POESÍA HISTÓRICA

Francisco de Quevedo Poemas

Francisco de Quevedo nació en el año 1580 y creció en una ilustre familia de la

época. Su padre ocupaba una posición importante en el reinado de Felipe II, por lo
que Francisco siempre estuvo rodeado de gente de la corte. Recibió una buena
educación demostrando su talento muy temprano. Con sólo 15 años Quevedo
obtuvo la licenciatura en Teología en la Universidad de Alcalá. La curiosidad lo
llevó a indagar otros campos de la ciencia. Estudió jurisprudencia, medicina,
matemáticas y muchas otras ciencias, adquirió un extraordinario aprendizaje, el
que a menudo excesivamente reflejaba en sus obras.

Muchas obras de Francisco Quevedo no pasaron más allá del manuscrito, aunque
un gran número de sus creaciones fue difundido. Escribió libros académicos sobre
diversas ramas del conocimiento, tales como teología y filosofía, cuentos
cotidianos, así como muchas obras poéticas en sus formas más diversas. Mucho
tiempo después de la muerte del poeta, su sobrino publicó una colección de sus
poemas titulada «El Parnasso español, monte en dos cumbres, dividido con las
nueve musas castellanas».

Un hecho interesante en la historia de este poeta es la numerosa colección de

buenos poemas publicados por Quevedo en 1631, los que atribuyó al autor

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Francisco de la Torre. Los historiadores de la literatura española por mucho
tiempo discutieron sobre si realmente existió un Francisco de la Torre o éste es el
seudónimo del propio Quevedo.

Lope de Vega

El legendario poeta y dramaturgo español Félix Lope de Vega y Carpio, más

conocido como Lope de Vega, el autor de 2000 piezas teatrales y de 3000
sonetos, llegó al mundo el 25 de noviembre del año 1562 en Madrid, España.

La biografía de Lope de Vega, refleja la biografía de España de los siglos 16-17,

en ella se destacan serenatas españolas y la campaña de la Armada Invencible.

En 1609, Lope de Vega se convirtió en un sirviente voluntario de la Inquisición,

adquiriendo este título bastante oficial. Y cinco años más tarde el dramaturgo
incluso tomó la dignidad sagrada.

Su personalidad combinaba matices de escritor, científico, funcionario público,

fabricante de imágenes y hasta un secretario del mismo conde Alba. Tenía la
capacidad de escribir historias y poemas realistas mezclando lo cómico y lo
trágico.

Sus obras teatrales más conocidas son “El perro del hortelano”, “Fuente ovejuna”,
“Maestro de bailes”.

Y, por supuesto, ¿qué hombre español olvida sus raíces? Lope de Vega fue
español de pura sangre. «El Cantar de mío Cid», muestra las raíces españolas,
los genes españoles del escritor. Estos genes están inmersos en sus dramas

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históricos: por ejemplo, «El Conde de Fernán González», «La juventud de Bernard
del Carpio».

Sor Juana Inés de la Cruz

Juana Inés de Asbaje y Ramírez fue una monja mexicana nacida en las
proximidades de la Ciudad de México en el pueblo de San Miguel de Nepantla el
12 de noviembre de 1651, escribía bajo el nombre de la hermana Sor Juana Inés
de la Cruz, se convirtió en una de las figuras más distinguidas de la literatura
castellano-hispánica de la segunda mitad del siglo XVII. Al cumplir los 6 años, ya
sabía escribir, coser y bordar, que en aquellos tiempos se consideraba una
educación integral para las mujeres. A los ocho años, Juana se había leído todo el
archivo de libros del abuelo, incluyendo obras de filosofía, teología y medicina. A
los 9 años, su madre la envió a la ciudad de México a reunirse con su tía y tío, una
familia bien acomodada de la época. En 1664, a los 13 años, Juana fue
presentada en el nuevo palacio, y pronto se ganó tal confianza, que la vice-reina la
hizo su primera dama de honor. Ella ocupó este cargo aproximadamente 5 años.
Luego se hizo famosa escribiendo poesías en español, idioma azteca, y también
en latín. Además escribió para actuaciones, conciertos nocturnos, fiestas
religiosas y para funerales.

En cuanto a su vida personal, tuvo gran cantidad de pretendiente, todos ellos eran
serios competidores para obtener su corazón. Por supuesto, ella misma estuvo en
más de una ocasión enamorada. Para llegar a tal conclusión basta con abrir un
volumen de sus poemas.

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Garcilaso de la Vega

Nació en Toledo en una familia de clase noble cercana a la corte. Se considera un

reformador de la poesía española. Con su trabajo contribuyó al triunfo de la nueva
«escuela italiana» con variadas formas de poesía (soneto, canciones y otros), las
que en el momento de la aparición de sus primeros poemas finalmente habían
entrado en el uso literario español.

El legado literario de Garcilaso consta de 38 sonetos, 5 poemas, 3 églogas, 2

elegías, epístolas y varias poesías, todas las obras han sido reeditadas muchas
veces. Hay en sus versos un anhelo desenfrenado por detener el tiempo, hacer
que lo material sea persistente.

En 1560 se trasladó a España, donde se alistó en el ejército. Participó como oficial

en la supresión del levantamiento de los moriscos de Granada (1568-1570) y
posteriormente se radicó en Córdoba y comenzó a trabajar en la literatura. A
principios del siglo XVII, se trasladó a Portugal, donde en 1605 publicó un libro
sobre la conquista de la Florida. Simpatizaba con los indios, que habían sido
víctimas de los conquistadores, de aquí nace su interés por escribir sobre ellos. En
1609 fue publicada la primera parte de su gran obra sobre la historia de los incas y
la conquista del Perú. La segunda parte fue publicada en 1617.

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Rubén Darío

Rubén Dario (1867–1916), es considerado el poeta más prominente de América

Latina, nació en la antigua ciudad de San Pedro de Metapa, hoy Ciudad Darío en
Nicaragua, pero pasó parte de su juventud en El Salvador y en otros países
centroamericanos. En 1886 se trasladó a Chile, donde publicó con gran éxito el
libro de poemas y relatos “Azul”, anunciando así el principio del movimiento
modernista, caracterizado por un lenguaje refinado y la sonoridad lingüística entre
otras características. Muchos de los poemas y cuentos que integran la colección
fueron escritos por el poeta durante su estancia en Chile.

Dario tuvo una enorme influencia no sólo en los poetas contemporáneos de

América Latina, sino también en la llamada «Generación de 1898» surgida durante
la crisis española provocada por la guerra hispano-estadounidense. La creatividad
del poeta Rubén Darío tuvo un gran significado para el desarrollo de la poesía
hispana, creando una nueva tendencia literaria que abarcó a todo el mundo
hispano, transformó radicalmente el vocabulario poético y estableció criterios
estéticos puros en la poesía. La fuerza lírica y la profundidad de la poesía de Dario
se confirman en las siguientes colecciones: El canto errante, 1907, El poema del
otoño, 1910), Canto a la Argentina, 1910 entre otras.

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Juan Ramón Jiménez

Juan Ramón Jiménez fue uno de los más celebres poetas de España. Él glorificó a
su ciudad natal con sus maravillosas poesías y con una historia prosaica
asombrosa «Platero y yo».

Nació el 24 de diciembre de 1881, en Moger (provincia de Andalucía), España,

cuando aún no tenía 16 años, comenzó a editar sus primeros poemas en las
revistas españolas.

La forma creativa de Jiménez dejó una extensa herencia poética y está dividida en
tres periodos: temprano (1898-1904), «modernista» (1905-1915) y el período de
obras de madurez (después de 1915). La primera publicación de Jiménez fue una
colección de estrofas poéticas (Rimas, 1902) que fue seguida por Arias tristes
(1903) y Jardines lejanos (1904). El tema principal en estos libros es el amor. En
las primeras poesías se nota la influencia de los simbolistas franceses. Más tarde
Jiménez sintió el impacto de las corrientes poéticas más radicales y mayormente
escribió elegías: Elegías puras, (1908), Elegías intermedias (1909), Elegías
lamentables (1910), La Soledad Sonora (1911). Formalmente, en estas poesías se
destaca la esencia musical (aunque obviamente mucha importante se le da
también al color), pero domina la nota melancólica de preocupación, pensamientos
de soledad y la muerte.

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Gabriela Mistral

Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, comúnmente conocida

bajo el seudónimo de Gabriela Mistral (1889-1957). Gabriela fue una brillante
poetisa chilena, maestra, diplomática, activista social, una luchadora por los
derechos de las mujeres y también la primera de América Latina en obtener el
premio Nobel de Literatura. Su patrimonio literario es muy amplio, este incluye
poemas, prosas líricas, crítica literaria y canciones de cuna. Como bien dijera el
crítico literario Margot de Vázquez «La creatividad de Mistral es completamente
original, ella tiene su propia voz».

Gabriela nació en el pueblo andino de Vicuña, hija de un maestro de escuela

primaria de origen indio y madre descendiente vasca. Su padre fue trovador por
vocación, escribía poesías para las fiestas rurales, lo que influyó notablemente en
la vocación de su hija. Cuando Gabriela tenía tres años, él se ausentó de su casa
y nunca más regresó a la familia. Más tarde, ella y su madre junto a su media
hermana se trasladan a la ciudad de Monte Grande.

Desde los 16 años, aún sin recibir el certificado de estudios terminados, Gabriela
comenzó a enseñar en una escuela provincial. Al mismo tiempo, poco a poco
comenzó a publicar sus artículos y poemas en los periódicos locales.

En 1907 inspirada en los acontecimientos sufridos durante el fallecimiento de una

persona muy querida por ella, Lucila creó su primera obra poética de valor,
«Sonetos de la Muerte». En el concurso anual literario chileno de Santiago, sus
sonetos lograron el primer lugar, y el mundo conoció a una nueva poetisa.

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Federico García Lorca

El célebre poeta, escritor de textos literarios, obras teatrales y una de las figuras
más prominentes de la cultura española del siglo XX Federico García Lorca nace
en el seno de una notable y acomodada familia el 5 de junio del año 1898 en el
pueblo Fuente vaqueros de la provincia española de Granada. Desde muy
temprana edad muestra su talento en diferentes artes a pesar de no destacarse
durante los estudios de escuela. En la década de 1910, Federico participa
activamente en la vida de la comunidad artística local. Ingresa en la universidad de
Granada en el año 1914 y comienza estudios de derecho y filosofía, aunque nunca
ejerció esta profesión debido a su interés por la poesía y la literatura.

En 1918 Lorca publicó su primera colección poética “Impresiones y paisajes”,

gracias a la cual comenzó su popularidad a pesar de no haber tenido éxito
comercial. En 1919 García Lorca viaja a Madrid donde conoce a destacados
artistas y escritores de la universidad de la capital, tales como Salvador Dali, Luis
Buñuel y Gregorio Martínez Sierra, este último guionista, director y productor, a
petición del cual Lorca escribe su primera obra “El maleficio de la mariposa” y lleva
a cabo su puesta en escena (1919-1920). Después de una esplendida carrera, el
poeta muere fusilado al comienzo de la guerra civil en España.