Sunteți pe pagina 1din 8

Dolor crónico de tobillo

16 después de un esguince.
Lesiones nerviosas y distrofia
simpaticorrefleja
Sergio Tejero, Estefanía Prada Chamorro , José Juan Fernández Torres
y Andrés Carranza Bencano
Hospital Universitario Virgen del Rocío, Facultad de Medicina,
Universidad de Sevilla, Sevilla

LESIONES NERVIOSAS TRAS EL ESGUINCE DE (NPS). El espectro de lesiones a los que está sujeto
TOBILLO el estiramiento del NPS es amplio según la intensi-
dad de la entorsis de tobillo. En los casos moderados
Las lesiones por inversión y flexión plantar de tobi- prevalece la sensación de “acorchamiento”, disestesias
llo ejercen fuerzas que sobretensionan las estructu- o sensación de quemazón en la zona de recorrido del
ras pasivas ligamentarias ocasionando eventualmen- nervio. En lesiones más graves puede darse alodinia,
te el esguince del complejo lateral, medial o ambos. cambios de coloración y sudoración, o dolor espon-
El diagnóstico y el tratamiento de estas lesiones en táneo grave. Esta miríada de síntomas puede tornar-
el deportista están dirigidos a restaurar la longitud se rápidamente en un síndrome regional complejo al
y fuerza tensil del complejo ligamentario, siendo de que se le dedicará un apartado más adelante.
capital importancia restaurar la velocidad de contrac-
ción de la musculatura peronea y el mecanismo pro-
ANATOMÍA
pioceptivo previo a la reincorporación a la práctica
deportiva. El NPS es una rama del nervio peroneo común
No obstante, inicialmente no se atiende a las lesio- (NPC) y proporciona sensibilidad a la cara antero-
nes producidas por el estiramiento de las estructuras lateral del tobillo y dorso del pie. Este nervio suele
más superficiales como los nervios y restos de tegu- describirse como una rama única que se localiza en el
mentos. La inflamación y el hematoma son conse- compartimento lateral de la pierna. Desciende entre
cuencia de lesiones por estiramiento de la piel, vasos los músculos peroneos largo y corto y emerge por la
linfáticos, pequeñas vénulas, capilares, etc., cuya fascia crural entre 10 y 15 cm proximal a la articula-
hemorragia se suma a la provocada por la ruptura ción del tobillo, donde se convierte en subcutáneo,
ligamentosa. Estas lesiones son bien conocidas y se aunque pueden existir variantes anatómicas en las
tienen en cuenta en el proceso fisioterápico de recupe- que emerge a la superficie subcutánea más distalmen-
ración, pero las lesiones nerviosas son infravaloradas o te (un 2% a 5 cm del extremo distal del peroné y un
no diagnosticadas inicialmente y pueden dejar dolor 5% a 7,5 cm)2,3 (fig. 1). A menudo se divide aproxi-
crónico en el tobillo1. madamente unos 6 cm por encima del maleolo lateral
El nervio que más frecuentemente se ve afectado en en 2 ramas principales: las ramas medial e intermedia
este tipo de lesiones es el nervio peroneo superficial dorsal cutáneas, que posteriormente se ramifican para

99
S. Tejero et al

A B

Figura 1. A) Disección del nervio peroneo superficial y


el nervio sural, que pueden estar implicados en el dolor Figura 2. Cobertura del nervio peroneo superficial
residual debido a esguinces de tobillo por inversión. mediante fascia muscular de peroneos. En este caso se
B) Imagen de la salida del nervio peroneo superficial al trata de dolor de tipo neuropático procedente del nervio
plano subcutáneo a través del hiato de la fascia crural. peroneo superficial fibrosado y adherido a tejido celular
subcutáneo.

proporcionar sensibilidad a la cara dorsal del pie y del


primer dedo, y una rama dorsomedial para el cuarto
dedo. Por otro lado, retromaleolar lateral discurre el sea crónico o agudo, también podría limitar la
nervio sural que inerva la cara dorsolateral del pie y capacidad de deslizamiento nervioso del NPS.
termina como el nervio cutáneo dorsolateral del quin- – Un aumento de la presión compartimental mus-
to dedo2 (fig. 1). cular durante el ejercicio limitaría el deslizamien-
to proximal del nervio.
– Un atrapamiento nervioso por contracción vigo-
HISTOPATOLOGÍA
rosa de los músculos peroneos podría comprome-
Durante la inversión normal del tobillo, el NPS ter el recorrido activo del NPS.
posee un alargamiento longitudinal de unos 4 cm que
normalmente se transfiere desde el NPC por su capaci- Desde un punto de vista histológico, los casos gra-
dad de deslizamiento y estiramiento sin ninguna reper- ves de esguinces de tobillo podrían provocar un estira-
cusión patológica. No obstante, durante una inversión miento nervioso tal que llevaría a lesiones perineurales
extrema de tobillo pueden existir algunos factores que que implican posteriormente una fibrosis intraneural
podrían favorecer la aparición de síntomas sensitivos y perineural. Ello puede provocar un mayor o menor
en la cara lateral de tobillo-pie porque el estiramiento engrosamiento neural, lo que contribuye a una defici-
nervioso supera la capacidad fisiológica de alargamien- taria capacidad de deslizamiento y estiramiento ner-
to. Estos factores, aunque no demostrados, se pueden vioso (fig. 2).
enumerar según las siguientes hipótesis3:
SÍNTOMAS
– Influye el nivel al que emerge al plano subcutáneo
(hiato de la fascia crural) el NPS. En las variantes Los síntomas relacionados con la lesión nerviosa
anatómicas, la disposición del hiato fascial más dependerán de la gravedad de la lesión del tejido neu-
distal permitiría menos estiramiento del nervio a ral. No es infrecuente obviar la exploración nerviosa y
los mecanismos de inversión. centrarse únicamente en la lesión ligamentaria o con-
– Un atrapamiento del nervio a nivel del hiato, ya secuencias intraarticulares del esguince, tales como las

100
Dolor crónico de tobillo después de un esguince. Lesiones nerviosas y distrofia simpaticorrefleja

lesiones condrales. Por ello, en un número no des- TRATAMIENTO


deñable de pacientes se pierde la posibilidad de un
tratamiento precoz, sobre todo en los casos más graves Como norma, el tratamiento no quirúrgico debe
que desencadenan en un cuadro doloroso persistente. ser la base inicial del abordaje de las complicaciones
En general, las lesiones nerviosas tras el esguince de nerviosas de los esguinces de tobillo. Sin embargo, en
tobillo se pueden dividir en 3 grupos: pacientes no respondedores a tal tratamiento y con
sospecha de atrapamiento nervioso, el tratamiento
– El primer grupo consiste en síntomas desenca- quirúrgico no se debe demorar demasiado tiempo.
denados por una tracción leve del nervio. Los El tratamiento farmacológico se basa en el abordaje
pacientes presentan un dolor medido con EVA de diferentes vías de dolor. Se pueden utilizar analgé-
(Escala Visual Analógica) de intensidad 4-7, sicos, antiinflamatorios no esteroideos (AINE), medi-
acompañado de entumecimiento o alodinia. A cación de control de la excitabilidad del tejido ner-
la palpación y percusión del nervio tras la inver- vioso, tramadol y otros narcóticos. La selección de la
sión y la flexión plantar se objetiva una hipersen- modalidad del tratamiento dependerá del componen-
sibilidad en su recorrido. Suelen mejorar en 4-6 te del dolor, pero en general la alodinia o sensación
semanas. de quemazón precisará de medicación específica para
– El segundo grupo corresponde al de pacientes el nervio. Entre los fármacos que pueden prescribirse
que presentan síntomas y signos significativos de para esta modalidad de dolor se encuentran la prega-
irritación nerviosa. Histopatológicamente existen balina (75 mg) o la gabapentina (300 mg), incremen-
cambios fibrosos del nervio tanto a nivel micros- tando la dosis hasta conseguir un control del dolor
cópico (daño intraneural) como a nivel macros- minimizando los efectos secundarios. La amitriptilina
cópico (daño perineural). A la inspección puede o la carbamacepina son otros fármacos utilizados en
observarse el engrosamiento tras la inversión, la las clínicas del dolor6.
flexión plantar y el estiramiento del cuarto dedo. El tratamiento tópico también puede ser efectivo
Ocasionalmente también puede desencadenarse en estos pacientes. La capsaicina, ingrediente activo
hipersensibilidad a nivel de la salida a través de de la pimienta roja, causa una depleción de la sus-
la fascia crural denotando atrapamiento a dicho tancia P interrumpiendo la transmisión del nervio
nivel. En estos pacientes puede estar indicada la periférico cuando se aplica en su territorio. El efec-
descompresión quirúrgica del hiato. to adverso más común (la sensación de quemazón y
– Por último, en el tercer grupo se incluye a los enrojecimiento de la zona) puede aminorarse con la
pacientes con dolor neuropático que presenta aplicación previa de lidocaína en crema. También se
una distribución más allá del territorio inerva- pueden utilizar preparaciones de AINE, pero en este
do por el NPS. Describen una intensidad del caso no han demostrado gran beneficio en el dolor
dolor de 7-10 puntos en la escala EVA. Pre- neuropático. Por último, los parches de lidocaína
sentan dolor espontáneo y desproporcionado también tienen su efecto analgésico en este tipo de
que empeora durante la noche, calambres que dolor.
se desencadenan al mínimo roce, etc. A la ins- Por otro lado, los bloqueos repetidos de anestési-
pección se observan cambios vasomotores (color co pueden tener no solo un papel diagnóstico, sino
y temperatura) y edema de los dedos. A veces también terapéutico, aunque este fenómeno no está
no toleran la carga, por lo que el pronóstico de totalmente clarificado. La hipótesis se basa en detener
estos pacientes se torna grave. Por ello se reco- los impulsos aferentes al sistema nervioso central para
mienda pensar en este síndrome lo antes posi- impedir la perpetuación del dolor neuropático. Se
ble, ya que el tratamiento precoz (ya sea médico pueden utilizar mezclas de anestésicos de vida media
o quirúrgico) podría acortar este invalidante corta, como la lidocaína, y de vida media larga, como
cuadro clínico4,5. la bupivacaína o la ropivacaína (efecto de 24 h), con
agujas finas (25 G) para evitar daño nervioso. Si es

101
S. Tejero et al

posible, y se dispone del entrenamiento adecuado, casos en los que los autores han obteniendo resul-
se recomienda administrarlos mediante visualización tados preliminares alentadores (fig. 2).
ecográfica, evitando la inyección en el torrente circu- – Otra opción consiste en la implantación de un
latorio, pues puede causar arritmias ventriculares. Se neuroestimulador del nervio que genere impul-
estima que si un bloqueo responde favorablemente sos no dolorosos para el paciente y de esta forma
y el dolor remite en 2-3 días, el efecto de bloqueos impida el paso de estímulos dolorosos. Esta téc-
repetidos puede tener una buena tasa de éxito en más nica se puede realizar sobre nervios amputados
de un tercio de los pacientes con este problema3. para evitar el dolor del muñón de amputación o
también en nervios aparentemente íntegros, pero
con daño intrínseco y que no han respondido a
Tratamiento quirúrgico
la neurólisis.
Si el tratamiento médico no es efectivo se pue-
de contemplar la opción quirúrgica. En general, en Con las técnicas descritas, estudios a largo plazo
casos constatados de atrapamiento del NPS, la libe- han reportado tasas de buenos resultados del 78%7,8.
ración a nivel de la fascia crural responde favora-
blemente. Sin embargo es importante informar al
DISTROFIA SIMPATICORREFLEJA
paciente sobre las expectativas de la cirugía nerviosa,
cuyos resultados son difíciles de precisar. Hay casos La distrofia simpaticorrefleja (DSR) es una enfer-
en los que se observan adhesiones al nervio que medad compleja (código CIE-9-MC [Clasificación
deben ser liberadas, pero en otros existe un daño Internacional de Enfermedades, Novena Revisión,
intrasustancia en el que la neurólisis obtiene resulta- Modificación Clínica] 733.7) cuyas causas se desco-
dos poco predecibles: nocen y que puede tener consecuencias graves. Es
habitual que el diagnóstico sea tardío. Normalmente
– La neurólisis a nivel de la fascia se realiza fácil- se produce tras traumatismos, fracturas o esguinces
mente en caso de atrapamiento, abriendo 3-5 cm y produce una sensación de “quemazón importante”
el hiato de salida del NPS. El cirujano puede con trastornos tróficos de la piel y un fenómeno de
observar el libre movimiento del nervio con la exquisita sensibilidad y dolor al mínimo roce o estí-
inversión-eversión de tobillo. mulo conocido como “alodinia”. Al parecer, el sistema
– Cuando se producen cicatrices alrededor del ner- simpático queda anormalmente activado, producien-
vio, este debe ser liberado a sabiendas de que en do sustancias que activan los nociceptores y perpe-
el plazo de 1-2 años desde la cirugía esas cicatri- túan el dolor al tiempo que se producen trastornos
ces pueden haberse formado nuevamente. vasomotores permanentes.
– Al liberar el nervio, si no existe una mejoría de El término “síndrome de distrofia simpaticorrefleja”
los síntomas es probable que el daño sea intraner- (introducido por Evans en la literatura médica en
vioso. En tal caso, si el dolor es invalidante (EVA 19469) ha recibido varias denominaciones, todas ellas
8-10), el cirujano debe considerar la amputación imprecisas. Algunas denotan el origen del trastorno,
del NPS enterrando el muñón proximal en el otras los mecanismos del dolor y otras la evolución
peroné. La pérdida de sensibilidad en el dorso de este. Así, se le ha llamado síndrome de causalgia
del pie es tolerable. Sin embargo, tras hacer esta (mayor y menor), atrofia de Sudeck, algodistrofia,
intervención hay casos en los que no desaparece algoneurodistrofia, distrofia refleja neurovascular, sín-
el dolor de tipo neuropático, sobre todo cuando drome de Steinbrocker, osteoporosis postraumática,
llevan mucho tiempo de evolución. distrofia postraumática, vasoespasmo postraumático,
– Con anterioridad a una amputación del NPS, edema crónico postraumático, simopatalgia, etc. A
y como tratamiento paliativo, se recomienda partir de 1994, la IASP (International Association for
envolver el nervio fibrosado para prevenir fibro- Study of Pain)10 reunió todas estas definiciones bajo el
sis mediante la fascia de los músculos peroneos, término “síndrome doloroso regional complejo” para

102
Dolor crónico de tobillo después de un esguince. Lesiones nerviosas y distrofia simpaticorrefleja

denotar el dolor regional y los cambios autonómicos mico. Esta inflamación proviene de la liberación de
y sensitivos que exceden en intensidad, magnitud o sustancias vasodilatadoras con aumento de la excita-
ambos a un fenómeno traumático. bilidad de las fibras sensitivas.
Así, el síndrome doloroso regional complejo quedó Estos fenómenos inflamatorios locales asociados a
clasificado en tipo I (DSR) y tipo II (causalgia). El una isquemia tisular forman parte de la hipótesis que
tipo I se caracteriza por la existencia de un carácter podría explicar la desmineralización ósea.
desproporcionado entre el traumatismo inicial y la En los Países Bajos, tratando de encontrar un posi-
sintomatología con mantenimiento de dolor, alodinia ble factor genético, Kemler et al encontraron que en
o hiperalgesia, junto a cambios en la coloración de la 52 pacientes cuidadosamente seleccionados con DSR
piel y sudoración. En el tipo II el dolor es producido la frecuencia de HLA-DQ1 fue significativamen-
esencialmente por una definida y demostrable lesión te superior a los controles, pero este factor genético
del nervio periférico y sus ramas, pero sin la distribu- requiere mayores estudios14.
ción correspondiente al nervio afectado y con rasgos Existe una posible implicación de trastornos psi-
acompañantes del tipo I. copatológicos en el desarrollo y mantenimiento de la
algodistrofia, aunque hay autores que defienden que
el trastorno psicopatológico podría ser la consecuen-
FISIOPATOLOGÍA
cia en lugar de la causa del trastorno15,16.
Las hipótesis fisiopatológicas son numerosas y com-
plicadas e incluyen diferentes mecanismos de altera-
PRESENTACIÓN CLÍNICA
ciones motoras, sensitivas y autonómicas periféricas y
centrales, junto a cambios inflamatorios, interacción Lo más característico de la presentación clínica es
de las catecolaminas y componentes genéticos y psi- que la intensidad de los síntomas es desproporcionada
copatológicos11,12. a la gravedad del traumatismo.
Las hipótesis fisiopatológicas periféricas se basan en Aunque la irradiación del dolor suele ser distal
perturbaciones del sistema nervioso simpático, con al sitio del evento inicial, en el 70% de los casos el
alteraciones del tono vasomotor, modificaciones de dolor se irradia a áreas distantes (no contiguas) sin un
la temperatura cutánea, trastornos de la sudoración y patrón neuropático y sin seguir la zona de inervación
modificación del flujo sanguíneo. Esta alteración del de un dermatoma, y puede ser tan caprichosa como
sistema nervioso simpático presentará una hipertonía la diseminación “en espejo” en la extremidad contra-
o hipotonía, pero en todos los casos el resultado será lateral sana. Algunos casos pueden aparecer espontá-
una hipersensibilidad a las catecolaminas por aumen- neamente, sin un evento precipitante.
to del número o de la sensibilidad de los receptores El dolor se describe habitualmente como de tipo
adrenérgicos. quemante o urente, asociado a rigidez muscular o
Las hipótesis centrales con repercusión medular, articular, sensación de edema, trastornos en la sudo-
talámica o cortical están establecidas en la fisiopato- ración local y alteraciones de la sensibilidad como alo-
logía, pues permiten explicar los trastornos motores dinia térmica, hiperalgesia y disestesias y es frecuente
en relación con fenómenos de plasticidad neuronal encontrar eritema localizado (primera fase). Con el
medular, disfuncionamiento del córtex premotor, así tiempo, el dolor se intensifica (segunda fase); la alo-
como modificaciones de la excitabilidad. Los trastor- dinia térmica es mayor; aparece edema de la extremi-
nos centrales cognitivos pueden igualmente intervenir dad, con cambios en la coloración de esta (palidez o
con fenómenos de negligencia o de seudonegligencia cianosis) y grave restricción de los arcos de movimien-
para alcanzar percepciones sensitivas y dificultad de to articular correspondientes. Posteriormente (tercera
reconocimiento de la posición del miembro13. fase) aparece atrofia muscular por desuso, atrofia de
Los fenómenos inflamatorios son calificados habi- la dermis y epidermis, y contracturas musculares. Si
tualmente como seudoinflamatorios por ser un fenó- el manejo no se inicia precozmente, el cuadro clínico
meno puramente local sin síndrome biológico sisté- evoluciona casi inevitablemente a la cronicidad grave.

103
S. Tejero et al

DIAGNÓSTICO

No hay una prueba específica para diagnosticar la


DSR. El consenso global es que el dolor es la piedra
angular en la entidad junto al grado de alteraciones
inflamatorias, vegetativas y distróficas necesarias para
asegurarlo.
Son interesantes los criterios de Harden18:

1. Dolor continuo desproporcionado en relación


con un elemento desencadenante no importan-
Figura 3. Imagen de distonía con una contracción tónica
te.
involuntaria, incoercible, localizada en los extensores del 2. Alodinia, hiperalgesia o dolor continuo que no
primer dedo. se encuentran limitados al territorio de un único
nervio periférico y parecen desproporcionados
para el traumatismo desencadenante.
3. Presencia actual o previa de edema, anomalías en
En el curso de la algodistrofia se pueden presen- el flujo sanguíneo cutáneo, actividad seudomo-
tar numerosas anomalías motoras, como temblores, tora anormal y disfunción motora desproporcio-
movimientos involuntarios, espasmos musculares y nada para el evento inicial.
un trastorno muy raro, pero que puede ser muy gra- 4. Exclusión de otros procesos que puedan ser res-
ve, como la distonía (contracción tónica involuntaria, ponsables del dolor o la alteración funcional.
incoercible, localizada en ciertos grupos musculares
sin ninguna sistemática funcional). Es pues una acti- Los datos analíticos sugestivos de inflamación agu-
tud fija debida a una hipertonía muscular permanente da (velocidad de sedimentación glomerular, proteína
de la región traumatizada o que se puede desarrollar C reactiva, recuento leucocitario y otros reactantes
a distancia. Esta afecta fundamentalmente a los flexo- de fase aguda) suelen ser normales. Sin embargo —y
res, pero se puede localizar en los extensores (fig. 3). puesto que puede aparecer asociada a entidades como
Su fisiopatología es complicada y se considera debida diabetes, infección por herpes, tumores, artrosis o
a una participación del sistema nervioso periférico alteraciones tiroideas— tampoco es posible hacer un
y, posiblemente, a una disfunción de la transmisión diagnóstico por exclusión en caso de encontrar analí-
refleja monosimpática y polisimpática17. ticas normales.
Las algodistrofias parciales afectan a algunos huesos La radiología ha sido la prueba objetiva más fia-
del pie y eventualmente pueden evolucionar en un ble. Hasta un 80% de los casos presentan osteope-
segundo tiempo hacia una forma locorregional, pero nia regional en la radiografía simple, pero aun con
pueden mantenerse aisladamente en un sesamoideo o esta característica, la radiología siempre es posterior
alcanzar a 1 o 2 metatarsianos. a la clínica. Se propone que la densitometría selectiva
Las algodistrofias parcelares se limitan al interior podría ser un medio precoz para el diagnóstico. Las
de un hueso, en una epífisis con contornos borrosos series hablan de un 30 a un 70% de incidencia de
respetando la lámina ósea subcondral. atrofia de Sudeck en cualquier tipo de DSR. Inicial-
Las algodistrofias migratorias se caracterizan por mente, la pérdida de mineral se hace más patente en
presentar focos múltiples de algodistrofia de desarro- las zonas de predominio de hueso esponjoso.
llo sucesivo en el tiempo con un tamaño limitado. El estudio gammagráfico en 3 fases con tecne-
Son formas muy perturbadoras porque se constatan cio-difosfonato muestra alteraciones en el 60% de
de forma sucesiva a nivel del pie de varios focos par- los pacientes con DSR; el diagnóstico es más precoz
celares. que con la radiología convencional. La gammagrafía

104
Dolor crónico de tobillo después de un esguince. Lesiones nerviosas y distrofia simpaticorrefleja

muestra aumento de la captación del radionúclido en Es importante entender que el tratamiento debe
las 3 fases con imágenes alteradas en todas las arti- ser multidisciplinario, con el objetivo de controlar
culaciones. La especificidad de la prueba es elevada los síntomas y restaurar la función. Como ya se ha
(97%); su sensibilidad varía según las series, pero comentado, esto incluye tratamiento farmacológico,
alcanza el 96% en la gammagrafía a las 3 h. bloqueos nerviosos, psicoterapia y fisioterapia19.
En la resonancia magnética, los cambios que se Lamentablemente, es necesario aclarar que no exis-
aprecian en la DSR (hiperemia transitoria y edema te una pauta fija protocolizada para abordar el trata-
medular, con aumento de la intensidad de señal en miento de este síndrome (esencialmente por la varia-
T2 y disminución en T1) aparecen en fases precoces, bilidad de formas de presentación y su complejidad)
pero son absolutamente inespecíficos y además van ya que en algunos casos, pese a una correcta aplicación
cambiando y normalizándose conforme evoluciona la de la escalada terapéutica, la evolución es tórpida.
enfermedad.
La electromiografía presenta alteraciones en la cau-
salgia, mientras que en los tipos no debidos a altera- Bibliografía
ciones nerviosas el resultado de estas pruebas es nor- 1. Nitz AJ, Dobner JJ, Kersey D. Nerves injuries and grade II
mal. and III ankle sprains. Am J Sport Med. 1985;13:177-82.
2. Blair JM, Botte MJ. Surgical anatomy of the superficial
peroneal nerve in the ankle and foot. Clin Orthop Relat
TRATAMIENTO Res.1994;305:229-38.
3. Melamed E, Zinman C. Nerve Injuries complicating inver-
El diagnóstico precoz es fundamental para un pro- sion ankle sprains. En: Baxter E. Baxter’s the foot ankle in
nóstico favorable. Es evidente que si se controla el sports. 2nd ed. Philadelphia: Mosby Elsevier; 2008. p. 502-7.
dolor postraumático se prevendrá la aparición de una 4. Bennett GJ. Are the complex regional pain syndromes due
algodistrofia. Es necesario limitar la inmovilización to neurogenic inflammation? Neurology. 2001;57:2161-2.
5. Weber M, Birklein F, Neundörfer B, Schmelz M. Facilitat-
y movilizar al paciente lo más rápidamente posible. ed neurogenic inflammation in complex regional pain syn-
La vitamina C parece que puede prevenir de manera drome. Pain. 2001;91:251-7.
significativa las algodistrofias. 6. Monfared H, Sferra JJ, Mekhail N. The medical manage-
La terapia oral farmacológica constituye el primer ment of chronic pain. Foot Ankle Clin. 2004;9:373-403.
escalón terapéutico, en el que, entre otros, puede 7. Eisenberg E, Waisbrod H, Gerbershagen HU. Long-term
peripheral nerve estimulation for painful nerve injuries. Clin
emplearse gabapentina (antiepilépticos), bifosfona- J pain. 2004;20:143-6.
tos que podrían suprimir localmente el alto nivel 8. Schon LC, Lam PW, Anderson CD, Easley ME, Trnka HJ,
de remodelado óseo origen de la desmineralización, Levin GB. Preliminary results of peripheral nerve stimula-
antagonistas del calcio, iones, vitamina C, agonistas tion for intractable, lower extremity nerve pain. Pain Med.
del GABA (ácido gammaaminobutírico), corticoides 2000;1:195.
9. Evans JA. Reflex sympathetic dystrophy. Surg Gynecol
y tratamientos tópicos (en general poco eficaces). Obstet. 1946;82:36-43.
Un segundo paso sería la aplicación de tratamien- 10. Merskey H, Bogduk N. Classification of Chronic Pain:
tos parenterales (como ciclos de anestésicos locales Descriptions of Chronic Pain Syndromes and Definitions of
por vía intravenosa), o bien la realización de bloqueos Pain Terms. 2nd ed. Seattle: IASP Press; 1994.
11. Bruehl S. An update on the pathophysiology of complex
anestésicos nerviosos locales, como inyecciones en el
regional pain syndrome. Anesthesiology. 2010;113:713-25.
ganglio estrellado o en la cadena simpática paralum- 12. Jänig W, Baron R. Complex regional pain syndrome is a
bar, estimulación medular, infiltraciones intratecales, disease of the central nervous system. Clin Auton Res.
electroestimulación nerviosa transcutánea (solo en 2002;12:150-64.
casos muy indicados, pues puede empeorar el cua- 13. Damiano J. Algodystrophies (CRPS1): physiopathologie et
présentations cliniques. Med Chir Pied. 2015;31:94-6.
dro), etc.
14. Kemler MA, De Vet HC. Health-related quality of life in
La reeducación funcional es fundamental con una chronic refractory reflex sympathetic dystrophy (complex
puesta en carga precoz bajo control del dolor, pues es regional pain syndrome type I). J Pain Symptom Manage.
necesario que no sea dolorosa. 2000;20:68-76.

105
S. Tejero et al

15. Hemler DE, McAuley Ra, Belandres PV. Common clini- 17. Giraud-Morelet A. La dystonie, complication atypique dans
cal presentations among active duty personnel with trau- l’algodystrophie. Med Chir Pied. 2015;31:97-8.
matically induced reflex sympathetic dystrophy. Mil Med. 18. Harden RN, Bruehl S, Stanton-Hicks M, Wilson PR. Pro-
1988;153:493–5. posed new diagnostic criteria for complex regional pain syn-
16. De Mos M, De Bruijn AG, Huygen FJ, Dieleman JP, drome. Pain Med. 2007;8:326-31.
Stricker BH, Sturkenboom MC. The incidence of complex 19. Rewhorn MJ, Leung AH, Gillespie A, Moir JS, Miller R.
regional pain syndrome: a population-based study. Pain. Incidence of complex regional pain syndrome after foot and
2007;129:12-20. ankle surgery. J Foot Ankle Surg. 2014;53:256-8.

106

S-ar putea să vă placă și