Platón

Origen de la ciudad
 Hay una justicia propia del hombre y una justicia de la ciudad entera. La ciudad por ser
mayor que el hombre, la justicia se muestra en mayores proporciones allí y en ella nos
resulta más fácil conocerla.
 La ciudad tiene su origen en la circunstancia de que ninguno de nosotros se basta a sí
mismo, sino que necesita de muchas cosas. Para satisfacer una necesidad del hombre ha
de reunirse con otro hombre con la mira de auxiliarse mutuamente. Esta sociedad es el
Estado.
 Las necesidades son el cimiento del Estado. Hay tres principales necesidades: alimentos,
habitación y vestidos.
 El Estado contará con un mínimo de cuatro a cinco personas.
 No hay dos hombres exactamente iguales por naturaleza y existen unos que tienen
condiciones innatas para hacer una cosa y otros las tienen para otras.
 También es evidente que, si se deja pasar el tiempo oportuno para efectuar un trabajo,
éste puede frustrarse. Se hacen más cosas, mejor y con más facilidad cuando cada
persona realiza un solo trabajo, de acuerdo con sus aptitudes, en el tiempo debido y sin
ocuparse de nada más.
 Es casi imposible al fundar un Estado que se encuentre un lugar en la tierra en el que se
pueda sacar todo cuanto aquél necesita para subsistir. Será preciso no sólo trabajar para
las necesidades del Estado, sino también en calidad y cantidad suficientes para aquellos
del exterior de quienes se necesite. Son convenientes los comerciantes.
 Se da la necesidad de un mercado y una moneda, como signo que facilite el valor del
cambio. Los mercaderes son necesarios en estas para poder vender lo que labradores etc.
Hagan para que permanezcan en el mercado y entregan dinero por mercancías a quienes
desean vender algo y mercancías en cambio por dinero a los que necesitan comprar.
 Los asalariados son ayudantes cuya cooperación a la sociedad no es su inteligencia pero
que poseen la suficiente fuerza física para realizar los trabajos más penosos; venden el
fruto de su fuerza y el salario es el precio que se les paga. Son un complemento del Estado.
 Como vivirán los ciudadanos:
o Primer cuidado será procurarse trigo, vino, vestido y zapatos.
o Luego se construirán viviendas.
o Se alimentarán con harina de cebada o trigo con los cuales banquetearán.
o Beberán vino y cantaran alabanzas a los dioses.
o Por temor a la pobreza y a la guerra procurarán tener el número de hijos
proporcionado al estado de sus recursos.
o Después de haber procurado vivir en paz y con salud, morirán como es natural y
dejarán sus hijos como herencia una vida similar a la suya.
 El Estado sano es el descrito anteriormente. El Estado enfermo es en el que habrá muchos
que no se sienten satisfechos con el género de vida sencilla. Ya no serán solo las cosas
necesarias, si no que se añaden nuevas “necesidades”. El Estado sano resulta demasiado
pequeño y ya no basta por lo que hay que agrandarlo y hacer entrar nuevos ciudadanos
 para atender el lujo y a otras conveniencias, como gastrónomos. Se hacen más necesarios
los médicos.
 Para esto, habrá que recortar en su provecho el país vecino si se quiere poseer los
suficientes pastos y tierra cultivable. Para esto, se tendrá que hacer la guerra. Origen de
la guerra. Será preciso tener un ejército para combatir contra los invasores. Es imposible
que los ciudadanos se puedan defender y atacar ellos mismos porque es imposible que
un mismo hombre desempeñe bien diferentes oficios.
 Cuanto más importante es el cargo de los guerreros o guardianes del Estado, tanto más
conveniente es que se desentiendan de toda otra ocupación y se consagren a su misión
con la máxima competencia y cuidado. Además, valiente.
 Guerrero: que tengan el sentido fino para darse cuenta del enemigo, velocidad para
perseguirlo y fuerza, porque han de luchar una vez alcanzado.
 Se necesita que tengan una naturaleza que sea dócil y con predisposición a la cólera, pero
estas cualidades son opuestas y por eso hay que admitir que será imposible encontrar el
buen guardián que se necesita.
 El alma tiene una predisposición a encolerizarse.
 Comparación perros con guardianes: el carácter de los buenos perros de raza consiste en
ser dóciles con los que conocen y feroces con los desconocidos.
 Además, se necesita que sea filósofo por naturaleza.
 Para distinguir el amigo del enemigo, se base en que al uno lo conoce y al otro lo
desconoce. Para que el hombre se muestre amable con los que conoce y son sus amigos,
es preciso que sea por naturaleza filósofo y tenga deseos de aprender.
 Guardián tiene que ser: valiente, fuerte, veloz y filósofo.
La ciudad justa
 La justicia consiste en ocuparse únicamente de lo que a uno le es propio, y no
multiplicar sus actividades en lo que no les es propio.
 Virtudes del Estado: templanza, valor y prudencia. El principio de estas virtudes permite
su nacimiento y después las conserva mientras subsiste en ellas. Si se encuentran estas
virtudes, lo que queda es la justicia.
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