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La Restauracion de la Confianza Matrimonial

Escrito por ApostolVielman 0000-00-00

TEMA : La Restauración de la Confianza Matrimonial

TEXTO CENTRAL: 11 El corazón de su marido está en ella confiado, y no carecerá de


ganancias. Proverbios 31:11

INTRODUCCION: 14 Mas diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y


la mujer de tu juventud, contra la cual has sido desleal, siendo
ella tu compañera, y la mujer de tu pacto.15 ¿No hizo él uno,
habiendo en él abundancia de espíritu? ¿Y por qué uno? Porque
buscaba una descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro
espíritu, y no seáis desleales para con la mujer de vuestra
juventud. Malaquias 2:14-15

DESARROLLO: 3 El marido cumpla con la mujer el deber conyugal, y asimismo la


mujer con el marido. 1 Corintios 7:3
I. El deber de la cohabitación por parte de los casados

El marido pague a la mujer la debida benevolencia. El esposo no tiene


potestad sobre su cuerpo y con todo es suyo propio, esto es explicado por la
unidad del cuerpo en que el matrimonio coloca al marido y a la mujer un ser
completamente al otro, ninguno sin el otro realiza el perfecto ideal del ser
humano.

Benevolencia: Del hebreo ratson que significa contentamiento, deseo, querer,


voluntad.

22 El que halla esposa halla el bien, y alcanza la benevolencia de Jehová.


Proverbios 18:22

18 Sea bendito tu manantial, y alégrate con la mujer de tu juventud. Proverbios


5:18

Es notoria la igualdad de deberes y derechos de ambos

1 Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que


también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta
de sus esposas,2 considerando vuestra conducta casta y respetuosa.3 Vuestro
atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de adornos de oro o de vestidos
lujosos,4 sino el interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un espíritu
afable y apacible, que es de grande estima delante de Dios. 1 Pedro 3:1-4
7 Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la
mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para
que vuestras oraciones no tengan estorbo. 1 Pedro 3:7

1
La razón por que debe el hombre dar honor a la mujer es porque Dios da
honor a ambos, conociendo la pasta humana y la dureza del corazón, es casi
imposible restaurar totalmente la confianza sin reservas en algún rincón de las
corrientes subterráneas del alma.

34 Porque los celos son el furor del hombre, y no perdonará en el día de la


venganza.
Proverbios 6:34
Furor: fiebre, ponzoña, veneno

27 ¿Tomará el hombre fuego en su seno sin que sus vestidos ardan? 28 ¿Andará
el hombre sobre brasas sin que sus pies se quemen? Proverbios 6:27-28

7 No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre


sembrare, eso también segará. Gálatas 6:7

Cuando se cultiva la desconfianza tarde o temprano dará su fruto. Debemos ser


sabios en cultivar la confianza con hechos y actos que permitan al cónyuge
garantías suficientes de su fidelidad.

La enfermedad de los celos “celotitis” no es más que un cuadro clínico


“pornográfico”, es una enfermedad previsible o curable en el aspecto de
prevención, el control sobre las obras de la carne es básico

19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación,


inmundicia, lascivia,20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras,
contiendas, disensiones, herejías,21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y
cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he
dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
Gálatas 5:19-21.

La medicina curativa vendría hacer eficaz, cuando un espíritu inmundo se ha


internado en los oscuros escondrijos de los celos; practicando en la persona
una liberación y luego aconsejándole un férreo control, mediante el uso de la
palabra textual al rebrote de la obra de la carne

CONCLUSION

6 Ponme como un sello sobre tu corazón, como una marca sobre tu brazo;
porque fuerte es como la muerte el amor; duros como el Seol los celos; sus
brasas, brasas de fuego, fuerte llama. 7 Las muchas aguas no podrán
apagar el amor, ni lo ahogarán los ríos. Si diese el hombre todos los bienes
de su casa por este amor, de cierto lo menospreciarían.
Cantares 8:6-7

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