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Orlando Dolores, especialista en cuarentena vegetal del Senasa (Servicio Nacional de

Sanidad Agraria),

Taller Manejo integrado de plagas y procesos finosanitarios de quinua para la exportación


a China, en Puno

Senasa hizo una gestión ante la autoridad sanitaria de China para poder exportar quinua
a este país. A mediados de este año se firmó un protocolo, pero el Gobierno chino ha
pedido la vigilancia de las plagas en los cultivos de quinua y que algunas plantas
procesadoras tienen que cumplir algunas actividades importantes como la clasificación de
la quinua para evitar que en los envíos se incluyan semillas de maleza.

También se tienen que cumplir medidas sanitarias relacionadas a temas de inocuidad, la


quinua se tiene que procesar en buenas condiciones sanitarias para evitar que se
mezclen con contaminantes químicos o biológicos.

Hay un conjunto de medidas que estamos abocados a difundir de tal manera que las
exportaciones de este grano andino sean sostenibles en el tiempo y evitar cualquier
observación de las autoridades de China cuando nuestros embarques lleguen a ese país.

El objetivo del Senasa es salir a diferentes regiones del país para capacitar a los agentes
que están involucrados en la cadena de exportación que son los productores, los
empacadores y exportadores de quinua. Lo que queremos es que se cumplan con los
protocolos fitosanitarios que ya está suscrito para salvaguardar nuestras exportaciones.

Senasa es la autoridad fitosanitaria que debe velar por los cumplimientos de los requisitos
que hemos firmado en un protocolo que está publicado en la página web y todo el mundo
puede leer. Sin embargo, es importante explicar de manera detallada este documento
para que la gente conozca y pueda hacer bien su trabajo. Este protocolo es para grano de
quinua y para quinua molida.

Las expectativas comerciales son muy grandes considerando que China es un país con
más de 1,300 millones de habitantes. Hay muchos exportadores que se han acercado a
Senasa porque ya han negociado con importadores chinos. China es un mercado muy
grande y esto va a generar más demanda del producto.

Muchos pequeños productores de Puno podrían beneficiarse en este gran mercado


asiático, porque el cultivo en esta región no hace uso de muchos plaguicidas y la quinua
es casi orgánica. Eso es ventajoso para estos pequeños productores. Las plagas no son
tan drásticas en Puno por su clima, algo que no sucede en otros lugares como la Costa
donde las plagas causan un impacto económico.

En nuestra sede de Puno tenemos agrónomos y biólogos trabajando en esta región y


también los capacitamos a ellos, para que realicen la difusión en todas las zonas de
producción. También tenemos previsto realizar talleres en Arequipa y Ayacucho.

Los pequeños productores deben aprender a producir quinua para la exportación, porque
muchos piensan que pueden exportar sin tener en consideración los registros sanitarios.
Tenemos que exportar productos que cumplan con los estándares internacionales y que
estos envíos no lleven plagas. Si nos cumplimos con esto, nos pueden cerrar el mercado
de destino. Eso no le conviene al Perú que se está desarrollando como un país
exportador de productos agrícolas.

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