Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
Dancourt Carlos. La ideologia regionalista en la revista peruana La Sierra (1927-1930). In: América : Cahiers du CRICCAL,
n°4-5, 1990. Le discours culturel dans les revues latino-américaines de l'entre-deux guerres, 1919-1939. pp. 285-295;
doi : https://doi.org/10.3406/ameri.1990.991
https://www.persee.fr/doc/ameri_0982-9237_1990_num_4_1_991
AMERICA 285
CARLOS DANCOURT
286 AMERICA
LA SIERRA (PÉROU, 1927-1930)
AMERICA 287
CARLOS DANCOURT
288 AMERICA
LA SIERRA (PÉROU, 1927-1930)
AMERICA 289
CARLOS DANCOURT
290 AMERICA
LA SIERRA (PÉROU, 1927-1930)
carâcter irréaliste y hasta délirante del debate que ellos abren, estos autores
aconsejan la creation de nuevas reducciones para que, en vez de trasplantar al
indio a la ciudad, se lleve mas bien la ciudad hacia al indio, agrupândole (N°3,
p. 57).
Dada esta oposiciôn de visiones sobre "el problema indîgena", no es de
extranar encontrar también en la revista opiniones contrapuestas frente al
problema agrario. Por un lado, varios artîculos ponen de manifiesto la idea de
liquidar la feudalidad en el Peril expropiando los latifundios. El director de la
revista es de este parecer, ya que repetidas veces indica la necesidad, segûn sus
propias palabras, de "pulverizar el latifundio". Pero, por otro lado, la actitud de su
hermano es mucho mas conservadora, pues este se pronuncia tan solo por la
expropiacion y el reparto de las tierras no utilizadas por los latifundios (N°2,
p. 11). En un artîculo, hace incluso el elogio de la hacienda costena Chiclfn, de
propiedad de los latifundistas Larco Herrera, y termina declarando sin ninguna
intention comica :
"Si lo que ocurre al respecto de Chiclfn se realizara en el Peril, la
nacionalidad estaria salvada, ante todo la raza indîgena" (N° 8, p. 10).
Grande es pues la distancia que sépara esta vision racista y conservadora de los
bellos principios "serranistas" sobre el resurgimiento de la raza y la renovation
social del Peril. Lo curioso es que esta diversidad contraditoria no provoca
polémicas, aclaraciones ni rectificaciones en la revista. Al contrario, lo que
prevalece entre los redactorcs es mas bien el encumbramiento mutuo. La linea
polïtica e intelectual de la revista parace zigzaguear entre varios discursos
opuestos.
No obstante, es posible fijar algunas tendencias. Una de las mas évidentes es
su antimarxismo. En efecto, por mucho que Juan G. Guevara déclara que la
renovation del Peril vendra "de la fusion de las vigorizantes doctrinas serranistas y
de los mas avanzados idearios de la época" (N° 13, p. 3), numerosos editoriales y
artîculos - so pretexto de defender lo autôctono y lo nacional - rechazan
categôricamente el marxismo como ideologïa de la Europa décadente. A este
respecto, el principal bianco de los ataques pasa a ser J.C. Mariâtegui, director de
la revista rival, Amauta, quien es acusado de insinceridad, de limenismo
oportunista y charlatan y de comportarse como un traficante del indigenismo y
socialismo (N° 4, p. 4-5 ; N° 8, p. 43). Los insultos contra Mariâtegui arrecian
en el momento de la ruptura con Haya de la Torre, quien pasa a escribir en La
Sierra (N° 28, p. 11, nota). Se produce entonces un acercamiento entre los
serranistas de la revista y los apristas. Ambos coinciden en el anticomunismo, la
afirmacion de un discurso que prétende ser puramente nacional, la perspectiva
mesiânica, el tema antiimperialista.
Otra tendencia de la revista radica en el carâcter finalmente vago e
inconsecuente de su posiciôn regionalista. En efecto, el "serranismo" no concluye
en un proyecto politico regional, ya sea automista o federalista. Los "serranistas"
prefieren proyectarse hacia un futuro mesiânico - que harâ de ellos los salvadores
de su region, del Peril, de America y del mundo - a elaborar proposiciones
AMERICA 291
CARLOS DANCOURT
concretas sobre una nueva organization regional del Peru. Pero el desfase no es
solo de contenido, es también de tono. Parece que cuanto mas générales,
imprecisas y vacuas son las proclamaciones, mas declamatorio, altisonante,
pomposo y estridente se muestra el estilo. La frase se hincha constantemente
cargada de proclamaciones, de afirmaciones perentorias y de vaticinios. Esto se
verifica principalmente en los editoriales, en los artfculos de contenido
"serranista" y también en una série ininterrumpida de ditirambos dirigidos a
Victor J. Guevara por su proposiciôn de supranacionalizar las leyes relativas a los
medios de prensa, presentada como una de las mas grandes ideas que ha producido
el continente (N° 2, p. 21).
Sin embargo, cabe notar en la revista la presencia de estudios precisos y
rigurosos, de carâcter cientîfico, sobre estos temas referentes a la historia, a los
problemas sociales y econômicos, a la flora y la fauna, a las tradiciones, al arte,
al floklore y a la personalidad de la region de la Sierra sur del Peru. Escritos por
estudiosos brillantes como Hildebrando Castro Pozo, Luis F. Aguilar, Jorge
Basadre, José U. Garcia, Atilio Sivirichi y sobre todo Emilio Romero, quien
colabora a menudo en La Sierra, estos estudios constituyen, sin duda alguna, los
artfculos mas valiosos de la revista y, en todo caso, los que conservan mayor
actualidad. Asimismo, en esta vertiente rigurosa de la revista, habrîa que anadir la
realization de encuestas donde se formulan con precision algunas interrogaciones
sobre los problemas fundamentals del Peru de la época, como la naturaleza del
problema indigena, las caracterîsticas de la agricultura peruana, la expropiaciôn de
los latifundios, los proyectos de reforma agraria, la etapa de transition hacia el
socialismo (N° 1, p. 38 ; N° 29, p. 60). La Sierra obtuvo respuestas
interesantes, entre ellas dos de J.C. Mariâtegui.
292 AMERICA
LA SIERRA (PÉROU, 1927-1930)
Carlos DANCOURT
C.R.I.C.C.A.L.
NOTAS
1. Existio en el Cuzco, entre los anos 1909 y 1911 en su primera época y en 1921 en
la segunda, una primera revista que llevo el nombre de La Sierra y que fue el organo de
la Asociacion Universitaria que se ilustro en 1909 en el movimiento estudiantil
cuzqueno de reforma universitaria.
2. Por ejemplo : J. Basadre, J.U. Garcia, V.R. Haya de la Torre, M. Iberico, E.
Lopez Albujar, A. Orrego, A. Peralta, L. de Rodrigo, E. Romero, M. Seoane, L.E.
Valcarcel
3. Segûn datos de José Tamayo HERRERA, Historia del indigenismo cuzqueno, Lima :
Insituto Nacional de Cultura, 1980 ; p. 240-241.
4. Por ejemplo : Attusparia en Huaraz, Kunter y Vôrtice en Sicuani, Kosko en Cuzco,
Boletin Titikaka en Puno, Chirapu y Wanak en Arequipa, Serrania en Huânuco, Inti
en Huancayo.
5. A rafz del movimiento de reforma universitaria que se produjo en Cuzco en 1909,
una nueva generacion de estudiantes y catedrâticos abre la Universidad cuzquena al
estudio de la region andina y del indio. Se forma entonces la "Escuela Cuzquena" : un
grupo de jovencs intclectuales que da comienzo al movimiento indigenista en el Peni.
6. El historiador José TAMAYO HERRERA afirma que Juan G. GUEVARA dedico gran parte
de su fortuna personal a la financiacion de la revista; op. cit., p. 241.
7. Luis E. Valcarcel, Tempestad en los Andes, Lima : Editorial Universo 1927,
Rééd. 1972 ; p.112 y 115.
8. El odio contra Lima se expresa con tanta agresividad en la revista que algunos
intelectuales limenos, experimentando un gran sentimiento de culpabilidad, se ven
obligados a rencgar de sus origenes. Por ejemplo, Manuel A. SEOANE confiesa que ha
AMERICA 293
CARLOS DANCOURT
294 AMERICA
INDICE DE LOS NUMEROS DE LA SIERRA
1 Enero 1927
2 Febrero
3 Marzo
4 Abril
5 Mayo
6 Junio
7 Julio
8 Agosto
9 Setiembre
10 Octobre
11-12 Noviembre-Diciembre
25-26 * 1929
27 Marzo
28 *
29 *
30 *
31
32-33 * 1930
34 *