porque si bien tenía lo mejor de su vida, su hijo, se sentía
sola, muy sola, sin nadie de sus seres queridos a su lado.
34 Richard. M. Cantera Ríos

Luego de algunas horas entró su padre, apresurado


corrió y la abrazó, mirando muy sorprendido a su hija con su
bebé, emocionado llevó entre los brazos muy tiernamente a
su nieto, abrazándola le reclamó con mucho sentimiento, el
por qué de aquel silencio, con lágrimas en los ojos le reclamó
que era su hija, que era el mejor regalo que le había ofrecido
la vida, que jamás le iba a reprochar nada, como hacerlo si lo
que tenía frente a sus ojos era un ángel, pero también lloró
de rabia al mirar que no estaba el padre de su nieto, lloró al
sentir que su hija había sido engañada.
Aunque no lo dijo, pero el ver a su hija como madre,
fue muy impactante, doloroso para él, la niña de sus ojos ya
era toda una mujer, era una madre, al final sólo atinaron a
llorar ambos, ¿cómo no entender el llanto de un hombre, de
un padre al saber que su hija había soportado nueve meses
de embarazo sola, más la rabia, el sentimiento de no haber
estado junto a su hija cuando más lo necesitaba?
Mientras que Elisa les pedía también llorando, que le
perdonaran por el error que había cometido, les dijo que les
ocultó su embarazo por el miedo de decepcionarlos porque
siempre le dieron mucho amor y confianza, aunque dándoles
a entender que no se arrepentía de tener entre sus brazos,
ese retoño, ese hermoso bebé, que iba luchar contra todos,
contra todo, por darle felicidad a su hijo.
Por fin Elisa ya tenía el apoyo de su familia, eso le dio
muchas fuerzas y motivación para enfrentar la vida con su
hijo, pero sus padres tenían una vida de trabajo, hijos que
cuidar en otra ciudad por lo que le propusieron, le exigieron
a Elisa para que vaya con ellos, con su bebé a su hogar, a su
casa donde siempre iba a ser bien recibida.
35 Richard. M. Cantera Ríos

Pero Elisa no aceptó nunca, ello implicaría tener que


dejar la universidad, quería ir con sus padres, extrañaba a su
familia, deseaba tener alguien quien le ayudara con su hijo,
pero no aceptó ir con ellos.
Estaba en la universidad, sabía que como una madre
soltera, sola, sin una profesión no iba a tener un buen futuro
para ella y su hijo, no quería sufrir, menos hacer sufrir a su
hijo en la pobreza, fue una decisión muy difícil pero decidió
quedarse a proseguir sus estudios.
Así pasó el tiempo, con muchas idas y venidas de sus
padres, con el poco tiempo para ayudar a su hija y su nieto.
Elisa siempre feliz con su bebé, con el doble esfuerzo para
estudiar y cuidar a su hijo, pero siempre en la soledad de sus
cuatro paredes.
Cierto día fuimos a visitarlos, los amigos de siempre,
un poco más maduros ya, su bebé tenía muchos rasgos de su
padre, lo mirábamos sorprendidos de lo parecido que era a
nuestro amigo.
Hay que poner algo de música dijimos, alguien puso
una canción, sonaba muy triste, de esas canciones que en su
letra expresan sentimientos de soledad, de grandes temores,
de miedos, canciones que cuando alguien está deprimido lo
único que hacen es recordar y algunas veces llorar, al sentir
que la vida no es como uno esperaba, o recordar los buenos
momentos vividos.
Mientras sonaba la canción, repentinamente el bebé
empezó llorar, sabemos que el llanto de un bebé expresa
conductas, hay un llanto para el hambre, llanto para el dolor,
hasta llanto para que lo arrullen entre los brazos, lo cierto es
que su llanto expresaba mucha tristeza y pena.
36 Richard. M. Cantera Ríos

Al escuchar Elisa llorar a su bebé salió corriendo de la


cocina, pidiendo que por favor cambiaran de canción, así lo
hicimos, mientras sorprendidos observábamos cuando Elisa
abrazaba a su bebé, llorando sin poder contenerse, con un
sentimiento de pena muy impactante, sólo lo miraba muy
tiernamente como si nadie estuviera a lado acompañándola
y como si tendrían que estar solos siempre en la vida.
La situación es que todos al ver esa escena callamos,
algunos aguantábamos las lágrimas, es muy difícil ver llorar a
una mujer, a una madre con su hijo, más cuando sientes que
sufren, le preguntamos el por qué de su llanto, que sólo era
una canción, por qué nos pidió que lo cambiáramos.
Ella intentó secarse las lágrimas que seguían rodando
por sus mejillas, dijo que cuando estaba embarazada, en su
soledad escuchaba muchas veces esa canción, que lloraba
sin consuelo abrazando muy fuerte su vientre, hablando a su
bebé, prometiéndole que no lo iba a dejar solo nunca.
Lo curioso es que cuando ella escuchaba esa canción,
en especial cuando se sentía deprimida, el bebé también lo
sentía, como si dentro del vientre sabía que su mamá sufría
y que necesitaba de él para vivir y enfrentar los problemas.
Cuando nació y escuchaba el sonido de la canción, el bebé
lloraba como si él sintiera, percibiera que su madre estaba
sufriendo una vez más, y lloraba sin parar cogiéndola con sus
pequeñas manos, como diciéndole que él en un futuro sería
la persona que lo protegería para que nunca vuelva a sufrir.
Lo cierto es que todos los niños dentro del vientre
perciben las emociones y sentimientos de la madre, que esa
conexión no sólo lo tendrá dentro del vientre sino toda la
vida.
37 Richard. M. Cantera Ríos

A partir del nacimiento de aquel hijo empezó la vida


dura de Elisa, pero gracias a sus ganas, fuerza para superar
los problemas, sabiendo que en este mundo la única forma
de lograr los objetivos no son sólo los deseos o el querer con
ganas algo, si no la acción, el esfuerzo, la motivación para no
desmayar. Terminó la carrera de Derecho y poco a poco se
ganó un lugar en el trabajo por su calidad y eficiencia.
Como dije antes, después de los sufrimientos, tocó el
momento de dicha, su vida de tristezas y llantos terminó, dio
paso a la gran felicidad, volviendo a sonreír, lo mejor, su hijo
creció feliz, disfrutando todos los momentos y etapas con él,
cuando sintió que era el momento, como toda mujer reinició
su vida con un buen hombre que trató a su hijo como suyo.
Entendió que el hecho de ser buena madre como era
ella, no significaba que dejaría de ser mujer, así que decidió
darse otra oportunidad en el amor, la vida la premió, le fue
bien, y eso fue porque al quedarse sola jamás se desesperó
por tener a una persona que no fuera su hijo.
Entendió que tarde o temprano se daría el momento
para reiniciar una relación, que pese a la edad que se tenga
jamás se debe mendigar amor. Por ello, no cometió el error
de algunas mujeres casadas o con hijos, que cuando se aleja
la persona que estuvo a su lado, se desesperan y sienten que
se les va el tiempo e intentan pareciera recuperar los años
perdidos, buscando una nueva pareja en los lugares menos
indicados, en discotecas, fiestas, borracheras. En la mayoría
de casos terminan metiendo a su hogar una persona que no
conocen muy bien, que lo único que hace es hacerle la vida
imposible, no sólo a ella, sino también a los que más aman
que son sus hijos.
38 Richard. M. Cantera Ríos
39 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO III – EL VERDADERO AMOR

Elisa Tenía una prima, ella se llamaba Nova, aunque


se encontraban muy lejos la una de la otra, paralelamente
por diversas circunstancias de vida ambas tendrían un futuro
muy similar, tratando siempre de encontrar la felicidad que
tanto se anhela.
Esta es la historia de la vida de Nova y Layon, ambos
muy buenas personas, siempre en busca de la superación.
Por un lado, Nova era una chica muy responsable,
con muy buenos sentimientos, de carácter muy noble, con
una estatura de 1. 69, de tez blanca, cabello rubio, dueña de
unos hermosos ojos azules, muy responsable, dedicada por
completo al estudio para lograr sus metas, mientras Layon
era un muchacho de pelo negro ondulado, tez blanca, buena
presencia, de 1,73 aproximadamente.
Cada quien por su lado, estudiaron y se prepararon
para postular a una Universidad nacional, gracias a su gran
dedicación lograron alcanzar una vacante, cumpliendo con
felicidad uno de sus primeros objetivos planificados.
Como todos los jóvenes, Layon estaba emocionado,
muy contento de entrar al nuevo mundo de la Universidad,
objetivo por lo que tanto se había esforzado, claro también
ilusionado por conocer nueva gente, nuevas amigas y sobre
todo feliz de empezar a estudiar una carrera profesional que
le iba a permitir tener un mejor futuro.
Una noche antes de su primera clase se preparó muy
bien, separando su mejor ropa, para él la primera impresión
ante las demás personas valía mucho, por lo que el primer
día de clases tenía que destacar del resto.
40 Richard. M. Cantera Ríos

Al siguiente día se levantó muy temprano, se cambió


y muy emocionado se dirigió a la Universidad, al entrar como
siempre eligió la carpeta del centro del aula para sentarse, él
era así, se ubicaba allí para entender mejor lo que hablaba el
profesor en clase, también, para no perderse los chistes muy
buenos que circulaban al fondo del aula, mientras esperaba
llegaban uno a uno los nuevos compañeros y compañeras,
desde su sitio en el centro observaba minuciosamente a las
personas que entraban, estaba muy contento de estar allí.
Mientras revisaba sus libros de estudio, sintió como
si en su sexto sentido percibiera algo que iba a hacer que su
vida cambie para siempre, como si una voz en su conciencia,
le dijera, mira hacia atrás, así lo hizo, al mirar vio anonadado
la mujer más linda que había visto en su vida, el nunca pensó
que existía el amor a primera vista, pero ese día se enamoró
en un instante, sintió que había llegado el verdadero amor a
su corazón, esa mujer era preciosa, con unos grandes ojos
azules y su cabello rubio ondulado que lentamente se movía
de un lado para el otro, con una figura espectacular, sólo la
miró y desapareció todo lo que le rodeaba, fue como si todo
se quedara oscuro y solamente la figura, la cara de esa chica
resplandecía.
Allí sintió que esa mujer sería la luz que iluminaría su
vida, Layon estaba inhibido, enmudecido, se dijo así mismo,
quiero que sea mi enamorada, es más, se dijo, va hacer mi
mujer, mi esposa, la persona con la que debo compartir toda
una vida; para Layon esa no fue sólo una emoción menos un
gusto, al verla por primera vez sintió que estaba en verdad
enamorado, aunque quiso atender la clase sólo aparecía su
hermosa sonrisa en su mente.
41 Richard. M. Cantera Ríos

Como todo hombre cuando se enamora de una mujer


decidió conquistarla, pero sabía que iba hacer muy difícil, no
era la única persona que quería estar de pareja con ella, si se
apresuraba o la presionaba demasiado, ella se daría cuenta
de su ansiedad de amor y podría alejarse, él no iba a permitir
eso, no quería ahuyentarla, era su verdadero amor y lo que
más quieres nunca se deja ir, se dijo.
Intentó acercarse a ella, esperando una mirada o una
sonrisa, pero nada pasaba; Nova estaba concentrada en sus
estudios; por un momento se consoló con la frase “lo bueno
se hace esperar”, en su desesperación por conquistarla puso
en práctica una serie de tácticas de enamoramiento.
Primera táctica para enamorar a una mujer que es difícil de
conquistar, se dijo; vuélvete amigo de su mejor amiga, así lo
hizo, Nova tenía una amiga llamada Leya, entre bromas, se
volvió amigo de ella, así mientras conversaban de uno y otro
tema le preguntó.
-¿Tu amiga Nova tiene pareja?- Leya lo miró con cara
de sorpresa respondiéndole.
-Tú también, no me digas que te gusta Nova, elegiste
mal amigo- respondió.
-Hay muchos que quieren tenerla como enamorada,
pero ella no desea ninguna relación con nadie-.
-No digas eso-, dijo Layon, -no busco aprovecharme
de ella, ni tampoco la quiero por su cara bonita, menos para
mostrarla como una modelo o premio, me gusta de verdad,
se que ella sería feliz conmigo, ayúdame a compartir una
vida de amor y respeto con ella-.
Leya al ver su emoción al hablar de Nova y sentir la
sinceridad en aquellas palabras le respondió.
42 Richard. M. Cantera Ríos

-Te voy ayudar, pero con una condición, primero voy


a preguntarle discretamente si es que tú en verdad le gustas
como ella a ti, si es así no hay problema, Nova es una buena
chica, se merece lo mejor.
Llegó el siguiente día y Layon apresurado abordó a
Leya.
-¿Ya le preguntaste? ¡Qué fué, que te habló, vamos
suéltalo!.
Leya contestó:
-Todavía no, sonriéndose de la desesperación de él,
me he olvidado.
-Apresúrate el tiempo es oro -le dijo Layon-,-mientras
más demoras es menos tiempo de su felicidad conmigo,- dijo
sonriendo.
Pasaron varios días, Layon seguía molestando por la
respuesta, hasta que un día Leya preguntó a Nova:
-Amiga -le dijo-, -hay alguien de los compañeros que
te atraiga como pareja.
-Ella –respondió-, no inmediatamente.
Más bien -replicó-
-¿Por qué me preguntas eso?.
-Por nada -respondió Leya-
-Sólo que hay compañeros simpáticos en la clase, por
ejemplo, si miras hacia atrás del aula, en la mitad de la fila,
está Layon, que te parece, ¿te agrada?.
Ella giró la cabeza para mirarlo, mientras que Layon
como si sintiera que estaban hablando de él, puso la mejor
cara, con una gran sonrisa, como quien diciéndole, mírame
soy simpático, soy yo, soy el amor de tu vida; Nova al mirarlo
brevemente respondió a Leya, con un contundente:
43 Richard. M. Cantera Ríos

-No amiga, no me agrada para nada, además mi idea


es estudiar, nada más, un hombre no es primordial, por hoy
en mi vida, no está en mis planes enamorarme, además ellos
son palabras, promesas y sus acciones no son lo que dicen,
no deseo malograrme la vida con nadie.
-Por qué me preguntaste si me gustaba.
-No, por nada amiga, sólo quería saber si te agradaba
alguien de los compañeros -respondió Leya-.
Terminó la clase y Layon apresurado corrió hacia Leya
preguntándole:
-¡Haber dime, que fue! -sin palabreo, ni adorno Leya
respondió.
-No, dice que no le gustas para nada, así que búscate
otra chica Layon, no hay amor, no existe el amor si no eres
correspondido olvídate de ella.
Para Layon no era la respuesta esperada, estaba ya
muy enamorado de Nova, no iba a rendirse tan fácilmente,
aunque quería ya tenerla entre sus brazos sabía que intentar
conquistarla muy rápido sería rechazado.
Allí, supo que era el momento de poner la pausa en
el amor e intentaría lentamente enamorarla, poco a poco,
para al final hacerla parte de su vida para siempre.
Hora de aplicar la segunda táctica para enamorar se
dijo a sí mismo, si no puedes con el enemigo, únete a él,
decidió convertirse en el mejor amigo de Nova, si lograba
ello, allí en esa amistad lo conocería mejor, se daría cuenta
que era el hombre ideal para ella y se enamoraría, no perdió
más tiempo y al siguiente día empezó a poner en práctica
sus planes.
44 Richard. M. Cantera Ríos

Fue muy temprano a la Universidad, la idea era ganar


sitio para sentarse en primera fila del aula, por supuesto, al
lado de Nova, ella llegó un poco más tarde, percatándose
que Layon se había sentado en la carpeta que estaba al lado
suyo, para ella él era un desconocido por lo que no tomó
importancia a su presencia, dedicándose exclusivamente a
escuchar la clase.
Por su parte Layon ni se inmutó, ni la miró, como si la
que estaba a su lado fuera cualquier chica, como si no le
interesara hablarle, sólo miraba con demasiada atención a la
pizarra, fingiendo estar atendiendo muy interesado en lo
que explicaba el profesor, aunque la verdad su mente estaba
pensando en la hermosa mujer que tenía a lado, él quería
hablarle, mirar sus azules ojos, pero se detenía, sabía que a
las mujeres bellas no les gusta que las presionen demasiado
y si sienten ello se alejaban, no quería que huyera antes que
conozca sus buenas intenciones con ella, su forma de ser, su
personalidad, no deseaba que se aleje sin que se enamore
de él.
Pasaron tres días, Layon siempre estaba atento a las
clases, la verdad es que muy pocas veces en su vida lo había
hecho con tanta dedicación, estaba esforzándose al máximo
para ocupar los primeros puestos, jamás en todos sus años
académicos se había desvelado por estudiar y menos, cursos
de números, pero así lo hizo.
Layon aprendía todo lo que el profesor explicaba, es
más se adelantaba a los temas, en las clases participaba casi
todos los días saliendo a la pizarra a desarrollar los ejercicios
como si fuera un experto en la materia.
45 Richard. M. Cantera Ríos

Nova, no sólo estaba sorprendida por Layon, por su


muy buen desarrollo académico, sino también porque todo
hombre que estaba cerca a ella, la molestaba o intentaba
enamorar, pero le incomodó que para el tipo que se sentaba
a su lado fuera como una mujer invisible, mientras Layon se
daba cuenta que poco a poco ya fijaba la atención de Nova.
Un día en clase el profesor propuso un problema muy
complicado de números, Layon lo desarrolló muy rápido, al
ver que Nova tenía dificultad para resolverlo, casi sin pedir
permiso cogió su cuaderno,
-¿Puedo?-, -esto es así, de esta manera es más fácil
resolverlo.
Nova sorprendida dijo.
-Qué fácil, no lo habría visto de esta manera, gracias
amigo, ¿cómo te llamas? -pregunto ella-.
-Layon –respondió-, preguntando a la misma vez el
nombre de ella, como si no la conocía.
Curiosa pregunta, él sabía de memoria su nombre, y
apellidos, pero se alegró por qué sintió que su plan estaba
en muy buena dirección, después de decirle, un gusto, miró
al profesor y prosiguió escuchando la clase como a quien le
interesara más la lección.
Allí nada, más el profesor dio un trabajo grupal, por
lo que Nova preguntó a Layon.
-¿Amigo hacemos el trabajo?
El aceptó de inmediato, fueron a la biblioteca pero no
les alcanzó el tiempo, por lo que Nova ofreció su casa para
terminarlo, allí fueron ambos, mientras trabajaban entraron
sus padres, Nova les presentó a Layon como su compañero,
éste saludó a los padres con mucha caballerosidad.
46 Richard. M. Cantera Ríos

-Un gusto conocerlos señores, felicitaciones tienen


una gran hija, muy educada y sencilla -les dijo.
Mientras realizaban su trabajo de la universidad, el
padre de Nova empezó realizar conexiones algo complicadas
y no podía hacerlo solo, por lo que Layon inmediatamente se
ofreció ayudarle, a lo que el señor agradecía el detalle, esa
caballerosidad de Layon agradó aun más a Nova, mientras él
alucinaba que tenía a la familia en el bolsillo.
Pasó el tiempo, cuatro largos meses para Layon, ya
había cumplido su primer y difícil objetivo en el camino por
enamorarla, de a pocos se convirtió en el mejor amigo de
Nova, ella también entró mucho más en su vida, ya conocía a
los padres de Layon, también dio una buena impresión, eso
no era difícil; era una buena chica.
A partir de allí, todas las cosas, actividades lo hacían
juntos, compartían casi todo, a parte de los trabajos de la
Universidad, iban y salían de las fiestas, siempre juntos, a
veces cuando Nova le cogía la mano esta empezaba a sudar
sin control, aunque sentía nervios incontrolables, ello era un
adelanto de felicidad, de ese amor tan esperado, en algunas
ocasiones mientras descansaban sentados en los jardines, él
la abrazaba por un momento, jugueteando con sus rubios
cabellos, la molestaba con un beso en la mejilla diciéndole lo
preciosa que era, ella lo permitía sonriendo.
Pasaban los meses, Layon tenía a Nova allí, siempre a
su lado, no obstante era sólo como amiga, al estar a su lado
se sentía feliz, aunque sea por un instante, pero cuando se
despedía, para Layon empezaba la tristeza, él nunca la veía
como amiga, jamás la vio como una mejor amiga, sólo quería
abrazarla, besarla, decirle que la amaba.
47 Richard. M. Cantera Ríos

Por momentos sólo la miraba cuando ella hablaba,


todo lo que ella opinaba le parecía interesante, cada día que
pasaba se enamoraba cada vez más de Nova, estando solo
caminaba como un sonámbulo, con la mirada hipnotizada,
pensando, soñando despierto con ella, con su compañía.
Una noche Nova, mientras charlaban y le contaba de
situaciones tristes que vivía a veces, como siempre Layon la
animaba, le decía que tenga paciencia, que se tranquilizara,
que ponga pausa para pensar, reflexionar y tomar decisiones
correctas, que no se preocupe, que nada dura para siempre,
los problemas pasan, que no haga caso a las personas, a las
situaciones que le hacían daño, que no estaba sola, que si
ella le permitía, siempre iba estar a su lado para ayudarla.
-Gracias de todo corazón Layon, -respondió con un
mensaje-, gracias Layon por permitirme estar junto a ti, eres
una buena persona, como quisiera tenerte a mi lado, recibir
un fuerte abrazo tuyo, te extraño mucho, -agregó Nova.
Layon al leer los mensajes, se emocionó otra vez, sus
ojos sólo resaltaron la palabra te extraño, esa simple palabra
para otros, pero muy significativa para él, gritó.
-¡Me extraña!.
Saltó emocionado de alegría, él sabía que cuando una
persona extraña a otra es porque ya existe un sentimiento,
entendió que algo le estaba pasando, no únicamente en la
mente, también en el corazón de Nova, Layon pensaba que
el primer paso del amor, es el extrañar, no obstante la razón
le decía que el extrañar podía significar dos cosas: una forma
de engrandecer más la amistad entre ellos o que ella se esté
enamorando de él. Mientras intrigado leía un libro ¿cuáles
son los pasos en el peldaño del amor?.
48 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO IV - PASOS EN EL PELDAÑO DEL SENTIMIENTO

Seguramente te preguntarás, ¿cómo saber cuando


estás enamorado(a)?; no es difícil descubrirlo, el amor es un
proceso continuo, y como todo en la vida hay pasos para
llegar a alcanzarlo, cuando es correspondido, es como subir
las escaleras hacia la felicidad, y en la decepción o desamor,
es como si cayeras de una cima a un vacío, que en algunos
casos no hay cuando encuentres un suelo donde llegar.
En esa escalera de ascenso al amor verdadero, en el
primer peldaño se encuentran el gusto, la admiración por
sus virtudes, por los valores, el agrado por la compañía de
una persona, porque no decirlo también, la atracción hacia
alguien.
Es normal reír por situaciones, por esos momentos
de felicidad que nos ofrece el día a día, pero si sonríes de
improviso, sin querer al recordar a alguien en especial, si
tan sólo su presencia fuera la motivación que hace que tus
labios arranquen una sonrisa de felicidad o si sientes que tu
mundo es únicamente alegría al lado de esa persona que te
está acompañando, bienvenido estás en el segundo peldaño
del amor.
El tercer peldaño, a mi parecer, es el más importante,
se llama comunicación, entendimiento, existe cuando hay
una buena e interesante conversación, es cuando puedes
charlar horas y horas con una persona sin cansarte de lo que
habla, sin darte cuenta que pasa el tiempo, se da cuando
caminas feliz esperando que las calles se hagan más largas
hacia el camino de su casa para disfrutar más de la charla, de
esa muy buena compañía.
49 Richard. M. Cantera Ríos

Si en cada lugar o momentos bellos que vives, sientes


que falta alguien para llenar ese vacío y aparece esa persona
en tu mente para hacerte feliz, si te sientas a pensar en ella
o él, así estés divirtiéndote en el mejor lugar del mundo.
Es porque la extrañas, si estando en un lugar donde
hay mucha gente que te acompaña, pero aun así te sientes
solo cuando no está aquella persona a tu lado y piensas en
él o ella, preguntándote dónde estará en ese momento, o si
sientes que su presencia es suficiente para llenar tu mundo.
Si eso te ocurre, bienvenido al cuarto peldaño, que
es el más cercano del verdadero amor.
Aunque ello puede significar también que puede ser
tu mejor amiga(o), en la gran mayoría de casos, si extrañas a
alguien, es el inicio de un sentimiento de pareja.
Quinto peldaño del amor, el sentimiento, si pasaste
los peldaños anteriores, el sentimiento de amor verdadero
hará que el espacio entre amigos disminuya por inercia, te
reirás sin querer con sus chistes por más absurdos que sean,
seguramente no te negarás jamás ante el pedido de ir a un
lugar, al contrario disfrutarás de su compañía, ansioso(a) de
que puedan salir otro día para compartir.
Cuando hay sentimiento quieres protegerla siempre,
poco a poco sin darte cuenta empiezas a ceder en algunas
situaciones, dejas algunas cosas importantes para ti en la
rutina diaria o realizas cosas que no hacías normalmente
para agradar a una persona, todo con la intención de hacerla
sentir bien, todo lo vez romanticismo, sin darte cuenta te
vuelves más débil de sentimientos, estás perdiendo la razón,
cediendo, ganando cada vez más el corazón, bienvenido(a)
ya estás enamorado(a).
50 Richard. M. Cantera Ríos

Sexto peldaño en el amor, la declaración, como ya


experimentas sentimiento, ahora te queda expresar el amor.
Muchas personas sintieron todos los pasos anteriores, pero
nunca lo expresaron y al final de los años, siempre les quedó
en la mente las palabras, “pudo haber sido pero nunca fue”;
cuando sientas que esa es la pareja de tu vida, exprésalo, si
no puedes decir lo que sientes para que sentirlo entonces.
Tienes que tener en cuenta que, antes de pensar en
la declaración de tus sentimientos, hay que meditar en todos
los peldaños anteriores de amor, todos ellos deben sentirlo
ambos, los dos, nunca solamente uno, si no, no es amor, es
obsesión por tener algo que no puedes alcanzar.
Séptimo peldaño del amor, acciones y no palabras,
aunque ya hay sentimiento, cuando dos personas se inician
recién como pareja, no todavía hay amor, si hay cariño, pero
el amor va acrecentándose a medida que pasa el tiempo.
Como se agradan, se gustan, ríen, se extrañan, existe
cariño, empiezan a quererse, pero no a amarse.
El amor siempre empieza con las acciones, nunca con
palabras, si es que hay gran respeto y acciones, más rápido
crecerá el sentimiento, a más detalles y situaciones vividas,
más la recordarás.
Acciones, es situar a la pareja antes que uno mismo,
es estar a su lado cuando se necesitan, es dejar situaciones o
hábitos negativos para demostrarle tu amor, es acompañar a
tu pareja a situaciones algo incomodas o cansadas para ti, es
llamarla todos los días, no por obligación, si no por escuchar
su voz, es mandar mensajes, dedicarle canciones románticas,
pero de corazón; estas acciones hacen que dos personas se
amen cada vez más.
51 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando pases todos esos peldaños de amor te darás


cuenta que has encontrado el verdadero amor, que durará
para toda la vida, pues cada momento que compartas con la
persona, será el momento más especial que puedes tener y
el primer deseo antes de ir a dormir será de bienestar para
ella (él) y tu primer pensamiento al despertar será de alegría.
Pero enamorarse nunca significa perder la razón, al
contrario, la razón, la reflexión, hará que utilices tus valores
para demostrar tu cariño a esa persona que amas; valores
como el respeto, fidelidad, solidaridad, bondad, fe, verdad,
humildad, responsabilidad, harán que el amor que existe en
una pareja se incremente día a día y por más problemas que
tengan, serán en un futuro un matrimonio muy sólido en el
cual ningún problema por más fuerte que sea, nunca podrá
destruirlo, menos separarlo.
La razón permitirá que jamás cedas ante situaciones
de condicionamientos o presiones ante alguien que te pide
demostrar tu amor por algo a cambio, argumentando una
recompensa por la expresión de sus sentimientos.
La razón te hará entender, que los hombres nunca
somos unas billeteras para satisfacer los gustos materiales
de las mujeres o para ser elegidos solamente por la situación
económica que se pueda tener, la razón te hará entender
como varón que no hay que sucumbir jamás en el concepto
retrogrado de caballerosidad, intentando gastar en nombre
del amor el dinero que no se tiene sólo por verlas felices.
Ojalá reflexionen y entiendan que los hombres no deben ser
aceptados por una pareja por cuan llena está su billetera y
tampoco las mujeres deben ser usadas como un juguete o
un objeto para satisfacer necesidades sexuales.
52 Richard. M. Cantera Ríos
53 Richard. M. Cantera Ríos

-Al terminar de leer los pasos del amor, -se dijo sonriendo-
me falta mucho, porque la razón ya la perdí, pero igual se
emocionó.
Ya habían pasado cuatro meses, y empezó a preparar
palabras románticas, frases poéticas de amor para declararle
su sentimiento.
Practicó como expresarle su cariño durante muchas
horas, aprendiéndolas de memoria, él no estaba dispuesto a
dejar pasar la oportunidad de decir a Nova que quería tener
una relación de amor para siempre con ella, no durmió esa
noche, la impaciencia, la larga espera para expresar lo que
sentía, hacían que las horas fueran más largas.
Después de muchas horas, por fin la luna se ocultó,
dando paso a un amanecer donde el sol brillaba, sentía que
esa luz iba a iluminar la oscuridad de su mente para expresar
sus palabras de amor. Toda la tarde tuvo en frente a Nova,
en clase, en la biblioteca, paseando por la Universidad, cada
vez que intentaba declarar sus sentimientos, algo o alguien
lo interrumpía.
Ya en la noche mientras caminaban juntos, al mirar
su hermoso rostro, con esos ojos azules como el cielo, que
no paraba de admirar, sintió que era el momento propicio
para expresarle su amor, proponiéndole que se sentaran un
momento.
Nova aceptó, mientras ella no paraba de hablar como
siempre, Layon cogió su mano, le dijo que quería decirle algo
muy personal, ella calló para escucharlo, en realidad nunca
se imaginó el sentimiento de amor que pasaba por la cabeza
de Layon, ella lo veía como un buen amigo, lo quería como
un mejor amigo.
54 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando se está enamorado con un sentimiento real,


es muy complicado expresar lo que quiere decir el corazón,
aún así volvió a repetir:
-Deseo conversar contigo Nova, algo muy íntimo para
mí, muy personal.
Mirando fijamente con una dulce voz, ella preguntó:
-¿Dime qué pasa Layon? -mientras le cogía la mano-.
Layon estaba temblando por la emoción, sudaba, sus
palabras se entrecortaban, mientras ello intentaba expresar
de sus labios un quiero decirte que…
Al mirar una vez más sus hermosos ojos, sentía que
esa mirada penetraba en su mente, quitando esa máscara,
ese caparazón de mejores amigos, mientras ello su corazón
palpitaba fuertemente cual una máquina que aceleraba para
darle más fuerzas.
No pudo expresar nada, los nervios y el miedo de una
respuesta negativa, hizo que su mente prefiriera quedarse
en un amorío oculto, antes que perder la amistad y alejarse
de ella; bajó la cabeza y dijo la excusa más tonta que le pudo
salir:
-Quiero decirte que………nada, ya olvídalo, no es nada
de importancia.
Ella sonriendo respondió:
-Que bueno.
Eso si recalcándole que todo lo que le pasaba a él era
importante para ella; en la mente de Nova no pasaba nada
en esos momentos, pero muy al contrario, para Layon era
una tortura tener a lado al amor de toda su vida, sin poder
expresarlo, se pararon y caminaron juntos dirigiéndose a su
casa, sólo entre conversación de amigos.
55 Richard. M. Cantera Ríos

Layon estaba muy enojado consigo mismo, esa noche


tampoco pudo descansar, sintiéndose un cobarde que tiene
miedo a ser rechazado, al siguiente día fue igual, pasaron
tres días y no tenía la valentía suficiente para expresar, para
decirle, cuanto la quería en secreto desde que la conoció, de
decirle, cuanto la amaba y cuanto estaría dispuesto a luchar
por su amor.
Una noche no aguantó el peso enorme de sacar de su
corazón, de su mente, esas palabras de amor, por lo que se
prometió, se dijo así mismo.
-¡Si no puedes expresar lo que sientes a esa persona
especial, para que sentirlo entonces!, haciéndose la promesa
de que al siguiente día iba decirle todo lo que sentía
Layon se levantó temprano, fue muy emocionado a la
Universidad, él estaba dispuesto a todo, no le importaba una
respuesta negativa de su amor, las ganas de saber, de tener
una respuesta para dar el paso adelante hizo que perdiera el
miedo, solamente quería verla y sacar de una vez por todo lo
que tenía guardado en su corazón.
Cuando entró a la universidad, apresurado a buscar a
Nova, escuchó una dulce voz que lo llamaba, se dio la vuelta,
era Nova, sorprendido casi sin poder creerlo vio que Nova
estaba feliz agarrada de la mano con alguien, ella apresurada
seguía llamándolo, ansiosa, con esa suave voz que él amaba,
pero que en ese momento le destrozaba el corazón le dijo:
-Te presento a mi pareja.
Para Layon fue una impresión muy difícil de asumir,
respondió:
-Felicitaciones Nova, -mientras los miraba cogidos de
la mano-.
56 Richard. M. Cantera Ríos

Únicamente quería escapar, pensaba en salir de allí


para no sentir más el dolor por la decepción, inventando que
lo llamaban de urgencia, se retiró con un, luego te veo, fue
muy complicado asumir que Nova tenía otra persona.
Layon abatido, invadido por la tristeza, sólo atino a
caminar, ello le daba tranquilidad para pensar, se recriminó
por no haberle expresado a tiempo su amor, pero no podía
hacer ya nada, ella ya tenía una pareja; sólo imaginaba en
ese momento que Nova estaba a su lado y que reía junto a
él, amaba de verdad a Nova.
Al siguiente día, decidió alejarse de ella, ya no podía
estar a su lado, ni como mejor amigo; no soportaba ver a la
mujer que esperó toda su vida con otra persona que no era
él, menos compartir momentos donde estuvieran los tres.
-Él, como mejor amigo, viendo a Nova con otro, no
eso no iba a pasar, -se dijo-.
En la universidad regresó a la misma rutina de antes,
en el aula, volvió a sentarse en la carpeta del centro, donde
él pertenecía, de donde nunca se hubiera ido, se decía, lugar
en el que todos los días seguía admirando a su amor Nova,
con tristeza porque sabía que no era para él.
Nova lo llamaba a menudo para hacer los trabajos de
la Universidad, Layon siempre respondía con una negativa,
aduciendo que ya tenía grupo, igual, ella lo llamaba todos los
días para saber de él, Layon inventaba que no tenía tiempo,
que estaba ocupado, poco a poco se alejó de ella, mientras
Nova también ya daba más tiempo a su pareja.
Pasaron tres meses, para Layon fueron muy largos y
difíciles, intentaba olvidarla, pero no sabía cómo sacarla de
su corazón, de su mente.
57 Richard. M. Cantera Ríos

Intentó hacer muchas cosas para copar su tiempo,


llevó varios cursos en la Universidad, buscó un trabajo de
medio tiempo para mantener ocupada su mente, mientras
trabajaba la olvidaba por unos momentos, pero al regresar a
casa, a su cuarto regresaba a la tristeza, a la añoranza.
Deseaba ya olvidarla, pero no lo lograba, sentía que
cada vez que observaba a Nova con su pareja, su corazón se
destrozaba, pero sabía que no podía hacer nada, ella tenía
quien la haga reír, quien la proteja.
Pasaron casi tres meses, alguna vez hablaron, ella le
confesó que estaba muy enamorada, que era muy feliz con
su pareja, Layon la felicitó, pese a todo la amaba y quería su
felicidad aunque él estuviera sin ella.
Cierta noche Nova y su pareja salieron a una fiesta
para divertirse, entre bailes y risas la estaban pasando muy
bien, su enamorado le demostraba a cada momento su amor
abrazándola, besándola tiernamente.
En ese momento, mientras se divertían Nova sentía
que había encontrado el amor que había esperado, apareció
de improviso una chica, quien muy ofuscada jaló del brazo a
Nova, gritándole:
-¡Perdida que haces con mi enamorado!.
Nova no supo qué hacer, ni decir, nunca en su vida
había estado en esa situación, lo peor de todo es que todas
las miradas de la gente que estaban presentes en la fiesta se
dirigieron hacia ella, se sintió muy avergonzada, sorprendida
preguntó gritándole a Michael:
-¡Quién es ella!
El enamorado de Nova sin pesarlo, ni remordimiento,
respondió.
58 Richard. M. Cantera Ríos

-Ella mi enamorada, es la persona que quiero, que


siempre quise, lo siento pero fue una equivocación tenerte
como pareja, por más que intenté olvidarla contigo, nunca
dejé de pensar en ella.
Nova con mucha rabia le arrojó el vaso descartable
con refresco y todo en la cara, saliendo muy rápido del lugar
decepcionada, llorando de la ira.
Tal vez esperando que la persona a la que le entregó
todo su amor la siguiera, para intentar darle una explicación,
pero ello nunca sucedió.
Se sentía humillada, sentía que se había equivocado,
siendo engañada en el amor una vez más, por una persona
que muchas veces le había prometido un amor en fidelidad,
le cayeron lágrimas de decepción porque había puesto todo
su amor, su confianza en esa relación, sin recibir nada, se
recriminó a sí misma por haber confiado y permitido entrar
en su corazón a una persona que no merecía nada, sólo su
desprecio.
Estaba claro que la personalidad de Nova era muy
sensible y sentimental, todas las situaciones difíciles de la
vida siempre terminaban marcándola.
Lo peor de todo es que cada, situación negativa que
le sucedía no podía olvidarlo tan fácilmente como los demás,
eso provocaba que todos los problemas para ella le fueran
difíciles de superar, sumiéndola algunas ocasiones en una
profunda depresión, alejándose del resto, encerrándose en
un mundo de problemas que para ella no tenían solución,
viviendo en un círculo al cual no dejaría entrar a nadie para
vivir en soledad, pensando equivocadamente en que estaba
sola en el mundo y que nadie la quería.
59 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO V – LOS CAMINOS DE SOLEDAD

De tanto caminar, cansada, se sentó en la banca de


una plazuela, lo que hizo es llamar a la única persona que
siempre iba apoyarla, que siempre estaba a su lado, a Layon;
eran las doce de la noche, él estaba en su cama, tampoco
podía dormir, sentía, presentía que algo le pasaba a Nova.
Cuando sentía que Nova estaba en problemas o tal
vez sufriendo la soñaba, a veces tenía esa extraña sensación,
ese presentimiento que algo le pasaba, ello no solamente le
ocurría a Layon si no también a Nova, era como si tuvieran
una conexión sin explicación.
Cuando pasaba ello él quería llamarla, preguntarle
como estaba, en verdad la extrañaba mucho, pero no iba a
meterse en esa relación, pensaba, sabía que ella estaba bien
y cuando se ama de verdad hay veces en las que se tiene que
dar el paso atrás para dejar ser feliz a la otra persona.
Mientras pensaba en ella, sonó el celular, era Nova,
se escuchaba acongojada, llorando.
-Por favor Layon, ayúdame, te necesito, ya no puedo
más, -le dijo-.
Layon preocupado, le preguntó:
-¿Dónde estás?.
Y salió corriendo a brindarle su apoyo; al llegar, la
encontró llorando, la abrazó, ella le contó decepcionada sin
poder calmarse lo que le había pasado, Layon la escuchó sin
recriminarle nada, sólo la escuchó, no soportaba verla llorar,
al abrazarla se prometió hacerla olvidar y verla feliz de
nuevo, estaba dispuesto a dar todo de él por ayudarla, para
volver a sacar esa bella sonrisa en su rostro.
60 Richard. M. Cantera Ríos

A partir de esa noche, todos los días, mientras ella


sufría por el dolor de amor que tenía, Layon la ayudaba, fue
el hombro en el cual se apoyó, habían días en los que Nova
lloraba sin consuelo, sentía que ya no daba su corazón, todo
por un amor fracasado.
Mientras Layon también sufría porque que sabía que
ella extrañaba, lloraba por otra persona; quería huir, alejarse
de ella, no soportaba verla llorar de amor por alguien que no
era él, pero luego reflexionaba y se decía:
Que no iba a renunciar a la mujer de su vida, sabía
que ella era para él, que habían nacido para estar juntos,
que estaban hechos el uno para el otro, pero en realidad ella
aún todavía no se daba cuenta de ello, agarraba fuerzas y
nuevamente acompañaba a Nova.
Cuando la sentía triste hacía muchas locuras para
robarle una sonrisa, la sacaba de su mundo de soledad, la
llamaba a cada momento cuando no estaba con ella, muchas
veces Nova no quería salir, pero igual insistía y la llevaba a
pasear, a cenar.
Algunas veces la miraba y la abrazaba muy fuerte,
como queriéndole entregar su energías, su voluntad para
seguir luchando; en realidad ambos sufrían, Layon al verla
llorar y Nova por no poder olvidar, de alguna manera estar
juntos les ayudaba a ambos, sentían mucha paz al estar
unidos y compartir sus penas.
Pero la vida prosigue para todos, las nubes negras en
el mundo de Nova se disiparon, nuevamente salió el sol en
su vida, olvidó poco a poco a la persona que le hizo mucho
daño, sintiendo la paz que tanto esperaba.
61 Richard. M. Cantera Ríos

Después de un duelo de seis meses, Layon sintió que


Nova estaba lista para vivir de nuevo un romance y volver a
confiar en el amor, en la palabra de un hombre, él sabía que
la única forma era con hechos, acciones, no con promesas ni
detalles, estaba dispuesto a todo por hacer que ella vuelva a
confiar. Aunque le dolió que ella haya sufrido por un tonto
amor, en el fondo se sentía feliz, pues estaba de nuevo libre,
lista para volver amar y vivir un amor puro, verdadero con él.
Una noche mientras se enviaban los mensajes diarios
e interminables por el celular, Nova le envió un mensaje
corto pero significativamente afectivo para él, decía:
-Gracias Layon por todo, gracias de verdad, por ser
parte de mi vida, por permitirme estar a tu lado, sin ti, sin tu
compañía mi vida nunca sería la misma y me ahogaría en mi
soledad, eres la persona más tierna, buena que he conocido,
quiero que sepas que por siempre voy estar a tu lado, no lo
olvides, te quiero mucho, estás en mi mente y corazón.
Al leer ese mensaje, Layon emocionado no supo qué
hacer, si gritar de felicidad o si responderle diciendo que la
amaba y que le diera una oportunidad.
Lo que pasa es que en su ilusión afectiva, se dijo así
mismo que ya estaba listo el cuarto paso del amor: el cariño;
ya no solamente tenía las risas, también tenía el segundo, la
conversación interesante; él pensaba que el amor no es sólo
un gran sentimiento puro, pues también era una muy buena
conversación, diálogo, en la que dos personas no se quieran
despedir, ni que el tiempo pase muy rápido; se decía que el
amor también es reír, reír sin parar como locos, que el amor
es mucho respeto, en el cual ambos piensen en el bienestar
del otro.
62 Richard. M. Cantera Ríos

Para Layon era obvio que ambos sentían todo eso;


también tenía el tercer paso del amor que era el extrañar,
estaba seguro que ambos cuando no se veían se extrañaban
demasiado, cuando sintió que ya tenía el cariño, que era el
paso más cercano al amor, se emocionó de alegría.
Pensó en que ya no iba esperar más, estaba decidido
nuevamente a declarar su amor a Nova, nada ni nadie lo iba
a detener, esta vez ya no tendría ningún temor a expresar
todos sus sentimientos, sabía que él era la única persona
que podía llenar su vida de felicidad.
Nuevamente fue a la Universidad, esta vez decidido a
todo; el amor hacía que su corazón latiera cada vez más
fuerte al sentir que iba a expresar su sentimiento, preguntó
dónde estaba Nova, los amigos le respondieron en el aula,
entró apresurado al salón de clase, gritando:
-Nova tengo que decirte algo muy importante.
Pero se enmudeció de repente mirándola, ella estaba
besándose emotivamente con alguien, esta vez se quedó
quieto cual una estatua, no pudo correr como la primera vez
de la impresión, eso hizo que Nova lo cogiera de la mano.
-Layon te presento a mi enamorado, al amor de de mi
vida -le dijo-.
Este enamorado era Jash, compañero de ellos, sus
rasgos, test blanca, cabellos rubios, ojos verdes, de 1.78 de
estatura, con una muy buena situación económica y autos
de lujo; lo peor de todo para Layon, fue que sentía que Jash
era una buena persona, él lo conocía, eran compañeros, por
primera vez en un ejemplo claro de baja autoestima, lo vio
como una valla muy alta de superar, sintió que no podía
competir con él.
63 Richard. M. Cantera Ríos

Hasta pensó que Nova y Jash tenían mucha empatía


y que eran el uno para el otro.
Lo que le afecto aún más, es que Nova, mientras lo
presentaba como su enamorado, le dijo que era el amor que
siempre había buscado, que lo amaba.
Dijo con gran seguridad que Jash era la persona con
la quería compartir toda la vida.
Allí, Layon sintió que se le desgarró más el corazón,
sus esperanzas de una vida con ella se le derrumbaron en
unos cuantos minutos, cuando ella emocionada le dijo que
quería casarse con Jash.
64 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO VI – PERDIENDO LA RAZÓN

Layon los felicitó saliendo apresurado del lugar, sintió


que su motivación, sus ganas de seguir luchando en este
mundo desaparecían, por más que intentaba no podía sacar
la imagen de Nova y su nueva pareja de la mente.
Fue a su hogar, en el encierro de su cuarto escuchó
música sentimental, fue el detonante para que sufriera más
y por más que intentaba aguantar sus sentimientos, lloró, sí,
lloró, no es señal de debilidad, eso pasa cuando se necesita
desahogar los problemas que atormentan en la vida.
Luego de algunas horas sintió que el encierro del
cuarto aumentaba su tristeza, por lo que salió a caminar, eso
le ayudaba algunas veces; la tristeza, la melancolía hizo que
tuviera muchas ganas de fumar, ello aumentó su ansiedad
sintiéndose peor de lo que estaba; fue a buscar a sus amigos,
les comentó que tenía problemas y como si la fórmula para
olvidar fuera el alcohol se fueron a beber, en realidad sólo él
bebía, sus amigos acompañaban, le preguntaron cuáles eran
sus problemas, el respondía que no tenía sentido hablar ya
del tema, hasta que se emborrachó, y sus compañeros como
buenos amigos lo llevaron a su casa para que descanse.
Layon se levantó al siguiente día, pero la tristeza no
lo abandonaba dirigiéndose nuevamente a ingerir licor, uno,
dos, tres días seguidos; sus padres preocupados por ello, le
llamaron la atención, les respondió que no pasaba nada, que
se trataba de un proceso en su vida, que lo disculpen pues
no lo iba volver a hacer, pero igual seguía bebiendo, y hacía
oídos sordos a los consejos y llamadas de atención, mientras
tanto su vida caía cada vez más al abismo de la perdición.
65 Richard. M. Cantera Ríos

Dejó la Universidad, se dejó el cabello largo, se puso


piercing, se hizo un tatuaje en el dedo en forma de anillo,
sentía que el tenerlo allí era símbolo de que su amor estaría
siempre, soñando que era un anillo de matrimonio real que
nunca recibiría y que nunca daría a Nova, hizo todo lo que
odiaba en su vida, como queriéndose hacer daño, viviendo
siempre en peligro, retando a la vida; en realidad su amor
dejó de ser un sentimiento y se convirtió en una obsesión.
Cometió el peor error de una persona, dejó de vivir
en valores y buenas costumbres, botando toda su vida a un
abismo, por una decepción amorosa.
Cuando empezó a ingerir licor, se dijo alguna vez, que
era sólo una etapa en su vida que iba a superar, es más, que
en algún momento, cuando él lo decida, lo iba a dejar; lo que
no calculó, es que poco a poco el licor se apoderaba de él, de
su razón, cayendo en la adicción.
Alguna vez los compañeros de Layon para sacarlo del
ambiente que estaba viviendo lo invitaron a una actividad de
la Universidad, él estaba decidido a dejar el licor, sabía que
ya le causaba daño, además le había prometido ese día a sus
padres, quienes, sufriendo por lo que le estaba pasando, le
rogaron una y otra vez que dejara ese vicio, aconsejándole,
tratando de hacerle entrar en razón, haciéndole ver que era
muy joven para botar su vida a la basura.
Ya en la actividad empezó a circular alcohol entre los
compañeros, cuando llegó la botella de licor a las manos de
Layon, este haciendo un gran esfuerzo, lo pasó al amigo de
al lado, al ver ese gesto, muchos de los amigos se alegraron
de ello, era un primer paso de voluntad para dejar ese vicio
que lo estaba matando poco a poco.
66 Richard. M. Cantera Ríos

Pero lamentablemente, la firmeza de su voluntad


decayó muy rápidamente, no pasó ni una media hora, ya sin
poder contenerse, se levantó, cogió un vaso con licor y sin
mirar a nadie, pero con un gesto de vergüenza, de decepción
consigo mismo por no poder controlarse ante su adicción,
levantó el vaso y empezó a ingerir apresuradamente el licor,
como si ese líquido fuera una necesidad primordial, como si
fuera agua para satisfacer su sed, su necesidad de vivir.
Las miradas se fijaron en él, algunos de sus amigos
murmuraban en silencio entre ellos, que era difícil que salga
de su adicción, Layon al sentirse observado, sintiendo que ya
nadie lo entendía, que todos sus amigos le daban la espalda,
salió huyendo del desprecio, de la desidia de la gente ante
sus problemas, dirigiéndose equivocadamente a lugares en
donde la vida no valía, no tenía un límite, donde reinaban las
personas que ahogaban su vida en licor, pues allí nadie le
recriminaría nada y a nadie le importaría lo que hiciera.
Por otro lado Nova, nunca estuvo ajena a lo que le
pasaba a Layon, para ella él era su mejor amigo, lo estimaba
demasiado, a ella también le sorprendió el cambio en sus
acciones, no estaba dispuesta a dejar que malogre su vida,
no lo iba a dejar jamás solo, tenía que intentar ayudarlo.
Sin temor fue a buscarlo en los lugares peligrosos
donde sabía que se refugiaba en el licor; cuando lo encontró
trató en vano de despertar su razón, le dijo que él no era de
las personas que huía de los problemas, que los enfrentara
como siempre lo había hecho en su vida, le preguntó el por
qué tomaba, le rogó que dejara de emborracharse, que ella
podía ayudar, que contara sus problemas que lo aquejaban,
que desahogara sus sentimientos que lo presionaban.
67 Richard. M. Cantera Ríos

Pero Layon, nunca le dijo nada, sólo le suplicó que lo


abrazara fuerte, como un mendigo sediento de cariño, Nova
lo abrazó muy fuertemente, al hacerlo sintió una debilidad
enorme y unas pocas ganas de seguir viviendo en Layon,
sintió que estaba perdiendo a su gran amigo, eso la asustó y
lo abrazó aún más fuerte, mientras ella también lloraba sin
consuelo, seguía hablándole que por favor no destruya su
vida, le decía que toda su familia, ella, sus grandes amigos lo
querían demasiado, que si no lo hace por los demás lo haga
por él, le pedía por favor que corrija su vida y vuelva hacer el
Layon de antes, pues el que estaba allí no era el Layon que
ella conoció.
Layon seguía en lo mismo, aunque sabía que estaba
destruyendo su vida, sentía que lo único que podía hacer
olvidar, ese amor, ese sentimiento de dolor por Nova, era el
licor, el embriagarse era lo único que podía hacerlo dormir.
Hasta que se volvió alcohólico, empezó a descuidarse
de él, de su persona, hasta de su forma de vestir, sus padres
intentaron frenarlo con terapias de alcoholismo, alguna vez
lo encerraron para evitar que beba, al menor descuido, se
tiró por el balcón de su casa, solamente para saciar su vicio,
fue empeorando más y más ante la tristeza de las personas
que lo querían, ahora dormía borracho en las calles, muchas
veces y muy seguido Nova iba y lo sacaba de las cantinas, lo
llevaba a su casa acompañada por Jash, ambos le ayudaban
a levantarse, Layon sólo callaba con la mirada baja mientras
le ayudaban a pararse.
Jash también le decía, que pasa Layon, deja el licor,
ya para de hacerte daño amigo, mientras lo subían al carro y
lo llevaban a su hogar.
68 Richard. M. Cantera Ríos

Habían pasado ya cuatro meses desde que Layon se


aferró al licor, como se lo había prometido Nova, nunca dejó
de intentar ayudarlo, lo buscó y encontró otra vez borracho,
esta vez al medio día, sentado en la vereda de una calle con
la mirada perdida, como quien sintiéndose olvidado por las
personas que quería, en su borrachera se daba cuenta que
para las personas que pasaban frente a él ya no existía, se
alejaban de él mirándolo con repugnancia, eso hacía que se
sintiera peor.
Nova al verlo se acercó para ayudarle nuevamente,
intentando una vez más hacerle entender, recapacitar para
dejar su adicción.
Ya no aguantando más su angustia le increpó, que ya
basta, que madurara, que no estaba comportándose como el
Layon que conoció, le reprochó que hablara, dijera lo que le
estaba pasando, que era un egoísta y que sólo pensaba en él
y nadie más, le pedía que piense en su familia, en su madre
que sufría mucho, en sus hermanos menores, que siempre
fue el ejemplo para ellos, en las personas que lo querían, en
todos los que estaban sufriendo por él, que despierte de ese
mundo de fantasía, de sueños de perdición, y se comportara
como el hombre maduro que era y enfrentara los problemas
con esa valentía que siempre mostro.
Layon alzó la cabeza súbitamente, por primera vez le
respondió con un tono de rabia:
-¡Vete de mi vida, vete, déjame aquí, no te pido nada,
nunca te pedí nada, esta es la vida que elegí y así quiero
estar!.
Calló un momento volviendo a hablarle, esta vez más
fuerte:
69 Richard. M. Cantera Ríos

-¡Es mi vida, yo sé lo que hago con ella y ni tú ni nadie


me va a sacar de lo que quiero, lárgate, ya me cansaste, no
quiero saber más de ti, el Layon que conociste ya no existe,
se fue, cambió hace mucho!, ¡ya vete, que esperas! -le gritó
nuevamente-.
Nova quiso abrazarlo y Layon la empujó, repitiendo:
-¡Lárgate, lárgatee, qué no escuchas!.
Ella, llorando sin poder parar, mirándolo, respondió:
-¡No hagas eso Layon!, te estimo demasiado, eres mi
mejor y gran amigo, por favor no, -él nuevamente la botó-.
Nova se retiró llorando, lloró toda la noche, por la
impotencia de no poder hacer nada por Layon, lo estimaba
demasiado, pero ya no volvería a buscarlo; la realidad es que
Layon la trató mal, aunque con un pensamiento inmaduro,
porque todos necesitamos de ayuda alguna vez en nuestra
vida, pero pensó en que ella necesitaba ser feliz y no iba a
jalar al abismo en el que vivía, a lo que más quería.
Al ser despreciada por Layon, Nova se refugió aun
más en el cariño de Jash, para salirse de la rutina, ambos
decidieron ir a una casa de playa que tenía Jash no muy lejos
de la ciudad, así lo hicieron, fue un momento muy esperado
para ellos, aunque sentía pena por Layon, ella estaba feliz,
había encontrado lo que buscaba, el amor verdadero,
Después de reír mucho y jugar un poco se sentaron
un momento en la playa disfrutando de la vista del mar, él
miró sus hermosos ojos azules diciéndole:
-Nova quiero que estés toda la vida conmigo, te amo,
no importan lo demás sólo tú, prometo nunca dejarte, eres
lo mejor que me ha sucedido en esta vida, si no estuvieras a
mi lado nada tendría sentido, ¿te casas conmigo?, finalizó.
70 Richard. M. Cantera Ríos

Para Nova escuchar esas cortas pero lindas palabras


significó algo maravilloso que esperó toda su vida amorosa,
era el inicio de una vida de pareja, había esperado escuchar
esas palabras toda su vida.
Casarse, significaba compartir una vida, unirse en un
solo corazón que estarían latiendo juntos para siempre, no
necesitó responder, lo besó emocionada con lagrimas de
amor, de felicidad en los ojos, el beso fue tierno, jamás en la
vida dos labios se habían unido con tanta emoción y ternura.
Para que una persona se una con otra y exista ese
amor verdadero, tienen que haber tres estados afectivos:
sentimiento, que es dar algo sin esperar nada a cambio, es
abrazar fuerte a esa persona que amas cuando sientes que
sufre y no pensar en dejarla, sin preguntar nada, sólo hablar
con acciones, demostrarle que nunca va a estar sola.
Sentimiento es cuando tu cuerpo y mente ceden con
una sonrisa, es sentir que tu corazón se presiona y desgarra
cuando sientes que vas a perder a la persona que amas, es
sentir que tus lágrimas quieren salir, mientras miras las fotos
y pasan por tu mente los hermosos recuerdos vividos con la
persona que compartiste momentos de felicidad; es pasar
por los lugares que alguna vez recorriste con esa persona
que aún vive en tu recuerdo sintiendo que todo el cuerpo se
escarapela de emoción hundiéndote en un sueño despierto,
volviendo a vivir aunque sea por un momento. Sentimiento
es cuando al escuchar su voz es suficiente dosis para poder
seguir en la rutina difícil de la vida, es cuando el pensar en su
sonrisa, en sus locuras, hacen que sonrías como si estuviera
a tu lado, mueves la cabeza y sin pensarlo el inconsciente
actuará llamando o mandando mensajes de amor.
71 Richard. M. Cantera Ríos

Sentimiento de amor, se da cuando sueñas en una


pesadilla que la persona que más amas se va de tu vida, al
despertar desesperado la buscas y está como siempre a tu
lado, la abrazas pidiéndole a Dios que siempre esté contigo,
estando dispuesto a dar tu vida por ella, ello hace que el
sentimiento del amor sea lo mejor que hay en la vida.
La emoción, es sentir que cuando vas a visitar a tu
pareja, los latidos de tu corazón se aceleran fuertemente,
como un adolescente, te sudan la manos al sentir las suyas,
es sentirte nervioso solo al verla, enmudecer por temor a no
expresar bien lo que piensas, emoción es cuando brillan tus
ojos al verla, mientras que tu corazón late fuertemente por
la desesperación de tenerla más cerca a ti.
La pasión, que hace que dos personas se deseen
haciendo que ambos estén dispuestos a dar su tiempo, su
espacio, su trabajo, su vida misma por verse un momento, lo
que hace que se arriesguen sin pensar en las consecuencias
por esa persona que te espera, pasión es cuando besas a la
persona que amas y no te quieres separar de ella, de esos
labios, de esos besos que te hacen soñar.
Nova, sabía que el sentimiento, la emoción, pasión,
todos unidos, hacen el verdadero amor, sentía que su amor
estaba completo, que su amor era el verdadero al escuchar
esas hermosas palabras. Lo abrazó como entregándole su
alma, su vida; estaba dispuesta a demostrarle su amor, cerró
los ojos y sintió los labios de Jash en los suyos, mientras se
besaban lentamente, su mente, su razón dejaron de pensar,
ahora hablaba el corazón, intentaba hacer caso a su mente,
pero también estaba soñando, soñando en un futuro a lado
de la persona perfecta que tenía junto a ella.
72 Richard. M. Cantera Ríos

Allí fue donde la razón sucumbió dando pase al amor


incondicional, al amor con pasión, sus besos tiernos dejaron
de serlo y sus labios se besaron cada vez con más pasión.
Jash mientras la besaba empezó acariciarla la espalda
suavemente, luego sus manos querían recorrer ya todo su
cuerpo, Nova estaba como hipnotizada en su amor, la mente
seguía diciéndole que por amor se debería entregar todo,
dejar todo en la vida y correspondía a Jash con besos cada
vez más intensos.
Jash como pidiéndole permiso, mirándola a los ojos
le preguntó:
-¿Te puedo acariciar, necesito hacerlo, quiero sentir
que eres sólo mía?, déjame tocarte –agregó- estoy que me
muero por tenerte cada vez más cerca.
A Nova le gustó el detalle que no la presionara, el
pedirle permiso para poder ir más allá, hizo que ella sintiera
que la estaba respetando, no dijo nada; las manos de Jash
empezaron acariciarle los senos, muy tiernamente, ella lo
abrazó aún más, lo miró a los ojos sintiendo que sus cuerpos
temblaban, le dijo:
-Te amo Jash, nunca, jamás me dejes, prométeme
que siempre vas estar a mi lado, mi vida no sería nada sin ti.
Jash volvió a repetir:
-Te amo, vamos a estar juntos toda la vida, déjame
hacerte mía -le dijo-, mientras Nova cerraba los ojos.
Cuando el cuerpo sólo quería dejarse llevar, volvió a
despertar su razón por hacer lo correcto, deslizándose una
palabra de sus labios no, no, separándose súbitamente de
Jash.
-No me rechaces, por favor -le dijo-.
73 Richard. M. Cantera Ríos

Nova le cogió suavemente la mano, le dio un tierno


beso diciéndole, que no estaba preparada, que por favor la
entendiera, que lo amaba, pero no se sentía bien con lo que
pasaba, le dijo que esperara un tiempo más, que cuando se
sienta preparada lo permitiría, pero por ahora no le replicó.
Jash sólo la escuchó, sin poder controlarse la acarició
suavemente de la mejilla y nuevamente le dijo:
-Te amo, por favor no me rechaces.
Empezó a besarla e intento tocarla de nuevo, Nova
ahora sí, mucho más segura de lo que quería, lo rechazó con
más fuerza.
-¡Por favor, respeta mi decisión! -le dijo-.
Jash, al sentirse rechazado por segunda vez, intentó
condicionarla, presionarla, diciendo que lo entienda, quería
estar a su lado, que estaba loco por ella, por tocarla, que no
era por placer, si no por querer tenerla más cerca y eso haría
que estuvieran más unidos, ya sin temores, que si lo amaba
como ella decía le permitiera tocarla, dejando de lado esos
principio moralistas, pues para el amor nunca había límites,
intentando tocarla nuevamente.
A Nova no le agradó esas acciones, y ahora con más
fuerza le dijo que no iba a pasar nada más, que el amor no
era solamente placer, que si él quería solamente caricias no
era amor, estaba confundiendo su amor con pasión; la cara
de ternura, las palabras de amor de Jash cambiaron por las
de reclamo condicionado, empezó a recriminarle del por qué
no quería que la toque, ya que el amor se demuestra en
toda situación, se debe dar amor sin condiciones, pues ella
quería que le den cariño y no daba nada a cambio, gritando
aun más enfurecido le reprochó:
74 Richard. M. Cantera Ríos

-¡A cuántos les habrá permitido acariciarles y a él no!.


Nova no iba a soportar esa ofensa y sin pensarlo, con
mucha cólera, que la persona que mas amaba tuviera esa
concepción de ella, le propinó una fuerte cachetada en la
mejilla; los ojos de Jash reflejaban rabia como quien tiene a
un gran enemigo que afrontar, sin dudarlo le devolvió la
cachetada, diciéndole que ninguna mujer en el mundo se va
atrever a golpearlo, no iba a permitirlo nunca y menos de
una cualquiera como ella.
Nova aún más ofendida intentó darle otra cachetada,
pero éste ahora le agarró la mano, deteniendo el golpe, al
contrario le propinó un tremendo puñetazo que la tiró a la
arena, seguidamente sin piedad, la pateó en el vientre y se
arrojó encima de ella tratando de aprovecharse.
Nova adolorida por los golpes intentaba defenderse
desesperadamente, pero Jash era más fuerte, para lograr su
cometido le encajó otra fuerte patada en la cabeza que la
dejó casi desmayada, con casi ya sin fuerza para defenderse,
ello lo aprovechó rompiéndole las prendas íntimas y con
violencia y sin piedad la violó.
Ella intentaba defenderse, gritando para que alguien
la ayudara, pero nadie la auxiliaba, sólo se escuchaba el
sonido del mar, reventando sus olas contra las rocas, como
un testigo mudo del dolor que sentía Nova, mientras Jash
desahogaba su lujuria con violencia.
Para Nova se destruían sus sueños de princesa, sus
sueños de amor con la persona que esperaba compartir su
vida; el príncipe azul se convirtió en un demonio, en una
pesadilla viviente que con golpes y palabras fuertes, seguía
aprovechándose de ella, sin tener piedad, ni remordimiento.
75 Richard. M. Cantera Ríos

Ya se imaginarán la escena, Nova media desmayada


tendida en la arena, ensangrentada, con las costillas rotas,
casi desnuda, llorando de dolor y de rabia, sacando fuerzas
intentó nuevamente defenderse, pero Jash le propinó otra
patada con más furia, nuevamente en el vientre. Cuando la
vio tirada en el suelo a punto de perder la razón, le gritó:
-Vas a morir, nunca, nadie en mi vida me ha negado
nada, siempre he tenido todo lo que he querido, deberías
saber eso princesita, -propinándole con una roca una herida
de muerte en la cabeza, golpe con el cual la desmayó-.
Jash creyéndola muerta fue a preparar su bote para
llevarla a lo más profundo del océano y desaparecerla para
siempre sin que nadie la encontrara, buscando así finalizar
su macabro plan; mientras el cuerpo de Nova yacía tirada
desangrándose sobre la blanca arena; las olas del mar como
queriendo que ella sobreviviera, empujaron fuerte sus aguas
llegando al cuerpo tendido de Nova haciéndola despertar;
sabiendo los planes de muerte de Jash intentó pararse como
pudo. Sacando fuerzas por vivir, corrió desangrándose hacia
la casa, cogió las llaves de su auto que todavía seguía allí,
puso los pies en el acelerador huyendo desesperadamente
de ese lugar, que hace algunas horas fue un paraíso cuando
le pidieron matrimonio y que en tan sólo unas horas su vida
se volvió un infierno, mientras manejaba pensó en recurrir a
la única persona que podía ayudarla, esa persona era Layon.
Ella sabía dónde podía encontrarlo, no estaba muy
lejos del lugar, manejando como pudo, casi desmayándose
fue en su búsqueda, con dirección a las cantinas de perdición
donde siempre estaba Layon, viviendo en su mundo bajo el
límite.
76 Richard. M. Cantera Ríos

Layon acababa de llegar al lugar, cuando se disponía


a intentar olvidar sus penas, vio que paró el auto de Nova,
cuando se abrió la puerta salió ella, dio unos cuantos pasos y
se detuvo sin poder caminar, Layon al verla ensangrentada
por los golpes que había recibido de Jash, corrió hacia ella,
mientras se desplomaba entre sus brazos llorando de dolor.
Layon la limpió como pudo, la colocó al asiento del
copiloto con cuidado, llevándola al hospital de inmediato, en
el camino le preguntó que había sucedido, Nova le contó
temerosa, nerviosa, temblando del dolor, sin poder contener
sus lágrimas, que había sido violada por Jash, por la persona
que pensó que menos daño le haría en la vida.
Layon calló por un momento, en su rostro se dibujó
una cara de ira, sintió que odiaba a ese desgraciado que le
había hecho tanto daño a la mujer que más amaba, quería
salir a buscarlo, enfrentarlo, pero miró nuevamente a Nova,
estaba desangrándose, pero pensó, no era el momento, por
ahora lo importante era que sanaran sus heridas.
Antes de llegar al hospital, Nova le hizo jurar que no
diría nada, nadie sabría lo que había pasado, tenía miedo de
que Jash la intentara matar, tenía vergüenza de lo que digan
los demás, de cómo la vea la gente, ella sintió que no iba a
poder asumirlo.
En el camino que llevaba al hospital Layon avisó a los
padres de Nova, inventando que había tenido un accidente
en su auto, pero al entrar al hospital ella se desmayó, su
dócil cuerpo no aguantó más los golpes recibidos, entrando
en un coma; entre la desesperación e impaciencia pasaron
tres largos días sin que ella despertara, Layon no se alejó ni
un solo momento de su lado.
77 Richard. M. Cantera Ríos

Al cuarto día, cuando pensaban que quedaban pocas


esperanzas de que ella viviera, Nova despertó, lo primero
que vio fue la cara de Layon, quien la recibía de su sueño con
una gran sonrisa, dándole un beso en la mejilla, le dijo:
-Bienvenida preciosa, tranquila ya todo está bien.
Quiso quedarse acompañándola más tiempo, pero
los padres de Nova le dijeron que ya había pasado el peligro
y ahora le tocaba descansar a él.
Layon al dirigirse a su hogar, parecía un sonámbulo
caminando por la calle, pensando en Nova, lo que iba a sufrir
con su pena en silencio. Aquella noche Layon durmió poco,
esperaba ansioso el amanecer. Al siguiente día se levantó
muy temprano, se cortó el cabello largo, se puso ropa limpia
y sobrio, sin probar una gota de licor en cinco días, se dirigió
apresurado a la casa de playa de Jash, donde sabía que los
fines de semana se reunían los amigos para divertirse.
Al llegar, entró en la casa, se sentó impaciente en una
banca, sus compañeros alegres de verlo allí, lo saludaban,
felicitaban por haberse reunido una vez más a compartir un
momento de diversión con el grupo, Layon movía la cabeza
en agradecimiento, pero enmudecido, se notaba su ansiedad
por esperar a alguien, con una mirada que reflejaba odio y
sed de venganza.
Cuando escuchó que saludaban a Jash, se levantó y
sin decirle ni una sola palabra se le acercó propinándole un
tremendo puñete en la nariz que lo dejó tirado en el suelo
ensangrentado.
-¡Así que te crees muy valiente con las personas que
no pueden defenderse, principito!
-le dijo, retándolo a defenderse-.
78 Richard. M. Cantera Ríos

Jash se puso de pie como pudo, y con un tono irónico


le respondió:
-¡Mírame, hagas lo que hagas, la persona que estimas
tanto ya fue mía, pero si la deseas, te la regalo, llévatela, no
quiero zorras en mi vida!.
Layon al escuchar los comentarios sin remordimiento
o ningún sentido de culpa de Jash, enceguecido por la rabia
le propinó otro puñete, tirándolo una vez más en la arena,
ahora dándole patadas en las costillas, en todo el cuerpo sin
poder controlarse.
Los pocos compañeros, que estaban allí intentaban
separarlo. Pero Layon estaba enloquecido, fuera de sí, ya no
hacía caso a nadie y continuó golpeándolo, hasta dejarlo casi
desmayado, cuando por fin lograron separarlos. Jash como
loco ensangrentado gritaba:
-¡La vas a pagar alcohólico, mírame tengo dinero, no
voy a parar hasta que te pudras en la cárcel!.
Ese mismo día Jash y su familia denunciaron ante la
policía a Layon por intento de homicidio, en realidad le había
roto las costillas, un brazo, la nariz, por poco lo mata.
Layon fue detenido casi de inmediato, le preguntaron
en el juicio, el por qué había golpeado a Jash, él callaba sin
responder nada; quizá, si contaba lo que había pasado, la
sentencia habría sido menor y el violador Jash sería el que
estaría en la cárcel. Pero no contó nada, había jurado a Nova
callarse, siempre cumplió su palabra, todo por amor. Layon
fue condenado a dos años en la prisión.
Durante los dos años, todos los sábados de visita,
Nova estuvo a su lado, charlando, llevándole libros para leer,
pues era lo que le gustaba a Layon.
79 Richard. M. Cantera Ríos

Leyendo su mente se liberaba de la soledad, en su


imaginación, en la fantasía de la lectura sentía que estaba
libre, fuera de esos barrotes.
Cada vez que se acababa la visita, Nova abrazándolo,
le decía que lo quería, le pedía que se cuidara, le comentaba
que sufría cuando no estaba a su lado, todas las acciones, las
palabras hacían que Layon pensara que ella lo amaba. Podía
haberle declarado sus sentimientos muchas veces pero no
quería que su amor estuviera atado a unas rejas.
Esperaba impaciente el sábado de visita para mirar
sus hermosos ojos y disfrutar de su compañía que tanta paz
le daba; podía soportar todo en la cárcel, menos el estar sin
ver a su amor en silencio.
Aunque el tiempo vivido en la cárcel se volvió una
eternidad, por fin se cumplieron los dos años; ese último
sábado fueron solamente sus padres y hermanos, al salir de
la cárcel, Layon abrazó a sus familiares, mientras su mirada
buscaba ansioso a Nova, ella no fue, no estaba, tratando de
no mostrar su pesadumbre se dirigió a su casa, para intentar
disfrutar su libertad en familia.
Cuando abrió la puerta, escuchó muchas voces:
-¡Sorpresaa! -dijeron en coro-.
Cuando prendieron la luz, vio emocionado a Nova y
todos sus mejores amigos, quienes le habían preparado una
gran fiesta de bienvenida, ambos se abrazaron una vez más,
como lo hicieron siempre desde que se conocieron.
Nova le dijo al oído:
-Gracias por estar siempre a mi lado, eres mi ángel de
la guarda, te quiero mucho, jamás dudes de eso, agradezco a
la vida por permitirme conocerte.
80 Richard. M. Cantera Ríos

Layon sentía que su cuerpo temblaba de felicidad,


estaba muy contento de estar cerca a su familia otra vez,
teniendo a sus mejores amigos, divirtiéndose en su hogar y
sobre todo, junto a la mujer que siempre amó, disfrutaba
observándola animando la fiesta, la miró como la primera
vez en la Universidad, se veía hermosa, con esa sonrisa y ese
hábito de hablar sin parar y nunca callar, la admiraba, una
vez más se daba cuenta del por qué la amaba tanto.
Si bien Layon estaba agradecido por el recibimiento,
quería disfrutar de su libertad, anhelaba tener un momento
en soledad, se alejó de la fiesta subiendo a la azotea de la
casa, sólo pensaba en cumplir su sueño, tal como se había
imaginado esos largos días en la cárcel; al observar las luces
de la ciudad que resplandecían como invitándolo a vivir la
vida, brindándole una luz de felicidad, sintió una paz interior
infinita y más aun al sentir el correr del viento por su rostro,
entendió que no importaba el lugar, por sencillo que sea, no
hay mejor satisfacción en la vida que sentir la libertad, de
ir, caminar hacia donde el destino, la vida y Dios decidan.
Mientras disfrutaba de su momento de tranquilidad
observó una pareja que apresurados unían sus labios en un
beso, al reconocer quien era la chica, se quedó pasmado, sin
moverse, mirando hacia el frente, allí estaba Nova, con los
dos brazos en el cuello de un tipo, besándose, con los ojos
cerrados, como si aquel fuera otra vez el hombre de su vida.
Layon se quedó quieto, parecía estatua, la paz de su
mente volvió a desaparecer, una lágrima de rencor rodó por
sus mejillas, aquella lágrima expresaba el final de una vida
de amor nunca correspondido, al cual ahora por fin estaba
dispuesto a finalizarlo.
81 Richard. M. Cantera Ríos

Mientras veía la escena, recordó con sentimientos de


rabia y decepción, todo lo que había hecho por el amor de
Nova, tanto tiempo que había perdido por un amor nunca
correspondido, dejó los estudios en la Universidad, se había
vuelto alcohólico, había ido a la cárcel, había causado daño,
sufrimiento a lo mejor que tenía, a las personas que jamás le
fallarían en la vida, su familia, se podría decir que a partir de
allí despertó la razón en la mente de Layon.
Cuando estaba por dar la vuelta y dejar para siempre
en el recuerdo ese amor que nunca fue correspondido, Nova
abrió los ojos viendo que Layon lo miraba con ojos brillosos,
se miraron por un segundo, Layon más que reasignado, bajó
lentamente las gradas, Nova dejó al tipo con el que estaba
besándose y corrió tras Layon.
Ella cogió la mano de Layon, intentó explicarle que no
sabía lo que hacía, pero Layon la calló evadiéndola con una
seña, como diciéndole que ya no quería escucharla, ante la
insistencia de Nova, le dijo brevemente:
-No tienes por qué intentar de disculparte, es tu vida
puedes hacer con ella lo que desees, mientras no te hagas
daño y sobre todo no hagas daño a los demás, creo que soy
la persona menos indicada para señalarte, cuídate y aléjate
de los problemas.
Nova, quiso seguir dando explicaciones a Layon, pero
uno de los amigos la cogió de la mano para bailar, mientras
ella se negaba, Layon salió de la fiesta. Nova salió corriendo
tras de él por segunda vez, al buscar atormentada a Layon se
dio cuenta que estaba enamorada de él, que lo amaba, que
nunca había seguido a un hombre así, pero tuvo miedo al
recordar su mirada de decepción, miedo de perderlo.
82 Richard. M. Cantera Ríos

Nova al no encontrarlo regresó a la fiesta a esperarlo,


pasaron tres horas, Layon no llegó, era tarde, los padres de
Layon le dijeron que mejor lo buscara al siguiente día, allí
hablarían con paciencia.
Al caminar a su casa, la nostalgia la invadió, no hacía
frío pero temblaba, estaba nerviosa, el pensar en que Layon
la rechace cuando escuchara que lo amaba, que no aceptara
sus disculpas, ello hacia que temblara mucho más.
Al llegar a su casa se dirigió directamente a su cuarto
a intentar descansar, ahora ella pensaba en cómo iba a decir
a Layon que lo amaba, que estaba muy enamorada de él,
que quería compartir toda la vida a su lado; aunque el sentir
que su amor era correspondido le daba un poco de alivio a
su mente y corazón, sin embargo, le daba temor al sentir un
sentimiento de tristeza, de soledad que la hacía ponerse aun
más nerviosa.
Cuando por fin se quedó dormida sonó su celular,
despertó desesperada con el corazón que le latía acelerado,
al responder el teléfono, una voz le preguntó:
-¿Usted es Nova?.
-Sí, -contestó ella-.
-¿Conoce a un joven llamado Layon?.
Ya asustada preguntó:
-¡Qué pasa, dígame por favor!, -como presintiendo
algo malo-.
-Le hablamos de la sala de emergencias del hospital,
hay un muchacho aquí su nombre es Layon, nos pidió que la
llamáramos, sentimos comunicarle este tipo de noticia, pero
su amigo ha sufrido un accidente está en una situación muy
grave, quisiéramos que también avise a su familia.
83 Richard. M. Cantera Ríos

Layon había subido a un tren, tal vez con la intención


de razonar sobre su vida y lo que tenía que aprender de sus
experiencias, reflexionando de la diferencia entre errores y
horrores, él sabía que en su falso camino de dejar todo por
amor, cometió muchos horrores, pues no sólo se hizo daño
él, sino que también arrastró a su mundo de oscuridad, de
adicciones, a las personas que más lo estimaban y querían.
Mientras estaba sentado, cerca de él habían varias
personas, incluida una anciana, de pie a un costado del tren
como quien ocultándose de la gente, al mirarle su rostro le
dio mucha nostalgia, tenía la mirada perdida con temor y de
soledad, se notaba que estaba sufriendo, provocando en él
un sentimiento de protección hacia ella.
Como el buen caballero que era, Layon se puso de pie
haciéndole señas para cederle el asiento, la anciana se negó,
al contrario muy educadamente le respondió:
-Gracias joven, descanse usted, -agregando-, ustedes
se merecen lo mejor, son el futuro; mi vida está acabando,
es el momento de darles la posta para que ustedes mejoren
este mundo, en su manos está cambiar nuestra realidad de
valores y falta de amor.
Al escucharla entendió que había que respetar a los
adultos mayores por su gran experiencia, y con mayor razón
le cedió el asiento; mientras reflexionaba sobre las palabras
de la anciana, subieron dos delincuentes quienes empezaron
a burlarse de la vejez de ella con gritos e insultos, la anciana
demasiada atemorizada miraba a la poca gente que había,
esperando que la ayuden, todos miraban, nadie se atrevía a
defenderla, parecía que a nadie le importaba, como si cada
uno se preocupara por sí mismo y viviera su vida.
84 Richard. M. Cantera Ríos

Layon al darse cuenta del maltrato de los dos sujetos


hacia la anciana, no lo pensó, su reflejo, su inconsciente por
ayudar, por defender, hizo que se dirigiera hacia la anciana y
la protegiera, se puso delante de ella y sin temor enfrentó a
los delincuentes, alzando la voz les increpó, que la dejaran
en paz, que la respetaran, pues ella no estaba sola, que tenía
alguien quien la defienda.
Los dos sujetos lo miraron muy enfurecidos, dieron la
vuelta como quien se retiraban, eso hizo que Layon bajara la
guardia, pero de improviso uno de ellos volteó, clavándole
sin piedad, ni remordimientos una profunda cuchillada de
muerte en el estómago, retirándose apresuradamente del
lugar, blasfemando con palabras de ofensa.
Fue tan rápido que Layon no sintió el cuchillo, caminó
tres pasos para ahuyentarlos más, la anciana gritó, mientras
que Layon sintió que se le humedecía el estómago, se tocó el
vientre y sorprendido observó que sus manos se llenaban de
sangre, inmediatamente cayó de rodillas sintiéndose cada
vez más débil, la anciana corrió desesperada a ayudarlo, la
gente lo rodeó, mientras él casi desmayando escuchaba las
voces que llamaban una ambulancia.
Al sentir que desmayaba, en su agonía tuvo mucho
miedo, le cayeron lágrimas cuando pensó en su madre, en la
soledad que iba a tener, en su padre y hermanos, no quería
dejarlos solos, cuando pensó en Nova su corazón empezó a
acelerarse más, quería, luchaba por vivir, la alucinación hizo
que viera a su abuela a su lado, que lo cuidaba y escuchaba
su voz que le decía, todo va estar bien, viendo una puerta
con una gran luz, muy clara que se habría frente a él.
85 Richard. M. Cantera Ríos

De improviso despertó, ahora escuchó una voz que le


decía:
-Tu puedes hijo, fuerza, no nos dejes.
Abrió levemente los ojos, vio al doctor y a la anciana
que lo ayudaban, al sentir que la sangre no paraba, sintió
temor, mucho miedo de morir, pero el ver la mirada, los ojos
tristes, tiernos de la anciana le dio paz, sentía que su abuela
que había querido tanto lo estaba cuidando.
Por más que intentó luchar por vivir, su corazón no
pudo aguantar más, dando un último, un fuerte suspiro de
vida pensando en Nova, sus ojos se cerraron para siempre.
Por más que los médicos intentaron revivirlo, con los gritos
desesperados de la anciana, su corazón no resistió, murió.
Nova al escuchar la triste noticia, salió desesperada,
gritando, que no podía ser, que no era justo, Layon no podía
abandonarla, su familia al escucharla también salió detrás de
ella. Mientras su padre manejaba hacia el hospital, ella no
paraba de llorar, respirando aceleradamente, temblando, se
negaba a que Layon estuviera muerto, pidió a Dios que no
fuera él la persona que estaba en el hospital, le prometió
entregar su vida por la de Layon, pero tenía miedo, su mente
presentía lo peor.
Al llegar todos al hospital encontraron también allí a
la familia de Layon, a su padre, estaba sentado, recostado en
la pared del pasadizo llorando desconsoladamente como un
niño, su madre estaba quieta, enmudecida, en shock con la
noticia, negándose a creer que su hijo ya nunca volvería a
estar a su lado, a diferencia de los gritos desesperados de
sus hermanos menores que no podían creer que en un solo
momento perdían a la persona que amaban tanto.
86 Richard. M. Cantera Ríos
87 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO VII - YO TE EXTRAÑARE

Al ver a todos sufriendo y llorando por Layon, Nova


entró corriendo, empujando la puerta de la habitación, la
enfermera intentó detenerla, pero igual se soltó, entrando al
cuarto y vio a Layon; estaba muerto, tendido sobre la cama.
Al ver al cuerpo de Layon lo abrazó, negándose a que
estuviera muerto, pidiéndole a gritos que no la deje, parecía
vivo, dormido en un profundo sueño, agarró sus frías manos
esperando que su mano apretara las suyas, cogió sus brazos
recordando, que cuando ella estaba mal le pedía un fuerte
abrazo y él nunca se negaba, siempre con una sonrisa para
ella, quería escuchar un, tranquila, ya pasará, todo va a estar
bien, pero su brazos cayeron, como si allí en aquel cuerpo no
hubiera ya nada, sólo materia inerte, se retiró un poco del
cadáver de Layon, mientras soltaba los brazos suavemente y
estos caían sin control.
Allí sintió que estaba muy sola, vacía, sintió que había
perdido el amor de su vida, no lo creyó, no quiso creer que
Layon no volvería jamás a estar a su lado y gritó, llorando sin
ya poder contenerse, gritó que lo amaba, no le importaba
nada, dijo que la vida ya no tenía sentido, le pidió que no la
deje sola, se acercó de nuevo al cadáver de Layon y lo besó.
Abrazándolo fuerte le pidió que le perdonara el no
haber querido darse cuenta del amor que tenía a su lado.
Mientras que sus padres y amigos la retiraban del
cadáver sin que ella quisiera hacerlo, no podía controlarse, la
familia, los amigos no podían creer en la muerte de Layon;
se podría decir que para Nova ese día y los demás meses que
venían iban a ser los peores de su vida.
88 Richard. M. Cantera Ríos

Los días pasaron siempre en un invierno para Nova,


sin Layon no sabía qué hacer con su vida, no tenía un futuro,
lo extrañaba demasiado, solía caminar soñando despierta,
que él estaba a su lado, recordando las palabras de Layon,
quién le decía que cuando haya problemas en la vida no se
encierre y salga, pues eso le iba ayudar.
Por un momento se daba fuerza, pero luego recaía
en la depresión, el único lugar que le daba un poco de paz
era el sentarse al lado de la tumba de Layon, allí se quedaba
sentada mirando su foto, le caían las lágrimas, se las secaba
y luego se quedaba pensando que él estaba allí a su lado.
A veces sentía que su energía la calmaba, dándole
una paz interna, era como si el alma de Layon la cuidara en
ese lugar santo, pero al regresar a su hogar, se encerraba en
su cuarto y lloraba, sólo lloraba, muy despacio, sabía que su
padres estaban preocupados, no quería hacerles más daño
pues estaban sufriendo por ella, algunas veces no soportaba
el sufrimiento y sólo abrazaba a su madre, diciéndole que no
aguantaba ese dolor, ese apretón en el corazón, ese nudo en
la garganta, que la perdonara por hacerla sufrir, que una
madre no debería sufrir por los hijos, sin embargo no podía
aguantar más los sentimientos de culpa, de amor perdido.
Siguieron pasando los meses, comía poco, las pocas
veces que lo hacía, era por no ver a su madre sufrir al verla
que se derrumbaba y se rendía poco a poco en la vida. Ello
trajo que la bonita figura corporal que tenía desapareciera,
se adelgazó terriblemente, solamente el escribir le daba paz,
soñaba, se imaginaba que Layon vendría por lo menos en sus
sueños; leía una y otra vez su historia como castigándose por
su error, y así en su soledad escribió su poema………
89 Richard. M. Cantera Ríos

Desde que te fuiste…….

Desde que te fuiste ya no he vuelto a sonreír como


antes lo hacía, no existe nada para mí, no hay quien pueda
ayudarme a despertar de mis temores, no existe futuro que
pueda esperar, sólo vivir el presente, un presente vacío, sin
sentido; encerrada en mi círculo, sin encontrar salida, dentro
de mi locura todos los días son lo mismo y pase lo que pase a
mi alrededor no me importa, he perdido las ganas de vivir.
Quiero tenerte cerca, a mi lado, necesito tu hombro
para llorar, tu voz para calmarme, pero ya no estás, quiero
verte, escuchar tu sonrisa para tener fuerza para vivir, pero
ya no estás, anhelo tu mirada de paz para perderme en ella y
tener de nuevo esa sensación de sentirme protegida, que ya
nada me va a pasar y dormir, dormir sin preocupaciones por
que estás a mi lado, pero ya no estás, no puedo vivir así.
Todas las noches intento, pero no puedo conciliar el
sueño, una noche de tanto llorar me quedé dormida por un
momento, te soñé Layon, estábamos felices, conversando y
riéndonos de nuestras locuras, me tenías abrazada, mirando
la luna, las estrellas como siempre lo hacíamos, no había, no
existía más paz, tranquilidad que estar entre tus brazos, pero
de improviso sentí un enorme frío, sentí que tus brazos me
soltaban, me di vuelta y no estabas.
Corrí desesperada a buscarte, no te iba a perder otra
vez, te encontré, estabas al borde de un precipicio, te llamé,
grité tu nombre, Layon, no por favor, te dije, diste vuelta, me
miraste con lágrimas cayendo por tus mejillas, se notaba que
estabas sufriendo mucho, te grité fuerte que no me dejaras
nunca más sola.
90 Richard. M. Cantera Ríos

Y con lágrimas en los ojos caías despidiéndote de mí,


te alejabas, te ibas de mi vida otra vez, mientras yo corría
desesperadamente e intentaba ayudarte, pero no podía.
Desperté gritando que no me dejes, mi corazón latía
aceleradamente, mis lágrimas no paraban de rodar por mis
mejillas, temblando y con ganas de seguir gritando que ya no
puedo vivir así, sin ti, sabes lo peor, despierto pensando que
sólo es una pesadilla, pero me doy cuenta que vivo en una
pesadilla real de vivir sin ti, por lo menos en mis sueños te
veo, pero en la realidad de la que quiero huir, tu ya no estás.
No sabes cómo se siente perder algo que más amas;
lo peor de todo es que te fuiste sin escuchar que te amo, si
pudiera regresar en el tiempo, pero sé que no se puede, por
ello sólo quiero vivir en el pasado donde estuviste tú, ya no
puedo más, te extraño demasiado, no puedo vivir sin ti.
Sé que ya no estás, sé que no volverás, pero hasta en
mis sueños te estoy perdiendo, no sé qué hacer, intento ser
feliz, intento reír, intento olvidar, pero no puedo, no puedo.
Debería recordar las cosas, las experiencias lindas
que vivimos juntos, pero mi mente tan sólo recuerda el daño
que te hice, este sentimiento está allí clavado en mi pecho
presionándome, haciendo que me falte el aire. Esta palabra
amor que está atascada en mi garganta esperando sólo verte
para gritarte que te amo, hace que me arrepienta una vez
más el no haberme dado cuenta a tiempo que eras, eres y
serás el verdadero amor de mi vida.
No puedo olvidar, sé que las cosas se olvidan, sé que
las situaciones malas se olvidan, me han dicho que llegará el
tiempo de paz, que estaré bien, que poco a poco el dolor se
va a ir.
91 Richard. M. Cantera Ríos

Pero la verdad es que por ahora, la que no quiere


olvidar soy yo, tengo mucho miedo de olvidar, sí, no quiero
olvidar, quiero estar así, estar con este gran sentimiento que
hace que se apriete mi corazón, como diciéndome, Layon
está allí, sigue allí vivo, con un amor tan grande, tan intenso
que hace que siga viva para recordarlo por siempre.
Todos me aconsejan que te deje ir, pero como dejar
ir algo que nunca tuve, desde que te fuiste no soy la misma,
todas las cosas las hago como dormida, por inconsciencia,
estoy viva sí, pero siento que desde que te fuiste todo murió
para mí, me resisto a decirte adiós.
Desde que te fuiste sólo siento mucha rabia por no
haber aprendido, que lamentablemente en la vida no existen
las segundas oportunidades, el pensar en ello hace que vaya
cayendo de hoyo en hoyo, como en un remolino en espiral y
así busque mi norte, mi ruta de salida, me hundo, me pierdo
cada vez más y más.
Desde que te fuiste ya ha pasado casi un año, sólo
quiero vivir en la oscuridad, desde que te fuiste se fue la luz
en mi vida, ya mis ojos se niegan a ver el mundo que está allí
afuera de estas cuatro paredes que se han convertido en mi
cárcel, me siento como encerrada en un túnel muy oscuro,
sentada sin intentar buscar su final, huyendo siempre de la
luz, esperándote para que tu luz de amor ilumine mi camino,
Layon te necesito eres la chispa que enciende la bomba de
mi corazón, todo es solitario sin ti, lo peor de todo es que ya
no puedo vivir así, te extraño demasiado, no existe ya vida
sin ti amor.
Desde que te fuiste…....................................................
92 Richard. M. Cantera Ríos
93 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO VIII – LA CAPACIDAD DE OLVIDAR.

Los padres de Layon estaban resentidos con Nova,


equivocadamente sentían que la culpable de que su hijo no
estuviera vivo era ella, le dijeron que por favor respetara su
dolor, no querían verla, ni saber nada de ella, que ella les
recordaba sólo dolores, tristezas del fallecimiento de su hijo.
Ellos no eran ajenos al sufrimiento de Nova, pero al
igual que ella, no soportaban el sentir que Nova pudo haber
ayudado a su hijo.
Un día el padre de Layon ordenando entre las cosas
guardadas de Layon, encontró algunos escritos con un título
que decía:
“Por qué debemos seguir viviendo” “La vida es una pausa”
Se acomodo y empezó a leer.
“Porque debemos seguir viviendo”………..
Ojalá entiendas que el mundo no se detiene por ti,
que mientras tú sufres y odias, los demás están viviendo,
divirtiéndose, algunas de ellas sabiendo que pueden tenerte
cuando quieran, siendo siempre tú, su última opción.
No te engañes, no puedes esperar que llegue alguien
que no está dispuesto a entrar en tu mundo, no podemos
pasarnos toda la vida persiguiendo algo que no podemos
tener, que no es para nosotros, que no está a nuestro lado;
hay que dejarlo ir.
Si piensas que llorando, encerrándote, va a regresar
esa persona especial para ti, no lo hará, nunca lo va a hacer
porque está feliz, porque como toda persona tiene derecho
a ser feliz, porque en el amor no existen personas malas, ni
buenas, sólo opciones diferentes, algunas mejores que otras.
94 Richard. M. Cantera Ríos

Ya es tiempo de sacarla de tu vida, te prometo que


ese sentimiento de dolor, de soledad no se va a ir tan rápido,
durará meses, pero también te prometo que entenderás que
la vida es un proceso donde todo se olvida; al final dirás si
mi corazón está bien o muy mal, todavía sufre, pero es un
sobreviviente que nunca se rendirá a intentar ser feliz.
Al principio seguramente pasará que, así estés en el
mejor lugar del mundo no lo será, porque no está la persona
que amas, sintiendo que no hay camino que quieras seguir si
no estás al lado de esa persona, pero eso cambiará cuando
permitas entrar a personas que te quieran ayudar en tu vida,
cuando te des tiempo para conocer a nueva gente, cuando
dejes de encerrarte en tu soledad.
Allí te darás cuenta que hay muchos caminos para
llegar a la felicidad, unos mejores que otros, que siempre
existirán las segundas oportunidades, que sólo es cuestión
de aprender a reconocer todo lo bueno que ofrece la vida y
aprender a tomarlos sin prejuicios, sin selecciones, estando
siempre dispuesto a dejar de lado lo que te hace daño.
Hay que intentar ser prácticos en el mundo que nos
toca vivir, hay personas que se encierran en un mundo de
soledad, de tristeza, de dolor, por causa de experiencias que
no pueden olvidar, tal vez porque su mente, su corazón no
quieren, se resisten a sacar a personas o experiencias malas
de su vida.
Lo cierto es que la solución depende de uno, no es
fórmula mágica, son nuestra compañía, se llama tiempo y
olvido, ojalá entiendan que la capacidad de olvidar es uno
de los más grandes dones de tu cerebro, que permite que
un hecho vivido quede en el recuerdo.
95 Richard. M. Cantera Ríos

Todos tenemos la capacidad de olvidar, el olvido es


muy bueno, es más bueno que malo, el olvidar al igual que
fallecer es parte de la vida, no importa si la persona es la
más buena del mundo, tarde o temprano alguno de los seres
queridos van a morir y vamos a sufrir terriblemente, mas
cuando fallece una persona que es muy importante para ti,
que vive para ti, duele en el alma, sientes como un hincón en
lo más profundo de tu corazón, sientes la soledad no sólo en
tu presente, sino también en un futuro enceguecido sin su
presencia y lloras, lloras sin poder encontrar paz en nada,
tienes las palabras, te extraño, te necesito, atascada en la
garganta, y por más que grites sigue allí ahogándote.
La realidad es que no hay persona en el mundo que
viva años con la misma intensidad de sufrimiento.
No te aferres a una persona fallecida, cuando esa
persona quiso en vida, quiere en la eternidad que seas feliz,
deja de llorar por alguien que ya no está, déjala ir, da el
paso adelante sin mirar atrás y agradécele por permitirte
haber estado en su vida, por dejar buenos, bellos recuerdos
y sobre todo, de ser tú, quien enseñe las lecciones que esa
persona te dejó, con tu familia y seres queridos.
Lo único real es que todo se olvida y sólo quedan
muy buenos recuerdos.
Es verdad que después de tener una larga vida de
sufrimientos, de mentiras, de odio, al final de muchos años,
quedan sólo los recuerdos buenos, el tiempo, el cansancio
de vivir siempre en lo mismo, la vida, harán que olvides las
experiencias malas, arriésgate en la vida por lo que sientes
que es bueno para ti, arriésgate pero toma tus precauciones.
96 Richard. M. Cantera Ríos

Sí, puede que te equivoques, pero, cuando pase el


tiempo sólo vas a recordar las cosas buenas, las malas se
olvidan más rápido, hay que aprender de los niños que lo
hacen rápidamente, aprende de ellos, porque en su mente
no existe la capacidad de odiar, sólo de amar y no guardar
rencores.
Si en la vida alguna vez diste todo por una relación,
no sólo con corazón, si no con respeto, si te olvidaste de ti
mismo por hacer feliz a la persona que amabas, por verla
sonreír, si fuiste el muro con el que se chocaron todos los
problemas para que no le pase nada.
Y de un momento a otro sientes que ya no es igual
contigo y por más que intentes renacer un sentimiento sólo
te deja alejándose de tu vida, sin importarle tu tristeza, tu
soledad, dando el paso adelante sin importarle el pasado
que deja atrás, déjala(o) ir.
Cuando pase eso seguramente sufrirás, querrás estar
encerrado en tu habitación, la soledad, la tristeza será tu fiel
compañía, intentarás dormir y soñarás con estar a su lado,
despertarás llorando, rogarás en silencio que acaben esos
sufrimientos, pedirás unos momentos de paz para tu mente,
habrá momentos que ya no aguantarás y sentirás que tu
vida no tiene sentido sin esa persona, sin esa vida de familia
que dejaste atrás.
Querrás dormir y no lo podrás hacer, tu mente no te
dejará pensar en algo más que en esa persona que amas,
querrás llamarla desesperadamente, aunque sepas que ya
no es para ti, te aferras, quieres escuchar su voz, soñando
despierto, que también está pensando en ti, que te necesita
como tú a ella (el).
97 Richard. M. Cantera Ríos

Seguramente coges el celular para llamar, lo piensas,


titubeas, la razón te dice que no, el corazón, el sentimiento
gana la lucha y cedes, le mandas un mensaje esperando con
mucha impaciencia una respuesta, pasaron minutos, horas,
bajas, subes de tu cuarto, miras el celular y nada, no hay
respuesta; la mente se preocupa, algo le pasó, igual dices, no
voy a llamar, mientras tus dedos ya están presionando las
teclas de tu celular, perdiendo no tan sólo la voluntad, si no
también el orgullo, llamas muchas veces y nunca respondió
tu llamada.
Pareciera que somos medio masoquistas, mientras
más rechazo hay, más nos aferramos a esas personas que
han salido de nuestra vida; mientras menos nos contestan
marcamos más el numero.
Así, la impaciencia, la ansiedad crecen por sentirse
querida(o) y amada(o) por alguien que no podemos tener,
mientras sentimos que estamos mendigando por un poco de
amor, la soledad, la tristeza, la impotencia, la rabia de haber
dado mucho en esa relación, hace que llores y desahogues
tus emociones, sufrirás, sí, el dolor es algo inevitable, pero
lo bueno es que el sufrimiento es una opción que cada uno
decide tomar o dejar.
La única realidad es que eso es todo menos amor, no
puedes estar persiguiendo a una persona declarándole tus
sentimientos, mientras ella (él) le demuestra, le declara sus
sentimientos a otro(a), si tú amas a una persona y ella no,
no es amor, es pasión, obsesión por querer tener algo que
no es para ti; el sentimiento es respeto, ternura, la pasión y
la obsesión sólo esclavizan al sujeto, hay amor cuando es
correspondido.
98 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando los dos se quieren, si es que en verdad dos


personas se aman, siempre se van a buscar, si una persona
no te busca, no lucha por su amor, no te ama.
Despierta tu razón, que haces leyendo esas cartas de
amor, llorando, abrazando el peluche que te ha regalado el
enamorado que ahora está con otra, que te ha sido infiel, no
seas un animal irracional, hasta ellos aprenden la lección,
aunque por allí dicen, que el ser humano es el único animal
que tropieza dos, tres veces con la misma piedra, entiende,
en la actualidad, en la mayoría de los casos, el siempre voy
estar a tu lado, el nunca te voy a dejar, no existe.
Evoluciona, que haces con la foto de esa persona en
un cuadro de tu cuarto, en tu billetera, cuando tu foto ya ha
sido reemplazada por la de otra persona, lo peor de todo es
que algunas personas todavía tienen el orgullo de decir, que
importa que esté con alguien más, yo le caía bien a su madre
y a todos sus hermanos, no seas doblemente irracional, es su
familia y van a permitir que entre en su casa, otras personas,
porque así no les agrade, todos buscan la felicidad de sus
hijos.
Al final esa persona que no te ama, al verte que te
vas, que estás saliendo ya de su vida, que eres feliz y estás
saliendo con alguien que te respeta, se dará cuenta de que
estás aprendiendo a olvidar e intentará regresar a malograr
tu felicidad, pero ahora tú habrás agarrado fuerzas, energía
para decir que no.
Allí es donde aquella persona que se alejó sin razón,
sentirá que su ego ha sido herido, y se reprochará el haber
perdido lo mejor de la vida, si por que cada uno de nosotros
somos lo mejor y lo más maravilloso que hay en la vida.
99 Richard. M. Cantera Ríos

Decídete ya a olvidar, Dios nos ha dado un regalo a


parte de razonar, el olvido, así que deja que el tiempo haga
su parte para que tus heridas del alma sanen por completo,
ten paciencia, llegará un momento en que como una ley de
la saturación tu mente se cansará, se reprimirá y tus ojos ya
no querrán llorar. Tu cabeza y tu razón ganarán la lucha
entre el sentimiento y las malas experiencias.
De un día para otro te darás cuenta aliviado que en
tu mente y tu corazón sólo habrá paz, tranquilidad, bellos
momentos, que arrancarán una sonrisa al recordarlos.
Pero hay recuerdos y errores en la vida que no hay
que olvidar, si es que lo haces estarás destinado a volver a
cometerlos, hay que aprender de ellos, no vivir en ellos. No
hay que vivir en el pasado sólo hay que recordarlos.
No hay que vivir en el pasado quedándonos como
unas estatuas mentales en un tiempo que por más felices o
tristes que fueron ya pasaron, es el tiempo de dar un paso
adelante viviendo tu presente pero en valores, teniendo en
cuenta siempre tus perspectivas futuras.
Hay pasos para olvidar, huir no funciona, no se debe
cambiar la vida por unas experiencias malas, menos por una
persona, enfrenta tus problemas, saca de tu vida lo negativo,
olvida lo que te hace daño. Hay que aprender la lección, vive
tu vida, sonríele a todos los que te rodean; Dios dijo: las
personas que ríen, y hacen reír a todos los demás tendrán
abiertas las puertas del cielo, así estés llorando, salte de ese
encierro, de esas paredes que sientes que te asfixian, intenta
divertirte, paséate, conoce a nuevas personas. Al final, lo
importante en esta vida, es vivir, con respeto, amor y con
pasión. Ello sólo se puede lograr con “La ley de la pausa”…
100 Richard. M. Cantera Ríos
101 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO IX – LA VIDA ES UNA PAUSA

Hoy aprendí… que el mundo de hoy es de aquellos que dan


pausas, que no ven la vida como una competencia en la que
hay que llegar primeros, pues mientras buscaban la fama, el
dinero, no se dieron cuenta que se olvidaban de disfrutar
minuto a minuto los buenos momentos que brinda la vida.
Utiliza tu pausa para entender que todo tiempo de
fama, éxito o felicidad afectiva es pasajera, ponte una pausa
para entender que la vida es como escalar una montaña en
la cual, a todos sin excepción nos tocará alguna vez llegar a
la cima de felicidad, de gloria que tanto buscamos, donde
nos sentiremos dueños del mundo, como tocando el cielo.
Pero, la realidad es que la estadía en esa cima será
momentánea, es como si tuvieras un marcador de tiempo
que te obligará a bajar al llano y así te aferres a quedarte
allí, será imposible, pues como una ley, en la que todo lo
que sube tiene que bajar, te tocará decaer porque nunca
hay situaciones perfectas, ni felices que duren toda la vida.
Cuando te toque decaer por situaciones de vida que
nadie planificó, buscarás desesperadamente a tu alrededor,
esperando a alguien que estire la mano para ayudarte a salir
de tu hoyo; decepcionado verás que tu mundo de amigos se
reducirá, allí te darás cuenta que algunas personas sólo se
acercaron a ti, por lo que les pudiste ofrecer.
Querrás volver a disfrutar aquellos bellos momentos
inolvidables con las personas que dejaste de lado, familia,
hermanos, amigos de siempre que nunca llamaste, porque
estabas ocupado buscando llegar a la cima o disfrutando del
éxito.
102 Richard. M. Cantera Ríos

Lamentablemente para ti, así desees regresar atrás el


tiempo para compartir con las personas que olvidaste, será
demasiado tarde, esos buenos momentos nunca regresarán,
solamente te quedará soñar, allí en tu mundo imaginario,
viviendo de tus recuerdos, intentando poner la pausa a tu
soledad.
Ponte pausa para quitarte esa petulancia de jefe o
líder, solamente porque la vida te dio una oportunidad de
sobresalir, sal de tu ignorancia, de que el mundo es plano
en donde tú eres el primero que camina adelante y el resto
te siguen como peones; el mundo es un círculo de vida, en
donde, todos caminamos aferrados a un suelo que se llaman
objetivos, metas, en donde nadie sabe quién estará primero,
en donde tarde o temprano tendrás que necesitar de esas
personas en la que menos pensaste, siendo ahora tú el que
camine detrás de los que algún día humillaste.
Ponte pausa para motivarte a cada momento, a cada
minuto, entiende que todos en este mundo tenemos una
motivación, un objetivo, una causa que nos hace luchar por
seguir adelante pese a las trabas que nos pone la vida, pero
esa motivación no sirve si es que no existe voluntad, firmeza
para hacer respetar, para hacer cumplir tus decisiones o tus
promesas.
Pon tu pausa, para aprender a decir no a situaciones
negativas que afecten tus decisiones ya tomadas, si cedes,
si dejas de cumplir tu palabra dirás no pasa nada es sólo esta
vez, pero ello no funciona así, para la próxima será más fácil
faltar a tus promesas, a tus decisiones, convirtiéndose en un
hábito negativo, al final, al pasar el tiempo no se cumplirán
tus objetivos.
103 Richard. M. Cantera Ríos

Únicamente te quedará disculpar tu mediocridad,


con palabras como: me faltó poco para lograrlo o quise, pero
no se pudo.
Ponte una pausa para motivarte, quererte a ti mismo,
motívate, entiende que siempre va a existir una luz en la
oscuridad que te estará esperando para iluminar de paz tu
vida; pero esa luz de tranquilidad exclusivamente lo puedes
encender solo tú, con tu fuerza de voluntad para decir no a
situaciones que te hacen daño, respetando tus decisiones
con firmeza, muriendo siempre en tu ley para cumplir con
tus promesas, pese a la soledad, la tristeza o las pocas ganas
de seguir.
Solamente, déjate ayudar, no existe una persona sola
en el mundo, siempre hay alguien que nos acompaña, que
está dispuesta a ayudarnos; busca a tus amigos de siempre,
a las personas que te consideran, estarán muy contentas de
volverte a ver, pero, sobre todo, busca lo más importante
que nos puede ayudar, dándonos fe y esperanzas, busca y
refúgiate en Dios.
Pon tu pausa, para ir a misa con toda tu familia, para
enseñarles a tus hijos que con la fe y la protección de Dios
todo es posible, pon tu pausa para agradecer a Dios por ese
maravilloso regalo que se llama vida.
Date una pausa, antes de quejarte de tu vida, de tu
religión; deja de hablar mal de Dios, de ver a nuestro señor
como un ser supremo castigador, ponte una pausa para
entender que todo lo que nos sucede, es para aprender las
lecciones de la vida, que por más difíciles que sean las
situaciones, nunca estás solo, Dios siempre te acompañará
será la fuerza que necesitas para afrontar tus problemas.
104 Richard. M. Cantera Ríos

Pon tu pausa, en tu relación de pareja, no la aceleres,


déjale su espacio, olvídate de llamar veinte veces al día,
aduciendo que es romanticismo, una preocupación por el
saber cómo está, cuando lo único que haces es ponerle un
disfraz a tus celos enfermizos.
Al final, lo único que lograrás es cansar y acabar una
relación de años, presionar, no funciona; ponte a pensar que
llamar muchas veces seguido, quita la emoción que produce
el escuchar esa dulce voz después de un lapso de tiempo;
¿te imaginas preguntando cómo te fue hace media hora?;
entiende que la relación se vuelve más interesante cuando
tienen más de que conversar.
Deja que en tu relación las cosas fluyan por si solas,
tómate el tiempo necesario para disfrutar de tu amor, se
han preguntado, ¿por qué las parejas terminan muy rápido
las relaciones?, es fácil, porque siempre quieren adelantarse
sin conocerse y no respetan los pasos que significa un amor
verdadero.
Pon tu pausa, cuando se acaba una relación de amor,
no puedes iniciar un nuevo compromiso con otra persona ni
bien terminas una relación, eso no está bien, pon la pausa y
espera el proceso mínimo de duelo y olvido de seis meses
para intentar empezar de nuevo.
Si es que vuelves a iniciar rápidamente una relación
sin conocerse, vas a fracasar, pues vas a intentar buscar
conductas, respuestas en la pareja que no las tiene, si te
aceleras vas aburrir y destrozar de nuevo tu vida amorosa y
nuevamente caerás en el círculo de la decepción, la pena,
el sufrimiento y la infelicidad.
105 Richard. M. Cantera Ríos

Date una pausa, para reflexionar, sobre todo, para


entender que cuando se toma una decisión de dejar algo
que te hizo mucho daño, hay que mantenerse con firmeza
respetando siempre tus principios y promesas, no puedes
estar cambiando tus decisiones a cada momento, con ese
pretexto de que hasta los más inhumanos merecen perdón,
las segundas oportunidades en los maltratos y golpes, no
existen.
Ponle pausa a tu vida, cuando sientas que te ahogas
en tu presente y sólo ves con miedo, que no hay un futuro
positivo para ti, es el momento de poner pausa al tiempo,
allí, en tu mente, regresando a un pasado en el que fuiste
muy feliz.
Es el momento de quitarse el disfraz de adulto, de
padre, de hijo mayor, de dejar de sentirte por un momento
ese muro con el que chocan todos los problemas y reunirte
con los mejores amigos de siempre e intentar volver a vivir.
Sonreír como adolescente, recordando un pasado
de bellos momentos, anécdotas inolvidables que marcaron
tu vida, ello te ayudará a recordar lo bueno que fuiste, los
objetivos trazados no cumplidos y poder agarrar las fuerzas
para encontrar nuevamente ese camino de tranquilidad y
éxito que siempre buscaste.
Pon la pausa en tu vida, para razonar y pensar que
eres un gran ser humano con defectos y virtudes como todos
los demás, pero sobre todo, para entender que eres único,
que eres lo mejor que existe en el mundo, y que mereces
ser feliz en la vida, porque cuando tú eres feliz las personas
que te rodean y te estiman también lo serán.
106 Richard. M. Cantera Ríos
107 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO X – VOLVIENDO A VIVIR

Al leer también los escritos de Layon que el padre le


alcanzó, Nova entendió más que el amor que sentía nunca
desaparecería, que ese sentimiento no iba a terminar jamás,
que lo mantendría vivo allí en su mente, en su corazón por
siempre, pero entendió también que tendría que intentar
seguir viviendo, y tratar de ser feliz, lo haría por el deseo de
Layon que quiso y murió pensando en que ella fuese feliz.
Decidió cambiarse de lugar de estudio, le faltaba un
año para terminar la carrera, en realidad la razón de cambiar
de lugar fue por Layon, todos los lugares le recordaban a él,
ya no quería hacerse más daño por lo que decidió internarse
en otra universidad.
Pero no fue tan fácil olvidar como pensó, el encierro,
la soledad terminó por completo sus ganas de vivir, mientras
su depresión aumentaba, comenzó a adornar todo su cuarto
de la universidad, con flores blancas en exageración. Alguna
vez Layon le dio a elegir entre flores blancas y rojas, cuando
ella escogió el color blanco, Layon le dijo, que escoger todas
las flores blancas significaba que en una relación se espera
que le den todo y ella nada, parece que el adornar con color
blanco era para ella un castigo para no volver a cometer los
mismos errores; sentía que el sufrir, deprimirse, el llorar por
Layon, era la única forma de que él la perdone donde esté.
Nova en su soledad sentía que su vida ya no valía la
pena, no iba a tener paz, porque tuvo el amor y lo dejó ir,
para ella todo lo que había buscado hace algunos años ya no
tenía sentido, nada lograba motivarla, solía encerrarse en un
mundo de soledad que lo absorbía más y más.
108 Richard. M. Cantera Ríos

Pero la soledad no existía solamente en su mente, ni


en su corazón, estaba en la vida huraña que llevaba; no tenía
amigos, se equivocó al dejar a sus padres y mejores amigos,
pensó que así estarían mejor, al no verlos sufrir por ella.
Lo cierto es que necesitaba del abrazo de sus padres,
de su familia, de todas las personas que la estimaban; y no
encontraba motivación por nada, lo que le daba fuerzas para
no rendirse eran los escritos de Layon, donde hablaba del no
rendirse jamás en la vida, e intentaba seguir hacia adelante
para no decepcionarlo como lo hizo antes.
Sentía, quería salir de esa depresión, pero ella a los
problemas no los dejaba ir, en su egoísmo, los cargaba, para
sufrir más; por ello en las aulas de clase todos comentaban
de su imnonesia, de sus largos sueños despierta.
En su egoísmo extremo, cansada de sí misma, por no
poder olvidar a Layon y que todo el mundo la mirara como
una persona rara, pensó en tomar la más estúpida decisión,
quitarse la vida, para ella era la única solución para no sentir
aquel sentimiento de culpa que lo asfixiaba.
Estaba decidida a hacerlo, preparó todo, escribió una
carta despidiéndose de todos, como si las personas la iban a
recordar, después de muerta, la peor mentira de un suicida,
sí, seguramente la gente que le tuvo cariño llorará en la sala
donde esté velándose, pero afuera la gente estará tal vez
riéndose y celebrando del haberse encontrado en su velorio.
La enterrarán, llorarán, sufrirán por ella, pero la vida
proseguirá para todos sin excepción, al pasar el tiempo ya
nadie la recordará, sólo su familia; no quiero equivocarme,
pero la realidad es que sus amigos estarán divirtiéndose,
sonriendo, viviendo la vida, sin recordar el por qué se fue.
109 Richard. M. Cantera Ríos

Hay personas que tienen el pensamiento cerrado


que amenazando, o intentando quitarse la vida lograrán atar
a una pareja, probablemente por pena, tal vez por temor o
por sentido de culpa la pareja se acercará un poco, pero en
realidad sentimentalmente se alejará mucho más, al final
esa persona huirá, porque no hay relación que sobreviva por
condiciones u obligaciones o por penas, sólo sobrevive por
dedicación, entendimiento, respeto y amor.
Quién no ha sentido alguna vez la infelicidad, donde
nuestro corazón es como una piedra que se desgrana poco a
poco, donde nuestra mente no tiene conciencia, y la razón
se va perdiendo, deambulando por la vida con una mirada
perdida, esperando la paz que al parecer nunca llegará.
Muchas veces nos encerramos en un cuarto, pedimos
a Dios que nos ayude, nos quite el dolor, pero lo pedimos sin
fe, sentimos que todos nos han olvidado y únicamente nos
queda llorar solos, porque lamentablemente no queremos
hablar y ver a las personas que amamos sufrir con nosotros,
muchas veces caminamos, nos sentamos solos en una banca
con la mirada perdida, tal vez para reflexionar, esperando
que los problemas se acaben, sintiendo que acaba nuestra
vida, nuestras esperanzas de ser feliz.
Antes de cometer un horror que marcará la vida de
los seres queridos, reflexiona, deja de lado los egoísmos, no
pienses sólo en ti, entiende que el mayor dolor ante una
decisión de suicidio lo van a tener los seres más queridos,
los que más amamos y los que más nos aman, ellos son la
familia, el hermano menor que te quería tanto, la madre, el
padre que sufrirán toda la vida, al sentir que ya no estará a
su lado lo que más aman.
110 Richard. M. Cantera Ríos

Ojalá entiendan que los problemas son parte de esta


vida, que cuando sientan que el mundo cae encima de uno,
donde la mente y el cuerpo no aguantan las presiones, las
injusticias de la vida; hay una solución que te puede sacar de
aquellos pensamientos negativos, ello se llama, motivación,
búscala, encuentra la motivación, tu causa, tu fuerza para
vivir, aunque sea mínima eso te dará esperanzas.
Cuando la encuentres aférrate con todas tus fuerzas
a ella, cuando encuentres motivos como, la familia, amigos,
valores, estudios y el motivo más grande, Dios, refúgiate en
ellos, que sean tu muro de protección y a la misma vez tú
valla, la que algún día saltarás para caminar solo y buscar
otros motivos y objetivos en la vida.
Te aseguro, que con la motivación y la firmeza para
no desmayar en el intento y cumplir tus metas, como magia
poco a poco el hilo de vida que querías cortar se hará más
fuerte y se alargará, a partir de allí aunque los problemas
sean muy fuertes no podrán romper tus ganas de vivir.
Ojalá entiendan que la vida siempre nos da muchas
oportunidades para enmendar nuestros errores, existe una
ley en la vida que se llama la ley de la saturación.
Todo en la vida tiene un límite, no existe persona que
no haya pasado por sufrimientos, cuando pasa ello sentimos
que nuestro corazón, nuestra mente no van a resistir más,
tenemos rabia, lloramos sin consuelo pensando que no hay
solución a nuestros problemas, razonando equivocadamente
que no hay nada, ni nadie que nos pueda ayudar.
Pero esa saturación hará que llegues a tu límite, que
te canses y satures, cuando pase ello será como si te bañaras
en líquido de aceite, en donde los problemas te resbalarán.
111 Richard. M. Cantera Ríos

Haciendo que logres olvidar, que tus ojos se cansen


de llorar, que tu corazón de tanto sufrimiento se haga fuerte
y que encuentres la paz que tanto buscabas, y así tus labios
vuelvan a sonreír.
Nova sentía que ya no soportaría, la locura se había
apoderado de ella, no razonaba, había perdido la voluntad,
las fuerzas para vivir, donde las personas que lo rodeaban no
le ayudaban en nada, al contrario se burlaban de ella.
Paraba deprimida con la mirada perdida, triste, los
ojos hundidos de no poder dormir.
Al percibir de sus problemas, algunos de sus nuevos
compañeros intentaron ayudarla, hablarle, sólo recibían una
mirada de desprecio, que decía, aléjense, déjenme con mi
tristeza, lo que provocaba que se quedara más sola.
La decisión de quitarse la vida ya estaba decidida,
escribió la carta de despedida a su familia y leyó los escritos
de Layon una vez más, cuando lo hacía, pensaba de nuevo
en darse la oportunidad de vivir, parecía que esos escritos le
daban fuerza para seguir luchando contra todos sus temores
y sentía la compañía de Layon en ellos.
Era una chica muy responsable, y quiso dejar todo en
orden, tenía algunos libros de la biblioteca que había pedido
para leer, los cogió uno a uno ya por inercia, su mente triste,
acongojada, no pensaba en nada, sólo en no estar en este
mundo, y estar al lado de Layon en la eternidad.
Cargó afligida los libros con dirección a la biblioteca,
caminando en el campus universitario con la mirada fija y
perdida como siempre, en ese momento pasaron corriendo
un grupo de muchachos, el primero de ellos topó los brazos
de Nova y los libros cayeron dispersos por varios metros.
112 Richard. M. Cantera Ríos

Algunos de los estudiantes universitarios pasaron por


encima de ellos, pisándolos como si fueran un simple papel,
al contrario de ayudar a recogerlos, se mofaron de ella:
-Búscate una vida, deja de soñar -le dijeron-
Nova no dijo nada, había perdido la capacidad hasta
para defenderse, agachó la cabeza, se inclinó y recogió los
libros casi con lágrimas en los ojos, ahora sentía que era aún
más invisible para todos los que lo rodeaban.
Mientras intentaba juntar los libros uno a uno, pasó
otro muchacho, sin darse cuenta pateó los libros regados,
iba a continuar su camino, pero miró a Nova, sufriendo en
recogerlos, se detuvo pensando en si perdía el tiempo o la
ayudaba.
No lo pensó más, se acercó a ella y empezó ayudar a
recoger los libros, lo puso en los brazos de Nova, pero al ver
que eran muchos libros, le dijo;
-¿Hola, cómo te llamas? yo soy Ricardo –Repitió- ¿te
ayudo a llevarlos?
Nova no respondió, Ricardo era un muchacho muy
amable, un poco hablador, con muchos amigos, caminaron
juntos a la biblioteca, Ricardo hablando y Nova pensando en
que le tenía pena, por eso la ayudaba.
Mientras caminaban cargando los libros, escucharon
algunas bromas de los amigos de Ricardo:
-Increíble, Ricardo está estudiando, donde estamos,
que está pasando, eres tú -dijeron riéndose-
Uno de los amigos le tocó la frente, como si Ricardo
estuviera enfermo.
Siguiendo de nuevo las carcajadas junto con las de
Ricardo, quien les respondía:
113 Richard. M. Cantera Ríos

-Nada mis amigos, los hombres nacemos así con la


cultura de la vida y de la experiencia, nada de libros, es para
venderlo para la entrada a la fiesta, respondió, -sonando de
nuevo las risas a carcajadas-.
-Son de la amiga -dijo-, muchachos les presento a mi
amiga,…..mm ¿cuál es tu nombre? -le preguntó-, ha, Nova
respondió mirando el nombre en sus cuadernos.
Antes de que se me burlen, les recalcó, ayúdenme a
llevar los libros, dándoles algunos a sus amigos.
En el camino Ricardo, miró la caratula del libro, eran
de física, por casualidad, el curso en que todos los amigos
estaban desaprobados, jalar el curso significaba un año más
en la universidad y no estaban dispuestos a volverlo a llevar
nuevamente, eso significaba pérdida de tiempo y dinero del
que no disponían.
Haciendo un gesto a los compañeros les dijo en voz
baja:
-¡Mira, física!
Sin pensarlo, no perdieron la oportunidad de pedir a
Nova que por favor les ayude a desarrollar las prácticas que
no entendían, que harían lo que sea por obtener su ayuda.
Nova al principio les respondió con una negativa, en
su mente sólo pasaba la idea de que la estaban utilizando,
aprovechándose para que les haga sus trabajos, pero ante
las insistentes, súplicas, se sintió conmovida por los cuatro
muchachos aceptando ayudarles, aunque más lo hizo por
corresponder el detalle que hicieron al ayudarle los libros.
Estuvieron todo el mediodía, gracias a la paciencia de
Nova, los amigos le entendieron más a ella, que a la cátedra
de su profesor.
114 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando terminó de ayudarles, Nova se paró saliendo


rápidamente de la biblioteca, ella percibió que Ricardo y sus
amigos, después que les apoyó en sus tareas, iban a ser igual
que los demás, dejarían de hablarle como la mujer invisible
que se sentía para todos.
Ricardo alzó la cabeza, viendo que Nova se alejaba
apresuradamente, sin pensarlo se levantó, corrió por detrás
de ella, la cogió de los hombros suavemente diciéndole:
-No te vayas todavía, acompáñanos a almorzar.
Ante la negativa de Nova, todos los amigos y amigas
vinieron a invitarla, repitiéndole:
-Por favor, acompáñanos.
Ricardo le insistió.
-No seas tímida amiga, no nos niegues el almuerzo,
nosotros pagamos.
Todos agregaron:
-No nos rechaces por favor, queremos agradecerte el
detalle de ayudarnos, eso vale mucho para nosotros.
Nova aceptó una vez más.
Por primera vez en casi un año de Universidad Nova
compartió la mesa con alguien más, después de la muerte de
Layon se negó a toda compañía. Después de mucho tiempo
hablaba con alguien, los nuevos amigos conversaban y reían
en la mesa, mientras ello Nova almorzaba, movía la cabeza
por las conversaciones locas de los muchachos, le agradaba
el grupo, esas sonrisas le daban vida, los chistes tontos, el no
poder parar de hablar y fastidiar, riéndose de todo, le hacía
recordar la Nova que era antes.
Después de tantas impresiones se paró, se despidió,
agradeció el almuerzo y fue con dirección a su cuarto.
115 Richard. M. Cantera Ríos

-¡A dónde vas! -le dijeron los amigos-, por qué no nos
acompañas, vamos a pasear.
-Vamos Nova, acompáñanos –agregó July, otra amiga
del grupo-.
Antes que responda, le hablaron:
-Te recogemos dentro de una hora, pero pensándolo,
mejor vamos, te cambias y luego nos acompañas -le dijeron
las demás chicas-.
Ante la insistencia de no poder huir de la invitación,
decidió nuevamente salir con ellos.
No pasó ni una media hora, todos los amigos llegaron
al cuarto de Nova, donde ya se encontraban las dos amigas
que acompañaron a Nova. Al demorarse en salir, todos los
amigos con Ricardo haciendo una enorme bulla, tocaban la
puerta, riéndose como siempre, para que se apresurara.
Mientras tanto Nova, sentada detrás de la puerta con
una foto de Layon en la mano, decidía, si seguir encerrada
sufriendo, llorando entre esas cuatro paredes que se habían
convertido en su cárcel, si, seguir viviendo en un pasado que
lo único que hacía era acabar con su vida poco a poco, o salir
a pasear e intentar olvidar con sus nuevos amigos.
Para Nova era muy difícil dar el paso hacia adelante,
al contrario desde que Layon falleció, ella sólo daba pasos de
retroceso huyendo de todo lo que significaba felicidad como
castigándose equivocadamente así misma de sus errores.
Los bullicios de Ricardo y sus amigas terminaron de
animarla, sabía que no iban a irse, si no salía acompañarlos,
Para ella fue muy difícil tomar esa decisión, pero el
pensar en sus padres, en el sufrimiento que les causaba su
depresión, la hizo motivarse para seguir con su vida.
116 Richard. M. Cantera Ríos

Con una gran fuerza de voluntad y firmeza, se secó


las lágrimas, y dio el primer paso para salir de aquel túnel de
oscuridad que tanto daño le estaba causando e intentó por
primera vez buscar la luz de la tranquilidad que tan esquiva
le fue durante tanto tiempo.
La tarde fue muy especial para todos, también para
Nova, Ricardo le presentó a un grupo de sus mejores amigos,
quienes con sus experiencias le enseñarían el cómo seguir
luchando en la vida, así se estuviera muriendo por dentro, el
cómo desaprender de todas las situaciones que hacen tanto
daño, utilizando siempre la razón, y poniendo pausa a todas
las decisiones para no arrepentirse en el futuro.
Allí aprendió que pase lo que pase, cuando se tome
una decisión, siempre hay que hacer lo correcto, eso hará
que nunca se tenga remordimientos, ni arrepentimientos
en un futuro.
Uno de los grandes amigos era Pier, él le enseñó que
para vivir, para afrontar los problemas, sólo dependía de
uno mismo, del como agarrar la fuerza apara enfrentar la
realidad de lo que te toca vivir en este mundo, que la vida
nunca será un paraíso completo donde todos son felices por
siempre, le enseñó que la mejor forma de vivir es sólo en
principios y valores que son herencia que jamás se deben
dejar de practicar así se vivan los peores momentos.
Lo aprendió de la persona que nunca se corrió de los
problemas, uno de los buenos amigos del grupo que se ganó
el respeto de todos los que lo conocían, pese a la situación
que vivía, jamás huyó de los problemas que lo rodeaban y
sobre todo, nunca se rindió a intentar ser feliz, esa persona
era Pier.
117 Richard. M. Cantera Ríos
118 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XI - LUCHANDO CONTRA LAS ADVERSIDADES

Mientras miraban a Pier sonriendo como siempre,


Ricardo empezó a contarle la historia de Pier.
Era inválido, desde que nació, sufrió una enfermedad
a los huesos, que nadie lo planificó, sólo el destino, aquellas
sorpresas de la vida; se podría decir que tenía la enfermedad
conocida como huesos de cristal, pues al mínimo golpe se le
rompían, teniendo innumerables operaciones a causa de las
caídas que se dio desde pequeño, pero dejemos el término
inválido, pongamos las palabras, autosuficiente, luchador,
físicamente tenía el pelo ondulado y ojos claros.
Era el mejor amigo de Ricardo, se conocieron desde
los cinco años, jugaban todos los días.
Desde niño, esa gran personalidad, con su carácter
fuerte afloraba ante todos, pese a su situación, como todo
niño inquieto, se arriesgaba a jugar todo deporte, porque
jamás se sintió inferior a los demás, igual a Ricardo, a Miguel
y a sus demás amigos, jamás les dio una pizca de pena su
situación, incluso se enojaban, gritaban y peleaban.
Pier era demasiado temperamental y como todos los
amigos, nos peleábamos, para estar en iguales condiciones,
Pier nos retaba sentado en su silla de ruedas, jalábamos una
silla para sentarnos frente a frente y nos agarrábamos a
cachetadas, ya supondrás el final, él, por manejar una silla
de ruedas tenía unos brazos muy fuertes, obviamente los
que perdíamos y terminábamos llorando, éramos nosotros.
Así transcurrió la vida para Pier y los mejores amigos,
fue pasando el tiempo, entrando a la etapa más difícil de la
vida para algunos, la adolescencia.
119 Richard. M. Cantera Ríos

Aunque creo que difícil fue para nuestros padres,


porque para Pier, Miguel, los tres amigos, fue la mejor etapa
de nuestras vidas; como olvidar esos momentos.
En esa etapa nueva nuestros juegos de niños, ya no
parecían tan divertidos, dejaron de gustarnos, empezamos a
crecer, sin darnos cuenta entramos en la adolescencia, con
esta etapa llegaron también a nuestra vida las personas más
especiales y también las más difíciles de entender en la vida:
¡mujeres!
Ellas nos raptaron la cabeza y el corazón, pese a que
intentábamos impresionarlas haciendo lo que sea por tener
su atención, el más solicitado por ellas, era Pier, supongo
que todas ellas se daban cuenta de las grandes máscaras de
comportamiento que teníamos como adolescentes, Pier al
contrario siempre se mostraba tal y como era, no trataba de
impresionar a nadie, por más bonita o hermosa que fueran
las chicas, siempre era sincero con todas.
Cuando íbamos a las fiestas era el primero que se
alistaba, no iba a permitir que lo dejáramos, por supuesto,
después de molestarlo que si quería ir, que se maneje solo,
siempre terminábamos llevándolo, jamás lo íbamos a dejar
solo, él era nuestro mejor amigo, aunque sabíamos que si lo
dejábamos era capaz de ir solo, siempre buscaba la solución
para todo y sí, seguro terminaría en la fiesta, no iba a quedar
encerrado mientras los demás se divertían, no, eso nunca.
Teníamos tan sólo dieciséis años, la consigna para
que su madre lo dejara acompañarnos, era que alguien de
los cinco amigos lo lleve y también lo regrese, es por ello que
siempre uno de nosotros, se encargaba de cuidarlo más que
el resto de los amigos.
120 Richard. M. Cantera Ríos

Entre bromas decíamos, el que maneja nunca toma,


hacíamos un sorteo para ver quién iba a estar encargado de
llevarlo, traerlo y por supuesto cuidarlo, es decir, teníamos a
un amigo que elegíamos para manejar su carro llamado, silla
de ruedas, aunque creo que en la mayoría de veces, el que
nos cuidaba era él, de nuestra inmadurez.
Era muy divertido ver como Miguel subía en la parte
trasera de la silla de ruedas y rodaban en los declives de las
calles, sin que Pier pusiera frenos a las ruedas, siempre a
mucha velocidad, como si estuvieran en un auto verdadero,
donde Miguel cuidándolo como siempre, para que nada le
pasara, reía sin parar y Pier seguro del cuidado de su amigo,
alzaba las manos gritando de emoción.
Desde que llegábamos a las fiestas, empezaban las
miradas de algunas personas, quienes equivocadamente con
esos prejuicios tontos lo observaban con pena o sorpresa;
claro está, Pier las percibía pero nunca les tomó interés, al
contrario, sin complejos les demostraba que no le afectaba,
se mostraba a todos sin ocultarse de las miradas del resto.
Su personalidad extrovertida hacía que siempre sea
el primero en salir a bailar y con seguridad como siempre de
sí mismo, cuando encontraba la pareja propicia, se dirigía a
ella, haciendo rodar las llantas de la silla de ruedas desde la
esquina de un gran salón, de extremo a extremo para sacarla
a bailar.
Como dije, cuando todos estaban sentados sin querer
salir a bailar, Pier era el primero en hacerlo, no lo hacía con
cualquiera, para ello siempre elegía a la chica más linda de la
fiesta, por supuesto, muchas de ellas se sorprendían que él
las invitara a bailar.
121 Richard. M. Cantera Ríos

Pero siempre accedían, por ver cómo bailaba, por la


presión de las amigas o de los adultos, seguramente algunos
en sus mentes cerradas, para no hacerlo sentir mal.
Por supuesto para Pier y nosotros era ideal, porque
generalmente las chicas lindas que elegía para bailar, tenían
amigas lindas, el primero en acompañarlo en la pista de baile
con su pareja, era Miguel, en realidad nunca lo dejábamos
solo y bailábamos cerca; Pier, en medio de los cinco amigos
inseparables del grupo, moviendo los pies que parecían de
un niño de once años, haciendo las piruetas de baile con las
manos, incluso moviendo los hombros, ante lo cual también
lo acompañábamos entre palabras y gritos de diversión de
todas las parejas.
Como dije antes, Pier, a parte de su problema físico
tenía otro, los huesos de cristal, cierta vez cuando íbamos
por la calle empujando la silla de ruedas, riéndonos de todo,
como siempre recordando nuestras anécdotas.
El amigo que empujaba la silla, se distrajo junto con
el resto de los cinco amigos, por saludar a una bella chica, no
se percataron que había un pequeño hueco en la pista, entró
la llanta delantera de la silla de ruedas y Pier que también
estaba algo distraído cayó fuertemente al suelo, se rompió
en dos pedazos los huesos del brazo izquierdo, literalmente,
solamente lo cogía la piel y los músculos al brazo.
Entenderán el dolor que le causaba las fracturas y la
impotencia de nosotros al no poder hacer nada, después de
algunos minutos llego la ambulancia, lo llevaron a la clínica,
una vez más le practicaron una operación muy dolorosa, le
pusieron varios clavos, enyesándole el brazo por tres largos
meses.
122 Richard. M. Cantera Ríos

Pero como dije al principio, como toda persona, le


molestaba que alguien le tuviera pena, eso hacía que pese al
dolor que sentía, intentara ser fuerte, mucho más fuerte de
lo que pensábamos, se reía de su accidente y pedía escribir
recuerdos en el yeso que le cubría el brazo, él siempre fue
valiente, tuvo como seis operaciones con clavos incluidos, en
piernas y brazos, solía reírse y decir que era un hombre de
acero, con tanta cantidad de clavos de metal.
Pasaron los años, entramos en la juventud, cada uno
elegimos nuestro límite, un camino de vida para superarnos,
por estudios en la Universidad y trabajos, ya no podíamos ir
a verlo para salir, él solo no podía movilizarse, por lo que
decidió ir a vivir a una ciudad de la costa, donde yo también
me mudé después de algunos años; le comentó Ricardo a
Nova, esta ciudad a él le permitía movilizarse mejor, además
toda su familia le recibió muy bien allí, Pier siempre tuvo una
muy buena capacidad para relaciones interpersonales, que
le permitió caer muy bien en cualquier lugar donde llegaba.
El siempre tener tema de conversación, le permitió
conocer por internet a una chica que vivía en el extranjero,
por su jovialidad, amabilidad y romanticismo, se volvieron
enamorados, el problema era que durante más de un año de
enamoramiento virtual, ella nunca supo de su invalidez.
Pensó muchas veces en no contarle nada, finalmente
su carácter fuerte, su valentía hizo que tomara la decisión de
decirle la verdad, aun sabiendo que esto significaba que ella
podía dejarlo.
Aunque tenía miedo, porque la amaba, le habló con
sinceridad como era él físicamente, mostrándose sentado en
la silla de ruedas.
123 Richard. M. Cantera Ríos

Ante esto su enamorada le terminó la relación, no


porque no existiera un sentimiento o huyera de la situación
física que vivía Pier, terminó la relación de pareja porque se
sintió engañada, por no ser sincero con ella, por lo que dejó
de comunicarse con él, casi un mes.
Fue una de las pocas veces que vi sufrir a Pier, pero
como siempre intentaba superar sus problemas y seguir para
adelante.
Le dije que hubiera esperado un tiempo para decirle
su situación, pero él comentó que había hecho lo correcto,
que era lo mejor, pues él ya no soportaba estar con alguien
aunque sea virtual, sin mostrarse tal y como era físicamente.
Entendí muy bien lo que dijo, nunca tuvo problemas
por la situación que estaba, allí me di cuenta que hay veces
en las que tenemos que actuar primero con la razón y no
con el corazón para no hacerse daño, ni herir a los demás.
Se dice que cuando el amor es verdadero, siempre se
regresa, Pier y su pareja no fueron la excepción, después de
casi un mes y medio de no hablarse, pudo más el amor que
el enojo o el orgullo.
La personalidad, la forma de ser, el temperamento de
Pier para enfrentar los problemas, había logrado un fuerte
amor, había hecho un nido en el corazón de su pareja.
Ella lo llamó, para decirle que lo extrañaba mucho,
que pensaba todos los días en verlo, en charlar con él, que
quería conocerlo en persona y no volverse a separar jamás.
Pier al escuchar esas palabras, estaba emocionado, le
dijo que la esperaba toda la vida, que venga cuando quiera,
se imaginan la emoción de Pier al ir a recibirla al aeropuerto,
de verla frente a frente.
124 Richard. M. Cantera Ríos

Al verse por primera vez se enamoraron más, como


dije anteriormente el destino nos da sorpresas, al final todos
sabíamos que ese encuentro entre ambos sería el inicio de
una gran historia de amor, el cual nunca acabaría al pasar el
tiempo.
Ellos se casaron al poco tiempo, como fruto de ese
gran amor tuvieron una preciosa hija, que al final sería, la
fuerza, la motivación para seguir luchando día a día en esta
vida.
Como puedes ver Nova, siguió comentando Ricardo,
Pier sigue siendo el hombre que ella adora, el que siempre
seguirá mostrándole una sonrisa frente a las adversidades y
situaciones difíciles.
Es el mejor padre que puede tener una hija, aunque
haya crecido más que él sonrió, siempre luchando por darle
todo lo que se merece, por supuesto, sigue siendo el mejor
amigo que tenemos y respetaremos por siempre, el amigo
que día a día nos da lecciones, ejemplos de cómo afrontar la
vida sin desmayarse en el camino.
Antes de que Nova intentara preguntarle más sobre
él, se acercó Pier.
-No prestes atención -bromeó a Ricardo-, sólo habla
puras mentiras para impresionar.
Nova sonriendo, respondió:
-No te preocupes Pier, no le creo nada.
Ricardo dándole un pequeño golpecito en la cabeza
de Pier, dijo sonriendo:
-Regreso amigo, no me la asustes extraterrestre he,
es muy buena chica y una gran amiga, posee una gran arma
que tú no tienes, inteligencia –retirándose sonriendo-.
125 Richard. M. Cantera Ríos

Al sentarse a su lado, Pier hablaba y hablaba, Nova


no paraba de reír con sus ocurrencias.
-Te cuento una historia de esos dos, -le dijo Pier-,
señalando a Ricardo y Jhon.
Como poder olvidar la primera borrachera de Ricardo
y Jhon, no estaban acostumbrados a tomar licor, pero con el
pretexto tonto de querer vivir desesperadamente, conocer
todo en la adolescencia, hizo que con algunos compañeros
de Universidad tomaran licor, si bien es cierto, ya lo habían
hecho solamente en brindis, igual les afectó.
Ricardo estaba ebrio caminando, como quien dice,
cuatro pasos para adelante y cinco para atrás, mientras que
Jhon, se podría decir que, le contaron que lo había pasado
bien.
Eran las siete de la noche y sus demás compañeros se
fueron, Ricardo ebrio, miró a Jhon, estaba completamente
dormido, intentó despertarlo pero él no respondía, no pasó
para nada en su cabeza dejarlo allí, decidió llevarlo, buscó en
el bolsillo para poder pagar un taxi, no tenía un solo centavo,
no quedó de otra solución que llevar a su amigo a su casa,
que no estaba muy lejos.
Como todo ebrio, pensaba que todo lo podía hacer,
cargó al hombro a Jhon, con la cabeza hacia delante y los
pies para atrás.
Ya te imaginarás la escena de ambos amigos, Ricardo
borracho caminando en zigzag, cuando se sentía cansado o
que se caía su amigo, se sentaba un momento en la vereda,
claro según su razón, lo soltaba despacio, pero cada vez que
descansaba el cuerpo de Jhon acariciaba el piso.
126 Richard. M. Cantera Ríos

Intentaba despertarlo y nada, Jhon seguía dormido,


nuevamente lo cargaba como podía y proseguía el camino,
ya entenderás como la gente se reía al observarlos, pero
también les agradaba, al ver la verdadera amistad de los dos
muchachos, alguien dijo, esto es amistad, al amigo nunca se
lo deja.
Ricardo pensó que había llegado a su casa, pero en
realidad estaba en la puerta de mi casa, luego, se dio cuenta
y tocó su puerta del costado, comento Pier sonriendo, vi que
no aguantaba más el peso, se sentó delante de la puerta de
su casa, cansado bajó de los hombros a Jhon, quien cayó
completamente ebrio y sin sentir ningún dolor en la vereda.
Tocó la puerta, mientras ello yo no paraba de reírme,
saqué mi cámara y empecé a tomarles fotos, mientras bajó
su hermano para ayudarle a entrar a su casa, Ricardo le dijo,
señalando a Jhon, es mi amigo llévalo a él primero.
Así hizo el hermano sonriéndose también de los dos,
aunque también seguro pensando en la verdadera amistad
de los dos amigos por no dejarse solos en esas situaciones.
-Hasta hoy me burlo de ellos, son buenos amigos, mis
mejores amigos, - comento Pier-.
Ricardo es una buena persona, gran amigo, sufrió
mucho por situaciones afectivas en la ciudad que vivió, para
tratar de olvidar se vino aquí, para empezar de nuevo hace
algunos años, ahora está muy bien.
La reunión se volvió amena, terminamos todos los
mejores amigos reunidos después de muchos años, juntos
en un círculo de amistad que al pasar muchos años nunca se
cortaría, pese al alejamiento y rumbo que cada uno haría en
sus vidas.
127 Richard. M. Cantera Ríos

De pronto, como siempre llegó el último de nuestros


amigos, Javier, tarde como siempre, por fin estaba completo
el círculo, le preguntábamos como estaba, que nos actualice
su vida, eran años que no lo veíamos.
Allí estaba Javier, ya maduro, contaba su experiencia
de vida en el extranjero, agradeciendo a su hermano mayor,
hablando del por qué lo apreciaba tanto.
El futuro del hermano mayor es ser el muro con los
que se chocarán los problemas, haciendo que su carácter se
hiciera más fuerte, por que cuando no estaban mis padres,
él tenía que afrontar las situaciones de la vida, siempre puso
primero a su familia, contó.
Cuando teníamos un problema recurríamos a él, casi
siempre le sonreía a la vida, aunque todos ya sabíamos que
sufría más que todos los demás, iba guardando siempre sus
problemas sólo para él, cuando nos reuníamos en familia, se
desahogaba a veces llorando, recordando como la vida es
dura para algunas personas.
Pareciera que para algunas personas, la vida dura,
difícil, jamás los va a dejar ser felices, pero lo positivo es que
ello, les enseña a afrontar con valentía todos los torbellinos
los problemas, su cruz para ellos, será una bendición para
otros, para aquellas personas que los necesitan y saben que
serán la fuerza de su familia, pues gracias a sus principios
perdurarán más allá de la vida, recordándolos por siempre.
Aunque todos ya sabíamos su historia, el hermano
mayor de Javier, era muy amigo de uno mis hermanos, entre
la confianza de amigos se contaban las penurias que les tocó
vivir como familia, especialmente la que pasó con Javier que
era su hermano menor.
128 Richard. M. Cantera Ríos
129 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XII – LOS PADRES, LA PIEZA PRINCIPAL DEL


ROMPECABEZAS FAMILIAR

Tengo un hermano menor que yo, habló el hermano


mayor de Javier, tiene dieciocho años, se llama Javier, por
ser el menor de los hijos, recibió muchas atenciones, a él le
tocó vivir situaciones económicas y de vida mejores que las
nuestras, desde pequeño siempre intentaron darle todo lo
que pidió, con la finalidad de que esté feliz, es decir, que viva
y tenga lo que sus padres nunca pudieron alcanzar.
Cuando terminó el colegio, como a todos los buenos
padres que quieren que su hijos se superen en esta vida, lo
inscribieron, con esfuerzo en una academia de estudios para
qué se prepare mucho mejor y esté listo para ingresar a una
Universidad; pese a ver el esfuerzo que hacían mis padres
por mejorar su futuro, mi hermano Javier, no entendió o no
quiso entender, que las oportunidades son pocas en la vida,
no estudiaba, adujo que ya estaba preparado, seguramente
pensaba que nos engañaba, cuando todos sabemos que los
únicos que se engañan son ellos, su etapa de prepa, la pasó
entre amigos y enamoradas.
Al llegar el examen de admisión, todos sabíamos que
no iba acceder a una vacante, aunque mis padres, esperaron
ansiosos resultados positivos; cuando les dieron la noticia,
que su hijo no alcanzó vacante, por primera vez después de
mucho tiempo vi llorar con mucho sentimiento a mi madre.
Ella se encerró en su cuarto, tratando de no hacer
sentir mal a su hijo, quien había tenido su primer fracaso,
ella conocía a Javier y sufría al saber que estaba propenso a
tener malos pasos en la vida, eso lo hacía sufrir mucho más.
130 Richard. M. Cantera Ríos

La reacción de mi padre no fue igual, también entró


al cuarto detrás de mi madre, la impotencia de saber que su
hijo no había podido ingresar, hizo desahogar su rabia con la
persona equivocada, con mi madre, le dijo:
-Por qué lloraba, si ya sabía que Javier no iba alcanzar
su meta, -alzando la voz más fuerte, increpó-,
-¡Si pues, allí está tu hijito, tú lo conscientes como si
fuera un niño!.
Mi madre le respondió:
-¡No me digas eso, acaso no es tu hijo también, La
responsabilidad es de ambos!.
Mi padre estaba enfurecido, salió del cuarto gritando,
volviendo a repetir:
-¡Claro, yo ya sabía que tu hijo no iba a ingresar, ha
salido a tu familia! –recalcó-.
Mientras mis padres discutían, fui y acompañé a mi
hermano Javier, quien intentaba ser fuerte, se percibía su
rabia y sentimiento al ver llorar a mi madre por su culpa, aún
así, se resistía a llorar, saliendo rápido de casa, seguramente
para desahogarse en su soledad.
Pasaron días, meses, les pasó la rabia a mis padres y
empezó la preocupación de nuevo por el futuro de Javier,
por ello le propusieron darle una nueva oportunidad, para
que se prepare para postular nuevamente a la universidad,
para ellos una profesión era la única forma de sobresalir.
Él, no quería, respondió que si querían que estudie,
que lo matriculen en una universidad privada de la capital
donde estaban sus mejores amigos, adujo en un berrinche
infantil, que si no lo mandaban allí, que no esperaran nada
de él, menos que estudie.
131 Richard. M. Cantera Ríos

Entenderán la negativa de mis padres, no estaban en


una situación económica adecuada para hacerle sus gustos,
menos para pagar una universidad cara de mucho prestigio
en la capital del país, y le respondieron que no podían, que
entendiera, no alcanzaba, el poco sueldo que percibían de
su jubilación, no les permitía pagar esa cantidad de dinero
así lo quisieran, mi hermano respondió tercamente, que no,
si ellos no lo enviaban, él no iba estudiar.
Es curioso los padres lloran, sufren, se preocupan, se
desvelan por los hijos que más errores cometen, será por
eso mismo que les ponen más atención, porque sienten
que hay que cuidarlos más y son muy propensos a cometer
errores.
En ese tiempo, yo, el hermano mayor, estaba en otro
país, trabajando en una universidad privada, mientras mi
hermano llevaba su vida fácil sin hacer nada por sobresalir,
deambulando, divirtiéndose con sus amigos, decía que había
estudiado muchos años y eso era suficiente por el momento
para él.
Su conducta empezó a cambiar de un momento a
otro, llegando muy seguido de madrugada totalmente ebrio,
se levantaba muy tarde, saliendo nuevamente en las noches,
sin preocuparse por nada; esa vida la tuvo cerca de un año.
Mis padres a medida que pasaba el tiempo, estaban
cada vez más preocupados al ver, al sentir que su hijo menor
llevaba una vida que ellos nunca le inculcaron, él solía llorar
mientras le hablaban, le aconsejaban que todos querían un
buen futuro para él, que por favor dirigiera su vida, que todo
tenía un límite en la vida, que buscara su norte y encontrara
su camino.
132 Richard. M. Cantera Ríos

Él se daba cuenta que el camino que llevaba era el


equivocado, abrazaba muy fuerte a mi madre, pidiéndole
disculpas por tener un hijo así y hacerla sufrir; un hijo jamás
debería hacer llorar a su madre, se decía así mismo; a veces
parecía que iba a cambiar su modo bohemio de vida, pero la
diversión, los malos amigos podían más que él y seguía con
su rutina casi diaria de fiestas, de alcohol, mientras nosotros
rogábamos que ojalá se mantuviera alejado de las drogas.
Mi madre, lloraba todos los días sin parar, su rostro,
sus ojos sólo expresaban tristeza y preocupación, su vida se
volvió muy difícil, nunca pensaron que en su vejez tendrían
que lidiar con el sentimiento triste de ver a un hijo perderse,
de ver a su hijo destrozando poco a poco su vida, su futuro y
lo peor de todo ya sin fuerzas suficientes para ayudarlo, ellos
sentían que Javier los necesitaba para salir de ese hoyo, en
ello, tenían mucha razón.
Muchas veces, cuando llegaba de madrugada ebrio,
encontraba todavía despiertos a sus padres, como siempre,
esperándolo, preocupados por él, los abrazaba y después de
pedirles perdón, les decía, que si ellos no estuvieran, nadie
se acordaría de él, solía insultarse, en su borrachera pedía
que ojalá muriera para no sentirse como una carga, luego los
abrazaba nuevamente, llorando como si fuera un niño, en su
inconsciente mi hermano pedía a gritos su ayuda, mis padres
sabían ello y no estaban dispuestos a dejarlo solo jamás, por
lo que ponían toda su esfuerzo para sacarlo de ese mundo.
Mi padre solía echarse la culpa del camino negativo
de Javier, pues el cometió un error al dejar por cinco largos
años a su familia, a sus hijos cuando eran niños, eso causó
que mi madre refugiara su soledad en mi hermano menor.
133 Richard. M. Cantera Ríos

Todas las atenciones fueron para él, dándole todo lo


que le pedía, pues en su soledad mi madre, sin pensar en las
consecuencias, dejó de entender que el ser una madre no
significa vivir para los hijos para darle todo, si no es vivir con
los hijos, es compartir todo incluido los momentos malos y
buenos.
Al percibir que su matrimonio había fracasado, por la
lejanía de mi padre, pensó que el único objetivo para seguir
viviendo en aquella soledad, era atender a su hijo de cinco
años, si bien es cierto, no es malo refugiarse en las personas
que amamos, pero cometió un error al no entender que un
hijo no está para llenar un vacío en la vida o para hacer feliz
a los padres, un hijo es para que toda nuestra vida, nuestros
esfuerzos se avoquen a enseñarles a vivir en valores, amor,
fe en Dios, también en enseñarles a defenderse y sobrevivir
en un mundo en donde casi todos piensan en sí mismos.
Por supuesto, también para compartir los momentos
de felicidad, penas, pobreza, riqueza, pero el problema viene
cuando se vive olvidándose de sí mismo, no entendiendo el
mensaje de que ser madre, una buena madre, no significaba
dejar de ser mujer, olvidándose, dejando de vivir, refugiando
la soledad en su hijo, no pensando en que al crecer su hijo y
empezara hacer su propia vida, su soledad se acrecentaría.
Mi madre, empezó inconscientemente a darle todo lo
que él le pedía, como siempre, terminaba haciéndole gustos
innecesarios, permitía comportamientos negativos, egoístas,
berrinches, gritos e insultos, sin corregirlo, únicamente por
no verlo llorar.
Se olvidó, que el carácter de un niño se forma en la
infancia y dura toda la vida.
134 Richard. M. Cantera Ríos

A menudo, mi hermano Javier vestía la mejor ropa,


siempre con el esfuerzo de mi madre, comprándole muchas
cosas, prefiriendo vestir a su hijo con ropas de moda, antes
de vestirse bien ella, gran error, los hijos se deben vestir de
acuerdo a como se visten los padres, de ser así, no tendrán
pena por el esfuerzo que hacen y sólo pedirán, gastarán sin
tener conciencia.
Mientras pasaba el tiempo, Javier se convirtió en un
adolescente engreído, entendiendo equivocadamente que
todo lo que pidiera, mis padres estaban en la obligación de
conseguirlo, siempre presionándolos, condicionándolos con
llantos o palabras de recriminación, aduciendo tener malos
padres si no accedían a sus caprichos.
Eso hizo que Javier, se acostumbrara a tener las cosas
fácilmente, sin la necesidad de hacer ningún esfuerzo para
conseguirlo, para mi madre era su hijo querido, al que tenía
que darle todo, con mucho trabajo nunca dejó de darle todo
lo que pedía.
Lo peor fue, no enseñarle el verdadero concepto de
lo que significa familia, por ello, cuando creció, no entendió
que al sufrir uno mismo, también sufrirá la familia, al igual
que, si algún miembro de la familia está feliz, todos los
demás lo estarán.
Cuando ya era de madrugada y Javier no llegaba, mis
padres solían levantarse a buscarlo por las calles, algunas
veces, mi padre intentaba detener a mi madre, ella insistía
en salir a la calle, aunque sea sola a buscar a Javier, mi padre
la acompañaba, con el miedo, que le estuviera pasando algo,
ya se imaginarán, dos ancianos caminando por la noche, sin
saber a dónde ir.
135 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando mi padre ya no la dejaba salir a buscarlo, mi


madre esperaba a Javier, viendo atormentada por el balcón,
soñando despierta, con la mirada triste, esperando que su
hijo llegue como antes, como cuando era niño y le prometía
que no iba a volver a cometer los mismos errores; en varias
ocasiones cuando descansaba, soñaba que algo le pasaba, se
levantaba bruscamente de la cama, gritando desesperada:
¡Mi hijo, dónde está!
Algunas veces, ella recibía las quejas de mi padre por
que su hijo Javier no llegaba, eso hacía que ahonde más su
preocupación, llorando en silencio, abrazando la almohada,
queriendo gritar de la impotencia y preocupación, sintiendo
que su corazón explotaba de la incertidumbre.
Yo, estaba fuera del país, decía el hermano mayor de
Javier, la impaciencia, el temor de que mi hermano se pierda
en los vicios, hizo que dejara el trabajo por unos pocos días y
viniera a ayudarlos, ni bien llegué, abracé emocionado a mis
padres; los años habían pasado muy rápido para ellos, los
sentía más ancianos, habían envejecido más rápido por las
constantes preocupaciones.
Pregunté por mi hermano, respondiendo que él, no
solía llegar a almorzar.
Ese día Javier llegó a las cinco de la tarde, al verme,
se acercó a saludarme, sorprendido de mi llegada, le dije:
-Alístate, vamos a salir a cenar.
Así lo hicimos juntos; después de mucho tiempo nos
sentimos en familia, todos unidos, aunque, por parte de mi
hermano, después de algunas horas, sentía la impaciencia
por salir, esa noche se quedó con nosotros, por el respeto
que me tenía, entendí.
136 Richard. M. Cantera Ríos

Al siguiente día, cuando Javier se disponía a retirarse


después de desayunar, mi padre con una voz muy segura,
cansado de conversarle, de concientizarlo, de exigirle que
estudie, le llamó la atención, esta vez, fue muy duro con él,
le dijo, ¡ya basta!, que dejara de ser el niñito que aparentaba
ser, y se comportara de acuerdo a su edad, pues, a partir de
la fecha, en su casa se tenía que respetar las reglas.
Le increpó, a darse cuenta, a pensar que la vida no es
un cuento de hadas, en el cual todos al final son felices, que
la única forma de intentar tener momentos de felicidad en
su futuro era estudiando, trabajando, esforzándose, para
así poder hacer felices a todas las personas que amamos, a
todos los que viven a nuestro lado, a nuestra familia, así la
felicidad no sea la de uno mismo.
Frente a la negativa de Javier, al ver su mirada, como
si nadie lo entendiera, queriéndolo enfrentar con la mirada;
le dijo nuevamente:
-¡Basta de no querer hacer caso a nadie en la casa!,
¿basta de las oportunidades perdidas!.
Yo sólo escuchaba, mientras miraba a mi hermano,
sabía que no iba a faltar el respeto a mis padres, menos a mí,
siempre lo cuidé y estuve en las malas situaciones con él.
Mi padre con más energía, le dijo:
-Hijo, te tengo dos opciones:
A partir del día de mañana vas a trabajar, te conseguí
un empleo, tu horario va a ser desde la ocho de la mañana
hasta la una de la tarde y a partir de las tres hasta las siete
de la noche.
Pero el trabajo no es de oficina -agregó-, recalcó que
ya aceptó por él y a partir de mañana trabajaría allí.
137 Richard. M. Cantera Ríos

Eso sí, dijo, mirándolo muy serio a los ojos, sé que no


va a ser fácil para nosotros aceptar que ya no estés a nuestro
lado, pero si no quieres trabajar te vas de la casa.
Mi hermano miró a mi madre para que lo proteja, lo
defienda, ella muy triste, haciendo un esfuerzo por ordenar
sus palabras, le habló:
-Hijo, lo siento, pero ya no puede defenderte como lo
hice antes, eres mayor para tomar decisiones correctas, tu
padre tiene la razón.
Mi padre, recalcó nuevamente:
-Ni creas que voy a esperar que acabes con tu vida
como lo estás haciendo ahora, ahora si quieres hacerlo, si
quieres complicarla peor de lo que está, hazlo, pero fuera de
este hogar o trabajas o te vas, porque superarte estudiando
no deseas.
Antes que responda, corté la conversación, hice una
pausa para pensar en lo que iba a decirles y luego agregué:
Hermano, yo te ofrezco una tercera opción, vente conmigo a
intentar buscar un mejor futuro en otro país, donde vivo yo,
allí estudias, te pago la universidad privada, yo voy a asumir
la responsabilidad, voy a pagar todo lo que necesites para tu
educación.
-La única condición es que estudies, eres mi hermano
menor, te mereces algo mejor en la vida, como la que estas
llevando hoy, -le dije-.
Pregunté a mis padres si estaban de acuerdo con mi
propuesta, pues sabía que se iban a sentir solos sin su hijo,
pero entendían, que si se quedaba no había un futuro bueno
para él y cedieron ambos con un leve movimiento de cabeza
que denotaba su tristeza al sentir que su hijo se iba a alejar.
138 Richard. M. Cantera Ríos

-Pero decide Javier, mañana me das la respuesta, -le


dije-
Esa noche mí hermano no pudo dormir, pensando en
las tres opciones que la daba la vida: trabajar, estudiar fuera
de su país o deambular fuera de su casa; no era una decisión
fácil, él era un joven, era muy difícil dejar su vida, e intentar
adaptarse a una nueva.
Al siguiente día, volví a preguntarle, esta vez sobre la
decisión que tomó, como arrepintiéndose de lo que había
decidido, con la cabeza gacha, sin mirarme respondió:
-Sí hermano, acepto tu propuesta-.
Se notaba que no estaba feliz, le dije:
-Mañana viajamos, despídete de tus amigos.
-No tengo que despedirme de nadie, -me contestó-,
ya no vale la pena lo que dejo aquí, sólo mis padres, que les
hice tanto daño.
Ya todos se imaginarán la despedida al sentir que nos
íbamos alejar, tal vez para alguno de nosotros para siempre,
fue difícil, muy difícil para toda mi familia, nuevamente nos
íbamos a separar; en esa corta espera del aeropuerto, todos
estábamos muy tensos, mirábamos la hora, esperando que
los minutos se vuelvan más largos, la verdad es que ninguno
queríamos separarnos.
Pero, esos minutos pasaron muy rápido, en esa corta
espera se volvieron segundos, tratábamos de disfrutar el
poco tiempo que nos quedaba charlando de los momentos
felices que habíamos vivido juntos, en familia, hasta que nos
alcanzó la realidad, llegando la hora del viaje; apenado con
un nudo en la garganta, le dije a mis padres:
-Ya es hora del vuelo, nos tenemos que ir.
139 Richard. M. Cantera Ríos

Fue el momento más difícil de mi vida, los ojos de mis


padres brillaban, sus lágrimas les daban vueltas, sus miradas
nos gritaban: por favor, no se vayan, los abracé, intentando
ser fuerte para no hacerlos sufrir más, sabía que iba a pasar
algún tiempo para volver a vernos; les dije:
-Hasta pronto, los amo demasiado, no se preocupen,
piensen en ustedes, nosotros vamos a estar bien.
Cuando me abrazó mi madre, sentí mucha nostalgia,
con su abrazo me quiso decir muchas cosas, parecía que me
quería dar sus fuerzas para seguir adelante, me dio miedo, al
sentir que se despedía como si ya nunca nos volveríamos a
vernos, me dio pena, rabia, porque la vida no era justa, por
buscar un futuro mejor tenemos que dejar a nuestros seres
queridos.
Mientras me dirigía al avión cayeron mis lágrimas, sin
dar la vuelta, sin mirar a mis padres, para que no sientan que
también estaba sufriendo al dejarlos una vez más, rogaba a
Dios que me permita darme otra oportunidad de abrazarlos.
Sequé mis lágrimas, giré la cabeza, vi a mi hermano,
él no pudo aguantar las lágrimas, abrazaba a mis padres; al
verlo así me di cuenta que por más errores cometidos, jamás
hubiera permitido que les pasara algo, me percaté, que si no
cometió más errores, fue tal vez porque al sentir mi ausencia
cuando me alejé del país, era él quien tenía que defender,
proteger a mis padres y ahora que se alejaba, sintió que los
había decepcionado.
Él siempre pensó que llegaría el momento de pagar
todas esas lágrimas y sufrimientos, con el orgullo de lo que
se iba a convertir, en un hombre de bien, de solo existir para
darles bienestar y felicidad.
140 Richard. M. Cantera Ríos

Lloraba también de miedo, al sentir igual que yo, lo


que podía pasar, percibió que a nuestro regreso, ya no los
encontraríamos, escuché pedirles perdón, que jamás se iba a
olvidar de ellos y se despidió.
En el vuelo lo abracé dándole ánimos, él solo, callaba
y pensaba, noté que nunca pudo expresar a mis padres todo
lo que había querido decirles y recompensarlos, con todo lo
que ellos se merecían.
Después de muchos años de estar lejos, la semana
que viví con ellos, me pareció unas pocas horas; el compartir
con la familia, me enseñó una vez más, que unidos todos
los problemas se superan rápido y son mucho más fáciles
de solucionar, yo también tenía problemas, pero al volver a
mi hogar, a mi país, ver y compartir con mi familia, hacían
que vaya mucho más tranquilo, con paciencia a enfrentar
las situaciones difíciles de la vida.
Al llegar a nuestro destino, observé a mi hermano, se
sentía algo extraño, era normal, no era como el lugar donde
él había vivido, llegamos a mi hogar, mi esposa y mi pequeño
hijo nos esperaban ansiosos, ellos le dieron la bienvenida.
Inmediatamente le mostré el cuarto donde se iba a quedar,
ordenó todas sus cosas y se acomodó en el espacio que iba a
ocupar por largos años.
Cuando acabamos de cenar, conversamos, lo primero
que hice fue darle las reglas de la casa, recalcando las horas
de llegada y de estudio.
Al siguiente día muy temprano lo matriculé en una
universidad privada, en la carrera que él eligió, compré todo
lo que necesitaba para ir muy bien puesto a la universidad,
solamente le pedí esfuerzo en el estudio, nada más.
141 Richard. M. Cantera Ríos

A la semana empezaron sus clases, asistiendo por fin


a la universidad, yo feliz por él, él no tanto, por el nuevo
mundo que le tocaba vivir, no iba hacer fácil adecuarse, era
una realidad diferente, con costumbres, idioma nuevo que
tendría que esforzarse en aprender.
Estaba estudiando tres meses, yo sabía su horario
porque trabajaba en la universidad.
Cierta noche, Javier tenía que estar en la casa a las
nueve, no llegaba, dieron las once y empecé a preocuparme,
rabiando a la vez de su inconsciencia.
La que trataba de animarme era mi esposa, dándome
a entender que los jóvenes de hoy son así, al igual que yo en
la universidad no siempre llegaba a las horas adecuadas a mi
casa.
-Te acuerdas, alguna vez seguramente has salido con
tus compañeros –repitió-, entiende a tu hermano, es joven.
Ante ello, le respondí todavía molesto.
-Voy a tratar de entender-.
Dieron las doce y no aparecía, me dije:
-No aguanto más la espera, ya es tarde.
Agarré el celular, le timbre, una, dos, varias veces,
seguía llamando, el celular timbraba por muchas veces sin
recibir contestación, mientras más transcurría las horas, me
preocupaba más, seguía timbrando sin saber qué hacer; eran
las dos de la madrugada, volví a timbrar y el celular estaba
apagado, lo que aumentó mi rabia.
Al pasar los minutos, mi corazón empezó acelerarse
de temor, mi mente pensaba en que le ocurrió algo malo; él
estaba bajo mi responsabilidad, tenía que haberlo cuidado
mejor, me decía.
142 Richard. M. Cantera Ríos

Dos y treinta de la madrugada y no llegaba, no podía


dormir, me hacia el dormido para no preocupar a mi esposa,
cerraba los ojos pero mi mente estaba despierta, sentía que
mi esposa me observaba; ella sabía que no dormía, estaba
preocupado; eran ya las tres de la madrugada, mientras ello,
empezaba una lluvia torrencial con truenos y relámpagos.
La situación es que no aguantaba la incertidumbre,
eran casi las cuatro de la madrugada y tocaron la puerta, mi
esposa desesperada se levantó de la cama, yo quise imitarla
pero ella lo hizo primero.
Tenía en la cabeza sólo pensamientos negativos, me
dije, la policía o mi hermano sufrió un accidente, como dije
antes, mi esposa salió al balcón a observar quién era y con
alivio, me dijo:
-Es tu hermano.
Respiré fuerte, la presión de mi cabeza se calmó, mi
corazón se tranquilizó, pero luego de la preocupación, vino
la rabia, mi esposa dijo:
-Voy a abrir la puerta.
Le respondí.
-No lo hagas, lo hago yo, descansa, -agregué-.
Pasaron cinco, veinte minutos, mi hermano seguía
tocando la puerta,
-Amor, -me dijo, mi esposa-, ¿te quedaste dormido?,
tu hermano está afuera en la calle esperando que abras la
puerta.
-Espérate, ya salgo, -le volví a repetir-.
Cuando vio que no me levantaba.
-Yo voy abrir -me dijo-.
143 Richard. M. Cantera Ríos

No te pares, déjalo afuera, yo sabré cuando lo hago


pasar, déjame hacerlo entender que hay horas de llegar a
esta casa, -le dije enfurecido-.
Ella me miró molesta, diciéndome:
-Eres inhumano, si fuera mi hermano, no lo trataría
así.
Mientras seguía lloviendo más y más fuerte, por fin
amaneció; la puerta dejó de sonar, eran seis de la mañana;
me levanté, después de bañarme salí rápidamente a trabajar
sin ganas de desayunar, la cólera, el sentimiento de culpa de
haber actuado mal, no me dejaba tranquilo.
Al abrir la puerta de la casa, encontré a mi hermano
sentado en la grada, muy arrimado, recostado sobre la pared
completamente mojado por la lluvia, él me miró, su mirada
expresaba resentimiento y cólera por haberlo dejado afuera,
yo ya me imaginaba que lo iba a encontrar así; dentro de mi
rabia, me decía:
-Si me dice algo, lo regreso con mis padres; si no está
de acuerdo con mis reglas, será mejor que regrese con ellos.
Ya lo había pensado, jamás lo iba agredir físicamente, no
tenía el derecho de hacerlo.
Supongo que él, también pensó en las consecuencias
que acarrea un error, le dije que pasara, mientras yo salía a
trabajar, no me respondió nada, entrando a la casa, escuché
a mi esposa preguntarle: ¿cómo estaba? y mandándolo de
inmediato a cambiarse.
En el trabajo no pude concentrarme, con los ojos casi
cerrados de lo que no pude dormir y más con la conciencia
que me decía: que había hecho mal al dejar afuera de la casa
a Javier, no estaba haciendo el mejor hermano con él.
144 Richard. M. Cantera Ríos

Mi mente empezó a entender, que la única forma de


ser un bueno padre, para no desesperarse en situaciones
negativas, era tener paciencia para actuar con inteligencia,
por otra parte, mi mente me decía, que nunca deberíamos
permitir que ningún hijo nos intentara imponer sus reglas,
aceptarlo sería un error.
Comprendí al fin que ante la ausencia de mis padres,
intentar suplirlos, tratando de educarlo como ellos lo hacían,
era complicado, yo era su hermano, y no iba a permitir que
elija caminos equivocados.
Al llegar a casa, él estaba sentado para almorzar, le
hablé que después de almorzar conversaríamos y así fue,
cuando terminamos, fui muy directo diciendo:
-Sabes bien, que esta es mi casa, aquí hay reglas que
respetar, horas que llegar, tú no puedes venir a la hora que
se te ocurra, menos de madrugada o ebrio, -le repetí está es
mi casa, las reglas son para que se cumplan.
-Sabes, que tengo un hijo y todo lo que tú haces, lo
va a imitar, porque él te estima mucho; así que, dime, si
quieres salir de esta casa; si sientes que vas a poder hacer lo
que quieras con tu vida sin pensar en el resto, aquí, no te lo
voy a permitir, en esta casa no hay espacio para tu egoísmo.
-Esta es una familia buena, todos los problemas lo
afrontamos juntos, lo que le pase a alguien de nosotros nos
afecta a todos y lo enfrentamos unidos, así nos hundamos
en el camino; deja de pensar sólo en ti, deja de ser egoísta
y piensa en las personas que te amamos, piensa que eres
parte de un círculo familiar que nunca te abandonara.
-Lamentablemente no estás en casa, -dije elevando la
voz-
145 Richard. M. Cantera Ríos

-No soy tu padre, algún día entenderás, si es que no


lo has hecho aún; los únicos que se van a preocupar por ti
en la vida son tus padres, tu familia; el resto viven su vida y
no les importas, este es el mundo en que vivimos, donde
cada uno vive por su bienestar.
Con pena le dije:
-Si sientes, que no hay cariño o cabida para ti en esta
casa, aunque te vamos a extrañar, porque eres parte de la
familia y quieres regresar, te voy a dejar ir; decide, te quedas
o te vas, acatas las reglas o no. No lo pensó mucho, él había
dejado una vida, por un futuro mejor, jamás regresaría a su
país, a su barrio sin lograr sus objetivos, soportaría penurias,
sufrimientos por lograr sus metas.
Sobre todo, no decepcionaría más a las personas que
tanto quería y extrañaba, a su madre, a su familia que sabía
que esperaban mucho de él; medio pensativo, respondió:
-Sólo quiero cumplir mis objetivos.
Entendí allí, que la vida lejos de los seres queridos, lo
habían hecho madurar, le hablé, que no le negaría permiso,
lo único que quería, es que me diga dónde está o que si va a
una fiesta; hasta que hora va a estar, que cumpla su horario.
-No te niego salidas -le volví a repetir-, háblame, para
no preocuparme, no me voy a negar a darte lo que pueda y
si te niego, igual entenderás, no todo lo que tú quieras se va,
o tiene que hacerse.
Han pasado tres años, no ha vuelto a venir tarde sin
avisar, entendió el consejo que le dio mi madre: razonar,
reflexionar, pensar antes de realizar o enfrentar situaciones.
Cuando le conté a mi padre de lo difícil que es ser la
cabeza de una familia, me envió una carta que decía…
146 Richard. M. Cantera Ríos

Como ser mejores padres…

Cuando naciste hijo mío, desde que cogí tus manos


y me miraste algo temeroso sin quitarme la vista, callando
intempestivamente de ese llanto sin temor a nada, como si
me conocieras de toda la vida, supe que compartirías la vida
y tus problemas conmigo, que cuando llegara el tiempo de
ese inexorable destino que se llama muerte, lo recibiría feliz
al saber que mis experiencias de vida, mis valores quedarían
plasmados en ti.
A medida que crecías, cada paso que dabas me hacía
sentir mucho más orgulloso del hombre que te convertías,
mientras seguías tu círculo de vida, alguna vez te reproché
esas ganas en exceso de querer ayudar a todo el mundo, de
compartir todo lo que tenías, sin pensar en ti, en un futuro
mejor, reproché tu poca ambición por ser alguien exitoso en
el mundo.
Pero, por más que te exigí pensar en ti antes que los
demás, sólo reías sin hacerme caso, compartiendo aun más
lo poco que tenías sin temor a reproches, allí comprendí que
nunca, jamás darías nada por perdido, que siempre lucharías
por lograr tus objetivos y hacer lo correcto.
Al pasar el tiempo entendí que hay que desaprender
de la idea que los hijos tienen que ser exitosos o ser modelos
de un hijo perfecto, que tienen que ser lo que uno no logró
en su vida, la realidad es que ya tuvimos la oportunidad de
cumplir nuestros objetivos, nuestros fracasos no pueden
ser cargados o subsanados por los hijos, hay que dejar que
ellos elijan su camino y destino.
147 Richard. M. Cantera Ríos

Entendí que el éxito no solamente está en tener una


excelente profesión, ni ser el más adinerado, está en que les
enseñemos que todo lo que ellos hagan en su vida, lo hagan
respetando las reglas, siempre en valores, enseñándole que
para lograr sus objetivos, nunca se deben humillar a nadie.
Entendí que no siempre la felicidad está en alcanzar
el éxito económico o en las grandes cosas materiales, está
en esos éxitos familiares, que por más insignificantes que
sean mientras se hagan en y para la familia siempre traerán
situaciones positivas de felicidad.
Entendí que si tienes una gran familia, es porque Dios
quiso darte un buen destino en donde tengas el regalo más
grande del mundo que un padre, una madre puedan tener,
los hijos. Hijos, para que día a día tengas un objetivo para
luchar y al verlos con orgullo, sientas que estás allí, en todo
lo que son ellos, porque también tu sangre corre por sus
venas, porque eres el reflejo de ellos, porque gracias a todas
tus enseñanzas son cada día mejores personas, para que rías
de felicidad con sus éxitos y llores con sus fracasos, siempre
sabiendo que con tu presencia a su lado, ayudarás a superar
sus trabas, sus caminos de vida difíciles.
Al final de tu vida, en la adultez mayor, los mirarás
orgulloso de tenerlos a lado tuyo y serán ahora, los hijos
quienes te admirarán, no solamente porque los ayudaste a
ser mejores personas o a tener una profesión para lograr el
éxito, sino porque los protegiste, porque les enseñaste a
como caminar y luchar en ese gran círculo que es la vida.
Entendí la importancia de estar a su lado de los hijos
con una gran sonrisa, no te niegues la felicidad de sentir, de
dar la sonrisa a un hijo al verte como su gran héroe.
148 Richard. M. Cantera Ríos

No te niegues nunca, jamás a dar la mano a un hijo,


entiende, que si tú no estás a su lado, es como si él andara
perdido en un laberinto, buscando con desesperación una
salida, un camino que tú ya conoces, esperando, gritando
que lo ayudes con esa tu experiencia, que lo auxilies en su
inseguridad, en sus fracasos, con un abrazo, con una palabra
de apoyo, con tu compañía en su soledad, sobre todo, con el
saber que siempre te va a tener a su lado, dispuesto a no
rendirte, a luchar contra cualquier obstáculo o situaciones
sólo por protegerlo.
Entendí que la familia es aún más importante que las
ocupaciones, que cuando se viva situaciones complicadas,
son los primeros en apoyarnos, estando siempre dispuestos
a dar su vida por vernos felices.
No dejes que el trabajo se convierta en una cárcel,
abre tu reja, despréndete de esos barrotes que te encierran
como un animal domado, que hace lo que le ordenan los
jefes. Piensa que en el trabajo siempre serás reemplazable y
cuando ya no te necesiten, te desecharán sin pensar en los
años de esfuerzo que diste por algo que nunca fue tuyo; en
la familia, toda la vida, tú serás la pieza principal de un
rompecabezas, que jamás estará completo si no estás.
Por ello, nunca abandones, nunca pongas de lado a
tu familia por la rutina del trabajo.
Sal a pasear con tus hijos pequeños, entiende que el
tiempo de disfrutar por completo de la compañía de tus
hijos sólo durará hasta los trece años, después posiblemente
ellos mismos por situaciones de maduración, crecimiento,
adolescencia, preferirán compartir más situaciones con los
amigos de su propia edad.
149 Richard. M. Cantera Ríos

Entendí que hay que poner una pausa, para respirar


profundamente y reflexionar, cuando se tenga que tomar
decisiones importantes donde implique la separación de
una gran familia, ponte una pausa para olvidarte de los
problemas, para disfrutar a tus hijos, para admirarlos y reír
con todos ellos, pon la pausa con tu esposa(o) recuerda las
canciones con las que se enamoraron, dedícale un poema,
prepárale lo que más le gusta, agradezcan ambos que están
juntos compartiendo una vida con sus hijos.
Entendí que hay que poner la pausa, a la infidelidad,
sobre todo en ese momento donde la razón se perdió y sólo
funciona el libido, detente un momento para pensar en lo
que puedes perder; pon la pausa a la pasión, recuerda que
jamás en tu vida debes dejar un sentimiento, una buena
persona por una pasión, lo bueno estará allí siempre, pero
la pasión se acabará y se irá.
No seas de las personas que habla de uno mismo, sin
dar la pausa para escuchar a la pareja, a tu esposa que te
está hablando, escúchala, mírala con detenimiento, traduce
lo que dice; sí traduce lo que expresa, pues toda mujer dicen
que esta adelantada un minuto más que tú y casi siempre
previene lo que está pasando.
Reflexiona, piensa, cuando sientas que tu matrimonio
a fracasado, por las peleas incesantes, los golpes, insultos,
maltratos, infidelidad; deja de estar dando disculpas a todo,
explicación a los maltratos físicos y psicológicos que estas
sufriendo; toma ya una decisión actúa como una mujer, no
como una niña que se aferra a una pareja como si fuera
una muñeca de su infancia, aléjate de lo que te hace daño,
deja de vivir en un mundo oscuro, lleno de tristezas.
150 Richard. M. Cantera Ríos

No esperes estar en un hospital o cementerio, donde


tus hijos o seres queridos lloren y sufran por ti.
Entendí que hay que desaprender, de seguir en ese
círculo de la pobreza como si fuera herencia de generación
en generación, deja ya de seguir ese círculo, es difícil, para
ello esfuérzate en crear otro círculo de bienestar económico
y emocional, te aseguro que en el camino con tu ejemplo no
sólo te superarás, si no también arrastrarás a tu familia y a
tus seres queridos a ese éxito tan esperado.
Entendí que los padres no estamos en este mundo
para ver a un hijo como una raíz para preservar un apellido,
menos para vivir como una esponja del cariño de un hijo, y
egoístamente cuando se tienen que marchar no dejarlos ir
porque sentimos que el cariño, la energía de amor que llena
nuestros días se está yendo, mendigando amor porque nos
sentimos viejos o acabados.
Entendí que envejecer es inevitable, es parte de la
vida, al final, los años no importarán, sino las experiencias
que has dejado de vivir en el corto tiempo que te toca estar
en este mundo, entendí que los años pasan, pero ellos han
dado algo admirable que tienes que tomarlo en cuenta, se
llama experiencia, enfoca tu energía en enseñar y ayudar a
los demás, a las personas que te rodean, usando siempre tu
sabiduría adquirida durante tantos años.
Entendí como hijo que las madres son únicas, que
su corazón es muy grande, abierto siempre para sus hijos;
que siempre estarán a nuestro lado, pensando en nuestra
vida, en nuestro futuro, cuidándonos, preocupándose por
nuestro bienestar, buscando dar una vida mejor de la que
ellas tienen.
151 Richard. M. Cantera Ríos

Comprendí que sin su cariño, su apoyo, sus consejos


andaríamos deambulando por la vida cometiendo errores,
que así tengamos los años avanzados, siempre seremos
unos niños para ellas, cogidos de sus faldas, como quien se
perdería sin su presencia, como quien no sabría que hacer
sin sus sabias palabras.
Entendí que siempre hay que darles un tiempo a lo
más valioso e importante que tenemos, a nuestros padres,
llevarlos a cenar al lugar más elegante que se conozca, para
compartir un momento de paz y felicidad con ellos.
Por situaciones finitas humanas de vida que nadie
espera, pero que lamentablemente todos tendremos que
llegar algún día, cuando ya no los tengamos a nuestro lado,
sólo quedará el placer y el recuerdo feliz, de que en vida se
compartieron grandes recuerdos en familia.
Entendí que para que nuestras familias, las personas
que amamos, consideramos, estén bien y sobre todo felices,
primero hay que estar anímicamente bien nosotros; si no
es así, no sólo sufrirás tú, también los arrastrarás como si
fueras un imán a tu mundo, a tu abismo de infelicidad a los
que más amamos, entendamos si un miembro de la familia
está bien, todos lo estarán.
Por ello no seas pesimista, negativo frente a la vida;
la felicidad, la tranquilidad no es algo lejano, ni imposible
de alcanzar, sólo tienes que empezar por ti, con acciones
positivas que dé a pocos te dará energía, fuerza para llegar a
cumplir todos tus objetivos, tus metas, y así no sólo tener la
tranquilidad, la paz que deseas, si no también hacer feliz a
las personas que más se quiere, a la familia que es lo mejor
que Dios, la vida nos ha podido regalar……………………………
152 Richard. M. Cantera Ríos
153 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XIII – DIFERENCIA ENTRE EL ERROR Y EL HORROR

Javier estaba muy emocionado de volver a unirse con


sus amigos, los amigos de siempre, con los que compartió
sus mejores años de vida, de sonrisas y grandes recuerdos;
estaba orgulloso porque siempre utilizó su razón, por más
equivocaciones, errores que tuvo, jamás cometió horrores,
decía, con la ayuda de Dios, siempre se dejó llevar por su yo,
su razón; mientras se felicitaba, hablaba de las situaciones,
experiencias en las que gracias a Dios, a la familia, a la razón,
que fueron quienes señalaron el camino correcto de su vida.
Mientras seguía hablándonos de la importancia de
utilizar la razón, empezó a contar sus anécdotas; alguna vez
me ofrecieron drogas, nos comentó.
Hubo un compañero en primer año de la universidad,
tenía actitudes y comportamiento que no me agradaban, era
muy selectivo, elegía a las personas con quien juntarse, las
chicas con quien salir; lo hacía siempre desde un punto de
vista material y económico, presumiendo siempre por tener
un auto lujoso o ropa cara, a las compañeras, si eran guapas
les decía:
-Suban al auto, las llevo.
Si no eran agraciadas, simplemente ni las miraba.
Los compañeros, sus amigos, tenían que ser supongo
de su nivel económico, de su clase, no sé, un pensamiento
medio estúpido e infantil, para una persona de universidad.
A mí, no me cuadraban ese tipo de gente, pero él se
acercaba a nuestro grupo de amigos; lo dejamos entrar para
darle una oportunidad de cambiar o más bien, porque él
siempre intentaba entrar al grupo, así lo excluyéramos.
154 Richard. M. Cantera Ríos

Para no perder la costumbre, como siempre, un día


llegué muy tarde a clases y no me dejaron entrar, mientras
me lamentaba, llegó, para mi mala suerte este compañero.
No es que sea un prejuicio, nos decía, hay gente que
te cae antipática sólo al verlo y éste ya caía mucho peor por
su comportamiento extraño; bueno, lo encontré.
-Habla -me dijo-, qué tal, qué haciendo.
-Aquí de muy mala suerte -le dije; pensando en que
también llego él-.
Todos sonreímos y Javier continuó su historia.
-Vamos a mi casa, acompáñame a traer los trabajos
como que tomamos una gaseosa por allí con unas amigas.
-Respondió él-.
La gaseosa no me motivó, pero sus amigas de hecho
que sí, estaban muy buenas, no lo pensé mucho, había dos
horas libres, más las dos que llegué tarde.
-Había tiempo para todo -pensé, así que vamos dije-
Cuando estábamos por llegar, lo llamaron algunos de
sus amigos.
-Habla, ¿dónde estás?, -le preguntaron-.
-Llegando a mi casa, vengan -les dijo, invitándolos a
que vayan por allí-.
Llegamos a su casa; la realidad es que su jardín era
más grande que mi casa completa; sus padres no estaban,
habían viajado, él estaba solo; al poco tiempo llegaron tres
de sus amigos y cinco chicas, muy preciosas ellas, se notaba
que todos eran adinerados.
Yo, no tenía problemas por ello, nunca me sentí más
ni menos que nadie en el mundo y esa situación no iba hacer
la excepción.
155 Richard. M. Cantera Ríos

Así que, sin pensarlo me acerqué a hablar con una de


las chicas, en plan de conquistador, además yo era dueño de
una de las mejores armas para enamorar a una mujer, tenía
siempre temas de conversación.
-A las mujeres de hoy, les gusta que los hombres sean
interesantes, ellas nunca quieren un pavo agraciado que no
sepa hablar, ni menos aburrido –dijo-.
Agregando, yo tengo esas características.
-De lo de pavo -dijimos todos riéndonos-.
No, -respondió-, lo de guapo e interesante.
Reímos ahora, más que antes, diciéndole.
-¡Ya, sigue contando, no alucines!.
Mientras conversaba con una de las chicas; siguió
contando Javier; intentando impresionarla o que se enamore
de mi personalidad, mi compañero como un buen anfitrión,
estaba circulando una botella de refresco con olor a whisky.
Probé sólo un poco para no despreciar y no ser mal
educado, -dijo-, no me gustaba el licor, -recalcó-.
Todos reímos nuevamente, eso era imposible en él,
molestándolo en son de broma.
De improviso uno de los amigos del compañero, dijo:
-Compártelo con todos.
Para mí sorpresa, sacó droga, cocaína. Agarrando un
vidrio tipo espejo, empezó a olfatear por la nariz.
El tema de drogas, no era ajeno para mí, me habían
hablado, desde primaria, secundaria hasta en la universidad;
mis padres también trataban muy seguido esos temas, la
verdad, muy pocas veces le puse interés, siempre me dije a
mi mismo:
-Eso no va a pasarme jamás.
156 Richard. M. Cantera Ríos

Pero, escucharlo era otra situación, que estar allí, era


totalmente diferente estar en ese momento complicado que
nunca planifiqué, sólo quedé pasmado, sin saber que decir o
hacer, callado mirando cuando pasaban las drogas, parecía
ser un simple juego para ellos, que no traería consecuencias.
El pata de al lado, me dijo:
-¡Habla, es bueno!, ¡pruébalo, te va hacer sentir muy
bien!, ¡no lo pienses demasiado!, hay cosas que no hay que
pensarlas sólo hacerlas, vivirlas y disfrutarlas –recalcó-, lo
vas a pasar muy bien.
No le respondí nada, moviendo la cabeza en señal de
negativa.
-Vamos Javier -me dijo-
La vida es una sola, aprovéchala, no va a pasar nada
por una vez que lo hagas-repitió-.
En esos momentos, salí de la sorpresa.
-Nada, yo paso -le dije-.
Créanme agregó, yo, no estaba en ese momento para
decir, que cambien o hablarles de moral, difícil, eran nueve
contra uno.
Las chicas también empezaron a drogarse, yo quería
retirarme, pero no sabía cómo escaparme de allí.
Sentí un poco de temor, sabía de las consecuencias
que traen las drogas en las personas, al captar mi sorpresa,
vino una de la chicas a la que al inicio conquistaba, se acercó
con una gran sonrisa sentándose a mi lado, dijo:
-Javier, por qué no nos acompañas en la diversión,
prueba, ofreciéndome la droga, hazlo, lo vamos a pasar muy
bien, tú y yo solos, vamos no seas tímido, no pierdas esta
oportunidad de estar juntos.
157 Richard. M. Cantera Ríos

Por más interesante que me creía, el objetivo era que


me drogara, en un tono irónico, le pregunté, si podría pasar
algo con ella sin eso, señalando a la droga, piénsalo me dijo
súper coqueta, con una sonrisa que expresaba, que estaba
dispuesta a todo.
Mientras el compañero de la universidad, también se
acercó.
-Habla Javier, un toque -me dijo, queriéndome pasar
un cigarro de mariguana-.
La primera vez que me lo ofreció, me dejó, medio
asustado, pero esta vez le respondí:
-No, paso, -sin dudarlo ya-.
Cuando intentó presionar por segunda vez, le dije:
-No le entro a eso –ahora con gran seguridad-.
Devolviéndole la pregunta.
-¿Qué tú le entras a esa vaina?, ¿por qué te drogas?.
Allí, se dio cuenta, supieron que no podían influir en
mi decisión, hagan lo que hagan no iban a convencerme de
fumar o ingerir las drogas, lo único que el compañero sugirió
fue, que no le contara a los amigos de la universidad, ni a
nadie de lo que hacían.
-No hay problema, son tus cosas, tus decisiones. -Le
respondí, mientras me despedía-, saliendo raudamente del
lugar.
Al salir apresuradamente de la casa, yo me felicitaba,
porque lo primero que me funcionó allí, fue la capacidad de
razonar, reflexionar, por poder decir no a situaciones que
hacen gran daño, me di cuenta, que se podía enfrentar las
tentaciones que se presentan en la vida, pues siempre hay
un límite del cual no debemos cruzar jamás.
158 Richard. M. Cantera Ríos

El caso es que al final, después de algún tiempo todos


los amigos se enteraron de su problema, de la adicción que
tenía a las drogas.
Lamentablemente para él, eso hizo que se alejara
cada vez más de las buenas personas; en su adicción terminó
jalando al abismo a su enamorada, quién era una muy buena
chica, pero supongo que no tuvo la voluntad para decir no,
la curiosidad se convirtió en una abismo sin fondo para ella
también.
Que puedo decir al respecto, al parecer en ese loco
afán de buscar lo distinto, lo diferente para lograr salir de
la rutina, algunas personas buenas se relacionan con las
personas equivocadas en su vida, pareciera que buscamos
lo opuesto de caracteres.
Esa es la gran diferencia entre unas y otras personas,
algunos primero actúan y luego piensan, no es malo a veces,
pero en la mayoría de casos terminamos arrepintiéndonos
de lo que hacemos, lo peor es que, después de cometer los
errores no podemos regresar al sendero de lo correcto o es
muy difícil hacerlo, aunque estoy seguro, con gran fuerza de
voluntad se puede todo, aclaró.
Pero, si razonas, reflexionas antes de realizar algo,
te va a permitir pensar en las consecuencias de tus actos,
eso hará que tomes tus propias decisiones, sin perjudicar tu
vida.
Después de la vida, la razón debe de ser el regalo más
grande que nos ha brindado Dios.
Cuya capacidad nos ayuda a decidir entre la bondad
y la maldad, tomando nuestras propias decisiones que a la
larga dirigirán nuestro destino, nuestro futuro.
159 Richard. M. Cantera Ríos
160 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XIV – LA LEY DE LA SATURACIÓN EN EL AMOR

La reunión estaba cada vez más interesante, todos


los amigos y amigas de siempre compartíamos recuerdos
inolvidables, la mayoría habíamos hecho un círculo, mientras
algunos pocos bailaban.
Entre uno y otro tema de conversación, Javier suelto
de palabras como siempre dijo:
-Las mujeres son como las comidas, el mismo menú
siempre cansa, imagínense comer tallarines todos los días,
en tu desayuno, almuerzo, en la cena, nos va a llenar, cansar,
saturar, cierto muchachos –dijo-.
-Sí, dijimos todos a una sola voz, por eso hay que
variar de cena de vez en cuando.
-Y muy seguido, -recalcó Javier-.
-Aunque hay varias cenas muy ricas y sabrosas que
demoran en llenarnos -agregó Carlos-.
-Sí, -volvimos a repetir todos-, riendo a carcajadas,
sin poder aguantar las sonrisas.
July una de las amigas del grupo de toda la vida que
también acompañaba, movía la cabeza en señal de negativa,
molesta de nuestro machismo.
-Palabras tontas y además retrogradas, -dijo-.
Cuando busquen a otras mujeres y varíen el menú,
como ustedes dicen, recién se darán cuenta que el menú,
puede ser siempre el mismo, pero la sazón, el sabor, jamás
lo van encontrar en otros lugares, e intentarán regresar a
probar de nuevo, pero esa comida estará degustándola otra
persona que querrá comerla todos los días durante toda su
vida.
161 Richard. M. Cantera Ríos

Ahora ellas se rieron de nosotros; como que no nos


gustó lo que opinó. Javier respondió rápidamente:
-Después que hayamos cenado esa comida, ya para el
otro, serán o quedarán sobras, -dijo Javier-.
July tampoco estaba dispuesta a perder, respondió
rápidamente:
-Lo siento Javier, pero hay comidas que nunca vas a
degustar, para las comidas que preparamos las mujeres, no
te alcanza como hombre, lo que ofreces, no alcanza ni para
las sobras de lo que hablas.
Antes que responda Javier, Pier los interrumpió.
-¡Ya, paren de pelear!, lo único que hacen es darnos
hambre –comentó-, todos los amigos y amigas reímos.
Mientras seguíamos poniéndonos al día de nuestras
vidas y riéndonos de todas nuestras anécdotas, mirábamos a
Miguel bailar y reír muy contento con su enamorada, como
siempre Javier, suelto de palabras, opinó.
-Recuerdan a Miguel, estuvo muchos años con su ex
enamorada, todos pensábamos que iban a tener una vida
juntos, como es el destino, nadie sabe lo que nos espera,
quien iba a pensar que en esa pareja que aparentemente su
relación era muy sólida, se iba a desaparecer, acabar el amor
después de tanto tiempo.
-Eso es cierto, -agregó, July-,
-El amor se acaba, hay veces que después de luchar
tanto tiempo por salvar un amor, y recibir sólo problemas,
ofensas, maltratos, insultos, llega un momento en que éste
se desaparece, se va, se acaba el sentimiento como si fuera
una huella en un desierto, que el viento ayudó a cubrir de
arena para siempre.
162 Richard. M. Cantera Ríos

-No -dijo Nova-


Todos, la miramos y escuchamos atentos, mientras
seguía hablando.
-El amor es un sentimiento que jamás así pasen los
años, siempre va a estar allí, reposando en un corazón, ni el
olvido, ni el tiempo va hacer que desaparezca un verdadero
sentimiento, sólo olvida el que no ha amado de verdad.
Sus palabras sonaron muy convincentes, con tanta
sinceridad, pero con mucha tristeza que todos callamos.
El único que estaba dispuesto a dar su punto de vista
era Ricardo, como siempre sin callarse, dijo:
-Te doy la razón Nova, el amor nunca se acaba, pero
se muda, va cambiando de lugar, de persona, sino mírenlo a
Miguel, ama mucho a su enamorada ahora, no sabemos si se
acabará el amor con ella, no creo, se ven felices, lo que sí es
seguro, es que cuando tenga sus esperados hijos, el amor se
compartirá, se trasladará a ellos también y su amor de padre
hará que su vida sea para toda su familia.
-Como dije- el amor nunca se acaba, sólo cambia de
lugar, muchas veces se traslada también a las personas que
te rodean, a los hijos, nietos, a la familia.
-Sí, yo dije siempre ello, -habló Javier-, es la verdad
amigos, -dijo-, el hecho de amar a una persona, no significa
que tengas que llorar o esperarla para siempre cuando se va,
además te enamoras, quieres, amas de un modo diferente,
te agradan cualidades, características que otra persona no
las tiene y eso hace que te enamores, ames una vez más.
-Ahora entienden amigos, por qué mi amor se para
trasladando de mujer en mujer, -dijo-.
-Yo, me he enamorado como quince veces –agregó-
163 Richard. M. Cantera Ríos

-Todos nos reímos una vez más, aunque aceptando


hasta Nova, que en parte había algo de, razón, de cierto en
lo que decía Javier.
Únicamente, July lo miraba con ganas de maltratarlo,
como siempre dispuesta a contradecir las ideas machistas
agregó:
-Sí, el amor se traslada de persona a persona, pero
eso pasa cuando abrimos los ojos, cuando nos damos cuenta
del tiempo que perdimos a lado de alguien equivocado, allí
nos preguntamos sorprendidos: ¿cómo me pude enamorar
de esos tipos, que juegan con una y otra?.
-Mirando molesta a Javier, -agregó-, será porque en
su complejo de don Juan, de mujeriegos inseguros, no tienen
los suficientes pantalones para mantener a una sola mujer
en su vida.
De hecho que el amor cambia de persona, -replicó
Javier-, ello porque muchas veces la mujer nos cansa con su
control exagerado, creyendo a cien por ciento en lo que dice
su intuición, como si fuera una bruja aprendiz de Merlín,
para saber lo que pasa siempre, sobre todo, nos cansa con
sus celos enfermizos, que no son, más que un reflejo de su
complejo de inferioridad por sentirse menos que otra mujer,
-dijo, mirando a July-.
-Ya, cállense -les dijimos-.
Sabiendo, que otra vez empezaban nuevamente con
su discusión.
Mientras Nova preguntaba, el por qué ellos discutían
tanto.
- Pier, respondió-, cierto, esos dos nunca se ponen de
acuerdo, ¿pero, si que se extrañan?, -reímos-.
164 Richard. M. Cantera Ríos

-Discuten demasiado, son dos polos opuestos que se


atraen, como el amor y el odio, aunque, para que haya amor
debe haber química y ustedes dos parecen que la tuvieran,
-los fastidiaron sonriendo-.
-Inmediatamente, -July respondió-, desaprendan de
ese concepto, que entre el amor y el odio hay un solo paso,
entiendan, ambos son polos opuestos, al contrario, entre
esos extremos hay muchos pasos, cada uno de ellos implica
decepciones, desaires, maltratos, golpes, gritos, esas frases
son estereotipos que alguien invento para disculpar su
fracaso, su amor enfermizo, su masoquismo por gustarle
sufrir; la conclusión es muy simple, nunca se puede amar
de verdad a alguien que te dio cosas negativas en la vida.
-Carlos, agregó- pero hay personas que los maltratan,
golpean y se aferran más, en nombre de su amor.
Allí sí, todos coincidimos en la idea, que eso ya no era
un sentimiento, pues lo que decían era cierto, era un amor
enfermizo o miedo a lo que les pueda pasar, hasta una baja
autoestima por pensar que si las dejan, no tienen un futuro.
-Aunque hay algunas personas que sólo prometen
que van a dejar a lo que les hace daño y siempre, pese a sus
promesas terminan regresando en nombre del amor o sus
hijos, -comento Lizbeth-.
-Pier, respondió- claro, ello es fácil de explicar, lo que
falta en esas situaciones se llama voluntad y motivación,
motivación para entender que siempre habrá una mejor
vida lejos de los maltratos y falta de voluntad al no cumplir
con gran firmeza su palabra, sus decisiones, aunque no son
fáciles de dejar, porque se llora, se sufre en soledad, pero
uno mismo se felicita cuando pasa el tiempo.
165 Richard. M. Cantera Ríos

-Pero tampoco sueñen, no existe la química, menos


aún la media naranja; no hay dos personas en el mundo que
piensen igual, que tengan los mismos gustos, personalidades
similares, todos pensamos, actuamos, sentimos de manera
diferente, -agregó apresurado Javier-.
-Así que olvídense de que existe la media naranja o tu
persona ideal, -habló, nuevamente July-.
-Cierto, agregó Javier- no lo hay, no existe la química,
en el amor, al principio las personas sólo nos adecuamos a
los gustos, a intereses de la pareja, así cuando la conoces
mejor, poco a poco, terminamos enamorándonos de sus
virtudes, cualidades y ello se da sólo con la comunicación,
cuando la pareja no dejan de escucharse y hablar. Allí te das
cuenta, que no quieres abandonar una buena conversación
o cuando sonríes todo el día con esa persona y no quieres
dejarla ir, sólo tomarla de la mano para siempre.
-Tienes toda la razón Javier, -dijo July-.
Al darse cuenta que los mirábamos sorprendidos que
concordaban más de lo que pensaban, agregó:
-Al menos tienes la razón en algo en tu vida.
Todos sonreímos, mientras celebrábamos que por fin
estaban de acuerdo en algo, mientras ellos con sus miradas
pareciera que se decían:
-¡Estar juntos, no sueñes, eso nunca va a pasar!.
Pier, el más maduro del grupo, como esperando el
final para opinar, dijo:
Cierto, en el amor no existe la química, ni menos el
masoquismo, pero creo que muchas personas se equivocan
al pensar que el amor es un sentimiento, emoción o pasión
sexual.
166 Richard. M. Cantera Ríos

El amor, es una buena e interesante conversación


que durará horas y horas sin cansarte, disfrutando, riendo
con una muy buena compañía, el amor es saber escuchar,
respetarse, sentir confianza, es sentir que la persona que
está a tu lado va a compartir toda una vida de felicidad y
por qué no, también de tristezas.
Si no, miren a los adultos, después de muchos años
de casados tal vez su amor no tiene la misma sensación de
jóvenes, pero es seguro que en la ancianidad quedará una
buena relación, con mucha comunicación, compañerismo y
cariño, esperando estar siempre juntos, hasta la eternidad.
Miguel, también se unió al grupo, creo que se había
dado cuenta que estaban opinando sobre él.
-Se imaginan, como sería el declararse a July, -habló-.
-Inmediatamente Javier, -dijo-, te golpea o te da un
palabreo moralista.
Todos rieron.
Saben, -agregó-, hay tres tipos de mujeres cuando un
hombre les declara su amor.
-La primera chica, es la que mientras uno intenta
expresar lo que siente, revisa el reloj, mirando de un lado a
otro, como si estuviera apurada, algunas de ellas presionan
con palabras como: apresúrate, dime qué quieres hablarme,
que tengo muchas cosas que hacer.
-Yo me he chocado con varias de esas -dijo Juan-.
-Sí, a ti te paran rechazando -nos reímos-.
-Pero, no es más que la segunda, cuando ya siente
que estas intentando expresarle tus sentimientos, tu cariño,
te corta de una y dice, no gracias, no me interesas o ya tengo
enamorado; no me llames, te llamo.
167 Richard. M. Cantera Ríos

-Esa es July –dijeron, riéndose todos-.


-La tercera, es la que te mira a los ojos y te escucha,
cuando siente que te pones nervioso, te coge la mano, como
entendiéndote y animándote a seguir, como quién también
está deseosa, ansiosa de escuchar tus sentimientos; eso nos
da mucho ánimo y hace que uno exprese mejor las palabras,
-dijo, Javier-, así son todas las mujeres conmigo.
Pier, -agregó- terribles tres situaciones de amor para
cualquier hombre, claro eso pasa siempre y cuando haya un
verdadero sentimiento, si no probablemente no hay nervios
ni emociones.
-Lizbeth -otra amiga, agregó:
- Pero ello depende de la situación amigos, no es que
haya tipos de chicas, lo que pasa es que los hombres piensan
que tenemos el derecho de escucharlos a la hora que ellos
quieran.
Si supieran que hay algunos, que en su alucinación
piensan que es romántico hacer escuchar canciones; llamar
ebrios a las tres de la madrugada para decirte que le gustas,
o que te extrañan demasiado, ¿se imaginan como se siente?,
que te despierte un borracho, timbrando insistentemente
cuando tu sueño está en su mejor hora, para decirte que te
extraña, que está en una fiesta que no te llevó.
Miguel, -opinó-, no es así Lizbeth, cuando una mujer ama de
verdad te contesta a cualquier hora, sea por emoción o por
preocupación.
No intenten mentir, a todas ustedes les encanta que
las extrañemos, cuando eso pasa, sienten que ya tienen el
poder y que nadie va a entrar en su territorio, si no pasa eso
probablemente, no has amado de verdad.
168 Richard. M. Cantera Ríos
169 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XV - LA ACTIVACIÓN DEL SENTIMIENTO

Ricardo, nuevamente habló, estaba dispuesto a dar y


defender su opinión:
-El amor es innato, es un sentimiento que nace con
nosotros, no hay una persona en el mundo que pueda negar
a tenerlo alguna vez, ello sólo está a la espera, en pausa, que
alguien venga y presione el interruptor del amor, que puede
estar en donde ustedes quieran imaginarlo, en su corazón,
en su mente, en el libido, o en el placer disfrazado de amor.
-Dijo sonriendo-.
-Esa activación se realiza de manera diferente, tanto
en hombre como mujer, con situaciones que de acuerdo a
nuestra personalidad se activará con lo que más se admira o
valora, ello hará que nos enamoremos.
-El amor se da como consecuencia de una activación,
metafóricamente hablando, en el juego del amor las mujeres
tienen tres interruptores, en la cabeza, en el corazón y en las
sensaciones de placer.
-Aunque para mí, -recalcó- nuevamente Javier, lo
único que puede activar ese interruptor del amor se llama,
detalles. Sí, volvió a repetir, mientras todos escuchábamos
atentos, el primer interruptor del amor se encuentra en una
zona muy difícil de llegar, pero muy fácil de conquistar, se
llama corazón; -dijo- como si fuera un experto en conquistar.
-Escúchenme, -continuó Javier-, el amor, es como si
prendiéramos un interruptor que se encuentra en el lugar
donde más débil es una mujer, en el corazón, éste se activa
con un interruptor llamado detalles, es lo único, que hace
que una mujer termine enamorándose.
170 Richard. M. Cantera Ríos

Todas las mujeres estaban ansiosas por contradecir,


pero no lo hicieron, pues, querían escuchar con curiosidad el
argumento final de Javier y Ricardo, sólo escuchaban atentas
queriendo saber los pensamientos machistas de los hombres
y qué buscamos con los detalles o romanticismos.
Por supuesto, también, en qué pensábamos de ellas y
cómo las conquistábamos, además, el escuchar que sólo se
enamoraban por los detalles, las hizo reflexionar, aunque se
notaba que Yuly, Nova, Lizbeth, estaban muy molestas por
los comentarios machistas de Javier.
Igual, estábamos muy interesados de saber, cómo era
la táctica para enamorar y hacer que una mujer cediera y se
rinda a nuestros pies.
-Ricardo, -agregó-, detalles traducidas en acciones, el
cariño sin miedo de mostrar a todo el mundo, a la pareja que
te acompaña, los regalos, dados con sinceridad, con todo el
corazón sin importar el precio, sin pedir nada a cambio de
ello; las cartas románticas inspiradas en el amor verdadero,
las locuras de amor solamente por verla reír de felicidad, los
recuerdos inolvidables de amor.
-Sí, -interrumpió Javier-, todo ello que dice Ricardo
harían que una mujer entregue el corazón y algo más.
-susurró despacio-.
Allí, todos reímos sin poder aguantar las risas, era
obvio, que la idea de amor como sentimiento de Ricardo y
Javier, era totalmente diferente.
Antes que le recriminaran, Javier, por primera vez,
como nunca, pidió disculpas a las chicas, les dijo que era la
verdad, que estuvieran preparadas para no ser engañadas y
al final sufrir.
171 Richard. M. Cantera Ríos

-Lo curioso, -agregó Javier-, es cuando se activa el


amor, parece que en la mayoría de los casos, se desactivará
el siguiente interruptor que está en la cabeza, nuestra razón;
allí se cumple esa frase que dice:
-“El primer paso del amor, es el último de la razón”, -
interrumpió Carlos-.
Javier estaba convencido de su argumento, siguió
hablando:
Cuando una mujer está enamorada, es como si esos
sentimientos hicieran que el amor se activara de fuerzas,
como si se llenara de energía y reinara en los pensamientos,
ayudando a desconectar, desactivar el segundo interruptor
llamado razón, quedando ahora enceguecida en una ilusión,
sin luz, para seguir los principios y valores adquiridos en toda
su vida.
Cuando se haya desactivado, la razón de la mente,
parecerá un juego de dominó, en donde los principios caen
desactivados rápidamente, pareciera que se dejara llevar
sólo por su placer, activando en ella la pasión la emoción, el
sentimiento, dándole ahora disculpas a todo lo que pase en
nombre del amor, cuando en realidad es un placer, o pasión
disfrazado de amor, allí se podría decir la frase “el amor es
ciego o casi nunca somos lo que aparentamos ser”.
Allí, es donde pareciera que las enseñanzas de años,
en algunos casos se pueden olvidar en minutos, en instantes,
la razón de respeto, de los valores, los largos consejos del no
dejarse llevar por sus placeres, el no, el nunca, el jamás, se
dejan condicionar, decaen y ceden dando paso al después,
desactivando por completo el último interruptor, la razón,
dejándose llevar por los placeres, por el libido.
172 Richard. M. Cantera Ríos

Perdiendo algo tan valioso para una mujer, como la


virginidad, principios morales, díganme por placer, pasión,
antivalores o por amor, pero la razón deja de funcionar por
momentos en la vida.
A partir de allí, existirá un antes y un después del
amor, en la mayoría de casos, la razón seguirá cediendo, el
sentimiento, enceguecerá aún más nuestra razón, dando a la
pareja muchas características positivas que no las tiene; a
todo lo negativo que hizo esa persona siempre le dará una
explicación, lucharán contra todos los que intenten alejarte
de tu amor, aferrándote a esa persona como una niña a un
dulce, un dulce que sólo sabrá a amargo, porque todo lo que
se apresura, sobre todo sin conocerse, sin pensar o razonar,
siempre termina mal, donde siempre hay uno quien perderá
más que otro.
Cuando las mujeres pensaban sobre el argumento de
Javier, algunos de nuestros amigos, lo miraban queriéndolo
maltratar por hacer público y ponerlas en aviso de la mejor
forma de enamorar a una mujer, mientras el otro grupo de
amigos trataba de convencer a las mujeres, que los detalles
verdaderos sin pedir nada a cambio y respetando los valores
eran parte del verdadero amor.
July estaba dispuesta a no callar y dijo convencida:
Si se trataba de hablar metafóricamente, en el caso
del hombre sus interruptores de amor se encuentran en la
razón, el corazón y en su libido.
-La única diferencia, -agregó-, es que en el hombre,
en su corazón nunca hay sentimientos, sino atracción, por
ello cuando conocen a una mujer, siempre observan la parte
física.
173 Richard. M. Cantera Ríos

Se activará por caras hermosas, imponentes caderas,


cuerpos esculturales, y su amor que él promete serán sólo
pasión y obsesión.
Estando dispuestos a rogarnos, engañar, humillarse,
hasta prometer lo que no pueden dar, solo por satisfacer su
placer y su gran ego de sentirse cada vez más macho al estar
con muchas mujeres.
Sí, aplaudieron todas las chicas, ofendidas por algo
que sólo era una conversación.
-Lizbeth, -agregó- por ello su mente, corazón estará
activado para buscar sólo placer, es más, la verdad es que su
corazón, su cabeza, su cuerpo, tienen tantos interruptores
que siempre estará activado con un nombre muy grande que
se llama, placer sexual.
Pier, nos miraba sonriendo por nuestra conversación,
nos dijo:
-Puede que tengan razón los dos, pero, lo que sí es
seguro, es que con el pasar del tiempo y vayan pasando los
años por ustedes, esa activación por amor o placer quedará
en pausa y llegará una etapa en la que se activarán por la
admiración, por las virtudes, por los valores como respeto y
la responsabilidad.
-Lo que sí es cierto, cuándo en una relación de pareja
hay sólo placer, penas, maltratos, humillaciones, infelicidad,
siempre se desactivará el amor, como ustedes dicen, no
importa si son años compartidos o hijos que aparentemente
los unan, los aten, ya no habrán sentimientos, emociones ni
menos pasiones, serán extraños al verse, quedando su amor,
en recuerdos que por más bellos que hayan sido acabarán la
relación.
174 Richard. M. Cantera Ríos

Pero saben, lo bueno es que algún día sin pensarlo, te


activarás nuevamente, elegirás ahora a una persona por sus
virtudes, teniendo en cuenta las experiencias y aprendizajes
vividos para no volver a equivocarte, allí es donde reinará la
razón sobre los sentimientos.
Sí, agregó Miguel, mirando a su enamorada que era
su novia, mostrando el anillo de matrimonio con orgullo.
-Hay personas que se activan de amor por siempre,
para toda la vida, no sean pesimistas, ni tampoco facilistas, si
no vean a algunos de nuestros padres y abuelos, quienes al
pasar el tiempo, la distancia, por más que estuvieron lejos o
en problemas, no se dejaron llevar por el facilismo de querer
ver a su matrimonio hundirse, entendieron perfectamente,
que en la unión en pareja no todo es felicidad, que también
se vive en un círculo de penas y sinsabores; entendieron que
hay que aceptarnos mutuamente con todos los defectos de
la pareja, siempre intentando subsanarlos, pensando no sólo
en uno, sino en ambos, en las personas que más se ama, que
en algunos casos son los hijos que quieren, anhelan, sueñan
con la felicidad y la tranquilidad de sus padres, pidiendo a
Dios que no separe nunca, lo que más aman.
Finalmente, entiendan, en la realidad -volvió a repetir
Pier-, nunca mandan tus sentimientos, ni la activación del
corazón; si habláramos metafóricamente de ello, la razón es
la llave cuchilla que manda a todos los interruptores de tu
cuerpo y pensamientos.
Todos escuchábamos atentos, pensando en todo lo
que decían, miramos a July, escuchaba pensativa con cara de
rabia y melancolía, pensando en alguna experiencia que le
sucedió en su vida.
175 Richard. M. Cantera Ríos

CAPITULO XVI - ¿LOS DETALLES SON LA LLAVE PARA


ACTIVAR LA NECESIDAD DE AMOR?

Había un compañero en la universidad, él se llamaba


Joaquín, su familia tenía una muy buena posición económica
y era único hijo, eso le permitía manejar mucho dinero.
La vida para él era diversión y poco estudio, por ello
siempre se sentaba al fondo del aula de clase, entretenido
en bromear con todos, no era muy agraciado físicamente,
pero en él, se podría dar la frase: El mundo de hoy, no es de
los modelos o galanes, si no de la personas inteligentes, de
los entradores, que tengan tema de conversación.
Teníamos una compañera muy hermosa, tenía unas
curvas de infarto y una cara de modelo; aquella chica era
July, una tarde, Joaquín emocionado al verla pasar, la llenó
de piropos, intentando enamorarla, ella sólo lo miró de pies
a cabeza y sin pensarlo como quien menospreciarlo, le dijo:
-Disculpa, no crees tú que estás volando muy alto, no
soy el tipo de chica que puedas aspirar, deja de soñar.
Todos rieron sin parar, burlándose de él, pues había
sido rechazado de una forma muy vergonzosa.
El temperamento de Joaquín, no era el de huir, ni de
avergonzarse, ni menos de perder, así que lo tomó, como un
reto personal, y decidió enamorarla.
-No sueñes -le volvimos a repetir-, nunca vas estar
con ella amigo, es mucho nivel para ti, -le dijo burlándose,
otro compañero-.
No le gustó, eso de mucho nivel, lo hizo sentir menos
y no estaba dispuesto aceptar sentirse menos que nadie, por
lo que le respondió de inmediato.
176 Richard. M. Cantera Ríos

-¿Crees que vuelo muy alto con July, que no está a mi


nivel para conquistarla?.
Y como si estuviera hablando de un juego de casino
agregó:
-Apostamos que se convierte en mi enamorada, es
más, apostamos que me acuesto con ella; no hay nada difícil
en este mundo para mí, -volvió a repetir-.
La apuesta estaba demasiado emocionante para que
el compañero lo rechazara, todos lo tomamos a la broma,
menos Joaquín, que exigió sellarlo con un fuerte apretón de
manos.
A todos nos pareció un juego o una burla, lo que ellos
hicieron, pero Joaquín no lo había tomado de esa manera,
inmediatamente empezó a activar de a pocos el amor que
según él estaba esperándolo en el corazón de July e intentar
enamorarla, con lo único que puede hacer que una mujer se
fijara en él, los detalles.
July, asombrada sacaba de su cartera una carta con
un hermoso y creativo diseño, se veía el rostro sorprendida,
preguntando a su amiga.
- ¿Cómo apareció ello en su bolso con su nombre?.
La carta tenía su nombre, empezó a leerla, no sabía
hasta ese momento, de qué trataba, al leerla con sus amigas
todas suspiraban de emoción, mientras July miraba a todos
lados, tratando de buscar a la persona que le mandaba tan
poéticas frases.
A partir de ese día, durante dos semanas, aparecían
varios escritos con poemas dedicados a ella, July cada vez
sentía mayor curiosidad por conocer quién era ese personaje
anónimo que le declaraba su amor con tanta dulzura.
177 Richard. M. Cantera Ríos

Cierto día me preguntó:


-Dime, ¿tú sabes quién es el que manda estas cartas
de amor?.
Me mostró muchas cartas con frases muy poéticas,
jamás pensé que Joaquín tenía cerebro para inspirarse tanto
por una mujer, todos los compañeros del grupo, ni siquiera
nos imaginamos quien las escribía; hasta que Joaquín, nos
pidió que distrajéramos a July, pues quería dejarle un regalo
en el bolso, allí, nos dimos cuenta que intentaba cumplir con
su promesa de enamorarla.
La cartas las entregó a escondidas por dos semanas,
observábamos que la curiosidad de July iba cambiando por
un nuevo sentimiento, pasaron las dos semanas, Joaquín fue
entrando más en la vida de July, suavemente le invitaba un
helado o a pasear, no sólo a ella sino a todas las amigas, para
compartir decía, sin pedir nada a cambio sólo una amistad,
July se sorprendía al ver ese cambio de conducta pero igual
no le interesaba.
Joaquín poco a poco entró en su grupo, lograba con
sus bromas sacarle siempre una sonrisa, hasta que un día ya
sin importarle mucho, le declaró que él, era la persona que
le había mandado esas cartas por dos semanas; le dijo que le
encantaba y estaba en su mente y su corazón, antes de que
July hable mencionó, que no quería que le respondiera nada,
le dijo que no esperaba una respuesta, sólo quería expresar
ese sentimiento que estaba luchando por salir.
July se quedó con la incertidumbre de saber, si él
verdaderamente estaba enamorado de ella, no dio ninguna
respuesta, pero le agradó su sinceridad con ella y con sus
sentimientos.
178 Richard. M. Cantera Ríos

Joaquín no estaba dispuesto a dejarla escapar, estaba


decidido a continuar enamorándola, se esforzaba mucho por
estar a su lado a cada momento, la cuidaba o la acompañaba
cuando era muy tarde con el pretexto que no le pasara nada,
siempre mostrándole respeto, con ello, poco a poco fijaba
más la atención de July.
Tratando de demostrar sus sentimientos, seguía con
sus detalles hacia ella, una tarde mientras cenábamos en un
restaurante con el grupo de siempre, donde también estaba
July; Joaquín sacó de la mochila que llevaba un regalo, era
una muñeca de porcelana con vistosos vestidos, a la vista se
notaba que era muy cara de precio; sin temor ni vergüenza
en demostrar sus sentimientos, se puso de pie acercándose
a ella, diciéndole:
-Esto es para ti, dijo, sé que no es una fecha especial
ni nada por el estilo, pero cualquier momento es bueno para
decir y expresar con hechos lo hermosa que eres.
July estaba muy sorprendida, miró a todo el grupo,
quienes sonriéndonos observábamos la poca discreción que
tenía Joaquín con la expresión de sus sentimientos hacia
ella, por lo que no quiso aceptar el regalo.
-Gracias, pero no puedo aceptarlo, no soy la persona
indicada para ello, -volviéndolo a rechazar otra vez-.
Joaquín volvió a preguntar:
-¿No me lo vas aceptar, es de corazón y todo lo que
venga del corazón debe ser recibido, no crees?.
Ante el silencio y el movimiento negativo de cabeza
de July, Joaquín miró a su alrededor, llamando a una niña
muy pobre que estaba vendiendo caramelos a la gente en el
restaurant.
179 Richard. M. Cantera Ríos

La niña, apresurada pensando que le iban a comprar


sus caramelos se acercó a la mesa, Joaquín se inclinó ante
ella, cogiendo la muñeca, la puso en sus brazos, diciéndole
sonriente:
-Esto es para ti niña, ves a esa señorita hermosísima,
-señalando a July-, ella te la regala, agradécele por ser tan
linda y especial.
La niña con lágrimas, muy emocionada, corrió hacia
July.
-Gracias señorita -le dijo abrazándola fuerte-.
Llorando de felicidad, le dio un beso en las mejillas,
retirándose sin parar de agradecer a todos por el regalo que
nunca en su vida dentro de su pobreza tendría.
Al mirar a July, me percaté que miraba a Joaquín de
una manera diferente, le gustaba lo que veía, sus acciones,
su solidaridad, mientras su corazón empezaba a activar ese
gran sentimiento llamado amor.
En ese tiempo fuimos de viaje de estudios fuera del
país, por situaciones familiares July no pudo ir con nosotros.
En aquel país, su moneda estaba devaluada en comparación
con la nuestra, tenía tres veces menos valor económico, por
lo que podíamos comprar más cosas a muy bajo precio.
Antes de regresar fuimos a comprar regalos para la
familia, por su lado Joaquín esperaba encontrar el regalo
propicio para July, en su búsqueda encontró un peluche de
un metro y medio de altura, nadie pensábamos que lo iba a
comprar; a parte del precio, era muy pomposo, grande para
meterlo en el autobús, al verlo entrar con ese gran regalo,
empezamos a mofarnos de él.
180 Richard. M. Cantera Ríos

Pero, al contrario de nosotros, la profesora del curso


molesta le recriminó, que como iba a meterlo en el autobús
si era muy grande, no había espacio.
Como siempre, con esa capacidad de improvisación
para responder o mentir, le dijo que por favor le permitiera
llevarlo, pues era un regalo para su hermanita pequeña que
estaba enferma, que le había prometido hacerle ese regalo;
la profesora muy conmovida cedió y al contrario nos regañó
a todos, diciendo que deberíamos recordar comprando algo
a nuestras familias, en vez de estar desperdiciando el dinero
en fiestas y discotecas.
Al siguiente día de nuestra llegada, Joaquín me pidió
ayuda, al llegar a su casa encontré otro compañero, nos dijo
que iba a llevar el regalo a July y necesitaba nuestra ayuda,
nos reímos, contestándole que él lo lleve solo, pero ante su
insistencia y por la presión de que los favores son prestados,
aceptamos.
Lo llevamos en el auto que él tenía, cuando llegamos
al departamento de July, después de ayudar a bajar el gran
regalo, nos dio las gracias a manera de despedida para estar
a solas con ella, mientras nos retirábamos riéndonos de lo
que podemos hacer los hombres por el amor de una chica,
observábamos que Joaquín apresurado tocaba la puerta, se
notaba algo nervioso.
Al salir July, preveíamos lo que él le decía, que aquel
regalo era tan grande como su amor por ella, lo cierto es que
allí declaró sus sentimientos, esta vez sí recibió el regalo muy
emocionada dándole un beso en los labios, se abrazaron.
Allí, nos dimos cuenta que el corazón de July había
sido activado por el sentimiento del amor.
181 Richard. M. Cantera Ríos

Joaquín ya como pareja, un día la llevó a July a pasear


en su auto, para estar solos, los dos juntos.
July estaba temerosa, sentía que sus sentidos cedían
rápido frente al amor que le demostraba Joaquín, mientras
se besaban y sentían ambos un temblor de emoción en sus
cuerpos, Joaquín le dijo:
-Déjame acariciarte, tocarte, vivo por tenerte junto a
mí, unidos por siempre.
Aunque su cuerpo deseaba también aquel momento,
July respondió suavemente, que no era el momento, que no
estaba preparada para ello.
Joaquín aunque sentía mucha pasión por acariciarla,
la abrazó tiernamente, la soltó suavemente, mirándola a los
ojos le pidió, que lo disculpara, él la iba a respetar siempre,
la esperaría hasta cuando ella lo decida y se sintiera segura,
terminó besándola suavemente diciéndole:
-Te amo mucho, no importa el momento ni el lugar,
lo importante es que estés conmigo.
El detalle de respetarla, le agradó mucho a July, sintió
que Joaquín no buscaba algo más que amor en ella, aquello
fue el inicio de la desactivación de su corazón y de la pérdida
de la razón.
Poco a poco, Joaquín seguía enamorándola, pasaron
casi tres meses, ya le había presentado a sus padres, a sus
hermanos, a todos les decía que había encontrado el amor
que tanto buscaba, July estaba feliz de que él le mostrara
siempre amor y respeto.
Joaquín le decía que quería estar más tiempo a su
lado y no veía la hora de verla a cada momento, sin ella era
como si le faltara su mitad y sólo se sentía completo al verla.
182 Richard. M. Cantera Ríos

Por ello, Joaquín alquiló un bello departamento como


quien queriendo vivir con ella, compraron cama, muebles,
cubiertos. La idea de Joaquín era de tener cosas para que en
el futuro les fuera más fácil vivir, July siempre se sorprendía
cómo actuaba, se enmudecía de cómo él pensaba, no sólo
en él, si no en los dos, en el futuro, pocos chicos pensaban
con esa madurez, se dijo.
Un día fue al departamento de Joaquín, cuando ella
entró encontró un ramo de flores sobre una mesa con velas
prendidas y una cena preparada por él, también había una
tarjeta, entre varias de las frases románticas, había una que
decía que no importa si discuten o si se pelean, él siempre
regresaría a buscarla, porque sabía que era la única mujer
que podía hacerlo muy feliz, te amo decía nunca dudes de lo
contrario.
La cena fue hermosa, en todo el lugar se sentía un
ambiente a romanticismo, cuando terminaron de cenar se
sentaron un momento en la cama; allí es donde se podría
decir, que el sentimiento desactivó no sólo la razón, sino al
cuerpo entero. Allí, fue donde se activó la pasión y el deseo
donde ambos se dejaron llevar por el placer, sus cuerpos
terminaron uniéndose el uno con el otro, haciendo el amor.
Después de ello, ella lo abrazó con fuerza diciéndole
que nunca la abandone, mientras Joaquín sonreía en forma
maliciosa sin ya una sola palabra romántica, pensando en lo
que iba a venir luego.
Yo me había enterado de lo que había pasado, pues
mi enamorada era muy amiga de July y le había contado en
secreto. Joaquín se acercó al grupo, diciendo al compañero
de al lado.
183 Richard. M. Cantera Ríos

-¡Págame la apuesta, ya está, tuve relaciones coitales


con July!.
El compañero sorprendido, le respondió:
-¿Cómo es eso?.
Joaquín, agregó:
-Pregúntales a las amigas de ella, si es que deseas, el
objetivo está cumplido.
Y se retiró sonriendo, sintiéndose como ganador en
una batalla de machismo y de poder.
A la mañana siguiente, July fue al departamento y no
encontró nada, Joaquín había llevado todas las cosas a su
casa, lo llamó a preguntarle qué pasaba, él sin siquiera darle
la cara le dijo, que no se emocionara más, porque ya se le
había ido la pasión por ella, que ya no la amaba, pues ella
estaba volando muy alto con él, así que, lo deje en paz, que
no estaba para compromisos.
Ya se imaginarán lo que le tocó vivir a July, a partir de
allí, decepcionada, enamorada y sobre todo arrepentida de
haber dado todo de ella sólo por un amor, sin esperar nada a
cambio.
Todas las amigas le reclamaron a Joaquín sobre su
actitud.
Mientras, él decía que no creía en el amor de pareja,
que sólo era una necesidad, y era tonto ver como a todo le
dábamos un tono sentimental, cuando sólo era una carencia
de algo que nos faltaba, con ese pretexto decíamos que era
amor, y como toda necesidad que tiene un final, se llenaría y
se acabaría, pues él lo veía a diario con los matrimonios
separados, incluso con sus padres que ya no estaban juntos
después de tantos años de casados; dando ideas que decían.
184 Richard. M. Cantera Ríos

El amor es una necesidad, no un sentimiento.

El amor se da cuando razonamos, cuando nos damos


cuenta que es una necesidad, el amor no es un sentimiento
que está en nuestro corazón, es una sensación netamente
biológica cuyo origen es el cerebro.
El amor jamás será un sentimiento, es la carencia, la
falta de cariño, se da como consecuencia de la necesidad de
compañía, protección, por los deseos no satisfechos, hasta
me atrevería a decir también por interés, cuando necesitan
una economía estable.
En ese razonamiento de necesidad enmascarada de
sentimiento, buscamos ese algo que en forma equivocada
llamamos amor.
En un pragmatismo exagerado, dijo que el amor es
una necesidad, como toda necesidad llega el momento en el
que tiene un límite, en el cual uno se satura, se llena tanto
que nos cansamos y es allí en la vida cuando lo abandonas,
lo dejas, le dices adiós; en un razonamiento sin lógica agregó
que es por ello que el matrimonio es un compromiso que
está destinado a desaparecer.
-Porque sólo es una simple necesidad, cientos de las
parejas actualmente se separan, eso lo sabremos cuando
pasen los años, - agregó-.
Por supuesto, como las necesidades son ilimitadas en
número, está demostrado que los seres humanos nunca se
contentan con sólo una cosa, siempre quieren más, por ello
en el amor buscarán un juguete nuevo con quien jugar hasta
cansarse y luego empezarán nuevamente a buscar satisfacer
sus necesidades de cariño por otro lado.
185 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando acabe el amor, como toda necesidad que es


sustituible se reemplazará por otra mejor, pues como dicen
a “Reina muerta, Reina puesta” y está bien, no tenemos por
qué estar sufriendo por algo o alguien que ya no es para ti.
Hay veces que se presentarán dos amores y se elegirá
al más importante no tomando en cuenta el sentimiento que
ustedes dicen, si no una economía, seguridad, tranquilidad,
respeto, personalidad, presencia, porque el sentimiento es
la carencia de algo que anhelamos tener y eso tampoco es
malo, todas las personas son buenas y malas cuando tienen
que serlo, ello es algo inevitable cuando tienes que dejar una
vida por algo mejor.
Siempre en nuestra vida se cumplirá la necesidad de
la complementación, pues el ser humano nunca estará solo,
siempre necesita de alguien para compartir buenos y malos
momentos, para sentirse acompañado y no vivir en soledad,
porque no hay una sola persona en este mundo que pueda
vivir sin socializarse, siempre habrá alguien a tu lado, por
ello, en la ansiada necesidad de complementación hará que
busques a esa persona que llamarás especial, para compartir
tu soledad con alguien; hasta en las leyes de la preservación
de la especie será importante el complemento.
Al final, el amor verdadero nunca existió, el tiempo lo
demostrará y quedará en un hábito o en una costumbre, en
la cual las dos personas vivirán, compartirán una vida, tal vez
una buena conversación o un compromiso, pero nunca un
corazón, saben por qué, porque llegarán al inicio de lo que
les dije, tendrán siempre la carencia en su vida, esperando
algo nuevo hasta que la muerte les diga que la vida tiene un
fin.
186 Richard. M. Cantera Ríos

Sí, probablemente, algunos de ustedes, estarán en


completo desacuerdo con la idea que los sentimientos son
una simple necesidad.
Pero esto sucede, por que los seres humanos en la
actualidad han dejado de utilizar algo tan importante que se
llama razón, y actúan sólo buscando satisfacer sus placeres y
necesidades, muchas veces influenciados por los medios de
comunicación, la imitación y por sus complejos, llevándose
por delante a todos quienes se interpongan en sus objetivos,
comportándose más que un animal irracional.
Esas decepciones hicieron que July guardara rencor a
todos los hombres que se acercaran a ella, o por aquellos
que sentía que jugaban con una mujer, poniendo un enorme
muro a su corazón, como si allí hubiera escrito las palabras,
nunca sentimientos.
Al pasar algún tiempo, nos enteramos que Joaquín la
buscó, arrepentido de haber jugado con ella, arrepentido de
haber dejado una buena mujer por sólo satisfacer su ego, la
vida le había hecho pagar todos sus errores con la persona
que más quería, con una integrante de su familia, que había
sido humillada y abandonada por alguien que seguramente
pensó lo mismo que él.
En la vida siempre existe la ley del uno por cien, todo
lo malo o bueno que se hace, la vida te las regresará, pagará
cien veces con la misma moneda.
Pero ya en ese momento el corazón de July estaba
desactivado del sentimiento de amor que alguna vez lo tuvo,
seguramente a la espera de que algún día alguien la active
nuevamente, pero ahora con amor y respeto, eso sí con la
lección de siempre utilizar su razón para no equivocarse.
187 Richard. M. Cantera Ríos
188 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XVII - DIOS NUNCA OLVIDA, ESTÁ EN TU VIDA,


MENTE Y CORAZÓN

Nova la estaba pasando demasiado bien, Ricardo, sus


amigos, todos le inspiraban mucha confianza, mientras más
los trataba, más familiar le parecían, ella estaba muy feliz de
compartir esos momentos con tan buenas personas, sin que
nadie le pregunte, ni la presionen por su pasado, no paró de
reír toda la reunión, después de mucho tiempo volvía a reír a
carcajadas.
Por primera vez se sintió como parte de una familia
de buenos amigos, se encontraba segura, que cuadraba en
un lugar, sobre todo, cuando todos los amigos vinieron y se
colocaron a lado de ella e hicieron el grupo, sus complejos,
temores iban desapareciendo poco a poco.
Como no recordar esa buena reunión de amigos, fue
inolvidable para todos, por supuesto, para Nova también,
por momentos les tenía vergüenza por la poca confianza,
por lo poco que los conocía, sentía que todavía no era parte
de ese mundo, pero ellos se encargaban de hacerla sentir
parte de sus mejores amigos, le agradaba la idea de volver a
ser parte de ese buen grupo que lo estaba recibiendo con los
brazos abiertos, lo real es que al pasar el tiempo todos ellos
se convertirían en sus mejores amigos.
Terminó la reunión de amigos, Ricardo, Pier, Miguel,
Javier, Carlos, July, Lizbeth, los demás amigos, le dijeron a
Nova.
-No pienses que te vas a librar de nosotros.
Esto fue el inicio de una gran amistad, ella agradeció
el detalle volviendo a sonreír.
189 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando llegó a su cuarto, agotada, se recostó en la


cama pensando en que no iba a poder dormir como siempre,
pero el cansancio de la reunión causó, que quedara rápido
dormida.
Al siguiente día, se levantó, miró la carta que había
escrito, tuvo pavor, temor al leerla, pasando de su egoísmo
equivocado, de sentirse muy sola, a darse cuenta que tenía
personas que la consideraban; allí pensó en su familia que lo
amaban, en ella misma, en su futuro, en las palabras que le
prometió a Layon, en seguir siempre adelante, agradeció a
Dios por permitirle vivir, aprender y sobre todo por darle esa
fuerza de voluntad para seguir luchando en esta vida.
Así transcurrió la vida para Nova, con nuevos amigos
que nunca la dejaban sola y más Ricardo que a partir de allí
se convirtió en el gran amigo, la persona que siempre estaría
a su lado; mientras Ricardo, intentaba explicar el por qué el
estar al lado de Nova le inspiraba un tremendo sentimiento
de protegerla, sentía que ella lo necesitaba mucho y aunque
no se llamaran, ambos terminaban buscándose, caminando
juntos, compartiendo también con los grandes amigos.
Cierta noche la mente de Nova volvió a recordar al
amor de Layon, con los recuerdos regresaba nuevamente la
incertidumbre, la nostalgia y la soledad, ella sabía que no iba
a ser fácil olvidar toda una vida de sentimiento verdadero, su
mente, su corazón se resistían a olvidar el pasado.
De verdad lo estaba intentando, había puesto todas
sus fuerzas, si no de olvidar, de poner toda su energía en
intentar seguir con su vida, pero al mirarse sola en su cuarto,
mientras allí afuera todos seguían con su vida, se sintió sola
y empezó de nuevo a querer regresar a la depresión.
190 Richard. M. Cantera Ríos

Recordó lo que le había hablado su madre, que nunca


estaremos solos en la vida, por ello, llamó y visitó a lo más
importante que tenía, su familia, después de mucho tiempo
habló con sus padres, con tanta sinceridad, conversaron por
horas de lo que estaba pasando, lo que estaba sufriendo, les
contó de su soledad, del amor que sentía por Layon aunque
ya no estaba, de sus ganas que tenía a veces de morir, de no
seguir viviendo.
Sus padres sólo la escuchaban sin recriminarle nada,
le recordaron que nunca estaría sola, que aunque ella se
escondiera, se encerrara en su soledad o que esté en el lugar
más lejano del mundo, ellos siempre estarían a su lado, para
demostrarle el gran amor que sentía toda su familia por ella.
Le dijeron, que lo que había pasado cuando falleció
Layon nunca fue su culpa, pues fueron situaciones que uno
jamás planifica, no sabemos que nos va a deparar el futuro;
que así queramos no somos dueños del hilo de la vida de
nadie, que se equivocó en echarse la culpa de algo que ella
nunca provocó, es el destino, la vida que nos trae sorpresas
malas y buenas, que aquella vida misma de la cual ahora
regaña, también le traería sorpresas buenas para ella.
Le hablaron, que entienda que somos seres humanos
imperfectos, que entienda que equivocándonos también se
aprende, no podemos andar por la vida castigándonos por
algo que ya pasó, que lamentablemente, hagamos lo que
hagamos hay situaciones que no podemos solucionar; al
contrario, que es allí en esas situaciones negativas, cuando
sentimos que nuestra vida está al borde de un gran abismo,
debemos aflorar nuestra fortaleza para lograr salir de allí y
superar nuestros traumas.
191 Richard. M. Cantera Ríos

Su padre le aconsejó que intentara volver a sonreír


como antes, -ante la negativa de Nova por no poder hacerlo
por el recuerdo de Layon-, le dijo que su sonrisa estaba mal
direccionada, que le estaba dando inconscientemente su
sonrisa a personas, y no era así, la sonrisa se debería dar a
situaciones, que por más difíciles que sean, la vida siempre
traería momentos o recuerdos agradables, que ella debería
crear, buscar situaciones felices para empezar a reír y poder
intentar tener la tranquilidad que tanto esperaba.
Le aconsejó, que buscara encontrar un motivo para
seguir luchando en esta vida y cuando lo hiciera se aferrara
muy fuerte a él, pues ese motivo le iba a dar la energía, las
fuerzas para seguir luchando, para seguir viviendo en esta
vida; le dijo que todos los seres humanos, tenemos motivos,
como la familia, hijos, amigos y sobre todo Dios.
Antes de despedirse, sus padres le dijeron: el camino
para sentirse en paz era refugiarse en lo único que puede
ayudarnos en la vida, en Dios.
Allí Nova entendió, que por más que uno piense en
no contar sus problemas a los padres, por ese pensamiento
equivocado de no hacerlos sentir mal, sufrir o preocuparlos
con nuestros dilemas de vida, aprendió, que aunque no les
contemos nuestras penurias, ellos percibirán perfectamente
nuestra tristeza.
Lo que sí es seguro, es que nuestros padres son más
fuertes de lo que pensamos y por su experiencia, por sus
años vividos, son los más adecuados para ayudarnos a salir
de las nubes negras que disipan nuestra vida y devolvernos
la tranquilidad tan esperada.
192 Richard. M. Cantera Ríos

Esa noche Nova tuvo más fuerzas para seguir en la


vida, aunque sabía que no iba ser fácil salir de su depresión,
durmió pensando en que no estaba sola, que su familia no la
había olvidado, le alegró mucho saber que contaría siempre
con ellos.
Al siguiente día, de nuevo se despertó llorando en la
madrugada, por mucho que intento dormir, no pudo, sentía
enormes ganas de encerrarse nuevamente, de estar en un
rincón de su cuarto y ser olvidada para siempre.
Pero esta vez tenía la fuerza, motivación para seguir
viviendo, llamó a las personas que sabía que la iban ayudar
a salir, con su compañía y sonrisas de su mundo de tristeza,
sus amigos, esa mañana llamó a todos del grupo de Ricardo,
la saludaron alegremente, pero por múltiples ocupaciones,
ese día todos ellos estaban ocupados en situaciones de su
vida, sin percibir la tristeza la depresión de Nova.
Al último que llamó, fue a Ricardo, quien contestó
saludándola también muy alegremente, Nova le preguntó
qué estaba haciendo, invitándolo a que la acompañara a un
compromiso familiar, Ricardo disculpándose, le respondió,
que le gustaría acompañarla pero tenía una reunión en la
que se había comprometido, Nova le contestó, que no había
problema, que lo entendía, despidiéndose amablemente.
Era medio día aquel fin de semana, el compromiso de
Ricardo era una actividad de amigos, una fiesta imperdible,
donde la diversión estaba asegurada en ese lugar. Mientras
estaba en el taxi dirigiéndose a la fiesta, lo llamó su amigo
Miguel, preguntándole si había recibido la llamada de Nova,
él respondió que sí, Miguel le contó que ella había llamado a
los amigos y amigas del grupo invitándolos a una reunión.
193 Richard. M. Cantera Ríos

Y todos le habían respondido que no podían ese día,


que en el muro de redes sociales de internet había escrito
las palabras “siempre sola en la vida”, Miguel le dijo, que si
podía él acompañarla o iba a llamar a los demás amigos para
ver quién podía ir a verla.
Ricardo, dijo que no se preocupara, él se encargaría
de llamarla al celular para saber qué pasaba, al hacerlo Nova
le respondió, se escuchaba un poco triste, Ricardo preguntó
¿dónde estaba?, ella le contó que había acudido a un evento
de una catequesis religiosa familiar.
Ricardo preguntó: ¿catequesis familiar, estas con tu
familia?, ella le respondió, que no, que estaba sola.
Ricardo le manifestó, que ni bien se desocupaba la
llamaría en la noche, Nova agradeció la llamada, mientras en
ese momento sonó el celular de Ricardo, eran sus amigas, a
gritos le decían que la fiesta estaba espectacular, se notaba
que la diversión estaba en su máximo punto.
Cuando estaba yendo a la fiesta, inconscientemente
Ricardo le dijo al taxista, llévenme a otro lugar, sin pensarlo
como si fuera un reflejo de ayuda, dirigiéndose al lugar que
estaba Nova, al llegar al lugar donde era el retiro familiar, la
llamó, le pidió que saliera, pues él estaba en la puerta.
Nova salió de inmediato, Ricardo no sabía que hacía
allí, creía en Dios según él a su manera, es más, nunca había
ido a un retiro; Nova al salir lo saludo alegremente, le dio las
gracias y cogiéndolo de la mano entraron los dos.
El retiro espiritual familiar era en un coliseo grande,
estaba repleto de familias, todos con personas queridas que
las acompañaban, demostrando todo su amor, su fe hacia el
supremo Dios.
194 Richard. M. Cantera Ríos

En algún momento de la eucaristía, el padre pidió a


todos los presentes, coger la mano al familiar, a la persona
que tenía a su lado, Nova y Ricardo se cogieron la mano, en
aquel momento el sacerdote habló sobre la importancia de
la fe, sobre las enseñanzas de paz y bien en el señor.
Mientras escuchaban atentamente las palabras del
sacerdote, Ricardo y Nova entendieron por fin que sólo Dios
iba a dar tranquilidad a sus corazones que tanto esperaban;
el sacerdote, les pidió que se amistaran consigo mismos, con
su alma, que dejaran de lado sus rencores, sus temores.
Les habló de la importancia de aprender a perdonar,
que el tiempo era demasiado corto para vivir odiando, que le
dijéramos cuanto los amamos a las personas que estaban a
nuestro lado, que dejaran de lado los pensamientos que les
hacían daño, pues era hora de intentar ser feliz con la gracia
de Dios, y depositaran su corazón y sus mentes sólo en Dios.
Ricardo, observó que Nova estaba arrodillada hacia el
señor, sus lágrimas rodaban por sus mejillas esperando la
paz, la tranquilidad en su corazón; él se acercó aún más a
ella abrazándola para darle su apoyo, sintió mucha ternura,
una debilidad que pedía a gritos ayuda, él agradeció a Dios la
oportunidad de estar en ese momento a lado de Nova.
Mientras en el coro sonaban unas voces melodiosas
y dulces a los oídos, cantando una canción con un gran tono
sentimental a ritmo de unas suaves notas de piano y tenues
acordes de guitarra, cuya letra hermosa agradecía a Dios por
guiarnos, por estar a nuestro lado y dar ese gran amor por
sus hijos, solamente escucharla hacía como si el corazón se
desgarraba de emoción.
195 Richard. M. Cantera Ríos

Dando un sentimiento de esperanza al entender que


jamás, que nunca estaremos solos en este mundo.
Nova y Ricardo cerraron los ojos, sintiendo en todo su
interior una energía que entraba en su mente, que hacía que
sus corazones latieran con más rapidez, pero no de temor si
no de un sentimiento de pasividad, de ternura indescriptible,
sintiendo en todo su ser la presencia de DIOS, cerrados los
ojos ambos se agarraron las manos con mucha fuerza, como
queriendo ayudarse el uno con el otro, mientras les caían las
lágrimas, al sentir la presencia de un ser supremo, quien les
daba paz a sus corazones que tan esquiva les había sido toda
su vida.
Cuando el sacerdote caminaba con la cruz, como una
procesión por donde estaban todos los asistentes, ambos se
acercaron a tocarla con mucha fe; y se sintieron liberados,
en pocos segundos sintieron en sus mentes y corazones la
paz, la tranquilidad, que buscaron durante muchísimos años,
se sintieron aliviados de todos los sentimientos de culpa y
tristezas.
Al salir emocionados del retiro familiar.
Ambos entre risas y conversaciones, compartían una
paz que nunca sintieron, habían encontrado la tranquilidad
en manos de Dios.
Por fin Nova encontró motivos para seguir viviendo,
motivos en Dios, su familia y los grandes y buenos amigos,
entendiendo que así no estén a su lado las personas que
amaba, siempre estarían con ella, para escucharla, para
compartir sus penas y también alegrías aunque sea de lejos.
El reencontrase con Dios fue el inicio de una nueva
vida para ella.
196 Richard. M. Cantera Ríos

La vida siempre es un círculo, les dije alguna vez, el


cual seguirá girando para darnos una nueva oportunidad de
poder subsanar nuestros errores y poder volver a respirar
el olor a tranquilidad.
Fueron demasiados años de sufrimientos, tristezas,
soledad para Nova.
Después de haber cargado sus problemas y culpas se
cansó de hacerlo, entendió por fin que son parte de la vida y
que también hay momentos de felicidad que nos esperan,
saliendo poco a poco de su remolino que la había arrastrado
hacia un fondo que para ella no tenía fin, entendió que nadie
está solo en la vida, empezó a compartir sus problemas, a
vivir con tranquilidad, y sobre todo volver a reír.
Y así como un círculo de vida en el que todo tiene su
recompensa, llegó no tan sólo la tranquilidad, la paz en el
corazón de Nova.
A parte de su familia que siempre estaría con ella,
llegó también la amistad, los verdaderos amigos y amigas
que nos hacen darnos cuenta que jamás estamos solos en
este mundo.
Que siempre van a existir muchas personas, amigos
a nuestro lado que estén dispuestas a escucharnos, como si
Dios los pusiera en el camino de la vida para despertarnos
de nuestros sueños y pensamientos locos.
Mientras entraba, compartía más en aquel grupo, le
contaron la vida de Ricardo, su gran amigo, sin saber que sus
vidas eran muy parecidas, y que algún día ella iba estar en su
futuro.
197 Richard. M. Cantera Ríos
198 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XVIII – LA DECISIÓN ENTRE LA PASIÓN Y EL


SENTIMIENTO

Esta es la historia de Ricardo y Yania


Yania era una chica hábil, inteligente, responsable,
sencilla, de personalidad extrovertida, alegre; le encantaba
bailar; una chica muy agraciada, de cabello negro frondoso,
de tez blanca, de 1.68.m. de estatura aproximadamente, con
unos labios preciosos cuya sonrisa podía encantar y alegrar
la vida a cualquier persona que la rodeara.
Por su parte Ricardo, era tranquilo, divertido cuando
se trataba de serlo, no era de los muchachos que dominaba
tanto el arte del bailar, muy sereno, reservado, sobre todo
muy caballero, muy conversador.
Se podría decir que era el muchacho interesante que
siempre tenía un tema que hablar, sus rasgos, de buen físico,
1.69.m de estatura, de tez blanca, con una mirada fija que
expresaba mucha confianza en las personas que lo conocían
y sobre todo una gran seguridad de sí mismo.
Como casi en todas las historias de amor, cuando se
conocieron, ambos sintieron una gran atracción especial, al
mirarse por primera vez sus miradas se confundieron una
con la otra.
Las pupilas de ambos, resplandecían como si fueran
dos estrellas, pues desde ese momento la luz de uno brillaría
siempre para iluminar a la otra, ella, observaba nerviosa su
profunda mirada, sintiendo que le penetraba el corazón.
Cuando quedaban solos escuchaba muy interesada
lo que Ricardo hablaba, se admiraba de sus cambios de tema
de conversación, todo lo que decía la sorprendía.
199 Richard. M. Cantera Ríos

A partir de allí, tendría una necesidad inexplicable de


conversar con él, como si Ricardo fuera la única persona que
la entendería en su vida.
Por su parte Ricardo no podía dejar de admirar esa
belleza, aunque la charla era muy interesante, el sólo ver los
hermosos labios carnosos, la tierna sonrisa de Yania, hacía
que temblara de nervios, hasta tenía miedo de aburrirla con
sus conversaciones y callaba para escucharla.
Le encantaba esa manía que tenia Yania, de hablar
sin parar, aunque intentaba no mirarla, siempre terminaba
admirando sus rojos labios, como si su mirada, sus oídos no
funcionaran y se paralizaran para verla y escucharla.
A partir de allí se verían todos los días, él inventando
la forma de estar siempre a su lado, para conversar, reír con
sus ocurrencias, ella para contarle las situaciones de su vida
y respirar con la paz que le daba su presencia.
Poco a poco se volvieron mejores amigos, ambos con
gestos disforzados intentaban negar aquel sentimiento que
estaban sintiendo para no terminar enamorándose, cuando
la realidad era que ya no podían controlarlo, menos de estar
sin conversar, sin verse ni un solo día.
Cuando empezaron a salir juntos, no paraban de reír
de las ocurrencias locas, lo que hacía que se rieran más de
ambos, si Ricardo realizaba una tontería o locura, Yania lo
miraba moviendo la cabeza como diciéndole que tonto eres,
callaba un momento como diciéndole ponte serio y le tiraba
un pequeño golpecito en la cabeza, empezando ella ahora a
reír sin parar, todo lo que sucedía les parecía gracioso, eran
felices estando juntos, se notaba que habían nacido para
estar juntos, que estaban hechos el uno para el otro.
200 Richard. M. Cantera Ríos

Aunque habían hablado del tema de amor, ambos


tenían miedo de mostrar sus sentimientos, ella por no volver
a sufrir decepciones que le causarían mucho pesar, él con
miedo de lo que sentía a su lado, notaba que podía perder la
razón al estar junto ella.
Ambos no querían malograr una hermosa amistad,
sabían que el amor es incierto y ninguno de los dos pensaba
en hacerse daño.
Pero ambos ya no podían ocultar sus sentimientos así
intentaran negarlo a sí mismos, el amor que se tenían poco a
poco se abría paso frente a las barreras que ellos se ponían,
al contrario, esos muros hacían que su ansiedad por verse,
charlar, reír, aumentara, no podían estar un solo día sin estar
juntos.
Hasta que una tarde, mientras observaban fotos en la
computadora, Ricardo, no pudo controlar su amor reprimido
durante tanto tiempo, el sentirse tan cerca a Yania, el tener
tan cerca esos labios que admiraba tanto lo hicieron temblar
de nervios.
Cuando quería besarla, reflexionó, su razón hizo que
se aguantara, sintió que le faltaría el respeto si lo hacía, sólo
beso el índice de su dedo y lo puso sobre los labios de ella;
Yania no dijo nada, sus rojos labios deseaban que Ricardo la
besara, su corazón latía fuertemente, deseando ese beso de
amor tan esperado también para ella.
Aunque Ricardo quiso detenerse, porque no quería
perder su amistad si ella lo rechazaba, pero sus sentidos le
gritaban, le obligaban que intentara, que le diera un beso de
amor para siempre, ya sin hacer caso a su razón los labios de
ambos se unieron en un profundo y sentimental beso.
201 Richard. M. Cantera Ríos

Al sentir los labios con los suyos, Ricardo perdió la


noción del tiempo, parecía que los labios de Yania le daban
una energía de amor, su corazón acelerado, lleno de amor,
le decía que no deje ir a esa hermosa mujer que besaba
Mientras, Yania con los ojos cerrados sentía ternura
un sentimiento, de respeto, de amor, de emoción que jamás
había sentido en su vida hasta ese momento.
Después de besarse, ambos avergonzados, nerviosos
salieron a caminar, aunque no creían lo que había sucedido,
trataban en vano de ocultar la alegría, la ternura, la emoción
de felicidad que tenían, al sentir un amor que les rebosaba
en sus corazones.
Al besarse, sintieron que valía la pena arriesgarse y
luchar por un amor tan puro, verdadero como el que ambos
estaban sintiendo. Entendieron que el amor que esperaron
había llegado, ofreciéndoles una oportunidad de ser felices y
de compartir una vida juntos.
Así empezaron a vivir una gran y apasionada historia
de amor; para Yania, el tener a Ricardo siempre a su lado, el
sentir su mirada que inspiraba amor, ternura, respeto, llenó
su corazón de tranquilidad, de paz, de confianza. Decidió
como toda mujer cuando siente que el hombre especial ha
llegado a su vida, darse una oportunidad con Ricardo.
Para Ricardo, Yania era la gran mujer que toda la vida
había buscado y no estaba dispuesto a cometer los mismos
errores de antes; se hizo la promesa de jamás hacerla sufrir,
se decidió a darle un amor con respeto y confianza; por ello
a partir de allí daría todo su tiempo, su espacio, su vida, para
hacerla feliz, era una gran mujer, la amaba demasiado, sintió
que se merecía lo mejor que podría salir de él.
202 Richard. M. Cantera Ríos

Ambos estaban en la universidad y empezaron a vivir


una historia de amor, en la que Ricardo daba todo por el
amor de Yania, la llenaba con mensajes todas las noches,
recordándole, prometiéndole con acciones que toda la vida
iba estar su lado.
Nunca dejaron en los cuatro años que estuvieron de
pareja de recordar las fechas, más especiales para ellos.
Aquel amor que sentían era puro, solían reírse de la
energía, de la electricidad que se pasaban cuando sus labios
se unían en un sentimental beso, sin ya querer separarse, en
verdad hasta su aurea, su energía les hacía sentir que debían
estar unidos para siempre.
Cuando ella estuvo apenada fue el hombro en que
descansaron sus tristezas, el que secó siempre sus lágrimas,
tratando de robarle una sonrisa, así él estuviera apenado,
siempre le dijo que ella era el amor de su vida, ello a Yania le
agradaba pues se sentía protegida por él y ella también le
demostraba su amor con acciones, poniéndolo siempre en el
primer plano, susurrándole al oído que lo amaba, gritando al
mundo que él era el hombre de su vida, que lo amaba con
locura.
Pero hay veces en el amor, donde también existe la
palabra “casi nunca somos lo que aparentamos ser” o “casi
nunca, las cosas son como aparentan ser”
A los cuatro años que compartieron de pareja, Yania
sintió que el amor se estaba perdiendo, trataba de negarse a
creer en ello y buscaba cada día enamorarse más de Ricardo,
observando detalles, otras virtudes en él, que encendieran
de nuevo la llama del amor que se estaba apagando, pero su
corazón, su mente ya estaba cansados.
203 Richard. M. Cantera Ríos

Yania, en un afán económico desesperado por lograr


sus objetivos y metas, poniendo equivocadamente al trabajo
antes que a su amor, empezó casi sin querer a alejarse más
de Ricardo, eso hizo que ya no se vieran seguido como antes,
enfriando más ese amor que estaba quedando dormido para
no despertar jamás.
En su preocupación por satisfacer sus necesidades
materiales, empezó a darle poca importancia a los detalles
de cada día, que por más simples o pequeños que fueran,
siempre ayudarán a mejorar una relación de pareja, al final
aunque todavía se amaban, ambos dejaron de expresar sus
sentimientos como deberían hacerlo y poco a poco dejaron
que su amor se enfriara aún más.
Se equivocaron al pensar que su amor se olvidaría o
se enfriaría para siempre, el tiempo les haría entender que
su relación de amor nunca, jamás debió acabarse. El tiempo,
las situaciones de vida que llevarían, les enseñaría, que ellos
estaban hechos para vivir una vida en pareja, que jamás dos
personas en el mundo se amaron con tanta emoción, pasión
sentimiento y que no iban a conversar, sonreír con ninguna
persona, como lo hacían juntos con tanta felicidad.
Ya los mensajes románticos, de amor que todas las
noches le enviaba Ricardo, junto con las invitaciones para
verse empezaron a parecerle triviales, sin interés, por lo que
respondía por compromiso, una de las clásicas respuestas de
una mujer cansada, “mañana no puedo, otro día será”.
Las salidas le parecían aburridas, sentía que salía por
obligación o por la necesidad de estar acompañada, había
perdido la emoción de amor, ya no le sorprendía nada de él,
es más, sentía que su amor se había vuelto muy predecible.
204 Richard. M. Cantera Ríos

Pero Ricardo también cometió muchos errores en su


relación, fue el culpable de que su amor se convirtiera en
una rutina, pues siempre hacían lo mismo, a todo lo que le
pedía Yania para salir a divertirse, ir a una fiesta, un baile o a
pasear para salir de encierro, respondía con: estoy cansado,
para otro día será, hay que planificarlo para que salgan bien
las cosas.
Supongo que en su autoestima, en su seguridad de lo
que tenía, subestimó a Yania pensó que ella nunca lo dejaría,
que jamás iba a perderla, al final terminó cometiendo una de
las más grandes equivocaciones que se puede cometer en el
amor, se volvió predecible, pues, Yania sabía lo que él iba a
hacer, lo que iba a decirle, los detalles fueron los mismos, sin
creatividad, sin tono de amor con locura.
El tiempo, pasó en la misma rutina de vida, de amor
para Yania y de un amor predecible con todo el corazón para
Ricardo.
Uno de aquellos días, Yania fue invitada a una fiesta
era el cumpleaños de una compañera de la universidad, a lo
que ella de inmediato contestó, que no, porque Ricardo no
podía acompañarla.
En realidad ella ya ni siquiera le preguntó nada, por
que supuso que como siempre que él iba a contestarle una
respuesta negativa, tal vez con un ahora no puedo, para otro
día será, con un estoy cansado como respuesta, como todas
las veces que tenían una invitación.
Cuando estaba decidida a descansar y no ir a la fiesta,
sus compañeros le hablaron de que el hecho de compartir la
relación con una pareja, no significaba que tendría que estar
abocada a hacer lo que él o ella diga.
205 Richard. M. Cantera Ríos

Le sugirieron que por amor nadie debería cometer el


error de dejar amigos, estudios o lo más importante, familia
y que se diera tiempo para todo, pues era lo correcto tener
también una vida para uno mismo.
Yania lo pensó, a parte le encantaba bailar, tomando
la decisión de ir a la fiesta.
Esperó que Ricardo le mandara el mensaje de amor
que lo hacia todas las noches, le respondió de inmediato con
unas frías palabras: hasta mañana, suerte, mintiéndole que
estaba cansada e iba a dormir.
Se cambió y de inmediato fue a la fiesta pensando en
que necesitaba un espacio para hacer su vida, en parte tenía
razón, necesitaba compartir con sus amigos, no podía estar
enfrascada sólo en una relación de pareja, tenía también una
vida de familia, de estudios, de muchas responsabilidades
que cumplir.
Lo que sí olvidó, fue la importancia que implica el
diálogo, la comunicación y la confianza en una pareja para
contar sus situaciones de vida.
Para no tener que ocultar las cosas o mantenerlas a
escondidas y arrepentirse luego de los errores cometidos,
cuando muchas veces ya es imposible solucionarlos por que
han dejado huellas de dolor que nunca se borrarán.
Mientras tanto Ricardo estaba en cama, intentando
dormir, seguramente pensando en el gran amor que sentía
por Yania.
La única realidad es que ella estaba divirtiéndose en
una fiesta sin él, sin la confianza para comunicarle de sus
acciones, sin la persona a la que le prometió amor, pensando
sólo en su libertad.
206 Richard. M. Cantera Ríos
207 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XIX - CUANDO LA RUTINA ACABA EL AMOR

Como dije antes, Yania era muy divertida, de aquellas


personas que pensaban, que si es que se va a una fiesta es
para pasarla bien, por ello empezó a bailar desde que llegó,
dominaba espectacularmente todos los ritmos de música,
pasaron varias canciones, la estaba pasando de maravilla, no
quería que acabe la fiesta, se felicitó por haber tomado la
decisión de estar compartiendo ese espacio con sus amigos,
lo necesitaba, sentía que la relación de pareja con Ricardo de
todos los días, la estaba asfixiando.
Repentinamente, apareció tarde en la fiesta otro de
los compañeros de la universidad, Magno, era amigo de las
compañeras de Yania, de más o menos 1.73.m de estatura,
blanco, de cabello rubio, totalmente extrovertido, decidido,
divertido y muy buen bailarín, quien al ver a Yania bailar con
tanta destreza, inmediatamente fue a su acecho, se acercó a
ella con una gran personalidad del típico hombre seguro de
lo que tiene, sin miedo a hacer rechazado le pidió mostrando
una sonrisa de confianza, de cómo quien no aceptaría un no.
- ¿Bailas?, -le preguntó-
Antes que ella conteste ya estaba cogiéndole la mano
siempre con una gran sonrisa de seguridad.
Yania no vio ningún problema en bailar con Magno,
además, ella había ido a divertirse, por lo que respondió con
un sí, claro, bailaron casi toda la noche, en realidad fueron
la pareja que mejor lo hacía de toda la fiesta, la mayoría de
personas los admiraba al verlos bailar con tanta armonía,
algunos de ellos comentaron, hacen buena pareja, esos dos
son el uno para el otro.
208 Richard. M. Cantera Ríos

Magno sin perder la oportunidad, le preguntó, como


buscando sacarle una sonrisa.
-¿Dónde has estado toda mi vida?, eres preciosa.
Por supuesto, cuidándose de no ahuyentarla, pues él
sintió esa noche una atracción fuerte por ella y lo menos que
quería era presionarla; en realidad a Yania le agradó también
Magno, pero no era de esas chicas que iba a coquetear con
alguien, teniendo una relación de pareja, por lo que sólo le
sonrió e intentó pasarla bien bailando, tratando de no tomar
importancia a los comentarios y piropos, aunque en el fondo
le gustaba los halagos que escuchaba.
Cuando terminó la fiesta, Yania se dirigió a su hogar
acompañada por sus amigas, fue una noche muy divertida
para ella, pues lo había hecho después de mucho tiempo,
estaba cansada pero feliz de haber bailado y al acostarse en
su cama se quedó completamente dormida.
Muy temprano, recibió como siempre la llamada de
Ricardo, saludándola con un buen día amor, preguntándole
como estaba, a lo que respondió: bien, sin comentarle para
nada que había ido a una fiesta, quedaron encontrarse en la
universidad, así lo hicieron, luego fueron a cenar, siguiendo
la misma rutina de siempre.
Llegó la noche, ella entró a su red social, lo primero
que leyó fue la invitación de amistad de Magno, quien no
había podido dormir pensando en Yania, por lo que ni bien
inició el día, lo primero que hizo fue buscar el nombre de
ella, enviando la invitación para ser aceptado. Yania tocó los
dedos en la computadora dudando en aceptarlo, pero como
si fuera un reflejo, sus dedos terminaron aceptando al nuevo
amigo.
209 Richard. M. Cantera Ríos

Magno estaba ansioso, por lo que empezó la charla.


-Hola Yania, no estás cansada por estar todo el día en
mi cabeza, -le dijo-.
Ella, respondió.
-¿Qué hablas?, -con una sonrisa de agrado dibujada
en su rostro-.
Siguió la conversación entre bromas, muchos temas y
sonrisas, sin darse cuenta habían pasado casi cuatro horas
conversando.
A partir de ese día, todas las noches charlaban, de
muchos temas, de familia, de estudios, de sus problemas, de
aspiraciones futuras, a Yania le encantaba la forma loca,
diferente y tierna que hablaba Magno.
Magno estaba deseoso por decirle que día a día se
enamoraba mucho más de ella, que todas las noches cogía
su computadora esperando que ella estuviera conectada en
el internet para charlar y que así hubieran muchas personas
para hablar, sólo le interesaba conversar con ella, aunque
quería desesperadamente expresar sus sentimientos, sabía
que Yania tenía una relación de años, y lo iba a rechazar si le
comentaba algo, no estaba dispuesto a perderla.
La verdad, no importaba si sólo la tuviera para charlar
como amiga, no era suficiente, pero se sentía feliz aunque
sea con ello, ella también sentía un sentimiento, hacía todo
lo posible por estar a una hora en la noche para charlar con
Magno e inventaba muchos pretextos a Ricardo, sólo por ir a
conversar.
No pasó por su cabeza extrañar, pero sí lo hacía, ya
no sentía una emoción al compartir con Ricardo, se aburría,
su corazón no palpitaba fuerte como antes al besarlo.
210 Richard. M. Cantera Ríos

Por más que seguía intentando, buscando recuerdos


bellos, anécdotas y aferrarse a ellos para volver a sentir ese
fuerte cariño que existió entre ambos, aunque ya con poca
motivación intentó encender la llama de ese amor, pero no
lograba sentir lo mismo que antes.
Al contrario, aquella llama de amor se apagaba más y
más, se sentía peor al ver a Ricardo, quién seguía intentando
enamorarla, diciéndole que lo amaba con todo el corazón.
Ricardo, se daba cuenta de la pasividad de Yania e
intentaba todo por salvar su amor, pero al pretender volver
a meterse en su vida, en su corazón, cometió un gran error;
dejó de ser aquella persona imaginativa, romántica e intentó
imitar poemas de internet, palabras de amor copiadas de
algún libro, lo que al intentar expresarlas, nunca salían como
deberían ser, pues no eran de su inspiración, no salían de su
corazón, ya después todas sus acciones de amor sólo fueron
gestos desesperados, que nunca le salían bien, ello lo alejaba
más del amor de Yania.
Llego el cumpleaños de Yania y Ricardo la llamo para
compartir ese día con él, ella aceptó calculando sin sorpresa
a donde la iba llevar y el regalo serio, sin nada de creatividad
que le iba a dar. No se equivocó, Ricardo hizo lo mismo de
siempre, la llevó a almorzar, con un regalo caro, con un tono
serio, sin romanticismo, aunque él lo hacía con todo el amor
del mundo, no se daba cuenta que estaba siguiendo la rutina
de siempre, de todos los años.
Yania, agradeciendo por los detalles, le dio un beso,
se despidió y fue a la universidad; mientras elaboraba con
sus compañeras los trabajos en la biblioteca.
211 Richard. M. Cantera Ríos

Entró Magno, acompañado de cuatro de sus mejores


amigos, con un pequeño pan dulce en las manos, con veinte
fósforos plantados en el pan, que reemplazaban a las velas
que no tenían para comprar, cantaban abrazados a viva voz.
-¡Feliz cumpleaños Yania!.
Sin importarle la cantidad de gente que reían de sus
ocurrencias, Magno gritó riendo:
-¡Qué sople la vela!.
Yania sorprendida, emocionada sopló los fósforos, no
faltando por allí un amigo que pedía a gritos que partiera la
torta; a todas las compañeras de Yania les causaba risa la
escena, pero a la misma vez soltaron palabras de halago por
el detalle que les pareció loco, pero muy romántica.
Magno se acercó a Yania, la abrazó tiernamente, le
dijo que la quería demasiado, si él podía pedir un deseo, era,
que ella tenga en su vida felicidad, ante el suspiro de todas
las personas que estaban allí; en realidad a Yania le encantó
el detalle, mucho más que el regalo caro que le dio Ricardo,
en agradecimiento abrazó fuerte a Magno, sin ya ni siquiera
recordar al amor de Ricardo, recién allí, Yania se dio cuenta
que estaba enamorándose de Magno.
En la noche, no pudo dormir pensando en cómo iba a
hacer frente a ese nuevo sentimiento que había surgido en
ella, y tomo la decisión de acabar la relación de años; ahora
pensaba, en cómo terminar, a pesar de todo, Yania era una
buena chica, no estaba en su mente hacerle daño a Ricardo,
él siempre estuvo con ella, en los malos momentos fue el
hombro en que descansó con sus tristezas, el que le secó sus
lágrimas cuando ella sufría y el que también algunas veces la
hizo reír a carcajadas, siempre se portó muy bien con ella.
212 Richard. M. Cantera Ríos

Recordó las palabras que decían, que en el amor no


existen personas buenas, ni malas, sino mejores opciones,
y para ella Magno era una mejor opción de amor, de mayor
felicidad, que estaba dispuesta a tomarlo.
Pero, lamentablemente, a veces para el amor no es
suficiente el que una persona sea buena, ella sentía que su
mente, su vida, debería ser diferente, además sentía que su
corazón ya no lo amaba, por lo que decidió llamar a Ricardo
para finalizar su relación.
Al escuchar la llamada de Yania, Ricardo presintió
que ella quería hablarle muchas cosas que no le gustarían y
tuvo miedo de enfrentarla, de perderla; no se equivocó, al
verla, Yania como intentando ordenar ideas para no hacerle
más daño, terminó diciendo las palabras de siempre cuando
se acaba un amor; nuestra relación no da para más, eres una
buena persona; le dijo triste, con lágrimas, que terminaran,
lloró sí, no era fácil acabar cuatro años de relación, lo abrazó
fuerte como despidiéndose de él para siempre, agregó que
quería estar sola, que no sentía lo mismo por él, que haga su
vida y que fuera feliz sin ella.
Ricardo no quiso aceptarlo, le pidió que le diera otra
oportunidad, mientras intentaba hacerse el fuerte para que
una lágrima no saliera de sus ojos y eso no fue una debilidad,
si no las expresiones de un gran sentimiento de amor para
él, le prometió que iba a cambiar, que lo amaba con todas
sus fuerzas y con todo el amor del mundo.
Yania lo cogió de las manos, lo abrazó fuertemente;
como quien despidiéndose para siempre de él, con los ojos
llenos de lágrimas de tristeza, pero pensando también en
ella le dijo nuevamente:
213 Richard. M. Cantera Ríos

-¡Vive tu vida!, ¡sé muy feliz!, ya nuestro amor nunca


funcionaría, sólo nos haríamos daño, no te aferres a un amor
que ya no existe.
Y se retiró del lugar, dejándolo solo, triste, sin futuro,
porque el futuro de su vida y todo lo que él había logrado
siempre fue por ella.
Mientras ella caminaba, Ricardo viéndola que se iba,
en su mente gritaba, esperaba que Yania diera la vuelta, que
regresara a él, es más, se diera cuenta, que él era el amor de
su vida y el único que lograría hacerla feliz, pero Yania sólo
caminaba apresuradamente alejándose cada vez más de él.
Ricardo, al llegar a su hogar, en su sufrimiento como
esperando obtener una respuesta a la vida, escribió en su
computadora. “Muchas veces me preguntaba, el por qué la
gente comete el error de escribir sus estados de ánimo en el
internet, hoy me di cuenta, se llama soledad, sin tener con
quien compartir personalmente todos los problemas y sin mi
confidente, me siento desprotegido, sin saber qué hacer. La
vida de por sí ya es difícil, pero hay días que se vuelven muy
complicados, mañana será mejor, sólo esperar y superarlo”
Por su parte, Yania llegó a su casa acongojada, triste,
sintiéndose más sola que nunca, escribió también algunas
palabras en su computadora. “Bienvenida soledad”; Magno
inmediatamente leyó el escrito, llamó a las compañeras para
saber lo que había pasado, enterándose que había acabado
la relación de Yania, para él fue una noticia triste, pero a la
vez de esperanza por el sentimiento de amor que tenía.
Al siguiente día, Magno sin perder tiempo fue a la
universidad a buscarla, le pidió que salieran a pasear y sin
pensarlo dos veces lo cogió de las manos.
214 Richard. M. Cantera Ríos

Le dijo que desde que la conoció estaba locamente


enamorado de ella, que no podía dormir por tanto pensar en
ella, que su mundo, su vida no eran nada sin ella, que era un
tormento sentir, ver que la persona que le atraía tanto le
pertenecía a otra, que soñaba todas las noches solamente
con besar sus hermosos labios, que sabía que era un pecado
enamorarse de una persona, que tenía pareja, que su mente
le decía que la olvide, pero su corazón se negaba y palpitaba
más fuerte al estar a su lado, que sólo moría por abrazarla y
besarla.
Yania escuchaba una a una, cada frase sin soltar una
palabra, su mente le decía que esperara, que se diera un
tiempo para iniciar una nueva relación, para no hacer daño a
Ricardo, pero su corazón, sus labios deseaban un beso de
Magno.
Mientras pensaba en las palabras de amor de Magno,
él sin dudarlo se acercó y le dio un beso lleno de pasión, sin
importarles a ambos el pasado que dejaban atrás.
Yania, aceptó a Magno, quien inicio la nueva relación
con una frase que le agradó: “amor nuestra relación empieza
desde hoy, tu pasado y el mío lo dejamos atrás, mi objetivo
es sólo hacerte feliz”, a partir de allí, iniciarían una relación
de amor diferente, con locuras, salidas constantes y bailes;
tuvieron muchas anécdotas, que hicieron que ella olvidara
rápidamente a Ricardo.
Ricardo, al enterarse de la nueva relación de Yania, se
sintió muy triste, dolido por la rapidez de iniciar una nueva
relación, aunque lo aceptó, porque pensó que ella tenía todo
el derecho de rehacer su vida e intentar ser feliz, aunque él
no lo fuera.
215 Richard. M. Cantera Ríos

No soportó ver a la persona que amaba con Magno,


decidió, equivocadamente, huir de las adversidades que le
presentaba la vida, no entendiendo que la única forma de
olvidar es siempre enfrentarlas y superarlas, se trasladó de
universidad a otra ciudad donde se encontraban algunos de
sus amigos de siempre, tal vez para empezar una nueva vida
e intentar olvidar.
Escribiendo para ella unas frases de despedida que
para el serían el inicio del olvido de su gran amor…….

Mi recordada y amor por siempre Yania


Estos últimos días, estos últimos años, sentí que lo mejor
que me había sucedido en mi vida se iba a quedar para siempre,
pensé que las cosas más lindas, los momentos felices que tienes
en la vida nunca acabarían, pero parece que el corazón entendió
que la vida no es siempre como una película de amor, donde los
problemas se resuelven tan fácilmente.
Escuchaba decir a muchos, que los mejores amores duran
para siempre, que cuando lo luchas con firmeza, cuando lo sigues
y gritas a todo el mundo, tu amor se va a quedar a tu lado.
Pero, tuve que despertar de esta ilusión de amor para
entender que la vida no es como un paraíso eterno de amor,
donde las promesas se cumplen, donde las personas se quedan a
nuestro lado para siempre, como un ciclo de vida, las personas
buenas se van, dejando excelentes y felices recuerdos; aunque tú
dejaste marcado en mi vida una huella de amor que al pasar el
tiempo nadie podrá borrarlo, como borrar algo que Dios, la vida
pusieron en mi camino y que el destino las acciones, las decisiones
se encargaron de cubrirlo.
Yania, estas no son palabras de reproches, como poder
reprocharte, si lo único que aparece en mi mente es tu sonrisa, si
cada vez que cierro los ojos, aparece tu imagen.
216 Richard. M. Cantera Ríos

Me dijeron que lo único que puede borrar este amor tan


grande, tan intenso, es el olvido, que debería ser paciente, fuerte
para sacar este dolor que siento al no tenerte cerca, que poco a
poco con el pasar tiempo, mi mente, mi corazón se iban a cansar
de pensar en ti; la verdad es que no, el corazón no quiere olvidar,
mientras exista la palabra Yania, existirá la palabra amor en mi
mente
No intento hacerte venir hacia mí, sé que ya te perdí, sólo
quiero agradecerte por haber estado a mi lado, por esas horas de
felicidad, que estando a tu lado se convertían en minutos; no
intento ser un poeta, sólo intento decir que no hay amor más
grande y mejor que el que hubo entre nosotros.
No te miento, todavía sueño con esa sonrisa que emanaba
de tus preciosos labios, que me hacían reír de felicidad, pero mi
mente en esos momentos de sueño sabe que nada es real, que no
estás a mi lado, la conciencia, la razón se encargan de volverme a
esta realidad y no quiero despertar, me agarro, me aferro en mis
sueños, a tus manos, sintiendo con desesperación que se sueltan,
se deslizan tus dedos de los míos y despierto, sólo quiero volver a
dormir, a soñar a tu lado, pero otra vez la razón se encarga de
reprochar al corazón, a mi mente que ya no estás aquí y te deje ir.
Voy hacer caso a mi mente, pero únicamente a la mente,
porque el corazón no te va a sacar, eres parte de su envoltura y no
va a dejarte ir jamás, porque tu nombre, tu sonrisa, el amor está
allí, y allí se van a quedar, porque sé, que gracias a ellos sigue y
quiere seguir latiendo.
Esta no es una despedida, estas palabras son sentimientos
hacia ti Yania, la persona que me enseñó, que el amor no es una
palabra que se dice, sino que se lo grita a los vientos, que cuando
en algún momento de nuestra vida alguien deja de hacerlo y de
amar, debe quedar la palabra, que seas feliz, que yo lo voy hacer
con tu recuerdo…………….
217 Richard. M. Cantera Ríos
218 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XX - EL AMOR NUNCA SE ACABA SÓLO CAMBIA


DE LUGAR

Pero la vida continuó para los tres, pasaron casi ocho


meses, Yania, para sorpresa de todos quedó embarazada, y
tuvo que dejar la universidad por exigencia de Magno, pues
tenía que cuidar a su hijo; pese a las súplicas de sus padres y
a la oposición que ellos tenían a esa relación, porque sentían
que Magno era una mala influencia para su hija, ella dejó
todo por amor, saliendo de su casa a los brazos del Magno, a
lado del padre de su hijo.
Pasaron dos años tuvo otro hijo más, hasta entonces,
habían pasado siete años, ella tenía veintiocho años y dos
hijos, su mundo de sueños de felicidad para toda la vida, de
palabras prometidas por Magno, quedaron dormidos en el
olvido.
Chocó con la realidad de que no siempre todo lo que
brilla es oro, Magno resultó ser únicamente sólo palabras
adornadas, los grandes detalles, las palabras de fidelidad y
confianza, que fueron lo que terminaron ayudando a decidir
a arriesgarse por ese amor, no fue sólo prometido a ella,
sino a muchas mujeres más, llevaba una vida entre alcohol y
mujeres, en un egoísmo extremo, le interesaba solo él, nada
más que él y no su familia.
Yania, sin un título profesional, con dos hijos y sin el
apoyo de Magno, cambió físicamente, no quedó nada de la
buena figura, ni de la cara hermosa, la vida de trabajo duro
pero honrado por mantener a sus hijos dejaron huella en su
persona, en realidad a ella lo único que le importaba en ese
momento era el bienestar de sus hijos.
219 Richard. M. Cantera Ríos

Uno de esos días de arduo trabajo, Yania, con el poco


dinero que contaba fue a comprar útiles escolares para sus
hijos, cuando salía de la librería, a unos cortos pasos vio que
frente a ella se estacionaba un auto del año, último modelo,
se notaba que era muy caro, saliendo del auto un tipo muy
bien parecido, con los lentes oscuros, con ropa moderna y
elegante, haciendo sonar la alarma de seguridad del carro
lujoso para asegurarlo, a lo que ella pensó, ¿como la gente
tiene tanta suerte en la vida?.
Mientras Yania pensaba, en que alguna vez en su vida
sus motivaciones fueron las de tener una vida cómoda, que
quedaron sólo en sueños, que ahora, era difícil de cumplir;
de improviso el tipo, el dueño del auto lujoso se acercó a ella
y la abrazo fuertemente; asustada, sobresaltada no supo que
decir.
Al sacarse los lentes sorprendida vio que era Ricardo,
quien la saludó con una gran sonrisa, dándole un beso en la
mejilla, ella enmudeció, por un instante, no supo que decir,
los recuerdos de su gran amor que había tenido de Ricardo,
volvieron otra vez a su mente.
Sintió que su gran amor, su mundo interior habían
regresado a su corazón, sus sentimientos de amor dormidos
despertaron repentinamente al tenerlo tan cerca, al verlo
después de tanto tiempo sintió nuevamente la tranquilidad,
la paz y el amor que siempre le dio a su vida.
Se dio cuenta que ese amor que tuvo por Ricardo
alguna vez, nunca se había apagado, estaba allí esperando
que la vida le diera una segunda oportunidad para poder
resarcirse de todos los errores cometidos.
220 Richard. M. Cantera Ríos

Quiso gritarle su amor, decirle que la perdonara, que


lo había extrañado como nunca, pero no pudo, sólo sentía su
mirada que le atravesaba nuevamente el corazón como la
primera vez que se conocieron, al mirarlo otra vez se olvidó
por completo de todo lo que la rodeaba, él la abrazó por
unos segundos, para Yania fueron segundos de felicidad, de
un amor, que estaba reprimido por años, queriendo que el
tiempo se detuviera allí, que no transcurriera, quiso estar así
toda la vida, vivir sólo en ese presente, y olvidarse de todos
los sufrimientos que vivía.
Ricardo, luego de abrazarla, le dijo:
-¡Te vez muy bien, los años no han pasado por ti!
Obviamente Ricardo se dio cuenta que ella estaba
mal económicamente, que había cambiado mucho, pero no
olvidemos que alguna vez la amó de verdad, de corazón y
siempre fue caballero, muy respetuoso sobre todo con ella,
buscando siempre resaltar las cosas positivas de las personas
con las que compartía.
Ricardo le comentó.
-Me enteré que te casaste.
Antes que le respondiera, Yania, le dijo, que también
lo había hecho él, que tenía una hija preciosa y una esposa
que amaba, que agradecía a la vida por haberle dado una
hermosa familia, que daría su vida por ellos.
Mientras escuchaba, en su mente comparaba el amor
que tenía Ricardo por sus hijos y lo poco o nada de su esposo
por los suyos.
Ella respondió todavía sonrojada, muy nerviosa que
estaba bien, que también tenía hijos y que eran la razón por
los cuales luchaba todos los días.
221 Richard. M. Cantera Ríos

Ricardo la felicitó y se despidió de ella diciéndole que


se cuidara, por ella, por sus hijos, por su familia, que si ella
estaría bien su familia sus hijos también lo estarían.
Yania, contestó todavía anonadada con un gracias y
suerte, viendo con tristeza que el amor de su vida se alejaba,
mientras que su corazón se destruía de amor y culpabilidad
por haber alejado de su vida un amor bueno, de respeto, de
sentimiento verdadero, por un amor de locura, de pasión.
Ahora ella en su mente, cuando se alejaba Ricardo,
gritaba que se diera la vuelta, que la mirara, que regresara a
su vida para darse una nueva oportunidad de amor, quería
gritarle que los amores buenos nunca se olvidan, que así se
unieran con otras personas, nunca vivirían un amor como el
que tuvieron y que su corazón le seguía perteneciendo; que
fue el peor error separarse de él, que nunca volvió a sonreír
como antes, como lo hacía con él.
Pero esta vez, el que se alejó para siempre sin dar la
vuelta fue Ricardo, caminando sin mirar atrás, siguiendo esa
vida, ese círculo que tarde o temprano le traería nuevas
sorpresas, en la que tendría que decidir siempre un límite,
con responsabilidad, poniendo siempre a los sentimientos
antes que la pasión .
Se alejó para siempre, tal vez agradeciéndole a Yania
por haber sido parte de una etapa maravillosa de su vida y al
contrario, en vez de reclamos odios y rencores, agradeció a
Yania por que al finalizar esa relación, había logrado darse
un tiempo para razonar y saber que hay cosas en la vida
más importantes que pensar que alguien puede morir por
un amor y que ello lo había enrumbado en los verdaderos
objetivos y motivaciones de superación en su vida.
222 Richard. M. Cantera Ríos
223 Richard. M. Cantera Ríos

CAPÍTULO XXI - DESAPRENDIENDO DE TUS ESTRUCTURAS


MENTALES

Intempestivamente, Ricardo despertó, se observó a sí


mismo muy sorprendido, estaba vestido con harapos, con el
cabello largo, la barba crecida, la cara quemada por el calor,
completamente lleno de polvo, como si fuera un indigente
que nunca recibió ayuda.
Miró atormentado el círculo de muchas personas que
caminaban apresuradamente en todas las direcciones sin
detenerse, como si todos estuvieran en una competencia
por quien llegara primero a sus objetivos, en una lucha para
seguir viviendo, parecía que buscaban algo que no podían
encontrar, le pareció muy extraño el por qué hacían eso, el
por qué perdían tanto tiempo en buscar cosas materiales o
algo que nunca encontrarían.
Lo que si era cierto, es que todas esas personas lo
evadían, tratando de no chocarse con él, sin darle la menor
importancia como si fuera una persona invisible para ellos.
Buscó desesperadamente dar una explicación del qué
hacia allí, del por qué su mundo de felicidad, de ilusiones, de
sueños, se convertían en menosprecio, en repugnancia, en
egoísmo por parte de la gente.
Mientras sentía que su cabeza explotaba de dolor,
intentó preguntar a algunas personas que pasaban cerca.
-¿Que pasó, que hago aquí? -preguntaba una y otra
vez-.
Nadie le respondía, como si no lo entendieran, huían
de él, lo rechazaban como si fuera una plaga a la que nunca
hay que acercarse.
224 Richard. M. Cantera Ríos

Al contrario, todos lo amenazaban con golpearlo si


se les acercaba.
-¡Aléjate, loco!, -le dijeron-.
Siguió caminando como perdido en un mundo que
sentía que ya nada era lo que él conocía, todo lo que veía le
parecía extraño, las calles de la ciudad con grandes edificios,
la tecnología nueva que había avanzado, la cual no entendía,
la cantidad de personas caminando como hormigas en varias
direcciones, como quién sin saber a dónde ir.
Todo era diferente a lo poco que recordaba, se sentía
que era un extranjero a quien nadie estaba dispuesto a dar
asilo, un bicho raro más al que todos querían aplastar, quiso
salir de allí, de esas miradas que lo veían como extraño, de
las miradas de burla, desidia, asco, que le causaba pavor.
En su desesperación, empezó a correr sin detenerse,
tal vez, tratando de huir de ese mundo, en donde casi toda
la gente pensaba en sí mismo y al que no entendería jamás.
Cansado de correr sin un rumbo fijo y de escuchar las
carcajadas, las burlas de las personas, se sentó adolorido y
apenado en un parque, mirando hacia el cielo, a las estrellas,
tal vez buscando encontrar una ayuda divina, cerró los ojos
para tratar de despertar de esa pesadilla, esperaba escuchar
una voz que le diera una explicación del por qué el mundo
actuaba así, tratando de regresar a su mundo de felicidad.
Tal vez, buscando regresar a la locura o al mundo de
sueños en el que se había sumido, intentando desconectarse
y vivir en la ignorancia de el no saber un significado para no
sufrir o buscando la sin razón, la sin lógica, la irreflexión para
no darse cuenta de lo que le rodeaba y así vivir en paz, para
huir de aquel un mundo sin sentimientos.
225 Richard. M. Cantera Ríos

Volvió abrir los ojos, pero nada cambiaba, seguía allí,


siempre en la soledad, en el sufrimiento, buscando en vano
escudriñar en su mente, de donde era, que se llamaba o cual
era el objetivo en su vida.
Cuando las luces de la ciudad se apagaron como su
memoria y todos dormían en sus abrigadas camas, se acostó
cerca a un edificio viejo, sobre un cartón, sin ninguna manta
que taparse, miraba acongojado a las estrellas buscando una
luz en su camino para seguir viviendo.
Mientras sentía que sus huesos se quebraban de frío,
aparecían más personas abandonadas como él, buscaban sin
poder encontrar lugares abrigados para dormir y tratar de
refugiarse en paz, se notaba el miedo en sus rostros, todos
ellos se acostaron como pudieron en el frío del pavimento,
temerosos, alertas de los grandes dueños de las calles, esas
personas sin sentimientos ni escrúpulos que actuaban como
murciélagos de la noche, siempre devorando, alimentándose
de la delincuencia, de la drogadicción, de la debilidad de la
gente: como hace siglos, sintió que estaba viviendo en un
mundo en el cual todavía existía la ley del más fuerte.
Al intentar dormir, su mente le decía que se adecuara
a este mundo, que la mejor forma de vivir era comportarse
como todos los demás, pues la sociedad no aceptaba a las
personas diferentes, que siguiera a la línea, a los dogmas de
pensamientos, de las conductas que todos imitaban, era la
mejor forma de sobrevivir en este mundo.
Que todo estaba definido en ese mundo, aceptando
la vida que le tocara llevar, que aunque lo intente no lo iba a
cambiar jamás, pues él sólo era un simple grano de arena
comparada con las fuerzas del destino.
226 Richard. M. Cantera Ríos

Que siguiera puesta esa venda de creer que somos


únicos, que somos lo mejor que existe en el mundo, por ello
teníamos el derecho de tomar todo lo que nos ofrece la vida,
sin discriminación, devorando como un animal carnívoro que
somos, exterminando a todo lo que se nos ponga en nuestro
camino.
Que se dejara llevar por la lógica de la vida y vivir en
un mundo de felicidad, olvidándose, alejándose de todo lo
que le causaba daño, intentando siempre sólo satisfacer su
hedonismo, los placeres materiales, carnales, que nos ofrece
la vida; su mente le decía que buscara ayuda, que dijera que
no estaba loco, que sólo había perdido la memoria, que si
seguía en ese mundo de sueños de locura, iba a recibir sólo
desprecio.
Pero, la locura de razón que todos llamaban, le decía
que no, que nunca aceptara vivir en ese mundo que actuaba
como una jauría de lobos en busca de presas, devorando a
quien se metiera en su largo camino al éxito, a objetivos que
ni ellos mismos entendían, su razón, su reflexión le decía que
todos los comportamientos de las personas no tenían lógica,
que no tenían sentido.
Se preguntó, cuál mundo era el real, el mundo en el
que había despertado, en el que materialmente vivía ahora o
el mundo de los sueños, de ilusiones, en el que se había
sumido varios años, en el que anhelaba regresar aunque no
tuviera razón de lo que pasaba, tendríamos que vivir en un
mundo de locura se preguntó, no podía ser lógico o cuerdo
el comportamiento negativo de algunas de las personas en
este mundo….
227 Richard. M. Cantera Ríos

No era lógico que una pareja de esposos se golpearan


sin piedad delante de los hijos, no era lógico que murieran
niños violados, asesinados por una mente enferma.
No era lógico que personas se sumieran en alcohol y
drogas, aun sabiendo que su mundo se iba a destruir, no era
lógico que algunas personas se enfrascaran en un mundo de
delincuencia y violencia, sabiendo que tienen familias que
sufrirían por ellos, no era lógico que hubieran muchos niños
abandonados por sus padres muriendo de hambre como si
fueran animales irracionales, no era lógico la desidia de los
humanos ante personas enfermas y pobres que esperan una
ayuda con desesperación, no era lógico que alguien atentara
contra su vida teniendo tantas personas que lo quieren y con
un gran futuro por vivir, no era lógico que le atribuyéramos
nuestros errores, penurias de vida al olvido de DIOS, cuando
nosotros también hacemos nuestro propio destino a través
de nuestras decisiones, no era lógico que adolescentes se
cortaran los brazos en juegos estúpidos o para imitar a otros,
no era lógico que en nombre de Dios algunas personas se
aprovecharan del poder religioso para tener poder o dinero,
no era lógico que el dinero pudiera comprar pensamientos,
principios, ideales, valores para satisfacer objetivos de otras
personas vendiendo para ello a su nación, a su localidad, no
era lógico que las personas se enfrenten en una guerra por
poder económico, por dominio sobre el otro. “No era lógico
involucionar en principios, cuando solo te han enseñado la
moral, el valor. No era lógico dejarse llevar por los placeres
cuando tenemos el más grande regalo que Dios nos dio, el
libre albedrío, la capacidad de decidir entre lo bueno y lo
malo, no era lógico actuar como animales irracionales.
228 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando despertó, decidió quedarse en ese mundo


que todos llamaban locura, decidió vivir entre la pausa y la
razón, desaprendiendo de la vida, desaprendiendo de las
situaciones negativas, que los demás le dijeron que tenía
que cumplir, como si nuestra vida fuera como una tabla de
multiplicar, en la que siempre tendría una sola respuesta,
no aceptó nunca la idea que la vida tenía solo un camino o
destino.
Prefirió quedarse ciego, en ese mundo donde todos
veían de manera diferente lo que él percibía, intentando a
partir de allí quitar la carga que significan los problemas de
la gente, quitar la venda que enceguecía sus mentes, aunque
mientras más conocía, deambulaba en ese mundo que había
despertado de su largo tiempo de amnesia, menos entendía
a la lógica de las personas, por lo que pensó y escribió………

En el mundo en que vivimos…


En el mundo en que vivimos pareciera que a algunas
personas les encantan vernos sufrir por ellos, como si tu
llanto llenara su vacio, su necesidad de elevar su ego, como
si tu tristeza sirviera para hacerlos importantes a aquellos
que no te merecen.
No intentes regresar al pasado, no vivas en el pasado,
porque ese pasado ya no existe, sólo vive tu vida pero con
madurez y responsabilidad.
Pero tampoco intentes adelantarte al futuro, porque
lo único que vas hacer en esa planificación es vivir en buscar
desesperadamente el cumplimiento de tus objetivos y metas
olvidándote de disfrutar lo hermoso de la vida, olvidándote
de vivir con pasión tu presente.
229 Richard. M. Cantera Ríos

Evoluciona, es hoy, no te digo que madures, porque


únicamente las plantas maduran, pero nunca te niegues a
cambiar tu ritmo de vida, entiende que la vida es un proceso
y como proceso todos cambiamos, todos evolucionamos,
ya no eres el infante, el adolescente, el joven que solías ser,
compórtate como lo que eres, de la edad que tienes, por ello
trata de quemar, de vivir tus etapas a cada día.
Evoluciona, no te niegues a cambiar jamás, nada está
quieto en este mundo y tú no eres la excepción, siéntate a
pensar solo en tu habitación o sal a caminar, pero reflexiona,
analiza y decídete a cambiar, luego de eso, continúa tu vida.
Permítete cambiar, todo en el mundo está siempre
en constante cambio y tú no eres ajeno a ello, no seas de las
personas, que para disculpar su ignorancia o terquedades
utiliza las palabras: ya estoy viejo para cambiar; tú puedes
cambiar, eres autosuficiente para mejorar como persona.
Evoluciona, basta de dar explicaciones, disculpas a
todos tus fracasos, entiende ya que todos nos equivocamos
algunas veces, acéptalos y prosigue con tu vida buscando
siempre nuevos caminos, aplicando lo aprendido, ve por la
vida siempre con las ganas, la motivación de ser un mejor
ser humano.
Entiende, de las decisiones que tienes que tomar en
tu presente, a cada segundo, minuto a cada hora, dependerá
tu futuro.
Evoluciona, deja de llorar por todo, desaprende de la
pregunta tonta, del por qué me sucede esto a mí, eso es lo
que tienes, lo que te toca(o) vivir, ya está hecho, avanza,
mira siempre hacia adelante, afrontando las situaciones
problemáticas sin perder tu límite de vida.
230 Richard. M. Cantera Ríos

Evoluciona, nunca confíes al cien por cierto en lo que


escuchas, ponle duda a todo lo que te dicen y más con lo
que te dicen los hijos, ellos no están contigo todo el día para
prever lo que hacen o dejan de hacer, los caminos de vida,
de la sociedad son demasiados peligrosos para pensar que
vives en un paraíso terrenal en donde todos son buenos,
felices y dicen la verdad.
Lamentablemente en el mundo en que vivimos hay
personas que involucionan, como si no hubieran aprendido
nada en la vida, como si mentalmente regresaran poco a
poco a su estado primate, en vez de dar el paso adelante
dan el paso para atrás, no aprenden nunca de sus errores.
Evoluciona no existen dos personas iguales, nuestra
conducta es como una huella digital, siempre diferente que
otra, podemos vivir la misma situación, pero las respuestas
nunca serán las mismas, no todo lo que te agrade tiene que
agradarle a los demás, aprende a respetar las diferencias y a
convivir en un mundo de respeto y tolerancia con los demás.
Hay que ser prácticos en la vida, las cosas que no te
sirven bótalas, sácalas de tu mundo, qué haces con una
persona que pese a las oportunidades que le has dado de
cambiar sigue haciéndote mucho daño, que llega ebrio todos
los días sin aportar económicamente en tu hogar, qué haces
con ese esposo que te golpea a ti y a tus hijos sin piedad,
sácalo de una vez de tu vida, enséñale que estas dispuesta
aplicar la ley de la utilidad de las cosas, “lo que no sirve hay
que desecharlo”.
Hay que ser prácticos en la vida, no te vuelvas como
algunas mujeres que no tienen para alimentar a su familia,
pero se endeudan para comprar los cosméticos y joyas.
231 Richard. M. Cantera Ríos

O como algunas personas que guardan sus objetos o


cosas para sacarlas sólo una vez al año, es bueno cuidarlas,
pero lamentablemente muchas de ellas mueren sin disfrutar
los bienes que adquirieron con tanto esfuerzo.
Sé práctico en esta vida, usa esa colonia que tanto te
encanta oler su aroma, que lo tienes tantos años guardada,
ponte ese pantalón que adoras cuando te miras al espejo y
que sólo lo usas para fiestas especiales, regala esa muñeca
que la tienes veinte años guardada a una niña que sueña
por jugar con ella, bota esos cuadernos de primaria de hace
quince años, que lo único que hacen es mantener recuerdos
y conocimientos desgastados.
Sé práctico en la vida, intenta recuperar algo perdido
hasta que sientas que has dado todo lo mejor de ti, intenta
solucionar el problema, aboca todo tu esfuerzo en ello, si no
se puede solucionar, déjalo ir, no puedes estar sufriendo,
deprimiéndote por algo que ya no depende de ti mismo, no
te niegues nunca a ser feliz.
Adáptate a la vida que tienes, al lugar donde vives, a
los sufrimientos, ellos son parte de la vida, al principio será
difícil, algunas veces sentirás que no cuadras en algún lugar,
que te asfixias en un trabajo, en una casa, en un aula de
clases; te sentirás como un punto negro dentro de muchos
blancos; entiende que es la vida que decidiste o que te toca
llevar, para ningún ser humano la vida es fácil, es nuestro
destino de vida.
Adáptate a disfrutar de lo poco o mucho que te ha
brindado la vida, entiende que si huyes de todos los lugares
en donde te sientes mal o extraño, huirás durante toda tu
vida.
232 Richard. M. Cantera Ríos

Adáptate, el hombre es más inteligente cuando más


rápido se adecua a una situación nueva, te prometo que al
final te acostumbrarás y disfrutarás los momentos que te
toca vivir, entendiendo que no hay otra vida mejor, que la
que uno decida vivir, en alegría, armonía y amor.
Pero también es bueno, desaprender, deja de utilizar
tiempo innecesario en arreglar cosas o hábitos negativos
que no tienen ningún sentido, hay situaciones en la vida que
merecen toda nuestra atención, nuestro tiempo, que estar
preocupándose por simples objetos.
Desaprende de ese concepto de novela, de dar todo
por tus sentimientos, sí, arriésgate, el amor y la vida es un
riesgo, pero también entiende que puedes equivocarte, no
hay nada seguro, ni fiable en este mundo, por ello pon un
seguro a tu persona, no des todo en una relación, no te
esclavices ni des todo tu tiempo para la pareja, olvidándote
de tu familia y amigos.
Al final, si fracasas en tu relación, esas precauciones
te harán decirte a ti mismo, sí, me arriesgué, me equivoqué,
aprendí de mis errores, pero sobre todo pensé en mí y en las
personas que me rodean, que son mis seres queridos.
Desaprende a pensar que mientras más adulto eres
más sabes, te equivocas, la vida no es como las líneas de un
libro, el saber se encuentra en la experiencia, si sientes que
ya sabes todo empieza a desaprender, pues todo lo que te
han dicho no fue todo real, fueron las ideas de una persona
común y corriente como tú, muestra tus ideas nuevas, tus
conceptos propios y arguméntalas sin miedo o temor a las
burlas de los demás, al final dirás, que importa si está bien
o mal lo que pienso, son mis propias ideas.
233 Richard. M. Cantera Ríos

Desaprende a pensar que los adultos, no deben soñar


y sonreír como niños, visita los lugares que te hicieron feliz,
recuerda los momentos más felices de toda tu vida, de tu
adolescencia, de tu juventud, ponte a escuchar esa música
que te gusta tanto, si sientes que quieres llorar al recordar
esos bellos momentos, hazlo, desaprende de ese concepto,
que el llorar es una debilidad, no olvides que el sentimiento
nos hace ser más humanos.
Desaprende de ese concepto tonto que escuchas en
casa por parte de la pareja, del por qué le das un poco de
atención a tu madre, tienes el complejo de mamitis. Dale un
tiempo a tu madre, llévala a cenar al lugar más elegante
que conozcas, comparte un bello momento de paz con ella,
cuando por situaciones de finitud, ya no la tengas a tu lado
sólo te quedará el placer y el recuerdo feliz, de que en vida
compartieron grandes recuerdos en familia.
Desaprende, deja de contradecir, de discutir con los
ancianos, deja de regañarlos porque se olvidaron de algo,
dales la razón y ayúdalos, entiende que los años hacen que
los adultos mayores pierdan poco a poco la capacidad de
recordar, entiéndelos, ellos regañan, se deprimen porque se
sienten impotentes, porque no pueden hacer las cosas que
hacían antes.
Desaprende de sentirte, de verte a ti mismo como un
señor viejo o acabado, al contrario, si existe un término para
calificarte, seria la palabra vivido, entiende que los años
pasan y esos te han dado algo admirable que tienes que
tomarlo en cuenta, se llama experiencia, enfoca tu energía
en enseñar y ayudar a los demás.
234 Richard. M. Cantera Ríos

Con tus grandes experiencias pasadas a lo largo de tu


vida también podrás mejorar este mundo y prever errores
que muchas personas cometen.
Desaprende del concepto, que la menopausia tiene
que hacerte enfadar; muchas veces es utilizada por los hijos
para presionarte, únicamente porque los regañaste al no
ceder a sus caprichos de adolescentes; entiende, envejecer
es algo inevitable, es parte de la vida, al final, los años no
importan, si no las experiencias que has dejado de vivir en
el corto tiempo que te toca estar en este mundo.
Desaprende del hábito de las reuniones de licor, de
fiestas semanales, desaprende de ponerte el uniforme, que
según tú es para el deporte, cuando sólo es el uniforme para
emborracharse, gastando el dinero que no tienes.
Desaprende del concepto que entre el amor y el odio
hay un solo paso, entiende que ambos son polos opuestos,
al contrario, entre esos extremos hay muchos pasos, cada
uno de ellos implica, decepciones, infidelidades, desaires,
maltratos, golpes, gritos, esas frases son estereotipos que
alguien inventó para disculpar todos sus fracasos, su amor
enfermizo, su masoquismo por gustarle sufrir; la conclusión
es simple, nunca se puede amar de verdad a alguien que te
dio sólo cosas negativas en la vida.
Desaprende de la idea de dejar que se alejen de ti los
verdaderos amores, olvídate de intentar seguir adelante sin
la persona que tanto amas; arriésgate a buscarla, sé sincero
con tus sentimientos, dile lo que piensas, lucha por el amor
de la persona que sabes que es tu felicidad, si no lo haces y
fracasen ambos sentimentalmente con otras personas, en
un futuro se van arrepentir toda la vida.
235 Richard. M. Cantera Ríos

Desaprende de la idea que tienes que humillarte para


iniciar una nueva relación, no necesitas estar persiguiendo
el amor con desesperación en tu vida, ni menos esperando,
rogando que alguien te elija como pareja, no estamos para
que nos elijan, estamos para elegir nosotros a la persona con
quien queremos compartir una vida, los seres humanos no
estamos hechos para mendigar cariño.
Desaprende de esa tonta idea racista, de rechazar a
las personas tan sólo porque son diferentes en color de piel,
nacionalidad o personalidad, entiende que la diferencia es
parte de esta vida, no existe una sola persona en el mundo
que sea idéntica a otra; deja de tener prejuicios, conceptos
adelantados de las personas sin conocerlos.
Desaprende de la idea que todo lo que ven tus ojos
es realidad, no siempre la luz es el final de un camino, en el
mundo de oscuridad, de dudas, temor también se aprende
lecciones de vida para no volver a cometer errores.
No siempre la felicidad está en alcanzar el éxito o
en las grandes satisfacciones materiales, a veces está en las
situaciones más simples, insignificantes, tómate tu tiempo
para encontrar esa felicidad y aprende a disfrutarlas.
Desaprende de la idea, que el tener una gran carrera
o una profesión, te hace mejor que otras personas, de nada
sirve tu inteligencia o que tengas muchos conocimientos y
seas el mejor profesional del mundo, con muchas becas,
maestrías o títulos superiores, si como ser humano te has
quedado en la mitad de la evolución, actuando como si
fueras un primate en evolución, sin sentimientos ni ética, al
tratar y menospreciar a otra persona.
236 Richard. M. Cantera Ríos

Desaprende de seguir en ese círculo de la pobreza


como si fuera una herencia de generación en generación,
deja de seguir ese círculo, es difícil, pero créate otro círculo
de bienestar económico, social y emocional, te aseguro que
en el camino al éxito, con tu ejemplo no sólo superaras tú,
sino también arrastrarás a tu familia y a tus seres queridos
a ese objetivo tan esperado.
Desaprende de la idea que para poner una empresa
se necesita mucho capital o dinero, estas equivocado, para
tener éxito económico, necesitas; idea diferente de negocio
en base a los gustos de los de los consumidores, buen trato
sin distinguir a ningún comprador, calidad, diferenciando el
producto con tu propio sello sin imitar a otros, porque ellos
estarán muy por delante de ti y por supuesto tener muchas
ganas de trabajar para lograr ese éxito tan deseado.
Desaprende, quita ya esa palabra de tu vocabulario,
que se aprende más errando, nunca tengas miedo al éxito,
da todo lo que puedes, ponle todo tu esfuerzo a esa meta, a
ese objetivo; está demostrado que las personas productivas
son aquellas que menos erraron, tratando de ser proactivos
utilizando su creatividad e imaginación para lograr sobresalir
en este mundo económico tan competitivo.
Desaprende de estar dando una explicación a todos
tus errores, acéptalos ya con un buen humor, puede que te
sigas equivocando, pero lo real es que siempre habrá algo
bueno que asimilar, que aprender, todas esas experiencias
harán que modifiques tus conductas, hasta que aprenderás
a no equivocarte, ello será el inicio para volver a empezar y
adquirir nuevos conocimientos, nuevas formas de enfrentar
a esos difíciles problemas que nos prepara la vida.
237 Richard. M. Cantera Ríos

Desaprende de poner pretextos facilistas a todos tus


errores, echando siempre la culpa en forma constante a tu
imperfección humana.
Si bien es cierto, nuestras sensaciones, emociones,
son innatas , no se pueden dejar de sentir, pero sí se pueden
detener; el aburrimiento, la exaltación, la rabia, la tristeza, la
excitación, en general todos los placeres se pueden manejar
utilizando algo muy simple para ti, mediante ese gran regalo
llamado “la razón, la reflexión”.
Desaprende de la idea de que dominas por completo
tus emociones y tus miedos, tu mente es una incógnita, una
caja negra de sorpresas, en donde no sabes a ciencia cierta,
cuáles van hacer tus reacciones, por ello, antes de tomar
decisiones a la ligera, primero piensa y luego actúa.
Desaprende de ese concepto equivocado, de que las
personas te tratan como te ven, esa es una idea tonta de
alguien, para intentar ocultar su complejo de inferioridad,
que piensa que la vestimenta, la ropa, la presencia, hace que
una persona deba ser mejor aceptada, las personas tratan
como te escuchan hablar, como te expresas, como te dejas
entender, en el mundo moderno el factor más importante
se llama conocimiento, innovación, creatividad, capacidad
para opinar, criticar, argumentando tus ideas, siempre con
sencillez y asertividad, sin menospreciar a nadie.
Desaprende de tus problemas, cuando sientas que
ellos se han extendido más del tiempo del duelo suficiente,
sumiéndote en una profunda depresión, que lo único que
hacen es hacerte sufrir sin poder tener paz en tu mente; es
tiempo de escapar de tu soledad, no te encierres, salte de
ese cuarto que se ha convertido en tu mundo de oscuridad.
238 Richard. M. Cantera Ríos

Motívate, tienes que poner todo tu esfuerzo para


lograr un bienestar psicológico, sal a distraerte, a caminar
para reflexionar sobre tu vida, sobre tus problemas.
Visita a tus familiares que te estiman, conversa con
alguien de confianza, déjate ayudar, ellos te darán nuevas
ideas de ver las situaciones, teniendo nuevas fuerzas para
enfrentar los problemas cara a cara sin huir de ellos.
Desaprende del sufrimiento, concientízate que todo
va a pasar, sí, se sufre, pero todo se olvida, son los procesos
del duelo frente a problemas, poco a poco entenderás que
el salir de tu círculo de vida que te atormenta te ayudará a
conocer nuevos lugares, buenas personas y encontrar de a
pocos, la paz que tanto anhelas.
Desaprende de ese complejo absurdo, que eres tonto
o menos que otros, porque no alcanzaste un puntaje para
una vacante a la universidad, o para alcanzar un puesto de
trabajo; la inteligencia no se mide por exámenes teóricos,
se mide por tus diferentes capacidades, habilidades para
salir de los problemas, utiliza tu capacidad de perseverancia
para entender y aprovechar las segundas oportunidades.
Desaprende de ese concepto erróneo que hay que
ser profesionales para lograr el éxito, la vida de por sí es una
lucha constante por sobresalir, nada de lo que busques será
fácil obtenerlo, deja de dar explicaciones a tus fracasos y
ponte a luchar contra tus miedos para lograr tus objetivos.
Para ello sólo necesitas trabajo y esfuerzo, utilizando
siempre tus capacidades, todas tus grandes habilidades que
la vida te ha regalado, no las desaproveches, entiende que la
inteligencia en la actualidad es la capacidad para solucionar
problemas, en tu familia, con tu pareja, en tu vida diaria.
239 Richard. M. Cantera Ríos

Desaprende de ese pensamiento, que como profesor


eres un ejemplo al que todos tienen que seguir, creyéndote
una eminencia al que hay que hay rendirle tributo para dar
una segunda oportunidad por un calificativo desaprobado,
sintiéndote en la cima del éxito porque sabes algún tema, el
cual has enseñado muchos años y lo dominas por mecánica
repetitiva o sintiéndote superior, porque has leído muchos
libros, alucinándote un amauta que sabe todo, obligando a
tus alumnos a seguir tu ejemplo y repetir lo que dices, como
si hubiera una persona en el mundo con la perfección para
calificar a alguien como ser humano, con una simple nota.
Si actúas con esos complejos de superioridad, nunca
lograrás un mejor aprendizaje en tus alumnos, porque jamás
entenderás la importancia que significa relacionarse, en sus
problemas, en sus alegría, en sus vidas; deja de comportarte
como un adulto experimentado o genio, el cual nunca se ha
equivocado, olvidándote de tus etapas de estudiante que
alguna vez viviste, como si hubieras sufrido de una amnesia
retrograda de experiencias; piensa en que también te tocó
vivir como adolescente, como joven y ayúdalos a aprender
a convivir; comparte, sonríe con ellos, dale más tiempo a
entenderlos y sobre todo a escucharlos; que tu educación
sea de mucha confianza y respeto, así lograras formar seres
humanos con valores, sin egoísmos, que es lo que necesita
este mundo donde casi todos piensan en sí mimos.
Desaprende de la petulancia de algunos psicólogos
al creerse videntes de conductas o dueños del mundo, sólo
porque alguien les pidió un consejo, creyendo ciegamente
que pueden analizar a cualquier persona sólo por el hecho
de una simple observación o un test.
240 Richard. M. Cantera Ríos

Todas las personas somos una caja negra llena de


secretos y respuestas que ni nosotros mismos conocemos,
lo único que puede hacerlos aflorar es la comprensión, la
confianza para poder ayudar a desahogar esos problemas
reprimidos.
Desaprende de la idea que te falta personalidad para
encarar los diferentes problemas; evoluciona, los problemas
de sufrimiento, de soledad, de enfermedades, te afectan de
acuerdo a tu personalidad para enfrentar las situaciones
negativas que te toca vivir.
La personalidad es la unión, conjunto de emociones,
sentimientos, conocimientos, conductas que todos los seres
humanos tenemos, no me digas que te falta una de ellas, no
pongas excusas constantes que no tienes personalidad para
afrontarlos, enfrenta a todos tus miedos, la perseverancia,
las ganas de continuar luchando, el tiempo harán que todos
tus grandes problemas desaparezcan.
Pero, esos primeros pasos sólo dependerán de ti, de
tu personalidad, de cómo te digas a ti mismo, que no vas a
huir de todos los problemas, no manda tu corazón, manda
tu razón, tu espíritu.
Por eso vive con pasión a cada momento, comparte
la vida con tu familia, abraza fuerte a la persona que amas,
si no la tienes, si no está a tu lado, pronto llegará, la vida da
siempre muchas oportunidades.
Ríe hasta no poder de alegría, baila hasta cansarte,
vive tu presente, pero piensa en los objetivos, en las metas
del mañana, porque tu futuro te está esperando junto a tu
felicidad, la felicidad que tú decidas vivir…………………………
241 Richard. M. Cantera Ríos

Ricardo deambuló por las calles por varios meses,


buscando sacarse la venda de los ojos, intentando encontrar
personas que le dieran motivos para seguir luchando, que le
enseñaran lo valioso de la vida para salir de sus locos sueños
y afrontar la realidad, tal vez, también buscando a alguien
que escuchara sus ideas, pero no pasaba ello, las personas
sólo se dejaban llevar por lo que veían al frente, una persona
pobre vestida con harapos, que jamás podría ofrecerles nada
y lo rechazaban sin escucharlo.
En una de esas largas noches, sintió que su cuerpo se
rendía, tenía los pies ampollados de caminar sin zapatos, la
cara enrojecida, quemada de tantos años de deambular en
un sueño sin razón, de pronto tosió fuerte arrojando sangre
por la boca, el gran frío, el vivir a la intemperie hacia que su
salud empeorara cada vez más y más, se limpió como pudo
con un pañuelo que siempre lo llevaba en el bolsillo, al ver la
sangre, sintió que estaba solo en este mundo, que estaría
destinado a morir en soledad, sus ojos sólo inspiraban rabia
por no saber a quién recurrir, pedir ayuda y tristeza, porque
a las personas que se acercaba les inspiraba repudio.
El desprecio de la gente, hizo que su cuerpo quisiera
descansar, tal vez ya para siempre, soñar era lo único que lo
hacía volver a su fantasía que para él era realidad; pero en el
mundo real poco a poco perdía las ganas de vivir, su mente,
su cuerpo se debilitaba, esperando un final para esa vida de
tantas decepciones, penurias, egoísmos, que hacían que se
dejara morir lentamente.
Ya era de día, escuchó el bullicio de las personas, se
encontraba recostado cerca a la playa, dormido junto al mar
con el sonido de las olas retumbando en sus oídos.
242 Richard. M. Cantera Ríos

Ello hacía que se sintiera acompañado en su soledad,


se puso de pie como pudo, aún enfermo con varios días sin
comer, empezó a caminar.
Como si estuviera en un desierto, sentía que sus ojos
alucinaban, encontrando dentro de mucha gente que había
allí a una persona muy familiar, lo miró fijamente, la persona
era Miguel, estaba de vacaciones con sus hijas y familia.
Al percibir que alguien lo miraba, como con un sexto
sentido, Miguel miró con detenimiento al indigente y volteo
a jugar con su hija, sólo le inspiró pena esa persona.
Ricardo agacho la cabeza y caminó lentamente para
huir como siempre de la desidia de la gente, Miguel al verlo
caminar reconoció algo familiar en él y como si su mente, su
garganta le obligara a desahogar esa palabra, llamó:
-¿Ricardo?
Lo dijo en una forma de sorpresa, de pregunta, como
esperando un milagro.
Al escuchar ese nombre, como si fuera un reflejo, el
indigente, el loco al que llamaban todos, volteó la cabeza
como si reconociera ese nombre.
Miguel, sorprendido llamó a su esposa y a sus hijas,
corrió detrás de Ricardo, lo miró fijamente, le dijo.
-¿Eres tú, Ricardo?, ¡Sí eres tú, dónde has estado!, -
gritando aún más emocionado-, toda tu familia, tus mejores
amigos te hemos buscado por años, mejor amigo.
Mientras la esposa de Miguel miraba asombrada la
cara de Ricardo y decía, que era imposible que lo hubieran
encontrado, cuando muchos lo habían dado por muerto, tan
lejos de su hogar.
243 Richard. M. Cantera Ríos

Era la primera vez que alguien se le acercaba, sobre


todo que lo trataban con respeto y atención, asustado quiso
correr una vez más, pero el nombre de Ricardo, Miguel y su
esposa le parecían muy familiares, el abrazo con sinceridad
de Miguel y su familia hacían que por primera vez se sintiera
importante para alguien, aunque el deseo impaciente de
querer saber quién era él, de donde venía, hizo también que
decidiera quedarse con aquellas personas, que hasta aquel
momento eran extrañas para él.
Miguel, por su parte, no estaba dispuesto a dejarlo ir,
menos abandonarlo ahora que había encontrado a su mejor
amigo de toda la vida, de inmediato lo llevó a un hospital
para que se recuperara, pasaron varios días de tratamiento,
finalmente Ricardo logró mejorar su salud, aunque todavía
no recordaba nada de su pasado por más que lo intentaba.
Con las heridas ya sanadas, Ricardo muy sorprendido
escuchaba la historia que le contaba Miguel; que él había
desaparecido en un accidente de autobús que había caído a
un barranco, le comentó que no lo encontraron por más que
lo buscaron, pues, aunque muchas personas lo habían dado
ya por muerto, su familia, sus amigos nunca se resignaron a
su desaparición y lo habían buscado por años.
La noticia de que Ricardo estaba vivo y bien de salud,
corrió rápidamente en todas las personas que lo conocían y
consideraban, Nova al recibir la buena noticia, casi sin creer
que Ricardo estaba vivo, sintió que había vuelto a vivir, que
sus súplicas habían sido escuchadas.
Mientras esperaba nerviosa, sin poder aguantar la
impaciencia por la llegada al aeropuerto del amor de su vida,
no paraba de agradecer a Dios por volver a traerlo a su vida.
244 Richard. M. Cantera Ríos

Cuando volvió a ver a Ricardo corrió a abrazarlo, lloró


de felicidad recostada sobre su pecho, siempre aferrada a él,
fuertemente, como teniendo miedo de volver a perderlo.
Mientras, detrás de Nova, una dulce niña se le acercó
caminando lentamente, con lágrimas de ternura cayendo
sobre sus rosadas mejillas, sorprendida, no creyendo lo que
estaba observando, con la mirada triste que reflejaban años
de sufrimiento sin poder olvidar a la persona que la cuidó y
protegió a cada momento, sin poder olvidar a la persona que
le cantaba todas las noches antes de dormir, que le prometía
que toda la vida estaría a su lado para amarla y cuidarla.
Cogiendo temblando con su pequeña mano a la suya,
muy fuerte, como quién, no queriendo que lo dejara sola
nunca jamás, con las palabras entrecortadas por la emoción,
le dijo sin poder soportar su llanto:
-¡Papito, no vuelvas a dejarme por favor!, te prometo
ser la mejor hija que tu esperas, nunca quise decepcionarte,
nunca vuelvas abandonarme, por favor, te extraño, te quiero
demasiado papito. Aferrándose a él, abrazándolo tan fuerte,
como si en todos esos años no habría tenido un momento de
paz, de cariño, ni de felicidad.
Ricardo se inclinó, abrazó a la niña sin querer soltarla,
su corazón, su mente acababa de encontrar la felicidad, la
motivación que tanto buscaba para seguir viviendo, para
seguir luchando en esta vida sin lógica, una familia, una hija,
que, aunque no recordaba nada de ella, los sentimientos, la
sangre que corría en sus venas hacía que llorara de felicidad
sin poder ya contenerse, pidiéndole perdón por no haber
estado para ayudarla, apoyarla como él le prometió alguna
vez.
245 Richard. M. Cantera Ríos

Inmediatamente, apareció los que más amaba en su


vida, su familia, su madre lo abrazaba desesperadamente,
agradeciendo ambos a Dios por permitirles vivir, para volver
a encontrarse, creyendo a ciencia cierta que si existen las
segundas oportunidades, que por más difíciles que sean la
situaciones que toca vivir; siempre habrá momentos de paz y
tranquilidad.
Todos los amigos de siempre también se acercaron y
abrazaron, sonriendo, felices, sorprendidos de que estuviera
compartiendo unos momentos con ellos, después de tanto
tiempo de darlo por desaparecido.
Tuvieron que pasar muchos meses para que Ricardo
recuperara por fin la memoria, cuando lo hizo, entendió que
los sueños en los que vivió podían hacerse realidad, que los
valores nunca desaparecerán, que siempre habrá personas
buenas en este mundo, que estarán dispuestas ayudar a los
que más lo necesitan, que la decisión entre el camino de la
maldad y la bondad puede tomarse con la pausa y la razón.
Que la diferencia es lo que nos hace seres humanos
únicos, que la locura para unos puede ser la bendición para
otros.
Entendió, que una de las muchas formas de intentar
seguir luchando en el duro camino que nos tocara seguir, es
dándonos unos minutos, un tiempo, una pausa para pensar,
para reflexionar, para entender que en medio de la vida, los
problemas o fracasos, siempre debe haber la pausa y la
razón para despertar de nuestros pensamientos, decisiones
equivocadas y así poder desaprender de todo lo que nos
limita o nos hace daño.
246 Richard. M. Cantera Ríos
247 Richard. M. Cantera Ríos

Richard Martin Cantera Ríos


Nació en la ciudad de Cajamarca
Realizó sus estudios secundarios en el colegio
“San Ramón”
Los superiores en la facultad de Educación y en la Escuela de
Guías de Turismo de la “Universidad Nacional de Cajamarca”
Sus diferentes escritos ofrecen una excusa perfecta para
intentar reflexionar sobre las diversas situaciones y tratar de
ayudar a las personas a aprender de sus experiencias de vida

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