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EL CONTROL GINECOLÓGICO

A ninguna mujer le resulta agradable abrirse de piernas y dejarse explorar por


un desconocido. Pero hay que ser consciente de que este examen resulta
necesario para prevenir algunas de las enfermedades más graves y frecuentes
en la población femenina, como el cáncer de mama y de cérvix.
Así que si eres mayor de 18 años y sobre todo si eres una persona
sexualmente activa, debes acudir periódicamente a la consulta de tú
ginecólogo. Más todavía si notas alguna anomalía, sientes dolor en el área
pélvica o genital o has tenido algún tipo de contacto sexual de riesgo. ¡Tú salud
está en tu mano!
El miedo al dolor ante una exploración ginecológica y el pudor a desnudarse y
mostrar las partes más íntimas ante una persona desconocida hace que
muchas mujeres renieguen de ir al ginecólogo. Pero las revisiones son
fundamentales en la vida de todas las féminas, ya que cumplen una función de
prevención de embarazos nos deseados y de enfermedades de transmisión
sexual u otras patologías.
Tu ginecólogo ha de ser tu mejor confidente. Ten en cuenta que vas a
compartir con él todas las etapas sexuales de tu vida: reglas dolorosas o
irregulares, sangrados fuera del periodo, la anticoncepción, tus embarazos, la
menopausia... Vuestra relación ha de basarse en la sinceridad y la confianza.
No debes tener reparos ni vergüenza con él, ten en cuenta que es un
profesional de la sanidad dedicado específicamente a los problemas de la
mujer.

El control ginecológico periódico conlleva una serie de cuestionamientos en la


mujer: ¿Cuándo?, ¿Por qué?, ¿Para qué?, ¿a partir de qué edad?, ¿Con qué
frecuencia?, ¿Es necesario si no me duele nada?...

El control ginecológico anual es un requisito ineludible en la actualidad.


Su importancia primordial consiste en:

1- Determinar el estado de salud de la mujer, informarla sobre su


funcionamiento ovárico, la importancia del autoexamen mamario, el riesgo de
contraer enfermedades de transmisión sexual y cómo prevenirlas, dar pautas
de procreación responsable, de períodos apropiados entre partos, de
amamantamiento, de métodos anticonceptivos adecuados a las distintas
edades de la mujer, educación sexual, etc.

2- La detección precoz de lesiones y/o modificaciones que inicialmente pueden


ser asintomáticas (por ejemplo: en las menopáusicas la alteración de los lípidos
aumenta el riesgo coronario y puede llevar a un problema cardíaco; o la
alteración del metabolismo fosfocálcico que puede evolucionar hacia una
osteoporosis), las patologías del cuello uterino, simplemente tratables o las
lesiones mamarias no palpables (detectadas sólo mediante mamografías) y
que libradas a su evolución natural pueden transformarse en un cáncer.

Existen distintas etapas en la vida madurativa de la mujer, y acordes con las


mismas la ginecología debe controlar, informar, prevenir y tratar situaciones
que comprometan su salud.
En cada uno de estos períodos existen con mayor frecuencia
determinadas patologías y consultas que el ginecólogo deberá resolver.

La adolescencia es un difícil período comprendido entre los 10 y 20 años


siendo menester conocerlo para poder comprender y ayudar a la adolescente.
Se caracteriza por la resistencia a estos controles.
Se inicia con la pubertad (10 a 15 años), manifestándose principalmente por
cambios corporales y mentales. El cuerpo de la niña va adquiriendo funciones
de adulto.

En la adolescencia media (15 a 18 años) ya existe un conocimiento y


aceptación de las modificaciones corporales, sus funciones y capacidades. En
éste período existe la búsqueda de la identidad sexual.

En la adolescencia tardía (18 a 20 años) se alcanzaría la madurez


biopsicosocial (identidad adulta como mujer). Existe tendencia a la rebeldía y a
buscar independencia del grupo familiar.

Durante este período pueden presentarse alteraciones del desarrollo, de los


caracteres sexuales y trastornos funcionales del ciclo -irregularidades
menstruales-. Estos últimos son bastante frecuentes.

Es necesario informar y clarificar sobre las enfermedades de transmisión


sexual y cómo prevenirlas; sobre los distintos métodos anticonceptivos para
evitar un embarazo no deseado; la responsabilidad que implica esa libre
elección y los riesgos inherentes a ella.

Finalmente, estar informada de qué es normal que le acontezca y ante qué


circunstancias debe la adolescente realizar una consulta al ginecólogo fuera del
control anual.

Es importante en éste período pleno de rebeldía, la presencia de un referente


médico contenedor, reconocido por los padres de la misma, en quien la
adolescente pueda canalizar sus dudas (mas libres de prejuicios o pudores) y
no solamente sus conflictos desde el punto de vista orgánico.

En el control ginecológico de la adolescente se evaluará:

 Talla, peso, desarrollo corporal.

 Examen mamario y abdominal.

 El examen ginecológico consistirá en la exploración del normal


desarrollo de los genitales externos.

 La colocación del espéculo vaginal queda limitado a aquella paciente


que haya iniciado sus relaciones sexuales.

 La colposcopia (también indolora) requiere la colocación de un espéculo


vaginal.
 Pueden ser necesarios estudios ecográficos ginecológicos y mamarios
(ambos no dolorosos).

En la madurez sexual:

En el control ginecológico se realizará básicamente:

• Exploración pelviana (Examen abdominal, examen ginecológico)

• Colposcopia, Ex.de Papanicolaou, Tacto vaginal.

• Examen mamario, ecografía mamaria, mamografía.

• Estudios de laboratorio.

Entre los 20 a 35 años los motivos de consulta más frecuentes están


relacionados con la paridad: infertilidad, esterilidad, métodos anticonceptivos,
enfermedades de transmisión sexual, etc.

Entre los 35 a 45 años pueden presentarse problemas tumorales (fibromas


uterinos, quistes ováricos, lesiones benignas o malignas de cuello uterino) y
prolapsos genitales.

Entre los 45 a 55 años nuevamente se consulta por trastornos funcionales del


ciclo (irregularidades menstruales), síndrome perimenopáusico y problemas
tumorales (benignos y malignos).

55 años o más: Se consulta habitualmente por síndrome climatérico, prolapsos


y procesos tumorales malignos.

Métodos complementarios de diagnóstico más frecuentes

Existen múltiples estudios complementarios y cotidianamente aparecen nuevos


y más precisos, dejándose de usar otros por obsoletos. Algunos de estos
métodos resultan aliados indispensables para el control y diagnóstico
ginecológico, por ejemplo:

1. Colposcopía: se realiza con el colposcopio, instrumento óptico que


permite visualizar con mayor aumento y distintos filtros de luz lesiones
de cuello uterino, vagina y vulva. Es un método totalmente indoloro ya
que se coloca un espéculo y el colposcopio no se introduce en el canal
vaginal.
Se efectúan tomas dirigidas de material de las lesiones para Ex. de
Papanicolaou o biopsias de las zonas para el diagnóstico preciso.
2. Mamografía (estudio radiológico básico para control mamario).
Ante imágenes dudosas se puede repetir éste estudio con magnificación
y comprensión (que focaliza y aumenta la imagen) o complementar con
ecografía mamaria para aclarar el diagnóstico.
Respecto a cuándo y con qué frecuencia debe realizarse existe un
consenso aceptado internacionalmente:
 Toda mujer (aún sin problemas mamarios) debe realizarse una
mamografía inicial de control a los 35 años (aunque actualmente hay
tendencia a llevar dicho estudio a los 30 años).
 Entre los 40 a 50 años realizar éste estudio cada año y medio o dos.
 A partir de los 50 años debe realizarse anualmente.

Esto queda supeditado al criterio médico, ya que ante factores de riesgo


aumentados o situación que lo requiera, se efectuará una mamografía fuera de
estos tiempos pautados y con la frecuencia necesaria para efectuar el
diagnóstico..

3. Ecografía Ginecológica (estudio no radiante)


 La ecografía ginecológica ABDOMINAL (convencional) permite una
visión panorámica del aparato genital aunque sin detalles de precisión.
 La ecografía ginecológica TRANSVAGINAL permite visualizar detalles
mínimos (quistes ováricos, alteraciones de las trompas de Falopio, la
presencia de un embarazo; la ubicación correcta de un DIU (que a veces
se desplazan), el espesor del endometrio, la presencia de pólipos o
fibromas, tumores ováricos (benignos o malignos), etc. Este estudio
resulta de gran utilidad en la pesquisa del cáncer ovárico (más frecuente
entre los 45 a 60 años) que se presenta en forma totalmente silenciosa
(sin síntomas que hagan sospecharlo) y es difícil descubrir en sus
estadios iniciales mediante un tacto vaginal.

INFECCIONES DE TRANSMISIÓN SEXUAL:

El incremento de enfermedades de transmisión sexual, sobre todo entre


adolescentes y menores de 25 años aumenta rápidamente, hasta convertirse
en una preocupación cada vez mayor, en especial en países en desarrollo,
como el nuestro.

Las enfermedades de transmisión sexual (ETS), son todas las enfermedades


que se adquieren principalmente por contacto sexual, al tener relaciones
sexuales sin protección y con una persona que está infectada. Antes se las
conocía como enfermedades venéreas (EV).

Las ETS son causadas por virus (herpes genitales), hongos, bacterias
(gonorrea y sífilis) y parásitos (piojos púbicos).

Son muy contagiosas.

En total constituyen más de 20 enfermedades, incluyendo el Síndrome de


Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA)

Muchas de estas enfermedades pueden tener buen final si se detectan a


tiempo; otras pueden traer problemas serios de salud, dejando secuelas para
toda la vida, como la infertilidad.
Formas de Transmisión:

Las enfermedades de transmisión sexual pueden ser contagiadas fácilmente


por personas infectadas aunque no presenten síntomas o signos visibles de
tener una enfermedad.

Algunas de estas enfermedades no presentan síntomas evidentes para el


hombre ni para la mujer, por lo que la persona infectada puede continuar su
vida aparentemente “normal”.

Sin embargo lo único que en realidad están haciendo cuando mantienen


relaciones sin protección (condón), es contagiar a otras personas y propagar la
enfermedad.
Las formas más comunes de contagio de una enfermedad de transmisión
sexual son:

· Contacto de la boca con los genitales y otras zonas de la piel infectadas.


· Coito vaginal o anal.

Otras formas de contagio son la transfusión de sangre y el uso de una misma


jeringa hipodérmica (SIDA, hepatitis B, sífilis) principalmente, entre adictos a
drogas inyectables.
Los jóvenes de ambos sexos suelen ser, por lo general, víctimas del contagio
de ETS por falta de información exacta sobre los síntomas, los sentimientos de
vergüenza y falta de protección en sus relaciones sexuales.

Por lo general, se preocupan ante la posibilidad de un embarazo; pero casi


nunca toman precauciones para evitar una ETS.

Síntomas:

Es muy importante conocer los síntomas de las diversas enfermedades de


transmisión sexual, para prevenir su contagio, y si ésta ya se produjo, iniciar el
tratamiento médico oportuno.

Las ETS producen síntomas diferentes que pueden afectar diversos sistemas y
órganos como la boca, ano, garganta, genitales o todo el cuerpo.
Algunas enfermedades pueden ser asintomáticas, es decir, sin manifestación
aparente de síntomas, especialmente en las mujeres.

Con frecuencia es difícil reconocer los primeros síntomas de muchas ETS.


En la mayoría de los casos afectan directamente a los órganos reproductivos,
motivo por el cual muchos jóvenes atacados por estas enfermedades, las
ocultan en un principio. Se deciden a hablar cuando el tiempo ha pasado y el
daño es mayor.
Los posibles síntomas de las ETS incluyen la secreción de pus por el pene o la
vagina.
También puede presentarse flujo vaginal anormal, ardor al orinar, dolor en el
bajo vientre o la ingle; fiebre; dolor o ardor durante las relaciones sexuales;
úlceras, verrugas o “pequeñas heriditas” en los genitales u otras partes del
cuerpo; infecciones, hepatitis; infecciones en el recién nacido y hasta
deficiencias en el sistema inmunológico.

ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL MÁS COMUNES.

1.- SÍFILIS:

También le llaman chancro. Es producida por un microorganismo que penetra


en la piel y la mucosa. Tiene distintos síntomas según el grado de avance de la
enfermedad. Estas pueden ser sífilis primaria, secundaria y terciaria.

La Sífilis Primaria:

Aparece después de tres semanas de haber tenido el contacto sexual con la


presencia del chancro duro o lesión primaria. También se adquiere por
transfusión sanguínea. Se presenta como una llaga o úlcera dura y sin ningún
color en particular, ubicada según el contagio (boca o genitales). No duele y
dura de 1 a 5 semanas y desaparece. Si no se detecta la enfermedad y se le
da tratamiento, la sífilis permanece.

Los síntomas de la Sífilis Secundaria:

Ocurren entre 6 semanas a 6 meses después de aparecer la llaga.


Las personas afectadas presentan un brote de erupciones en forma de
salpullido, principalmente en las palmas de las manos y plantas de los pies.
También pueden aparecer lesiones en la boca y la vulva, siendo la más común
la lesión en forma de verruga plana. Sin embargo, aunque no se presenten
signos, la sífilis continua latente.

La Sífilis terciaria:

Compromete órganos vitales como el corazón, cerebro, hígado y pulmones,


pudiendo sobrevenir por esta razón, demencia, parálisis o muerte .

Complicaciones de la Sífilis:

 Tanto la sífilis secundaria, terciaria como la congénita (transmitido de la


madre al niño durante el parto) pueden evitarse con un diagnóstico y
tratamiento oportuno de la sífilis primaria.
 Las úlceras en los genitales causadas por la sífilis se asocian con un
mayor riesgo de transmisión del virus del SIDA.
 La madre con sífilis puede contagiar a su bebé durante el embarazo o al
momento del parto, ocasionando una serie de defectos congénitos al
recién nacido, o hasta la muerte
2.- GONORREA:

La produce un microorganismo llamado gonococo. La mayoría de hombres y


mujeres no presentan síntomas aún cuando tengan la enfermedad.

Si aparecen síntomas, se dan entre los 5 y 7 días después de las relaciones


sexuales.

En los hombres produce ardor o dolor al orinar. Ganas frecuentes de orinar,


eliminando por el pene una secreción espesa, blanca o amarilla.
Las mujeres pueden presentar un flujo vaginal espeso, amarillento o blanco;
ardor o dolor al orinar. Un dolor más intenso que de costumbre durante la
menstruación. Cólicos en la parte baja del abdomen.

Cuando la gonorrea se presenta en la garganta puede producir síntomas


parecidos a la faringitis (dolor de amígdalas, dificultad para pasar alimentos).
Complicaciones de la gonorrea:

 Las mujeres infectadas y no tratadas pueden desarrollar enfermedad


pélvica inflamatoria, la cual puede ocasionarles infertilidad
 Los hombres también pueden sufrir de esterilidad, e infertilidad.
 Una madre con gonorrea puede contagiar a su bebé en el momento del
parto, lo que a su vez puede producirle ceguera al recién nacido.

3.- HERPES GENITAL:

Es una enfermedad transmitida por un virus que se localiza generalmente en el


cuello uterino, la vagina y la vulva.
La mayoría de las veces la infección no presenta síntomas, pero basta un
breve contacto sexual para que se produzca el contagio.
Los síntomas se manifiestan entre 2 y 30 días después de haber tenido
contacto sexual. Aparecen pequeñas lesiones o ampollas muy dolorosas en los
órganos sexuales que cicatrizan a los 10 a 15 días, aunque la enfermedad
permanece latente.

El herpes no tiene cura. Los tratamientos ayudan a reducir o suprimir los


síntomas, que se presentan periódicamente a lo largo de la vida.

Complicaciones del herpes genital:

En las mujeres se ha asociado con cáncer cervical y abortos espontáneos.

Una madre con herpes puede contagiar a su bebé, causándole daño


neurológico, infecciones en la piel o la muerte.
4.- PEDICULOSIS PÚBICA:

Es causado por la ladilla o piojo del pubis, que se adhiere a la base de los
vellos que rodean a los genitales y se alimentan de sangre.
Los piojos del pubis son muy pequeños y se pueden transmitir por contacto
sexual y por muchos tipos de contacto físico cercano, como uso de sábanas,
toallas, bolsas de dormir o baños infectados.
Su principal síntoma es la presencia de prurito o picazón en la zona del vello
pubiano.

Complicaciones de la pediculosis púbica:

· Los piojos y ladillas pueden ser portadores de otras enfermedades .

5.- VHI - SIDA:

La mayoría de los comportamientos de riesgo asociados al VIH tienen una


característica común: producen placer. Las consecuencias gratificantes
constituyen uno de los factores claves para explicar su aparición y su
mantenimiento. La transmisión se produce en la mayoría de los casos por la
práctica de comportamientos de riesgo".

Existen tres vías de trasmisión del VIH: transmisión sexual, transmisión


sanguínea (uso compartido de agujas o jeringas, instrumentos contaminados,
transfusión sanguínea, etc.) y transmisión de la madre al feto.

5.1. Transmisión sexual: Las relaciones sexuales sin protección suponen un


claro riesgo para la infección por VIH.

o Los contactos oro-genitales (contacto boca-órgano genital) pueden


transmitir el VIH si hay lesiones en cualquiera de las dos zonas.
o Todas las prácticas sexuales que favorecen las lesiones y las irritaciones
aumentan el riesgo de transmisión
o Las relaciones anales son las más infecciosas, porque la mucosa anal
es más frágil que la mucosa vaginal.
o El riesgo de infección aumenta con el número de relaciones sexuales sin
protección, aunque una sola puede ser suficiente si es que la pareja esta
infectada.
o El riesgo aumenta si la mujer tiene la regla ( a cusa del flujo sanguíneo).
o El riesgo se incrementa cuando se padece alguna infección de
transmisión sexual (ITS).
o En las prácticas heterosexuales el riesgo es mutuo, pero la probabilidad
de trasmisión hombre a mujer es hasta 20 veces mayor que la
trasmisión mujer- hombre al ser la mucosa vaginal más frágil.
o El uso de drogas puede afectar la capacidad del individuo para tomar
medidas de protección aumentando el riesgo de infección.
5.2. Transmisión sanguínea: La trasmisión del VIH por la sangre es otra
importante forma de infección. El uso compartido de agujas contaminadas
pueden trasmitir el virus, los elementos de cuidado corporales (hojas de afeitar,
pinzas, cepillo dental, etc) presentan también un riesgo, ya que pueden entrar
en contacto con la sangre.

5.3. Transmisión madre- hijo: El VIH se transmite de la madre al hijo durante


el embarazo a través de la placenta. El momento del parto supone otra
situación donde puede producirse la infección al entrar en contacto las
secreciones vaginales y la sangre de la madre con el recién nacido. Es
importante saber que el VIH solo se transmite a los niños en el embarazo o en
el parto siempre que su madre sea portadora del virus, no existiendo en el
mundo, ningún niño infectado en el que concurran otras circunstancias.

PREGUNTAS FRECUENTES:

¿Qué debo hacer si contraigo una ETS?

Acudir inmediatamente a un médico o establecimiento de salud más cercano.


No sentirse avergonzado/a y colabore siguiendo el tratamiento
responsablemente.
Comunicárselo a su pareja y evitar las relaciones sexuales hasta que el médico
se lo indique.

¿Los niños también pueden contraer una ETS?

Si. Con frecuencia las ETS pueden llegar al niño durante el embarazo de la
madre y durante el parto. Otra forma de contagio en niños se da a través del
abuso sexual.

¿Puedo tener relaciones sexuales una vez iniciado el tratamiento?

No. El médico dirá cuándo puede hacerlo. Esto dependerá del tipo de ETS que
sufra y del tratamiento que necesite. Puede durar varias semanas.

¿Qué debe hacer una mujer embarazada que ha contraído una ETS?

Informar a su médico inmediatamente, para iniciar el tratamiento. El profesional


le indicará las medidas preventivas para evitar el contagio durante el proceso
del parto y reducir los riesgos de contagio en las primeras semanas del
nacimiento.

¿Por qué las ETS son más peligrosas en las mujeres?

Porque la mayoría de mujeres infectadas no presentan síntomas. Porque si no


se tiene tratamiento oportuno, las complicaciones son más severas y
frecuentes. Por la anatomía genital de la mujer, la frecuencia de ETS es mayor
en ellas que en los varones. Por ejemplo, más de la mitad de mujeres con
gonorrea no presenta síntomas.
¿Por qué las ETS son más peligrosas en las mujeres?

Porque la mayoría de mujeres infectadas no presentan síntomas. Porque si no


se tiene tratamiento oportuno, las complicaciones son más severas y
frecuentes. Por la anatomía genital de la mujer, la frecuencia de ETS es mayor
en ellas que en los varones. Por ejemplo, más de la mitad de mujeres con
gonorrea no presenta síntomas.

¿Puedo tener al mismo tiempo dos ETS?

Si, se pueden tener más de dos enfermedades de transmisión sexual al mismo


tiempo. Cada una de las cuales requiere un tratamiento distinto. Además, el
haberlas tenido no le garantiza que no las vuelva a tener en el futuro

Sentimientos ante las ETS:

Adolescentes y jóvenes suelen ser, por lo general, quienes más demoran en


buscar tratamiento médico una vez que casi han confirmado sus sospechas de
haber adquirido una ETS, exponiendo de esta manera a su pareja.
Son frecuentes los casos de muchachos que al principio intenten auto
medicarse, y al no obtener resultados satisfactorios le confían el problema a su
amigo más íntimo, quien suele recomendarles algún “remedio” que casi nunca
producirá los efectos esperados.
Les resulta muy difícil vencer el temor y la vergüenza.
En especial, las chicas se sienten preocupadas o culpables de haber tenido
una relación sexual.
Creen que la enfermedad desaparecerá por sí sola y postergan su tratamiento.
Esto sólo origina complicaciones y contribuye a propagar la enfermedad si
tienen relaciones con otras personas.

Consecuencias:

Las ETS traen consigo una serie de consecuencias que van desde el:

 Dolor.
 Incomodidad.
 Ansiedad psicológica hasta enfermedad pélvica inflamatoria.
 Infertilidad.
 Embarazo ectópico.
 Artritis.
 Aborto espontáneo.
 Cáncer cervical.
 Lesiones cardíacas y cerebrales e inclusive malformaciones congénitas
en el recién nacido y la muerte.

Las más graves consecuencias se originan cuando las ETS pasan inadvertidas,
no son tratadas a tiempo, se equivocan al diagnosticarse y por lo tanto son
incorrectamente tratadas.
Existen ciertas ETS que pueden causar infertilidad y esterilidad en los jóvenes,
si no son tratadas a tiempo.
Tomemos por ejemplo a la gonorrea, que daña a los órganos reproductores
debido a que el gonococo puede producir cicatrices en las trompas de Falopio,
impidiendo el encuentro del óvulo con el espermatozoide, haciendo imposible el
embarazo.
En el hombre, la enfermedad produce cicatrices en la uretra, con la
consiguiente esterilidad.

Diagnóstico precoz y tratamiento oportuno:

Casi todas las Enfermedades de Transmisión Sexual tienen tratamiento y se


curan cuando se diagnostican a tiempo.
Si la persona sospecha que ha contraído una ETS debe ir sin pérdida de
tiempo al centro de salud más cercano, para iniciar el tratamiento.
Ante la evidencia de la infección, es común que los jóvenes estén muy
preocupados y ansiosos por negarse a admitir que han sido contagiados de
una ETS.
Querer mantener su problema en secreto, por un lado; y por el otro tener que
informar a su pareja y/o a sus padres de algo tan delicado, es una de las
razones por la cual los jóvenes retrasan la ayuda profesional.
Algunos acuden a tratamientos caseros “recomendados” por amigos; o se auto
medican, ignorando que es necesario un diagnóstico y que cada enfermedad
requiere de un tratamiento específico que sólo se lo puede proporcionar el
médico.

Existen medicinas para combatir la mayoría de estas enfermedades; lo más


importante es que la persona que sospeche que está infectada, acuda al
médico.

Prevención y recomendaciones

Para el caso de las Enfermedades de Transmisión Sexual, la monogamia


(tener y conservar una sola pareja) es tal vez la manera más segura de
prevenir un contagio.

Recomendaciones para prevenir las Enfermedades de Transmisión


Sexual

· Abstenerse de tener relaciones sexuales.

En caso de tener relaciones sexuales

 No tener relaciones sexuales con personas infectadas.


 Evitar relaciones promiscuas.
 Protegerse con el uso de condones.
 Practicar medidas de higiene como lavarse los genitales antes de las
relaciones sexuales.
 Observar siempre los genitales de su compañero/a para ver si presenta
llagas, granos, enrojecimiento, etc.
 Orinar antes y después del coito para eliminar las bacterias de la uretra.
 Tener controles médicos periódicos.
En el caso de tener la infección

 Comuníquelo a su pareja para iniciar el tratamiento junto y evitar


nuevamente el contagio. El tratamiento en pareja es fundamental para
evitar la reinfección.
 Evite tener relaciones sexuales hasta que el médico le indique que está
totalmente curado.
 Evite auto medicarse porque puede aumentar las resistencias en los
microbios.

PARA RECORDAR:

Todas las enfermedades de transmisión sexual son altamente contagiosas y se


transmiten teniendo relaciones sexuales con una persona infectada.

Las personas que alguna vez han contraído una ETS, saben lo fácil que resulta
infectarse, y por lo tanto deben comprender que pueden contraer el VIH de la
misma manera, es decir por medio de las mismas prácticas que los llevaron a
contagiarse de una ETS.

BIBLIOGRAFÍA:

http://www.agremiados.com.ar/indyr_control_gineco.htm

http://www.upch.edu.pe/vrinve/labyuni/labs/ueets.asp

http://www.peru.com/sexualidad/ets/

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