Sunteți pe pagina 1din 14

Ubicación geográfica de Europa

Al sur, Europa está separada del continente africano por el mar Mediterráneo, frontera
que se reduce a unos pocos kilómetros en el estrecho de Gibraltar, al sureste los límites
con Asia también están dados por el Mediterráneo y sus mares subsidiarios, el mar de
Mármara y el mar Negro.

Mapa Físico
Mapa Geográfico

Mapa Político
LOS PAISAJES DE EUROPA
Europa es el segundo continente más pequeño del mundo, tras Oceanía; tiene una extensión de
10.359.358 km², lo que representa el 7% de las tierras emergidas. En la actualidad está
compuesto por 49 países, incluyendo Rusia y Turquía, aunque la mayor parte de sus territorios
sea asiática. Su distancia máxima de Norte a Sur es de 4.300 km y de Este a Oeste de 5.600
km. Se sitúa en el Hemisferio Norte. Está unido a Asia, configurando una enorme península
dentro de lo que se denomina Eurasia, y debe sus características de individualidad, además de a
elementos físicos, a rasgos de orden histórico y humano.
Limita con el mar por tres de los cuatro puntos cardinales. A grandes rasgos, con el océano
Ártico al norte, el océano Atlántico al oeste y el mar Mediterráneo al sur, lo que evidencia una
importantísima influencia oceánica dada su amplia fachada formada por casi 38.000 km de
costas y que, además, lo llega a caracterizar como uno de sus rasgos físicos más importantes,
determinando el clima en la mayor parte del continente. Al este su límite es continental y, según
la mayor parte de los geógrafos, lo sitúan al pie oriental de los montes Urales hasta llegar al mar
de Mármara.

El continente se caracteriza también por poseer una gran parte de terrenos macizos pero a la
que se contrapone una parte mucho más articulada, compuesta por islas y penínsulas. Las islas
representan el 8% y las penínsulas el 27% de Europa. El contorno de estas islas y penínsulas es
muy diverso y accidentado por la gran extensión de sus costas.

-
RELIEVE
Europa es el continente más llano, con una altura media de 230 metros. La máxima expresión
de estas planicies es La gran llanura del Norte, que se extiende 2.000 km desde las costas
atlánticas francesas hasta los montes Urales, la frontera física con Asia. Los puntos más altos
son el monte Elbrus (Rusia) en Europa oriental (5.642 m), el Shkhara (Georgia) (5.204 m) y el
Mont Blanc (Francia) en Europa occidental (4.807 m).
Entre los golfos de Europa destacan el Golfo de Vizcaya (Francia-España) y el Golfo de Botnia
(Suecia-Finlandia). Los estrechos europeos más importantes son el Paso de Calais (Francia-
Reino Unido), el de Gibraltar (España-Marruecos), el de Dardanelos (Turquía), el del Bósforo
(Turquía), el de Messina (Italia), el de Oresund (Dinamarca-Suecia), etc.

Sus principales penínsulas son la Escandinava, Ibérica, Itálica y Balcánica, además de las
penínsulas de Kola (Rusia), Jutlandia (Dinamarca), Bretaña (Francia) y Crimea (Ucrania).

Sus principales islas son:

1. Gran Bretaña, con más de 218.000 km², es parte del Reino Unido.
2. Islandia, con más de 103.000 km², constituida como República de Islandia.
3. Irlanda, con más de 70.000 km², cuya mayor parte pertenece a la República de Irlanda y la
porción nororiental al Reino Unido.
4. Sicilia, con más de 25.000 km², es parte de Italia.
5. Cerdeña, con más de 24.000 km², es parte de Italia.
6. Córcega, con más de 8.700 km², es parte de Francia.
7. Creta, con más de 8.300 km², es parte de Grecia.
8. Selandia, con más de 7.500 km², es parte de Dinamarca.
9. Eubea, con más de 3.900 km², es parte de Grecia.
10. Mallorca, con más de 3.600 km², es parte de España.
11. Fionia, con más de 3.400 km², es parte de Dinamarca.
-CLIMA
El continente europeo es una zona templada en su mayor parte. Su clima no sólo varía de norte
a sur sino también de oeste a este a causa de las corrientes de aire polar marino y polar
continental, y en menor medida de las corrientes de aire tropical marino y tropical continental.
En países de la zona mediterránea como España, Italia, Grecia y el sur de Francia, las
temperaturas son más calurosas. Sin embargo, en el interior de Europa el efecto moderador del
mar desaparece, y los países del este de Polonia experimentan condiciones climáticas mucho
más frías y secas.

En Europa se pueden distinguir los siguientes climas:

 Clima mediterráneo: entre los 30º y los 45º de latitud se puede encontrar el clima
mediterráneo. De él cabe destacar la aridez que se produce durante el verano provocada por el
anticiclón subtropical, y la humedad del invierno debida al frente polar. Las masas de aire que se
encuentran son de tipo tropical marítimo o continental y polar marítimo. Las masas de aire polar
marítimo que afectan a esta zona en primavera, otoño e invierno son las responsables de la
mayor parte de las precipitaciones en este clima, siendo las estaciones más lluviosas las
intermedias: otoño y primavera. En invierno pueden aparecer, localmente, anticiclones térmicos.
Las temperaturas son suaves, ya que durante el año apenas varían unos 15 °C.
 Clima oceánico (o Atlántico): es un clima que comprende las orillas del océano Atlántico y va
desde Noruega hasta la costa norte de Portugal. Hacia el interior del continente el clima oceánico
va desapareciendo y se convierte en clima continental. Posee una humedad constante y
temperaturas moderadas sin grandes oscilaciones, que aumentan de oeste a este, al aumentar
la continentalidad. Las abundantes precipitaciones también disminuyen hacia el este y, en
general, son superiores a 1000 mm anuales con máximos en el invierno.
 Clima continental: se caracteriza por el contraste entre las precipitaciones, altas temperaturas
del verano y el frío seco del invierno. Las altas temperaturas del verano hacen que la
evaporación del agua que cae en forma de chaparrones sea muy alta.
 Clima de tundra: se da entre los 60 y 80 grados de latitud, en Rusia y al norte de Noruega,
Suecia y Finlandia. Se caracteriza por escasas precipitaciones (alrededor de 250 mm de media) y
un frío constante con máximas de 10 °C durante todo el año. Esto hace que el agua se acumule
en cenagales y se cree una capa de hielo en el suelo que lo mantiene escaso de nutrientes y con
una biodiversidad baja.
 Climas de montaña: en el clima de montaña la temperatura disminuye de 0,5 a 1 °C con cada
100 metros de altura, lo que aumenta la humedad relativa del aire y provoca precipitaciones.
-HIDROGRAFÍA
Un área relativamente pequeña y un relieve poco elevado impiden a Europa disponer de ríos de
la longitud del Amazonas. Entre los grandes ríos se cuentan el Rin, el Danubio, el Volga y el Don,
destacando los ríos en las llanuras rusas. Los ríos al occidente:

 Duero, Tajo, Ebro, Támesis, Loira y Garona.


Los ríos al centro:

 Vístula, Sena, Rin y Danubio.


Europa está rodeada por agua de diferentes formas:

Océanos y mares: el océano Atlántico tiene mayor volumen, y sus constantes oleajes y mareas
moldean las costas del noroccidente de Europa. Alrededor de Europa están los mares de
Noruega, Blanco, de Barents, Báltico, de Irlanda, del Norte, el Canal de la Mancha, el Cantábrico
y el Mediterráneo, dividido éste en mares menores como el Tirreno, el Adriático, el Jónico y el
Egeo. También destacan el mar Caspio y el mar Negro. Algunos mares europeos se encuentran
comunicados entre sí por estrechos, como el de Gibraltar, el de Dardanelos, que une el mar de
Mármara con el Negro, y el de Kerch, que une el mar Negro con el Azov.
Regímenes hídricos: se han determinado a partir de las condiciones de la posición longitudinal
de Europa, de las diversas formas del relieve y de las variaciones en las condiciones climáticas
del continente. Se puede considerar la siguiente división de los regímenes hídricos:
Mediterráneo, cuyos ríos Atlántico, cuyos ríos Planicie Oriental, cuyos
ríos
 Están condicionados por la  Tienen cuencas muy extensas  Atraviesan grandes
estrechez de sus cuencas  Son favorecidos por los planicies de Europa oriental
 Tienen poca longitud terrenos planos (Rusia)
 Nacen en terrenos altos con Tienen grandes longitudes  Presentan recorridos largos
fuertes pendientes
 Son muy caudalosos por las Originan estuarios en sus  Presentan caudales
condiciones abruptas del desembocaduras variables
relieve y las condiciones  Facilitan la construcción de  En invierno se congelan
fuertes del clima en puertos  En verano son navegables
invierno  Pertenecen a este régimen los Pertenecen a este régimen
 Arrastran grandes ríos: los ríos: Volga, Danubio,
cantidades de sedimentos Rin, Vistula, Elba, Tajo, Loira, Ural, Dniéper, Don,
 Son poco navegables Moza, Oder, Sena, Duero, Dniester, Pechora, Dvina
 Pertenecen a este régimen Garona, Fornea, Weser, Serpentrional, Nieven
los ríos: Ebro, Po, Ródano, Guadalquivir, Umea, Támesis,
Maritza, Tíber Glomma.
Lagos de Europa: ocupan una extensión de 77.000 Km2; la mayoría se originaron por la acción
de las glaciaciones y el tectonismo. Los lagos europeos se pueden agrupar de acuerdo con su
ubicación:
 Lagos septentrionales: son de origen glacial, formados por el retroceso y la sobreexcavación de
las lenguas glaciales. Destacan los lagos de Finlandia y Rusia, dentro de los cuales sobresalen el
Ladoga, el Onega, el Saimaa y el Peipus
 Lagos alpinos: algunos son de origen glacial, otros de origen tectónico; se encuentran a lo largo
de la cadena alpina y forman hermosos paisajes como los lagos suizos; en Hungría destaca el
Balatón; en Italia el lago Mayor y el lago de Garda
 Lagos mediterráneos: son de menor tamaño pero muy profundos; sobresale el lago formado por
la Albufera de Valencia y el mar Menor de España; los lagos del Rosellón en Francia y los deltas
de los ríos Ródano, Po y Danubio, que al momento de desembocar forman cuerpos de agua
cerrados e interconectados con el mar.
-VEGETACIÓN
La mayor zona de vegetación de Europa, que divide la mitad del continente desde el Atlántico
hasta los Montes Urales, es un cinturón de árboles de hoja caduca y coníferas: robles, arces,
olmos mezclados con pinos y abetos. Las regiones árticas de la Europa septentrional y las
vertientes superiores de sus montañas se caracterizan por una vegetación de tundra, constituida
fundamentalmente por líquenes, arbustos y flores salvajes.

Buena parte del centro de Europa padece lluvia ácida, debida al alto grado de industrialización
de la zona. En 2005 entró en vigor la norma europea para limitar la contaminación atmosférica:
las ciudades de más de 250.000 habitantes de la Unión Europea no deben superar los 50
microgramos (0,05 mg) de partículas por metro cúbico de aire ambiental, que debe ser el
umbral máximo para 35 días al año, y el valor medio anual no debe superar los 40 microgramos.
Sin embargo, las normas anti-contaminación ya en vigor no eran respetadas: en 2002, 11 países
habían superado el margen autorizado.

La contaminación marítima también es un problema, generada por el turismo, el vertido de


sustancias contaminantes al mar, como metales pesados (cromo, plomo, etc.), pesticidas, aguas
fecales, fertilizantes a base de nitratos y fosfatos, que favorecen la proliferación de algas,
accidentes de petrolero, etc. Se calcula que los barcos pesqueros tiran al mar anualmente cerca
de 150.000 toneladas de sedal, redes de plástico y otros residuos. Estos residuos, al no ser
fácilmente degradables, dañan a los animales marinos, que intentan comérselos o se enredan en
ellos.
El mar Adriático es diez veces más rico en fosfatos que la media, como consecuencia de los
vertidos procedentes de la cuenca del río Po. Los mares Mediterráneo, del Norte y Báltico
también presentan altos grados de contaminación.

Cultura

Lenguas

Desde el I milenio antes de Cristo (por lo menos), Europa estuvo dominada por pueblos
indoeuropeos, que hablaban varias lenguas, pero unidas por rasgos comunes.1 Si bien existe
evidencia arqueológica y genética de que antes de los indoeuropeos hubo aportes desde Próximo
Oriente ligados principalmente a la expansión de la agricultura. Existen algunas pocas evidencias de
las lenguas preindoeuropeas de Europa si bien es difícil clasificar adecuadamente estas lenguas.

Dentro de las lenguas indoeuropeas, muy temparamenamente a partir del I milenio a.C. es posible
distinguir la mayor parte de grupos modernos: las lenguas latinas, germánicas, eslavas, celtas,
bálticas, así como el griego y el albanés (por otro lado el grupo indoeuropeo también se extendía
ampliamente por Asia, incluyendo Irán y el subcontinente indio).2 Entre los pueblos modernos de
Europa siguen existiendo hablandes de lenguas no-indoeuropeas como: el vasco el húngaro, el finés
y el estonio. Si bien parece que el idioma vasco es el único idioma preindoeuropeo (el etrusco era
otra lengua preindoeuropea ampliamente documentada, y existen vestigios de otras lenguas
preindoeuropeas en Italia, Grecia, Creta y Chipre).

Desde la introducción de la escritura en Europa, las lenguas europeas se han escrito usando
alfabetos derivados del alfabeto fenicio, estos alfabetos incluyen el alfabeto griego, el alfabeto
latino o el alfabeto cirílico (un derivado del alfabeto griego adaptado a los sonidos eslavos), entre
otros (rúnico, glagolítico, etc.). En algunos países, especialmente al norte y al este del continente,
las versiones locales del alfabeto latino tienen también una gran cantidad de signos "diacríticos"
para reproducir los sonidos locales.

En los límites del este y del sur del continente existían otros alfabetos: alfabeto georgiano y el
armenio en el Cáucaso.

Historia

Antigüedad e influencia romana

Además de los factores lingüísticos, religiosos y demográficos, el principal factor de evolución


cultural han sido los cambios socioeconómicos. Durante el primer I milenio a. C. en Europa
predominaron las jefaturas y en el centro y norte de Europa las sociedades pueden considerarse
seminómadas, por lo que los procesos migratorios fueron importantes durante el período
protohistórico. Las condiciones ambientales más favorables en el sur de Europa y la agilidad de la
comunicación marítima frente a otras formas de comunicación, favoreció la aparición de los
primeros estados centralizados en la cuenca mediterránea. A partir del Imperio Romano existió un
potente estado centralizado en el sur de Europa cuya influencia se extendía desde el norte de África
hasta el centro de Europa y de Este a Oeste, esto produjo un importante proceso de convergencia
cultural. Previamente los arqueólogos y los historiadores registraban un cierto número de
sociedades guerreras matrilineales, pero eventualmente la aparición de estados centralizados, la
sendentarización y el proceso de formación de ciudades afianzó los modelos patrilineales y el
patriarcado. Hacia el inicio de la Alta Edad Media Europa presentaba una notable diferencia entre
el sur más urbano y densamente poblado y el centro y norte, más rural y menos densamente
poblado. El proceso de romanización afectó fundamentalmente al sur de Europa, y en el norte el
Imperio romano tuvo un impacto no tanto cultural sino comercial y en menor medida tecnológico.

Edad media y cristianización

En la Edad Media hubo una segunda ola de convergencia económica, tecnológica y social, en parte
impulsada por el proceso de cristianización del Europa central y septentrional. Si bien políticamente
Europa estuvo entonces políticamente más divida que durante el período romano. La existencia de
grandes imperios como el imperio merovingio, el Sacro Imperio Romano Germánico o el Imperio
Bizantino favorecieron el proceso de uniformización cultural, en parte ayudado por la existencia de
una religión común, que ocasionalmente amortiguó los conflictos entre países rivales si bien
también dio lugar justificar numerosos conflictos como guerras de religión. En cualquier caso, el
proceso de convergencia cultural en Europa fue mucho más allá que en otros continentes como
América, África, Oceanía o la mayor parte de Asia septentrional.

François Guizot, historiador y político francés, propuso en su trabajo Historia de la civilización en


Europa (1828) que fue el feudalismo el punto de arranque de la civilización en Europa, tras
sobreponerse del caos posterior a las diversas invasiones producidas entre los siglos V y VIII:

Los principios de civilización han sido la necesidad de orden, los recuerdos del Imperio Romano, la
Iglesia cristiana, los bárbaros. Tentativas de organización por los bárbaros, por las ciudades, por la
Iglesia de España, por Carlomagno, por Alfredo. La invasión germánica y la invasión árabe se
detienen. Comienza el régimen feudal3. (...) en el siglo X el régimen feudal era necesario, era el
único estado social posible, es la universalidad con que se estableció. Allí donde cesa entonces la
barbarie, todo toma la forma feudal4.

François Guizot, Historia de la civilización en Europa (1828)

Los historiadores medievalistas García de Cortázar y Sesma Muñoz señalan en su trabajo Manual de
Historia Medieval (2014) la etapa carolingia como punto de arranque de una futura conciencia de
unidad europea:5

Junto a su discutido papel en el tránsito de una sociedad a otra, la época carolingia dejó otro legado
menos discutible: una memoria histórica en la que el vocablo «Europa» empezaba a abrirse paso
como idea-resumen de un nivel de civilización, bienes y valores que había que defender frente a
enemigos calificados como bárbaros. Sin perfiles geográficos muy precisos, cada vez resultaba más
claro que esa Europa era, ante todo, el espacio en que habitaba una población dispuesta a escuchar
los mensajes difundidos en nombre de una Iglesia romana. En esa identificación de un territorio y
una población con la Cristiandad latina hallamos, en vísperas del año 1000, el embrión de Europa.

García de Cortázar, Sesma Muñoz, Manual de Historia Medieval (2014) p.1665

Si bien el caso de uniformización cultural en Europa no es único en el mundo. Bajo la expansión del
Islam en África y Asia, otras regiones como el norte de África, Oriente Próximo, India o el Sureste
Asiático llegarían a experimentar procesos de uniformización equiparables a los encontrados en
Europa. Y por otra parte, el influjo de la cultura y la economía del mundo chino, llevarían también a
una cierta uniformización cultural de Extremo Oriente y las regiones adyacentes.

Edad Moderna y expansión europea

A partir de la Edad Moderna, debido a una serie de factores sociales y económicos, se produjo la
expansión europea hacia otros continentes, inicialmente hacia América y sur de Asia y
posteriormente también hacia África. Antes de ese periodo la economía europea era de tipo feudal
pero a partir del período colonial se desarrollaría un cambiante modo de producción típicamente
capitalista. Fue en ese período colonial que apareció una cultura europea más altamente uniforme,
y apareció una conciencia eurocéntrica donde muchos europeos imponian su cultura al resto de
civilizaciones del planeta. Previamente, los europeos sólo habían confrontado su cultura frente a la
del mundo islámico, de cuya cultura en muchos aspectos Europa era deudora. A partir del siglo XVII,
Europa empezó a ser militarmente hegemónica frente a otras regiones del planeta, aunque China e
India poseían economías más productivas durante el siglo XVIII. Sólo en el siglo XIX, Europa tuvo una
economía y un poderío militar sin rival en otras regiones del mundo.

Emer de Vattel, historiador y filósofo, escribió en 1758 durante la Guerra de los Siete Años su opinión
sobre los elementos comunes a todos los europeos, el orden y la libertad:

Las continuas negociaciones hacen de la Europa moderna una especie de república, cuyos
miembros, independientes entre sí, pero unidos todos por un interés común, se unen para
mantener el orden y conservar la libertad. Esto es lo que ha hecho surgir el conocido principio de
equilibrio del poder, el cual significa un arreglo de los asuntos de manera que ningún Estado tenga
predominio absoluto ni domine a todos los demás.

Emer de Vattel.6

Edward Gibbon, historiador británico, también señaló el carácter unitario del continente: «se puede
considerar que Europa es una gran república cuyos distintos habitantes han alcanzado
prácticamente el mismo nivel de educación y cultura».7 Montesquieu también se refirió a Europa
como una entidad unificada en base a intereses comunes: «La situación en Europa es que todos los
Estados dependen unos de otros. Francia necesita la riqueza de Polonia y Moscovia, al igual que la
Guyena necesita a la Bretaña y la Bretaña a Anjou. Europa es un solo Estado compuesto de varias
provincias».6

Edad contemporánea y democratización

A partir de la revolución francesa (1789) y otras revoluciones liberales (s. XIX) empezó a emerger
una nueva clase social en Europa denominada burguesía. Hasta entonces el campesinado había sido
la clase social abrumadoramente mayoritaria. Durante el siglo XIX el proceso de urbanización y la
revolución industrial alteraron el peso económico y social del campo y las ciudades, lo cual acarreó
a su vez cambios económicos, sociales, culturales y políticos. Cuando a finales del siglo XX el sistema
colonial europeo de ocupación territorial empezó a ser abandonado, en las sociedades europeas
crecieron los movimientos políticos que cuestionaban el sistema patriarcal tradicional y se
opusieron a los sectores más conservadores de las sociedades. La mayor parte de sistemas políticos
pasaron de ser sistemas autocráticos (monárquicos o dictatoriales) a regímenes democráticos o
liberales a una escala que nunca antes había sido puesta en práctica.
José Ortega y Gasset, filósofo y ensayista español, destacó en esta edad contemporánea de Europa
como elementos clave en la construcción del continente los elementos democracia liberal y
desarrollo técnico:

Esta civilización del siglo XIX [la europea] —decía yo— puede resumirse en dos grandes
dimensiones: democracia liberal y técnica. Tomemos ahora sólo la última. La técnica
contemporánea nace de la copulación entre el capitalismo y la ciencia experimental. (...) Sólo la
técnica moderna de Europa tiene una raíz científica, y de esa raíz le viene su carácter específico, la
posibilidad de un ilimitado progreso Esta maravillosa técnica occidental ha hecho posible la
maravillosa proliferación de la casta europea. Recuérdese el dato de que tomó su vuelo este ensayo
y que, como dije, encierra germinalmente todas estas meditaciones. Del siglo V a 1800, Europa no
consigue tener una población mayor de 180 millones. De 1800 a 1914 asciende a más de 460
millones. El brinco es único en la historia humana.

José Ortega y Gasset, La rebelión de las masas, (1923)8

Si bien Europa en la Antigüedad, la Edad Media y la Edad Moderna se había caracterizado por la
existencia de regímenes autocráticos, el esclavismo, la servidumbre del campesinado o la
explotación de mano de obra forzada en las colonias, el avance de la noción de derechos civiles llevó
a Europa y otras regiones del planeta a abogar por sistemas democráticos, caracterizados por un
Estado de Derecho y un Estado Social que cambiaría profundamente los patrones culturales de las
sociedades europeas, y en particular hizo retroceder enormemente el conservadurismo clásico
típico del siglo XIX.

Religiones y espiritualidad

Antigüedad

Desde la Antigüedad los pueblos indoeuropeos practicaron cultos que tenían mucho en común. Los
sistemas mitológicos germanos, celtas, eslavos, griegos y latinos tenían características comunes,
tales como la creencia en una "tríada" divina fundamental, y la división de los hombres en varias
categorías de rango social distinto.

Véase el simbolismo de el lobo en la cultura europea

Esta visión del mundo ha dado forma a las sociedades más recientes, incluso más allá de la
cristianización, como se muestra en la obra de Dumézil, comparando las sociedades medieval e
hindú.

Romanización y cristianización

Más tarde, el Imperio Romano estableció una religión oficial en todos los territorios que
administraba; las creencias de los griegos y el politeísmo romano casi no merecen ser consideradas
como religiones en la actualidad, pero siguen siendo referencias de gran alcance en las culturas
europeas actuales utilizadas en la literatura, la pintura, la escultura, la música, la filosofía y hasta el
psicoanálisis. La expansión del cristianismo en Europa tuvo varias fases, en una primera fase estuvo
restringida al territorio oriental del Imperio Romano, por la acción de predicadores que formaron
numerosas comunidades. El edicto de Milán (313 d. C.) estableció la libertad religiosa en el imperio
y el edicto de Tesalónica (380 d. C.) lo convirtió en religión oficial, por lo que el cristianismo a partir
de entonces tuvo una notable expansión desplazando al paganismo que inicialmente quedó
relegado a las regiones más rurales.

Los pueblos germánicos inicialmente no profesaron el cristianismo sino que mantuvieron sus
creencias ancestrales. Algunos germanos aun cuando adoptaron el cristianismo lo hicieron bajo la
forma del arrianismo, y no fue hasta el final de la Alta Edad Media que el centro y norte de Europa
fueron mayoritariamente católicas. Durante siglos existió unidad religiosa, aunque diversos cismas
como el ortodoxo y la reforma protestante dividieron a Europa en diversas confesiones cristianas.
El cristianismo, en sus diversas formas (catolicismo, ortodoxo, protestante) unificó el continente y
se transmitió una forma de cultura común. Se ha hablado así de la civilización de las catedrales en
la Edad Media.

Perry Anderson, historiador inglés y ensayista político, señala en su obra El Nuevo Viejo Mundo
(2009) en relación al origen de la conciencia europea como algo que arranca de la Edad Media
cristiana, pero que eclosiona en el siglo XVIII:

Pero aunque es objetivamente cierto que Europa nació en este período [la Edad Media], este
proceso no vino acompañado de una conciencia subjetiva general. Para la gente de la época, su
mundo era la cristiandad. (...) El término Europa no se dio a conocer hasta mucho después, hacia
finales del siglo XVI, en la coalición que luchaba contra Luis XIV. Todavía en 1713 el Tratado de
Utrecht invocaba a la Respublica Christiana, y dos años después Leibniz criticaba el proyecto de paz
perpetua en Europa del abate de Saint-Pierre, que había colaborado en las negociaciones, en
nombre de la cristiandad, una noción mucho más sagrada para él. Hubo que esperar al giro secular
dela Ilustración para que la noción de Europa adquiriera una acepción sólida, y empezara a designar
una civilización unitaria.

Perry Anderson, El Nuevo Viejo Mundo (2009)7

Voltaire, en su obra El siglo de Luis XIV definió la Europa del siglo XVIII como una entidad unida en
lo religioso pero dividida en lo político:9

Desde hacía mucho tiempo la Europa cristiana podía considerarse (incluyendo Rusia) como una
especie de gran república dividida en varios estados, unos monárquicos, los otros mixtos; éstos
aristocráticos, aquéllos populares, pero relacionados todos los unos con los otros; con un mismo
fundamento religioso, a pesar de estar divididos en diversas sectas, e iguales principios de derecho
público y de política, desconocidos en las demás partes del mundo.

Voltaire, El siglo de Luis XIV (1751) p.59

A partir de finales del siglo XVIII, con movimientos intelectuales como la Ilustración apareció el
fenómeno del secularismo, que desde entonces ha ido ganando espacio en la Edad Contemporánea.

Presencia del Islam

A partir del siglo VIII el Islam fue introducido en el sur de Europa, afectando a las costumbres y la
arquitectura regional. A partir del siglo XV los turcos osmanlíes introdujeron el Islam en Los Balcanes
por lo que en esa región existen grupos étnicos autóctonos de religión musulmana (en Europa
occidental la presencia musulmana autóctona perduró sólo hasta la expulsión de los moriscos en
1609.)
A partir del siglo XX los procesos migratorios aportaron importantes contingentes demográficos
procedentes de África y Asia, muchos de los cuales profesaban la religión islámica, por lo que a
principios del siglo XXI existían minorías musulmanas de origen alóctono en la mayor parte de
Europa Occidental.

Administración y Derecho

Grecia y Roma influyeron en la conformación de una cultura política y jurídica común en los países
europeos (y países que están o han estado bajo la influencia de la política europea). Si bien en
Europa se practicó activamente el esclavismo, la servidumbre del campesinado, y el uso de mano
de obra forzada durante el colonialismo, la noción de democracia, centralización y codificación de
textos (estado de derecho) son nociones que se retrotraen a la antigüedad clásica.

Desde la Edad Media, se desarrolló un pensamiento jurídico y político común en el continente (con
autores de referencia reconocidos en todos los países: Tomás de Aquino, Maquiavelo Hobbes,
Locke, Montesquieu, Rousseau, etc.), a pesar de que los estados estaban divididos políticamente y
en conflicto entre ellos.

La filosofía europea reciente y las revoluciones liberales inspiraron las constituciones de todos los
estados del continente (y, a menudo las de otros estados, con distintos grados de éxito), y también
las instituciones europeas (UE, Consejo de Europa, etc.) valores fundamentales expresados en el
Convenio Europeo de Derechos Humanos, son reconocidos por casi todos los países del continente
en la actualidad y de gran parte del mundo moderno.

Sin embargo, la extensión del modelo jurídico y político grecorromano se encontró con la resistencia
de otro modelo, llamado derecho anglosajón, marcado por un sistema de derecho consuetudinario
y una administración poco centralizada.

Durante siglos, los dos modelos han coexistido en Europa (el primero en el Sur y en la cultura de
países católicos, el segundo en el Norte y en la tradición de los países protestantes) no sin
dificultades, sobre todo en países como Francia, Bélgica y Alemania, en el límite de la tradición
romana y la tradición germánica, del derecho positivo y el derecho consuetudinario.

Manifestaciones artísticas

Arquitectura

Puerta de Brandeburgo de la Berlín.

Parlamento de Budapest de la Budapest.

Desde la antigüedad, muchas de las principales corrientes arquitectónicas se desarrollaron en toda


Europa, hasta más allá de sus fronteras.

En el I milenio antes de Cristo los griegos fundaron colonias por todo el Mediterráneo, seguidos por
los romanos; exportaron su arquitectura, su escultura y su literatura a los países que ocuparon. En
la periferia de estos territorios se desarrollaron movimientos artísticos originales, en contacto con
las civilizaciones celta, Ibérica ... Pero el lugar de esta cultura es más importante en el mundo
mediterráneo (el Mare Nostrum) que en la propia Europa (el arte grecorromano está
particularmente bien representado en África del Norte y Oriente Medio). En el Norte, los arquitectos
están influidos por la cultura celta, que tuvo un notable dominio de los metales y el cobre.

Sin embargo, la civilización romana sobrepasó la costa mediterránea después de la Guerra de las
Galias, alcanzó el Rin y los límites de Escocia.

Las invasiones del final del Imperio Romano perturbaron la situación: el arte grecorromano se
extinguió con la decadencia de las grandes ciudades, mientras que se difundió un arte de inspiración
germánica, más áspero y rústico, relacionado con el arte celta. Sin embargo, puesto que el Imperio
bizantino permaneció en el Este, sus cánones arquitectónicos, y el uso del mosaico se desarrolló en
Italia; este país permaneció abierto a las influencias bizantinas hasta la toma de Constantinopla en
1454.

Todo esto dio como resultado los cambios culturales de la Edad Media, que se verán sometidos a
múltiples influencias:

Influencia celta, germánica y normanda; llegada del norte y muy impregnada de "paganismo",
introdujo un estilo propio en la arquitectura, el arte y especialmente en la literatura (la difusión de
mitos como la Mesa Redonda, adaptaciones cristianizadas de creencias paganas); que alcanza hasta
el extremo sur del continente (en Sicilia, por ejemplo);

La influencia latina: las lenguas procedentes del latín como el provenzal y el italiano (pero también
la lengua de oïl, antepasada del francés) se convirtieron en lenguas de amplia difusión literaria;

Influencia árabe-islámica: España fue un lugar de cruce cultural entre el Islam, el cristianismo y el
judaísmo, y el atractivo por la orilla sur del Mediterráneo aumentó durante las Cruzadas; la
arquitectura, la literatura y las artes decorativas se enriquecieron con motivos orientales;

Influencia grecobizantina: fue muy fuerte en las ciudades mercantiles italianas (que a menudo
tienen relaciones comerciales con Grecia), y se refleja sobre todo en la arquitectura; Italia será
pionera en el redescubrimiento del arte de la antigua Grecia, que tuvo lugar desde el siglo XIII, dos
o tres siglos antes que en otros países europeos); en los países eslavos, la evangelización por los
bizantinos fue acompañada por la propagación de la arquitectura griega y de motivos pictóricos
griegos)

S-ar putea să vă placă și