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Pregunta: "¿Puede un cristiano escuchar música secular?

"

Respuesta: La pregunta de si un cristiano puede escuchar música secular, es una


con la que muchos cristianos batallan. Hay muchos músicos seculares que son
tremendamente talentosos. La música secular puede ser muy entretenida. Hay
muchas canciones seculares que tienen melodías pegajosas, buenas reflexiones, y
mensajes positivos. Para determinar si un cristiano puede o no escuchar música
secular, hay tres factores importantes que deben considerarse: (1) el propósito de
la música, (2) el estilo de la música, y (3) el contenido de la letra.

(1) El propósito de la música. ¿La música está diseñada únicamente para la


adoración, o Dios quiso que la música fuera tranquilizadora o entretenida? El
músico más famoso de la Biblia, el rey David, utilizó la música primeramente con
el propósito de adorar a Dios (ver Salmos 4:1; 6:1; 54:1; 55:1; 61:1; 67:1; 76:1).
Sin embargo, cuando el rey Saúl era atormentado por espíritus malignos, él
llamaba a David para que tocara el arpa a fin de tranquilizarlo (1 Samuel 16:14-
23). Los israelitas también usaban los instrumentos musicales para advertir el
peligro (Nehemías 4:20) y para sorprender a sus enemigos (Jueces 7:16-22). En el
Nuevo Testamento, el apóstol Pablo instruye a los cristianos para animarse unos a
otros con música: “Hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos
espirituales…” (Efesios 5:19). Así que, aunque el propósito principal de la música
parece ser el de la adoración, la Biblia definitivamente permite que la música
pueda ser usada para otros propósitos.

(2) El estilo de la música. Tristemente, la cuestión de los estilos musicales puede


ser muy divisivo entre los cristianos. Hay cristianos que demandan inflexiblemente,
que no deben usarse instrumentos musicales. Hay cristianos que solo desean cantar
los himnos “antiguos de la fe”. Hay cristianos que quieren más ritmo y música
contemporánea. Hay cristianos que aseguran poder adorar mejor en un ambiente
estilo “concierto de rock”. En lugar de reconocer estas diferencias como
preferencias personales y diferencias culturales, algunos cristianos declaran que
su preferencia en el estilo de la música es el único “bíblico” y declaran a todas las
demás formas de música en el mejor de los casos, como profana, sino hasta
satánica.

La Biblia en ninguna parte condena un estilo de música en particular. La Biblia en


ninguna parte declara que un instrumento musical en particular sea impío. La
Biblia menciona numerosas clases de instrumentos de cuerda e instrumentos de
viento. Aunque la Biblia no menciona específicamente la batería, si menciona otros
instrumentos de percusión (Salmo 68:25; Esdras 3:10). Casi todas las formas de
música moderna son variaciones y/o combinaciones de los mismos tipos de
instrumentos musicales, tocados a diferentes velocidades o con un mayor énfasis.
No existen bases bíblicas para declarar algún estilo de música en particular, como
profano o fuera de la voluntad de Dios.

(3) El contenido de la letra. Mientras que ni el propósito de la música ni su estilo


son determinantes para saber si un cristiano puede escuchar música secular, el
contenido de la letra sí debe ser considerado. Aunque que no esté hablando
específicamente de la música, Filipenses 4:8 es una excelente guía de lo que
debíamos escuchar en las letras de la música, “Por lo demás, hermanos, todo lo
que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable,
todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en
esto pensad”. Si esas son las cosas en las que debemos pensar, seguramente
también esas son las cosas que debemos invitar a nuestras mentes a través de la
música y las letras. ¿Puede ser la letra de una canción secular totalmente
verdadera, noble, justa, pura, amorosa, admirable, excelente, y digna de
alabanza? Si la respuesta es sí, no habrá absolutamente nada de malo con que un
cristiano escuche una canción secular de esa naturaleza.

Sin embargo, mucha de la música secular no cubre los estándares de Filipenses


4:8. Frecuentemente la música secular contiene inmoralidad y violencia, a la vez
que degrada y desvaloriza la pureza y la integridad. Un cristiano no debe escuchar
deliberadamente una canción que glorifique lo que se opone a Dios. Sin embargo,
hay muchas canciones seculares que no mencionan a Dios, pero que aún así
contienen buenos valores, tales como la honestidad, pureza e integridad. Si una
canción de amor promueve la santidad del matrimonio y/o la pureza del amor
verdadero – pero no menciona a Dios o a la Biblia – tal canción puede ser escuchada
y aún disfrutada.

Es un hecho que cualquier cosa que una persona permita que ocupe su mente,
tarde o temprano influirá en su plática y sus acciones. Esta es la premisa detrás
de Filipenses 4:8 y Colosenses 3:2,5 para establecer patrones saludables para la
mente. Segunda de Corintios 10:5 dice que debemos hacerlo “llevando cautivo
todo pensamiento a la obediencia a Cristo”. Estas Escrituras nos dan una clara
imagen de la clase de música que no debemos escuchar.

Obviamente, la mejor clase de música que podemos escuchar es aquella que alaba
y glorifica a Dios. Hay muchos músicos cristianos talentosos en casi cualquier
género de música, con un rango que va desde lo clásico, hasta el rock, rap y reggae.
No hay nada inherentemente malo con ningún estilo de música en especial. Es la
letra la que determina si una canción es “aceptable” para que un cristiano la
escuche. Pero si un estilo de música secular, ya sea en la música misma o en la
letra, te lleva a pensar en, o te involucra en algo que no glorifique a Dios, debe
ser evitada.

Otra deunte
Se puede escuchar
música secular?
Se puede escuchar música secular

Es la pregunta que se hace muy común entre jóvenes y adultos, si un cristiano


puede escuchar música que no es cristiana o como es conocida música secular ?
Todos desean conocer la verdad pero en lo mas profundo la pregunta seria … Si
buscan una forma de poder justificar para poder escucharla y como cristianos no
pecar. O puedo ser que hagamos la siguiente pregunta.

La música secular es mala o buena ?.


Normalmente los chicos y adultos son altamente influenciados por la música, por
medio de ella encuentran un estilo y una forma de poder expresarse ya que se
sienten totalmente identificados con lo que escuchan e influye en su
comportamiento y inclusive en forma de vida.

Vamos hacer una dinámica juntos ?


Piense en una canción que te guste no importa si es cristiana o secula …. Ahora
piense en porque le gusta?…es el ritmo o genero….y cuantas canciones
parecidas escuchas o te gustan…
Hay similitud en el genero y la letra ???? toma tu tiempo para responderte…..
Cuantos géneros o ritmos te gustan???
Perteneces a un grupo de amigos o frecuentas lugares donde se escucha y
disfrutan de esta música.

Despues de pensar en estas respuestas vamos analizar lo que pasa con la música
que escuchamos y cantamos.

Iniciamos escuchando una canción porque nos identificamos con ella por el ritmo
numero 1 y después por lo que dice la letra y en muchas ocasiones ni sabemos lo
que dice pero simplemente nos gusta demasiado.
Nuestro cuerpo y emociones comienzan a brincar y sentir que esas notas avivan
todo nuestro cuerpo tanto que al terminar esa canción queremos volver a
escucharla u otra mas, pero que suene tan bien como esa o me haga sentir tan
bien como esa canción.

Al pasar las horas y los días esa música esta en mi mente día y noche es capaz
de sonar ene mi hasta sin yo desear simplemente esta en mi todo el día.
Sin darme cuenta inicio a comportarme como este tipo de personas, veo que sus
vestimentas son atractivas y todos tienen una forma y un estilo de cantantes que
me gusta y quiero sin darme cuenta ser como ellos.
la forma de pensar y la forma de comportarse inicia a cambiar lentamente y al
pasar el tiempo soy uno de ellos. Pienso como este grupo por ende me visto como
este grupo y mis actitudes las defiendo creyendo que es lo mejor. Algunos ya
llegan a pertenecer a un grupo una red social de este genero y donde se
convierten en fieles seguidores.

Ok ahora si después de esta dinámica vamos a juntos pensar y definir si la música


secular es buena o mala ?

Si un 80% de estos parámetros te an pasado en su vida vas a poder hacer el


siguiente ejercicio conmigo.
Antes de leer la siguiente parte quiero que sepas que la anterior parte es tanto
para la música cristiana o secular.

Si yo escucho musica secular y tengo un genero que me gusta y quiero ser parte
de este grupo que va pasar con mi interior y exterior.
La biblia nos dice en

Santiago 3:11-13 Nueva Versión Internacional (NVI)


11 ¿ Puede acaso brotar de una misma fuente agua dulce y
agua salada?
12 Hermanos míos, ¿acaso puede dar aceitunas una
higuera o higos una vid? Pues tampoco una fuente de agua
salada puede dar agua dulce.
Si no nosotros escuchamos musica escrita por una persona que no esta llena de
Dios a lo aceptado en su corazón como salvador de su vida o bien la letra de esta
canción no alaba y glorifica a Dios, como de nuestra boca puede salir estas
palabras, o con cada nota musical inspirada por circunstancias del mundo en su
propia humanidad.

Podemos verlo en otro punto de vista como esta música y letra puede estar
ministrando nuestro cuerpo, alma y espíritu si Dios nos enseña en la biblia.

Apocalipsis 5:13
Y a toda cosa creada que está en el cielo, sobre la tierra,
debajo de la tierra y en el mar, y a todas las cosas que en
ellos hay , oí decir: Al que está sentado en el trono, y al
Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el dominio por
los siglos de los siglos.

La pregunta final seria Usted cree


que Jesús escucharía música secular
???

2 razones para NO escuchar música secular


La música secular está en todo el mundo. Aún si no quisiéramos oírla, la gente aquí
y en China la seguiría poniendo en la radio, el coche, en la televisión, en las
noticias, en la calle, en películas, en el transporte público, en la escuela, en el
centro comercial, y virtualmente en cualquier lugar secular en el que vayamos.
Todo esto demanda una convicción del cristiano de no ir tras los ídolos musicales
de mundo y las cosas que éstos promueven, pues el pecado también está en todo
el mundo.

El problema en sí no es oír el ruido del mundo, sino escucharlo. La diferencia entre


oír y escuchar es que cuando alguien escucha, lo hace voluntariamente y pone su
atención, su gusto, interés y/o voluntad en aquello que escucha, mientras que lo
que sólamente se oye a lo lejos puede ser ignorado como ruido que se deja de
lado.
Nadie niega que haya muchísimos músicos seculares que tengan muchísimo talento
o que interpreten música con melodías creativas, grandiosas, o innovadoras, ni que
existan canciones que pueden llegar a ser muy agradables o pegajosas por su
melodía. Sin embargo, somos seres espirituales y la Biblia nos dice que no debemos
guiarnos por las apariencias o lo externo, ni andar en la carne, sino caminar en el
Espíritu y vivir por la fe.

A muchos cristianos nos preocupa la cuestión de la música secular, porque,


habiendo venido del mundo, hemos abandonado a nuestros antiguos ídolos
musicales que por muchos años habíamos escuchado, y el decidir no escuchar o
aceptar el gusto por la música secular que se oye en el mundo es una decisión que
nos demanda la negación personal de la que Cristo hablaba cuando Él habló, "y a
todos les decía: "Si alguien quiere seguirme, niéguese a sí mismo, tome su cruz
cada día y sígame" (Lucas 9:23).

Si queremos seguir a Cristo con seriedad y de todo el corazón (que es la única


forma de seguir verdaderamente a Cristo), debe llegar un momento en el que el
creyente enfrente la naturaleza de sus propios gustos y deseos antiguos, y busque
hacer la voluntad plena de Dios, preguntándose si es correcto seguir escuchando
la misma música que los ateos, agnósticos, miembros de otras religiones paganas
y hasta satanistas también escuchan. Cristo dejó su reino y dio todo por nosotros
¿Acaso no debemos nosotros también estar dispuestos a renunciar a nuestros
propios gustos carnales y dejar de escuchar el sonido del mundo si fuese necesario?
Pienso que sí.

Por experiencia propia y por enseñanzas bíblicas clave, estoy convencido de que
la música secular tiene el potencial de llegar a ejercer tanto daño en la vida de
una persona, que a la larga le puede incluso separar de Cristo y robarle el corazón
de las cosas del Reino de los Cielos. Lo he visto ocurrir, y me parte el corazón
conocer a hermanos y hermanas que no se den cuenta de esto, o no lo quieran
aceptar, y es por ello que he decidido compartir y analizar este estudio de 12
razones por las cuales un cristiano no debería escuchar música secular por gusto.

Mientras lees, permite que la palabra de Dios hable a tu vida en la verdad de Cristo
Jesús. Concéntrate en preguntarle a Él, y si escuchas hoy su voz, no endurezcas tu
corazón y deja que Su Espíritu Santo te convenza de verdad sobre la voluntad
agradable a Dios, para que puedas servir a Dios haciendo su voluntad, con toda
entrega, de todo corazón, con pasión, en Espíritu y verdad, con todas tus fuerzas,
y con todo tu ser.

RAZÓN #1: El propósito de la música secular NO es glorificar a Dios.


Todos los músicos seculares componen e interpretan nuevas canciones por diversos
motivos y con diversos objetivos en mente. Sin importar cual sea el motivo, es
evidente que las personas que ni si quiera quieren hacer referencia a Dios en su
música, no tienen deseos de glorificar a nuestro Creador en toda su música, y
mucho menos en cada una de las obras que hacen. Cristo dijo que si no somos
fieles en lo poco, tampoco seremos fieles en lo mucho (Lucas 16:10). En otras
palabras, si a Dios le somos infieles en cosas pequeñas, también seremos infieles
en lo mucho. Debemos ser completamente fieles a Dios, aunque sea una canción
de 2 minutos.

No es posible que los domingos cantemos alabanzas que dicen "Todo rindo a Ti",
y el resto de la semana sigamos escuchando gustosamente las mismas cosas en las
que los incrédulos se alegran. Es cuestionable. Oscar Medina, en una de sus
canciones, nos recuerda que ser cristiano no significa cantar solamente los
domingos, sino cargar la cruz y andar en la luz de Cristo todo el tiempo. No
caigamos en la hipocresía ni en la tentación. Resulta cierto lo que dijo A. W. Tozer
al afirmar que "si no estás adorando a Dios el lunes de la forma en que lo hiciste
el día anterior, quizá no lo estás adorando del todo". Debemos adorar a Dios
24/7.

RAZÓN #2: El propósito central de la música debe ser para la GLORIA de Dios

En la Biblia hay más de 120 referencias específicas relacionadas con la música y


muchos otros versículos pertinentes que pueden servirnos de guía general para
darnos cuenta del papel trascendental que la música tiene en el estilo de vida
humano, sea cristiano o secular. Allí leemos que el pueblo de Israel entonó una
variedad de cánticos espirituales con los cuales alababan a Dios y le engrandecían
y honraban con música por las obras que Él había hecho, por ejemplo:

 cuando Moisés junto a los Israelitas dedicaron a Dios dos cantos para
agradecer la liberación del pueblo de Israel (Éxodo 15:1-21, Deuteronomio 32:1-
43)
 cuando Débora y Barac engrandecieron a Dios con su cántico (Jueces 5)
 los cantos que las mujeres de Israel entonaron después de que David
venciera al filisteo (1 Sam. 18:6)
 cuando Salomón fue ungido como rey de Israel por el sacerdote Zadok (1
Reyes 1:40)
 cuando Ezequías celebró los holocaustos en el templo (2 Crónicas 29:27-28)
y la Pascua en honor a Dios (2 Crónicas 30:22)
 cuando Jesucristo y sus discípulos terminaron de cenar y antes de ir al Monte
de los Olivos, cantaron un himno (Mateo 26:30; Marcos 14:26)
 cuando Pablo y Silas cantaron himnos a Dios como expresión de su fe en
Dios, a pesar de que estaban pasando en medio de tiempos de tribulación
Incluso se dice que la hebrea se usaba para memorización del Pentatuco o partes
de la Biblia; el músico más destacado de la Biblia, el rey David, utilizaba la música
con el propósito de adorar y ensalzar la gloria y el gran carácter de Dios, y escribió
al menos 73 salmos registrados en las Escrituras, muchos de los cuales fueron
hechos para ser cantados. En el Nuevo Testamento, el apóstol Pablo instruyó a los
cristianos a animarnos unos a otros con música espiritual: “Hablando entre
ustedes con salmos, con himnos y cánticos espirituales…” (Efesios 5:19).
En todos los sentidos, en la Biblia vemos que los siervos de Dios usaban la música
de forma devocional: para alabar o adorar a Dios, para exhortar espiritualmente,
para agradecer a Dios, para honrar la Palabra de Dios, para expresar su fe, para
dar a conocer las obras de Dios y para engrandecer la gloria de Dios. Los santos
manifestaban los sentimientos que surgían de su anhelo de estar cerca de Dios, y
el sentimiento de paz, de fe o esperanza que les daba el Señor, o bien, su fe en
momentos de dificultad. Ellos tenían sus pensamientos centrados en Dios y
expresaron sus vivencias con Dios de forma artística, ejemplificando así, el
propósito por el cual Dios creó la inventiva musical. En este sentido, se pueden
identificar distintos tipos de música devocional, por ejemplo:

 himnos, alabanzas o música de adoración


 música que habla sobre la vida cristiana y lo relacionado a ella
 música que contiene enseñanzas teológicas bíblicas
 música evangelística para aquellos que aún no creen
 música instrumental cristiana (melodías originalmente creadas por
creyentes que las dedicaron a Dios)
Independientemente de la naturaleza de la música, todos estos tipos deberían dar
una imagen fiel de los distintos aspectos del
cristianismo, haciéndolo con sinceridad, humildad, fe, y con una sana doctrina
bíblica que de gloria a de Dios. La grandeza de Dios, el amor de Dios hacia
nosotros, el amor del cristiano hacia Dios, la relación personal del cristiano con
Dios son temas que si están arraigados en el corazón, se expresarán
frecuentemente en la música del creyente. Ahora bien, yo no intento decir que
todas las canciones cristianas que escuchamos deban ser de tipo congregacional
todo el tiempo (incluso se lee en la Biblia que el libro de Ester y porciones del
Cantar de Cantares y los Proverbios no mencionan expresamente a Dios, pero sí
hablan de lo que Él o sus enseñanzas hacen o representan en sus vidas y siempre
guardan y enseñan una doctrina sana que impacta en el que las recibe). Temas
como la comunión entre hermanos cristianos, la obra de Dios por la humanidad, el
amor de Dios por los perdidos, el amor al prójimo, el llamado de Dios al
arrepentimiento, la esperanza, el perdón, la oración, la fe, la seguridad, y el
servicio y la pureza espiritual también deberían ser ejemplos de temas tratados en
la música que consume o compone un cristiano.

El punto aquí es que, si somos cristianos, no podemos olvidarnos de nuestro


cristianismo cuando se nos antoja y dejar colgada la vestidura de Cristo cuando
queremos ponernos la del mundo, "porque todos los que fuisteis bautizados en
Cristo, de Cristo os habéis revestido" (Gálatas 13:27). "Desechemos las obras
de las tinieblas y vistámonos con las armas de la luz" (Romanos 13:12-13).

De este modo, resultaría bíblico lo que dijo el genio musical


Johann Sebastian Bach al afirmar que «Toda la música no debería tener ningún
otro fin y objetivo que la gloria de Dios y la recreación del alma. Donde no se
tiene esta en cuenta, no hay verdadera música, sino sólo un despotrique y
clamor infernal».

Es claro que el mensaje de la Biblia sustenta esta enseñanza firmemente si


pensamos en lo que Jesús dijo: "Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón,
y con toda tu alma, y con toda tu mente" (Mt. 22:37) y la Biblia también
dice: "Todo lo que hagan, sea de palabra o de hecho, háganlo todo en el
nombre de Jesús" (Colosenses 3:7). "Cualquier cosa que hagan, háganlo todo
para la gloria de Dios" (1 Corintios 10:31). "Todo lo que hagan, háganlo de
corazón como para el Señor y no como para los hombres, sabiendo que del
Señor recibiréis la recompensa de la herencia. Es a Cristo el Señor a quien
servís" (Colosenses 3:23).

"Todo" incluye la música. ¿Puede alguien cantar una canción de Michael Jackson,
Madonna, Metallica, Led Zepellin o cualquier otro músico mundano, "para la gloria
de Dios" o "en el nombre del Señor Jesucristo"? Por favor, no nos engañemos. "No
os dejéis engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que el hombre siembre,
eso también segará. Porque el que siembra para su propia carne, de la carne
segará corrupción, pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará
vida eterna" (Gálatas 6:7). De la misma forma que no se puede fumar marihuana
para estar sanos, tampoco se puede consumir música mundana para engrandecer
a Dios. "Den al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios" (Marcos
12:17). Separemos lo que es del mundo, y lo que es del cielo.

La música secular generalmente engrandece más bien algo del hombre y le cierra
la puerta a Dios dejándolo fuera de la ecuación. Consumir música secular por
gusto es dejar a un lado el primer y máximo mandamiento "Amarás al Señor tu Dios
con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente", como si no tuviera
importancia alguna o no fuera gran cosa. Originalmente, fuimos creados para
glorificar a Dios (Isaías 43:7) y la música también debe ser por completo para
Él. "Porque de Él, por Él y para Él son todas las cosas, a Él sea la gloria para
siempre. Así sea" (Romanos 11:36). ¿Estamos dando gloria a Dios con aquello que
estamos viendo, escuchando y consumiendo?

RAZÓN #3: La música del mundo está en ENEMISTAD con Jesucristo


Suena duro, pero la Escritura declara que, inevitablemente, aquellos que no siguen
a Cristo, están actuando (consciente o inconscientemente) en contra del Reino de
Dios. Por muy radical como pueda parecer, Jesucristo fue muy claro y tajante al
afirmarlo así: "El que no está conmigo, contra mí está; y el que conmigo no
recoge, desparrama" (Mateo 12:30; Lucas 11:23; Lc. 10:16). Aquél que no pasa
tiempo con el Señor, derrocha su tiempo. Aquél que no dedica su vida o sus
palabras a Dios, malgasta sus días. Aquél que se dedica o sumerge en la música
secular, está derrochando tiempo, dinero y esfuerzo en el mundo; derrochando el
don que Dios le dio (que originalmente era para glorificarle a Él).
El Nuevo Testamento también dice: "Todo espíritu que no confiesa a Jesús, no
es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, del cual habéis oído que viene,
y que ahora ya está en el mundo" (1 Juan 4:3). En la música secular NO se
confiesa a Cristo abiertamente. Por consecuencia, debería quedar entendido que
los músicos seculares o incrédulos, aunque quizá lleguen a tener algunas líneas
comprensibles, al final del día están trabajando en contra de Cristo desparramando
sus pensamientos o sentimientos de pecado, dispersando sentimientos impuros,
y/o promoviendo falsedad o vanidad en la gente, en vez de cooperar con el Espíritu
Santo para traer gente al conocimiento de la verdad, el camino y la vida. La música
que no está con Cristo, contra Cristo está. En cambio, la música que está con
Cristo, la de los salmistas (si es que realmente lo hacen de corazón) recolectará
pensamientos que serán agradables y como perfume a los pies de Dios.

La Biblia hace un llamado muy urgente que se puede aplicar al respecto:

"Os he escrito a vosotros, jóvenes, porque sois fuertes y


la palabra de Dios permanece en vosotros y habéis vencido al maligno. 15 No
améis al mundo ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo,
el amor del Padre no está en él. 16 Porque todo lo que hay en el mundo, la
pasión de la carne, la pasión de los ojos y la arrogancia de la vida, no proviene
del Padre, sino del mundo. 17 Y el mundo pasa, y también sus pasiones, pero
el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre" (1 Juan 2:15)

"¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad hacia
Dios? Por tanto, el que quiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de
Dios. 5¿O pensáis que la Escritura dice en vano: El celosamente anhela el
Espíritu que ha hecho morar en nosotros?" (Santiago 4:4-5)

De acuerdo a los estándares bíblicos, si la música carece de la mente de Cristo y


el amor de Dios, nada es y de nada sirve, por mucho ruido que haga, y por muuy
agradable que sea (1 Corintios 13:1). Porque "El que no ama no conoce a Dios,
porque Dios es amor. En esto se manifestó el amor de Dios en nosotros: en que
Dios ha enviado a su Hijo unigénito al mundo para que vivamos por medio de
El" (1 Juan 4:8). Estos versículos deberían llenarnos de convicción de que algo anda
mal si amamos la música del mundo, porque son tan claros como el agua más pura.

Puede que algunos escuchen música por tradición familiar o por mero
entretenimiento sin propósito, pero cuánta razón tenía Leonard Ravenhill cuando
dijo que "El entretenimiento es el sustituto del diablo para la alegría. Mientras
más gozo tengas en el Señor, menos entretenimiento necesitarás". La música
secular no expresa el amor de Dios y por tanto, a la luz de la eternidad, es una
vanidad de vanidades que pertenece al mundo. Nosotros estamos en el mundo,
pero no somos del mundo (Juan 17:16); nuestra música debe tener la mira en las
cosas de arriba (Colosenses 3:2).

RAZÓN #4: La música secular fue hecha para agradar al hombre


Independientemente del mensaje y de los músicos en cuestión, la música secular
está hecha para agradar al hombre. ¿No es innegable? Algunos músicos la hacen
para causar o evocar sensaciones agradables o placenteras en sí mismos (por
ejemplo, para relajarse, desestresarse, tranquilizarse, alegrarse, sentir placer o
sacar sus frustaciones de forma enérgica), otros lo hacen para causar estas mismas
reacciones o sensaciones en otras personas, y otros más, lo hacen por motivos
meramente comerciales o lucrativos (para agradar al público, para hacerse
populares, para sentirse bien consigo mismos, ganar fama o para vender discos y
ganar fortunas), o por una mezcla de los mismos motivos.

Jesús dijo que la puerta que lleva a la perdición es amplia. "Entrad por la puerta
estrecha, porque ancha es la puerta y amplia es la senda que lleva a la
perdición, y muchos son los que entran por ella. Porque estrecha es la puerta
y angosta la senda que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan" (Mateo
7:13-14).

Los objetivos de componer y escuchar verdadera música cristiana se espera que


sean completamente distintos: agradar a Dios, acercarnos a Dios, entregarnos a
Dios, llegar nuestra mente de Su Palabra y de los pensamientos de su voluntad,
pensar en su Reino y en lo que podemos hacer para bien. "Porque ¿busco ahora
el favor de los hombres o el de Dios? ¿O me esfuerzo por agradar a los
hombres? Si yo todavía estuviera tratando de agradar a los hombres, no sería
siervo de Cristo" (Gálatas 1:10).

De esta forma, así como la música dedicada a Cristo no puede agradar totalmente
a un ateo, ¿porqué la música secular habría de agradar tanto a un cristiano? La
música del mundo está hecha para agradar al mundo, y la cristiana para agradar a
Cristo. "Hijos míos, vosotros sois de Dios y los habéis vencido, porque mayor
es el que está en vosotros que el que está en el mundo. Ellos son del mundo;
por eso hablan de parte del mundo, y el mundo los oye. Nosotros somos de
Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. En esto
conocemos el espíritu de la verdad y el espíritu del error" (1 Juan 4:4-6).

Es necesario tomar una decisión radical de escoger consumir y aceptar la música


para el mundo o la música para Dios. "Nadie puede servir a dos señores; porque
o aborrecerá a uno y amará al otro, o se apegará a uno y despreciará al
otro" (Mateo 6.24). "Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el
que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará. Pues, ¿de qué
le sirve a un hombre ganar el mundo entero y perder su alma? Pues ¿qué dará
un hombre a cambio de su alma?" (Marcos 8:35-36).

RAZÓN #5: La música secular no puede darte verdadera paz

Una razón por la cual hacemos y escuchamos música es para expresar nuestro
estado de ánimo, sentimientos y emociones. Por ello, aunque no sean todas las
canciones, una gran parte de la música secular está llena de deseos y sentimientos
pecaminosos, como odio hacia otras personas, rencor, enojo, ira, envidia, tristeza
sin esperanza, autocompasión, frustaciones personales, egoísmo, codicia,
amargura, celos, duda, confusión, miedo, orgullo, arrogancia, odio, lascivia y
muchos otros pecados y vanidades. No hay duda de que, a la luz de la Escritura,
estas cosas incitan a un mal comportamiento y actitud que puede afectar nuestra
comunión con Dios y llevarnos a hacer malas obras que no agradan a nuestro Padre
celestial.
Algunos objetarán diciendo que no se puede generalizar y que no toda la música
secular es así. Pues bien; nadie niega que los músicos seculares también expresen
sentimientos agradables con melodías "placenteras" al oído o a la carne, o que de
vez en cuando expresen buenos pensamientos o buenas intenciones en unas
cuantas líneas, pero el problema es que esos sentimientos son pocos, son
insuficientes para calmar el alma y son engañosos cuando se mezclan con mentira.

La Biblia tiene el ejemplo del rey Saúl, quien había pecado y desobedecido a Dios
y por consecuencia, era atormentado por un espíritu maligno. Alejado de la
presencia de Dios, en vez de arrepentirse y buscar la ayuda de Dios en oración,
Saúl hizo caso del consejo de sus criados y mandó conseguir a un músico que le
tocara música para tranquilizarlo un poco (1 Samuel 16:14-23). David, que tocaba
muy bien el arpa, fue el elegido para tocarle al rey de Israel. La Biblia no especifica
si David tocó una melodía secular o religiosa, aunque podría pensarse que David le
tocó melodías religiosas del pueblo judío porque de principio se menciona que él
era "prudente en sus palabras... y Jehová estaba con él". De cualquier manera,
lo que llama la atención es que la música que David
tocaba aliviaba momentáneamente el dolor o la carga que sentía el rey Saúl (1
Sam. 16:23), pero más tarde en el relato, el sentimiento de oscuridad y carga
regresaba. Llegó un punto en que el rey mismo se llenó de celos contra David y su
espíritu malo volvió a regresar a él, a tal grado de que disvariaba y ya no le importó
que David siguiera tocando su arpa (1 Sam. 18:8-12). Esto es lo que pasa con la
música: su alivio es efímero.
Para no querer escuchar a su consciencia o enfrentar su realidad, muchos se
sumergen en sí mismos al ponerse sus audífonos, buscan más canciones que
alarguen su catársis, le suben más a la música, o se consiguen más músicos y
canciones, pero por mucho que escuchen más canciones, la Biblia dice que "No
hay paz para el pecador" (Isaías 57:21). Querer tranquilizarse con música
secular sin acudir a Dios no es la solución. Quizá la gente del mundo siente que
puede sacar un poco de sus frustaciones a través de la música, pero al fin del día,
su condición termina siendo la misma cuando se termina. Una canción, por razón
de su melodía y tono agradable, tiene la capacidad de hacernos sentir bien por
unos minutos, pero después de que el sonido se termina, la persona tiene que
encontrarse de nuevo con su realidad espiritual.

Por ello, la música secular nunca podrá sustituir lo que sólo el Espíritu Santo puede
hacer. Si tu espíritu está afligido o estresado y prefieres escuchar música secular,
en vez de acudir a Dios en oración, ¿no será que estás confiando más en la
sensación pasajera del mundo, que en la paz duradera y eterna que Dios te
promete dar por medio de una oración en comunión con Él? La tranquilidad que da
la música secular es efímera: dura por un momento breve, pero rápidamente se va
y ya no es más. Esto es porque, como dijo Blaise Pascal, "en el corazón de todo
hombre existe un vacío que tiene la forma de Dios. Este vacío no puede ser
llenado por ninguna cosa creada. Únicamente puede ser llenado por Dios, que
se da a conocer mediante Cristo Jesús".

La verdadera paz, la verdadera tranquilidad, el verdadero gozo, sólo viene de Dios


y en un momento con Dios. La música puede calmar o apaciguar al pecador por un
breve momento, pero nunca le dará paz duradera que necesita y sólo Dios puede
dar. Por algo la Biblia es muy concreta al decir que si estamos afligidos o con
alguna carga, lo que tenemos que hacer es orar. "Por nada estéis afanosos; antes
bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a
conocer vuestras peticiones delante de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa
todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo
Jesús" (Filipenses 4:7).

Si, por en cambio, quieres alegrarte pero prefieres que Dios tenga nada que ver,
¿no estás prefiriendo gozarte en el mundo y en ti mismo, que gozarte en la vida
que te da Jesús? La Biblia dice que "el gozo del Señor es nuestra fortaleza"
(Nehemías 8:10), así que, ¿porqué querrías volverte débil de nuevo? Si estamos
alegres, la Biblia nos dice que lo que debemos hacer es cantar a Dios. ¿Cantar
qué? Salmos y canciones espirituales. ¿A quién? ¡A Dios! ¿Al mundo? ¡No! ¿A los
demás? ¡No! ¿A nosotros mismos? ¡No!... ¡A Dios!
Jesús dijo: "La paz les dejo, Mi paz
les doy; no se la doy a ustedes como el mundo la da. No se turbe su corazón
ni tenga miedo" (Juan 14:27). "La paz les dejo, Mi paz les doy; no se la doy a
ustedes como el mundo la da. No se turbe su Venid a mí, todos los que estáis
cansados y cargados, y yo os haré descansar. Tomad mi yugo sobre vosotros
y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y HALLAREIS
DESCANSO PARA VUESTRAS ALMAS" (Mateo 11:28-29).

RAZÓN #6: La música secular está rodeada de pecado e ideas falsas


La elección que tenemos que hacer no sólo es cuestión de sonido sino también de
todo lo que le rodea. La letra es uno de los factores esenciales que debería
determinar si la música es “aceptable” o no para que un cristiano la escuche. De
verdad no hace falta darle la vuelta a la música para buscar supuestos mensajes
subliminales que cuestionablemente se aceptan y controversialmente se dice que
existen. Así de frente, de corrido y directamente, tan sólo analizando lo que dice
ante la luz de la Biblia, se puede abiertamente ver que, casi siempre, en la mayor
parte de sus letras, el mayor porcentaje de la música secular (al igual que otros
tipos de entretenimiento secular) contiene al menos una descarada inmoralidad,
una acción pecaminosa o una mentira que se rebela contra la verdad de la
Escritura, o una idea falsa que contradice lo enseñado por Cristo.

La inmoralidad, la injusticia y la impiedad (la ausencia de piedad) que contienen


las letras seculares son muchas veces una declaración de guerra a la moral, una
degradación espiritual y una desensibilización al pecado. Si las letras seculares
desvalorizan la pureza y la integridad del corazón, relegan la santidad y exaltan la
rebeldía, ¿cómo puede ser posible que un cristiano escuche voluntaria y
gustosamente una canción que se opone al amor y a la verdad de Dios? No es
correcto.

Aquellos que no están en Cristo practican el pecado y no han sido lavados por la
sangre de Jesucristo. ¿Cuál es el punto en este tema? Que su música está
inevitablemente influida por su condición espiritual. Aunque ellos no tengan malas
intenciones, sus palabras declaradas son frecuentemente incorrectas
teológicamente hablando. Peor aún: la ideología contenida en las letras de mucha
música secular también está basada en una forma de ver las cosas desde el punto
de vista de una mente pecaminosa o una persona que no tiene a Cristo en su mente
ni en su corazón. La Biblia les llama "muertos" espiritualmente a aquellos en esta
situación. Indiscutiblemente, la mentalidad, los juicios, las ideas contenidas, las
opiniones, los puntos de vista, la percepción o la cosmovisión de los músicos
seculares influye e impregna el mensaje detrás de sus letras y álbumes.

Las letras seculares tienden a exaltar o incitar el comportamiento inmoral o


amoral, con fin de expresar o avanzar ideas distorsionadas de la vida. Algunos dirán
que entonces "no hay que poner atención a las palabras", lo cual no es realista
puesto que aquello que repetimos y escuchamos constantemente inevitablemente
se va arraigando a nuestra mente (y Cristo dijo que "de toda palabra ociosa que
digamos tendremos que dar cuenta en el día del juicio" (Mateo 12:36). Llega
un momento en que aquello que los músicos promueven va volviéndose parte del
pensamiento de sus seguidores y éstos empiezan a pensar que después de todo eso
es verdad o "no está tan mal". Este fenómeno de desensibilización es sigiloso, pero
peligroso.

La Biblia, sin embargo, nos llama a llenar nuestras mentes con pensamientos
bíblicos todo el tiempo porque todo esto formará nuestra carácter y
comportamiento. "No todos hicieron caso al evangelio, porque Isaías dice:
Señor ¿Quién ha creído a nuestro anuncio? Así que la fe viene del oír, y el oír,
por la palabra de Cristo" (Ro. 10:16-17). La música cristiana de forma ideal
igualmente debería estar hecha por personas que hayan creído con sinceridad en
Jesucristo y estén viviendo en santidad y buscando la voluntad de Dios
expresándola en sus letras. Deberíamos preguntar, ¿Jesús cantaría esto?¿Los
ángeles del cielo cantarían esto? Escuchar salmos o música llena de la palabra de
Dios nos ayudará a acrecentar el conocimiento de nuestra fe, pero si preferimos
escuchar música secular, nuestra fe en los músicos seculares es la que aumentará
y la otra se disminuirá.

Muchos músicos seculares son tan astutos que usan su música de forma metafórica
para llamar la atención y expresar sus pensamientos engañosos y sus ideas falsas
(para de alguna forma esconder y dar a conocer al mismo tiempo su forma de ver
las cosas, sus argumentos, sus opiniones, su forma de pensar o incluso para
promover sus ideologías o filosofías falsas de la vida).

Los grupos modernos también promueven letras que hablan abiertamente la


inmoralidad, la rebelión, el rencor o la desobedoencia o menosprecio a los padres
y autoridades, la fornicación (sexo fuera del matrimonio), parrandas,
adicciones, la promiscuidad, homosexualidad, el uso de palabras profanas (malas
palabras), blasfemias, lascivia, desnudez, desinterés y demás pecados. Después de
ser cantadas por décadas, todas estas cosas pasan a ser vistas como inofensivas
por nuevas generaciones, y mucha influencia ejerce la música al difundir
aprobación a estas prácticas. Los pensamientos vanos, dañinos y peligrosos van
moldeando poco a poco la visión de las personas si no tomamos en cuenta la forma
en que Dios ve las cosas. ¿Con qué estamos llenando nuestra mente? ¿Escucharía
Jesús la música que estamos escuchando?

"Las obras de la carne son evidentes, las cuales son: inmoralidad, impureza,
sensualidad, idolatría, hechicería, enemistades, pleitos, celos, enojos,
rivalidades, disensiones, sectarismos, envidias, borracheras, orgías y cosas
semejantes, contra las cuales os advierto, como ya os lo he dicho antes, que
los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. El fruto del
Espíritu en la conducta cristiana Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz,
paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, 23 mansedumbre, dominio propio;
contra tales cosas no hay ley. Pues los que son de Cristo Jesús han crucificado
la carne con sus pasiones y deseos. 25 Si vivimos por el Espíritu, andemos
también por el Espíritu" (Gálatas 5:19-25).

Lo que cantamos con nuestra boca es lo que terminará ocupando nuestra mente,
y nuestro corazón, y tarde o temprano influirá en las pláticas, acciones y cosas que
practicamos. Por ejemplo, Bob Marley usó el reggae para promover el
rastafarismo. Los miembros de los Beatles ocuparon su fama en los años 60's para
difundir implícitamente pero conscientemente la ideología hindú en la cultura
occidental a través de canciones como "India, India", "Across the universe", "I Am
The Walrus", "Imagine", "Sweet Lord", etc. Lennon quería que la gente aceptara la
idea de que "no hay cielo... ni infierno" y su idea hizo un hit. Muchos otros grupos
famosos de los 60s y 70s también usaron su reconocimiento para promover el
movimiento hippie y sus ideas de oposición al "establecimiento", el
librepensamiento, el relativismo moral, el liberalismo sexual, el misticismo,
filosofías orientales, el humanismo secular y hasta el odio o la burla de todo lo
relacionado con Dios o la religión. Desde los 80's hasta la actualidad, muchos
músicos han promovido la aceptación de la homosexualidad con su música (por
ejemplo, Queen, Erasure, Village People, Frankie Goes To Hollywood, Cyndi
Lauper, Diana Ross, Joan Baez, Tracy Chapman, Madonna, Britney Spears, Christina
Aguilera, Scissor Sisters, Lady Gaga, Katy Perry y muchos otros artistas seculares
contemporáneos).

La Biblia nos advierte reiteradamente contra todas estas cosas:

"...que nadie os engañe con razonamientos persuasivos, porque aunque estoy


ausente en el cuerpo, sin embargo estoy con vosotros en espíritu,
regocijándome al ver vuestra buena disciplina y la estabilidad de vuestra fe
en Cristo. Por tanto, de la manera que recibisteis a Cristo Jesús el Señor, así
andad en Él; 7 firmemente arraigados y edificados en Él y confirmados en
vuestra fe, tal como fuisteis instruidos, rebosando de gratitud. Jesucristo:
Dios, salvador y vencedor 8 Mirad que nadie os haga cautivos por medio de su
filosofía y vanas sutilezas, según la tradición de los hombres, conforme a los
principios elementales del mundo y no según Cristo" (Colosenses 2:4-8)

"Porque vendrá tiempo cuando ni sufrirán la sana doctrina; antes, teniendo


comezón de oír, se amotonarán maestros conforme a sus concupiscencias, Y
apartarán de la verdad el oído y se volverán a los mitos. Pero tú vela en todo,
soporta las aflicciones, haz la obra de evangelista, cumple tu ministerio" (2
Timoteo 4:1-5).

"Que nadie os engañe en ninguna manera, porque [Él] no vendrá sin que
primero venga la apostasía y sea revelado el hombre de pecado, el hijo de
perdición, el cual se opone y se exalta sobre todo lo que se llama dios o es
objeto de culto, de manera que se sienta en el templo de Dios, presentándose
como si fuera Dios" (2 Tesalonicenses 2:3-4).

Los músicos a veces se les ha puesto en el lugar de Dios: los fans del mundo le han
llamado a Jimi Hendrix y a Eric Clapton los "dioses" de la guitarra; Elvis Presley,
David Bowie, Michael Jackson, Louis Armstrong, James Brown, han sido llamados
cada uno "el Rey" de la música o rey de un género en específico; Cher ha sido
llamada "la diosa del pop", y Missy Elliott "la diosa del hip hop". John Lennon dijo
que él que "Los Beatles son más grandes que Jesús", y hay muchas otras
aberraciones que se podrían nombre.

Pero no debemos perder de vista el Evangelio al aprobar música profana que


pretende tomar el lugar de Dios. Ezequiel 44:23 dice que quienes sirvan a
Dios: "enseñarán a mi pueblo a hacer diferencia entre lo santo y lo profano, y
les enseñarán a discernir entre lo limpio y lo que no está limpio". Lo profano
y sucio es aquello que se resiste a las cosas de Dios y se mantiene lejos de Él. Los
cristianos estamos llamados a la tarea de diferenciar entre honrar a Dios y
deshonrar a Dios. "Y este es el mensaje que hemos oído de El y que os
anunciamos: Dios es luz, y en El no hay tiniebla alguna. Si decimos que
tenemos comunión con El, pero andamos en tinieblas, mentimos y no
practicamos la verdad" (1 Juan 1:5).

La Biblia nos dice que, por sobre toda cosa guardada, debemos cuidar nuestro
corazón. Jesús explica que esto es "porque del corazón provienen malos
pensamientos, homicidios, adulterios, fornicaciones, robos, falsos
testimonios y calumnias. Estas cosas son las que contaminan al
hombre" (Mateo 15:19). Lo que entra por nuestra boca no causa pecado, sino
aquello que sale de nuestra boca; y lo que sale de nosotros es en gran medida
influido por aquello que ponemos en nuestro corazón. Y las canciones que
cantamos son parte de aquello que ponemos en nuestro corazón. Por esto, Dios en
su sabiduría nos llama:

19 El camino de los impíos es como la oscuridad; no saben en qué tropiezan. 20


Hijo mío, está atento a mis palabras; inclina tu oído a mis razones. 21 No se
aparten de tus ojos; guárdalas en medio de tu corazón. 22 Porque son vida a
los que las hallan, y medicina a toda su carne. 23 Sobre toda cosa guardada,
guarda tu corazón; porque de él mana la vida. 24 Aparta de ti la perversidad
de la boca, y aleja de ti la iniquidad de labios. 25 Tus ojos miren lo recto, y
tus párpados enderecen tu camino delante de ti. 26 Pesa la vereda de tus pies,
y todos tus caminos sean ordenados. 27 No te desvíes a diestra, ni a siniestra;
aparta tu pie del mal (Proverbios 4:19-27)

RAZÓN #7: Las letras "positivas" de la música secular desviarán tu mente de las
cosas de Dios, las torcerán, te confundirán, las centrarán en el hombre o
añadirán aflicción a tu vida
A menudo muchos objetan que no toda la música secular habla de cosas malas. Si
bien es cierto que mucha música secular habla de amor por otras personas, o de
amistad, de familia, de alegría, de gratitud u otras cosas bien vistas, lo
aparentemente agradable que expresa la música secular a menudo termina siendo
engañoso hasta cierto punto por varias razones. Proverbios 16:25 ya nos dice: "Hay
caminos que al hombre le parecen rectos, pero que acaban por ser caminos de
muerte".

Muchos de los supuestos mensajes "positivos" y aparentemente "inofensivos" en la


música secular son muy engañosos en realidad, incorrectos en el sentido teológico,
contradictorios a las enseñanzas de Cristo, idólatras del hombre y discretamente
pecaminosos desde el punto de vista cristiano. Esto se debe a que el concepto de
amor secular está sumamente distorsionado (desviado) del concepto bíblico de
verdadero amor agape, y lo mismo ocurre con los conceptos mundanos o torcidos
acerca de la amistad, alegría, gratitud, caridad, esperanza y demás. El
pensamiento "positivo" y la esperanza que siente el mundo se basa en las propias
ideas, en los ideales propios, o simplemente en creencias falsas sobre sí mismo,
sobre los demás, sobre Dios o sobre la vida. Veamos como ejemplos el mensaje de
algunas canciones populares del mundo que encontramos las siguientes líneas:

 "Siempre soñé con tener una reina... y en ti todo lo encuentro" (Los Dandys)
 "Tú eres la niña que me llena el alma" (Cristian Castro)
 "El poder de tu amor me eleva a lo profundo como un globo hasta el
cielo" (Ricardo Montaner)
 "Toda mi vida eres tu" (Juanes)
 "Yo soy lo que tú necesitas" (Alex Sintek)
 "Yo juraría hacer cualquier cosa por ser su dueño" (Enrique Iglesias)
 "Yo te quiero a morir, sobre todas las cosas" (Cristian Castro)
 "Tu eres lo mas bello que jamas me sucedió" (Timbiriche)
 "Tu eres realmente el mas cierto en horas inciertas" (Roberto Carlos)
 "Tú eres mi amor, mi alegría; tú eres mi refugio y mi verdad" (Maná)
 "Ni siquiera los dioses que están arriba pueden separarnos" (One Direction)
 "Yo fui hecho para ti y tú fuiste hecha para mí" (Kiss)
 "Nosotros somos el mundo... somos nosotros los que hacemos que el día
brille más;.. nosotros salvamos las vidas propias... sólo tú y yo" (Michael Jackson)
 "Todo lo que tú quieras puede ser tuyo en cualquier momento" (Jason Mraz)
 "Todo lo que tú quieras lo puedes hacer tú mismo" (Lil Jon)
 "Tú sostuviste mi vida en tus manos, creaste todo lo que soy, me enseñaste
a vivir de nuevo, sólo a ti te importó cuando necesitaba un amigo" (The Stylyistics)
 "Nadie en el mundo ha tenido un amor tan dulce como el mío, nunca hubo
un chico tan verdadero como tú..." (The Carpenters)
 "Tú fuiste el amanecer que rompió con la noche, la promesa de la luz de
mañana, llenando el mundo que me rodea, cuando te tengo, bebé..." (The
Carpenters)
Cuando una persona le canta estas cosas a un amigo, a su pareja o a su padre
o madre, a sí mismos, o a otras personas, ¿de verdad está haciendo algo bueno?
¿en serio está glorificando a Dios? ¿no glorifican más bien al hombre? ¿acaso no se
está idealizando e idolatrando el ser humano, poniéndole en el lugar que sólo le
corresponde a Dios? ¿no se está exaltando a las personas por encima de Dios? ¿sería
correcto si escucháramos a un ministro pronunciar estas palabras en ese sentido
en un púlpito? ¿sería correcto llevar estas canciones a la congregación de los justos?
¿no sería considerado acaso apostasía? Debemos analizar lo que escuchamos por
nuestro Señor "nos ha hecho reyes y sacerdotes para Dios" (Apocalipsis 1:6) y
debemos procurar vivir de esta forma. Nosotros somos el templo de Dios. "El que
es espiritual juzga todas las cosas... porque tenemos la mente de Cristo" (1
Corintios 2:16).

Ahora bien, aquí vienen otras objeciones. Para "analizar todas las cosas", algunos
dirán, primero habría que ver qué es lo que dicen esas cosas que se pretenden
analizar. Pienso que es cierto, Nicodemo dijo con veracidad en defensa de
Jesús: "¿Acaso juzga nuestra ley a un hombre, sin antes oírle y saber lo que
hace?" (Juan 7:51), y este es un caso en que creo que sería útil oír alguna canción
de música secular: oírla para buscar en su letra y analizar, junto a alguien cercano,
qué es lo que dice alguna canción popular. Pero sólamente si buscamos el objetivo
de exponer o comparar lo que dice a la luz de las Escrituras, y tomar una decisión
basado en eso.

Hay una diferencia entre escuchar por gusto y por entretenimiento, y escuchar
para adquirir entendimiento o conocimiento de algo o alguien, como podría ser en
un contexto escolar. Puede que haya momentos en que se puede escuchar una
canción específica no cristiana para aprender acerca de otro idioma, acerca de
una cultura o de algún tema en específico (por ejemplo, la canción del ABC, alguna
canción que explique una situación social, o que explique o testifique algún punto
de reflexión sobre un hecho histórico o social). Es cierto que hay casos en los que
escuchar una canción secular no sería diferente a leer un poema o libro secular en
la escuela o para aprender acerca de cómo piensan otras personas, qué les ha
ocurrido, o con el objetivo de entender el pensamiento de alguien más para
prevenir cómo ayudar (así como Pablo, al pasar por el Areópago observó los objetos
y la inscripción que habían escrito unos griegos, según Hechos 17:23). Sin embargo,
la línea entre escuchar música para conocer y caer en conocimiento vano se puede
hacer delgada en dado momento si no recordamos la importancia de pensar antes
de aceptar, como los de Berea: ¿concuerda esto con las enseñanzas de Cristo, con
el mensaje de las Escrituras?. La información nueva por conocer es interminable
en el mundo y el conocimiento más vasto que el tiempo de una vida. Pero no
podemos tener la pretensión de conocerlo todo, por ello las Escrituras
advierten: "Porque en la mucha sabiduría hay mucha angustia, y quien aumenta el
conocimiento, aumenta el dolor" (Eclesiastés 1:18). Es importante centrarse en
lo importante y recordar que todo razonamiento verdadero o pedacito de verdad
le pertenece a Dios y proviene de Dios, aunque lo haya dicho alguien más. Fue Dios
quien dio a los seres humanos, sean ateos o cristianos o de otras religiones, la
capacidad de crear y razonar, a su imagen y semejanza. Por esto Santiago 1:17
dice: "Toda buena dádiva y todo don perfecto viene de lo alto, desciende del Padre
de las luces".

Pero mucha gente canta o baila canciones sin si quiera reflexionar o pensar en lo
que dicen, y en realidad deberíamos ser conscientes de todo lo que hacemos,
incluyendo la música, teniendo la mente de Cristo en nuestro actos. No sería
coherente con la fe que alguien pase oyendo las canciones seculares del mundo y
lo haga de forma recreativa o por gusto: el hecho de "saber lo que dicen" es una
idea válida en el área de estudio, pero hay que saber diferenciar entre el propósito
y el momento en que es prudente o requerido por nuestras circunstancias (escuela,
trabajo o aprendizaje o tolerancia de nuestro prójimo, por ejemplo), y cuando es
por preferencia, pues de lo contrario se puede volver vanidad y peligro.

Jesús nos advirtió que debemos ser cuidadosos con las palabras que salgan de
nuestra boca: "Yo os digo que de toda palabra vana que hablen los hombres,
darán cuenta de ella en el día del juicio. Porque por tus palabras serás
justificado, y por tus palabras serás condenado" (Mateo 12:36). Cantar pura
música cristiana tiene que ver, no con lo que "nos prohíbe la religión", ni con una
religiosidad escrupulosa humana, sino con un deseo de agradar solamente a Dios y
mantener una piedad que es pura y santa delante de Dios: "Si alguno se cree
religioso, pero no refrena su lengua, sino que engaña a su propio corazón, la
religión del tal es vana. La religión pura y sin mácula delante de nuestro Dios
y Padre es ésta: visitar a los huérfanos y a las viudas en sus aflicciones, y
guardarse sin mancha del mundo" (Santiago 1:26-27).

La música "positiva" del mundo se convertirá en vanidad que transmite un mensaje


humanista: hace al hombre el centro de la vida y el universo y le cierra la puerta
a Dios. Esto no es bueno delante de Dios. La Biblia dice que "El malo, por la
altivez de su rostro, no busca a Dios; no hay Dios en ninguno de sus
pensamientos" (Salmos 10:4). Nosotros no estamos llamados a ser así ni a aprobar
esta actitud. Nuestros pensamientos deben ser Cristo-céntricos. Jesús fue muy
radical al llamarnos: "Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre y madre,
a su mujer e hijos, a sus hermanos y hermanas, y aun hasta su propia vida, no
puede ser mi discípulo. El que no carga su cruz y viene en pos de mí, no puede
ser mi discípulo" (Lucas 14:26). Un llamado radical como este requiere una
respuesta radical.

No hay punto de comparación entre los sentimientos buenos que emanarán de una
relación de comunión con Dios, a los sentimientos carnales en los que Dios se deja
de lado. Que toda la música sea para la gloria de Dios no quiere decir que toda la
música sean himnos o alabanzas de adoración para la congregación, pero sí quiere
decir que toda tiene que darle honra suprema a Dios y portar el mensaje bíblico
de verdad conforme a la voluntad Dios y a Su palabra. Hay canciones cristianas que
hablan acerca del amor fraternal, de familia, de pareja, de la hermandad, hasta
de la amistad, la sociedad u otras cosas, pero la diferencia es que están escritas
desde el punto de vista bíblico y Dios es exaltado y honrado en ellas. La sabiduría
de Dios eclipsa con la sabiduría del hombre. "Porque la sabiduría de este mundo
insensatez es para con Dios; pues escrito está: Él prende a los sabios en la
astucia de ellos. Y otra vez: El Señor conoce los pensamientos de los sabios,
que son vanos. Así que, ninguno se gloríe en los hombres" (1 Corintios 3:19-
21). No esperes encontrar la plena aprobación de Dios en un album dedicado al
entretenimiento secular. No confíes en el ser humano porque hay un peligro
latente para aquél que lo hace (Salmos 146:3; Jeremías 17:5; Miqueas 7:5). La
música secular por naturaleza no te busca incitar a elevar tu pensamiento hacia
Dios. Te recordará cosas del pasado, expresará la frustación de tus problemas
presentes, o hablará de tus deseos para el futuro, pero, en tu condición humana,
no te orillará a rendir tu vida a Dios y a su voluntad.

¿Puede alguien someter todo pensamiento a Cristo cuando canta desde el punto
de vista de una banda mundana? Hermanos, no nos engañemos. La letra de la
música secular hace que pongamos la mira en las cosas del hombre, y eso es un
problema, independientemente de lo que hable. Cuando Pedro le dijo a Jesús que
tuviera compasión de sí mismo (que pensara en sí mismo, que se enfocara
solamente en sí mismo y no en la cruz), Jesús "...volviéndose Él, dijo a Pedro:
¡Quítate de delante de mí, Satanás! Me eres piedra de tropiezo; porque no
estás pensando en las cosas de Dios, sino en las de los hombres" (Mateo 16:23).
Si Jesús hizo esto con Pedro tan solo porque este se enfocó en la naturaleza de
hombre meramente, ¿porqué es que tantos creyentes aceptan y escuchan gozosos
las piedras de tropiezo que representa la música humanista secular? "¡Ay del
mundo por sus piedras de tropiezo! Porque es inevitable que vengan piedras
de tropiezo; pero ¡ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo!" (Mateo
18:7)

La Biblia nos dice que, como cristianos, nuestra mirada espiritual debe
estar fija, inamovible, y firme en la roca de Jesucristo, el autor y consumador de
la fe (Hebreos 12:2). Deuteronomio 32:21 dice que Dios dijo los desobedientes
antiguos: "Ellos me han provocado a celo con lo que no es Dios; me han irritado
con sus ídolos". No buscar a Dios en todas las cosas que hacemos, escuchamos,
cantamos o aceptamos es algo dañino para el cristiano porque la Biblia nos dice
que debemos someter todo pensamiento a la obediencia de Cristo.
El Señor es un fuego consumidor, celoso por su pueblo. Todo pensamiento debe
estar sujeto a la obediencia de Cristo (2 Corintios 10:5). La música secular tiende
a distraer o desviar nuestra atención de las cosas de Dios. Deuteronomio 32:31
nos dice: "En verdad, su roca no es como nuestra Roca; incluso nuestros mismos
enemigos así lo juzgan". ¿Porqué entonces hay creyentes que se aferran al
moralismo secular de música que no reconoce la autoridad de Cristo?

Una de las causas es que muchos desconocen el peligro del moralismo humanista.
¿Qué tiene de malo hablar de moral? Por sí mismo, no tiene nada de malo hablar
de cosas buenas, pero las cosas son más complejas de lo que parecen y hay dos
peligros potenciales del moralismo secular: el primero es dejar de reconocer a
Dios como el Autor de la moral y el bien. La película cristiana "El que cambia los
tiempos" trata este tema a fondo: en resúmen, cuando a un buen mensaje moral
se le quita la autoridad espiritual de Cristo, el mensaje se convierte en humanismo,
y el mero humanismo secular es muy peligroso porque se basa en la pretensión de
que el hombre puede ser bueno y correcto sin la necesidad de acudir a Dios. El
humanismo te dice: "Tú puedes ser bueno y guiar tu propia vida por ti mismo, sin
necesidad de que Dios intervenga o te tenga que decir qué hacer".
No obstante, la Biblia dice que Dios es el que ha escrito el bien moral en nuestro
corazón (Romanos 2:15), y que de Él es de donde procede todo lo bueno (Santiago
1:17). Cuando el hombre en su arrogancia quiere desprenderse de Dios y quiere
hacer cosas "buenas" según su propia sabiduría, cae en el mismo pecado que
cometieron nuestros antepasados al comer el fruto de la sabiduría del bien y el
mal (Génesis 3:6).

No es bueno dejar de lado el mandato y la advertencia de Dios. Isaías dijo: "¡Ay


de los que llaman al mal bien y al bien mal, que tienen las tinieblas por luz y
la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo! ¡Ay
de los sabios a sus propios ojos e inteligentes ante sí mismos!" (Isaías 5:20-21).
La Biblia nos exhorta: "Confía en el SEÑOR con todo tu corazón, y no te apoyes
en tu propio entendimiento. Reconócele en todos tus caminos, y Él enderezará
tus sendas" (Proverbios 3:5).
Sin importar las intenciones, nuestras buenas obras, separadas de Dios, son vistas
como "trapos de inmundicia" ante Dios (Isaías 64:6). Tratemos de limpiar una mesa
con un trapo lleno de suciedad, ¿y qué pasará? ¿acaso no embarraremos más la
mugre? Así es el moralismo humanista y secular. Piensa que hace bien o que actúa
con justicia al tratar de usar sus trapos para limpiar la mesa, pero su trapo está
tan sucio, que solamente esparce más la suciedad. El mensaje "de bien" o el
mensaje "positivo" de la música secular es así: se convierte en un insípido mensaje
humanista, seco y carente del Espíritu Santo. En vez de edificarnos en la fe, es
probable que nos desvíe más porque si llegamos a creer que una persona puede
ser buena y estar en lo correcto a pesar de que no está con Dios, terminarás
enfriándote; poco a poco habrá más laxitud y menos convicciones en tu corazón;
sentirás que Dios no es tan necesario todo el tiempo o que no es tan importante
estar siempre con Él (sentirás que no toda la música debe ser para gloria de Él).

Algunos dirán que aunque alguna música, no estaría mal escuchar a algunos artistas
que sí se consideran creyentes, porque habla de esperanza y de salir adelante o
porque los compositores o cantantes son creyentes. Ahora bien, en caso de que así
lo sean, habrá que analizar cada caso. Sin embargo, no se nos olvide que hasta los
demonios creen y tiemblan. Decir que creemos en Dios no nos hace creyentes.
Hasta los servidores de Satanás pueden disfrazarse de servidores de Cristo, "y no
es de extrañar, pues aun Satanás se disfraza como ángel de luz. Por tanto, no
es de sorprender que sus servidores también se disfracen como servidores de
justicia; cuyo fin será conforme a sus obras" (2 Corintios 11:14-15).

Jesús dijo que sólo hay un camino angosto, por ello exhortó: "Permaneced en mí,
y yo en vosotros. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo si no
permanece en la vid, así tampoco vosotros si no permanecéis en mí. Yo soy la
vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mí y yo en él, ése da mucho
fruto, porque separados de mí nada podéis hacer. Si alguno no permanece en
mí, es echado fuera como un sarmiento y se seca; y los recogen, los echan al
fuego y se queman" (Juan 15:5).

No podemos vivir con un oído caliente en el Señor, y un oído frío en el mundo. No


podemos distraernos del Reino de Dios dormirnos o desmayarnos. El Señor nos dice:
"¡Velad!" En el Espíritu Santo, no dejemos de estar despiertos a las cosas de
Dios. Jesús también advirtió: "Se levantarán muchos falsos profetas, y a muchos
engañarán. Y debido al aumento de la iniquidad, el amor de muchos se
enfriará. Pero el que persevere hasta el fin, ése será salvo" (Mateo
24:12). Debemos "buscar primeramente el Reino de Dios" en todo. A los tibios
Dios les dice:

"Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o
caliente! Así, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi
boca... te aconsejo que de mí compres oro refinado por fuego para que te
hagas rico, y vestiduras blancas para que te vistas y no se manifieste la
vergüenza de tu desnudez, y colirio para ungir tus ojos para que puedas ver.
19 `Yo reprendo y disciplino a todos los que amo; sé, pues, celoso y
arrepiéntete. 20 `He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz
y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo. 21 `Al vencedor,
le concederé sentarse conmigo en mi trono, como yo también vencí y me senté
con mi Padre en su trono. 22 `El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a
las iglesias.'" (Apocalipsis 3:15-16).

El segundo peligro potencial del humanismo secular es la hipocresía. ¿Cómo puede


el inconverso transmitir un buen mensaje, si su visión y su oído están nublados por
la nube del pecado? Jesús dijo:

"15 Cuídense de los falsos profetas, que vienen a ustedes con vestidos de ovejas,
pero por dentro son lobos rapaces. 16 Por sus frutos los conocerán. ¿Acaso se
recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos? 17 Así, todo árbol bueno da
frutos buenos; pero el árbol malo da frutos malos. 18 Un árbol bueno no puede
producir frutos malos, ni un árbol malo producir frutos buenos. 19 Todo árbol
que no da buen fruto, es cortado y echado al fuego. 20 Así que, por sus frutos
los conoceréis. 21 No todo el que me dice: ``Señor, Señor, entrará en el reino de
los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. 22
Muchos me dirán en aquel día: ``Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y
en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
23 Y entonces les declararé: ``Jamás os conocí; Apártense de mí, todos los que
practican la iniquidad." (Mateo 7:15-23)

"Al impío Dios le dice: ¿Qué derecho tienes tú de hablar de mis estatutos, y de
tomar mi pacto en tus labios? Pues tú aborreces la disciplina, y a tus espaldas
echas mis palabras" (Salmos 50:16). Jesús también le dijo a unos
fariseos: "¡Camada de víboras! ¿Cómo pueden hablar cosas buenas siendo
malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca" (Mateo 12:34).

Jesucristo dijo: "Aquél que peca es esclavo del pecado" (Juan 8:34). La Biblia
también dice: "Hijos míos, que nadie os engañe; el que practica la justicia es
justo, así como El es justo. El que practica el pecado es del diablo, porque el
diablo ha pecado desde el principio. El Hijo de Dios se manifestó con este
propósito: para destruir las obras del diablo. Ninguno que es nacido de Dios
practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él. No puede
pecar, porque es nacido de Dios." (1 Juan 3:8-9). "En esto se reconocen los hijos
de Dios y los hijos del diablo: todo aquel que no practica la justicia, no es de
Dios" (1 Juan 3:10). Si la música secular está hecha por gente que practica el
pecado, y nosotros la escuchamos, ¿no estamos entonces escuchando música de
los hijos del diablo?

Es cierto que la Biblia dice que busquemos pensar en todo lo bueno: “Todo lo que
es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable,
todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza,
en esto pensad” (Filipenses 4:8). Pero hay dos preguntas que surgen en este
contexto. En primer lugar, ¿pueden las letras de una banda secular ser totalmente
verdaderas, nobles, justas, puras, amorosas, admirables, excelentes, y dignas de
alabanza? Si los cristianos debemos vivir “llevando cautivo todo pensamiento a
la obediencia a Cristo”, la segunda interrogante es: ¿cumple la música secular
este estándar? ¿es "digno de alabanza" el sacar a Dios de nuestros pensamientos?
¿es "digno de alabanza" que los músicos (con tal de ganar o mantener su
popularidad) eviten pensar y hablar de Él ante los demás? ¿es "digno de alabanza"
promover, consumir y apoyar música mundana que se desentiende de Dios, como
si Él no importara? No nos engañemos. Estamos llamados a tener la mente de
Cristo en todo lo que pensamos y Él debe ser el primero y el último en nuestras
vidas porque quien se avergüence de Él, también estará avergonzado en Aquél día.

Si Dios quiere atraernos hacia Él y nosotros endurecemos nuestro corazón yéndonos


tras de otros personajes, ¿qué tanto le estamos amando? En esto Carl Gustav Jung
acertó al decir: "Me parece que todos mis pensamientos circulan alrededor de
Dios como los planetas lo hacen alrededor del sol, y son irresistiblemente
atraídos por Él. Siento que sería el mayor de los pecados si yo opusiera
resistencia alguna a esta fuerza". Con amor les exhorto, hermanos,
¡examinémonos a nosotros mismos!

Jesús, cuando estaba ante los fariseos, les dijo: "os conozco, que no tienen el
amor de Dios en vosotros. Yo he venido en nombre de mi Padre y no me recibís;
si otro viene en su propio nombre, a ése recibiréis. ¿Cómo podéis creer, cuando
recibís gloria los unos de los otros, y no buscáis la gloria que viene del Dios
único?" (Juan 5:42-44). Jung admitió que “el individuo que no tiene puesta su
esperanza en Dios no puede resistir por sus propios medios los ataques físicos y
morales del mundo. Para lograrlo necesita la evidencia de la experiencia interna
y trascendente, que es la única que puede protegerle de ser absorbido
irremediablemente por la masa. Una mera comprensión intelectual o hasta la
ética... carecen del empuje de la convicción religiosa, ya que es meramente
racional”

Estamos llamados a pensar en lo que es bueno, pero aprendamos a diferenciar


entre lo bueno y lo malo, según el estándar de Dios. Los ateos y agnósticos ignoran
a Dios en sus pensamientos y esto no es "digno de alabanza". Si somos cristianos,
no nos debe seguir gustando música que deliberadamente ignora a Dios. Los
gustos pueden ser moldeados por la decisión de creer o no creer en alguien. Por
tanto, Martin Luther King Jr. dijo:

"El tipo de ateísmo más peligroso no es el ateísmo teórico, sino el ateísmo práctico,
que es el de la clase más peligrosa; y el mundo (incluso la iglesia) está lleno de
gente que da servicio de labios a Dios y no lo sirve con su vida. Y siempre hay
peligro de que vayamos a hacer que parezca externamente que creemos en Dios,
cuando internamente no lo hacemos. Decimos con nuestras bocas que creemos en
Él, pero vivimos nuestras vidas como si nunca hubiera existido. Ese es el peligro
siempre presente que hay que confrontar en la religión. Ese es un ateísmo
peligroso... Hemos adoptado en el mundo moderno una especie de una ética
relativista... hemos aceptado la actitud de que el bien y el mal son meramente
relativos a nosotros... La mayoría de la gente no puede defender sus convicciones,
porque puede ser que la mayoría de la gente no lo está haciendo: [piensan] "todo
el mundo lo está haciendo, por lo tanto ha de estar mal", y "como todo el mundo
lo está haciendo, han de estar en lo correcto."

Veamos, escuchemos y hagamos caso de aquello que nos edifica en Cristo, no de


lo que nos guía hacia el mundo. Cuidemos nuestra relación con el Señor,
caminemos siguiendo sus pisadas y fortalezcámonos en nuestra devoción total a
Él. Como en la escuela, si el Maestro está enseñando y nosotros nos distraemos
constantemente, escuchando a los demás en vez de al Maestro, cuando venga el
momento de la prueba, no seremos aprobados. El enemigo siempre busca formas
de desviar nuestra atención lejos de Jesús. La música secular hace que pongas tu
mira en las cosas del mundo; te distrae y roba tu atención por Dios y disminuye tu
afecto por Él, para aumentarlo en las cosas del mundo. Pero el Señor nos dice que
podemos y tenemos que fijar nuestros ojos en Él, para aprender de Él.

Juan Bautista dijo que es necesario que nosotros "disminuyamos" y Él "aumente".


Pablo dijo que hasta que sólo vive Él en nosotros. Es lo mejor que podemos hacer
y si lo hacemos, daremos mucho fruto y llegará un momento en que Él nos librará y
se llevará toda duda, incertidumbre, titubeo, infirmeza, aflicción o temor. La
Biblia nos dice: "Si habéis, pues, resucitado con Cristo, buscad las cosas de
arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las
cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida
está escondida con Cristo en Dios" (Colosenses 3:1-3).

Jesús dijo: "el que entra por la puerta, es el pastor de las ovejas. A éste le
abre el portero, y las ovejas oyen su voz; llama a sus ovejas por nombre y las
conduce afuera. Cuando saca todas las suyas, va delante de ellas, y las ovejas
lo siguen porque conocen su voz. Pero a un desconocido no seguirán, sino que
huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños" (Juan 10:2-5). Si tu
objetivo primordial como discípulo es dedicar tu corazón y mente a seguir y
conocer más a Jesucristo, entonces la Escritura te instruye a remover de tu vida
toda influencia que te distraiga de esa meta.

RAZÓN #8: La música secular promueve un estilo de vida mundano y


pecaminoso
La objeción y el rechazo que muchos cristianos sentimos cristianos a tantos estilos
de música modernos no siempre tiene que ver con la letra o la melodía, sino con
las prácticas y hábitos inherentemente relacionados con diversos intérpretes
través de sus conciertos, videos musicales y presentaciones. Los subgéneros
musicales están plagados de dichas prácticas, que pueden ir desde el
comportamiento inmoral de los músicos, hasta la vestimenta, la exageración
extrema de sonidos, las insinuaciones sexuales de doble sentido, la violencia, los
bailes sensuales y las actitudes o hábitos que promueven los músicos, son conocidos
como subculturas musicales.

Por poner ejemplos, en el rock pesado, hardcore o heavy metal, se tiene la


práctica del headbanging (movimiento violento con la cabeza de arriba a abajo),
el uso de gestos como la mano cornuda, símbolos satánicos como la cruz invertida,
el uso de tatuajes o piercings por todo el cuerpo, la destrucción de objetos en el
escenario y la forma de baile violento llamado moshing en el cual los participantes
corren en círculos golpeando a los que están a su lado. En la música gótica, es
común la constante evocación de escenas de muerte, sangre, calaveras, espíritus
y sentimientos depresivos. En la música punk, los cortes de cabello largos o en
picos como símbolo de rebeldía, la técnica del screamo (que es una forma agresiva
de gritar o cantar, raspando la voz, para asemejar al sonido de un demonio), la
promoción del anarquismo civil, la condena de la sociedad y la violencia en
general. En la música pop, el uso de prendas reveladoras y bailes eróticos que
incitan la lascivia. En el rock, la tendencia de diversos cantantes a presentarse de
forma alcoholizada o drogada y llevar un estilo de vida relacionado con la
promiscuidad y la desobediencia. En el reggae, el uso de la marihuana y el cigarro,
además del rastafarismo. En el raggeaton, el uso de lenguaje en doble sentido y
sonidos evocativos a la sensualidad o sugestivos de connotaciones sexuales. En el
hip hop, los bailes sensualisados como dab, head spin y breakdance. En el rap, la
tendencia general a cantar con una actitud altiva, desafiante, retadora o
intimidatoria. En el ska, la práctica de skanking, que es un baile frenético en el
que los participantes se avientan entre sí indistintivamente, como símbolo de la
idealización de la anarquía y oposición a la sociedad y a las autoridades. En la
cumbia, el baile con exagerado movimiento de caderas y la poca ropa sugestiva
con bailes llenos de insinuaciones sexuales. En la música electrónica, los bailes del
trance psicodélico, la música acid house, y el estilo de vida fiestero o parrandero
asociado al género. Y así sucesivamente. . .

Un claro ejemplo de cómo los músicos influyen en el comportamiento social es


gran parte de los músicos más del rock clásico que fueron portavoces del
movimiento hippie de los 70's, promoviendo a través de su música el liberalismo
sexual y la promiscuidad, el arte psicodélico, además de la experimentación
con drogas y el uso y abuso del cigarro y el alcohol. Ya sea por presión social o por
moda, muchos jóvenes, en cada época, tienden a imitar las prácticas promovidas
por los músicos, a veces para llamar la atención, para ser aceptados en dado grupo
social, o supuestamente declarar su inconformidad a la sociedad. Sin embargo,
muchos no se dan cuenta que al hacer esto, perpetuan y sostienen el mismo
sistema maligno que ha mantenido a su sociedad en cadenas. "¿Me ofenden a mí?-
-declara el SEÑOR-- ¿No es a sí mismos que se ofenden para su propia
vergüenza?" (Jeremías 7:19). Cualquier clase música secular que te lleve a pensar,
copiar o involucrarte en cosas que no glorifican a Dios, debería ser evitado por
convicción y amor a Dios, no por que alguien te imponga una prohibición.
El cristiano debe ser cuidadoso de no confundir el inofensivo uso de ciertos
instrumentos o melodías con subculturas engañosas que la industria musical
moderna y los cantantes populares han creado e impregnado alrededor de un estilo
musical en particular. "Sabemos que somos de Dios, y que todo el mundo yace
bajo el poder del maligno" (1 Juan 5:19). De igual forma, debemos ser cuidadosos
de no ver ni aceptar música con videos musicales o arte de álbum que estén llenos
de este tipo de cosas, porque "La lámpara de tu cuerpo es tu ojo; cuando tu ojo
está sano, también todo tu cuerpo está lleno de luz; pero cuando está malo,
también tu cuerpo está lleno de oscuridad. Mira, pues, que la luz que en ti hay
no sea oscuridad" (Lucas 11:34-35).

Jesús mismo os exortó: "Si tu mano o tu pie te es ocasión de pecar, córtatelo y


échalo de ti; te es mejor entrar en la vida manco o cojo, que teniendo dos
manos y dos pies, ser echado en el fuego eterno. Y si tu ojo te es ocasión de
pecar, arráncatelo y échalo de ti. Te es mejor entrar en la vida con un solo
ojo, que teniendo dos ojos, ser echado en el infierno de fuego" (Mateo 18:9).
¿Porqué entonces no hacemos caso a Jesús y cortamos de raíz el problema y
dejamos la radio secular, la música secular, y bloqueamos los anuncios seculares
del Internet con AdBlock?
La Biblia dice que debemos evitar a la gente que practica estas cosas: "Debes
saber esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles. Porque los
hombres serán amadores de sí mismos, avaros, jactanciosos, soberbios,
blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, irreverentes, sin amor,
implacables, calumniadores, desenfrenados, salvajes, aborrecedores de lo
bueno, traidores, impetuosos, envanecidos, amadores de los placeres en vez
de amadores de Dios; teniendo apariencia de piedad, pero habiendo negado
su poder; a los tales evita" (1 Timoteo 3:1-5)

Este consejo, por supuesto, aplica también a otros tipos de entretenimiento


además de la música, por ejemplo, muchas películas, programas de televisión,
libros, novelas y material disponible en Internet. Los cristianos enfrentaremos
diariamente una guerra espiritual contra tales cosas, pero se nos promete
que todo lo podemos a través de [Cristo] quien nos fortalece (Filipenses 4:13).
Lo que debemos hacer es no imitar las costumbres vanas de los pueblos
y guardarnos sin mancha del mundo (Santiago 1:27). Se honesto contigo mismo y
con Dios. ¿Tus preferencias musicales entorpecen o aumentan tu amor por Él?
RAZÓN #9: La música secular que no entiendes no es de edificación ni da de
buen testimonio de tu fe

Por el simple hecho de que la música secular no tiene el mensaje de Cristo, carece
de la luz que Cristo nos mandó a brillar. No contiene la sal que Cristo nos llamó a
tener. Cristo nos llamó a ser la luz y la sal en este mundo, pero la música secular
no lo tiene. Si la música no nos guía a la luz, nos guía a la vanidad o a nuestras
narices, pero no a Dios. "Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se ha
vuelto insípida, ¿con qué se hará salada otra vez? Ya para nada sirve, sino
para ser echada fuera y pisoteada por los hombres. Vosotros sois la luz del
mundo. Una ciudad situada sobre un monte no se puede ocultar; ni se enciende
una lámpara y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra
a todos los que están en la casa. Así brille vuestra luz delante de los hombres,
para que vean vuestras buenas acciones y glorifiquen a vuestro Padre que
está en los cielos" (Mateo 5:13-16).
Algunos creyentes podrían argumentar que las letras seculares no les afectan
porque las letras que contienen están en otro idioma (por ejemplo, inglés), y que
por lo tanto, no serán influidos por sus pensamientos en ellas. Otros podrían decir
que no le ponen atención a las letras, o que ni si quiera entienden lo que dicen.
Este tipo de razonamiento no toma en cuenta que, en primer lugar, el hecho de
que el escuchar a músicos seculares es una forma de consumir, popularizar, dar a
conocer, beneficiar económicamente y/o aprobar culturalmente lo que esos
músicos representan. No importa si tú no entiendes la letra. De todas formas los
estás apoyando directamente o indirectamente y si otra persona (un familiar tuyo,
un amigo o un nuevo creyente que sabe que tú eres creyente y sí entiendo) te
escucha y te ve consumiendo esa música, y por causa de ello, él la consume y se
desvía, entonces en vez de guiarlos a Cristo, los habrás guiado al mundo, y ellos
habrán tropezado en su camino a Dios, en vez de acercarse a Él. Tengamos cuidado
de no promover a músicos seculares porque pueden ser un obstáculo al Evangelio,
pues Jesús advirtió que la muerte es un mejor resultado que hacer tropezar a un
pequeñito de Dios (Mateo 18:6).

Debemos aprender a distanciarnos del material que nos corrompe moralmente a


nosotros, pero también debemos alejar aquello que pueda corromper o desviar a
nuestros seres queridos, si es que realmente los amamos. Aunque todo el mundo
se vaya tras los ídolos, debemos estar dispuestos a decir: "Pero yo y mi casa
serviremos a Dios".

¿Qué es lo que estamos alimentando en nuestra mente y en nuestro hogar? ¿La


palabra de Dios, o la palabra del hombre? Si hiciéramos una analogía, veríamos
que hay una lucha entre la carne y el espíritu. La carne se alimenta de oscuridad,
pecado y corrupción. El espíritu de la vida, esperanza y amor que proviene de Dios.
¿Estamos alimentando la carne, o estamos alimentando el espíritu? La batalla
entre el espíritu y la carne es ganada por aquél a quien alimentamos más. Si la
carne fuera un perro que quisiéramos matar, infaliblemente moriría si lo dejamos
de alimentar. Así con la música secular. La música secular alimenta sólo nuestra
carne, pero nos deja vacíos en el espíritu. En cambio la música cristiana que
contiene palabra de Dios edifica al oyente y atrae nuestros pensamientos hacia Él.

¿Por qué entonces tantos jóvenes dentro de las iglesias ni si quiera pueden recitar
de un versículo específico básico de la Biblia de memoria, pero se acuerdan palabra
por palabra de las canciones más escuchadas en el mundo? Examinémonos a
nosotros mismos y cuidemos nuestro testimonio, que Dios nos ve, y muchos
también voltean a vernos para ver si realmente hay una diferencia entre nosotros
y el mundo. No dejemos que el nombre de Dios sea blasfemado por nuestra tibieza.
Seamos la luz que Cristo nos ha llamado a ser.

El escuchar los músicos seculares denota falta de devoción, entrega o falta de


amor por Dios. ¿Donde está el temor de Dios? ¿Cuál es el temor de Dios? El temor
de Dios es caminar con Dios y apartarse del mal. En la música secular no hay temor
de Dios. Nunca nadie se ha convertido a Cristo gracias a una canción de naturaleza
secular.

Hoy en día, muchos jóvenes han adoptado música secular, e incluso algunos líderes
cristianos en la iglesia la han introducido a las congregaciones. Muchas reuniones
"cristianas" se han vuelto una copia de conciertos seculares en todos los sentidos e
incluso hay algunos creyentes que dicen acudir a conciertos seculares o tener el
deseo de hacerlo. Amós 3:3 nos dice: "Andarán dos juntos, si no estuvieren de
acuerdo?"

Lo correcto sería exhortar a los creyentes, ministros, padres y familiares, y líderes


religioso que han tenido laxitud en este aspecto a darse cuenta de quién está
influyendo a sus hijos. Si alguien llegara a su casa intentando vender películas
pornográficas, drogas o libros inmorales a sus hijos, ¿permitirían que esa persona
entrara y les mostrara ese material? Si no lo hacen con esas personas,
¿entonces porqué permiten despreocupadamente que la música secular entre a la
vida de sus hijos? Tómense el tiempo de instruir a sus seres queridos, analizar y
explicar el porqué no conviene escuchar música secular, y ser de ejemplo.

Por su puesto que Dios ama a todos los músicos seculares y Él envió a su Hijo
Jesucristo a dar su vida por todos. Por su puesto que Él les dio a ellos la habilidad
de tocar y vivir, y si no fuera por Dios, no podrían hacerlo. Sin embargo, la rebelión
de esos músicos ha sido usada por el enemigo para promover canciones que han
devastado el alma de millones de personas en el último siglo de nuestra historia.
Amemos a las personas, pero no a sus obras malas, porque Dios amó al mundo
entero, pero también vio que sus obras eran malas. Dios ama a todos los seres
humanos, pero Dios no acepta el pecado. Dios nos llama a amar al prójimo, pero
sin comprometer la verdad. Amemos lo suficiente a Dios para no aceptar de ellos
el estilo de vida pecaminoso del cual Cristo nos vino a salvar.

Jesucristo nunca apoyó ni sustentó el comportamiento inmoral o injusto. Él amó a


las personas, pero les dijo que "no pecaran más". Él amó a los pecadores, influyó
en ellos y los llamó al arrepentimiento. Pero en el mundo, son los pecadores los
que quieren influir en nosotros y llamarnos a seguir pecado. No nos engañemos. En
la relevancia cultural que tenemos, no dejemos que se pierda nuestra convicción
de justicia.

Algunos se excusan diciendo que los cristianos que hagan música secular podrán
usar la fama para llamar la atención y atraer la atención a Cristo, pero esto no es
el método de Cristo. Numerosos ejemplos fallidos demuestran que cuando un
creyente pretende andar en los caminos del mundo para ser impacto, termina
siendo impactado por el mundo. Al final, llama la atención de la gente a sí mismos,
pero no a Cristo. ¿Cómo puede alguien que no vive la cruz guiar a otra persona a
la cruz de Cristo? Los cristianos que convivan o hablen con esos músicos en lugares
de influencia podrán testificarles de Dios y así ellos se podrán arrepentir, pero si
una estrella de pop o cualquier músico realmente se ha convertido a Cristo y
realmente quiere ser un discípulo, tal persona experimentará un verdadero cambio
en su vida y querrá dejar la música secular atrá porque "Si alguno está en Cristo,
nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí, son hechas nuevas" (2
Corintios 5:17). El músico Ricardo Ceratto es un ejemplo de esto, pues después de
haber entregado su vida a Jesús, no solo dejó de cantar sus antiguas canciones,
sino que "quitó de la circulación del mercado sus discos de música secular", como
alguien que no tuvo miedo de perder fans ni perder la aprobación del público, y
desde entonces quiso solamente amar a Dios y ganar almas para Cristo.

Jesús dejó su trono y riqueza en el cielo para venir a este mundo y vivir como
nosotros para dar su vida entera en la cruz. ¿Porqué nosotros habríamos de
resistirnos a dejarlo todo atrás y entregarle absolutamente todo? Si decides
confiarle todo y dejarlo todo al Señor, deberás dejar de escuchar música secular
por gusto y si lo haces, por experiencia te digo que será una de las decisiones más
trascendentales en tu vida cristiana, y verás que te ayudará a afirmará tu fe y a
tener una comunión más firme clara y continua con nuestro Señor Jesucristo.

RAZÓN #10: La industria musical secular está altamente influida por el


satanismo y el ateísmo
Aunque no estoy diciendo que todos los músicos seculares sean satanistas ni
tampoco todas las canciones seculares son satánicas o ateas, el hecho de que una
gran cantidad de bandas y cantantes seculares famosos han expresado
abiertamente sus muestras de odio, rechazo o burla al cristianismo es plenamente
conocido para todo el que está familiarizado con la industria musical y cualquiera
que haya explorado más que superficialmente la música contemporánea. Mucha,
MUCHÍSIMA de la música moderna, sin lugar a dudas, incluye letras que se oponen
descaradamente y abiertamente se levantan con altivez "contra todo lo que se
llama Dios o es objeto de culto", pero especialmente, con un sentimiento de odio
u hostilidad hacia lo cristiano a las enseñanzas de Cristo.

Si revisáramos la música de los artistas más vendidos de todos los tiempos, es


comprobable encontrar mensajes satanistas en canciones de una gran
mayoría: The Beatles, Rihana, Lady Gaga, Madonna, Led Zepellin, The Rolling
Stones, Elvis Presley, Pink Floyd, Eagles, David Bowie, AC/DC, Black Sabbath,
Marilyn Manson, Bill Haley, Jerry Lee Lewis, Robert Johnson, Van Haley, Kiss, Hall
& Oates, Fleetwood Mac, Carlos Santana, Jimmy Hendrix, Prince, Sting, Iron
Maiden, Nirvana, Madonna, U2, Metallica, Tupac, Red Hot Chilli Peppers, Duran
Duran, etc. No podemos detenernos a explicar cada caso, pero pruebas de este
hecho son sustentadas en un excelente documental de 10 horas titulado "They Sold
Their Souls For Rock and Roll" (Vendieron sus almas por el Rock & Roll) que, a
través de una investigación exhaustiva y pruebas tangibles, informa de forma muy
precisa y detallada la influencia abiertamente satánica en muchísimos artistas
famosos. Si no lo crees, te reto a ver el documental e investigar más al respecto,
aunque hay también otros videos documentales y sitios web que documentan estos
hechos. El que busca encuentra. La influencia es innegable. En innumerables
tratados electrónicos también se hace un recuento de la influencia que la
masonería y la secta luciferina de los illuminati ha promovido en círculos de
influencia y poder de la industria musical desde hace media década, a través del
uso de publicidad, simbologías, diseño, producción y propaganda mental con lo
que buscan desensibilizar a la gente para ganar simpatizantes y establecer
eventualmente un Nuevo Orden Mundial conforme a las profecías del libro de
Apocalipsis.

Lucifer es un experto en la música; originalmente era un ángel cuyo papel en el


cielo , según la interpretación teológica, estaba relacionado con esta actividad
(Ezequiel 28:13). No es de extrañarse que mucha de la industria de la música
secular moderna todavía tenga una agenda anticristiana: resistirse a la santidad
de Dios, promover el gobierno del anticristo en el mundo e ideología antagonista
a la moral bíblica. Su táctica ha sido infiltrarse en los medios e comunicación más
influyentes, estar a cargo de la producción de muchos álbumes y artistas nuevos,
contar con el apoyo y difusión de la prensa liberal, desensibilizar a la gente sobre
el pecado, mentirles acerca de Dios y presentarles una forma satánica de vivir en
la que cada quien "hace lo que quiere".
Sabiendo esto, tenemos que tomar una decisión. La Biblia dice "No podéis beber
la copa del Señor y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa
del Señor y de la mesa de los demonios. ¿O provocaremos a celos al Señor?
¿Somos, acaso, más fuertes que El? Todo es lícito, pero no todo es de
provecho. Todo es lícito, pero no todo edifica" (1 Corintios 10:22-23).

RAZÓN #11: No hay ni habrá música secular en el cielo, en la presencia de Dios

En Apocalipsis 5:8-14 se describe la música agradable ante el Trono de Dios:

"Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro animales y los veinticuatro
ancianos cayeron sobre sus rostros delante del Cordero, teniendo cada uno
arpas, y copas de oro llenas de perfumes, que son las oraciones de los santos
y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro, y de abrir
sus sellos; porque tú fuiste muerto, y nos has redimido para Dios con tu
sangre, de todo linaje y lengua y pueblo y nación; y nos has hecho para nuestro
Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos en la tierra."

En Apocalipsis 15:2-4 también se narra otra adoración celestial con música, de


aquellos que alcanzarán victoria sobre la Gran Tribulación:

"Y vi así como un mar de vidrio mezclado con fuego; y vi los que habían
alcanzado la victoria de la bestia, y de su imagen, y de su marca, y del número
de su nombre, estar sobre el mar semejante al vidrio, teniendo las arpas de
Dios. Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero,
diciendo: Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso. Tus
caminos son justos y verdaderos, Rey de los santos. ¿Quién no te temerá, oh
Señor, y engrandecerá tu Nombre? Porque tú sólo eres Santo; por lo cual todos
los gentiles vendrán, y adorarán delante de ti, porque tus juicios son
manifestados."

Hay creyentes que piensan que en ahora que están en la tierra, la música del cielo
es algo opcional, pero el Señor nos llama a vivir en completa santidad desde ahora,
y a orar y buscar que, "Sea Su voluntad en la tierra, como en el cielo". El hecho
de que en el cielo no habrá música secular es inferido a partir de Apocalipsis 21:27,
que nos dice que en la ciudad celestial "jamás entrará en ella nada inmundo, ni
el que practica abominación y mentira".

Jesús dijo: "En verdad os digo: todo lo que atéis en la tierra, será atado en el
cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo". Si nuestro
corazón está atado a las cosas terrenales (como la música secular) ante Dios, así
es como se ve ante el Padre. Pero si nuestro corazón está amarrado a las cosas
celestiales (como la música para Dios y acerca de Dios) asimismo es como nos ve
el Padre. El Padre nos está contemplando en toda la tierra y está atento a nuestras
obras, y Él conoce a nuestro corazón. "El SEÑOR mira desde los cielos; El ve a
todos los hijos de los hombres. Desde el lugar de su morada El observa a todos
los habitantes de la tierra; Él, que modela el corazón de cada uno de ellos;
Él, que todas las obras de ellos entiende" (Salmos 33:13-15). "Porque los ojos
del SEÑOR recorren toda la tierra para fortalecer a aquellos cuyo corazón es
completamente suyo" (2 Crónicas 19:6).

RAZÓN #12: La música cristiana es mucho mejor que la música secular y tan
versátil como la música del mundo

El último argumento a refutar es el de las personas que dicen que no quieren dejar
de escuchar música secular porque piensan que la música cristiana nunca podrá
llegar a ser "tan buena" como la del mundo. Seré directo: quienes piensan así, es
porque han sobrevalorado a sus ídolos musicales pensando que estos son más
talentosos que lo que cualquier músico cristiano pueda ser. Yo mismo fui así, y casi
pensaba que grupos como Los Beatles habían inventado la música, pero esto es una
mentira diabólica. Marcos Barrientos tiene razón al afirmar que “la excusa de
buscar calidad en la música secular ya no es válida”.

Uno de los problemas principales es que muchos NO conocen la gran variedad de


música cristiana que ha sido creada y no creen que un músico cristiano poco
conocido pueda ser más hábil que un músico secular mundialmente famoso. Sin
embargo, popularidad no es sinónimo de talento. Si un arrogante músico que no
tiene a Cristo en su corazón pudo llegar a tocar un instrumento de forma
extraordinaria, ¿cuánto más podrá hacer un humilde músico que tiene a Cristo de
su lado? El Señor sólo nos pide buscar con fe, en humildad, su Voluntad, Su gloria,
y primero SU Reino, y todo lo demás será añadidura. La Biblia dice que es mejor
un día en la casa del Señor, que mil años lejos de ella, y en este sentido tal vez
también deberíamos pensar que es mejor una alabanza cristiana escrita con el
corazón correcto, que mil canciones seculares escritas en la oscuridad del alma.

Aunque los subgéneros musicales existentes son tan variados que no hay tiempo ni
espacio de explicarlos cada uno, actualmente los estilos musicales que tratan
temáticas cristianas son tan variados que prácticamente podríamos decir que hoy
en día hay música cristiana en todo tipo de género musical. Hay algunos hermanos
que demandan inflexiblemente que no se usen cierto tipo de ritmos o instrumentos
musicales en la alabanza, y que sólo deberían cantarse himnos “antiguos de la
fe”. Otros dicen que su preferencia en el estilo de la música antigua es el único
“bíblico” y declaran que todas las demás formas de música son malas por ser
parecidas en cuestiones instrumentación, voz o melodía a diversos músicos
seculares.

Sin embargo, la Biblia en ninguna


parte condena ningún estilo de música ni ningún instrumento en particular. El
género o estilo musical es una forma artística que surge a partir de la combinación
de voces, instrumentos, ritmos y melodías estructuradas de forma continua. Este
punto es muy similar al tema de la vestimenta, la forma de peinarse, o la comida.
Aunque ciertamente sí hay excesos y vicios en cada parte del mundo en todo tema,
el Espíritu Santo es el que nos dará entendimiento a los creyentes para no caer en
tales excesos ni en culpas innecesarias o falsas.

La Biblia no declara en ninguna parte que alguna forma de instrumentación musical


sea profana o esté prohibida. Muy por el contrario, lo que encontramos en el Salmo
150 es una exhortación de Dios a alabarle a Él con toda clase de instrumentos
(instrumentos de cuerdas, de viento y de percusión):

"¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor! Alaben a Dios en su santuario, alábenlo en


su poderoso firmamento. 2 Alábenlo por sus proezas, alábenlo por su inmensa
grandeza. 3 Alábenlo con sonido de trompeta, alábenlo con el arpa y la lira. 4
Alábenlo con panderos y danzas, alábenlo con cuerdas y flautas. 5 Alábenlo
con címbalos sonoros, alábenlo con címbalos resonantes. 6 ¡Que todo lo que
respira alabe al Señor! ¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!"

Por tanto, no hay sustento para pensar que la música del cielo sólo consiste en
arpas. Los caminos de Dios son "mucho más grandes que nosotros". Como bien el
Apóstol Pablo escribió: "Yo sé, y estoy convencido en el Señor Jesús, de que
nada es inmundo en sí mismo" (Ro. 14:14). Usar un órgano o un laúd, en vez de
una batería y una guitarra, no hace que la música sea más o menos santa. Los
pueblos paganos y los impíos también adoraban a sus dioses y se alegraban con
arpas, flautas y todo tipo de instrumentos (Job 21:12, Daniel 3:5), pero no por ello
estos instrumentos eran malos. La verdadera razón por la cual ellos no agradaban
a Dios no tenía que ver con el uso o desuso de instrumentos, sino con el pecado,
la condición de su corazón y el propósito de su música.

Algunos objetan que la Biblia no menciona específicamente los tambores o el uso


de ciertos instrumentos modernos (por ejemplo, la batería o la guitarra eléctrica),
y concluyen que por lo tanto no sería es bíblico usar estos instrumentos en la
alabanza porque éstos son de origen pagano. No obstante, la Biblia si menciona
una variedad de instrumentos de percusión similares en naturaleza a intrumentos
modernos, tales como el pandero, el tamborín o tamboril, la bocina, los címbalos
y el sistro (1 Samuel 10:5, Salmo 68:25; Esdras 3:10), antecedentes de los tambores
y partes de la batería. Muchos otros instrumentos fueron inventados tiempo
después de que se escribiera el Antiguo Testamento, y por ello no son mencionados
en la Biblia, pero eso no quiere decir que estén prohibidos. La Biblia tampoco
menciona al chello, al violín o al órgano usado en las liturgias de la iglesias
luteranas del siglo XV, y sin embargo, ¿qué religioso ortodoxo objeta algo contra
dicha música? Todos los instrumentos musicales pertenecen a tres categorías, las
cuales son todas consideradas en la Biblia, y la gran mayoría de los géneros de
música moderna son variaciones o combinaciones de los mismos tipos de
instrumentos musicales, tocados a diferentes velocidades o con un mayor o menor
énfasis o repeticiones, según sea el caso. En este sentido, no existen bases bíblicas
para declarar que el uso de algún instrumento en particular sea profano o esté
fuera de la voluntad de Dios. Hay muchos otros objetos cotidianos como la bombilla
eléctrica, el coche, o la laptop que no fueron diseñados por cristianos, pero esto
no los hace impuros por sí mismos. No seamos hipócritas.

La Biblia nos dice que siempre y cuando cada uno esté alabando y dando gloria a
Dios, cada uno debe estar convencido de su propio sentir. La preferencia por un
instrumento musical es similar a la de las preferencias alimenticias, de las cuales,
se nos dice que "cada uno esté plenamente convencido según su propio
sentir. El que guarda cierto día, para el Señor lo guarda; y el que come, para
el Señor come, pues da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor se
abstiene, y da gracias a Dios" (Ro. 14:5-6).

Hay cristianos que prefieren alabar en un ambiente enérgico y danzante, mientras


que otros creen que un ambiente sereno es más adecuado para la alabanza. Hay
cristianos que simplemente no encuentran en los órganos y la lentitud de los
himnos un estilo musical que les cause un buen sentir o ánimo, sino lo contrario:
un dolor de estómago. Esos ritmos se asemejan más a melodías de la Iglesia
Católica y de la Edad Media, y no por ello son malos. Pero la verdad es que nadie
está obligados a que le guste una melodía en particular. Muchos jóvenes cristianos
prefieren ritmos o instrumentos más animados, jubilosos, o más rápidos porque
coinciden con los instrumentos que son más usados en la música de su tiempo, con
lo que conocen por su ciudad, país o lugar de origen. Dios no condena a los
cristianos de Hawaii por alabarle con un ukelele, ni a los de México por alabarle
con una marimba, ni a los sudamericanos por alabarle con una maraca, ni a los
africanos, por bailar tanto durante el servicio. Si algún débil en la fe nos inculpa
por usar nuevos instrumentos o ritmos, debemos ser cuidadosos de no hacer
tropezar a nadie, pero tampoco ser movidos fácilmente del gozo que tenemos en
el Señor, quien nos enseña que:

"En esto sabremos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros


corazones delante de El: en cualquier cosa en que nuestro corazón nos
condene; porque Dios es mayor que nuestro corazón y sabe todas las cosas
Amados, si nuestro corazón no nos condena, confianza tenemos delante de
Dios; y todo lo que pidamos lo recibimos de El, porque guardamos sus
mandamientos y hacemos las cosas que son agradables delante de El" (1 Juan
3:19-22).

Si bien se dijo que hay prácticas de subculturas musicales de las cuales debemos
abstenernos y no debemos imitar del mundo, también hemos visto que muchas
veces las melodías básicas son más que nada, preferencias personales y diferencias
culturales que no retienen maldad alguna. El Señor sabe cada caso, pero sobre
todo, el conoce el corazón de las personas. La mejor clase de música que podemos
escuchar es aquella que alaba y glorifica a Dios y hay muchos músicos cristianos
talentosos que han compuesto música en la mayoría de géneros musicales, con un
rango que va desde baladas clásicas y la música folk, hasta el rock alternativo, la
música electrónica y el reggae.
Conclusiones

A la hora de elegir música, debemos tener muy en cuenta que debemos seguir a
Dios, no a los hombres. Debemos rendir nuestras vidas a JESUCRISTO, no a la
música ni a los músicos. Siempre debemos buscar la gloria de Dios, no idolatrar al
músico. Debemos ser cuidadosos de no seguir el glamour del pecado ni las
tradiciones vanas del mundo.
También es muy importante ser cuidadoso con la música catalogada "cristiana" que
decidamos escuchar. Si en cualquier momento ves incongruencias entre la música
que escuchas y con el Evangelio de Jesucristo, debes estar dispuesto hacer caso
de la convicción que el Señor ponga en ti y estar dispuesto a dejar de escuchar lo
que Él te pida o lo que no le agrade. Haz caso omiso de las personas, incluyéndome,
si es que no somos claros. Es tu responsabilidad consultar con Dios, pedirle que te
muestre si aquello que escuchas es agradable para Él, y permitirte ser guiado por
Su Espíritu Santo. Si en algún momento llegas a ver algo impropio o incorrecto en
algún tipo de música catalogada como "cristiana", de igual forma te ruego
consideres tomar una decisión bíblica conforme a la voluntad de Dios y alejarte de
aquello que no sea conforme al corazón de Dios. Hoy en día vivimos en tiempos de
apostasía donde muchos se hacen llamar cristianos, pero en realidad no lo son, y
hay quienes pretenden hacer mercadería de cosas santas. Mantente alerta.

"Sé que después de mi partida, vendrán lobos feroces entre vosotros que no
perdonarán el rebaño, y que de entre vosotros mismos se levantarán algunos
hablando cosas perversas para arrastrar a los discípulos tras ellos. Por tanto,
estad alerta,..." (Hechos 20:29-31)

Sé por experiencia propia que la transición de deshacerse de la música secular que


tanto te ha gustado no es nada fácil, pero tienes que decidir entre dos caminos: el
angosto y ancho; entre dos mundos: el de arriba o el de abajo; y entre dos
personas: Cristo o el diablo. Pídele fuerzas a Dios para tomar esta decisión.
Deshazte por completo de la música secular que has tenido. Si la regalas a alguien
más o la preservas, solamente seguirás permitiendo o promoviendo más de lo
mismo. Tienes que deshacerte de ello.

Después, no te desanimes, sino alégrate en el Señor. Al seguir a Cristo, pierdes


mucho, pero ganas MUCHÍSIMO MÁS, incluso en este mundo. Por ello, pienso que
este estudio no estaría completo sin darte opciones de una lista de cantates y
músicos cristianos con similitudes musicales a famosos músicos seculares para
que tengas sugerencias que escuchar. Comparto dicha lista de sugerencias
musicales con músicos cristianos como alternativas para dejar de escuchar a los
músicos seculares. Aunque la mayoría de estos músicos cristianos no superan a los
músicos seculares en popularidad, repito que la popularidad no es sinónimo de
talento. Si lo investigas y te abres a nuevos cánticos, verás que hay muchísimos
músicos cristianos hábiles y talentosos que han dedicado su tiempo y esfuerzos a
realizar música cristiana de la mayor calidad, muchas veces muchísimo mejor que
la música del mundo, y superándola en habilidad y creatividad. Las similitudes que
entre un músico secular y un músico cristiano a veces están relacionadas con el
color o tipo de voz, el uso y la combinación de instrumentos, el estilo de las
melodías, la armonía, la velocidad, el ritmo predominante o de fondo, el aumento
o disminución de repeticiones, entre otros aspectos meramente musicales con un
mundo de diferencia en cuestiones líricas.

Para seleccionar objetivamente la música que hayas de escuchar, te recomiendo:

1. Orar a Dios, pidiéndole su guía y su dirección, que Él ponga en ti el


sentir de gusto por la música que a Él le agrada, y disgusto por la que le
desagrada.
2. Asegurarte que el contenido lírico sea correcto doctrinalmente, y que
no sea falso ni contrario a la Escritura
3. No seguir al hombre o al salmista, sino a Dios. Enfócate en Dios
mientras escuchas, cantas.
4. Estar alerta y ser cuidadoso de las tentaciones del mundo y de los
falsos cristianos que con tal de arrastrate a sus ideas falsas, pueden hacerse
pasar por creyentes cuando en realidad no lo son. Rechazar la música
ecuménica en dado caso.
Espero que este estudio y esta lista te sean de bendición para ayudarte a tomar la
decisión de sólo escuchar música cristiana, y si tienes cualquier duda, observación,
pregunta o comentario, estoy a tu disposición para servirte en la sección de
comentarios. Dios te bendiga.

Comprobando lo que es agradable al Señor Ef.5:10

MÚSICA SU ORIGEN
Todos los idiomas tienen sus orígenes en Dios mismo. Génesis 1:3 dice “En el
principio creó Dios los cielos y la tierra.” Genesis1:3 nos menciona que instrumento
usó Dios para efectuar esta creación… “ Y dijo Dios, sea la luz…” observe la
palabra DIJO Dios… ¿acaso “dijo” no es una palabra? ¡Claro que lo es! Por medio de
esta palabra nos aclara sin lugar a duda que el origen de todo idioma es Dios
mismo ¿Cómo comprobarlo?Bueno veamos nuestras bases bíblicas, Ezec. 28:13 nos
narra el estado de Satanás en su estado caído y en su estado angelical. Al describir
su primer estado (Lucifer), Dios dice, “los primores de tus tamboriles y flautas
estuvieron preparados para ti en el día de tu creación.”. Nos menciona la
Biblia tamborín y flauta los dos son instrumentos musicales. Podemos concluir que la
música existió antes de la creación del mundo mismo, y su origen como cualquier otra
cosa creada es Dios mismo. , Otros versículos que respaldan esta enseñanza:
Colosenses 1:16-17 “…todo fue creado por medio de el y para El. Y El es antes de
todas las cosas, y todas las cosas en El subsisten.” Santiago1:17 “…toda buena
dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto…” Concluimos que el origen del
idioma universal de la música es Dios mismo.

MÚSICA Y SU PROPÓSITO
Ya que sabemos que la música es un idioma, podemos establecer que el propósito de
la música es comunicar. TODA música por ser idioma comunica una idea.
Regresemos a la Biblia, ¿Con quién debemos comunicar?
1. Dios mismo dio al hombre el don del idioma para comunicarse primeramente con
Dios mismo, Gen. 2:7, Gen 2:15. El hombre por medio del uso del idioma se
comunicó con Dios, su Creador.
2. Dios dio al hombre el don del idioma para que se comunicara con su pareja….
Con otro ser humano, Gen 2:18, Gen 2:22-23
Al entrar el pecado en el hombre, se perdió inmediatamente el deseo y posteriormente
la posibilidad de usar el idioma como herramienta directa para la comunicación con
Dios. Sin embargo, siglos después, Jehová Dios mandó al Verbo encarnado,
Jesucristo, para reestablecer la comunicación pura y directa con Dios Padre. 1Juan
5:13-14
Efectos 4:29, Colosenses 4:6

Si esto entonces son los objetos y propósitos del idioma según el diseño de Dios
¿habrá instrucciones parecidas para guiar nuestra comunicación por medio del uso
del idioma de la música?

Efesios 5:19 “hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales”

Colosenses3:16 “La palabras de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos


y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros
corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales”.

La Biblia aclara para nosotros que Dios espera del hombre una comunicación sana y
de naturaleza espiritual mediante el uso de la música para con su prójimo y para con
Dios como Creador y Padre.
Elementos de la música y influencia en el ser humano
La música tiene tres elementos más importantes que son: melodía, armonía, ritmo.
Idioma hablado Música
1. Los “tabiques” del idioma son los sonidos que se representan en forma 1. Los “tabiques” de la músi
escritas con el abecedario (a-b-c). Estos sonidos son de carácter amoral. como notas de la escala (d
2. Los “tabiques” se arman para formar palabras que expresan ideas. Al
convertirse en palabras que expresan ideas-estas sí adquieren un valor 2. Los “tabiques” se arman
moral. éstas ahor
3. Las palabras se ordenan para expresar ideas mas completas, 3. Las melodías se encade
sentimientos, respuestas preguntas, etc. Estas adquieren cierto nivel ideas mas completas, se
intelectual o emocional. adquieren cie
4. La expresión oral inteligible del idioma depende del ritmo en el hablar: 4. La expresión inteligible d
ritmo depende de acentos y pausa. del ritmo
Ejemplo:
El perro comió dos huesos y después a mí papá le dio de comer mi mamá por que
tenía hambre mi hermano y todos sus compañeros comieron también en casa.

El perro comió dos huesos. Y después a mi papá le dio de comer mi mamá por que
tenía mucha hambre. Mi hermano y todos sus compañeros comieron también en
casa.

Melodía: Sucesión de tonos musicales de distintos alturas que animados por el ritmo
expresan una idea musical.
Distorsión en la melodía: Una de las más comunes en la melodía es el uso del
resbalón (también conocido como vuelta). Es decir envés de mover en forma limpia de
tono a tono, resbalamos de un tono a otro tono, y esto produce un sentir incierto
(1 Cor. 14:7-8), poco controlado dentro de la melodía. Es en efecto la imitación de la
voz y la hablar de la `persona que ha estado tomando bebidas alcohólicas.

Armonía: Sucesión de acordes (tres o mas tonos musicales sonando


simultáneamente) que apoyan a la melodía con mas interés tonal.
Distorsión: La armonía correctamente construida siempre no lleva a punto de reposo
.La armonía se puede distorsionar en una variedad de maneras, pero la mas común
es por el uso de demasía de armonías abiertas.

Ritmo: Sucesión periódica y extendida de pulso acentuados y no acentuados


que dan estructura y movimiento o “vida” a la melodía.
Distorsión: La distorsión mas común es el uso de la sincopa. Sincopa significa
acentuar lo débil y no acentuar lo fuerte dentro de un compás, o acento de la palabra.

Distorsión en proporción: También tenemos que tener cuidado con el balance y


proporción con la cual se llegan a combinar. Todo músico estudiado sabe que el
elemento de la MELODIA es de primera importancia dentro de la música. En segundo
lugar debe proporcionar la ARMONIA. Hasta lo último debemos sentir el RITMO
dentro de la composición.¿ Por que es tan importante mantener este balance entre los
elementos musicales? Mucho tiene que ver con los efectos que estos elementos
musicales ejercen en nosotros en forma individual.
Veamos primeramente un ejemplo Bíblico: Usaremos como ejemplo al rey Saúl. En 1
de Samuel 16:14-23 vemos al rey Saúl bajo el juicio de Dios por su desobediencia.
Dios permitió que un mal espiritu atormentara a Saúl. Sus siervos preocupados
pensaron que un poco de música buena ayudaría al Rey en su tormento, así que
mandaron traer a David para que tocase delante del rey. La Biblia nos menciona que
al escuchar la música que “Saúl tenía alivio (efecto físico), y estaba mejor (efecto
intelectual e emocional) y el espíritu malo se apartaba de él (efecto espiritual)” 1 Sam.
16:23.
Por estos versículos podemos concluir que:
La melodía–nos afecta en el espiritu- lo espiritual.
La armonía-nos afecta en nuestro intelecto y en nuestras emociones- el alma
El ritmo-nos afecta en nuestro cuerpo-lo físico.
De igual manera que nosotros debemos mantener en balance, el espiritu dominando
el alma (intelecto/ emociones) y estos dos dominan nuestros cuerpos, así también en
la música. Pensemos que la melodía dominando a la armonía, y estos dos
dominando al ritmo si esta en este orden la música es buena. Si en algún momento
predomina la armonía, quedara el mensaje sobrecargado hacia el intelecto o hacia las
emociones. Si llega a predominar el ritmo, el mensaje será sobrecargado hacia lo
físico del oyente.
Recuerde hermano(a) Comprobando lo que es agradable al Señor Efe.5:10
Texto: Idioma específico/ regional: Sucesión de vocales y consonantes, que forman
palabras, las cuales al ir encadenadas, expresan ideas concretas e inteligibles.
Si combinamos elementos musicales de estructura legítimas en proporción correcta
podemos crear música buena y sana calidad. El problema surge cuando los elementos
individuales de la música sufren alguna distorsión, o al combinar los elementos musicales
fallamos en observar el balance y proporción correcta. Si descuidamos estos detalles, la
música se distorsiona en su formación y en la misma medida el mensaje que comunica
también queda distorsionado.
Para concluir este tema nos vamos a enfocar en la mezcla de mensajes (espirituales y
carnales) y que producen cuando los mezclamos.
1. Mezclamos mensajes: el mensaje del texto podrá ser espiritual, pero el mensaje de la
música carnal y mundanal, o vise-versa. Podrá ser que tanto el texto como la música
contienen algunos elementos espirituales, pero estos vienen mezclados con
elementos mundanos, por lo tanto tenemos un mensaje espiritual mezclado con un
mensaje carnal.
2. Producimos confusión: al mezclar mensajes opuestos dentro de una composición
de música sagrada, producimos un “sonido incierto” que No comunica un mensaje
claro, sino al contrario, resulta nada más en confusión. (1 Corintios 14:7-9) Es
IMPOSIBLE que Dios apruebe este tipo de música, pues la Biblia enseña sin lugar a
dudas que nuestro Dios no es un Dios de confusión. (1 Corintios 14:33)

Para aclara lo perjudicante de este tipo de mezcla, pensemos en el pastor de la iglesia


y su afán de comunicar un mensaje espiritual a su congregación cada domingo.
Supongamos que el hermano pastor pasa toda la semana estudiando la Palabra de
Dios, meditando en ella y preparando el mensaje para le culto de la mañana. Ya tiene
el mensaje de Dios para su pueblo, pero antes de ir a la iglesia para predicar el pastor
se viste con un traje de payaso… la cara pintada como de payaso, su peluca
alborotada de payaso, sus zapados cómicos de payaso… y se para en el púlpito para
predicar. ¿Qué tanto del mensaje cree usted que oirán los miembros de su
congregación? ¿Será de bendición espiritual el mensaje del pastor? ¿O será mas bien
un momento de tremenda confusión para los hermanos de la iglesia? Así es entonces
el efecto cuando tratamos de presentar mensajes espirituales por medio de técnicas
carnales. Produce entre el pueblo de Dios mucha confusión, y da lugar al inconverso
dudar de y burlarse de la supuesta nueva vida del creyente.
En Apocalipsis 4:1-11 Dios nos permite ver por un breve instante la adoración que Él
recibe en todo momento. El refrán que resuena en todo tiempo delante de Su trono es
“Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso,…” ¿No será blasfemia de
nuestra parte pensar que podemos ofrecer a Dios alabanza de salmos, himnos y
cánticos espirituales que hemos mezclado con elementos musicales tomados del altar
de Satanás y su música mundana?

¡Que Dios nos ayude a producir y usar música sagrada que sea realmente sagrada…
separada de tosa influencia mundanal para el uso y servicio de nuestro Santo Dios¡

Música en mi vida espiritual

Hay varias maneras de tomar decisiones, pero el cristiano, si es que no quiere errar
en sus decisiones y eventualmente en las consecuencias que éstas implican de
aprender a poner en práctica las normas bíblicas que Dios nos ha dado. La Biblia nos
da muchos consejos en cuanto al tema, pero utilizaremos la vida de Daniel.

1. “Daniel propuso en su corazón…”El primer paso que tenemos que hacer es tomar
una decisión, y formar un trato con Dios en el corazon.
Aplicación: Es necesario decidir en el CORAZON que escogeremos para nuestro uso
personal la música que es “Agradable al Señor”
2. “no se contaminaría” Especifica de lo que se abstendría.
Aplicación: Música que me contamina físicamente no es para mi uso. Ritmos
sensuales, sobrecargados, fuera de proporción musical-contaminan físicamente. La
música nos afecta en nuestro intelecto, espíritu.
3. Con la porción de la comida del rey, ni con el vino que el bebía.” En tercer lugar,
Daniel pudo reconocer el origen de lo contaminado.
Aplicación: La música compuesta por el diablo para sus hijos siempre se identifica
porque de alguna manera va a romper las leyes de proporción y de orden
establecidas en la Biblia para la buena música.
Música en el hogar
Parte del ambiente de su hogar tiene que ver con la música que escucha. Es el
privilegio y deber de los padres establecer para sus hijos las normas musicales que se
observarán para el bienestar de la familia. Las siguientes sugerencias le pueden
ayudar.
1. Hay que empezar temprano. (Prov. 22:6) desde la infancia hay que proveer
música de la más alta calidad para sus hijos.
2. Usar la música para enseñar (Deum. 31:19-22) La música siempre ha
ayudado para entender mas rápidamente las cosas y sumamente eficaz para
enseñar conceptos, reglas, rutinas, filosofías etc.
3. Regir lo que se está escuchando en su hogar. (josué24:15) Como padres de
familia es tu deber escoger e insistir en las normas musicales que se observarán
es su hogar.
4. Escuchar lo que se está escuchando en su hogar. (Hebreos 2:1)
Música en la iglesia
Salmo 100 exhorta al pueblo de Dios a “cantar alegres” delante de Él .Como iglesia de
Dios debemos tener mucho cuidado que tratamos de cantarle al Señor y no vayamos
a traer vana ofrenda delante de El.
1. No despreciar lo viejo por lo nuevo. Hay que utilizar de manera amplia los himnos
de la fe.
2. No despreciar lo nuevo por lo viejo. Hay que incluir muchos himnos y cánticos
espirituales de compositores contemporáneos.
3. Escoger música a las necesidades de la congregación.
4. Mas que nada elegir lo que es “agradable al Señor” Recuerde que, el culto de
adoración es para nuestro Dios y el merece lo mejor. No hay mejor olor grato que el
olor de una ofrenda de obediencia a El

¿SOY CRISTIANO PUEDO


ESCUCHAR MÚSICA MUNDANA O
SECULAR?
06.01.14 90 Opinaron

Eres joven, y aún te gusta escuchar la música secular, las personas tienen
algunas tendencias sobre este tema y suelen decir que “por supuesto siendo
cristiano puedes escuchar música secular”, pero hoy me gustaría abordar este
tema contigo de una manera más espiritual, para ofrecerte algunas cosas que he
aprendido y que Dios me ha permitido entender sobre la música que no glorifica su
nombre, y que hoy podría arrojarte un poco de luz si te encuentras con algún tipo
de confusión.
¿La música secular puede escucharse siendo cristiano?

Antes que nada, debes de saber que la palabra “música mundana o secular”
realmente no existe en la Biblia, pero se le llama de esa manera, a toda la música
que no glorifica a Dios, y fue creada por compositores o cantantes que cantan
para el mundo (quienes no conocen la luz de Cristo), o que componen canciones
dedicadas a la inmoralidad. De allí la terminología de estas palabras.

¿QUIÉN GOBIERNA LA MÚSICA


MUNDANA O SECULAR?
Esta es una de las preguntas que debes de hacerte principalmente. Debes de
saber que la música fue creada por Dios, y que el cielo está lleno de músicos que
alaban a Dios. Ahora me gustaría platicar contigo acerca del gobernador de la
música secular, y te pido que leas cuidadosamente la descripción para que
puedas abrir tu corazón y comprender lo que la música secular puede causar en tu
vida.

Un verso bíblico que es la mayor base para hacer la afirmación de que ‘el enemigo
es músico’, se encuentra a partir de Ezequiel 28:13, en donde se describe que los
‘primores de tus tamboriles y flautas estuvieron preparados para ti desde el día de
tu creación’. La palabra primores se refiere a instrumentos creados con
delicadeza, es decir, instrumentos que eran algo especial para el querubín que
desobedeció a Dios. Los tamboriles se refieren a panderos, o un instrumento que
consiste en una piel sobre alguna especie de aro. Flautas es un instrumento de
viento que consistía en una caña con agujeros, por donde se hace música, tal
como la conocemos ahora, una flauta convencional.

Luego la cita de Ezequiel describe con exactitud al enemigo, en donde habla de


que su hermosura le llevó a corromperse en el cielo, y es entonces cuando Dios
decide que no debería de seguir ocupando el lugar que le correspondía en el cielo.
Si la cita bíblica, no hubiese descrito que al enemigo se le habían preparado
instrumentos, no podríamos obtener una sola base para sostener tal afirmación
sobre ‘si el enemigo fue o es músico’.

Se cree que el querubín “Grande” descrito en la Biblia, tenía una jerarquía


bastante respetable, y esa jerarquía fue la que le permitió convencer a otros
ángeles para sus malévolos propósitos. Luego de enaltecerse, y pasado un tiempo
determinado por Dios, decidió que sus dotes de músico los iba a utilizar para
seguir exaltándose así mismo, hasta hoy en día, sus propósitos siguen vigentes.
LO QUE CAUSA LA MÚSICA
MUNDANA O SECULAR EN TU VIDA
Ahora sí, trata de mantenerte lo más confortable que puedas. Después de la
‘breve introducción’ para que comprendas de donde parte todo, vamos a platicar
acerca de lo que la música secular está causando en tu vida. Ve por alguna
bebida ya sea fría o calientita y lee lo que quiero compartir contigo.

Por si no lo sabias, el enemigo es mencionado como un dios (2 Corintios 4:4) con


d pequeña de este mundo en la Biblia, y además la Biblia describe que el mundo
entero está bajo el maligno (1 Juan 5:19), y también es mencionado como un
espíritu que gobierna en los aires (Efesios 2:2), entonces lo único que no le
pertenece al enemigo, somos nosotros, los que fuimos comprados por la sangre
de Cristo.

Es aquí en donde tú debes de meditar de que la música secular, no tiene ninguna


parte que provenga de Dios, hablando de sus letras, y de quienes las componen y
están bajo la gobernanza del maligno. Por esa razón es que cuando estas
tratando de adorar a Dios, y si estas escuchando constantemente música secular,
será imposible que logres una comunicación íntima con Dios, quizás lo puedas
lograr, pero verdaderamente podría ser porque la misericordia de Dios pudo
haberte alcanzado.

A Dios no le agrada que un cristiano quiera engañarle, quiera decirle que le adora
con todo su corazón, y que le ama, cuando en realidad dentro de ese corazón
están operando dos lados, uno de luz, y uno de obscuridad. Por esa razón, es que
muchas veces podemos ver a muchos jóvenes e incluso adultos sosteniendo las
bancas con sus manos, mirando para todos lados mientras el ministro intenta
llevar adoración fragante a la gloria de Dios, o sencillamente nunca sienten la
presencia de Dios en su vida, la respuesta es sencilla, en ese corazón hay dos
lados gobernando.

La mayoría de cantantes seculares, están gobernados por el enemigo (por


supuesto debemos de orar por ellos para que Cristo les alcance), y muchas veces
es imposible aceptar la realidad, realidad que un día yo mismo tuve que
enfrentarme, y decidir que en mi corazón no había espacio para 2 tipos de glorias.
Decidí que en mi corazón tenia espacio solamente para darle la gloria a Cristo y a
nadie más.

La música secular ha llevado a millares de jóvenes al suicidio, y muchos de ellos


también han sido arrastrados a las drogas, a la decepción, al alcoholismo y una
infinidad de espíritus que son transmitidos por medio de la música secular. No
cabe la menor duda, que quien está operando en la música que no glorifica a Dios,
es el enemigo, quien sabe que por medio de su música puede atraparte y
destruirte. Tal como el enemigo lo ha hecho desde que estaba en el cielo hasta
hoy en día, con orgullo, enaltecimiento, desobediencia y soberbia contra Dios en la
música que no glorifica a Dios.

Quizás el día de mañana se te olvidará lo que leíste el día de hoy, pero dejame
decirte algo, del enemigo y del mundo, nunca esperes cosas buenas, al contrario
es mejor llenarte con un cantico inspirado en los Salmos, o un cantico que
provenga desde lo profundo de tú corazón para Dios.

¿QUÉ HACER PARA DEJAR LA MÚSICA


SECULAR?
Quiero terminar ofreciéndote un testimonio rápidamente, hace muchos años fui
testigo de cómo un joven fue tomado por el enemigo, fue una escena que aún
tengo presente, el enemigo le arrastró por todo el piso, y finalmente habló con una
voz terrorífica, y confesó que había ingresado por haber escuchado música
secular, de una banda que está bajo el dominio del enemigo.

Esto no es ciencia ficción, ni tampoco quiero asustarte, porque he comprendido


que solamente Dios puede hacer la obra maravillosa en cada uno de nosotros, si
de verdad deseamos hacerlo y nos arrepentimos de cualquier falta. Tampoco es
un tema en donde yo quiera tener la razón, no, es un tema que quiero compartir
contigo, para que decidas si quieres seguir por el camino de escuchar la letra y
música que no es inspirada por Dios, pues ya te comprobé con la Biblia que la
música que no pertenece a Cristo no hace más que darle gloria a otro dios, o si
deseas en realidad hacer un único espacio a Cristo en tu corazón, y que de
acuerdo al Salmo 22 es lo que una persona que conoce a Cristo como su salvador
personal debe de hacer, al ofrecerle nuestras alabanzas que serán solamente
para Él y su gloria.

Si deseas tomar ese cambio, entonces pídele a Dios perdón en tu corazón, y


tendrás que dejar por un lado la música secular, pues tu vida corre peligro, y si
eres un hijo o hija de Dios, tarde o temprano su mano te alcanzará, es mejor
volver tú corazón hacia Dios solamente a tiempo, y evitar que luego tengas que
lamentar el no atender a su Palabra. Es momento de hacer que en tu corazón
gobierne uno sólo, Cristo autor y consumador de la vida. Hoy es tú oportunidad de
comenzar de nuevo, si en verdad deseas que la presencia de Dios llene tu
corazón.

No me gustaría que me vieras como “un religioso”, cuando hablo de dejar la


música, no me refiero a que casualmente fuiste a un restaurante a comer algo, de
pronto en el restaurante están tocando alguna canción que te llama la atención,
pues en ese sentido Dios conoce que no es tu culpa, estamos en el mundo y no
podemos tampoco marginarnos, realmente creo que la cosa se pone mal, cuando
nosotros decidimos comprar directamente música secular, y tomarla como parte
de nuestro diario vivir, tu alimento al alma es la música secular, y es allí en donde
he comprobado que a Dios no le agrada que tomemos esa actitud.
De pronto te encontraste con una canción en YouTube o cambiando la estación de
radio, por curiosidad decidiste escucharla, bueno quizás Dios lo vea como que fue
algo casual, pero si todos los días buscas escuchar la misma canción e incluso
inundas tu iPhone, iPad, Tablet, MP3, PC etc. con las canciones, creo que es allí
en donde realmente radica el problema y desagradamos a Dios.

Yo comprobé que escuchar música secular continuamente puede causar estragos


en tu vida espiritual con Dios, y en tu vida sentimental. Por esa razón es
importante tener un fino cuidado sobre lo que escuchamos y sobre todo
preocuparnos en agradar a Dios como Él desea que lo hagamos, dándole a Él
solamente la gloria.

Tomalo como un consejo sano, y meditalo, yo no puedo convencerte de nada,


solamente su Espíritu Santo puede manifestarte hoy su verdad, como un día lo
hizo conmigo.

Hay muchísimo más de que hablar sobre la música, pero por hoy considero que
algo grande hará Dios en tu corazón y en tu vida, pues mi anhelo es verte
adorando y exaltando al Dios de nuestros corazones, y que recibas el regalo más
preciado, que es su presencia todos los días. Emersondiaz.com

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