Sunteți pe pagina 1din 3

¿Comprueba la ciencia que el universo existe

por EVOLUCIÓN o por CREACIÓN?


(Por: Julio A. Rodríguez, IQ)

Esta pregunta se la están haciendo hoy en día millones de personas en todo el mundo,
principalmente aquellos que estudian en escuelas y universidades.

Por 14 años (1974-1988) yo fui ateo. No creía en Dios ni confiaba en nadie. Desde que empecé a
estudiar en la universidad y hasta varios años después de graduarme de ingeniero químico, yo
creía que el saber mucha ciencia y tecnología me sería suficiente para dominar todos los
misterios de la vida. Yo decía que Dios era: “Un mito creado por mentes débiles e ignorantes
que tenía como propósito, además de hacer que las personas fueran buenos ciudadanos,
confortar a aquellos infelices que por su falta de competencia o preparación, enfrentaban el
fracaso de sus vidas con la vana ilusión de que después de la muerte, entonces vivirían bien”.
Como yo no creía en la existencia de Dios, creía en la evolución; y aseguraba (aunque no había
manera de demostrarlo) que todo lo que existe vino de la nada; por pura casualidad.

Sin embargo, después que tuve la oportunidad de profundizar en el conocimiento y adquirí


experiencia profesional, comencé a mirar las cosas con más objetividad y de la manera más
pragmática posible. Estuve buscando conocer por qué las cosas suceden como suceden. Por qué,
por ejemplo, la luz del sol continúa brillando por tantos años sin agotarse; por qué existe la
fuerza de la gravedad; la inmensidad del universo, la perfección del átomo, etc. Comencé a
imaginar que quizás existiría algún tipo de computadora en el universo que controlaba todas las
cosas…Pero luego me preguntaba: ¿Quién diseñó y programó esa computadora? ¿Qué mente
había detrás de tanta perfección en el universo? Fue entonces cuando vino a mí la gran inquietud
de saber si en verdad existiría un Ser superior a toda la raza humana; y de ser así, ¿Cómo sería
este gran Ser?

Ya entonces por lo menos pude comprender que tanta perfección y tanta diversidad que yo
conocía en el mundo científico debía tener una fuente primaria; pero no fue sino hasta el año
1988 que pude mencionar el nombre de Dios y reconocer Su poder y majestad; y pude dar
respuesta a la pregunta que tanto me inquietaba: ¿Qué fue primero, el huevo o la gallina?

Más adelante, con el transcurso de los años y al revisar los resultados de muchas investigaciones
científicas que honestamente se han hecho (incluyendo el descubrimiento secuencial del Genoma
Humano y los experimentos realizados por el Laboratorio Europeo de Física de Partículas –
CERN-, en el Gran Colisionador de Hadrones), ahora estoy plenamente convencido de que el
verdadero mito de todos los siglos es el concepto de la evolución, que dice que el universo se

1
formó por sí solo y que ha venido evolucionando (desarrollándose) en todas sus partes; a partir
de la nada, y sin que ninguna mente superior pueda estar detrás de tanta perfección.

Los que hoy en día hablan de razón y lógica como las únicas bases de conocimiento dicen que
los asuntos de fe, como no se razonan, no se pueden enseñar en las escuelas; sino que a los
estudiantes solo se les debe enseñar hechos y ciencia. Sin embargo, al final se encuentran que
aquello que afirmaban con tanta seguridad que era lógica y no fe, razón y no ilusión, ciencia y no
ficción; irónicamente ha venido a requerir un grado de fe aún mayor que el nivel de fe que
sostienen todos los religiosos del mundo; y para evitar el bochorno, le han cambiado los
términos: No fue Dios que creó las cosas, dicen; sino que fue “la casualidad”. Dicen que “Nadie”
hizo todo y que las leyes que existen en el cosmos y la naturaleza se dictaron solas (aunque
dichas leyes sean tan estrictas y tan poderosamente establecidas por “ningún legislador”, que
nadie las puede violar)

Aún en este siglo 21 nos damos cuenta que esa “Nada” era tan sabia y poderosa, que incluso con
todas las supercomputadoras e increíble tecnología con que cuenta la humanidad, todavía no
podemos desenredar todo lo que ha hecho, ni siquiera en la tierra; mucho menos en todo lo que
nos falta por saber sobre los demás astros del sistema solar; y luego en nuestra galaxia; y después
en los miles de millones de galaxias que existen en el universo…
Ese “Nadie” que usó la “Casualidad” para que todo, de la nada, viniera a la existencia, es una
burla a toda mente pensante que no quiere reconocer, por orgullo, sus limitaciones como ser
diseñado y creado por el poder y voluntad de Alguien que hizo las cosas a Su manera (y no nos
pidió permiso para entrarnos a vivir en este mundo; ni nos pedirá permiso para sacarnos de
aquí).

La evolución se convierte en otro dogma que hay que creer “POR FE”.
Con solo decir que “todo sucedió así” y obligar a otros a creerlo, no se demuestra nada. Ahora
nos preguntamos: Si la ciencia verifica que la evolución no es posible, ¿por qué muchos
científicos no quieren creer lo que están comprobando en sus propios experimentos? ¿Por qué
les es tan difícil creer en la existencia del eterno Dios todopoderoso, que creó y sostiene los
cielos y la tierra por la palabra de Su poder, como nos lo dice la Biblia en Hebreos 1:2-3 y
Apocalipsis 4:11? ¿Por qué en las escuelas y universidades se enseña que la evolución “es un
hecho comprobado”, cuando esto es una terrible mentira; ya que ninguna ciencia (ni la genética,
ni la paleontología, ni la astronomía, ni la geología, ni la biología, ni la zoología, ni la
antropología, ni la física, ni la química, etc.) ha podido NUNCA verificar ninguna teoría
evolucionista?

La respuesta es obvia: la mayoría de los maestros en las escuelas y casi todos los alumnos,
quieren encontrar la manera de ser auto-justificados en los actos de sus vidas; y prefieren
rechazar lo que Dios habla a través de la Biblia sobre la necesidad que tiene cada ser humano
(sin importar su raza, sexo, posición económica, conocimientos científicos, etc.) de guardar
ciertas normas y reglas; y de ponerse a cuentas con Aquel que los formó. Así que, el asunto
central es espiritual y tiene que ver con las almas humanas (incluyendo TU alma).

2
Cada persona que estudia en alguna escuela o universidad será enfrentada por los incrédulos para
que crea POR FE que la evolución es un hecho; y que no crea que el mundo fue creado por Dios.
Sin embargo, ¿Qué es la ciencia sino el estudio sistemático del mundo que Dios creó? La ciencia
bien aplicada, sin poner a un lado al Autor de aquello que los científicos descubren, es una gran
bendición para toda la humanidad; y todos debemos apoyar las investigaciones científicas
honestas.
La revelación divina nos indica en la Biblia que toda persona que adquiere conocimiento y no lo
utiliza justamente, recibirá un terrible castigo de parte de Dios; si antes no se arrepiente de
corazón y pone su vida en paz con el Creador, a través del ÚNICO medio disponible: El Señor
Jesucristo; por causa del sacrificio expiatorio en el cual Él derramó Su preciosa sangre, para
satisfacer la justicia divina.

“Pero ahora, aparte de la ley se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los
profetas; la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo para todos los que creen en él. Porque no
hay diferencia, por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados
gratuitamente por Su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, a quien Dios puso como
propiciación por medio de la fe en Su sangre, para manifestar Su justicia, a causa de haber pasado por
alto en Su paciencia, los pecados pasados” (Romanos 3: 21-25)

¿Cuál es tu posición? ¿Estás dispuesto a creer lo que Dios habla en Su Palabra, o prefieres
creer lo que algunos hombres insensatos están afirmando como verdad lo que ni aún ellos han
podido comprobar?

¡Sé sabio/a; es tu alma la que está en juego!


Abre tu corazón a Dios y Él te hará conocer toda la verdad.

Mi sugerencia es que te pongas inmediatamente en paz con Dios y que recibas el regalo de la
vida eterna que Él está ofreciendo a todo ser humano. Sólo así tendrás la seguridad de que
cuando dejes este mundo, irás al Cielo a morar con el Dios Altísimo para siempre.
Ahora mismo, donde estés, habla con Dios de todo tu corazón y dile:
“Padre Santo, en el nombre de Jesucristo me acerco a ti en confianza para pedirte perdón por
todos mis pecados. Me arrepiento de haberte ofendido y pido que me limpies y purifiques con
la sangre de Cristo. Yo recibo en este momento al Señor Jesús como mi único y suficiente
salvador personal; y te entrego toda mi vida, para que la moldees según tu perfecta voluntad y
dirijas mis pasos con tu Santo Espíritu. Gracias por darme el regalo de la salvación y la vida
eterna. En el nombre de Jesús, Amén.”

¡DIOS TE BENDIGA Y BIENVENIDO(A) A LA FAMILIA DE DIOS!

MUY IMPORTANTE:

Congrégate en una iglesia cristiana donde se predique y enseñe la Palabra de Dios,


La Biblia; para que crezcas en el conocimiento de Dios y en el amor fraternal.

S-ar putea să vă placă și