El concepto de Marketing social data de julio del año 1971 y lo utilizaron
Kotler y Zaltman, para aplicar el uso de los postulados y técnicas del marketing comercial, en campañas de bien público o la difusión de ideas que beneficien a la sociedad, siendo un concepto que se refiere al diseño, la puesta en práctica y el control de programas que tienen como objetivo, promover una idea o práctica social en una determinada comunidad, lo que va en estrecha relación con las necesidades humanas y así mismo con el tema social, las cuales se satisfacen con la creación de un producto social. Según el economista Philip Kotler, el Marketing Social “Comprende los esfuerzos por cambiar el comportamiento público por otro que la sociedad estime deseable”. El marketing social busca que los comportamientos individuales no deseables cambien de forma positiva, es decir, erradicar costumbres negativas, para de esta manera introducir hábitos que permitan y faciliten la organización de grupos sociales. Estos cambios transforman la forma en la que piensa un grupo específico, con el objetivo de ofrecerles un mayor bienestar en algún aspecto de su vida. De acuerdo Alan Andreasen, se puede entender el Marketing Social cómo: “La aplicación de las técnicas del marketing comercial para el análisis, planeamiento, ejecución y evaluación de programas diseñados para influir en el comportamiento voluntario de la audiencia objetivo en orden a mejorar su bienestar personal y el de su sociedad”. El Marketing es una disciplina que ya excede el ámbito comercial, puesto que su metodología, para detectar y satisfacer necesidades de consumo y uso de bienes y servicios, también es útil para detectar y satisfacer necesidades de tipo social, humanitarias y espirituales. Por lo que su campo de acción no se limita solamente al ámbito de las empresas, sino que se extiende a asociaciones sin fines de lucro, fundaciones, entidades religiosas y también al Estado. Estos nuevos campos de acción comprenden lo que los autores denominan Marketing Social, que también incluyen las acciones de tipo social y humanitarias que realizan las empresas, para que el público las asocie a ellas y a sus marcas con una preocupación por lo social, lo humanitario y lo ecológico, convirtiéndolos en una entidad socialmente responsable. Las estrategias que ocupa el marketing social para el cambio de determinadas conductas son fomentadas a través de la tecnología y la publicidad. Por lo tanto, el marketing social busca generar impacto social, aumentando la aceptación de una idea o causa social en un grupo determinado de personas.