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DIPLOMADO EN DERECHO

COMERCIAL Y ADUANERO

MÓDULO: CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE EN MATERIA COMERCIAL

GRUPO: LOS REFEREES

INTEGRANTES:

● Barriuso Escalera Rene Alejandro


● Chambi Gonzales Dateo
● Flores Medrano Elizabeth Marriet
● Torrico Sanchez Erick Fabrizzio

Cochabamba octubre de 2019


LA FALTA DE MOTIVACIÓN DEL LAUDO
ARBITRAL COMO CAUSAL DE NULIDAD DEL
MISMO

1.- INTRODUCCIÓN.-
Bolivia se constituye conforme la Constitución Política, en su Artículo Primero en un
Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, libre, independiente,
soberano, democrático, intercultural, descentralizado y con autonomías, asimismo por
disposición de su Art. 8 los valores que sustenta el Estado son unidad, igualdad,
inclusión, dignidad, libertad, solidaridad, reciprocidad, respeto, complementariedad,
armonía, transparencia, equilibrio, igualdad de oportunidades, equidad social y de
género en la participación, bienestar común, responsabilidad, justicia social,
distribución y redistribución de los productos y bienes sociales, para vivir bien.
Dentro de la sociedad Boliviana como cualquier otra, sus individuos sean de Derecho
Privado o Público, suscitan diversas disputas o controversias, fruto de las relaciones
jurídicas que éstas entablan, para la resolución de estas acuden ante las diferentes
instituciones con jurisdicción y competencia para resolver los mismos, siendo estos
en principal medida los Tribunales de Justicia, no obstante en especial en las
actividades comerciales por imposición de la misma ley, los participantes están en la
obligación de resolver sus controversias mediante el Proceso Arbitral, el cual cuenta
con sus características propias, constituyéndose en un Método Alternativo de
Solución de Controversias, empero donde se contraponen intereses.
Todo proceso donde se contraponen intereses, conlleva la necesidad de resolver esta
disputa en mérito de valorar elementos de convicción, adecuando la resolución a
emitirse sobre los hechos que se demuestren por las partes.
El presente trabajo estará enfocado en determinar que el fallo dictado dentro del
proceso Arbitral- Laudo Arbitral, es susceptible de ser anulado mediante el Recurso
de Nulidad, cuando este no se encuentre debidamente motivado, para lo cual se
examinará la normativa
nacional, el marco teórico de la presente investigación, se incluye conceptos al
derecho del debido proceso, se revisa la norma fundamental constitucional de nuestro
País, la norma adjetiva civil, la jurisprudencia relativa al tema de estudio y la opinión
de algunos autores que hacen referencia al presente tema de investigación.
2.- MARCO TEÓRICO
Durante el proceso de búsqueda de un tema para la elaboración de trabajo final como
requisito para aprobar el Módulo IV del Diplomado en Derecho Comercial y Aduanero
del Postgrado de la facultad de Derecho de la Universidad Mayor de San Simón, se
presenta este tema como objeto de estudio, el cual sin duda por sus propias
características, es como se podrá advertir en adelante un elemento indispensable en
la administración de la justicia y es que esta labor no recae únicamente en Tribunales
de Justicia con Jurisdicción y Competencia que la Ley les reconoce, sino también
nace de la voluntad de las propias partes en controversias para acudir ante una
Tercera Persona, individual o Colegiada, para que esta en mérito de su pericia y
sujetando su decisión en las permisiones, facultades o requisitos establecidos por
ley, emita una resolución de cumplimiento obligatorio para estas.
El presente trabajo pretende centrarse precisamente en uno de los requisitos
establecidos por ley, para que esa resolución concretamente denominada Laudo
Arbitral, surta plenos efectos y sea de cumplimiento obligatorio bajo conminatoria de
exigibilidad judicial, este requisito concretamente es la motivación que todo Laudo
Arbitral debe tener.
El presente trabajo, es el resultado de un intenso análisis de las normas vigentes, la
Constitución Política del Estado, La Ley de Conciliación y Arbitraje el actual y el
abrogado, ahí genera el tema central, el cual da la necesidad de evitar y prevenir de
que en futuros Laudos Arbitrales, dictaminados conforme las normas lo establecen,
en este caso se tenga presente de que la motivación en los Laudos, sea incorporado
como una causal de nulidad dentro la Ley de Conciliación y Arbitraje, elemento
esencial que debe dar seguridad a la resolución arbitral pronunciada.
En la actualidad existe un vacío jurídico fundamental de la motivación, por tal motivo
se debe adecuar la resolución, sin vicios a fin de evitar futuras interposiciones de todo
tipo de recursos jurisdiccional y extrajudiciales.
2.1,. LA MOTIVACIÓN COMO ELEMENTO DEL DEBIDO PROCESO.-
El elemento motivación tiene gran importancia y constituye la base del presente tema
de investigación, en el sentido de que dan a conocer aspectos que de alguna manera
u otra consolidan la misma, siendo el método investigativo el resultado óptimo a las
referencias que realizan las diferentes disciplinas respecto a este tema, y por otra
parte se dará el análisis en la parte teórica, dando a conocer su doctrina aplicable,
además la legislación nacional, jurisprudencia nacional y Legislación comparada que
sustentan el presente trabajo de investigación.
Al margen de todo lo descrito, cabe mencionar que los acápites de relevancia para
fortalecer el presente trabajo de investigación, corresponde al análisis e
interpretación conceptual, doctrinal y legislación comparada, de la que puede
evidenciar el análisis para definir que el conjunto de razonamiento de hecho y de
derecho, que darán fuerza a la necesidad de complementar el Art 112 del Ley de
Conciliación y Arbitraje.
Como primer paso estamos en la imperiosa necesidad de saber que es la motivación
y cual es su alcance en la actual línea jurisprudencial emitida por el máximo Tribunal
de Justicia de nuestro Estado en ese entendido se tienen las siguientes
consideraciones:
Motivación.- Es el Conjunto de razonamientos de hecho y de derecho, en los cuales
el órgano jurisdiccional o administrativo, fundamenta su decisión se la consigna en
los considerando de la resolución de la sentencia.
MOTIVAR: De acuerdo a lo expresado por Otero Parga, “motivar significa explicar la
razón o motivo que se ha tenido para hacer algo, en la sentencia es la razón que
impulsa a los jueces a decidir de una manera u otra.” (Otero Parga Milagros,
“cuestiones de argumentación jurídica, México, 2006”).
MOTIVACIÓN DE LAS DECISIONES JUDICIALES: La motivación es el instrumento
jurídico enderezado a garantizar que el poder actúe racionalmente y dentro de ciertos
límites. Implica la necesidad de acreditar la racionalidad de las decisiones, vale decir,
que el ejercicio más o menos discrecional que representa la sentencia, no es, sin
embargo, un ejercicio arbitrario. La motivación debe ser configurada como un
instrumento de comunicación que se inserta en un procedimiento comunicativo, que
se origina por el juez y que está encaminado a informar a las partes, y también al
público en general, aquello que el juez pretende expresar. El “cierre” del discurso que
constituye la motivación y su consiguiente despersonalización, provocan que ésta no
refleje todo aquello que el juez ha querido expresar, sino solo aquello que el intérprete
está en capacidad de “comprender”. El carácter instrumental que tiene la motivación
respecto de la “decisión”, puede ser visto desde diversos aspectos:
a. Como base para la determinación exacta de la decisión, lo que deriva en su
uso para la “interpretación” de lo decidido;
b. La motivación como discurso que está destinado a cumplir una función
“justificadora” de la decisión, es decir, para validar, racionalizar, volver aceptable la
decisión, lo que implica el uso de la motivación para la determinación de la ratio
decidendi que juega como principio vinculante en el estare decisis (Taruffo, “La
motivación”, p. 117-118)
FUNDAMENTAR: “Sugiere la idea de que toda resolución judicial, toda sentencia,
debe hundir sus raíces, hacerse firme en la ley como único apoyo en el que puede
descansar la decisión judicial.” (Otero Parga Milagros, “cuesti argumentación jurídica,
México, 2006”).
LA SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0646/2017-S1 Sucre, 27
de junio de 2017 DETERMINÓ ENTRE SUS PARTES MÁS SOBRESALIENTES
LOS SIGUIENTES ASPECTOS:
III.2.El debido proceso, en sus elementos de fundamentación, motivación y
congruencia de las resoluciones. La SCP 1585/2014 de 19 de agosto, que citó a su
vez la SCP 0099/2012 de 23 de abril,sobre esta problemática indicó que: “La triple
dimensión del debido proceso, se encuentra reconocida en la Constitución Política del
Estado, que lo consagra como un principio, un derecho fundamental y una garantía
jurisdiccional. Su protección como garantía jurisdiccional, implica a su vez el
resguardo de los elementos constitutivos del debido proceso, traducidos en derechos
fundamentales, entre ellos la fundamentación y congruencia de las resoluciones
emitidas tanto por autoridades judiciales como administrativas, que se constituyen en
normas rectoras de la actividad procesal.
Corresponde en consecuencia, referirse a los dos elementos constitutivos del debido
proceso enunciados: fundamentación y congruencia, dado que los mismos son
invocados como vulnerados por la parte accionante.
Respecto a la fundamentación de las resoluciones, la SC 2023/2010-R de 9 de
noviembre, resume en forma precisa los razonamientos doctrinales asumidos sobre
el particular, señalando: 'La garantía del debido proceso, comprende entre uno de sus
elementos la exigencia de la motivación de las resoluciones, lo que significa, que toda
autoridad que conozca de un reclamo, solicitud o dicte una resolución resolviendo una
situación jurídica, debe ineludiblemente exponer los motivos que sustentan su
decisión, para lo cual, también es necesario que exponga los hechos establecidos, si
la problemática lo exige, de manera que el justiciable al momento de conocer la
decisión del juzgador lea y comprenda la misma, pues la estructura de una resolución
tanto en el fondo como en la forma, dejará pleno convencimiento a las partes de que
se ha actuado no sólo de acuerdo a las normas sustantivas y procesales aplicables
al caso, sino que también la decisión está regida por los principios y valores supremos
rectores que rigen al juzgador, eliminando cualquier interés y parcialidad, dando al
administrado el pleno convencimiento de que no había otra forma de resolver los
hechos juzgados sino de la forma en que se decidió. (…) cabe señalar que la
motivación no implicará la exposición ampulosa de consideraciones y citas legales,
sino que exige una estructura de forma y de fondo, pudiendo ser concisa, pero clara
y satisfacer todos los puntos demandados, debiéndose expresar las convicciones
determinativas que justifiquen razonablemente su decisión en cuyo caso las normas
del debido proceso se tendrán por fielmente cumplidas; (…). Así la SC 1365/2005-R
de 31 de octubre, entre otras.
Del citado razonamiento, se concluye que la fundamentación de las resoluciones
judiciales, constituye un elemento inherente a la garantía jurisdiccional del debido
proceso, lo que significa que la autoridad que emite una resolución necesariamente
debe exponer los hechos, la valoración efectuada de la prueba aportada, los
fundamentos jurídicos de su determinación y las normas legales que aplica al caso
concreto y que sustentan su fallo; lo que de ninguna manera implica una
argumentación innecesaria que abunde en repeticiones o cuestiones irrelevantes al
caso, sino que al contrario debe desarrollar, pero con precisión y claridad, las razones
que motivaron al juzgador a asumir una determinada resolución, claro está con la
justificación legal que respalda además esa situación.
La congruencia por su parte, responde a la estructura misma de una resolución, por
cuanto expuestas las pretensiones de las partes traducidas en los puntos en los que
centra una acción o recurso, la autoridad competente para resolver el mismo está
impelida de contestar y absolver cada una de las alegaciones expuestas y además
de ello, debe existir una armonía lógico-jurídica entre la fundamentación y valoración
efectuadas por el juzgador y el decisum que asume. En ese marco, la congruencia
abarca dos ámbitos, el primero referido a la unidad del proceso; es decir, la coherencia
y vínculo que debe existir entre una resolución y otra dentro de un mismo proceso, y
el segundo en cuanto a la consideración y resolución de todos los puntos puestos a
consideración del juzgador, lo que significa que también debe existir coherencia y
unidad de criterio dentro de una misma resolución, dado que la misma debe guardar
correspondencia con todo lo expuesto a lo largo de su contenido, caso contrario
carecería de consecuencia, siendo inviable que luego de analizar determinados
hechos se llegue a resultados distintos, vulnerando la construcción jurídica que toda
resolución debe tener en aplicación y resguardo del debido proceso (en ese sentido
se expone el criterio mencionado las SSCC 1009/2003-R y 0639/2011-R entre otras)'.
Por su parte, la SCP 0632/2012 de 23 de julio, refirió: 'En este contexto, debe
señalarse que uno de los elementos del debido proceso es la congruencia en virtud
de la cual la autoridad jurisdiccional o administrativa, en su fallo, debe asegurar la
estricta correspondencia entre lo peticionado y probado por las partes; en ese
contexto, es imperante además precisar que la vulneración al debido proceso en su
elemento congruencia puede derivar de dos causales concretas a saber: a) Por
incongruencia omisiva, en virtud de la cual, la autoridad jurisdiccional o administrativa
emite una resolución sin considerar las pretensiones de las partes, vulnerando con
esta omisión el derecho a un debido proceso y también el derecho a la defensa; y, b)
por incongruencia aditiva, en virtud de la cual, la autoridad jurisdiccional o
administrativa, falla adicionando o incorporando elementos no peticionados o no
discutidos por las partes en el decurso de la causa. En el orden de ideas antes
señalado y concretamente en lo referente a la incongruencia omisiva, la SC
0486/2010-R de 5 de julio, establece y concatena el debido proceso con el principio
de congruencia
señalando lo siguiente: De esta esencia (es decir de la naturaleza jurídica del debido
proceso), deriva a su vez la congruencia como principio característico del debido
proceso, entendida en el ámbito procesal como la estricta correspondencia que debe
existir entre lo peticionado y lo resuelto; ahora bien, esa definición general, no es
limitativa de la coherencia que debe tener toda resolución, ya sea judicial o
administrativa, y que implica también la concordancia entre la parte considerativa y
dispositiva: sino que además, debe mantenerse en todo su contenido, efectuando un
razonamiento integral y armonizado entre los distintos considerandos y
razonamientos contenidos en la resolución. La concordancia de contenido de la
resolución y su estricta correspondencia entre lo pedido, lo considerado y lo resuelto,
conlleva a su vez la cita de las disposiciones legales que apoyan ese razonamiento
que llevó a la determinación que se asume.
En base a esas consideraciones, es que quien administra justicia, emitirá fallos
motivados, congruentes y pertinentes'. Asimismo, en relación a la incongruencia
aditiva, la citada Sentencia Constitucional, señala que: '…la congruencia ha venido
clasificada en diversos tipos o categorías que nos interesa anotar a los fines que se
seguirán, y así es moneda corriente hablar en doctrina de incongruencia «ultra petita»
en la que se incurre si el Tribunal concede «extra petita» para los supuestos en que
el juzgador concede algo distinto o fuera de lo solicitado por las partes; «citra petita»,
conocido como por «omisión» en la que se incurre cuando el Tribunal no se pronuncia
sobre alguno de los pedimentos que le han sido planteados, etc.' (Principios
Constitucionales en el Proceso Civil, Consejo General del Poder Judicial, El deber
Judicial de Congruencia como Manifestación del Principio Dispositivo y su Alcance
Constitucional, Madrid 1993, Mateu Cromo, S.A., Pág. 438). Es decir que, en segunda
instancia, pueden darse casos de incongruencia 'ultra petita' en los que el juez o
tribunal decide cuestiones que han quedado consentidas y que no fueron objeto de
expresión de agravios (extra petita); y cuando omite decidir cuestiones que son
materia de expresión de agravios por el apelante (citra petita)”.

Comprendido que se encuentra el concepto de motivación, que se resume en la


exposición de los motivos por los cuales se toma una determinada resolución,
sea esta de carácter judicial, administrativo, para la solución de una
controversia.

2.2.- ANÁLISIS DE LA NORMATIVA ESPECÍFICA.-

Para evidenciar si en nuestro ordenamiento jurídico la falta de motivación del laudo


arbitral es motivo de nulidad del mismo, se examina la norma específica, siendo esta
la Ley 708 de Conciliación y Arbitraje de 25 de junio de 2015, en la cual tenemos
como sobresalientes los siguientes artículos:
Artículo 3. (PRINCIPIOS). La conciliación y el arbitraje se sustentan en los
siguientes principios: (ENTRE LOS MÁS SOBRESALIENTES PARA EL TEMA
DE ESTUDIO)
1. Buena Fe. Las partes proceden de manera honesta y leal, con el ánimo de llegar a
un acuerdo y acceder al medio alternativo que ponga fin a la controversia.
6. Flexibilidad. Por el que las actuaciones serán informales, simples y adaptables a
las particularidades de la controversia.
7.-Idoneidad. La o el conciliador y la o el árbitro, legitiman su intervención a partir de
su aptitud, conocimiento y experiencia en el desarrollo de los medios alternativos de
solución de controversias.
9. Imparcialidad. La o el conciliador y la o el árbitro, deben permanecer imparciales
durante el procedimiento, sin mantener relación personal, profesional o comercial
alguna con las partes, ni tener interés en el asunto objeto de controversia.
11. Legalidad. La o el conciliador y la o el árbitro, deberán actuar con arreglo a lo
dispuesto a la Ley y otras normas jurídicas. Conforme a este artículo, donde se
plasman los principales principios tanto de la Conciliación como del Arbitraje, se tiene
que los Árbitros en el caso concreto deben sujetar su actuar y consiguientemente sus
resoluciones al principio de buena fe y legalidad, es decir deben observar la ley en
todo momento, sin animo de perjudicar a las partes y en aras de encontrar una
solución a los conflictos enmarcados en la normativa jurídica, sin perjudicar o
favorecer indebidamente a una de las partes, haciendo referencia al principio de
imparcialidad.
Por otro lado el principio de idoneidad, asegura que sólo personas capaces, tanto
profesional como moralmente, sean quienes se encarguen de la resolución de
controversias mediante el arbitraje. Si bien un principio rector es la flexibilidad está
también encuentra límites en el principio de legalidad, es decir no puede suplirse un
elemento tan importante como es la motivación en la resolución final.
El Artículo 103 de la Ley 708 determina (FORMA). l. El Laudo Arbitral deberá ser
motivado y suscrito por la o el Árbitro Único o por la mayoría de los miembros del
Tribunal Arbitral, aunque exista disidencia.
II.-. La o el Árbitro disidente deberá fundamentar los motivos de su decisión, al pie del
Laudo Arbitral. Este artículo es de vital importancia ya que por imperio de la ley, los
laudos arbitrales, inclusive los disidentes, forzosamente deberá ser motivado, como
hemos analizado esto, deberá realizar una exposición congruente de las razones por
las cuales ha emitido la resolución.
Al referirnos a la congruencia debemos definir la misma como el vínculo existente
entre las posturas de las partes y sus pretensiones, con la respuesta en este caso de
los árbitros mediante su resolución o laudo arbitral.
El Artículo 105 de la ley 708 determina entre sus partes más sobresalientes para
el tema (CONTENIDO DEL LAUDO). El Laudo Arbitral contendrá mínimamente:
3. Relación de la controversia sometida a arbitraje.
4. Individualización y evaluación de las pruebas y su relación con la controversia.
5. Fundamentación de la decisión arbitral sea en derecho o en equidad.
Una vez más la ley impone requisitos esenciales para el Laudo Arbitral y estos están
íntimamente ligados a la motivación ya que en primera instancia deberá existir una
relación de los antecedentes que originaron la controversia, es decir resumir las
pretensiones de las partes.
Más importante aún es individualizar y evaluar las pruebas y su relación con la
controversia, este acápite comprende asignar un valor a los elementos probatorios y
determinar si estos son relevantes y pertinentes con respecto a la problemática,
valorar las pruebas corresponde una tarea delicada y fundamental a momento de
emitir el laudo arbitral ya que son las pruebas las que determinan la procedencia o
improcedencia de las pretensiones, valorarlas implica un análisis de las mismas y
consiguientemente una motivación forzosa de la relevancia que cada una de ellas ha
adquirido en el proceso arbitral.
Por último el numeral 5, establece claramente la necesidad de fundamentar en
derecho o en equidad el laudo arbitral, que equivale a motivar conforme la legislación
vigente o conforme los saberes periciales del o los árbitros, observando nuevamente
que un laudo arbitral no puede bajo ningún motivo dejar de contemplar la exposición
de motivos, sustentados a su vez en las pruebas y las normas o conocimientos
periciales que dan origen a la resolución.
El Artículo 112 de la Ley 708 contempla in extenso (CAUSALES DE NULIDAD
DEL LAUDO ARBITRAL). l. La autoridad judicial competente declarará la nulidad del
Laudo Arbitral por las siguientes causales:
1. Materia no arbitrable.
2. Laudo Arbitral contrario al orden público.
3. Cuando la parte recurrente pruebe cualquiera de las siguientes causales:
a) Que exista nulidad o anulabilidad de la cláusula arbitral o convenio arbitral,
conforme la Ley Civil.
b) Que se hubiera afectado al derecho a la defensa de una de las partes, durante el
procedimiento arbitral.
c) Que el Tribunal Arbitral se hubiera extralimitado manifiestamente en sus facultades
en el Laudo Arbitral, con referencia a una controversia no prevista en la cláusula
arbitral o en el convenio arbitral.
d) Que el Tribunal Arbitral se hubiera compuesto irregularmente.
De la revisión de este artículo in strictu sensu se observa que la falta de motivación
no es una causal de nulidad del laudo arbitral, entonces surgen cuestionantes tales
como ¿ Porque la Ley impone como requisito la motivación de los laudos arbitrales
pero no castiga su omisión como causal de nulidad? ¿ Está permitido la emisión de
laudos arbitrales que hayan sido dictados desconociendo la motivación sin hacer
conocer los motivos de la resolución de la controversia? y sobre todo ¿Es nulo un
Laudo arbitral que no esté debidamente motivado? VAMOS A AVERIGUARLO.

2.3.- EL ORDEN PÚBLICO Y EL DEBIDO PROCESO.-


Para el desarrollo del presente trabajo, necesariamente debemos tener un
conocimiento preciso de los siguientes conceptos, los cuales se desarrollan a
continuación, estos conceptos se encuentran vinculados de forma directa con la
motivación, tal como se advierte de la revisión de la SENTENCIA CONSTITUCIONAL
PLURINACIONAL 0646/2017-S1 Sucre, 27 de junio de 2017, según la doctrina y en
la medida de lo posible la interpretación que ha dado el Tribunal Constitucional de
Bolivia, ya que sus decisiones constituyen doctrina legal de aplicación obligatoria para
cualquier Tribunal que administre justicia, sea este de carácter jurisdiccional,
administrativo o elegido por las propias partes para la solución de sus controversias.
Orden Público.- Según Couture, conjunto de Valores de Carácter Político, social,
económico o moral propio de una comunidad en un momento determinado que
fundamentan el derecho positivo que tiende a tutelar..2. Característica de un Estado
que Garantiza la seguridad y protección de los individuos que integran su
organización; el Estado, con sus fuerzas de seguridad y medidas políticas, mantiene
el orden público contra quienes buscan disocias su vigencia.
“Incongruencia del fallo como cuestión de orden público: El examen de la alegación
de incongruencia del laudo arbitral como constitutiva infracción de orden público se
efectúa bajo el prisma de que la jurisprudencia relativa a la congruencia de las
sentencias afirma que no exige una correspondencia absolutamente rígida entre lo
pedido y lo acordado, sino que tal exigencia también se cumple cuando el fallo, pese
a no concordar literalmente con lo pedido, se adecue racionalmente a las
pretensiones de las partes y a los hechos que las fundamenten, hasta el punto de ser
admisibles pronunciamientos complementarios del juzgador no pedidos por las partes
pero sí encaminados a facilitar la ejecución del fallo o a evitar nuevos pleitos (SSTS
19/09/07 entre otras muchas)” (https://www.iberley.es/temas/laudo-contrario-orden-
publico-causa-anulacion-laudo-62973)
“...la acción del orden público es omnipresente en el arbitraje, pero ofrece una especial
importancia en la etapa post-arbitral al configurarse como un dispositivo del control
jurisdiccional del laudo por parte del juez, una vez que el árbitro ha finalizado su
misión, tanto en sede de anulación como, cuando procede del extranjero, en sede de
execuátur. Independiente de los criterios que un determinado ordenamiento adopte
para determinar la arbitrabilidad de un asunto, cada vez más abiertos y favorables a
la misma, el orden público actuará siempre como una última instancia para negar la
eficacia del juicio arbitral o para admitir los efectos de los arbitrajes “deslocalizados””
(https://www.researchgate.net/publication/308929354_Contravencion_al_orden_publ
ico_como_motivo_de_anulacion_del_laudo_arbitral_en_la_reciente_jurisprudencia_
espanola)
“...cuando se invoquen las causales de anulabilidad previstas en el art. 63.II.3 de la LAC, por
lesión al derecho a la defensa y art. 63.I.2 de la mencionada Ley, cuando el laudo arbitral sea
contrario al orden público; en ambos casos la parte afectada puede interponer directamente
su recurso de anulación contra el laudo arbitral, con la exigencia de que motive en forma
suficiente las causales de anulación, a tiempo de interponerse el recurso de anulación
referido. La señalada Sentencia, estableció que: “…el Laudo Arbitral Definitivo o en su caso
el Laudo Complementario, llegasen a vulnerar el derecho al debido proceso de las partes, en
su vertiente derecho a la defensa (reconocida como causal de anulabilidad según el art.
63.II.3 de la LAC), o en su caso cuando el Laudo Arbitral sea contrario al orden público
(reconocido como causal de anulabilidad según el art. 63.I.2 de la indicada Ley), no será
exigible la protesta establecida en el art. 63.III de LAC, pudiendo la parte afectada, interponer
directamente su recurso de nulidad, sin necesidad de cumplir previamente con la protesta;
dentro los plazos procesales establecidos para el efecto; con la exigencia, de que la parte
afectada, mencione expresamente la causal en la que funda su recurso y la motive de manera
clara, ya que no sería aceptable que se presente el indicado recurso, en base a hechos o
actos que no se encuentren expresamente reconocidos como causales de anulabilidad en el
ordenamiento legal. Razonamiento constitucional, que se desarrolla, en resguardo al derecho
de impugnación reconocido en el art. 180.II de la CPE 'Se garantiza el principio de
impugnación en los procesos judiciales', extensible a los procesos arbitrales, en razón a que
este último, se constituye en un medio alternativo de solución de controversias; así como al
principio de flexibilidad, por el que se establece, que las actuaciones en el proceso arbitral,
son informales, adaptables y simples, por su naturaleza jurídica, tal cual lo dispone el art. 2
inc. 2 de la LAC””
https://jurisprudenciaconstitucional.com/sentencias/18101-sentencia-constitucional-1765-
2013
Debido proceso legal.- Principio jurídico procesal por el cual toda persona tiene
derecho a garantías mínimas, tendentes a asegurar un resultado justo y equitativo en
un proceso, y a permitirle tener oportunidad de ser oída y hacer valer sus pretensiones
frente al juez. Obs. Principio establecido de acuerdo con las reglas consagradas en
las leyes para hacer efectiva la protección de los derechos que la ley otorga, ejercido
ante los tribunales competentes y con el derecho de los justiciables de estar presentes
y ser oídos y defendidos.
DERECHO AL DEBIDO PROCESO. “El debido proceso es un derecho fundamental,
se materializa en aquellas garantías mínimas e incluidas que permiten el resultado
justo, equitativo e imparcial en el proceso, la que se conoce como la tutela
jurisdiccional efectiva. por ejemplo, ser escuchado, tener un abogado, ofrecer
pruebas, un juez predeterminado, una sentencia motivada y oportuna, la doble
instancia. No caben los procesos indebidos, estos son descalificados por la ley”.
(QUIROZ y LECOÑA “Constitución Política Del Estado”.)
Este autor nacional en cuanto al derecho al debido proceso, señala que es un derecho
esencial y fundamental de toda persona, manifiesto en un resultado justo, previo a
que toda persona tiene el derecho a ser escuchado, y propuesto sus pruebas, a fin
de que la sentencia pronunciada oportuna, cabal y motivada, lejos de los vicios e
invalidados por ley.
Por otra parte no hacer mención a los Autores Cabanellas de Torres Guillermo y
Osorio Manuel, quede sorprendido por cuanto a los conceptos que ambos autores
describen al debido proceso, son similares e iguales, inclusive no varían en las
palabras y signos de puntuación como se transcribe a continuación:
Debido Proceso Legal. “Cumplimiento con los requisitos constitucionales en materia
de procedimiento, por ejemplo en cuanto a posibilidad de defensa y producción de
prueba.” (Cabanellas de Torres Guillermo.)
Debido Proceso Legal. “Cumplimiento con los requisitos constitucionales en materia
de procedimiento, por ejemplo en cuanto posibilidad de defensa y producción de
prueba.” (Osorio Manuel.) Para los doctrinantes del derecho Cabanellas y Osorio, se
considera que son fieles aplicadores de la norma, por cuanto el debido proceso solo
se basa para ambos, en el cumplimiento del requisito constitucional, en las instancias
procesales vigentes repleto de principios y reglas que sustancian la decisión, siendo
entonces el debido proceso la parte formal y de hecho que reglan las decisiones
judiciales.
Referente a las leyes nacionales se hace conocer primeramente a la ley suprema del
Estado Plurinacional de Bolivia, que consiste en la Nueva Constitución Política del
Estado, aprobado mediante Referéndum nacional en fecha 25 de enero de 2009 y
promulgada por el Gobierno en 07 de enero de 2010, su estructura consta de cinco
partes; resaltando en principio los artículos respecto al tema de investigación el
debido proceso, que se encuentra en la Primera parte, de las Bases Fundamentales
de Estado, Derechos, deberes y garantías, de este modo el Artículo 115 describe lo
siguiente:
Artículo 115. I. Toda persona será protegida oportuna y efectivamente por los
jueces y tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos.
II. El Estado garantiza el derecho al debido proceso, a la defensa y a una justicia
plural, pronta, oportuna, gratuita, transparente y sin dilaciones.
Por lo indicado en el presente artículo que se menciona en la Constitución Política del
Estado, protege los derechos de toda persona, mismas que son totalmente
inviolables, donde el Estado juega un papel importante que tiene el deber de
resguardar, además de que el deberá Estado garantizar el derecho al debido proceso
y defensa justa del ciudadano sea nacional o extranjero; Por otra parte en el mismo
sentido el artículo 117 de la norma suprema constitucional citada se refiere de la
siguiente manera:
Artículo 117. I. Ninguna persona puede ser condenada sin haber sido oída y
juzgada previamente en un debido proceso. Nadie sufrirá sanción penal que no
haya sido impuesta por autoridad judicial competente en sentencia
ejecutoriada…
En la misma dirección, este artículo hace referencia de que el Estado tiene la misión
fundamental de dar protección a las persona, por cuanto una persona antes de ser
condenada, debe ser oída y juzgada aplicándose los principios del debido proceso,
justo e equitativo, cabal y eficaz libre de toda impugnación.
Nuevo Código Procesal Civil
El Presidente Constitucional del Estado Plurinacional de Bolivia, mediante Ley Nº 439
de 19 de noviembre de 2013 y promulgada en fecha 19 de noviembre de 2013, como
parte de las nuevas leyes denominadas leyes Morales, por lo que el derecho indagado
es parte del Libro Primero, Disposiciones Generales y Disposiciones fundamentales,
donde sobresale formalmente tipificado el debido proceso, que se ciñe estrictamente
a lo establecido la Constitución Política del Estado que a la letra señala:
ARTÍCULO 4.
(DERECHO AL DEBIDO PROCESO). “Toda persona tiene derecho a un proceso
judicial justo y equitativo, en el que sus derechos se acomoden a lo establecido
a disposiciones jurídicas generales aplicables a los que se hallen en una
situación similar; comprende el conjunto de requisitos que debe observar toda
servidora o servidor judicial en las instancias procesales, conforme a la
Constitución Política del Estado, los Tratados y Convenios Internacionales de
Derechos Humanos y la Ley”.
El debido proceso como parte de los principios legales, por el cual el Estado mediante
sus órganos respectivos jurisdiccionales, en este caso el Órgano Judicial, está en la
ineludible tarea de guardar y hacer respetar todos los derechos legales que toda
persona posee conforme a ley; Por lo que el debido proceso como parte de los
principios jurídico procesales, por el cual toda persona está impregnado con todas las
garantías mínimas y propenso a afirmar con cabalidad de6 qué resultado de un
proceso debe ser justo e equitativo dentro la administración de un proceso judicial.
La línea jurisprudencial en nuestro país actual Estado Plurinacional, siempre a fue
rico en su contenido, por lo que la garantía al debido proceso legal, ha sido
consagrado en las diferentes Sentencias Constitucionales, que tiene el fin de evitar
posibles imposiciones de sanción sin haber cumplido una forma o un proceso anterior
justo con apego y observancia a la Constitución y demás Leyes del nuestro
Estado, de este modo transcribimos a continuación para su estudio la Sentencia
Constitucional Nº 1276/01-R: …CONSIDERANDO: “Que, el sistema constitucional
Boliviano ha adoptado como una de las garantías constitucionales de la persona el
debido proceso, que conforme ha definido este Tribunal en su Sentencia
Constitucional Nº 418/00-R, consiste en “el derecho de toda persona a un proceso
justo y equitativo en el que sus derechos se acomoden a lo establecido por
disposiciones jurídicas generales aplicables a todos aquellos que se hallen en una
situación similar”. La garantía del debido proceso comprende “el conjunto de
requisitos que deben observarse en las instancias procesales”, a fin de que “las
personas puedan defenderse adecuadamente ante cualquier tipo o acto emanado del
Estado que pueda afectar sus derechos”, entre ellos el derecho al Juez natural que
consiste en el derecho de toda persona inculpada o procesada ser enjuiciada ante un
órgano estatal (Juzgado o Tribunal) competente, independiente e imparcial…”.
La Sentencia constitución descrita, reafirma que como parte elemental del
constitucionalismo boliviano el debido proceso es parte elemental de las garantías
constitucionales, que tiene por objeto el de observar el cumplimiento de todos los
pasos procesales, para que finalmente la persona puede ejercer su derecho a la
defensa pronta y oportuna e enjuiciada por un Juez natural designada con
anterioridad al hecho. Así mismo las Sentencia Constitucional Nº 43/05-R, haciendo
mención al debido proceso, exige que las Resoluciones pronunciadas por los jueces
debieran de estar debidamente fundamentada y motivadas en la toma de su decisión,
que a la letra señala: …“La exigencia de la motivación de las resoluciones judiciales
se satisface cuando estas, de modo explícito o implícito contienen las razones o
elementos de juicio que permiten conocer cuáles han sido los criterios jurídicos que
fundamentan la decisión. En relación a esta exigencia el Tribunal Constitucional ha
establecido en la S.C. Nº 1369/01-R de 19 de Diciembre de 2001 que: “ el derecho al
debido proceso (…) exige que toda resolución sea debidamente fundamentada. Es
decir que cada autoridad que dicte una Resolución sea esta judicial o administrativa
debe motivar la misma con relación a los fundamentos que la llevan a tomar esa
determinación.
2.5.- ANÁLISIS DE LA NULIDAD COMO CAUSAL DE NULIDAD DEL LAUDO
ARBITRAL.-
De la revisión de todos los antecedentes expuestos podemos inferir que la falta de
motivación no es una causal de nulidad, expresamente determinada por la legislación
nacional, lamentablemente tampoco se ha podido constatar una Sentencia
Constitucional que sea clara a momento de determinar si la falta de motivación
determina o no la nulidad del laudo arbitral, ya que las examinadas contemplan la
nulidad de resoluciones judiciales o administrativas y si alguna de ellas ha
determinado la nulidad de algún laudo ha sido por evidenciar transgresión de la
autoridad judicail a sus competencias pronunciandose ultrapetitamente sobre los
recursos interpuestos, ya que la nulidad del laudo constituye en si un recurso de
revisión y no una segunda instancia, donde no existe valoraciones de pruebas,
limitándose la autoridad judicial a evidenciar la existencia o no de causales de nulidad.
Sin embargo consideramos que un Laudo Arbitral falto de motivación es contrario al
Orden Público, ya que un Laudo Arbitral carente de motivación, valoración de pruebas
y ante todo exposición de motivos lógicos y concretos sobre los que sustenta su
determinación está dañando y vulnerando el debido proceso, asimismo es contrario
a las propias exigencias del laudo arbitral dispuestas por la Ley 708.
La transgresión al debido proceso, constituye una vulneración de un derecho y
una garantía constitucional, Las garantías constitucionales se definen como los
medios o instrumentos que la Constitución Nacional pone a disposición de los
habitantes para sostener y defender sus derechos frente a las autoridades,
individuos o grupos sociales, es decir es el propio Estado el que recoge en su
máxima norma la inviolabilidad de estos derechos y cualquier autoridad que
administre justicia, o resuelva una controversia está en la inexcusable obligación de
cumplir con este mandato constitucional y así de claro lo ha dejado el Tribunal
Constitucional, máximo intérprete y guardián de la Constitución en hacerlo saber al
declarar nulas resoluciones judiciales, administrativas, que carecían de motivación,
por lo tanto se ha creado una completa línea jurisprudencial, la cual permite
determinar la existencia y aplicación de antecedentes jurídicos a casos análogos que
se presentan con posterioridad y que permiten una aplicación uniforme de la
interpretación de la norma jurídica.
Sin embargo consideramos que existe la necesidad de plasmar la línea jurisprudencial
en la norma, esto con el fin de que exista una aplicación uniforme en la administración
de justicia, como en la solución de controversias por parte del arbitraje, ya que
lamentable sería el escenario donde una autoridad considera que un Laudo Arbitral
falto de motivación sea nulo y para otra no lo sea, perjudicando a la parte afectada y
obligando a recurrir ante un peregrinaje mediante la interposición de acciones de
defensa, que lamentablemente conllevan factores económico y plazo desfavorables
para esta, por lo tanto añadiendo la falta de motivación como causal de nulidad
expresa este escenario podría ser fácilmente evitado.
3.- LEGISLACIÓN COMPARADA .-
A fin de continuar con el estudio de la problemática planteada se procede con la
revisión de normativa de diferentes estados, a fin de evidenciar si en los mismos, la
falta de Motivación del Laudo Arbitral es causal de nulidad del mismo o no.
Para tal efecto mencionamos que La razonabilidad, como principio general del
Derecho Público, intenta ordenar los medios por los cuales una actuación estatal
procura un fin, permitido constitucionalmente, de forma tal de no afectar el contenido
esencial de los derechos en su acción. Dicho de otra manera, consiste en un criterio
-compuesto por varios sub criterios- que busca medir la licitud de las limitaciones a
los derechos en pos de fines de bienestar general. (J. BARNES,
“El principio de proporcionalidad. Estudio preliminar”, Madrid, 1998). El principio de
razonabilidad expresado en la correcta motivación de las decisiones -en este caso en
el Laudo Arbitral-, se traduce en una garantía contra la arbitrariedad que intenta
ordenar los medios por los cuales se procura un fin.
Así pues, como lo expresa Tomás de Aquino en “La Suma Teológica” “actuar
racionalmente en función a un fin supone, previamente, actuar en base a razones”
(TOMAS DE AQUINO, Suma Teológica, I - II, p. 90). En efecto se requiere razones
para justificar tanto la valía del fin como la utilidad de los medios propuestos para
alcanzarlo, pues sin razones que motiven una conducta no puede existir un fin
racionalmente predetermindado por conquistar (CFR. NINO p. 75).
Es de esta manera que a fin de cumplir con el principio de razonabilidad, leyes de
diferentes estados ubican a la motivación como una exigencia a ser cumplida en la
elaboración del Laudo Arbitral;algunas de estas leyes son citadas a continuación a
efecto del objeto de la presente investigación:
En Bolivia, la ley 708 señala Artículo 103. (FORMA). I. El Laudo Arbitral deberá ser
motivado y suscrito por la o el Árbitro Único o por la mayoría de los miembros del
Tribunal (......)
Artículo 112. (CAUSALES DE NULIDAD DEL LAUDO ARBITRAL).
I. La autoridad judicial competente declarará la nulidad del Laudo Arbitral por las
siguientes causales: (.....) Laudo Arbitral contrario al orden público (.....).
PERÚ
De acuerdo al Artículo 56 del Decreto Legislativo Nº 1071, en actual vigencia en el
vecino Estado del Perú, se dispone: Artículo 56.- Contenido del laudo. 1. Todo laudo
deberá ser motivado, a menos que las partes hayan convenido algo distinto (......)
Artículo 63.- Causales de anulación. 1. El laudo sólo podrá ser anulado cuando la
parte que solicita la anulación alegue y pruebe:
a. Que el convenio arbitral es inexistente, nulo, anulable, inválido o ineficaz. (......)
f. Que según las leyes de la República, el objeto de la controversia no es susceptible
de arbitraje o el laudo es contrario al orden público internacional, tratándose de un
arbitraje internacional. (.....).
La legislación peruana establece, sin excepciones que todo Laudo que se emita en
un proceso arbitral deberá ser motivado, de lo que se deduce que se trata de una
obligación de corte legal o jurídico que ha de ser cumplido como cualquier otro
mandato de la ley, salvo el caso expresamente determinado de que las partes
acuerden que el Laudo Arbitral no debe cumplir con el requisito de motivación,
liberando así de dicha obligación al Tribunal Arbitral.
No obstante los dicho y deduciendo de lo expresado por la normativa citada, existen
dentro de la hermana república del Perú un número creciente de demandas de nulidad
del laudo arbitral por falta de motivación, aspecto que se encuentra reflejado en los
datos ofrecidos por el Centro de Conciliación de la Cámara de Comercio de Lima al
expresar en su página web que: “De los 821 recursos de anulación de laudo
presentados en Lima en un lapso de 7 años, 485 fueron planteados alegando defectos
en la motivación del laudo y 65 recursos se declararon fundados por este motivo”
haciéndose necesario a simple el ejercicio de la coercitividad que reside en el Estado
para sancionar el incumplimiento del requerimiento de motivación en los laudos
arbitrales.
COLOMBIA
De acuerdo al Artículo 104 del Decreto Legislativo Nº 1563, en actual vigencia en el
vecino Estado de Colombia, se dispone: Artículo 104. Forma y contenido del laudo.
El laudo arbitral consultará la siguiente forma y contenido: 1. El laudo se proferirá por
escrito y será firmado por el árbitro o los árbitros. En actuaciones arbitrales con más
de un árbitro bastará la firma de la mayoría de los miembros del tribunal arbitral o la
del árbitro presidente en su caso y se dejará constancia del motivo de la ausencia de
una o más firmas. La falta de una o más firmas no afectará la validez del laudo arbitral.
2. El tribunal arbitral deberá motivar el laudo, a menos que las partes hayan convenido
otra cosa, y en este caso, siempre y cuando ninguna de ellas tenga su domicilio o
residencia en Colombia, o que se trate de un laudo pronunciado en los términos
convenidos por las partes conforme al artículo 103.(......)
Artículo 41. Causales del recurso de anulación. Son causales del recurso de
anulación: (......) 5. Haberse negado el decreto de una prueba pedida oportunamente
o haberse dejado de practicar una prueba decretada, sin fundamento legal, siempre
y cuando se hubiere alegado la omisión oportunamente mediante el recurso de
reposición y aquélla pudiera tener incidencia en la decisión. (.....) 8. Contener el laudo
disposiciones contradictorias, errores aritméticos o errores por omisión o cambio de
palabras o alteración de éstas, siempre que estén comprendidas en la parte resolutiva
o influyan en ella y hubieran sido alegados oportunamente ante el tribunal arbitral.
Dentro el ordenamiento vigente en el país en estudio podemos citar así mismo con
referencia al tema de investigación, la Sentencia de la Corte Constitucional de
Colombia T-466 de 2011, resolución que señala: “Al igual que como ocurre con el
defecto sustantivo, el principio de estabilidad jurídica de los laudos arbitrales y el
carácter restringido de las vías para controlarlos imponen que la procedencia de la
acción de tutela para cuestionar la actividad probatoria de los árbitros esté sometida
a la demostración de una auténtica vía de hecho, por haber realizado una apreciación
de las pruebas caprichosa y carente de razonabilidad”.
Como se puede apreciar, en Colombia, desde el año 2011, por vía del control
jurisdiccional se ha emprendido la tarea de hacer efectiva la exigencia legal de
motivación de los laudos arbitrales, en este sentido, de acuerdo lo expresado por
Guillermo Poveda Cubillos en la “Revista digital de Derecho Público de la Universidad
de los Andes: ”la Corte Constitucional formalizó el régimen de procedibilidad de
tutelas contra providencias judiciales —categoría en la que se encuadra a los laudos
arbitrales— por medio de la sentencia T-462 de 2003. En esa misma sentencia agregó
cuatro supuestos adicionales a los defectos que se viene de aludir, estableciendo
como causales de procedibilidad adicionales: error inducido, decisión sin motivación,
violación directa de la Constitución y desconocimiento del precedente.”
ARGENTINA
Ley 27449 Art. 79.- El tribunal arbitral decidirá el litigio de conformidad con las normas
de derecho elegidas por las partes como aplicables al fondo del litigio. Se entenderá
que toda indicación del derecho u ordenamiento jurídico de un Estado determinado
se refiere, a menos que se exprese lo contrario, al derecho sustantivo de ese Estado
y no a sus normas de conflicto de leyes.
Art. 87.- El laudo del tribunal arbitral deberá ser motivado, a menos que se trate de un
laudo pronunciado en los términos convenidos por las partes conforme al Capítulo 3
de este Título.
Art. 99.- El laudo arbitral sólo podrá ser anulado por el tribunal indicado en el artículo
13 cuando: a) La parte que interpone la petición pruebe: (.....) II. Que el laudo es
contrario al orden público argentino.
De acuerdo a las fuentes investigadas, no se encuentra un pronunciamiento expreso
referente al tema de investigación –Nulidad del Laudo Arbitral por falta de Motivación-
a pesar de que normativamente es exigido el cumplimiento de ésta condición, existiría
cierta inconsistencia en la norma cuando la falta de motivación no es constituida
expresamente como causa de nulidad del laudo; con el advertido de que puede ser
obviada dicha motivación en caso de que el Laudo sea pronunciado en los términos
convenidos por las partes.
ALEMANIA
Ley de Arbitraje Nº 98 Artículo 1054 Forma y contenido del laudo. 1.- El laudo se
dictará por escrito y será firmado por el árbitro o los árbitros. En actuaciones arbitrales
con más de un árbitro bastarán las firmas de la mayoría de los miembros del tribunal
arbitral, siempre que se deje constancia de las razones de la falta de una o más firmas.
2.- El laudo del tribunal arbitral deberá ser motivado, a menos que las partes hayan
convenido en otra cosa o que se trate de un laudo pronunciado en los términos
convenidos por las partes conforme al artículo 1053.(......)
Artículo 1059 La petición de nulidad 1.- Contra un laudo arbitral sólo podrá recurrirse
ante un tribunal mediante una petición de nulidad conforme a los párrafos (2) y (3) del
presente artículo.
2.- El laudo arbitral sólo podrá ser anulado por un tribunal cuando: (.....) 2º el tribunal
compruebe: b.- que el reconocimiento o la ejecución del laudo conduciría a un
resultado que es contrario al orden público alemán (.....).
De acuerdo a la práctica legislativa habitual en materia de arbitraje; Alemania,
siguiendo la misma línea, establece de manera expresa como un requisito para la
emisión del Laudo Arbitral la motivación, a pesar de que en la ley aplicable ni a lo
largo de la investigación se logró ubicar precedente alguno dentro su ordenamiento
jurídico acerca de alguna medida coercitiva a ser aplicada por el incumplimiento de la
exigencia legal en estudio consideramos que toda orden emanada de la ley debe ser
cumplida o dicha ley debe ser modificada.
ESPAÑA
Artículo 37. Plazo, forma, contenido y notificación del laudo. (.....) 4. El laudo deberá
ser siempre motivado, a menos que se trate de un laudo pronunciado en los términos
convenidos por las partes conforme al artículo anterior.
Artículo 41. Motivos. 1. El laudo sólo podrá ser anulado cuando la parte que solicita
la anulación alegue y pruebe: (.....) f) Que el laudo es contrario al orden público.
La S.A.P de Sevilla , (Sección 5º), Num. 336/2010, de 07 de junio de 2010, (Aranzadi,
JUR 2010/377098), (ponente: Illmo. Sr. D Conrado Gallardo Correa), F.D. 3º: “la
jurisprudencia que interpreta el requisito de la motivación debe además ser aplicada
con especial flexibilidad en el caso de los Laudos Arbitrales, puesto que si se hiciera
una interpretación excesivamente amplia o rigurosa de la exigencia de la motivación,
equivaldría permitir a los tribunales determinar si la motivación es correcta y ajustada
al derecho, lo que abriría una vía que excedería de la competencia atribuída a los
tribunales en orden a la anulación de los laudos, la cual se limita a examinar si
concurre alguna de las causas de nulidad reguladas en el artículo 41.1 de la Ley de
arbitraje.”
Podemos destacar en la legislación española la exigencia de la motivación que debe
contener el Laudo; aunque los más notable en referencia a la normativa española es
el reconocimiento, mediante la S.A.P 336 / 2010, de la importancia del cumplimiento
del principio de razonabilidad en los laudos arbitrales, a pesar de que señala que
dicho cumplimiento ha de contemplar parámetros más flexibles, sin que esto quiera
decir decisiones menos razonables.
4.- CONCLUSIONES:
De la revisión de los antecedentes que conforman el Marco Teórico, la Legislación
Comparada y demás textos revisados podemos concluir los siguientes aspectos:
PRIMERO.-
La motivación comprende dar una respuesta congruente a todos los aspectos
sometidos a consideración, fruto de una controversia, ante una Autoridad, sea ésta
de carácter administrativo, judicial o designada por las propias partes, como en el
caso de los Métodos alternativos de Solución de Controversias, exponiendo las
razones en las que se ha fundado la resolución, la cual debe estar acorde a los
antecedentes del proceso y en especial la valoración de los elementos probatorios
producidos en el proceso, sometidos a contradicción entre las partes.
La motivación en materia de arbitraje, es un requisito establecido por ley,
concretamente por la Ley 708, sea que el proceso arbitral se halla desarrollado en
equidad o en derecho. Empero nuestra legislación Ley 708, no contempla
expresamente la falta de motivación del laudo arbitral como causal de nulidad, lo cual
significa siendo extremadamente positivistas que ante la interposición del recurso de
nulidad basado en esta causal esta debería ser rechazada.
Asimismo se debe tomar en cuenta que la voluntad de las partes y la resolución de
conflictos que surjan, deben tener carácter ejecutivo, dado que sin el mismo no tendría
sentido dicha resolución.
SEGUNDO.-
Sin embargo de las consideraciones previas, el incumplimiento de un requisito
establecido por ley, tal cual es la motivación de un Laudo Arbitral, conlleva privar a la
parte perdidosa, de los fundamentos por los cuales su pretensión o defensa ha sido
desestimada, causando un estado de incertidumbre en la misma, produciéndose de
esa forma una vulneración al debido proceso, que conforme se ha desarrollado en el
marco teórico, doctrinal y jurisprudencialmente está compuesto por el elemento
motivación, cualquier resolución que prescinda de motivación está vulnerando el
debido proceso y consiguientemente siendo contraria al Orden Público, el cual se ha
definido como el conjunto de normas, valores, inclusive costumbres propias del
Estado que garantiza a sus ciudadanos una convivencia armónica.
Un Laudo Arbitral contrario al Orden Público, es causal de nulidad del mismo, por lo
tanto es necesaria la relación y unión de ambos presupuestos de nulidad para
interponer el recurso, cumpliendo la parte formal que sería la invocación de la causal
que sería Contraria al Orden Público, mientras que la parte material sería la
demostración de una falta de motivación del laudo arbitral, para sustentar el recurso
de nulidad, por lo que a nuestra consideración pese a no estar establecida
expresamente como causal de nulidad, esta es procedente por su afectación al orden
público.
TERCERO.-
Como se ha manifestado la motivación no implica una excesiva o ampuloso redacción
de los fundamentos de una resolución, pero sí debe observar parámetros que han
sido delimitados por el Tribunal Constitucional, considerando a esta omisiones
trascendentes que impidan a las partes conocer con certeza porque su pretensión ha
sido desestimada.
CUARTO
De acuerdo a la normativa analizada se puede inferir que la obligación de la
motivación del laudo arbitral es una obligación de naturaleza legal o normativa, pero
que carece de coercitividad al momento de incurrir en su incumplimiento. En el mismo
sentido debemos aclarar que, todo tipo de Laudo Arbitral debe estar sujeto a tutela
mediante alguna acción pues, en cualquier escenario, el tribunal arbitral o los árbitros
son susceptibles de incurrir en conductas arbitrarias que den origen justificado al
planteamiento de la acción de defensa con el asidero de que cualquier decisión o
Laudo arbitral puede contener los mismos defectos en los que incurre un juez público
que administra justicia en la vía jurisdiccional.
QUINTO.-
Se ha demostrado que el derecho al debido proceso legal, debe estar debidamente
fundamentada y motivada en la pronunciación de las resolución y por ende no deben
afectar derechos y principios que toda persona posee en un determinado estado,
entonces el debido proceso constituirá una verdadera garantía constitucional que
protege al ciudadano.
CONCLUSIÓN FINAL Y SUGERENCIA.-
Por todo lo expuesto se ha evidenciado que la falta de motivación del Laudo Arbitral
es una causal de nulidad del mismo, empero esta debe invocarse como causal de
nulidad de ser un Laudo Contrario al Orden Público, por infringir la obligación de
motivar el laudo y principalmente por la afectación al derecho y garantía constitucional
de toda persona al debido proceso,
Sugerimos la implementación de la falta de motivación como causal de nulidad del
laudo arbitral, a fin de asegurar la aplicación uniforme de la línea jurisprudencial
emitida por el Tribunal Constitucional, ya que lamentable sería un escenario donde
estos fallos jurisprudenciales no sean debidamente aplicados por las autoridades
judiciales, quienes en última instancia son las que realizan la verificación de las
causales de nulidad del Laudo Arbitral.
5.- BIBLIOGRAFÍA
1.-BOLIVIA. “Constitución Política del Estado”.
2.-BOLIVIA. “Nuevo Código Procesal Civil”.
3.-CABANELLAS de Torres Guillermo. “Diccionario Jurídico Elemental”. Nueva
Edición. Edit. Heliasta).
4.- OSORIO Manuel. “Diccionario de Ciencias Jurídicas Políticas y Sociales”. Edit.
Edigraf. Bs.As. Argentina. 2007).
5.- QUIROZ CAMACHO Jorge Wilder y LECOÑA QUISPE Claudia Rosario.
“Constitución Política Del Estado”. 5ta. Edic. 2012.
6.-BOLIVIA. Sentencia Constitucional Nº 1276/01-R. Sucre, 5 de Diciembre de
2001.
7.- BOLIVIA. Sentencia Constitucional Nº 43/05-R de 14 de Enero de 2005
8.- SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0646/2017-S1 Sucre, 27 de
junio de 2017
ENLACES DE INTERNET
9.-https://arbitrajeraci.files.wordpress.com/2018/08/11-02-10.pdf
https://www.arbitrajeccl.com.pe/portfolio/1-anulacion-de-laudos-por-defectos-de-
motivacion/
10.-(https://www.arbitrajeccl.com.pe/portfolio/1-anulacion-de-laudos-por-defectos-de-
motivacion/);
11.-(https://www.iberley.es/temas/laudo-contrario-orden-publico-causa-anulacion-
laudo-62973)
(https://www.researchgate.net/publication/308929354_Contravencion_al_orden_publ
ico_como_motivo_de_anulacion_del_laudo_arbitral_en_la_reciente_jurisprudencia_
espanola)

12.-ttps://jurisprudenciaconstitucional.com/sentencias/18101-sentencia-constitucional-1765-
2013

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