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Formación y Capacitación
DIPLOMATURA DE ESPECIALIZACIÓN
Gestión de la
Formación y
Capacitación
FACULTAD DE
EDUCACIÓN
ÍNDICE
Pág.
Introducción 5
Esquema general del contenido 6
Unidad didáctica I: Fundamentos conceptuales y pedagógicos de los entornos
virtuales de aprendizaje 7
1. Rasgos del contexto mundial que condicionan el uso de las TIC en educación 9
1.1. Los nuevos paradigmas tecnoproductivos 9
1.2. Velocidad de los cambios tecnológicos y necesidad de educación permanente 10
1.3. La educación intercultural 11
1.4. La sociedad virtual 12
2. Los entornos virtuales, comunidades y redes para el aprendizaje 14
2.1. El aprendizaje en entornos virtuales 14
2.2. Las redes de aprendizaje 18
3. Recursos para el aprendizaje 19
3.1. Componentes básicos de un curso on- line 20
3.1.1. Componentes pedagógicos 21
3.1.2. Componentes tecnológicos 23
3.2. La estructura básica de los materiales para el aprendizaje. 27
4. Los antiguos y nuevos roles del profesor, el tutor y el participante 33
4.1. Rol del profesor 33
4.2. Rol del tutor 34
4.3. Rol del participante 35
5. Nettiquette 38
Autoevaluación de la unidad 39
Respuestas a la autoevaluación de la unidad I 40
Bibliografía y referencias electrónicas de la unidad I 41
Unidad didáctica II: TIC, aprendizaje, herramientas y servicios 43
1. Tecnologías de información y comunicación 46
2. Aprendizaje y tecnologías de la información 50
3. Herramientas y servicios de tecnología 52
4. La Web 2.0 y el proceso de enseñanza-aprendizaje 85
5. Uso pedagógico de las herramientas de productividad e Internet 89
5.1. Uso de herramientas de productividad 90
5.2. Uso de algunos programas y recursos 110
Introducción
Estimados participantes:
Bienvenidos a nuestro curso Recursos en entornos virtuales de aprendizaje, el cual consta de tres
unidades didácticas. La primera unidad está orientada a comprender algunos factores del contexto
internacional, especialmente, la denominada sociedad virtual que influye en la integración de las
TIC en la educación. Aquí, se discutirán algunos conceptos como realidad virtual, se presentarán
algunos lineamientos pedagógicos para el diseño y desarrollo de los recursos para el aprendizaje,
así como las características de las redes de aprendizaje. Finalmente, se examinará cómo, en este
nuevo contexto, están variando los roles de los docentes y los estudiantes.
El desarrollo de los temas va acompañado de actividades para el aprendizaje que les ayudarán
a aplicar lo aprendido. Asimismo, contarán con una autoevaluación.
Estamos seguros que, con el esfuerzo conjunto de ustedes, de sus tutores y del docente
especialista, culminaremos con éxito la tarea que ahora iniciamos.
Fundamentos conceptuales y
pedagógicos de los entornos
virtuales de aprendizaje
Iniciamos el estudio del curso
reconociendo el contexto internacional,
denominado sociedad virtual, y aquellos
factores que influyen en la integración
de las TIC en la educación, además de
conocer lineamientos pedagógicos para 1. Rasgos del
el diseño y desarrollo de recursos para contexto mundial que
el aprendizaje, las redes de aprendizaje condicionan el uso de
y los nuevos roles del participante y del las TIC en educación
docente en este nuevo contexto. 2. Los entornos
virtuales,
comunidades y redes
Para tal propósito, la unidad se ha
para el aprendizaje
organizado en cinco temas tal y como se
presenta en el esquema de la derecha:
4. Los antiguos y
3. Recursos para el nuevos roles del 5. Netiquette
aprendizaje profesor, tutor y el
participante
De este modo, esperamos que el estudio y desarrollo de las actividades que proponemos en
esta unidad lo lleven a alcanzar las siguientes capacidades:
a) Valora los elementos del contexto internacional que condicionan el uso de las TIC en
educación.
b) Comprende los fundamentos pedagógicos esenciales del uso de las TIC para el aprendizaje,
los roles del profesor, el participante y el proceso de elaboración de un material educativo
para el autoaprendizaje.
.............................................................................................................................
.............................................................................................................................
3. Mencione los recursos para el aprendizaje que utiliza con mayor frecuencia en
la formación o capacitación de adultos.
Le recomendamos que comparta sus respuestas con algún(a) compañero(a) del curso. Comente
sobre cuánto conoce acerca de los contenidos. También, puede revisar estas preguntas al finalizar
el estudio de la unidad y verificar sus aprendizajes.
Bien, terminamos de revisar los conocimientos que usted tiene sobre el contenido de la
presente unidad. Ahora, le invitamos a iniciar el estudio de estos temas.
Nuestro curso aborda, en general, el uso de recursos para generar entornos o ambientes
virtuales de aprendizaje. Dichos entornos se pueden comprender mejor en el marco de los nuevos
paradigmas tecnoproductivos y de la denominada «sociedad virtual». Además, pueden utilizarse
tanto en la modalidad de educación presencial como en la educación a distancia. Sin embargo,
por la naturaleza de nuestra diplomatura, consideramos importante ubicar el uso de las TIC en el
contexto de la educación a distancia.
Fernando Villarán ha resumido certeramente las características del nuevo paradigma tecno-
económico que viene produciendo la denominada tercera revolución industrial:
Reducción de las escalas de producción (…) hoy en día ser eficiente y de alta productividad no
significa producción en masa ni a gran escala (…)
Nuevo rol de los recursos humanos como centro del desarrollo tecnológico (…) convirtiendo
a las empresas modernas en inteligencia-intensivas.
Esta es la razón por la cual, salvo en los conceptos más fundamentales de las diversas disciplinas,
ya no se puede pensar que es factible lograr en la formación inicial universitaria los conocimientos
actualizados de una determinada profesión. Tanto es así que en ciertos campos, como el de la
computación, lo que un estudiante aprende en el primer año de su carrera es posible que ya no
este vigente cuando egresa. «Esta situación (…) plantea la necesidad de establecer un proceso de
educación permanente con currículos recurrentes que dejen siempre abierta la posibilidad de una
continua actualización» (Gonzales, 1993, p.22).
Pero sobre todo plantea la necesidad de que los individuos adquieran las herramientas
necesarias para el aprendizaje permanente. Los profesionales formados en las universidades,
entre ellos el profesional de la educación, necesitan fortalecer su capacidad de autoaprendizaje,
y su habilidad y creatividad para hacer frente a situaciones nuevas en su desempeño laboral. En
consecuencia pasa a tener especial relevancia una docencia centrada en el aprendizaje y promover
una educación activa. Por ello, el «aprender a conocer» recomendado por el Informe Delors tiene
aquí una de sus justificaciones más claras.
Aunque en la mayoría de los países las políticas de formación de docentes se siguen centrando
en la formación inicial, la formación y el perfeccionamiento en el empleo o formación continua
de los maestros ha cobrado más importancia en los últimos años (…) Se está generalizando la
opinión de que la docencia, al igual que otras profesiones, es una actividad de ‘aprendizaje’
y que las personas que la ejercen han de tener oportunidades de actualizar y renovar sus
conocimientos, aptitudes y capacidades periódicamente a lo largo de su carrera (Unesco,
1998, p.69).
La educación y las otras disciplinas que se ocupan del hombre y la sociedad están llamadas a
enfrentar paradojas y contradicciones en un mundo que es:
(…) aldea global dominada por el mercado y por los medios de comunicación que llegan a las
comunidades más remotas [y simultáneamente enfrenta una] (…) eclosión étnica, en la que
nacen nuevas culturas y renacen las viejas (…) los pueblos se sienten hoy más orgullosos de
sus diferencias, los grupos sociales crean nuevas identidades y las sangrientas luchas étnicas
amenazan la civilización a pesar de sus logros tecnológicos. Este mundo nuevo, que es cada
vez más de todas las sangres, necesita (…) construir la unidad en la diversidad (Marzal, 1997,
p.83).
La persona educada del mañana, nos dice Capella (1996), tendrá que estar preparada para
vivir en un mundo global, pero peculiar. Deberá tener la aptitud necesaria para ser un ciudadano
del mundo –por su visión, sus horizontes y su información- pero también tendrá que ser capaz de
nutrirse de sus raíces autóctonas, y a su vez de enriquecer y nutrir a su propia cultura local.
Felizmente, como señala el informe de la Comisión Mundial de Cultura y Desarrollo (1998) los
jóvenes de hoy están más alertas a las tendencias mundiales que cualquier generación anterior en
la historia. Gracias a la revolución en la información están más conscientes y más proclives que las
anteriores generaciones para responder a la diversidad de valores culturales y formas de expresión
en el mundo de hoy.
El futuro ya está aquí, y solamente existen dos posibilidades: ser digital o no ser (Negroponte,
1995).
Desde sus orígenes, el ser humano ha procurado diversos mecanismos para representar la
realidad: el lenguaje oral, los dibujos, la pintura, la escritura, etc. Pero lo revolucionario del mundo
virtual es que presenta la realidad usando elementos intangibles denominados bits que son los
portadores de la información.
Uno de los aspectos más positivos de la sociedad virtual son las posibilidades democratizadoras
de producción y acceso a la información. A diferencia de la televisión y la prensa, ya no se necesitan
grandes capitales para ser miembro de esta sociedad. Y no solamente como receptores, sino
también como emisores. La «agresión desde el espacio» de la que se hablaba en la década de los
setenta al referirse a las transnacionales de la información, cede de algún modo al hacerse posible
que una pequeña empresa, o una sola persona pueda ser protagonista con igualdad de derechos
en la red mundial.
La educación, que tiene múltiples retos, puede aprovechar las posibilidades de la realidad
virtual. Una de ellas es justamente el uso didáctico de la simulación de modelos reales, pues «(…)
la tecnología moderna permite diseñar micromundos artificiales que tienen todas las ventajas del
mundo real. Con ellos (...) es posible exponer a los estudiantes a situaciones a las cuales resulta
demasiado caro, peligroso, lento, impredecible o difícil exponerlos en la vida real (…)» (Westbury,
2001, p.78).
Ahora, responda:
a) ¿Ha tenido alguna experiencia de aprendizaje en entornos virtuales antes
de esta diplomatura?
SÍ ( ) NO ( )
b) ¿Qué apreciación puede hacer de los entornos virtuales que le ofrece la
Diplomatura de Especialización en Gestión para la Formación y Capacitación?
Este entorno, ¿le resulta amigable? Precise por qué.
Realidad virtual es una especie de simulación y, como todas las simulaciones, tiene dimensiones
de fidelidad. Incluso, muchas veces, los ambientes virtuales llegan a incorporar al usuario como
objeto del ambiente en el que está trabajando.
En general, la educación puede también aprovechar otras ventajas de los medios informáticos
y telemáticos como las posibilidades de interactividad del estudiante con los materiales, con el
profesor y entre ellos mismos, formando grupos de aprendizaje colaborativo.
Como se sabe, gran cantidad y calidad de recursos para el aprendizaje, muchos de ellos ubicados
en lugares remotos, pueden estar al alcance de la mano de cualquier estudiante. Están disponibles
las veinticuatro horas del día en la más prometedora de las autopistas de la información: Internet.
Estudiantes de cualquier punto del orbe pueden, con facilidad, acceder a revistas científicas,
bases de datos, software gratuito, etc. con igual o más facilidad que obtener un libro en cualquier
biblioteca pública. La evolución tecnológica de los aparatos y programas informáticos ha empezado
a cambiar la situación de su uso en la educación:
Por lo que se refiere a los equipos, en los últimos años, se ha producido un tremendo aumento
de la potencia de tratamiento de datos (…) en lo que respecta a los programas, también se
han producido novedades importantes (...) existe una mayor interacción entre el usuario y el
ordenador…se han elaborado programas de autoaprendizaje interactivo para los usuarios, y
(…) se ha mejorado la comunicación y la interacción (creación de redes) con otros aparatos
(…) Los especialistas en pedagogía han empezado a reconocer que…el ordenador se está
convirtiendo en un instrumento que facilita el aprendizaje(…) (Unesco, 1998, pp.81-82).
De hecho, aunque en forma desigual para los distintos grupos sociales, ya estamos enmarcados
en la realidad del mundo virtual. Pero, explotar su potencialidad exige a las organizaciones
educativas un conjunto de cambios que van desde la construcción de una infraestructura electrónica
de comunicaciones, que hoy tiene una importancia estratégica, hasta cambios radicales en la
estructura educativa, en los contenidos y en la metodología de trabajo.
Siguiendo a Dettori, podemos decir que la expresión «aprendizaje en red» no indica tanto
(o solo) la utilización de una red de ordenadores, cuanto el de una red de interrelaciones que
comprenda a todos los actores del proceso (estudiantes y formadores) y sea funcional para
alcanzar los objetivos didácticos del curso. La finalidad de esta comunidad de aprendizaje no es
tanto la de superar el aislamiento de los que estudian a distancia, sino de valorizar y compartir los
conocimientos de todos para favorecer el crecimiento del grupo (Dettori, 2003).
Análogamente, los materiales de estudio proporcionados por un curso de este tipo no consisten
simplemente en materiales formativos tradicionales, digitalizados y puestos a disposición en red,
sino que son organizados para favorecer una utilización individualizada y al mismo tiempo estimular
una confrontación de puntos de vista y también el desarrollo de capacidades de autoevaluación.
La idea de aprovechar el trabajo de todo un grupo para mejorar el aprendizaje de cada uno de
sus miembros deriva en gran parte de la teoría constructivista, que ve el aprendizaje como fruto
de un trabajo de construcción personal, y sobre todo del constructivismo social, que considera el
aprendizaje como resultado de un proceso social y cultural que tiende a la elaboración conjunta de
significados.
Hay quienes como Adell piensan que la formación basada en TIC implica un cambio cualitativo
muy importante en relación a la educación tradicional, especialmente en lo que se refiere a la
educación a distancia: «no se trata de sustituir al cartero para distribuir los materiales de estudio
a una masa de estudiantes y al teléfono para la consulta ocasional de dudas y problemas en el
estudio de los materiales. Se trata de un nuevo medio, muy dinámico, en el que se pueden hacer
cosas imposibles en la educación a distancia tradicional. Por la misma razón, por las posibilidades
comunicativas que se abren a profesores y estudiantes, es necesario abandonar la «perspectiva
industrial» de producción en masa de productos idénticos y adoptar una visión más personalizada
y artesanal de un proceso bastante más costoso de lo que se asume habitualmente (….)» (Adell,
1999, p. 8).
Notemos, sin embargo, que aún si privilegiamos la participación en las comunidades virtuales
de aprendizaje, sigue plenamente vigente la necesidad de fortalecer la autonomía del participante
en sus procesos de aprendizaje lo cual exige, lo reiteramos, aprender a aprender.
Todo ello implica, a su vez, una larga serie de habilidades particulares, sea a nivel individual
como a nivel de interacción social, entre ellas:
Tal vez, el ejemplo más espectacular está en Internet… «No importa cuál sea su trasfondo,
su sofisticación o su grado de capacitación técnica, los participantes en redes de conocimientos
persiguen la misma meta: buscan información y modos de entender y aplicar esa información…»
(Harasim, 2000, p.31).
Debemos notar que las redes, si bien usan soportes electrónicos son, sobre todo, comunidades
de personas. Algunas de ellas son abiertas e informales; otras, se encuentran muy estructuradas y
coordinadas por uno o varios moderadores que autorizan la participación y cuidan de la pertinencia
de las intervenciones.
Las redes ofrecen a estudiantes y docentes acceso a nueva información, a nuevas ideas,
perspectivas diversas sobre un mismo tema. También, favorecen la comunicación intercultural
favoreciendo la perspectiva del respeto por la diversidad. Linda Harasim (1993) da cuenta de una
encuesta realizada entre maestros y alumnos a través de Internet. De 176 encuestados, el 90 %
respondió que en las redes de aprendizaje:
Las redes de aprendizaje pueden soportarse en tecnologías tan sencillas como una lista de
correo electrónico, un simple tablón de anuncios o tan avanzadas como Internet 2 que surge
como un conjunto de infraestructuras, proyectos de investigación y acuerdos de colaboración
entre las principales compañías tecnológicas y la comunidad académica para desarrollar una
nueva red que sea un verdadero entorno de trabajo compartido y de investigación. A través de
ella, las universidades podrán intercomunicarse a una velocidad hasta 1 000 veces superior a la
actual. Esta impresionante velocidad permite a las universidades compartir grandes archivos de
datos, desarrollar aprendizaje interactivo a distancia, establecer bibliotecas digitales y laboratorios
virtuales, entre otros proyectos de ciencia avanzada.
Le invitamos a estudiar el tercer apartado, referido a los recursos para el aprendizaje en línea.
El logro de conductas autónomas por parte del alumno constituye siempre un valioso objetivo
a lograr en cualquier modalidad educativa. Desde esta perspectiva, los materiales pueden y deben
facilitar el aprendizaje autónomo.
Los recursos para el aprendizaje son elementos fundamentales para el proceso de enseñanza-
aprendizaje porque contribuyen a la mediación pedagógica. Justamente esta mediación es la
que deben cumplir los materiales didácticos. Son estos los que, objetivando los lineamientos del
currículo, conducen en primera instancia el proceso de aprendizaje de los estudiantes. Los recursos
para el aprendizaje cumplen el papel de mantener y elevar la motivación del participante; así como
informarle, responder a sus interrogantes, propiciar la aplicación práctica de los aprendizajes que
se va produciendo, darle oportunidades de autoevaluación y, en la medida de lo posible, proveer la
retroinformación indispensable para que el participante verifique sus aprendizajes, etc.
Siguiendo a González Soto (2003, p. 30) hay dos tipos de componentes en la formación on-
line: los pedagógicos y los tecnológicos. Los componentes pedagógicos van desde los niveles más
altos de abstracción expresados a través de los objetivos pretendidos por el programa formativo
pasando por el modelo educativo que inspira este proceso formativo hasta llegar al nivel de
concreción de las estrategias de EA (enseñanza-aprendizaje) que coadyuven a la consecución de
los objetivos. En el otro lado, están los componentes tecnológicos bajo la forma de software que
servirá de escenario al curso e infraestructura de red que es el canal sobre el que tendrá lugar la
comunicación mediada por ordenador.
a. Los objetivos
Son el eje que articula el modelo pedagógico. Actualmente, la tendencia que predomina
actualmente es una concepción flexible del aprendizaje y la enseñanza, términos como enseñanza
flexible y aprendizaje abierto, formación «just in time», «formación a la carta», entre otros,
encierran una idea principal: el participante como centro de un proceso formativo necesariamente
flexible para adecuarse a sus necesidades.
Por tanto, los objetivos tanto como los contenidos y estrategias se diseñan en función de los
alumnos. Las implicaciones de una perspectiva centrada en el alumno se refieren a que los alumnos
toman una responsabilidad creciente sobre su propio aprendizaje, gracias a que se les permite
más control sobre la estructuración del proceso de aprendizaje y el profesor es un guía más que
un instructor. Por tanto, estamos avanzando hacia el concepto de aprendizaje autodirigido al que
aspiran los adultos.
b. El modelo pedagógico
a. Magistral
b. Participativo: espacios virtuales, integración de varios
medios sistemas integrados gestionados por ordenador.
c. Investigador (Bartolomé, 1995, p.132)
Se refiere a las estrategias didácticas que se usarán en la formación. En este caso, la selección
de las estrategias está estrechamente vinculada con el modelo educativo seleccionado. Así, por
ejemplo, en modelos participativos o de investigación suelen emplearse estrategias como estudio
de caso, aprendizaje basado en resolución de problemas conocido por las siglas ABP, aprendizaje
por proyectos y aprendizaje como actividad. En general, estas estrategias provienen de las teorías
contemporáneas del aprendizaje y representan un cambio de paradigma con relación a la postura
conductista que define el aprendizaje en términos de cambio de conducta.
De Benito (2000, p.11) considera cinco categorías de herramientas para cursos on-line:
En este caso, nos referimos al software empleado en todas las fases del proceso que hoy día
se conoce como de ingeniería de los contenidos. En este grupo, se incluyen tradicionalmente
los programas de autoría para el diseño de los contenidos y los programas para navegar a
través de los mismos. Generalmente, el desarrollo de contenidos en formato HTML y XML
siguen constituyendo el estándar aunque agregando elementos de interactividad a través
de programas para crear animaciones o contenidos en 3D.
Herramientas de comunicación
Herramientas de colaboración
Sin embargo, respecto a este mismo punto, autores como Gilbert y Moore (1998) tienen
posturas diferentes al considerar que si bien es cierto que los productos groupware proveen
una alta gama de servicios de un tipo de interacción que ellos denominan social, no es
menos cierto que muy pocos proveen soporte a la interacción instruccional y si lo hacen, su
uso requiere de manejo de lenguajes de programación no accesibles a un formador.
Herramientas de evaluación
La evaluación del aprendizaje en cursos on-line puede ser uno de los temas más discutidos
actualmente. En esencia, una de las mayores críticas se refiere a que si bien el desarrollo de
las tecnologías telemáticas ha tenido influencia en el diseño y entrega de la educación on-
line, la evaluación sigue tomando formas tradicionales. De hecho, aún muchas universidades
virtuales condicionan la aprobación de un curso a la realización de un examen presencial
escrito.
No obstante, hay una amplia gama de herramientas que permiten, con cada vez mayor
flexibilidad, la creación de evaluaciones con altos niveles de confiabilidad. Podemos
mencionar, como ejemplo, la estrategia evaluativa de la diplomatura en la que participamos.
En este sentido, el proceso de evaluación se apoya en el logro de las actividades de
aplicación de la información tanto a nivel individual como grupal. En algunos casos, se
plantea una evaluación en línea y/o foros como complementos importantes al proceso de
asimilación y transferencia de la información.
Herramientas integradas
Finalmente, en esta última categoría incluimos aquel software que integra todas las
herramientas para autoría de contenidos, colaboración, comunicación y evaluación, así
como de las tareas que tiene que ver con la gestión en una sola plataforma. En el mercado,
el nombre habitual con que los fabricantes se refieren a sus productos para la creación
de cursos on-line es el de «campus virtual» llegando incluso algunos como el producto
NetCampus a usar la metáfora del campus para el diseño de su interfaz de usuario
(González, 1999).
Componentes
pedagógicos
Componentes
tecnológicos
2. Responda:
a) ¿Qué caracteriza a los objetivos de formación en un curso on-line?
b) En un curso en línea, ¿qué papel cumple el trabajo en grupo?
3. Siguiendo la tipología de De Benito, señale el tipo de herramienta al que
corresponde cada ejemplo:
a) El campus virtual ........................................
b) El software ........................................
c) Un foro ........................................
d) El groupware ........................................
Bien, esperamos que le hayan quedado claros los contenidos de esta sección. Si no pudo
resolver satisfactoriamente las tareas previas, le recomendamos revisar nuevamente los temas.
Los medios y materiales para el aprendizaje deben constituir una propuesta innovadora para la
modalidad de educación a distancia. Su diseño didáctico debe responder a un enfoque integral del
proceso de aprendizaje. En lo posible, los materiales deberían partir de las experiencias concretas
de los participantes y remitirlos permanentemente a contextualizar su aprendizaje, recogiendo su
experiencia y sus conocimientos previos.
Las actividades de construcción del aprendizaje deben poner énfasis en el carácter interactivo
del mismo, procurando confrontar al participante con ejercicios y preguntas después de la
presentación de los conceptos. Del mismo modo, deben combinar actividades individuales y
colectivas o grupales.
Problematización, conceptualización e
integración cognitiva
2. Introducción
3. Instrucciones
4. Resultados del aprendizaje
5. Organizador avanzado
6. UNIDADES DIDÁCTICAS
6.1. Título
7. Procesos metacognitivos
9. Instrumentos para
retroalimentación
11. Bibliografía
12. Glosario
Para conocer los roles de los protagonistas del proceso formativo en la modalidad a distancia,
le invitamos a estudiar la siguiente sección.
Según González Soto, (1999), el profesor ha de ser consciente de que ha dejado de ser «el
eje central del proceso en el sentido de que realmente se convertía en centro y vértice global
de dicho proceso». Su papel es «actuar como organizador y facilitador de la participación de los
estudiantes» (Adell y Sales, 1999, p. 364).
• Rol intelectual: es un facilitador educativo y, como tal, debe animar a los alumnos
a elaborar y ampliar sus comentarios y aportaciones haciéndoles preguntas y
respondiendo a sus cuestiones.
También, tiene la misión de coordinar con el tutor o los tutores las acciones de enseñanza y la
resolución de problemas, dudas o interrogantes del participante.
Adolfina Pérez nos dice que el docente se encuentra en los nuevos entornos con el reto de
crear materiales estructurados para facilitar el aprendizaje:
El profesor-tutor sigue siendo el facilitador del aprendizaje que está en permanente contacto
con el grupo de participantes para atender sus intereses, inquietudes y problemas sobre los temas
en estudio.
El participante debe ser el protagonista de su aprendizaje, por ello, el rol del tutor debería
definirse sustancialmente en función de sus necesidades. Es decir:
Una institución que quiera responder a esta forma de concebir la intervención del alumno en
el proceso de aprendizaje se le deberá recomendar o deberá demostrar que (Adell y Salas, 1999):
La integración de las TIC en procesos de enseñanza y aprendizaje permite que los estudiantes
desarrollen habilidades en la navegación; adquisición y análisis; aplicación del conocimiento
a nuevas situaciones; creación de nuevo conocimiento; y toma de decisiones. Todas estas son
esenciales para sobrevivir en la sociedad de la información. Esto implica, según Salinas (1997), que
la institución educativa debe ofrecerles:
Acceso a recursos de aprendizaje. Los nuevos usuarios del sistema de formación deben
tener acceso a una gran variedad de recursos: bases de datos, bibliotecas, materiales
multimedia, sistemas de comunicación bidireccional, entre otras.
Control activo de estos recursos de aprendizaje. El participante debe poder manipular
activamente la información, debe ser capaz de organizar información de distintas
maneras, elaborar estructuras cognitivas más complejas que la simple respuesta a
pantallas previamente diseñadas. Debe poseer destrezas para usar las herramientas de
información y acceder a las mismas, al mismo tiempo que participa en la actualización
y crecimiento de los materiales.
Participar de experiencias de aprendizaje individualizadas, basadas en sus destrezas,
conocimientos, intereses y objetivos. Debe entenderse que instrucción individualizada
no significa instrucción aislada, sino instrucción adaptada a las necesidades específicas
de cada participante.
Habilidades adquiridas
Habilidades del Habilidades
participante en que aún no se Nivel Nivel
modalidad@ adquieren Nivel básico
intermedio avanzado
Localizar
información
Analizar la
información
Crear
información
Comunicar
información
5. Netiquette
Del mismo modo, y en consideración a que los intercambios y debates en la red suelen hacerse
mayoritariamente a través de la palabra escrita, el establecimiento de un conjunto de normas para
la redacción y presentación de los mensajes favorece una comunicación fluida y respetuosa.
Entre las lecturas que le sugerimos revisar para esta unidad se encuentra aquella relacionada
con las normas en el uso del correo electrónico. Revísela y analice en detalle su contenido.
Autoevaluación de la unidad I
1. En el nuevo paradigma tecnoproductivo, ¿cuáles son las exigencias al TRABAJO, como actividad
humana?
5. Elabore un cuadro con los nuevos roles del profesor, el tutor y el participante, para el contexto
de un proceso formativo en entornos virtuales.
1. Hoy en día, al trabajo de una persona se le exige, además de la memoria y el orden, que posea
talento y creatividad; habilidades para analizar, relacionar, evaluar y aplicar conocimientos.
2. Uno de los aspectos más positivos de la sociedad virtual son las posibilidades democratizadoras
de producción y acceso a la información. Ya no se necesitan grandes capitales para ser miembro
de una sociedad de la información, como receptores y como emisores.
3. Para Dettori, la expresión “aprendizaje en red” no indica solo la utilización de una red de
ordenadores, cuanto el de una red de interrelaciones que comprenda a todos los actores del
proceso (estudiantes y formadores) y sea funcional para alcanzar los objetivos didácticos de un
curso.
b) Componentes tecnológicos
- Herramientas de creación, publicación y recuperación de contenidos
- Herramientas de comunicación
- Herramientas de colaboración
- Herramientas de evaluación
- Herramientas integradas
la unidad I
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