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El big bang

Nuestro universo no es más ni menos que un vasto, gigante, esplendido e


inmedible lugar en el cual habita cada partícula de materia del que se tenga o no se
tenga conocimiento. Luego está la tierra, planeta el cual está rodeado de otros miles
de planetas y millones de estrellas a lo largo de nuestra galaxia, la Vía Láctea. Y
nuestra galaxia, es tan sólo una de otras cientos de billones de galaxias. Y
justamente, hace 14 mil millones de años, absolutamente nada de esto existía; ni
galaxias, ni planetas, ni estrellas. Siendo así, ¿Cómo pasamos de la nada absoluta,
a este hermoso y sorprendente fenómeno que podemos ahora observar?
Bien ahora, que desde la antigüedad ha habido diferencias entre los “bandos”
de los fundamentalistas religiosos y los científicos, y el epicentro de estos
contrapuntos es el de la creación. Temas como estos ejercían una fricción a un nivel
letal, pues realmente podrían asesinarte o torturarte por tener un punto de vista
diferente al de estos fundamentalistas, quienes eran los que tenían la mayor
potestad de la palabra; con eso hacían creer que el universo era realmente joven,
de unos apenas 6 mil años de edad. Teoría que poco a poco fue siendo desmentida
gracias a la aparición de los fósiles de millones de años de edad; de esta forma, la
edad real del universo sería un millardo de veces mayor que esos 6 mil años.
Pero, ¿qué tal si el universo ha existido desde siempre? ¿Qué tal si siempre
ha sido así de grande? ¿Qué tal si siempre ha estado estático y nada nunca
interesante pasó?. Esa era la teoría más aceptada a comienzos de siglo XX, hasta
que en 1929, el astrónomo estadounidense Edward Hubble, haciendo
observaciones en el telescopio más potente de la época, el del observatorio del
Monte Wilson en California, logró analizar múltiples galaxias, y vio que estas podían
moverse. Es decir, el universo no es estático. Dando así comienzos a la teoría de la
expansión del universo. (Demostración con globo).
En ese caso, si el universo de hace cada vez más grande, quiere decir que
tuvo haber comenzado muy pequeño. Tuvo que haber tenido un comienzo, un
momento de creación. Siendo así, unos años después de haber finalizado la
segunda guerra mundial, emerge un famoso científico ruso queriendo resolver a la
incógnita del origen del universo. A George Gamow, se lo ocurrió la idea de que
todo habría comenzado con una gran explosión, similar a la de una bomba de
hidrógeno (sí, tuvo unos cuantos errores de cálculo). Luego del evento, el universo
creado se enfriaría y gracias a esto, surgirían los elementos básicos, cómo el
hidrógeno. Fue así como se dio inicio a la “teoría del big bang”.
Aun así, la teoría de Gamow no fue tomada muy en serio; pero hizo una gran
predicción. Gamow dijo que a causa de la gran explosión, se emanarían grandes
ondas de radiación de microondas que seguirían presentes a lo largo de toda la
existencia del universo. Claro, no serían los suficientemente fuertes como para
descongelar una pizza, pero sí como para ser detectadas. Pero había un problema
en la teoría, ya que en aquellos tiempos no había forma de detectar microondas, así
que aquella idea se quedó como una idea. Esta era una de las formas de validar la
teoría del big bang.
Pero no fue sino casi 20 años después, en 1965, cuando por accidente hubo
al fin pruebas empíricas del big bang. Dos científicos estadounidenses, Arno
Penzias y Robert Wilson, se encontraban probando un receptor de radio a la espera
de señales de microondas, cuando de repente encuentran una fuente de ruido
extraña, una especie de interferencia. Estuvieron meses tratando de hallar la fuente
del ruido. Limpiaron la antena, cambiaron piezas, conectaron y desconectaron
cables, y nada. Luego por casualidad, tuvieron una conversación con un cosmólogo
quien estaba interesado por las predicciones de Gamow, y justo ahí se dieron
cuenta de que aquella interferencia no era ni más ni menos que radiación de
microondas.
Video: Lo que se cree que pasó, es que hubo un momento en que el universo
tenía un tamaño cero y era infinitamente caliente. Luego, de repente, se genera el
big bang. A medida que el universo se expadía, este se enfriaba. En algunas áreas
se formaron galaxias, dentro de ellas, nubes de helio colapsaron para crear
estrellas. Y en el momento que las estrellas consumían todo su combustible, se
convertían en una supernova para posteriormente explotar, esparciendo en el
espacio nuevos elementos al espacio, como oxígeno y carbono. Estos elementos
generados por el polvo de estrella, crea la materia que conforma a cada planeta del
universo, incluyendo la tierra. Todo esto quiere decir que tú, yo, incluso tu lápiz está
hecho de polvo de estrella.
Pero ahora, queda una interrogante. ¿Qué generó el big bang? La respuesta
estricta a la pregunta nadie la sabe. Los físicos teóricos han sido capaces de trazar
la historia del universo hasta un pequeño intervalo de tiempo después del Big Bang.
Ir más allá hasta el momento ha sido imposible. Hay diversas teorías acerca del
hecho, pero nada lo suficientemente probable o comprobable. Si toda la materia del
universo estaba reunida en un punto descomunalmente pequeño y
descomunalmente potente, pero que aun así se mantenía en casi armonioso
equilibrio, ¿qué fue lo que paso para ocurriera un cambio en el sistema? ¿Qué
provocó la explosión?, puesto que a cada acción corresponde una reacción, ni
siquiera sabemos cuál fue la acción que rompió el susodicho sistema, siendo ahí
donde a los científicos religiosos les agrada intervenir.
De todas formas, no tengo duda que algún día hallaremos la pieza faltante
de este gigante rompecabezas.

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