Sunteți pe pagina 1din 11

METODOLOGÍA DE LAS CIENCIAS SOCIALES II

Gabriel Gutiérrez Pantoja


Colección Textos Universitarios en
Ciencias Sociales
Edit. Harla
p. 139-

Hermenéutica.- Proviene del griego Hermeneúcin: significa el arte de interpretar.

La idea de la hermenéutica es la sustentación de una “ciencia o método universal” cuya


finalidad es la interpretación y la comprensión (entendimiento crítico y objetivo) del
sentido de las cosas en su generalidad. La hermenéutica intenta establecer un proceso
por medio del cual se haga, inicialmente una interpretación en torno al sentido de
cualquier fenómeno, y en una segunda instancia, se realice la comprensión del propio
fenómeno.

Originalmente la hermenéutica fue una interpretación técnica de los poetas de la Grecia


clásica sobre los trabajos de sus colegas.

1. HERMENÉUTICA FILOLÓGICA

Una de las formas primarias de la aplicación hermenéutica se hizo en la filología. Dilthey


afirma: la filología es un arte de recensión de textos de crítica superior, de interpretación y
de valoración fundada en una comprensión íntima del idioma. La Filología como arte de
recensión de reseñar los textos, además estudiar los textos, trasciende esa técnica de
reseña y estudio para interpretar y comprender.

La hermenéutica de la escuela alejandrina basa su interpretación en la analogía, la cual


compara el lenguaje las representaciones, la concordancia interna y el valor estético de un
poema escrito, cuya autoría se encuentra en duda. Esta hermenéutica busca, la
eliminación de las contradicciones.

La hermenéutica en Aristóteles no designa una ciencia que se ocupe de las significaciones,


sino la significación misma, la del nombre, el verbo, la proposición y en general el discurso.
Es interpretación todo sonido emitido por la voz y dotado de significación –toda phoné
semantiké, toda vox significativa. En este sentido el nombre ya es en sí mismo
interpretación, y el verbo también, puesto que allí enunciamos algo; pero la enunciación o
phasis se toma del sentido total del logos; así que el sentido completo de la hermenéutica
no aparece sino con el enunciado complejo, con la frase que Aristóteles llama logos y que
comprende tanto el orden, el ruego, la pregunta, como el discurso declarativo. La
hermenéia, en sentido completo es la significación de la frase. La palabra significante, la
expresión que tiene un contenido es interpretación.
La hermenéutica analógica pretendía eliminar, a través de los preceptos expuestos, los
elementos contradictorios que pudieran indicar, por su incompatibilidad en el marco
global del poema, que no eran obra del autor; mientras que la hermenéutica analógica
propendía con su interpretación a identificar lo que de manera racionalmente aceptable
pudiera ser imputable a un poeta o filósofo determinado.

Crates de Malo en la Escuela Filológica hace analogías de una forma “anómala”, en vez de
buscar las regularidades que excluyan lo contradictorio se buscan las excepciones que
como tales son anomalías. Crates introduce en la filología la interpretación alegórica, cuya
finalidad estriba en eliminar la contradicción entre los testimonios religiosos y una visión
depurada del mundo.

2. LA HERMENÉUTICA EN LA TEOLOGÍA

La hermenéutica teológica se origina como una forma de interpretar la Biblia como texto,
con la finalidad de penetrar bajo la superficie del texto literal a fin de develar lo más
profundo de su significado.

Dilthey dice: “si el intérprete tropieza en su texto con dificultades, dispone para
solventarlas de un recurso de tipo sublime: la conexión que se da en la religiosidad
cristiana viva. Si traducimos esto de la mentalidad dogmática a la nuestra, este valor
hermenéutico de la experiencia religiosa no es más que un caso del principio, según el
cual todo proceso interpretativo implica como un factor, la interpretación con base en la
conexión real”.

Flacius captó la conexión entre la interpretación gramatical y la significación del principio


psicológico o técnico de la interpretación. Según ese principio, habrá que interpretar los
diversos pasajes gramaticales, según la intención y composición de toda la obra. Para
Flacius las partes de un todo se hacen inteligibles por su relación con este todo y sus
demás partes.

Gadamer dice que en la hermenéutica teológica se da una precomprensión que dificulta


saber cuál es la interpretación correcta, y sobre ello, dice: “…en toda comprensión se
presupone una relación vital del intérprete con el texto, así como su relación anterior con
el tema”. A este presupuesto hermenéutico se le da el nombre de precomprensión,
porque evidentemente no es producto del procedimiento comprensivo sino que es
anterior a él…”

La precomprensión en la hermenéutica teológica parte del principio de que los textos


religiosos deben ser entendidos solamente como textos dedicados al problema de Dios,
como base de la existencia humana.

En la hermenéutica teológica no hay para qué identificar el contenido del texto, éste ha
sido resuelto desde la selección misma, el contenido se resumen en la precomprensión de
que un texto religioso se encuentra la presencia o palabra de Dios en la existencia
humana. El problema surge en el momento de la interpretación del texto propiamente
dicha.

La hermenéutica moderna como disciplina protestante defiende polémicamente el arte de


la interpretación de la escritura frente a la tradición dogmática de la Iglesia Católica. En la
hermenéutica teológica se presupone que la palabra de la escritura es verdad, y que sólo
la comprende aquel a quien afecta su verdad, en la fe o en la duda.

La hermenéutica teológica parte de la precomprensión de que los escritos biblícos tienen


en sí mismos una verdad indiscutible, y solamente llegan a comprenderla aquellos a
quienes afecta esa verdad, ya que su comprensión no es dogmática sino razonada, por ello
en el proceso de interpretación pretenden extraer el sentido de lo expuesto en la escritura
y la aplican en la comprensión.

3. LA HERMENÉUTICA JURÍDICA Y LA HISTORIA

La hermenéutica jurídica, no intenta comprender textos dados pues se constituye como


“un simple medio de la praxis jurídica encaminado a subsanar ciertas deficiencias y casos
excepcionales en el sistema de la dogmática jurídica”.

Gadamer señala: “la divergencia entre hermenéutica jurídica y hermenéutica histórica…en


que una y otra se ocupan del mismo objeto, esto es, los casos en que un texto jurídico
debe ser interpretado jurídicamente y comprendido históricamente. Se trata de investigar
el comportamiento del historiador jurídico y del jurista respecto a un mismo texto
vigente…”La diferencia entre el interés dogmático y el interés histórico “es evidente. El
jurista goma el sentido de la ley a partir de y en virtud de un determinado caso dado. El
historiador, en cambio no tiene ningún caso del que partir, sino que intenta determinar el
sentido de la ley representándose constructivamente la totalidad del ámbito de aplicación
de ésta; pues sólo en el conjunto de sus aplicaciones se hace concreto el sentido de una
ley”.

El jurista interpreta la ley a raíz de la experiencia dejada por la decisión de emitir un juicio
en un momento dado, provoca que en este sentido, la hermenéutica jurídica se vuelva
dogmática frente a la hermenéutica histórica.

Cuando el juez intenta adecuar la ley transmitida a las necesidades del presente tiene
claramente la intención de resolver una tarea práctica. Lo que en modo alguno quiere
decir que su interpretación de la ley sea una traducción arbitraria. También en su caso
comprender e interpretar significa conocer y reconocer un sentido vigente. El juez
intentará responder a la “idea jurídica” de la ley mediándola con el presente. Es evidente
una mediación jurídica. Lo que intenta reconocer es el significado jurídico de la ley, no el
significado histórico de su promulgación. No se comporta, como el historiador, pero sí se
ocupa de su propia historia, que es su propio presente. En consecuencia puede en todo
momento asumir la posición del historiador frente a las cuestiones que implícitamente le
han ocupado ya como juez. Así entendida, la actividad hermenéutica del jurista se vuelve
hermenéutica histórica.

“El historiador que pretende comprender la ley desde su situación histórica original no
puede ignorar su pervivencia jurídica: ella es la que proporciona ella es la que le
proporciona los problemas que a su vez él debe plantearse respecto a la tradición
histórica. En la medida en que el verdadero objeto de la comprensión histórica no son
eventos sino sus “significados”, esta comprensión no se describe correctamente cuando
se habla de un objeto en sí y de un acercamiento del sujeto a él. En toda comprensión
histórica está implicado que la tradición que nos llega habla siempre al presente y tiene
que ser comprendida en esta mediación.

La importancia de la hermenéutica reside en la unión del pasado con el presente y


viceversa.

4. HERMENÉUTICA LINGÜÍSTICA

Castilla del Pino: “La hermenéutica del lenguaje pretende ser una antropología del
lenguaje. Y surgió así como parte de una antropología dialéctica…”

La hermenéutica del lenguaje busca entender el sentido de las expresiones lingüísticas de


acuerdo al contexto histórico y las formas de comportamiento de los individuos en
sociedades. Castilla del Pino señala: el análisis hermenéutico es un método más.

La hermenéutica se convierte en una interpretación que además de partir de lo dado,


busca lo no manifiesto, es decir, encontrar en el lenguaje tanto lo intencional como lo no
intencionado de las expresiones. Cualquier análisis hermenéutico ha de contar con la
posibilidad del habla, capaz de informar y expresar movimientos de la mayor sutileza. La
psicología del habla se ofrece como una esfera suficientemente compleja como para que
pueda encerrarse en esquemas preestablecidos. Por ejemplo: la ironía, el sarcasmo, el
doble sentido. En todos estos casos, la actitud es inversa de lo directamente denotado. Lo
que cuenta a la hora de la cualificación de una proposición es la conciencia de lo que se
propone el propio autor, y ello ha de obtenerse no procediendo al análisis, sino
atendiendo en un primer momento al contexto como estructura global. La
intencionalidad, que presidió el acto creador, dándole unidad, se detecta luego desde la
aprehensión unitaria de lo creado.

La hermenéutica del lenguaje como método, es posterior al momento del acto expresivo,
pues sólo entonces se le puede enmarcar dentro del contexto global y determinar si la
proposición corresponde a la conciencia que se tiene de ella.

El procedimiento o metódica sigue una serie de pasos básicos: “la primera tarea a realizar
en el análisis hermenéutico es la (relativamente arbitraria) argumentación del discurso en
segmentos que se representen de algún modo como contexto. Si una segmentación no es
significativa, debemos remitirnos a contextos más y más amplios, para luego retrotraernos
a componentes más elementales cuantitativamente. La tarea inmediatamente ulterior
radica en los siguientes momentos: a) fundamentación de la inteligibilidad obtenida; b)
determinación de los componentes del contexto; c) determinación de la adecuación o
inadecuación de éstos en orden al propósito inferido del examen global del contexto; d)
sustitución, de la inteligibilidad lograda por la que se deriva ahora del análisis de sus
componentes parciales.

5. HERMENÉUTICA PSICOANALÍTICA

Freud establece: el término psicoanálisis se aplica a tres cosas diferentes:

1. A un método de investigación mediante el cual las regiones más íntimas y ocultas


del espíritu pueden considerarse como la disección de la mente y el estudio de su
anatomía.
2. Una teoría que se elabora con los resultados de ese análisis, llevado a cabo en
muchos casos semejantes que se estudian comparativamente, para poner en
evidencia rasgos y reacciones características en cada uno. De esta suerte se
elabora una verdadera fisiología de la mente y se señalan las normas de su
funcionamiento. Es la teoría psicodinámica del desarrollo de la personalidad.
3. Una técnica de aplicación que tiene por finalidad adoptar el método analítico -
conocida la estructura de la mente y su funcionamiento- al tratamiento de los
desequilibrios del espíritu. Esta acción terapéutica a través del inconsciente es la
que verdaderamente ha de llevar el nombre de técnica analítica o de psicoanálisis.

Erich Fromm afirmaba sobre el psicoanálisis: la grandeza del descubrimiento de Freud


radica en que ha ideado un método para llegar a la verdad que trasciende aquella que
el individuo cree que es tal; esto lo logró al descubrir los efectos de la represión y en
correspondencia con ellos, las racionalizaciones.

Sobre el método de Freud se puede decir que es la interpretación realizada a partir de


una serie de elementos disociados que se van integrando paulatinamente, por medio
de preguntas y la atención a las respuestas para entrelazar las ideas e interpretarlas.
Pero el proceso de interpretación no es simple. Freud jamás simplifica, por el
contrario, complicaba y más complicaba las cosas, a tal punto que, en medio de la
interpretación de Freud, uno casi siente que se halla en un laberinto. El método de
pensamiento de Freud le hace descubrir a uno que un fenómeno significa aquello que
parece dar a entender, pero que también puede expresar su negación.

La interpretación se convierte así en el método del psicoanálisis. El trabajo que sirve


de base es “la interpretación de los sueños”, donde por primera vez se plantea el
problema de que un fenómeno ha de ser “interpretado”, es decir, “descifrado”, ya que
se presenta en forma encubierta y escondida. El problema de los sueños tiene que ver
por consiguiente en la distinción entre explicar, entender y comprender. Y sobre todo
con el “deuten” o sea la interpretación. Explicar supone poner en claro la conexión
causal entre dos fenómenos. Las habituales tesis neurofisiológicas del sueño, en
realidad nos dicen que éste ocurre en relación con unos centros nerviosos, pero en
cuanto a explicarlo, son tan insuficientes como puede serlo la afirmación de que un
papel nos explica el contenido de las Sagrada Escrituras. Una relación de dependencia
no es una relación causal. Entender supone un conocimiento de la red de conexiones
en que se produce un fenómeno.

Es preciso situar lo conocido dentro de un esquema ordenador. Entender es, a la vez,


conocimiento de las relaciones entre las cosas y también conocimiento de ésta dentro
de las conexiones que le ligan a un orden superior. Lo primero que hay que hacer es,
como Freud, reunir datos aislados. Después hay que referirlos a la totalidad de la
psique dentro de la que se producen. Tanto más numerosos los hechos que se
coleccionan, tanto más amplio se vuelve el círculo dentro del que han de insertarse.
Con esta última actitud, la comprensión se cierra, y abre el círculo hermenéutico de la
interpretación freudiana. El círculo hermenéutico constantemente ampliado, exige
cada vez mayor esfuerzo para darle sentido.

La interpretación de los sueños plantea la sugerencia de un método, cuya flexibilidad


permita el uso de la razón reflexiva, de la reflexión interactuante y la autorreflexión. La
finalidad última es encontrar el sentido del sueño, en este caso. Según Freud
“interpretar un sueño” quiere decir indicar su “sentido” o sea sustituirlo por algo que
pueda incluirse en la concatenación de nuestros actos psiquícos como un factor de
importancia y valor equivalentes a los demás que la integran…no es posible indicar
norma alguna para llevar a cabo una tal interpretación simbólica. Esta depende tan
solo del ingenio y de la inmediata intuición del interpretador; razón por la cual pudo
elevarse la interpretación por medio de símbolos a la categoría de arte, para el que se
precisaba una especial actitud.

6. LA HERMENÉUTICA FILOSÓFICA COMO MÉTODO GENERAL

Schleiermacher: la hermenéutica es el arte de evitar el malentendido. A partir de ese


postulado, hace una distinción entre la praxis relajada de la hermenéutica, según la cual la
comprensión se produce por sí misma, y esa praxis más estricta, que parte de la idea de
que lo que se produce por sí mismo es el malentendido.

La hermenéutica de Schleiermacher tiene como fin el comprender. Según Scheliermacher


“el método del comprender tendrá presente tanto lo común –por comparación- como lo
peculiar –por adivinación-, esto es habrá de ser tanto comparativo como adivinatorio. En
uno y otro sentido seguirá siendo sin embargo arte, porque no puede mecanizarse como
aplicación de reglas…en principio comprender es siempre moverse en este círculo y por
eso es esencial el constante retorno del todo a las partes y viceversa. A esto se añade que
este círculo se está siempre ampliando, ya que el concepto del todo es relativo, y la
integración de cada cosa en nexos cada vez mayores afecta también a su comprensión.

La comprensión tiene un carácter interno y provisional, lo que la hace inconclusa, ya que


se desarrolla a partir del principio hermenéutico del todo y las partes…la hermenéutica es
arte y no un procedimiento mecánico. Lleva a cabo su obra, la comprensión, tal como se
lleva a cabo una obra de arte hasta su perfección.

El arte de la comprensión del texto es equipararse con el autor del texto. ¿Cómo se puede
hacer esa equiparación? aún dentro de la propia lengua lo cierto es que el lector tiene que
empezar por hacer suyo el acervo lingüístico del autor a partir de sus obras, y aún más las
peculiaridades de su intención…se trata de comprender a un autor mejor de lo que él
mismo se habría comprendido.

Dilthey apunta: la totalidad de una obra tiene que ser comprendida partiendo de las
palabras y de su combinación y, sin embargo, la comprensión plena del detalle presupone
ya la comprensión del conjunto. Se comienza con una sinopsis de la articulación que se
puede comparar con una lectura ligera, se abarca la conexión entera, se aclaran las
dificultades, y se mantienen todos los pasajes que suministran un atisbo de la
composición; es entonces cuando comienza la interpretación.

El análisis lógico diltheyano del concepto del nexo de la historia representa la aplicación
del postulado hermenéutico de que los detalles de un texto solo pueden entenderse
desde el conjunto, y éste sólo desde aquéllos, pero proyectándolo ahora sobre el mundo
de la historia…En consecuencia el fundamento de la historiografía, es la hermenéutica.

La comprensión cae bajo el concepto del conocer, entendiéndose por conocer, el proceso
en el cual se busca un saber de validez universal.
Proposición 1. Llamamos comprender al proceso en el cual se llega a conocer la vida
psíquica partiendo de sus manifestaciones sensiblemente dadas.
Proposición 2. Por muy diversas que puedan ser las manifestaciones sensiblemente
captables de la vida psíquica, su comprensión debe poseer las características comunes
impuestas por las condiciones, ya indicadas, de este modo de conocer.
Proposición 3. Denominamos interpretación la comprensión técnica de manifestaciones
de vida fijadas por escrito.

La interpretación es obra de arte personal y su aplicación más perfecta depende la


genialidad del intérprete y descansa en la afinidad, potenciada por la familiaridad con el
autor, por el estudio constante.

Proposición 4. Hermenéutica es la técnica para la comprensión de manifestaciones de vida


fijadas por escrito.
Proposición 5. Comprender constituye el método para todas las operaciones de las
ciencias del espíritu.
Proposición 6. El análisis epistemológico, lógico y metódico del comprender representa
una de las tareas principales para la fundamentación de las ciencias del espíritu…pero la
significación de esta tarea resalta cuando tomamos conciencia de las dificultades que
supone la índole del comprender por lo que se refiere al desarrollo de una ciencia de
validez universal.

La propuesta de Heidegger es una fenomenología hermenéutica cuya finalidad es la


renovación general del problema del ser.

Una manera de fundar la hermenéutica en la fenomenología es, según Ricoeur, mediante


el establecimiento de una ontología de la comprensión, que no es otra cosa que una
ontología del ser finito, en el sentido sugerido por Heidegger, que lleva a la comprensión a
través de un modo de ser. Así entendida al comprensión tiene como finalidad la discusión
tradicional entre el sujeto y el objeto, es preciso, ante todo el interrogarse sobre este ser
que es el ‘allá’ de todo ser, sobre el Dasein, es decir sobre este ser que existe en el modo
de comprender el ser. Comprender no es más entonces, un modo de conocimiento sino
un modo de ser, el modo de este ser que existe al comprender.

La tarea del comprender se basa en el carácter óntico (de ser ahí) original de la vida
humana en sí misma.

La pertenencia del intérprete a su objeto…obtiene un sentido concreto y perceptible, y es


tarea de la hermenéutica mostrar ese sentido. Para mostrar el sentido debemos entender
su significado.

Heidegger apunta: sentido es aquello en que se apoya el ‘estado de comprensible’ de algo.


Lo articulable en el abrir comprensor es lo que llamamos sentido. El concepto de sentido
abarca la armazón formal de aquello que es necesariamente inherente a lo que articula la
interpretación compresora. Sentido es el ‘sobre el fondo de qué’, estructurado por el
‘tener’, el ‘ver’ y el ‘concebir’, ‘previos’, de la proyección por la que algo resulta
comprensible como algo.

El comprender y la interpretación constituyen la estructura existencia del ser del ‘ahí’ por
lo que el sentido debe concebirse como la armazón existenciario-formal del ‘estado de
abierto’ inherente al comprender. Expuesto lo que es el sentido, podemos considerar
como fórmula para identificar esa armazón, el círculo hermenéutico en el sentido
heideggeriano, el círculo del comprender. El círculo del comprender es inherente a la
estructura del sentido, fenómeno que tiene sus raíces en la estructura existenciaria del
‘ser ahí’ en el comprender interpretativo.

El que quiere comprender un texto realiza siempre un proyectar, tan pronto como se topa
con un primer sentido, el intérprete proyecta un sentido del todo. El sentido se manifiesta
porque se lee el texto desde ciertas expectativas, relacionadas a su vez con un sentido
determinado. La comprensión de lo que pone en el texto consiste en al elaboración de
este proyecto previo que, tiene que ser revisado constantemente con base en lo que
resulte, conforme se va avanzando en la penetración del sentido.

Toda revisión del primer proyecto estriba en la posibilidad de anticipar un nuevo proyecto
de sentido; es muy posible que diversos proyectos de elaboración rivalicen unos con otros
hasta que pueda establecerse unívocamente la unidad del sentido: la interpretación
empieza con conceptos previos que tendrán que ser sustituidos progresivamente por
otros más adecuados. Y es todo este constante reproyectar, el cual consiste el movimiento
del comprender e interpretar. La comprensión sólo alcanza sus verdaderas posibilidades
cuando las opiniones previas con las que inicia no son arbitrarias.

Heidegger descarta todos los a priori en la interpretación, y el objeto se aborda taly como
se presenta, tal y como está. Heidegger describe al círculo hermenéutico en forma tal
que la comprensión del texto se encuentre determinada continuamente por el
movimiento anticipatorio de la precomprensión. El círculo del todo y las partes no se
anula en la comprensión total, sino que alcanza en ella su realización más auténtica. El
círculo no es a naturaleza formal, no es subjetivo ni objetivo, sino que describe la
comprensión como la interpretación del movimiento de la tradición y del movimiento del
intérprete. La anticipación del sentido que guía nuestra comprensión de un texto no es un
acto de la subjetividad sino que se determina desde la comunidad que nos une con la
tradición.

Pero en nuestra relación con la tradición esta comunidad está sometida a un proceso de
continúa formación; nosotros mismos la instauramos en cuanto que comprendemos,
participamos del acontecer de la tradición y continuamos determinándolo así desde
nosotros mismos. El círculo de la comprensión no es un círculo metodológico, sino que
describe un momento estructural ontológico de la comprensión.

La ontología de Heidegger establece las bases de la denominada hermenéutica del ‘yo soy’
ésta como hermenéutica filosófica parte del supuesto de que “primero está el ser en el
mundo, luego hay que comprenderlo, después interpretarlo y por último decirlo”.

Para Ricoeur, la interpretación sobre el entendimiento de los acontecimientos sociales, se


reúne en el sujeto, pero no en el sujeto abstracto, sino en el sujeto concreto que tiene
historia y porvenir, arqueología y teología. Solo un sujeto que tiene telos tiene también
arché.

Para definir los dos momentos de arché y telos, Ricoeur dice: el hombre es el único ser
que es presa de su infancia; un ser siempre en retroceso hacia su infancia; incluso
atenuando el carácter demasiado histórico de tal interpretación pretérita, resulta que
seguimos emplazados frente a una anterioridad simbólica; de esta forma, si interpretamos
el inconsciente como el orden de los significantes claves respecto a cualesquiera sucesos
temporalmente interpretados nos remite a un sentido más simbólico de la anterioridad.
Según Ricoeur durante la infancia se van adquiriendo símbolos que se asientan en el
inconsciente, para manifestarse en cada momento de la historia del individuo. Esta
dialéctica entre espíritu e inconsciente es el objeto de la filosofía reflexiva, que actúa
como hermenéutica filosófica.

Hans.Georg Gadarmer expone: la comprensión es el modo de ser del propio estar ahí. La
hermenéutica designa el carácter móvil del estar ahí, que constituye su finitud y su
especificidad y que por lo tanto abarca el conjunto de su experiencia del mundo. El que el
movimiento de la comprensión sea abarcante y universal está en la naturaleza misma de
la cosa.

Gadamer considera como comprensión y dónde se realiza:


1. Comprender es ponerse de acuerdo con alguien sobre algo
2. El lenguaje s, por tanto el medio universal para realizar el consenso o comprensión,
3. El diálogo es el modo concreto de alcanzar la comprensión
4. Todo comprender viene a ser así un interpretar,
5. La comprensión, que se realiza siempre, fundamentalmente, en el diálogo por
medio del lenguaje, se mueve en un círculo encerrado en la dialéctica de pregunta
y respuesta
6. La dimensión lingüística de la comprensión, indica que es la concreción de la
conciencia de la historia efectual
7. La tradición consiste en existir en el medio del lenguaje, en cuanto el pasado se
actualiza, se reconoce su sentido a menudo con nuevas iluminaciones

Igual que en la conversación con el fin de alcanzar la comprensión, uno se pone en el lugar
del otro para comprender su punto de vista, también el traductor intenta ponerse por
completo en el lugar del autor. El ponerse de acuerdo en una conversación implica que los
interlocutores están dispuestos a ello y que van a intentar hacer valer en sí mismos lo
extraño y lo adverso.

La hermenéutica sale del contexto rígido de la metodología de la ciencia para establecerse


como una metodología que busca la comprensión de la verdad, donde y como quiera que
se encuentre.

S-ar putea să vă placă și